Disclaimer:Todos los personajes, así como lo que podáis reconocer pertenece a J.K. Rowling.
Flashback 66
Andrómeda había servido el almuerzo en el jardín, hacia un día espléndido y Teddy gateaba por el suelo agarrando todas las flores que se encontraba a su paso mientras los tres chicos se servían comida en sus platos y se lanzaban a devorarlos totalmente hambrientos.
Theo y Harry no habían sacado nada en claro sobre las visiones de éste.
Habían pasado parte de la mañana debatiendo: La información que tenía Theo sobre la búsqueda de un sitio místico en Escocia que Voldemort se traía entre manos era escasa y la visión de Harry, al ser tan pobre, tampoco revelaba muchos más; lo único claro era que Voldemort ya disponía del sitio para cerrar el círculo. ¿Pero qué círculo?
Theo se quedó pensando en si todo esto tendría algo que ver con la famosa profecía que Draco robó de la Mansión Lestrange…recordó algo que Parvati dijo antes de morir y algo dentro de su mente se encendió; no iba mal encaminado.
· Draco…querido- el tono de sorpresa de Andrómeda sacó a Theo de sus pensamientos y los demás levantaron sus miradas de los platos- ven, siéntate con nosotros.
Draco buscó con la mirada perdida a Hermione. Cuando descubrió que la chica no se encontraba ahí empezó a ponerse nervioso. ¿Se habría ido otra vez? ¿Se habría cansado de esperar que él se dignase a prestarle atención? Theo, que conocía perfectamente a su amigo y había visto como apretaba los labios se levantó y se dirigió a él.
· Está en su habitación- la sonrisa fraternal que le dedicó Theo hizo que Draco se ablandara- come algo con nosotros y sube a buscarla.
· No tengo hambre, quizás más tarde- Theo asintió, no quería forzarlo. Draco se tomó ese gesto como una despedida y volvió a entrar en la casa dirigiéndose a la habitación de Hermione.-
Cuando entró en la habitación encontró a la chica totalmente dormida. Tenía los rizos desparramados por la almohada y su aspecto parecía cansado, como si llevase muchas noches sin dormir y probablemente fuera así; estaría mortalmente preocupada mientras él había intentando apartarla de su lado cada día en el que la chica había ido a prestarle su apoyo y cariño; En ese momento se sintió aún más miserable.
Se acercó lentamente y apartó al gato que estaba enroscado en los brazos de ella con un aspaviento de manos. Se tumbó junto a ella y la abrazó, sintiendo todo el calor que emanaba el cuerpo de la chica, aspirando su aroma y preguntándose por qué la había apartado durante esas dos semanas si ella era la única persona en la tierra que podría calmar su dolor y hacerle sentir en casa.
La única que podía calmar su sed… su fuente inagotable.
Hermione gimió levemente al sentir unos brazos rodearla, abrió los ojos lentamente y vio un brazo que la cogía por la cintura fuertemente. Un brazo con la marca Tenebrosa, el brazo de Draco. Sonrió para si misma y lentamente se dio la vuelta hasta tener su cara pegada con la suya encontrándose los ojos más tristes que había visto jamás.
· Draco…- Hermione acarició su mejilla y el chico cerró los ojos absorbiendo la caricia- me alegra que estés aquí.
· Te necesito tanto…- Draco pegó su frente a la de la chica y suspiró- he perdido a mi familia…estoy tan sólo…
· Shhh- Hermione lo besó fugazmente- estoy aquí contigo, Theo está aquí contigo. A veces la familia de sangre no es la única que tenemos…yo también me quedé sola y ahora tengo a Harry y a Ron…a los Weasley. Te tengo a tí – la sonrisa que le dedicó transmitía tanta hermosura y cariño que Draco empezó a sentir un poco de consuelo en su atormentada alma.
Y así, abrazados y mirándose fijamente pasaron horas disfrutando de la burbuja de silencio y calma que sentían cuando estaban juntos.
Hermione había acallado los demonios de Draco por unas horas y ella se había olvidado completamente del mundo al tenerlo de nuevo a su lado.
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Marzo pasó fugazmente mientras Draco cada día se recuperaba más de su tristeza y comenzaba a vivir de nuevo. La casa de Andrómeda se había vuelto a llenar de risas y de bromas entre los jóvenes que allí vivían sumadas a las visitas que hacían regularmente Harry y Ron.
Ron se había relajado respecto a Malfoy; el gran corazón que tenía el pelirrojo no podía soportar odiar al hurón después de todo lo que le había pasado; en el fondo sabía que lo que sentía por Hermione jamás saldría a la luz, ella ya había elegido hacia tiempo y Ron no estaba dispuesto a perderla también como amiga. Eso no quería decir que él y Malfoy se hiciesen amigos, pero al menos intentaría respetar la decisión de su amiga y ser comprensivo con el duelo del chico.
Esa noche, habían cenado todos juntos. Incluso Snape había salido de su laboratorio y les había honrado con su presencia contando algunas anécdotas como jefe de casa de Slytherin que hizo que Theo y Draco agachasen la cabeza avergonzados.
Todos reían mientras Andrómeda mecía a Teddy en su cochecito intentando que se durmiera.
Hermione se sentía plena. Sus amigos sentados en la misma mesa que Draco y riendo juntos, pensó en cuán diferente hubiera sido todo sino hubiese existido Voldemort en sus vidas…pero algo le hizo alejar este pensamiento, si Voldemort no hubiese existido quizás ella y Draco jamás se hubieran enamorado, no hubieran tenido que ser parte de una profecía y jamás hubieran convivido juntos.
Estos pensamientos le hicieron pensar en algo que Theo le había comentado días atrás mientras leían juntos en el jardín para matar el tiempo.
· Theo…creo que Snape puede ayudarnos con eso que me comentaste sobre lo que dijo Parvati antes de morir.- los ojos de todos los allí presentes se posaron en ella y las risas cesaron-
· ¿A que te refieres Hermione?- preguntó Snape con dureza esperando que la chica no sacase a la luz nada que tuviera que ver con la profecía ; a pesar que Narcissa había oído algo, Draco y la chica no estaban enterados del contenido en su totalidad ¿O si?-
· Theo me comentó que Parvati se dirigió a Voldemort antes de morir y le dijo estás palabras: La salvación de la oscuridad vendrá de la mano del heredero. Y me preguntaba, si con esa frase Parvati no quiso a advertir a Voldemort que está equivocado con la profecía…
Todas las miradas se debatían entre Hermione y el rostro contrariado de Snape.
· ¿Por qué nosotros no conocemos el contenido de esa profecía? Tú tampoco lo conoces ¿No Harry? Me lo habrías contado…– preguntó Ron mientras Harry miraba a Draco que había empezado a palidecer considerablemente-.
· Creo que este no es un tema para tratar en la mesa…esté equivocado o no, el objetivo para con el heredero es el mismo. La muerte.- sentenció Snape- y hablando de profecías… espero, por su bien y el de todos Aquí presentes que no haya cometido ninguna insensatez y esté…- miró a Draco de reojo y seguidamente a Hermione que en cuanto sintió los ojos oscuros de su ex profesor no pudo evitar pensar en los viales de pociones que llevaban en su cajón desde que Draco desapareció aquella mañana de lluvia – tomando las precauciones adecuadas.
· ¿De qué heredero hablan Harry? – preguntó Ron en un susurro a su amigo- no entiendo nada…
· Si te sirve de consuelo yo tampoco tengo idea, pero puedo sospechar algo- contestó Harry a Ron sin apartar la mirada de su amiga que había enrojecido levemente y se mordía el labio como cuando se encontraba nerviosa-.
· Hermione es demasiado inteligente para olvidar un hecho tan importante, puedes estar tranquilo Snape- dijo Draco escupiendo las ultimas palabras y levantándose de la mesa para coger la mano de la chica y tirar de ella - si nos disculpáis, es hora de dormir.
Salieron por la cocina dejando a todos desconcertados por el giro que había dado la noche en unos segundos. Cuando estaban lejos de las miradas de los demás, Draco se giró hacia ella:
· Tú has tomado pociones o realizados hechizos anticonceptivos todo este tiempo ¿Verdad? Creo recordar que Snape te proporcionó algunos viales…- preguntó el rubio intentando controlar el miedo que se había apoderado de su cuerpo. Él se había olvidado completamente de la profecía cuando fue a rescatarla, y después de lo de su madre tampoco había pensado mucho en el peligro que correría Hermione si resultaba embarazada.-
· Claro…- dijo la chica bajando la mirada-.
· Buenas chica, no esperaba menos de ti- le dio un beso en la coronilla y tiró de ella hasta la habitación que compartían.
Esa noche, por primera vez tuvo que fingir no encontrarse bien para que el rubio no la atrapase en sus encantos.
Mientras Draco dormía plácidamente entrelazado en su cuerpo, Hermione no pudo evitar dejar escapar unas lágrimas y rezar a Merlín,Circe y Morgana porque no estuviese embarazada.
