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Hola queridos lectores
lamento la demora pero aqui esta un nuevo capitulo de este fic
espero que les guste :D
saludos desde la CDMX
de su amiga Serenity Moon
No olviden votar por su Fic favorito ;)
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CAPITULO 8 NUEVOS SENTIMIENTOS I
PAPELES INVERTIDOS I
Entre la dulce y calidez mirada de tus ojos,
Puertas del paraíso inundando mi mirada,
Oh dulce tormenta, ¿Por qué no poder dejar de lado el martirio?
¿Por qué me castigo con esta tormenta que yo misma cree?
¿Por qué me martirio de mi misma y cruel decisión?
¿Cómo poder seguir viviendo en este mar de lagrimas que agobian mi corazón?
Respirar, mi dulce y tormentoso aire es quien me puede matar de opresión
¿Por qué alejarlo cuando lo quiero cerca?
¿Por qué alejar el sol cuando la luna te necesita?
¿Por qué alejar el agua de la planta que se muere de sed?
¿Por qué no poder adherirme como el moho se adhiere a los desechos?
Maldita tortura
Maldita condena
Bendita la luz aunque me torture
Maldita paradoja
H.G.P
Helga caminaba con tranquilidad hacia sus clases de ballet, había comenzado hace apenas unas semanas, era una distracción para ella ahora que Arnold no estaba con ella, bueno eso era un decir porque en si el rubio no había sido quien terminara con ella, pero se sentía mejor.
La doctora Bliss podría tener razón, solo estaba con Arnold por la idolatría que había tenido de él desde niña, quizás solo era un apego, quizás solo era su manera de tener un rayo de luz de esperanza entre las sombras que había crecido pero ahora que su vida comenzaba a mejorar, ya no se sentía sola y esa necesidad de que Arnold fuera quien la cobijara y curara su roto corazón, estaba desapareciendo.
Y el ballet había descubierto que realmente le gustaba, además sus padres también le habían pagado clases para los sábados, en un pequeño taller de escritura de Hillwood mientras iban a NY.
Su mente se mantenía en constante ocupación y eso le evitaba pensar en Arnold.
Era una mala obsesión como decía Bliss.
Suspiro mientras sostenía su relicario que aun llevaba, sin embargo no podía dejar de pensar en que lo extrañaba.
Pero era mejor así, levanto la mirada e ingreso al estudio de ballet sin mas.
No se dio cuenta que cierto niño rubio le estaba siguiendo desde que había salido de casa.
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Lila miraba con molestia a Rhonda. -¿Enserio crees que ellos deberían de seguir juntos?
Rhonda sonrió de lado con burla y superioridad -Si lo creo, además sus familias seguramente esperan eso
-¿Por qué dices eso?
-Vamos Lila los Shortman ayudaron a los Pataki's con su nuevo negocio, Miles Shortman es el socio de Bob Pataki, ¿No crees que es lo mas obvio que ellos esperen que sus hijos algún día estén juntos?
-Pues no será posible, Arnold debe estar conmigo.
Rhonda rodo los ojos
-De verdad no entiendo que te vio Arnold
-¿Qué paso en ese viaje? -Pregunto molesta aun
-Helga le dio la muestra mas grande de amor que le puedes dar a una persona sin esperar nada a cambio y cuando todos estábamos molestos con el y lo dejamos, punto final
-¿Pero que?
-Lila no puedo pensar por ti y para ser sincera esta conversación ya me aburrió, adiós
Y con eso Rhonda se fue del lugar dejando a una pelirroja confundida y molesta.
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Arnold miraba desde la otra acera a una distancia considerable a Helga, ella caminaba de regreso del ballet.
Era algo divertido como la rubia quien lo había acosado por años no se hubiera dado cuenta que alguien le seguía a todas partes.
Quizás porque se la pasaba inmersa en sus pensamientos o leyendo como en ese momento.
La veía muy feliz que intento hacer lo que ella hizo por años, amarla en silencio, no quería acabar con esa aura de felicidad que le rodeaba, esa paz que le hacia ver con mas luz y mas bella.
Aunque el amor que estaba comenzando a sentir por ella comenzaba a sobrepasarlo.
Se detuvo cuando observo que Brainy se le acercaba a la rubia, quien se había detenido en la parada de autobús, ya se había dado cuenta de que ese niño se la pasaba siguiéndola a todas partes, eso no le gustaba
Se intento acercarse sin que lo notaran para escuchar.
-Hola Helg….Helga.
-Hola enano -Dijo la rubia sonriéndole -¿De verdad no te cansas de seguirme? Llevamos con esto ¿Cuánto? ¿10 años? Ya no deberías seguirme amigo
-Perdón -Susurro después de tomar aire
-Esta bien Brainy pero es que es raro
-¿No…no…sabes porque?
Arnold vio como se sonrojaba y sintió un golpe en el estomago ¿Y que tal que por darle espacio alguien se robaba el corazón de Helga?
Alguien que no sea tan buen samaritano e idiota como el.
Helga tiene razón es muy buen samaritano por eso siempre se burlo de…
Y entonces tuvo una idea
-No -Dijo la rubia tratando de ignorar el sonrojo del rubio
-Me…me…gus…gus…
En ese momento alguien salpico al rubio con agua, Brainy se cubrió pero no logro evitar mojarse todo y Helga solo se hizo a un lado, miro hacia alrededor pero no vio realmente a nadie, molesta miro a Brainy
-¿Estas bien?
-Eh…si -Dijo triste
-Deberías ir a casa a cambiarte de inmediato, quien sea que hizo esto es un imbécil -Le regalo una sonrisa cálida -Brainy gracias. -Susurro mientras tomaba el autobús que ya había llegado
Arnold sonrió con burla desde un callejón saliendo de detrás de la basura donde se escondió
Nadie se acercaría a ella, al menos el evitaría hasta donde pudiera claro.
-Ahora entiendo porque te gustaba hacer esto Helga. -Susurro mientras caminaba con tranquilidad para la casa de la rubia y asegurarse que había llegado a casa.
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Gerald miraba con preocupación a su amigo, ya llevaba casi un mes persiguiendo a Helga y eso comenzaba a asustarle, además había comenzado a molestarla en la escuela, eso no estaba bien era como ver a tu mejor amigo convertirse en un abusador y no de cualquier persona, sino de una niña.
-Arnold
-¿Qué pasa Gerald?
-Creo que debemos hablar ¿no?
-¿De que?
-¿Cómo de que hermano? Sigues a Pataki a todos lados, no dejas que nadie se acerque a ella y eso es ser muy posesivo hasta para ti.
Arnold rodo los ojos pero sonrió de lado -Es divertido saber como veía las cosas Helga
-Es de locos
-Quizás
-Arnold la molestas ahora tu
-Solo un poco -Dijo sonrojado -Además no llego al nivel de acoso que ella me daba
Gerald movió la cabeza
-Esto no esta nada bien
-Tranquilo Gerald te prometo que no seré tan molesto -Dijo sonriéndole con tranquilidad
-Es que ya lo eres hermano por eso te lo estoy diciendo
-Bien ya no lo hare tanto -Dijo sonriendo
Gerald solo negó con la cabeza aunque en el fondo era bueno que Helga tuviera un poco de su propia medicina, y además le alegraba ver que ambos rubios se amaban a ese grado, hacían buena pareja aunque nunca lo diría en voz alta
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-Lila en verdad no estoy de humor -Comento la rubia por enésima vez
-Me debes el favor Helga ¿Recuerdas? Romeo y Julieta
-¿Y si no que harás? ¿Le dirás a Arnold? Hazlo no me importa -Comento molesta la joven
Ese miedo de ocultar lo que siente ya se ha ido, no tiene porque temer ahora esta con su familia y ellos la van a proteger y lo demás no importaba.
-Helga por favor
La rubia rodo los ojos
-Si Arnold no te esta haciendo caso, no se, ¿No se te ha ocurrido que es porque no quiere?
-Se que le gusto
-Vamos no seas tan ególatra, Lila
-¿Qué?
-No seas presumida niña
-Es la verdad
-No lo puedes asegurar Lila, deja que el decida si te quiere o no y el solo venga a ti, no lo busques como un perro a su dueño
Lila se enojo por eso ultimo por lo que la empujo
-¡Eres una idiota! ¡Por mi pudiste ser Julieta y besar a Arnold, sino nunca hubieras tenido la suerte de que él te besara!
Helga se quedo en schock mientras varios alumnos que estaban ahí escuchaban pues la discusión llego a ser mas que sus platicas grupales.
Harold se comenzó a reír hasta que Rhonda y Patty le fulminaron con la mirada para que se callara.
Arnold también miraba con molestia a Harold pero se acerco a ambas chicas
-Estas equivocada Lila
-¿Qué? ¿De que estoy equivocada Arnold? Ella hizo que todas renunciáramos al papel solo porque te quería besar ¿No te parece cruel?
-No me refería a eso
Lila le miro sin comprender -¿Entonces?
-Te daré una pista -Miro a la rubia quien le miro con nerviosismo
Se acerco a ella con un movimiento rápido para atraparla y evitar que se fuera y planto sus labios con firmeza sobre los de ella.
Helga sintió que el corazón se le salía.
Una vez mas Arnold la besaba
¿esta vez porque?
Quizás era solo para ayudarle, claro aunque se comportara de manera rara seguía siendo el mismo samaritano de siempre.
No supo cuanto tiempo sintió los labios de Arnold en los suyos, se perdió en esa calidez y en la timidez de los movimientos del rubio.
Aunque ahora se sentía con sentimientos fuertes aquel beso, se sintió abrumada sin saber que pensar.
Hasta que reacciono y se separo del rubio quien le sonrió con ternura, no supo que responder o como actuar.
-Esto no se queda así -Susurro Lila mirando a la rubia con ganas de matarla y se fue
Los demás poco a poco se fueron yendo, Arnold miro a Helga de nuevo y se sintió un poco culpable de besarla sin su permiso pero antes de hablar ella hablo
-No te preocupes Arnold, se que lo hiciste para ayudarme pero no lo necesitaba, estaba bien
-¿Qué? No…yo….
-No te apures Arnold enserio, de todas formas gracias pero no requería tu protección, puedo lidiar con tu noviecita sola
-¿Qué acaso las moscas te comieron el cerebro Pataki? -Pregunto molesto
-¿Qué?
-¿Qué no captaste el mensaje? ¿Qué tan retrasada se debe ser?
-Eres un idiota Arnoldo y no vas a conseguir molestarme, mejor me voy
-¿Quién es la ciega ahora Helga? -Pregunto el rubio tomándola del brazo
-Según yo tu
-Deberías dejar de construir ese muro entre nosotros -Comento mirándola con intensidad -Así podrías ver lo que realmente siento por ti y no es por las razones que tu te creas en tu mente.
-Gracias -Susurro sonrojada -Pero…es difícil
-Y lo he entendido pero no me trates como tonto Helga, tampoco soy tan bueno como crees
Helga sonrió con tristeza -Si lo se
-Aquí seguiré y lo sabemos los dos
Helga solo rodo los ojos
-Solo para de seguirme a todos lados -Comento algo cansada pues en la escuela se había percatado de que Arnold estaba en todos lados en donde ella estaba y además siempre que le hallaba, el le molestaba.
-¿No te gusta el cambio de papeles?
Helga suspiro
-Hace que me asustes un poco
-Ahora sabes como me sentía -Comento con sarcasmo
-Ya me voy -Comento algo molesta
-De acuerdo Geraldine
Helga bufo enojada pero ya no le dijo nada
Arnold sonrió divertido
Realmente molestar a la persona que amas era algo liberador para evitar decir todo lo que el corazón quería gritar.
Ahora comprendía un poco mas a Helga aunque pareciera algo de locos.