Sentía su cuerpo pesado, el dolor de cabeza era insoportable y la migraña no se compraba. Ahora recordaba porque casi nunca se emborrachaba.

Miró a su alrededor y había un completo caos y desorden. Pobre del dueño de la casa pensó. A su lado vió a Sakura como siempre, abajo de sus piernas estaba Naruto abrazado de Shion, su novia, en la esquina estaba Kiba y a su lado Shino, abajo de la mesa estaba Lee con Gaara abrazados, a un lado del sillón estaba Ino con Sai, al parecer habían tenido una noche de pasión, en el sillón estaban Shikamaru y Temari, que al igual que los otros dos la habían pasado muy bien, Chouji estaba al otro lado de la habitación.

Al ver el completo desastre en el que se había convertido aquella "reunión" intentó levantarse, no recordaba absolutamente nada, lo último que recuerda era haber tomado una cerveza, pero después de eso nada.

Se puso de pie como pudo, Pero el dolor de cabeza, las nauseas y el mareo lo hicieron tropezar y casi caer encima de Sakura.

Cómo pudo llegó al bañó y se permitió sacar todo lo que había comido el día anterior.

Se incorporó nuevamente y a su mente llegaron unas frases.

"Estoy enamorado de ti, por favor sé mi novia"

"Deberías besarme si ya somos novios"

"Eres de verdad hermosa"

Se sorprendió al recordar eso, ¿A quién se lo había dicho? ¿a Sakura? probablemente, por eso estaba a su lado.

Con fastidio se frotó la cara, ahora iba a ser imposible apartarla de su lado.

Chasqueo la lengua y comenzó a lavarse la cara y enjuagarse la boca. Fue a despertar a Naruto pues debían limpiar su casa antes de que sus papás volvieran.

Ya casi terminaban con la ayuda de todos los que estaban inconscientes anteriormente.

Sasuke pensó que Sakura tampoco recordaba nada porque no se le había restregado como seguro lo haría si le preguntaba.

-Naruto

Llamó a su amigo, tenía la esperanza de que él recordara algo.

El nombrado le prestó atención y con cautela se acercó, con el mismo tono que su amigo utilizo le respondió un escueto mandé.

-¿recuerdas algo de lo que pasó anoche?

-Yo estoy igual que tú amigo, no recuerdo nada. Después de tomarme la cerveza he olvidado todo. Al parecer la cosa se puso fea, mira como quedó mi casa.

-hmp, a ver si aprendes a comprar cerveza buena.

Ambos siguieron con la labor de limpieza.

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Aún seguía pensando en quien habría sido la persona a la que se le había confesado. Miró a su derecha, su compañera de asiento, Hyuga Hinata, su perfil era hermoso, todo de ella le parecía hermoso, corroboraba que estaba perdidamente enamorado de ella.

Ojalá hubiera sido ella, pensó, pero recordó que ella nisiquiera había ido a la fiesta.

Con un suspiro provocó que ella lo volteara a ver. Se sorprendió cuando ella lo miró y se sonrojó en sobremanera y volteó la mirada demasiado rápido para poder evitarlo.

Sasuke con una sonrisa dejó de mirarla y volteó para prestarle atención al profesor, aunque solo sería fachada, pues seguía pensando en aquella persona.

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Habían pasado dos días desde aquel encuentro, aún no tenía más recuerdos pero se seguía esforzando por recordar a aquella persona, disculparse y decirle que no era cierto lo que le había dicho y que estaba enamorado de alguien más.

-Uchiha-san.

Escuchó aquella hermosa voz, centró su atención solamente en ella y se permitió deleitarse con su hermosa belleza y su hermosa voz.

-Padre me pidió que te llevará a casa. C-creo que quiere hablar algo contigo.

Sasuke se sorprendió, Hiashi Hyuga casi nunca lo quería ver. Si acaso al que llamaría normalmente era a su hermano Itachi o ya directamente a su padre.

-¿Tienes idea del porqué?.

Estaba realmente confundido.

-P-por lo que pasó hace días.

Hinata estaba demasiado avergonzada. Y Sasuke no entendía porque.

-¿Qué pasó hace días?.

Quiera saber exactamente de lo que ella hablaba. No entendía lo que le estaba pidiendo.

-Sobre nosotros...

Ahora su expresión había cambiado. Su rostro ya no demostraba esa timidez.

-No recuerdo que haya pasado algo entre nosotros.

Cada vez estaba más confundido, ¿se habría confundido?.

Hinata sin previo aviso corrió lejos de él y desapareció de su vista sin dejarle tiempo de detenerla o saber a dónde se había ido.

Lo único que podía hacer era ir con Hiashi, ya lo había mandado llamar así que debía aceptar las órdenes.

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Llegó a la mansión Hyuga y se sorprendió al ver a Neji, el hermano de Hinata. O primo.

-¿Qué haces aquí escoria?.

Neji lo miraba con desprecio, Sasuke no podía saber cuál era la razón.

-Hiashi me mandó llamar.

Fue su escueta respuesta.

-Si es por Hinata-Sama te puedes largar de aquí, no permitiré que salgas con ella. Aunque Hiashi-sama lo permita yo no.

Sasuke se quedó sorprendido, ¿en qué momento Hinata y él tenían la oportunidad de salir?.

-¿A qué te refieres?.

Estaba más confundido que nunca

-Aquella noche en que le pediste a Hinata-Sama que saliera contigo y después te atrevieras a besarla, Hiashi-sama decidió que serías el hombre indicado para salir con ella. Pero yo no lo creo.

Sasuke se sorprendió a tal punto de dejar su mente en blanco. ¿Entonces si fue Hinata? ¿Pero cómo?

-Ella no estaba en la fiesta...

Fue lo único que pudo responder.

-Yo la llevé después de que Hiashi-sama y los demás se fueran a dormir, yo le prometí que la llevaría, pero grande fue nuestra sorpresa de encontrarlos demasiado eufóricos. Ahora entiendo que estaban completamente ebrios. Supongo que no recuerdas nada de lo que le dijiste o hiciste. Y ella tampoco se dió cuenta de que estabas perdido en el alcohol.

-Y yo le dije que no recordaba nada como un cabron.

-¿Entonces por eso regresó sola y llorando?, idiota.

La mente de Sasuke estaba en completo caos, comenzó a recordar. Hinata había ingresado a la casa de Naruto, se veía hermosa en ese vestido blanco, que dejaba ver sus hermosas piernas, se acercó a ella y sin previo aviso la abrazó, nadie se había dado cuenta de su presencia así que lo aprovechó y se la llevó a un rincón.

-Hinata, te ves demasiado hermosa.

-Sasuke-kun, yo...

-Estoy enamorado de ti, por favor sé mi novia

-Y-yo... Si, si quiero ser tu novia

-Deberías besarme si ya somos novios. Eres de verdad hermosa

Cayó en la realidad cuando Neji estaba a punto de cerrar la puerta.

-¡Espera!, vine a hablar con Hiashi y eso haré.

No esperó a que Neji le permitiera el paso, no entendía porque no lo detuvo tampoco. Llegó al despacho del Hyuga y tocó con demasiada confianza. Escuchó el "pase" y entró.

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Hinata estaba en su habitación, se sentía demasiado avergonzada, no podía creer que solamente ella era la que recordaba aquel beso y aquella propuesta por parte del Uchiha. Se sentía como una verdadera tonta.

Pero también estaba triste, pues ella no era la persona de la cual Sasuke Uchiha estaba enamorado. Con pesar soltó un suspiro.

Ella estaba enamorada de él desde hacía mucho tiempo, pero le daba mucha pena entablar una conversación con él.

Salió de sus pensamientos cuando alguien tocó su puerta. seguramente era Neji, él pudo verla cuando entró corriendo sin saludarlo.

Se paró para abrirle y pedirle disculpas.

-Lo siento mucho Nej...

Levantó su mirada y en lugar de encontrarse con una similar a la suya se encontró con una completamente contraria.

Se quedó en blanco al ver al hombre del que gustaba en la puerta de su habitación.

-Lamento no ser tu primo.

Sasuke estaba un poco nervioso, no sabía que decir para disculparse.

-Lo siento Hinata, lamento no recordar por completo lo que pasó en esa noche.

Comenzó a avanzar hacía adentro de la habitación, provocando que Hinata comenzará a retroceder por reflejo, permitiendo que Sasuke entre por completo.

Cerró la puerta tras de si y al hacerlo con rapidez tomó el rostro de Hinata.

-Eres de verdad hermosa, permíteme ser tu novio Hinata.

Sentía el rostro de Hinata calentarse bajo las palmas de sus manos, poco a poco se iba acercando a ella.

-S-si...

Hinata susurró que Sasuke apenas y pudo escuchar.

-Deberíamos recrear el beso hasta poder recordar ¿no crees?.

Con una sonrisa Sasuke acercó sus labios a los de ella, permitiendo sentir su calidez y suavidad. Se sentía demasiado felíz al por fin ser su novio. Agradecía a esa horrible fiesta. A su mente llegó el preciso momento en que tomó a Hinata de la cintura y se acercó a ella para tomar sus suaves labios.

-Aún no lo recuerdo, necesito otro.

Volvió a tomar sus labios una y otra vez, la tomó de la cintura y profundizó aquellos besos sin darle tiempo a Hinata de recuperarse. Lo único que podía hacer era aferrarse al cuello de Sasuke y evitar que sus piernas le fallaran.