EDWARD POV:

-Después de lo que paso en casa, con el episodio de Tanya, estoy cada vez más sobre protector (palabras de Esmee) yo solo estoy protegiendo a dos ángeles y no estoy dispuesto a que les pase algo malo, así que siempre que tengo que salir me las llevo conmigo.

Bella, Renesmee y yo llegáramos a la empresa, le pedí a Rick que estacionara el auto, baje para sacar la carriola y vi a mi Bella que la sacada de su porta bebés a la niña y la ponía en su carriola que tenia una almohada muy suave especial para ella, su oso de peluche abrazándolo

-Edward me siento extraña - lo decía mordiendo su labio inferior

-¿porqué ? - lo dije mirándola a los ojos

-y si alguien se enoja porque estamos ahí en tu oficina y si te regañan? lo dijo todo tan rápido que pensé que no le iba a entender.

-no te preocupes, soy el jefe después de todo, veras que no sucederá nada; ¿tienes todo? - le pregunte- a lo que ella asintió

Entramos al lobby de la empresa, y se comenzó a escuchar murmullos -¿Quién es ¿ella?,¿Por qué nunca la vimos?,¿La bebe será suya?-

-que no tienen nada que hacer más que chismear? esta empresa no se resolverá sola - les grite a todos.

Después de eso todos se dispersaron, en ese momento nosotros nos fuimos hacia el elevador y presioné el botón del último piso,

como buen caballero le abrí la puerta, su reacción fue de sorpresa, al ver mi oficina, de echo era una gran sala, tenía varios estantes de

libros, el escritorio con una silla muy elegante, frente a estas dos sillas de color marrón, al lado izquierdo estaba una pequeña sala, una televisión anclada al muro; me miro y le dije fuera hacia la sala, con mis manos le cogí la cara y le di un beso al cual ella me respondió, la mire a los ojos y le coloque un mechón detrás de su oreja, dios cuanto quería a esta mujer, todavía no me atrevía a decírselo, aunque sabía que ella me corresponde pero primero tenía que arreglar algunos asuntos y después…

-Edward, ¿Qué pasa? ¿De un momento a otro te quedaste callado - me lo dijo con el ceño fruncido - te pasa algo?

-No me pasa nada, solo es que estoy un poco retrasado con lo del trabajo, pero nada más… - quédate aquí mi amor el sillón es doble se hace cama por si quieres dormir o jugar con Renesmee

Mientras trabajaba en mi computadora, mis ángeles dormían. Llego

la hora del almuerzo y como si fuera un reloj se despierta Renesmee y detrás de ella mi Bella

-¿Qué hora es? - lo dijo bostezando

-Hora de almorzar - lo dije recogiendo a Renesmee que levantaba sus bracitos para que la cargara - vamos a almorzar aquí en la oficina o vamos a un restaurante cerca

-Todavía tienes mucho trabajo?

-No mucho… - le dije dándole un beso en esos ricos labios, ella se sonrrojo

-Me encanta cuando te sonrrojas - le dije acariciándole las mejillas

-Entonces salgamos - a lo cual yo asentí

Y así pasaron los días y los meses, hasta que llego el día del primer año de Renesmee, le hicimos una gran fiesta, en la parte trasera de la casa de mis padres, donde había payasos, decoraciones con

globos, una mesa con diferentes dulces, en el fondo su nombre grande lleno de luces y un pastel de dos pisos y mi hermosa cumpleañera feliz porque era centro de atención…

-Me quedo muy bien todo, ¿no crees hermanito? - era mi hermana Alice dando brinquitos a nuestro alrededor

-Claro que sí, eres la mejor - lo dije guiñándole un ojo y dándole un abrazo

Dentro de mi bolsillo tengo una cajita con un anillo que había comprado hace varios días en Tiffany; la única que lo sabía era mi loca hermana.

-Para cuando se lo vas a proponer? - me lo dijo en susurros

-Espera, tranquila - se lo dije también en susurros

-Qué pasa? - me pregunta mi princesa, pero cuando le iba a contestar salió corriendo a donde estaba Renesmee.

Cuando las veo reírse me hago la promesa que de hoy no pasaría… Hoy le voy a proponer que se case conmigo