Era viernes de transformaciones, por lo cual Liam estaba emocionado. Emma también lo estaba, pero por qué era viernes, y el fin de semana por había llegado.

Las lechuzas entraban al gran comedor, traían cartas a diferentes alumnos. Ese día, Liam si esperaba una carta, y afortunadamente llegó, pero acompañada de otro par. Entonces, una lechuza color arena aterrizó enfrente de Liam, era la confiable lechuza de la familia, Sara. La lechuza traía un paquete, y cuatro cartas, una para Tom que Liam guardo para dársela después.

—toma un poco — dijo Liam dándole tocino a la lechuza

—de quien son? — pregunto Emma con su característico tono celoso

—de mamá y de Raine

—ah… genial — Emma sonrió — ojalá esa Annelie no te vuelva a escribir

—ojalá — Liam abrió la carta de su madre

"¡Hola, Liam! ¿Cómo va tu primera semana de séptimo? ¿Bien? ¿Mal? Espero que bien, mi primera semana de séptimo fue muy movida, pero no te preocupes, tu hermosa madre pudo con eso y más. Tú también puedes, pequeño, ¡cualquier duda puedes preguntarme! Y también a tu hermana, pregúntanos lo que quieras.

Ponme al corriente de cómo vas con Emma, ¿Están felices y contentos? Esta mañana recordé una muy buena historia, en la que tú padre me llevo a una cita muy romántica, ¡me acuerdo y me dan ganas de hacerles otro hermano! Dime si quieres saber el secreto, con eso seguro la enamoras un poco más.

Mucha suerte Liam!

Atte. Tu hermosa, preciosa y UNICA madre

Pd. Annelie sigue en casa, ¿Podría quedarse en tu habitación un tiempo?"

Liam se imaginó por un instante a su joven madre, saliendo con su joven padre. Era una bonita imagen mental, hasta que recordó la parte de la concepción de un nuevo hermano, entonces su desayuno tuvo ganas de salir por dónde entró.

Adjunta a esa carta, venía el paquete, Liam lo tomo y leyó una pequeña nota en la cubierta.

"Anne te trajo esto el otro día, ¿Desde cuándo se dan estos detalles?"

El chico quitó la nota de su madre y empezó a destapar el paquete. Era un videojuego, Pursona 4 Dorado, para la consola portátil que Emma le había regalado. Observo la reseña del juego, aparentemente tenía historia, y tenía una estética anime. Dedujo que Anne lo había comprado por eso mismo, o porque Liam tenía una copia de Pursona 5R en casa, y Anne la había jugado. Como fuera, Liam saco aquella consola de su mochila, y la consola ya estaba previamente protegida del efecto mágico de Hogwarts, gracias a, irónicamente, otro encantamiento. Abrió el estuche y se encontró con otra nota, está vez de la alegre Anne.

"¡Encontré este juego el otro día, lo compré para ti! Recordé que habías jugado la quinta parte, está parte es muy buena, ¡juguemos en cuanto nos veamos!

Con Cariño: Annelie, la de la playa, no la rubia"

Al lado de aquella firma peculiar, estaba un pequeño dibujo del Pocket digital monster favorito de Liam.

Cómo fuera, sonrió al leer la nota y quitó el cartucho de la caja, abrió la ranura de la consola y lo inserto. Tenía tiempo así que podía jugar tranquilamente, al menos unos veinte minutos.

—abre bien — dijo Emma alzando un pan con huevo frito

—AHHHH! — Liam obedeció, y Emma le dio de comer

—jaja, que divertido! — río Emma — ahora yo, ahora yo!

—bien — Liam tomo un tocino, lo acercó a Emma y la chica lo devoró de un mordisco — Emma! — río

—así sabe mejor — sonrió Emma — oye, que tanto juegas, eh mi amor?

—me lo regaló Anne — contó Liam — me siento como en navidad

—ah, y desde cuándo te regala cosas? — suspiro Emma

—vamos, yo le regale la guitarra, supongo que ahora estamos a mano — Liam sonrió — no te pongas celosa

—bueno, es que a veces es muy considerada contigo — dijo Emma

—bueno, es que soy su único amigo — Liam continúo jugando — bueno, también está el chico nuevo aquel, nosotros y Raine

—uy, oye, Raine te ha contado cómo van? — dijo Emma con una sonrisa — tal vez venga en esta carta — dijo alzando la segunda carta, de Raine

—puedes leerla — le dijo Liam

—de verdad?! — Emma lo miro sorprendida

—claro, te lo contaría de todas maneras — Liam río un poco

—genial — Emma abrió la carta

"Liam, Liam, Liam! ¿Cómo te va en tu primera semana? Mi primera semana fue muy dura, ¿y la tuya?

Tengo un montón de cosas que contarte, así que te llamo está noche, ¡procura estar disponible a las nueve! De verdad estoy muy emocionada, creo que se viene una época muy buena, estoy ansiosa de que tú también te puedas unir aquí afuera.

Por lo mientras, disfruta tu fin de semana, tal vez vaya a verlos un rato.

Con emoción: Raine

Pd. Por qué Anne te da ese tipo de regalo, ¿eh?"

—no sé por qué es tan extraño! — suspiro Liam cuando Emma terminó de leer

—es mucha amabilidad — le dijo Emma — además, no se me olvida que le pediste que fuera tu novia!

—fue solo para que la dejaran ir con nosotros! — dijo Liam — además rompimos al instante

—sí, claro — gruño Emma

—fue una buena relación — Liam río un poco

—oye! — Emma le dio un pequeño golpe en el hombro y también río un poco

La campana de inicio de clases sonó después de un rato, y los alumnos se pusieron en movimiento. Era un día algo frío, y tenía sentido, el otoño se acercaba poco a poco, aún que las calabazas todavía no estaban listas.

La profesora Amelia había preparado una clase especial, los alumnos tenían que adivinar cuál de los mapaches era en realidad un bote de basura. Si acertaban, el premio sería una buena cantidad de puntos, y una bonita botella de hidromiel con especies. Pero si fallaban, tenían que hacer un ensayo sobre algún tema de transformaciones, asignado por la profesora.

—a ver, Liam, es tu turno — dijo la profesora poniendo al chico enfrente de la fila de mapaches

—vamos Liam! — lo apoyo un chico de Ravenclaw — tú puedes adivinar!

—sí! ¡Eres el único que no tiene ensayo! — sollozo Erika

—silencio! — ordenó la profesora — a ver, soy una mujer amable, así que les daré una oportunidad, si Liam adivina cuál es el correcto, les cancelo los ensayos, pero si no lo hace, les pongo doble!

—NOOOOOOOOO! — gritaron los alumnos

—vamos, chicos, no confían en su compañero? — la profesora Amelia río un poco

—Liam es bueno en estas cosas — dijo Odette — seguro puede!

—yo no sé — dijo un Ravenclaw — si falla, tendremos doble ensayo, solo por su culpa!

—pues tampoco lo hiciste bien, Mark — gruño Jack

—si me dieran otra oportunidad, adivinaría — dijo el mismo Ravenclaw

—a ver, ¿cuál es? — le pregunto una Slytherin

—obviamente es ese de ahí — el chico apunto al último mapache de la derecha — estoy seguro

—también estuviste seguro con el del centro — lo regaño Emma

—era muy convincente!

Liam suspiro y vio a los mapaches con atención, todos estaban olfateando la habitación, aún que no se movían, pues la profesora les había hecho un hechizo para que se quedarán en su lugar. Pensó en transformarse en hurón y hablar con los mapaches, pero sería trampa, así que recordó esos seis años de transformaciones de cosas a animales. Pero entonces vio a uno, que estaba más quieto de lo normal. Vio un momento a la profesora, que veía a sus alumnos discutir, entonces la mujer se rasco un poco la nariz, y en ese momento Liam pudo ver cómo el mismo mapache se rascaba la nariz. Discretamente le lanzo un hechizo de bostezó a la profesora, que hizo efecto, y el mapache hizo lo mismo que la profesora.

—es ese! — dijo Liam, apuntando al cuarto mapache a la izquierda

—NOOOOOOOOO! — dijeron los alumnos, que empezaron a gritarle

—ERA EL DEL CENTRO!

—EL DE LA DERECHA!

—EL DE LA MANCHA EN EL LOMO!

—SILENCIO! — grito la profesora — veamos si Liam los salvo, ejem, Reparifarge

En ese momento, el mapache giro y regreso a su forma de bote de basura. La profesora hizo el mismo hechizo sobre los otros mapaches, pero ellos no hicieron nada.

—bien, acertó — dijo la profesora — y ustedes que desconfiaban

—cómo lo supiste?! — pregunto una Ravenclaw, asombrada

—hay que poner atención — explico Liam — la profesora también hizo un hechizo para que el mapache siguiera sus órdenes, solo se puede hacer con los animales que transformas! Y bueno, hay algunas acciones involuntarias que se pasan al animal, lo supe cuando la profesora se rasco la nariz y bostezó — sus compañeros hicieron una expresión de sorpresa

—bueno… — la profesora se meneo un poco

—va a cancelar los ensayos, ¿verdad? — le pregunto Liam

—hmmmm

—lo prometió! — dijo un chico de Ravenclaw

—que lo cumpla! — dijo Emma

—SIIIIIIII — la siguieron todos

—ya, ya — suspiro la profesora — SILENCIO! Ah, está bien, se cancelan sus ensayos

—GRACIAS LIAM! — dijeron los alumnos

—de… nada? — Liam miro confundido a sus compañeros. En ese momento, la campana de fin de clases sonó

—bien, pueden irse, jóvenes — dijo la profesora Amelia, y los alumnos no tardaron en escapar del lugar, menos Liam y Emma

—buena clase — dijo Liam — menos la parte en la que si me equivocaba me ganaba odio eterno

—era por un bien mayor, hijo — la dijo la profesora con un suspiro — ¿por qué no se van?

—bueno, es que le quería decir algo — Liam se acomodó la túnica — estaba pensando en ir a hogsmeade hoy, ya sabe, y estamos con Julie desde hoy

—uy! Me agrada la idea — la profesora Amelia sonrió — salgan en escoba

—en escoba? — dijo Liam — pero no tenemos hechizos protectores muy difíciles de quitar muy muy difíciles?

—no, eso es solo contra apariciones — explico la profesora — además ya son de séptimo, es una pequeña libertad que tienen

—genial — dijo Emma — vamos Liam, quiero pasear, vamos!

—no vamos a pasear — suspiro Liam — vamos a cuidar a Julie

—ah, por cierto, tengan esto — la profesora meneo la varita y una maleta apareció enfrente de ellos

—qué es? — Liam alzó la maleta, tenía un buen peso

—todo lo que mi Julie necesita — sonrió la profesora — está su cobija, sus libros, TODO!

—y por qué no lo tienen en casa? — suspiró Emma

—es que Julie es muy inteligente, y muy curiosa! — dijo la profesora — un elfo la cuida por el día, pero ella siempre se escapa del elfo y empieza a buscar por toda la casa! Siempre encontraba los juguetes escondidos, y cuando llegamos a casa siempre los encontramos regados por toda la casa

—entiendo — Liam asintió — yo era muy tranquilo de niño

—yo siempre jugaba! — dijo Emma — bueno, siempre deje mis cosas regadas por todos lados, pero es mi estilo! No soporto una habitación muy ordenada, puaj

—yo la ordeno mucho — dijo Liam — pero no es tan prioritario, puedo tenerla desordenada

—tú te adaptas a todo — Emma abrazo a Liam con el brazo — por eso te amo, te amooooooo AHHHHHHHH

—jaja, yo también — sonrió Liam — bueno, creo que nos iremos ahora

—adelante mis niños — la profesora también sonrió — tiene la casa sola por este fin de semana, muchas gracias, de verdad!

—no se preocupe — dijo Liam sacando la varita, un meneó y su mochila acudió a sus manos — nos vemos!

—cuídense! — dijo la profesora mientras los jóvenes se iban

Liam y Emma caminaron por la escuela muy contentos, mientras los demás se dirigían a sus otras clases, ellos se iban del colegio. Emma salió de la sala común de nuevo, ya tenía su escoba Nimbus 2001, y Liam ya la esperaba.

Parecía irreal lo vacío que estaban los jardines, los únicos que estaban ahí eran un par de alumnos de sexto y algunos de séptimo esparcidos por el lugar. Emma subió a su escoba, y luego Liam se subió detrás de Emma. Las dos empezaron a subir, poco a poco hasta que Emma despegó con suavidad, gracias a la escoba. Subieron y avanzaron hasta que llegaron a los muros del colegio, Liam abrazo con fuerza a Emma, y entonces sobrevolaron sin problemas el muro.

Llegaron en menos de diez minutos a Hogsmeade, magos y brujas salían y entraban de las tiendas, pero ellos no iban a las tiendas. Fueron a la zona residencial, que tenía una clara diferencia con los edificios comerciales.

—estamos en casa! — anuncio Liam entrando a la casa de la profesora

—Liam? — dijo la voz de una niña desde la sala, aún que el chico no veía nada

—Julie! — dijo Emma, cerrando la puerta detrás de ella — en dónde estás?

—Emma! — alguien salió de detrás de un sillón, era Julie

—vaya! — Liam miro sorprendido a la niña, había crecido mucho desde que la había visto en agosto

—LIAM! — Julie corrió hacia Liam, salto y abrazo al chico — te extrañe, te extrañe!

—jaja, yo también Julie — Liam se agachó y abrazo a Julie — venimos a cuidarte unos días

—siiiiii! — celebro la niña

—que estabas haciendo? — pregunto Emma dejando su escoba en la pared

—jugando con Winky — respondió Julie — Winky!

—ah, joven Forker — una elfina bajo las escaleras — estaba aquí, que escurridiza

—Hola Winky! — sonrió Liam

—oh, señor Baker — Winky se acercó — que hace aquí?

—vinimos a cuidar a Julie, puedes ir a descansar — le dijo Liam

—muchas gracias — Winky sonrió, chasqueo los dedos y se desapareció

—bueno, es hora — Emma sonrió — Julie, ahora somos tus padres

—COMÓ?! — Julie los miro sorprendida — son mamá y papá… mamá y papá de mí?!

—sí — río Emma

—OH! Pero Liam es hermano — dijo Julie

—déjalo — suspiro Liam — así es, soy tu hermano, vamos a estar aquí unos días, ¿sí?

—SIIII! — Julie sonrió — estoy contenta, vamos a jugar mucho!

—si — dijo Liam — pero para jugar, primero tenemos que aprender un poco

—aprender? — Julie miro a Liam — yo quiero jugar!

—jugaremos, después de un poco de estudio — Liam sacó un libro de su mochila — mira, aprenderemos sobre los animales

—oh! — Julie se sorprendió al ver los dibujos de la portada — enséñame, enséñame!

—jaja, que entusiasta — Liam río un poco — me ayudas? — le pregunto a Emma

—por supuesto — la chica asintió, y los tres fueron a la mesa del comedor

Liam empezó con la clase, y Julie escucho atentamente, muy sorprendida. Estuvieron ahí media hora, hasta que Liam cerro el pequeño libro, aún que Julie quería seguir hablando sobre aquello. Se fue a jugar un rato en la sala, Liam y Emma la acompañaron.

—hmmm… es temprano — dijo Emma viendo por la ventana — y si salimos a hogsmeade un rato?

—quieres ir con Adrel? — le propuso Liam — pero vamos a llevar a Julie, no puede estar sola!

—claro, llevémosla — Emma sonrió — espero que Adrel no se moleste

—ya hemos ido con ella antes — dijo Liam — no creo que haya problema

—genial, vamos! — Emma se puso de pie de un salto — Julie, vamos a salir!

—salir? — Julie sonrió — siii! ¿A dónde vamos?

—al pueblo — contesto Liam

—que divertido! — dijo Julie — vamos, vamos!

—ven — Liam se puso de pie, y tomo su mochila — tienes crayones?

—sí — contesto Julie

—llévalos, por si te aburres — le dijo Liam con una sonrisa

Julie corrió a la estantería, tomo un estuche para lápices, de color azul y con una bonita estampa de flor. Se la dio a Liam, muy contenta, y el chico la guardo en su mochila.

—ven, Julie, dame la mano — dijo Liam, una vez estuvieron afuera

—sí — Julie fue con Liam, alzo el brazo y le dio la mano — Emma

—eh? — la chica la miro

—tú también! — Julie alzo el brazo izquierdo

—oh, claro! — Emma sonrió y tomo la otra manita de Julie — que bonito día, no crees?

—es bonito! — dijo Julie — estoy muy feliz, ustedes conmigo!

—pronto estaremos más tiempo — le dijo Emma

—de verdad?! — Julie miro sorprendida a Emma

—sí, solo espera este año — Emma sonrió — ya tendremos tiempo libre

—es… verdad — dijo Liam — tal vez nos mudemos

—que divertido! — Julie salto contenta

Los tres caminaron tranquilamente hacia el pueblo, un camino relajante, en el que hablaron con Julie sobre sus pensamientos de niña pequeña. Llegaron a una cafetería, La bruja cafetera, que Liam llevaba visitando desde tercer año. Estaba medianamente llena, principalmente de magos y brujas, pues los alumnos de Hogwarts todavía no podían salir a hogsmeade.

Detrás de la barra se encontraba una bruja de cabello azabache y ondulado, usaba un corte Bob corto, y estaba cargando un bebé.

—buenos días — dijo Liam sentándose en un asiento de la barra

—buenos… oh! Liam! — dijo la mujer — vaya, que hacen por aquí?

—vinimos a cuidar a Julie — contesto Emma

—ya veo — la mujer vio a la pequeña Julie, que se sentaba al lado de Liam, con su ayuda

—como has estado, Ade? — pregunto Liam

—muy bien! — contesto Adelaine Cook — aún que han sido unos meses muy movidos… mira, es mi hija!

—cómo se llama? — pregunto Emma, viendo al bebé, que también les regresaba la mirada, curiosa

—je, adivinen — Adelaine río un poco

—Annelie? — dijo Liam con una sonrisa

—no!

—Adelaine Junior — dijo Emma

—tampoco

—Dalia? — dijo Liam

—no jaja — Adelaine sonrió — es la pequeña Beatriz

—Beatriz? — Liam se sorprendió — de verdad?

—sí, estuve un poco en desacuerdo, pero… ah, tampoco está mal — Adelaine miro con cariño a su hija — ya saben, la idea fue de Adrel, obviamente

—es un buen nombre — dijo Liam

—hola! — dijo Julie saludando a la bebé, que también la miro curiosa

—Julie, tú también eras así de pequeña — le dijo Liam

—de verdad?! — dijo Julie sorprendida

—sí, y yo te cargaba — contó Liam — eras del mismo tamaño, yo te cuidaba, te daba de comer, y te daba mucho cariño!

—lo sigues haciendo — dijo Emma

—claro, como no quererla! — Liam le revolvió el cabello a Julie

—jiji, quiero mucho! — sonrió Julie

—que lindos — Adelaine sonrió — que quieren ordenar? — dijo tomando una pluma y lamiendo un poco la punta

—dos sándwiches de carne — pidió Emma, y la pluma empezó a anotar sola en una libreta — con dos refrescos de naranja

—bien — Adelaine saco la varita, la sacudió y la hoja se separó de la libreta, se dobló y fue a la cocina — en un momento vienen, mientras, cuénteme, como va su séptimo año?

—tranquilo — dijo Liam sacando el estuche de crayones de su mochila — al menos esta semana, no hemos tenido tantas tareas!

—que envidia — suspiro Adelaine — mi séptimo año fue ciertamente agotador desde la primera semana

—lo siento — suspiro Liam

—no te disculpes — Adelaine río un poco

—dos sándwiches de carné! — dijo un hombre saliendo rápidamente de la cocina, con dos platos en la mano, y dos vasos flotando a los lados — ajá! ¡Supe que eran ustedes, que gustó!

—buenos días Adrel — saludo Liam con una risita

—buenos días — Adrel Cook se acercó, puso los platos enfrente de los chicos y los vasos bajaron, posándose en el mismo lugar — supongo que salieron a cuidar a la pequeña Forker, mira, Liam, yo también tengo una!

—me alegro por ustedes — Liam sonrió — me enteré que le pusiste Beatriz

—ah, sí, es importante! — dijo Adrel — además tu madre estuvo de acuerdo, se puso muy feliz

—tanto que no me dijo — suspiro Liam — en fin

—bueno, jóvenes, disfruten — Adrel sonrió

—espera! — le dijo Liam — podrías traerle un poco de pay a Julie? Solo un poco, no puede comer tanto

—claro, ahora regreso — Adrel se fue directo a la cocina

—bien, mientras tanto — Liam tomo una papa a la francesa y se la extendió a Julie, que ya empezaba a dibujar en un pergamino que Liam había sacado — come

—para mí? — Julie miro la papa — que es?

—papas fritas a la francesa — contesto Liam — son muy ricas!

—oh! — Julie mordió un poco la papa — ah… fuerte…

—sí, son saladas, toma un poco — Liam le extendió el refresco — solo un poco

—dulce — dijo Julie después de tomar el refresco — quiero más papa!

—cómo se dice? — Liam río un poco

—por favor — suspiro Julie

—muy bien — Liam le extendió otra papa — come despacio

—chi — Julie asintió con la boca llena

—aquí está! — Adrel salió de la cocina con un pequeño plato, puso el pay enfrente de Julie, y la niña lo miro sorprendida

—es para ti — le dijo Liam — come

—ah! — Julie tomo la pequeña cuchara de plástico — gracias!

—que educada — Adrel sonrió

Comieron animadamente, siguiendo su conversación. Hablaron tan contentos, que no se fijaron que habían terminado su comida. Liam lo descubrió cuando le dio un mordisco al aire. Pagaron la cantidad adecuada, aunque Adrel les hizo un descuento.

—ah, que comida — dijo Emma al salir de la cafetería

—mira, Liam! — Julie levantó el pergamino que Liam le había dado, y se los mostró a los jóvenes

—a ver… — Liam tomo el pergamino, vio un dibujo muy bonito, era una Julie, con Liam y Emma, en medio de un campo verde y con un sol brillante — Awww, Julie, que bonito!

—somos nosotros! — dijo Julie con una sonrisa

—es toda una artista — Emma sonrió — recuerdo que yo también dibujaba de niña

—y donde están los dibujos? — dijo Liam tomando a Julie de la mano

—jejeje, por ahí… — Emma se sonrojo un poco y tomo la otra mano de Julie

—claro — Liam rio — vamos a casa, y juguemos un rato, no Julie?

—SIIIII! ¡A jugar! — Julie dio saltitos de felicidad

Así lo hicieron, apenas llegaron a casa de la profesora, Liam saco los juguetes de la maleta de Julie. Dieron vueltas por toda la casa, dejando un poco desordenado, pero no importaba mucho, ya lo arreglarían con magia. Julie se agotó de tanto jugar, así que tomo una siesta en el regazo de Liam.

Paso el día, y la tarde llegó, Liam cocino para Emma, porque Julie todavía no despertaba. La niña despertó en la noche, solo para volver a tener sueño. Liam llevo a la niña a su habitación, la recostó en su pequeña cama y le leyó un cuento para dormir.

—ah, qué día — Emma se tumbó en la cama del cuarto de visitas — estoy agotada

—yo también — Liam se recostó al lado de Emma — fue un buen día, no crees?

—fue excelente — Emma miro a Liam — no me molestaría que se repitiera

—no digas eso — Liam río un poco — una vez vi una película en donde el protagonista decía eso, y el día se repetía por siempre!

—jajaja, de verdad? — Emma también río — bueno, solo digo que me sentí bien… fue como… si fuéramos una familia!

—lo somos — dijo Liam

—sí, pero… ya sabes — Emma se sonrojo un poco — como papá y mamá y eso

—claro jaja — Liam sonrió — como papá y mamá… y Julie como la hija… como ha crecido

—así es — suspiro Emma — ella crece… y nosotros también…

—te imaginas a Julie yendo a Hogwarts? — le dijo Liam

—no! — Emma se estremeció

—jaja, lo sé, es como dejarla en medio de alfileres — suspiro Liam — pero un día tendrá esa edad

—no sé, Liam — Emma abrazo a Liam — me da miedo, estoy muy insegura!

—es lo que me dijiste el otro día — Liam correspondió el abrazo — mira, creo que lo estás pensando mucho, el futuro está delante, pero nosotros estamos aquí, y si no estamos aquí, no hay futuro

—a que te refieres?

—a que vivas más el presente! — dijo Liam con una sonrisa — esto está pasando ahora, nosotros estamos pasando, no te preocupes por lo que pasará, y disfruta lo que está pasando ahora… aún que claro, está bien tener planes, pero eso no tiene que ser todo el tiempo, entiendes?

—sí, entiendo — Emma suspiro — pero… no lo sé, Liam

—tranquila — dijo Liam suavemente — mientras estemos juntos, estaremos bien

—juntos — Emma sonrió

—así es — Liam abrazo más a Emma

—demonios, te amo! — Emma le dio un beso a Liam — me tienes toda embobada, no es justo!

—tú también me gustas mucho — le dijo Liam — y me siento muy cómodo, muy… cómodo…

—jeje, buenas noches, cariño — Emma noto como Liam cerraba los ojos

—buenas noches…