Capitulo 14 – La primera sobreviviente
-Tras haber dejado el cuerpo de Paul en aquella casa, regresamos a la bodega; para ese entonces, Thor había aceptado mi propuesta de vivir conmigo desde hace mas de una semana –Loki, necesito hablar contigo-
-¿Sobre qué, Fandral?-
-En la delegación, hay 2 compañeros míos que están detrás de usted. Se trata del detective Tapp y el detective Sing, pero a lo que tengo entendido, no han obtenido una pista clave-. Para ese entonces no me extrañaba que la policía estuviera detrás de mí, cada vez que encontraban un nuevo cuerpo, la prensa se volvía loca. Para ellos eso era como encontrar el Santo Grial
-Ya lo tengo todo pensado, antes de que regreses a tu casa, quiero que vuelvas a ese lugar y dejes esto- dije mientras le daba una bolsa de plástico, la cual contenía una pequeña lámpara de medico –Con esto cualquier sospecha se desviara a otra persona-
-¿Quieres decir que me estas pidiendo que inculpe a otra persona?-
-Es parte del siguiente juego; recuérdalo bien, Fandral, nunca dejes nada al azar-. Quizás era mi imaginación, pero desde que Thor llego a mi casa, todo ha cambiado para bien. Al tener compañía, ya no estaba todo el tiempo metido en preparar un nuevo juego; ahora casi todas las noches salíamos a cenar a un restaurante, o simplemente íbamos a pasear a un parque cercano. Ahí nos conocimos aun más, confiaba lo suficiente en mí como para contarme algo de su pasado. Había estado casado unos meses antes de mi accidente, pero su esposa fue asesinada por un ladrón que salió libre al poco tiempo. Pero a pesar de eso, no dejaba que la amargura invadiera su vida; eso era algo que yo admiraba de el
Después de que Fandral dejara la linterna, comencé a buscar información sobre Sharon, ella era la novia de Cecil. Al igual que él, estaba metida en las drogas y había sido paciente de Jill -¿Ellos serán los siguientes?-
-Así es, Sharon Carter y Donnie Greco; será mejor tenerlos aquí cuanto antes, antes de que la policía encuentre el cuerpo de Paul-. Le entregue la carpeta con la información de los 2, comenzó a leerla detalladamente. Jamás lo había notado, pero tenía los ojos tan azules que incluso se reflejaban las hojas que estaba viendo… Espera, ¿En qué estoy pensando?
-¿Cuándo estará listo el juego?-
-En 2 días, solo me falta darle los últimos detalles, mañana iremos por ellos. Fandral se está haciendo cargo de los detectives-
-¿Eso quiere decir que el Dr. Banner será el próximo sujeto de prueba?-
-A ti nada se te escapa, Thor-
Tal y como lo planee, logre terminar los aparatos; subimos a mi coche y maneje hasta un edificio (El cual tenía un aspecto no muy agradable, incluso se parecía al antiguo hogar de Fandral), entramos preguntando por el numero de habitación en el que estaba Sharon -¿Qué son de ella?-
-Unos amigos muy cercanos a ella, quisimos darle una sorpresa visitándola. Tenemos tanto tiempo sin verla-
-Habitación No. 15- dijo mientras nos daba una copia de las llaves. Subimos por las escaleras y entramos a su departamento, no paso mucho tiempo antes de que la puerta se abriera
-¿Hola?- pregunto apenas entro, ni Thor ni yo respondimos. Eso la extraño bastante, pero continuo con su rutina; pero al entrar a su habitación, Thor se abalanzo sobre ella y le inyecto un sedante, el cual no la haría despertar sino hasta el día siguiente. Al sacarla de su habitación, obviamente el recepcionista notó su estado
-Se golpeo la cabeza contra su mesa, esta inconsciente, la llevaremos a un hospital-. No sé si este hombre es ingenuo o torpe, pero esa excusa logro convencerlo. Salimos de su edificio y la recostamos en el asiento trasero de mi coche, para cuando llegamos a la bodega, Fandral ya estaba ahí con Donnie (Otro de los pacientes de Jill). Pero a excepción de Sharon, el estaba despierto, pero había sido inyectado con burundanga; una droga que controla la voluntad de la persona. Con esta sustancia hicimos que se tragara una llave, llave que Sharon tendría que sacar para poder ganar su juego
Los dejamos en una habitación, recostamos a Donnie en el suelo mientras que a Sharon la dejamos sentada en una silla. De una caja saque mí más reciente artefacto, colocándolo en su cabeza –Ya está todo listo-
Salimos del cuarto, no paso mucho tiempo antes de que comenzara a despertar; como todos los anteriores, se veía completamente nerviosa. Gracias a que el artefacto sujetaba su boca, solo pudo soltar una serie de quejidos; al mismo tiempo que trataba de soltarse de las correas en sus muñecas. Usando un control remoto, encendí la televisión que estaba a su lado
Hola, Amanda… No me conoces, pero yo a ti sí, quiero jugar un juego. Esto te pasara si pierdes, el aparato que tienes está enganchado a tus 2 mandíbulas. Cuando el tiempo del reloj a tu espalda se acabe, tu boca quedara permanentemente abierta. Como si fuera una trampa de osos invertida. Así… Te lo mostrare
En la pantalla de la televisión se podía apreciar como un maniquí (El cual tenía el mismo artefacto) quedaba completamente destrozado cuando se abrió. Claramente eso provoco que el nerviosismo aumentara por mucho
Solo hay una llave que abre el aparato, está en el estomago de tu compañero muerto de celda. Mira alrededor, Amanda, créeme que no estoy mintiendo. Rápido, vivir o morir, tú escoges
La cinta se termino, casi al instante, Amanda comenzó a forcejear las correas; pero cuando por fin logro ponerse de pie, hizo que el cable que detenía el cronometro se rompiera, activando el reloj. Por varios segundos trato inútilmente de quitarse aquel artefacto, hasta que (Al mirar a un lado) vio el cuerpo de Donnie recostado en el suelo. Se hinco a su lado y levanto su camiseta, descubriendo un signo de interrogación pintado en su estomago
Tomo el bisturí que estaba a su lado, justo en ese momento, Donnie abrió los ojos, pero no podía moverse. Aunque estuviera aterrada, Amanda no dudo en clavarlo en su estomago una y otra vez; sus manos quedaron empapadas con su sangre y el solo podía soltar un sinfín de quejidos. Escarbó en su estomago hasta que encontró una pequeña bolsa que contenía la llave. Rápidamente abrió el candado y se quito el aparato arrojándolo justo en el momento que este se abrió. Mientras ella lloraba desconsoladamente, Billy se había acercado en su triciclo
-Felicidades, sigues viva. La mayoría de la gente es tan desagradecida de estar viva, pero tú no, ya nunca más…-