CAPITULO No 36

El día miércoles llego demasiado pronto según Yoruichi, no había dormido muy bien a pesar de la comodidad de dormir en su propia cama tenia la constante preocupación por Soi Fong, sabía que podía confiar en que no haría nada tonto pero lo que había sucedido con su madre era un punto de inflexión para ella. La morena había despertado muy temprano para prepar y dejar todo listo en casa para cuando regresara en la noche junto a su novia, solo esperaba que su día de trabajo fuese tranquilo.

Soi Fong había dormido poco, pero trato de poner mejor actitud ante lo que pudiese venir de ahora en adelante, ella al final del día saldría del hospital y luego de un par de días de descanso debía volver a su rutina que antes se dividía entre trabajo, familia y su novia. Hoy tenía pensado ir a la habitación de su abuela y su madre para pasar un rato con ellas. Lyu había llegado en el transcurso del almuerzo, llevaba lo que era una pequeña maleta con ropa para su hermana y sus implementos personales que le había sido entregados por Lisa esa mañana de los cuales se encontraba su laptop personal y teléfono.

Su alta estaba programada para las seis de la tarde, Yoruichi vendría por ella y cuando el tiempo se acercaba, la peli azul fue a despedirse de su abuela y de sus padres. Era notable que Ryu no estaba de acuerdo en que se fuese al apartamento de su prometida sabiendo que en casa podía estar mejor con las personas del servicio y no le daría más carga a su futura nuera. Fue agradable que su madre como siempre fue sabia aun con todo lo que sucedía y había dicho que era mejor que se fuera con Yoruichi ya que así no se metería en problemas, fue ahí cuando su padre estuvo de acuerdo. La morena llego a tiempo, pero antes fue a saludar a la abuela y su suegra que le dio uno que otro consejo que le serviría para su hija.

La salida fue un poco tardada, la política del hospital pedía que el paciente desalojara en una silla de ruedas, pero Soi Fong quería salir por su propio pie. Cuando Yoruichi se dio cuenta rápidamente le pidió poner de su parte para ir a casa lo mas pronto posible ya que debían pasar por algo de comida. Lo siguiente fue que la peli azul pensó que ella manejaría pero de forma dominante la morena no quiso entregarle las llaves del auto, pasaron por la cena al restaurante de marca registrada de Si Fong y su familia, No tardaron más que unos cuarenta minutos para por fin llegar al apartamento de la morena, al final sintió que había sido un poco divertido ya que al principio la peli azul se mostraba un poco critica de como conducía la morena, pero al final entendió que podía hacerlo bien sin que ella estuviese temerosa.

Cuando llegaron al apartamento la morena llevo a su novia a la habitación para que colocara las cosas que traía consigo mientras ella iba a servir la cena, pero no fue a ninguna parte porque Soi Fong no permitió que se marchara de la habitación.

— ¿Qué haces? — Cuestiono la morena — debo ir a servir la cena o se enfriara.

Soi le atrajo hacia ella en una pequeño abrazo y suspiro — la cena puede esperar — indicio mientras iniciaba un pequeño asalto de besos en el cuello de su novia.

Yoruichi carraspeó levemente aun cuando sintió que su cuerpo se estremecía un poco ante el contacto amoroso de la peli azul — Soi creo que no deberíamos, la doctora dijo que debías descansar — dijo poco convencida de esas palabras, es que simplemente podía fácilmente admitir que la extrañaba, sus toques, el roce de su piel, los besos apasionados, más cuando la noche del compromiso habían pensado en hacer el amor hasta la saciedad.

Soi suspiro largamente aun cuando sus manos trabajaban sobre la morena para quitarle la ropa que llevaba puesta — Yoruichi te necesito, además no creo que le pase nada a mi hombro — dijo suavemente y luego sonrió — espero que no te pongas muy resistente cuando llegue a darte el mejor orgasmo de tu vida — la morena parpadeo ante la frase osada de su prometida y cuando quiso decir algo o replicar — vamos no te preocupes, luego cenamos porque sinceramente ahora muero por el postre.

Hicieron el amor olvidándose de todo lo demás, porque atrás había quedado ese terrible ataque, el hospital, la angustia, la venganza y todo lo que les afligía, en ese instante eran solo ellas dos en ese pequeño mundo amándose, sintiéndose de la manera más íntima y egoísta que nadie más podía entender. Casi una hora después la morena se dirigía al baño para darse una ducha rápida y después de eso fue a la cocina a poner la comida fría en el microondas mientras Soi Fong tomaba su ducha, bajo la regadera y con agua fría cayendo por su cuerpo sintió que de alguna manera volvía a la vida y de alguna manera no era la primera vez, ya que antes lo había pasado después de meses de recuperación y terapia por el ataque en su colegio.

Recordaba en ese momento que volvió a casa y tenía esa sobre protección de sus padres, las discusiones sobre su educación que iban desde tener tutores en casa o buscar un colegio privado en otra ciudad o en otro país, luego las negativas de su madre para que ella no aprendiese a defenderse, sabía que si seguía ahí cerca de su familia las discusiones no cesarían en un buen tiempo, por eso mismo ella busco un colegio que fuera bueno, privado y tuviese internado, si ella planteaba el colegio tal vez no habrían esas discusiones tontas entre sus padres, también debía ceder con lo del psicólogo porque desde que había salido del hospital no había querido más terapia aun cuando Retsu y su psicólogo en el hospital había recomendado más tiempo de terapia. Entonces así fue como logro ir al interinato del colegio ingles más prestigioso de Japón, con la condición de tener terapia por seis meses.

Ahora no podía simplemente salir huyendo de su casa, manipular la situación y poner sus condiciones, ella estaba bien, su abuela estaba bien pero su madre no, la mujer que había pasado semanas junto a su cama desde que fue posible salir de cuidados intensivos, aquella que según su padre leía cuentos, libros, la biblia, las noticias y hasta los chismes de la farándula cuando no tenía nada más que decir en su inconciencia. Quien cuando despertó lloro dándole gracias a Dios y quien espero a que volviera hablar luego de dos meses. Su madre nunca se rindió con ella aun cuando algunos meses atrás desperdiciaba su tiempo en relaciones fugases y estúpidas. Ahora ella debía estar ahí con su madre y por dios que lo haría, aunque todo lo demás tuviese que esperar, se lo debía a su familia y especialmente a su madre.

Llego a la sala y vio que Yoruichi ya había llevado los platos de comida y vasos con agua, ya que tenía que tomar sus medicinas para el dolor. Suspiro al verla sentada en con el control remoto del televisor en mano indicando que ella tenia el mando y verían lo que decidiera. Sonrió al verle vestida con un simple pans y camiseta de tirante que ciertamente no importaba lo que se pusiera pareciera que a la morena todo le quedaba bien, ella al contrario llevaba una de sus pijamas que seguro su hermano le había empacado con la demás ropa.

— Ven, come antes que se enfrié — dijo la morena y cuando la peli azul tomo asiento su novia al instante le inspecciono su herida en el hombro y suspiro — todo parece estar bien.

Soi puso los ojos — te dije que no habría algún problema, está casi cerrada — señalo.

— Igual debes tomar tu medicina y antes de dormir te aplicare la crema cicatrizante — le recordó con calma, la peli azul sonrió un poco ante la preocupación con respecto a su completa recuperación y de alguna manera sentía que ella era quien debía hacer ese trabajo.

La cena fue deliciosa para la peli azul que había pasado casi una semana entre comida blanda y sopas de hospital, hablaron de cosas ligeras y vieron un poco de televisión. Al final de la noche la morena lavo los pocos trastes utilizados para la cena y fue a la cama donde Soi ya se encontraba lista para dormir. Soi Fong se movió de su comodidad entre sueños al sentir que algo faltaba para seguir su sueño de manera cómoda, de manera inconsciente movió su brazo para buscarlo y extrañamente no lo encontró por lo tanto el descanso placentero fue interrumpido. Parpadeo un poco en la oscuridad y trato de ubicarse en la cama, parpadeo de nuevo identificando el lugar entre sombras y recordó que se encontraba en el apartamento de Yoruichi, pero ella no estaba a su lado en la cama.

Yoruichi se había levantado temprano, desde ayer se lo había propuesto pues su novia se quedaría en el apartamento todo el día y debía dejarle listo un almuerzo saludable y casero preparado junto al respectivo desayuno, no quería que por ningún motivo comprara comida de restaurante o comida rápida, las dos se habían comprometido en que estos días estarían juntas para que Soi no hiciera algo que no debía y para que de verdad terminara de recuperarse, de paso Yoruichi permitió que invadiese su apartamento, espacio personal y su cama, ante ese pequeño pensamiento suspiro y siguió cortando verduras para el salteado tratando de apartar de su mente lo sucedido horas atrás en su cama dos veces la primera a su llegada y la otra cuando estaban por dormir, aun cuando lo importante era que Soi se mantuviese reposando al parecer su apetito sexual se había disparado un poco y ciertamente su novia era tan buena que le costaba trabajo negarse a sus deseos.

La peli azul frunció el ceño al llegar a la cocina y ver que Yoruichi se encontraba ahí cocinando con un poco de música a volumen bajo, se acercó despacio y la abrazo por atrás sobresaltando a su novia —¿qué haces? — Pregunto al momento que le daba un pequeño beso en su cuello — deberías estar en la cama conmigo, aun es muy temprano.

Yoruichi suspiro, no pensó que ella despertará ya que parecía estar durmiendo cálidamente cuando la dejo en la habitación — preparo lo que será tu almuerzo, lo dejare listo para que solo calientes en el microondas.

Soi suspiro — no debiste dejar la cama por eso, bien hubiese pedido algo de comida.

La morena se dio vuelta en el abrazo de su novia — nada de comida de restaurantes, dije que cuidaría de ti estos días para que termines de recuperarte y es lo que hare.

La peli azul suspiro largamente, hubiese querido decirle que regresara a la cama y que se quedara en casa con ella todos estos días antes de regresarse a su casa el fin de semana, pero no podía hacerlo pues ella misma le había insistido el tratar de volver a la normalidad y no estar angustiada en el hospital o por la situación — no quiero que te sobre esfuerces y menos ser una carga para ti.

Yoruichi le dio un pequeño beso — no eres una carga, además eres mi prometida — dijo suavemente — en un futuro seremos esposas y ya debería aprender a ser un ama de casa o algo así.

Soi Fong soltó un suspiro largo al pensar en su futuro matrimonio, le gustara o no este no era el momento de pensar en eso y por mucho que sus planes eran casarse lo más pronto posible lo sucedido en ese ataque de alguna manera retrasaba sus planes mientras veía que sucedería con su mamá — regresare a la cama, no hagas nada tan elaborado sabes me que encanta todo lo que haces.

La morena le sonrío y le vio irse camino a la habitación, suspiro pensando en que debía apurarse puesto aún tenía que ducharse y prepararse para ir a la revista. Pensó que Soi le diría que se quedara y no fuese a trabajar, ciertamente ella había pensado eso mismo, aun temía que Soi hiciera algo tonto y no cuidara de su recuperación, pero sabía que debía confiar. Termino de preparar la comida y la dejo enfriar un poco, de paso había hecho un pequeño desayuno para las dos, ahora era mejor no perder tiempo y fua a la ducha.


Yoruichi Shihōin estaciono el auto lujoso en su lugar ante la mirada de algunos de los trabajadores de la revista, no se perdió el hecho de que hablaban suavemente cuando ella pasaba a su lado de alguna manera desde ayer que apareció en el auto lujoso de Soi Fong había sido la comidilla de la revista y no es que le importara la opinión de los demás, pero odiaba los cuchicheos y chismes sin sentido. No era su culpa que Soi permitiese que usara su auto, además no fue la única en usarlo ya que Nanao fue quien al principio lo tomo y uso para llevarlas al hospital y cuando la llevo a casa para descansar en el tiempo que su novia estaba perdida. Suspiro al llegar a su escritorio lo menos que deseaba era recordar ese momento que de alguna forma le ponía de mal humor, por lo que se dispuso a trabajar y de alguna manera olvidar todo a su alrededor.

Una hora después llego Hirako de su asignación y lo primero que hizo fue sacarla de su pequeña nube — así que andas en el auto de lujo — señalo un poco divertido pero su sonrisa se borró al notar la cara de su amiga — ¿dije algo malo? — Cuestiono al instante.

— No, pero parece que es el tema para el día de hoy en la revista — apunto seria.

Hirako suspiro — creo que es mejor a que hablen sobre lo sucedido en la fiesta de los Fong o…— se inclinó un poco más a la morena para bajar su voz — sobre como la princesa salió del hospital herida para irse a un hotel en Narita y de alguna manera termino dopada.

La morena abrió sus ojos en sorpresa de que se supiera ese suceso —¿cómo es que sabes de eso? — Pregunto.

Hirako suspiro — alguien filtro la noticia, pero dado a la censura que hay sobre el caso la noticia solo es un rumor que circula entre periodistas, según supe Ōmaeda envió oficiales de confianza para traerla de vuelta — suspiro — debo de aceptar que es algo de esperar, el oficial tiene una larga historia con Soi Fong.

La morena puso los ojos — un día hablare con ese oficial — señalo seria.

— Vamos es solo un buen respaldo, seguramente por eso Shunsui Kyōraku le pidió su colaboración — indico con calma — el jamás haría algo que dañara a tu princesa.

La morena soltó un suspiro — lo sé — acepto conforme — igual todo fue un mal momento.

Hirako suspiro — seguramente le hiciste ver su error, no tienes que ponerte tan tensa con eso — le sugirió — ahora solo debes esperar que termine su recuperación y vuelva a la rutina.

Yoruichi sonrío un poco — sí, es bueno que le hayan dado el alta y ahora solo tomara unos días de descanso para la otra semana volver a la empresa.

— ¿Ya le dieron de alta? — Pregunto sorprendido — esa es buena noticia, pero no te pongas toxica con eso de estarle controlando todo el tiempo porque seguro se comportará para tenerte contenta.

La morena suspiro — no soy de este tipo de persona, de todas maneras, se está quedando conmigo hasta el sábado — la sonrisa de Hirako se amplió — ¿qué? — Cuestiono.

— Ahora entiendo porque al llegar tenías esa media sonrisa satisfecha — comento con cierta diversión — no es muy bueno eso de hacer cositas cuando se está recuperando de una herida de bala.

La morena soltó un leve suspiro — no fui yo quien se… — se detuvo al mirar la risa contenida del rubio.

— Bueno, no es como si alguien pueda negársele a la princesa de hielo — dijo un poco divertido — seguro necesitaba un poco de amor de tu parte.

Yoruichi bajo los ojos un poco pensando en todo — ha sido difícil lo sucedido — dijo con seriedad tomando la atención de Hirako — por un momento pensé que ella…es extraño, al saber quién era realmente y la fama que arrastraba no podía soportar tenerla cerca y ahora de alguna manera no concibo mi vida sin ella.

Hirako suspiro — se supone que así es el amor — dijo con calma — ahora debes pensar que aun con todo tienen un futuro por delante, Soi Fong te ama de la misma manera y quizá hasta más allá de lo que cualquiera pueda imaginar, porque quien diría que vería el día que la princesa de hielo descongelara su corazón.

Yoruichi soltó una leve risa, Hirako podía ser un tonto con sus frases sobre su novia — las cosas no serán tan fáciles de ahora en adelante Hirako.

El rubio se encogió de hombros — nadie ha dicho que las cosas del amor lo son, pero de alguna manera sabes que vale la pena el esfuerzo — la morena asintió en comprensión y aceptación — no deberías preocuparte por el bienestar de tu novia, hay un dicho que dice que mala hierba nunca muere.

La morena negó con su cabeza, en definitiva, Hirako Shinji jamás iba cambiar y entonces se soltó a reír un poco, de alguna manera tenía razón las cosas importantes nunca eran fáciles y en este punto Soi Fong valía el esfuerzo, su amor merecía el esfuerzo — necesito las fotos que tomaste hoy — dijo de pronto, su compañero puso los ojos inconforme al ver que estaba arruinando un buen momento de compañerismo con el trabajo.


Soi Fong se movió un poco ansiosa en la sala del apartamento de Yoruichi y por enésima vez miro su reloj impaciente, ya era pasada las cuatro y se suponía que Lyu debía llegar a las cuatro para llevarla al hospital. El día había sido de alguna manera tranquilo entre desayunar con Yoruichi antes de que se marchara al trabajo, luego de eso volvió a la cama para ver televisión pero se quedó dormida de alguna manera, tomo los medicamentos que le habían prescrito según las indicaciones, limpio un poco y lavo los platos, para luego almorzar lo que su novia le había preparado diligentemente, también había recibido dos llamadas de Yoruichi para controlarla un poco con eso del medicamento y que descansara, por mucho que había querido revisar su mail su computadora personal no tenía nada de carga y decidió que lo revisaría por la noche.

Un leve toque de la puerta la saco de sus pensamientos, se preguntó quién podría ser ya que de alguna manera nadie debía de venir a buscar a Yoruichi en horas laborales, fue hacia la puerta y la abrió rápidamente — ¿estas lista? — Pregunto un sonriente Lyu.

Soi suspiro — desde hace ratos, me hubieses hablado para salir — se quejó — ¿por qué tardaste tanto en venir? — Cuestiono.

Lyu suspiro — ¿me darías un poco de agua? — Pregunto mansamente — tengo un poco de sed — señalo, al instante Soi asintió adentrándose de nuevo al interior del apartamento dejando que su hermano ingresara tras ella — para responder tu pregunta, hay mucho tráfico por este lado de la ciudad a estas horas — explico mirando un poco curioso el apartamento de la morena y sonriendo un poco satisfecho del lugar.

Soi apareció con un vaso de agua — aquí esta tu agua — dijo llamando la atención de su hermano — ¿qué miras? — Cuestiono curiosa al notar a su llegada como su hermano miraba de un lado a otro.

— Este es un buen lugar — señalo con una sonrisa — un poco pequeño, pero lo compensa con lo acogedor y fresco — bebió su agua — aunque la televisión es un poco pequeña, bien podías traer una más grande de nuestra fabricación.

Soi suspiro — lo intente, pero a Yoruichi no le pareció la idea.

El pelinegro sonrío levemente — ya que es su lugar, nada que hacer entonces — le entrego el vaso — será mejor irnos — su hermana asintió y puso el vaso en la pequeña mes y los dos se dirigieron hacia la salida.

Soi ingreso al auto en el lugar del pasajero y estaba abrochando su cinturón cuando noto que en el porta vasos su hermano mantenía una botella de agua, el auto empezó inicio su marcha y la música sonó por el estéreo suavemente — como es que tenías sed y justo aquí tienes una botella de agua.

Lyu sonrío levemente — bien me atrapaste — dijo alzando las manos como si se rendiera ante el enemigo, habían llegado a un stop de semáforo — tenia curiosidad de cómo era el apartamento de Yoruichi, ya que te veo muy cómoda quedándote con ella cada que puedes.

Soi suspiro — al parecer no le gusta mi apartamento por ser estéril — señalo seria.

— Bueno, le doy la razón — dijo con seriedad — hay árboles y se respira un aire más fresco, esta área de la cuidad no parece estar tan urbanizado — el pelinegro noto como la peli azul ponía los ojos y al instante supo que le había irritado que le diese la razón a su novia, así que opto por cambiar de tema tomando una carpeta que llevaba en su puerta entregándosela — échales un ojo para que ver que te parecen.

Soi tomo la carpeta abriéndola para ojearla notando que en su interior había algunas hojas de vida — ¿qué es esto? — Pregunto curiosa.

Su hermano suspiro — Nemu me las envió, son enfermeras privadas que pueden ayudarnos para el cuidado de la abuela cuando le den el alta.

La peli azul frunció el ceño — se supone que debemos consultarlo con la abuela y no tomar decisiones por ella.

Lyu se puso serio — vamos Soi, en este punto la abuela no tendrá mucho que decir — dijo con calma — mamá no podrá estar a cargo de la casa por un tiempo, de ahora en adelante no puede estar cuidando de todos como lo ha venido haciendo — señalo — es tiempo en que seamos nosotros un poco más responsables con la familia.

Soi frunció el ceño, su hermano tenía toda razón en todo — tienes razón — acepto con total seriedad — deja que revise estos más tarde para darte mi opinión — suspiro guardando la carpeta — ¿son solo estos o tu doctora te enviara más? — Cuestiono.

— No es mi…— intento refutar, pero noto la media sonrisa de Soi — solo está ayudando de manera profesional — suspiro — creo que ha notado que estoy abrumado con todo este asunto, pero no creo que me envié más pues me indico que eran lo suficientemente eficientes según los estándares de la doctora Unohana.

La peli azul suspiro un poco aliviada, eso era una garantía de profesionalismo — creo que todos lo estamos un poco abrumados Lyu — acepto— pero no seas tonto hermanito, seguro que no solo está siendo profesional al ayudarte con eso de las enfermeras — se encogió de hombros — en algún punto seguro que son señoras mayores y enojonas que no pueden seducirte, al final la doctora Kurotsuchi quiere ser la única en cuidar del pequeño Ryu Fong.

El pelinegro hizo una mueca de sonrisa molesta — muy chistosita Soi — la susodicha rio levemente, lo sabía bien, ese mote que le decía la madre María Gracenburc cuando era un niño de apenas cuatro años era como su némesis.

— ¿Cómo va la empresa? — Cuestiono de pronto.

Lyu puso los ojos — no te preocupes, Vanessa lo está haciendo de maravillas — respondió serio — además Yoruichi no será feliz si se entera de que estoy abrumándote con cosas del trabajo cuando estas terminando tu recuperación.

— No seas ridículo, además no se enterará — dijo Soi con seriedad.

Ryu suspiro — de ninguna manera — dijo al instante — no pienso arriesgarme, no sabes cómo se puso cuando escapaste y pensó que yo sabía de tu escape — se quejó — deberías aprender de lo sucedido y no tentar tu suerte.

La peli azul miro a su hermano y pudo ver que hablaba en serio, se preguntó que le había dicho Yoruichi para Lyu fuera precavido y cuidadoso al respecto. Su mirada gris volvió al frente y a unas cuadras pudo divisar el edificio del hospital, ya estaban llegando y por ahora lo mejor era olvidar todo para otro momento, prepararse para visitar a su madre y abuela era importante darles un poco de animo esperando una pronta recuperación. Lo primero que hizo al ingresar al hospital fue visitar a la abuela, Soi sintió que era lo mejor mientras que su hermano fue con Lian, su padre al parecer había ido a casa por más ropa porque al parecer pasaba ahí parte del día y noche y solo salía parte de la mañana para asearse y ver como estaba todo en casa, luego volvía al hospital. Cuando Yoruichi llego una hora y media más tarde Soi ya llevaba un buen rato con su madre, Lyu estaba con la abuela y Ryu también, en términos generales la visita se llevó sin mayores problemas.

Habían buenas noticias, la primera era que el domingo se le daría el alta a Shaolin Fong y la segunda era de que Lian estaba recuperándose sin problemas de su operación y que podría acortar su estadía en el hospital que según las primeras impresiones de Retsu podría ser mes y medio, justo ahora pensaba que en tres semanas o en un mes máximo estarían dándole el alta, claro que señalo enfáticamente que Lian seguía las recomendaciones e instrucciones medicas al pie de la letra y por eso su recuperación iba viento en popa. Cuando la visita termino Ryu Fong pidió a sus hijos el poder cenar el día sábado juntos en casa para ver como procederían ante la vuelta de la abuela a casa y el pronto regreso de su madre.


El televisor estaba encendido en el apartamento de la morena y justo la pareja se encontraba cenando, habían llegado hace una hora y aunque había pasado a comprar comida para la cena a petición de Soi que tenía ganas de comerse una hamburguesa y papas fritas, había comprado también un poco de helado y postre. Por mucho que la morena le sugirió comida más ligera y saludable no pudo evitar que la peli azul cambiara de opinión, al llegar ella se había puesto a cocinar lo que sería el almuerzo para Soi el día de mañana, después fue y se sentaron a comer viendo una película de kung-fu. Ya habían charlado un poco de cómo le había ido a cada una en su día, la peli azul había dicho a la morena que el sábado por la tarde regresaría a casa ya que su padre quería hablar con ellos sobre lo que harían con su abuela y el regreso de Lian.

En este punto Yoruichi sabia a lo que se refería, Lian debía de estar por un tiempo en silla de ruedas y aunque la casa de los Fong era una mansión amplia no tenía lo necesario para la libre circulación de una silla de ruedas. Sin olvidar que las habitaciones se encontraban en la segunda planta, excepto la de Shaolin que según había indicado Soi su madre sabiamente había hecho los arreglos para una habitación en la planta baja y no tuviese el inconveniente de bajar y subir gradas dada su edad, posiblemente debían hacer algunos arreglos para facilitar la circulación de una silla de ruedas, seguramente después ya irían pensando un lugar donde llevarían a Lian para sus terapias físicas, sabía que de ahora en adelante el diario vivir no sería tan fácil para los padres de Soi, por no decir toda la familia, hecho un vistazo a su novia que justo empezaba a comer un poco de pastel de chocolate.

Se puso de pie y levanto los platos para llevarlos a fregadero y lavarlos para no dejar nada sucio, Soi había insistido en que no se preocupara por el desayuno ya que solo deseaba un poco de cereal con leche, por lo mismo habían pasado por un supermercado y comprado todo eso, más galletas, yogurt, algunos jugos y hasta palomitas de maíz para hacerlas en el microondas. Era como si el apetito se le hubiese disparado de pronto y en este punto no tenía ninguna queja, después de acomodar todo en las alacenas volvió hacia la sala y se quedó ahí mirando con desaprobación lo que la peli azul estaba haciendo —¿qué se supones que estás haciendo Soi? — Cuestiono seria mientras iba con su novia.

La peli azul suspiro — solo reviso mi correo — se defendió al instante.

Yoruichi miro hacia la pantalla pues había caminado hasta sentarse junto a su novia — hay cosas de trabajo de ahí — regaño al instante y se acercó para bajar la pantalla — mejor vamos a dormir.

Soi suspiro, sabía que con Yoruichi sería difícil seguir con la revisión de los correos y la posible respuesta que ella podrá darles — bien, como mandes— acepto mansamente, apago la computadora mientras su novia hacia lo mismo con el televisor. Cerraron todo y fueron hacia la habitación para cambiar sus ropas y descansar, esa era la idea de Yoruichi, pero Soi Fong tenía un plan mejor y como el día de ayer le hizo el amor hasta que estuvo satisfecha de darle un par de orgasmos a la morena, luego de eso cayeron en un sueño reparador.


El día viernes paso rápido siguiendo la tónica de los anteriores hasta el sábado que cambio un poco, Yoruichi tenía que ir a un evento con Hirako que terminaba a las 11 de la mañana, desde ahí Ukitake les había dicho que podían ir a sus casas y el día lunes hicieran lo propio con las fotos tomadas. La más feliz de esa noticia fue Soi Fong, su novia llego temprano y por mucho que le había dicho que iba a pedir comida, la morena opto por cocinar para las dos lo cual al final fue mucho mejor ya que preparo filete de pescado y ensalada. Habían charlado sobre la cena de hoy en su casa, ayer Soi había preguntado a su padre si Yoruichi podía ir a esa cena, su padre no le dio ninguna respuesta más que una mirada fastidiada Lyu se había reído del momento, explicando que era una pregunta tonta ya que se suponía que desde el compromiso, según sus padres su novia ya era parte de la familia para muestra un botón, ella con la peli azul habían estudiado los perfiles de las enfermeras escogiendo tres que se mostraban como las mejores opciones.

Eran las cuatro de la tarde y Yoruichi se encontraba en la ducha, Soi dormía en la cama cansada de su actividad sexual de esa tarde. Suspiro cansinamente al reconocer que por mucho que había intentado pasar un momento normal viendo tv al momento de sugerir comer un postre la sonrisa traviesa de Soi Fong le anuncio lo que estaba en realidad estaba pensando en su mente cochambrosa, no tomo mucho tiempo para que se movieran hacia la habitación donde habían hecho el amor, se suponía que Soi debía de mantenerse en calma y reposo estos días pero al contrario podría reconocer que no había día en que no le hubiese hecho el amor, pero quizá sabía que volviendo a casa de sus padres no tendrían de esos momentos con facilidad, recordaba cuando había regresado de América y todo el asunto de volver a la empresa con el problema con Lyu ya arreglado, paso días intensos de trabajo donde no tuvieron mucho tiempo de pareja.

Termino su baño y empezó a cambiarse, había optado por vestirse ahí para evitar cualquier otro asalto sexual de parte de su novia, además no era el momento se supone que a las cinco y media debían estar en el hospital para la respectiva visita. Todo estaba dicho y discutido entre las dos por mucho que Soi había tratado de convencerle de que esa noche se quedara en casa de los Fong junto a ella, había declinado de manera firme y de alguna forma el sexo de esa tarde era como compensar a su novia su negativa, porque a decir verdad no quería aceptar que como había dicho Shinji, le era difícil decir que no a Soi Fong. Ya estaba totalmente vestida por lo que no se detuvo más tiempo pensando y fue con su novia porque era hora de que despertarle para que se hiciera lo propio con el aseo y prepararse para ir al hospital.

Se acerco dispuesta a despertarla con cuidado entonces noto que se agitaba en su sueño, la morena estiro su mano para despertar a Soi Fong cuando esta de pronto despertó con una leve grito "no" Parpadeo y miro a su novia que estaba vestida y sentada a su lado. Entonces lo entendió había sido un mal sueño — ¿A dónde vas? — Cuestiono seria y un poco confusa, Yoruichi le miraba un poco asustada como si había visto un fantasma o algo así.

Por inercia la morena le abrazo — ¿estas bien? — Pregunto y luego dejo el contacto para verle detenidamente.

La peli azul suspiro largamente — solo fue un mal sueño — dijo negando con su cabeza como si quisiera borrar lo que sea que haya soñado.

Yoruichi suspiro — debes ducharte y prepararte para irnos al hospital — le recordó.

— Me hubiese bañado contigo, ¿por qué no me despertaste? — Cuestiono poniéndose de pie.

— Me pareció que debías descansar un poco y se notaba que dormías pacíficamente — dijo lo último como en un susurro.

Soi suspiro — iré a ducharme antes que se haga más tarde, no te preocupes por la maleta que la prepare esta mañana — se acercó y le dio un pequeño beso en la frente para tranquilizarle al notar que le miraba con cierta preocupación.


El camino ciertamente fue un poco incomodo, primeramente, porque Soi intento ser quien manejara y aunque Yoruichi rápidamente se negó a tal sugerencia no evito que de alguna forma el pequeño episodio de su mal sueño fuese una factor que preocupara a su novia de una manera tonta según su pensamiento, noto en el camino como le mirada de soslayo aún pendiente de las calles y señales de tránsito. Preguntándole si todo estaba bien, de que iba su mal sueño y señalando que días atrás había dormido bien. Le había respondido de la mejor manera que no se preocupara que solo había sido una mal sueño, que no tenía mayor importancia y aun así le morena persistió en su preocupación, hasta que Soi tomo su mano y le miro seria para decirle que estaba bien, que un mal sueño lo podía tener cualquiera y que solo era eso. Como las otras veces la visita se llevó a cabo con normalidad y una buena actitud ya que mañana en horas de la tarde Shaolin Fong seria dada de alta.

A las seis de la tarde todos salieron del hospital con dirección a la casa Fong, Lyu se había llevado a su padre mientras que Soi iba junto a Yoruichi que esta vez no pudo evitar que se saliera con la suya y condujera el auto luego de una semana de no hacerlo. Cuando llegaron rápidamente se dirigieron hacia el comedor donde todo ya estaba preparado, muy distinto a otras veces Yoruichi pudo notar que el lugar parecía tan vacío y poco acogedor, era como si la presencia de Lian Fong llenara el lugar de calor y una sensación de familia, había notado la incomodidad en su novia desde que cruzo por la puerta, pero decidió que era mejor no decir nada.

— Vamos, tomen asiento antes de que se enfrié — invito Ryu al instante.

Lyu suspiro — espero les agradé, les pedí que hicieran lo que cenamos cuando regresaron de América.

Yoruichi sonrió un poco y Soi asintió seria, fue cuando empezaron con la cena de manera que solo el sonido de los cubiertos fue lo único que se escuchaba. La morena noto que Ryu Fong tenía un firme agarre en su tenedor y Lyu por alguna razón estaba comiendo como si era una competencia de quien terminara rápido, había estado en esa mesa un par de veces o quizá una más pero nunca el ambiente fue tan frio y silenciosamente incomodo, cuando pensó que sería bueno iniciar alguna charla fue su novia la que lo hizo.

— Entonces padre, ¿qué es lo que querías hablar con nosotros? — Cuestiono suavemente y la morena noto como Ryu Fong alzaba su rostro del plato de comida soltando un suspiro.

— Estoy seguro que tu hermano te mostro las hojas de vida de las enfermeras, debemos pensar en contratar una adecuada para que cuide a tu abuela en casa ya que mañana le dan de alta — dijo al momento — además de eso debemos pensar en cómo haremos cuando tu mamá regrese, ella necesitara…

Lyu suspiro — tal vez contratar alguien que sepa adecuar el lugar para el libre movimiento de una silla de ruedas.

Ryu suspiro — eso mismo que dice tu hermano, además he pensado que podemos adecuar el salón de juegos para que sea nuestra habitación mientras se recupera por completo.

Soi asintió — bueno papá con Yoruichi estudiamos las hojas de vida y creemos que tres son especialmente adecuadas para la tarea, no sé si tu o Lyu tienen alguna sugerencia.

El patriarca se encogió de hombros, pero Lyu sonrío levemente — como ayer me dijiste quienes eran le pregunte a la doctora Kurotsuchi, dijo que eran una buena elección y que cualquiera de las tres serviría.

Soi bajo los ojos levemente y frunció el ceño, los dos no parecieron ser de mucha ayuda según la morena — mañana por la mañana podríamos llamar a la que escojamos para darle los detalles — sugirió Yoruichi.

Ryu Fong sonrío levemente hacia su futura nuera — sería lo más apropiado, gracias por la ayuda Yoruichi.

— Buscare un ingeniero que haga las adaptaciones, me imagino que será para que una silla de ruedas pueda movilizarse y el cuarto de juegos — la peli azul suspiro — mamá siempre se quejó que era un tanto encerrado así que me imagino de que sea podrá hacer más abierto y accesible.

Lyu frunció el ceño — no sería bueno comprar una de esas sillas eléctricas en vez de esas sencillas, mamá podría moverse con más...

— Es muy pronto para pensar en eso Lyu — interrumpió el patriarca y podía ver que el tema lo ponía tenso.

La morena sonrío hacia el pelinegro — quizá te estas adelantando un poco Lyu, creo que hay que esperar a lo que puedan decir los doctores.

— Hay que ver qué opinión tendría mamá al respecto — dijo suavemente la peli azul.

Ryu puso los cubiertos en su plato — ahora debemos hablar sobre la seguridad.

Los tres parecieron quedarse en silencio, nadie lo espero y Soi había creído que luego de que el supuesto responsable estuviese bajo custodia no tendrían la necesidad de ocupar seguridad — pensé que quedaba descartado, el sujeto esta…

— No me importa si lo van a sodomizar en prisión, no pienso arriesgarme con la seguridad de Lian y de ustedes tres — indico Ryu y Soi Fong entendió que no había manera de hacerle cambiar de opinión.

Pero Lyu algunas veces pecaba de inocente — pero a mamá nunca le pareció buena idea tener seguridad.

Soi le lanzo una mirada de "cállate" — no estoy haciendo un consenso Lyu, ya pedí a Vanessa buscar a la mejor agencia de seguridad, el lunes llegaran a la empresa a las diez de la mañana para ver los términos y honorarios — se puso de pie y miro su reloj — debo regresar al hospital, Lyu pide que mañana hagan limpieza en el cuarto de la abuela.

El susodicho asintió y con esas últimas palabras dichas soltó un buenas noches mientras iba de salida dejando a los tres ahí sin saber que decir — que cena familiar — se quejó Lyu levemente — debe cambiar de actitud, está comportándose como un loco.

Soi paso su mano sobre la sien — hay que tener paciencia — dijo suavemente.

— ¿Paciencia? — Repitió Lyu incrédulo — debe calmarse, no le hará bien a mamá si esta todo paranoico — señalo — ¿crees que le hará bien ver unos matones armados en el jardín o ir junto a ella en el auto?

— No seas exagerado — regaño Soi y suspiro — el lunes con más calma tratare de que tome las cosas con calma.

Lyu suspiro — no te engañes Soi, no has estado aquí todo este tiempo y me alegro que al menos tuviese un lugar acogedor donde estar y alguien que te cuide, porque no podemos esperar mucho de papá — se quejó — ni ha preguntado si estas totalmente bien, es como si dejara todo y no le importara, ayer me di cuenta que no se le había pagado al personal, las plantas de mamá están en mal estado ya que el jardinero no ha venido porque solo ella sabe dónde llamarlo — el pelinegro se agarró la cabeza con las dos manos en un acto de hastió.

— Es comprensible Lyu, lo que ha sucedido en parte es mi culpa — dijo suavemente la peli azul.

Lyu frunció el ceño — también es mi culpa, si yo no…

— Por favor basta, no es culpa de nadie — corto Yoruichi un poco molesta dejando a los hermanos en silencio, Shaolin-san tenía razón cuando le dijo que Lian era el corazón de la familia, pero más que eso era quien hacía que todo funcionara para todos — en vez de lamentarse o culparse no esperen que Ryu-san se haga cargo porque por lo visto no es capaz de hacerlo en estos momentos, quizá cuando Lian-san vuelva a casa no tendrá más remedio que ponerse a cargo nuevamente, pero mientras tanto háganse cargo ustedes, ya son mayores y en cierta manera responsables.

— Eso he tratado, ya les pagué a los del servicio — indico — le pedí a Vanessa ayuda con eso y otras cosas.

Soi frunció el ceño — Lyu, Vanessa fue contratada para la empresa no para hacer cosas de la casa.

— Lo sé, le dije que solo sería por esta vez — dijo como disculpa — estaba desesperado y no sabía que hacer, sabes bien que mamá tenía todo controlado en casa — le recordó a su hermana — los pago del servicio de luz, agua, calefacción, internet, cable, la despensa, los empleados de la casa, el maldito jardín, el menú del desayuno, almuerzo y cena, las donaciones al orfanato — suspiro — manejar un hogar o ser un ama de casa es un trabajo extenuante, lo juro si no tuviésemos personal de servicio me hubiese suicidado.

Soi sonrío levemente — bueno, hay que ver como planificamos de ahora en adelante.

La morena tomo su mano — mañana desayunemos los tres juntos y veamos que podemos planear — sugirió la morena — así también estas presente en la entrevista con la enfermera Lyu.

La sonrisa de Lyu se amplió — es una buena idea — acepto y miro a su hermana que asintió ante la idea —¿se quedaran hoy aquí? — Pregunto un poco esperanzado, estos días la casa se sentía tan vacía.

— No — dijo la peli azul — lo siento Lyu me iré con Yoruichi, pero desde mañana me quedare en casa.

La morena se sorprendió al momento, antes su novia había dicho que se quedaría y justo ahora cambiaba de opinión viendo como Lyu parecía un poco decepcionado — podríamos quedarnos Soi — dijo un poco dudosa y noto la mirada extrañada en su novia.

Lyu se puso de pie un poco más alegre — sí, podemos jugar un poco ya que me parece que pronto desmantelaremos el lugar.

Soi noto el cambio en Lyu y entendió que Yoruichi lo hacía por el — ve a preparar todo, mientras hablo con Yoruichi un momento — pidió y su hermano comprendió que era hablar algo de pareja — pensé que no era educado quedarte en la casa de tu novia.

La morena puso los ojos, ya se esperaba ese reproche — se supone que ibas a quedarte y de pronto dices que no.

Soi suspiro — mira el lugar, es como si... — negó un poco — se ve tan deprimente sin mamá.

— Por eso mismo, ¿no crees que Lyu siente igual? — Cuestionó — seguro ha sido una semana difícil para él, no me pareció buena idea dejarle solo y no podemos llevarlo a mi apartamento.

Soi frunció el ceño — por supuesto que no — dijo abrazando a su novia posesivamente.

— Si me quedo no pienses que tendremos intimidad en esta casa — le advirtió Yoruichi.

La peli azul suspiro — ya decía yo que no podía ser tan bueno.

— Vamos, hay que sacar la maleta que Lyu te estará esperando para jugar — dijo la morena — además puedo aprovechar para ver cómo están las cosas en la casa, además si no quedamos no tendremos que salir a desayunar, estando aquí podemos citar a la enfermera para que venga y conozca de una vez.

Soi sonrío — buena idea, llevemos los expedientes para que entre los tres decidamos de una vez — sugirió tomando a la morena buscando la salida del comedor — solo vas a ver lo que se necesite hacer, nada de ponerte hacer limpieza u ordenar, eso lo puede hacer mañana alguien del servicio con tus instrucciones.


La mañana llego rápido para los tres en la casa, Soi Fong había dado indicaciones al personal de servicio de hacer lo que su novia indicara. Ayer antes de dormir su novia había revisado cada habitación y parte del jardín, como antes había señalado Lyu los rosales de Lian-san parecían descuidados y la grama parecía haber crecido un poco a la última vez que estuvo ahí, lo otro y menos importante había sido el desorden en la habitación del matrimonio Fong, noto adornos rotos tirados al piso, ropa esparcida en la cama de manera desordenada y el enorme espejo de la esquina de la habitación estaba roto. No cabía duda que Ryu Fong se había desahogado de lo ocurrido de alguna manera. Cuando estuvieron listas para dormir Yoruichi le señalo todo lo encontrado y que se debía limpiar y reparar pronto.

Las empleadas hicieron lo que Yoruichi señalo esa mañana, mientras Soi, Lyu y la morena entrevistaban a la enfermera que cuidaría a Shaolin, aunque aún estaba por ver si sería una de planta o solo estaría ahí durante el día y en este punto si debían pedirle su opinión a la abuela. Aprovechando el momento y la buena disposición, Yoruichi, Soi y Lyu empezaron a ver como se irían organizando con las cosas de la casa, todo aquello que el joven Fong había señalado y hasta hace poco era total responsabilidad de Lian. Yoruichi había sugerido que Lyu se encargara de ver todo sobre la despensa y el jardín, que Soi se encargara de todos los pagos y gastos mientras su padre vuelve gradualmente a la responsabilidad. Ella por su parte les ayudaría con los recordatorios a cada uno por si algo se les pasaba ya que no sentía que debía meter mucho su mano en todo por mucho que fuese la futura esposa de Soi.

Con las cosas un poco claras y resueltas de alguna manera, los hermanos Fong sintieron que se les quitaba un enorme peso de encima. Soi estaba muy feliz de que Yoruichi se quedara ahí, por mucho que ayer apenas le permitió unos pequeños besos en su tema de viejita sobre el respeto de la casa de sus padres. Los tres hicieron planes de ir al centro comercial para comprar el mismo espejo que había sido destruido, para reemplazarlo y cuando su madre volviera no supiese del desastre que había armado su amado esposo. Luego irían al hospital donde tratarían de pasar un momento con su madre y luego sacar de ahí a la abuela, desde ahí todo sería un poco más movido porque volvería el lunes a la empresa y Lyu debía hacer lo propio con la agencia de publicidad que la tenía un poco abandonada, Yoruichi volvía al trabajo más comprometida aprovechando que su novia ya se encontraba bien, lo cierto es que con todo lo que podía venir en un futuro en la familia de Soi pensaba en dejar el trabajo de la Universidad y quizá arreglar los turnos con la agencia para tener más tiempo libre.


La abuela fue dada de alta del hospital la tarde del domingo, esa tarde noto que sus nietos se habían hecho cargo de las responsabilidades de la casa a falta de Lian y su hijo, por supuesto que todo con la ayuda de Yoruichi que parte de la tarde-noche ayudo a que estuviese cómoda y atendida en la casa junto a sus nietos. Al parecer ella se encargó de proporcionar el menú de la cena y tener un menú saludable para la semana, ya le habían anunciado que a partir del lunes tendría una enfermera para atenderle además de los empleados del servicio que ya conocía, sin duda era una nueva etapa en su recuperación y para su familia.

El día lunes Soi tuvo una pequeña sorpresa al ver llegar a su padre a la reunión que habían pactado con la empresa de seguridad para poner su propio plan de vigilancia, la joven Fong había hablado con su novia y hermano sobre esto, tenía un plan de cómo podrían tener una escolta sin sentirse invadidos en su propia privacidad, pero Ryu Fong puso su propio plan de acción con respecto a los escoltas y el tiempo serian escoltados. El patriarca pensaba que tres meses sería un tiempo adecuado para mantener su seguridad, también tenía el número de elementos para contratar, Soi Fong tuvo poco que decir o refutar al respecto y lo único que pudo conseguir es que el tiempo de los escoltas bajara para dos meses alegando que el culpable ya estaba bajo la custodia de la policía, en estas instancias habían contratado 6 agentes de seguridad para custodiarles durante el día y si era necesario parte de la noche.

Fue así como los días empezaron a pasar y de alguna manera la rutina fue asentándose en el diario vivir de la familia Fong, Ryu Fong pasaba parte de la mañana y final de la tarde con Lian en el hospital, almorzaba en casa y pasaba la tarde con acompañando a su madre, para luego regresar a la hora de la cena con Lyu y Soi que tomaban la tarde para visitar a su madre casi todos los días mientras aún permanecía en el hospital, Soi solo los días martes y jueves no visitaba a su madre para tener un momento privado de pareja con la morena, Lyu por otro lado había decidido faltar los días miércoles y viernes para de vez en cuando salir con la doctora Nemu del cual su amistad se había afianzado y podría decirse que ya estaban iniciando la transformación a una relación de noviazgo.

La abuela había reanudado algunas de sus antiguas funciones como gerente de la empresa en china haciendo reuniones virtuales y hasta había pedido a su amigo y mano derecha Chōjirō que visitara Japón pronto para arreglar algunos asuntos legales que ayudaran a un mejor funcionamiento de la empresa, además con lo que sucedido estaba pensando en dejar todo previsto de cómo se harían las cosas cuando ella faltara. Sabía que su familia se había asentado de maravilla en Japón y no podía pedir a ninguno de sus nietos que dejara su país de nacimiento para hacerse cargo de la empresa en China, para su total agrado Lyu por fin había dado con una mujer hermosa y bastante competente profesionalmente, Soi ya estaba comprometida con Yoruichi y pronto formarían una familia propia y de alguna manera su nieta era la que se quedaría frente a la empresa en Japón, Lian debía recuperarse por completo y era seguro que no dejaría a sus hijos y sus futuras nueras que seguramente más pronto que tarde le darían nietos.


Lian Sayers de Fong fue dada de alta del hospital tres semanas y media después de que la abuela regresara a casa, no había sido fácil salir tan pronto del hospital ya que Retsu tuvo muchas reservas ante eso y en la estancia de Lian en el hospital se aseguró que no hiciese ningún esfuerzo físico hasta que las heridas de su operación estuviesen completamente sanas, aun habían muchas recomendaciones con el tema del esfuerzo físico porque de alguna manera debía de iniciar con sus terapias para volver a caminar, el doctor Ishida había recomendado empezar con pequeños ejercicios para que sus piernas no se hicieran tan inútiles por falta de uso, según las indicaciones la primer semana se le harían masajes en sus piernas y pequeños movimientos tomando mucho cuidado para la paciente. Cuando Lian volvió a casa había cierta incertidumbre al respecto ya que no lo hacía por su propio pie.

Además de eso pudo notar los cambios a simple vista, pues habían hecho unas rampas de acceso para la circulación de una silla de ruedas y Ryu le había comprado una silla eléctrica de las más modernas. Yoruichi que en ese punto había señalado a su novia que eso era un poco innecesario, al final no dijo más porque vio que los hijos y padre ya habían decidido y la abuela había recomendado dejarlos en su necedad, el dojo también había sufrido cambios ya que ahora parecía más un centro de rehabilitación con los mejores implementos que el dinero pudiera comprar. El doctor Ishida recomendó tres fisioterapeutas que era lo mejor de Japón del cual Ryu decidió junto a Lian cuál sería el más adecuado. Su habitación ahora era lo que antes era la sala de juegos y aunque habían hecho algunas mejoras Lian resintió el no estar en su propia habitación.

Habían pasado mes y medio del día del ataque, en este punto Nanao y Lisa iban y venían con noticias sobre lo que sería el juicio, cargos y el posible tiempo que tomaría tener una sentencia para el que les había hecho daño. Como era de esperar las autoridades japonesas quieran que el juicio fuese corto, las autoridades Chinas presionaron para que se hiciera justicia pronto y sentar un precedente con la sentencia. Nanao había explicado a Soi Fong que además de los cargos propios de Inteligencia Japonesa por negocios fraudulentos, enriquecimiento ilícito, se sumaban el de asesinado con premeditación y alevosía de parte de la familia Shiba por las muertes de los patriarcas y la joven pareja de Miyako y Kaien Shiba, sin olvidar los propios de la familia Fong que iban desde intento de asesinato con premeditación y alevosía en contra de Lian de Fong, Soi Fong y Shaolin Fong, presunción de terrorismos por utilización de un arma de alto calibre en una zona pública.

Según Nanao si Yammi era encontrado culpable de todos esos cargos pasaría hasta su segunda reencarnación en una cárcel de máxima seguridad lo que eran muy buenas noticias para la peli azul. Por otro lado, Kūkaku le había visitado en la empresa algunas veces para charlar sobre la situación y sobre negocios ya que bajo la dirección de Abarai por fin podían ver como crecía la fábrica familiar y con eso podía empezar a saldar deudas, de alguna manera en lo referente a negocios iba de maravilla y las cosas parecían volver a tomar un buen rumbo. Yoruichi y Soi iban muy bien aun con la rutina auto impuesta de sus momentos como pareja se veían solo dos días a la semana donde la peli azul visitaba a su novia en su apartamento para charlar, cenar y hacer el amor, algunas veces era más el tener intimidad pues la peli azul se había vuelto un poco fogosa.

Lo cierto era que de alguna manera Soi Fong se desestresaba física y mentalmente cuando se dedicaba al sexo puramente dicho, porque ciertamente había días que el acto sexual era simplemente eso y otros donde realmente hacía el amor con más calma, con cierta devoción y de manera romántica, donde la pareja complementaba la tarde noche con cena, charla, películas y lo que se les ocurriera. Ya tenían en esta nueva rutina por mes y medio, las escoltas no eran un problema según la morena su guardia era cool y le recordaba un soldado que había conocido, por mucho que su novia se quejaba de tener un monigote tras de ella en todo momento también se había acostumbrado ya que el tipo era serio y profesional que apenas sonreía. Lian había iniciado las terapias físicas pues trabajaba con ponerse en pie y otros pequeños ejercicios de fortalecimiento, navidad era en una semana y un pequeño problema apareció para la que parecía una feliz pareja.


La tarde en la revista inicio de manera un poco extraña según la morena, al principio solo parecía ser un día más, cada quien hacia lo suyo de manera calma y con el bullicio normal que se tenia como costumbre, pero luego de una hora la situación fue cambiando ya que podía notar algunos movimientos aquí y allá, además de los breves cuchicheos que en el momento en que miraba o ponía un poco de atención cesaban de manera extraña. Lo cierto es que no tenía tiempo para poner atención en nimiedades, suspiro al pensar en que hoy era tercer miércoles de la semana que Soi parecía perderse de su radar y no es que le controlara, simplemente algunas veces de alguna manera estaba pendiente de cómo se encontraba.

Soi había regresado de su pequeña cita, para ser su cuarta vez se sentía que todo estaba mejorando aun con las pequeños inconvenientes y su propia alternativa a la situación. Hoy como las semana pasada Jamin le informo que Yoruichi había llamado mientras ella no se encontraba, un pequeño detalle que esperaba no fuese un problema. Pensó que lo mejor sería hablarle en el transcurso de la tarde para evitar algún tipo de interrogatorio y se dedicó a su trabajo. Pero justo a las 3 de la tarde Rangiku le había llamado para pedirle explicaciones sobre una foto que circulaba en las redes insinuando que la heredera de los Fong tenía una aventura, un comentario más osado parecía señalar que de alguna forma tenía cierta inclinación por las morenas, porque la foto fue tomada en una cafetería junto a una morena, la situación no era comprometedora en sí, pero la atención que le daba a la foto si era un problema.

Soi rápidamente colgó a Rangiku con la promesa de explicar todo después, aun con las amenazas implícitas de su amiga de que si arruinaba su relación con Yoruichi ya vería. No le importo mucho ya que sabía que no hacía nada malo, pero si esa foto se volvía más viral podría llegar hasta Yoruichi y eso no era conveniente porque hasta ahora todo entre ellas marchaba maravillosamente. Apago su computadora y decidió que era mejor hablar con su prometida lo antes posible para aclarar la situación. Soi Fong salió de la empresa no sin antes anuncia a Vanessa que estaba a cargo pue debía resolver algo personal, mañana compensaría con creces su tiempo perdido. Cuando iba con dirección a la revista el teléfono volvió a sonar y noto que era Lyu.

Lyu, justo no es buen momento — dijo la peli azul al momento de contestar.

Soi, ¿ya viste la foto? — Pregunto — te sugerí decirle a Yoruichi.

Soi suspiro — lo sé, es mi error — acepto con resignación — justo voy para hablar con ella.

Hubo un momento de silencio en la línea — cualquier cosa sabes que puedo corroborar tu historia y Nemu también.

Lo sé — dijo suavemente — hablamos después.

Colgó al instante y cuando meditaba si era conveniente marcar el número de Yoruichi para avisarle de su visita en su lugar de trabajo una voz ronca le saco de sus pensamientos — el semáforo señorita Fong — advirtió el guardia de seguridad al notar la pequeña distracción.

Soi se detuvo ante el semáforo en rojo y suspiro — gracias Kano, lamento mi distracción.

— Es normal según la situación — dijo suavemente, luego carraspeo — no quiero ser una molestia, pero…se lo advertí.

La peli azul apretó el volante, solo faltaban unas calles para por fin llegar, solo esperaba que Yoruichi aun no haya visto la dichosa foto. Ciertamente recordaba como su silencioso y serio guardaespaldas le había advertido que lo que hacía no le parecía buena idea.

Llego a la revista en menos de quince minutos y al instante de estacionarse salió con dirección a la entrada de la revista al divisar que Hirako venia llegando junto a la joven Kiyone, tras de ella sintió como su escolta no le perdía el paso y al instante todos pudieron entrar al ascensor ante la mirada asombrada de la recepcionista.

— Buenas tardes — saludo a peli azul ante la mirada seria y un poco molesta que le dirigía Kiyone, Shinji suspiro cansinamente.

— No creo que sean tan buenas — señalo el rubio — hay una foto circulando por ahí.

Soi suspiro y frunció el ceño — no es lo que se dice.

Kiyone bufo con incredulidad y Hirako quiso reír ante ese abrupto, mientras que Soi le miro seria y su guardaespaldas le miro de reojo — hay una circular hecha por Ukitake que dicta no hablar o comentar sobre la relación de Yoruichi contigo — el sonido de llegar al piso sonó — tal vez ella no sabe aún.

Soi sintió un leve alivio y la puerta del ascensor se abrió de pronto, los que se encontraban en el interior salieron del ascensor, fue ahí mismo cuando el teléfono de Soi Fong sonó y al mirar el numero lo supo. Yoruichi acababa de tomar su teléfono para ver que tendencia había en las redes y lo primero que vio fue algo que de alguna manera corto su respiración, por inercia lo primero que hizo fue llamar a Soi Fong, pero la llamada fue mandada inmediatamente al buzón, resoplo en su lugar e iba a intentar cuando de pronto Renzo pareció reaccionar a alguien que se acercaba.

Soi noto como el guardaespaldas de Yoruichi se extrañó de verle llegar, como anticipando que algo estaba pasando. Soi llego al escritorio de la morena que en ese mismo instante miraba hacia donde Renzo miraba tras de ella, su mirada era ciertamente nada amigable según Kano que permanecía tras de Soi Fong.

— Yoruichi, tenemos que hablar — pidió con un poco de nerviosismo en su voz que la morena pudo notar.

Shinji se había quedado cerca del escritorio de Kiyone que estaba tras del suyo y de la morena, al notar que por la expresión de que justo ya había visto la dichosa foto. El lugar parecía haber caído en un silencio un poco incomodo — estoy en mi trabajo — advirtió la morena.

Kano se acercó a la pareja — señoritas, les recuerdo que no están solas — indico con calma al notar que la siempre sonriente de Yoruichi parecía molesta con su novia.

Ukitake salió de su oficina con lo que sería la foto de la portada que seria publicada para la nueva edición que saldría el día sábado, justo noto que todo estaba en silencio y nadie hacia nada más que ver hacia donde se encontraba Yoruichi junto a Soi Fong, suspiro sabiendo que le había traído a la revista, seguro era por esa foto que circulaba con especulaciones erróneas y comentarios tontos no había nada comprometedor en que una chica esta con otra en una cafetería, pero claro era la princesa de hielo y su fama le precedía.

Se adelanto y llego junto a la pareja — Soi que bueno verte — dijo suavemente y miro hacia la morena que tenía un rostro serio como pocas veces, más bien era como cuando apareció Soi junto a Lisa después de tomar esas fotos — Yoruichi, podrían venir a mi oficina un momento.

La morena suspiro y miro hacia la peli azul que asintió al momento, caminaron hacia la oficina del peliblanco con sus escoltas tras de ellas en completo silencio al entrar ellos al parecer quedaron fuera de la puerta al momento que Soi cerraba la puerta tras de si — sé que justo tienen cosas que resolver, así que creo que lo conveniente es que lo hagan en su casa, en privado — sugirió el peliblanco con tono amable.

— Aun no es mi hora de salida — indico la morena.

Soi suspiro y Ukitake sonrío un poco — tienes mi permiso para ir a tu casa y resolver las dudas que tengas, si te quedas posiblemente los demás en el piso no trabajaran a gusto.

Yoruichi puso los ojos y al instante salió de la oficina, Soi carraspeo — agradezco tu ayuda en este momento.

Ukitake sonrío levemente al notar lo apesadumbrada que parecía la siempre fría heredera de los Fong — esa foto es una tontería, igualmente tienes que poner las cosas claras con ella ya que hay muchas especulaciones al respecto.

— Solo es un mal entendido — aclaro al momento y vio como Jūshirō fruncia el ceño un poco extrañado por la explicación — será mejor que me vaya o se ira sin mí, te debo una.

Ukitake le vio dar la vuelta y salir de la oficina, quiso reír de la situación o más bien de ser testigo de cómo la fría y rompecorazones de Tokio parecía una simple chica enamorada en una pequeña discusión de pareja — un día se me tiene que hacer — comento para sí mismo ante la esperanza de hacerle una entrevista.

La puerta de su oficina fue abierta de manera arrebatada y Hirako Shinji apareció — se acaban de ir y todos han vuelto a sus labores sin tanto barullo — informo y vio como su amigo y jefe suspiraba — eso fue un poco hilarante, Soi Fong venia como alma que lleva el diablo.

Ukitake tomo un sorbo de su café — la foto en si no es comprometedora, es más bien de lo más normal.

— Pero estamos hablando de Soi Fong — señalo Shinji tomando asiento — tampoco me parece gran cosa, excepto que la chica es una morena y las especulaciones de la gente están poniendo más pesor al asunto — indicio — Yoruichi no parecía muy feliz de irse a su casa.

Ukitake se encogió de hombros — era eso o hacer un espectáculo con Soi esperándole.

Shinji suspiro — debo aceptar que como siempre dice Yoruichi, las cosas no son tan simples — se puso de pie — volveré al trabajo.


La peli azul había ido tras Yoruichi que había iniciado su camino porque como supuso que iba a suceder, no perdió tiempo esperándole y aunque no iba corriendo o algo por el estilo no se lo iba a poner todo tan fácil. Había sido una suerte que Kano había visto todo lo que sucedía con su prometida. Renzo le había dicho entre señas que iban a casa y con eso ella metió a fondo su pie sobre el acelerador a sabiendas que no debía dejar las aclaraciones para otro momento. Yoruichi había subido al Audi y no había esperado por Soi Fong, aunque tuvo que esperar a Renzo que de alguna manera quedo un poco rezagado quizá pensando que esperarían por Soi Fong, en este caso no sabía que sentir o porque estaba molesta, había visto la foto de su prometida con una mujer joven, morena en si no era una foto de lo más normal y no había ninguna señal de que estuviesen haciendo algo malo, pero para su molestia los comentarios contaban otra historia.

— Ahora entiendo porque no contesto el teléfono — soltó de manera molesta, aunque no recibió ninguna respuesta o comentario de parte de su guardaespaldas que guardaba silencio convenientemente, de pronto frunció el ceño de manera molesta — si lo recuerdo bien la semana pasado paso lo mismo.

Renzo suspiro por lo bajo, luego de casi un mes cuidando a la morena nunca la había visto molesta o enojada y menos con su prometida que a su parecer estaba muy enamorada de su asignación, pero que según Kano le faltaba un poco de experiencia en relaciones. Ya estaba por llegar, miro levemente por el retrovisor para ver si lograba divisar el auto lujoso de la peli azul y se asombró al ver como venía rebasando autos a lo que podía suponer que era el límite de velocidad permitido, la morena se estaciono en su lugar con cuidado de no golpear la motocicleta. Cuando bajo del auto noto que Soi se estacionaba a fuera del complejo, pero de manera arrebatada salía del auto dejando a Kano posiblemente apagando el auto, ella camino hacia el apartamento seguida de cerca por Renzo y Soi que apuraba el paso.

Yoruichi abrió la puerta y entro dejándola abierta, Soi en este punto miro hacia Renzo que se encogió de hombros — ¿te vas a quedar ahí o vas entrar? — Cuestiono la morena de manera mandona y al instante la peli azul entro y cerró la puerta tras de sí.

La peli azul entro y lo primero que vio fue a Yoruichi parada en medio de la pequeña sala con sus brazos cruzados y esa cara que no auguraba nada bueno para ella — quería hablar contigo para aclarar el mal entendido.

— Estaba en mi trabajo — señalo la morena — te llame hoy por la mañana y al parecer me enviaste directamente al buzón — le indico — ¿estabas con esa mujer? — Cuestiono y la peli azul suspiro — sí o no Soi Fong.

— Si, pero antes que saltes a conclusiones que no son, quería explicarte en persona todo el asunto — dijo con calma.

La morena soltó un largo suspiro — bien comienza, ¿quién es ella, que tiene que ver contigo? — Pregunto.

La peli azul pareció un poco incomoda ante la pregunta directa — es una psicóloga que me ha estado atendiendo — respondió suavemente y lo noto la sorpresa de Yoruichi — puedes preguntarle a Lyu y la doctora Kurotsuchi que fue quien me recomendó algunos nombres, yo solo me tome la tarea de buscar lo más conveniente — dijo con voz suave al notar que su novia le miraba y no decía nada — sabes que no me agrada mucho eso de ir y contarle a un desconocido sobre mí.

La morena suspiro — ¿por qué necesitabas un psicólogo? — Pregunto un poco más curiosa.

— He tenido ciertos problemas para dormir — aclaró vacilante y la morena pareció soltar un leve bufido — pensé que era cosa normal pero no es la primera vez que sucede y supe que tenía que buscar como solucionarlo.

— ¿Pesadillas? — Cuestiono sabiendo que era el común denominador, ellas las había tenido por mucho tiempo los primeros meses desde que había estado en su primer enfrentamiento como corresponsal de guerra.

La peli azul se encogió de hombros — pensé que sería algo disperso, pero luego de una semana se estaban volviendo una constante.

Hubo un momento de silencio y la morena por fin pareció soltar un poco de tensión ya que dejo su pose rígida con su brazos cruzados — ¿por qué no me dijiste? — Pregunto — pero las veces que te has quedado aquí no has tenido ninguna.

— No hemos dormido juntas desde que volví al trabajo y no quería preocuparte con algo que me pareció una nimiedad — explico al instante, ciertamente era cierto ya que las veces que tenían su momento de parejas hacían otras cosas menos dormir y si tenían intimidad, se quedaban en cama solo hablando o tomando un breve descansando para después tomar una ducha.

Yoruichi le miro seria — una nimiedad — repitió — ¿acaso crees que no se de lo que se trata? — Cuestiono y cuando su novia iba a decir algo le corto — he vivido esa situación muchas más veces, la primera vez que estuve en un enfrentamiento dormir fue lo menos que hice, luego los meses fueron peores con cada vivencia y de alguna manera te vas acostumbrando aun cuando eso no quita las pesadillas — explico seria.

Soi hablo despacio — como dije antes, no quería preocuparte — aclaro seria — vi tu preocupación aquella vez que tuve un mal sueño.

— ¿Quién sabe de esto? — Pregunto.

— Nadie sabe de las pesadillas, solo la doctora Yuriko y ahora tú— confeso suavemente.

La morena suspiro — ¿por qué están en una cafetería? — Pregunto sin querer mostrar que había cierta curiosidad mal sana estimulada por los leves celos, era humana y leer algunos comentarios trastoco su confianza.

Soi Fong puso los ojos, ¿cómo podía explicar algo así? Cuando ya antes Kano le había recordado que desde el final de la primer sesión con la doctora señalo que toda la situación era inusual y podía ser un problema, dos veces le advirtió que era una mala idea, pero ella en ese momento solo vio una manera de hacerlo todo más factible — yo no quería ir a un consultorio y tener "terapia" eso es molesto, desde el inicio nos reunimos en el Ukai-Tei, pero hoy por la mañana no iban abrir al público porque hay un evento — señalo, noto como su novia ponía los ojos — quería sentirme normal, cómoda así como cuando hablo contigo.

La morena trato de digerir la explicación y una idea surgió en su mente — ¿por eso la doctora es morena? — Pregunto y lo supo al momento por la expresión de la peli azul — no sé qué decir al respecto — acepto negando con su cabeza, eso era inaudito.

— No lo tomes a mal, sé que es peculiar pero como dijo la doctora — puso los ojos — solo estaba proyectando.

— Eres tan tonta a veces y no sé si lo haces a tu favor — expreso en tono cansino — si no hubiese pasado lo de la foto, ¿me hubieses dicho? — Cuestiono Yoruichi.

La peli azul frunció el ceño — eventualmente te lo hubiese dicho.

—¿No confías en mí? — Pregunto la morena con tono dolido.

— Claro que confío en ti — sentencio de manera firma le peli azul.

La morena tomo asiento y la peli azul se quedo ahí parada, la situación se estaba alargando y en vez de que todo se solucionara de una buena vez el tema era más enredado con cada cosa que surgía y en este punto temía que cualquier cosa que dijese o tratara de aclarar fuese molestar a su prometida. Yoruichi por otro lado intentaba entender a su novia, sabía que de alguna manera tenía buenas intenciones y la foto en si no era delatora, al principio Soi le había señalado que era su primer relación por ende cometía muchos errores, pero iban a casarse en un futuro ya no podían darse el lujo de estar con estas tonterías.

— Si dices que confías en mí, ¿porque no me dijiste primeramente? — Cuestiono y cuando Soi iba a responder interrumpió — se supone que somos una pareja y por eso nos vamos a casar, para tener una vida compartida, formar una familia y apoyarnos en los momentos difíciles, no solo para tener sexo.

Soi abrió su boca para decir algo, sus mejillas se tiñeron de un leve tono rojo — yo no…lo que…— había tartamudeado como una colegiala tonta y lo odiaba — te amo — soltó de una vez — no diré nada sobre el sexo porque hemos discutido ese tema antes, solo quiero que quede claro que admito mi error, perdón por las molestias que te haya causado esta situación.

Yoruichi quiso sonreír por el espectáculo de sonrojos y tartamudes de la peli azul que pocas veces mostraba y sabía que era privilegiada de verlos — nada te costaba decirme — dijo en un susurro — ¿qué pensarías si tengo un problema y no contigo? — La pregunta fue simple pero el cambio drástico en el semblante de la peli azul lo dijo todo.

— Es diferente — indico al momento.

Yoruichi negó al instante — lo sabía, seguro pondrías el grito en el cielo — apunto.

La peli azul suspiro — se supone que soy yo quien debo cuidarte.

— No has escuchado lo que dije antes, esto algo reciproco — señalo — un puente no se levanta solo de un lado y si no lo entiendes será mejor que te devuelva este anillo — dijo mostrando la mano donde llevaba el anillo de compromiso.

Soi frunció el ceño, sabía que esta discusión se estaba degenerando y todo era su culpa ya que no quería sentirse justo como ahora, sin saber qué hacer y con tanto miedo que dudaba de sí misma, lo que podía decir o hacer — solo intentaba…— carraspeo al escuchar como su voz fallaba un poco.

Yoruichi suspiro — será mejor que lo hablemos con calma otro día — sugirió al darse cuenta que se estaba precipitando, de alguna manera todo el asunto les sobrepasaba y no era justo para ninguna de las dos, podía ver que lo último expresado había afectado a Soi y de alguna manera todos esos comentarios tontos de la foto le habían hecho sentir mal ya que lo quisieran o no la mayoría creía que era la pobre engañada que pronto podría ser cambiada, evocando lo que Nozomi había dicho "cuando te canses de jugar a la casita, búscame"

— Siempre me alejas de tu lado o pides tiempo cuando discutimos — se quejó —¿tanto te cuesta perdonarme? — Cuestiono.

La morena suspiro — no se trata de eso, puedo perdonarte fácilmente y lo hago — acepto seria — pero justo ahora para todos soy la cuernuda del todo Japón.

— No importa lo que la gente diga, no saben nada de nosotras solo especulan — señalo la peli azul.

— No importa para ti ya que tu reputación está intacta, pero si te das cuenta yo soy la que ha estado en boca de todos — le recordó Yoruichi.

Soi frunció el ceño, Yoruichi tenía razón y lo quisiera o no los comentarios solo tiraban hacia ella con cosas como "pobrecita, engañada si creía que sería la única, tiene algo con las morenas y otros comentarios por el estilo" — entiendo — acepto mansamente, de alguna manera recordó lo que ella había pasado por eso cuando se dio lo del problemas con Lyu, la empresa y su familia.

Yoruichi noto que hubo un momento de silencio entre ellas luego de cierta tensión, lo que parecía ser una simple foto vino a sacar cosas que luego de su compromiso y lo que habían pasado creía que todo seria llevadero, pero justo entendía que con cada paso hacia adelante como pareja tenían desafíos que solventar. Lian-san le había aconsejado tener paciencia con su hija y en este punto aceptaba que de alguna manera Soi también debía tener paciencia con ella ya que no era perfecta, no entendía porque, pero se daba cuenta que esta era la segunda vez que se sentía insegura como mujer y eso era casi ridículo.

— Soi no lo tomes a mal, pero todo está reciente y lo mejor es dejar que se asienten para hablarlo con más calma — dijo con calma Yoruichi tratando de que entendiera su punto de vista.

— Yo…— iba a decir que lo iba a solucionar, pero lo vio inadecuado pues no podía hacer lo de siempre amedrentando periodistas o desquitándose de la ofensa porque Yoruichi era de alguna manera lo reprobaría y saldría peor el remedio que la enfermedad — creo que tienes razón y será mejor hablar con calma mañana, además debo ir a casa.

La morena le vio dudar en acercarse o solo dar media vuelta e irse — ve con cuidado, no hagas más tonterías por favor.

Si la peli azul dudaba en darle un beso de despedida con lo último dicho lo desestimo por completo — descansa, hasta mañana — con esa despedida dio media vuelta y busco la puerta.

La morena soltó un largo suspiro cuando la puerta se cerró tras la peli azul, no sabía que era o que debía sentir ya que por más que lo quisiera justo ahora sentía una molestia con su novia, pero de alguna manera no parecía justo que todo recayera en Soi que como había dicho Rangiku aún tenía cierta inmadurez. Rápidamente fue a la ventana y pudo ver que Soi hablaba algo con Renzo que se encontraba junto a Kano, luego de un asentimiento con la cabeza su novia y escolta se dirigió al auto para irse del lugar, entonces su guardaespaldas como los días anteriores camino hacia su apartamento y la morena para que no la cachara espiando dejo su lugar en la ventana para ir a cambiarse a su habitación.


Soi no iba de buen humor, entendía que de alguna manea todo se había ido al carajo y en este punto debía de buscar como arreglar la situación. Por ahora lo urgente era quitar la cara larga y dejar su nube gris para no preocupar a su madre con sus problemas de pareja. Ella tenía cosas más importantes en que enfocar sus pensamientos y esfuerzos como la terapia para su recuperación, tenía muy presente las palabras de Retsu y el doctor Ishida sobre el tratar de mantener un ambiente familiar positivo y calmo para que el ánimo de su madre no decayera junto a sus esfuerzos de recuperación. Por lo que se detuvo en una heladería para poder animarse con un helado de chocolate, pidió a Kano que le acompañara y aunque el serio guardaespaldas dudo la peli azul le convenció con la frase "no creo que piense que tu seas alguna aventura, eso sería el colmo"

Cuando Soi llego a casa un poco más relajada, no se salvó de dar explicaciones pues todos habían visto la foto. En este punto aclaro que ya había hablado con Yoruichi y que solo una confusión, que la mujer en la foto era una doctora a quien le había pedido verificar si el método de procreación que la morena y ella habían seleccionado era adecuado. Costó convencerlos, pero cuando Lyu llego este apoyo la historia señalando que Nemu había recomendado la doctora, con eso sus padres y abuela quedaron satisfechos de no había arruinado su casamiento. Luego de las cena la peli azul tomo un momento para preguntar a Lian como había sido su terapia y charlar con la abuela, Kano marcho desde que llego. Solo quedaban los de planta, luego se fue a su habitación para pensar como procedería mañana y responder mensajes de wasap a Rangiku, Lisa y Nanao para aclarar lo de la foto.


Yoruichi estaba revisando sus mails, tenía que corroborar como había quedado la foto de portada ya que cuando llego Soi eso era lo que esperaba pues el día de viernes que iniciaban con la impresión de las revistas para que el sábado a primeras horas de la mañana estuviesen a la venta en cada kiosco de Tokio y enviadas por mensajería a los suscriptores, así para el medio día terminar de ser distribuidas por todo Japón. El reloj marcaba las diez de la noche y no deseaba acostarse aún, siempre que discutía con su novia parecía que el sueño se le espantaba por estar pensando sobre su relación y Soi. Tampoco podía olvidar las palabras de Renzo, que como siempre compartía su cena los días que la peli azul no he visitaba "quien diría que la princesa de hielo fuese tan mansa, es notable que le quiere y solo fue presa de su inexperiencia" No iba a refutar tal cosa, pero tampoco iba a ponerse a discutir sobre su relación y lo que le molestaba con un guardaespaldas, aunque opto por aprovechar el momento y preguntar que había dicho Soi Fong al irse, Renzo le sonrío diciendo "solo pidió que le cuidara bien" Con eso en mente se fue a la cama de una vez.


GRacias por leer...