Hay una cosa de mí que no sé si he contado: soy incapaz de desechar algo escrito. Últimamente lo he hecho y estoy orgullosa de ello, tirar a la papelera capítulos que no funcionaban. Pero durante tiempo he tenido una carpeta en el drive que se llamaba "Para reciclar". Y ahí estaban los tres o cuatro párrafos que han dado pie a esta historia. Originalmente, este Draco iba en el Fictober 23, que tiene una historia omegaverse en los últimos dos días, pero le vi demasiada mala actitud a la que dar la vuelta en un one shot. Por eso pueden sonar cosas a lo que esta ahí escrito, al menos a mí me suenan.
Tengo sentimientos ambiguos por el omegaverse. Por un lado, me encanta el rollo de parejas destinadas y que no tengan dudas respecto a sus sentimientos porque la biología lo deja claro. Por otro, la feminista que hay en mí se horroriza con los roles que se adjudica a alfa y omega; y por supuesto he renegado muchas veces con la justificación de la violencia sexual por la biología de los personajes. Para mí, nunca nunca jamás se puede romanizar una violación. En este caso, los límites reconozco que están un poco difuminados y he optado por plantearlo muy desde el punto de vista animal.
Con todo esto, he escrito muy poco omegaverse y siempre que lo he hecho me han salido omegas fuertes, revelados contra los roles tradicionales, y esta historia no va a ser menos. En este contexto, como iremos viendo, los sangrepura han marcado profundamente los roles de alfas y omegas y el resto de la población mágica lidia con ello como puede, peor cuanto más se hayan mantenido en contacto con el mundo muggle seguramente. Por eso, un omega que tiene hijos de padre desconocido, los cría sin pareja y, por ende, no está marcado, podría ser un paria, o un rebelde que comience una nueva corriente ideológica, como nuestro Harry en este caso.
El prompt de esta historia es que sea el pov del villano. He hecho un poquito de trampa en la intro, mostrando cosas que necesitamos saber, pero después ya me he recreado en escribir el Draco más antipático de tooooodo mi repertorio, seguramente el más canónico. ¿El reto? Pues llevar a este tío a un final feliz, porque la verdad es que pone muy poco de su parte. Estoy acostumbrada a que, como dice mi amiga Shimi, mis Draco estén trabajaditos emocionalmente, así que este cabronazo egoísta me ha dado muchos quebraderos de cabeza.
Mientras escribía, se me ocurrían escenas de los demás personajes que no podía traer a la historia principal porque no había manera de contarlas desde el punto de vista del villano, por eso hay luego una serie de extras cortos con títulos relacionados con la dinámica omegaverse. Recomiendo leer hasta el final
Los personajes de esta historia no me pertenecen, yo solo les doy otra vida diferente a la que planteó JK. Y por supuesto no me lucro escribiendo esto.
