Anchorhead, Tatooine. 978 DRR, 22 ABY

La vida en Tatooine no era fácil, algunos la podrían describir como extremadamente dura, pero con la habilidades correctas uno podía sobrevivir de manera sencilla o hasta incluso relativamente cómoda. Puede que Haron y sus hermanos sean pequeños pero en cuestión de habilidades, superaban a incluso una buena parte de los adultos de Tatooine. Cuando sus padres se dieron cuenta de que no eran unos simples niños normales empezaron a enseñarles sus diferentes oficios y cabe decir que eran prácticamente hijos de sus madres ya que cada uno sobresalía en el campo donde operaba su respectiva madre.

Haron sobresalía a la hora de encontrar cosas que se podrían vender a un precio bastante bueno, que haya resultado bueno con las máquinas también ayudaba ya que podía reconocer piezas o partes de buena calidad pero que por algún fallo se quedaron como chatarra llegando incluso a comprarlas de comerciantes o depósitos que no sabían lo que tenían para que luego se puedan vender a un precio mucho mayor. Sus métodos favoritos eran entrar a las tiendas de partes pidiendo trabajo por un día, si lo contratan aprovechaba para revisar las diferentes piezas y máquinas que había e identificar las mejores para luego al día siguiente pasar a comprarlas bajo un glamour y revisar continuamente los depósitos de chatarra para sacar piezas en buen estado y que se puedan reparar las diferentes naves, droides y máquinas que se encontraban abandonadas.

Para piezas más complejas se dieron cuenta rápidamente que un hechizo reparo arreglaba la mayoría de las cosas y no les afectaba negativamente la exposición a la magia. Rápidamente se hicieron de una gran cantidad de piezas que podrían vender a muy buen precio.

Nalin contrario a su vida en la tierra, era bueno a la hora de la negociación y regateo ya que podía vender lo que Haron conseguía y reparaba a precios mucho más rentables para la familia, eso sí con un glamour puesto, ya que sería raro que un niño de tres años negociará como una persona con años de experiencia. No era raro ver a niños en las calles tratando de vender cosas pero usualmente tenían alrededor de siete años en adelante.

Darus por otro lado empezó rápidamente una red de información que les había conseguido sus primeros ingresos al enterarse de una gran recompensa por un dug que se había metido con Jabba el hutt. También empezó a conseguir clientes para las diferentes piezas y partes que tenían en stock.

Se hicieron rápidamente con un lugar a medio camino entre el centro de Anchorhead, donde se encontraban la mayoría de las tiendas y comercios y las afueras de la ciudad por qué pasaba desapercibido para la mayoría de la gente ya que no aportaba nada en cuanto a ubicación lo que lo hacía perfecto para usarlo como bodega y escondite para la mayoría de sus cosas, lo cubrieron rápidamente con protecciones anti intrusos y vincularon un encanto no notarme para hacerla pasar desapercibida gracias a una secuencia de runas que Darus diseño.

Algo que les enseñó su padre a los tres fue a cómo usar una pistola blaster con efectividad además de enseñarles a pelear de manera que sus pequeños cuerpos no sean una gran complicación, los tres por su cuenta eran buenos, pero juntos eran una fuerza a tener en cuenta algo que su padre les ayudo a aprovechar gracias a rigurosos entrenamientos. Su padre al ser mandaloriano de nacimiento fue entrenado desde una edad muy temprana en las diversas formas de su cultura, esforzándose para ser siempre el mejor en su vocación, algo que quería transmitir a sus hijos.

Una cosa que les demostró lo grande que es la galaxia fue el comienzo de las llamadas guerras clon, un conflicto entre la república y la confederación de sistemas independientes que se conformaba por sistemas que se retiraron de la república gracias a los altos impuestos exigidos y a la gran corrupción que percibían. Dónde quiera que iban se hablaba del conflicto a gran escala que estaba ocurriendo lo que les hizo preguntarse cómo se desarrollarían las cosas en el futuro.

No le dieron demasiadas vueltas al asunto puesto que estaban concentrados en seguir vendiendo para poder generar una buena cantidad de ingresos.

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Haron, Nalin y Darus se encontraban revisando el depósito de un dug a las afueras de Anchorhead buscando cosas que pudieran llevarse para reparar y vender. Era uno de los depósitos más grandes a las afueras de la ciudad con un terreno de casi dos hectáreas lo que dificulta la vigilancia y lo hacía un lugar ideal para sacar piezas sin tener que pagar por ellas ya que todo lo que estaba dentro se consideraba chatarra. Si encontraban algo lo colocaban en las mochilas que tenían a las cuales les pusieron encantos de expansión indetectables y encantos ligeros como pluma para poder llevar grandes cantidades de cosas.

Estaban revisando cerca de la parte trasera del depósito donde se encontraban la gran mayoría de naves abandonadas buscando piezas para sacar cuando como uno solo los tres voltearon a ver una nave de aspecto desgastado, ocupaba casi toda la esquina final del lugar, lo que les decía que era una de las naves más recientes colocadas aquí, era grande casi como un disco, la parte de enfrente terminaba en dos puntas y había un espacio entre ellas, donde se encontraba colocada la cabina. Lo reconocieron como un carguero ligero yt-1300 un famoso carguero de la corporación de ingeniería coreliana. La mayor ventaja de esta nave y la razón por la que se consideraba de las más populares entre los pilotos era su gran capacidad para hacerle modificaciones lo que la hacía una nave muy adaptable.

Rápidamente se acercaron a echarle un vistazo y se dieron cuenta de por qué había sido abandonada, tenía un gran agujero en uno de los costados, no afectaba mucho a la hora volar en algún planeta, pero le impedía salir al espacio por lo qué no era de mucha utilidad. Se acercaron a la compuerta de la rampa para revisar el interior, pero cuando querían abrirla se dieron cuenta de que estaba atorada. Un rápido alohomora y la compuerta se abrió con un chirrido metálico; en el interior se dieron cuenta que aparte de polvo y suciedad la gran mayoría de cosas se hallaban en buen estado, sin embargo su mayor sorpresa fue encontrar tres droides astromecanicos en perfecto estado salvo algo de polvo en su chasis.

Los droides eran de la serie R, una serie un versátil de astromecanicos por su gran capacidad de actualización y modificación; los tres eran muy parecidos ya que contaban con tres patas para movimiento, dos a los costados y una al frente además de tener un chasis en forma de cúpula, dos de los droides pertenecían a la serie R2 siendo su cúpula blanca y su color azul su mayor distintivo, sin embargo el que más los emocionó fue el droide con el chasis de color verde y cúpula transparente, perteneciendo a la serie R3, una que se caracteriza por la gran capacidad de almacenamiento en su interior.

Rápidamente los abrieron y los reprogramaron para verlos a ellos como sus dueños; una vez acabaron, los cerraron y les lanzaron varios hechizos reparo sobre ellos trataron de encenderlos, para su deleite los droides de la serie R2 encendieron de inmediato empezando a hacer silbido y pitidos que reconocieron como binario pero que no podían entender, sin embargo el droide R3 no mostró signos de movimiento.

"Podría uno verificar si todo se encuentra bien con su amigo ¿por favor?" les pidió Haron a los droides, mientras Haron, Nalin y Darus se iban con el otro astromecánico para revisar el resto de la nave, fue después de revisar la bodega y el área de pasajeros que se dieron cuenta que estaban en un yt-1300fp, una variante que equilibra el transporte de pasajeros con el transporte de mercancías, lo que la hacía muy valiosa por derecho propio ya que son más caras que las variantes solo de carga o solo de pasajeros.

Una vez en puente y con la unidad R2 conectada a la computadora principal, hicieron una revisión de los sistemas, enterándose que el hipermotor estaba dañado y los motores subluz estaban muy desactualizados, sin embargo los generadores de energía estaban en buen estado, tanto que solo necesitaban unas reparaciones menores para funcionar al cien por ciento Los demás sistemas se tendrían que revisar una vez que la nave sea encendía en su totalidad, para poder evaluar el estado de cada uno.

Regresaron donde se encontraba la unidad R3 mientras dejaban al droide que los acompaño siguiera corriendo diagnósticos del resto de sistemas de la nave.

"Que nos puedes decir amigo", le preguntó Nalin al droide que estaba revisando a la unidad R3. Dicha unidad empezó a dar pitidos y a señalar dentro del droide verde, específicamente a su celda de energía. Los hermanos se acercaron a echar un vistazo y notaron que estaba mañana, por lo que hasta que no la cambiarán no sabrían si el droide funcionará correctamente.

"Vamos tenemos trabajo que hacer" les dijo Haron a sus hermanos, dándose cuánta con solo unas miradas entre ellos que habían encontrado su nuevo proyecto favorito.

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Anchorhead, Tatooine. 979 DRR 21 ABY

Los hermanos rápidamente se hicieron un nombre entre los compradores que iban y venían a Anchorhead ya que sus piezas demostraban ser de buena calidad y a veces incluso mejor que una nueva. Se estaban haciendo una pequeña fortuna de manera constante con sus ventas, esto les generó algo de resentimiento por parte de algunos comerciantes de piezas y partes quienes continuamente trataban de sabotearlos o incluso atacarlos mientras tenían su glamour, sin embargo no lograban mucho, ya que continuamente detenían sus intentos de manera eficaz y sin dejar rastro.

Su buena racha también se reflejó en el estado de la nave que estaban reparando, con la ayuda de los astromecanicos rápidamente lograron reparar el gran agujero que tenía la nave con partes de otros modelos similares abandonados en buen estado y poner en marcha los generadores de energía, lo que les facilitó el hacer diagnósticos de los demás sistemas de la nave. Lograron encontrar una celda de energía para reemplazar la dañada de su unidad R3, la cuál rápidamente quitaron para luego colocar la nueva en su lugar. Esperaron unos momentos para ver si reaccionaba y casi saltaron de alegría cuando empezó a dar los característicos silbidos y pitidos de una unidad en buen estado. Con la energía restaurada y la unidad R3 funcionando lograron revisar la memoria del droide, encontrando una gran cantidad de rutas hiperespaciales viables y por lo que parecían, muy diferentes a las conocidas y utilizadas por la república y los separatistas.

Algo de lo que se dieron cuenta rápidamente fue que los droides tenían una gran capacidad de aprendizaje ya que mientras colocaban runas de refuerzo y durabilidad en las placas, marco y blindaje de la nave los droides empezaron a estudiar lo que estaban haciendo al detalle, estuvieron haciendo esto durante varios días y al principio los descartaron como si simplemente estuvieran esperando órdenes pero luego de que regresarán de un descanso que se tomaron encontraron a los droides haciendo las runas por sí mismos; al principio se asustaron y Darus, que tenía más conocimiento del tema, se puso a revisarlas de manera frenética viendo si podría ocurrir algún error si se llegarán a activar con la magia del ambiente, sin embargo, se llevó una sorpresa al ver qué no solo las runas estaban bien hechas si no que parecían casi rayando la perfección.

Decidieron revisar el interior y dejar que los droides siguieran con el tallado de las runas después de pedirles que les demuestren como lo estaban haciendo, dándose cuenta que el método que usaban era una copia exacta de la manera con que las aplicaban ellos.

El interior de la nave fue una de las primeras cosas que pudieron arreglar, por qué se encontraba casi en óptimas condiciones, solo faltando pequeños detalles para quedar completamente reacondicionado. Las bahías de carga se habían ampliado gracias a encantos de expansión indetectables anclados a runas para evitar su desgaste, el cuarto de pasajeros y de tripulación estaban en buen estado por lo que no hubo casi cambios ahí, la bahía médica estaba vacía por lo que no podían hacer mucho más que limpiarla y reparar los tanques de bacta, los sistemas principales estaban en buen estado por lo que no había mucho que hacer con ellos.

Se llevaron la sorpresa al encontrarse el núcleo de energía en prácticamente perfecto estado, lo que les llevó a pensar que la nave tenía poco uso cuando se dañó. Rápidamente tallaron runas de detección de calor y enfriamiento alrededor de la sala del núcleo para poder evitar el sobrecalentamiento a la hora de encender la nave así dándole más eficiencia.

Tanto los motores subluz y el hiperimpulsor tendrían que ser reemplazados por lo que la nave no volaría en un futuro cercano, sin embargo, serviría muy bien para una bodega de almacenamiento secundaria o una sala de reunión aprovechando la buena conexión a la holonet que tenía la nave. Gracias a la buena conexión de holonet que tenía la nave los hermanos rápidamente se hicieron de todo tipo de conocimientos, que gracias a su oclumancia, podían guardar para analizar en cualquier momento que quisieran, lo que les permitió aprender a un ritmo que habría impresionado incluso hasta los más eruditos de la galaxia.

Pero su buena racha no duraría por siempre.

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Haron, Nalin y Darus se encontraban en el centro de Anchorhead tratando de conseguir algunas cosas cuando empezaron a escuchar disparos blaster en otra parte de la ciudad, no era raro que ocurriera algún tiroteo en Tatooine, por lo que trataron de ignorarlo como siempre lo hacían, sin embargo, algo en el fondo les dio una sensación inquietante por lo cual estuvieron más alertas mientras seguían consiguiendo lo que necesitaban.

Mientras regresaban a su casa la sensación de inquietud fue aumentando hasta el punto que tuvieron que mirar constantemente por encima del hombro en todo momento ya que no se sentían cómodos tratando de ignorarlo.

Nada los pudo preparar para ver la calle de su casa convertida casi en una zona de guerra, zonas quemadas tanto en las calles como en las paredes por los disparos de las pistolas blasters, escombros regados por todas partes, sangre salpicada por todos lados, parecía una escena de algún campo de batalla; pero la mayor sorpresa fue darse cuenta que su casa era donde se concentraba la mayor cantidad de rastros de disparos.

Se acercaron con cuidado, tratando de ver a todas partes por si alguien se había quedado y buscando pistas de lo que pudiera haber ocurrido, pero todos esos pensamientos se desvanecieron cuando vieron a sus padres tirados en el suelo de la entrada con marcas de quemaduras en sus cuerpos, señal de que les dispararon bastante antes de morir. Estaban tan conmocionados que no se dieron cuenta de la figura que se les acercaba por detrás hasta que fue demasiado tarde.

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La siguiente vez que despertaron, ya no se encontraban en su casa, estaban encerrados en jaulas separadas bastante pequeñas en una habitación que parecía como si fuera tallada de la una solo gran piedra color naranja apagado, había luz artificial además que hacía mucho calor, una vez que se les pasó el aturdimiento y vieron cómo era la habitación, se miraron los unos a los otros y notaron algo que los hizo abrir los ojos con sorpresa. En sus cuellos tenían collares de esclavo.

Sabían por información que habían obtenido que a la mayoría de los esclavos se les colocaba un collar de esclavos o un chip explosivo en la cabeza, una vez que ese pensamiento entró en su mente Haron empezó a revisar su cabeza para comprobar si le habían implantado el chip. Nalin y Darus al ver darse cuenta de lo que estaba haciendo abrieron enormemente sus ojos antes de comenzar a revisar sus cabezas para comprobar si tenían algo. Se relajaron visiblemente cuando comprobaron que no tenían nada en la cabeza, lo que les alegró ya que el collar era muy fácil de quitar para ellos gracias a la magia.

No pasó mucho tiempo desde que se despertaron cuando un rodiano de aspecto cruel los saco de sus jaulas, les puso cadenas en los brazos y los hizo seguirlos fuera de la habitación a punta de blaster.

El pasillo donde se encontraban parecía hecho del mismo material que el lugar donde se despertaron sin embargo no había nada interesante, parecía como si fuera un área de almacenamiento o contención ya que había más jaulas y cadenas en las distintas habitaciones que conectaban con el pasillo, sin embargo las cosas se volvieron significativamente más interesantes cuando llegaron a un al pasillo central mucho más grande que del que salieron que terminaba en una puerta completamente blindada por un lado y por el otro había un tipo de elevador.

Tal vez se quedaron mirando la puerta blindada demasiado tiempo ya que el rodiano decidió burlarse de ellos, creyendo que no representaban ninguna amenaza para el.

"Esa es la bóveda del tesoro del gran Jabba el Hutt, ahí es donde se encuentra la vasta colección de objetos y riquezas que a obtenido además delas armaduras de sus padres, son unos buenos trofeos que trajimos como premio para el gran Jabba" terminó con una risotada, creyendo que con el nombre de su captor quedarían aterrorizados.

No vio las miradas firmes que compartieron los hermanos al escuchar esa información, ni las sonrisas siniestras que tenían en sus caras antes de recomponerse y poner una expresión en blanco.

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Después de pasar por el ascensor y varios pasillos y cuartos más, llegaron a la sala del trono del palacio, donde se encontraba la cosa más fea que habían visto en sus vidas, sentado en el trono del otro lado de la habitación estaba Jabba el hutt y decir que era feo era quedarse corto. Su cuerpo era de un color verde oscuro solo siendo el área de su pecho y vientre de un color amarillo pálido bastante horrible, su cabeza parecía aplastada y tenía unos ojos naranjas con unas rendijas cono pupilas además de una coca enorme que prácticamente iba de lado a lado.

Su voz retumbó mientras se reía y hablo en huttes con un tono de burla que era fácil de identificar, su mayordomo principal. Un twi'lek de piel blanca bastante gordo tradujo a su maestro, pensando que los tres niños frente a él no entenderían lo que su maestro habría dicho, sin embargo los hermanos habían aprendido huttes de su padre ya que en un mundo como Tatooine hablar el idioma del bajo mundo era primordial para la supervivencia.

"Saludos hijos de Black, espero que encuentren sus nuevas condiciones de vida bastante agradables", terminó fortuna riéndose al pensar en cómo iba a usar a los niños para la diversión de su maestro. Haron, siendo el que que estaba en el centro de los hermanos hizo la pregunta que rondaba por la cabeza de los tres.

"¿Por qué han atacado a nuestra familia?", dijo en un tono bajo, tratando de parecer más pequeño de lo que era para que no creyeran que eran una amenaza, sin embargo, su voz se escuchó en todo la habitación dejándola en un silencio desconcertante, solo roto por la música que sonaba a todo volumen.

Fortuna sintiéndose algo nervioso miró a su maestro, sin embargo, la babosa parecía ajena a lo que había pasado, ya que no había parado de reír desde que terminó de hablar. Cuando terminó de reír volvía a hablar sin haber notado la incomodidad en la habitación.

"Sus padres fueron una espina en mi costado durante demasiado tiempo, su influencia en Anchorhead obstaculizaba muchos de mis negocios en la ciudad, algo que no iba a permitir. Sus días estaban contados cuando comenzaron a interferir en mi negocio" dijo Jabba en una voz ronca tratando de parecer aterrador, lográndolo con cierto grado de éxito.

"Espero que disfruten de su nuevo estilo de vida, ya que es el único que tendrán de ahora en adelante" terminó la babosa con una risa estruendosa, haciendo una seña para que se los llevarán de vuelta a sus jaulas.

Los hermanos compartieron una mirada por unos momentos y vieron la misma resolución en los ojos del otro, Jabba el hutt no sabía con quién se había metido e iba a pagar caro por ello.

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Anchorhead, Tatooine 979 DRR, 21 ABY

Los hermanos se habían acostumbrado a una rutina después de unas cuantas semanas de cautiverio entre muchas comillas ya que sabían que si querían podrían haber escapado mucho antes, pero se quedaron para obtener la mayor cantidad de información que pudieran y parecía que sus esfuerzos estaban dando sus frutos.

Habían estado en prácticamente todo el palacio, y gracias a su oclumancia recordaban todos los caminos y contenidos de cada habitación en la que habían estado, sin embargo algo que les hizo hervir la sangre fue cuando se encontraron con los pozos de los esclavos, estaban en pésimas condiciones, ya que se notaba que no los dejaban salir incluso para ir al baño, además de tener un aspecto físico muy espantoso. Las únicas que eran tratadas marginalmente mejor eran las mujeres ya que a la gran mayoría de ellas las hacían bailar o actuar como prostitutas por lo que hacían que mantuvieran su figura. Muchos de los esclavos encerrados ahí se sorprendieron al verlos pero luego su mirada paso a una de profunda tristeza por el aparente destino que les esperaba.

Los tres siendo hábiles mecánicos a su corta edad los pusieron a reparar diferentes cosas en el palacio, desde máquinas simples hasta droides eran reparados por ellos y quedaban como nuevos o con mejor funcionamiento que antes. No pasó mucho tiempo antes de que los pusieran a reparar y mejorar la distinguida colección de naves que poseía Jabba, lo que les dio la oportunidad de aprender todo lo que pudiera sobre ellas. Encontraron varios tipos de naves, desde cargueros de gran tamaño hasta cazas estelares muy modificados, entre ellos había una gran cantidad de cargueros YT-1300, los cuales aprovecharon para revisar y ver qué partes tenían.

Lograron encontrar un hiperimpulsor clase 0.8 en una variante de carga del carguero corelliano y unos motores subluz de primera línea en un modelo básico de la misma nave, sabían que todos los YT-1300 tenían núcleos de energía quadex por lo que no había problemas con eso.

Había más naves pero ninguna otra les llamó la atención, salvo una que les llamó la atención por el intrincado sistema de camuflaje que llevaba. Lo revisaron pero no pudieron identificar la forma de hacerlo funcionar para probarlo, pero si lograron obtener información sobre cómo obtenerlo, por lo que cuando finalmente llegarán a terminar su nave uno de sus primeras paradas sería el lugar donde podrían conseguir el sistema de camuflaje, el planeta del que su nave salió por primera vez del astillero: Corelia.

Tuvieron la oportunidad de ver el contenido de la bóveda de Jabba gracias a que en un acto de arrogancia hizo que los hermanos fueran a limpiar la sangre de las armaduras de sus padres; cuando se enteraron por primera vez que sería su siguiente tarea tuvieron que hacer un esfuerzo por controlar la irá que salía de ellos, algo que la babosa aprovecho para restregarles en la cara que eran sus esclavos. Cuando llegaron a la puerta de la bóveda escoltados por Bib Fortuna, Darus, el más hábil de los tres en legilimancia aprovecho para obtener el código de acceso de la mente de fortuna mientras lo introducía en el panel de control de la bóveda. Una vez que lo obtuvo Darus les hizo una señal a sus hermanos y los tres compartieron una sonrisa de sombría satisfacción.

Esperaban encontrar una bóveda llena hasta casi reventar, sin embargo, ni siquiera ellos lograron dimensionar el tamaño de la cámara que estaba llena hasta el tope de reliquias, joyas, especias y peggats. Fácilmente la habitación era tres veces más grande que la sala del trono de Jabba y esa sala ya era bastante grande por si sola.

Fortuna al ver su cara de asombro se rió de manera sardónica y rápidamente los hizo avanzar hasta donde se encontraban las armaduras de sus padres, decir que estaban molestos al verlas era quedarse corto ya que estaban muy dañadas por el fuego blaster y la sangre manchaba gran parte de su superficie.

Lograron controlar la irá que tenían y rápidamente se pusieron a trabajar para quitar la gran mayoría de la suciedad de las armaduras. Terminaron bastante tiempo después ya que no podían usar hechizos limpiadores sobre las armaduras ya que los tenían vigilados en todo momento.

Mientras los llevaban de regreso a sus jaulas después de terminar de limpiar las armaduras de sus padres los hermanos se miraron y llegaron a una conclusión, se irían hoy, y dejarían el mayor caos posible detrás de ellos.

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Habían pasado unas horas desde que el último guardia del día hizo sus rondas rutinarias cuando los hermanos decidieron que había llegado el momento de irse de este lugar, por lo que con unos simples hechizos cortantes cortaron los collares de esclavos y los dejaron caer al suelo con un ruido sordo, abrieron las jaulas en las que estaban con unos rápidos alohomoras y pronto estaban avanzando por los prácticamente desérticos pasillos del palacio de la babosa. Su primera parada fue el hangar de naves donde rápidamente se acercaron a las naves con las partes que necesitaban y empezaron a desmontarlas, Nalin en un rápido pensamiento se apareció fuera del palacio y volvió rápidamente con sus bolsas expandidas, Haron y Darus se sorprendieron de no haber pensado en eso pero lo hicieron a un lado y continuaron desmontando las cosas que querían para su propia nave.

Los motores subluz fueron la parte fácil y en relativamente poco tiempo terminaron de desmontarlos y escogerlos para guardarlos en sus bolsas, habían descubierto muy rápidamente que un encantamiento encogedor no afectaba negativamente su funcionamiento en absoluto.

El hiperimpulsor fue bastante más complejo pero con el trabajo de los tres lograron desmontarlo y guardarlo de manera satisfactoria, otra cosa que agregaron a la lista de cosas para llevarse fue dos generadores de escudos de grado militar que habían encontrado en una corbeta CR90 bastante bien armada. Sabían que podría funcionar en su nave mucho más pequeña ya que eran unos de los muchos generadores que necesitaba la corbeta para poder mantener su escudo a máxima capacidad.

Cuando terminaron con los escudos fueron a por dos núcleos de energía de los cargueros YT-1300 ya que tenían grandes planes para ellos. Estos tardaron mucho más tiempo ya que estaban conectados íntimamente con los sistemas de las naves a los cuales pertenecían; les llevó tiempo y mucha paciencia pero lograron sacar los dos núcleos y los guardaron junto a las demás partes que habían obtenido.

Una vez obtenidas las piezas que querían se trasladaron a la bóveda para tratar de llevarse lo más que pudieran meter en sus bolsas. Una vez que Darus tecleo el código de acceso y las puertas se abrieron, los hermanos no perdieron el tiempo y empezaron a vaciar la bóveda de todo lo que pudieran, peggats, truguts, wipiupis, reliquias, joyas, todo lo que pudieran encontrar que tuviera algo de valor era metido en sus bolsas, fue cerca del final de la bóveda cuando los hermanos encontraron una sección dedicada a puros datapads, los empezaron a revisar y vieron que eran usuarios y códigos de diferentes cuentas bancarias alrededor de la galaxia, no perdieron tiempo en guardarlos y comenzará revisar el resto.

Fue en varios de estos datapads que encontraron información valiosa sobre un tema del que no habían podido obtener casi nada. Los datapads contenían información sobre la orden Jedi y el concejo Sith, así como muchas de las enseñanzas de dichas órdenes, usos de la fuerza y mucha más información que les resultaría muy útil una vez que la estudiarán. Cuando terminaron con la bóveda, solo habían dejado alrededor del treinta por ciento del contenido original.

Se estaban preparando para irse cuando un pensamiento entró en la cabeza de Haron, rápidamente se echó a correr en dirección a los pozos de esclavos, Nalin y Darus rápidamente captaron la idea y lo siguieron. Cuando llegaron aplicaron varios encantos adormecedores y rápidamente empezaron a quitar los collares de esclavos de la gran mayoría de los seres ahí, empezando por las mujeres y niños. Se aseguraron de revisar las mentes de todos los adultos para saber si merecían ser liberados o no. Conocían a muchos esclavos que por ganar favores harían cualquier cosa por obtenerlos, no importaba que tan cuestionable fuera.

Cuando hubieron quitado la mayoría de los collares se dieron cuenta de que las primeras guardias estarían empezando sus rondas pronto por lo que convirtieron las cadenas en trasladores retardados y los programaron al depósito de chatarra con cinco minutos de diferencia y el primer grupo lo configuraron diez minutos después de que se hubieran ido.

Una vez programados todos los trasladores, aparecieron en el depósito y rápidamente hicieron espacio para que los ex esclavos llegarán sanos y salvos. Terminaron de apartar las pilas de chatarra justo a tiempo para que el primer grupo llegará sin problema. Cada grupo contaba con al menos 10 personas y procuraron poner familias completas, mujeres y niños principalmente. En total habían sacado a más de 100 personas de diferentes razas de los pozos de esclavos del palacio de Jabba el hutt lo que consideraron un gran logro ya que eran casi todos los esclavos que tenía a su disposición.

Programaron los trasladores a su siguiente destino y se aparecieron para hacer los preparativos para su llegada, llegaron a Bestine, la capital de Tatooine y el único lugar que tenía presencia de la república en forma de grandes naves de transporte de pasajeros gracias al trato que se hizo entre la república y Jabba. Les pareció irónico que el trato que la babosa acordó con la república sería el que le quitaría la gran mayoría de sus esclavos.

Rápidamente buscaron a la tripulación y una vez los encontraron empezaron a aplicar encantamientos confundus para hacerlos viajar hasta Kashyyyk, donde sabían que los esclavos serían tratados de manera digna.

Lograron terminar los encantamientos justo cuando el primer grupo de ex esclavos empezó a llegar, habían silenciado todas las salidas y llegadas para evitar que el ruido alertara a las personas de lo que estaba sucediendo.

Rápidamente empezaron a acomodar a las personas en la nave y cuando terminaron le ordenaron al capitán y su tripulación que diera inicio al viaje a Kashyyyk. Fue hasta varias hora después que llegaron a su nave y se desplomaron en las literas por el agotamiento por las tantas apariciones que hicieron y hechizos que lanzaron.

Sabían que había caos cuando se despertarán, pero no se dieron cuenta hasta qué punto las cosas se complicarían.

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Anchorhead, Tatooine 80 DRR, 20 ABY

Las cosas se complicaron para los hermanos bastante rápido después de que se despertaron, Jabba en un frenesí de irá después de enterarse del robo de sus riquezas y la desaparición de sus esclavos ordenó una caza masiva a todos los maestros de esclavos para que consigan nueva gente para el. Solo que no contaba con que Haron, Nalin y Darus se interpusieran en cada paso de su camino. Cada vez que conseguía algún nuevo lote de esclavos, ellos rápidamente entraban, los liberaban y los mandaban en naves de la república hacia planetas que les darían la atención necesaria.

La holonet estuvo plagada de noticias sobre grandes cantidades de esclavos que eran enviados a sus planetas y muchos se preguntaban cómo es que fueron liberados y puestos en esas naves.

Entre tanto, los hermanos se pusieron manos a la obra y colocaron las diferentes piezas que habían tomado de las naves de la babosa y las colocaron en su propia nave. Lo más fácil fue reemplazar los viejos motores subluz por los nuevos por lo que con ayuda de los astromecanicos comenzaron por ahí. Les llevó unas horas cambiar y colocar los nuevos motores pero al final podían presumir de haber conseguido unos nuevos motores de muy buena calidad. Haron, aprovechando la ayuda de los astromecanicos empezó a mejorarlos para hacerlos aún más eficientes de lo que ya eran, y las estimaciones les arrojan unos 150 km más de velocidad atmosférica máxima.

Aprovecharon los viejos motores subluz y los repararon lo mejor que pudieron antes de que Nalin logrará venderlos a unos precios muy superiores de lo que realmente costaban.

Lo siguente en cambiarse fue el hiperimpulsor el cual con ayuda de los astromecanicos les llevó menos tiempo reemplazarlo con el de mejor calidad, las mejoras en este fueron ligeramente mejores que las de los motores subluz ya que Haron logro unas mejoras que lo convertían en un hiperimpulsor clase 0.5, lo que lo convertía en una de las naves más rápidas de la galaxia.

Los problemas comenzaron a la hora de cambiar los generadores de escudos ya que los hermanos se vieron muy superados en sus capacidades por lo que tuvieron que comprar unos tres droides astromecanicos más para poder hacer el cambio de manera segura, los droides estaban en buenas condiciones y con la riqueza que habían sacado del palacio de Jabba el precio realmente no les molestaba. Consiguieron unos droides modelo R2 en buenas condiciones que rápidamente acondicionaron para que puedan trabajar en óptimas condiciones.

El cambio de los generadores una vez que los nuevos droides estuvieron listos se realizó de manera eficiente, por lo que casi no intervinieron en esa parte. Sin embargo la parte difícil fue colocar los demás nuevos de energía de quardex para que cada uno alimente diferentes sistemas, la idea original fue de Darus, que propuso usar uno para los motores, otro para los sistemas internos y el armamento de la nave y otro para los generadores de escudos.

Primero tuvieron que ampliar el espacio del lugar del núcleo original con runas y luego ir colocando los demás núcleos junto con las conexiones a los diversos sistemas que alimentaria. Les llevo varias semanas hacer todas las adaptaciones que querían, pero cuando acabaron, sabían que tenían una de las naves más increíbles de toda la galaxia.

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Nalin se estaba preparando junto con sus hermanos para otro asalto al palacio de Jabba y liberar a los esclavos que había conseguido cuando sintió que algo no iba bien, estudiaron sus alrededores pero no encontraron nada por lo que siguieron con su plan habitual,sin embargo, en vez de encontrar a los esclavos dormidos en los pozos lo único que encontraron fueron los cadáveres masacrados de los esclavos que se encontraban ahí. Sintiéndose horrorizados fueron a por el primer guardia que encontraron y Darus no perdió el tiempo leyendo la mente del tipo para entender que paso. Lo que encontró le hizo apretar los dientes con furia y prácticamente arrasar con el guardia en ese mismo momento.

Tanto Nalin como Haron se sorprendieron por la brutalidad de Darus por lo que trataron de calmarlo para que pudiera explicarles que había causado ese estallido en el.

"La babosa bastarda a estado ordenando que maten a los esclavos a diestra y siniestra cuando algunos comete un error, a matado a más de cincuenta personas en solo tres días, estos eran el último lote que había comprado". Dijo Darus con la mandíbula apretada después de tomarse un momento para tranquilizarse un poco. "Todas las personas en este palacio son monstruos, Jabba pudo haber dado la orden, pero sus matones las cumplieron con sonrisas en sus rostros".

Nalin al escuchar lo que su hermano decía no pudo evitar comenzar a temblar de la rabia que sentía, miró a Darus que como él, estaba tratando de no caer completamente en su furia con cierto grado éxito, sin embargo se notaba que le estaba costando; cuando volteo a ver a Haron, la sangre se le helo, tenía la cara prácticamente en blanco, sin algún tipo de expresión, pero lo que lo dejó temblando de miedo fueron sus ojos, esos orbes verdes brillaban con furia apenas contenida y amenazaban con un mundo de dolor si te metías en su camino.

Después de un momento de tenso silencio Haron habló por fin.

"Hay que acabar con ese bastardo"

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Darus avanzó por los cuartos de los matones de Jabba, silenciando las puertas y aplicando encantos somníferos a todas las personas que se encontraba en su camino, lo que sacaba de sus mente cada vez que las revisaba lo llenaba de una sensación de asco y repulsión por los seres que trabajaban para la babosa. Sus hermanos estaban en otras partes del palacio ya que los cuartos del personal están distribuidos por todo el palacio.

Le llevó un tiempo, pero logró aplicar los encantos de manera satisfactoria y se dirigió al punto de reunión que habían acordado antes de haberse separado.

Llegó a la sala del trono y noto que era el primero en llegar, por lo que se acercó a una mesa y se sentó a esperar a Haron y Nalin. No estuvo sentado mucho tiempo ya que Haron llegó unos cinco minutos después y Nalin apenas unos minutos después de Haron.

Como uno solo los hermanos empezaron a acumular la mayor cantidad de magia en sus cuerpos desde que llegaron a esta realidad con el único fin de lanzar un único hechizo que devastaría por completo este palacio y a todos los monstruos que había en él. Se habían asegurado que no hubiera inocentes dentro por lo que no tenían remordimientos por la destrucción que causarían. El hechizo para el que estaban acumulando tanta magia no era otro que la llama que lo consumiría todo: Fuego Demoníaco.

Sin embargo, antes de que pudieran lanzar la maldición, un pulso de magia los detuvo, aclaró sus mentes de golpe y calmó su furia de manera casi instantánea haciéndolos entrar en razón y reconocer que lo que estaban a punto de hacer podría tener resultados catastróficos para todo el planeta.

Cuando sintieron el pulso una vez más, los hermanos miraron el lugar desde donde se originaba, encontrando en su mirada las montañas que rodeaban Anchorhead, como cada vez que sentían una llamada cuando practicaban su uso de la fuerza. Solo que está vez era clara la dirección que debían seguir y la fuerza de la llamada no dejaba dudas de su importancia.

Los hermanos se miraron y acordaron que no podían seguir ignorando la llamada, sea lo que fuere, quería que los tres se acercarán y lo quería con insistencia, por lo que una vez que llegarán a su bodega, que usaban como casa temporal, empezarían a prepararse para hacer el viaje a las montañas.