La Leyenda de la Familia Hestia

by Providence G

Familia Hestia... una vez vista como la mas débil de Orario, sin embargo un encuentro especial de su único miembro Bell Cranel con una chica que recién había comenzado su propio camino... llevara a varios encuentros que llevaran a la Familia Hestia al camino de ser los mas fuertes mientras que Bell disfrutara de la compañía de varias bellezas. Bell x Harem.

8. Princesa De la Espada y La Ángel Nanael

Aventura 07: Princesa De la Espada y La Ángel Nanael.

-Cuarto Piso-

Dos humanos y una Mitad-Elfo habían logrado escapar de una muerte segura en el quinto piso.

La Familia Hestia había con un movimiento desesperado pero efectivo cegar al Minotauro y hacer un escape milagroso. De haber fallado en este punto habría tres cadáveres y una Diosa devastada.

Estos siguieron corriendo hasta llegar hacia la mitad del Cuarto Piso, justo en donde hay varios cadáveres de monstruos esparcidos siendo esos monstruos con los que la Familia Hestia había estado peleando antes.

Las Piedras Mágicas eran innecesarias ahora mismo para esta Familia debido a la pequeña fortuna que consiguieron, al menos las que les podía ofrecer estos pisos superiores. Por eso mismo esos cadáveres conservaban las piedras y no habían desaparecido en la Mazmorra.

Al ver esos cadáveres y reconocer este mundo donde estaban… Bell supo que estaban como por la mitad del Cuarto Piso, un buen punto para descansar.

"Leina, Nowa detengámonos por un momento," Dijo Bell, "Aprovechemos este momento para descansar un poco y reponernos,"

La humana y la Mitad-Elfo hicieron lo que Bell les dijo, si bien ellas quieren seguir corriendo era verdad que también estaban cansadas… más Leina al tener su cuerpo adolorido de aguantar tantos ataques del Minotauro.

"Correr con el cuerpo en no muy buen estado es algo muy peligroso," Dijo Bell quien saco unos frascos con el mismo tipo de pócima adentro, "Tomemos esto mientras podamos," Y así el Capitán le entrego a las dos chicas dos frascos con un líquido azul dentro mientras él se quedó con el otro.

Siempre había que llevar algún tipo de poción en este lugar. Eso Leina se lo inculco claramente a Bell en su primera lección asique este le había comprado a la Familia Miach en el camino.

"Me siento mejor," Dijo Leina sintiendo como el dolor en su cuerpo se desvanece.

"Si, mi cabeza ya no duele," Dijo Bell. Ese golpe que el Minotauro logro conectar a medias sique fue doloroso para este chico.

Este leve momento de calma era una verdadera bendición para esta emocionalmente cansada Familia.

"Muy bien, tan pronto como podamos correremos hacia la salida," Dijo Bell, "Si nos atacan los monstruos intentemos escapar en lugar de pelear… con el arma de Leina y la mía rota no creo que podamos hacer mucho," Y si bien Nowa todavía tiene su arma, Bell no quería darle toda la carga de pelear mientras Leina y el escapaban.

Sin embargo, aquel leve momento de paz fue… interrumpido por aquello de lo estos están escapando.

"¡GRAAAAAAAH!" Un rugido que lamentablemente era conocido para esta Familia se escuchó.

Como si los tres hubiesen sido solo uno, la Familia Hestia centro su atención en el origen del rugido… todos ellos están pálidos al reconocer lo que se está acercando.

El Minotauro los había perseguido… ¡Y se encuentra furioso por lo que habían hecho!

"¿¡C-como nos encontró!?" Se escucho de un horrorizado Bell al ver como la muerte simplemente les estaba persiguiendo.

"E-esta ciego, ¿Verdad?" Leina tampoco lo podía creer.

¿Cómo pudo ese monstruo llegar hacia ellos cuando sus ojos habían sido eliminados?

La respuesta le vino a la chica con más experiencia en cosas de la naturaleza y una maestra que le enseño varios aspectos del combate.

"¡…El olfato y el oído!" Se dio cuenta la Mitad-Elfo.

Su Maestra una vez le hizo un entrenamiento donde Nowa tuvo que pelear con sus ojos vendados, verdaderamente fue complicado el acostumbrarse a perder uno de sus sentidos. Pero luego se hizo más fácil, ahí su maestra le explico que cuando se perdía un sentido los otros se intensifican para compensar.

Entonces… seguramente lo mismo se aplicaba a los Monstruos, quizás para ellos era incluso más potente el efecto al ser seres de instinto puro.

"¡No puede ser!" Leina no pudo evitar alzar la voz en clara frustración.

Su Familia había logrado aparentemente darle la vuelta a una verdaderamente desastrosa situación y lograron huir justo cuando la muerte los veía a la cara… pero dicha muerte se negaba a simplemente dejarlos escapar.

¿Acaso esto era el mundo balanceando todas las cosas buenas que le había pasado a la Familia Hestia en una rápida sucesión de eventos?

Por suerte en esta Familia había alguien que hay pasado su infancia en un bosque y se conocía uno que otro truco practico que gente que había vivido en lugares más normales no podría pensar tan rápidamente.

"¡Los cadáveres!" Exclamo Nowa, "Usémoslos para ocultarnos," El enemigo podía tener mejor olfato y oído ahora, pero… el olor de la sangre en esos cadáveres debería poder ocultarlos perfectamente, Nowa lo sabía a la perfección siendo una chica que tuvo que cazar su comida en el bosque ella sola para sobrevivir… y quizás ella uso la táctica de cubrirse con sangre para cazar a un ser carnívoro.

Confiando totalmente en las palabras de la Mitad-Elfo, Bell y Leina asintieron y así toda la Familia se puso en medio de los cadáveres de Monstruos que ellos habían matado hace poco.

Entonces Nowa tomo una piedra del suelo y rápidamente esta la lanzo cerca de donde estaba el Minotauro.

¡CLANG!

Esa piedra logro distraer momentáneamente al Minotauro quien torno su atención hacia donde esta había caído…. Momentáneamente.

El monstruo ahora estaba simplemente enfocándose en todo alrededor suyo… esperando que hubiese algún movimiento que delatase la ubicación de sus enemigos.

"Uugghh el olor de la sangre es tan desagradable…" Susurro una claramente disgustada Leina. Considerando su estilo de vida anterior ella nunca tuvo que oler la sangre de esta forma tan cercana.

"Lo sé, pero debemos aguantarlo o sino estaremos en problemas, Leina-san," Dijo Nowa que también estaba disgustada con el olor a sangre… ella esta acostumbrada al olor, pero mas no resistente a este.

"No podemos quedarnos aquí para siempre… eventualmente tendremos que movernos," Susurro un preocupado Bell. Ellos no podían ocultarse para siempre ya que una vez que el hambre y el cansancio llegase, ellos no podían ni moverse para escapar.

Si bien el monstruo estaba ciego en este punto y los cadáveres que la Familia Hestia había dejado lograban ocultarlos de la nariz del Minotauro… una vez estos comenzasen a correr hacia la salida que llevaba al tercer piso, este los podría escuchar.

Ellos DEBEN que moverse si o si, sino eventualmente más monstruos vendrían a atacar lo que revelaría al Minotauro donde estaban ellos, ahí se terminaría todo para la Familia Hestia.

Bell lo sabía, esta situación era una que no se puede esperar salir con vida… sin un coste.

Asique para que ellas pudiesen escapar, Bell tomo su decisión.

"Díganle a Kami-sama… que lo siento mucho," Dijo Bell.

Ni Leina ni Nowa respondieron ante esas palabras, pero el ambiente se puso muy pesado de un momento para otro.

"¿C-capitán?" Pregunto una nerviosa Nowa a la que definitivamente NO le agradaba ese tono de voz que estaba usando Bell.

"Bell… no estarás diciendo que planeas…?" Leina tiene una idea de lo que Bell estaba por decir… y realmente sería algo horrible si ese era el caso.

"Si hay una posibilidad de salir de esta y volver hacia Kami-sama, esa es que uno de nosotros se quede para pelear contra el Minotauro y le dé a los demás todo el tiempo posible para escapar," Dijo Bell... y antes de que Leina y Nowa se ofreciesen, "…Yo seré el sacrificio, eso no se va a discutir," La voz de Bell… llevaba tal acero y determinación que era claro que esta decisión estaba tomada y que ellas no cambiarían su opinión.

Su rostro era de piedra… al punto que tanto Leina como Nowa se cuestionaron si ese chico era el mismo Bell que de sonrisa amable que ambas conocían.

En un momento serio como este, Bell Cranel demuestra que debajo de su inexperiencia y buen corazón existía alguien con el potencial de tomar decisiones duras… sin duda un buen Capitán si este tuviese la oportunidad de experimentar más cosas y crecer como persona.

"C-capitán yo… soy la más nueva y no tengo familia biológica…" Intento nuevamente Nowa, "Asique… nadie me extrañara si muero aquí," Nowa estaba segura de que si se llegase a saber que ella murió en la Mazmorra… los Elfos de su bosque estarían más que contestos al punto de celebrar.

A sus ojos si alguien era la persona ideal para servir de sacrificio… era ella.

Nowa solo esperaba que su maestra sintiese algo si esta llegase a enterarse de la muerte de su alumna… si bien su maestra es alguien estoica, Nowa también sabe que ella es una persona con un corazón cálido que se preocupa por los demás.

Y quién sabe si ella aprende que su estudiante murió protegiendo valientemente a su Familia entonces su maestra estaría quizá muy orgullosa.

"Nowa yo tampoco tengo familia biológica a la que volver asique estamos en el mismo bote," Sonrió tristemente Bell al revelar eso.

Un silencio incomodo se formó y Nowa se vio bastante apenada por lo que ella había dicho. Sin embargo, antes de poder disculparse…

"Y estas equivocada, si murieses tanto Kami-sama, Leina y yo estaríamos devastados y te extrañaríamos mucho," Dijo Bell mirando con severidad a los ojos, "No me lo podría perdonar que murieses luego de encontrar un hogar,"

Leina si bien no dijo nada ella asintió mostrando que se siente igual que Bell.

"Siempre le dije que cumpliría mi sueño y algún día yo me volvería un Aventurero legendario que podría salvar a una doncella que realmente necesita a alguien que la salve, un héroe incluso podría convertirme yo," Sonrió el peliblanco recordando esos momentos, "Incluse siempre le conté a mi amiga sobre todo lo que haría una vez fuese un Aventurero," Y su querida amiga Mirim siempre le escucho en esos momentos.

Asique...

"Pero si sacrificase a una de ustedes para seguir cumpliendo mi sueño… ¿Qué tan bueno sería ese sueño?" Pregunto Bell.

Si el continuase como Aventurero luego de elegir sacrificar o a Leina o a Nowa…Bell sabía que esa decisión lo atormentaría por el resto de sus días como Aventurero, siempre recordando que si el algún día lograse llegar alto seria únicamente luego de haber elegido la muerte de alguien más.

O incluso llegaría a cuestionarse si el merecía en primer lugar ser un Aventurero luego de haber dejado que alguien más pereciese para poder vivir… tal cosa terminaría por limitar las posibilidades de crecimiento de Bell Cranel.

Eso solo demostraba que si Bell tomaba esa decisión entonces todo se sentiría miserable y quizás el futuro no solo de el sino de muchos otros se vería afectado… como por ejemplo que tal decisión mancharía su alma pura y por ende… digamos que cierta Diosa ni se interesaría en el.

"En ese caso… si tú te mueres… entonces mi propio sueño…" Leina estaba por intentar contrarrestar el argumento de Bell… intentar siendo la palabra clave.

"Yo fue quien tuvo la idea," Dijo Bell con un tono de voz bastante severo y con una voz un poco más alta.

En esta situación sin duda eso era una mala idea el siquiera alzar un poco más la voz, pero para Bell eso no importo, lo único importante para este era que tanto Leina como Nowa entendiesen que para vivir ellas deberían dejarlo atrás.

"Sin mí no estaríamos aquí sino disfrutando allá arriba… asiqué ustedes no tienen que sentirse culpables de nada," Les dijo Bell, "Yo vine creyendo que si bien algo más difícil de lo normal, podríamos superarlo y volver a la superficie,".

"Pero Bell… nosotras aceptamos bajar también," Leina trato de dejar en claro que el no tenia toda la culpa, si bien el peliblanco había tomado la decisión de bajar como ni ella ni Nowa objetaron realmente a su propuesta, ambas también tenían responsabilidad en esto.

"Así es Capitán, por favor no se heche la culpa de todo," Dijo Nowa.

"Aun así es mi responsabilidad…" Contesto Bell con una débil sonrisa, "Kami-sama confió en mi como el Capitán de esta Familia al darme esa responsabilidad… asique voy a ir con todo para que ustedes puedan volver con ella,".

"Bell… p-por favor no…" Leina supo que ya no podía hacerse nada para convérselo de abandonar ese plan… ¡Pero ella al menos tenía que intentarlo!

"Recuerden esto bien claro: Ustedes no hicieron nada malo, yo elegí este sacrificio por mi propia voluntad, la decisión de venir aquí abajo fue mía y por eso mismo es mi responsabilidad lidiar con esto," Dijo con más suavidad Bell Cranel, "Asique… ustedes no deberían pagar por mi error," Dijo un determinado peliblanco, "Fue mi decisión el bajar a este piso… pensé que si éramos los tres juntos estaría todo bien,".

Y para ser justos con Bell esa suposición de poder manejar juntos el Quinto Piso fue… correcta.

Si bien había sido un poco más difícil porque claramente un Monstruo del Quinto Piso siempre será superior a uno de los pisos de más arriba, la Familia Hestia manejo el Quinto piso de forma bastante buena y cumplieron el objetivo de entender más como pelea esta Familia con la adición de Nowa.

De no ser por la gran diferencia que era un monstruo de la talla de un Minotauro entonces esta Familia seguramente hubiese logrado el explorar un poco este piso, batallado juntos para acostumbrarse a como se pelea… y luego volver a la superficie para disfrutar con el dinero que les sobraba ahora.

Pero al parecer las buenas rachas se podían acabar en el momento menos esperados… Bell se dio cuenta de que para los Aventureros en un lugar como este eso era especialmente verdad.

"Si… en el futuro más gente se une y ustedes terminan siendo una gran Familia… y sé que la serán," Sonrió tristemente Bell Cranel ante la humana y la mitad-elfo, "Por favor si tienen tiempo hablen del Capitán que solo duro dos semanas,".

En el futuro de la Familia Hestia después de que el muriese aquí… probablemente el ni sea recordado como alguien importante. Tan solo como una anécdota para los que se unan después y que probablemente pensarían en el cómo un debilucho o una persona desafortunada pero que con su última acción pudo asegurar el futuro de esta Familia…. Solo eso y nada más.

Sin embargo, si este era el fin de su historia a tan solo dos semanas… entonces como estaban las cosas ahora Bell podía irse de este mundo con una sonrisa, Leina es una chica fuerte con una gran voluntad de ser Aventurera.

Bell no era experto, pero este podía decir con toda seguridad que Leina en un futuro se convertiría en una increíble Aventurera y una Capitana muy capaz que llevaría a la Familia Hestia muy lejos una vez el muriese aquí.

Nowa también es simplemente increíble, ella siendo la más joven de los presentes era la mejor peleadora, si ella seguía adentrándose en la Mazmorra y desafiando una y otra vez todos los peligros… entonces Bell estaba seguro de que esta se convertirá en una Aventurera legendaria.

En cambio, el… no era la gran cosa en comparación con estas.

Él era solo un chico que nunca conoció a sus padres y fue criado por su abuelo en una aldea rural, su sueño era el de convertirse en un héroe que pudiese rescatar a una chica que realmente lo necesitase. Bell no se veía realmente a si mismo como alguien con mucho potencial… eso sin saber que realmente el es la piedra angular de esta Familia.

'…Correcto, si son ustedes entonces no tengo nada de qué preocuparme,' Pensó Bell.

Comparado a él, esas dos tienen un futuro más brillante por delante.

"Kami-sama y la Familia quedaran en buenas manos," Dijo Bell.

Asique como ellas eran el futuro de la Familia Hestia… Bell Cranel sin duda les daría la oportunidad para escapar aun si cuerpo quedase irreconocible.

"Bell… n-no podemos," Leina intento hacerle cambiar de opinión… que Bell entendiese que su idea era algo que ellas no podían simplemente aceptar.

Pero…

"Órdenes del Capitán," Contesto Bell con aquel tono de voz totalmente serio, "Yo hare esto y es final,".

Ni Nowa ni Leina pudieron encontrar la fuerza para protestar a esa decisión… no luego de escuchar tales palabras.

En un mundo donde Bell Cranel no las hubiese conocido, entonces este chico hubiese escapado del Minotauro dando todo de sí mismo para seguir viviendo otro día ganando así tiempo precioso… lo que muy posiblemente le hubiese llevado a ser rescatado por una chica poderosa, estoica y sobre todo hermosa.

Pero en este mundo donde él tiene la responsabilidad de un Capitán… y gente a la que este desea proteger.

En este mundo Bell decidió luchar en lugar de huir. Este ganaría cada segundo posible para ellas.

"B-bell… ¡Asegúrate de volver con nosotros!" Dijo Leina quien lloraba mientras corría hacia la salida.

"¡P-por favor no muera capitán!" Y con lágrimas en sus ojos Nowa corrió detrás de Leina.

Si bien ella ya no podía hacer nada porque la decisión fue tomada… al menos Nowa le deseo toda la suerte a su Capitán.

Bell había sido una de las personas más increíbles que ella hubiese conocido, el poco tiempo que estos se conocían no importaba, el chico se había ganado un lugar especial en su corazón, si bien nunca al nivel de su maestra, Bell esta igualmente en un lugar alto en el corazón de Nowa.

"Por favor escapen…" Fueron las palabras suaves de un Bell Cranel que procedió a… ¡Saltar directamente hacia el Minotauro desde el punto de escondite!

Con esa acción estaba todo sellado y sería el quien se enfrentaría a la amenaza.

"¡Tu pelea es conmigo maldita vaca!" Grito Bell quien directamente insulto al Minotauro para ganar su atención y que ese ignorase a las dos chicas escapando.

El efecto fue inmediato ya que aquel Monstruo centro su atención en Bell y visiblemente se puso furioso al apretar los dientes y estar conteniendo un rugido.

¿Acaso el Minotauro podía entender lo que Bell está diciendo?

Probablemente… no, aquel Monstruo no entendía el lenguaje humano.

Lo más probable es que quizás de forma instintiva el monstruo entendió que ese chico estaba burlándose de el… y bueno para una criatura de instinto solo hay una respuesta apropiada ante algo como eso: Matar.

"¡GAAAAAAOOOOH!" Con un rugido el Minotauro fue hacia Bell con los cuernos listos para una que ese chico terminase empalado en estos.

Bell reacciono al instante eso sí, si bien él no era fuerte por lo menos en velocidad y agilidad algo podía mostrar.

Por poco en evito esa envestida a la cual el Minotauro se detuvo al no sentir nada impactando su cuerpo… hasta que este sintió un pequeño piquete en su estómago cortesía de aquel humano que aprovecho para atacar.

Sin embargo, era inútil, su daga rota no podía penetrar la dura piel del Minotauro. Lo único que consiguió Bell de ese ataque fue un arma en aun peor estado.

Pero aun sabiendo que a esto se reduciría el combate…

"¡Aquí estoy! ¡Estúpida vaca yo soy tu oponente!" Grito Bell para que el Minotauro definitivamente se concentrase solo en él.

El peliblanco simplemente ganaría tanto tiempo como fuese posible. Los pasos de sus dos compañeras de Familia se hacían cada vez más distantes.

Y así al final Humana y Mitad-Elfo de desvanecieron en el horizonte, corriendo hacia la salida mientras lagrimas se derraman de los ojos de ambas.

"Muy bien ahora solo debo ganar todo el tiempo posible para ellas," Se dijo a si mismo Bell quien acepto que su destino probablemente se terminaría aquí… entonces él podría simplemente correr por este piso para que el Minotauro perdiese su tiempo persiguiéndole.

O sino…

"¡Pero mi abuelo no crio a alguien que se resignaría a morir!" Grito un Bell que en lugar de dejarse morir simplemente decidió seguir batallando.

Él no podía ganar, pero… al final un héroe no se iría de este mundo resignado a morir… ¿No?

¡NOOO! ¡Los héroes se van de este mundo peleando con todo!

Bell Cranel se lanzó en contra de su poderoso oponente con la intención de usar su casi inútil arma para atacar… era mejor a sus ojos que solo ganar tiempo escapando.

Bell ganaría tiempo… peleando.

"¡Toma esto!" Bell se lanzó e intento dirigir su ataque al cuello del Minotauro.

Pero dando una reacción increíble para una criatura ciega el Minotauro dio un rugido y respondió mandando un puñetazo al área donde este sintió a Bell.

A duras penas Bell logro retroceder antes de que ese movimiento le hubiese tocado y probablemente acabado con él.

Con eso se formó una especie de secuencia en esta batalla donde Bell intentaba cerrar la distancia con el Minotauro ciego quien lo detecta nada mas este entraba a su rango de ataque… para lanzar un ataque con sus brazos que de conectar con Bell seguramente o lo hubiese matado o le hubiese dejado medio muerto.

"¡Raaaahhh!" Con un rugido esta vez el Minotauro intento usar sus puños en un martillo para dar un golpe devastador… que de conectar sin duda reduciría la cabeza de Bell a un montón de carne y huesos aplastados.

Instinto de supervivencia guiando su cuerpo y Bell se movió a un lado evitando por poco su muerte… ¡E inmediatamente aprovecho su posición para clavar su daga rota en el brazo derecho del Minotauro!

¡claaang!

Pero el ataque con su rota daga pareció simplemente rebotar ante la dura piel del Minotauro.

Además, que luego de conectar unos cuantos fragmentos se salieron de su arma que termino aún más pequeña.

Si Bell seguía atacando llegará el punto en donde su arma ya no existirá. Luego sus manos y piernas serian su única arma hasta que la energía se le terminase.

Y considerando la fuerza de su oponente aquí lo primero que ocurrirá será que dichas manos y piernas terminaran inútiles antes de que el Minotauro fuese dañado.

Aun así, no había más opción que seguir con este combate…

Si bien Bell Cranel estaba peleando, poniendo toda su vida en juego y sabiendo que cuando su oponente le golpease ese sería el fin de todo…

…pero precisamente porque él estaba peleando con su vida en juego, era que Bell Cranel seguía estando de pie y dando pelea.

Olvidándolo todo y solo enfocándose en la batalla… solo así uno podía durar más tiempo con vida ante un oponente que te superaba… pero era solo ganar tiempo.

Si no podías dar un golpe decisivo incluso estar peleando al límite de todo solo te llevaría un poco más lejos.

Bell lo sabía, instintivamente el joven se dio cuenta de que el seguir así solo podría llevarlo tan lejos y que dentro de poco su suerte se terminaría y el Minotauro ganaría.

Este… para dejar escapar a Leina y Nowa debía simplemente seguir esquivando como ahora hasta quedar exhausto.

Después de todo no había forma de ganar ni de escapar… ¿Verdad?

Bell quien pensó en eso recordó que él y Nowa atacaron el único punto que no estaba protegido por esa dura piel… y que ahora se veía como un buen lugar para atacar.

'Si sus ojos son su punto débil… ¿No son esos mi mejor oportunidad?' Pensó Bell.

Si… detrás de sus ojos debía haber un punto débil donde el usar su arma sería algo letal.

Su arma estaba en las últimas, lo poco que se mantenía estaba seguro a desmoronase de hacer contacto tan solo una vez más con el Minotauro.

Si Bell usaba lo que quedaba de su arma y lo enterraba con todas sus fuerzas en una de las cuencas de los ojos del Minotauro entonces… ¿Quizás ese sería un golpe letal?

"¡Podría funcionar!" Sonrió Bell.

Y así la esperanza de poder salir vivo de esta lleno el corazón de Bell Cranel.

"Tengo a una Diosa esperándome… y a mis dos compañeras que debo volver a ver," Dijo suavemente Bell mientras con sus dos manos agarro el mango de su cuchillo que ya tenía un objetivo: Una cuenca de algún ojo del Minotauro.

'Sus movimientos son fuertes, pero no puede verme,' Si bien su oponente podía oler y escuchar al final no era lo mismo que tener sus ojos funcionando.

No estaba en su mejor estado asique… Bell cree que con eso será posible tener una ventaja.

"Solo tengo que encontrar una apertura…" Y para tener una mejor imagen mental de su oponente, Bell siguió acercándose a la zona del alcance del Minotauro solo para alejarse cuando algún ataque estaba cerca de impactarle.

Sin embargo, Bell rápidamente dio un salto hacia atrás y evito ese zurdazo.

Aun con haberse alejado este sintió la leve ráfaga de aire creada por ese ataque.

A pesar de entrar en el rango de ataque de su oponente, Bell lograba evitar ser golpeado al esquivar a ultimo segundo… entonces si el solo atacaba un poco más rápido él podría conectar su ataque.

'Entonces… ¿Podría logarlo?' Pensó un emocionado Bell ante la posibilidad de sacar una victoria de las fauces de la derrota.

Su arma solo resistiría un ataque más entonces… Bell pondrá todo su ser en dicho ataque.

¡Una estocada letal en una cuenca de ojo vacía! ¡Eso incluso debería matar a su oponente!

Y dicho oponente seguía ciego…

'¡Genial!' Bell dio una gran sonrisa y sus ojos rojos se llenaron de una determinación renovada.

Entre toda la oscuridad una luz de victoria pudo verse.

'Todos estarán muy sorprendidos de verme vivo!' Pensó con alegría Bell, '¡Quizás me daré a conocer como un chico que desafía lo imposible y sobrevive!'

Además, como el Minotauro seguía siendo un monstruo poderoso…

'¿Subiré de nivel con esto? ¡Creo que si lo hago eso sería un récord!'

Bell estaba pensando en todo lo que hacer una vez el diese este golpe final. En su corazón inocente el creyó que este momento era el que antecede a su victoria.

'Comeremos hasta reventar! ¡Luego compraremos un nuevo hogar!'

'La Familia Hestia no podrá ser detenida porque vanos en una gran racha!' Considerando lo de dos miembros nuevos en poco tiempo, la Jack Bird y ahora el a punto de derrotar a un oponente que parecía ser demasiado para el… si la Familia Hestia seguía con una racha de cosas buenas ellos podrían llegar muy lejos y como el Capitán, Bell Cranel estaría muy orgulloso cuando tal momento llegue.

Pero…

Sin embargo, ahí fue que Bell Cranel se dio cuenta de que algo raro estaba ocurriendo.

Acaso… ¿No todo estaba fluyendo más lento?

Y… ¿Desde cuándo él pensaba tan rápido?

Ciertamente, él estaba pensando demasiado en lo que este usualmente lo hacía… en especial porque todo estaba transcurriendo de forma muy lenta.

Ahí fue cuando… Bell recordó cuando su abuelo le contaba de las historias de héroes que el tanto amaba, en una de esas se mencionaba que aquellos héroes que habían experimentado experiencias que los dejaban cerca de la muerte… veían el mundo mucho más lento.

'No es esto cuando' Ahí este trago saliva… '¿Todo pasa más rápido antes de morir?'

Al final de esos pensamientos para Bell Cranel todo volvió a la velocidad normal… incluido el Minotauro el cual lanzo una poderosa patada en lugar de un golpe.

¡CRACK!

El sonido de algo rompiéndose resonó en la Mazmorra… junto con el de un cuerpo volando por el cielo.

Aquel sonido era el de la armadura que protege el pecho de Bell rompiéndose en pedazos ante aquella patada.

Bell voló por unos segundos… antes de terminar cayendo en el suelo de la Mazmorra.

Su armadura estaba hecha pedazos, sus ojos estaban vacíos y sangre estaba saliendo de su boca,

Al final esa armadura barata solo pudo bloquear una pequeña porción del daño antes de ceder.

Aunque esa ligera reducción de daño pudo ser determinante para por lo menos mantener con vida a Bell por un poco más de tiempo… pero eventualmente la severidad de sus heridas lo mataría, aun vivo este solo podría tener esperanza de seguir viviendo por un poco más de tiempo a menos que un médico muy habilidoso pudiese ayudarle.

Pero nadie sabía más sobre su propio estado físico que el mismísimo Bell Cranel.

'Por lo menos… no… las mataste…' Demasiado aturdido como para hablar, lo mínimo que Bell pudo hacer fue simplemente dar una sonrisa muy tenue al Minotauro para echarle en cara que fallo en matarlos a todos.

Eso hubiese sido mejor si el oponente no estuviese ciego… pero quizás igualmente sintiendo esa sonrisa de triunfo de su oponente, el Minotauro apretó un puño y lo alzo por sobre su cabeza con la intención de terminar con la vida de la basura que intentaba desafiarlo.

'¿E-este es el final?' Se pregunto a sí mismo un Bell quien sin poder hacer nada veía al Minotauro preparando ese ataque.

Pues si esto era todo…

'Está bien… esto está muy bien, Leina y Nowa están yendo de regreso a mi Diosa quien no se quedará sola…' Sonrió suavemente un Bell que acepto su destino, 'Abuelo no pude cumplir mi promesa… espero que me perdones,'.

Ya todo estaba dado y solo un verdadero milagro en toda regla podría salvar a Bell Cranel.

Porque antes de que el Minotauro pudiese conectar el golpe final…

¡SLASH!

El sonido de la carne siendo cortada resonó en la Mazmorra.

La sangre comenzó a caer ya que desde atrás una espada había rebanado sin nada de dificultad al Minotauro… quien termino puerto por ser cortado desde su hombro derecho hacia debajo de forma cruzada.

Un solo ataque con una espada había cortado al Minotauro por la mitad como si fuese papel…. Realmente quien era el usuario de dicha espada era una persona bastante fuerte,

Bell por su parte quien había estado en el suelo mirando como el Minotauro preparaba el movimiento que sin duda terminaría con su vida… solo pudo ver como una silueta se asomaba por detrás del monstruo derrotado pero la sangre que salió a alta presión del cuerpo cortado le impidió ver con claridad a su salvador.

Claro, solo era cosa de seguir mirando y este podría ver a esa persona… pero el ya no daba más.

Pero sus ojos rojos solo pudieron distinguir la espalda de una cabellera rubia y nada más, el daño sufrido fue simplemente demasiado como para quedar consciente más que ese leve momento justo antes de que su salvador hubiese podido mirarle.

Sin embargo, el no poder ver el hermoso y estoico rostro de aquella chica en ese momento crítico fue lo que cambio el destino de este chico. El simplemente estaba demasiado dañado como para poder ver claramente a esa belleza.

Lo único que Bell pudo distinguir fue una cabellera rubia, pero antes de poder registrar el rostro o como mínimo los ojos dorados de aquella que, salvo su vida, los ojos de Bell no pudieron más y el color negro consumió su vista.

Tan cerca de despertar algo… pero aquí los daños a su cuerpo hicieron que ese instante llegase un segundo tarde, segundo que tendría repercusiones impensables para todo el mundo.

"No… llegue muy tarde," Bell pudo vagamente escuchar una voz perteneciente a una mujer.

El no la vio… pero ahí estaba una estoica belleza de largo cabello rubio como el de Leina, pero con ojos dorados en lugar de azules… y un cuerpo mas modesto que la rubia de la Familia Hestia, aun así, esa chica es una belleza total que tiene un montón de admiradores, ya sea por belleza o su enorme poder.

Aiz Wallenstein, Aventurera Nivel 6 de la Familia Loki… la Princesa de la Espada ha hecho su aparición… un poco tarde pero la hizo.

Si bien esa voz a primera vista no expresaba mucho, para Bell Cranel aun en su complicado estado actual… este pudo reconocer arrepentimiento en dicha voz.

'¿Eh? ¿T-tú lo mataste?' Pregunto mentalmente el peliblanco, aunque físicamente él no podía encontrar las fuerzas para hacer esa pregunta.

Eso era… genial.

'Gracias… ahora sé que Leina y Nowa estarán seguras,' Bell estaba más feliz por ese hecho que por sentir odio hacia quien no llego a tiempo para salvarlo.

Y habiendo confirmado que las dos chicas de su Familia estarían bien, Bell ya estaba en paz.

Era en un momento como este donde la muerte se acercaba que aquellos que estaban por morir comenzaban a recordar cosa del pasado.

Bell no fue la excepción… este recordó a su Familia.

A esas dos chicas increíbles que el logro darles la oportunidad de escapar y evitar que terminasen como el, así estas puedan tener un futuro.

Su Diosa es una gran Diosa, puede que ella no viva en las mejores condiciones (Pero eso cambiaria pronto… pero una verdadera pena que Bell no viviría para verlo) o siquiera una reputación, pero esta tiene un enorme corazón que aprecia verdaderamente a quienes se le unen… verdaderamente a pesar de entender por qué… Bell cree que quienes la habían rechazado eran idiotas al perderse el tener una Diosa tan amable a pesar de sus falencias.

Y no solo en Orario, sino que imágenes de gente de su vida antes de Orario también flotaban en su cabeza.

Como olvidar a su abuelo, él fue quien con sus historias le inspiro a seguir este camino, quizás el no pudo llegar a ser un héroe como este lo soñó… pero si este era su final él estaba satisfecho

Si su abuelo lo restaba esperando en el cielo, entonces Bell Cranel esperaba que este pudiese estar orgulloso de sus últimos momentos.

Y finalmente… su aldea donde el paso su infancia.

'…Mi segunda familia… M-mirim…' Y recordando a quienes le habían acogido y dado un lugar donde este no se hubiese sentido solo, Bell pensó en su mejor amiga.

Tantos buenos momentos juntos, tantos días donde ambos jugaron o plantaron para la cosecha… esos días donde él contaba sus sueños de ser un héroe y ella escuchaba con una sonrisa junto con darle ánimos porque esta creía en sus sueños.

Al menos él pudo mandar el dinero a la familia de Mirim… si, por lo menos el cumplió su promesa aun cuando hubiese sido solo una vez. Con la cantidad que les mando ellos podrían incluso mudarse a una mejor granja con un suelo más fértil para que sus cosechas crezcan como nunca.

'Si… si todo estará bien para todos entonces… puedo descansar…' Susurro para sí mismo el peliblanco, sus ojos estaban tan pesados… este los cerraría y probablemente no los abriría.

Pero… Bell Cranel tenía una Familia después de todo. Una Familia que al parecer era demasiado terca como para dejarlo morir, así como así.

"¡Bell!" Una voz muy familiar llego a sus oídos.

Este ni podía mover su cabeza o abrir sus ojos, sin embargo, sus oídos aun funcionaban mientras este pudiese mantenerse consciente… cosa que era más difícil cada segundo.

Dos voces preocupadas gritando su nombre y el sonido de pasos acercándose hasta llegar a su lado.

Este chico no tenía que ser un genio para saber quién era…

"Les… dije que… huyesen…" Aun sin poder ver y con dificultades para sentir sus alrededores… este chico lo sabe… que su Familia ha vuelto a rescatarlo.

"El Minotaruo… está muerto," Contesto Leina cuya voz estaba llena de varias emociones: Miedo, culpa, tristeza… pero aun así por el bien de Bell y Nowa, esta no quebró en llanto.

Leina sabía que si ella pierde el control y termina colapsando aquí entonces para solamente Nowa seria prácticamente imposible llevar tanto al lastimado Bell como a ella en estado de shock.

Ella había fallado antes… y ahora mismo Leina Vance se niega rotundamente a perder a Bell por su culpa.

"D-descuide Capitán… ¡Lo llevaremos a donde puedan ayudarlo!" Declaro una Nowa que tenía su voz a punto de quebrarse por la angustia.

Ella nunca pensó que algo la haría sentir peor que cuando esta fue expulsada del bosque sin poder despedirse de su maestra… nada peor que esas noches de soledad en el bosque.

Pero ahora mismo frente a sus ojos había algo que se sentía absolutamente peor que las mencionadas ocasiones. Una pesadilla verdadera.

Al final Nowa detesta este sentimiento, ella daría lo que fuese para hacerlo desaparecer.

Y lo único que podía hacer que este sentimiento se vaya era el llevar a Bell a un lugar donde pudiesen curarle.

Leina tomo a Bell y con extremo cuidado lo puso por sobre su hombro siendo esta para ella la mejor posición para correr cargando a alguien más.

Y con su Capitán seguro… ella procedió a tomar control de la situación.

"Nowa… como la Vice-Capitana te ordeno que… ¡mates a cada monstruo que se nos acerque mientras yo cargo a Bell!" Y con no otra opción Leina tuvo que dar esa orden y dejar que en Nowa recayese la tarea de pelear contra lo que viniese.

Leina realmente odiaba dar esa orden y dejar a Nowa con un trabajo como ese en una situación tan horrible, pero… ¡No había opción!

Ella había perdido su arma, lo único que ella tenía para matar monstruos era su escudo, cosa que no tiene el mejor rango.

"Entendido Leina-san! ¡Déjemelo a mí!" Con pura determinación en su rostro Nowa respondió, en los dulces ojos de la chica solo había una emoción: Determinación.

Ella iba a matar lo más rápido y efectivamente posible a cualquier monstruo que les dificultase el camino, aun si eso significaba terminar lastimada por no poder usar su típico estilo de movimientos y acrobacias.

Y con eso… la Familia Hestia corrió a toda velocidad hacia la salida de este piso con un solo plan: Salir lo más rápido posible de la Mazmorra y llevar a Bell a donde le pudiesen ayudar

El camino será duro, era probable que fuesen atacadas y Nowa resultase lastimada, si eso pasaba entonces únicamente ellas deberían continuar luchando… asique si ellas harían todo lo posible, entonces Bell tenía que aguantar.

Esa iba a ser la ruta original que esta Familia iba a tomar, un camino duro hacia la superficie…

…Pero.

"Esperen," Una voz femenina interrumpió al dúo de chicas de la Familia Hestia quienes nunca dejaron de correr.

Esta chica simplemente los alcanzo en un instante, considerando su nivel y estadísticas para ella el alcanzar a estas dos era algo en extremo simple.

"Tú eres la chica que mato al Minotaruo," Dijo Leina.

"Ustedes deben ser la Familia de ese chico," Contesto Aiz.

Ahí fue que Aiz pudo ver en mejor detalle a las dos chicas que habían venido a recoger al Capitán de su Familia.

La primera era una que ella podía fácilmente reconocer como una Mitad-Elfo debido al tamaño de sus orejas que, si bien eran las de un Elfo, estas eran demasiado cortas como para ser de un Elfo de sangre pura.

La segunda chica era una humana quien compartía con ella el mismo color de cabello rubio, pero en lugar de dorado aquella chica tiene ojos azules… pero lo que inmediatamente llamo la atención de Aiz fue… el generoso pecho de aquella chica.

BOING

Sin embargo y solo por un instante al ver los generosos senos de Leina los cuales su armadura lograba resaltar enormemente y los cuales se movían mientras esta corría… Aiz sintió algo raro. Algo que ella nunca había sentido ya que por un momento Aiz Wallenstein se sintió… pequeña.

Esa era la mejor palabra para describir esa sensación… Aiz se sintió como una niña pequeña nada más al ver a esa chica.

Levemente ella pensó en sus propios atributos… más específicamente sus propios senos y trasero los cuales palidecían en comparación con la otra rubia… incluso con cualquier otra mortal que ella hubiese conocido.

Honestamente solo Dementer-sama podía compararse a esa chica en cuerpo… y Demeter es una Diosa.

Sera posible que sienta… ¿Una pizca de envidia ante Leina por su cuerpo superior?

No en términos de poder… sino en la gran diferencia entre sus cuerpos.

Es decir, si bien Aiz es una belleza con su propio tipo de encanto la verdad es que esta no poseía un cuerpo tan desarrollado en ciertos lugares.

'De donde vino eso?' Se pregunto a sí misma Aiz.

Un pensamiento como la diferencia entre sus cuerpos era algo que Aiz nunca hubiese pensado… ¿Verdad?

Quizás dentro de ese corazón de una chica estoica que busca venganza y el poder para completarla… también hay una chica normal en alguna parte.

Y dicha chica se sintió totalmente derrotada como una mujer al comparar su humilde cuerpo contra el generoso cuerpo de Leina.

Afortunadamente para Aiz quien de cierta forma había descartado ese aspecto de chica común y corriente hace mucho tiempo, ese sentimiento de inferioridad con respecto a su cuerpo más modesto no se mostró más que como una mirada leve a los senos de Leina.

'Como puede tener una humana… unas tan grandes…' Fue la pregunta que se hizo silenciosamente a sí misma Aiz quien resistió el impulso de poner sus manos sobre sus senos para… intentar sentirse mejor.

Hasta ahora ninguna otra humana que ella hubiese conocido se acercaba a ese tamaño… asique Aiz estaba sorprendida… y sin darse cuenta de ello quizás un poco celosa como mujer.

Sin embargo, como había algo más serio en este momento en lo que enfocarse, Aiz prefirió enfocarse en el presente.

"Así es… somos la Familia Hestia," Asintió Leina mientras corría.

"¿Familia Hestia?" Repitió Aiz mostrando un poco de confusión al nunca antes haber escuchado ese nombre.

"Somos una Familia nueva, apenas llevamos dos semanas," Explico Leina.

Si bien Bell es la prioridad absoluta, todavía nada los esta atacando… y bueno esa chica es quien le salvo la vida asique Leina veía correcto como mínimo dirigirle la atención en esta situación.

"S-señorita Aventurera, si quiere una compensación… por favor espere a que ayudemos a nuestro Capitán," Dijo Nowa.

"No, no vine por eso," Negó con la cabeza Aizm "Iré con ustedes," Dijo la chica rubia de ojos dorados, "Conozco donde hay una Familia que puede darle el tratamiento para salvar su vida," Eso ella lo sabia muy bien al conocer a esa Familia.

"¿Q-que Familia es?" Pregunto una temblorosa Nowa… ella ya estaba esperanzada con la posibilidad de que Bell saliese con vida.

"Familia Dian Cecht," Contesto Aiz.

"He… he escuchado de ellos," Asintió una igualmente temblorosa Leina, "Creo que son los mejores a la hora de curar y ofrecer tratamientos…,".

"La Deidad de esa Familia dijo que me debe un favor," Explicó Aiz, "Si algún día lo necesitase me darían un tratamiento gratis,".

Tal favor fue uno nacido de una petición de ellos a la Familia Loki, una petición de un ingrediente bastante raro pero que era necesitado con urgencia para fabricar algo especial, eso era lo que Aiz sabia.

Afortunadamente Aiz justo tenía ese objeto obtenido de uno de los monstruos de los pisos bajos donde pocas Familias habían llegado luego de una batalla un poco larga. Dicho objeto era uno bastante raro que casi no aparecía como Drop por lo que sumado a la profundidad del piso hábitat del monstruo que Aiz mato hacia ese Item uno con pocos en existencia.

Aiz no tenía realmente planes para ese objeto ya que si bien era raro no le ayudaría mucho a volverse más fuerte… sin embargo ahí fue cuando Loki intervino y termino por convertir eso en una situación donde Dian le debía el favor a Aiz… solo a Aiz y no a Loki, al menos Dian logro evitar el peor escenario en esa negociación y eso fue por poco.

Aunque considerando que si Loki pedía usar ese favor… bueno, al final ella obtendría el mismo resultado que si el favor fuese para ella.

O quizás que Dian dio esa oferta creyendo que alguien como Aiz nunca necesitaría el hacer uso de dicha oferta.

Fuese como fuese el hecho aquí era solo uno: Aiz podía en cualquier momento hacer uso de dicho favor.

Y bueno, ella decidió por cuenta propia que este era el momento… sin consultarlo antes ni con su Diosa… o como mínimo su Capitán o la Vice-Capitana de la Familia ya que cuando ella lo usase el favor quedaría usado. Si Aiz deseaba usar ese favor entonces esta debía consultar primero con su Diosa, después de todo la Familia Loki podía costear prácticamente cualquier cosa de la Familia Dian Cecht excepto algún tipo de tratamiento que involucre múltiples prótesis al mismo tiempo y heridas mortales… lo que algún día podría ser necesario para la Familia Loki considerando que ellos eran de las pocas Familias que se adentraban en los pisos más profundos.

En pocas palabras un favor de la Familia Dian Cecht es algo muy, muy valioso dependiendo de la circunstancia y que algún día la Familia Loki podría necesitarlo si lo peor llegaba.

Asique si ella planeaba usar ese favor primero debía ser discutida con la Diosa, o por último con los ejecutivos del a Familia.

Pero… ella razono como el favor le había sido dado a ella, esta era libre de usarlo cuando lo viese necesario o en una emergencia.

"E-entonces mi Capitán… ¿podrá salvarse? …" Al escuchar que Bell podría ser salvado, Nowa recupero sus esperanzas.

Ahora mismo a Nowa no le importaba que ella le está hablando a una Aventurera mucho más fuerte… oh no, a Nowa solo el importaba el estado de Bell.

"No hablen, solo enfóquense en correr," Dijo Aiz, "Yo mantendré mi velocidad,".

Si bien era algo muy reconfortarme el saber que alguien tan fuerte estaba al lado de ellas… realmente era lo de menos para Leina y Nowa el pensar en su seguridad cuando Bell estaba entre el borde de la vida y la muerte.

"Si puedes ir más rápido… entonces por favor ve a donde puedan ayudar a Bell," Dijo Leina con sus ojos rogándole a Aiz que hiciese eso en lugar de quedarse aquí con ellas.

"Tú estás desarmada, podrías estar en peligro," Dijo Aiz a Leina notando que la rubia de ojos azules no lleva consigo un arma.

"Prometo proteger a Leina-san con mi vida," Intervino Nowa con una resolución absoluta en sus ojos, "No le pasara nada… aun si tengo que pelear sola contra todo lo que venga,".

"Por favor cree en Nowa," Dijo suavemente Leina, "Ella es fuerte, sé que podrá mantenerme segura," Y esas palabras no nacían de intentar convencer a Aiz de simplemente partir… sino que también eran porque Leina Vance tiene absoluta confianza en las habilidades de Nowa.

Aiz solo vio esa resolución absoluta en los ojos de la Mitad-Elfo y la humana, una resolución que ella había cisto en los ojos de los miembros de su Familia cuando los momentos decisivos llegan.

Asique…

"Entendido," Asintió Aiz.

Al ver tal determinación en esa joven, una promesa absoluta de proteger a la otra rubia… ¿Cómo Aiz podría negarse?

Si ella quería honrar la voluntad de esas chicas entonces ella debía llegar lo más rápido posible hacia la Familia Dian Cecht.

"Por favor… salva a Bell," Rogo Leina Vance quien miro directamente a Aiz Wallenstein a los ojos.

Ojos azules se encontraron con ojos dorados.

Unos ojos eran los de una chica que buscaba poder para poder cumplir una venganza contra una criatura horrible y que emocionalmente no emite mucho. Ojos fríos y decididos pero que no habían perdido la humanidad.

Otros eran los ojos de una chica que solo buscaba cumplir un sueño nacido de la admiración por su amada madre, si bien ella también sentía ira ante quien le arrebato a su madre… la gran diferencia era que Leina nunca supo quien fue, ni siquiera una pista de la identidad.

Esta chica… no tenía realmente un objeto en específico en que hacer recaer su odio aun cuando ella todavía resintiese al desconocido que mato a Maria… pero era difícil enfocar ese deseo de venganza al mismo nivel de Aiz cuando no sabias siquiera contra quien deberías vengarte.

Quizás el no tener una figura para depositar su resentimiento y crear una voluntad de venganza permitió que Leins no hubiese tomado el mismo camino que Aiz.

"Entendido, lo hare," Respondió Aiz Wallenstein.

Una chica que había visto incontables batallas y una chica que había visto pocas batallas… tan diferentes… pero que al mismo tiempo podrían haber terminado siendo la misma persona si circunstancias diferentes se hubiesen dado… o por lo menos en el mismo bando.

Y así… Aiz con Bell en sus brazos corrió con todo, si bien ella no era realmente la más rápida de su Familia, su velocidad seguía siendo considerable… hasta el punto de que luego de segundos Leina y Nowa la habían perdido de vista.

"¡Woah!" Grito una sorprendida Nowa, aquella chica de ojos dorados verdaderamente se movía más rápido que cualquier animal que esta hubiese visto.

"Increíble…" Leina igualmente estaba sorprendida… ¿Así eran la velocidad de una Aventurera de nivel alto?

Francamente… ella no tenía palabras.

"Creo que finalmente puedo apreciar la verdadera diferencia entre nosotros y los Aventureros más fuertes," Dijo con suavidad Leina.

Esta era la primera vez que Leina había visto a un Aventurero de nivel alto, todo eso le puso en perspectiva cuanto le faltaba para considerarse a sí misma siquiera algo comparable a su madre.

Era un camino duro, pero… Leina no sintió su voluntad siendo superada al ver a Aiz en acción, sino un fuerte deseo de llegar ahí algún día.

Después de todo siendo fuerte… esta situación nunca volvería a ocurrir ni a Bell ni a otro miembro de la Familia Hestia que se una en el futuro.

-Con Aiz Wallenstein-

Para esta chica solo había una decisión clara en su mente: Llevar a ese chico a donde pueden salvarle la vida.

En ese preciso momento no había deseos de venganza y de hacerse más fuerte… y si había estos estaban en segundo plano.

Bell Cranel ha tomado prioridad en la mente de Aiz Wallenstein… solo que uno hubiese deseado que hubiese sido en mejores circunstancias.

"Fue mi culpa que ese Minotauro se hubiese escapado…" Aunque no era muy notable, la culpa por esta situación era evidente en la voz de esa chica, "Y ese error le costó caro a alguien que no estaba listo para ese desafío," Si bien ella sabe que la vida de Aventurero es dura y la Mazmorra es peligrosa… este incidente se hubiese evitado si ella no se hubiese descuidado dejando escapar a un Minotauro.

En pocas palabras era su culpa que toda esta tragedia hubiese ocurrido. Eso era lo que Aiz sentía…. Y quizás ni estaba equivocada.

Otros de su Familia le dirían que ella no tenía que hacer nada, que quien viaja aquí lo hace bajo su propio riesgo y que lo que paso eran cosas que pasaban a los Aventureros.

Eso ella lo entendía mejor que nadie luego de pasar mucho, mucho tiempo como Aventurera hacía que uno fuese más consciente de cómo se hacían las cosas aquí.

Sin embargo, Aiz no podía evitar sentirse responsable igualmente porque fue su descuido lo que permitió tal cosa y una Familia demasiado joven termino por pagar las consecuencias.

Pero… no era solo ese sentido de la culpa lo que la movía, al final Aiz no es una santa que hace cosas buenas porque es lo correcto.

Antes de matar al Minotauro ella pudo ver el combate que ese chico en sus brazos tuvo contra aquel monstruo.

Aun así, a pesar de todo esta chica se sintió bastante… maravillada con lo que ella pudo apreciar una vez llego a donde se estaba dando la batalla.

Naturalmente ella iba a intervenir debido a que fue su culpa que un monstruo tan fuerte estuvo ese en un piso donde los Aventureros dé bajo nivel no podrían manejarlo.

En ese momento Aiz Wallenstein vio algo especial en Bell Cranel quien seguía manteniéndose con vida a pesar de que este apenas llevaba dos semanas si lo que su Familia dijo era la verdad. Lo que ella vio… ese tipo de combate en el que no se sentía correcto intervenir.

En la parte final de la pelea como ese chico busco las cuencas de los ojos para dar una estocada final con lo que quedaba de su arma… Aiz instintivamente supo que de conectar el peliblanco habría logrado una tremenda victoria para alguien de su nivel.

Aiz incluso creyó que ese chico tendría la chance de lograrlo y derrotar por sí mismo al Minotauro de forma milagrosa…. Ese chico con su voluntad inquebrantable logro que ella creyese en su victoria.

¿Alguien que apenas llevaba dos semanas logrando evitar la muerte y al parecer tener una oportunidad de ganar?

Pues para Aiz… si realmente ese era el caso, ella creyó que ese chico lo lograría.

'Parecía… un héroe de leyenda peleando contra un monstruo legendario,' Pensó la rubia de ojos dorados.

Por supuesto que un Minotauro no estaba a ese nivel, después de todo Aiz puede matarlos como si fuesen Goblins.

Pero para alguien con tan poco tiempo en la Mazmorra como ese chico, pues un Minotauro muy bien puede llegar a ser considerado un monstruo legendario.

Aun con la diferencia de poder y un arma rota de mala calidad en mano… ese chico no perdió en sus ojos la voluntad de seguir peleando.

No, de hecho, en ese combate su voluntad de seguir peleando aumento como si él hubiese visto como superar la situación, como si él hubiese visto la victoria aun con todo estando en su contra.

Un chico que ni un mes completo llevaba como Aventurero, un chico que aún era un nivel uno en toda regla… fue capaz de verse de tal forma.

Y por alguna razón ella se quedó viendo fascinada todo eso… incluso habiendo visto y participado en batallas mas grandes e intensas que esa. Aiz por supuesto como miembro de la Familia Loki había sido testigo de personas teniendo duras batallas contra monstruos mucho más épicas que esta, las batallas de su propia Familia son un ejemplo.

Entonces…

¿Por qué su corazón late tan fuerte?

Aiz realmente no es buena con identificar sus propios sentimientos más allá de la ira, venganza y tristeza.

Quizás ver a un chico débil totalmente superado y aun así viendo como este buscaba la victoria… hizo que algo resonase con esa chica rubia y estoica.

Después de todo ella también buscaba desesperadamente la victoria ante un oponente muy poderoso… ella se imaginó por un instante el estar peleando contra el Dragon Negro de un Ojo con la misma determinación y voluntad que ese chico lo hacía ante un simple Minotauro.

Por eso mismo Aiz Wallenstein decidió ayudar a esa pequeña Familia. El no hacer nada más y dejar a este chico morir sin duda le haría sentir terriblemente culpable cuando ella pudo hacer algo desde el inicio… y al final del día, aunque estoica esta chica es una buena persona.

La vida de Bell Cranel pende de un hilo, su estado era tan delicado que no era una posibilidad remota que este chico simplemente muriese en el camino hacia la Familia Dian Cerct.

Lo bueno era que con lo buenos que eran ellos, si Bell lograba llegar incluso al borde de la muerte, algo podría ser hecho para salvarle la vida más aun porque el favor se traducía al mejor tratamiento sin costos incluidos.

¿Podrán estas tres chicas llegar rápido a la superficie y conseguir ayuda?

¿Podrá este chico aguantar tanto en su estado crítico?

A ciencia cierta era imposible saberlo, después de todo su vida está muy frágil… pero por lo menos existía una oportunidad de salvación.

Para este punto un milagro sería el hecho de que Bell sobreviviese lo suficiente como para ser salvado.

"Leina…. N-nowa… Kami-sama…" Susurro un inconsciente Bell.

Verdaderamente sería interesante saber en que estaría pensando este chico… quizás su mente delirante solo podía ver a su amada Familia y a esos buenos momentos.

Seguramente Bell Cranel se las imaginaba a su Familia estando felices en la Iglesia Abandonada como en el desayuno completo que tuvieron esta mañana… el primero decente luego de haberse formado la Familia.

'Quiero… vivir más… momentos… como esos…' Dijo Bell.

Pero no solo eso.

'T-también… quiero visitar esa granja… M-mirim no te he olvidado…' Y aun cuando todo en Orario estaba en el corazón de Bell, este chico aun no olvidaba sus orígenes.

El… todavía tenía… a donde volver…

"Discúlpame… fue mi culpa que esto te ocurriese," Dijo con suavidad Aiz.

Por supuesto que ese chico no le respondió… aun así Aiz trato de hablarle un poco.

"Ya falta muy poco para la superficie," Dijo Aiz.

Ella lo sabía a la perfección ya que después de todo Aiz había salido por este piso cientos de veces, incluso con los ojos vendados ella hubiese podido encontrar su camino.

Sin embargo… fue ahí que Aiz se dio cuenta de que estaba todo calmado… demasiado calmado.

Cierto sonido también se había ido.

¿Por qué ella ya no sentía siquiera la leve respiración de ese chico?

Temiendo lo peor Aiz se detuvo u rápidamente puso al chico de cabello blanco en el suelo suavemente… y luego puso dos dedos sobre su yugular. Si bien Aiz no era experta en medicina su profesión y los riesgos de ir más abajo hizo que ella por lo menos supiese tomarle el pulso vital a alguien… todos los del a Familia Loki que visitaban los pisos más bajos habían ganado esa habilidad por necesidad.

"No…" Susurro ella.

Débilmente Aiz puso una mano sobre el pecho de ese chico y… nada. Aiz había visto en su tiempo de Aventurera suficientes muertes para confirmar que ese chico… se había ido.

El Corazón de Bell Cranel… ha dejado de latir.

"Estábamos tan cerca de lograrlo… pero el daño debió ser mucho," Dijo con tristeza Aiz.

La muerte no era algo ajeno para esta belleza…

Sin embargo, en esta ocasión era como si ella hubiese matado a un chico inocente que apenas comenzaba a abrir sus alas como Aventurero.

Asique…

¿Realmente este era el final de este chico?

¿Acaso sus sueños y su gran potencial solo habían logrado llevarlo dos semanas en esta ciudad?

¿Realmente el dejaría sola a su amada Familia que poco a poco iba creciendo?

Pues… normalmente si ya que él había muerto, pero este no es un mundo exactamente normal ya que como los Dioses existen… ¿Por qué no otros seres celestiales?

Mas específicamente uno que tuviese una relación de amistad con cierta Diosa.

Solo digamos que su segunda oportunidad solo pudo existir gracias a que… Hestia es una Diosa de buen corazón.

-Tenkai, (Ciudad de los Ángeles: Sephirot)-

El Tenkai… el misterioso reino celestial en donde las Deidades originalmente vivieron antes de descender al Gekai de los mortales comenzando con Ouranos.

Este es el lugar donde residen tanto las Deidades que han sido enviadas de regreso desde el Gekai por una multitud de razones y sin olvidar a las que todavía no han descendido… ya fuese por un sentido del deber (Raro considerando como pueden ser estos como especies… tan egoístas que incluso los de mejor corazón dejaron sus deberes aquí arriba debido al aburrimiento) o porque la cantidad de Deidades que ya están en el Gekai hace que si más fuesen a dejar el Tenkai habría efectos desastrosos.

Un lugar vasto y misterioso que el explorarlo a fondo seria ciertamente una tarea bastante larga considerando sus varias áreas como la del Olimpo, el Asgard donde vivieron Dioses tipo Loki y Freya, y otra como Inisfáil donde Miach, Brigid y Dian Cecht vivieron antes.

La sección donde nos encontramos es una ciudad en el vasto reino del Tenkai… más específicamente la ciudad donde los Ángeles viven y trabajan: Sephirot.

Esta ciudad está ubicada en el centro exacto del Tenkai ya que aquí es donde varias cosas importantes ocurren… como el camino que toman las almas de los difuntos para llegar.

Para los ojos de los del Gekai este lugar es hermoso e imponente con ninguna ciudad ahí abajo capaz de compararse siquiera.

(Básicamente para una imagen más clara imagínense a Anor Londo de Dark Souls 1 en términos de como se ve el lugar.)

Esta ciudad esta construida sobre un enorme portal que conecta con el Gekai y el que cada Deidad había cruzado cuando estos deseaban descender… y nuevamente cuando fueron mandados de regreso.

Además, dicho portal enorme servía para que las almas de los mortales pudiesen llegar y ser recibidos por los Ángeles quienes les guiarían a la siguiente parte del viaje.

Como un alma podía aparecer en cualquier momento, cada Ángel que viese una tenía el deber de guiarla en caso de verla junto con sus deberes normales.

Y sobre eso… en estos momentos nuestra atención se centra en cierta chica sentada sobre un techo de una casa… claramente holgazaneando en lugar de trabajar.

"Ahh… que trabajo más aburrido," Se escucho una voz femenina quejarse.

Sentada ahí se podía apreciar a una chica de corto cabello azul que si bien compartía la apariencia base de humanos y Deidades más las demás razas del Gekai… lo que la diferenciaba eran las dos alas en su espalda, aunque claramente de esas alas una era normal mientras que la otra más pequeña.

Si uno se fijaba entonces panties blancas con puntitos azules eran visibles cada vez que había una briza debido a que esta elegia volar en lugar de caminar.

Senos generosos que su vestido blanco oculta un poco el verdadero tamaño, aunque esos senos no estaban al nivel de Leina, igual eran dos suaves y grandes pares que causarían envidia en ciertas mujeres no muy desarrolladas en tal área. Básicamente un cuerpazo como parecía ser para varias mujeres en las que nos hemos enfocado.

Y spoiler… definitivamente esta será una tendencia que ira en alza… cosa que para cierto chico será felicidad pura mientras que otros derramaran lágrimas de sangre por la pura envidia.

El nombre de esa belleza angelical es Nanael. Una de las múltiples Ángeles del Tenkai.

Nanael es en sí una existencia un tanto peculiar en términos de lo que son los Ángeles… pero no por algo positivo, sino todo lo contrario ya que ella no era vista con buenos ojos por los de su misma raza.

Lo más claro era una de sus alas la cual era más pequeña que la otra, a diferencia de los Ángeles normales que todos habían nacido con las proporciones de sus alas exactamente igual, el ala izquierda de Nanael era más pequeña en lo que parecía ser un simple defecto de nacimiento… al parecer tal cosa era posible incluso entre los Ángeles que son seres de los cielos y por lo tanto exentos de ese tipo de cosas que le ocurren a los mortales, aunque era en extremo raro podía ocurrir que un Ángel naciese con una deformidad.

Pero eso era algo solo físico, si bien ella no podía volar tan bien o tan rápido como los otros Ángeles, su problema solo se limitaba a eso. Sus poderes están a la par de los demás y ella al final es una Ángel pura.

Y cuando Nanael se pone seria ella era tan buena peleadora como cualquier Ángel… asique solo era un defecto físico sobre el cual ella no tenía control y una personalidad no muy apropiada para un Ángel esta no es vista con buenos ojos… aunque lo de la personalidad perezosa y mala para su trabajo es cien por ciento culpa de Nanael. Quizás el sentirse menospreciada en su hogar fue un factor que la llevo a actuar así, pero al final esta chica tenía una predisposición natural a ser vaga en su trabajo y preocuparse más de otras cisas que de hacer dicho trabajo.

Y hablando de su trabajo… un alma apareciendo desde la puerta que ella está vigilando era la señal de que hay que trabajar.

Viendo como otra alma apareció en este lugar ella supo que había trabajo que hacer ya que en ese techo apareció una pequeña esfera.

Ella se acercó a esa pequeña esfera semitransparente… aquella era un alma. Todas sin importar la raza del mortal tomaban esa forma al llegar al Tenkai como señal de que la muerte los hace igual a todos.

"Otro Bendecido mordió el polvo," Comento ella mientras fue hacia la nueva alma que había llegado al Tenkai pero esta estaba claramente con un Falna.

Una cosa que no era muy conocida era que un alma de Aventurero al poseer el Falna de los Dioses era más reconocible debido a que el Falna afectaba el alma y aquí este le daba a los Ángeles una especie de aura para identificar a que Deidad ellos siguieron en vida.

Los poseedores de Falna si bien al llegar al Tenkai irán al mismo lugar que la gente sin un Falna, como señal de respeto por haber servido a una Deidad estos eran permitidos un pequeño tour por el Tenkai, más específicamente a la sección donde residió la Deidad que les dio un Falna, tal era el pequeño tributo que se les daba a esas personas.

Y solo digamos que no es exactamente un viaje corto… después de todo lugares como el Olimpo están bien lejos y son más grandes e imponentes que esta ciudad si tal cosa fuese posible.

El Tenkai es inmenso, esta ciudad donde Nanael esta es solo una pequeña parte de este, la inmensa ciudad de los Ángeles… y si bien era hermosa esta palidecía cuando se compara con los aposentos de las diferentes Deidades.

"Bueno… no tenía ganas de trabajar en esto, pero por lo menos el viaje me permitirá alejarme de esta aburrida ciudad y el aún más tedioso trabajo de aquí…" Dijo para sí misma Nanael… si bien el viaje era molesto al final nunca tanto como esta ciudad con todos esos estrictos Ángeles y sus críticas.

Ella había hecho esto antes con otros Aventureros asique pensó que sería cosa de identificar la Deidad a la que sirvió esa alma y listo… hasta que al acercarse más a esa pequeña esfera semitransparente Nanael lo sintió.

Una sensación cálida... el aroma de un hogar.

Inmediatamente luego de sentir eso junto con la nostalgia fue que Nanael voló con más velocidad hasta estar en frente del alma.

Y así poniendo el alma sobre sus palmas y cerrando sus ojos para concentrarse… y sus ojos se abrieron en sorpresa absoluta un segundo después.

"Lo reconocería donde fuese… esa es la esencia de la Divinidad de Hestia," Dijo la peliazul mientras aquella pequeña alma estaba en la palma de su mano.

¿Hace cuánto tiempo fue la última vez que ella pudo sentir esa reconfortante aura?

Pues fue el día donde dicha Diosa partió del Tenkai.

Aquella Deidad que fue la gran amiga de Nanael y no la molesto por su pequeña ala fue Hestia.

Muchas Deidades como Ikelos, Thanathos, Apollo o Loki entre otros se burlaron de ella cuando estos residían en el Tenkai por precisamente su ala pequeña… y por la diferencia de poderes y rango, Nanael no podía ni intentar defenderse de esas burlas.

Uno no debería sorprenderse de que los Dioses hagan algo como eso ya que… solo había que ver a Hephaistos y las burlas que esta había sufrido por su ojo… y esa era una Deidad como ellos, pero aun así las burlas eran genuinas y llevaban malicia.

Asique con eso uno solo debe imaginar las burlas que Nanael recibió de los Dioses… o casi todos, mejor dicho.

Todos excepto cierta Diosa que no era muy aceptada entre los demás por razones que Nanael nunca entendió del todo ya que, a pesar de vivir en el mismo plano astral, Ángeles y Dioses eran especies distintas que a pesar de vivir en el Tenkai juntos estos no mantienen contactos estrechos y no interactuaban realmente a menos que fuese que tuviese que ver con deberes.

Asique Hestia y Nanael formaron una fuerte amistad nacida del estatus de ambas como marginadas por sus propias especies. De ahí en más fueron los días más brillantes para Nanael quien simplemente podía ir hacia Hestia cuando ella no tenía ganas de trabajar (Básicamente todo el tiempo).

Si bien eso irritaba a muchos Ángeles que sabían que Nanael iba a perder el tiempo en lugar de hacer algo importante… estos no podían realmente hacer nada cuando Hestia anunciaba que Nanael tenía su permiso.

La jerarquía era la misma: Dioses en la cima, Ángeles por debajo (Excepto la Ángel Superior que está a la misma altura que estos) … y mortales al fondo.

Asique si una Diosa pedía que una Ángel le hiciese compañía… los Ángeles no podían ni protestar ni castigar a dicho Ángel y la Ángel Superior no podía ser molestada con algo tan simple como una Diosa llamando a una Ángel para holgazanear juntas.

Así de ahí en más fueron los mejores días para Nanel: El simplemente te holgazanear acostada en el césped del Olimpo cubierta por la sombra de un árbol mientras las uvas eran devoradas por ella y Hestia estaba al lado suyo disfrutando también.

Y por supuesto las uvas del Olimpo que Nanael tenía como su comida favorita incluso ahora… una tristeza que ahora sea imposible conseguirlas sin una Hestia que se las diese ya que los otros Dioses del Olimpo o se reían de ella por preguntar… o intentaban atacarla por su osadía de creer que un mero Ángel era digno de la comida que crece en tierras de los Dioses.

"Ahhh… Hestia porque tuviste que descender..." Suspiro Nanael al recordar esos buenos momentos, "…Yo entiendo tus razones, pero… al menos hubiese querido bajar contigo…" Pero eso ultimo no se podía hacer aun si una Deidad lo ordenaba explosivamente. No, de ser eso posible Nanael hubiese dejado ella el Tenkai hace mucho tiempo para seguir a Hestia al Gekai y seguramente ella se hubiese vuelto la primer miembro de la Familia Hestia.

En parte para seguir a su amiga… y en otra parte para ser libre de los sermones y reproches de los otros Ángeles y de sus aburridos deberes.

Tristemente a diferencia de las Deidades… los Ángeles lo tenían más difícil ya que para llegar al Gekai primero se debe conseguir la aprobación de la Ángel Superiora: Reiel.

Y para conseguir dicha aprobación un evento catastrófico que alterase las leyes de la naturaleza debería ocurrir… asique nop, eso no era una opción.

El día que Hestia descendió fue uno triste para Nanael quien se sintió bastante sola… y quizás en secreto derramo unas cuantas lagrimas al haber perdido a su amiga.

Ella estuvo tentada a rogarle que no se fuese… después de todo fue con Hestia que esa Angel despreciada por su propia especie encontró un hogar.

Sin embargo, sabiendo lo mucho que Hestia deseaba probarse a sí misma al resto de las Deidades que la vieron como menos en el Tenkai, Nanael no encontró dentro de su corazón la voluntad para detener a Hestia de seguir ese camino.

Y desde entonces había sido volver a la vida antes de conocer a la Diosa.

"Si ella no se hubiese ido podría haber seguido comiendo las uvas del olimpo mientras teníamos de nuestras conversaciones," Sonrió Nanael ante esa idea… pero ahora sin Hestia los demás Dioses que viven en el Olimpo no le darían nada a una Ángel con ala deforme… no, de hecho, aun si ella fuese una Ángel con alas normales y a la vez verdaderamente sobresaliente los Dioses igualmente no cumplirían sus peticiones.

Pero bueno lo hecho ya hecho esta, Hestia no regresaría aquí al Tenkai a menos que la mandasen de regreso a la fuerza o ella decidiese activar su Arcanum por completo y ser enviada de regreso con eso.

Conociéndola, aun si todo comenzaba de mala forma… esta nunca se rendiría, si algo había aprendido Nanael era que esa Diosa podía llegar a ser muy terca… aunque no era como si esta Ángel despreciase eso, todo lo contrario, era una de las cosas que le agradaban de Hestia.

Y ella conociendo a Hestia sabia lo mucho que ella apreciaría a sus hijos, cuando ella estaba haciendo los planes para partir Hestia siempre hablo de como ella apreciaría a quienes la siguiesen y de que ella tendría una gran Familia que sería la mejor de todo el Gekai… sin saber realmente lo duro que seria.

Poco sabia Nanael que si bien era algo muy difícil de lograr… las bases para tal sueño ya estaban en su lugar con tres miembros de buen corazón, un buen capital de dinero y finalmente gente en camino a Orario por una u otra razón.

Y si este chico no regresaba con los suyos entonces puede que tal sueño no logre cumplirse ya que, a pesar de no ser mucho ahora, ese chico era la pieza fundamental de todo… de aquel futuro donde la humilde Familia Hestia se alzaría orgullosamente como la numero uno no solo en Orario sino que también en el Gekai.

Asique aun sin saberlo el destino de mucho dependía de la decisión de Nanael.

Pero precisamente porque es Nanael y no otro Ángel es que esto siquiera es una decisión y el alma de Bell no fue dada un tour hacia los aposentos de Hestia en el Olimpo antes de ser enviada a donde toda alma iba.

Y considerando la amistad entre Ángel y Diosa… era obvia la siguiente acción de Nanael.

"Pero… realmente Hestia se pondría muy triste si tú te mueres de verdad," Ahí una expresión pensativa apareció en el rostro de Nanael, su trabajo era el guiar esta alma con las demás después de la visita a los aposentos de Hestia.

Normalmente ella lo haría y continuaría esperando a la siguiente, pero… el problema era que esta alma en particular llevaba un Falna que pertenecía a la única Diosa que Nanael apreciaba.

Asique ella… se quedó quieta y comenzó a pensar, cosa que era una rareza para esta chica.

"Lo que estoy por hacer va en contra de muchas reglas…" Susurro ella sabiendo que si ella procede con su plan definitivamente ella pasaría un mal rato si la descubriesen.

Palabra clave 'si la descubriesen'.

Si no lo hacían entonces ella sin duda alguna podría hacer una buena acción por su amiga y hacer como que no paso nada.

"Hestia me ayudó mucho al conseguirme uvas del Olimpo y fue amable conmigo… nunca pude apagarle de regreso todas esas buenas acciones," Y las uvas que crecían en esa zona eran simplemente supremas, las mejores en comparación con las otras zonas. Nanael absolutamente las ama.

Tomando su decisión la, Ángel acerco lentamente una de sus manos a su ala normal… y procedió a quitar una pluma.

Levemente Nanael hizo una pequeña mueca de molestia debido al dolor, pero eso desapareció rápidamente.

"…Ho, Seredop selacilegna… ut legna Leanan rada us noicidneb…"

Nanael comenzó a rezar en un lenguaje desconocido para la gente del Gekai, ese era el Lenguaje Divino.

Ella estaba dándole sus Bendiciones a esa pluma:

La primera una bendición para guiar un alma.

La segunda para que dicha alma encontrarse su cuerpo.

Y la tercera para que la pluma pudiese salir de lo que era el Tenkai.

Bendiciones muy específicas que cumplirían el propósito de llevar a esa alma de regreso.

Una vez Nanael termino de rezar y sus Bendiciones tomaron efecto, la Pluma se ilumino y comenzó a emitir una blanca aura angelical.

La Pluma entonces comenzó a ir hacia cierta dirección… hacia el Gekai para ser más precisos.

"Sigue a esa pluma y encontraras tu camino de regreso hacia tu Diosa," Sonrió cálidamente Nanael.

El alma de Bell no dijo nada… aunque no era como si pudiese hacerlo siendo solo una pequeña esfera de color blanco.

Sin embargo, aun con esas, esa alma escucho las palabras de Nanael e inmediatamente fue tras la pluma que le llevara de regreso.

"Por favor regresa con tu Diosa," Sonrió suavemente la Angel, "Hazla feliz y no vuelvas aquí en mucho tiempo,".

Aunque… de ser que esa alma volviese a aparecerle entonces era muy, muy probable que Nanael ignorase las reglas nuevamente y una vez más enviase a Bell o incluso a cada poseedor de un Falna de Hestia de regreso.

Si eso ocurriese la Familia Hestia seria básicamente invencible al ser la muerte una preocupación secundaria ya que ellos sabrían que existe en el Tenkai una Angel dispuesta a romper las reglas y ayudarlos.

Pero… tal escenario ideal donde la muerte ya no fuese algo que temer simplemente no podía ocurrir.

Además…

Lo que Nanael no vio mientras Bell se alejaba era que aquella pluma…en lugar de simplemente guiar el alma de Bell Cranel de regreso al Gekai… dicha pluma hizo contacto con el alma…

En donde inmediatamente fue absorbida por dicha alma la cual por un instante brillo con una luz especial… la luz de los cielos.

Originalmente todo lo que esa pluma iba a hacer era servirle de guía a un alma para que pudiese volver al Gekai, luego de eso simplemente se desintegraría en partículas de luz para que no quedase prueba de sus acciones.

Pero… esto era inesperado.

¿Quizás ella recito mal una línea de su Bendición y eso causo este pequeño problema?

Pues… considerando que se trata de Nanael es del todo posible que eso haya sido la causa de este percance.

¿Qué efectos llegara a tener ese incidente donde un alma humana absorbió la pluma de un ángel que había sido bendecida con un Milagro?

Eso habrá que verse… pero de que habrá repercusiones por eso, habrá sin duda.

De repercusiones no solo en el Gekai donde están los mortales… sino que dentro de poco en el Tenkai.

Y así aquella alma que debía haber seguido en el Tenkai… termino siendo guiada de regreso al Gekai sin que una Deidad del Inframundo diese su permiso.

Asique milenios de una perfecta transición de almas siendo llevada al Tenkai… fue rota, así como así sin darle mucho pensamiento, todo por una Ángel que con esa acción le había devuelto un favor a aquella Diosa que fue amable con ella.

"Muy bien ahora es cosa de alejarme y hacer como que no paso nada aquí," Asintió para sí misma la peliazul.

Un buen plan, pero…

A diferencia de las Deidades quienes son bastante variables a la hora de ser eficientes en sus trabajos… los Ángeles eran eficientes en sus trabajos cuando dicho Ángel no fuese Nanael.

Básicamente la transgresión de la chica fue… inmediatamente detectada una vez se sintió algo saliendo del Tenkai… un alma humana para ser más precisos y como ninguna Deidad había dado su permiso y hablado con la Ángel Superior para permitirlo…

"Señorita Nanael…" Pero la voz siniestra que se escuchó detrás de la Angel peliazul hizo que ese escenario de hacer como que no paso nada se cayese a pedazos.

Detrás de ella se encontraban un Ángel masculino con largo cabello rubio y lentes. Como un Ángel él es alguien atractivo ciertamente sin embargo la mirada de desprecio absoluto en sus ojos reduce su encanto natural en un margen considerable.

"Ah… h-hola, Rokuel," Saludo débilmente la mencionada Nanael.

Ella realmente… realmente deseaba que Rokuel no hubiese visto nada y solo estuviese aquí para reprenderla por saltarse el trabajo como siempre… Nanael esta vez esperaba que su regaño fuese ese.

"No pude evitar notar que… en una completa falta de consideración por las Sagradas Reglas del Tenkai… enviaste de regreso un alma humana al Gekai sin la aprobación de ninguna Deidad ni tampoco informarle a la Ángel Superior-sama," Dijo el Ángel Rokuel con una voz llena de veneno mientras este apretaba sus nudillos al punto que uno debía preocuparse de que la sangre angelical comenzase a fluir.

"A-ah… ¿T-te diste cuenta?" Pregunto nerviosamente Nanael.

"Dime porque… dame solo una buena razón por la cual tú has decidido romper por primera vez en toda la historia del Tenkai las reglas de esa forma," Al menos en su corazón esperaba que Nanael tuviese algo… el rogaba que al menos ella tuviese una razón mínimamente plausible.

Pero…

"…Porque la Diosa de esa Alma de Aventurero me daba uvas?" Sonrió con miedo la Ángel que solo pudo temblar.

Si bien era una razón estúpida e insignificante para romper las reglas… era al mismo tiempo la única razón que Nanael tenía para justificar sus actos y que ella veía como un motivo totalmente aceptable.

La mirada de total y absoluto disgusto que aquel Ángel Guardia le dio a Nanael era suficiente para saber lo que este pensaba de aquella excusa.

"Sabía que eras un fracaso como Ángel, pero… ¿Esto?" Se decía a si mismo aquel Ángel Guardia quien estaba tan incrédulo como enojado.

No había palabras… simplemente lo que Nanael había hecho no tenía palabras para reflejar la decepción y enojo de Rokuel.

Una tarea difícil realmente ya que él estaba conteniendo con todo su ser el deseo de castigar el mismo a esa insolente que por las razones más estúpidas rompió una regla tan básica… eso se notaba si las manos que temblaban eran indicación alguna.

'Que diga alguna otra estupidez… este fracaso de ala deforme…' Se dijo a sí mismo Rokuel mientras veía con desdén a Nanael quien solo se veía nerviosa ante la mirada, 'Que lo haga y yo mismo la castigare… me disculpare con la Ángel Superior después, pero si ella dice nuevamente algo estúpido… al demonio el procedimiento legal,'.

"P-pues… ¿L-lo siento?" Intento ella disculparse, pero para cualquiera era claro que, si bien Nanael esta asustada por lo que le pudiese ocurrir, esta al mismo tiempo no se sentía culpable por sus acciones.

"Creo que un castigo está en orden aquí," Dijo sin inmutarse Ángel guardia, "Desde el inicio de los tiempos todas las almas que llegan aquí no han podido volver a menos que alguna Deidad que rige sobre el Inframundo lo permita," Y las raras ocasiones que pasaba era cuando esas Deidades lo veían necesario.

"N-no podemos h-hacer como que aquí no paso nada?" Pregunto la nerviosa Ángel.

Bueno… ¿No había problemas en preguntar, ¿verdad?

"Por favor acompáñeme a la celda mientras su juico está siendo preparado," Fue la impasible respuesta. Una prueba de la eficiencia de los otros Ángeles era que aun segundos después de ser informados estos ya estaban preparando un juicio.

Nanael sintió como todos sus ánimos se desvanecían al escuchar tal respuesta… ella sabía que correr era inútil porque la atraparían en cosa de segundos… ¡La seguridad del Tenkai era simplemente demasiado perfecta!

Y conociendo a las Deidades que todavía están aquí o que han sido mandadas de regreso… seguramente ninguna intentaría interceder en su defensa.

"Y te aseguro que será un castigo durísimo, de eso me asegurare personalmente, testificare en tu contra y me encargare de que no haya piedad," Dijo con convicción absoluta el Ángel Rokuel.

"Uuuuu…" Nanael por su parte se encuentra al borde de las lágrimas luego de escuchar eso ya que los castigos que se les a los Ángeles (Un evento raro y nunca por algo tan severo) no eran algo que uno desease experimentar.

Ahora ella quería ponerse a rezar para que el futuro no fuese tan duro…

Aunque… solo digamos que su futuro castigo terminaría siendo algo que esta Ángel tan peculiar encontraría más como un premio absoluto.

Bueno… por lo menos esa Ángel conocida como Nanael con una buena acción logro darle a Bell una segunda oportunidad… junto con un regalo especial cortesía de su pluma bendecida.

-Gekai, (Piso 1 de la Mazmorra)-

En el primer piso podemos ver a una belleza estoica llevando consigo un cadáver en su espalda.

Aiz Wallenstein decidió por lo menos llevar el cadáver de regreso a donde se encuentra su Familia. Es lo mínimo que ella podía hacer.

En esa profesión muchos no tienen la suerte de dejar un cadáver, usualmente los cuerpos muertos de quienes eran Aventureros terminaban o en los estómagos de los monstruos o pudriéndose en algún lugar de la Mazmorra.

Para una chica que había estado sirviendo de Aventurera desde niña… ella había visto ese escenario varias veces. Incluso a la poderosa Familia Loki le ocurría aun con los fuertes miembros de dicha Familia.

Para esa pequeña y joven Familia Hestia… pues al parecer esta será la primera vez que ellos conocerán el dolor de la perdida será muy temprano.

'Pero esa es una parte de ser una Familia… eventualmente les pasara,' Aiz supo que el tener una Familia que era del tipo exploración significaba que en algún punto alguien caería y no todos lograrían regresar con vida.

Sin embargo, como respeto por aquel chico que peleo valientemente y nunca dejo de buscar la victoria, ella llevaría su cuerpo hacia su Diosa… donde Aiz se disculparía por causar la muerte de alguien que no estaba listo para un oponente de esa talla.

Sin embargo, cuando Aiz estaba a punto de recoger el cadáver… fue que paso el milagro que fue causado por un Ángel (Cosa que Aiz no tenía ni razón para sospechar).

"Ghh… khhh..." Débilmente el sonido de la vida volvió al cuerpo de Bell quien logro hacer que su garganta emitiese sonido en una desesperada bocanada de aire.

Y por una fracción de segundo la luz sagrada ilumino su cuerpo, señal del trabajo de un Ángel.

Una vez esa luz rápidamente dejo de brillar, Aiz simplemente se quedó ahí quieta… intentando creer lo que sus ojos habían visto.

Tentativamente ella acerco una mano hacia el corazón de aquel chico solo para comprobar si lo que ella vio fue verdad.

"…Su corazón está latiendo otra vez…" Aiz no pudo esconder la sorpresa en su voz y rostro al ver ese… milagro.

En sus años de Aventurera ella jamás había visto el caso de alguien regresando así desde la muerte.

Además…

¿Qué fue ese brillo que ella vio por un instante junto con esa sensación cálida?

¿Habrá ella por error visto algo que no era?

"No, eso no importa ahora," Si bien ella ya se había resignado a estar cargando un cadáver… ahora el plan oficial de ir hacia la Familia Dian Cecht había vuelto a full.

Y con eso… Aiz volvió a correr a toda velocidad.

"Realmente no quiere morir…" Aiz estaba honestamente impresionada por como ese chico se aferraba desesperadamente a la vida al punto de que su corazón volvió a latir una vez más en lugar de extinguirse para siempre.

Y quizás viendo la enorme determinación de ese chico por vivir, Aiz continúo corriendo esta vez dando absolutamente todo de si para llevar al máximo su velocidad.

Si había algo que quedaba claro era que Bell debería realmente agradecerle a su Diosa ya que de no ser porque ella había sido amable con un Ángel bastante peculiar entonces el ama de Bell Cranel nunca hubiese regresado y la Familia Hestia hubiese vivido una enorme perdida.

"Vamos… prometo que te salvare," Quizás inspirada por la voluntad de vivir que ella pudo ver en ese chico, Aiz Wallenstein se sintió más llena de energía y determinación, hace un buen tiempo que ella no se sentía así aun cuando su rostro no lo demostrase.

Qué raro…. Un chico novato de una Familia desconocida fue quien termino por darle a Aiz ese tipo de voluntad a no detenerse que ella solo sentía en las duras batallas de los pisos más bajos…. Verdaderamente algo misterioso.

El encuentro entre estos dos se dio de forma distinta al del mundo en donde Bell y Leina nunca se conocieron… donde ninguna de las personas que estaba actualmente en camino hacia Orario y la Familia Hestia era solo Bell.

En ese mundo Bell hubiese terminado sin mayores problemas aquella experiencia, más que con un miedo a los Minotauros y su persona cubierta en sangre…. Pero con algo naciendo por Aiz Wallenstein.

Sin embargo, en este mundo donde Bell tuvo gente a la que proteger y a las cuales él le dio prioridad a sus vidas… su estado actual era desastroso y probablemente nada especial por Aiz había nacido.

Sin embargo… este tuvo un encuentro que terminaría siendo importantísimo para el futuro de la Familia Hestia no solo porque el técnicamente causo que la Ángel Nanael recibiese un castigo... sino porque accidentalmente el termino absorbiendo dentro de su alma una pluma de esta imbuida con el poder de los cielos.

¿Tendrá algo como eso algún cambio importante en Bell?

Pues… efectivamente eso tendría ramificaciones que nadie se habría esperado, ni siquiera los Dioses o en el Gekai o en el Tenkai.

NOTAS DEL AUTOR:

¿Cómo están mis queridos lectores?

¡Aquí tenemos otro hermoso cap!

Esta historia realmente es una que quiero ver llegando lejos, tantas ideas… realmente quiero llegar más lejos y mostrar el viaje de la pequeña Familia Hestia legítimamente poco a poco ganando miembros y logrando llegar a la cima. Cada miembro tiene su historia y si bien potencialmente son demasiados personajes… pues lo acepto al final todo va para que cierto conejo obtenga su harem y eventualmente disfrute XD

Bell termino claramente cayendo al estar superado, pero aun así el dio una mejor pelea de lo que uno podría asumir que este normalmente daría… pero bueno al final de todo siento que era el resultado más realista si bien el tenia una oportunidad de ganar.

Es decir, era más probable que el Minotauro terminase en conectar que Bell logrando el conectar su golpe a las cuencas de los ojos… ¡Aunque les digo que de haberlo logrado Bell hubiese subido un nivel mucho más temprano que en el canon y ahí creado un récord histórico al ser un Nivel 2 en solo dos semanas!

Pero al final tome esta ruta lo que nos lleva al siguiente encuentro.

Porque inesperadamente hace su aparición… la Ángel: ¡Nanael!

¿Quiénes se la esperaban en esta etapa?

Espero que no muchos ya que así sé que logre sorprenderlos XD

Mi plan desde el planteamiento inicial de este fic fue siempre el que Bell muriese contra el Minotauro de forma temporal debido a que en este mundo él tendría gente a la que proteger (Sino aquí iba a ser en el Piso 17 contra el Goliath)… y bueno vi en eso la perfecta chance de que Bell y Nanael tuviesen un primer encuentro y que eso desencadenase una serie de eventos que cambiaran mucho el balance de Orario.

También era algo plausible para que Nanael apareciese siendo que en esta historia los Ángeles no pueden dejar el Tenkai como los Dioses lo hacen. En QB Canon ellos pueden por el Torneo del Queen's Blade, pero como eso no ocurre en este mundo… ellos se quedan ahí arriba.

Básicamente digamos que la Familia Hestia podrá ser la única en todo el Gekai en presumir (Especialmente a Loki) de tener a una Ángel entre sus rangos… y no es spoiler ya que queda muy claro para cualquiera que es lo que Nanael hará una vez llegar al Gekai… reunirse con su amiga.

Además, ojito con las Deidades que molestaron a Nanael antes ya que en un Gekai con ellos con los poderes sellados… bueno dulce venganza supongo XD

Y realmente con eso porque al final Nanael es fuerte, demasiado (En el canon ella derroto sola a Melona, Airi y Menace).

Es decir, a pesar de su actitud y ser usada como broma en QB, Nanael de hecho es de las más fuertes al punto que se tuvo que darle un limitador en forma de la Leche Sagrada, asique me pregunto si debería incluirla en mi historia o darle otro limitador… ya saben Nanel es OP por su raza y ella al no ser Diosa no tiene por qué sellar sus poderes.

Bueno ahí veo que hacer con ese detalle.

Y finalmente…

¿Qué efectos tendrá la pluma de Nanael que fue absorbida en el alma Bell?

Pues… para eso habrá que esperar al próximo capitulo, pero de que este se gano la lotería en términos de Hax, lo hizo.

Y además… aquí Aiz hizo su esperada aparición, espero haberle sido fiel al personaje porque es mi primera vez escribiéndola.

Si bien ella mata al Minotauro aquí las circunstancias con Bell son distintas… asique no hay enamoramiento o Liaris Freese en esta historia… pero aquí parece que es Aiz la que comenzó a sentir algo con Bell, algo aun minúsculo pero que puede crecer.

Y no solo eso sino… cierta envidia e inseguridad sobre su cuerpo al ver a Leina XD

Siento que Aiz a pesar de todo sigue siendo una chica adolescente, aun si no es una prioridad para ella quien tiene sus propias cosas en que centrarse, siento que muy dentro de Aiz también existe una chica normal que al ver a otra humana que la supera totalmente en cuerpo… esta sienta envidia pero que no entienda de donde viene.

Y miren…

Solo digamos que con los cuerpazos que tienen las chicas de QB (Menos Ymir y Yuit) esta no será la primera vez que Aiz se sentirá inferior en términos de cuerpo por lo menos comparada con el elenco de QB… y créanme que con solo eso puedo pensar en escenas tanto divertidas como que le den un desarrollo para humanizar más a Aiz.

Básicamente que la 'chica' en Aiz tenga más chance de manifestarse que la estoica guerrera en búsqueda de la venganza.

Y sobre Aiz, bueno aquí Bell por su estado no llego a verla… asique ella no se volverá su 'anhelo dorado' ni tendrá su corazón capturado por Aiz.

A decir verdad, quise que eso ocurriese ya que verán… encuentro eso un cliché bastante persistente aun cuando la situación no lo amerita cuando hay un Bell distinto al del canon.

Es decir, aun en historias donde Bell es más fuete, tiene aliados o gana un poder OP antes de este momento… igual se termina dando el evento donde Aiz derrota al Minotauro y este se siente enamorado de ella solo para incluir ese momento.

Entiendo que es un momento icónico e importante de Danmachi… pero pensé que dadas las diferentes circunstancias de este Bell al tener más miembros terminase por dar lugar a un resultado distinto.

Quise intentarlo y espero que haya sido creíble como mostré mi versión de ese primer encuentro junto con la razón por la que Aiz no se vuelve el objeto de atención de Bell… sin embargo tranquilos, Aiz seguirá siendo un personaje importante en la historia… pero con la dinámica con Bell un tanto invertida.

Aquí fue Bell y su gran voluntad a pesar de su debilidad lo que la maravillo… nunca tanto como el nivel del Bell del canon con Aiz pero por lo menos él se registró en la mente de ella asique para este punto sus acciones y las de su Familia en el futuro se encargaran de que la semilla dentro del corazón de Aiz florezca.

¿Esta creíble esto? Bueno sino al menos intente cambiar un poco la dinámica de Bell y Aiz.

Asique he decidido darle una pequeña vuelta a tal concepto tan utilizado… poniendo a Bell Cranel como el que llamo la atención de Aiz a menor medida, si bien ella no se enamora perdidamente esta se interesa por él lo que ya es un logro considerando la brecha de poderes.

Aquí Bell realmente la impresiona con su determinación a no perder una batalla donde él era totalmente superado… y solo digamos que gracias a Nanael todo lo que lograra Bell y su poder la harán aún más impresionada… quizás algo especial nazca.

En fin, muchas gracias a todos ustedes que siguen esta historia, me alegra saber que aun con lo poco conocidas que son ambas series en lugar de Naruto o DB, todavía hay gente dispuesta a leer lo que escribo. No tengan miedo de leer mis otras historias que he hecho una nueva de RWBY y me gustaría que más gente le prestase atención junto como he dicho a mis otras historias.

Nos vemos en el próximo cap amigos donde las secuelas de esta batalla se mostraran.

PD: Me hubiese gustado darle mas detalle a la pelea de Bell con el Minotauro… pero como seria mas que nada Bell esquivando, creo que quedo bien -_-

Aunque si quedo demasiado corta podría mas tarde añadir una escena mas completa de la pelea.