Luego de su lucha contra el titán de tierra, las cosas fueron extremadamente fáciles. Casi como si hubieran destruido el spawn de los monstruos al derrotar a esa cosa.
En medio de la cuarta hora de caminata las piernas de Izuku cedieron debido al cansancio de la propia lucha. "Rayos...", se quejó el chico cuando el dolor de su pierna fue demasiado. Se había exigido demasiado otra vez. "Esta maldita pierna... maldito Endeavor..."
"Ven, déjame ayudarte", dijo Toru sujetándolo por los brazos para luego ayudarle a caminar, "Uf... eres mas pesado de lo que aparentas".
Izuku desvió la mirada levemente sonrojado, evitando mirar a la chica, "Esto es...", mientras caminaba, el pecho de Toru estaba presionado contra el suyo, permitiéndole sentirlos perfectamente, "...el paraíso", murmuró el joven.
"¿Dijiste algo?", le preguntó la chica ladeando su cabeza confundida, haciendo que el rostro del joven se pusiera azul.
"¡N-Nada!", respondió rápidamente el peliverde. "¡Maldita sea papá! ¡Por tu culpa estoy pensando así ahora!", pensó el joven mirando al cielo y en ese momento le pareció ver la imagen de su padre con una sonrisa tonta levantandole un pulgar. Luego de parpadear un par de veces, la imagen desapareció, "Perfecto, ahora no solo tengo una voz extraña en mi cabeza, también veo el fantasma de papá"
No fueron si no minutos los que faltaban para llegar al albergue. Cuando atravesaron los últimos arboles los jóvenes se quedaron de piedra al ver a Mandalay abanicando frenéticamente a una casi desmayada Pixie-Bob, pero al momento en que vio al grupo, la mujer rubia se levanto de un salto dispuesta a atacar a los jóvenes.
"¡Ustedes destruyeron mi creación mas fuerte como si nada! ¡Me las pagaran!", justo antes de que ella pudiera concretar su ataque Mandalay la sujetó por la cintura.
"V-Vamos, Ryuko... Será mejor que te lleve a tu habitación", dijo la mujer mientras llevaba a rastras a su amiga.
Todos siguieron con la mirada a las dos mujeres, completamente en silencio, hasta que la puerta se cerró.
Aizawa tosió para llamar la atención de todos, "Consiguieron llegar antes de lo previsto. Bien hecho, clase".
"Tienen comida esperando adentro, también pueden utilizar las aguas termales para relajarse lo que queda de tarde", añadió Toshinori con un sonrisa. "Mañana comenzaremos temprano así que las luces se apagaran a las 20:00 horas"
Cuando ambos profesores se fueron, los estudiantes corrieron desesperados hacia adentro del edificio con la esperanza de comer. No importaba lo que fuera, solo querían saciar el hambre.
Izuku simplemente se sentó en la escalera. Realmente no tenia apetito y el dolor de su pierna simplemente no le dejaría disfrutar la comida. Fue en ese momento en que el chico se percató de la presencia de un niño que lo estaba mirando como si tuviera ganas de asesinarlo.
"¿Como te llamas?", le preguntó en un tono amigable.
"Eso no te importa, idiota", respondió el niño cruzándose de brazos.
Izuku tuvo un tic en la ceja luego de escuchar al niño. Se parecía demasiado a Katsuki. "N-No hay necesidad de ser así. Soy Izuku Midoriya", el peliverde extendió mano hacia el niño, pero él simplemente se quedo mirando su pierna.
"¿Que te pasó?", preguntó bruscamente. Izuku simplemente masajeó un poco su extremidad recordando el pasado.
"Me lastimé salvando a mi hermana del ataque de un héroe", respondió el peliverde, causando una reacción extraña en el niño que rápidamente fue remplazada por ira.
"¿Entonces por que tratas de ser uno... acaso no ves que solo glorifican a los quirks y pelean como unos imbéciles sin importarles las vidas de los demás?". El niño estaba apretando los dientes mientras decía todo eso y luego salió corriendo.
Midoriya intento seguirlo, pero su pierna protesto cuando intento levantarse, por lo que golpeó su trasero contra el suelo al caer.
"Veo que conociste a Kota, gatito". Izuku volteo para ver a una mujer de pelo verde detrás de él sosteniendo un plato de comida. Ella lucía afligida por algún motivo.
Izuku se sonrojó levemente y asintió desviando la mirada. "Oh no... ¡Controlate Izuku!", se dijo el chico en su cabeza, "D-Disculpe, señorita Ragdoll, ¿pero que pasa con él? Es un sitio extraño para tener a un niño y esa tampoco es una reacción común"
"Kota es el sobrino de Shi... oh, cierto, Mandalay", respondió la heroína sentándose junto al chico, dejando la bandeja de comida a un lado.
"No se preocupe, conozco su nombres", respondió Izuku mientras hacia un gesto con la mano similar a los de Iida.
"¿Oh, acaso eres un fan,gatito?", dijo la mujer mientras cubría su sonrisa con una mano.
Izuku simplemente desvió la mirada apenado, "T-Tal vez".
Ella rió a expensas de Izuku por un momento antes de continuar, "No conozco todos los detalles, pero sus padres murieron hace dos años defendiendo un hospital del ataque de un villano". Izuku sintió un golpe en el pecho cuando escuchó las palabras de la heroína. Lentamente bajó la mirada hacia el suelo.
"Ya veo", dijo Izuku aun con la cabeza gacha, "Imagino que el nunca vio los elogios por las acciones de sus padres como algo noble", Ragdoll asintió lentamente e Izuku levantó la mirada con determinación en sus ojos, "Por favor, dígale a la señorita Mandalay que haré todo lo posible por ayudar a Kota"
"¡¿Eh?! ¡¿En serio?!", exclamó sorprendida la heroína.
"No puedo dejar que alguien sucumba ante ese tipo de dolor...", murmuró el chico,claramente afligido, "Es lo peor que hay"
Sin que Izuku lo supiera Kota estaba detrás de una pared escuchándolo todo. El niño salió corriendo al bosque después de escuchar suficiente.
"Deberías comer un poco, gatito", dijo Ragdoll con una sonrisa, devolviendo a Izuku a la realidad mientras le ofrecía la bandeja, "Esa chica invisible guardó un poco para ti"
Midoriya extendió los brazos y aceptó la comida, "Muchas gracias", dijo el chico con una sonrisa antes de empezar a devorar la comida.
En todo ese momento, la mujer peliverde se quedó mirando a Midoriya haciendo que el chico se pusiera algo nervioso "¿N-Necesita algo mas de mi, señorita Ragdoll?", preguntó Izuku.
"Oh, es solo que quería conocer un poco mas al primer héroe quirkless y al hijo de Hisashi Midoriya", respondió casualmente la mujer haciendo un gesto de paz con los dedos, "Has sido todo un tema de conversación entre los pros"
"¿E-En serio?", preguntó sorprendido Izuku. Sabia que alguna de las cosas que estaba haciendo podrían llamar la atención de algunos héroes, pero nunca pensó que tanta atención.
"Claro que están los imbéciles de siempre", el peliverde sonrió nervioso al ver como la mujer se enfurruñaba mientras murmuraba cosas, "¡Oh, cierto! ¡Nosotras y Yawara te apoyamos, Midoriya, así que sigue así!"
Luego de decir eso, Ragdoll se despidió y volvió a entrar al albergue, dejando a Izuku completamente congelado en su sitio.
Mas tarde, luego de salir de su sorpresa inicial de saber que sus heroínas de la infancia estaban apoyándolo, Izuku sumergió parte de su cabeza en las aguas termales mientras que el resto de los chicos hacían un escándalo.
El peliverde suspiró, añorando la paz que tenia en casa, pero igual no podía negar que estaba disfrutando todo ese caos. Incluso con la inclusión de los chicos de la clase B todos parecían llevarse bien (excepto ese tipo rubio gritón de la clase B).
"Aun no puedo creer que puedas soportar esa herida, Midoriya", dijo Kirishima a un lado de Izuku luego de echarse un poco de agua en la cabeza.
"F-Fue complicado al principio, pero me acostumbré al dolor"
"Aunque creo que nunca nos contaste como te lastimaste así, Midoriya". Ante las palabras de Iida, el chico parpadeó varias veces haciendo memoria antes de asentir.
"Oh... solo salte hacia un Providence Burn de Endeavor para proteger a alguien. Nada importante". Todos se quedaron quietos al escuchar a Izuku. Poco a poco, los rostros de Kirishima y un sujeto metálico llamado Tetsutetsu comenzaron a iluminarse.
"¡Eso fue muy... varonil!", gritaron ambos emocionados pidiendo mas detalles mientras sacudían a Izuku.
"Midoriya, lamento la imprudencia de mi donante de esperma, si hay algo que pueda hacer solo dímelo. Puedo pagar los mejores tratamientos con su tarjeta", los ojos del chico bicolor se transformaron en símbolos de yenes por unos segundos antes de volver a la normalidad.
"Ya no importa...", dijo Izuku cuando fue liberado de los cabeza dura, "Esta herida marcó el inicio de mi camino a ser un héroe, y sin ella tampoco hubiera conocido Toru, así que le tengo un poco de cariño..."
Todos los chicos se conmovieron ante las palabras de Izuku, unos mas que otros claro está. Luego continuaron charlando sobre las historias de las heridas que tenían y ejercicios para fortalecerse.
Al menos hasta que lograron escuchar algo del otro lado...
"¡Oh... Yaomomo no me digas que crecieron otra vez! ¡Que envidia!".
"¡A-Ashido! ¡No digas eso en voz alta!"
Los chicos tragaron saliva, con sus rostros sonrojados, y de inmediato se sentaron todos en circulo en el agua mientras escuchaban a las chicas hablar y reír.
"Piensen en la biblia, caballeros", dijo un chico de la clase B con el rostro completamente serio.
"¡¿Ahora eres como Shiozaki, Awase?!", preguntó Sen exaltado.
Justo en ese momento se escucho un gemido del otro lado del lugar, "S-Setsuna, detente", claramente era la voz de Kendo, que parecía bastante avergonzada.
"Hohoho... hermana mayor de seguro volverás locos a los chicos si dejaras que ese trasero se viera mas"
Los chicos seguían quietos en su lugar, pero algunos ya estaban comenzando a romperse. "¿T-Tal vez podríamos mirar un poco?", dijo uno de los chicos de la clase B, mientras otros asentían.
"¡Eso es inmoral!", exclamo Iida completamente sonrojado, "¡Como estudiantes de UA debemos dar el ejemplo!"
"¡Pero, hombre! ¡Tenemos el paraíso al lado de nosotros!", exclamó Kaminari para sorpresa de Izuku. "Lo siento, pero no puedo desaprovechar esta oportunidad, quien quiera que me siga". El peliverde no podía creer la seriedad que tenia en ese momento Kaminari, era completamente anormal.
Varios chicos siguieron al rubio en su intento de encontrar alguna forma de ver hacia el otro lado y fue en ese momento en que un pensamiento paso por la cabeza de Izuku como un rayo. "¡Oigan, mi novia esta al otro lado!", exclamó el peliverde poniéndose delante de los chicos antes de que llegaran al muro.
"¿Es la chica invisible, no? Entonces debería estar bien", concluyó uno de ellos haciendo que una vena se marque en la frente de Izuku y le golpeara la cara haciendo que se estrelle contra la pared contraria.
"¡Ese no es el punto!", gritó Izuku enojado, "El vapor podría hacer que puedan ver su perfecta figura esculpida por los ángeles y..."
"Midoriya, estas sangrando", dijo Todoroki con su tono característico tocando su nariz. Izuku lo imitó y se dio cuenta de que de verdad tenia sangre.
¡Maldita sea, hormonas de adolescente!
"¡¿Ves?! ¡Ni siquiera puedes engañarte ti mismo!", exclamó Kaminari señalándolo acusatoriamente. "¡No podrás detenernos, Midoriya!"
Izuku se puso en guardia preparado para luchar contra todos con tal de defender el honor de su amada. "¡Vengan con todo!", exclamó el peliverde incitándoles a atacarlo con un gesto.
Tsuburaba fue el primero en ir y se encontró rápidamente con el puño de Izuku en su cara, dejándolo fuera de combate.
De inmediato, Kaibara apareció por el lado de Izuku apunto de darle una patada en el rostro, pero el peliverde logró bloquearla con la suya propia, luchando por unos segundos para ver quien cedía.
Kaminari empujó a Izuku al suelo, pero rápidamente las posiciones se invirtieron gracias a un fuerte golpe en la clavícula que hizo Izuku, obligando al rubio a retroceder.
Justo cuando la pelea iba a continuar, un poco de agua salpico a Bakugo en el rostro, mojando un libro que tenia. Él se levantó de golpe y caminó enojado hacia el grupo, "¡Quiero leer en paz, pedazos de mierda! ¡Guarden silencio!".
El rubio desató una explosión contra el agua de las termas haciendo que esta salga hacia arriba como géiser, dejando sentados en el suelo a Kaminari y su grupo que empezaron a ser reprendidos por Bakugo.
"¿Y Midoriya?", preguntó Kirishima buscando al chico, luego Shoji tocó su hombro señalando al cielo y todos pudieron ver como el chico caía como un cometa al otro lado de las aguas termales.
Kirishima y Tetsutetsu colocaron los baldes de madera frente a ellos presentando respetos, "Murió de la forma mas macha posible", dijeron ambos a la vez, confundiendo al resto.
"¿Qué?", preguntaron los demás.
"Snu-snu". Todos cayeron sentados al oír la estupidez que dijeron los cabeza dura antes de decidir que era mejor salir del lugar antes de que las cosas se descontrolaran.
Al otro lado de la muralla, Midoriya se levantó sobándose la cabeza completamente adolorido, "Maldita sea Kacchan, controla tus explosiones un poco mejor", murmuró el chico notando que todo estaba cubierto en vapor por culpa de su aterrizaje.
"¿Midori?", dijo una voz mientras una figura se acercaba.
"Oh, hola Ashido...¡¿Ashido?!", exclamó el joven sorprendido cuando vio a la chica rosa mostrar todo lo que tenia sin pudor frente a él cuando el vapor se disipo. A su lado estaban Momo y Toru y detrás de ellas el resto de las chicas luciendo avergonzadas.
Izuku dio un salto y estrelló la cabeza contra el suelo de piedra, sacándose sangre, "¡Lo lamento! ¡Aceptare cualquier castigo por esta bendición de los dioses... digo, imprudencia de mi parte!".
"Vamos, Midori, tranquilízate, puedes quedarte aquí. Estoy seguro que las chicas no tienen ningún problema", respondió Ashido mientras se encogía de hombros.
"Es decir... si es Izuku no me importaría", murmuró Momo sorprendiendo a Izuku y a Hagakure
"¡¿Momo?!", exclamó Izuku con el rostro completamente rojo como un tomate mientras Hagakure simplemente comenzaba a pinchar con el dedo el hombro de la pelinegra.
"M-Midoriya es un buen chico así que...", Kendo no termino su frase ya que hundió su cabeza en el agua para ocultar su vergüenza.
"Te haremos pasar un buen rato, Mi-do-ri-ya", dijo Setsuna mientras se inclinaba frente a él mostrandole en primera plana sus atributos al chico.
"¡Lo siento muchoooo!", gritó Izuku con su voz quebrada por lo aguda que salió mientras escapaba de los baños y caía un par de veces por culpa de su pierna
"¿Que habrá sido todo ese alboroto al lado de los chicos?", pregunto otra chica de pelo blanco con una expresión estoica.
"N-No quieres saberlo...", respondió Jiro dejando de cubrirse cuando se aseguró que Izuku se había ido.
"De alguna forma terminó con Midoriya aquí y... ¿Hagakure, puedes dejar de hacer eso?". Momo miró a un lado y pudo ver como la silueta de Toru seguía pinchandole el brazo con un dedo.
Ella simplemente la ignoró, por lo que Momo suspiró mientras se llevaba una mano al puente de su nariz.
Iba a ser una noche larga.
Las luces ya se habían apagado por ese día, pero Midoriya no podía conciliar el sueño. Con cuidado, el joven salió de su saco de dormir y fue a caminar un poco.
Tenia experiencia evitando gente, por lo que, a pesar de que las Pussycats fueran heroínas profesionales, no lo iban a encontrar a menos que Ragdoll supiera que se había escapado.
Izuku se quedó mirando a la luna una vez que llegó a un pequeño claro. Tenia muchas cosas en las que pensar y ese ere un momento perfecto para hacerlo.
Su mente ya era un desastre sin agregar todo lo que había pasado recientemente, por lo que era necesario tener un momento como ese.
El teléfono de Izuku vibró un poco, interrumpiendo el silencio, y el chico contestó la llamada de inmediato al ver quien era, "Hey Lena ¿Cómo estas?", preguntó el chico.
"Estoy bien... Saya y la señora Inko también. Te mandan saludos". Lena se tomo un tiempo antes de continuar, "N-No se si pueda dormir hoy"
"Ya veo ¿Quieres que te cuente una historia?", dijo Izuku con una sonrisa mientras se acostaba en el suelo para ver mejor la luna.
"Eso... estaría bien. Como en los viejos tiempos"
"A ver si no me he oxidado", Izuku cerró los ojos por unos segundos antes de comenzar a hablar, tenia que pensar en algo bueno. "Esta es la historia de un niño que quería ser un héroe como los de los cuentos de hadas. En su mundo no existían los quirk, no, las bendiciones de los dioses era la única forma de volverse un aventurero..."
El joven peliverde continuó contando su historia durante largos minutos hasta que escuchó unos suaves ronquidos por su teléfono, "Duerme bien", dijo Izuku antes de colgar.
"¿Aun sigues haciendo eso?", preguntó Katsuki apareciendo entre los arboles sorprendiendo a Izuku. "Pensé que los dejaste cuando tu hermana cumplió los 10"
"No podía negarme si volver a hacerlo ayudaba a Lena con sus pesadillas", respondió el peliverde encogiéndose de hombros.
Katsuki se sentó al lado de Midoriya y también se fijó en la luna. Por unos minutos se quedo en silencio, confundiendo a Izuku. "¿Recuerdas la promesa que hicimos cuando eramos niños?", preguntó el rubio sin desviar su mirada.
"¿Eh? ¿Que íbamos a ser héroes juntos?", respondió Izuku, en un tono mas de pregunta que de una respuesta real.
"No. Si uno de los dos tiene problemas, el otro siempre estará para ayudarlo", recitó el rubio como si hubiera estado ensayando esas palabras. "Sé que algo no anda bien contigo, Izuku. Luces siempre cansado, cuando antes tenias el sueño de una abuela; La oruga y la dominatrix te miran de una forma extraña y has estado actuando raro últimamente".
El peliverde sonrió levemente mientras volvía a sentar, "Ya veo... debí suponer que no podría engañarte", dijo en un tono solemne, "Puede que yo no sea el Izuku Midoriya que crees que soy"
Katsuki simplemente se quedó en silencio, por lo que el peliverde comenzó a explicar todo lo que había pasado hasta ahora, incluyendo la aparición de la voz extraña en su cabeza. "...Y eso es todo...", Izuku soltó un suspiro largo cuando terminó. "No he querido pensar en esto, Kacchan, que pueda ser una de esas cosas de All for One, o que simplemente yo sea un villano disfrazado..."
"¡No me jodas!", gritó el rubio interrumpiendo a Izuku, quien lo miró sorprendido. "Izuku, he vivido contigo durante mas de 10 años. ¡Eres como el jodido hermano que nunca tuve y ni creas por un puto segundo que por culpa de un villano de mierda eso va a cambiar! ¡Sé que eres capaz de luchar contra ese bastardo, así que deja de joder!"
"Kacchan yo..."
"¡Noté que cambiaste! ¡Ya no actuabas como antes cuando el tío Hisashi te encontró, pero hice mi mejor esfuerzo para seguir siendo tu amigo y joder, si, la cagué cuando pensé que burlarme de ti seria la mejor opción para hacerte mas fuerte, pero... pero solo quería a mi mejor amigo de regreso!"
Izuku se quedó en silencio escuchando como por fin su amigo abría su corazón y dejaba escapar todo el dolor que tenia dentro. Nuevamente, él se preguntó como fue tan ciego para no ver que tenia personas a las que le importaba y que nunca lo dejarían.
iba a asegurarse de que estuvieran a salvo.
Sin importar el costo.
El chico puso una de sus manos en el hombro de Bakugo haciendo que este detuviera sus palabras y lo mirara a los ojos con lagrimas corriendo por sus mejillas.
"Asegurémonos de cumplir nuestra promesa de ahora en adelante, Kacchan". Izuku mantuvo una sonrisa en su rostro, aunque dentro de su mente, dudaba de sus palabras.
"Je, mira lo que me hiciste hacer, nerd", dijo el rubio con una sonrisa luego de limpiarse el rostro.
"Solo tengo otro favor que pedirte. Si de alguna forma, All for One logra controlarme, asegúrate de detenerme... definitivamente".
Ambos jóvenes se miraron a los ojos durante un tiempo. Los ojos de Izuku estaban afilados, no mostrando ninguna vacilación ante lo dicho, cosa que sorprendió al rubio. Katsuki resopló luego de desviar la mirada. "No lo haré", dijo Bakugo cuando comenzó a irse, "Encontrare una forma de salvarte y traerte de regreso si esa mierda llega a pasar, Izuku", agregó al final con una sonrisa dejando congelado a Izuku.
El joven peliverde negó con la cabeza mientras una sonrisa melancólica crecía en su rostro.
Por supuesto ese idiota iba a decir eso. Él siempre era el ganador, un verdadero símbolo de victoria a los ojos de Izuku y por eso siempre lo admiró. Pero él tenia que entender que a veces en la vida hay que hacer sacrificios y puede que el precio de ese sacrificio sea demasiado alto para algunos.
Izuku se quedó unos minutos más antes de regresar a su saco de dormir en los dormitorios.
Sin que lo supiera, Ragdoll había estado oculta detrás de un árbol escuchando toda la conversación que tuvo con Bakugo. Ella se había preocupado al ver como el rubio salia del dormitorio, por lo que uso su quirk y también terminó descubriendo a Midoriya, luego lo siguió y terminó enterándose mas de lo que debía saber.
Una parte de ella se arrepiente de haber espiado, pero también, ahora estaba mas motivada a ayudar a ese chico a ser un gran héroe.
La idea de Eraser era útil, pero ella también podría poner un poco de su parte y darle otro tipo de entrenamiento.
