CAPITULO No 40
Yoruichi miro hacia el lado derecho de su asiento en la avioneta, Soi Fong estaba dormida luego de que había comido. Lo cierto es que habían despertado muy temprano para salir del hotel a las siete, el viaje en taxi hasta Londres había durado una hora con cuarenta minutos para llegar al aeropuerto privado donde la avioneta les esperaba. Habían tardado un poco más ya que había pasado a una cafetería para desayunar y justo llegaron quince minutos antes de la hora de salida del vuelo, tiempo que ocuparon para hacer la documentación de salida. No era para menos que Soi Fong resintiera cierto cansancio además de que se había tomado el medicamento para el dolor y eso le daba un poco de sueño. Esperaba que todo saliera bien al llegar a casa, ya había hablado con Lyu para que enviara al chofer al aeropuerto a la hora de llegada.
Sabía que Soi Fong aún no se encontraba al 100% y eso podía ser una preocupación para Lian que había estado pendiente del viaje. Pero era mejor explicar todo cuando el tema saliera a colación, esperaba que pudiese tomarse los días necesarios para su recuperación, eso sin olvidar que según el doctor Wilson para hablar de una completa recuperación podría tardar entre dos a tres semanas. Lo bueno es que estando en Tokio tendría a la familia cerca y no estarían solas. Ahora entendía muy bien el hecho de que Soi Fong quisiera un lugar céntrico donde vivir cuando se casaran, sobre todo que estuviesen cerca de la familia. Vio por la ventana la torre de Tokio y sonrió levemente, por fin llegaban a casa y de ahora en adelante seria pensar en la recuperación de Soi y esperar noticias de Cambridge que según habían dicho, tardarían en dos a tres meses.
Soi Fong despertó ante el anuncio del piloto que informaba que por fin estaban llegando a su destino — por fin — dijo la peli azul, la morena sonrío levemente ante la leve queja de su prometida.
— Tómalo con calma — pidió Yoruichi, Soi Fong asintió y con cuidado empezó a enderezar su asiento para el aterrizaje.
Llegaron a la mansión de la familia después de treinta y cinco minutos, entre el aterrizar, hacer el respectivo ingreso al país y que el chofer pusiera el equipaje en el auto. Soi Fong había señalado que el equipaje parecía ser más abundante de lo que recordaba, al momento la morena le señalo que había comprado algunos regalos para la familia la noche en que la paso sola, por supuesto que lo había hecho por línea y también había comprado para ella y la peli azul que solo pareció sonreír un poco divertida por la situación. Al llegar a la casa Lian y Shaolin Fong se encontraban en la sala esperando su llegada, después de los saludos pertinentes preguntaron si deseaban almorzar, aunque eran casi las dos de la tarde. En este punto Yoruichi pensó que sería bueno que su novia comiese algo antes de ir descansar.
— Me gustaría comer algo ligero — señalo la peli azul — luego si me disculpan subiré a mi habitación a descansar.
La morena se pudo de pie — veré que te preparo.
— Por favor Yoruichi, tú también deberías comer algo y no es necesario que cocines, para eso están las muchachas del servicio— señalo Lian y a la vez la joven a su lado dio una inclinación y salió con dirección a la cocina.
— Gracias — dijo tímidamente la morena,
Shaolin asintió y miro con curiosidad a su nieta — me imagino que el viaje fue cansado.
La peli azul suspiro — un poco — respondió — lo cierto es que tuvimos que someternos a algunas pruebas, además de eso tuve que someterme a un procedimiento que según los doctores era necesario.
— ¿Un procedimiento? — Cuestiono Lian — ¿de qué tipo?
Soi iba a decir algo, pero su abuela fue más rápida para hablar — cálmate Lian, es normal que tengan que hacer algunas pruebas o exámenes — dijo cautelosa la anciana — aun así, me imagino que era mejor hacerlos de una vez ahora que han viajado que espera más tiempo para otro viaje.
La peli azul sonrío levemente, al menos había alguien que pensaba como ella — eso mismo le dije a Yoruichi, el procedimiento fue un poco molesto y espero no tener que volver a pasar por eso — señalo — pero era necesario, así que pensé que lo mejor era hacerlo de una vez para no darle largas.
Yoruichi tomo su mano — el doctor dijo que debe reposar unos dos días para luego volver a su rutina con calma— apunto — me quedare para cuidar que lo haga de esa manera.
— Con respecto a la prueba, no podemos dar detalles, solo puedo decir que necesitaban células madres y debían obtenerlas de la medula ósea — indico Soi Fong — además de eso, hicimos el papeleo legal y todo está en marcha.
Lian sonrío levemente al entender los cuidados de Yoruichi, pues su hija podría ser un poco necia al respecto, Shaolin Fong sonrío un poco divertida también — quiere decir que el procedimiento da resultados y podríamos tener un hijo de ustedes dos corriendo por ahí.
Soi puso los ojos — abuela te estas precipitando un poco ya que no será tan rápido, ahora queda en manos de los doctores para que eso sea posible.
Lian carraspeo — además, antes de eso deberían de pensar en la boda — apunto seria — no veo factible que se adelanten con lo del niño y dejen su lazo matrimonial de lado.
— Lian, estoy segura que el matrimonio esta pronto a suceder — apunto la matriarca.
La peli azul apretó la mano de la morena — nos vamos a casar pronto — aclaro — como dije antes solo esperaba que las cosas mejoraran en casa, ahora con eso de tener hijos encaminado podemos pensar en planear lo del matrimonio — miro hacia la morena — ¿si tú estás de acuerdo? — Medio pregunto.
Yoruichi sonrío levemente — sabes que si — dijo con un dejo de una timidez casi impropia de ella.
Shaolin Fong sonrío con cierto orgullo, Lian mostro una alegría que pocas veces se le veía y llevo su mano al pecho para soltar un suspiro — me alegra escucharlo — expreso — pero por ahora será mejor que descansen — noto que una de la chica de servicio regresaba.
— Señora, la comida esta lista — anuncio — ¿le servimos en el comedor o las traemos aquí? —Pregunto la mujer del servicio.
Lian miro hacia la pareja — ¿qué quieren? — Pregunto.
Yoruichi miro a la peli azul — tengo hambre, pero lo que más quisiera es recostarme y descansar — apunto.
— Lo mejor será que les lleven la comida a la habitación — ordeno Lian — me imagino que Yoruichi cuidara de ti, así que lo mejor es que duerma en tu habitación.
Soi sonrió levemente — gracias mamá — soltó agradecida que entendiera que Yoruichi podía ser un poco renuente a dormir en la misma habitación, ya que desde que se quedaba ahí los fines de semana tenía su habitación aparte. La morena se puso de pie y extendió su mano para que Soi se apoyara en ella para levantarse de su asiento.
Lian y Shaolin Fong las vieron ir directo a la segunda planta, la anciana miro a su nuera con seriedad — no te preocupes, seguro el descanso le hará bien — le señalo — recuerda que Soi es un poco aprensiva con médicos, sobre todo con agujas.
Lian suspiro — tiene razón, seguro Yoruichi hará que descanse como debe y si se porta mal seguro sale de esa habitación.
La anciana sonrío un poco divertida, solo esperaba que su nieta no tentara su suerte porque Yoruichi era alguien de armas tomar, además de eso sabia comportarse con mucha clase y educación, estaba segura que no haría algo indecente por mucho que seguro todo lo decente e indecente lo hubiesen hecho una y otra vez antes con su nieta. Ahora podía estar un poco en paz sabiendo que por fin vendría la boda, una que se había retrasado por los hechos trágicos de hace unos meses y ahora esperaba que eso fuera un punto y aparte en la vida de su nieta y familia en general.
— Vamos al jardín — dijo Lian sacando de sus pensamientos a su suegra.
Shaolin Fong se puso de pie — ¿quieres que te empuje? — Cuestiono aun sabiendo que a su nuera no le agradaba que empujaran su silla de ruedas.
Lian sonrío con amabilidad — gracias Shaolin-sama, pero prefiero hacerlo por mí misma.
Yoruichi y Soi Fong se encontraban en la habitación, la peli azul recostada en la cama con una bandeja de comida. La morena a un lado en una silla junto a la cama, había puesto su comida en la cómoda junto a la cama de su novia que comía con calma a comparación de Yoruichi que casi tenía su plato vacío, lo cierto es que se encontraba un poco impaciente por desempacar y sacar los regalos que había comprado para la familia.
— ¿Tienes que hacer eso justo ahora? — Pregunto la peli azul al ver que la morena estaba arreglando los regalos.
Yoruichi suspiro — ¿tienes sueño? — Cuestiono — duerme, prometo no hacer ruido y dejo esto listo para la cena.
Soi Fong suspiro — pensé que dormirías conmigo.
La morena le sonrío levemente — si duermo ahora posiblemente no lo haría muy bien en la noche, en cambio a ti el medicamento seguro te da sueño y creo que es mejor que descanses — miro hacia la pequeña cómoda — además debo llevar esos platos sucios.
La peli azul puso los ojos — eso puede hacerlo las del servicio — señalo — creo que estas huyendo de mi — acuso soltando un pequeño bostezo — quédate conmigo hasta que me duerma.
Yoruichi sonrío y se acostó al lado de la peli azul — no huyo, dije que te cuidaría — dijo seria — me quedare contigo, pero duerme.
Media hora más tarde la morena recogía los platos para ponerlos en la bandeja, Soi Fong estaba completamente dormida. Ella por su parte de alguna manera no tenía demasiado sueño, cosa extraña porque reconocía que le encantaba dormir en su tiempo libre. Pero esta vez sentía que sentía la necesidad de estar pendiente nada más que su novia se tomara el tiempo necesario para recuperarse por completo de su intervención. Bajo de la habitación para llevar los platos sucios pero una muchacha del servicio le ayudo antes que pudiera ir hasta la cocina, noto que Shaolin estaba sentada en la mesa del jardín y miraba hacia donde habían instalado lo que era sala de terapias para Lian Fong.
— ¿Cómo van las terapias con Lian-san? — Cuestiono la morena sacando de sus pensamientos a la anciana.
La matriarca le sonrío — creo que está decidida a caminar para la próxima boda — dijo un poco divertida y miro hacia la morena — pensé que estarías durmiendo con mi nieta, sé que eres respetuosa con la familia y esta casa, pero no tiene nada de malo que duermas con ella.
Yoruichi sonrío — admito que se siente extraño compartir la cama en esta casa — acepto seria — pero la verdad es que lo que más quería era que Soi descansara, además no quiero lastimarla de alguna manera.
Shaolin sonrío divertida — así que te cuesta resistir el encanto de mi nieta — vio como la morena se sonrojaba un poco — cada vez me doy cuenta que en todo Lian tenía razón, eres la mujer que mi nieta necesitaba a su lado, ha madurado de una manera sorprendente desde que está contigo.
— Gracias, pero también Soi ha sido una parte importante de crecimiento en mi vida y todos estos planes que tenemos a futuro es algo que ni en mis mejores sueños espere — dijo la morena.
— Deben casarse pronto — apuntó la matriarca — Lian estará más que feliz de ayudarles con eso, pero sería bueno que contrataran una agencia o algo así que siga sus instrucciones.
Yoruichi sonrío divertida — no es algo que tendría que decidir sola, pero es seguro que lo menos que deseamos las dos es evitar poner alguna carga en Lian-san.
Shaolin negó rápidamente — Lian mataría por ser ella quien arme todo, al fin y al cabo, es su hija — dijo seria — para un padre que su hijo pase a formar una familia es algo importante — vio como la morena se ponía seria de pronto y carraspeo — sería bueno que tu familia viniese a compartir este momento contigo.
La morena suspiro largamente — mi hermano y su familia es seguro que vendrían, con mi padre…es un poco difícil la situación.
— Bueno — soltó al instante — aún queda tiempo para eso, pero recuerda lo que te dije aun con todo los padres siempre queremos estar en los momentos importantes de nuestros hijos — dicho eso ultimo vieron que Lian por fina salía de su terapia empujada por el fisioterapista y por lo visto todo iba bien en la recuperación, ya que la peli azul traía una sonrisa satisfecha en su rostro, ella pidió que la dejara ahí en el jardín para platicar con su suegra y su nuera, aunque pensó que esta estaría dormida junto a su hija.
Se despidieron del fisioterapista que iba de salida, mientras Lian limpiaba su frente de las pequeñas gotas de sudor con su toalla. La charla inicio con las preguntas de regla de cómo había sido la terapia, para luego cambiar de tema y preguntando porque Yoruichi estaba ahí y no descansando con su hija como pensó que seria. Luego la charla fue más ligera de alguna manera informativa, ya que lograron que Yoruichi hablara un poco de su viaje a Londres. Por la noche cenaron todos en familia, Soi había descansado y no tuvo problemas para bajar y de una vez dieron los regalos que su novia había comprado para todos, el día siguiente la morena volvió al trabajo, aunque las noches regresaba a la mansión Fong para que Soi realmente descansara y no se le ocurriera volver a la oficina, aunque sabía que tenía una que otra llamada de la empresa que atendía sin problema.
Los días pasaron y todo volvió a cierta normalidad, Yoruichi el día domingo volvió a su apartamento ya que el lunes Soi Fong volvía al trabajo, esos días de descanso le cayeron de maravilla, pero aun así todavía resentía cierta molestia por la intervención, aunque lo que más le molestaba era que la morena había evitado a toda costa tener intimidad. Lo cierto es que un día que se encontraban en los preliminares de alguna manera su mano había tocado donde la aguja había hecho su trabajo y Soi resintió el contacto, fue un momento que de alguna manera apago todo el ambiente y desde ahí Yoruichi había sugerido esperar un poco a que la peli azul estuviese totalmente bien, fue así que paso una semana y media.
Habían pasado dos semanas del viaje a Londres, Soi seguía su ritmo de trabajo y Yoruichi no se quedaba atrás ya que deseaba recuperar todas esas horas de trabajo que había perdido en permisos. Lian estaba mejorando a pasos agigantados, había pedido a su fisioterapeuta que le guardara el secreto de que podía estar más tiempo de pie, además de que podía dar pasos sin ayuda de una barandal, sobre todo podía hacer la acción de ponerse de pie y sentarse con mucha más facilidad que semanas atrás, en conclusión, su recuperación estaba en un 80% como había dicho el ortopeda en su última consulta que había sido hace unos tres días atrás.
Ese día en específico le tocaba visitar a su prometida en el apartamento, esperaba que esta vez dejara de lado sus escrúpulos y por fin hicieran el amor. Ya habían pasado dos semanas desde que habían vuelto de su viaje a Inglaterra y aunque cuando intentaron ella resintió el procedimiento, ahora podía decir que estaba al 100 por ciento ya que los moretones habían desaparecido a la semana y había cesado en los medicamentos, hasta había ido a pasar consulta con Retsu para que la morena se convenciera que se encontraba bien, pero como siempre su novia tenía su propio juicio sobre cómo proceder. En este caso de alguna manera se había puesto el cinturón de castidad y de paso había hecho lo mismo con ella ya que hasta ese día no había podido pasar de primera base, manejando su auto esperaba que esta vez su optimismo no la golpee en la cara cuando reciba una negativa de la morena.
Yoruichi suspiro largamente al salir de la ducha de su apartamento, había tenido un día de trabajo largo y lo primero que hizo al llegar fue tomarse una ducha, desde hace días tenía estrés acumulado que tenía nombre y apellido "Soi Fong" Las dos semanas pasadas habían sido insufribles por decirlo de alguna manera, por un lado su prometida que después de ese procedimiento había quedado convaleciente, por mucho que los doctores habían dicho que todo el procedimiento no era complejo y que no tendría secuelas a futuro. Lo cierto era de qué quitando el dolor, las molestias y los moretones no resultaba mayor cosa, pero la peli azul era del tipo de persona tan particular que cualquier cosa que tenía que ver con doctores y agujas lo hacía un gran lio. Por otro lado, lo difícil fue sortear todas esas veces que Soi Fong aprovechaba cualquier excusa para querer llevársela a la cama.
Excusas tan variadas que iban de lo ingenioso hasta lo veraz, como: "bien podríamos jugar a la enfermera y paciente", "tú eres mi mejor medicina", "leí que hacer el amor refuerza la inmunidad". Pero lo mejor según la morena era dejar que el tiempo hiciera lo suyo porque la primera vez que habían intentado hacer el amor las cosas no resultaron como hubiesen querido y desde ese momento Yoruichi había decidido que lo mejor era esperar, por mucho que ella también resintiera no tener intimidad con su prometida, lo cierto es que desde que se conocieron no habían tenido un tiempo tan prolongado sin tener sexo y debía aceptar que quizá eso era parte de su estrés, además del hecho que hasta ahora aún no había podido decidir sobre hablar con su padre para decirle de su boda.
Yoruichi ya había hablado con su hermano de lo que podía ser su boda cercana, pero le había pedido no decirle nada a su padre todavía. Como antes le había dicho su novia era mejor que su padre supiera del matrimonio por su hija que por su hermano, Lian también había abonado al asunto con respeto y delicadeza aun cuando sus palabras habían sido como un baldazo de agua fría "que crees que hubiese querido tu mamá que hicieras" No tenía que ser un genio para saber que su madre hubiese querido que su padre le entregara como era la costumbre, ¿Cuántas veces se había hablado de eso en su juventud? Muchas y en todas esas veces su madre volvía a narrar como había sido la boda con su padre.
El toque de la puerta la sacó de sus pensamientos y sabiendo que posiblemente era Soi Fong se encamino a la puerta aun con la toalla alrededor de su cuerpo. Soi suspiro frente a la puerta, pensando en que quizá debía de quitarse esas ideas de la cabeza sobre que esta iba ser la noche en que por fin Yoruichi dejaría de lado las precauciones. Ante la apertura de la puerta la peli azul se quedó un momento en blanco, la morena por su parte sonrío — ¿te vas a quedar ahí? — Pregunto.
Soi frunció el ceño, rápidamente entro al apartamento y cerró la puerta tras de si — ¿Por qué sales así? — Cuestionó — alguien puede verte.
La morena suspiró — no creo que los vecinos estén pendientes de mi — señalo — además, conociéndote apuesto que no hubieses querido esperar a que me cambiara para venir abrir la puerta — dicho esto trato de irse hacia la habitación, pero su novia la retuvo tomándole en un abrazo por la espalda.
— Por favor Yoruichi — dijo suavemente — aprovechemos el momento — dijo y beso el cuello de la morena a la vez que eliminaba los obstáculos, en ese punto la toalla cayó al suelo sin problema, la morena se dejó hacer y no puso ningún recato pues ella también lo deseaba y cuando pensó que irían hacia la habitación, el ímpetu de su prometida fue mucho más fuerte y al momento la tumbo en el sillón de la pequeña sala.
Cuarenta minutos después las dos yacían en el sofá, sudorosas, agitadas y tratando de volver sus respiraciones a la normalidad — esto fue tan bueno — dijo Soi Fong, aspirando en el cuello de la morena que se estremeció al instante.
— ¿No pudiste al menos esperar llegar a la habitación? — Cuestiono Yoruichi, aun cuando reconocía que esto era lo que necesitaba y se había sentido tan bien.
Soi sonrío levemente — justo ahora pienso en llevarte a la habitación para desquitar todas esas veces que me has mantenido a raya.
La morena suspiro y se alzó un poco para besar el cuello pálido de su novia — sabes que no lo hice agrede — dijo a modo de disculpa — también deseaba estar contigo.
Soi acallo a la morena con un beso — lo se — apunto — por eso mismo hoy me cobrare todos estos días de abstinencia.
Yoruichi sonrío — tengo que hacer la cena Soi.
— No has escuchado de que no solo del pan vive el hombre — dijo con una sonrisa.
La morena le miro seria — hablo en serio.
Soi suspiro — yo también — aclaro — pidamos comida — sugirió.
— Tardaran y seguro no querrás que toquen la puerta en un momento intimo — dijo con una sonrisa.
La peli azul sonrío ante lo que significaba esa última frase, se puso de pie y al momento tomo a la morena en sus brazos para tomar camino hacia la habitación donde se amarían hasta que quedasen satisfechas.
Dos horas después se encontraban en la cama, descansando y luego de haber tenido una que otra charla sobre su día, si había alguna noticia de Cambridge y repasar sus planes sobre la boda que de alguna manera estaban siendo frenados porque por mucho que buscaban aun no conseguían la casa donde vivirían. Habían visto la última casa antier y el lugar estaba a 50 minutos de la casa de sus padres, en ese punto Soi había puesto un punto negativo a la casa. Yoruichi por otro lado resintió el hecho de que el lugar no tenía mucha vegetación, tenía un pequeño jardín, pero era tan diminuto que para la peli azul le parecía un poco al apartamento de la morena, aunque era cómodo era pequeño según Soi Fong.
Soi se puso de pie — vamos a ducharnos, se hace tarde y debo irme — señalo.
La morena suspiro — tengo hambre — se quejó poniéndose de pie y siguiendo a su novia.
— Te dije que pidiéramos algo de comida — apunto Soi, recibiendo una sonrisa de disculpa de parte de la morena.
Terminando la ducha las dos empezaron a vestirse, la morena con ropa para dormir y Soi Fong con su traje de trabajo con el cual había llegado pues era mejor volver a casa para no preocupar a su mama ya eran las nueve pasadas.
— Me hare un emparedado — dijo la morena y al instante miro hacia su novia — ¿quieres que te prepare uno? — Pregunto caminando hacia la cocina.
— No — respondió — comeré algo en casa, se está haciendo tarde — apunto mientras se acomodaba la ropa, al instante vio una mirada inconforme de la morena — ¿ahora que hice? — Pregunto confusa.
La morena suspiro — Lian-san dirá que no te atiendo — se quejó.
— No creo que mamá este esperando — dijo aun cuando dudo en sus palabras, se acercó a la morena que hacia su emparedado y le dio un breve beso — provecho y descansa.
Yoruichi sonrío — me llamas al llegar — vio como la peli azul asentía y decía adiós con su mano y buscaba la puerta. Tomo su emparedado y un vaso de leche, se encamino a su habitación no sin antes cerrar la puerta con llave. Suspiro mientras tomaba su computadora para ver algunos mails, aunque en su mente resonaba la charla que había tenido con Soi Fong.
************************************************Flash Back***********************************************
Recostadas en la cama luego de hablar sobre lo frustrante y decepcionante que era buscar una casa para vivir en la periferia de Tokio, Soi Fong suspiro largamente y miro a la morena con notable seriedad. Yoruichi le sonrío y se inclinó para darle un pequeño beso.
— Encontraremos una casa, solo hay que ser pacientes — apunto la morena.
La peli azul soltó un largo suspiro — es tedioso — se quejó, luego guardo un momento de silencio — recuerda que teniendo una casa donde vivir lo siguiente será poner fecha para la boda.
— Lo sé — dijo Yoruichi.
— ¿Ya hablaste con tu papá? — Pregunto y al instante vio la mueca de su novia — sé que no es algo sencillo para ti, pero debes decirle — recomendó — escucha, me da igual que tu papá venga a la boda porque con quien me casare es contigo — Yoruichi sonrío ante el ocurrente comentario —pero sé que al final te pesara no invitarlo.
Yoruichi bajo su rostro — le diré es solo que…
— Me imagino que es difícil, si lo invitas es seguro que no vendrá solo — señalo la peli azul — creo que deberías hablarlo con tu hermano para ver que dice — apunto — sabes que me hare cargo de todos los gastos, ya sea pasajes, estadía y lo quesea que se necesite.
La morena negó — los gastos no son problema, yo puedo pagarlos — dijo suavemente.
— Pero yo quiero hacerlo — refuto Soi — recuerda que me estoy ahorrando el gasto del vestido gracias a Mia Matsumoto.
Yoruichi sonrío divertida — los vestidos — dijo aclarando, ya que según Rangiku Mia Matsumoto había diseñado casi un ajuar completo.
— No entiendo para que tanta ropa — apunto — por mí el que estés desnuda es mejor.
Un leve golpe en su brazo fue lo que recibió de parte de la morena — tu solo piensas en sexo — acuso.
Soi Fong le abrazo — sabes que no es así, solo estaba poniéndome al día — Yoruichi sonrío y dio un beso más a su novia.
*****************************************Fin Flash Back**********************************************
Soi Fong llego a su casa media hora después, de alguna manera se había tomado el regreso con calma y había manejado a la velocidad mínima en un afán de retener esa buena sensación de satisfacción por su noche con Yoruichi. Estaciono al instante del llegar, tenía hambre y pensó en ir directo a la cocina para ver que podía comer, solo esperaba que su mama estuviese ya en su recamara. Al llegar a la cocina fue directo a la nevera y veía que era lo que podía comer sin hacer algo tan elaborado, suspiro pensando en que hubiese sido mejor aceptar el emparedado que emparedado que Yoruichi le ofreció.
—¿Qué haces Soi Fong? — Cuestiono Lian en medio de la cocina.
La peli azul casi se golpea del susto ya que tenía su cabeza dentro del refrigerador — por dios — se quejó y suspiro — ¿mamá que haces aquí? — Pregunto — debería estar en la cama, seguro mi papá hará un lio — sacando lo que parecía las sobras de la cena.
Lian le miro — ¿no has comido? — Pregunto, al instante Soi puso los ojos — tu papá esta dormido, lo puse arreglar algunas cosas y al parecer fue mucho para el — señalo con una sonrisa, miro como su hija ponía en plato en el microondas y esperaba.
— Por favor no vayas a comentar nada a Yoruichi que vine a comer — apunto seria — ella quería hacer algo de comer, pero yo no la deje… — dijo lo último bajando la voz.
Lian sonrío un poco divertida no tenía que preguntar o adivinar lo que podía haber sucedido con su hija y su futura nuera, las señales estaban a la vista. Cabello húmedo, una actitud relajada y ese pequeño brillo en los ojos, seguro por fin había logrado pasar más allá de segunda base. Sabía que Yoruichi la había mantenido a raya para que se recuperara por completo y de alguna manera eso había estresado a su hija. Luego que la comida estuviese lista la vio devorar todo como si no hubiese comido en todo el día, le acompaño hasta que termino y dejo todo en orden, por supuesto que aprovecho para hablar un poco.
— Te dije que no era necesario que me esperaras — dijo la peli azul ayudando a su madre con la andadera.
Lian suspiro — la última visita a una casa las vi un poco desanimadas, pensé que querías tomar un receso y enfocarte en otras cosas.
Soi se detuvo — la última propiedad tenía puntos buenos y malos — apunto — si dejamos de buscar retrasaremos más la boda, ¿Cómo pienso en casarme y no tengo un lugar donde llevar a mi esposa? — Pregunto.
Lian sonrío — puedes traerla aquí, hay suficientes habitaciones — señalo.
La peli azul puso los ojos — imposible — dijo al instante — sabes bien que aquí apenas me deja que la bese, si nos venimos a vivir aquí jamás tendremos hijos.
Lian sonrío un poco divertida ante el comentario de su hija, pero aun con todo le daba la razón. Yoruichi siempre se había comportado de manera educada en casa y pocas veces se les había visto teniendo alguna muestra de cariño subida de tono. La madre de la morena la había educado muy bien para que aun guardara ese respeto.
— La verdad es que no me importa pagar lo que sea, con tal de que sea la casa que deseamos a nuestro gusto — apunto la peli azul.
— No lo digas de esa manera — dijo Lian — luego las personas se aprovechan, mejor deberías de poner en perspectiva que es lo que más interesa, pueda que la casa no sea lo que desean al cien, pero sabes que se puede remodelar.
Soi miro a su mama y sonrío — tienes razón — dijo agradecida de que le diera otra perspectiva que podía ayudar a conseguir su propósito.
— Ve a dormir — dijo Lian en la puerta de su habitación y con un beso su hija se despidió de ella dando un "buenas noches"
Los días pasaron, en ese periodo Soi y la morena habían visitado dos casas más las cuales no habían sido de su agrado, porque según la peli azul eran una pocilga. Las casas estaban dentro de la periferia de Tokio una más cercana y la otra no tanto. Pero una de las casas era bastante vieja y se notaba descuidada, la otra era tan simple como vivir en un solo cajón. La agencia inmobiliaria que había hecho el trabajo recibió una queja explicita de parte de Soi Fong, hasta Jazmín se llevó una parte de los reclamos. Ese fin de semana a diferencia de los pasados Yoruichi no fue a dormir a la casa de los Fong, ya que por fin tendría la llamada con su padre para anunciarle que se iba a casar, obviamente Yūshirō estaría ahí en apoyo para que las cosas no se salieran de cause pues milagrosamente las relación padre e hijo estaban mejorando.
La conversación había sido larga y de alguna manera lo de la boda quedo para el último momento, porque lo primero fueron los saludos y ponerse al día. Pero aun con todo fue evidente que la noticia del compromiso y futura boda no fue del agrado para Shiro Shihōin que solo atino a guardar un momento de silencio, para luego mostrar su leve descontento de una manera calma, preguntado cosas como: "no creí que pensabas en formalizar tu relación", ¿estas segura que es la indicada?, "no crees que es muy pronto" Yūshirō fue como un intermediario, al principio la morena respondió de manera calma pero al final lo dejo como "la amo, me casare con ella pronto y si te agrada o no será tu problema". La video llamada termino con el anuncio que le avisaría cuando tuviese la fecha de la boda por si deseaba acompañarlos.
Inicio la semana, el día de ayer Soi se había tomado la tarea de animar un poco a su novia por la charla que había tenido con su futuro suegro que según la morena no salió tan mal, pero aceptaba que tampoco dijo que había salido bien cosa que le inquietaba, por mucho que su futuro suegro estuviese al otro lado del mundo lo mejor era llevar la fiesta en paz, ya que desde el momento en que tuvieran un hijo el pasaría a ser el abuelo paterno y tenía derecho de convivir con él quisiera o no. Yoruichi por la noche mucho más tranquila había dicho que no se iba a complicar por lo que su padre pensara que dando al fecha de boda todo quedaría en él.
Esta semana no tenían ninguna visita a alguna casa, todo por el hecho de que la peli azul se había quejado con la agencia de bienes raíces. Pero de alguna manera la pareja se sentía aliviada convencidas de que esperar un poco no era problema. A mitad de semana Yoruichi tenía una asignación fuera de la urbe de Tokio, Soi Fong había aprovechado su mañana trabajo arduamente ya que tenía algunas reuniones con los chinos y la fábrica. Sucedió algo totalmente fuera de lo normal, la puerta de su oficina fue abierta por Jazmín y se quedó ahí mientras ingresaba Lian con su silla de ruedas ante la mirada un poco sorprendida de su hija.
— ¡Madre! — dijo la peli azul.
Lian puso los ojos — no hagas un escándalo — pidió seria — ¿acaso no tengo permitido visitar la empresa? — Pregunto.
Soi suspiro y salió de tras de sus escritorio para llega donde su madre, le tomo de sus manos delicadamente — siempre eres bienvenida — dijo con una sonrisa — solo no quiero que haya problemas con papá.
— No los habrá, salí hoy porque tenía mi revisión con el Ortopeda — explico con calma Lian.
— ¿Qué dijo el ortopeda? — pregunto Soi.
— Que estoy mejorando —respondió seria Lian.
Soi bufo — siempre dices lo mismo — se quejó y era cierto, todas las veces que Lian iba al doctor para su chequeo a su regreso respondía lo mismo — ¿entonces que te trae a mi humilde oficina? — Preguntó.
Lian pareció reaccionar — sí, se me olvidaba — se quejó — los vecinos se mudan.
Soi le miro seria — mamá, podrías haber esperado a que llegara para contar sobre eso.
— No lo digas como si fuera un chisme de vecinos — dijo la peli azul mayor — ¿no has pensado que es conveniente? — Pregunto.
Soi sonrío — como podría ser algo conveniente que unos vecinos que nunca conocimos se muden — señalo.
Lian suspiro — se mudan — repitió — significa que la casa queda vacía y seguro la venderán — apunto — en la urbe de Tokio y cerca de nuestra casa.
Soi parpadeo ante lo que su madre decía, no cabía duda que tenía toda la razón y una noticia que era caída del cielo si se podía decir de alguna manera —¿Cómo es que sabes que se fueron? — Pregunto.
— Una de las personas que trabajaban ahí pregunto a Yuki si necesitábamos alguien en la casa — explico seria — fue ahí que me conto todo.
Soi Fong sonrío — vere que Jazmín averigüe todo, si está en venta y que inmobiliaria está autorizada.
Lian sonrío de la manera que Soi Fong conocía muy bien, era la sonrisa orgullosa que le hacía sentir como una adolescente en espera que su madre no le avergonzara de alguna manera o en un peor caso cuando esperaba algún regaño de su parte. En ese momento Lian Sayers saco una tarjeta — esta tarjeta es de la agente inmobiliaria, me tome el atrevimiento de concertar una cita, quedo para este sábado a la una de la tarde.
Soi parpadeo, su madre no perdía el tiempo y sonrío al pensar que parecía volver a ser la misma de siempre, audaz y una madre multitareas que podría encargarse de todos los grandes y pequeños detalles — gracias mamá — dijo.
— Bueno, debes ponerte de acuerdo con Yoruichi — apunto rápidamente — yo debo de irme, para que trabajes tranquila — se despidió de su hija al momento, sabía que si se quedaba más tiempo su hija pensaría las cosas demasiado y conociéndola no quería que pensar que las estaba presionando.
Soi suspiro un poco contrariada, sintió que la despedida con su madre había sido rara y apresurada. Vio la tarjeta en su mano, se suponía que este día no vería a Yoruichi, pero sería una buena excusa para hacerlo.
Yoruichi estaba lista para irse a casa después de un largo día de trabajo, solo debía ir al baño y luego buscaría la salida al instante. Soi Fong no había llamado como siempre lo hacía al final del día, pensó que posiblemente había tenido una tarde ocupada. Aprovecho el momento para retocarse el peinado y sonrío, no sabía porque razón se estaba acicalando si hoy su novia no le visitaba. Ante ese pensamiento suspiro de alguna manera reconocía que se encontraba acostumbrada a su cercanía, ¿Cuánto más tendrían que esperar para estar juntas? Se pregunto en su pensamiento, aunque lo sabía demasiado bien "El conseguir una casa estaba retrasando todo" Yoruichi escucho que alguien tocaba la puerta del baño.
— Yoruichi, alguien te busca — escucho de Kiyone detrás de la puerta.
Frunció el ceño — ya salgo — dijo seria, lo cierto es que no tenía idea de quien podría estar buscándola. Al instante que salió se encamino hacia su escritorio y la vio ahí parada mirando su escritorio — ¿Qué haces aquí? — Cuestiono confusa.
Soi le sonrío— también me agrada verte — indico haciendo que la morena y Kiyone que se encontraba cerca sonrieran — vine a invitarte a comer — se encogió de hombros — pensé que sería una buena sorpresa.
— Lo es — dijo al instante y miro hacia la joven Kotetsu — tomas buenas fotos — señalo y la joven asintió — nos vemos — se despidió y escucho como su novia se despida y caminaba tras de ella buscando el ascensor.
Cada una se fue en su auto hacia el apartamento de la morena donde solo dejo su auto y luego subió al Arash de Soi. Como era costumbre terminaron en el Ukai-Tei que era el favorito por mucho de la peli azul, aunque Yoruichi reconocía que ya tenían un tiempo de no salir a cenar. Charlaron de su día de trabajo, cosas tan banales como el clima, la morena miro alrededor y sonrío ante la elegancia del lugar. El gerente había llegado personalmente a saludarlos, asegurándose de que Soi fuese atendida de la mejor manera ya que como el mismo gerente había dicho "qué bueno tenerla de nuevo" Como había comentado Soi desde que volvió a la casa de sus padres la comida casera era lo que comía, así como cuando visitaba a la morena, luego de hablar un poco sobre eso y otras cosa comieron y disfrutaron de salir de lo común.
Soi suspiro luego de tomar un trago de su bebida — sabes que hoy apareció mamá por la oficina — comento.
Yoruichi se puso seria — ¿volvió a discutir con tu papá? — Cuestiono con un dejo de preocupación.
La peli azul rápidamente negó — según venia de su consulta con el Ortopeda y aprovecho para escaparse a la oficina — dijo poniendo los ojos — debo decir que yo también pensé lo mismo que tú, pero que ande vagando por ahí no ayuda.
La morena sonrío — aun así, no es malo que de a poco extienda sus alas — apunto.
Soi se encogió de hombros — bueno, lo importante es que nos consiguió una cita para ver una propiedad — señalo, miro la expresión seria de Yoruichi — al parecer no pudo esperar que llegara a casa para darme la noticia o llamar por teléfono.
Yoruichi soltó un suspiro, después de casi una semana sin ir a ver alguna propiedad ahora ya tenían una cita y no es que se quejara, pero esperaba que no fuera tan mal — me sorprende lo comprometida que esta con eso de buscar casa — apuntó la morena.
Soi rio divertida — eso es quedarse corta — apunto y noto que su novia le miraba extrañada por lo que acababa de decir — te contare.
Al momento le conto todo lo sucedido sin olvidar ningún detalle, ante la sonrisa divertida de la morena y aunque la peli azul mostraba cierta indignación de que su propia madre haya enviado a una de las muchas de servicio con los vecinos para averiguar si la casa seria puesta a la venta y con qué inmobiliaria, al final podía notar cierta diversión ante la anécdota. Tomaron un postre para seguir con la charla y el buen momento, se pusieron de acuerdo para ver como harían el día de la cita, la morena no se hacía mucha ilusión ya que las últimas veces todo había sido un fiasco, Soi siempre parecía ver un pelo en la sopa y aunque que aceptaba que las dos últimas propiedades fueron una desilusión, su novia no era del tipo reservado a la hora de emitir una crítica.
Regresaron cada una a sus casas, obviamente Soi fue a dejar a la morena a su apartamento y después de la despedida fue directamente a su casa donde su familia aun pernoctaba. Se detuvo un momento a saludar y luego de charlar un poco se fue a su habitación para llamar a Yoruichi para luego dormir. Todo había quedado concretado para su cita con el agente inmobiliario, ahora solo debían esperar dos días más ya que apenas era mitad de semana.
El día sábado llego rápidamente para la pareja, Yoruichi había terminado su trabajo antes de tiempo y había pedido a Ukitake el poder salir media hora antes. Soi deseaba que almorzaran antes de adentrarse en el asunto inmobiliario. Comieron algo ligero en la casa de la morena que había dejado todo preparado desde la mañana para solo llegar a cocinar, comerían en calma para ir a su cita de la una y media, era seguro que llegarían a tiempo para conocer el lugar.
Cuando llegaron al lugar vieron que estaba abierto, Soi ingresos con su auto y al instante se estaciono junto al que se encontraba ahí a las puertas de la casa. Al bajar pudo notar que había a su derecha un estacionamiento techado que parecía ser para tres vehículos, debía de aceptar que era un buen detalle, hace un tiempo les había pedido a sus padres hacer uno en la casa para que los vehículos no estuviesen al aire libre y evitar las inclemencias del tiempo. Notaron que un hombre de unos veintitantos que les esperaba en la puerta, al momento en que se acercaron parecía asombrarse al reconocer a Soi Fong.
— ¿Shihōin-san? — Cuestiono a la pareja.
Soi suspiro seguramente su madre pensó en poner el apellido de Yoruichi para evitar especulaciones o chismes de la prensa, la morena sonrío levemente — si — respondió.
El hombre carraspeo — debo informarles que la casa aun no estaba en el catálogo — señalo serio — la familia apenas dejo la propiedad hace unos pocos días, los muebles y enseres pueden ser parte de la venta junto a la propiedad si ustedes lo ven convente.
— Antes que de todos los anuncio podría mostrarnos el lugar — pidió Soi Fong.
El hombre asintió — por supuesto, mis disculpas — dijo con una leve sonrisa — ahora, si me siguen puede mostrarles el lugar.
El recorrido por el lugar fue en calma, el hombre que se identificó como Tao Miyagi hablo sobre la propiedad en extensión, al entrar a la casa les señalo que el lugar poseía 4 habitaciones, cocina, la sala era amplia y entraba luz por la puerta de vidrio corrediza, la habitación principal tenía un baño amplio, las otras habitaciones compartían un baño propio y la última habitación podía ser utilizada para un estudio. informo que como era evidente la casa era de una planta enfatizando en que los antiguos propietarios al momento de comprar la casa eran un matrimonio joven con un hijo en brazos. La casa a simple vista se miraba pequeña. Ya que a los lados tenía jardín, aunque el lado derecho la cochera robaba una parte del mismo, también notaron que había un columpio y algunas pequeñas metas de futbol, el lado izquierdo al fondo del mismo. Yoruichi pudo notar que Soi se detenía a mirar el enorme muro perimetral que rodeaba la casa, sonrío al entender que al otro lado de esa pared se encontraba la casa de la familia.
Tao se acercó — los muros son altos, no debería preocuparse — señalo — además, es probable que las casa que se encuentra a la par de esta levantaran sus propios muros para delimitar y cuidar su propiedad.
Soi dejo de mirar hacia ese lugar — veo que no hay ningún tipo de sistema de vigilancia.
— Creo que la familia que vivía aquí no lo creyó necesario — apunto Tao.
Soi suspiro — nos podría dar un momento — pidió suavemente.
— Por supuesto — dijo el hombre y salió del lugar, para darles privacidad.
Soi miro a su prometida — ¿te gusta? — Pregunto, aunque la verdad era que había visto como la morena sonrío al momento que entraron a la propiedad, solo al ver que había una amplia vegetación y árboles, unos cuatro para ser exactos y uno era una sakura, preservados y parecían cuidados, así como parecía estar el césped del lugar.
Yoruichi sonrío — ¿a ti te gusta? — Cuestiono juguetonamente.
Soi se encogió de hombros — me parece buen lugar, aunque podía tener uno que otro arreglo — señalo seria — todavía no me respondes — se quejó.
— Bueno, me gusta y creo que lo sabes — apunto — es sencilla de alguna manera, el jardín es fantástico — suspiro — además estar cerca de la urbe de Tokio, cerca de la casa de tus padres — ante eso vio como la peli azul ponía los ojos — de alguna manera creo que este lugar ha salido mejor que todos los anteriores.
Soi camino para ponerse cerca del árbol de sakura — sí, el lugar tiene muchos puntos a favor — reconoció.
Yoruichi miro a su novia, la conocía y sabía que algo no terminada de agradarle — no es que tengamos que decidir ahora mismo Soi — dijo al momento — aun podemos ver otros lugares y no sabemos cuánto podrían pedir.
La peli azul suspiro — aun así, le pediré que envié la información necesaria — la morena vio como Soi buscaba al agente que estaba afuera porque había recibido una llamada, ella por otro lado miro la sala de la casa y giro viendo todo el lugar por última vez. Realmente le gustaba, pero no solo era su decisión y ahora solo esperaba tener un momento en que pudiera hablar con su novia para saber que era lo que no le agradaba del lugar, porque ciertamente había visto que parecía complacida con la propiedad.
Unos quince minutos después la pareja se encontraba comprando helado para llevar, la morena había tenido esa idea de ir por uno a lo cual Soi no se negó. Aunque sugirió llevarlo al apartamento de la morena y ver una película ahí cambiando por completo los planes y aunque en un principio Yoruichi pensó que todo era un plan para irse a la cama, se llevó una agradable sorpresa ya que si vieron una película compartiendo un poco de helado y luego noto que su novia se había quedado levemente dormida a mitad de la película con su cabeza apoyada en sus piernas, seguramente sus caricias en el cabello le dieron el efecto relajante después de la visita a la propiedad, la morena había aprovechado para llamar a casa de los Shihōin y avisar que llegarían tarde.
Lo cierto era que pocas veces podía ver que la peli azul durmiera de esa manera, siempre parecía un búho nocturno, pero luego de que la película por fin terminara, Yoruichi intento levantarse para ir a dejar lo ocupado al lavatrastos la peli azul pareció despertar — ¿Qué hora es? — Pregunto bostezando en el proceso.
— Casi son las cuatro — respondió mientras iba a la cocina.
Soi aprovecho el momento para ir al baño y quitarse la pereza de encima, miro su teléfono y se extrañó que no había alguna llamada perdida de su mamá, lavo sus rostro y suspiro, para luego salir hacia la sala donde Yoruichi parecía arreglar un poco — es extraño que no hayan llamado de casa — comento la peli azul.
— Yo le llame a tu mamá para avisar que llegáremos tarde — informo la morena.
Soi suspiro — ¿no pregunto qué haríamos? — Pregunto.
— No, agradeció que llamara para avisar — dijo Yoruichi — ¿podríamos hablar antes de irnos? — Pregunto Yoruichi.
— Por supuesto — acepto la peli azul sentándose en el sillón — ¿Por qué no me dijiste antes? — Cuestiono.
— Te dormiste — señalo al instante.
Soi se encogió de hombros — tu culpa, es el efecto de tu mano en mi cabello.
Yoruichi sonrío levemente y luego se puso seria — ¿Qué es lo que no te agrada de la casa que vimos este día? — Pregunto y noto como la peli azul soltaba un suspiro — me parece lo mejor que hemos visto desde que empezamos a buscar, quiero decir que tiene algunos punto buenos que buscábamos como que es de una planta, no es tan ostentosa y tiene un amplio jardín, además está en la urbe y cerca de la familia.
— Si, tiene muchos puntos a favor y que tenga un estacionamiento techad en otro punto a favor — apunto Soi Fong.
— ¿Pero? — Cuestiono la morena.
— No se —dijo un poco avergonzada — podríamos hacerle uno que otro arreglo — indico seria — no quiero algo ostentoso, pero tampoco algo simple — Yoruichi puso los ojos e iba a quejarse — déjame terminar — pidió — quería algo cerca de la familia, pero estará al lado es…— suspiro — no sé, raro — frunció el ceño — no quiero que mamá nos vaya a invadir o …
Un dedo color moka detuvo sus pequeña quejas — Lian-san no haría algo así, ella misma nos ha estado animando a hacer nuestra vida.
Soi puso los ojos — no quiero que vaya a suceder lo que sucedió en el apartamento — dijo seria — imagina quiero hacértelo en la sala, en el jardín o que se yo.
La morena parpadeo y soltó una leve risa — admito que es un buen punto, pero creo que antes te vigilaba porque andabas con una y otra mujer — señalo — además si te soy honesta que tu familia este a la par me da seguridad.
Soi soltó un suspiro cansino — dijiste que lo tomaríamos con calma — se quejó — que no era necesario tomar una decisión pronto y podíamos ver más lugares.
— ¿Realmente quieres seguir buscando? — Pregunto con cansancio.
Soi hizo un leve puchero, lo cierto era que la propiedad había sido de lo mejor que había visto y como antes había señalado Yoruichi tenía muchos puntos a su favor y solo un punto negativo para ella — no quiero seguir con esas frustraciones — admitió.
Yoruichi sonrío — bien, podemos hacer algo por ahora — dijo llamando la atención de la peli azul que parecía un tanto derrotada — seguro que Lian-san preguntara como nos fue y lo que diremos es que el lugar no es tan bueno.
Soi frunció el ceño — mi mamá no es tonta Yoruichi — señalo.
— No lo es, pero le diré que no te agrada demasiado — dijo seria — además, le contaré que el tipo al verte supo que podría conseguir una alta suma — Soi iba a refutar, pero su novia continuo — sé que el dinero no es problema, pero según lo que diga, si nos da soluciones o que nos sugiera algo, podremos ver que es lo que le importa más, si tu felicidad o mantenerte vigilada.
La peli azul parpadeo y lo medito por un momento, era una buena idea y si su mamá se ponía a darles soluciones o alternativas queriendo resolver las cosas a su manera y de forma apresurada, solo mostraría sus deseos por tenerlas como vecinas a cualquier costo y si ese era el caso, no les quedaría otra cosa que seguir buscando una propiedad que les sea más favorable aun cuando esa realmente tenía más puntos buenos que negativos. Soi Fong suspiro por enésima vez esa tarde — bien, haremos eso — acepto seria.
La pareja llego a la casa de los Fong casi a las tres de la tarde, Lian y Shaolin Fong veían una película vieja en la habitación donde ante era la sala de juego. Al momento en que la pareja entro dejaron un poco de lado la tv para los saludos y después de acomodarse vinieron las preguntas de rigor, de cómo había ido todo y desde ahí iniciaron a contar su visita a la cada de al lado. En este punto fue Yoruichi quien llevo la batuta al contar todo mientras la peli azul trataba de permanecer en silencio, aunque también aportaba un poco de su experiencia y algunos detalles que no le gustaron. De la propiedad. Lian escucho todo en silencio y a veces mostraba esa expresión en la cara que Yoruichi había visto algunas veces cuando la peli azul mayor parecía un poco desanimada.
Shaolin hacia una que otra pregunta interesante y después de quince minutos Soi Fong quería dejar de hablar de eso — ¿podríamos pasar a otra cosa? — Pregunto y la morena le lanzo una mirada de desaprobación.
— Mis disculpas hija, realmente pensé que esta podría ser una buena idea — dijo Lian.
Soi suspiro — no te preocupes por eso mamá sé que solo quieres ayudar — indico con una leve sonrisa.
— Además, no nos daremos por vencidas y seguiremos buscando — señalo la morena.
— Por supuesto, recuerden que no importa el monto — apunto la abuela — lo importante es que tenga la casa como la desean.
Soi Fong sonrío — gracias abuela — miro hacia la morena — iré a darme un baño.
La morena le sonrío y al instante que salió de la sala, Soi escucho que la plática seguía y se quedó apoyada en la puerta tratando de escuchar un poco, pero al momento escucho una leve risa y que alguien carraspeaba — esto no tiene precio — dijo Lyu con su teléfono tomando una foto de las escena delante de él.
La peli azul se enderezo y carraspeo — no es lo que… — no solo era su hermano, también su padre estaba con el — piensan — termino un poco avergonzada.
— Por supuesto, no estas detrás de la puerta solo tropezaste y se te pego la oreja — apunto Lyu y noto que su hermana se ponía seria.
Ryu suspiro hacia su hija — acompáñame a mi despacho Soi — pidió suavemente y Luy al instante negó con su cabeza — Lyu por favor abstente de comentar con todos lo que has visto.
— Si, papá — dijo a regañadientes, aunque su padre y hermana buscaban el camino hacia el despacho, solo esperaba que las cosas no se pusieran tensas entre esos dos.
Ryu abrió la puerta del despacho y dejo que su hija pasara la interior, el hizo lo mismo y cerró la puerta tras de sí, noto como la peli azul tomaba asiento en las sillas frente al escritorio y él fue directamente al pequeño bar donde tomo un vaso y para sorpresa de Soi sirvió un poco de té — ¿deseas algo? — Cuestiono — hay sodas, té y cosas más fuertes.
Soi sonrío levemente — no, está bien así — dijo seria, no quería que su vergüenza o alguna reprimenda de sus padre se alargara.
El patriarca tomo asiento tras su escritorio y soltó un largo suspiro — entonces, ¿Por qué estabas escuchando tras la puerta? — Pregunto directamente — estoy seguro que bien podrías entrar y saber que hablaban.
— Acababa de salir — aclaro — sé que estando ahí no hablan tan libremente., solo deseaba saber que le preguntarían a Yoruichi.
Ryu suspiro — puedo imaginar que tiene que ver con la propiedad de al lado — dijo, la peli azul asintió — no te agrado y de eso están hablando — señalo — tu mamá temía que eso había sucedido cuando no aparecieron.
—Yoruichi llamo para avisar que fuimos a ver una película — explico Soi — espera, dices que mamá lo presentía.
Ryu suspiro — Lian pensó que tu no querrías estar demasiado cerca de nosotros — señalo serio — obviamente le aconseje no inmiscuirse — indico — además, según la muchacha que envió dijo que el lugar era algo simple, todos sabemos que eres un poco exigente con algunas cosas.
— No soy exigente — se defendió la peli azul, aunque la mirada de su padre le hizo flaquear en su defensa — no mucho — acepto.
Lyu miro a su hija —deberías de saber que mamá y Lian se han acostumbrado a la compañía de Yoruichi que hay veces que pienso que la quieren más que a ustedes — dijo de manera un poco divertida y Soi sonrío levemente — es seguro que cuando se casen resentirán su lejanía, pero es no es el principal problema.
— ¿Y cuál es? — Pregunto un tanto cansada de darle vueltas al mismo asunto.
El pelinegro se puso serio — hasta este tiempo Lian aun resiente esa manía tuya de alejarte de todos — apunto — lo haces desde el incidente.
Soi parpadeo — por favor eso fue hace mucho tiempo y ….
Ryu negó al instante — si fue hace tiempo y acepto que de alguna manera tu madre salió muy perjudicada — indico — ella deseaba cuidarte y yo me sentía tan culpable que lo único que se me ocurrió fue darte lo que deseabas.
Soi Fong miro hacia otro lado y la vio ahí en una esquina del escritorio de sus padre, la foto familiar donde se encontraban la abuela, sus padres, Lyu y ella. Una que había sido tomada antes de que ella se fuera a la Universidad de Oxford — ya ha pasado mucho de eso y lo arreglamos.
El pelinegro negó —lo hablaste con la abuela, con tu madre — señalo — nosotros solo lo pusimos bajo el tapete.
Hubo un largo silencio en el despacho — siempre sentí que tenías altas expectativas de mi parte, aunque ese nunca fue un problema — apunto la peli azul — cuando sucedió todo eso, hubo un tiempo que estuve molesta contigo — dijo suavemente — sabía que tú y mamá discutían por la escuela, porque no podías tener tu venganza personal —suspiro — solo pensé que todo era por mi causa y era mejor estar lejos.
Ryu puso su mano en el puente de la nariz y cerro sus ojos un momento — nunca fue por tu causa Soi Fong — dijo con suavidad — cualquier problemas que podamos tener Lian y yo solo nos compete a los dos — aclaro al instante — sé que en ese departamento tengo muchos problemas y hasta ahora los he podido ver — confeso — por mi culpa tu mamá tuvo que buscar maneras de tenerte bajo su cuidado — indico — ¿Por qué crees que ha estado inmiscuyéndose en tu vida todo este tiempo? — Cuestiono dejando a la peli azul en silencio — es la única manera que encontró para cuidar de ti y estar cerca — explico — lo más extraño es que de alguna manera tú te acostumbraste a eso.
Soi se encogió de hombros — es mi mamá después de todo y la amo— aclaro — no es que no los quiera cerca, al final creo que me acostumbre a hacer autosuficiente.
El pelinegro miro hacia su hija — lo sé — admitió — eres inteligente — indico — no te voy a mentir — advirtió — sé que lo has de saber, pero yo deseaba tener un varón como primogénito y no fue así — vio como su hija asentía — pero aun con todo eso aprendí a amarte — señalo con una sonrisa y luego suspiro — no esperaba que te gustaran las chicas y ese fue un trago amargo para mí.
La peli azul bajo su rostro — entiendo que la manera en que lo supieron no ayudo — dijo suavemente — al principio pensé que solo era una exploración, pero lo cierto es que nunca me sentí inclinada por la figura masculina.
Ryu asintió — no soy perfecto Soi y admito que mi educación fue tradicional — se puso de pie y empezó a caminar tras el escritorio — en tu época universitaria de alguna manera te desataste y se creó esta fama de play girl que de alguna manera salpico a todos — apunto con seriedad — has conseguido muchas cosas por ti misma en lo profesional y encontraste el amor en una mujer que ha hecho buenos cambios en ti.
Soi sonrío levemente — tuve la fortuna de que Yoruichi me aceptara, aun con todos mis defectos — señalo y bajo el rostro — pero aun con todo hasta hoy parece que no alcanzo a llenar tus expectativas.
Ryu detuvo su andar y camino hacia su hija llegando junto a la silla donde se encontraba y se puso de cuclillas para tomar su mano — perdóname por no ser el padre que necesitabas que fuera — pidió — acepto que sigo aprendiendo, contigo todo es un poco más complejo.
Hubo un momento de incredulidad, Soi había visto como su padre se puso de pie y empezó a deambular tras el escritorio mientras hablaba sobre cosas que ella ya sabía de alguna manera, pero eso ultimo le tomó por sorpresa — yo…— dijo casi en un susurro, su padre no tenía que recordarle que de alguna manera ella era complicada, aun así en el fondo sabía que no podía negarle algo — no tengo nada que perdonar, me imagino que es difícil ser padre, más cuando de alguna manera no he ayudado a ser una buena hija — dijo notando que su padre negaba.
— Nunca he pensado que eres una mala hija — aclaro Ryu Fong y bajo su rostro un poco avergonzado — he estado en terapia desde la discusión con tu madre, me ha tomado un tiempo entender que los tiempos han cambiado y las cosas no son como antes — dijo con una risa un poco amarga — lo que quiero decir es que mi machismo al parecer esconde mi falta de carácter — aclaro — creo que tu abuela no ayudo mucho dado que tiene un carácter fuerte y papá… — suspiro — era demasiado estricto para mi — hubo un momento de silencio — bueno, estoy vomitando excusas tontas — confeso — para mi es importante que puedas perdonarme por no ser un buen padre.
Soi Fong le miro seria, lo cierto es que todo esto le estaba tomando por sorpresa y no sabía cómo manejarlo, siempre había mantenido cierta distancia emocional con su padre por obvias razones, su madre por otro lado, siempre luchaba por acercarse y de alguna manera había roto sus barreras y en otras circunstancias hubiese preferido que esto sucediera en otro momento no este día cuando con Yoruichi habían fraguado un plan para ver las intenciones de su madre, realmente todo estaba sobrepasando su capacidad para lidiar con los sentimientos y pensamiento, aun así sería una egoísta si le negaba algo, ¿cuántas veces le había dicho a Yoruichi que aun con las fallas su padre era su padre?, aun en el fervor de su problema familiar podía reconocer que las enseñanzas de su madre eran más fuertes que el enojo, entonces ella no iba ser una hipócrita que dice una cosas y hace otra, movió su mano para deshacer el agarre de su padre — si es importante para ti, te perdono.
Hubo un leve silencio, Ryu sonrío levemente y Soi pareció soltar un suspiro que no sabía que había estado conteniendo, los dos se pusieron de pie y se fundieron en un fuerte abrazo que duro poco tiempo, padre e hija por fin limaban asperezas y luego de ese momento emotivo, decidieron que era mejor relajarse por lo tanto se prepararon una copa de vino y brindaron por la familia. Lyu apareció unos minutos después con cautela esperando que esos dos no se hubieran matado, pero al ver que nada malo había sucedido se unió a ellos en leve plática donde hablaban de la propiedad.
Yoruichi había escuchado atenta a Lian, verdaderamente conocía demasiado a Soi Fong y aunque había señalado de manera sabía que la cercanía de la casa sería un detalle suficiente para desestimar todo las demás cosas que fueran positivas. Luego de eso no había intentado buscar algún plan para que pudieran tomar en cuenta la propiedad, nada de su habitual astucia para hacer que Soi Fong doblegara su voluntad. Según la apreciación de la morena Lian-san parecían más bien resignada a seguir buscando más propiedades para conseguirles una casa pronto. Hasta la abuela había pensado en un plan para ampliar la búsqueda contratando varios agentes inmobiliarios.
Después de que la charla cambiar a cosas triviales cansadas de darle vueltas al asunto, en la habitación las mujeres notaron que había un silencio extraño, Lyu había aparecido hace una hora para saludar, pero luego de un momento de había ido y desde ahí no lo habían visto, mucho menos a Soi y Ryu. Pero el anuncio de una joven del servicio anunciando que la cena estaba les saco de su charla. Cuando llegaron al comedor Ryu y Lyu se encontraban ahí.
— Soi fue al baño — informo Lyu al notar que Yoruichi parecía mirar alrededor.
Ciertamente Soi Fong había ido a la habitación para usar el baño y de paso tomar un momento para sí misma a sabiendas que la plática sostenida con su padre fue demasiado intensa para su mente y su alma, además de eso había traído muchos recuerdos, unos buenos y muchos otros malos. Aprovecho el momento para cambiarse a algo más cómodo, ya que se había vestido bastante formal para su cita con el agente inmobiliario y ahora solo se puso una camiseta y un pants poco holgado ya que el clima estaba un poco fresco, el agua en su rostro había caído bien y sosegado su mente. Una parte de ella se inclinaba por quedarse ahí en su habitación tirada en la cama escuchando música para acallar su mente, la otra le señala lo obvio "estas huyendo" frunció el ceño ante esa acusación y luego soltó un suspiro cansino al reconocer que su padre tenía razón.
La peli azul salió de su habitación con dirección al comedor, se extrañó cuando bajando las escaleras vio que Yoruichi estaba ahí y le miraba seria —¿pasa algo? — Pregunta al momento que termina de bajar las escaleras.
— Ya está la cena — anuncio Yoruichi suavizando la expresión de su rostro.
— Lo siento, me estaba cambiando — dijo seria y tomo la mano de su novia — vamos, seguro estará servido — señalo, la morena le miro detenidamente ya que antes de que la peli azul le notara parecía meditativa.
Llegaron al comedor y como lo había dicho Soi, la cena ya estaba servida ya que solo esperaban por ellas. Tomaron sus lugares en la mesa y después de eso todos se dispusieron a comer entre una breve charla y uno que otro comentario ligero sobre alguna noticia de actualidad o chisme amarillista. Yoruichi noto que Soi Fong casi no participaba, más bien parecía en otro mundo, su plato estaba casi intacto y además de eso ya llevaba dos copas de vino. Lyu miraba con cierta cautela hacia su hermana, había llegado al despacho y no pudo notar que algo andaba mal, pero ahora temía lo que hubiese dicho su padre a Soi que la tenía en otro mundo y extrañamente había decido tomar vino cuando la mayoría de veces prefería un refresco o té. La cena paso sin ningún incidente importante, aunque luego de haber terminado la cena Lyu pareció charlar un poco con su abuela sobre la doctora y otras cosas.
Ryu se puso de pie — llevare a Lian a la habitación — anuncio Ryu — necesita descansar un poco — Lian al momento se despidió dando las buen noches.
Soi se puso de pie después que sus padres salieran del comedor — necesito un poco de aire fresco — dijo y al instante salió del comedor.
Shaolin miro hacia la morena — ¿hay algún problema? — Cuestiono.
La morena negó al momento y cuando iba a decir algo Lyu se adelantó — quizá todo ese asunto de la casa la tiene fatigada, recuerda que no tienen mucha paciencia.
La anciana suspiro — seguramente — acepto.
—Iré con ella — dijo Lyu poniéndose de pie.
— No — negó Shaolin Fong al momento — mejor que Yoruichi sea quien hable con ella.
No hubo más que decir la morena se levantó al momento y fue tras su novia dejando a Lyu con su abuela charlando de otras cosas. La morena por otra parte se dirigió con dirección al jardín y sonrío al ver que ahí estaba la peli azul sentada en una de las sillas en el juego de jardín junto a la piscina. No puedo evitar quedarse en la puerta corrediza mirando a Soi que se encontraba con la cabeza apoyada en el respaldo mirando el cielo de Tokio, se acercó con cuidado y tomo asiento junto a la su prometida que al momento giro su cabeza para verle.
— ¿Sucede algo? — Pregunto Yoruichi con seriedad.
Soi frunció el ceño — nada — respondió.
— Nada— repitió la morena — bebiste durante la cena.
— Vino y solo fueron un par de copas — defendió la peli azul.
Yoruichi le miro — fueron tres copas y sé que no sueles hacerlo — apunto.
La peli azul suspiro — no sabía que las estabas contando — dijo suavemente y con tono suave, antes esa última declaración el silencio pareció caer entre la pareja — ¿crees que soy una mala hija? — Pregunto de pronto.
La morena parpadeo ante esa extraña pregunta — ¿Por qué preguntas eso? — Cuestiono.
— Solo responde — pidió cansinamente.
Yoruichi la miro directamente con esos ojos ambarinos, deseaba saber que era lo que tenía en mente, tal vez algo había sucedido para que Soi estuviese y sabía que al final ella iba a decírselo — no creo que lo seas — respondió y vio como Soi ponía los ojos.
— Lo dices porque eres mi novia — apunto la peli azul.
— No hay como refutar ese hecho — dijo la morena — pero, recuerdo cuando nos vimos por segunda vez y todos esos rumores sobre ti — sonrío — hasta los apodos que la gente se ha inventado me parecían raros, aun así, todas esas veces que coincidíamos podía ver una faceta de ti que pocos hablaban, como que pasabas los fines de semana en la casa de tus padres — apunto — cuando parecías tan independiente no había vez que no tenías una mención para Lian-san o Shaolin-san, te quejas de tu mamá y de todo — pero en el fondo amas a tu familia más que nada.
Soi Fong frunció el ceño — creo que todos somos así — señalo.
Yoruichi asintió — posiblemente, pero mira cuantos años tienes y dejaste tu libertad por complacer a tu mamá y abuela — indico — así como tú dices que los padres no pueden ser perfectos, creo que eso aplica con los hijos.
La peli azul pareció guardar un momento contemplativo — ya me dio sueño — dijo al momento.
La morena se puso de pie — vamos a dormir entonces, te llevare a tu habitación.
— No estoy ebria — señalo la peli azul.
Subieron a las habitaciones y como había dicho la morena dejo a Soi en su habitación y de dirigió a la suya, mientras se ponía su ropa para dormir pensaba en lo sucedido. No hubo manera de saber de dónde venía todo eso y esperaba que esas copas de vino que su novia había ingerido le ayudasen a dormir. Apago la luz y se fue directamente a la cama, se estaba acomodando cuando de pronto la puerta fue abierta y la luz fue encendida. La figura de la peli azul se encontraba junto al interruptor de la luz.
— ¿Soi que haces aquí? — Pregunto la morena — pensé que tenías sueño.
— Si, pero dormiré mejor contigo — dijo la peli azul — prometo portarme bien — señalo y se quedó ahí esperando obtener la aceptación de su novia.
Yoruichi le miro seria, había veces que Soi era demasiado tierna y aun así reconocía que tenía sus mañas — nada de trucos y me dirás que ha sucedido — advirtió.
La peli azul suspiro — te aseguro que mañana te iba a contar que estuve hablando en el despacho con papá — índico mientras apaga la luz y se unía a su novia en la cama.
Yoruichi resoplo, sabía que el padre de Soi no era muy paternal con su hija como lo era con su hijo — ¿qué dijo? — Cuestiono con tono exasperado y escucho la pequeña risa de su novia.
— Para variar no fue malo — respondió de manera suave.
La morena le entrecerró sus ojos — no fue malo y aun así te afecto para ponerte a beber.
Soi frunció el ceño — Yoruichi, solo fueron unas copas — se defendió — lo necesitaba yo…
— No creo que necesites beber — refuto — te conozco, puedes conseguir cualquier cosa que te propongas con la adecuada motivación, eres inteligente, sabes defenderte y a pesar de tu apodo de princesa de hielo eres todo lo contrario y mucho más.
La peli azul lanzo un largo suspiro — quiero besarte y posiblemente querré mucho más que un beso — soltó, hubo una pequeña pausa — creo que piensas bien de mi porque me amas.
— No —Refuto la morena — es cierto que estoy enamorada de ti, por mucho que al principio pensé que eso no era lo que quería —apunto — mamá me dijo una vez que cuando encontrara a esa persona especial, lo sabría porque reconocería dos cosas, que me gusta por y la amo a pesar de.
Soi rio un poco — me amas a pesar de mi fama, de mi incapacidad para expresarme y ese cumulo de fallas que tengo.
Yoruichi rio divertida — Oh si, tu tartamudeo y ese sonrojo son cosas que me gustan de ti.
Hubo un momento de silencio — espero poder ser buena madre para nuestros hijos —dijo de pronto —siempre he sido mala con las emociones, es como no saber que hacer.
— Uno aprende y eso no es una excusa para beber — señalo la morena —¿me dirás de que hablaron? — Pregunto.
Soi asintió y se acercó mucho más a la morena recostando su cabeza en el pecho suave de su novia. Fue ahí que empezó a contar todo desde que su padre la atrapo tratando de escuchar tras de la puerta, para luego entrar con lo más importante. Yoruichi se sorprendió como todo había dado un giro interesante, que Ryu Fong decidiera dar un paso importante para ir con su hija y pedir perdón por no ser el padre que ella necesitaba fue sorpresivo, a la vez que podía escuchar cierto pesar en que se pusiera a recordar cosas del pasado, pero como le había dicho Soi los dos nunca se habían sentado a charlar sobre sus problemas, solo habían optado por obviado y tirarlo bajo la alfombra.
Aun así, no le había gustado a Yoruichi la manera en que su futuro suegro había abordado la situación, era como si a pesar de todas sus disculpas le resultara un problema el que Soi fuese como era, cuando todos saben cada individuo es el resultado de todas las experiencia pasadas sean buenas o malas, por desgracia su novia había tenido mucho con que lidiar desde pequeña. El sueño llego después de haber terminado de contar hasta el mínimo detalle, la primera fue la peli azul, a la morena le tomo un poco más de tiempo dormirse ya que lo quisiera o no las cosas se habían juntado, si Ryu Fong había tratado de resarcir sus pecados y Soi había sido noble al perdonar, dejaba entrever que la situación con su padre podía resolverse de la mejor manera antes de su boda.
El día domingo llego con cierta calma, Yoruichi para su mala fortuna no tuvo el despertar esperado pues Soi ya no se encontraba en la cama con ella, aunque posiblemente era lo mejor no fuera ser que les ganara el deseo mutuo. La morena sacudió su cabeza, esperaba que este día todo fuese mejor y con eso en mente fue directamente a tomar su ducha. Soi Fong terminaba de vestirse y estaba lista para bajar, necesitaba con urgencia un jugo de naranja e hizo un recordatorio en su mente de no beber vino más de un par de copas, justo ahora sentía que su cabeza le iba a estallar siendo un recordatorio doloroso porque odiaba beber además del hecho que perdía el control y podía ser un desastre. Aun así, se felicitó por ser inteligente para salir de la habitación de Yoruichi porque era más que seguro que despertar a su lado hubiese despertado el deseo que ayer por la noche que calmo por el bien común.
Cuando salió de su habitación con dirección a la cocina la puerta frente a ella se abrió y la figura de Lyu en piyama apareció — Soi, ayer vine a buscarte — dijo, la peli azul se detuvo su camino — ¿dormiste con Yoruichi? — Pregunto.
— No hicimos nada — se defendió al instante haciendo que su hermano sonriera — ¿Qué querías? — Cuestiono.
— No es mi asunto lo que hagan ustedes y no te acuso de nada — apunto — solo quería saber si todo estaba bien y si papá no fue molesto contigo.
Soi no pudo evitar sonreír un poco ante la preocupación de su hermano — no pasó nada, todo bien — apunto y vio la duda en el pelinegro — es solo…el asunto de buscar casa que se está tornando un poco molesto — indico y aunque no decía la verdad tampoco era que estuviera mintiendo.
Lyu sonrío — no deberías preocuparte por eso, la abuela dijo que mamá y ella hablaran con Jazmín para que contraté más agencias que ayuden a buscar un lugar que les agrade y todo sea rápido.
— ¿De verdad? — Pregunto.
El peli negro asintió — pensé que Yoruichi te había dicho ya que dormiste con ella — dijo con cierta diversión.
Soi puso los ojos — necesitas ducharte Lyu — apunto — debo ir por algo de comer.
Lyu suspiro y soto una leve sonrisa, seguramente su hermana estaba sufriendo los efectos de su ingesta de vino. No entendía como hasta ahora no había aprendido a ser un poco más tolerante al alcohol con Lisa y Rangiku como amigas es lo menos que se podía esperar. Él ya lo sabía su hermana nunca iba a dejarse seducir por el alcohol ya que pensaba que era algo que le quitaba el control a ella una maniaca del control, el pelinegro sintió que su estómago le reclamaba comida, decidió apurarse para acompañar en el desayuno a su hermana.
Soi Fong había logrado obtener su jugo de naranja, cosa que alivio su estómago y el dolor que parecía querer llegar a su cabeza. Lo cual le recordó que por mucho que le gustaran las uvas eran mucho mejor como fruta que como bebida, aun así, se quedó ahí viendo como las muchachas de la cocina se movían para preparar el desayuno. Los Fong tuvieron un día en calma y familiar como se estaba haciendo costumbre, por la noche después de la cena Yoruichi se despidió porque necesitaba volver a su apartamento, mañana debía salir muy temprano a una asignación que le llevaría estaré lejos tres días. El regreso a su casa fue en el lujoso auto de Soi Fong la charla fue poca y muy útil. Yoruichi le había contado lo que Lian había expresado ayer sobre la casa de al lado y olvidarse de eso para buscar algo que pudiesen hallar pronto.
— Mañana mismo le diré a jazmín que no haga nada hasta nuevo aviso — dijo la peli azul.
La morena negó — estas jugando con fuego, si tu mamá o Shaolin-sama se dan cuenta la única persona que tendrá problemas es Jazmín.
— Tendré todo bajo control — dijo — tengo que admitir que esa casa ha sido de las mejores que hemos visto y solo resta saber cuánto es lo que piden.
Yoruichi le miro seria — ¿estas segura de eso? — Cuestiono.
Soi sonrío — solo quiero saber algo antes de responder — apunto y la morena le miro curiosa — ¿a ti te gusto el lugar? — Preguntó.
La morena asintió — sí, me gusto y podríamos remodelarla si es lo que tu deseas.
La peli azul le miro — no quería ese lugar porque creí que mamá estaba queriendo hacer lo que ella quería con nosotros — suspiro — pero me doy cuenta que solo quiere lo mejor para nosotras y si tú te sientes segura teniendo a mi familia de vecinos, porque no considerarlo.
Yoruichi le miro y sonrío — quieres que nos casemos lo más pronto posible, eh — apunto.
— Claro, ya me cansé de dormir sola — se quejó — llegamos — anuncio.
La morena frunció el ceño — ¿no entraras? — Pregunto.
— Si voy contigo no dejare que te duermas temprano y según me has dicho debes levantarte temprano — señalo — aunque no me vendría mal que quedaras, pensar que estarás casi cuatro días lejos es raro.
Yoruichi se inclinó y dio un beso a su novia — bien, entiendo — dijo — pero sabes que podremos hablar por teléfono.
Soi puso los ojos — no es lo mismo —apunto, aunque la morena trato de obviar la queja.
— Me avisas cuando llegues — pido la morena y vio como su novia asentía.
La peli azul suspiro al momento en que la morena bajo del auto, le vi encaminarse hacia su apartamento hasta que entro y cerró la puerta, al momento salió de ahí con dirección a la casa donde seguramente su madre le esperaría para dar buenas noches, solo esperaba que estos días pasaran rápidos para que Yoruichi regresara, lo cierto es que no le había gustado para nada que se fuera esos días, odiaba admitir que su novia tenía razón al decir que al casarse estarían juntas y que era mejor hacer estos trabajos ahora, además no podía dejar de recordar que la morena se había emocionado como una niña que iría a excursión al ver los lugares que iba a visitar.
La morena en su apartamento busco rápidamente su habitación, pero antes dejo todo listo para el día de mañana que debían ir a tomar una fotos en Kawaguchiko en la prefectura de Yamanashi, un viaje de tres días donde tomarían fotos de todo los lugares turísticos, según Hirako la oficina de turismo de Japón les había solicitado ese trabajo. Según había dicho su compañero sería un viaje de hora y veinte minutos para llegar, primero se iban a instalar cerca del lago, para aprovechar el día ver las vistas al monte Fuji, tomar fotos del lago, el siguiente día en la mañana irían por las rutas de sedentarismo, por la tarde visitarían las aguas termales.
El miércoles y último día, visitarían el Fuji Panoramic Ropeway, que era un teleférico que los llevaría hasta el fabuloso mirador del monte Fuji ubicado en la cima de Tenjōyama, los dos llevaban sus cámaras pues debían tomar fotografías de todos los lugares que visitaran, al llegar Jūshirō y los dos verían cada fotografía y buscarían las mejores para publicarlas en la revista. Todas las noches la morena tenía la tarea de hablar con su novia, Hirako tampoco se libraba de llamarle a Hiyori. El plan era regresar el día jueves por la mañana, aunque vería a Soi Fong hasta la noche.
El día lunes llego Soi tenía trabajo que hacer y del cual ocuparse, pero a medio día tenía ese cosquilleo de querer tomar el teléfono para llamarle a Yoruichi. En su casa en la hora de la cena Lyu parecía molestarle un poco al verla un poco ansiosa al esperar la llamada de su novia que según habían quedado ella seria quien le llamaría. Lian pudo ver como su hija al momento de recibir la llamada que esperaba subió a su habitación para no ser interrumpida, solo dio las buenas noches y se marchó. La llamada dura casi una hora, la peli azul había querido saber todo de la morena, donde había ido y si le había gustado cada lugar, además de eso ella conto arte de su día que consistió en trabajo. Por último, vino la pregunta de si había recibido un corro con el precio de la propiedad que habían visto ayer, Soi le dijo que no creía que un día para otro enviaran el precio, que seguramente considerarían la situación y quizá entre mañana o miércoles tal vez tendrían noticias.
El martes cuando el día de trabajo estaba terminando para Soi Fong tuvo en su oficina una visita inesperada. Lisa había irrumpido su trabajo con la excusa de que la invitaba a cena ya que desde hace un tiempo no se ponían al corriente, cosa que era totalmente cierto ya que desde lo sucedido a su mamá había optado por no hacer vida social. Por último, le había confesado que Lyu le había llamado para que la sacara de su encierro. Soi había pensado que Nanao las acompañaría, pero según Lisa tenia una cita con Shunsui y aunque le había enviado un mensaje con los detalles de donde se encontrarían, dudaba que su hermana dejara al viejo Shunsui para ir a parlotear con ellas, en un restaurante de comida bufet.
— ¿Entonces como van las cosas? — Pregunto Lisa después de tener su plato lleno y un vaso de Sake a su lado.
— ¿Qué cosas quieres saber en específico? — Cuestiono la peli azul, odiaba parlotear largamente pudiendo ser breve y concisa.
Lisa sonrío y se llevó un bocado de comida a la boca — no he sabido cómo te fue en Cambridge de tu propia boca, solo supimos las cosas por Yoruichi — se quejó — no nos hemos visto de manera banal desde la fiesta anual — suspiro — pronto te vas a casar y habrá menos tiempo para perderlo con los amigos.
Soi puso los ojos — nunca he pensado que reunirme a hablar con ustedes es una pérdida de tiempo, son mis amigas — aclaro al instante y de pronto alzo su vista — parece que Nanao perdió su cita.
— ¿Cenaste? — Pregunto Lisa — no me digas que Shunsui te dejo plantada
Nanao Ise se acercaba a su mesa con el teléfono en su oreja, estando cerca pareció cortar la llamada y tomo asiento junto a su hermana — pídeme té y si cene — aclaro a Lisa — hola Soi, al parecer llegue a tiempo — dijo tomando asiento — ¿en que iban? —Pregunto.
— Soi iba a contar lo de Cambridge y sus planes de dejar la soltería — resumió Lisa.
Soi sabia que no le quedaba mas que contar su dolorosa y horrible experiencia con el procedimiento que le hicieron en Cambridge, así mismo se quejó de lo difícil que había sido hasta ahora el lograr conseguir una casa acorde a los gustos de Yoruichi y el suyo propio. También les comento la plática que había tenido con su padre, no les detallo por completo la charla, pero si lo mas importante. Nanao y Lisa quedaron un poco sorprendidas de todo lo que su amiga les contaba, en su interior pensaban que era una lastima que Rangiku no estuviera ahí con ellas. Soi ya no era aquella chica atolondrada que desperdiciaba sus días de chica en chica. Al terminar de contar un resumen de lo sucedido en estos días fue de alguna manera refrescante, Soi reconocía que ahora le era más fácil compartir sus cosas y eso era gracias a Yoruichi.
Lisa suspiro — es increíble lo de tu papá — comento.
— Aun así, no creo que debas tentar tu suerte — dijo Nanao y vio como la peli azul ponía los ojos — sé que te portas bien, solo…
Lisa interrumpió — a Nanao y Rangiku nunca les agrado el trato que algunas veces tenía tu padre hacia ti — señalo — ni a mí, pero que íbamos hacer — apuntó — a Nanao y a mi el viejo aun con todos nuestros defectos siempre fue…ya sabes.
— Un buen padre — termino Nanao mirando hacia su hermana — no te hará mal decirlo Lisa, aunque bien sabemos que tiene sus fallas como todos — termino y miro hacia la peli azul — es un buen paso que el acepte que ha sido duro contigo.
Lisa sonrío — estoy segura que Lian-san te consiente compensando el trato de tu padre te da lagunas veces — señalo la pelinegra ajustando sus gafas.
— Pronto me casare y volveré a dejar la casa de mis padres — dijo Soi encogiéndose de hombros — soy lo suficientemente madura para saber que nunca daré la talla con papá y puedo perdonarle por eso — suspiro — cuando tenga mis hijos quisiera que ellos puedan perdonar cualquier cosa tonta que yo pueda hacer mal.
Lisa y Nanao sonrieron un poco — estoy segura que Yoruichi y tú serán unas buenas madres — señalo la menor de las Yadōmaru.
— Espera dijiste hijos — recapitulo Lisa — ¿acaso piensas tener mas de uno? — Pregunto.
Soi suspiro — realmente no lo sé, no hemos hablado de eso — aclaro — creo que hay cosas que aun debemos hablarlas — dijo con un suspiro.
Nanao sonrío — estas madurando — señalo.
Lisa suspiro — quien diaria que nos ganaras a todas, realmente creímos que Rangiku sería la primera en casarse, tener hijos y ahora de manera increíble tu estas más cerca de lograr todo eso.
— No es una competencia — se quejó la peli azul — necesito un trago fuerte, ¿quieren algo? — Cuestiono.
— Pídeme lo de siempre, iré al baño — dijo Lisa y fue con dirección a los baños.
Soi llamo al camarero y este se acercó — podría traerme una margarita, un Daiquiri y una copa de vino tinto.
El camarero asintió a los pedidos y se marchó — pensé que no pedirías para ti, aunque al parecer la margarita aun sigue siendo tu preferido — dijo Nanao.
— Solo será uno — se defendió — esa bebida es lo mejor del mundo — señalo con una sonrisa.
— Por supuesto, un sabor exquisito y suave — describió Nanao — una borrachera lenta.
La peli azul sonrío — si Rangiku estuviera aquí seria perfecto, hace un tiempo que no hacemos esto — apunto.
Nanao asintió — te apuesto que no pasara mucho para escuchar sobre quien seria la madrina de tu futuro hijo.
Soi rio llanamente — no creo que sea así — dijo y vio la mirada sagaz de Nanao — bien, apuesto que tal esperar diez minutos.
— Acepto, pero será antes de diez — confirmo — beberás otra margarita como pago y yo una copa más de tinto si pierdo — dijo la pelinegra el castigo.
Las bebidas llegaron y Lisa lo hizo al momento en que el camarero se marchaba — hay algo que estaba pensando — dijo tomando asiento — debo ser madrina de tu hijo.
— ¡Lisa! — Exclamo Soi Fong.
Nanao reía divertida y Lisa parecía perdida —¿yo que he hecho? — Cuestiono.
Soi puso los ojos — perdiste, debes pagar Soi — apunto la pelinegra.
Lisa hizo rostro de indignada — Nanao apostaste sobre ser la madrina — dijo seria — que mala hermana.
— Lisa no seas dramática — regaño Nanao.
Ciertamente pasaron un buen rato charlando y terminando sus bebidas, después de eso cada una se despidió para ir a sus respectivos lugares de habitación. La peli azul se fue con mucha calma, esa noche en especial su novia no iba a llamar porque iban a buscar lugares de fiesta junto a Hirako. En la tarde como a las 4 habían podido tener un momento de video llamada, realmente el perder esa apuesta no era tan malo según la peli azul a sabiendas que con un poco de alcohol era fácil dormir. Al llegar a su casa dio las buenas noches y fue directamente a su habitación, después de enviar un pequeño mensaje de "ten cuidado y buenas noches" a la morena, luego se durmió.
