Otro capítulo terminado rápidamente, como dije, realmente estos capítulos son cosas que ya tenía en mente de hace mucho, por lo que realmente no fue tan complicado escribirlos, el siguiente, quizás incluso los dos siguientes, son capítulos que tengo menos planeados, y que involucran peleas, que siempre me tardo más en escribir cuando no tengo planeadas, es cierto que gracias a mi tiempo libre puedo dedicarle más tiempo a esto, pero no puedo garantizar que esto se mantenga eternamente.

La verdad, sí no fuera porque quería marcar un par de cosas para este capítulo, y dedicarles algo de tiempo me habría saltado directamente a los combates y habríamos empezado aquí, sobre capítulos más planeados que otros son los que vienen tras este arco, y aun así los tengo planeados a medias.

Y ahora mi parte favorita de cualquier historia que haga, los reviews;

ghust95; Sí hablas de mamadacoa, sí, esa era la intención, admitó que me costó más de lo que me gustaría pensar en un nombre ridículo, sí, esa era la intención, admito que me costó más de lo que me gustaría pensar en un nombre ridículo para el lugar, y sí, Kiba es un enfermo, parte genética y parte crianza, pero yolo, sirve para lo que lo quiero.

CCSakuraforever; Creo que te equivocaste de nombre de protagonista, pero, igual estoy agradeciendo la felicitación, precisamente en este capítulo trato un poco más de lo que trama Orochimaru, y reitero, todo el asunto que se dio entre Sasuke y Sakura fue, principalmente, un terrible malentendido.

Zombie XD; La reacción de esas dos bestias con cola, y la de Bee, se mostrará, sí todo va según lo planeado, en el próximo capítulo, y no te preocupes, la verdad es que yo tampoco me acuerdo, ni de su nombre tal cual ni de cómo se escribe su nombre de bestia con cola (Probablemente me pase por la wiki para poder ver su nombre y acordarme).

Sobre lo de Kiba y Naruto tiene más bases, en la serie nos dicen una y mil veces que Naruto no tenía amigos y que por eso estaba tan ciego con Sasuke, pero, y eso lo considero un problema muy grave en cuanto a estructura, en flash backs tanto de Naruto como de otros personajes, se ve que no tenía mala relación ni con Shikamaru, Choji ni Kiba, quizás siendo la relación más tensa esta última y que me creo que sea de esos amigos que se la pasan peleando pero son de los primeros en defender al otro, y ese es mi problema, o no tenía amigos o sí los tenía, que se decidan, pero sí, en general creo que los rasgos de naturaleza canina de ambos puede dar a que sean más cercanos que con los otros dos miembros del grupo (Shikamaru y Choji) Básicamente lo veo como un grupo de amigos con dos pares de mejores amigos, y por lo mismo a ese par darles el título de hermanos.

Sobre lo de Hana es algo que pienso tratar en próximos capítulos, y, debido a que ella misma se enlistó sabe que no puede negarse per se, pero sí voy a darle cierto desarrollo para hacerlo más sano.

Ahora, Naruto no ha dejado de querer ser Hokage, lo sigue viendo como un objetivo a cumplir, el asunto es que ahora no puede andarlo gritando a los cuatro vientos, ya sea porque el entrenamiento lo mantiene más cansado, o porque ha adquirido cierta sensatez, pero, precisamente este tema lo tengo planeado tocar más a fondo cuando llegue el arco de Tsunade, mismo arco que tengo más planeado en estos momentos que este examen, la apuesta en sí misma es una parte que aún me falta pulir, porque ya no puedo recurrir al rasengan porque ya lo tiene. Honestamente no había considerado del todo a Shizune en el harem, pese a que en ese arco tenía pensado a agregar a alguien más al harem, un personaje que no se ha mencionado en la historia aún para ello.

Voy a darle un cambio a Neji, si, la pelea en sí misma será diferente porque Naruto quiere confrontar directamente la visión de Neji en este, y no va a ser tan fácil de plantear como me gustaría, pero sí, tiene el mismo objetivo.

Muchas gracias por lo de Sasuke y Sakura, vivo para humillar al primero, y sí, en general siento que Sakura llegó a tener muchos problemas para entender que Sasuke la estaba embarrando, y se dio cuenta cuando estaban declarándole la guerra al mundo entero..., sobre sí ella notará la diferencia, más o menos, es un asunto que aún me falta por tratar un poco más, lo mismo con el compromiso, Sasuke en general trata a sus prometidas como prometidos en nombre y nada más, a diferencia de Naruto que sí está pasando más tiempo con las chicas con las que se compromete.

Sobre ese tema en concreto has adivinado bastante, es uno de esos temas que pienso tratar en capítulos posteriores, pero que estará relacionado uno con el otro.

Por cierto, me encanta responder tus review, son largos e interesantes.


Naruto avanzaba con pasos lentos y pesados hasta su casa, las páginas que se habían quedado en la lista del quizás apenas sosteniéndose en su mano, tras la reunión con sus amigos se sentía agotado, en parte por los juicios ante su falta de cuidado al aceptar prometidas, algo que ya sabía, y en parte por los pervertidos comentarios de Kiba quien no se detenían sobre candidata que se presentaba, y, por último, por la charla que le siguió con Kiba sobre por qué parecía tan tranquilo sobre que él se prometiera con alguna de las mujeres que tenía en su familia, incluso con su madre...

— Disculpe... ¿Usted es Naruto Uzumaki? —Una voz detuvo su un tanto patético avance, así lo fuera el mismo, se giró para ver quien lo llamaba, allí estaba un joven pelirrojo de ojos castaños dorados, más alto que él por una cabeza y sostenía en sus brazos una especie de paquete alargado— Soy Shiro Emiya, de la herrería Emiya y vine a entregarle un paquete a Naruto Uzumaki, es usted ¿Correcto? —Se presentó el pelirrojo mientras le daba una mirada.

— Ah, sí, eres el hermano de Tenten, ¿Cierto? —Cuestionó con una sonrisa cansada por el agotador día que había tenido— Si, soy yo, hablé con Tenten hace unos días y me dijo que tardarían en tenerla, no pensé que estaría tan pronto —Murmuró sin poder evitar recordar la conversación que habían tenido a inicios del examen chunin.

— Sí, ya casi estaba, y en general el arma ya estaba casi lista, pero estábamos usando los sobrantes de la chakrita para forjar piezas para una funda —Ofreció mientras extendía el paquete que tenía entre manos, antes de mirar a la casa del Uzumaki— ¿Entramos? —Cuestionó con una sonrisa un tanto nerviosa.

— Claro, claro, perdona —Abrió la puerta para que los dos pudieran entrar, caminando hasta la mesa central para que el pelirrojo pudiera dejar el arma en la mesa— Tenten me comentó que al usar chakrita, mi chakra y sangre sería un arma... interesante —La chica de la herrería, así como Zabuza y Jiraiya, habían pintado el mineral como sí hablasen de la más grande de las maravillas.

— Sí, forjamos una espada, pero la chakrita, tras ser tratada con sangre y chakra se convirtió en un arma "cambia forma" —Sentenció mientras liberaba la tela con la que había estado cubriendo el arma— El arma cambiará una vez usted la sostenga, no debería cambiar demasiado, aunque eso bien podría depender de su kekei genkai —La mirada que le dio al rinnegan que estaba a la vista significaba que ahora no era ignorante de que esos ojos podían modificar significativamente el arma— La chakrita nunca pierde esa propiedad maleable solamente se acentúa una vez pasa por el proceso, por favor pruébela —Suplicó mientras veía su creación— No tomará su verdadera forma hasta que usted la empuñe y la chakrita tratada resuene con usted —Aclaró con una sonrisa emocionada y un poco salvaje.

— Me estás emocionando, mucho —Admitió antes de sostener el arma, misma que sintió vibrar casi al instante, emitió un brillo arcoíris que se extinguió solo unos segundos después.

La funda seguía siendo de un negro lustroso, el extremo adornado de la funda era de un brillante color dorado que se extendían hacia el centro como el tayo de una flor, siete piedras de diferentes colores se incrustaban entre el adorno de la vaina, como si fueran las flores que brotaban de ella, la guarda era circular y plana, con apenas grosor, pero tenía cierta forma que recordaba a una flor de loto dentro del círculo. Emocionado no pudo evitar desenfundarla para observarla completamente; La empuñadura era negra con trenzado anaranjado, la hora era de un color plateado mientras que cerca de la guarda había grabado una flor de loto.

— Es hermosa —Gimió Shiro mientras miraba la espada en manos del Uzumaki con admiración como quien mira una pieza de arte de valor incalculable— Sabía que se vería hermosa, pero no esperaba que tanto —Naruto casi podía ver al chico llorar— T-te sugiero que la nombres, una espada tan hermosa debe tener un nombre —Ahora sí el pelirrojo estaba llorando.

— La nombrará tras probarla, lo que haremos mañana —Una nueva voz sonó detrás de ellos, allí, mirando la espada con la misma admiración que Shiro estaba Zabuza— Ahora, Naruto, vete a dormir y más te vale que descanses bien porque mañana comenzamos a entrenar y no pararemos hasta uno o dos días antes de la siguiente prueba —Anunció con una sonrisa emocionada que era visible incluso debajo de las vendas.

— Por esa expresión ya puedo imaginarme que será un entrenamiento infernal, ya estoy lamentando esto —Gimió el rubio al recordar que esa misma mirada era la que había acompañado al espadachín el día siguiente de su primer entrenamiento, y la que le acompañó por muchas sesiones siguientes

— Sí, quizás te arrepientas, pero eso te ha hecho el que eres ahora así que es claro que da frutos —Rugió el hombre mientras se acercaba para darle un par de palmadas en la espalda al rubio quien solo asintió lentamente sabiendo que tenía razón.

— Le ruego me informe cualquier cosa sobre la espada, y cuando la nombre, la herrería Emiya quiere grabar esta ocasión en piedra —Suplicó el chico pelirrojo antes de hacer una reverencia para retirarse.

Al día siguiente estaba en el campo de entrenamiento habitual, postes de madera erguidos, alfombras tatami enrolladas y erguidas, Zabuza estaba tan emocionado que parecía saltar en su lugar, Haku miraba a su mentor como sí lo estuviera viendo por primera vez, y Jiraiya miraba todo con una expresión divertida en el rostro, Naruto estaba parado frente al grupo de tatamis y postes de madera con su espada atada a su espalda.

— No dudo que tendrá un buen filo, pero quiero probarlo —Explicó Zabuza con una sonrisa salvaje mientras señalaba los tatamis— Lo normal es probarlo con tatamis, un corte diagonal bien y sencillo, luego lo probaremos con chakra de viento, el mejor potenciador para el filo de una espada, ¡Corta! —Ordenó con emoción brotando de cada poro de su piel.

Ante la orden Naruto desenfundó su espada con habilidad practicada, empuñándola a dos manos como había practicado anteriormente, incluso cuando la espada podía sostenerse perfectamente con una sola, levantó los brazos ajustando las manos y lanzó el corte, un corte diagonal que apuntaba para abajo, el corte era limpio y perfecto, acariciando el tatami para notar lo suave que había sido el corte, perfecto en todos los sentidos posibles.

— Notó que la katana es sorprendentemente ligera en comparación con la que usamos anteriormente para el entrenamiento —Murmuró el rubio mientras lanzaba la espada un par de centímetros al aire para atraparla perfectamente.

— Eso es porque la que usamos para entrenar tenía veinte veces el peso de una espada promedio —Admitió el hombre como sí nada, ignorando deliberadamente las miradas que se ganó de todos ante tal admisión— Pero eso no importa, ¡Ahora con chakra de viento! —Ordenó.

— Con razón no podía levantarla al principio —Gruñó antes de volver a empuñar el arma, por mucho que quisiera quejarse conocía la ideología de Zabuza detrás de ella, te hizo más fuerte así que sirvió, enviando chakra de viento al arma la levantó, solo para que esta emitiera un brillo blanco y algo se enroscaba en su brazo, y repentinamente no podía sentir la funda del arma en su espalda, deteniéndose en seco— ¿Qué paso? —Cuestionó mientras bajaba el arma para observarla.

La empuñadura había cambiado para ser de una sola mano, el trenzado se había vuelto blanco, la hoja se había reducido en tamaño y se había vuelto más ancha, de un color dorado, la guarda se había vuelto plana y cuadrada, y del final del mango brotaba una larga cadena negra que conectaba con un abanico de metal con bordes afilados, igual de dorado que la hoja del arma, y algo raro que Naruto notó es que ahora llevaba puestos guantes blancos sin dedos que llegaban hasta medio brazo, recubiertos con protectores metálicos.

— No estoy seguro de que eso se supone que pasase —Murmuró Jiraiya mientras miraba el arma en manos de su ahijado, desde fue había podido ver como el arma había cambiado en un brillo blanco, y lo más curioso era que la funda se había convertido en esos guantes.

— Sabía que la chakrita era maleable, el metal que cambia de forma, pero no se supone que pase esto ¿O sí? —Cuestionó Naruto mientras miraba a Zabuza en búsqueda de alguna explicación.

— En realidad creo que la transformación del arma no es tanto por la chakrita —Comentó el hombre vendado mientras se acercaba para ver el arma con detenimiento, sus ojos fijos en la espada y recorriendo el camino que creaba la cadena— Imbúyela del elemento agua, prefiero que sea un elemento que manejes bien —Fue lo único que dijo mientras miraba a su alumno a los ojos.

— No sé qué piensas, pero okey —Murmuró el rubio mientras dejaba de transmitir chakra de viento, al instante el arma volvió a tomar su forma original, los guantes desapareciendo mientras que la funda volvía a manifestarse en su espalda, un poco nervioso comenzó a transmitirle chakra de agua, y el arma volvió a brillar, solo que esta vez en una luz azul.

La empuñadura creció, al igual que la hoja y el peso, haciendo que debiera empuñarla con las dos manos, la katana, salvo por el trenzado que se había vuelto azul, era totalmente negra, la funda se había convertido en una especie de calabaza, del mismo tipo que alguien rellenaba de agua o licor, y por lo que Naruto podía sentir estaba llena de líquido. Oficialmente Naruto entendía cada vez menos lo que estaba pasando, y por las miradas que tenían el resto era claro que solo Zabuza parecía entenderlo.

— Debido a que imbuiste la chakrita de tu propia sangre y chakra el arma que se forjó tiene la misma maleabilidad y flexibilidad que tú, y como eso no puede aplicarse del todo a un arma normal, potenció la propia maleabilidad de la chakrita ¿Entiendes? —Cuestionó mientras miraba la espada, caminando en círculos alrededor del rubio para observar al completo el conjunto— Algo que no solo comparte la espada sino también la funda...

— Déjame ver sí entendí —Gruñó Naruto cuando logró entender lo que el hombre vendado decía, o más bien hizo una teoría en su propia cabeza porque no lograba entender las palabras de su mentor— Debido a que tengo el rinnegan y las cinco naturalezas de chakra, mi espada cambia de forma según el elemento que imbuya ¿Es lo que intenta decir? —Preguntó mientras un tic aparecía en su ojo izquierdo.

— ¿Básicamente? Sí —Zabuza se encogió de hombros, es cierto que no había forma de adivinar los efectos que tendría imbuir la chakrita de sangre y chakra, más allá de que el arma se adaptara mejor al individuo, solo la mezcla de maleabilidades había dado un caso tan raro, casi creía que debía dejar esto escrito para el registro.

— Genial, ¡Fantástico! —Bufó el rubio mientras regresaba su espada a su forma normal para volver a enfundarla, levantando las manos al cielo con fastidio— Ahora no tengo que aprender a manejar una espada, ¡Debo aprender a manejar cinco! ¡Claro que no podía tener algo normal! Desde que el rinnegan apareció esa palabra se fue de mi vocabulario —Gruñó dejándose caer en el suelo, frotando su rostro con sus palmas.

— En realidad podrían ser más —Mencionó Zabuza casualmente, logrando que Naruto detuviera su queja para mirarlo, los ojos totalmente abiertos y atento a lo que podría salir de su boca— ¿Qué ocurre sí imbuyes un elemento secundario, como el elemento hielo? ¿Será un arma totalmente nueva, una mezcla rara entre el modo de viento y agua, o directamente no cambiará de forma? —Cuando las palabras calaron en la consciencia del Uzumaki este palideció hasta un tono enfermizo— Y, aun así, es probable que esto sea algo secundario en lugar de lo principal —Sugirió.

— ¡¿Qué?! —Las palabras salieron como un chillido ahogado, su mente corriendo a toda marcha intentando calcular las formas que el arma en su espalda podría tener suponiendo que el renegado de Kiri tuviera razón.

— Es innegable que el kekei genkai que tienes fue lo que dio este resultado tan curioso —Declaró el espadachín de la niebla mientras apuntaba al rubio para que ni siquiera intentara negar lo evidente— Además, en su forma original tiene flores de loto en guarda y en la hoja, sin contar las piedras que adornan la vaina ¿No es eso curioso por sí mismo? —El hombre señaló la espada para que viera esos detalles de los que hablaba— Sí el rinnegan fue el causante de eso, ¿Cómo se vería afectada por los caminos? —Hizo la pregunta que se clavó en la frente del Uzumaki como un clavo ardiente.

— ¿Crees que cambie de forma con cada camino? —El rubio tembló mientras miraba la espada ahora en sus manos— ¿¡Once espadas?! —Contó el número de posibles formas mientras deseaba profundamente golpear su cabeza contra un tronco.

— Eso suponiendo que se límite a las cinco naturalezas básicas del chakra, y que no haya una forma para el chakra Yin y Yang —Señaló el hombre logrando que el rubio se pusiera verde— Y suponiendo que se limite a espadas, técnicamente crea dos piezas, la espada se convierte en uno mientras que la vaina en otra, conectadas entre sí, un arma impresionante, sí —El hombre parecía estar en el extremo opuesto del pensamiento en el que se encontraba su alumno.

— ¡¿De dónde voy a sacar tiempo para aprender a usarla?! —Rugió cuando logró recomponerse, intentaría levantarse para gritar, y dar más fuerza a su queja, pero sentía las piernas temblarle y no confiaba en sí mismo para ponerse de pie.

— Cálmate, estamos teorizando sobre los caminos, el chakra Yin y Yang, y las naturalezas secundarias —Le recordó mientras golpeaba el centro de la frente del Uzumaki con su nudillo para sacarlo de la nube de pensamientos que estaba habitando— E incluso sí tuviera razón no tienes por qué entrenarlo todo en este momento —Podía imaginar la desesperación de su alumno, después de todo él había tardado años en ser tan bueno con la Kubikirikocho, la idea de tener que aprender a dominar otras posibles once espadas sería casi psicótico para él— Limita las formas de chakra elemental a las naturalezas de chakra que dominas, así dejas de preocuparte por secundarias y por los elementos que no dominas, y sobre los caminos, hasta donde sabemos solo has despertado tres de seis, lo más probable es que hasta que no despierten la espada no pueda adoptar una forma para ellos, así que tranquilízate —Le recordó mientras ponía una mano sobre la cabeza del rubio en un intento de acto reconfortante.

— Cinco formas, quizás cinco formas, bien, p-puedo trabajar con eso —Suspiró aliviando parte de la tensión que había estado cargando, seguía siendo añadir a su entrenamiento algo más, algo que tenía que hacer él solo ya que sus clones no le entregarían memoria muscular, pero era mucho más tolerable que lo que había imaginado— Así no creo poder sacar mi propio proyecto —Se quejó, al mismo tiempo que ya veía sus horas de sueño reducirse aún más.

— ¿Qué tenías en mente? —Cuestionó Jiraiya, el que en teoría sería quien se haría cargo del entrenamiento del rubio durante el mes entero.

— Quería reforzar mis clones de sombra, especialmente los que cargan con los caminos, hacerlos reales, superar los clones de sombra —La idea era loca, lo sabía, pero sí pudiera lograrlo podría librarse de un peso de encima.

— Lo que dices es una locura, los clones de sombra ya son considerados un jutsu prohibido por la cantidad de chakra que gastan, incluso sí lo que tienes en mente es posible requeriría demasiado chakra —Advirtió el sannin de los sapos con una expresión seria en el rostro— Pero bueno, supongo que eso son buenas noticias, la verdad es que no tenía mucho que enseñarte este mes, y lo próximo que quería enseñarte es algo por lo que te descalificarían del examen —Admitió con un encogimiento de hombros mientras se levantaba del suelo, limpiando de polvo sus ropas— Así que haremos lo siguiente, harás un corto entrenamiento físico diario para no oxidarte, tus clones seguirán entrenando el control de chakra elemental, sí puedes dominar una o dos naturalezas más sería ideal, pero dividiremos el día en dos, la primera mitad será entrenamiento físico en el que entrenaras una forma de tu arma, y la otra mitad será intentar lograr lo que tienes en mente —Anunció el ajuste a su horario de entrenamiento, lo que provocó tanto alivio a Naruto que casi quería ponerse a llorar— Tendrás dos días libres a la semana, necesitarás aumentar tu descanso sí haremos tus entrenamientos físicos más agresivos.

— Gracias —Las palabras salieron apenas como un murmullo, pero Naruto comenzó a llorar de alivió, sí tenía que sumar aún más a su entrenamiento se volvería loco por la falta de sueño y descanso, este nuevo acomodo, aunque sería agotador, le provocaba un alivio inmenso.

— Agradéceme cuando dé resultados —Objetó Jiraiya mientras daba palmadas en el hombro de su alumno, él ya sabía que estaba presionando los límites físicos del rubio desde que comenzó el entrenamiento con él, no podía, en buena consciencia, pedirle que se concentrara en esto sin relajarlo en otros campos— Ahora crea tus clones para que tengan los caminos y entrégales el arma para ver sí esa teoría es correcta —Ordenó y al instante los seis clones que contenían el poder de uno de los caminos le estaban regresando la mirada.

— Igual esto me servirá para saber cuál tiene el camino Naraka —Había aprendido cuál contenía el camino Deva, incluso había entrenado ligeramente esté en su tiempo en la torre, no había dado muchos frutos, pero al menos sabía cuál era, pero el Naraka era un completo misterio.

Kakashi miraba a Sasuke hacer las posiciones de manos para el chidori por sexta vez, la chispa de electricidad se formó un instante antes de desaparecer, el chico soltó gruñido de frustración antes de comenzar a formar las posiciones de manos una vez más, honestamente, Kakashi no quería enseñarle el chidori a Sasuke, nunca había logrado hacer ese jutsu para algo menos que matar, y no creía que fuera posible ajustar la potencia hasta quitarle el factor letal como sí se podía hacer con el rasengan, por lo que en su punto de vista era darle un arma muy peligrosa a alguien en quien no podía confiar algo así.

El ninja que copia no era ignorante de los problemas psicológicos de Sasuke, él había tenido algunos muy parecidos en su juventud y los trató, o al menos tanto como podía, sabía que no todos sus métodos de afrontamiento eran saludables, pero al menos daban frutos. Y por mucho que lo señalara, por mucho que les dijera a los altos mandos de lo peligroso que era esto, lo estaban ignorando, se negaban a darle atención psicológica al Uchiha, había intentado llevar el asunto a Inoichi, quizás la única persona que podía llevar esta situación a buen término y tampoco había servido, aunque él al menos le dio una explicación del por qué no podía interceder (A diferencia del joven Kakashi que había sabido admitir que tenía un problema, incluso cuando no quería buscar ayuda, Sasuke no parecía notar que tenía un problema, por lo que no haría frente a la terapía obligatoria tan bien como lo había hecho Kakashi), aunque eso no logró que desistiera de sus intentos de que los altos mandos hicieran que el chico tomara terapia.

— Sí bien es admirable la preocupación que tiene en su alumno, Kakashi —Había comenzado Danzo aquella vez— Él heredero Uchiha no es usted, solo se está proyectando —Kakashi sabía que se proyectaba en Sasuke, pero al menos él sí había sabido ver que tenía problemas— Y sí bien podemos entender que le preocupa este entrenamiento, que es más propio para un jonin o un Anbu, pero eso solo demuestra el compromiso que tiene para estar a la par con los otros líderes de clanes.

Entendía que Sasuke y Naruto tenían que llegar a un nivel de fuerza aceptable para los líderes de clanes, pero tenía que ser proporcional, entrenarlos como chunin cuando eran genin, y entrenarlos como jonin cuando fueran chunin, no entrenarlos como jonin siendo genin, Naruto podía permitirse algo semejante por sus clones quienes reducían el entrenamiento que el propio Uzumaki tenía que hacer personalmente era el entrenamiento físico mientras dejaba lo demás a los clones. Y, aun así, Kakashi había visto el cambio en su alumno rubio, se había vuelto un tanto más mezquino, se había vuelto peor para fingir que todo el mundo le caía bien (Algo que Kakashi aplaudiría sí no fuera algo desarrollado por cansancio y agotamiento), las bolsas bajo los ojos comenzaban a ser perceptibles y se veía más cansado de lo que lo había visto jamás, pero también es cierto que el chico entrenaba casi constantemente y no había podido verlo en uno de sus días libres, quería creer que no se vería tan cansado en sus días libres. Sasuke no podía permitirse avanzar los mismos pasos que Naruto porque no podía permitirse hacer los clones que él hacía, pero quería igualarlo a cualquier precio. Por lo mismo había intentado amenazar con dejar de entrenar a Sasuke sí no le daban terapia o le permitían ajustarlo a un plan menos lunático.

— Nos enorgullece que un miembro tan respetable de nuestra aldea —Había dicho la concejal Koharu en esa ocasión— Pero no podemos permitir que uno de nuestros herederos que debe tomar la posición de líder de clan se atrase tanto en comparación con el otro —Argumentó como sí no supiera que Naruto solo podía avanzar tanto por sus inmensas reservas de chakra que le permitían hacer esos clones en cantidades masivas— Sí, aun así, usted se niega a entrenarlo, nos veremos en la obligación de encontrar un mentor que sí esté dispuesto a ayudar al joven Uchiha a desarrollarse adecuadamente.

Y Kakashi sabía cómo sería esa persona, uno de los shinobis personales de Danzo, y por mucho que no le gustara aceptar a este entrenamiento salvaje para Sasuke, menos aún le gustaba la idea de que fuera entrenado por Danzo, y por un instante realmente deseó que Naruto no avanzara tan rápido para que el concejo no lo usara como barra de medición para Sasuke, no culpaba al rubio, ni le desagradaba que avanzara tanto en su entrenamiento, en realidad estaba orgulloso de él y se lamentaba de no haber podido ver el potencial de los clones para ayudar a su alumno, pero le gustaría que el concejo dejara de hacer comparaciones en base a que Sasuke era un "prodigio" mientras que Naruto no lo era, aunque Kakashi cada vez dudaba más de sí el Uchiha debía tener aquel título.

— ¡Lo logré! —El rugido de Sasuke lo sacó de la senda de los recuerdos que Kakashi recorría cada día, posando la mirada en su alumno, su mano tenía un chidori de un brillante color azul, era inestable y no podría mantenerse por más de unos segundos, pero era bastante bien para uno de los primeros intentos.

— Aun no está completo, pero es un gran avance —Señaló mientras formaba uno en su propia mano, a diferencia del que Sasuke tenía en manos los rayos no se extendían tan salvajemente por el aire, envolvía la mano del ninja que copia— Inténtalo una vez más y duerme un rato, el chidori no es un jutsu sencillo y lo más seguro es que además del cansancio que ya sientes tus reservas de chakra estén por los suelos, podrías matarte si no descansas —Ordenó desde su posición sobre un tronco.

Por eso, incluso en contra de su mejor juicio, había decidido entrenar a Sasuke con el chidori, para empezar, sería una de sus mejores armas contra Gaara, maldita sea la fortuna que hizo que se enfrentara a él en la siguiente ronda, y que era agotador y extenuante tanto para el cuerpo, la mente y el chakra, y podía obligar a Sasuke a descansar cada tanto para mantener su seguridad sin que el chico se quejara, incluso pensaba que seguían avanzando al mismo nivel psicótico. Incluso había podido ajustar el resto de su entrenamiento para concentrarse en aprender el chidori. Claro, aún no había pensado en qué haría sí el chico lograba dominar el jutsu antes de que se completara el mes, probablemente lo incentivaría a crear variaciones para mantener un cierto orden.

— Se tardó más de lo que esperaba —Admitió cuando vio al Uchiha caer desmayado en el suelo, había acordado previamente con él que sí le ocurría eso lo llevaría a su hogar y no lo entrenaría hasta que estuviera totalmente recuperado, lo levantó para desaparecer en un shunshin.

El hogar de su alumno siempre le había parecido algo lúgubre, quizás por la tragedia que había ocurrido allí años atrás, y no lograba entender por qué es que prefería quedarse en este lugar manchado de sangre y pesadillas en lugar de mudarse, entró en el hogar y caminó hasta la habitación de Sasuke, girándose para mirar una habitación en concreto, una que mantenía un fuerte olor a sexo, había notado el olor hacía unos pocos días, no podía entender por qué mantendría el lugar sin limpiar para quitarle el olor, o con quién lo hacía para que el lugar tuviera ese olor constantemente, pero se negaba a darle la plática de las aves y las abejas a cualquiera de sus alumnos, casi prefería que se malinformaran leyendo un Icha Icha en lugar de explicarlo él mismo, dejó al Uchiha en su cama y se fue.

— Tan patético, ¿No puedes lograr un jutsu tan simple? —Sasuke despertó en aquel pozo de brea y serpientes que era su mente con esas palabras.

Igual que todas las veces que había despertado allí el cielo era de un desagradable tono púrpura que se arremolinaba como si fuese un turbio océano, el suelo en el que Sasuke estaba atrapado era una mezcla de brea negra fría y serpientes que recorrían su cuerpo desnudo. Esta era una de las razones por las que había intentado reducir aún más su tiempo de sueño, cada vez que se quedaba dormido despertaba en este lugar donde se encontraba a sus torturadores, pero tampoco podía ignorarlos eternamente, no porque quisiera escucharlos especialmente, sino porque nunca había podido irse de aquí sin escucharlos, y en ocasiones eran capaces de darle buenos concejos. Se levantó pesadamente para observar a las siluetas.

Incluso cuando los dos no eran más que sombras y siluetas podía reconocerlos, el de la derecha era Itachi tal cuál lo recordaba de cuando mató a todo el clan, sentado perezosamente en un trono como cada una de las figuras había sido vista cada vez que llegaba a este lugar. El de la izquierda era Naruto, igual que la mayoría de las veces, estaba desnudo, algo que podía notar incluso cuando no podía reconocer ningún detalle. La desnudez del Uzumaki era algo normal, aunque en ocasiones intercambiaba ese papel con Itachi, para este punto había llegado a la conclusión de que era un recordatorio de cómo es que cada uno lo superaba en los dos frentes que más fuerza tenían en su vida. La única razón por la que creía que Naruto aparecía desnudo con más frecuencia que Itachi era porque fue él quien le demostró su inferioridad en ese territorio.

— Pero ¿Qué podías esperar de él? —Itachi habló antes de que lo hiciera el propio Sasuke, aunque no sabía cómo argumentar en contra de ellos, nunca sabía cómo hacerlo— Mi hermanito es débil, débil y patético, no podría dominar un jutsu tan simple —Itachi negaba con la cabeza como si estuviera lleno de decepción.

— Cierto, cierto —El Naruto hecho de sombras asintió con una risilla— Sí la boba de Sakura pudo chantajearlo —El recuerdo de eso cayó profundo en sus entrañas ahogando las réplicas que tenía en la punta de la lengua— Neh, Sasuke ¿No te cansas de ser tan patético? Te dejo solo cinco minutos y encuentras una nueva forma de humillarte —Se mofó.

— ¡Cállate! —Logró rugir por fin, mirando a ambas siluetas con odio en su mirar, aunque eso no logró hacerlos temblar ni un poco— ¡No dirás lo mismo cuando acabe contigo en la tercera ronda del examen! —Gruñó la idea a la que se había estado aferrado como un clavo ardiente desde que las voces de Itachi y Naruto habían llegado a su cabeza.

— Oh ¿En serio? —Itachi se mofó mientras miraba a su hermano con su mangekyo sharingan, mismo sharingan que lo había perseguido en sus pesadillas por años después de la tragedia— Tú sabes muy bien lo que significaría sí pierdes, padre te lo dejó bien claro desde que eras niño ¿O sí? —La ceja enarcada fue solo un anuncio de que él sabía que Sasuke jamás podría olvidar las enseñanzas de su padre mientras estuviera con vida.

— Jamás lo olvidaré —Las palabras de su padre regían su vida, el débil servía para obedecer al fuerte, les dabas uso sirviendo como un escalón para que los fuertes siguieran siendo fuertes, su destino, sí fracasaba, quedaría sellado para él— No pienso fallar, no fallaré —Se dijo más para sí mismo que para las figuras de sombras que lo atormentaban.

— Ya veremos, Sasuke —Naruto se burló, una de esas sonrisas zorrunas suyas— Sabes que siempre estoy dispuesto a hacer apuestas contigo, especialmente cuando puedo disfrutar tanto del premio como la última vez —Soltó una canina risa, de la brea y serpientes surgieron dos siluetas, la de Samui y la de Ino que estaban igual de desnudas que lo estaba el rubio, en un recordatorio de cómo le fue en su última apuesta.

Jiraiya no podía evitar encontrar un poco nostálgica la vista que tenía en estos momentos, Naruto sentado en posición de loto, la mano en el mentón intentando pensar en cómo sacar a flote una idea demente. Una vista que ya había visto en el pasado cuando Minato había intentado mejorar el hiraishin no jutsu del segundo Hokage, no podía evitar encontrar encantador que fuera su hijo quien quisiera lograr lo mismo con uno de los jutsus creados por el segundo Hokage, casi esperaba que, en unos años, suponiendo que siguiera en este mundo para verlo, tendría al nieto de Minato intentaría mejorar el Edo Tensei, esperaba que esa vista no se diera, o que decidiera mejorar un jutsu diferente, pero no le sorprendería.

— La complejidad del jutsu clones de sombra reside en la cantidad de chakra que se requiere —Señaló mientras se sentaba frente al rubio, agradecido de que al menos esta vez conocía el jutsu lo suficiente para ofrecer unas palabras amigas— A diferencia de los clones que enseñan en la academia que requieren solo chakra yin siendo la forma más simple de genjutsu —Recordaba en sus tiempos, que no era obligatorio para graduarse de la academia, aunque era sustituido por actividades más complicadas, servía para medir que tanto potencial tenía alguien en esa rama— Los clones de sombra requieren una mezcla de chakra yin y chakra yang, hay quienes dicen que es la verdadera forma del chakra yin yang, pero no es tan simple —Explicó.

— ¿Chakra yin yang? ¿En qué es diferente a solo juntar los dos chakras? —Naruto preguntó con la misma curiosidad con la que un niño hacía sus inocentes preguntas, lamentaba haberse perdido tantas de esas en el pasado.

— Se dice que el chakra yin yang es la capacidad literal de crearlo todo, desde una pieza de la más simple piedra, hasta un humano, se dice que el único que ha podido usarlo es... —Claro, toda esa teoría era solo un rumor, nadie había podido lograrlo y por ende era solo un mito al que le daban demasiado crédito.

— El sabio de los seis caminos ¿Cierto? —Naruto ya había aceptado que muchas cosas que llevaban la etiqueta de "Solo una persona antes lo ha logrado" casi siempre había involucrado al primer usuario del rinnegan— Bien, tocará comenzar a experimentar —Naruto sabía que su jutsu de clones seguía siendo un jutsu prohibido que solo podía usar como lo hacía por tener tanto chakra, y la sospecha de que lograr lo que quería necesitaría aún más chakra lo preocupaba.

— Te recomiendo que no intentes crear vida como tal —Jiraiya detuvo a su ahijado cuando este ya había realizado la posición de manos, aunque el jutsu aún no había empezado, por suerte— Ya tienes una base, no solo los propios clones de sombra, sino también tus invocaciones, las invocaciones que creas suenan exactamente como lo que estás buscando, no intentes romperte los sesos buscando otras formas de conseguir algo que ya tienes —Sugirió, incluso sí tenía una idea de lo que buscaba, y un modo de lograrlo, no significaba que la misión sería menos complicada.

— ¿Algo más parecido a mis invocaciones? —Durante los días que había estado en la torre había intentado recordar cómo se sentía cuando usaba cada uno de sus caminos;

El camino Deva se sentía como una especie de capa o recubrimiento que tenía un cierto aire de fuerza suave, algo extrañamente reconfortante, cuya capa o recubrimiento le permitía atraer y repeler las cosas. El camino Naraka, incluso sí no había podido usarlo más de una vez se había sentido siniestro y oscuro, como sí sirviese de puente entre sí mismo y algo peligroso, aunque podían ser imaginaciones suyas por las condiciones en las que lo uso. Pero nunca se había puesto a pensar en cómo se sentía el camino animal, incluso ahora, que el camino animal estaba practicando un estilo de combate que involucraba sus invocaciones y una mezcla de combate cuerpo a cuerpo y a distancia, podía sentir la conexión con las invocaciones, como un punto que picaba en el fondo de su mente tan levemente que no lo notaría sí no lo buscase.

Realizó la posición de manos que requería el jutsu clones de sombra, una parte de él, quizás por la sencilles del jutsu o por el uso constante, tuvo que contenerse de hacer un clon de sombras. Y se permitió sentir el chakra en su interior, la imagen de un clon se volvió clara en su mente, casi podía sentir su chakra escapando de él para formarlo como formaría a cualquier otro clon, incluso sí estaba añadiendo más chakra de lo que necesitaba un clon se sentía mal, incompleto. Y ante la sugerencia de hacerlo igual que sus invocaciones intentó enviar su chakra a ese punto en su cabeza donde estaban las invocaciones, en un sentido más metafórico que literal. Su concentración en el clon comenzó a flaquear, en parte por los jadeos que escuchaba del mundo real, pero en su mayor parte era por lo que estaba pasando en su propia mente; la forma que tenía el clon en su mente comenzó a cambiar, no los pequeños detalles que cambiaban entre los clones que tenían sus caminos, el color, la forma, cada segundo que pasaba necesitaba más concentración para regresarlo a su forma, para este punto podía sentir su chakra fluir a aquel imaginario punto en su cabeza con una fuerza inmensa, un torrente de chakra siendo consumido por ese punto que más se estaba pareciendo a un remolino.

— ¡Naruto! —Una palmada en la frente lo sacó de su concentración, abrió los ojos para ver el mundo una vez más, sintiendo el mundo demasiado brillante a como lo había sentido antes, Jiraiya le miraba preocupado, solo desviando su mirada a algo al lado del rubio.

Allí, donde la mirada de todos se posaba, estaba un clon del rubio, un clon que incluso sí Naruto compartía la visión con este se sentía diferente al resto, así fuese solo su instinto el que se lo estaba diciendo, pero quizás lo más diferente de este con el resto era su apariencia traslucida, lo único que desestimaba que fuera un genjutsu era la hierba que se oprimía debajo de él. Este abrió los ojos, una vista cansada y agotada, antes de comenzar a deshacerse en una estela de luz, o polvo, blanco (Naruto no podía definir exactamente qué era), antes de desaparecer por completo.

— ¿Qué era eso? —Preguntó a nadie en particular antes de levantarse y caer de rodillas, solo en ese momento se dio cuenta de lo agotado que se sentía, de cuanto chakra había desaparecido de su cuerpo, y sin poder evitarlo vomitó, sintiéndose totalmente enfermo de golpe.

— Eso deberíamos preguntarlo nosotros —Murmuró Zabuza mientras veía a Haku posarse al lado de su prometido para comenzar a palmear suavemente su espalda intentando darle, aunque sea, un poco de alivio.

— Tú chakra se hizo visible por un momento antes de arremolinarse donde estaba el... ¿Clon? —Jiraiya comenzó a explicar viendo que su alumno no estaba en condiciones de hacerlo desde su lado— Fue lento, pero pronto comenzó a ser visible el clon, pero tú, bueno, habías comenzado a sudar y te veías muy pálido... parecías estar... muriendo —Admitió mientras su propia tez se volvía blanca ante la idea.

— Agotamiento de chakra —Haku decidió hablar por fin mientras ayudaba a su prometido y amigo a sentarse— Todos son síntomas de agotamiento de chakra, y no sé cómo es eso posible —Miro al par de adultos a los ojos intentando darles más peso a sus palabras.

Tanto Zabuza como Jiraiya no pudieron evitar palidecer de golpe, sintiendo una piedra caer en sus estómagos ante la realización, Zabuza sabía que el rubio tenía más chakra que él, menos control y precisión, pero suficiente chakra para hacerlo correr por su dinero. Jiraiya no estaba teniendo una línea de pensamiento muy diferente, a diferencia del espadachín de la niebla, y cualquier jonin en la aldea en realidad, tenía más chakra que Naruto, un logro que sabía no sería eterno, pero la idea de que algo pudiera provocarle agotamiento de chakra era... aterrador. Jiraiya no sabía de un jutsu que pudiera provocarle a él agotamiento de chakra y la idea de que el rubio, incluso sí solo era darle cantidades de chakra astronómicas a un clon lograra eso no le gustaba.

— ¿Así se siente? Jeje, diablos —Murmuró tembloroso mientras intentaba levantarse solo para volver a caer al suelo— Pero estaba cerca, lo sé —Intentó asegurar, sabiendo que sería complicado que lo dejaran volver a intentarlo, quería seguir argumentando, asegurarles a todos que podía permitirse seguir entrenando, pero los ojos le pesaban y la lengua la sentía pegada, y tras esas palabras quedó inconsciente, los clones desaparecieron en nubes de humo.

— ¿Estamos todos de acuerdo en no dejarlo volver a intentar algo así? —Inquirió Zabuza mientras a Jiraiya, no le preocupaba que Haku lo dejara intentarlo de nuevo, ella no iría en contra de una orden suya incluso tras unirse a las filas shinobi.

— Todo lo contrario —Jiraiya soltó un pesado suspiro de agotamiento puro, el espadachín de la niebla no pudo evitar enarcar una ceja ante la afirmación, el hombre no lo veía, pero su alumna estaba igual que él— Sí conozco a Naruto como creo que lo conocemos todos nosotros, sí le prohibimos intentar esto, especialmente cuando él está seguro de que estaba cerca de lograr lo que quiere, solo lograremos que lo entrené en solitario, y ahí sí tendremos un problema —El sannin explicó su razonamiento logrando sacarle muecas en los rostros ajenos.

A ninguno le gustaba la idea, pero tenía razón, Naruto era lo suficientemente cabezota como para ignorar el peligro que representaba lo que estaba tramando, incluso cuando eso sería lo más sabio.

— Por mucho que odié admitirlo —Haku murmuró su queja por lo bajo— Jiraiya-san tiene razón, Naruto entrenará esto con nosotros o sin nosotros, sí al menos estamos allí podremos cuidarlo y evitar... evitar que se maté por intentarlo —Aceptó por lo bajo sintiendo que esto era una decisión de la que se arrepentiría demasiado pronto.

Orochimaru había decidido desde el principio, que fingir ser Rasa traería muchos problemas y tendría que tomar decisiones que fingieran ser del propio Rasa para no llamar la atención, incluso sí no le gustaba había reducido al Kazekage a una forma en la que Orochimaru podía pensar sin mayores problemas; Reducir a todos, incluso a sus hijos, a posesiones y objetos de los que él decidía el valor. Claro, habría quienes dirían que el cuarto Kazekage era más que eso, y probablemente lo fuera, pero era la mentalidad con la que Orochimaru trabajaría.

Este pensamiento de que ser Rasa era problemático solo se intensifico ahora, que estaba en dicho despacho, vistiendo exactamente como lo haría Rasa, con la única diferencia de que él estaba usando el sombrero de Kage, Baki mirándolo desde el otro lado de su escritorio con nervios evidentes, retorciendo la tela de sus pantalones en un patético intento de tranquilizarse, incluso sí el hombre con medio rostro cubierto no le hubiera informado por qué esta reunión había sido de urgencia lo sabía, principalmente porque esto lo había visto él mismo en Konoha, escuchaba los murmullos del resto de miembros del concejo de Sunagakure, Orochimaru nunca entendería este intento de democracia cuando incluso sí quitabas al daimyo de la ecuación seguían siendo una monarquía/dictadura, algo que los líderes de las aldeas parecían olvidar muy fácilmente, sí acaso estaban para ofrecer concejo, y en su experiencia Orochimaru podía decir que todos eran idiotas.

— Ofreceremos a mi hija, Temari, para un compromiso para... reforzar la alianza —Orochimaru los hizo callar a todos con sus palabras, algunos voltearon a verlo, pero ninguno fue más evidente que Chiyo, quizás la única persona que no se compraba del todo la actuación de Orochimaru.

— Una alianza que se romperá tras el ataque con Orochimaru ¿Para qué nos serviría eso? —Cuestionó un hombre delgado y olvidable, el sannin serpiente creía recordar que era el ministro de educación civil, hasta este momento Orochimaru creía que el hombre le agradaba, una lástima.

— Sería raro que no intentáramos obtener el rinnegan ahora que otras dos aldeas lo descubrirán, incluso sí no tenemos intención de dejar el plan de invasión servirá para mantener apariencias —Chiyo explicó mientras dirigía una de sus miradas a Rasa, o a quien todos creían que era Rasa, a Orochimaru normalmente le agradaban las personas inteligentes, tenía que explicar menos sus planes, lo que le ahorraba tiempo y energía que podía usar para cosas más importantes, pero eso solo era aplicable cuando estaban de su lado, de lo contrario los odiaba como odiaba a esa anciana.

— Tiene toda la razón, Chiyo-san —Un ligero tic apareció en los ojos de Chiyo, y esa fue la señal de que Orochimaru había cometido un error, ¿Cómo se supone que supiera como se refería el idiota Kazekage a esa anciana cuando esta nunca salía de su hogar?, Afortunadamente la mujer solo se quedó callada sin despegarle el ojo de encima.

— Además... —Ebizo, el anciano hermano de la anciana maestra de marionetas habló para intentar reducir las tensiones en la sala— Sí seguimos el plan de echarle la culpa de todo a Orochimaru y la aldea del sonido, serviría para mantener la paz tanto como podamos —El hombre ofreció con una sonrisa.

Dicho sannin serpiente se sentiría ofendido de que intentaran echarle toda la culpa del ataque conjunto sí no fuera porque el propio Orochimaru pensaba dejar caer las culpas en el país de la arena.

— Y, suponiendo que la aldea de la hoja realmente caiga con este ataque —Comenzó con tono cuidadoso— Sirve para tener en cuenta que este chico no debe ser asesinado, sino secuestrado para que nosotros seamos la aldea en el que el rinnegan sea restaurado —Añadió.

Orochimaru honestamente dudaba que esto provocara la caída de la aldea de la hoja, había visto ejércitos enteros fracasar en lo que estaban planeando hacer solo con un par de batallones pequeños, incluso con el factor sorpresa dudaba enormemente que esto funcionara, pero serviría para cumplir sus intereses, poner su marca de maldición en Sasuke Uchiha para que más tarde viniera a buscarlo, con el reciente añadido de que este trajera consigo al Uzumaki. Y la parte que aún no lograba, pero estaba planeada a ocurrir dentro de un mes, era la muerte del tercer Hokage, el viejo Hiruzen, pese a su suavidad y fragilidad de carácter y decisión, era de las pocas personas que podrían evitar que el chico Uchiha viniera a él, y sería incluso peor ahora que intentaría sacar a Naruto de la aldea, sería más simple secuestrarlo durante la invasión, ya sea que se lo llevará Oto o Suna daría lo mismo, podía lidiar mejor con la seguridad de Suna, por lo que podría hacerse con él, y luego sería solo cuestión de darle cierto adoctrinamiento antes de que pudiera ser un aprendiz optimo.

Así fue como avanzaron los días, los días se convirtieron en semanas, y las semanas en un mes, desde hacía una semana las calles estaban llenas de gente, los puestos de comida se encontraban siempre repletos, una mezcla de comerciantes de Konoha, Suna y Kumo adornaban las calles vendiendo sus productos callejeros, mientras en los grandes locales se hacían los grandes negocios intercambiando grandes cantidades de mercancías costosas, para este punto los daimyos y kages de las grandes aldeas aliadas estaban allí, algunos ocupando sus privilegiados lugares en el coliseo donde se llevaría a cabo el torneo final. En los dos grandes palcos principales se encontraban en lados opuestos y elevados del resto de las gradas, en uno se encontraban los daimyos con sus escoltas, y justo al lado contrario se encontraban ya esperando dos de los tres kages, el Raikage y el Hokage, ambos esperando, no solo en lo que llegaba el Kazekage, sino también que llegará la hora de que el torneo empezará.

— Hiruzen, no olvide que tenemos una reunión en la noche —El Raikage A le recordó al anciano que solamente dio una calada a su pipa— Porque me encantaría saber ¿Por qué no nos informó del rinnegan cuando hicimos la alianza? —El hombre rubio apretó los puños con fuerza, amenazando con destrozar el asiento en el que estaba sentado.

— En ese momento la información era demasiado delicada, ustedes ofrecieron la alianza justo cuando el concejo de la aldea se enteraba, incluso cuando queríamos incluirlo en la alianza no estábamos preparados para hacer la noticia publica —Hiruzen admitió sin pena alguna— Incluso cuando vinieron la primera vez creíamos que la noticia de que Minato y Kushina habían tenido un hijo sería una noticia escandalosa, no queríamos sobrecargarlos de información tan sensible, darles tiempo para aceptar la noticia una por una hasta que no quedasen más noticias que dar, solo un gesto amable —Explicó mientras lentamente posaba su pipa en una pequeña mesa entre su asiento y el del Kazekage— En realidad, sí no se hubiera descubierto hace un mes yo mismo le habría pedido una reunión privada para explicarle esto, fue... una cuestión de mala suerte que ocurriera antes —Ofreció como una disculpa.

— No me hace ninguna gracia, Hiruzen —Gruñó el hombre de impresionante musculatura mientras le dedicaba una desdeñosa mirada al hombre que lideraba la aldea de la hoja.

— ¡Tranquilo brotha! —Killer Bee decidió meterse en la conversación a riesgo de que ocurriera lo mismo que había ocurrido en el país del rayo hacía más de semana y media, cuando le llegó la noticia, algo que prefería evitar en una aldea que no fuera la suya— Concentrémonos que esta por empezar la action, ¡yeah! —El intentó de rapeo del jinchuriki del ocho colas logró desviar la frustración del raikage a su hermano, quien había tomado el lugar de Yugito para poder acompañarlo, una manera de mantener la aldea siempre con un biju protegiéndola.

— Bee, hermano, deberías hacerme caso y dejar la música, te morirías de hambre —Gruñó A, sabiendo que aquella era una pelea perdida, lo llevaba intentando desde que Bee se interesó en la música rap y no había logrado que lo dejara en todos esos años, quizás incluso se había vuelto era una pelea perdida, lo llevaba intentando desde que Bee se interesó en la música rap y no había logrado que lo dejara en todos esos años, quizás incluso se había vuelto peor.


Espero que hayan disfrutado el capítulo, ahora, sé que deje muy en el tintero el asunto del clon y al espada, incluso cuando eran parte del eje central de este capítulo, especialmente del clon, pero tengo planeado hacer las explicaciones pertinentes en los capítulos posteriores, ahora, sé que en la versión anterior de la historia le había dado un nombre a la espada, pero decidí cambiarlo, y sé que en esa versión solo llegué a mostrar formas para los elementos, pero desde ese entonces ya tenía planeado darle formas a cada camino.

Ahora, ¿Por qué no las mostré en este capítulo? O ¿Por qué no le di un nombre a la espada en este capítulo? En parte por darle cierto misterio y expectación, y en parte por indecisión, ya tomé la decisión del nombre, y de la forma que tendrá con el camino animal, pero no se me ocurren las formas para los otros caminos, pese a que estoy seguro de que tenía alguna planeada en la versión antigua de la historia.

Por lo que, en caso de que no logre decidirme por formas para los caminos lo desecharía y me quedaría con las formas que llegué a pensar en el pasado, ahora, me gustaría ver sí pueden adivinar con qué forma imaginé el arma para el camino animal, una pista, es un arma a distancia larga, media larga, y no es muy buena en el cuerpo a cuerpo, y lo más importante, no es una espada.