la ciudad se levantaba ante sus ojos, imponente, poderosa y hasta podria decirse lujosa...

hace apenas algunos momentos qué arribaban a la entrada de aquella majestuosa ciudad, shifu observaba con un ligero asombro las calles y mercados por los cuales pasaban para llegar a su destino, los grandes edificios eran completamente diferentes a los que el acostumbraba en el valle de la paz, observaba fascinado el ir y venir de las diferentes criaturas que arribaban al puerto, bajando de navios tan grandes que podrian considerarse criaturas mitologicas del oceano y asi mismo de embarcaciones un tanto más pequeñas, a pesar de ya tener conocimiento acerca de la gran ciudad, esta era la primera vez que la visitaba...

se tomo el capricho de hacer unas cuantas paradas solo para poder contemplar el gran puerto y las enormes embarcaciones que se encontraban, contemplaba la gran cantidad de humanos que desembarcaban a la gran ciudadela, vestidos en su mayoria con ropa elegante y altos sombreros de copa para los caballeros, y vestidos pomposos y un tanto voluminosos para las damas, aunque tambien observaba a humanos con ropaje mas sencillo e inclusive mas desgastado, cientos de obreros, comerciantes y demas bajaban de embarcaciones más pequeñas, sin embargo dicha emoción fue reemplazada por confusión al observar a una gran cantidad de humanos encadenados bajando de algunos navíos, había de todo un poco, desde hombres de gran tamaño hasta mujeres e incluso infantes, horrorizado, dirigió su mirada hacia una multitud bastante animada en una de las chozas de aquel puerto...

curioso se aproximó hacia dicha multitud para saber que es lo que pasaba, seguido en todo momento de uno de los búfalos que jalaban su carruaje quien respondía al nombre de To...

-es una subasta de esclavos, habló el búfalo a sus espaldas...

-esto... es normal?, preguntó con incredulidad el panda rojo...

-desde hace unos años lo es, en esta parte de la ciudad se permite la compra y venta de esclavos, tanto de humanos como de hombres bestia, que es como nos llaman, respondió To un poco incómodo...

la multitud sonaba enérgica, las ofertas y demandas se lograban apreciar por los alrededores, los precios variaban dependiendo el especimen a vender, shifu observaba con indignación y un poco de ira dicha escena, el jamás había sido partidario de la esclavitud y mucho menos de lo que la conllevaba...

-como que en esta parte de la ciudad?, preguntó shifu con acidez...

-esta es una pequeña sección del distrito comercial de la ciudad, aquí por lo regular son un poco menos "exigentes" con las leyes de ese tipo, a partir de las siguientes cuadras rumbo al palacio gubernamental las cosas cambian un poco, explicó el búfalo...

-cambian un poco he?, respondió sarcásticamente shifu...

-buscan mantener una vista "civilizada" de la ciudad ante los ojos de la alta sociedad, respondió una vez más con simpleza To...

-ocultar o "disimular" actos de esa índole... ya veo, habló para si mismo el panda rojo...

volteando a observar al joven búfalo shifu agradeció cortésmente su explicación...

-llevame al palacio gubernamental, pidió cortésmente el maestro...

-a la orden, respondió energéticamente el búfalo...

una vez que shifu abordará una vez más el carruaje partieron al destino solicitado, tal y como había explicado el búfalo al irse adentrando cada vez más en la gran ciudadela shifu comenzó a notar los cambios entre las calles y edificios, dejando de lado los mercados y zonas de comercio comenzaron a ser reemplazados por sitios más elegantes y de mayor categoría, tiendas de ropas finas y restaurantes lujosos se lograban apreciar, la presencia de humanos en las calles también aumentaba, la mayoría portando elegantes ropajes con sombreros de copa y vestidos pomposos, vestidos un tanto exagerados a opinión del maestro, así permaneció contemplando el ir y venir de dichas criaturas a lo largo de las calles hasta que fugazmente apareció en su mente la presencia de su hija tigresa, cómo habría reaccionado ella en caso que le hubiera tomado la palabra y lo hubiera acompañado a esta grande y rara ciudad?, habría hecho algún tipo de escándalo en aquella venta sin igual?...

-hemos llegado, gritó el joven búfalo desde la punta del grupo que jalaba de aquel carruaje...

el carruaje se detuvo y de el fue abierta la puerta en la cual ya le esperaba el joven búfalo una vez más, shifu bajo del carruaje y observó el lugar, era su primera vez en el palacio gubernamental de aquella ciudad y vaya que quedó sorprendido al observar la gran arquitectura que se alzaba delante de el...

-te agradezco mucho tus servicios To, agradeció shifu mientras tomaba su pesuña del joven búfalo...

-no tiene nada que agradecer maestro shifu, realmente disfruté este viaje, no se ofenda pero la verdad fue más fácil de transportarlo que a otros clientes que han contratado mis servicios, dijo sonriente el joven búfalo...

-debe ser por mi gran tamaño no crees?, bromeó el pequeño panda rojo...

-jajaja vaya que sí maestro, respondió con una carcajada To contagiando al resto de sus compañeros...

-bien, es hora de nuestra despedida, exclamó shifu...

-si claro maestro, volveremos por usted mañana a medio día que le parece?, preguntó To amablemente...

-me parece bien, aunque a decir verdad no sé cuánto tiempo tomen los asuntos que tengo aquí, así que no quisiera que vinieran en vano, explicó shifu...

-en ese caso vendré solamente yo, pensaba en darle un pequeño recorrido por la ciudad, para que la conozca y se quite ese mal sabor de boca que acabamos de tener en el puerto, invitó alegremente To...

-me parece perfecto, agradezco mucho tu invitación, respondió shifu con una pequeña sonrisa...

-bien, hasta mañana entonces, se despidió To mientras jalaba una vez más el carruaje junto a sus compañeros...

shifu permaneció por algunos instantes observando al grupo de búfalos que le habían traído hasta la ciudad, después de recordar su motivo de visita dirigió su mirada hacia el gran palacio, comenzó a avanzar a paso lento pero decidido hasta llegar a la puerta principal donde se encontraba un grupo de guardias con armaduras completamente negras, y con cascos que impedían saber sus identidades, continuo caminando, las puertas del palacio estaban abiertas algo extraño para el sin embargo le resto importancia, el lugar era bastante amplio, el acceso principal conducía a un enorme patio abierto, con un gran jardín decorado con pequeños caminos forrados de piedra, los cuales conducían a pequeñas bancas distribuidas a lo largo del jardín, el patio se encontraba lleno de guardias y de visitantes, en su mayoría humanos que curiosos arribaban a conocer el sitio histórico del encuentro entre dos mundos, al centro de aquel gran jardín conformado por arboles de cerezo y duraznos, se alzaba majestuosamente el gran monumento en honor al gran explorador SALAZAR y al gran gobernante FENG, en un gran apretón de manos, representando así el descubrimiento y la unión de ambas especies...

"esto es algo modesto supongo" pensó en sus adentros el panda rojo dirigiendo su mirada a una pequeña coneja que parecía atender la recepción del lugar...

-buen día señorita, soy el maestro shifu del palacio de jade, he venido a la reunión del consejo de maestros de este año, saludó cortésmente el maestro...

-por supuesto maestro shifu, le estábamos esperando por favor deme un segundo, respondió amablemente la pequeña coneja, mientras llamaba a una de sus compañeras...

-por favor acompaña al maestro shifu a la sala de conferencias, ahí le están esperando maestro, explicó al panda rojo...

-por aquí maestro, invitó la pequeña coneja...

shifu agradeció por la atención y comenzó a seguir el mismo camino que su acompañante...

-es su primera vez en la ciudad?, preguntó la coneja con una sonrisa...

-realmente no, hace muchos años cuando aún era un simple estudiante tuve la fortuna de acompañar a mi maestro a este lugar, sin embargo era muy diferente a lo actual, respondió shifu serenamente...

caminaron por algunos minutos más, por los elegantes pasillos del palacio gubernamental, shifu se sorprendió bastante al percatarse de la gran cantidad de soldados con armaduras negras dentro del palacio...

-tienen mucha seguridad, habló shifu...

-la seguridad es una de las prioridades del gobernador Shan, explicó la pequeña coneja...

-gobernador?, preguntó extrañado shifu...

-sucede algo?, respondió ella...

-no, nada, respondió el panda rojo con simpleza...

asi permanecieron por algunos momentos subiendo algunas cuantas escaleras hasta llegar al segundo piso de aquel gran palacio, atravesando algunos otros pasillos hasta toparse una gran puerta, de cedro rojo con dos leones grabados en ella, shifu contempló por unos instantes la majestuosa puerta que se alzaba frente a el...

-aqui es maestro, ya hemos dado el aviso en unos momentos vendrá el gobernador a recibirlo, explicó la coneja mientras abría la puerta para el...

-te agradezco mucho, se despidió shifu...

la pequeña mamífera se despidió cortésmente y dió la media vuelta continuando con su camino, shifu entro al gran salón encontrándose con una gran mesa y 13 sillas a su alrededor, la madera denotaba ser de la más excelente calidad, al igual que el resto del sillar, shifu observaba curioso los cuadros que decoraban aquel gran salón, la mayoría eran simples representaciones de la familia real y del escudo que estos portaban, ahora que lo pensaba mejor ese escudo se encontraba en todos lados, principalmente en las pesadas armaduras de los guardias que custodiaban la ciudad, al cabo de unos instantes el ruido de las puertas abriéndose nuevamente captaron su atención, el joven gobernador había llegado...

-maestro shifu, es un placer conocerlo al fin, saludó amablemente el joven león mientras extendía su zarpa hacia el panda rojo...

-el gusto es mío joven shan, respondió cortésmente completando el apretón de manos...

-veo que sabe de mí, respondió Shan mientras se dirigía a una de las sillas en aquella gran mesa...

-ying zaho es una ciudad popular, al igual que su dirigente actual, respondió shifu mientras tomaba asiento...

-creo que es de familia, dijo el joven león...

shifu solamente asintió en silencio con una pequeña sonrisa...

-vaya! , discúlpeme dónde están mis modales?, exclamó apenado el león...

rápidamente mandó a llamar a una de las pequeñas conejas que hacía unos instantes había conducido al maestro al gran salón...

- whisky, y café por favor, ordenó amablemente el joven león a la pequeña coneja...

la coneja haciendo caso a la orden salió rápidamente de la habitación, dejando nuevamente solos al pequeño panda rojo y al león...

-tengo entendido que por su profesión no puede consumir ningún tipo de bebidas embriagantes no es así?, preguntó Shan...

-asi es, es uno de los principales juramentos para ser un maestro de Kung fu, debemos mantener cuerpo, mente y alma, lo más sanos posible, explicó shifu...

-vaya, todo un dilema he?, realmente es una pena, yo considero al whisky cómo una de las maravillas del nuevo mundo, mencionó el joven león un poco entusiasmado...

-es tal "whisky" acaso es una bebida embriagante?, preguntó shifu...

-así es, lo trajeron las primeras embarcaciones humanas en su momento, comentó Shan...

-hableme un poco acerca de ellos, los... "¿humanos?" , es correcto ese término?, preguntó shifu...

-si, es correcto...

-cómo fue el "primer encuentro", supongo que usted no lo vió ya que era muy joven o quizá no lo recuerda, pero que piensa acerca de estas criaturas?, preguntó shifu mientras juntaba sus manos sobre la mesa...

-justo como usted lo dice, la verdad no recuerdo aquel evento, sin embargo si pudiera describirlos con una palabra a mi me gustaría que fuera... "fascinante", respondió enérgicamente el león...

-cómo fue que llegó a esa conclusión?, preguntó shifu un poco extrañado...

-he tenido la oportunidad de viajar por todo el mundo, y he visto las maravillas que ellos han logrado crear cómo especie, ciudades tan enormes que no se pueden recorrer en un solo dia, la iluminación de ellas es por medio de una fuente de energía que ellos suelen llamar "energía eléctrica", entre otras cosas, explicaba alegremente el joven león...

-veo que es muy moderada su admiración por esas criaturas, mencionó shifu mientras observaba al joven león ir y venir por la sala explicando emocionadamente las maravillas que los humanos traían consigo...

-acaso he sido muy obvio?, bromeó el felino...

-tan solo un poco, respondió divertido el maestro...

-mis disculpas, es sólo que he visto tantas maravillas en su mundo, que la verdad es imposible no quedar asombrado al contemplar todo lo que han logrado, explicaba el felino alzando su mirada y ambos brazos con emoción hacia el cielo...

-sin embargo, añadió shifu...

-sucede algo maestro?, preguntó desconcertado el felino...

-he tenido la oportunidad de observar ciertas "prácticas" en el puerto con las cuales no estoy muy de acuerdo, explicó el panda rojo con una ligera molestia...

-entiendo, murmuró él felino...

-podría explicarme más detalladamente aquella situación tan grotesca que pude observar con las criaturas que usted admira tanto?, cuestionó shifu con firmeza...

-acompañeme, demandó el felino...

shifu desconcertado hizo caso a la voz del joven león, siguiéndolo hasta llegar a un balcón del cual se lograban apreciar toda la ciudad...

-que es lo que ve?, cuestionó el felino...

shifu permaneció en silencio por algunos instantes, observaba con detenimiento el ir y venir de todas las criaturas en las calles de la ciudad en ese día soleado, la vida y movimiento yacían en abundancia, realmente se lograban apreciar un mayor flujo de personas a dónde fuera que dirigiera la mirada, carruajes elegantes transportando a humanos y hombres bestia por igual, desde pequeños puestos ambulantes hasta grandes edificaciones alzándose majestuosamente...

-ahora entiendo el porque le llaman "ciudad mágica", realmente es un panorama poco usual el que yace ante mí, declaró shifu tranquilamente mientras observaba la ciudad...

-yo veo progreso, innovación... futuro, dijo el león mientras extendía sus brazos con pasión...

shifu lo observó extrañado, le parecía una actuación un tanto "peculiar" y sospechosa, en un principio le comparaba con su estudiante de blanco y negro sin embargo solo basto con charlar por algunos minutos con el para darse cuenta que el era por mucho, bastante diferente a su estudiante, podría decirse que gozaba de una pasión un tanto desenfrenada...

-y ese futuro... ¿le parece bien que sea en base a una actividad repugnante cómo lo es la esclavitud?, cuestionó firmemente al joven felino...

-por supuesto que no, declaró el león ya un poco más tranquilo mientras se peinaba su erizada melena castaña...

-¿entonces?, ¿porque permite que ese tipo de actividades se realicen en la capitanía del puerto con toda libertad?, volvió a cuestionar al joven león...

shan simplemente observó con tranquilidad al pequeño panda rojo, soltando un suspiro de resignación respondió...

-presión...

shifu lo observó bastante confundido, no comprendía a lo que se refería el joven felino, estuvo a punto de realizar otra pregunta sin embargo Shan continuó...

-cuando comenzaron a llegar estos "humanos", la ciudad creció a un ritmo muy acelerado, mi abuelo en ese entonces, presionó a mi padre para que accediera a algunas "demandas" por parte de estos visitantes, decía que el progreso no se podía detener, a pesar que mi padre ya cumplía con las funciones de gobernador, mi abuelo seguía siendo el verdadero líder, tal y cómo es mi caso actualmente...

shifu permaneció en silencio por algunos instantes, por fin creía comprender la causa de tal situación, y por ende a lo cual estaba atado el joven felino...

-a mi me gusta verlo cómo "un mal necesario", después de todo... ¿ying zaho ahora refleja un gran ingreso para la economía de china no es así?, declaró Shan mientras observaba a shifu con una pequeña sonrisa...

-¿un mal necesario he?, murmuró para si mismo shifu...

-es por eso que lo necesito maestro, declaró de repente Shan observando la ciudad una vez más...

-¿a que se refiere?, preguntó desconcertado el maestro de Kung fu...

-alguien cómo usted, con su visión, su reputación y sobre todo su posición, será un gran aliado para mí causa, declaró el joven león confiado...

-no entiendo, mencionó shifu aún más desconcertado...

-usted es uno de los maestros más reconocidos y respetados de la nación, con usted a mi lado haremos que los señores feudales y lords de la región escuchen, podemos hacer un gran cambio aquí y en china, no solo podremos presionar para que abolen la esclavitud, podemos llevar juntos todo este progreso e innovación al resto de china, invitó sonriente el joven león...

-una oferta bastante tentadora, declaró shifu...

shan presionaba sus puños de manera ansiosa mientras observaba y escuchaba al panda rojo...

-sin embargo, añadió shifu...

-¿sin embargo?, preguntó nervioso el felino...

-no es una decisión que pueda tomar yo solo, después de todo el propósito de la reunión del día de hoy es para determinar el futuro de esta ciudad, aún debemos escuchar al resto de los maestros, respondió shifu serenamente...

shan un poco extrañado entendió la declaración del respetado maestro, con un poco de incomodidad asintió en silencio...

-entiendo perfectamente la ultima voluntad de mi difunto padre, declaró el joven león...

shifu asintió con una mirada comprensible...

-sin embargo, abusando de su confianza y amabilidad me gustaría pedirle un favor maestro, añadió el leon mientras observaba intensamente al panda rojo...

-¿que clase de favor?, preguntó shifu extrañado...

-me gustaría que me tomara en cuenta frente al consejo de maestros, me gustaría serles de utilidad para el manejo de esta ciudad, cómo un consejero más o un simple oficinista, mencionó shan...

-creo que podría ayudarle en eso, despues de todo ¿quién mejor que usted para servir de apoyo en el manejo de esta gran ciudad?, respondió shifu cortésmente...

En eso estaban ambos individuos cuando de pronto se abrieron las puertas del gran salón, haciendo acto de presencia una vez mas la pequeña coneja de hace unos minutos volviendo acompañada de dos compañeras más, cada una con las peticiones del joven leon...

-disculpe la demora joven amo, nos hemos tomado la libertad de traerle ademas de lo que solicitó, un poco de té de jazmín en caso que el "café" no sea del agrado del maestro shifu, habló la coneja mientras sus compañeras colocaban dos teteras sobre la mesa, asi como dos pares de tazas...

la botella de cristal la cual contenía el tan ansiado licor tambien fue colocada al centro de aquella gran mesa...

-no se preocupen, les agradezco a todas su consideración y su gran esfuerzo, eso es todo pueden retirarse, mencionó shan con amabilidad...

-¿me acompaña?, invitó el joven león...

-si claro, accedió el maestro...

ambos tomaron sus respectivos asientos frente a la mesa...

-sabe?, en verdad agradezco que hayamos tenido está conversación, realmente lo disfruté bastante, declaró de pronto el felino mientras servía amablemente una taza de café para el maestro...

ha si?, preguntó shifu extrañado mientras tomaba la humeante taza entre sus manos...

-sí, usted es el tipo de hombre que sabe escuchar y respetar una opinión, aunque está este equivocada, declaró el felino mientras llenaba su vaso de cristal con el licor...

shifu observó por algunos instantes la humeante taza, desconcertado y desconfiado por el color de esta, sin embargo el olor que está desprendía era algo aún más desconcertante para él, no reflejaba algún olor desagradable o sospechoso, podría decirse que hasta incluso le pareciera agradable...

-sucede algo?, preguntó extrañado Shan...

-este... ¿"café"?, ¿este es su color natural?, cuestionó shifu de manera desconfiada...

-vaya, mis disculpas maestro, me he olvidado de explicarle un poco acerca de esta maravilla, declaró Shan mientras le acercaba un pequeño tazón, en el cual yacía en su interior un poco de azúcar...

-de los primeros productos que arribaron a esta ciudad con la llegada de las primeras embarcaciones humanas, fueron estás dos maravillas, el café y la azúcar, exclamó Shan mientras mostraba la tetera y el pequeño tazón...

-¿azucar?, preguntó extrañado shifu...

-exacto maestro, ambos productos son cultivados y cosechados en las zonas tropicales de América, exportados en su mayoría por el reino humano español, la corona de Castilla le llaman, en fin que su apariencia no lo engañe y mucho menos lo haga desconfiar, el color negro es un derivado del grano del café en sí, tostado, y después molido es exportado en su presentación en polvo, para que sea fácil de disolver con agua caliente, la azúcar es un aditivo para endulzar la amargura que puede ofrecer el café por si solo, explicaba detalladamente el felino mientras añadía un poco de azúcar en la humeante taza del maestro...

shifu habiendo escuchado esa explicación estuvo a punto de pegar el primer sorbo, sin embargo fue detenido por el mismo joven shan...

-espere un poco maestro, se me olvidaba que también el azúcar puede ser empleada en el té...

- ¿en verdad?, preguntó shifu curioso...

-permitame por favor, exclamó el joven león...

shan tomo la otra tetera, sirviendo en otra taza un poco de té jazmín...

-¿alguna vez probó el te de jazmín con un toque dulce?, preguntó alegré el felino...

-realmente no, declaró shifu mientras observaba cómo agregaba un poco de azúcar a la humeante taza...

-entonces está será toda una experiencia para usted, mencionó confiado Shan...

shan extendió la taza a un confundido maestro shifu...

-los humanos tiene una extraña frase para brindar, habló Shan...

-¿cuál sería?, preguntó shifu...

-salud, respondió Shan mientras alzaba su vaso con licor...

-salud?, respondió un poco nervioso shifu...

ambos tomaron de sus respectivos brebajes, la sensación que provocó el té en shifu fue muy diferente a lo cuál estaba acostumbrado, era el mismo té de siempre solo que "diferente"...

-y bien... ¿que le parece?, preguntó Shan sonriente...

-bastante agradable, se logra percibir la dulzura en cuanto lo bebo, declaró shifu con una sonrisa...

-perfecto, mencionó el felino...

-¡bien! , ahora ¿que le parece si prueba el café?, le aseguró que será un sabor que su paladar jamás a experimentado, invitó Shan ansioso...

shifu haciendo caso a la sugerencia bebió de la taza donde yacía el café, una sensación muy diferente a la cual había experimentado hacía unos instantes, sabor y sensación intensa y amarga, sin embargo por alguna razón agradable, algo un tanto difícil de explicar...

-se siente una fuerte intensidad, sin embargo no es del todo desagradable, declaró shifu aún con la taza en sus manos...

shan asintió en silencio sonriente, permanecieron así por algunos minutos, charlando animadamente acerca de cultura, historia y filosofía, shifu estaba bastante sorprendido por el nivel intelectual que poseía el joven felino, sabía que al ser hijo del gobernador de una ciudad rica como lo era ying zaho el joven león tendría una educación bastante completa, sin embargo la idea que el tenía respecto al joven felino era la de un joven alocado, rebelde y quizá bastante fanfarrón, sin embargo encontró todo lo contrario, un joven bastante inteligente, culto, y educado, ahora le hacía cuestionarse un poco acerca de la decisión del difunto padre con respecto a la gubernatura de la ciudad y sus territorios, después de todo la reunión acerca del consejo de maestros era con esa finalidad...

-y asi fue el cómo descubrí lo delicioso que puede ser el "chocolate", contaba animadamente el joven felino con una sonrisa dental...

-ahora entiendo su fascinación por los humanos, sin embargo me gustaria preguntarle algo joven shan y espero no lo tome a mal, declaro shifu cambiando a un tono un poco más serio...

-porsupuesto maestro digame, respondio confiado el leon...

-yo recuerdo la guardia y los soldados de esta ciudadela completamente diferentes a lo actual, que a sucedido?, preguntó firmemente el panda rojo...

-es solo un pequeño cambio para dar una visión "diferente" a los turistas, nada importante, respondió con simpleza el felino...

-me imagino que ese "cambio" fue realizado por su persona, mencionó shifu mientras tomaba otro sorbo de la humeante taza...

-espero no generar incomodidad alguna por esa pequeña libertad que me he tomado, respondió un poco apenado y nervioso el joven león...

-a todo esto... ¿dónde tienes al resto del consejo?, cuestionó seriamente el maestro...

-¿disculpe?, preguntó extrañado...

he notado que nos han estado vigilado desde que entre a esta habitacion, declaró el panda rojo...

-eso es, el león estaba por continuar sin embargo fue interrumpido por el maestro de Kung fu...

-a que le teme joven shan?, cuestionó firmemente mientras tomaba el bastón que alguna vez perteneció al maestro Ooway...

-no sé a dónde quiere llegar con esto!, exclamó el león mientras se levantaba y retrocedía alejándose del panda rojo...

-es una simple pregunta, porque no es capaz de responder?, volvió a cuestionar él...

-son motivos de seguridad solamente, desde la repentina muerte de mi padre, tuvimos que tomar cartas en el asunto, declaró un poco asustado el felino...

-no veo el porque si habría muerto de causas naturales tal y cómo se declaró, mencionó shifu acercándose cada vez más al asustado león...

shan expandió su mirada rápidamente al entender la situación, al parecer había caído en la trampa, sus emociones le traicionaron y el cayó...

-acaso insinúa algo maestro?, cuestionó el felino mientras detenía su alejamiento del panda rojo...

-hay un refrán que muy conocido... el que nada debe nada teme, declaró shifu apuntando con su bastón a un tenso león...

shan se mantuvo recto, tomando nuevamente el control de su respiración y sus movimientos, el temor habría sido cambiado por algo más duro... "tenacidad"...

-tenga cuidado con sus palabras maestro, no queremos que esto termine de manera violenta o si?, habló Shan agachando su mirada y cuerpo hasta quedar frente a frente al maestro shifu...

-donde está el consejo de maestros?, susurró de manera amenazante al joven león...

shan dejo salir un pequeño suspiro al igual que una sonrisa un tanto confiada y altanera, levantando la mitad de su cuerpo y recuperando su postura caminó hacia atrás sin despegar la mirada del pequeño maestro...

-así que... he sido descubierto he?, preguntó al aire el león...

shifu observó con detenimiento los movimientos del león, atento a cualquier movimiento brusco o sospechoso de su parte...

-traiganlo! , gritó Shan generando un gran estruendo en la habitación...

al cabo de unos minutos arribaron dos guardias con armaduras negras, trayendo consigo al maestro chao, el viejo lagarto líder del consejo de maestros de toda china, shifu se sorprendió bastante por ver frente a el a uno de los maestros más fuertes y poderosos encadenado y visiblemente torturado cual si fuera un perro...

la situación fue muy imprevista, solo bastaron unos segundos del desviar su atención, lo único que logró escuchar fue un pequeño corre, segundos después, su mirada se tornó obscura y su conciencia se apagó...


Bueno, que les puedo decir?, la verdad tarde demasiado con este capítulo, han pasado muchas cosas y estos últimos días no han Sido muy buenos para mí, aún así espero y haya Sido de su agrado este capítulo, nos leemos en el siguiente...