Arco 2: Capítulo 3

Me encontraba recibiendo golpes de lado a lado por parte de Muramasa, incluso sangre salpicaba en el aire por la golpiza que me está dando.

Aunque pueda ver que viene de izquierda a derecha y viceversa, no logro defenderme.

"¡Necesitas mejorar tu instinto!"

Recibí otro golpe que llego a mi mejilla donde sangre y una muela volaron al suelo.

Él no tenía piedad, incluso Esdeath también recibió una fuerte paliza donde sus brazos fueron rotos.

Mientras pensaba en eso, mi cuerpo se había levitado en el aire.

"¡Y ten tu mente enfocada siempre en la pelea, no pienses otras cosas!"

Solté un quejido de dolor al momento de sentir como mi columna se destruía.

Lo último que vi fue a Muramasa fumando y decirme algo que no logre escuchar ya que mi conciencia se había ido.

Han pasado dos años y medio de esa vez que recibí una paliza por parte de Muramasa y ahora me encuentro en otro mundo llamado "Little Garden" donde estaba el cuerpo original de Muramasa.

"Vamos Esdeath."

Le hable a mi compañera para continuar nuestro camino.

Liberaremos a Muramasa para luego pelear con él y matarlo.

Después de todo, él también deseaba morir.

{Muramasa}

"Dime Zelretch, has visto algo interesante gracias a tu magia…"

Me encontraba aburrido así que vine a molestar al anciano que puede ver diferentes universos.

"Ya te dije que solo puedo ver los universos que está conectado con este mundo, no puedo ver el universo de donde provienes."

"Qué aburrido es eso."

Me serví un poco de té para relajarme.

"Me puedes responder que hiciste con Emiya Shirou."

"Nada peligroso, solo cambie la magia por energía espiritual. Esto ayudara mucho al muchacho para no autodestruirse… solo espero que no intente una locura ahora con la energía espiritual."

"Eso me da curiosidad. Como recuperas la energía espiritual gastada."

"En mi caso, medito en un volcán en la tierra. Uno de los hermanos de Sun Wukong medita bajo el mar, en los volcanes submarinos. Tengo entendido que aún sigue meditando hasta el día de hoy… o tal vez ya haya terminado. No puedo afirmarlo con certeza, ya que no he estado en Little Garden."

Le respondí mientras seguía saboreando el té con desagrado. Me gustaría regresar a Little Garden, pero todavía no es el momento de regresar.

{Alicia}

Me encontraba malhumorada, un humano ordinario que tenía un poder bajo de energía espiritual había escapado de la demonización fácilmente por su fuerza de voluntad de ser un [Héroe].

Tch.

"Parece que la Reina sufrió una derrota."

Escuche la voz burlona de Toujo. Incluso Gremory intentaba ocultar su risa.

"Creo que es hora del entrenamiento."

Ellos tragaron saliva.

"Prepárense, esta vez no iré suave con ustedes."

"Tenías que abrir el hocico para una broma de mal gusto."

"¡Tu cállate, incluso te reíste! ¡Así que los dos somos culpables!"

"Basta de parloteo y comencemos."

Comencé a golpearlos de lado a lado golpeando fuertemente su cabeza donde perdieron la conciencia por unos segundos.

"Veo que mejoraron en resistir eso." Sonreí levemente.

"Tú siempre nos golpea moviendo nuestro cerebro, es lógico que algún momento íbamos a resistir eso."

Gremory me respondió presumiendo.

"Supongo que tienes razón."

¡Crack!

Usando mi codo golpeé de arriba hacia abajo donde enterré la cabeza de Gremory al suelo.

Su cuerpo quedo estático en el suelo sin lograr moverse.

"El siguiente eres tú."

"Así que enserio fuiste enserio esta vez."

Toujo estaba sudando, viendo como Gremory no se levantaba para nada.

"Je, para ti seré más ruda."

"¡Qué! ¡Agh!"

Lance un fuerte puñetazo en el estómago soltando todo el aire que tenía para luego golpear 3 veces seguidas al mismo tiempo donde conectaron en la nariz, plexo solar y rodillas.

Es decir que destruí esos huesos.

Toujo quedo en el suelo inconsciente.

"Espero que haya aprendido su error, la próxima vez que intente ser gracioso le ira peor."

Regrese a mi trono y comenzar a meditar.

Enserio Little Garden se encuentra en peligro por lo que ocurrirá en el futuro.

"Matar a mi padre, o más específicamente a la comunidad [Mal Absoluto], implicará la muerte de muchos al intentar erradicar a todos ellos."

Lo único que puedo decir, es suerte para todos ellos que quieren eliminar a [Mal Absoluto].

{Muramasa}

"Oye Zelretch, hay una forma de matar el aburrimiento."

"Pensaste vivir como un humano ordinario."

"Ya lo hice, estaba en un mundo infectado de zombis. Fue divertido hasta que llego Sun Wukong con deseo de matarme, enserio fue problemático esa situación ya que siempre gritaba "Debo matar a tu hija, no puedo permitir que otro monstruo habite en Little Garden", aunque fue un gran problema me divertí peleando siempre con ella."

"Al final no viviste como un humano ordinario."

"Eh, supongo que tienes razón."

"Entonces que te parece vivir como el protagonista de esta historia."

Un libro apareció mágicamente en las manos de Zelretch titulado "Yumemiru Danshi wa Genjitsushugisha" como también "Tokidoki Bosotto Russia-go de Dereru Tonari no Alya-san" y algunos libros más, por lo que veo son Novelas Ligeras Japonesas.

"Aunque decida aceptar, es probable que termine buscando peleas callejeras. No creo que esa sea la vida de un humano ordinario."

"Entonces, ¿qué opinas de las personas que son famosas por lo que hacen? ¿Un actor o un cantante no lleva una vida ordinaria?"

"Obviamente, no llevan una vida ordinaria. Después de todo, viven una existencia glamorosa que seguramente provoca envidia en muchas personas, quienes desearían vivir una vida como la de ellos."

"Pero al final ellos viven como humanos ordinarios, algo que tu no haces."

"Está bien, está bien. Entonces que yo busque pelea callejera me convierte en un humano ordinario, pero la opinión de la gente seria que yo soy un chico problemático."

"Es muy seguro, pero al final estarás viviendo una vida ordinaria como cualquier adolescente problemático."

"Por ahora déjame pensarlo, además todavía soy el "Servant" de Olga Marie Animusphere. Que nombres tan largos tienen los occidentales."

"Tengo ganas de enviarte a un NTR no tengo idea del porqué."

Me levante de mi silla para retirarme de la oficina de Zelretch.

"Gracias por el té."

"Nos vemos, Senji Muramasa."

"Solo llámame Sengo o Senji, no es necesario decir todo mi nombre."

"Bien, nos vemos pronto Senji."

"Enserio que cara dura eres sabiendo que "Senji" no es de mi agrado."

"Es tu verdadero nombre, así que no puedes olvidarlo fácilmente."

"Tsk. Supongo que tienes razón."

Saliendo de la oficina de Zelretch me encontré con alguien.

"Ha pasado un tiempo, ¿cierto?"

Ella llevo su mano derecha a mi cuello donde ejercicio presión para ahorcarme.

"Demasiado tiempo, Senji Muramasa."

El odio de ella no ha desapareció en estos años.

"Parece que la pequeña princesa logro convertirse en Reina."

"Hmph. Eso ya estaba previsto desde que nací en esta familia."

Lorelei Barthomeloi, la chiquilla que conocí años atrás se ha vuelto más fuerte.

"Pero aun así no eres rival para mí. Que lastima."

Soltando fácilmente de su agarre comencé a marcharme.

"Nos vemos otro día, Lorelei."

"Tsk, aun con toda la experiencia que tengo actualmente no sigo siendo rival para él."

Escuche el murmullo de ella. Aunque puede que tenga razón de la experiencia que ella posee actualmente, pero aun así no es rival para mí.

Me pregunto que estarán haciendo Izayoi y Esdeath en este momento. Las entrené por un año, supongo que mejoraron después de que me fui.

{En Little Garden, 2 meses después}

"Oye Izayoi, ya pasamos 2 meses buscando la ubicación de esa hija de Muramasa."

Esdeath se quejaba de Izayoi que iba a unos pasos delante de ella.

"Tranquila, estamos cerca de la ubicación. No mintieron de este lugar, así que más adelante estará ella."

"Solo porque lo dijo una loli albina, no asegura que ella diga la verdad."

"¡Qué estás diciendo Esdeath! ¡Una loli nunca mentiría!"

"Los manga que lees son pura fantasía, una loli puede mentir fácilmente. Además, porque le decimos loli a una niña."

"Porque ella si era una loli, por lo que pude percibir debe tener más de 1000 años. Una niña no es, ¿cierto?"

"Si lo pones así, no es una niña. Es un fósil con apariencia de niña… si eso es."

"Como dice Muramasa de él mismo, es un fósil andante."

Unas ligeras risas escaparon de las dos chicas.

"Parece que llegamos."

[Ubicación actual: Territorio de Alicia Muramasa]

"Uff enserio fue molesto este viaje de buscarla." Esdeath frunció el ceño.

"Tienes razón, pero ya llegamos. Un viaje de dos meses caminando y explorando Little Garden. Me gusto este mundo."

"No podemos negar eso, fue muy divertido incluso participamos en algunos Gift Game."

"Si. Pero es mejor dejar de un lado ese pensamiento, hay que ingresar este lugar que parece sacado de una película de horror."

Caminaron bajando la colina para llegar un castillo y cementerio sacado de una película de Drácula cutre.

"Es un castillo con un ambiente sombrío, enserio no causa terror aparte de los niños." Izayoi comento con aburrimiento.

"Tiene un diseño un poco tenebroso a película ochentera." Esdeath opino con la mano en la barbilla.

Continuaron su caminata ingresando por el cementerio del gran castillo sombrío.

Llegando a la puerta de robles de la entrada. Donde Izayoi abrió la puerta sin titubear donde Esdeath la seguía atrás.

Caminando por la larga alfombra roja que seguía de largo a otra habitación donde caminaron sin preocuparse de la mirada que tenía la chica de cabellera larga de color blanco y sus ojos rojos sangres mirando con detenimiento a ellas dos.

"Tú debes ser Alicia Muramasa, ¿verdad?" Izayoi miro a la chica con los brazos bajo sus pechos.

"Um… parece que ellos dos encontraron primero a esta chica." Esdeath hablo mirando a Gremory y Toujo derrotado en el suelo.

"Veo que se conocen, entonces para que me buscan." Pregunto con indiferencia Alicia.

"Tenemos entendido que tu relación con tu padre es algo indiferente. Nos gustaría pelear con el pasado de tu padre."

"Así que más persona se unen…" hablo en voz baja Alicia con aburrimiento. "Tienen un poco de razón de mi relación con mi padre, pero me pregunto porque quieren pelear con el pasado de mi padre."

"Es algo sencillo." Esdeath hablo. "Tu padre siempre nos dice que si queremos aspirar alto debemos ir por enemigos fuertes."

"Por ahora conocemos que tu padre es el más fuerte. Así que buscamos pelear con él para mejorar." Izayoi hablo después de Esdeath.

Alicia, apoyando la cabeza en su puño derecho y mirando con aburrimiento, analizó la situación.

"Puedo hacer eso… pero tendrás un tiempo límite si quieres aprovechar eso."

Izayoi señalo que continuara.

"Dos semanas. Así que debes aprovecharlo correctamente."

Esdeath e Izayoi se miraron, para luego sonreír con confianza.

"Tiempo suficiente para nosotras."

Alicia soltó un leve suspiro.

[Sión, Puerta Exterior Número: 156]

Sión una hermosa y la joya radiante de las tierras sagradas, era una ciudadela mística rodeada de altas murallas de mármol blanco que resplandecían bajo el sol. Sus puertas doradas, decoradas con intrincados relieves de antiguos héroes y dioses, se abrían a un mundo lleno de maravillas y misticismo.

En el corazón de Sión se erigía el Gran Templo, un edificio imponente de columnas doradas y cúpulas de cristal, donde los sacerdotes y sacerdotisas ofrecían sus plegarias a los dioses. Este templo era conocido por su sala de oráculos, donde las profecías eran grabadas en tabletas de oro y guardadas por los más sabios.

Los jardines de Sión eran un paraíso de flora exótica y fuentes cristalinas. Árboles frutales de diversas especies, algunos considerados sagrados, florecían todo el año. Los caminos de piedra serpenteaban a través de los jardines, llevando a los visitantes a recintos secretos donde se celebraban rituales antiguos.

La Biblioteca de Sión albergaba el conocimiento de eras pasadas. Manuscritos, pergaminos y libros sagrados llenaban los estantes de esta vasta colección, custodiada por eruditos dedicados a preservar y expandir el saber de la humanidad.

Los habitantes de Sión vivían en armonía, guiados por una profunda fe en los dioses y un fuerte sentido de comunidad. La vida diaria se centraba en rituales y festividades que honraban a los seres divinos, con celebraciones que iluminaban la ciudad con antorchas y cánticos sagrados. Los ciudadanos, devotos y diligentes, trabajaban juntos para mantener la belleza y santidad de su hogar.

La ciudad estaba protegida por una élite de guerreros conocidos como los Guardianes de la Luz. Estos defensores, entrenados en artes marciales sagradas y portadores de armas bendecidas, juraban proteger la ciudad y sus habitantes de cualquier amenaza. Los Guardianes eran respetados y honrados por su valentía y compromiso con la paz de Sión.

Sin embargo, esta era dorada llegó a su fin con la llegada del [Señor Demonio] Rey Oni Sengo, un individuo sediento de poder y destrucción. Con su fuerza descomunal y sed de sangre, asaltó la ciudad con una furia devastadora. Los robustos muros que una vez parecían indestructibles cayeron ante su implacable avance. El sonido de las espadas resonaba en las calles mientras el cielo se oscurecía con humo y fuego.

El Gran Templo, el corazón espiritual de Sión, fue el último en caer ante su furioso ataque. Las cúpulas se rompieron y las columnas doradas se convirtieron en escombros. Las antiguas profecías grabadas en piedra se perdieron en la destrucción, y los valientes sacerdotes y sacerdotisas defendieron su sagrado hogar hasta el último aliento.

Al final de la batalla, Sión se transformó en una sombra de su antigua gloria. Solo quedaban ruinas humeantes y los jardines celestiales eran solo un recuerdo. Los pocos supervivientes escaparon, llevando consigo historias de tiempos mejores y la esperanza de un día ver renacer su ciudad sagrada.

{Izayoi y Esdeath}

Se encontraban desconcertadas, contemplando únicamente escombros y ruinas, con un fuego crepitante que devoraba lo que alguna vez fue una próspera ciudad.

"Todo esto explicaría una cosa." Murmuró Izayoi.

"El causante es Muramasa." Respondió Esdeath mientras contemplaba los horizontes de aquella devastación.

Empezaron a caminar explorando la antigua ciudad de Sión y buscando al menos respuesta de Muramasa.

Donde su respuesta había sido más rápido de lo que imaginaba. Una gran montaña de cuerpos muertos se erguía ante ellos. En la cima, un hombre albino con cuernos delgados, mitad negro y mitad rojo, devoraba los cuerpos con desagrado.

"… Está comiendo los cuerpos muertos, ¿verdad?" Izayoi miraba asqueada la situación.

"Si, eso está haciendo él." Esdeath mostraba indiferencia por aquella acción de Muramasa.

Parece que su pequeña conversación fue escuchada por el individuo.

"¿De qué imaginabas que se alimentaba un Oni?" Preguntó él, una vez girando su mirada hacia ellas dos, mientras seguía comiendo.

"Nos olvidamos de ese detalle." Siseo Izayoi.

"Cuando ves que actúa como alguien estúpido, a veces uno se olvida de que es un monstruo." suspiró Esdeath con resignación.

"Siento que me insulta. Pero no tengo idea de quienes son ustedes, me pueden decir sus nombres."

[Señor Demonio] Rey Oni Sengo, Edad: 500+.

"Wow, que seriedad la tuya como se nota que has cambiado por los siglos." Se burlo Izayoi.

"Supongo que me conocen y viajaron a esta época." Parecía que Muramasa no encontraba una sorpresa la situación de las dos chicas.

"Te conocemos en el futuro, pero como alguien imbécil." Respondió Izayoi.

"Así que un imbécil… no importa." Muramasa se relajó sintiendo su estómago lleno. "Pero aun así no contestaron mi pregunta, quienes son."

"Me llamo Esdeath, la rubia esta es Izayoi Saigou."

"Porque dijiste rubia como algo despectivo." Izayoi se quejó de Esdeath donde solo se encogió de hombros.

"Bien, agua oxigenada y cabello smurf. Pero enserio porque viajaron al pasado de Little Garden."

"¡Oye!" Ellas reclamaron con enojo.

Muramasa solo limpio su oreja evadiendo el reclamo de las chicas.

En ese momento la tierra empezaba a temblar con fuerza donde poco a poco se abrió la tierra para tragar los escombros que pertenecían a Sión.

"Parece que comenzó."

Esdeath e Izayoi escucharon el murmullo de Muramasa.

Cuando en ese preciso momento no se dieron cuenta de cómo y cuando llegaron a otro lugar surrealista, fue un abrir y cerrar de ojo.

"Qué es este lugar." Izayoi miro con curiosidad lo que había en ese lugar.

"Se lo que sea este lugar, no me gusta por eso bichos." Esdeath no se dio cuenta que estaba temblando de miedo por ver eso bichos.

"Por si acaso conocieron algunos Ángeles en su mundo." Muramasa miro confundido por que se dio cuenta que era la primera vez que ven un Ángel de Little Garden.

"Conocemos a los Ángeles de nuestro mundo, pero son demasiado diferente ya que su apariencia es la de un humano con alas de pájaros." Respondió Izayoi.

"Nunca vimos Ojos con plumajes de pájaros." Se filtraba el temor de Esdeath al decir eso.

"Hmph. Bienvenido al Territorio de los Ángeles de la Biblia."

Muramasa se levantó dándole la espalda a las chicas para mirar a los horribles ángeles conformado de ojos y plumajes de aves con más apariencia tenebrosas.

El territorio donde solo habita tres tipos de Ángeles: Serafines, Querubines y Tronos.

[Terra Luminum, Puerta Exterior Número: ¿?]

"Nunca respondieron porque viajaron al pasado de Little Garden." Muramasa miro de reojo a Izayoi y Esdeath.

Ellas respondieron al mismo tiempo. "Queremos volvernos más fuerte."

Una ligera risa escapo de los labios de Muramasa. "Por lo que veo no conocieron a seres más fuerte que yo."

Asintieron lo que dijo Muramasa.

"Es una lástima. Pero lamentablemente yo no soy el ser más fuerte que existe en Little Garden."

Izayoi señalo a los Ángeles donde arqueo la ceja. Muramasa negó eso moviendo su cabeza.

"Aunque los Ángeles son los seres más fuertes de la Biblia, ellos no están en la cima del pináculo de Little Garden."

"Por la forma de decirlo, tú conoce quienes están en la cima, ¿verdad?" Izayoi pregunto con curiosidad.

"Por ahora a tres… Azi Dahaka, Reina Hallowen y Shiroyasha. No tengo idea si hay alguien más que puede rivalizar a eso tres monstruos en la cima de Little Garden."

Izayoi y Esdeath se miraron al escuchar el nombre de alguien que conocieron hace 1 mes.

"De seguro conocieron a Shiroyasha." Muramasa entendió rápido la expresión de las chicas.

"No creo, pero puedes describir su apariencia." Esdeath hablo recordando a la loli que siempre mencionaba Izayoi.

"Es una niña de cabello blanco con pequeños cuernos negro en su cabeza, siempre usa un kimono."

"Ah, parece que nos encontramos con ella." dijo Izayoi, golpeando su puño contra la palma de su otra mano al darse cuenta de que efectivamente era ella.

"Ella es más fuerte que yo, pero aun puedo sobrevivir si tengo una pelea a muerte con ella."

"Si eres capaz de eso, entonces que andas haciendo en este lugar." Esdeath mostro curiosidad por las acciones de Muramasa.

"Entrenamiento."

Lo que dijo Muramasa hizo que ellas dos alzaran levemente las cejas.

"Ustedes conocen mi versión futura. Ahora mismo estoy recorriendo ese camino para alcanzar la cima de Little Garden. Para llegar allí, debo enfrentar a enemigos que están un escalón por encima de mí y derribarlos con mis propios puños. Y viendo a ustedes, vinieron por lo mismo, ¿correcto?"

"Así es. Y si estás diciendo que estos ángeles están por encima de ti, entonces serán una oportunidad para fortalecer nuestra fuerza."

Izayoi camino cerca de Muramasa.

"No me quedaré atrás. También anhelo superar mis límites y lograr matarte en el futuro."

"Huh." Eso confundió a Muramasa. "Así que matarme… me parece bien eso. Kurumi y Shiro ustedes también salgan."

De la sombra de Muramasa emergieron dos chicas de apariencia casi idéntica. Una tenía el cabello negro en dos coletas, mientras que la otra, con el mismo estilo de cabello, lo llevaba en color blanco.

"Me estaba cansando de escuchar las estúpidas conversaciones que tenían." dijo Shiro, la hermosa chica de cabello blanco y ojos heterocromáticos de rojo y azul.

"Puedo entender tus sentimientos, Shiro, pero es muy interesante ver a dos personas del futuro viajando al pasado." comentó Kurumi, observando la situación con un rostro divertido, mientras sus ojos heterocromáticos de rojo y dorado brillaban de emoción.

Izayoi y Esdeath miraron con leve sorpresa los ojos de las dos chicas. Aunque ya habían visto ojos similares en Alicia Muramasa, les sorprendió descubrir que había dos hijas más de Muramasa.

"Es hora de comenzar." dijo Muramasa, llevando su mano derecha hacia la parte posterior de su cuello y comenzando a caminar hacia el frente.

Detrás de él, lo seguían sus hijas, junto con las dos chicas viajeras del futuro.