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Pelirroja (2/2)

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Barrio residencial. Apartamento de Kakashi. Konoha

Ese mismo día. Cerca de la media noche

La emisora de radio hacía horas que se había perdido, pero dado que lo único que hacía era maldecir al mundo tirado en el sofá no le importaba mucho.

Coge el libro 'Icha Icha Tácticas' y lo abre por una página al azar. Una ilustración de un hombre besando el cuello de una mujer decoraba la página par. Lo levanta sobre su cabeza y un par de páginas pasan perdiendo la imagen.

-Mierda.

Lanza el libro contra la puerta de entrada y deja caer un brazo sobre sus ojos para que la luz de la farola que entraba por la ventana no le molestara.

El timbre le saca del letargo en el que estaba cayendo. Tiene que volver a sonar para que se dé cuenta de que no era parte de su sueño y debía levantarse a abrir la puerta.

Se incorpora en el sofá con un gruñido y arrastra los pies hasta la puerta golpeando el libro que estaba en el suelo. Luego abre la puerta, sin mirar quién había llamado.

Sakura estira la mano y estampa un sobre en su pecho antes de que se diera cuenta de que era ella.

-¿Qué es esto? ¿Vienes a que firme tu ausencia? -pregunta todavía adormilado.

-No es eso, estúpido. Léelo.

-¿Entonces qué es? -pregunta abriendo el sobre y sin darse cuenta de que había sido insultado.

-Léelo -le ordena de nuevo ganándose la mirada fija de él.

Kakashi saca una carta del interior del sobre todavía sin retirar la mirada de Sakura, y desdobla el papel.

Entonces baja la mirada y empieza a leer en silencio.

Era una carta de ella. Hacía él. Hablaba de sus sentimientos hacia él. De sus motivos para irse.

Kakashi la mira por un segundo, antes de regresar la vista a la carta.

Le confesaba cómo se sentía por él. Y lo difícil que era para ella mantenerse cerca de él mientras él estaba con otra.

-No lo entiendo -confiesa producto del sueño y del propio contenido de la carta.

-Mira la fecha -pide Sakura en un susurro.

Kakashi regresa a la carta. Y mira la parte inferior. Junto a la firma. Enero de este mismo año. Enero, no ahora, septiembre.

-Al principio no lo entendí... -Sakura habla mientras deja que él terminé de leer la carta-. No entendía por qué te habías puesto así este medio día.

Kakashi levanta la mirada de la carta y clava sus ojos en los de ella.

-En esta carta hablas de irte. Pero no te fuiste a ninguna parte en aquel entonces -afirma recordando que un par de meses después de la fecha de esa carta ella había empezado a salir con aquel muchacho.

-Entendí que irme no solucionaría nada.

-¿Por qué no me la entregaste?

-Por entonces... tú... tú estabas con esa mujer.

-¿De qué estás hablando?, ¿qué mujer?

-Aquella pelirroja.

Kakashi la mira sin terminar de comprenderla.

-¿Qué pelirroja?

-No te hagas el tonto.

-Creo que te equivocas -responde con sinceridad-. Llevo mucho tiempo sin salir con nadie. Eres tú la que empezó a salir con ese chico.

-Yo sólo intentaba salir adelante -dice arrancándole la carta de las manos.

Kakashi parece comprenderlo todo de golpe. La mira fijamente y ve una pequeña lágrima caer por la mejilla de Sakura que detiene levantando la mano hasta su rostro.

-Cuando aquella noche en el campo de entrenamiento me dijiste que podría arrepentirme si no me atrevía comprendí dos cosas -dice Sakura-, que me arrepentiría si me iba con Tetsuo y que no estabas interesado en mí.

-Estaba hablando de mí mismo -comenta Kakashi negando con la cabeza.

-Desde entonces, ha habido momentos... momentos en que pensé que realmente podrías estar interesado. Pero nunca dijiste... nunca hiciste nada. Y de nuevo apareció esa pelirroja, así que lo dejé estar. Pero esta tarde... No entendí por qué no querías que me fuera cuando hacía unos meses me dijiste que si no lo hacía podría arrepentirme. Sonaba contradictorio.

-Yo no...

-Pensé que estabas con ella. Que seguías con aquella pelirroja. Pero no es así. Me estabas dando tiempo para olvidar a Tetsuo -explica Sakura por él-, ¿verdad?

Kakashi deja escapar un largo suspiro y fija su vista en los labios de ella.

-Yo, no creo que pueda seguir esperando -anuncia agachándose sobre ella para besarla.

Sakura deja escapar un gemido cuando por fin nota los labios de él sobre los suyos.

Sus labios eran suaves y tenían un sabor dulce. Podía decirlo incluso con la máscara de por medio.

Ella deja escapar un jadeo y le aparta suavemente.

-Quítate la máscara -pide con la boca ligeramente abierta mientras su lengua recorre su labio inferior.

Kakashi obedece y se baja la máscara antes de volver a besarla. Sus lenguas se encuentran y sin querer esperar más la levanta agarrándola por debajo de las nalgas para permitirla enredarse a su cintura. Cuando ella adivina sus intenciones se abraza a su cuello y cruza los tobillos a su espalda para no caerse. Sin separarse de sus labios la lleva hasta la habitación, la tumba sobre la cama y la cubre con su cuerpo, permitiendo que la lengua de ella inspeccionara cada rincón de su boca.

-Llevo esperando esto mucho tiempo -susurra despegándose de sus labios antes de bajar por su cuello dejando un reguero de besos.

-Kakashi -gime en una súplica.

Eso fue suficiente para hacerle perder la cabeza. Desabrocha los primeros botones de la camiseta de ella mientras sus labios ansían alcanzar uno de los pechos que todavía se esconden bajo la ropa interior.

-¿Realmente vamos a hacer esto? -pregunta nerviosa.

-¿Quieres que pare? -pregunta liberando uno de los pechos del sujetador y tomándolo en la boca, a lo que ella deja escapar un gemido-. ¿Es un sí? -pregunta divertido.

-No. Diablos. No pares -suplica arqueándose por el placer de los labios de Kakashi sobre su piel.

Kakashi sonríe y deja que sus manos sigan desabotonando el vestido hasta que está completamente abierto.

Deja de torturar el pezón de Sakura y baja por su estómago besando cada centímetro de piel.

Cuando se topa con la cinturilla del pantalón lleva sus manos hasta estos y los arrastra fuera dejando visibles un conjunto de ropa interior color violeta.

-Joder -jadea Kakashi besando sobre la tela antes de obligarla a abrirse de piernas y cubrir con la boca la tela escondida entre sus muslos y empaparse de su excitación-. Dime que estás así por mí -suplica cerrando los ojos.

-Claro que es por ti -susurra temblando bajo sus caricias.

Con un par de dedos aparta la tela antes de volver a colocar la boca sobre ella y dejar que la lengua se hunda en su interior. Un gemido sale de lo más profundo de su garganta y Sakura se arquea solo por el placer de escucharle gemir mientras se muestra ansioso por devorarla.

Cuando nota como la penetra con un par de dedos lleva las manos a los hombros de él y se agarra clavando las uñas en sus omóplatos.

-No pares -ruega cerrando sus ojos.

Kakashi mueve sus dedos dentro y fuera de ella mientras juega con la lengua sobre su exterior y recoge los jugos que ella le brinda.

En unos pocos minutos nota como su interior se contrae atrapando sus dedos, la espalda de Sakura se arquea y las manos sobre sus hombros le empujan contra sus caderas.

-Kakashi -gime de nuevo dejando que su cabeza caiga hacia atrás incapaz de controlar ninguna parte de su cuerpo.

Un último lametazo la lleva al éxtasis. Su cuerpo, todavía arqueado, se tensa por unos segundos, después se inclina hacia delante abrazándose a la espalda de él en completa tensión y por último cae de espaldas contra el colchón temblando por el placer que todavía recorre su cuerpo.

-Dios, Kakashi -susurra sonriendo.

Él no parece escucharla. Saca los dedos de dentro de ella y los lleva a la boca para saborear su premio. Luego pasa la lengua con suavidad entre los pliegos del sexo de Sakura para limpiar por completo su orgasmo mientras ella sigue temblando. A continuación, coloca le tela en su sitio y deja algunos besos más sobre su ropa interior.

Cuando la nota dejar de temblar vuelve sobre su cuerpo para besar su boca con delicadeza apoyándose sobre los codos para no aplastarla.

-Te amo -susurra sobre sus labios.

Sakura se congela ante esa confesión. Kakashi lo nota y se separa para mirarla fijamente. Cuando la ve avergonzada retira la mirada.

-Perdón. No debí decir eso -susurra con miedo a haber ido demasiado lejos con su confesión.

-No. No -asegura ella sonriendo y llevando sus manos a la mandíbula de él para obligarle a mirarle a los ojos-. Es que no lo esperaba.

-¿Y qué esperabas? -pregunta confundido frunciendo el ceño.

-No lo sé -reconoce en un susurro.

-Pues te amo -repite ahora en un tono de voz normal-. Te amo Sakura -repite volviendo a agacharse sobre ella para besarla-. Estoy loco por ti -asegura bajando su cadera para que notará cuánto de loco estaba por ella.

Sakura deja escapar un jadeo al notar el calor y la dureza a través de su pantalón. Sin dejar de besarle baja sus manos para desabrocha el botón, deslizar la cremallera y bajar lo suficiente los pantalones y el calzoncillo para que su erección quede libre. Después le sujeta de las caderas para tirar de él y pegarle a ella.

Kakashi gruñe de placer cuando siente que la presión de la tela ha desaparecido y ahora roza la ropa interior de Sakura y parte de su estómago.

-Te necesito dentro -pide ella en un susurro sobre su oído antes de coger el lóbulo de su oreja entre los dientes.

Kakashi pone los ojos en blanco por respuesta y lleva sus manos a la cinturilla de la braguita que arrastra sin delicadeza rompiendo una de las tiras en el camino de descenso.

-Kakashi... -se queja en un jadeo.

-Te compraré unas nuevas -se disculpa bajando la lengua por su estómago.

Cuando vuelve entre sus piernas ella le toma entre las manos para guiarle hasta su interior.

Con delicadeza se va hundiendo en ella poco a poco esperando que pudiera adaptarse a su tamaño. Algo que puede adivinar mirando su cara. Sakura aprieta los labios en una mueca seria y él se detiene por unos segundos. Cuando la ve morderse el labio inferior empieza a moverse de nuevo hasta que se encuentra casi por completo dentro de ella.

-¿Sigo? -pregunta en un susurro mirándola fijamente.

Sakura afirma en silencio, pero le toma por las caderas y le obliga a moverse fuera de ella. Cuando está por salir completamente de ella las manos de Sakura tiran de él de nuevo dentro.

-Sigue, por favor -pide repitiendo el proceso.

Kakashi comienza a moverse dentro y fuera de ella entre jadeos de ambos. Tras algunas embestidas esperaba que ella no tuviera problemas para tomarle por completo, pero sigue sintiendo que es demasiado pronto para subir el ritmo.

-¿Estás bien? -pregunta preocupado al ver la seriedad en su rostro.

-Dios, sí. No pares -pide cerrando los ojos y acariciándole el pecho.

Kakashi sigue apoyado sobre los codos entrando en ella con suaves movimientos hasta que su propio placer recorre su espina dorsal. Entonces se deja caer sobre ella para acelerar el ritmo.

-Dios, eres pequeña –susurra contra su cuello.

-No soy pequeña – se queja entre jadeos.

-Sí que lo eres. Puedo rodear tu cintura sólo con mis manos -explica sentándose sobre sus talones, sin salir de ella, y mostrándole que es capaz de hacerlo.

-Tú eres jodidamente grande -se queja ahora tomándole de las muñecas y obligándole a soltarla.

-Nunca pensé que una mujer fuera a quejarse de ello -bromea dando un pequeño empujón de cadera para hundirse más en ella.

-No me refería a eso -se queja en un jadeo.

-Ni yo. Me refiero a tu tamaño real.

-¿Real? -pregunta intentando entenderle mientras la cabeza le da vueltas por el placer que siente.

-Tu tamaño. Nunca me había dado cuenta de lo pequeña que eres. Lo disimulas con esa fuerza bruta que tienes -sigue hablando mientras sus caderas continúan moviéndose contra ella. No puedes pesar más de cuarenta kilos.

-Cállate -pide entre jadeos-. No soy tan pequeña. Y no querrás comprobar cómo de fuerte me he hecho últimamente.

-¿Quién dice que no? -pregunta él todavía bromeando.

-Por favor, cállate -pide con la voz ahogada.

Cada vez le cuesta más hablar. Kakashi se carcajea y guarda silencio.

Ella le toma de las caderas de nuevo demandando más velocidad y, aunque sigue sintiendo cómo se contrae a su alrededor, él obedece.

-No creo que aguante mucho más -confiesa Kakashi intentando retrasar lo inevitable.

-No te contengas -le pide sonriendo y notando como ella misma está cerca del orgasmo.

-¿Segura? -pregunta sonriendo de regreso.

-Por favor, no te contengas -pide de nuevo.

Kakashi sonríe de medio lado, se sienta de nuevo sobre sus talones y la toma de las caderas para levantarla un poco antes de acelerar sus embestidas.

Ella deja escapar un gemido demasiado alto para la hora que es. Kakashi se ríe y la levanta abrazándola contra su cuerpo para buscar su boca y silenciarla.

Sakura se abraza a su cuello y empieza a moverse arriba y abajo sobre él.

En menos de un minuto ambos se tensan. Sakura esconde su rostro en el cuello de Kakashi mientras su orgasmo se escurre entre ambos.

Cuando los dos han llegado al éxtasis se quedan así por unos minutos. Él sentado sobre sus talones en el colchón, y ella sentada sobre las piernas de él todavía sintiéndole en su interior.

Cuando sus respiraciones se han calmado Kakashi se separa un poco para mirarla a los ojos.

-Hola -saluda él sonriente y acariciándole la espalda intentando hacer desaparecer un pequeño temblor.

Sakura le mira fijamente, la felicidad que puede ver en los ojos ónix hace que los nervios que estaban empezando a instalarse en su cuerpo desaparezcan de golpe.

-Hola -saluda ella de regreso sonriendo.

-¿Has cenado? -pregunta como si nada.

-No.

-¿Quieres cenar?

-Hablas de comida de verdad, ¿verdad?

Kakashi rompe a reír en carcajadas.

-Claro que hablo de comida de verdad -responde cuando puede dejar de reír-, eres una pequeña pervertida -asegura revolviéndola el pelo.

-Tengo hambre -reconoce avergonzada y dejando a un lado el comentario de él.

-Espera aquí, traeré algo -pide quitándola de encima suya y poniéndose en pie.

Se aleja por el pasillo todavía desnudo.

Sakura se gira en la cama y hunde su rostro en la almohada. Luego grita eufórica.

-¿Todo bien? -pregunta riendo Kakashi que escucha el grito desde el salón.

Ella levanta su cara, ahora colorada, para responder.

-Sí. Todo bien.

-¿Quieres un sándwich?

-Un sándwich está bien -asegura volviendo a hundirse en la almohada.

A los pocos minutos Kakashi vuelve vestido con unos pantalones cortos y un par de sándwiches y se sienta en la cama colocándose contra el cabecero. Sakura se arrastra entre sus piernas, se cubre con la sábana y coge uno de los sándwiches.

Ambos comen en silencio. Un silencio sencillo, un silencio que, pudiendo ser incómodo, no lo es.

Un silencio que dura hasta que Sakura se gira entre sus piernas, le mira fijamente y, aunque sabe que es un error, vuelve a sacar el tema, no pudiendo evitarlo.

-¿Quién era la pelirroja?

Kakashi deja el sándwich sobre el plato y la mira negando en silencio sin saber qué responder.

-No me mientas.

-Te juro que no ha habido una pelirroja en mi vida -responde con sinceridad.

-Eso no es posible. Kakashi. Te vi con ella. En varias ocasiones.

Kakashi frunce el ceño intentando hacer memoria.

-¿Cuándo?

-Finales de enero, febrero, marzo...

Kakashi se pasa la mano por el pelo intentando recordar.

-Te juro que no sé de quién me hablas.

-Puedo asegurarte que existe una pelirroja. Recuerdo cada ocasión en que os vi juntos.

Mientras ella habla él retira el plato de comida de la cama y se tumba obligándola a tumbarse a su lado y abrazándola.

-Sé qué va a sonar estúpido, ¿pero no sería otro tipo con pelo gris y máscara?

-Kakashi, créeme cuando te digo que te reconocería en cualquier lugar. Por no mencionar que en la espalda de tu uniforme pone Hokage con letras rojas. Eras tú -explica incorporándose un poco para verle la cara-. Estaba por aquí hace cuatro días, en la reunión a la que no fuiste.

De golpe los ojos de Kakashi se abren de par en par. Ella puede notarlo y le mira interrogante.

-¿Pelirroja, bastante alta, piernas largas y con grandes pechos? -pregunta como si no estuviera describiendo a otra mujer mientras la tenía abrazada desnuda en su cama.

-Eh... sí. Supongo.

-Voy a matar a ese hijo de puta -dice con total seriedad.

-¿Qué? -pregunta ella confusa.

-A Genma. Voy a matar a Genma -asegura cabreado.

-¿Genma?, ¿qué tiene que ver Genma en todo esto?

-Fue Genma. Era Genma, no yo.

-Créeme, no era Genma.

-Créeme, era Genma -asegura soltándose de ella para incorporarse y sentarse contra el cabecero de la cama con claros síntomas de cabreo-. Hablas de Haruka, Hikaru o algo así.

-¿Algo así? -pregunta ella sentándose a su lado.

Kakashi la levanta por las caderas y la sienta entre sus piernas de espaldas a él para poder besarla sobre los hombros.

-Es la secretaria del Raikage. Estuvo aquí en la última reunión anual. Genma dejó claro que le gustaba.

-¿Y eso que tiene que ver con todas las veces que te vi con ella? ¿Vas a decirme que solo intentabas conseguir que saliera con él? Te vi con tu lengua en su garganta mientras metías las manos bajo su falda.

Kakashi pone mal gesto ante la descripción.

-No era yo. Es cierto que ella mostró interés en mí. Pero yo ya... -de pronto guarda silencio.

-¿Tú ya qué? -pregunta Sakura girándose entre sus piernas para quedar de frente a él.

Kakashi la mira sonriendo.

-Yo ya estaba loco por ti -confiesa besándola suavemente en los labios-. Si realmente viste lo que dices que viste, estoy seguro de que Genma se hizo pasar por mí.

-¿Hablas en serio?

-En realidad ahora entiendo aquella carta.

-¿Qué carta?

-La que me envió aquella mujer a los pocos días de la reunión.

Sakura levanta una ceja mirándole.

-Sobre lo bien que lo habíamos pasado. Me sorprendió. Pero pensé que se refería al rato que había conversado con ella antes de que me intentara meter la mano en los pantalones y yo la rechazara. Ahora supongo que para ella hubo un después.

-¿Hablas en serio? -pregunta girándose de nuevo para darle la espalda.

-Saldremos de dudas. Vayamos a buscar a Genma -pide apartándole el pelo del cuello para poder besarla en el hombro antes de salir de detrás suya para ponerse de pie-. No veo motivos para dejarle vivir un segundo más -su tono de voz no indicaba para nada que estuviera hablando en broma.

-Espera. Relájate.

-¿Qué me relaje? -pregunta claramente cabreado con Genma-. Ha hecho creer a una mujer que era yo para llevársela a la cama. ¿Cómo te habrías sentido si te hicieran eso a ti?

-Lo sé. Llevas razón. Lo que ha hecho es horrible, pero no puedes matarle -pide tomándole de la muñeca.

Kakashi respira profundamente un par de veces con los ojos cerrados intentando relajarse. Pero cuando los abre y la ve es incapaz de controlarse.

-Voy a matar a ese hijo de puta -anuncia cabreado.

-Por favor. Cálmate -suplica al verle tan nervioso.

-Le meteré en la cárcel -sentencia todavía cabreado quitándose los pantalones cortos y poniéndose unos calzoncillos y unos pantalones de jonin.

-Está bien. Espera. Necesitas relajarte un poco -repite Sakura cogiéndole por la muñeca-. No tienes que ir ahora mismo. Es mejor que no estés así cuando vayas a verle. Ven. Túmbate conmigo, por favor -pide sentada en la cama y palmeando el colchón a su lado.

Kakashi vuelve a clavar la mirada en ella y respira profundamente de nuevo.

-Está bien, siempre puedo esperar un poco para matarle -acepta volviendo a la cama-. Pero me dejarás matarle, ¿verdad?

-Bueno, no sé.

-¿Qué quieres decir?, ¿acaso no te cabrea tanto como a mi?

-Claro que me cabrea. Pero...

-¿Pero?

-Kakashi, ahora estamos juntos. No sabemos que habría pasado si nunca te hubiera visto con esa mujer.

-Quizás nunca hubieras empezado con ese niñato -asegura cono seriedad-. Y no era yo.

-¿Niñato? -pregunta riendo-. Pensé que te caía bien.

-¿Caerme bien? Quería arrancarle el corazón. Pero no podía decirte eso, ¿no crees? -pregunta tumbándose de nuevo y arrastrándola hacía él.

Sakura deja escapar una risa suave y apoya la cabeza en su pecho.

-Vamos a dormir. Mañana iremos a casa de Genma -pide abrazándose a él y colocando una pierna por encima de las suyas.

Kakashi la rodea con sus brazos y la aprieta fuerte contra él.

-Dejando a un lado todo esto de Genma... -comienza en un susurro acariciándole el pecho-. Este es el mejor día de mi vida- confiesa Sakura.

Kakashi guarda silencio unos segundos antes de apretar suavemente sus brazos alrededor de ella.

-Perdóname -se disculpa cansado.

-¿Perdonarte?, ¿por qué? -pregunta ella sorprendida.

-Por como ha terminado la noche. Yo... debería estar demostrándote lo mucho que te amo y sin embargo me he puesto echo una furia por Genma.

-No tienes que disculparte por eso.

Kakashi se incorpora un poco, lo justo para poder mirarla.

-He arruinado la noche.

-No lo has hecho -asegura incorporándose ella también para poder besarle.

-¿Estás segura?

-Estoy bastante segura. Saber que no eras tú quien se estaba tirando a esa mujer en mitad de un callejón es reconfortante -afirma sonriendo-. Además, todavía queda noche -añade sugerente.

-No jodas. Pienso matarle -asegura cabreándose de nuevo e ignorando la segunda parte de su comentario.

-Kakashi, acabo de decir que la noche todavía es joven. ¿Quieres que te cuente todo lo que vi a Genma hacer con esa mujer mientras se hacía pasar por ti o prefieres... -deja la pregunta a medias para arrastrarse entre sus piernas y bajarle la cremallera del pantalón.

-Está bien. Ya me callo -asegura llevando sus manos a la melena rosada y atrapando un mechón entre sus dedos-. Lo prometo.

-Eres demasiado hablador -ríe ella pasando sus manos por debajo del elástico del calzoncillo.

-Yo—

-¡Calla! -exige riendo mientras baja su boca para tomarle.

Kakashi ríe y guarda silencio centrándose en el placer que le proporciona su lengua.

Barrio residencial. Entrada al apartamento de Genma. Konoha

El día después. Primera hora de la mañana

Kakashi golpea con sus nudillos la puerta del apartamento.

No obtiene respuesta.

Insiste, con fuerza. Pero sigue sin obtener respuesta.

Sakura se asoma por la ventana.

-No veo a nadie.

-Está en la aldea -asegura Kakashi golpeando nuevamente la puerta.

-Ahí vienen.

-¿Vienen? -pregunta Kakashi girándose para mirarla interrogante.

Sin embargo, no da tiempo a que ella responda cuando la mujer pelirroja abre la puerta.

-¿Kakashi? -pregunta Gemma sorprendido desde detrás de ella-. ¿Qué te trae hasta aquí? ¿Puedo hacer algo por ti?

-Tenemos que hablar -pide con seriedad.

-Claro. ¿Qué necesitas?

-A solas -añade mirando a la mujer.

-Oh. No te preocupes por ella. Es Hiraku, ¿la recuerdas?

-Sí -responde con seriedad-. La recuerdo. Claro que la recuerdo. Hablemos.

-¿Qué carajo te pasa, Kakashi? ¿A caso he hecho algo malo?

-¿Qué si has hecho algo malo? ¿Lo dices en serio? -pregunta todavía más cabreado subiendo la voz.

-Kakashi -susurra Sakura cogiéndole por el brazo para intentar calmarle.

-Diablos, Sakura, no te había visto. ¿Qué haces aquí?

Sin embargo, Sakura no responde, y mira a Kakashi en silencio.

-Hiraku, ¿verdad? -pregunta Kakashi dirigiéndose a ella.

-Sí -responde la mujer dudando.

-¿Estás saliendo con él?

-Sí.

-¿Desde cuándo?

-Hace un tiempo.

-¿Cuándo lo supiste?

-¿El qué?

-No me tomen por tontos. ¿Cuándo descubriste que era él y no yo?

Ambos cambian de color. Sus rostros se ponen pálidos y Hiraku se gira para mirar a Genma.

-Kakashi, no es lo que piensas... -comienza Genma.

-¿No es lo que pienso? ¿No te hiciste pasar por mi para acercarte a ella?

-No.

La mirada de Kakashi podría atravesar a Genma si todavía tuviera el sharingan.

-Bueno, sí. Sí me hice pasar por ti. Pero no es lo que piensas.

-Le descubrí -interrumpe Hiraku- pero la fantasía era buena y seguimos el juego. Era sólo sexo entre nosotros, ambos accedimos. No hay nada de malo en ello.

-¿Sexo entre ustedes? Por kami, lo hicieron en la calle, la gente los vio.

-Era divertido -dice Genma-. Y no hacíamos daño a nadie.

-A mí. Me hicieron daño a mí. La gente pensó que era yo. ¿Están jodidamente locos?

-¿No te molesta que se hiciera pasar por otro? - pregunta Sakura desde detrás con algo de timidez en la voz.

-Cuando nos enrollamos la primera vez ya sabía que era él -responde ella sin darle importancia.

-¿Basan su relación en que ella se acuesta con Kakashi? - pregunta Sakura verdaderamente sorprendida.

Genma la miró en silencio, sin saber qué decir.

-No es eso -responde Hiraku-. En un primer momento, yo sí... A mí me gustaba usted -continúa mirando a Kakashi-, y bueno, aunque sabía que no era usted, pensé que por una vez... que podría... ser divertido. Supongo. Ya que no podía estar con usted, al menos podría tener esa fantasía.

-¡No fue una vez! -grita Sakura antes de poder frenarse.

-Bueno, es que... después empezamos a hablar, y... me gusta él -asegura girándose para poner una mano sobre el pecho de Genma- su forma tan... especial de ser. Es tan puerco que me conquistó.

Sakura hace un gesto de desagrado. Sin embargo, Genma sonríe como un tonto.

-Ves, no debes preocuparte de nada, amigo -aseguró Genma poniéndole una mano sobre el hombro de Kakashi.

Kakashi mira la mano por el rabillo del ojo y le da un manotazo.

-Genma. Quedas detenido -dice finalmente Kakashi.

-¿De qué carajo hablas? -pregunta este sorprendido.

-Te hiciste pasar por el Hokage, eso ya de por si es un delito. Pero además intentaste engañar a una mujer haciéndote pasar por mi para acostarte con ella. ¿Te parece mínimamente normal?, ¿sabes lo cabreado que estoy? Vamos, te vienes conmigo.

-Bromeas, ¿verdad?

-¿Te parece que estoy bromeando? Un mes de cárcel, sin sueldo. Vivirás del aire, de tu ego y tus fantasías de mierda.

-Pero tío—

-No -le corta-. Despídete de ella -le ofrece mientras le pasa las manos a la espalda y las ata con una brida.

-¿Me esperarás? -pregunta Genma a la pelirroja haciendo un puchero.

-Claro cielo -asegura ella riendo-. Aquí estaré. Para ti también -añade mirando a Kakashi y mordiéndose el labio inferior.

Kakashi pone los ojos en blanco.

-Desde luego os merecéis -comenta sacándole a arrastras de la casa.

Sakura, mira la escena en silencio, sin saber si seguirlos o no.

-Yo... -empieza Hiraku-. Siento las molestias.

Sakura se inclina para despedirse y sale corriendo detrás de Kakashi y Genma.

-¿Y ella qué hace aquí? -pregunta Genma siendo arrastrado calle arriba.

-No es de tu incumbencia -responde Kakashi cabreado.

-Tío, no es para tanto. Ya te lo ha dicho Hiraku, ella lo supo todo el tiempo.

-No lo entiendes, ¿verdad? No importa si lo supo o no. Importa que tu lo ibas a hacer igualmente. Pensabas llevártela a la cama fingiendo ser yo. Lo cual, por otro lado, me parece repulsivo.

-¿Te parece repulsivo ser tú?

Kakashi le detiene en mitad de la calle de un tirón en el brazo, provocando que Genma se queje.

-No estoy de humor -grita-. Genma. Esto no es una broma. Será mejor que te lo tomes en serio. Esta vez no voy a llevarte a mi despacho para darte una charla y un par de golpecitos en la cabeza. Por Kami, ya no tienes dieciséis años. Madura. Se un hombre y compórtate como tal. Respétate, respétame y, por el amor de dios, respeta a las mujeres.

Genma le mira fijamente con el rostro serio por primera vez desde que empezó la conversación. Kakashi le devuelve la mirada y deja escapar un suspiro de cansancio.

-Hoy pasaras la noche en el calabozo. Mañana hablaremos -asegura recuperando un tono de voz normal, pero mostrando su agotamiento.

-Kakashi... -interviene Sakura.

El aludido se gira hacia ella.

-Déjaselo a él -le pide señalando un ANBU que a aparecido ante los gritos del Hokage en mitad de la calle.

Kakashi indica al ANBU que se acerque hasta ellos.

-Llévalo al calabozo. Por favor -pide Kakashi dirigiéndose al ANBU.- No le escuches, diga lo que diga no le dejéis salir hasta que yo dé la orden.

El ANBU afirma con la cabeza y coge a Genma por el brazo.

Puerta de entrada al colegio shinobi. Konoha

Mediados de octubre, primera hora de la mañana

-¿Qué haces aquí? -pregunta Sakura sorprendida.

-¿Qué haces tú aquí? -pregunta él a su vez.

-Me han pedido venir a dar una charla.

-Por el día de las profesiones -afirma Kakashi entendiendo porqué ambos estaban en el colegio.

-Ya veo. No me habías dicho nada.

-El Hokage viene todos los años. ¿Y tú?

-Me han llamado hace menos de una hora.

Kakashi mira a su alrededor para comprobar que nadie los está mirando antes de acercarse un poco más a ella y dejar que sus nudillos rocen los de ella.

-¿Tienes planes para la comida? -pregunta tomándola de la mano entrelanzado sus dedos.

-No -responde poniéndose nerviosa.

Ya llevaban algo más de un mes, pero Kakashi todavía conseguía ruborizarla con el menor de los contactos.

-Me dejas invitarte -pregunta inclinándose sobre ella un poco más para susurrar sobre su oído.

Sakura siente un suave escalofrío con el aliento de Kakashi sobre su cuello.

-Hay gente -responde Sakura en un murmullo ahogado.

-Siempre hay gente -se queja él separándose de ella y soltando su mano.

Sakura le mira decepcionada por la ausencia de su aliento sobre ella y de sus dedos acariciando la palma de su mano.

-¿Entonces? -pregunta él como si nada.

A él no parecía afectarle de la misma manera. O eso, o lo disimulaba bien. Eso quería creer Sakura.

-¿Qué? -pregunta respirando un poco agitada.

-¿Comemos juntos? -pregunta conteniendo una carcajada.

-Sí, claro.

-¿En un lugar público o en mi casa? -pregunta ahora riendo.

-En tu casa -pide ella poniéndose colorada de nuevo.

-Ohaiyo -saluda Genma pasando a su lado como si nada.

Ambos se congelan en el sitio y quedan así hasta que el shinobi se aleja.

-¿Crees que nos haya oído? -pregunta Sakura nerviosa.

Kakashi se encoje de hombros todavía mirando la espalda de Genma.

Despacho de Kakashi. Torre Hokage. Konoha

Horas más tarde, medio día

-¡Ey! -saluda Genma asomándose al despacho con timidez-. ¿Tienes un minuto? Necesito hablar contigo. Nada urgente. Temas personales. Nada de trabajo. Así que cuando puedas. Realmente no quiero causar molestias. Entiendo que como Hokage tienes mucho trabajo. Quizás debería esperar fuera -continúa calmado, pero sin darle tiempo a responder-. Te busqué en tu casa, pero no estabas. Es domingo. Pensé que no trabajarías hoy.

Kakashi levanta la cabeza y le mira confundido por esa actitud tan respetuosa nada propia del shinobi.

Genma se queda de pie a unos pocos pasos de su escritorio. Esperando que él diga algo.

Kakashi deja los papeles que estaba leyendo sobre el escritorio y le mira fijamente.

-¿Qué puedo hacer por ti, Genma? -pregunta con el ceño fruncido sin entender qué le traía por su despacho.

-Veras... -Genma no sabe cómo plantear el tema y guarda silencio pensando en cómo empezar.

-Genma. Sólo dilo -pide esperando cualquier tontería por parte del ninja.

-Yo... quería pedirte perdón -dice por fin llevándose una mano a la nuca frotándose con fuerza.

Si hubiera confesado que era gay le hubiera extrañado menos.

-¿Pedirme perdón? -pregunta poniéndose en pie y rodeando el escritorio para acercarse a él y poder observarle mejor.

-Bueno, creo que debería pediros perdón a ambos, pero primero quería hablar contigo -asegura nervioso.

-¿A ambos?

-A Sakura y a ti -confiesa en un susurro mirando hacía el suelo.

Kakashi se tensa ante la mención de ella.

-¿De qué hablas Genma?

-Yo no sabía que vosotros... -detiene la frase cuando levanta la cabeza y ve a Kakashi mirándole fijamente esperando una explicación-. Hace un mes, cuando me detuviste, no lo entendí. Pero hace un par de días os vi. Estáis juntos, ¿verdad?

Kakashi no responde, le mira con seriedad apoyado sobre el escritorio. Así que decide continuar su relato.

-Hace unos cuantos meses Sakura me vio con Hiraku. Bueno, no me vio a mó. Ya sabes -comentó evitando su mirada-. Ella nos saludó como un tempano de hielo y se marchó. Pensé que estaba cabreada por algo. Así que no le di importancia.

Kakashi le mira con atención esperando ver dónde lleva su relato.

-Que no vinieras a buscarme al día siguiente me dejó claro que no te había comentado nada. Así que no le di más importancia. Al poco ella empezó a salir con aquel chico y parecía feliz. -Kakashi se tensa ante la mención de Tetsuo. Genma se da cuenta y continua con el relato dejando la mención del chico a un lado-. No sabía que ella te gustaba. Aunque ahora que lo pienso durante esa época tú estabas siempre de malhumor -reconoce riendo con suavidad por los nervios.

-Genma, ¿a dónde quieres llegar? -pregunta impaciente.

-Si hubiera sabido que tú y ella... le habría dicho que era yo.

-Ella y yo no estábamos juntos.

-Pero lo están ahora, ¿verdad?

Kakashi piensa por un segundo si era buena idea contárselo. Luego afirma en silencio.

-¿Jodí las cosas? -pregunta con verdadera preocupación y quedándose en silencio esperando una respuesta.

Kakashi se incorpora y respira profundamente antes de acercarse a él.

-Mira, Genma. No sé si jodiste las cosas o no, pero desde luego la enviaste directa a los brazos de ese muchacho.

Genma se tensa ante esa afirmación.

-Lo siento -dice con verdadero arrepentimiento.

-Ya da igual, ¿no crees? -afirma Kakashi acercándose a él y poniendo una mano sobre el hombro del shinobi.

-Le pediré perdón también a ella -asegura en casi un susurro.

-No lo entiendes, ¿verdad? No es a nosotros a quien debes pedir perdón. Sí, ella pensó que yo estaba con otra y decidió seguir con su vida. Eso no es un delito, sólo un malentendido provocado por tu estupidez. Una por la cuál podría matarte. Pero...

Genma se pone colorado ante la acusación. Kakashi aprieta el agarre entorno a su hombro esperando que fuera, al menos, un poco doloroso.

-Pero lo que hiciste puede ser considerado un delito. Si ella no te hubiera descubierto la hubieras llevado a la cama haciéndola creer que eras otra persona. Sabes muy bien cómo es juzgado el abuso sexual en Konoha, ¿verdad? -preguntó clavando su vista en la de él, que le miró entre asustado y avergonzado bajo su agarre.

Genma solo atina a afirmar en silencio.

-La libraste barata en esta ocasión. Si ella no hubiera hablado en tu favor–.

-Lo sé -asegura rápidamente.

-Cásate con esa mujer Genma. No habrá otra que aguante tus gilipolleces -aseguró Kakashi antes de soltarle e irse dejándole solo en el despacho.

Genma se quedó clavado en el sitio mirando por la ventana. Algunas imágenes del oficial al mando del departamento de tortura golpeando violadores cruzaron su mente. La siguiente era él, siendo castrado por un sinobhi encapuchado mientras Ibiki, cruzado de brazos al fondo de la sala se carcajeaba y susurraba un "por fin".

Barrio residencial. Apartamento de Kakashi. Konoha

Esa misma noche, más tarde

Kakashi abre la puerta de la entrada y deja caer la mochila al suelo según cruza la puerta.

Avanza por la casa y ve a Sakura dormida sobre el sofá vestida con una camiseta suya que podría servirle como vestido. Durante unos minutos la observa en silencio.

Sakura se mueve ligeramente, pero sin llegar a despertar. Pero sirve para activar a Kakashi que se arrodilla junto a ella y tras bajarse la máscara la despierta con suave beso en los labios.

-Buenas noches -saluda cuando ella abre los ojos.

-Buenas noches. ¿Qué hora es? -pregunta bostezando.

-Tarde. He tenido algo de trabajo. Lo siento.

-No te disculpes. ¿Todo bien?

-Sí -dice incorporándose para sentarse a su lado.

-¿Tienes hambre?

-No. Estoy cansado.

-Entonces vamos a la cama.

Sakura se levanta, le toma de la mano y tira de él, que la sigue hasta la habitación. No hay ningún tipo de insinuación sexual. Ella le obliga a sentarse en la cama y le ayuda a quitarse la ropa y le da un suave beso en los labios antes de obligarle a tumbarse.

-Me quedaré a dormir -afirma tumbándose a su lado y abrazándose a él.

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NdA: Buenas de nuevo. Perdonad, lo iba a subir ayer, pero daba error :S
Espero que os haya gustado este doble capítulo. Estos días también subiré un drabble de la colección primeras veces. Intentaré estar más presente de ahora en adelante :D

¡Un saludo!