Saludos a todos los lectores de esta historia,otro sabado de actualización y otro cap para ustedes.Aqui veran que las cosas estaran tomando otro camino con respecto al cannon.Pero sera mejor que lo lean.

En Beacon, ya habían pasado unas horas desde que todo había pasado. Todo el Team RWBY estaba deprimido. No solo por cómo acabó el día, sino cómo es que él se ve así mismo.

De esa manera, ellas mismas parecían perder en cierta manera la esperanza de que pudiera pasar algo. Es más, Ruby había llorado un poco.

En eso, la puerta fue tocada y Weiss de mala gana se puso de pie. La abrió y vio como el Team HVNL llegó, pero sin Issei.

-...¿Pasa algo…?

-¿Saben algo de Issei? – Ren fue al grano.

Eso hizo que todas se alcen de sus camas y se pongan de pie. El equipo entero entró al cuarto de ellas y Weiss cerró la puerta.

-¿No ha regresado? – Yang preguntó con temor. – Pero ya son las 11…

-Eso es justo lo que nos preocupa. – Ren sabe que esto es raro. – Lo estamos llamando a su Scroll, pero nada. No responde.

-Dime que es una mala broma… – Blake se llevó una mano a la boca. – Espero que no…

-¡No pienses eso!

Pyrrha alzó la voz. Ella estaba muy preocupada, porque vio el estado en que Issei salió y su mente no puede evitar pensar que puede que haya hecho una locura. Es más, ella misma… No, no debe pensar eso.

-Hay que llamar a Glynda. – Yang trató de sonar fuerte, pero se oía el miedo en su voz.

-¡Vamos! – Ruby fue la que tomó el mando y fue a la puerta para ir a donde la profesora.

Y en ese instante, el Scroll de Blake sonó. Ella lo miró y abrió los ojos con sorpresa al ver que…

-¡Es Issei! – El grito de la faunus hizo que todos se detengan de golpe. Ella respondió y… – ¡Issei, gracias a cielo! ¿¡Donde…!?

-Jamás imaginé el día que sonarías tan preocupada por alguien de ese modo… Blake.

La voz que oyó del Scroll solo hizo que Blake se quedara helada. No… Era imposible. Sus manos empezaron a temblar.

-¿Blake…? – Yang se acercó a su amiga, quien no parecía reaccionar. – ¿Qué pasa…?

-Dime Blake. ¿Tanto te importa este niño para asustarte tanto al ser yo el que llama de su Scroll? Je, admito que era hábil. Pero… Ya debes intuir que le pudo pasar ahora, ¿No?

-¿¡DÓNDE ESTÁ!? – El grito de ira de Blake suprimió el miedo que le tenía a su antiguo mentor, haciendo que todos la vean con rareza. – ¿¡DONDE ESTÁ ISSEI!? ¡¡¡HABLA ADAM!!!

El jadeo de las que sabían de quién hablaba Blake, solo pasó a lo que era el miedo y la preocupación. ¿¡Cómo es que tenía el Scroll de Issei!?

-Si lo deseas saber, debes de venir al muelle de Vale. Ya debes de saber de cual hablo. Tenemos tanto de qué hablar.

-¡No tenemos nada de qué hablar! ¡Dime dónde está mi Issei!

-¿Con que es eso…? Tsk… se merece estarse muriendo en la calle como un perro. – Blake sintió que le dieron una patada en el estómago. – No tardes. Tienes hasta las 12.

-¿¡A qué te refieres Adam!? ¡¡¡ADAM!!! – Blake vio que la llamada terminó y… – ¡Mierda! ¡Hijo de puta!

-¿¡Que ha pasado Blake!? – Weiss preguntó sintiéndose alterada, dado que no sabe que es lo que tiene así a la faunus.

-¡Adam le hizo algo a Issei! ¡Por eso tiene su Scroll!

El silencio que los envolvió duró varios segundos, hasta que…

-¿¡Qué le hizo ese sujeto a mi hermano!?

-¡¡Lo voy a averiguar!! – Blake puso a un lado a Nora, dado que estaba decidida a hacer esto. Sea una trampa o no…

-¡No puedes ir así como así! – Ren trató de detenerla, pero la faunus abrió la puerta. – ¡Blake!

-¡No me importa! – Ella se giró y se veía que trataba de no llorar. – ¡Nunca me perdonaría si algo le pasó a Issei! ¡No saben la clase de persona que es Adam y lo rencoroso que es! ¡Ha hecho esto para vengarse de mí!

-¿A qué…?

-...Adam es un obsesivo. De seguro siente que el irme fue una traición a él. Y tal vez lo fue, pero ahora ha usado a Issei para esto. Eso no se lo perdonaré jamás. – Blake dejó salir unas lágrimas… – Si algo le pasa… No podría vivir conmigo misma.

Nadie dijo nada, hasta que Ruby avanzó.

-Vamos contigo. Si Issei está en peligro, entonces debemos de estar ahí también.

-¡Es verdad, no lo vamos a dejar solo!

-¡Cuenten conmigo!

El resto del Team RWBY simplemente estaba listo para ayudar al chico que era tan importante para ellas.

-¡Vamos también!

-¡Hay que salvar al líder!

-Parece que no hay otra.

Y el resto del Team HVNL también lo estaba. No dejarán a su líder y mucho menos en las manos de un criminal.

-Ok, primero debemos de avisar que es lo que pasa. Cuando ya estemos lejos de Beacon. – Weiss fue a la salida, con el resto tras ella.

-Pero, ¿Cómo saldremos? Ya no hay más transporte a estas horas. – La pregunta de Pyrrha era buena, pero la heredera sonrió.

-¿Olvidan con quien están? Déjenme hacer una llamada a la estación central.

Sin duda el poder del dinero era increíble. De todos modos, deben de ir por sus armas y luego ir por Issei.

Solo esperan que esté bien.

--

El dolor que sentía era horrible, más si es que lo hacía tener ese deseo de no querer moverse o ir a ningún lado.

Abrir los ojos y verse en lo que sería, un tipo de habitación, lo hizo alzar una ceja.

-¿Dónde…?

-(Ya era hora que despertaras.) - Ddraig le habló con un tono de alivio. – (Tienes suerte de que el disparo que ese sujeto lanzó no fue más al medio, porque el daño que te hizo si que fue severo. Las balas de Dust parecen ser tan fuertes que pueden dañarte si son lanzadas con fuerza suficiente.)

-Ese sujeto… – Issei miró su hombro derecho y estaba vendado. Parece que alguien lo trató. – ¿Quién…?

-(La muda. Te sacó de ahí, parece que le salvarás el cuello la hizo devolver el gesto. No parece ser tan mala, solo muy mal guiada. O la vida que tiene es todo lo que tiene. Pero se veía preocupada por ti.)

Aprecia el sentimiento… Pero quiere estar seguro de que… La cabeza no le retumba.

-(Bueno, nada de esto habría pasado si dejaras de ahogarte en tu miseria. Si estás así, es por tu culpa.)

-¿Qué insinúas…? – Preguntó molesto al dragón, quien soltó un suspiro.

-(Que ya estoy harto con esa patética actitud tuya. Ante mis ojos estás igual que la primera semana aquí en este mundo… No, estás peor ya que realmente pensé que lograrías salir adelante, que tenías lo necesario para superar cualquier reto, pero al parecer me equivoque. No eres más que una pobre cría de mierda compadeciéndote a ti mismo. A mis palabras de mi antiguo ser solo eres basura Issei, no cambiaste nada, ahora todas ellas están en peligro).

-Quizás… – Issei miró el techo. – Es solo que… – Ni fuerzas tenía de querer enfurecerse. – ¿Qué es lo que me queda Ddraig? Al pensar en lo que perdí, solo me di cuenta de que lo que tengo solo es efímero. Se irá un día… Y yo lo sé. Y Dios lo sabía… Lo sabía y me mandó aquí. Me mandó a ser el chivo expiatorio…

-(Puede que sí. Pero eso es lo que no entiendes. Dime, ¿De verdad quieres seguir lamentándote de lo que perderás? Céntrate en lo que tienes ahora. Porque al final, aún tras toda esa oscuridad que son tus pensamientos, no dudaste en salvar a esa niña. Que no es nada tuyo. Eso ya dice mucho de tu carácter.)

-¿Que soy idiota…?

-(De buen corazón.) – Ddraig optó por ser sincero. – (Sé que puede que no tengas nada. Es lo mismo conmigo. No tenemos nada… Pero sabes, ¿No basta con que sepas que al menos no te dejare? Es como dijiste, juntos hasta el final. Y será así hasta el día en que mueras. Porque sé que después de ti, no habrá otro Sekiryuutei… Eres el último. Por ello, deja de sentir pena por ti. Deja la miseria que sientes y levántate. Solo así estarás listo para cuando sea el momento de… Dejar ir la mentira que has creado.)

Issei quiso ser fuerte. No llorar. Pero era verdad… ¿Qué estaba haciendo?

Solo bastó con pensar en lo que perdió. En lo que pudo ser… Que se olvidó que eso ya es un imposible. Que aunque al final, se deba de quedar solo… Él eligió venir. Él eligió luchar… Y si al final es odiado, es porque es parte de sus acciones.

-...¿Qué estoy haciendo…? A veces detesto ser tan llorón…

-(Si, pero es parte de quien eres. Y ahí viene la niña esa…)

Y como Ddraig dijo, Neo llegó con unos vendajes. Pero se sorprendió al verlo despierto. Se le acercó y se sentó al lado de la cama, a la vez que le mostraba un mensaje en su Scroll.

-"Sanas rápido. Es una suerte, te estabas desangrando. Pero me pareció raro que tu Aura no te haya salvado."

-No tengo Aura por… Situaciones especiales. – Ella alzó una ceja. Se encogió de hombros y empezó a cortar el vendaje para poder tratar la herida. – ¿Cuanto…?

-"4 horas. Ya es casi medianoche." – Issei maldijo por lo bajo. – "No podía llevarte a un hospital. Preguntarían por mí, y no me puedo arriesgar. Así que te traje a mi apartamento. Siéntete honrado."

-Lo haría… Si no me doliera todo. – Miró a Neo trabajar. Y noto que… Vaya, son grandes para su altura. Unos 83…

Sintió la palma de Neo dándole un golpe en la frente, ella lo miró como diciendo que no sea pervertido. Vaya, fue descubierto. Pero a ella pareció darle igual.

-"No eres el primero en hacerlo. Sin contar que no soy una puritana para que eso me moleste niño. Soy mayor que tú, no lo olvides."

-Ya hablas como una anciana… ¡OW! – Se quejó al sentir el ardor por el alcohol. – ¡Era una broma! – Ella le sacó el dedo medio y siguió en lo suyo. – No debes de hacer esto…

-"Me salvaste. Y no debías de hacerlo. ¿Por qué…?"

-Simplemente mi cuerpo se mueve por su cuenta. Es mi naturaleza ayudar a quien necesite una mano, además no es mi estilo dejar que las chicas lindas salgan heridas. Menos a manos de un bastardo como ese tipo. – Issei solo se encogió de hombros, cosa que fue mala idea debido a que aún estaba herido… Arg, estúpida fuerza del hábito.

Issei no notó el ligero sonrojo en la cara de Neo, dado que él estaba viendo el techo. La chica siguió tratando la herida hasta que…

-"Eres un tipo raro. Eres de los que mueren primero. ¿Lo sabías?" – Ella sacó una aguja con hilo, dado que deberá de cerrar una parte a la antigua. Parece que su regeneración tiene límites.

-Quizás… Me hice a la idea que no viviré mucho.

-"¿No tienes gente que se preocupe por ti?"

-...Los tengo, pero se que tarde o temprano me separaré de ellos y no hay nada que pueda hacer para evitarlo.

-"¿Y por qué dices eso? ¿Estás seguro que eso va a pasar?" – Neo oyó un quejido al introducir la aguja, pero siguió con lo suyo. – "Me parece raro que lo digas así. Como si te hubieras rendido a esa idea."

-Quizás porque es así. Solo soy… Alguien temporal en sus vidas.

-"No hay nada temporal en ser parte de la vida de otros." – Neo terminó su tratamiento. – "La verdad me parece tonto que no lo veas."

-¿Qué quieres decir con eso?

-"Para bien o para mal, siempre seremos parte de la vida de alguien. Yo lo sé… Puede que Roman no sea la mejor persona, pero es lo mejor que halle dado la vida que tenía. Y aun sabiendo como es, sé que sin él mi vida solo habría sido una miseria. Por ello, aun sabiendo sus errores, no lo puedo abandonar. ¿No crees que así es la vida de la gente? Hasta los que mueren no nos dejan del todo."

Issei abrió los ojos con sorpresa. No lo había visto de esa manera. Es más… Ni lo había visto. Él…

-...¿Lo crees de verdad…?

-"Si una criminal como yo lo puede ver, ¿Como un bonachón como tú no puede verlo?" – Neo le dio una sonrisa burlona a la vez que cerraba la herida y asentía a su trabajo. La empezó a vendar, para poder terminar. – "Lo que creo es que te estás rindiendo antes de tiempo. Y no va contigo por lo que Roman me dijo y lo que vi."

Issei suavizó la mirada. Él…

-...Quizás tengas razón…

-"Obvio que la tengo. A ver, levántate." – Neo lo hizo sentarse, a la vez que le daba una palmada en la cabeza. – "¡Listo! Como nuevo… Casi."

Issei movió el hombro y aunque le dolía, al menos lo puede mover. Es… Perfecto. Muy bien.

-Gracias Neo.

-"Estamos a mano. Solo no olvides tu parte y yo haré la mía para ayudarte a detener a esa loca."

-Es un trato. Tch, pensar que ese tipo estaría aquí.

-"Adam Taurus ha estado Vale meses. Es parte de un plan de esa mujer, por ello es que White Fang nos ha estado ayudando en nuestros atracos. Pero desde que pasó lo del muelle, como que se han asustado por lo que hiciste."

-Eso explica muchas cosas y también… ¿En serio tanto fue el impacto que deje en ellos? – Issei no creía que había asustado a toda una célula de terroristas sabe que da miedo pero, ¿A ese punto?

Neo lo miró como si fuera idiota. Le dio un zape por preguntar eso.

-¡Duele! ¿¡Y eso por qué!?

-"Por idiota. Obvio que darías miedo. Nadie hace lo que tú y no deja ningún impacto. Si no fuera porque sé que es absurdo, diría que eres un Faunus Dragón." – Lo de Dragón no estaba lejos… – "Pero si, y a Adam no le gustó. Ha tratado de saber de ti por semanas. Y ahora te halló. Tienes suerte que logramos huir."

-...Le haré pagar por esto… – Issei tomó aire. – Bueno, solo necesito llamar y decir que estoy bien… ¿Has visto mi Scroll?

-"¿Cuál?"

-¿Como que cual….? ¡El que tenía conmigo!

-"No tenías uno." – Issei abrió la boca sin creerlo. – "Quizás se te cayó por el ataque de Adam."

-¿¡Qué!? ¡¡¡NO!!! ¡Glynda me matará! – Ahora si estaba asustado. – ¡Debo de hallarlo…! ¡GAH! – Neo lo mandó a la cama de nuevo de un jalón de su cabello.

-"No te espantes. Deja que vea… Dime tu número y lo puedo rastrear. Soy buena hacker."

-No sé cómo sentirme al saber eso…

-"Tranquilo, no es como si me interese el porno que debes de tener ahí." – Issei la miró con rabia. – "Ya dime…"

Contra su mejor juicio, le dio su número. Ella asintió y empezó su búsqueda, no le tomó mucho ya que…

-"...Tu Scroll está en el muelle de Vale…"

-¿¡Qué hace ahí!?

-"Deja que vea. Me parece raro… Más si lo perdiste en la pelea con Adam. Eso no me gusta." – Ella logró tener acceso a lo que era el registro de llamadas y… – "Ok, hay un problema."

Issei vio lo que Neo le mostró y eso no era bueno.

-...Hay que ir hacia allá. Ahora.

Neo soltó un suspiro. Odiaba pensar que este chico era interesante y que tenían un trato. Y que la mirada seria no le quedaba nada mal.

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De vuelta en Beacon, Ozpin se mostraba algo inquieto en su silla. Ya hace lleva un rato tratando de comunicarse con Issei para decirle que su sorpresa a sus compañeros se llevará a cabo, pero por alguna razón no contesta. Tiene un mal presentimiento.

En eso, el sonido del elevador abriéndose llamó su atención y al mirar pudo ver cómo Glynda salía de este con una expresión preocupada. Eso no era buena señal.

-¿Alguna pista sobre el paradero del joven Hyoudou?

-Me temo que no Ozpin, pero creo que algo muy malo ha debido pasar.

-¿Qué quieres decir? – El director se levantó preocupado.

-Al parecer el Team RWBY y el resto del Team HVNL también han desaparecido. Fui a sus cuartos, pero no había nadie.

Ok, eso sí que es malo. Pero tampoco han podido ir muy lejos dado que a esta hora ya no pasa ningún Aero Bus. Aún así…

-Trate de contactar con la Srta. Rose, a ver si ella me puede explicarnos lo que esta pasando.

-Ya estoy en… – Glynda se detuvo al ver cómo le llegaba una llamada entrante de la mencionada chica. Qué sincronización. – Estaba a punto de llamarla Srta. Rose. ¿Ha sucedido algo?

-¡Profesora Glynda, algo malo le a pasado a Issei!

-¿Qué quiere decir? ¿Donde se encuentran en este momento – Glynda estaba comenzando a preocuparse en gran medida, cosa que fue notada por Ozpin quien se levantó de su asiento atento a las reacciones de su colega.

-¡Adam Taurus lo tiene como rehen en los muelles, nos dirigimos en este momento al sitio! – Esas palabras fueron como un balde de agua fría para la profesora rubia.

-¿¡En qué estaban pensando en irse por su cuenta!? – Glynda gritó con una mezcla de ira y preocupación. – ¡No se muevan de su ubicación, enviaremos refuerzos lo más pronto posible!

-¡Lo siento profesora Goodwich, no tenemos tiempo que perder! ¡Issei nos necesita! – En ese momento la comunicación se cortó.

-¡¡Srta.Rose responda, Srta.Rose!! ¡Mierda! – La mujer lanzó al suelo su Scroll en un ataque de furia aportándole poco que se haya dañado.

-¿Que sucede Glynda? – Ozpin sabía que si ella reaccionaba de esa manera es por qué algo muy malo está pasando.

-¡Tenemos que mandar a todo cazador disponible, Issei está en peligro, Adam Taurus lo tiene en los muelles!

Ozpin solo pudo maldecir por lo bajo. Si eso es cierto, están en una situación de lo más peligrosa. Pensar que un sujeto tan peligroso estaría en el reino… Al parecer deberán aumentar la seguridad, pero por el momento necesitan salvar a Issei.

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El general James Ironwood era conocido como un hombre de carácter y de gran liderazgo por algo es que estaba al frente del mayor ejército de Remnant pero también era que pecaba de querer tener el mayor control posible y ese defecto aumento cuando Ozpin lo invitó a su círculo cercano y fue consciente de la verdad tras los Grimms eso lo llevo buscar sin descanso una forma de ganar esta guerra secreta.

En este momento estaba viendo nuevamente la grabación que sus alumnos le proporcionaron y mientras más la observaba más crecía su intriga y, por qué no decirlo, miedo por lo que observaba. Un poder así de grande no debería ser siquiera posible, pero aquí estaba. El ver sus movimientos indicaba que apenas se estaba esforzando, podía notar cómo evitaba hacer movimientos de más.

También tenía que hacer mención de ese extraño guantelete. Era la primera vez que miraba algo como eso y fue capaz de notar que emitía un comando cada 10 segundo y con cada comando el muchacho parecía hacerse más fuerte. Pensar que algo así es real… Si tan solo pudiera tenerlo en sus manos, podría intentar replicarlo y de esa manera armar un ejército entero, con eso no tiene dudas de que al fin podría ponerle un alto a Salem.

Pero James fue sacado de sus pensamientos cuando alguien entró a toda prisa en su oficina improvisada. Era un hombre con una especie de traje mecánico.

-¡General, traigo noticias!

-¿De qué se trata? – El hombre se giró para ver a su subordinado.

-El sujeto al que me mandó espiar fue atacado.

-¿Atacado por quien?

-Por Adam Taurus, señor. – Pudo ver cómo el general lo vio con asombro ante tal declaración. – Llegué justo cuando parecía haber empezado la pelea. Salió herido por una herida de bala, pero logró escapar gracias a la ayuda de la criminal de Vale conocida como Neopolitan.

-¿La mano derecha de Roman Torchwick? Eso es extraño. El chico se interpuso en sus planes… ¿Algo más?

-Los seguí hasta el apartamento donde al parecer ella vive. Se encargó de curar al muchacho y después se fueron. Por lo que pude oír, se dirigen a los muelles.

-'Los muelles…', entiendo. Llama a Penny y reúne a 30 Atlesian Knight, partimos a los muelles de inmediato. – El ordenó mientras comprobaba si sus pistolas estaban cargadas.

-¡A sus órdenes mi general!

El espía salió apresuradamente del lugar, dejando solo a James con sus ideas. El mayor criminal de White Fang y ese mocoso altanero en el mismo lugar. Sin duda era un gran golpe de suerte, ya que ahora… Podrá capturarlos a ambos.

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De vuelta con el Team RWBY y parte del HVNL, todos ellos hace poco se bajaron de una pequeña nave de transporte que la heredera había solicitado para que los llevará a Vale y ahora se dirigían a los muelles donde esperaba Adam.

-La profesora Goodwich no sonaba muy contenta. – Decía Ruby quién estaba cargando balas de Dust en Crecent Rose. No tiene tiempo que perder.

-¡Ya nos preocuparemos por eso después, ahora debemos salvar a nuestro Líder intrépido! – Nora también cargaba granadas en Magnhild.

-Blake, tú conoces a ese tipo, ¿Alguna sugerencia? – Ren trataba de mantenerse lo más sereno posible, hasta estaba usando su Semblanza, pero no era muy efectivo en este momento.

La Faunus del grupo se mantenía callada tratando de encontrar la mejor manera de explicar de lo que era capaz su antiguo mentor.

-Solo una. Si vamos a enfrentarlo, debemos matarlo de una. Sus habilidades son de temer y su Semblanza es incluso peor, ya que puede devolver el daño que recibe tanto el mismo como las de sus armas en una onda de corte.

Nadie dijo nada. Sabían que en este trabajo tarde o temprano tendrían que hacerse a la idea de quitar una vida, pero pensaron que tendrían años para prepararse. El oír a Blake diciendo que tendrán que ir a matar fue un duro golpe pero…

-Por mi bien. Si ese sujeto le hizo algo a Issei, juro que yo misma le aplastaré la cabeza a golpes. – Yang no bromeaba. Sus ojos rojos brillando con intensidad eran una clara señal de ello.

-Estoy de acuerdo. Ese tipo se arrepentirá de haberle tocado un solo pelo a mi futuro esposo. – Weiss se aseguraba de que las recámaras de Dust de Myrtenaster estaban a tope mientras decía eso.

-Si tan solo no lo hubiéramos dejado solo… ¡Maldición! – Pyrrha se reprendió a sí misma. Si bien Issei no parecía estar en el mejor de los estados cuando se marchó, era su deber como compañera no haberlo dejado solo. Y ahora él se encontraba en un grave peligro.

-No es momento de pensar en eso. Debemos de pensar en cómo enfrentarnos a ese tipo para tener una oportunidad de ganar.

Por más que Blake le diera vueltas al asunto no podía entenderlo. Si bien Adam era peligroso, su fuerza radicaba en su habilidad y uso de Semblanza, pero incluso eso no debería ser bastante para hacer algo en contra de Issei. Él, con su poder puro y múltiples habilidades poderosas, debería poder hacer algo contra Adam… Algo aquí no le cuadra.

-'Piensa en eso después, ahora solo importa salvar a issei. Si lo lastimaste, juro que acabaré contigo Adam, aún si es lo último que hago en mi vida'. – Blake murmuró para ella misma, no estaba dispuesta a dejar al chico que en poco tiempo y sin intentarlo se había ganado su corazón.

Y así el grupo de 7 adolescentes llegaron a los muelles, todo estaba en calma y eso solo aumentaba sus nervios siguieron caminando hasta que escucharon unos pasos y fue ahí cuando lo vieron. Era tal cómo Blake lo describió.

-Veo que no viniste sola. Y para colmo vienes con… Humanos. – La voz del faunus destilaba odio puro cuando hablaba de los humanos. Ni se dignaba a disimular en lo más mínimo.

-¡¡¡ADAM!!! – Blake dio un paso al frente, mostrando sus colmillos por la rabia. – ¿¡¿DÓNDE ESTÁ ISSEI?!?

-Vaya, cuánto cariño muestras por ese tipo. Me siento herido.

-¡¡Vete a la mierda Adam, no estoy aquí para jugar al exnovio tóxico contigo!!

-En lo que a mí respecta mi amor, nunca terminamos como tal…

¡Bang!

El faunus sintió una bala pasar rozando su cara. Su vista se posó rápidamente en la perpetradora del ataque, quien era la chica pelirroja.

-Issei. ¿Dónde está? – Pyrrha cargó su arma tras decir eso. – Habla.

-...¿Qué les hace pensar que lo tengo aquí? La última vez que lo vi se estaba desangrado de un disparo bajo la lluvia.

Esas palabras les heló la sangre a todos por un momento, para luego sentir una enorme ira dirigida al sujeto frente a ellos que se mantenía imperturbable, pero notaban que disfrutaba ver su sufrimiento.

-¡¿¡QUE!?! – Yang parecía una enorme antorcha en ese momento. – ¡¡¡BASTARDO!!!

-No era más que un idiota ingenuo… Recibir un disparo dirigido a alguien y que de paso es su enemigo. Sólo un imbécil haría eso.

Eso sorprendió a los adolecente pero definitivamente sonaba a Issei él siempre se preocupa más por los que lo rodean que por el mismo.

-Un imbécil no. Lo haría alguien que, a pesar de querer hacer un cambio, aún ve algo de esperanza en las personas. Incluso en los criminales como los de White Fang. Pero tú… – Ren habló, dejando atrás su usual actitud calmada y mostraba su enojo. – Tú no tendrás esa oportunidad.

-El fue el primero en escucharme sin juzgarme, no le importo saber que fui parte de White Fang. Además me ayudó a darme cuenta que nunca te importé Adam, solo me usaste para que te ayudará en tu cruzada egoísta. Comparado con él, no eres más que un monstruo, una basura que debe de ser detenida.

Fueron las palabras de Blake que no parecía intimidada ante la presencia de su antiguo mentor. Este por su lado apretó los puños ante lo dicho por la que lo traicionó.

-...Veo que sigues con esas tontas ilusiones idealistas mi amor, pero el mundo no es así. Lo único que importa es hacer lo que sea necesario para sobrevivir. – Todos se pusieron en guardia al ver como Adam desenfundó su espada, ese color rojo le daba un aire intimidante. – Al parecer tendré que recordarte esa verdad y qué mejor manera que acabando con esos humanos que te acompañan, en especial con esa Schnee.

Ante esa declaración Adam salió disparado con la única intención de partir a la mitad a la heredera, pero la espartana reaccionó a tiempo deteniendo la espada con su escudo… Blake no exageraba, este tipo era fuerte.

-Sobre mi cadáver miserable.

La espartana repelió a Adam mientras ella pasaba a la ofensiva, intentando acertar un corte con su espada que su rival esquivó por los pelos para inmediatamente esquivar una granada que fue disparada por la bombardera del Team HVNL

-¡¡Traga Dust hijo de puta!!

Nora lanzó una andanada de granadas al supuesto héroe de White Fang, pero este esquivaba el bombardeo con gran agilidad. Cuando dio un salto, fue recibido por un puñetazo cortesía de Yang, pero lo esquivo y con la funda de su espada le dio un disparo que fue repelido por Ruby, que estaba junto a Nora. Tenía a Crecent Rose en su modo de rifle.

Estaba apunto de volver a disparar cuando tuvo que esquivar un corte directo a su cuello y al ver de quién se trataba dejó salir un suspiro de decepción.

-¿Con que así son las cosas mi amor?

-Solo una persona tiene ese derecho ahora y ese no eres tú.

Iba a contestar, pero un par de cortes en su espalda lo hicieron tomar distancia. Pudo ver cómo Ren estaba en posición de combate, notando que tenía un estilo similar al de Blake. Así que un ninja.

Lo que no notaron es que los cuernos de Adam brillaron levemente. El solo dio una pequeña sonrisa, al parecer podrá entretenerse un rato antes de acabar con ellos. Dejará a Blake al final para que vea el precio de su traición.

Ambos vieron como una ráfaga de energía en forma de corte iba hacia ellos, lo que los hizo esquivar el ataque por los pelos. Así que esa era su Semblanza… Curiosamente era similar a la de Yang, solo que puede más fuerte por lo que Blake dijo.

-¡Weiss, probemos eso! – Ruby miró a su amiga quien asintió y procedió a crear un gran Gliffos imbuido con Dust de hielo para que Ruby inmediatamente disparará varias rondas de su arma, haciendo que las balas se recubrieron de hielo para ganar fuerza.

Adam solo se quedó en su lugar y en un movimiento impresionante de velocidad corto cada una de las balas que les dispararon y no parecía cansado en lo más mínimo.

-Un buen truco… Pero no será suficiente.

-Para eso estoy yo aquí.

Adam bloqueo un corte descendente de la pelirroja, el cual fue seguido de un golpe con su escudo y finalizando con una patada con giro que lo hizo retroceder.

Aprovechado que Pyrrha lo mantenía ocupado Ruby, quién había cambiado su arma a su modo de guadaña, fue a ayudar a su amiga utilizando su semblanza. Pero Adam lograba esquivar sus ataques mientras se defendía de los embates de la espartana. Este intento de dispararle a Ruby, pero de la nada está apunto hacia arriba haciendo que el tiro fallará. ¿Qué demonios? Fue ahí que vio como un aura grisácea cubría una de las manos de la peliroja… Con que es eso.

-Una semblanza interesante, pero no te servirá de nada.

Justo estaba por volver a atacar cuando un grito llamó la atención y era la otra pelirroja que intentaba acertarle un golpe con un martillo. El solo dio un salto para atrás esquivando el impacto.

Tch, son más molesto de lo que espero. Ya va siendo hora de acabar con ellos. Su atención se volvió a enfocar en esa pelirroja del martillo fue a su dirección y justo cuando estaba por darle un corte en el cuello, se encontró con una especie de muro blanco que bloqueo el arma.

Todos vieron con sorpresa como un enorme brazo de armadura con una igual de enorme espada había defendido a Nora. Pero lo más increíble es que el brazo salía de uno de los Gliffos de Weiss.

-Así que está es la legendaria Semblanza de la familia Schnee.

-Aún… No viste nada… – Weiss se veía algo cansada. Parece que esa invocación requería mucha energía. – ¡Yang!

Dando un grito, la rubia activo su propia Semblanza y le dejó ir un puñetazo justo en medio del estómago que lo mandó a varios metros de distancia. La rubia estaba jadeando, ese tenía que ser el puñetazo más grande que ha dado en su vida.

-¡¡Última oportunidad bastardo!! ¡¡Dinos dónde está nuestro amigo y tal vez te dejemos algún hueso intacto!!

-Hablan mucho. Si realmente creen poder derrotarme, vengan y demuestrenlo..

-¡¡Con gusto!!

Nora y Ruby se lanzaron en contra del faunus, pero justo cuando estaban por impactar sus ataques Adam activo su Semblanza y ejecutó un corte circular que no sólo hizo retroceder a las chicas, sino que además partió sus armas en dos. Eso dejó sorprendidas a ambas.

-¿Lo entienden ahora? Ustedes no son nada frente a mí. Admito que me han entretenido más de lo que esperaba, pero ninguno me ha hecho esforzarme en serio. Deberías saberlo mejor que nadie mi amor.

-Ya te lo dije cabrón… – Blake cambió su arma a modo de pistola. – ¡No tienes ningún derecho a llamarme así!!

Adam bloqueo todas las balas sin esfuerzo y de paso disparó a su costado, dándole a Ren quien trató de volver a atacarle por la espalda. Ese solo disparo rompió el Aura del ninja del Team HVNL sorprendiendo a todos.

-¡¡Renny!!

-¡Maldito! – Pyrrha se lanzó contra su enemigo lanzando una estocada, pero esta fue repelida por la funda del faunus.

-¡¡Te tengo!!

Yang se lanzó contra Adam, pero este lanzó un disparo que usó para girar sobre su propio eje y le lanzó una patada a la rubia que le sacó el aire y un corte a la pelirroja, la cual vio como su escudo se rajó hasta la mitad.

Continuando con su ataque esta vez fue directo a Weiss quien volvió a usar ese brazo de armadura para resistir el golpe, pero se notaba como este comienza a desaparecer poco a poco hasta que se esfumó como si nunca hubiera estado ahí. Una vez estuvo cerca de la peliblanca, Adam conectó una patada circular en su rostro, que terminó con la poca Aura que le quedaba a la heredera.

-Tengo que admitir que eso fue… Satisfactorio.

-¿No me digas?

Blake apareció al lado del faunus y le conectó tres cortes en el pecho, pero esto no fue suficiente para amedrentar a su enemigo que le disparó con la funda de su espada, pero Blake logró esquivar los disparos usando los clones de su Semblanza. Adam no le dio ni un segundo de descanso y fue contra ella mientras disparaba lo que le quedaba de munición en la funda, lo cual fue más que suficiente para que pudiera estar cerca de la faunus quien recibió un corte en su abdomen que terminó de quebrar su Aura y le dejaba una herida en dicha zona.

-¡Grag! Desgraciado…

-Me parte el corazón tener que hacer esto mi amor… Pero no me das muchas opciones.

Adam estaba apunto de dar el golpe de gracia a Blake. Los que aún podían seguir luchando vieron eso con horror ya que sabían que no llegarían a tiempo. La pelinegra solo cerró los ojos aceptando su destino, con el único arrepentimiento de no haber visto una última vez a cierto castaño.

-'Adios amigos… Adiós Issei'. – Se despidió con un susurro mientras dejaba ir una lágrima.Pero…

El sonido del metal chocando con el metal, junto a la sensación de estar siendo abrazada por alguien la desconcertó. Cuando abrió los ojos, pudo ver cierto guantelete rojo bloqueando la espada del faunus.

-No esperaba verte de nuevo… Issei Hyoudou.

-Je, también me alegro de verte… Adam Taurus. – Contestó el castaño mientras abrazaba con su brazo libre a la pelinegra, quien lo vio con lágrimas de felicidad en sus ojos y una sonrisa.

-¡Issei! – Ruby sonrió al ver a su amigo, así como el resto. Pero notó que tenía solo la gabardina que usa y se veía un vendaje en la zona del hombro.

Adam no creía que el niño siguiera con vida. Es más, detuvo su ataque. Se nota que es fuerte.

-Issei… Yo… – Blake le quiso decir algo, pero él negó con la cabeza.

-Lo que él haga Blake, no es tu culpa. Todo… Es él. – Issei le sonrió a la chica, quien trataba de no llorar. – Deja que me haga cargo…

Él la dejó en su lugar, a la vez que se ponía de pie. Sacaba lo que parecía ser una inyección automática y se clavó en el hombro derecho, siseo del dolor, a la vez que el líquido ingresaba a su sistema.

-(La muda dijo que eso solo durara 5 minutos. Espero que sepas aprovecharlos.)

Lo hará. Caminó hacia donde estaba Adam y…

-...No debe de ser así. – Trató de razonar con él. – El camino que sigues, solo te llevará a la ruina. Lo debes de saber.

-Hmph. ¿Y? – Adam parecía darle igual. – Tú no sabes lo que he pasado. No sabes lo que he vivido. Si crees que tus palabras me harán cambiar… Eres ingenuo.

-...¿Y crees que ahogarte en la miseria de lo que fue tu pasado cambiará el mundo? – Issei sintió que esas palabras se las dijo a él mismo. – No es tarde. ¡Aún puedes huir del camino que estás recorriendo! ¡Piensa en el porque empezaste esto!

Adam afilo la mirada y no sabe por qué, pero se llevó la mano a la máscara y se la quitó. Eso dejó ver algo que Issei no esperó y nadie más. Weiss se vio horrorizada de eso…

Una marca en su ojo derecho, como un animal de granja marcado. Solo que este caso fue por el SDC, la compañía de su familia.

-...Lo hago. Para que nadie viva lo mismo que yo. Y para ello, hay que hacer que los humanos entiendan su lugar. – Se puso de nuevo la máscara e Issei soltó un suspiro.

-(Está metido en esto. No le importa nada más que su cruzada. Se ha dejado corromper por su dolor y se ha ahogado en él. Me recuerda mucho a tus predecesores. No tiene salida…) – A las palabras de Ddraig, Issei alzó el brazo derecho y el segundo guante apareció.

Adam sonrió, al parecer el chico estaba listo. Y él también…

-Si algo me han enseñado Adam… Es que el dolor personal te vuelve un monstruo. Puedo ser uno biológico… ¡Pero me niego a que mi alma sea el de uno!

[¡Boost!]

Al comando, Adam fue contra Issei y este alzó el puño derecho. Espada y puño chocaron creando una onda de choque que obligó a los demás a cubrirse.

Yang de inmediato fue con Blake y la llevó con ella, a la vez que trataba de evitar que la herida sangre más. Pero su vista se posó en la pelea, notándose que Adam tenía la ventaja.

Y era de esperarse, la habilidad del Faunus Toro eran legendarias para muchos.

Sus movimientos eran precisos e iban a puntos vitales. Issei solo estaba en la defensa, como esperando que el guante le dé el poder que necesita para acabar esto rápido.

Issei esquivó un corte que fue a su cabeza, para girar y darle una patada al faunus, quien se cubrió. Y de inmediato, se pudo ver como su Semblanza se cargó en gran medida.

-¡Me impresionas! ¡Eres fuerte para darme mi Semblanza casi al instante!

Issei maldijo todo. No sabe la Semblanza de este sujeto, pero no debe de ser buena. Si usa el daño que toma, debe de ser poderosa. Tiene que…

Concentró energía en ambas manos y simplemente se lanzó al ataque. Sus golpes dieron al aire, pero la onda de estos siguió hacia el almacén detrás de Adam, creando un hoyo en el muro. El faunus sudó frío al ver eso. Este chico…

Giró sobre su eje y le dio una patada a Issei en el hombro derecho, quien por la inyección no sintió el dolor. Pero la sangre salió a chorros… ¡Mierda, le abrió la herida!

-¡NO! – Weiss se horrorizó al ver la sangre salir de la herida de Issei y como este se la tomó en un intento de detener el sangrado.

-¿Por qué no está sanandose como antes? – Nora no ocultaba su preocupación, pero nadie tenía la respuesta. Solo uno…

-(El factor curativo va en relación al estado de salud de tu sistema. Solo aceleras el proceso natural. Si estás cansado o no estás bien alimentado, es natural que no sanes. Ya se trató la herida antes y eso te debilitó por dentro. Creí haberte dicho eso.)

-(¡Ahora no Ddraig!)

[¡Boost!]

La repotenciación le dio calma… Pero la herida seguía sangrando. Rayos… Estaba muy mal. ¿Cómo se le ocurrió esta locura?

Miró de reojo a sus amigos y ellos estaban mal… Pero ellos tienen Aura, eso lo calma. Él no. Tiene que tener cuidado.

-Pensé que eras más fuerte. Parece que Roman exageraba.

-Bueno… No eres tú el que recibió una bala en el hombro y casi se muere desangrado… – Issei sonrió con rabia.

-Hmph. Salvar a una chica que se nota es tu enemiga… Esa es tu culpa.

-Lo sé. Pero ahí yace la diferencia Adam. ¿Darías la vida por otros? ¿Estás dispuesto a poner tu cuerpo por alguien más? ¿Que no seas tú?

El faunus lo miró como si estuviera loco. ¿Arriesgar él su vida por otros? Nunca. Porque sólo él tiene lo que se necesita para cambiar el destino de los faunus.

-Mi vida, vale mucho. Solo yo puedo cambiar el destino de los faunus.

-Jejeje. Y luego te preguntas porque Blake se fue. Se nota que eres egoísta. El tan llamado "Héroe de White Fang". Eres llamado así, solo por la gente que has matado. Pero no tienes lo que hace a uno un héroe.

-¿Y es…? – Adam lo apuntó con su espada, a la vez que Issei soltaba un suspiro.

-Empatía. – Su voz sonó como si algo hubiera hecho eco y entendiera. – No entiendes a la gente. No tratas de ver que tus acciones causan más mal que bien. Estás tan centrado en tu mundo… En ser el Héroe de la historia de tu raza, que has perdido la visión. Y ahora lo entiendo…

Issei tomó el vendaje y se lo arrancó, mostrando la herida y como está sangraba. La tocó con el guante izquierdo, viendo como la sangre bañaba el guantelete.

-Que pase lo que pase… Lo que yo decida, es porque yo lo elegí. Incluso lo malo. ¡No seré más ciego a la verdad! – Apretó la herida con fuerza, provocando que la sangre saliera más. – ¡No voy a caer en ese ciclo de ahogarme en mis penas y creer que soy algo más! ¡No soy un héroe como tú eres llamado! ¡Pero puedo ser mejor persona! ¡Aunque para otros, sea un monstruo!

[¡Transfer!]

El nuevo comando hizo sonido y se vio que de alguna manera la herida empezó a sanar, era como si estuviera siendo forzada a ser cerrada.

-(¿¡Qué haces!? ¡Te dije que eso solo lo uses de emergencia, hacer ello consume los nutrientes en tu cuerpo! ¡Puede que acabes muy mal!)

-(Lo sé… Pero debo ganar. Debo mostrarme a mí mismo, que no caeré como este sujeto.)

-(...Solo no mueras.)

Adam vio la herida casi cerrada, pero se notaba que fue algo forzado. Se veía una cicatriz aún sangrante.

-En verdad estás loco.

-Me lo dicen seguido. Pero, ¿Seguimos?

Adam no perdió el tiempo. Se lanzó hacia Issei, quien vio como su objetivo cambió. ¡Está atacando las piernas! ¡Eso no lo esperó!

Dio un salto y esquivó la onda de corte que le rozó la pierna derecha, pero si le hizo un ligero corte. ¡Eso no es bueno!

Lanzó una patada, pero el Faunus se cubrió. Eso llevó que este la tome y con una llave lance a Issei a un contenedor, el impacto bastó para que su espalda cruja. Pero se puso de pie de nuevo, solo para esquivar otro tajo a la pierna.

-¿¡En serio harás eso ahora!?

-No hay manera limpia de ganar en una batalla a muerte. – Tiene razón y eso no le gusta. – Solo acepta tu destino y muere.

-¡No gracias! ¡Eso de morirse no es sano, además que duele mucho!

Se lanzó a un lado, pero el bastardo siguió con su estrategia. Demonios, eso es… ¿¡Que puede hacer!? ¡Necesita una manera de proteger sus piernas!

No notó el brillo del Boosted Gear, la gema pareció reaccionar a lo que estaba en su mente. Que cuando el siguiente corte fue a sus piernas, e Issei supo que esquivarlo era imposible, es que el Boosted Gear soltó un brillo.

Fue rápido, instantáneo. Pero el clank fue el último sonido que Adam esperó, así como la resistencia. Lo que él esperó fue atravesar la pierna de ese mocoso, pero vio algo que lo dejó sin habla, así como a los demás.

En las piernas de Issei habían protecciones, que parecían ser parte de una armadura. Lo peculiar de estas, era que la parte de los pies parecía tener como garras. Como si emulara un animal y el rojo era como el guantelete.

-¿¡Qué demo-!? – Pero la patada que Issei le dio lo mandó hacia atrás. – ¡Bastardo! ¿¡Cómo es posible que…!?

Alzó la vista y aunque sintió su Semblanza cargada, su ira no lo dejó estar en calma.

Issei solo miró lo que estaba en sus piernas. Eso era nuevo… ¿Qué era lo que le estaba haciendo el Boosted Gear? Le dio igual. Debe de acabar esto ya… Siente que su resistencia se estaba acabando. Con el segundo guantelete era cansado en el estado en que estaba, pero con las piernas siente que es peor… Ya estaba viendo borroso…

Alzó las manos y se puso en guardia, sin decir nada. Solo tiene una oportunidad… Siente que se va a odiar por esto. Y que será resondrado… Si sobrevive.

Adam cargó su Semblanza, todo su ser parecía una masa de negatividad. E Issei ya casi estaba inconsciente… Pero su cuerpo estaba listo. Era como respirar, ¿Estaba ya acostumbrado a la lucha a muerte que su cuerpo se preparó para lo que se viene?

Adam lanzó una onda de corte hacia Issei, quien usó una mano para poder bloquear el ataque. Las armaduras en las piernas sirvieron como un punto de soporte, dado que casi lo hace retroceder. Pero la sorpresa de que logró resistir, nadie la ocultó. Sobre todo Blake, quien había visto a gente ser partida a la mitad por la Semblanza de Adam aún con el aura protegiendolos.

Pero el faunus, aun en su rabia, no se amedrentó. Tenía un as bajo la manga por si eso pasaba. Usando la misma fuerza del ataque que luchaba con el guantelete, giró para lograr alzar la mano de Issei hacia arriba, logrando abrir su defensa.

-¡Muere! – La espada, con lo poco que le quedaba de la energía residual de la Semblanza, iba al pecho del castaño, listo para dar una estocada al corazón.

Pero en eso, el ala derecha de Issei salió y la pequeña garra que estaba ahí movió la mano de Adam en el momento justo.

La espada si le dio a Issei, pero solo atravesó la zona del hombro izquierdo, muy cerca de donde puede estar el pulmón. Adam maldijo todo, se salvó por los pelos. Estaba por sacar la espada para dar otro ataque. Pero en eso, vio como la mano derecha de Issei tenía atrapada su muñeca con fuerza.

-Jejeje. Te tengo… – Alzó la mirada y le dio una sonrisa donde se vio sus colmillos, que estaban ensangrentados por la sangre que salió de su boca.

-Tú… ¿¡Te dejaste lastimar para tener una pequeña oportunidad!? – Adam vio con ira e incredulidad al castaño. ¿Que clase de lunático se arriesga a este extremo?

-Todo lo que tengo es este cuerpo… ¿Por qué no sacarle provecho? Es más…

[¡Blade!]

La espada salió en el guante izquierdo y esta parecía lista para lo que sea.

-Dime… ¿Qué te parece ser zurdo?

[¡Transfer!]

Con un movimiento que ni siquiera Adam pudo ver, Issei alzó su brazo izquierdo por encima de su cabeza, lo dejó caer a toda velocidad y…

Nadie estuvo preparado para el grito que Adam dio. Blake pudo ver al que fue su mentor, alguien quien ella vio como invencible, caer al suelo con todo el brazo derecho cortado desde la zona del hombro.

Este daba gritos de dolor, a la vez que se tomaba la zona herida, su Aura lo curaba pero a la vez quitaba la oportunidad de poder hacer algo para tratar de unir la extremidad perdida.

Issei cayó de rodillas, el brazo de Adam cayó al no tener ya nervios que sirvan. Pero la katana seguía ahí, Issei solo la dejó al saber que si la sacaba… Será peor.

Se puso de pie y caminó hacia Adam, quien se quitó su máscara con su brazo que le quedaba y lo miró con odio puro.

-¡¡¡HIJO DE PUTA!!! ¡¡¡CÓMO TE ATREVES A HACERME ESTO!!!

-Je, ya no es tan divertido cuando eres tú el que sale herido, ¿Cierto? Se acabó Adam, estás derrotado. Entrégate y vivirás. Resistete y te prometo que perder un brazo será el menor de tus problemas.

Issei alzó el brazo derecho y creó una esfera roja, como dándole el ultimátum. Y antes que Adam le pueda decir algo más…

-¡¡ESTE ES EL EJÉRCITO DE ATLAS!! ¡¡QUE NADIE MUEVA UN MÚSCULO!!

De la nada apareció un gran BullHead con el emblema de Atlas. Issei y los demás se sorprendieron de eso, pero esta era la oportunidad que Adam necesitaba. Sin que nadie lo viera, sacó algo de su bolsillo….

-ARRIBA LAS MANOS.

Un grupo de robots armados con pistolas bajaron de un salto de la nave, apuntando inmediatamente tanto a Adam como a Issei.

-¡¡Wow, un momento!! ¡¡A mi no me apunten con esas…!!

En menos de un segundo Issei se vio rodeado por un montón de espadas que parecían estar unidas a algo con un cable super fino. Ese algo era Penny, quien veía al castaño con atención.

-Dijimos que arriba las manos. Por favor coopere. Estoy autorizada a usar la fuerza letal de ser necesario.

-¡¡Espera Penny!! – Ruby alzó la voz para llamar la atención de la chica. – ¡¡Issei está de nuestra parte!!

-Lo siento amiga Ruby. Estas son las órdenes que se me han dado.

-¡¿Órdenes de quien?!

-Mías. – Todos vieron como el general Ironwood bajaba del Bullhead por medio de un cable. – Penny, esposalo.

-¡¿Qué te crees que estás haciendo?! – Issei miró con rabia al general ese. El muy desgraciado.

-Cumplo con mi deber de neutralizar a toda amenaza contra el mundo. Y tu definitivamente has demostrado serlo.

-Pagarás por esto… Te lo juro. – Los ojos de Issei perdieron su humanidad y eran los de un reptil que solo deseaba hacerle pagar por creer que lo pueda tener bajo sus pies… ¡Él es el que está debajo de su existencia!

-Ya escuche suficientemente. ¡Penny!

-¡Si señor! – Ella se acercó lentamente al castaño con unas esposas.

Pero lo que nadie esperó es que la otra ala de Issei salga y le dé un golpe a Penny, quien salió volando por la fuerza con la que esta salió.

-¡IRONWOOD! – El rugido que Issei dio bastó para que el lugar tiemble y aun con la sangre que salía de su herida, se le iba a lanzar encima.

Fue ese instante que todos los Atlesian Knight dirigieron su atención a Issei que Adam sonrió. Esto claro no pasó desapercibido por el castaño que lo vio directamente a los ojos.

-Esto no ha acabado… La próxima vez que nos veamos, no tendrás tanta suerte. – Adam lanzó una esfera de metal que una vez tocó el suelo explotó liberando una gran cantidad de humo que bloqueó la visión de todos. Issei utilizando sus alas y generó una gran corriente de aire que despejó el humo del área pero… Adam Taurus había logrado escapar.

-¡ADAAAAAM! – El rugido que dio fue lleno de ira, pero sobre todo de frustración. – ¡Tú! ¡Mira lo que has hecho, lo teníamos! – Issei miró al general, su ejército y a la chica que se había recuperado con odio puro. – ¡¡LOS MATARÉ!! ¡¡GREAT BLAZE!!

Issei pareció haber perdido la cabeza, estaba tan lleno de ira y frustración que lanzó sus llamas a los robots que sufrieron el destino de ser metal derretido de inmediato. Se sacó la espada del hombro y aunque salió más sangre, la usó para para ir contra Ironwood.

Pero esa chica Penny lo bloqueó con todas sus espadas. Eso lo frustró más.

-¡FUERA! – Atacó de nuevo, esta vez logrando poner a la chica a un lado, quien le lanzó lo que era un rayo verde de las espadas que usaba. Y el láser le dio de lleno en el ala, haciendo que ruja del dolor. – ¡PERRA!

Harto de esto, pareció que el guante derecho sacó otra espada. Y estaba por atacarla, su cara ya había perdido su humanidad. Era como la de un animal rabioso, la sangre se mezcló con su baba y caía al suelo.

Y la imagen le dio a Penny miedo, quien dio pasos hacia atrás del miedo… Juraba que había algo detrás de él. Una enorme bestia con alas que respiraba fuego, pasaron unos segundos y al imagen "fantasmal" no se iba….dando a entender una sola cosa… Y cuando Issei se iba a lanzar a atacar para matar a esa niña y luego al general…

-¡Alto!

Una nueva voz se dejó escuchar y todos vieron que era Ozpin y a su lado estaba Glynda y un grupo de cazadores.

-¡¡¡ES SUFICIENTE GENERAL IRONWOOD!!! ¡¡¡COMO MIEMBRO DEL CONSEJO DE VALE, LE ORDENO QUE SE RETIRE DE INMEDIATO Y DEJE EN PAZ AL JOVEN HYOUDOU!!! – Ozpin se plantó frente al general de Atlas, a quien le dio la mirada más fría y autoritaria que alguien jamás allá visto en el.

-¡DEJAMELO! – Issei rugió, sus instintos estaban fuera de control. – ¡DEJA QUE LO MATE! ¡SE ATREVE A CREER QUE ESTÁ SOBRE MÍ! ¡¡SE CREE ESTAR POR ENCIMA DEL SER DE LA DOMINACION DEL PURGATORIO CARMESÍ!! ¡¡CREE ESTAR POR ENCIMA DE UN CELESTIAL!!

Todos se asustaron al ver que Issei estaba perdiendo la cordura y las gemas de lo que eran sus guantes y las piernas brillaban con intensidad.

-¡Issei, ya no es necesario que…!

-¡ME ATACÓ! ¡LO TENÍA OZPIN! ¡ADAM SABE ALGO QUE NOS PUDO AYUDAR A RESOLVER TODO! ¡Y LO DEJÓ IR POR SU MALDITO EGO! – Issei estaba sacando humo de su boca y escamas estaban apareciendo en su cara, haciendo que pierda más de la humanidad que le quedaba. – ¡PAGARÁ SU INSOLENCIA! ¡ÉL! ¡SU ZORRA! ¡Y TODO SU MALDITO EJERCITO! ¡HARÉ QUE ARDAN EN EL PURGATORIO CARMESÍ! ¡TODOS! ¡ATLAS VA A ARDEEEEEEEEEEER! ¡¡¡CAERA ANTE LA FURIA DE LA DOMINACION!!!

Y sus ojos decían que lo juraba. Issei estaba fuera de sí, pero no tanto como para jurar algo que no iba a cumplir. Porque en ese momento, Issei declaró a Ironwood y a Atlas como su enemigo.

-¡Issei por favor, ya basta! – Glynda le gritó al castaño para que reaccione. Verlo en ese estado le partía el alma.

-¡FUERA! ¡FUERAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – Issei de repente se empezó a envolver en llamas, creando un pilar de estas a su alrededor. Todos los que estaban cerca tuvieron que apartarse de inmediato.

-¡¡¡ISSEI!!! – Ruby corrió hacia el pilar de llamas, mientras que el castaño se tomaba la cabeza. – ¡¡¡PARA!!! ¡¡¡ISSEI!!!

GROOOOOOOOOOAAAAAAAAAAR

El rugido se oyó en todo Vale. Issei había perdido el control. Solo quedaba la bestia que quería hacer arder Atlas. El dragón que haría que todos vean el poder de la Dominación. ¡¡¡QUE EL MUNDO ES SUYO!!!

La chica se lanzó a él y lo abrazó, a la vez que Issei seguía rugiendo. Las llamas no paraban y la chica sentía su Aura ser dañada segundo a segundo. Pero poco o nada parecía importarle eso. Ella solo tenía una cosa en mente ahora. Salvar a Issei de caer en el abismo.

Y no fue la única que lo pensó, dado que su equipo y el de Issei se unieron para tratar de detenerlo. Cada uno tratando de contenerlo, pero el dragón no quería que lo toquen. ¡Quería que lo dejaran en paz! ¡No necesita a nadie! ¡¡¡DEJENLO SOLO!!!

-¡Issei, reacciona! ¡No vale la pena!

-¡No estás siendo tú! ¡Vuelve!

-¡Regresa en ti, por favor hermano!

-¡Por favor Issei detente, se acabó, vuelve en ti!

-¡No te dejes engullir por tu ira Ise, te lo suplico!

-¡Vuelve con nosotros, cielo! ¡Vuelve!

-¡ALEJENSE DE MI! ¡USTEDES NO TIENEN NADA QUE VER CON ESTO!

Iba a usar más fuerza, para alejarlos. Pero en eso, Ruby lo tomó de la cara y lo miró a los ojos. Notó las lágrimas que salían de estos. Y notó que… Esos eran de los ojos más puros que había visto. Aun tras todo, ahí estaba la pureza que lo hizo sentir que lo veían a él.

Ella lo hizo tener amigos… Gente que ahora vela por él. Y a su vez, gente que le importa tanto. Y maldecía su corazón de haberse pegado tanto a ellos… Sobre todo con esas 5. Pero…

-Issei… Vuelve… A mí. A nosotros… Por favor.

Fue la súplica y esas lágrimas, que hicieron que Issei vuelva en sí. Sus ojos perdieron el salvajismo en el que se metió, las llamas desaparecieron y las escamas ya no estaban. Solo quedaba él… Pero muy cansado. Tanto, que no pudo seguir más de pie y cayó inconsciente entre los brazos de sus amigos.

El grito de preocupación de todos bastó para que Ozpin reaccionara.

-¡Al hospital! ¡Llevenlo ahora! – Fueron sus órdenes y nadie lo contradijo a pesar del miedo que tenían de ese muchacho.

El general estaba a punto de ordenar que detuvieran al castaño, pero pasó algo que jamás se esperó.

El gran general James Ironwood tenía su rostro volteado ante la vista incrédula de Penny. Jamás pensó ver el día en que alguien se atreviera a abofetearlo. Y ese alguien era…

-¡Todo esto es tu culpa Ironwood! ¡Tú llevaste a Issei a eso y que Adam Taurus, uno de los criminales más peligrosos de todo el maldito Remnant, se haya escapado! – Glynda estaba que mataba al general con la mirada y él se sintió intimidado por esa mirada. Primera vez que la veía enfadada a estos niveles. – ¡Te juro en este instante que si le tocas un solo cabello a Issei, desearás haber muerto en Montaña Glemm hace años! ¡No me dirijas de nuevo la palabra si no tiene nada que ver con lo del torneo y pasando ello, no me vuelvas a hablar nunca mas!-.

Glynda ni se dignó en esperar una respuesta, se giró para ir con el grupo que estaba llevando a Issei al hospital.

-...Ni se te ocurra presentarte ante mí de nuevo Ironwood. – Ozpin miró al general con desdén. – Luego del torneo… Ni se te ocurra volver. ¡Y saca a tus robots de mi Academia! ¡No son necesarios!

El grito de Ozpin vino con poder, algo que el mismo hombre no había sentido en siglos o milenios, sacando a flote algo que él pensó haber perdido, el instinto de ser un guía, de ser un padre una vez más…

Y el general fue incapaz de decir algo, dado que los ojos de Ozpin brillaron, mostrando que hablaba en serio.

A su vez, Penny quiso acercarse a Ruby, pero la chica al ver que se le acercaba la miró con rabia, lo que la detuvo. La chica de ojos plata subió al Bullhead que llevaba a Issei al hospital, a la vez que la chica de cabello naranja bajaba la cabeza… Muy triste y con un dolor que no entendía.

El muelle había sido testigo del rompimiento de algo… De un grupo que había jurado proteger el mundo, pero que ahora… Ya no sería así.

--

En la zona alta del muelle, Neo vio lo que pasó y si bien admite que estaba algo asustada… Se sorprendió del poder de Issei. Parece que eligió bien.

Él es lo que ella necesita para salvar a Roman. Y se ve que es agradable. Eso lo hace mejor. De seguro se alegrará de que le dé una visita.

Giró su paraguas y desapareció como si se hubiera desvanecido. El lugar estaba en silencio de nuevo.