Aventura 04: Recuerdos y Fortuna.
-Calles de Orario, (Tarde)-
El cielo naranja podía observase sobre la ciudad de Orario, la actividad en las calles si bien era constante había decaído del gran ritmo que se llevaba en partes más tempranas del día.
Varios eran quienes estaban comenzando a cerrar sus negocios por la hora, mientras que otros se mantenían todavía abiertos ya que en Orario siempre había gente que te podría comprar algos, ciertos comerciantes incluso desearían estar activos todo el día y noche de no ser porque descansar era algo necesario.
En medio de esa calle con menos puestos de mercaderes abiertos podemos ver como un trio de dos chicas y un chico corrían.
"Descuida Nowa el Gremio todavía tiene tiempo para estar abierto!" Dijo Bell.
Este y Leina estaban corriendo detrás de la emocionada Nowa.
Antes de recibir el Falna de Hestia ambos hubiesen tenido problemas en siquiera seguirle el paso a Nowa o simplemente se hubiesen detenido a descansar. Pero gracias a la profesión de Aventureros estos eran más rápidos y tenían más resistencia física.
Nowa por su parte aun con su Falna recién marcado y por lo tanto sin una ventaja en sus atributos podía tomarle la delantera a Bell y Leina gracias a su duro entrenamiento.
Si bien en esta escena podía parecer, había cierto detalle que Nowa no tomo en cuenta cuando esta salió corriendo del hogar de la Familia Hestia debido a la emoción de finalmente tener una Familia.
"¿Sabes dónde está el Gremio?" Fue la simple pregunta de Leina.
Inmediatamente con eso Nowa dejo de correr lo que permitió que su Capitán y la Vice-Capitana la alcanzasen.
"¡Lo siento mucho Capitán!" Se disculpo la Mitad-Elfo, "Me emocioné tanto que ni me di cuenta de que no sabía hacia donde ir,".
Por muy buena guerrera que fuese Nowa gracias a su entrenamiento, está todavía era una chica joven e inexperta con el mundo exterior, eso se mostraba en momentos como este.
"Está bien, no hay problema," Dijo un Bell que claramente no estaba molesto, "Entiendo que estes emocionada, yo también lo estuve luego de conseguir mi Falna," Pero en el caso de Bell debido a su tiempo anterior en Orario buscando Familia, esta sabía dónde estaba el Gremio.
"La dirección del Gremio es por allá," Apunto Leina hacia la dirección donde el Gremio se encontraba, "Hay que ir en línea recta, luego doblar hacia la derecha y luego ir nuevamente en línea recta,".
"Entendido," Asintió una Nowa que ahora sabiendo a donde ir se preparaba para nuevamente correr con todo.
"Espera Nowa," Sin embargo Bell la detuvo con una mano en el hombro de esta al notar que la Mitad-Elfo iba a ponerse a correr, "¿Qué te parece si caminamos mejor?".
"¿Eh? ¿P-pero el Gremio no cerrara entonces?" Pregunto una nerviosa Nowa. Ya faltaba poco para que se oscureciese, según lo que ella sabía cuando oscurece todos cierran y se van a sus casas.
Si eso pasaba Nowa debería registrarse mañana… ¡Pero ella estaba tan emocionada que tenía que ser hoy!
Nowa quería comenzar lo más rápido posible a serle útil a la Familia que la acogió… tan simple como eso.
"Descuida, el Gremio no cierra sino casi más tarde," Aseguro Bell, "Aun caminando podremos llegar a tiempo para registrarte,".
Y con esas palabras y un paso más lento, la Familia Hestia continuo con su camino.
-Minutos Mas Tarde-
"¡Woaahhh!" Se escucho a una impresionada Nowa los varios puestos de la calle.
Comida, accesorios, ropa, ese tipo de cosas se podía ver en los varios puestos que todavía quedaban.
Nowa no había visto algo como esto antes, cuando ella llego a Orario esta solo miro a sus alrededores antes de ser encontrada por Bell y Leina, asique ver en detalle todo esta no lo pudo hacer.
"¡Hay frutas que ni siquiera hay en el bosque!" Dijo ella apuntando hacia un puesto en particular que vende frutas, "¡Hay muchas cosas que nunca he visto!"
Si bien el bosque de Nowa era uno apenas tocado por la civilización siendo solo los Elfos quienes viven ahí, en su trabajo como Guardiana del Bosque ella podía encontrar todo tipo de frutas y nueces locales a ese bosque.
Pero solo era un bosque del mundo, afuera había mucha mas variedad y en Orario uno podía encontrar esa variedad.
"Entiendo como se siente," Asintió Leina, "En mi tiempo en esta ciudad vi muchas cosas que no tenemos en casa,"
El dinero de la familia Vance sin duda podía comprar muchas cosas, pero lo que no podía conseguirse desde el vasto territorio que estos controlaban debía ser importado.
Sin embargo, en Orario parecía simplemente haber de todo.
Y como había de todo, eso incluía algo que todo mundo podía apreciar: Dulces.
Esta era una de las calles que tenía una posición privilegiada al estar en ruta directa al Gremio.
¿Qué mejor lugar para poner una tienda que en una calle que te lleva hacia el Gremio?
Incluso había peleas entre personas que deseaban un puesto en una de esas calles, afortunadamente nunca se volvía un problema grande debido a precisamente la localización, comenzar problemas en un lugar donde frecuentaban mucho los Aventureros era simplemente estúpido.
"Por favor quiero tres," Dijo Bell a un vendedor luego de pasarle el dinero.
"Aquí tienes," Dijo el vendedor de dulces.
"Gracias," Respondió Bell quien tomo los productos que este había comprado.
Lo que Bell compro fue algodón de azúcar, un dulce simple y popular.
Principalmente este puesto fue la razón por la que Bell quiso tomar esta ruta caminando al gremio y no corriendo.
Así Nowa podía ver con más calma la ciudad… y Bell podía comprarle este algodón de azúcar. Según las palabras de su abuelo: Las chicas sin importar la raza amaban los dulces
¿Pero era malo que luego de escuchar su historia Bell quisiese darle a Nowa momentos buenos?
Por suerte en sus días en Orario, Bell conocía unos pocos buenos lugares para hacer buen uso del limitado presupuesto de la Familia Hestia siendo este puesto uno de esos lugares.
"Toma," Ahí Bell ofreció uno de los algodones de azucare a Nowa. Específicamente el de color rosado.
Nowa miro con curiosidad el dulce en sus manos., a comparación de las frutas del bosque no había una cascara cubriendo esta comida que se veía muy suave.
Asique curiosa por el sabor que tendría esta comida, Nowa dio un mordisco… y probo el paraíso.
"…¿¡QUE ES ESTO!?" Pregunto una Nowa que tenía estrellas en los ojos.
Las papilas gustativas la Mitad Elfo simplemente sintieron una tremenda explosión de sabores al probar el algodón de azúcar.
"Es algodón de azúcar," Explico Leina quien comía del suyo, el de color amarillo, "Un dulce popular y barato," Y por eso mismo amigable para el bolsillo de esta Familia.
"¿Dulces?" pregunto una curiosa Nowa.
"¿Nunca probaste dulces?" Pregunto un curioso Bell.
Leina se vio levemente horrorizada al escuchar eso.
"No, en el bosque solo tenía frutas si quería algo dulce," Dijo Nowa quien se comía su algodón de azúcar a gran velocidad al punto que con pocos segundos ella ya se había comido más de la mitad.
Verdaderamente esta chica había descubierto algo maravilloso. Ciertamente la civilización ofrecía un montón de maravillas que para una chica como Nowa quien paso la mayor parte de su vida en un lugar aislado, para esta chica incluso algo tan mundano como los dulces eran algo novedoso.
"El mundo fuera del bosque realmente es increíble…" Dijo para sí misma Nowa quien reflexiono que había muchas cosas que ella no conocía tanto como sabores que ella nunca había probado en su vida.
"Pues cosas como estas son muy comunes aquí afuera," Dijo Bell quien mostro su algodón de azúcar, "…Recuerdo que cuando vivía en mi aldea mi abuelo traía dulces de vez en cuando," Dijo un sonriente Bell que miro a su manzana caramelizada con una sonrisa de pura nostalgia.
"En mi caso… mi familia tenía varios dulces," Dijo Leina dando una nostálgica sonrisa, "Aunque este no está nada mal,"
El sabor del algodón de azúcar era más mucho más simple que los dulces que Leina estaba acostumbrada, menos refinado, pero igual dulce.
En el caso de Leina dichos dulces eran francamente de muy alta calidad hechos con los mejores ingredientes… y eso era algo que Leina extraña de su hogar.
Si bien Leina estaba perfectamente feliz en Orario, había ciertos detalles que ella extrañaba de casas como los dulces y el vino que ella podía consumir ahí… y los largos baños calientes que ella se podía dar. Ella estaba viviendo su sueño, pero eso no significaba que Leina no extrañase ciertas comodidades.
'Pero perfectamente puedo tener eso aquí… cuando nuestra Familia tenga más dinero' Pensó una determinada Leina ya que de esos dulces que podía conseguir el dinero de su padre había más y de más variedad en Orario, de mejor calidad incluso.
Si ella pensaba en cosas como esas, entonces había más determinación para continuar y ganar en la Mazmorra.
"Pero aun cuando los dulces que mi abuelo me traía eran simples, lo mejor era compartirlo con los demás," Especialmente luego de jugar después de haber trabajado en el campo, no era muy común pero cuando ocurría esos eran grandes momentos.
"¿Los otros?" Pregunto una curiosa Nowa.
"Yo, mi amiga y sus hermanos," Dijo un Bell que dio una sonrisa que Leina no había visto en su rostro antes.
Una sonrisa de nostalgia era una que hasta ahora Bell Cranel no había dado ya que cuando estaba con ella este no pensaba en su pasado.
Luego de que su abuelo muriese él se quedó con esa familia quienes lo trataron como uno de los suyos pesar de no estar en una buena situación económica.
Esa familia en la aldea rural de Bell no era exactamente adinerada… sino todo lo contrario, una familia pobre que consistía en una madre y sus hijos quienes trabajaban cosechando vegetales para subsistir y cuyas cosechas ni siquiera crecían del todo bien por lo que en más de una ocasión llegaban con lo justo a fin de mes.
A pesar de eso estos acogieron a Bell cuando este se quedó solo en su antiguo hogar.
Realmente eso ayudo a Bell a sobrellevar la soledad luego de haberse quedado solo en el mundo.
'Ah… cierto, falta poco para mi envió semanal,' Pensó Bell recordando que ya se acercaba el momento.
Parte de su dinero de hecho estaba siendo enviado fuera de Orario, aun cuando él tuvo su primera semana en solitario y lo que ganaba no era mucho, Bell igualmente envió lo poco que pudo hacia esa familia dejándose a si mismo apenas con una pequeña cantidad de dinero.
Este se había prometido enviarles la mitad de sus ganancias, ya fuese mucho o poco dinero, este enviaría lo que se pudiese para ayudar a esa familia.
Y quizás era por ese factor, pero Bell no pudo evitar pensar el pasado… en la familia que lo acogió luego de la muerte de su abuelo… y en aquella chica con la cual él se volvió un gran amigo.
-Flashback-
-Aldea de Bell, (Cuatro Semanas antes)-
Este lugar era una casa humilde en una aldea rural. Ni muy pequeña, pero al mismo tiempo ni muy grande.
Sin embargo, el polvo acumulado mostraba que alguien no había estado en esta casa desde hace un buen tiempo, quizás años. Eso era porque la única persona que debía vivir aquí había estado viviendo en otra casa de esta aldea.
Sin embargo, fue este lugar el que Bell eligió para ordenar sus cosas para su partida hacia Orario.
"Muy bien, creo que eso es todo," Dijo Bell viendo su equipaje para el gran momento de partir.
Bell de por si no tenía mucho, solo unas cuantas ropas, una mochila y el dinero ahorrado a lo largo de los años, poco para varios pero suficiente para él.
Esta era la casa en la que Bell había vivido con su abuelo, desde lo que él podía recordar hasta la muerte de este.
"No puedo creer que realmente estoy dejando este lugar," Se dijo a si mismo Bell, muchas veces antes el sonó con el día en donde finalmente sería el momento de partir de casa, pero el realmente estarlo viviendo era totalmente distinto.
Pero él ya lo había decidido, este era el momento de partir, así lo había anunciado este al pueblo entero.
Después de su fiesta de despedida, Bell no podría acobardarse y decidir quedarse, simplemente no le parecía correcto.
Él ya se había despedido de todos en esa celebración, fue algo emotivo para el pero el ver como todos le desearon suerte lo motivo aún más.
Pero entonces una voz familiar se escuchó en esta casa en donde solo debía haber un ocupante.
"B-bell…" Una voz femenina hablo.
Bell Cranel centro su atención en el origen de aquella voz y vio como su amiga se encontraba ahí. Mirándolo tímidamente desde la puerta.
"Ah, eres tú," Sonrió Bell.
Esa chica era su amiga de la infancia, estos se conocieron cuando ambos aun usaban pañales y no podían hablar.
Fue algo únicamente por casualidad que podía haber pasado en cualquier punto si consideramos el hecho que esa chica y este chico vivían en la misma aldea donde en primer lugar ni había tantos niños.
Quizás estos dos estaban destinados a volverse amigos.
"Realmente… ¿Realmente dejaras la aldea?" Pregunto con falta de ánimos la chica.
Pero ¿quién podía culparla?
Bell era su mejor amigo, ellos habían estado juntos durante años.
Y lo que ella ocultaba era que sus sentimientos… iban más de una simple amistad.
"Lo siento, pero… tengo que hacerlo," Dijo un Bell que dio una sonrisa triste, "Se lo prometí a mi abuelo," Él se había tomado su tiempo ya que Bell pudo partir de inmediato luego de oír sobre la muerte de dicho abuelo, pero a sus catorce años el vio que este era el momento para partir.
Los del pueblo incluso le hicieron una pequeña celebración de despedida a Bell, si bien no fue la más grande o cara a esta aldea no ser exactamente un lugar prospero, para este esa humilde celebración fue suficiente.
Él se estaba yendo esa era la realidad.
Asique viendo que ese momento que ella temía realmente había llegado, esta chica supo que era el momento de decirle a Bell lo que ella siempre había querido decirle.
Llenándose con determinación, está reunió todo su valor y entonces ella lo confeso todo…
…o ese hubiese sido el plan de no ser porque su coraje le había fallado al último momento como muchas veces en el pasado.
"¡…Por favor no nos olvides!" Exclamo la chica a todo pulmón.
"…" Bell no dijo nada, el solo miro sorprendido a su amiga al decir esas palabras.
"Te vas a Orario… en ese lugar debe haber gente increíble, seguramente mucho más increíbles que unos granjeros… mejor que una simple granjera torpe…" Dijo la chica, las últimas palabras fueron en voz baja por lo que Bell no la escucho.
Realmente lo que ella más temía era que Bell conociese en Orario a una chica de la que este terminase enamorado, por ejemplo una poderosa Aventurera que superase en todo a la simple amiga de la infancia.
"No! ¡Nunca los olvidaría!" Aseguro al instante Bell.
Y considerando su alma y corazón puro, era muy posible que Bell mantuviese esa promesa ya fuese que el terminase siendo el Aventurero más poderoso y deseado de por mujeres y diosas de todo Orario.
Aun si el lograse todo aquello que quienes soñaban con hacerla grande en Orario, Bell jamás olvidaría sus orígenes humildes.
"Yo… ¡Por lo menos enviare dinero!" Declaro Bell con una gran seriedad en su voz y expresión.
"¿Que?" Pregunto sorprendida la chica al no esperar tales palabras de su amigo.
"Veras, sé que a ustedes no les va muy bien con las ventas de lo que plantan," Dijo Bell.
La chica miro con tristeza al suelo ya que esas palabras eran la pura y santa verdad.
Toda esta zona era una donde mayormente los habitantes se dedicaban a la agricultura, una típica aldea rural de este mundo.
Como podía ser, había casos de familias logrando vivir de lo que plantaban y vivían de buena forma, incluso pudiendo tener ciertos lujos… pero había otro tipo de casos en donde las cosechas que había no eran muchas o las que había no eran de buena calidad.
La familia que acogió a Bell termino con una mala combinación: Malas cosechas y un numero alto de gente en una casa que dependía de dichas cosechas.
Lo que Bell admiraba era que, a pesar de esa realidad, estos lo acogieron igualmente, le dieron un techo, le alimentaron aun cuando el dinero era escaso… Bell siempre estaría agradecido con ellos.
"Si… desde hace tiempo que nuestras cosechas no han ido bien," Admitió su amiga… al parecer antes las cosas andaban de mejor forma,
"Asique además de haber una boca menos que alimentar, cuando llegue a Orario les enviare lo que pueda de mis ganancias," La principal razón de que Bell fuese a Orario seguían siendo su abuelo y sus historias, este eventualmente partiría de su hogar para esa ciudad ya fuese hoy o en el futuro.
Pero el poder ayudar a esta familia también era un motivo, un objetivo secundario suyo, este viendo sus capacidades vio que la forma de ayudar aquí era irse y enviar dinero.
"¿D-debería ir yo también?" Pregunto tímidamente su amiga, "Si vamos los dos… podemos ganar dinero juntos en la Mazmorra,"
"¿¡EHHH!?" Fue la respuesta de un Bell Cranel que no se podía creer lo que este escucho.
Después de todo su amiga nunca había soñado con ser Aventurera, esta estaba feliz trabajando en el campo con su familia y jugando con sus hermanos y el cuándo se podía, más que eso esta no deseaba nada más.
"T-tu, ¿Estas segura?" Pregunto un incrédulo Bell, "La vida de Aventurero es muy peligrosa," Después de todos estos se enfrentaban a monstruos sedientos de sangre.
"Pero jugamos juntos a ser Aventureros, ¿Eso ayudaría?" Sugirió tímidamente la chica.
Ciertamente, cuando Bell soñaba y tomaba un palo fingiendo ser una espada legendaria, los hermanos y hermanas de esta chica se le unían… por supuesto esta chica también. Con Bell ella era quien más jugaba con él, cosa que eventualmente se volvió una especie de practica para el peliblanco.
La chica… realmente no era buena ni para esa práctica disfrazada de juego, Bell siempre ganaba con facilidad, a veces gracias a ella tropezándose con sus propios pies.
Esta chica era una aldeana que trabajaba (Como podía) en el campo y ayudaba a cuidar a sus hermanos, así ella ni siquiera tenía un sueño serio sobre ir a Orario para volverse una Aventurera o siquiera algo para dejar esta granja.
"No… realmente no creo," Y si bien Bell no tenía entrenamiento formal ni nada, este seguía siendo un chico joven en gran estado físico cuyo trabajo en el campo le daba un cuerpo relativamente fuerte más su agilidad natural.
En cambio, su amiga… bueno, ella lo intentaba.
"Pero… creo que podría ayudar," Insistió ella, aunque sus palabras eran débiles, "Se cómo usar un rastrillo y otras herramientas… seguro que puedo usar un arma,".
Mas que nada esta chica en lugar de querer ir hacia la Ciudad Laberinto en búsqueda de gloria y aventura como muchas otras personas que también provenían de una granja, ella solo quería ir para no separarse de su amigo… su muy querido amigo.
Esta chica poco sabia de Orario o de ser Aventurero, pero lo que ella sabía era que el ser Aventurero era algo peligroso y que había varios quienes iban hacia ese lugar para eventualmente nunca volver.
Al parecer jóvenes que venían de áreas rurales para buscar grandeza en Orario eran el tipo más común de gente que no duraba mucho y no salían con vida de Orario (O con un cuerpo siquiera para ser enterrado) y esta chica no quería en lo absoluto que Bell se uniese a ellos.
Lo que a ella le gustaría era que Bell se quedase… con eso bastaba para ser feliz.
"No quiero que nada malo te pase," Respondió un Bell que miraba con ojos de preocupación a su amiga, "Planeo ser Aventurero por la promesa que le hice a mi abuelo y para eso tendré que pelear en la Mazmorra, mi abuelo de dijo que podía ser peligroso… asique prefiero que te quedes aquí,".
Si ella terminaba muriendo por seguirlo… Bell nunca se lo perdonaría a sí mismo.
Esa chica era alguien amable quien se preocupaba por su familia e intentaba ayudar en lo que pudiese a pesar de ser un tanto torpe… una persona como esa no duraría mucho como Aventurera, incluso Bell podía saberlo.
La chica al oír eso simplemente asintió, ella no tenía palabras para refutar a su amigo. Incluso ella sabía que el ser una Aventurera no era algo que ella podría hacer, al final del día ella era solo una aldeana que trabajaba en la granja de su familia.
"E-entiendo… entonces me q-quedare aquí," Ella dijo eso con resignación en su voz.
Bell dio una sonrisa al escuchar eso ya que al final su amiga estaría en un lugar seguro.
"Entonces, partiré ahora mismo con mi viaje," Bell dio una sonrisa medio triste a su amiga… realmente no era fácil decirle adiós a ella después de los años que pasaron juntos.
Y por el mismo hecho que esos años que pasaron juntos habían llegado a su fin, naturalmente ahora que ese chico se iría la chica sintió que este momento era el indicado para confesar sus sentimientos personales hacia él.
"Yo… tu realmente me… g-g…" Sin embargo, ella no pudo encontrar la fuerza para decir esas palabras.
Varios hubiesen sido capaces de con solo ver el sonrojo en esa chica, la timidez en sus acciones y el hecho que ella está abrazando a Bell como una muy obvia declaración de amor.
Pero este era un chico denso, eso no había que olvidarlo, en una situación como esta él no entendió los sentimientos ocultos de su amiga confundiéndolos con tristeza porque el dejaba la aldea.
"…Tu eres mi mejor amigo," Pero ella aun con la partida inminente del peliblanco no pudo encontrar las palabras adecuadas para decirle sus sentimientos.
'Porque… ¿¡Porque no puedo decirle!?' La chica en este momento se odiaba a sí misma por ser tan débil… por no poder decir unas palabras. Ahora ella se arrepentirá por mucho tiempo por no haber tenido el valor.
"Tú también, tú eres mi mejor amiga," Dijo Bell, "Gracias a ti y tus hermanos tuve con quien jugar y no me sentí solo en las noches,".
Bell realmente agradecía eso, el terminar viviendo solo luego de la muerte de su abuelo hubiese sido una experiencia dura.
"Y quién sabe, quizás cuando sea más fuerte y un Aventurero de verdad, volveré y todos ustedes podrán ver lo fuerte que me volvere," Sonrió Bell, "Cuando eso pase y tenga mucho dinero prometo ayudarlos más," Incluso Bell pensaba en comprarles una casa y territorio mejor para alivianar los costos.
Esta familia humilde se lo merecía, aun con la situación difícil ellos lo acogieron sin dudarlo por un instante, por ahora Bell era solo un chico que soñaba con partir hacia una legendaria ciudad y volverse Aventurero, pero como este planeaba volverse alguien grande y poderoso en Orario el poder pagarle de regreso a esta familia.
"Cuida de todos mientras yo no estoy," Dijo Bell a su amiga, "Se que tu podrás," Aun cuando muchos realmente no dejarían una gran responsabilidad en esta chica, Bell sabía que con ella se podía contar para cuidar de este lugar.
"Si, prometo que lo hare…" Dijo ella en voz baja conteniendo las lágrimas.
"Adiós, espero que cuando nos volvamos a ver yo sea todo un Aventurero," Y con esas palabras Bell partió su camino hacia Orario habiéndose despedido por última vez de su amiga.
Dicha amiga ahora se había quedado sola en aquella habitación de la vieja casa de Bell, si bien ella quería realmente ir detrás de Bell y confesarse… esta simplemente no encontraba la voluntad para hacerlo.
"… ¿Por qué soy tan débil y torpe?" Se pregunto a sí misma la chica que veía como su amigo de la infancia y primer amor se alejaba para preparar su partida.
Orario estaba lejos, ella no podía simplemente ir a ver a Bell como si fuese tan fácil como ir hacia otro pueblo que estuviese cerca.
Un viaje a Orario era algo costoso, no era algo que ella pudiese pagar aun con sus ahorros que no eran ni tanto dinero.
"Realmente espero que… nos volvamos a ver," Dijo la chica para sí misma.
Esa misma tarde Bell Cranel partió hacia Orario dejando su hogar, amigos y a cierta chica que veía a su amigo como algo más que un simple amigo.
¿Realmente se volverían a ver?
¿Realmente ese chico regresaría a su aldea una vez este fuese más fuerte y tuviese más dinero?
O quizás…
¿Aquella chica terminaría realmente siguiendo a su amigo hacia Orario?
-Fin del Flashback-
Y así era como Bell hablo por última vez con su amiga antes de partir hacia Orario con no solo su promesa a su abuelo de ser un gran Aventurero, sino una de enviar dinero hacia la humilde familia que lo acogió.
No era como si fuese un secreto de hacia su Diosa, pero como ella le dijo que este era libre de hacer lo que quisiese con el dinero que quedaba para él, Bell enviaba la mitad de lo suyo hacia la familia de su amiga.
Hestia no lo sabía porque ella nunca pregunto, si ella preguntase entonces Bell con gusto le respondería, pero Hestia no lo hizo porque esta respetaba la privacidad de Bell quien podía gastar su dinero como él lo quisiese.
"Bell, ¿Estas bien?" La preocupada voz de Leina saco a Bell de sus pensamientos.
Nowa también miraba con preocupación a su capitán quien se veía simplemente perdido.
"…Ah, disculpen, me perdí recordando el pasado," Dijo Bell.
Sin embargo, él no podía evitarlo, esos recuerdos eran buenos recuerdos de una vida más tranquila donde Bell podía simplemente jugar y ser solo un niño de una aldea rural.
Si bien fue un momento duro para el dejar atrás esa vida en lo que era el hogar que este había conocido por toda su vida…
…si le diesen a elegir, Bell no cambiaría su vida en Orario, este ya había encontrado una Familia con su Diosa y las dos nuevos miembros, después de todo era aquí en Orario donde Bell estaba cumpliendo su sueño inspirado por las palabras de su abuelo quien muchas veces le hablo de los Aventureros.
Siendo dicho eso, Bell nunca olvidaría a la familia que lo acogió en el pueblo. Él era ese tipo de persona después de todo, aun cuando este creciese en poder y se acercase más a su sueño, este no olvidaría esos momentos.
"Pensaba en lo que deje atrás y como varias veces lo he extrañado," Explico el peliblanco. Sus primeros días en Orario donde él era rechazado por las Familias terminaban con el deprimido en su cama en un hostal, cada una de esas noches el recordaba su cama en loa casa de esa familia de granjeros.
Si bien el compartir una cama con los hermanos de su amiga no era en esencia lo más ideal, Bell simplemente se lo tomaba con toda normalidad.
Eso sí, las palabras de Bell resonaron con los dos miembros de su Familia.
"Extraño a mi maestra," Dijo Nowa, "El bosque era tranquilo, pero realmente… solo la extraño a ella," Y esos eran sus sentimientos honestos, Nowa era tan buena que el odiar a esos Elfos no había pasado aun cuando esta tenía todo el derecho a odiarlos a mas no poder, pero por lo menos esta no los extrañaba y estaría feliz sin volver a verlos.
Pero por otra parte… Nowa rogaria de rodillas si ella pudiese volver a ver a su maestra.
"Yo… Extraño a mis hermanas," Revelo Leina, "Realmente me gustaría verlas, pero… creo que es mejor que no pase por un tiempo," Leina las quería mucho, pero como ella se había escapado de casa esta temía que si ella se encontraba con sus hermanas estas terminarían por intentar traerla de regreso a casa.
Por suerte hasta ahora ninguna se ha mostrado en Orario, ella había estado preocupada de que alguna se mostrase bajo órdenes de su padre y a la fuerza la trajese de regreso… incluso lastimando a Bell quien Leina sabia trataría de evitarlo.
Conociendo a su padre, eso era inevitable… Leina era consciente de que sin dudarlo el buscaría a como dé lugar el traerla de regreso, el en más de una ocasión dejo bien claro como su futuro rol de heredera no era algo negociable sino su deber que ella debía cumplir.
Asique Leina cuando se escapó de casa dejo una nota dando una ubicación falsa sobre su paradero, mas específicamente en un punto lejano lejos de Orario que estaba en la ubicación geográfica opuesta de la ciudad, con eso ella no debería preocuparse por un buen tiempo su padre intentando traerla de regreso a la fuerza.
Ahí Leina buscaría hacerse fuerte para demostrarle a su Familia que ella ya no era esa chica que debía ser la heredera sino una Aventurera capaz de avanzar por su propia cuenta. Viendo que ella podía valerse por sí misma y sobrevivir a la Mazmorra deberían poder convencer a su padre de que ella quería esta vida en Orario.
"Pero bueno… aun si extraño lo que deje atrás para venir a Orario, no me arrepiento de estar aquí," Dijo Bell luego de que un silencio se hubiese formado.
Sera quizás por ser el Capitán, pero el peliblanco al ver como su Familia se había desanimado por causa suya, este sintió que algo debía ser hecho para romper el silencio.
"Si bien extraño a aquellos en esa aldea, ahora mismo estoy aquí en Orario con mi Familia," Dijo un sonriente Bell que miro a las dos chicas, "Y realmente no cambiaría esto por nada," Al final esto era vivir el sueño junto a gente con la que Bell sentía un fuerte lazo a pesar del poco tiempo de conocerlos.
"Yo… quiero mucho a mi Familia," Dijo Nowa mirando a Bell y Leina con ojos llenos de honestidad, "Siempre extrañare a mi maestra, pero… también me gusta este lugar," La bondad que Bell, Leina y por supuesto su Deidad Hestia le habían mostrado era algo genuino.
"Estoy de acuerdo con ustedes," Asintió una sonriente Leina, "Extraño a mis hermanas que deje atrás, pero el poder vivir aquí y ser una Aventurera es algo que no cambiaría," Y para Leina que tuvo que literalmente buscar el momento indicado para huir de casa, ella no estaba con muchos problemas sobre lo que esta dejo atrás… salvo por sus hermanas como se ha dicho.
"Capitan, Leina-san," Dijo Nowa luego de haber terminado su algodón de azúcar, "¡Creo que ya se cómo gastare mi dinero… este será para dulces para dulces!" Declaro Una emocionada Nowa ganando aún más motivación para ser Aventurera.
Sip una motivación que uno esperaría en alguien joven.
Ahora que ella aprendió la maravillosa invención que eran los dulces, Nowa estaba el doble de motivada para ir a la mazmorra ya que antes de esto ella no tenía realmente nada para usar su dinero. Con su vida hasta ahora en realidad ella no tenía necesidad alguna para tener dinero ya que con solo sus ropas y lo que ella pudiese encontrar para comer bastaba.
Sin haber descubierto la maravilla de los dulces, Nowa probablemente hubiese solo acumulado su dinero sin más.
Las palabras de Nowa podían no haber sido las más profundas o filosóficas, pero estas sirvieron para levantar el ánimo de Bell y Leina.
"Cierto, y para eso necesitamos primero ir al Gremio," Con eso dicho la Familia Hestia continuo con su camino.
Esta pequeña distracción antes de llegar al Gremio podía parecer algo insignificante, un simple momento para comer unos dulces y hablar un poco más… pero era en momentos pequeños e insignificantes los que formaban lazos especiales.
-Gremio-
Para el Gremio todavía quedaban alrededor de cuatro horas de actividad aun cuando el cielo estaba naranja, para la Familia Hestia ese era un tiempo suficiente para lo que venía a hacer.
En la recepción se encontraba Eina Tulle quien estaba observando unos papeles, el día podía estar cerca de terminar, pero todavía había trabajo de hacer y como trabajadora diligente que era esta, Eina seguiría trabajando hasta que la hora de terminar llegase.
"Hmm… parece que la todavía sigue estable," Comento para sí misma Eina al ver en un papel en particular que hablaba sobre el estado en general entre las Familias de Orario.
En los últimos meses no se habían perdido miembros importantes (Pasados el Nivel 1) de ninguna Familia, las Familias más grandes e importantes no demostraban alguna animosidad con las otras comparables a estas tampoco.
Ahora mismo había paz, ahora mismo existía una especie de balance en Orario.
"Qué bueno que sea así, estoy segura de que Bell y Leina podrán hacerse más fuertes en un Orario como este," Ya que cuando Orario pasaba por tiempos turbulentos, las Familias pequeñas y débiles no llegaban muy lejos.
Por lo que ella había visto en reportes sobre tales tiempos, incluso Familias más grandes que la diminuta Familia Hestia tenían miembros muriendo o siendo exterminadas por una Familia más grande y poderosa por cualquier razón.
Eina estaba preocupado por ellos, tanto Bell como Leina habían demostrado ser muy buenas personas, ella no podía hacer mucho por ellos salvo buscar como ayudarlos desde su posición.
Pero como ambos les estaba yendo muy bien y Orario seguía estando en un momento de calma, Eina podía sentirse calmada por el momento sobre el futuro inmediato de la Familia Hestia.
Una cosa que le alegraba a ella era como la situación de Bell y Leina se veía bastante estable, desde que Leina se unió a la Familia Hestia, las ganancias de dicha familia se habían duplicado y por lo visto Bell y Leina podían pelear bastante bien como equipo si la falta de heridas en ambos era indicación alguna.
A veces era increíble la enorme diferencia que solo una persona podía hacer.
No solo en las ganancias de la Familia, sino en la actitud de cierta persona.
Desde que Bell era el capitán de la Familia de dos miembros, este había sufrido un cambio leve pero notable. Este ahora se veía con más confianza que antes y tenía una determinación mayor.
Sera que el ser consciente de lo importante de la posición le inspiro a cambiar para poder ser el capitán que su Familia necesitaba…
Y por mera coincidencia, mientras Eina pensaba en ese especifico Aventurero…
"Eina-san! Eina-san!" La familiar voz de Bell Cranel se escuchó dentro del Gremio.
"Ah, Bell-kun, Leina," Saludo Eina al ver quien se estaba acercando.
Efectivamente eran Bell Cranel y Leina Vance (Aunque Eina sabia no mencionar ese apellido) quienes se le estaban acercando.
Aunque era un poco raro ya que… ¿No había ellos regresado a casa luego de haber estado aquí más temprano?
Como Bell y Leina habían ya hecho una visita a la Mazmorra antes de conocer a Nowa estos ya visitaron el Gremio para intercambiar sus Piedras Mágicas por valis. Lógicamente estos no volverían hasta mañana luego de otra ronda en la Mazmorra.
La respuesta a esa pregunta se mostró cuando Eina noto como detrás de Leina se encontraba una chica joven, visiblemente más joven que Bell.
Eso si por el tamaño de las orejas Eina inmediatamente la reconoció como una Mitad-Elfo como ella.
"Eina-san, queremos presentarte a nuestra tercer miembro, Nowa!" Dijo Bell muy alegre.
El peliblanco señalo hacia Nowa quien parecía perdida en sus pensamientos, esta solo miraba con sorpresa a Eina.
"H-hola, mucho g-gusto," Dijo timidamente la Mitad-Elfo.
"Vaya, Bell realmente tu Familia está adquiriendo nuevos miembros a una velocidad notable," Comento Eina con ligera sorpresa, "Familias que empiezan en Orario desde cero tardan mucho más en consolidarse,".
Para Familias de tamaño mediano con buena reputación entonces no era poco común el ver sus números aumentar con nuevos miembros en días y a veces más de una persona en un mismo día.
Para familias de buena reputación y con un numero alto de miembros entonces cualquiera que desease unirse o era rechazado o rara vez dado la oportunidad de unirse.
Para las Familias de baja reputación y pocos miembros el problema era inverso, nadie quería unírseles prefiriendo ir hacia los más conocidos.
Que la Familia Hestia que estaba en esta última posición ya tuviese tres miembros en dos semanas era una buena velocidad honestamente algo destacable considerándolo todo.
"Así es y francamente espero que se mantenga así," Dijo un emocionado Bell.
"Nuestra Diosa se pondrá muy feliz si más gente llega," Añadió Leina.
Por otra parte, Nowa se había quedado quieta, esta se encontraba observando con bastante sorpresa a Eina. La razón de esa sorpresa era que por primera vez en su vida Nowa había conocido a otra… que compartiese su raza.
"Otra Mitad-Elfo," Susurro una sorprendida Nowa, "Es la primera vez que veo una," Y si, Nowa había visto humanos y Elfos de sangre pura, pero no otros como ella.
De cierta forma era triste que hasta este punto Nowa nunca hubiese podido ver a quien compartía su misma especie si es que los Mitad-Elfo podían ser clasificados como una especie separada.
Francamente ella no sabía como actuar, había varias cosas que ella quería preguntarle a esa señorita, pero las palabras simplemente no se formaban. Por eso Nowa solo pudo guardar silencio mientras miraba a tímidamente a Eina.
"Eina-san, como usted también es una Mitad-Elfo y Nowa es nueva a Orario, pensé que usted podría ser también la asesora de ella," Dijo Bell.
"Bueno… normalmente eso no pasa, normalmente de una Familia varios miembros no comparten un asesor," Admitió Eina, "Aunque hay casos donde eso ocurre, el límite de asesor por miembros de Familia es 5," De nuevo, Leina no sabía el porqué de esa regla, solo que esta existía.
Una teoría era que ese límite estaba impuesto porque una Familia técnicamente no tenía límite de miembros y un asesor solo era capaz de efectivamente tratar con un número fijo de personas antes de que se volviese demasiado como para que solo un empleado pudiese asesorar propiamente.
En fin, eso significaba que como máximo Eina Tulle solo podía ser asesora de otros dos miembros de la Familia Hestia si estos llegaban a unirse y ella estaba dispuesta a ser asesora de estos.
"Pero no veo nada malo con esto," Finalmente Eina se decidió, "Si Nowa está de acuerdo conmigo no veo problema,".
"S-si! No tengo problema alguno!" Asintió muy rápidamente Nowa.
Y así Eina Tulle había ganado a una tercera Aventurera a su cargo.
-Habitación Privada-
"Entonces Nowa, ahora te hare unas preguntas y luego necesito que firmes unos papeles," Dijo Eina.
"D-de acuerdo," Asintió rápidamente una nerviosa Nowa.
Sin embargo, ¿Quién podía culparla? ¡Ahora ella estaba sola con alguien de su misma especie!
"Primero, ¿Cuántos años tienes?" Pregunto Eina, Nowa se veía un poco mas joven que Bell asique ella quería confirmar su edad.
"Tengo 13," Contesto la Mitad-Elfo, si lo que ella recordaba era correcto sobre su fecha de nacimiento, esa debía ser su edad actual.
'Tan solo un año más joven que Bell…' Pensó Eina quien evito dar un suspiro audible ante eso.
Francamente una de las cosas que Eina detestaba era ver a gente tan joven elegir este camino… pero no era como si ella pudiese hacer más que recomendar no hacerlo, si la persona que deseaba inscribirse poseía el Falna y pagaba lo que se debía, entonces no había razón para rechazar a dicha persona.
Reglas del Gremio dadas por Ouranos desde la fundación. Nadie podía cambiarlas salvo la Deidad quien claramente no tenía interés en aquello.
"Muy bien, entonces comenzare a pedirte que llenes el registro con información básica para luego darte una lección básica sobre lo que se debe hacer y no hacer como un novato," Dijo Eina quien puso en la mesa los papeles para que Nowa los firmase.
Esto iba a ser un proceso estándar para un nuevo Aventurero… o eso parecía hasta que Nowa alzo una mano.
"D-disculpe," Sin embargo Nowa la interrumpió, "Eina-san, lamento interrumpirla cuando va a comenzar su lección," Para Nowa el interrumpir una lección era algo extremadamente grosero. Sin embargo, lo que ella deseaba preguntar simplemente la supero.
"¿Pasa algo?" Pero con amabilidad y sin enojo al ser interrumpida, Eina dijo esas palabras.
"Eina-san, ¿Usted también tuvo que lidiar en Orario con el desprecio por ser Mitad Elfo?" Pregunto con timidez Nowa.
Nowa no sabía si era apropiado el preguntarlo… pero realmente ella quería saber cómo era para los otros, si estos habían experimentado cosas similares o incluso peores que lo que ella tuvo que pasar.
"¿Eh?" Fue la respuesta de una Eina que no se preguntó eso como la primera pregunta.
Y ahí en esa habitación fue que Eina pudo escuchar el pasado de Nowa.
-Una Hora Después, (Afuera de la Habitación)-
"…y por eso creo que ustedes dos deberían tener el sofá esta noche ambas son chicas," Se escucho hablar a Bell quien esperaba junto a Leina a la nuevo miembro de la Familia una vez esta terminase su lección.
"¡Bell! ¡Yo debería ser la que debería dormir en el suelo!" Contesto una determinada Leina a su capitán, "¡Yo fui la segunda en llegar y tú eres nuestro capitán!".
"Yo dormiré en el suelo, esas son las órdenes del capitán," Insistió un Bell que cruzo sus brazos y miro con terquedad a Leina.
"¡Pues como Vice-Capitana creo que el capitán está cometiendo un error!" Contesto una igualmente testaruda Leina.
De no ser por el tema de conversación y la poca importancia de esta Familia entonces esta situación podría ser una situación crítica si ocurría en una Familia modernamente grande y con más importancia.
Normalmente en una Familia cuando el capitán y el Vice-capitán de una Familia tenían una discusión en la que no podían llegar a un acuerdo… eso no era una buena señal, peor aún era algo como eso justo en medio de una expedición.
Por suerte este tema era uno no muy importante a grandes rasgos.
¿Quién iba a dormir en el suelo ahora?
Como un nuevo miembro se había unido eso significaba que para la noche alguien debería dormir en el suelo. El sofá donde Bell y Leina dormían juntos simplemente no podía acomodar a tres personas.
La Diosa Hestia por supuesto no tendría problemas en ofrecer compartir su cama (Como detalle curioso: de sus tres hijos ella estaría más que feliz de que Bell fuese con quien ella compartiese su cama) pero como Bell y Leina veían eso como algo inapropiado al tenerle respeto a su Diosa, estos se negarían a esa oferta.
Por otra parte… debía decirse, Bell Cranel realmente disfrutaba cuando el momento de dormir llegaba, el sofá no era muy grande por lo que él y Leina debían estar muy cerca para poder dormir.
Bell no lo diría abiertamente, pero este disfrutaba mucho de las noches desde que Leina se unió a la Familia, para un chico adolescente como el, claramente no había nada mejor que sentir tan de cerca el voluptuoso cuerpo de una belleza como Leina.
Un joven princeso pero que al mismo tiempo podía apreciar lo que era una mujer… y Leina Vance era una mujer de calidad muy alta: Cuerpo increíble, juventud, línea se sangre noble y descender de una Aventurera muy poderosa en su tiempo.
En otras palabras, una parte de Bell lamentaba el tener que partir de tal situación… pero otra parte sabía que tenía que hacerse.
Curiosamente, a Leina también le agradaba el poder dormir con Bell estando tan cerca de ella aun si ella no lo decía en voz alta.
Yendo por una lógica convencional, como la miembro más nueva Nowa debía ser la que debería dormir en el suelo, pero… ni Bell ni Leina se sentían cómodos con la idea.
Asique esta discusión era simplemente ver quien dormía en el suelo. Ni Bell ni Leina estaban dispuestos a ceder en sus posturas.
Esta discusión por eso mismo podría extenderse por quien sabe cuánto tiempo ya que ambos creían que estos debían ser quienes deberían ser los que duerman en el suelo.
Quizás eso llegue al punto que la única persona que pueda ponerle un fin a esto era el mismo ser que tenía la palabra final en lo que era una decisión para una Familia: La Deidad a la que estos servían.
Asique antes que esta pequeña discusión entre estos dos continuase sin una resolución, la puerta detrás de ellos se abrió.
Desde ahí salió Nowa quien se veía… alegre. Detrás de ella salió una silenciosa y un tanto decaída Eina.
"¡Muchas gracias por sus lecciones Eina-san!" Agradeció sinceramente Nowa, "¡Prometo no olvidar nada de lo que me enseño!"
Nowa escucho atenta la explicación de Eina sobre lo básico de ser Aventurero, sobre las cosas que esta debía tener en cuenta y lo que había que evitar, básicamente la misma lección que recibieron Bell y Leina (Aunque la de Leina fue en mucho más detalle para que le quedasen bien claros los peligros de la Mazmorra) cuando Eina les fue asignada como asesora.
"Nowa, ¿Lo entendiste todo?" Pregunto Leina, si bien su propia lección fue una experiencia más… aterradora, esta hizo esa pregunta.
"Si, Eina-san realmente explica muy bien las cosas," Asintió Nowa.
Con eso hecho lo único que los detiene para comenzar a explorar la Mazmorra era el llegar ahí.
"capitán… estoy feliz," Admitió Nowa para sorpresa de Bell y Leina, "Feliz porque al menos en Orario los Mitad-Elfo no tienen que experimentar lo mismo," Dijo con toda honestidad Nowa. "Tenía miedo de que el trato hacia mi fuese lo normal de los Elfos a los Mitad Elfo, pero ese no es el caso," Dijo ella con una sonrisa honesta.
Tales palabras provocaron un silencio en el lugar, para ellos que conocían su historia… no sabían como responder.
"Nowa, por favor podrías adelantarte e ir con Leina en la entrada del Gremio," Dijo Eina con un tono de voz suave pero al mismo tiempo profesional, "Tengo que discutir algo con tu capitán, solo tomara un poco de tiempo".
Bell se apunto a si mismo a lo que Eina asintió, asique el peliblanco solo asintió silenciosamente.
"Por favor espérenme ahí en la entrada, prometo ir inmediatamente cuando termine aquí y de ahí vamos a la Mazmorra," Dijo Bell.
"Entendido capitán," Asintió con seriedad Nowa al aceptar esas palabras como una orden.
Con eso Bell y Leina se quedaron solos.
Eina vio como una alegre Nowa fue junto con Leina, ella no había salido de esa habitación con los espíritus bajos, sino que con su espíritu brillando más fuerte.
Verdaderamente un alma pura le pertenecía a Nowa, en lugar de sentir resentimiento u odio hacia los Mitad-Elfo de Orario quienes no experimentaron lo mismo que ella, esta sintió alivio por tal hecho.
Al parecer mientras un trato como ese se limitase solo a ella, Nowa estaba contenta.
Esta chica realmente era del tipo que había pocas de esta en el mundo… eso Eina Tulle había aprendido luego de escuchar su historia.
"Por favor, trata de que no le pase nada malo a esa chica," Dijo seriamente Eina.
Eina Tulle había… escuchado la historia de Nowa desde principio a fin. Una historia que Nowa conto con una normalidad impresionante ya que si bien Nowa se desanimó, esta nunca se puso a llorar o sufrió un quiebre emocional.
"Eina-san…" Susurro Bell.
Bell nunca había visto a su asesora actuando de esta forma. Si bien Eina había sido seria con el cuándo era necesario, ahora mismo ella simplemente sonaba distinta a la chica que era seria cuando esta hablando con el Aventurero joven a su cargo.
Quizás una mejor forma de decirlo es que esta Eina era simplemente la 'Eina Tulle' la chica que vivía en Orario, no la 'Eina-san' quien era la trabajadora del Gremio.
Ahora mismo después de todo ella le estaba pidiendo a Bell el cuidar a Nowa no como una petición de parte de su asesora, sino de una chica que no quería ver a alguien como Nowa morir.
"Creciendo en Orario, si bien no fue perfecto, diría que tuve una infancia bastante buena," Dijo la asesora de Bell, "A lo más recibí miradas frías de ciertos Elfos en las calles, pero solo eso,".
Bell no dijo nada, el no sabía que decir por lo que este solo pudo escuchar a una Eina que se veía más vulnerable de lo que él había visto desde que la conocía.
"…Pero ahora me di cuenta de que fui más afortunada de lo que pensé," Una expresión indescifrable se manifestó en la asesora de Bell, "Creciendo en Orario… no tuve muchos problemas, hubo ligeras veces en donde ciertos Elfos me miraban con frialdad, pero más que eso nada,".
Y Eina no menciono nada sobre la forma que Royman la trataba a ella, aun si era algo indeseable se tenía en un nivel donde Eina podía manejarlo ya que nunca pasaba de palabras que ella podía ignorar.
Sin embargo, al comparar su situación con la de Nowa, ahí Eina entendió como estar en Orario donde todas las razas se encontraban era un verdadero plus en comparación con otros lugares y que ella fue afortunada en nacer aquí aun cuando esta era consciente de los muchos problemas de la ciudad.
"…. ¿Cómo puede esa chica todavía sonreír de esa forma?" Eina Tulle no podía entender como Nowa no se había roto después de recibir esa clase de trato de parte de los Elfos: Aislamiento total salvo por una persona, "Si hubiese sido yo sufriendo esa clase de trato… creo que hace tiempo me habría vuelto loca,".
A veces el ser completamente ignorada podía ser peor que ser abiertamente despreciada…. Pero aun así Nowa conservaba su inocencia e idealismo, al parecer su único lazo con alguien más era uno bastante fuerte para lograr salvarla del abismo.
"Yo… no lo se," Afmitio Bell con una sonrisa triste, "Lo que ella tuvo que pasar fue muy duro pero… por lo menos ella esta aquí, mi Familia puede darle a Nowa un hogar donde ella es aceptada," Y Bell estaba determinado a que eso ocurriese.
Bell podía ser solo un joven de 14 años, pero este por lo menos entendía que Nowa necesitaba un hogar que la acogiese cálidamente y que la Familia Hestia podía ser ese lugar.
"Bell-kun, de ser posible hubiese preferido que una chica como Nowa no se hubiese vuelto Aventurera," Admitió Eina para la sorpresa de Bell.
"¿Eh? ¿Por qué? Fue Nowa la que decidió ir a Orario porque ella fue entrenada mucho en como pelear," Dijo un confundido peliblanco.
"Por eso mismo Bell-kun," Dijo con severidad Eina a lo que Bell retrocedió inconscientemente un paso, "Nowa a sus ojos no tuvo otra elección más que volverse Aventurera, ella nunca pensó que otro camino podría haber estado abierto para ella," Por ejemplo esa mente brillante le hubiese abierto varias puertas.
Para Eina el ver que alguien como Nowa iría al lugar que había sido tumba de muchos sin duda fue algo duro, aunque siempre era así ya que había incluso gente más joven que iniciaba como Aventureros, esa era una profesión que no tenía límite de edad y que hasta alguien muy pequeño podría legalmente inscribirse si se poseía un Falna.
'Podría haberla ayudado a conseguir un trabajo en el Gremio…' Fue el pensamiento traicionero de Eina.
Eina pudo ver a una joven con una mente brillante, a una chica que aprende rápido y que con una buena educación podría usar esa mente brillante para algo más seguro que adentrarse en la Mazmorra, el Gremio era un buen lugar, por ejemplo.
En el fondo: Eina Tulle estaba simplemente preocupada por Nowa.
De haberla conocido antes ella hubiese intentado al menos convencerla de buscar otras opciones para ver qué hacer con su vida luego de ser expulsada de su hogar.
Había más opciones… no solo era necesario arriesgar tu vida.
"Creo que lo entiendo…" Asintió Bell luego de pensar en las palabras de Eina, "Pero, sabes Eina-san, no siento que Nowa haya visto esto como su única opción,".
"¿Cómo lo sabes? ¿Acaso ella te lo dijo?" Respondió Eina.
"N-no…" Admitió Bell quien miro al suelo, "Era solo una sensación mía,".
Si bien Eina pudo decir más cosas, esta eligió no hacerlo luego de ver como estaba actuando Bell.
Ella no debía olvidar que este seguía siendo solo un joven de 14 años, un chico de buen corazón y todavía inocente… Eina debía recordarse no ser muy dura con él.
Ese silencio que se formó le permitió a Bell reunir sus pensamientos y tomar una decisión luego de pensarlo más detenimadmente.
"Eina-san, realmente… ¿Los Elfos y Mitad-Elfos se llevan tan mal?" Bell se atrevió a preguntar.
Hasta la historia de Nowa, Bell Cranel quien creció en un lugar pequeño con únicamente humanos no tenía idea realmente sobre como funcionaban las cosas con otras razas…. Mejor dicho, él era ignorante de esas cosas.
Sin embargo, ahora él era un capitán, el tenia a una Mitad Elfo en la Familia y como tal Bell decidió que el debería saber un poco más de ese tema para poder ayudar a Nowa con sus problemas.
A lo ojos del joven capitán: Era su deber ayudar en todo lo posible a su Familia, si el no sabía como entonces él debía aprender.
Tal pensamiento era erróneo para un capitán por supuesto, si bien estos tenían un rol importante en sus Familias, ese rol no era el de ayudar a cada miembro con sus problemas como si fuese un deber más de la posición.
Bell no lo sabía, este chico seguía siendo ingenuo y con poca experiencia sobre lo que un capitán debía ser. El estaba malentendiendo en donde este debía interceder y donde no.
"…Lamentablemente eso ocurre en la mayoría de los casos," Responio Eina, "Es especialmente graves en lugares donde los Elfos son la mayoría,".
"Y-ya veo," Asintió Bell.
"Pero como asesora no está en mi lugar hablar de eso aquí, pero si quieres realmente aprender, puedo enseñarte lo que pueda," Dijo Eina.
"En serio? ¡Muchas gracias!" Dijo un feliz Bell.
"Pero no creo que sea algo que deba hablar contigo como tu asesora," Dijo Eina tan profesional como siempre, "Pero si realmente quieres saber más, podríamos juntarnos en mi día libre,".
Como Eina iba a enseñarle eso no como su asesora, esta decidió usar uno de sus preciados días libres. Pero si era para ayudar a Bell y a Nowa entonces ella no veía problema.
"De acuerdo, así podre entender mejor la situación de Nowa," Asintió un determinado Bell.
Y habiendo decidido eso, Bell hizo otra pregunta para confinar como le fue a la nueva miembro de la Familia.
"Todo fue bien con Nowa a la hora de enseñarle lo básico?" Pregunto Bell para cambiar un poco el tema.
"Ella entendió todo bastante rápido," Dijo Eina, "Creo Nowa es bastante buena a la hora de recibir nueva información,".
Francamente eso era algo que su maestra noto que la hacia una excelente estudiante al tener Nowa la capacidad de entender y aprender de forma rápida.
"Bueno ella menciono entrenar mucho tiempo bajo una maestra," Dijo Bell, "Quizás ella sea buena aprendiendo en general,".
"Cierto, ella también con mucho orgullo menciono a su maestra," Dijo Eina al recordar ese detalle.
'Hubiese sido genial tener a una persona como esa…' Pensó Bell.
Después de todo, él era autodidacta, Bell hizo lo que pudo por sí mismo, pero realmente hubo veces en que este hubiese deseado que en su pueblo hubiese habido alguien que le hubiese podido enseñar a ser un mejor aventurero.
¿Cómo sería tener un maestro que le enseñase a ser mejor peleador?
Luego de escuchar lo mucho que Nowa admiraba a su maestra Bell realmente pensaba que tener un maestro hubiese sido genial con quien se podría crear un lazo tan fuerte que este pudiese hablar con el mismo orgullo que Nowa.
Pero bueno, Bell ya se encontraba en Orario, este ya había entrado a la vida de Aventurero solo con su propio entrenamiento, este no pudo ingresar a Orario como alguien con ese tipo de experiencia.
Aunque quizás… Bell podría terminar efectivamente teniendo una maestra.
Después de todo, nunca era demasiado tarde como para comenzar a entrenar y buscar mejorar.
"Eina-san, yo voy a reunirme con Leina y Nowa en la entrada del Gremio," Dijo Bell luego de salir de esos pensamientos, como él estaba aquí ya no había punto en lamentarse por lo que no pudo ser, "Nowa esta emocionada por poder entrar a la Mazmorra como Aventurera, no quiero hacerla esperar más,".
"Entonces déjame acompañarte a la entrada" Ofreció Leina, "Quiero darle unas últimas palabras a Nowa,".
-Afuera del Gremio-
En la entrada podemos ver como Leina y Nowa estaban esperando juntas a Bell. Ahora mismo ellas estaban en silencio esperando.
"¡Leina! ¡Nowa!" Las chicas escucharon la familiar voz del capitán de la Familia Hestia.
"Bell/Capitán," Respondieron ambas chicas.
"Ya terminé de hablar con Eina-san, ahora podemos finalmente ir a la Mazmorra," Sus ojos tenían determinación, aun cuando este técnicamente era su segunda expedición en un mismo día, como era la primera de Nowa, Bell no sentía mucha fatiga.
"¡Muy bien!" Celebro una Mitad-Elfo que miro a Bell directo a los ojos con tal intensidad que uno casi podía ver el fuego en esos ojos, "¡capitán, Nowa lo dará todo!".
Y ante tal declaración tanto Bell, Leina e incluso Eina no pudieron evitar sentir una gran motivación.
"Muy bien, realmente no puedo detenerlos…" Dijo Eina quien entonces miro específicamente a Nowa, preocupación presente en los ojos de la asesora "Pero por favor, ten cuidado, eres muy joven y odiaría verte morir,".
"Descuide Eina-san!" Dijo Nowa dándole una mirada determinada a Eina, "Mi maestra no entreno a una chica débil, le aseguro que podre con el primer piso," En su voz no había dudas sobre aquello.
Y con esas palabras Nowa fue con los miembros de su Familia, determinada a pelear en la Mazmorra como una Aventurera de la Familia Hestia.
Eina vio como la ahora más grande Familia fue hacia el combate y ahora con un nuevo miembro, una joven Mitad-Elfo que había experimentado prejuicio debido a su raza pero que aun así había podido mantener su inocencia.
"Por favor, vuelvan sanos y salvos," Susurro la asesora quien únicamente podía desearles buena suerte a ese grupo que ahora era un trio.
Una Familia pobre con miembros jóvenes e inexpertos que parecía entrar en una buena racha al encontrar gente dispuesta a unirse.
Eina había aprendido que a lo largo de la historia de Orario desde que el Gremio estaba activo como tal, que hubo varias Familia que tenían un rápido ascenso al comenzar a crecer a una rápida velocidad y que tenían claramente un futuro brillante…
…solo para que la realidad los encarase y que la Mazmorra se volviese sus tumbas.
Eina había en este trabajo aprendido de casos similares… que habían encontrado un final prematuro en la Mazmorra, esa era una historia que se repetía varias veces en la historia de esta ciudad.
Siendo solo una asesora ella solo podía rezar para que la joven Familia Hestia no viese sus jóvenes alas siendo cortadas y pudiesen terminar más alto junto con las otras Familias de prestigio.
-Mazmorra, (Primer Piso)-
Mas tarde este mismo día nos encontramos en la Mazmorra donde los ahora tres miembros de la Familia Hestia se hacían presente para servir como Aventureros haciendo lo que estos deben hacer: Matar monstruos.
"Increíble, ¿Esta es la Mazmorra?" Pregunto una sorprendida Nowa quien miraba a sus alrededores.
"Así es," Asintió Leina, "También me sorprendí cuando llegue por primera vez,".
Bell y Leina ya estaban en el Cuarto Piso en lo que se refería al lugar donde estos solían llegar, si bien era muy pronto cuando estos trabajaban juntos incluso un piso como este para aventureros que llevaban dos y una semana respectivamente era algo posible.
Sin embrrgo como Nowa apenas comenzaba, el primer piso era lo ideal.
"Entonces… ¡Vamos!" Ordeno Bell.
"¡Muy bien!" Leina cargo con todo para otro combate, ella ya se había acostumbrado a lo que era peelar contra monstruos.
"S-si!" Dijo una nerviosa Nowa que se lanzó al primer combate con su Familia. Este era el momento de la verdad para ella, aquí ella debía probarse a sí misma como una ayuda.
Y así la Familia Hestia de ahora tres miembros se cargó en contra de los monstruos.
Bell y Leina por supuesto comenzaron a matar con facilidad a los monstruos… estando separados.
Ellos eran más fuertes aun después de relativamente poco tiempo en la Mazmorra al punto que el primer y segundo piso ya no eran un problema aun peleando separados cuando antes necesitaban pelar juntos en equipo para salir de aquí sin herida alguna.
Leina usando su espada con un solo movimiento era capaz de cortar a un monstruo, y más que cortes profundos esta era capaz de cortar por completo a sus oponentes como los Golbins y Kobolds al decapitarlos o cortarlos por la mitad.
Bell por otro lado se movía con más velocidad, este peleando y sobreviviendo había logrado completar más las bases de su propio estilo de combate, ahora sus ataques iban más directo a los puntos vitales como el cuello o el corazón.
Mientras tanto fue Nowa la que en este primer combate con otros dejo en evidencia… lo que era ser una guerrera con entrenamiento.
"¡Haa!" Dijo la joven Mitad-Elfo mientras usando su arma esta derrotaba con facilidad a los monstruos que la atacaban.
Haciendo una estocada frontal Nowa pudo destruir el cráneo de un Kobold… pero eso permitió que desde atrás otro Kobold la atacase con la intención de morderle el cuello.
Sin embargo, por muy novata que era ella, a diferencia de muchos otros novatos esta Mitad-Elfo tuvo un entrenamiento constante y de muy alta exigencia antes de pisar la Mazmorra.
Y sin siquiera mirar hacia atrás Nowa giro su arma en sus brazos para impactar la cabeza del Kobold rompiendo así su cráneo y acabando con su vida.
"Pude sentirte sin siquiera mirar," Susurro Nowa.
Una pelea donde su vida estaba realmente en peligro era algo nuevo, con su maestra habían sido siempre peleas constantes de entrenamiento donde su maestra siempre sabia donde detenerse, pero… esto era matar o morir.
Dando un salto y una voltereta en el aire, Nowa clavo una de las puntas de su vara en la cabeza del Goblin cuando esta había comenzado a descender al suelo.
De entre los tres, a pesar de ser la más nueva Nowa era la que había matado más monstruos peleando mejor que Bell y Leina, Nowa tenía golpes más certeros y pocos movimientos desperdiciados.
"Increíble Nowa," Dijo Bell luego de observar cómo al Mitad Elfo estaba teniendo una mucho, "Comparado con mi primera vez aquí, tú lo haces ver fácil,".
"No, es gracias a mi maestra," Respondió Nowa quien negó con la cabeza, "Ella me enseño todo lo que se sobre pelear desde que tenía seis años," Si alguien merecía los cumplidos era su maestra.
Aunque lo malo era que Nowa no reconoce sus propios méritos… después de todo no muchos pueden seguirle el ritmo a su maestra junto con conseguir tal reconocimiento de parte de esta.
Nowa podía ser la miembro más joven, inocente e inexperta con el mundo exterior de entre los tres miembros de la Familia Hestia… pero no había que olvidar que a diferencia de Bell y Leina, Nowa había recibido un entrenamiento duro y constante desde joven.
Asique en las bases, técnica y en general como peleadora, Nowa era superior mientras Bell y Leina tenían estadísticas básicas más fuertes asique estos las superaban en cosas como la fuerza, velocidad y resistencia.
Normalmente que el miembro más nuevo se muestre claramente superior en combate a los más veteranos causaría fricciones en una Familia regular… pero eso era en caso de una Familia regular.
"Nowa es la mejor peleadora y tuvo entrenamiento con alguien más, pero… como Capitán… ¡No voy a perder!" Declaro Bell quien sintiéndose renovado siguió peleando ferozmente contra los monstruos.
A diferencia de otro tipo de Aventureros con un ego frágil que inmediatamente hubiesen sentido envidia y hostilidad hacia alguien como Nowa que desde su primera ronda en la Mazmorra mostraba tal talento y habilidad de combate, Bell Cranel no sintió una sola pizca de resentimiento hacia ella.
En lugar de eso este al ver como Nowa era superior en respecto a técnica y estilo de combate, Bell se sintió más motivado a hacerse más fuerte.
"Tienes razón, ¡Yo tampoco voy a parar!" Dijo Leina quien con un renovado vigor partió nuevamente al combate.
Estos dos quienes habían escuchado la historia de Nowa supieron que ella había sido entrenada todos los días desde joven cosa que ambos no tuvieron.
No había ni un gramo de envidia o resentimiento en los corazones.
Y así trabajando juntos estos tres lograron acabar con los monstruos del primer piso, para Bell y Leina esto se había vuelto más fácil que la primera vez señalizando que estos se estaban volviendo más fuertes.
"Creo que esos son todos," Dijo Bell mirando a los alrededores.
"Haaa… asique esta es una batalla real…" Nowa dio un largo suspiro, por primera vez ella había probado lo que era batallar contra oponentes que buscaban matarla. Realmente el entrar en combate real era distinto de únicamente entrenar.
"¿Te sientes bien?" Dijo Leina quine puso una mano en el hombro de Nowa para calmarla.
"Si… es solo que es tan diferente de entrenar," Respondió Nowa.
"Pues deberías acostumbrarte, si quieres seguir como Aventurera encontraras esto muchas veces," Dijo Bell, "A veces ni puedes tener momentos para recuperar tu aliento antes de ser atacado por otro monstruo,"
En su primera semana cuando él estaba solo hubo más de una vez que él fue atacado por sorpresa por un monstruo que había recién aparecido u otro que él no había matado realmente.
"Pero por suerte los matamos a todos," Dijo Leina mirando sus alrededores, y confirmando que ninguno seguía con vida, "Si hay un momento para relajarse es este,".
Nowa también miro para asegurarse de que todo estaba bien no había monstruos alrededor… y ahí ella lo vio.
"Ah, ¡pero ahí queda uno!" Exclamo Nowa quien vio moverse a otra criatura a lo lejos.
Cuando Bell y Leina centraron su atención en donde Nowa había apuntado, la sorpresa fue clara.
Un gallo. Un gallo con suaves plumas de color amarillo verdoso.
Normalmente al ver que quedaba un monstruo, la acción inmediata hubiese sido ir hacia este y acabar con el… Sin embargo, el verlo causo que Bell se quedase quieto por la sorpresa antes de recuperarse.
"¡…Esa es el Jack Bird!" Exclamo en sorpresa Bell quien no se pudo creer que realmente ese famoso monstruo aparecería frente a sus ojos.
"¿¡Eh!?" Leina estaba también sorprendida, "¿¡No ese ese un monstruo super-raro!?"
Efectivamente se trataba de la famosa Jack Bird, un monstruo raramente visto que solo aparecía en el primer piso.
Cuando uno pensaba en el primer piso de la mazmorra lo que se viene a la mente eran monstruos débiles y pocas ganancias en comparación con lo que uno podría encontrar más profundo.
Y bueno, uno estaría correcto, pero por eso mismo este era el primer piso donde los monstruos más débiles se encontraban.
Sin embargo, en estos primeros pisos había un monstruo un tanto especial no exactamente por su poder, sino por su rareza y la gran recompensa que uno podría obtener si este.
El Huevo Dorado de la Jack Bird es un objeto muy valioso que llegaba como mínimo a valer 1.000.000 de Valis.
Un precio increíble ciertamente algo que se justificaba debido a la rareza del monstruo que dejaba ese Item ya que en primer lugar una Jack Bird rara vez era vista, podían pasar meses desde que alguien haya visto una incluso.
Además de la rareza con la que esta aparecía, este monstruo rara vez era asesinado por los Aventureros ya que la Jack Bird no poseía habilidades de combate… pero si la habilidad de sobrevivir al combate.
El gran poder que este monstruo de gran rareza poseía era: Su velocidad.
Si esa criatura sentía peligro alguno inmediatamente se escapaba corriendo a tal velocidad que muy pocos serian capaz de mantener, ciertamente no Aventureros que estuviesen con frecuencia en el Piso 1 de la Mazmorra. Incluso los experimentados tenían problemas en atrapar a ese monstruo cuando se trataba de velocidad pura salvo por los Aventureros más rápidos… quienes para ese punto tendrán mejores cosas que hacer que estar en el Piso 1.
"B-bell, ¿Vamos hacia el monstruo?" Pregunto Leina. Con las historias de su madre, ella sabía que oportunidades tan raras como estas deben ser aprovechadas si o si ya que la Mazmorra era un lugar despiadado donde oportunidades como esta seguramente nunca volverían a ocurrir.
"Escuche que es muy rápido…" Dijo Bell lo más suavemente posible para no alertar al Jack Bird que solo los miraba con precaución, "Pero si no nos movemos se ira… nuestra única opción es ir hacia él," Bell en este momento se arrepentía de no haber entrenado con un arma de larga distancia como una ballesta o un arco. La única otra opción para Bell era lanzar su cuchillo y de milagro esperar a acertar… y Bell no se veía logrando algo como eso.
"Si ese es su plan Capitán, hare lo mejor que pueda," Asintió Nowa, ella no sabía que tan realmente rara e importante era una Jack Bird, pero si Bell decía que lo era, entonces lo era, "Solo de su orden y correré,".
Lamentablemente todos los miembros de la Familia Hestia eran peleadores de corto alcance, quizás en un futuro alguien que pueda compensar esa falencia se unirá o alguno de los presentes intentaría expandir su arsenal.
"Si tan solo tuviese puntería para tirar mi arma…" Bell se sentía frustrado de que la mejor alternativa no estaba disponible para sus habilidades.
Al escuchar esas palabras de parte de Bell… la Mitad Elfo recordó una parte de su entrenamiento que de hecho sería muy útil en esta situación.
"En ese caso, si lanzar un arma es necesario… yo puedo," Dijo tímidamente Nowa esperando no parecer muy impertinente con Bell y Leina.
Ambos centraron la atención en Nowa.
"Nowa, ¿Hablas en serio?" Pregunto Bell quien inmediatamente le creyó.
"B-bueno… mi maestra me entreno para lanzar mi arma como un proyectil en caso de que tuviese que lanzar mi arma contra un oponente en movimiento," Ofreció Nowa, "Si me dejan prepararme puedo intentarlo," Nowa no quería molestarlos pidiéndoles esperar, pero ella necesitaba un poco de tiempo para concentrarse.
'Por favor que no piensen en mi como una inútil,' Rogo mentalmente una preocupada Nowa.
"Nowa si en serio puedes, creo en ti," Leina no dudo ni un momento en esas palabras, ella había visto de primera mano lo habilidosa que era la Mitad Elfo,
"Si necesitas tiempo entonces nosotros lo distraeremos," Dijo Bell pensando en un plan rápido, "Leina tu acércate desde la derecha y yo lo hare desde la izquierda, eso podría distraer a la Jack Bird mientras Nowa se prepara,".
"Entendido Bell," Asintió rápidamente Leina, "Seguiré tus ordenes,".
"Entonces… voy a prepararme," Y con esas palabras Nowa tomo su arma desde la mitad, el brazo que ella uso para esa arma se alzó por sobre la cabeza de la Mitad Elfo quien se concentró en su objetivo.
'Recuerda las lecciones de tu maestra… no apunte hacia donde esta una presa que se mueve rápido, sino hacia donde estará,' Pensó fríamente una concentrada Nowa, 'Tu arma solo sirve como proyectil una sola vez, si la usas como tal asegúrate de hace que cuente,' Como el arma de Nowa solo puede ser lanzada una vez, su maestra se aseguró de entrenarla para tal situación… y dicho entrenamiento consistió Nowa lanzando su arma una y otra vez hacia un objetivo fijo y luego uno en movimiento hasta acertar.
Nowa vio lo rápido que se movía la presa y cuanto tardaría su arma en alcanzar cuando esta fuese lanzada a toda velocidad, ella también calculo mentalmente cuando la Jack Bird se encontraría en el rango de su próximo movimiento. Nowa solo tenía el lapso de un segundo para lanzar su arma, si esta lanzaba un segundo más temprano o tarde su presa escaparía.
El estado de concentración de Nowa era uno perfecto… ella gracias a su entrenamiento había logrado entrar en ese estado mental que solo pocos lograban en donde solo existía ella y su objetivo.
Sus alrededores, su respiración, las vibraciones en el aire, Nowa podía sentirlo todo.
'Bien, uno…dos… ¡TRES!' Y ahí sintiendo su momento indicado Nowa lanzo su arma a toda velocidad.
El sonido del aire siendo cortado resonó, un arma siendo lanzada a toda velocidad y con toda la fuerza de Nowa fue el causante de ese sonido.
La Jack Bird que con facilidad escapo de Bell y Leina gracias a su gran velocidad estaba a punto de perderse en la entrada al segundo piso donde luego se perdería definitivamente para la Familia Hestia.
Pero entonces cuando el monstruo escucho el sonido de algo acercándose… ya era demasiado tarde.
"Piiiii!" Grito de dolor la Jack Bird al sentir su frágil cuerpo siendo golpeado y luego atravesado por el arma.
Lamentablemente el ataque de Nowa fue tan certero que incluso la Piedra Mágica de la Jack Bird fue destruida.
Las piedras mágicas al ser estas los núcleos de los monstruos eran también el punto débil en común de todos ellos. Si estas eran destruidas entonces no importaba lo duro del monstruo, este moría.
Aun así, eso era un último recurso ya que con eso se perdía la Piedra Mágica y por lo tanto las ganancias.
Pero francamente eso era un factor menor. Insignificante realmente cuando se compara con el Item que siempre aparece cuando la Jack Bird moria.
"…lo logre," Sonrió la Mitad Elfo quien dio un gran respiro de alivio al haber logrado, "No les falle…".
Inmediatamente entonces… Nowa sintió su cuerpo siendo envuelto en un cálido abrazo.
"Nowa, ¡Eso fue increíble!" La Mitad-Elfo escucho esas palabras de parte de una emocionada Leina, "¡Muchas gracias!"
Bell por supuesto también llego para felicitar a Nowa pero primero este fue a recoger el Huevo Dorado.
"¡Eso fue fantástico Nowa!" Fue el cumplido de Bell mientras le acariciaba la cabeza a la Mitad Elfo.
"Nunca vi un movimiento tan certero!" Igualmente, Leina fue a felicitarla por un trabajo muy bien hecho, ella siguió con su abrazo.
Luego de escuchar las palabras de Bell y Leina, la cantidad de emociones amenazaba con superar a esta chica que solo había recibido tal calidez de parte de su madre que ella apenas podía recordar.
"Se siente genial poder ser tan útil…" Dijo Nowa con ligeras lagrimas saliendo de sus ojos, "Por suerte no falle… no los decepcione,".
Nowa había recibido felicitaciones parte de su maestra, felicitaciones cuando ella completaba sus lecciones y tenía una buena performance cuando ambas hacían combates de práctica.
Pero esto… era distinto.
Ellos no eran maestros felicitando a estudiantes, sino personas que ella a penas conocía por menos de un día realmente la hacían sentirse bienvenida.
"Aun si hubieses fallado no hubiésemos pensado mal de ti," Dijo Bell como si fuese la cosa más clara del mundo, "Ese era un movimiento demasiado difícil de logar," De hecho Bell todavía no podía creer que Nowa hubiese logrado algo tan difícil.
"Bell tiene razón," Dijo Leina para quitarle a Nowa sus miedos, "Si hubieses fallado no te culparíamos, solo quedaría esperar a que se nos muestre otro de esos,".
Ellos… no la rechazarían por fallar. Todos los miedos que Nowa tenía de que esta seria expulsada si era una carga… se esfumaron finalmente.
Esta era gente que aceptaba su existencia, gente que no negaba su existencia por factores que ella no podía controlar, gente que… daba la bienvenida con los brazos abiertos a su existencia.
En ese caso Nowa se dio cuenta: Ella realmente había encontrado a donde pertenecer.
"… B-bhuuaah…" Comenzó a llorar Nowa quien abrazaba con fuerza a Leina. Tantas emociones terminaron por superar a la pobre.
"Nowa, ¿Estas bien?" Pregunto una preocupada Leina al ver el cambio en Nowa.
"P-pero… s-soy tan feliz…" Dijo la chica de cabello castaño.
Nowa se sentía bienvenida por varias personas quienes genuinamente querían que ella estuviese con ellos y reconocían su existencia. Gente que se acercó a ella en primer lugar.
Nowa no sabía cómo describir esa sensación… pero definitivamente era algo agradable y cálido.
"Nowa… continúa llorando, yo me encargare si viene algún monstruo," Dijo suavemente Bell.
Bell Cranel aún era el tipo de Capitán que le daba prioridad a los sentimientos de sus camaradas por sobre como seguía el campo de combate, el cómo Capitán todavía estaba muy verde.
Sin embargo, a sus ojos era más importante que Nowa llorase y dejase salir todo.
'Después de todo cuando mi abuelo murió… yo también llore mucho,' Las manos de Bell se tensaron al recordar aquel momento.
Por eso mismo Bell solo dejo que Nowa se desahogase desde el fondo de su corazón.
Una cantidad impresionante de Valis ahora estaba con ellos. Mas de lo que ellos hubiesen podido conseguir juntos en meses en los pisos superiores de la Mazmorra aun yendo todos los días durante meses.
Gracias a Nowa la Familia Hestia había ganado una cantidad considerable de dinero.
Si bien el millón de valis no era mucho en comparación con cuánto dinero tenían las Familias más grandes o incluso medianas, para una Familia pequeña de bajo rango esa cantidad sin duda era una ayuda muy grande.
"Todo gracias a este Item," Sonrió Bell mirando al Huevo Dorado de la Jack Bird.
El peliblanco entonces guardo ese invaluable Item, como capitán, Bell se encargaría de resguardar con su vida el Item.
Eventualmente el sonido del llanto se terminó, Nowa había dejado de llorar mientras que Leina en ningún momento soltó su abrazo reconfortante.
"Ya te sientes mejor?" Pregunto suavemente Bell cuya mirada suave se encontró con la mirada vidriosa de los ojos de Nowa.
La Mitad Elfo asintió silenciosamente. Ella uso su manga para limpiarse las lágrimas y luego de un respiro profundo para agarrar determinación, esta miro a los ojos de su Capitán.
"¡Nowa será todavía más útil para esta Familia!" Declaro muy animada la Mitad Elfo quien caminaba al lado de los dos humanos.
El corazón de Nowa ya lo había decidido: ¡Con ellos está mi hogar y daré todo de mi por mi Familia!
A partir de ahora Nowa vivirá bajo el mismo techo que estas personas y su Diosa, irían juntos a la Mazmorra, pelearían juntos y celebraran juntos los buenos momentos y juntos superarían los malos.
Si ese era el caso, entonces Nowa estaba feliz de haber llegado a Orario y de tener su futuro junto a la Familia Hestia.
'Maestra… yo estaré bien, sus lecciones han sido muy útiles,' Pensó para sí misma Nowa, "Con esto puedo ayudar a mi Familia," Para Nowa se sintió bien poder decir 'Mi Familia'.
Un lugar al que pertenecer… un lugar que reconocia su existencia y no la juzgaba por haber nacido de la unión entre dos especies, un lugar con gente que la aceptaba con brazos abiertos.
La única forma con la que su vida en Orario podría ser mejor es si su maestra de alguna forma estuviese aquí también y se uniese a la Familia Hestia, así Nowa tendría tanto a la persona más importante en su vida como a aquellos que la aceptaron sin problemas.
Pero… tal escenario era solo una fantasía, ¿Verdad?
Un gruñido sin embargo saco a la Familia Hestia de este dulce momento.
Viendo a su alrededor Bell pudo ver que había unos cuantos monstruos que quedaban.
El peliblanco había olvidado la regla número uno para quienes exploraban la Mazmorra: Distraerse mientras se estaba seguro de que todos los monstruos habían muerto.
"Todavía quedan unos monstruos, Nowa ya hiciste suficiente, pero si te sientes lista para más acción, no hay problema," Dijo Bell mirando con una sonrisa a los monstruos que quedaban.
Leina gentilmente soltó a Nowa para ponerse delante de esta en forma protectora em caso de que algún monstruo apareciese de la nada y decidiese atacar.
"Nowa puedes descansar, pero si quieres seguir eres libre de hacerlo," Leina también estaba con un muy buen ánimo y lista para acabar con más monstruos.
"…No, yo voy a continuar," Dijo Nowa luego de recuperarse, "¡Todavía puedo pelear!" Declaro con mucha emoción la Mitad-Elfo.
Y así esos tres se encargaron de los monstruos restantes de este piso, con todos derrotados Bell y Leina sacaron las Piedras Mágicas, si bien había dinero, Bell vio ese momento como el indicado para enseñarle a Nowa sobre la parte de sacar las Piedras Mágicas desde dentro de los monstruos que habían sido derrotados.
Esta vez la Familia Hestia termino el día con un nuevo miembro… y los bolsillos llenos y muchas expectativas para un futuro que parecía ponerse cada vez mejor.
Quizás incluso… ¿Un nuevo hogar no estaría muy fuera de las expectativas ahora que la Familia Hestia tenía una suma considerable de dinero?
"Vamos a decirle a Kami-sama, estoy seguro de que ella se pondrá muy feliz," Dijo Bell quien conociendo a su diosa se imaginaria lo feliz que esta se pondría luego de aprender cuánto dinero habían ganado.
"De seguro ella bendecirá el haber recibido a Nowa entonces," Dijo Leina quien acaricio la cabeza de la Mitad Elfo quien dio una risita en respuesta, "Sin ella esto no hubiese sido posible,".
"Hehehe, muchas gracias," Dijo una feliz y avergonzada Nowa, "Estoy feliz de poder ayudar,".
Por ahora para esta Familia todo andaba bastante bien, era como si los buenos momentos simplemente no paraban de llegar.
Sin embargo… para esta joven Familia esto era solo la calma antes de la tormenta, después de todo para ellos quienes estaban destinados a la grandeza, para llegar a lo más alto muchas duras pruebas estarían en el camino.
La próxima vez que esta Familia a la que todo le ha estado yendo bastante bien vuelva a la Mazmorra… estos serían recordados en carne propia que la vida de Aventurero y la Mazmorra no era algo fácil y que una situación inesperada podría terminarlo todo.
Pero que, a pesar de todo, también situaciones críticas podían dar a luz a algo muy especial y aun encuentro inesperado que marcaría de forma muy importante el futuro de esta Familia ya que ese evento finalmente transformara mucho las cosas.
NOTAS DEL AUTOR:
¡Muchas gracias y otro capítulo listo!
Espero que les haya gustado, si bien el inicio fue simple con los miembros de la Familia creando un lazo gracias a los dulces, espero que este resultado final haya quedado bien y creíble.
Saben, una cosa que me doy cuenta de que es muy poco utilizada es el hecho de que Bell Cranel tuvo una vida antes de Orario. Si bien era la vida de un aldeano, creo que a esa vida no se le da suficiente importancia ya que cuando este llega a Orario es como si su pasado no importase.
Viendo eso decidí darle un poco más de énfasis al pasado de Bell, considerando como el atraer chicas es para Bell una segunda naturaleza la cual este ni siquiera hace intencionalmente, este ahora tiene una amiga de la infancia que se había enamorado de el… quien como todo chico denso que es nunca se dio cuenta.
Esa chica es un personaje de Queen's Blade, me pregunto si alguien se dará cuenta de quien es… porque con las pistas que deje debería ser claro.
Como sea otro detalle importante es que la Jack Bird apareció y la Familia Hestia logro una cantidad notable de dinero, todo con poco tiempo de haberse formado.
Sentí que para demostrar que esta historia definitivamente haría las cosas de forma diferente, este tipo de cambio era necesario, después de todo la Familia Hestia ahora está en posesión de una gran cantidad de dinero.
Quiero decir, no creo que alguien haya escrito algo como eso, pero eso es hasta donde se yo.
Sobra decir que tengo planes para ese dinero… esta historia si bien es una de Danmachi tiene sus diferencias.
Sin embargo, sigue siendo Danmachi y por ende hay ciertos eventos que deben ocurrir.
Pero como ya es momento de seguir con el canon… solo les digo que un próximo encuentro con cierta espadachina estoica ocurrirá mas pronto de lo que pensamos, pero aquí la presencia de miembros extra en la Familia Hestia afectará las cosas. Llegara el punto donde esta historia se divida por completo del canon de Danmachi, pero falta todavía.
Siento que el cap se me alargo un poco, pero… bueno a veces pasa XD
En fin agradezco mucho a todos los que se toman la molestia de leer esta historia, aprecio mucho el apoyo y me inspira a continuar y mejorar.
Como siempre apoyen esta y mis otras historias, nos vemos en el próximo cap.
PD: Siento mucho la pelea de la Familia Hestia no fue muy buena, pero… como he dicho antes las escenas de pelea no son lo mío.
