Buenas Tardes,
Les traigo una nueva actualización, espero sea de su agrado y a la vez me disculpo por algún error de palabra aun cuando intento revisarlo una y otra vez la imperfección es lo mio.
Gracias por sus comentarios y me alegro que disfruten de esta historia.
saludos.
CAPITULO No 21
Soi Fong aprovecho el momento, pues empezó a responder brevemente los mails de sus amigas, luego apago la computadora y froto sus ojos dejando escapar un largo suspiro. Al momento sintió unos brazos rodeándole por la espalda. Yoruichi había ido al baño y tomado un vaso de agua y ahora que regresaba noto que la peli azul parecía más cansada de lo normal.
— ¿En verdad renunciaste? — Cuestiono suavemente la morena, su tono era calmo.
— Si — respondió la peli azul.
Yoruichi soltó su agarre para colocarse frente a su novia — ¿pero cómo? — Pregunto con incredulidad — ¿Por qué no me dijiste?
La peli azul suspiró — han pasado muchas cosas, no me pareció el momento adecuado para hablarlo, además no es gran problema — informo con calma, la morena le miro con seriedad — solo es un empleo como cualquier otro Yoruichi, no es como si me quedo en la calle o sin dinero.
— ¿Qué no es un problema, dices? — Cuestiono un poco molesta de que su novia lo tomara a la ligera — estás hablando del trabajo por el cual te has preparado, eres muy buena en eso y no debes olvidar que es la empresa de tu familia.
Soi frunció el ceño — Lyu está a cargo de la empresa ahora, el también debe trabajar para variar.
La morena suspiro — ¿tu hermano?, pero si él tiene la agencia de publicidad — indico y se puso a pensar un poco — ¿fue por ese rumor? — Pregunto.
La peli azul sonrió levemente — deberíamos ir a la cama e intentar dormir, es tarde para estar charlando como si fuese las 3 de la tarde.
— ¿Podrías solo ir a dormir después de lo que ha pasado? — Pregunto la morena con seriedad, luego suspiro — vamos a la cama y me cuentas todo lo que sucedió ese día.
Soi suspiro — no será como un cuento para dormir.
Yoruichi puso los ojos — seguramente no, además ya paso demasiado tiempo desde que alguien me dijo un cuanto para dormir — acepto — ¿cómo lo catalogarías?
La peli azul se puso de pie y extendió su mano para que la morena le acompañara camino a la cama — no se — se encogió de hombros — tal vez como uno de esos locos Doramas que ve Lisa.
— ¡Oye! — Se quejo la morena dando un pequeño golpe en el hombro de su novia — yo veo algunos Doramas, me parecen buenos y entretenidos.
Cuando llegaron a la otra habitación, Soi se apresuro a encender la luz de la habitación y se dispuso a levantar alguna de las almohadas en la cama pues al despertar de improviso y con esa llamada una que otra salió volando al suelo. La morena por otra parte acomodaba las sabanas, sin perder más tiempo se acostó en la amplia cama mientras Soi apagaba las luces y hacia lo mismo. Ante una recién y cómoda costumbre los dos cuerpos se acercaron uno al otro buscando la comodidad. La morena se recostó en el pecho de la peli azul y Soi soltó un leve suspiro, Yoruichi sonrió un poco al sentir esa sensación. Fue así como su novia empezó la narración de los hechos de todo lo que había sucedido en la reunión, con ese día en específico.
No fue muy grato escuchar todo en completo silencio sin sentir la necesidad de decir algo pero sabiamente no lo hizo, hubo un momento en que se arrepintió de haber insistido a la peli azul de contarle lo sucedido, no le miraba ya que se encontraban en la oscuridad y acostadas en la comodidad de la cama, pero podía sentir la tensión en el cuerpo de su novia, cómo su voz cambiaba a una fría cuando se refería a su hermano y otra cargada de decepción cuando hablaba de sus padres. No entendía cómo es que ella había podido salir con la frente en alto de esa reunión, de la empresa y a la vez el procurar solucionar el problema inmediato del rumor, para luego tomar un avión e ir tras ella olvidando sus propios problemas. Yoruichi se apego mas a la peli azul abrazándose mas, justo ahora se sentía egoísta y entendía esa última suplica por evitar que ella se fuera: "Por favor, no te vayas".
Soi le contó todo con pelos y señales, sin guardarse nada, extrañamente el hacerlo fue catártico en cierta manera pues desde que salió de la empresa no había hablado de eso con nadie. Rangiku lo había intentado pero sabía muy bien que ella prefería hablar de las cosas importantes frente a frente. Yoruichi escucho en silencio y agradeció ese gesto, aunque ella misma sintió la tensión de todo eso que había guardado en su corazón, no pudo evitar el sentir decepción y el enojo, sintió que sus ojos acerados se humedecían y una que otra lagrima surco su rostro níveo, no sabía si era tristeza o simplemente el enojo mismo. Casi al término de todo sintió como la morena le abrazaba de una manera posesiva que resulto ser un poco reconfortante; luego de que no hubo más que decir y un breve momento de silencio las dos se abandonaron al mundo de los sueños. Seguramente mañana tendrían más tiempo y mejor ánimo para hablar.
Ciudad de Tokio - Japón
Ryu Fong llego a la empresa en 25 minutos, no podía creer lo que estaba sucediendo o más bien no espero que las cosas fuesen de tal magnitud a menos de una semana. El pelinegro había pasado la mañana escuchando las quejas del Ingeniero de la fabrica y aunque podía darle un poco de razón no espero que las cosas fueran peor, cambiar de Ceo hace 4 días y perder al jefe del departamento legal era algo preocupante para la empresa sin contar el mensaje de inestabilidad que mostraban a sus propios empleados. Lo peor de todo es que su madre no perdió tiempo para contactarle, seguramente ella ahora se arrepentía de darle esa oportunidad a Lyu. Era viernes y daba gracias a Dios que Lisa esperara el fin de semana para dimitir, obviamente no le agradaba el asunto más con los motivos que la orillaron a renunciar, el día en que Soi renuncio pensó que ella también o haría ya que ese trío era como uña y carne, pero sorprendentemente tomo una actitud profesional al quedarse.
Ryu Fong llego al cuarto piso al momento Vanesa fue a su encuentro — buena tardes señor Fong — saludo, el patriarca de los Fong le miro con seriedad — la sala de juntas se encuentra lista y Shaolin-sama se encuentra esperando que usted aparezca — el ceño del pelinegro se profundizo — ella manifestó que desea hablar con usted en privado antes, que luego avisara cuando sea llamado el joven Lyu.
— Llévame un vaso de agua, por favor — pidió Ryu — ¿Lyu se encuentra en su oficina?
— Si, desde que usted llamo para dar instrucciones no ha salido de ahí — informo la pelinegra.
Ryu camino hacia la sala de conferencias — ¿Lisa se fue? — Pregunto antes de entrar.
Vanesa suspiro — se fue luego terminar de hablar con el joven Lyu — respondió.
— Si Lyu sale de su oficina o pregunta por mí, dile que aun no he llegado — ordeno y la pelinegra asintió al instante. Ryu Fong abrió la puerta de la sala de juntos al instante el jefe de informática le hizo la señala que podía hablar. En la gran pantalla una mujer de 69 años, pequeña con cabello canoso, ojos grises de tez blanca y rostro serio marcado por las arrugas se encontraba sentada en lo que parecía una silla ejecutiva tras una escritorio donde solo había una computadora. El patriarca de los Fong tomo asiento en la cabecera de la amplia mesa de conferencia.
— Te tomaste tu tiempo — señalo con tono serio la mujer al otro lado de la pantalla — no tengo que decirte que lo que ha pasado es un tanto inusual.
— Yo más bien diría que es preocupante — señalo el pelinegro.
— Tenemos parte de responsabilidad en esto — señalo la abuela — ¿Qué les está pasando a tus hijos? — Cuestiono — no puedo creer que mi nieta de una día para otro parece tener una novia por la cual deja todo de lado — frunció el ceño — ni se ha dignado en corresponder los mails y por otro lado esta Lyu — suspiro cansinamente — ¿desde cuándo ha tenido interés por la empresa?, no es que sea malo — expreso con calma — es la manera en que se dio todo la que me preocupa.
— Madre, ya explique que no es de la noche a la mañana lo de la relación de Soi — aclaro el pelinegro — como te informe ayer, esto viene desde hace algunos meses pero hasta hace poco ella lo aclaro con la prensa.
— Esa es otra de las cosas extrañas — dijo — ¿desde cuándo va a la prensa?, ella que ha vivido con urticaria a los periodistas, hoy hasta visita un programa de televisión — Ryu suspiro — no me mal interpretes, se las razones porque lo hizo y debo admitir que hasta ahora le ha ido muy bien — señalo — según me dijo mi secretario hay rumores de que ella aparecerá la primera plana en el Times de Hong Kong y Londres.
— Es una gran noticia — celebro el pelinegro — con esto nadie puede señalar que ha hecho algo incorrecto…— su voz se apago.
— Dilo — pidió la matriarca — acepto que me precipite, pero si me hubieses informado nada de esto hubiese sucedido.
— No sé cómo se salió de nuestras manos, Lian y yo tratamos que todo no pasara a mayores — índico Ryu.
— No me parece justo que metas a Lian en esto — expreso con calma — su único error es amar a sus hijos y hacer lo posible por evitar un confrontamiento, pero obviamente llevan el carácter Fong — suspiro — si Soi no hubiese sido tan orgullosa al entregar su renuncia de manera precipitada, pero claro la niña quería tiempo para unas vacaciones e ir a retozar con su novia, ¿los jóvenes de ahora no se cansan de copular?
— Madre — regaño el pelinegro avergonzado y Shaolin Fong rio levemente — pasando a otro asunto, hoy recibí algunos señalamientos de inconformidad del Ingeniero encargado de la planta, se queja de que Lyu no es apto y que no sabe tratar con las personas — la seriedad en el rostro de Shaolin Fong era notable.
— Sabemos muy bien como son los ingenieros de arrogantes, solo entre ellos pueden llevarse bien — señalo la matriarca — el tema de hoy es Lisa, su renuncia es inesperada y en cierta manera preocupante — indico — es la única que sabe a fondo sobre todos los contratos con proveedores, socios empresariales, hasta los contratos de los empleados los diseño justos y con legalidad — llevo una pequeña y delgada mano a su frente — redacto los estatutos de la empresa junto con Rent — señalo — ¿Qué fue lo que paso y quién diablos es ese Kūgo Ginjō?
— Es un abogado — informo el pelinegro — le apodan el "Aboganster de Japón", tiene fama de solucionar cualquier problema legal, por supuesto que todo por una cantidad adecuada, puede tergiversar las leyes a su conveniencia de una forma poco ética y aun así salir inmune.
— ¿Porque Lyu le llamaría con respecto a los estatutos? — Pregunto — si estos se hicieron de esa manera ha sido por objetos de control y tú lo sabes mejor que nadie.
El patriarca de los Fong suspiro — Lyu se ha mostrado inconforme con los estatutos, del control a lo que someten al Ceo — señalo Ryu y la abuela Fong puso los ojos — él cree que no le da libertad de decisión.
La abuela suspiro largamente — esa es la finalidad y por eso mismo se constituyeron, si yo dejo todo a manos llenas quien sabe si ha este tiempo tuviésemos lo que tenemos — el pelinegro le lanzo una mirada de indignación — no lo tomes personal hijo, se hicieron especialmente para las nuevas generaciones Fong.
— Quizá he hecho todo mal — señalo con suavidad — si hubiese sido más estricto, mas…
Una risa del otro lado de la pantalla — hay hijo, no puedes simplemente planear el cómo serán tus hijos en un futuro — indico con calma — nadie ni siquiera yo pude prever que el carácter e inteligencia de tu padre saltara directamente a tu hija, así mismo sucedió con Lyu a quien tu creíste seria el indicado para la empresa por el simple hecho de ser varón.
Ryu Fong frunció el ceño — estoy seguro que pudo ser diferente, si no hubiese ocurrido ese ataque.
— ¿Aun te atormentas por ello? — Cuestiono con seriedad — ¿Por qué no piensas que es mi culpa?, al fin y al cabo yo te sugerí esa escuela y el tipo de educación que sería adecuada para tus hijos — la anciana hizo un ademan con su mano — hemos hablado de esto con anterioridad, creo que tu esposa ya lo ha superado y mira nosotros justo seguimos con ese tema.
— Me he quedado sin ideas, realmente no se cual sería el mejor plan de acción— confeso el pelinegro.
Shaolin Fong dejo entrever una leve sonrisa — yo tengo algunas ideas — indico y su hijo le miro con total atención. La charla se prolongo por unos quince minutos, el jefe de informática envió un mensaje a Vanesa para que llevara al joven Fong a la sala de juntas donde su padre y abuela le estaban esperando.
El joven entro con el rostro serio como pocas veces se le veía, Lyu por lo general era de carácter afable y sonriente pero desde hace algunas semanas parecía otra persona. Tomo asiento a un lado de su padre, saludo a su abuela y luego al pelinegro. Vanesa estaba por retirarse hasta que unas palabras le detuvieron — Vanesa, podrías regresar en diez minutos por favor — pidió Ryu Fong — traerás tu libreta porque hay algo que luego deberás redactar — Vanesa asintió y al instante salió de la sala.
— ¿Qué sucede, porque la urgencia de la reunión? — Pregunto Lyu.
Su padre le miro serio — ¿en verdad estas preguntando algo tan estúpido? — Cuestiono un poco molesto.
— Ryu por favor — pidió la abuela Fong — Lyu, podrías explicar que fue lo que sucedió con respecto a la renuncia de Lisa.
El pelinegro suspiro — abuela, también a mi me tomo por sorpresa su renuncia, hasta ahora por la mañana todo parecía marchar bien.
Ryu suspiro — si las cosas son como dices, ¿porque razón llamaste a Kugō Ginjō?
El pelinegro miro a su abuela y luego hacia su padre — creo que todo está siendo dimensionado erróneamente, es cierto que llame al señor Ginjō pero solo fue para unas simples consultas.
— Tenemos un departamento legal, Lisa era la jefa por si no lo sabías — expreso Ryu sarcásticamente.
Lyu le miro serio y la abuela simplemente puso los ojos — Lisa no me ayudo con mis consultas — se defendió — es obvio que siendo la amiga de Soi estaba reticente ayudar en mi desempeño, su renuncia posiblemente fue planeada y los comentarios en su mail son evidencia de que tomo su oportunidad para hacer verme mal.
— No veo porque Lisa haría algo así — señalo Ryu — ¿qué consultas tendrías que hacerle al tal Ginjō sobre los estatutos?
— Papá, es obvio que Lisa trabajaba aquí por ser amiga de Soi — indico el pelinegro — no creo que le cayera en gracia que yo tomara su puesto, si no mira la evidencia — dijo — su correo tenia copia a mí y Soi, obviamente para informarle de su hazaña.
— Creo que es tiempo que dejes de decir disparates — indico la matriarca Fong — primero deberías saber que la contratación de Lisa fue hecha por mi y tu padre mucho antes de que tu hermana fuera nombrada Ceo de la empresa — informo, Lyu no pudo evitar mostrarse sorprendido — ella sola fue quien armo y redacto los estatutos que ahora rigen la empresa, por supuesto que todo bajo la supervisión de su padre Rent Yadōmaru.
Ryu le miro serio — esos mismos estatutos de los cuales tú te quejas, fueron una idea de tu abuela y mía con un propósito en especifico — expreso con calma — cualquier consulta que necesitaras Lisa era la indicada, pero preferiste ir con un sujeto de dudosa reputación.
Lyu frunció el ceño — solo fue una consulta — se defendió.
— Creo que nos equivocamos — señalo la anciana y el joven le miro asombrado — más bien me precipite al nombrarte como Ceo tan a la ligera, al final tu hermana no hizo nada incorrecto estando a cargo de la empresa.
— No puedes hablar enserio — expreso Lyu indignado — merezco esta oportunidad, ¿acaso le importo a Soi la empresa? — Cuestiono — solo dejo su cargo sin importarle nada más, yo hubiese luchado por mantenerme en el puesto.
— ¿Justamente cómo ahora lo haces tú? — Pregunto Ryu.
La matriarca Fong interrumpió la charla de padre e hijo — era evidente que tu hermana entregaría su posición, su orgullo es un rasgo muy marcado en su personalidad — señalo soltando un suspiro — pero para aclarar, lo que quise decir anteriormente con el hecho de haberme precipitado, es porque simplemente te entregue el cargo a manos llenas, cuando lo correcto era que pasaras por el mismo proceso que tu hermana.
— ¿Qué proceso? — Cuestiono dudoso.
Shaolin Fong no pudo evitar mostrar una leve sonrisa — cuando tu hermana estaba por graduarse esperábamos que tomara el cargo de tu padre, pero apenas salía de la Universidad y aunque sus notas eran sobresalientes no tenía experiencia — explico — anteriormente solo tu padre y yo sabíamos todo lo concernientes a datos contables, reportes y toma de decisiones de la empresa.
— Aun sigue siendo así con algunas variantes, desde que tu hermana tomo el cargo de Ceo los datos contables y reportes son compartidos con la familia — indico Ryu— pero las decisiones finales siguen siendo de tu abuela y mía, por eso mismo planteamos establecer los estatutos, con esas mismas condiciones tu hermana tomo su cargo y supo dirigir la empresa de manera eficaz.
El pelinegro suspiro — aun así no veo cual es el proceso, que yo recuerde Soi trabajo contigo un tiempo.
Ryu sonrió — tu hermana no trabajo conmigo Lyu, trabajo para mí — aclaro.
— Lyu, tu hermana paso como ayudante de la asistente de la presidencia por el espacio de seis meses aprendiendo desde lo básico hasta lo más complejo — el pelinegro frunció el ceño — además de eso, paso 15 días visitando la fábrica donde aprendió el proceso de fabricación de equipos y cuando digo aprender, dejo claro que no fue directamente con el ingeniero— aclaro la anciana — estuvo más de una semana aprendiendo con los obreros.
Lyu se puso de pie molesto — eso es absurdo, me estás diciendo que quieren que sea un asistente y vaya a trabajar como un simple obrero — señalo — soy tu nieto, no puedes tratarme como a cualquier empleado.
Shaolin Fong enarco una de sus cejas y Ryu frunció el ceño — se te está dando la misma oportunidad que a tu hermana, ella no solo se graduó y tomo el cargo.
— Pe...Pero — casi se ahogo — soy un Fong, soy uno de tus hijos no puedes hacer que sea el asistente del asistente, seré la burla de todos en la empresa.
— No seas dramático — regaño la matriarca — en todo caso, esta es la oportunidad que has pedido y es tu decisión de ahora en adelante, ¿lo tomas o lo dejas?
— ¿Qué pasara con la empresa? — Cuestiono — no me digan que volverá a manos de Soi.
Ryu suspiro — creo que te preocupas demasiado por lo que suceda con tu hermana — dijo sarcásticamente.
— Tu padre estará a cargo de ahora en adelante — informo la anciana — además de que será quien supervisara tu proceso de aprendizaje.
— ¿Y si no acepto? — Pregunto el joven Fong.
La abuela Fong le miro seria — tendremos que buscar soluciones — indico — como tú mismo lo has dicho eres mi nieto, esta la empresa de publicidad a donde puedes volver.
— ¿Esto es un castigo? — Cuestiono Lyu.
— No — respondió Ryu — simplemente es el proceso que debimos seguir desde un principio.
El pelinegro se debatía interiormente, sabía que si declinaba no tendría más oportunidades de ser Ceo nunca más. Las cosas ciertamente le habían tomado por sorpresa no recordaba que Soi hubiese pasado por tanto trabajo, pero él estaba en la Universidad en ese entonces y poco le importaba la empresa, tenía su dinero y solo debía estudiar y cumplir con las reglas y sus notas. ¿Pero realmente quería ser como un trabajador más?, cuando siempre había sido el joven Fong, señorito Lyu y todos le guardaban respeto. Suspiro largamente y tomo asiento — está bien, acepto.
— Llama a Vanesa — ordeno la anciana.
Cuando la asistente llego y le indicaron que había nuevas directrices de ahora en adelante jamás espero ese tipo de cambio. A simple vista podía notar la molestia en el joven Lyu y ella sabía que la partida de la señorita Soi había dejado a la empresa un poco a la deriva por el simple hecho de que el joven Fong nunca mostró el talento y el carácter de su hermana, es mas lo único que evidencio fue su nepotismo por ser un Fong. Ahora también debía intentar adaptarse a la dirección del señor Ryu, todos esos cambios en una semana. El lunes iba ser uno de esos días extraños, porque ella tendría un asistente. Con todo dicho y hecho la reunión término, Ryu Fong se quedo para desalojar a su hijo de la oficina del Ceo y tomar el posesión de todo.
Lisa había llegado a las oficinas Legales Yadōmaru ubicadas en Shibuya, suspiro a la entrada del lugar el cual era un edificio de 10 pisos, el piso a que ella iba era en el 7º ya que toda esa planta albergaba el bufete familiar. Odiaba el lugar pues le recordaba su adolescencia y todas esas vacaciones perdidas las cuales las paso trabajando como mensajera, archivadora, como personal de usos varios de todos aquellos aprendices y abogados que trabajaban para su padre. Rent Yadōmaru les inculco sobre las leyes a sus dos hijas, les hizo trabajar en sus tiempos de libres y de ocio antes de irse a la Universidad, lo hacía para que aprendieran sobre el valor del trabajo, para que se rodearan del ambiente legal y conocieran lo que un día seria su legado.
La pelinegra suspiro y entro al edificio para tomar el ascensor, la última vez que llego al despacho fue cuando recién empezaba a trabajar con los Fong. Su padre le había asistido como supervisor, crítico y estricto con su trabajo, en ese entonces había dado gracias de no trabajar para él y hoy justamente estaba por pedirle una plaza. Bueno eso dependía de lo que Nanao le dijera, solo deseaba hablar con su hermana para luego irse a emborrachar y gozar su fin de semana como desempleada, ya que seguramente el lunes tendría que volver a laborar y para colmo de males lo haría para su padre. No es que tenían problemas entre sí, pero Rent siempre fue un padre un poco ausente y estricto dado a su línea de trabajo y Lisa tenía una leve inclinación por la rebeldía.
Cuando Lisa llego al séptimo piso una joven le saludo con una leve sonrisa — Señorita Yadōmaru, su hermana le espera en su oficina.
— Gracias Kaori — agradeció Lisa con una sonrisa y siguió a la oficina de Nanao, ante la mirada de algunos empleados que se mostraban sorprendidos. Cuando llego toco levemente y escucho la voz de su hermana indicándole que pasara. La pelinegra no perdió tiempo y entro a la oficina de una vez, sonrió al ver la imagen que pocas veces tenía el privilegio de ver. Su hermana de tras de un escritorio mostrando todo el profesionalismo y seriedad que siempre fue una de las características distintivas de Nanao.
Nanao ajusto sus gafas — ¿cómo te fue? — Pregunto al instante.
Lisa se dejo caer en la silla frente a su hermana y lanzo un suspiro — pude hablar con Soi y avisarle antes de tiempo — indico con calma, Nanao sonrió un poco pero su rostro cambio al ver la sonrisa traviesa de su hermana — creo que a Lyu no estaba muy contento con mi mail de renuncia.
— ¿Qué hiciste? — Cuestiono con una mirada inquisidora.
Lisa se encogió de hombros — nada que no sea de dominio público, solo mencione la visita de Ginjō y de paso le di unos consejos para ser mejor Ceo.
— Pensé que harías las cosas más tranquilamente — señalo Nanao.
Lisa puso los ojos — sabes que me dijo, que el firmaba los cheques y que yo era su empleada — Nanao frunció el ceño — bueno, lo digo parafraseando pero lo que quiero decir es que el muy tonto se cree el dueño del mundo.
Nanao puso los ojos — ¿tanto así? — Pregunto — nunca creí que Lyu fuera tan déspota.
— Posiblemente alguien le ha calentado la cabeza — indico — o lo huevos.
Nanao negó con su cabeza — Lisa — regaño.
La susodicha suspiro — ¿entonces, ya le dijiste al viejo? — Cuestiono.
— Si — respondió — obviamente quiso saber los motivos de tu renuncia, pero creo que eso te corresponde explicar a ti.
Lisa puso los ojos — no me hubiese importado que tu le contaras — expreso ganándose una mirada molesta de Nanao.
— Escucha Lisa, he tratado de ver como ha sido el día de papá — dijo con calma — hace unos minutos me entere que recibió una llamada de Shaolin-sama
Lisa suspiro — seguro ya sabe sobre todos los detalles — se quejo.
— ¿Eso es malo? — Pregunto Nanao.
Lisa estaba por responder esa pregunta cuando alguien abrió la puerta de la oficina, las dos hermanas Yadōmaru al momento miraron al imprudente y sin educación que entro como Juan por su casa y al instante quedaron en silencio. Caminando con pasos calmos Rent su padre hacia acto de presencia, llego hasta donde sus dos preciadas hijas se encontraban sentadas y sin perder tiempo tomo asiento junto a Lisa y frente a Nanao.
Lisa se enderezo en su silla y miro hacia el hombre junto a ella — padre — saludo con seriedad — justo hablábamos de que iría a tu oficina, seguro ya estas informado de lo sucedido.
Rent ajusto sus gafas y sonrió levemente — seguramente lo habías pensado Lisa, pero ahorrémonos las molestias — expreso con calma — ya estoy sabedor de todos los detalles de tu renuncia — dijo haciendo énfasis en "detalles".
Nanao suspiro, conocía al hombre frente a ella y si se había tomado el trabajo de ir a su oficina para adelantarse a su hermana era porque posiblemente esos detalles de la renuncia eran algo de lo que quizá deseaba aclarar — quizá debo dejarlos solos para que charlen tranquilamente — señalo Nanao poniéndose de pie y mirando la cara de suplica de Lisa que le pedía quedarse, su padre por otro lado le miro serio.
— Toma asiento Nanao — ordeno Rent con tono serio, Lisa y Nanao al instante se miraron y la menor de las hermanas volvió a su asiento. Rent Yadōmaru miro a sus hijas con una mirada inquisidora. Era extraño Lisa tenía los ojos violetas y los ojos de Nanao eran verdes mientras que los ojos de su padre eran negros, obviamente el color de ojos eran herencias de sus madres pero el problema visual lo heredaron del el ya que los tres usaban anteojos desde muy temprana edad. Rent era un hombre alto que medía 1.78, su cabello era negro de tez blanca, su voz era autoritaria, firme y su carácter siempre fue estricto y hasta distante.
Lisa suspiro — podrías haber tocado la puerta — señalo rompiendo el silencio.
Rento medio sonrió — quería darles una sorpresa a mis dos preciosas hijas — expreso con una sonrisa — esta noche debemos cenar en casa para celebrar que la hija prodiga vuelve a casa — incido con calma — puedes traer a Riruka contigo y tu a Shunsui, si es que no tiene algo importante que hacer.
Nanao miro a su hermana que puso los ojos — entonces, ¿eso quiere decir que me darás una oportunidad en el bufete? — Pregunto Lisa.
Rent les miro serio — hace unos minutos termine de hablar con Shaolin Fong, deseaba que interviniese contigo para que recapacitaras y volvieras a la empresa — Nanao miro con sorpresa a su hermana y Lisa frunció el ceño — según tengo entendido Ryu tomara la dirección de la empresa nuevamente.
El asombro fue lo que noto Rent en sus hijas — ¿qué paso con Lyu? — Pregunto Lisa.
— Estará bajo supervisión y según entendí, tendrá que pasar por el mismo proceso por el cual paso Soi — explico el pelinegro — asumo que con el giro de la situación, pensaras sobre tu renuncia que dicho sea de paso me pareció poco ortodoxa al final.
— Fue un toque de último momento — respondió Lisa, luego suspiro — seria poco ético olvidar mi renuncia a si por así.
Rent dejo entrever una leve sonrisa — ¿no vas a pensarlo si quiera? — cuestiono Nanao.
— Nanao no sería correcto — respondió con calma — ¿donde quedaría mi palabra si de pronto olvido todo lo que ha pasado y vuelvo como si nada?
Nanao suspiro — entiendo el punto.
— ¿Por qué no volver? — Pregunto Rent — eras jefa del departamento legal, tienes la confianza de los Fong y según tengo entendido tu sueldo era muy bueno, ¿no crees que te precipitas como con tu renuncia al dar una negativa tan pronto?
Lisa le miro con seriedad y ajusto sus gafas — esta semana he visto cosas en la empresa las cuales desapruebo, primeramente los cuestionamientos que hicieron a Soi sobre sus negocios ajenos a la empresa me parecieron fuera de lugar, además no eran desconocidos para sus padres y Lyu se agarro de ello para arrebatarle el lugar — informo — ¿cómo despides a quien ha hecho crecer la empresa?, los datos y ganancias avalan el buen desempeño, Lyu no sabe nada de la empresa es obvio que no tiene el talento y carácter de su hermana.
Rent suspiro — ¿tú le asesoraste para ese negocio? — Pregunto.
La pelinegra suspiro — si con asesorar te refieres a que le indique los parámetros legales en contra y a favor, puedes darlo por hecho — respondió — aunque debo darle el crédito ya que ella había investigado lo suficiente para tener una idea para ese negocio.
Rent sonrió levemente — escucha Lisa, dado todo el asunto algunas personas se ha acercado para averiguar sobre leyes y reglas de inversión — informo — lo que hizo Soi ha sido fuera de lo común, algo audaz e inteligente — señalo — he escuchado que saldrá en la portada del Times de Europa y Hong Kong, siendo catalogada como la nueva genio de la economía.
Lisa sonrió levemente y Nanao hizo lo mismo — ¿cómo es que sabes eso? — Cuestiono la menor de las Yadōmaru.
— Shaolin Fong me informo — respondió.
La pelinegra frunció el ceño — ¿qué tiene que ver todo eso?, además de que sirve que justo ahora vean los logros de Soi cuando antes solo le cuestionaron.
Rent suspiro — es más que obvio que a su manera Shaolin acepta que se equivoco con su nieta y conociendo a Ryu se debe de estar lamentando el asunto — señalo — me adelante a responder que posiblemente tu no regresarías ya que habías pedido venir al bufete, por lo tanto estaremos platicando en unos días con Shaolin-san sobre contratar al bufete como supervisores legales, obviamente quieren que tú seas quien supervise todo.
— ¿Qué quieres decir? — Pregunto Lisa un poco confusa y sin creer lo que su padre decía.
— Este bufete es especialista en casos penales y casi todo el personal es competente en esa área de la legislación, sobre derecho financiero el único capacitado soy yo — indico — tu hermana sabe un poco pero no profundizo dado que no tomamos muchos casos de esa índole y ahora que tú has decidido tomar tu lugar como mi una de mis herederas me parece oportuno buscar otra persona que ayude en esos casos ya que has traído a los Fong como clientes perennes.
Lisa parpadeo y Nanao hizo lo mismo — ¿estás diciendo que los Fong estarían redituando honorarios mensualmente? — Cuestiono Nanao.
— Si — respondió Rent — por eso nos reuniremos con Shaolin Fong, donde pactaremos los parámetros del contrato, los servicios y el monto de los honorarios.
Lisa sonrió levemente — ¡Guau! — Exclamo — eso es algo…un momento — dijo al instante — ¿iremos a China?
Rent sonrió levemente — por supuesto que no, Shaolin-san estará arribando el día lunes por la tarde a Japón — informo — por cierto, desea que le comuniques a Soi que desea hablar con ella en la brevedad posible.
Nanao y Lisa se lanzaron una leve mirada — no sé donde se encuentra, no tengo como y donde comunicarme con ella — señalo al instante.
Rent le miro con seriedad — entiendo — dijo con calma y se puso serio — no quiero ser melodramático pero viendo todo este asunto deseo saber si ustedes tienen algún tipo de problema.
Lisa y Nanao le miraron confusas — ¿a qué te refieres? — Pregunto Nanao.
— No quiero que un día ustedes dos me salgan con esas mismas tonterías de luchar por una posición, por el bufete o en un caso más extremo por una herencia — expreso con seriedad. Luego de un breve silencio y de pasar el momento de sorpresa ante lo dicho por el pelinegro su hija mayor se puso a reír, Nanao por su parte solo negó con su cabeza mostrando una sonrisa en su rostro — no veo cual el chiste, no se dan cuenta lo difícil que es la situación de Ryu con sus dos hijos — tomo un chicle de su saco y se lo hecho a la boca, hace mas de 6 años había dejado de fumar, pero cuando parecía estresado una goma de mascar le quitaba la ansiedad.
— No creo que Lisa y yo lleguemos hasta esos extremos papá — informo Nanao.
Lisa calmo sus risas — sabes que nos llevamos muy bien desde que éramos unas niñas, aun cuando nacimos de diferentes madres.
— Lo sé — acepto al instante — pero Soi y Lyu también parecían llevarse muy bien.
— Eso es muy cierto — apunto Nanao.
Lisa suspiro — se les olvida que hay una gran diferencia, Soi y Lyu pueda que se lleven bien pero son niño y niña.
— No le veo el caso — señalo Nanao.
— Yo tampoco — acordó el pelinegro.
Lisa puso los ojos — es obvio que Lyu tiene el complejo del pene pequeño.
Nanao puso los ojos y Rent le miro reprobatoriamente — no creo que exista algo como eso que tú dices, menos el hecho de catalogarlo como complejo — indico el pelinegro.
Lisa sonrió ampliamente — claro que si — defendió su postura — dime como te sentirías tú papá, si tuvieses una hermana que se lleva más mujeres a la cama que tu, que es inteligente y le siguen las chicas por montones.
— Creo que tiene un buen punto — afirmo Nanao — por lo tanto ni yo y ni Lisa caeríamos en algún complejo o una lucha tonta — indico la pelinegra — primero porque Lisa es lesbiana y segundo porque soy heterosexual.
Lisa sonrió — además a Nanao le gustan mayores y no tenemos pene — la menor de los Yadōmaru le lanzo un pedazo de papel.
— Confiare en sus palabras— expreso — el lunes hablaremos sobre tu contrato de trabajo y sobre donde te ubicaremos, después veremos cómo quedamos con los Fong — informo Rent — recuerden que las espero hoy para cenar, su madre estará feliz de ver que nos acompañaran — se puso de pie y miro a sus hijas — estoy orgulloso de ustedes.
Lisa y Nanao se quedaron en silencio y vieron como su padre dio media vuelta y emprendió camino a la puerta — gracias papá — dijeron suavemente. Hace mucho el no decía algo como eso, mas bien no recordaban ninguna de las dos haberle escuchado tan fuerte y claro.
— Creo que mi plan de emborracharme esta noche quedo descartado — se quejo levemente.
Nanao río — aun esta el día sábado, ¿una fiesta de traje? — sugirió Nanao.
Lisa sonrió — ¿en tu apartamento o en el mío? — Pregunto.
Nanao se encogió de hombros — el tuyo — respondió.
La pelinegra se pudo de pie — bueno, mejor regreso a mi apartamento — señalo — debo ir por Riruka y avisarle de nuestros planes para esta noche y la siguiente.
Nanao se puso seria — ¿le dirás a Soi lo de su abuela? — Pregunto.
— No quiero arruinar sus últimos días de estar lejos de todo el problema — señalo la pelinegra — quizá solo informare que su abuela desea hablar con ella y si se pone necia le diré que estará en Japón.
— Hace unos 3 años que la abuela no viene de visita — indico Nanao — ¿crees que viene por todo el problema reciente?
Lisa se encogió de hombros — tenía entendido que vendría para la gala anual de la empresa, pero seguramente adelanto el viaje pues la gala es dentro de un mes y aprovechara para solucionar inconvenientes.
— ¿Crees que la gala siga en pie a pesar de los problemas? — Pregunto.
Lisa frunció el ceño — creo que por eso mismo adelanto el viaje, para solucionar todo el asunto antes de la gala — señalo — ese evento no solo es una tradición, es el culmen de un año de trabajo y una manera de celebrar con socios, empleados y amigos la buena fortuna de la sociedad.
— Justo ahora eso parece algo irónico — expreso Nanao.
— No lo niego, pero Shaolin-sama es tan necia que lo arreglara si o si — indico — aunque le cueste algunas rabietas o le lleve a la tumba.
Nanao negó — no seas extremista.
Lisa suspiro — nos vemos en la noche — se despidió, Nanao asintió y vio como su hermana mayor salía de su oficina. Una sonrisa se dibujo en su rostro, ¿Quién iba a imaginar que todo saliera bien? Lisa iba a trabajar en el bufete de la familia, había tanta ironía en ello, pero también había cierta felicidad que no se podía explicar.
New York – Hotel Mandarín Oriental
Por primera vez desde que llego a New York Yoruichi había sido la primera en despertar, miro la hora al instante para luego ver hacia su novia que se movía inquieta en la cama denotando que su sueño era tranquilo. La morena suspiro y se levanto para buscar el baño, necesitaba despertar por completo, además debía quitarse ese malestar por beber tequila la noche anterior. Tomo una ducha fría muy necesaria para aclarar todos sus pensamientos, podía recordar todo lo que Soi le había contado sobre su familia y la reunión en la empresa, el tono resentido en sus palabras era palpable junto con la decepción. Todo el asunto le hizo sentir mal, Soi aun con sus problemas había tomado una avión, dejado todo por ir tras ella, le había consolado y acompañado cuando mas perdida ella se había sentido.
Pero ahora que sabía todo lo ocurrido no podía dejarlo pasar así por así, la peli azul le había instado a no juzgar tan duramente a su hermano, le aconsejo arreglar la situación con su padre para al final regresar a Japón sin temas inconclusos o arrepentimientos. Yoruichi por primera vez desde lo ocurrido con su padre pensó las cosas de manera fría y analítica, como cuando estaba en el frente con una cámara y descargas de M-16, ametralladoras y otras armas de guerra se dejaban escuchar. Sus días en New York estaban por terminar y debían regresar a Tokio para que Soi también solucione sus problemas familiares, de eso estaba más que segura, porque la morena sabia que los Fong era una familia muy unida a pesar de lo problemas actuales y no era justo lo que estaba sucediendo.
Cuando la morena salió de la ducha fue a la sala de estar, tomando el teléfono para pedir el desayuno, luego de cambiarse despertaría a su linda novia para que cuando llegase el desayuno pudieran comer juntas. Soi Fong por otro lado se movió en la amplia cama y noto que su izquierda estaba vacía, abrió sus ojos levemente y noto que Yoruichi ya no se encontraba en la cama.
— Despertaste — señalo la morena y tomo asiento en la cama, para darle un pequeño beso a la peli azul.
— ¿Qué haces despierta tan pronto? — Cuestiono.
La morena sonrió levemente — son casi la nueve — informo — ve a ducharte, ya pedí el desayuno — señalo — espero te agrade, tenemos un largo día por delante.
La peli azul frunció el ceño lindamente según Yoruichi — ¿un largo día? — Pregunto con curiosidad.
— Si — respondió la morena — además, deberías revisar tus mails para ver como están las cosas en Tokio.
Soi suspiro — seguro no ha cambiado mucho desde la madrugada — expreso levantándose de la cama, se sentía cansada pues no había podido descansar luego de las noticias de Lisa.
Después de quince minutos Soi estaba terminando de cambiarse cuando el desayuno llego a la habitación. Escucho como la morena parecía arreglar la mesa con la comida. Por otro lado Yoruichi sonrió levemente ante el desayuno ya listo en la mesa, cuando Soi estaba en la ducha había aprovechado para llamar a su padre, su plan era simple verse en una lugar para charlar y limar asperezas o simplemente dejar las cartas sobre la mesa. La peli azul apareció y noto que su novia ya se encontraba sentada en la mesa sin tocar el desayuno.
Soi se acero y la morena le recibió con una sonrisa, Soi no pudo evitar corresponder de la misma manera — se ve bien — felicito la selección del desayuno, huevos, tocino, café y pan cake, acompañado con un poco de fruta.
— Toma asiento, que tengo hambre — se quejo la morena y Soi hizo como le indicaba, con eso empezaron a degustar su desayuno. La peli azul noto que Yoruichi parecía un poco más animada a los días anteriores, quizá la charla de ayer con su hermano había ayudado y la carta de su madre, aun recordaba como leyó cada palabra como si se tratara de un aliento de vida. Aun así tenía cierta curiosidad.
Soi se encontraba picando un poco de fruta — ¿qué has planeado para este día?
La morena alzo su vista y bebió un poco de café — lo primero es ir al centro comercial que fuimos ayer, iremos a una cafetería porque ahí me estará esperando papá.
La peli azul casi se atragantó con un bocado de manzana — ¿tu padre? — Cuestiono y la morena asintió.
— Tienes razón en lo que dijiste ayer — expreso la morena — todos cometemos errores y si mamá lo perdono, creo que a ella le gustaría que siguiéramos su ejemplo.
Soi sonrió levemente — me alegra saber que deseas arreglar las cosas.
La morena le miro seria — lo intentare, pero no prometo mucho — indico y luego miro hacia la peli azul — por lo tanto, cuando regresemos a Tokio tu también deberás arreglar las cosas con tu familia — advirtió.
La peli azul enarco una de sus cejas — haces trampa — acuso.
— No es así — se defendió — solo he pensado que deberías intentar arreglar el asunto de la empresa, ya sea que regreses o no es tu decisión — señalo — debes al menos darles una oportunidad a tus padres y tu abuela de aclarar todo el asunto — Soi frunció el ceño y la morena se encogió de hombros — tengo dos trabajos y una cantidad considerable de dinero ahorrado, entre mi sueldo que pocas veces gastaba estando en lugares inhóspitos y el premio en efectivo del Pulitzer, puedo darme el lujo de mantenerte si lo necesitas — indico de manera divertida.
Soi no pudo evitar reír — sabes que eso no es necesario.
— Lo sé — afirmo al momento — estoy segura que para ti lo que yo poseo no es más que una nimiedad.
Soi le miro seria — no creo que sea algo como lo que dices, más bien pienso que deberías invertirlo, hacer que el dinero trabaje y no pase ociosamente en una cuenta bancaria.
— Es una cuenta a plazo — informo — esta redituando intereses, además no se mucho sobre la bolsa o esas cosas.
La peli azul sonrió levemente — después de arreglar todos estos inconvenientes familiares hablaremos sobre eso, quizá te venda algunas acciones de la inversora inglesa.
— ¿Me cobraras por asesoría? — Pregunto maliciosamente.
Soi sonrió — obviamente, no estudie para regalar mis conocimientos — señalo con picardía — pero a ti, de pago solo aceptare cuerpomatic — la morena le lanzo la servilleta a la cara mientras las dos reían un poco y charlaban de otras cosas más ligeras.
Soi y Yoruichi caminaban por los corredores del centro comercial, la afluencia era considerable dado que era día viernes. La morena vestía un jeans, una camiseta ajustada a su figura y un pequeño abrigo. Soi por su parte usaba un pantalón casual color azul junto a una camiseta gris. Habían salido del hotel hace 15 minutos y aunque todo iba de la mejor manera la peli azul noto que Yoruichi justo ahora parecía más silenciosa de lo que había sido en parte de la mañana, quizá el que estuviese a punto de volver a ver a su padre hizo que su ánimo menguara un poco y de pronto se encontraban frente a una cafetería, La morena se detuvo de pronto y miro atreves de la vitrina del lugar el padre de la morena ya se encontraba en un lugar. Soi lo vio sentado en una mesa al fondo del lugar y parecía ansioso.
La morena llego al lugar pactado, una cafetería que era la que visitaba con su madre para comprar algunos muffin cuando estaba en la escuela. Cuando vio que su padre ya se encontraba ahí su resolución de arreglar de charlar y arreglar todo el asunto desapareció y solo deseaba salir de ahí y regresar al hotel o a Japón. Soi tomo su mano y la apretó suavemente dándole una leve sonrisa — si no deseas entrar, yo puedo ir y explicarle.
Yoruichi suspiro y negó con su cabeza haciendo que su cabello se balanceara ante el movimiento — debo hacer esto — señalo suavemente y Soi frunció el ceño — solo que no es lo mismo llamar al diablo que verlo venir.
Soi le atrajo en un leve abrazo, no quería hacer una escena o algo por el estilo ya que siempre había sido reservada en sus afectos — quiero que estés bien Yoruichi.
— Solo quédate a mi lado — pidió suavemente, mientras se aferraba al abrazo de la peli azul.
La peli azul sonrió levemente — siempre — respondió haciendo que la morena dejara entrever una sonrisa.
Un suspiro largo erizo el cuello de Soi — será mejor entrar, no quiero darle más largas al asunto — señalo la morena. Fue en ese momento en que terminaron el contacto y caminaron hacia la puerta para ingresar a la cafetería, Shiro que estaba ansioso noto cuando su hija se acercaba y frunció el ceño cuando descubrió que venia acompañada por la chica que le acompaño a su casa.
Shiro se puso de pie un poco incomodo — hija, gracias por venir — expreso con calma y luego miro hacia la joven que se encontraba junto a su hija — pensé que hablaríamos a solas.
— Puedo esperar en otra mesa — sugirió la peli azul al instante asombrando al moreno que posiblemente pensó que no hablaba un ingles fluido.
La morena frunció el ceño — si deseas que hablemos ella se quedara a mi lado — afirmo.
Shiro miro con un dejo de asombro a su hija que nunca fue muy apegada a las personas desde que tomo ese trabajo peligroso — entiendo, discúlpame.
Soi asintió en confirmación — será mejor que tomemos asiento — sugirió para romper el momento un poco incomodo. Los Shihōin tomaron asiento, Yoruichi frente a su padre y de forma posesiva halo a Soi a su lado derecho, sus manos entrelazadas consciente de su nerviosismo creciente.
— Pensé que habías regresado a Japón — se quejo el moreno — en todo caso no te culparía por eso — empezó Shiro — sé que he cometidos muchos errores, tu madre que en paz descanse tuvo la paciencia de perdonarme pero aun con eso la confianza fue un punto difícil de recuperar — explico, cerro sus ojos brevemente — fue un momento de debilidad del cual ni yo mismo he podido entender.
La morena apretó su agarre con la peli azul — hurgar en el pasado no es mi intención, menos el motivo por el cual te llame — indico la morena — eso que hiciste de engañar a mamá me parece por demás inapropiado y bajo — señalo con un dejo de veneno — pero si ella te perdono quien soy yo para juzgarte por ello — Shiro sonrió levemente.
— Gracias hija — dijo soltando un suspiro de alivio.
La morena negó — no agradezcas, porque una cosa es que engañaras a mamá y otra que nos mintieras a nosotros todos estos años— expreso con molestia.
— Creímos que sería lo mejor — se defendió el moreno.
Yoruichi le miro duramente — ¿si no hubieses tenido una hija le hubieses confesado lo ocurrido a mamá? — Pregunto y su padre asintió con seriedad— ¿cuántos años tiene ella?
— Va a cumplir 14 años — respondió.
— Yo aun estaba en la escuela cuando ella nació — señalo la morena — ¿nuca nos ibas a decir? — Cuestiono — solo esperaste que mamá muriera para ir con tu otra familia.
Shiro le miro serio — antes que tu madre muriera hablamos sobre esto, tu hermano se había casado en ese tiempo y tu siempre has sido de las que no se queda mucho tiempo en un lugar — indico y la morena le lanzo una mirada molesta — se que no es tu culpa, fue ese trabajo — suspiro — cuando tomaste la decisión de ir a Japón hubo una parte de mí que no lo podía creer, eras una niña cuando emigramos a América, ¿que podías querer en un país al otro lado del mundo? Aquí tenías propuestas de trabajo.
La morena suspiro — la muerte de mamá fue algo muy doloroso para mi, simplemente no podía quedarme donde todo me recordaba a ella — simplemente no podía quedarme.
— Como te dije antes, tu madre pensó en que sería bueno el recompensar el tiempo que no estuve con Yashiro, ustedes ya estaban adultos y con sus vidas casi hechas — el moreno guardo silencio — se que fui un cobarde por no decirles antes pero temía que me odiaran.
— No es como si las cosas fuesen mejores ahora — indico Yoruichi, no pudiendo evitar el reclamo — se que irme lejos fue solo una manera de huir, pero me hizo bien — miro hacia la peli azul y medio sonrió — se que mamá te perdono y aunque para nosotros fuiste buen padre, extrañamente eso se ha roto para mí.
Shiro negó con su cabeza — princesa no puedes hablar en serio.
— No me llames así — pidió la morena con frialdad — tome un avión porque estaba preocupada por ti y llevarme esa sorpresa fue…— bajo el rostro al sentir que sus ojos picaban, la peli azul apretó su mano suavemente — ¿Creíste que nunca nos daríamos cuenta? — Cuestiono — no quiero irme sin dejar todo resuelto.
Shiro frunció el ceño — pensé que te quedarías más tiempo o…
— ¿Qué? — Pregunto la morena.
— Tienes casi un año en Japón, pensé que podrías quedarte un poco más y… — empezó Shiro, pero fue interrumpido.
— Pasarla con la familia — termino — el corazón de la familia era mamá, ahora tú tienes una familia la cual debes cuidar — señalo — Yūshirō ya formo la suya y yo — miro hacia la peli azul que le sonrió levemente — quizá un día forme la mía.
Shiro miro hacia su hija y luego a la peli azul con seriedad— ¿con una niña que ni es japonesa? — Cuestiono — porque según se, el apellido Fong es de raíces chinas.
La morena le lanzo una mirada fría a su padre — descendencia china e inglesa, pero japonesa de nacimiento — aclaro Soi Fong con tono calmo.
— Deja de atacar a mi novia — advirtió Yoruichi.
Shiro suspiro — no le estoy atacando, solo señalo algo evidente — dijo con calma — no la conozco, ¿quién sabe si solo es alguien colgando de tu fama? — Señalo — basta verle para notar que es más joven que tu.
Soi parpadeo sorprendida y la morena acentuó su ceño — primeramente Soi no es tan joven como parece — aclaro la morena y la peli azul apretó su mano suavemente indicándole que se calmara — segundo, quizá la familia de Soi pudiese decir más o menos lo mismo de mi.
— Por favor — expreso con sarcasmo Shiro, Soi suspiro supo que si el moreno seguía por ese rumbo Yoruichi lo dejaría ahí sin llegar a algún acuerdo entre padre e hija.
La peli azul carraspeo — por muy acostumbrada a ser el centro de atención, debo indicar que no soy el tema de conversación que los trajo aquí — indico dejando callados a los Shihōin.
— Se que fuiste un buen padre para mí y Yūshirō, aun así es difícil que esa imagen no se vea empañada, como dije no soy quien para juzgarte — indico la morena — pero justo ahora lo mejor será que cada quien vuelva a lo suyo, posiblemente con el tiempo limaremos las asperezas que ahora están presentes.
Shiro asintió entendiendo — al final de todo ¿regresaras a Japón? — Cuestiono — yo hubiese querido al menos un momento para charlar a solas.
Soi pudo sentir el fuerte agarre de la morena en su mano — no creo que sea buena idea.
— Hija, por favor — pidió Shiro.
La morena suspiro — no me presiones papá, ha sido difícil el venir aquí ahora — se puso de pie — estaremos en contacto — soltó y aunque el moreno quiso decir algo mas solo vio como su hija le daba la espalda, Soi suspiro y dio una inclinación de forma educada para ir tras la morena. Shiro suspiro un poco decepcionado esperaba un poco mas de comprensión aunque debía aceptar que Yoruichi había sido más flexible que Yūshirō que apenas dejaba que viese a su nieta. Shiro Shihōin frunció el ceño, seguramente si su hija no tuviese ese enamoramiento con la chica china quizá pensara mejor el regresara Japón.
Yoruichi camino a paso apresurado para salir del área de cafeterías del centro comercial, quizá Soi había tenido parte de razón de que si no estaba lista para ver a su padre no lo hiciera. Pero la morena sabía que debía hacerlo, primero por ella y luego por la peli azul que parecía un poco reticente de hablar con su familia y arreglar sus disputas al llegar a Tokio. La peli azul iba tras de ella pero le daba su espacio pues no quería molestarle o ser la que recibiese la molestia que se guardo frente a su padre.
La morena llego hasta donde habían dejado la camioneta estacionada, Soi llego unos instantes tras de ella — quiero regresar al hotel — pidió la morena cuando la peli azul quito llave a las puertas.
Soi suspiro tras el volante y se coloco el cinturón, para mirar a la morena — quería ir a almorzar para variar.
— Podemos almorzar en el hotel, hacen buena comida — apunto con seriedad.
La peli azul le miro — hemos cenado, almorzado y desayunado en el hotel todo el tiempo que hemos estado aquí — señalo con calma — me gustaría invitarte a comer a un lugar bonito, visitar lugares que no sean centros comerciales — Soi sabía que estaba presionando a la morena, pero quería sacarla de ese estado molesto y triste, egoístamente deseaba ver de nuevo esa sonrisa astuta y suficiente, que su seriedad fuese la normal que mostraba, no la que veía desde que se entero lo de su padre que era una triste y decepcionada.
Yoruichi suspiro, la peli azul tenía razón solo pasaban del hotel al centro comercial, la casa de su hermano, la casa de su padre, la discoteca fue el único lugar que visitaron y según lo que la morena entendió el bailar no era una de las cosas que Soi disfrutaba al 100%, además de que mañana habían invitado a cenar a la familia de su hermano a cenar en el hotel como despedida — perdona, no quise…— los labios de Soi le acallaron en un leve contacto.
— No quiero que te disculpes, entiendo que no estés de humor pero estar encerradas en el hotel no será mejor — señalo la peli azul.
La morena suspiro levemente — ¿Qué lugares quieres visitar? — Pregunto.
Soi sonrió — quizá no te agraden — señalo al instante — la vez pasada no pude convencer a Lisa y Matsumoto de ir.
Yoruichi sonrió, algunas veces Soi parecía tan infantil — bueno, fuiste a una discoteca conmigo aunque no parece que lo disfruta mucho.
— Es porque no me agrada que te vean bailar — se defendió la peli azul y la morena le lanzo una mirada incrédula — bueno, el primer lugar seria ir al Wall Street para ir a trocar al toro y podría comer por ahí — dijo entusiasta y la morena ensancho mas su sonrisa porque definitivamente su novia parecía una niña algunas veces — la catedral de San Patricio, el Museo de Historia Natural — la morena rodo sus ojos — al final si lo deseas podríamos caminar en el Central Park.
— ¿Museo de Historia Natural, Catedral de San patricio y el Toro? — Pregunto con un dejo de diversión — espero que no ocupes esos trucos para conquistar chicas — Soi puso los ojos — bueno vamos por tu fantasía de tocar el toro, aunque creo que no lo necesitas.
— No es una fantasía — replicó Soi aunque la morena solo le regalo una sonrisa, fue así como empezó su recorrido por los lugares descritos, la morena extrañamente la paso bien por el simple hecho de que su mente se lleno de lugares que alguna vez visito pero había olvidado.
Soi por otra parte disfruto de cada lugar, había explicado a la morena que la vez que vinieron con Lisa y Rangiku, solo accedieron a visitar Times Square, Grand Central Terminal, Rockefeller Center y el Empire State. Almorzaron en el Trinity Place Bar & Restaurant, la morena se divirtió mucho por la elección del restaurante, si su novia definitivamente tenia cierto encanto infanto-juvenil. Llegaron al hotel noche y por ende habían cenado algunos hot dogs en la calle para variar, obviamente esa fue una contribución de Yoruichi al paseo que sirvió a que la morena aligerar su mente de los problemas.
La mañana del día siguiente la pasaron en la habitación del hotel, los preparativos para su regreso a Japón, la discusión principal fue el viaje ya que la morena tenía su regreso a una hora más temprana en un vuelo diferente con escala, Soi en cambio quería que olvidara ese boleto y comprar uno en el suyo que obviamente era primera clase y la morena se negaba a que la peli azul gastara más de lo que hasta ahora había gastado pero como siempre Soi uso sus armas de convencimiento que al final le resultaron inútiles e inadecuadas y ella misma termino emboscada con un trato horrible y deshonesto que Yoruichi había planteado para aceptar la propuesta de su novia que consistía en que Soi se comprometía en su regreso a Tokio ir a su casa y hablar con sus padres para limar asperezas.
Para aplacar un poco el ánimo de Soi, Yoruichi la llevo a comer a uno de sus lugares preferidos en New York que era Rizzo's Pizzería, obviamente el plato a comer fue pizza y de postre pidió canoli para las dos, el almuerzo fue diferente y la peli azul podía decir que con la morena había visto otra cara de la ciudad como la más común y natural, olvidando un poco el glamur y otras cosas más. Regresaron al hotel para descansar y estar listas para la cena, descansaron parte de la tarde, Soi hizo la reservación de la mesa para que fuese más privado.
Yūshirō y su familia llegaron puntuales a la cena, la pareja justamente ya les esperaba en su mesa privada. El moreno no pudo dejar de notar lo lujoso que era el hotel en que su hermana se encontraba hospedada aun cuando recordaba de que ella le había explicado que su plan original había sido quedarse en casa de sus padres, en ese caso solo quedaba deducir que la peli azul era quien había rentado la habitación y por ende desembolsado una cantidad considerable por su estadía. Además de eso su padre le había llamado contándole sobre la novia de su hermana o lo que había encontrado en internet sobre ella, como que era la primogénita de una de las familias más ricas y poderosas de china y Japón, sus apodos y su largo historial de conquistas. Obviamente el joven Shihōin se hizo el desinteresado para no darle el gusto a Shiro de darle la razón ya que le había expresado su preocupación porque le rompiesen el corazón a su hija.
Pero justamente como la primera vez que les vio juntas y ahora la peli azul mostraba el cuidado y consideración hacia su hermana que este día parecía un poco más alegre. Su esposa le había dicho que posiblemente su padre exageraba y que Yoruichi no era ninguna tonta, además se podía notar que se complementaban, ya que su trato era bastante cercano y no algo tan superficial. Seguramente Yoruichi ya conocía todos los antecedentes de su novia y con solo el hecho de que hubiese viajado para acompañar a la morena era una muestra de que la relación era formal para la joven millonaria. Yoruichi y Jessica tomaron un momento para ir a la habitación luego de una cena amena y un poco de charla, la bebe parecía un poco inquieta y mientras Soi cancelaba la cena el moreno le esperaba en el ascensor.
— Guau — expreso la rubia con la pequeña Danielle en brazos — esta si es una habitación lujosa — señalo a la morena que solo sonrió.
— Lo es — acepto la morena — por mi hubiésemos estado bien en cualquier lugar, pero Soi es un poco quisquillosa.
— Claro si tienes como pagarlo no importa — expreso con calma y vio como la morena enarco una de sus cejas —tu padre llamo a Yūshirō ayer y le conto sobre los antecedentes de tu novia.
La morena suspiro — papá la tomo contra ella — señalo al instante — pero siendo sincera no hubiese hablado con él si no fuera por Soi.
— ¿Pero la playgirl de Tokio, como es que tu y ella? — Pregunto.
Yoruichi suspiro— no soy una niña Jessica, ya estamos grandecitas para hablar sobre las cosas como son, se que ella tiene historial y créeme me he topado con una que otra, aunque ha sido molesto — Jessica sonrió al ver como su cuñada rodaba los ojos — conmigo ha sido tan diferente, obviamente al principio fue un desafío para ella y una molestia para mí, es más debo confesarte que venía sola y ella vino siguiéndome aun con los problemas que ha conllevado el dejar todo lo del trabajo familiar.
Jessica suspiro — ¿en verdad se conocieron en un cumpleaños o solo era una tapadera?
La morena no pudo evitar reír — lo simplificare para que le cuentes a mi hermano pero no daré detalles, yo había conseguido trabajo y decidí comer en un restaurante que vi, ella estaba esa noche ahí con sus amigas celebrando un cumpleaños, aunque nunca hablamos me llamo la atención observar esa celebración, alguien quiso abordarme de una menare molesta, ella vino al rescate, fue amable, me pareció linda y pensé que hace mucho tiempo no tenia sexo y…para ese entonces pensé que sería algo como te vi y no me acuerdo.
— ¿En serio? — Cuestiono Jessica un poco asombrada mientras le daba de comer a la bebe.
— Unos meses después me entere quien era — se encogió de hombros — fue molesto saber todo el asunto, aunque no nos presentamos pensé que era una chica normal y resulto ser quien era, desde ese reencuentro hizo todo lo posible por limar asperezas o que le viese de otra manera.
— Vaya, sí que hay una gran historia entre ustedes — señalo la rubia — ¿entonces la conquistaste y ella a ti?
— Creo que fue algo mutuo — respondió la morena y se puso de pie — espero Yūshirō no se ponga sobre protector, veo que están tardando.
Al instante la puerta era abierta y los dos que faltaban hacían su aparición, su hermano tenia cara de póker al ver la habitación y lo lujosa, se acerco a las ventanas y vio la vista con detenimiento — yo creí que estaríamos un poco incómodos metidos todos en la habitación.
La morena fue junto a su hermano lo tomo del brazo — quiero hablar contigo, ya regresamos — dijo la morena saliendo por la puerta donde antes había entrado Soi y el moreno.
— ¡oye! — Se quejo Yūshirō — ¿qué pasa?
— Ya me dijo Jessica que papá te hablo ayer — señalo con tono serio.
El moreno rodó los ojos — no hagas drama hermanita, ya sabemos lo de tu novia playgirl millonaria — señalo con diversión.
— Espero no le hayas dicho nada — expreso la morena — le gusta pasar desapercibida con el hecho de su apellido y su familia.
Yūshirō suspiro y se puso serio — les he visto y me parece que te quiere, te cuida y está aquí contigo en un momento difícil — se encogió de hombros — que tenga un largo historial no es un problema para mi si no lo es para ti, además tu también tienes tu historial y no te lanzo piedras por ello — Yoruichi rodó los ojos — aunque a papá no le agrado saber que su princesa ande con una chica así.
— ¿El va a dar ejemplo de moral? — Pregunto con sarcasmo y su hermano sonrió.
— ¿Vives con ella? — Cuestiono el moreno y la morena negó al instante — ¿es formal?
— Ya me llevo con sus padres — respondió seria.
— ¿Y qué tal la familia peluche? — pregunto con un poco de diversión y la morena le golpeo el brazo.
Yoruichi suspiro — sus padres bien, su madre es una amor de persona aunque su hermano es un problema, aun falta conocer a la abuela.
— Me parece que va en serio, no cualquiera deja sus comodidades por venir a participar de un drama familiar — señalo el moreno con calma — espero que nos invites a la boda.
— No vayas muy rápido hermano — pidió con calma la morena — hay mucho camino por recorrer.
— El hermano problemático, ¿no será que te tiro los perros? — Pregunto y la morena hizo una cara que le confirmo sus sospechas — ¿por qué será que algunos hombres no entienden?
La morena suspiro — machismo hermano — afirmo — entremos o pensara que algo sucede.
Cuando se disponían a entrar Soi abrió la puerta — ¿algún problema? — miro de Yūshirō a Yoruichi.
— Nada, vamos que hay que despedirnos — señalo la morena tomando a la peli azul de su brazo, haciéndole ingresar a la habitación con el moreno tras de ellas— la bebe no puede andar en la calle tan noche, además se puede resfriar si cae nieve.
Como Yoruichi había dicho al entrar notaron que la bebe ya estaba un poco soñolienta, por lo que empezaron las despedidas, Jennifer fue la primera y de paso dejo que la pareja se despidiese de la pequeña Danielle. Yoruichi fue la que tomo más tiempo para despedirse de la pequeña princesa. Yūshirō se despidió de su hermana, Soi les observo un poco alejada no queriendo estorbar y darles un poco de privacidad. El moreno pidió Yoruichi no dejar de contactarse, esperando poder verse en un futuro cercano y esperando que su relación fuese para mejor. La peli azul que les miraba pensaba en cómo habían cambiado las cosas con su hermano en menos de un mes. Yūshirō de pronto estaba frente a ella para despedirse, fue amable y afectivo y como cualquier hermano le encargo a su hermana.
Luego de quedar a solas Yoruichi y Soi fueron a la cama, la cena había sido amena e interesante, la bebe se había comportado tranquilamente y aunque la morena no lo dijese la peli azul sabia que extrañaría a la pequeña, era inminente que eso pasara. Al final Soi había notado que le gustara o no la morena tenía guardado instinto maternal y eso interesante. Su vuelo salía mañana a las 10 de la mañana para llegar a Tokio en la madrugada del día Lunes, como anteriormente habían platicado irían directo al apartamento de la morena a dormir un poco para que en horas de la tarde irían con los padres de la peli azul.
Yoruichi y Soi Fong tuvieron un viaje calmo si se podía decir, las comodidades de la primera clase dejaron a la morena asombrada y en cierta forma agradecida de tener que viajar con cierta soltura y privacidad. Había notado a su pareja ensimismada e inquieta en los momentos que habían intentado dormir, al final decidieron platicar un poco sobre ellas y lo que pensaban de su relación, la morena se asombro al notar que Soi fue directa con sus sentimientos y lo que quería de la relación, como lo había observado Yūshirō ella deseaba hacerlo más formal. La morena extrañamente no sintió ese temor que anteriormente le asaltaba, estos días que había convivido con la peli azul había experimentado lo que podía ser el convivir diariamente como en un matrimonio, aun con algunas variantes como el estar de vacaciones o en otro país.
Luego de casi 18 horas de vuelo Soi acomodo su asiento y la morena le imito, el anuncio de que estaban por aterrizar en el aeropuerto de Tokio. Media hora más tarde se encontraban llegando al complejo de apartamento donde la morena vivía. Apenas entraron al lugar buscaron la habitación para descansar como la morena había sugerido Soi puso la alarma para las 11 de la mañana.
Era día lunes y Lisa se encontraba en la oficina de Nanao lista para su día de trabajo en el Bufete legal de su familia, Nanao ya se encontraba en el juzgado según le había dicho la recepcionista al llegar pues le dejo encargado un café de bienvenida que justo se encontraba disfrutando. Lisa corroboro su correo nuevamente y como era costumbre no tenia ningún nuevo mensaje de Soi, ayer había charlado con Matsumoto sobre cómo estaba la situación ahí en Tokio. La recepcionista entro a la oficina.
— El señor Yadōmaru le espera en su oficina — señalo la joven. Lisa suspiro y se puso de pie para ir tras de ella. La recepcionista todo la puerta de roble color vino frente a ellas, al escuchar un pase ella abrió levemente — la señorita Lisa.
— Que pase, no tenemos toda la mañana — señalo Rent con seriedad y Lisa puso los ojos, aun así entro inmediatamente, la recepcionista se fue al momento que ella paso el marco de la puerta de roble.
Lisa no pudo evitar mirar la oficina de su padre y extrañamente era igual a como lo recordaba solo que esta vez no le veía tan grande — buenos días, padre.
— Toma asiento — pidió Rent y al momento le entrego una carpeta — léelo y me dices si te parece o quieres negociar algo, tu oficina será la que está junto a la de Nanao me parece que será más cómodo para ti — Lisa tomo la carpeta y empezó a leer como su padre indicaba — deberías llamarle a Riruka para avisarle que llegaras tarde este día.
Lisa alzo su vista — ¿tarde, porque? — cuestiono.
Rent sonrió — Shaolin Fong llega a Kyōto por la tarde y espera reunirse con nosotros para ver lo de nuestro servicios, ya tengo un borrador listo de lo que ofreceremos y espero que tu y Nanao lo chequeen mas tarde.
Lisa suspiro — pensé que lo hablaríamos aquí en Tokio.
— Lose, pero no me pondré quisquilloso con ella — suspiro — la conoces y si lo quiere de esa manera es porque algo tiene entre manos.
Lisa asintió y frunció el ceño — ¿Por qué en el contrato mencionas las ganancias y dividendos del bufete? — Pregunto la pelinegra.
Rent suspiro — porque tú junto a Nanao serán las que en un futuro se quedaran a cargo de todo esto— índico con una mano — hay una cosa que agradezco de todo el mal asunto de los Fong y es que eso te trajo con nosotros, Shaolin y Ryu siempre hablaron de ti como alguien inteligente y diligente, has crecido con ellos y debo agradecer eso aun cuando siempre tienes esa rebeldía que me saca de mis casillas.
Lisa no pudo evitar una sonrisa, pero podía sentir el incomodo silencio — ¿vas a llorar o algo así? — Cuestiono y su padre sonrió — se que no he sido la hija que esperabas.
Rent suspiro — nunca dije algo como eso, acepto que es difícil tratar contigo — señalo el pelinegro — pero como dijo una vez tu madre, es porque somos parecidos en cierta manera.
— Eso no me conforta — expreso Lisa.
Rent sonrió — lo sé, pero también tienes cosas de tu madre y eso te hacen mejor — suspiro — tu hermana me dijo que no te abrumara con cosas del bufete, herencia y esas cosas pero quiero que les quede claro que de ahora en adelante ustedes tendrán más peso en las decisiones del bufete.
— ¿Acaso estas pensando en un futuro retiro? —Pregunto Lisa.
— En un futuro, Nao ha sido paciente con mi ritmo de trabajo y es tiempo de aflojar un poco — señalo el pelinegro.
Lisa tomo un bolígrafo del escritorio de su padre y firmo el contrato — estoy conforme, ahora será mejor que empiece a trabajar — se puso de pie — tengo secretaria o algo así.
— Si, la misma que Nanao y un colaborador que tú misma deberás tomar según tus necesidades — indico el pelinegro — por cierto tu oficina esta vacía, pensé que te agradaría tener tus comodidades así que mira en línea y compra con la cuenta de la empresa para que traigan todo y mientras puedes usar la oficina de tu hermana, según se vendrá a medio dio pues tiene que estar en la corte toda la mañana.
— ¿A qué hora nos iremos a Kyōto? — Pregunto Lisa.
— El vuelo está programado para las 3 de la tarde, así que a las 2:30 deberíamos estar en el aeropuerto — dijo Rent tomando su portafolio — tengo una cita con un cliente importante pasa buen día, la oferta la envié a tu correo de la empresa, habla con Yumi para que tu usuario.
Con esa última indicación Rent salió de su oficina, Lisa suspiro todo era nuevo para ella porque realmente nunca pensó en trabajar junto a su padre y no es que tuviesen una mala relación o algún problema, quizá era simplemente que ella y Nanao era tan parecidos a su padre, poco efusivos y rara vez mostraban emociones. Esta sería un comienzo interesante, por ahora debía ver lo de su oficina y buscar un colaborador, de paso revisaría la propuesta para Shaolin-sama.
La alarma sonó molesta a los oídos de la peli azul, sintió que su compañera se aferraba a ella y le tomo un momento el mover su brazo para apagar el sonido molesto. El silencio era bastante cómodo abrió sus acerados ojos y pudo notar que el sol se encontraba en su esplendor, parpadeo un par de veces para luego lanzar un suspiro.
— ¿Ya es hora? — Pregunto con voz rasposa la morena que recién despertaba.
Soi sonrió levemente — podemos dormir un poco más si lo deseas.
Yoruichi se enderezo un poco y quedo frente a la peli azul — tengo hambre — se quejo, haciendo un puchero.
La peli azul sonrió — ¿pedimos algo de comer? — Pregunto.
— Si, porque no tengo nada de comida — señalo la morena — todo lo deseche antes de irme, además quiero hacer un poco de limpieza.
Soi soltó un largo suspiro — bien, hagamos limpieza, pedimos la comida y nos duchamos.
— Suena como un buen plan — señalo la morena poniéndose de pie y dejando la comodidad de la cama y de los brazos de Soi — pero no pienses que nos ducharemos juntas.
Soi rodó los ojos — no piensas en el medio ambiente — se quejo poniéndose de pie distraídamente, pero al instante sintió que había sido tecleada cayendo a la cama de nuevo.
Yoruichi yacía sobre ella con una sonrisa traviesa — un falta arreglar las cosas con tu familia, para luego poder pensar en nosotras — tomo sus labios suavemente y la peli azul correspondió al contacto.
Cuando el beso termino Soi suspiro — haces trampa Yoruichi.
La morena se puso de pie — esto es igual de difícil para mí, así que no te quejes y entre más rápido hagamos todo mejor.
La peli azul puso los ojos — eres peor de mandona que mamá — se quejo.
Con una sonrisa de la pareja ante el último comentario se dispusieron a hacer lo que habían planeado, la limpieza fue rápida no había mucho que hacer ya que todo solo era polvo y no habiendo más que hacer, cada cual se dispuso a tomar la ducha para después llamar a un servicio de comida. Almorzaron en calma y tranquilamente viendo las noticias. Soi reviso sus correos y miro con detenimiento el de su abuela que le pedía hablar con ella, como había cosas que eran inminente envió una contestación preguntando cuando podían hablar luego de eso y cerro la computadora. Eran las dos de la tarde cuando Soi tomo su teléfono.
Lisa se encontraba con Nanao preparándose para su viaje, ya había revisado lo que implicaría el acuerdo y como conocedora un poco de en lo que Shaolin Fong pedía de los servicios legales ajusto una que otra cosa. Al momento su padre trabajo en ello y ahora solo esperaban que el indicara el momento de salir, cuando el teléfono sonó, Lisa dudo por un momento al notar el numero pero con una leve sonrisa contesto.
— Hola, aquí Lisa Yadōmaru — saludo — ¿en qué puedo ayudarle?
— Hola Lisa, pues creo que un trabajo me vendría bien — respondió Soi con calma y una sonrisa — no creo que Yoruichi quiera mantenerme por mucho tiempo.
— Por favor, tu aun desempleada puedes mantenerte a ti, a Yoruichi y a mil niños chinos por el tiempo de un año y no pasar hambre — señalo la pelinegra rodando los ojos.
— ¿Cómo estás de desempleada? — Pregunto la peli azul.
— La verdad creo que es mejor que te sientes — indico Lisa y escucho un leve silencio de parte de su amiga en el otro lado de la línea — trabajo con papá de ahora en adelante.
— ¿hablas en serio? — Pregunto Soi un poco dudosa luego de un silencio incomodo en la línea — creí que es lo que evitabas todo este tiempo.
— Si bueno, creo que al final siempre está la familia — suspiro — es lo que siempre dice tu abuela y tu mamá, ¿lo recuerdas?
— Si — respondió Soi — bueno, es una gran sorpresa pero me alegro que estés conforme.
— Increíblemente lo estoy, hasta el viejo está feliz sorpresivamente — señalo la pelinegra.
— ¿Qué tal si nos vemos para cenar? — Sugirió Soi.
— Lo siento Soi, pero justo voy con el viejo y Nanao a cerrar una negociación con un cliente — informo con calma — vamos a salir de Tokio — indico — pero podemos vernos mañana si lo deseas o tienes tiempo.
— Por supuesto, hablamos mañana para ver a qué horas puedes — dijo Soi.
— Saludos a Yoruichi — se despidió Lisa y la llamada termino.
Yoruichi que había estado escuchando miro hacia la peli azul que extrañamente se había quedado en silencio — ¿todo bien? — Cuestiono.
Soi suspiro — creo que sí, es solo que en una semana han sucedido tantas cosas que los cambios son inminentes — señalo con seriedad.
— Dímelo a mi — expreso la morena y se abrazo a la peli azul — al menos estamos juntas.
— Eso es lo mejor — afirmo la peli azul — gracias por presionarme en arreglar los problemas.
Yoruichi se soltó del abrazo — creo que es hora de prepararnos para ir con tus padres.
Soi rodó los ojos — esta vez espero que tú me acompañes en todo.
La morena le sonrió — tenlo por seguro, no te dejare y evitare a que seas intransigente.
— No soy intransigente — se defendió y vio como la morena iba hacia la habitación a cambiarse, suspiro largamente le gustara admitirlo o no Yoruichi tenía razón. Ella nunca había sido calma cuando su temperamento tomaba lo mejor de sí, más bien parecía como si explotara y jodia todo en instantes sin poder controlarse.
Lisa tenía razón y le recordó que la familia siempre esta aun con todos los problemas y en cierta manera su madre no tenia culpa de nada más que evitar que sus hijos pelearan. Con lo que hablara hoy con sus padres podría al menos llegar a un entendimiento con sus padres y luego vería que es lo que su abuela pondría en la mesa, porque sea como sea antes que su apreciada abuela era la jefa de la familia y ella siempre tenía una manera de que todos movieran las decisiones a su favor.
Gracias por leer...continuara.
