.
:::::
Destiempos
:::::
Se separó de él pidiendo perdón y abandonó su despacho.
Kakashi se quedó unos minutos ahí, de pie, sin saber muy bien qué hacer. Pero, sobre todo, sin saber porqué lo había hecho.
Después de tanto tiempo era imposible seguir resistiéndose. Sí, le había pillado en un momento bajo, había tenido un día duro, una de las misiones había salido realmente mal y habían sufrido unas cuantas bajas. Así que cuando ella entró y se acercó a él para darle ánimos, no pudo frenar ese sentimiento y la besó.
Que ella se separara y huyera de él era una posibilidad clara. Bueno, ahora era una realidad. Pero no pudo resistirse.
Por fin reaccionó y salió del despachó en busca de un baño donde echarse agua a la cara e intentar no pensar mucho en lo sucedido.
Al otro lado del pasillo, en la esquina contraria, Sakura se encontraba de pie, sin moverse, sin saber qué hacer. "Es un error" se repitió antes de volver sobre sus pasos y llamar al despacho, ahora vacío, del Hokage.
Por detrás suya pasó una de las secretarias "No está, acaba de salir".
"Gracias" respondió antes de irse dando de nuevo las gracias en su cabeza, pero esta vez porque él no estuviera allí.
-o-
El timbre suena y Sarada, de apenas cuatro años, corre abrir la puerta. Frente a ella se encuentra Kakashi que saluda revolviéndola el cabello.
-¿Y tu capa de Hokage?
-No es una capa -responde sonriendo bajo la máscara-. Y creo que me lo dejé en el despacho.
-¿Y el sombrero? -pregunta todavía más suspicaz.
-También me lo dejé en el despacho. Vengo de incognito.
-Pues te he reconocido.
-Eres buena… ¿Está tu padre? -pregunta con algo de nerviosismo.
-Sarada, ¿quién es? –se oye preguntar a Sakura desde el salón.
-Kakashi-sama –responde la chica sin apartarse de la puerta.
Sakura aparece rápidamente.
-¿Pasa algo?
-¿Está Sasuke?
-¿Sasuke? -pregunta sorprendida.
-Necesito hablar con él –comenta visiblemente incomodo-. Unos ANBUs han encontrado una de las piedras sobre las que investiga. Si pudiera hablar con ellos…
-Claro, dame un segundo -pide dirigiéndose al salón- debe estar en su despacho, le avisaré. Entra.
Minutos después Sasuke baja por las escaleras principales para encontrarse a Kakashi en el recibidor practicando con Sarada un extraño juego de manos.
-¿Todo bien? –pregunta serio.
-Sí, sólo necesito tu ayuda.
-Claro, entra, sentémonos -ofrece señalando el sofá- ¿Quieres algo de beber?
-No será necesario. ¿Seguimos luego? -pregunta Kakashi dirigiéndose a Sarada antes de seguir a Sasuke hasta el sofá.
-Sarada, vete a tu habitación -pide el Uchiha dejándose caer en una de las butacas frente al sofá- ¿Qué ha sucedido?
Kakashi mira a su alrededor, es una habitación llena de cajas apiladas y desordenadas.
-¿Cuánto tiempo vas a estar por aquí? – pregunta quedándose en pie frente a Sasuke.
-¿Cómo dices?
-Volviste hace unas semanas, ¿no?
-Sí.
-Pero todas tus cosas siguen en cajas, ¿piensas irte de nuevo?
-No lo sé.
-¿Y Sakura?
-¿Qué pasa con Sakura?
-¿Qué opina ella de que te vayas de nuevo?
-¿Has venido a hablarme de mi matrimonio? –pregunta contrariado.
-No. Perdona. -Kakashi le mira por unos segundos en silencio-. Un grupo ANBU vino ayer, encontraron una de esas piedras sobre las que investigas. Estarán aquí un par de días más, si quieres hablar con ellos…
-Hablaré con ellos.
Kakashi mira fijamente a Sasuke. Esa actitud seria es habitual en él, sin embargo, había algo más. Sentía que estaba interrumpiendo algo importante.
-Está bien. Eso es todo. Puedes hablar con Shikamaru si quieres contactar con ellos.
Sasuke sólo afirma con la cabeza en silencio.
Kakashi mira a su alrededor todavía pensando en las cajas.
-¡Adiós chicas! –se despide Kakashi cruzando el recibidor hacia la salida.
-Espera –pide Sarada desde las escaleras.
Éste se detiene en la puerta, Sarada se acerca hasta él con los brazos a la espalda. De pronto los estira frente a él con un antifaz hecho de cartulina.
-Para que no te reconozcan cuando vayas de incognito -dice ofreciéndoselo a Kakashi.
-Vaya. Gracias. No se me había ocurrido -comenta cogiéndolo y levantándolo a la altura de los ojos dejándola ver cómo le queda-. Me lo pondré luego.
Sakura aparece por detrás, sonríe y le indica a Sarada con un suave empujón que vuelva al salón.
-Kakashi, yo-
-Lo siento, no debí… -susurra mirando por encima del hombro de ella- ya sabes.
-No. Yo lo siento. ¿Estarás en tu despacho después?
-Sí. Claro -responde preocupado.
-Entonces hablamos luego, ¿de acuerdo? –pregunta mirando hacía las escaleras por las que Sasuke ya había desaparecido.
-¿Está todo bien?
-Sí. Te veo luego, Sarada necesita mi ayuda con unas cosas.
-¿Hay algo por lo que deba preocuparme?
-No seas paranoico. Te veo en tu despacho –insiste empujándole fuera.
Por un momento la mira fijamente a los ojos.
-Por favor, no me hagas venir a ver qué pasa.
-No te preocupes.
Kakashi levanta una mano inconscientemente hasta la altura de la cara de Sakura, pero justo antes de tocarla la retira.
-Estaré en mi despacho.
-Hasta luego.
-o-
-Kakashi, no quiero molestarle, pero tenemos que ir.
-Esta anocheciendo. Iremos mañana -responde mirando por la ventana.
-Siento insistir, pero creo que deberíamos ir hoy.
-¿Cuál será la diferencia?
-Le necesitan.
-Pueden esperar a mañana.
Shikamaru mira atentamente a Kakashi, que no para de moverse por el despacho y mirapor la ventana con frecuencia.
-A menos que lo que le tenga tan nervioso no pueda esperar hasta mañana. En ese caso puedo ir sólo. Seguro que podré arreglarlo.
Kakashi se detiene, cierra los ojos respirando con profundidad y agita la cabeza en negación.
-Está bien, llevas razón. Vayamos.
-o-
-Lo siento, el Hokage no está.
-¿No está?
-No. Salió hace como una hora con Nara.
-¿Sabe si va a volver?
-No lo sé. Yo me iba ya.
-Claro. Perdone. No quería retrasarla.
-No se disculpe. Podrá verle mañana.
-Sí. Claro. Gracias –responde Sakura contrariada.
Se aleja por el pasillo sin saber muy bien a dónde dirigirse.
En ese momento, en la planta de arriba, Kakashi entra a su despacho por una ventana. Deja algunas cosas sobre la mesa, enciende la luz, y sale del despacho buscando a su secretaria. Esperaba no llegar tarde. Sólo había estado fuera una hora.
Pero es tarde. Sakura había salido de la Torre Hokage por la puerta de la planta inferior.
-o-
-¿Entonces te vas? –pregunta Sakura cruzándose de brazos apoyada contra la puerta del despacho.
-Ya lo habíamos hablado.
-Sí. Lo habíamos hablado, pero ¿lo has hablado con Sarada?
-No.
-Así que pensabas irte de nuevo sin hablar con ella.
-Serán sólo un par de meses. Quizás menos.
-No hablo de eso, aunque también es ridículo que pienses que si te vas sólo un par de meses no es necesario despedirte de tu hija.
-Lo sé.
-¿Sabes que deberías despedirte de ella o que deberíamos hablar con ella sobre que a tu regreso no volverás a esta casa?
Sasuke no cambia su expresión.
-Lo siento. Pero debo irme.
-A mí me da igual. Díselo a tu hija – exclama abandonando la habitación.
-¿A dónde vas? – pregunta siguiéndola fuera de la habitación.
-Dormiré fuera.
-¿Qué-
-Ni te atrevas a preguntarme dónde -responde antes de ser preguntada-. Sarada está en su habitación, haz de padre por una vez y habla con ella antes de irte mañana.
Coge las llaves y se va sin decir nada más. Baja las escaleras hasta la calle y se pone a andar con decisión hacia el apartamento de Kakashi.
-o-
Sasuke abre la puerta y encuentra a Kakashi con su vestimenta de Hokage.
-¿Qué sucede ahora? -pregunta cortante y de mal humor.
-Perdona, ¿vengo en mal momento?
-No es eso. Lo siento. ¿Qué necesitas?
-Buscaba a Sakura.
-No está.
-¿Sabes cuándo volverá?, ¿o dónde puedo encontrarla?
-Volverá mañana, supongo. Pasará la noche en casa de alguna amiga.
Kakashi le mira preocupado.
-¿Está todo bien?
-¿A qué te refieres?
-Con Sakura.
-Kakashi, por mucho que aprecie tu preocupación, no es asunto tuyo.
El hokage hace un mohín de desagrado.
-¿Le dirás que vine? –pide girándose.
-Posiblemente la veas tú antes que yo.
-¿Qué quieres decir? -vuelve a girarse para verle.
-Me marcho mañana.
No dice nada. Niega con la cabeza en desaprobación y se marcha. De un salto baja a la calle.
-¿Dónde te has metido? -se pregunta metiendo las manos en los bolsillos y poniendo rumbo a la Torre Hokage.
-o-
Sakura llega al apartamento de Kakashi. Imaginaba que, ya que no se encontraba en la Torre Hokage, habría ido a casa a dormir.
Llama a la puerta un par de veces, pero no obtiene respuesta. Intenta mirar el interior de la casa, pero todas las luces están apagadas y no consigue ver nada.
-Supongo que te veré mañana -susurra para si misma.
-o-
La luz del sol entra por la ventana a pesar de las cortinas. Sakura se gira hacia el lado contrario sobre la pequeña cama de hospital. Sin embargo, en cuanto es consciente de dónde está se despierta de un brinco.
-¿Qué hora es?
Se mete al baño para asearse un poco e intentar deshacer la maraña que tenía en el pelo.
-o-
Sucede algo similar en la torre Hokage. Kakashi se levanta del sofá que ocupa un rincón de su despacho. Estira el cuello de un lado a otro y pasa los brazos por encima de la cabeza. Sabía que dormir en el despacho no era cómodo, pero pensó que quizás ella pasaría por allí en algún momento.
Se asoma a la ventana, las calles permanecen casi vacías y en silencio, pero la luz ya ilumina todo. Y de pronto la ve, es Sakura.
Sin pensarlo dos veces abre la ventana y salta al tejado, desde dónde salta al siguiente y de nuevo a otro, hasta que toca el suelo unos metros por delante de Sakura.
Ella le ve y se detiene.
-¿Estás bien? -pregunta acercándose.
-¿Dónde te metiste ayer? -pregunta ella a su vez.
-¿Yo? Estuve esperándote por horas en el despacho.
-Fui allí, no estabas.
-Tuve que salir un momento, pero fue menos de una hora. Luego regresé.
-Debimos cruzarnos.
-Fui a tu casa.
-No… -duda por un momento si decirlo-. No he pasado la noche allí.
-Lo sé. Él me lo dijo.
Sakura se encoje de hombros.
-¿Y te dijo algo más? -pregunta esperando que ya lo supiera todo.
Kakashi afirma con la cabeza- ¿Cómo estás?
-Bien, supongo.
-¿Cuándo volverá?
-No lo sé. Pero ya no importa. Da igual cuando vuelva.
-¿Qué quieres decir? -pregunta confundido.
-Ya lo hemos hablado. Los dos estamos de acuerdo en que será mejor que a su regreso busque otra casa.
-Eso no me lo dijo -comenta sorprendido.
-Sí, supongo que uno no va anunciando que le han echado de casa -comenta con una risa nerviosa, sin maldad.
-Supongo. Entonces… ¿vais a separaros?
-En realidad, es como si ya lo estuviéramos.
Kakashi la mira en silencio completamente sorprendido, y al mismo tiempo preocupado.
-¿Sarada…
-Estaremos bien -afirma Sakura refiriéndose a Sarada y ella.
-¿Lo sabe ya?
-No. No sé si Sasuke ha hablado con ella, no lo creo. Pero lo entenderá.
-Estará bien. Es una niña fuerte, e inteligente. No debes preocuparte por ella -comenta con seriedad.
-No puedes decirme eso con esa cara de preocupación.
-Eres tú quien me preocupa.
-¿Yo? No tienes que preocuparte por mí. Yo estaré bien -responde sonriendo.
-Sakura, imagino lo mucho que te ha costado tomar esta decisión, y sí crees que es lo mejor para ti, para vosotras, yo estaré ahí para ayudaros en todo lo que pueda. No sólo como Hokage, sino como amigo.
Sakura se abraza a él, que le pilla de improviso.
-Gracias Kakashi.
El hokage sonríe y la abraza a su vez.
-¿Tienes algún plan ahora? -pregunta Sakura separándose de él.
-Mi plan era buscarte. ¿Dónde has pasado la noche?
-En el hospital. Ahora buscaba un sitio para desayunar.
-Es demasiado pronto, no hay nada abierto.
-Pues me muero de hambre, no cené nada.
-Eres un poco exagerada. Yo tampoco cené, pero no muero de nada.
-Entonces iré a desayunar sola.
-¿Y Sarada?
-Sarada dormirá hasta medio día, es sábado.
-Ve a casa a desayunar.
Sakura guarda silencio por un segundo.
-Puede que él aún…
-Está bien -la corta entendiendo porqué Sakura no quiere regresar a casa- Ven a mi casa, te prepararé algo de desayuno.
-¿Seguro?
-¿No te fías de mí?
-La última vez que cocinaste para mi debió ser con 15 años, en alguna misión.
-¿Y estuvo malo?
-No que yo recuerde.
Ambos ponen rumbo a casa de Kakashi, empiezan a hablar de cosas sin importancia, pero de pronto Kakashi corta la conversación.
-¡Oye! ¿De qué querías hablar ayer?
-Ah, no es nada. No te preocupes.
-Parecías preocupada.
-No es preocupación.
-¿Entonces?
-En realidad quería comentarte que no debías sentirte culpable por lo que pasó.
De pronto Kakashi se queda blanco, casi había olvidado lo que pasó.
-Sobre eso yo… yo… quería pedirte perdón.
-Eso ya me lo has dicho. Y no debes hacerlo. Me pilló por sorpresa que me besaras, pero no voy a negar que había pensado más de una vez en algo así. Es solo que…
-Estás casada.
Sakura afirma con la cabeza.
-No quería… engañarle.
-Lo sé. Por eso te pido perdón. No debí besarte.
-Sin embargo, no seré una mujer casada por mucho tiempo. Aunque seré una mujer separada.
-No es un problema para mí.
-Eres el Hokage, claro que es un problema.
-¿Por qué?
-¿Crees que la aldea aceptará que estés con una mujer separada y con una hija?
-¿Me debe preocupar eso?
-Sí.
-Entonces nos casaremos -decide con solemnidad-. Sakura, no me preocupa la aldea. Solo me preocupáis tú y Sarada.
-No sé qué opinará Sarada de todo esto.
-Sarada me adora. Además, siempre me dejo ganar en los pulsos de pulgares.
-Sí… creo que lo sospecha. Ya no es tan pequeña como para creer que es capaz de ganar al Hokage.
Kakashi comienza a reír con una risa fuerte y grave. Sakura sonríe, por primera vez en varios días.
-Vamos, prepararemos tortitas para que puedas llevarle unas a esa listilla.
:::::
:::
NdA: Nunca comento esto, pero creo que es obvio que para mi lo de Sakura y Sasuke del final de la serie, y lo que está sucediendo en Boruto, nunca existió.
Es bastante obvio, si has llegado hasta aquí leyendo todo lo anterior, que suelo reescribir la historia desde un punto posterior a la Guerra Ninja, poco antes o algo después, pero sin el regreso de Sasuke (muerto, perdido por el mundo, lo que prefieras) o con él presente, pero con una Sakura que ya superó lo que sentía por él.
Creo que solo tomé como real el final canon en un drabble, en el que Sakura, cansada de esperar que Sasuke (su marido) volviera, tenía "encuentros nocturnos" con Kakashi, y de pronto Sasuke regresaba.
Creo (y digo creo) que fue la única vez. Hoy lo repito. Sakura está casada con Sasuke, y todavía más, este personajillo llamado Sarada está por ahí, aunque no sé mucho sobre ella, ni me cae bien ni me cae mal, es que no veo Boruto (no, todavía no le he dado una oportunidad más allá de la primera película).
Pero bueno, esto no es tanto para explicar que en este drabble están casados que es obvio, sino para poner por escrito mi punto de vista respecto a esto, y aquí va el monologo, podéis dejar de leer si os aburrís:
Para mi, la relación Sakura/Sasuke nunca se dio.
Sakura y Sasuke pueden ser amigos, pero nunca acaban juntos y, por lo tanto, Sarada no existe. No se trata de negar a Sasuke sin más, debo decir que estoy volviendo a ver Naruto (aun no llegue a Shippuden) y estoy intentando hacer las paces con Sasuke (en parte el personaje me fascina). En esta primera parte me parece un poco cretino, aunque entiendo que es la idea, igual que Sakura en esta primera parte es una cría idiota que solo piensa en el amor, y no en entrenar (deseo llegar a Shippuden para verla repartir). La cosa es, que quiero darle una oportunidad a Sasuke en Shippuden, para no odiarle tanto, pero aún así, puedo asegurar que NUNCA podría shippearlos (respeto 100% a quien lo haga si lo hace desde el respeto a quien no lo haga).
¿Por qué? Aquí va: Sakura se enamoró de un Sasuke que era el mejor de la clase, muy guapo, con un toque de vengador oscuro. Y sí, eso puede poner mucho, pero también era un amor de niños. Y con los años, Sakura madura, y Sasuke madura, y ambos pueden ser las mejores personas del mundo y maravillosos (hablo del Sasuke post-guerra), pero Sakura no está enamorada de ese Sasuke. Sakura está enamorada de la evolución que Sasuke ha tenido en su cabeza desde ese "primero de la clase, guapo y vengador", ya que no le conoce (pensad que nosotros hemos visto a Sasuke a lo largo de Shippuden en más de una ocasión, pero ella… ¿cuánto?). Sakura necesitaría verle, estar con él, conocerle, y tratarle para enamorarse de él, y la oportunidad de eso se resume en: me intenta matar con un chidori, también a Karin y al mismísimo Kakashi (INTENTA).
Por lo tanto, lo que no tiene sentido es que acepte a Sasuke sin más. Hay tres opciones de amor en esta historia (y sólo analizo el punto de vista de Sakura):
A) Ella está enamorada de ese Sasuke oscuro de su infancia (que es el único que conoce al acabar Naruto). Pero ya no es el mismo, incluso físicamente ha cambiado, y ya no tiene esa aura de venganza, ni tan siquiera es el mejor de su clase. Se arruino la imagen de la infancia, adiós enamoramiento de niña de 12 años. Cuando le trate nuevamente se daría cuenta de que no es lo que ella recordaba.
B) Sakura ha madurado, olvidado el enamoramiento infantil y está enamorada del Sasuke de los últimos años que ha conocido 10 minutos y ha intentado matarlos a todos. ¿Cómo te enamoradas de un chico que ves tan poco tiempo y quiere matar a los demás? Es la opción menos racional.
C) Sakura ha madurado, olvidado el enamoramiento infantil, PERO está enamorada de la imagen que se ha hecho del Sasuke, es decir, de su "evolución imaginada". De lo que, Naruto y ella, quieren creer que es ahora Sasuke. ¿De dónde sale esa imagen si no le han tratado? Al tratarle se daría cuenta de que no es lo que ellos creían. Puede ser una buena persona, pero ¿qué probabilidad hay de que sea lo que ellos imaginaron?
En cualquier caso, si nos quedamos con Naruto y Naruto Shippuden, esa relación es absurda -muchas en esta serie lo son, pero no voy a entrar en esto-, irreal a mas no poder, o peor aun, horrible en el sentido en que se está enamorando de un hombre que la ha querido matar. Un hombre que, a todas luces, no merece ser admirado, es como si nos enamoramos de asesinos vengadores a los 30 años. No, hemos madurado, nadie en su sano juicio busca eso.
Aun así, digo que respeto a quien los shippea, si lo hace entendiendo su relación como yo lo hago con Sakura y Kakashi. Es decir: hubo algo que no se llegó a mostrar en Naruto y debió suceder para que tenga sentido. Una Sakura y un Sasuke que puedan enamorarse en algún momento dado. Un Sasuke que reconoce todo lo equivocado que ha estado y pide perdón. Y, que finalmente, resulta ser el chico perfecto para Sakura con independencia de todo el pasado (que es mucho, pero quizás se puede olvidar). Que tras la guerra se conocen como amigos -ES LA CLAVE- y no con una Sakura que ya está enamorada. Y después, surge el amor, ASI ME VALDRÍA.
Creo que algo así se plantea en el libro dedicado a Sakura, no lo he leído. Así que quizás hablo de más. Pero lo que vi al final de Naruto Shippuden era una Sakura enamorada de Sasuke, y no puedo con ello. No puedo con ese amor irracional cuando Sakura ha evolucionado tanto, es como si siguiera siendo esa niña de 12.
Creo que cierro con esto, porque no terminó:
En mi mundo ideal Sakura y Kakashi están juntos y con dos críos monísimos sobre los que he escrito en varias ocasiones (Sakumo -el mayor, copia de su abuelo paterno- y Yumiko -una nena encantadora-).
En un mundo normal (no ideal), Sakura sigue sin estar con Sasuke, pero, aunque no esté con Kakashi, ella y Kakashi se pasan la vida juntos como si fueran un matrimonio ideal.
En un mundo ordinario, Sakura se casó con Sasuke (y tienen o no a Sarada) pero éste pasa tanto tiempo fuera que finalmente acabará igual que en un mundo normal: con Kakashi y ella como un matrimonio ideal (y puede que Sarada por ahí).
Bienvenidos, en este capítulo, a un mundo ordinario.
NdA2: Este no es el que tenía planeado, pero lo he encontrado olvidado en la carpeta.
NdA3: Gracias por los comentarios y las estrellitas, los follows, por todo. Sé que escribo cada mil años, pero siempre volvéis a leer y dejar vuestro amor, así que mil gracias, de verdad.
