Prólogo
¿Cómo te sentirías si de un momento a otro te encuentras en una situación difícil en tu vida?
¿Cómo te sentirías si de un momento a otro, te encuentras en un lugar que no reconoces para nada?
¿Cómo te sentirías si de un momento a otro, abres tus ojos y no reconoces para nada lo que te rodeaba?
¿Cómo te sentirías?
Es una pregunta complicada de responder debido a que las reacciones de las personas serán totalmente diferentes, reacciones que pueden ir desde la locura máxima hasta el relajo mismo, todo porque jamás creerían que esto fuese de verdad. Sería un sueño más, abrir los ojos y listo, comenzar de nuevo en su propia vida, no en la vida de algo o alguien más…
Pero…
¿Y si de verdad abres tus ojos, ves que todo lo que te rodeaba era algo que no te pertenece y encima y por más que te pellizques varias veces no logras despertar en tu propio mundo?
¿Qué harías?
¿Qué haces?
¿Qué deberías hacer?
Nada en la vida te prepara para algo así y por más que algún día sueñes con experimentar estar en el lugar del otro, el choque emocional y psicológico será devastador.
Dicho todo eso, es algo que sucedía entonces a nuestro querido protagonista que, de un momento a otro, no sabía dónde estaba o qué diablos hacía en el cuarto de un querido muchacho… o eso siente que es.
—¿Dónde… se supone que estoy? —se dijo a sí mismo. No reconocía nada del lugar donde se encontraba. Por más que intente reconocer los posters que se encuentran en el cuarto, por más que intente reconocer las figuras de acción, no reconoce ninguna—. ¿Esto es un cuarto? No… parce un… clóset…
Ah, otra cosa.
Se dio cuenta que donde estaba no era un cuarto en sí.
¿Cómo debe sentirse que debe estar en una especie de clóset que fue remodelado en un cuarto para este muchacho? ¿Debe ponerse feliz? Nunca tuvo un cuarto así…
Lo que importa ahora es que quiere saber dónde es que se encuentra.
¿Cómo es que pasó de estar dormido en una cama grande a estar en un cuarto pequeño?
De tanto mirar a sus alrededores, el cuarto parecía tener un equipo encima de unos de los muebles. Dicho espejo le sirvió para verse y llevarse una grata sorpresa, una que le hizo acercarse cada vez más y más al espejo mismo, pasando de estar sorprendido a estar incrédulo.
—¿Qué…? ¿Cabello blanco? ¿Ojos celestes? —se miró fijamente al espejo. Pensó que era una broma. Se pellizcó. Sintió dolor. Luego de eso, comenzó a moverse lentamente para ver si realmente su reflejo… eh, reflejaba sus acciones, sus movimientos. Cada movimiento se veía reflejado en el espejo lo que le hizo abrir más los ojos. Se quedó estático. Se paró recto—. No soy yo… claramente no soy yo…
Un pequeño y agudo dolor de cabeza comenzó en él.
Los recuerdos comenzaron a invadir su cabeza.
Información que siquiera él entendía, comenzó a aparecer.
Recuerdos de personas, recuerdos de familia, recuerdos de eventos con dicha familia…
Hermanas, tenía familia… ¿tenía hermanas?
Nunca tuvo hermanos en general, no sabe lo que es tal experiencia…
Pero…
Una… dos… tres…
En lo que los recuerdos vinieron a su cabeza y el dolor mismo de cabeza desapareció, dejó de tomarse la cabeza para mirarse al espejo, todavía haciendo algunas caras por el dolor que sintió. Luego, más preocupado que antes, se dijo a sí mismo:
—¿Cómo diablos tengo 10 hermanas?
Para luego pensar mucho mejor todo esto.
—No, ersta no es mi vida… aunque… ¿cómo puede ser que tengan 11 hijos? ¿Estaban aburridos o qué?
Por más recuerdos que ahora posea del dueño de este cuerpo, digamos que de alguna manera es… demasiado raro el hecho que una familia tenga 11 hijos. Entiende de alguna manera si es una familia de bajos recursos provenientes de una parte específica de un continente donde cada hijo equivale a mano de obra para que trabajen con los padres o en el peor de los casos, cobrar dinero del estado por cada hijo que uno tenga. Aun así, es llamativo que sea el único varón de la familia.
Por si fuera poco, entre más parece indagar en dichos recuerdos, más cosas puede ver que le llama la atención, de cómo vive la familia… de todo. Pero, esto no importa, para nada.
—¿Cómo puede ser que esté aquí? ¿Me morí como esas historias que solía leer en tiempos libres? No, por favor, espero que no sea así… Dios me libre y me guarde. Espero que no sea eso…
Digamos que en cierta manera es así…
Por otro lado, la razón de él en estar aquí… es algo rebuscado y algo complicado de explicar que implica, él no sabiendo esto, que hay dos hermanas involucradas de alguna manera en que esta persona, sea lo que sea, su alma, sus recuerdos, esté aquí. Dos hermanas que al parecer, una de ellas ha querido que su hermano cambie un poco, que sea más... bueno, más… ¿hermano? Y la otra, escuchando esto, decidió hacer algo con Lincoln.
La sorpresa que se llevará cuando se dé cuenta que funcionó perfectamente… aunque también se sentirá un tanto mal al saber que su hermano, su alma, ya no está más en ese cuerpo…
—… ¿qué debo hacer?
Se preguntó ahora el chico de cabellos blancos a quien corresponde el nombre de Lincoln Loud… otro detalle que vió fue que él y el resto de sus "hermanas" se llaman con un nombre que empieza con la letra L.. otra cosa curiosa… ¿es que esta familia no tiene algo normal?
Se va a dar cuenta que con el pasar de los días, aparte de saber qué diablos hacer ahora mismo, la familia Loud es todo menos normal…
