Es chistoso, no creía que este capítulo saliera pronto, porque serían capítulos de consecuencias, que tardaría al menos otro par de días en sacar capítulo, pero esto en realidad se escribió mucho más rápido de lo que había creído que saldría, por razones es que probablemente este pequeño arco de consecuencias se alargue un capítulo más de lo que había previsto (Según yo solo duraría este y el siguiente, pero ahora no estoy tan seguro), creo que este ha sido el mes más productivo para esta historia, siento que hay algo más que debo mencionar aquí, pero no logro recordar qué.

Y ahora mi parte favorita de cualquier historia que haga, los reviews;

ZombieXD; Mira, es lo que ocurre cuando tienes insomnio y te concentras demasiado en algo, en este caso en completar un capítulo, ya había sacado rojo, que hasta dónde recuerdo fue la segunda en aprender Gojo, así que pensé justo enseñarle azul para terminar. Mira, necesitaba una escena que cortara todo eso y si no era Yugito no se me ocurría nada. Detalle random que me acabo de inventar, en realidad no está relacionado con los raikage, solo que originalmente era un gimnasio de boxeo y el rayo es porque están en esa nación. El problema es que esos cortos solo tenían lugar en esta misión.

Me alegro de que lo hayas considerado así, yo mismo sigo con la duda de qué tal quedó, empiezo a creer que eso es algo que sentimos todos los que escribimos peleas.

Mira, nos acercamos mucho a ese momento, es algo que siento que voy a disfrutar escribir y que me va a dar mucha diversión en demasiados niveles, Naruto tiene 13 y Deidara 16, el viaje de entrenamiento en el canon fue de dos años y medio, ciertamente es triste, porque Kakashi lo habría notado al instante, simplemente nunca coincidieron, para esa charla de autoconservación tardará, hay muchas cosas que tratar antes.

Mira, escribí 10,000 y siento que aún me faltan otros dos capítulos para terminar las consecuencias, lo resumiré, quizás, no prometo nada. Si, honestamente sería una forma de compensarlo, porque creo que en realidad escribí diez capítulos de este. No, debo preocuparme porque no quiero morirme.

Samuel Santillan; Me alegro de que te haya gustado, necesitaba un corte y eso era lo mejor que se me había ocurrido.

Lo está porque eso le permitió llegar con Orochimaru, pero tampoco esta alegre porque eso demuestra también cuán débil es, Sasuke no estará satisfecho con ningún resultado que no fuera él venciendo a Naruto completamente, es consciente de eso, y no le gusta, como mínimo a volverlo un tronco sin brazos ni piernas.

Que suerte que Jiraiya tiene pensado un viaje de entrenamiento que le permita alejarse de Tsunade después de que haga público que Minato tuvo otro hijo, ha habido dos con ese título, Naruto está apuntando a ser el tercero.

Sabe que Naruto también es más fuerte que en los exámenes chunin, el problema es que no sabe cuánto, pero nadie más que esos dos saben sobre ese combate, nadie más lo supo, él no tuvo esa suerte, de lo contrario Naruto probablemente tampoco estaría muy convencido de haber ido a dejar invalido a alguien.

Shikamaru es el que está más satisfecho con el resultado, principalmente porque él no tiene que pagar las consecuencias, pero si, van a aceptar lo que les llegue porque no pueden ponerse exigentes.

borjacaconcepcion; De antemano mencionó que escribiré tu nickname sin el punto porque de lo contrario me lo podría contar como spam, en segundo lugar, si, la forma de escribir que tienes por DM que aquí en público es discordante como mínimo.

Tiene más experiencias en batallas simuladas, que en el gran margen de las cosas en realidad no es tanto, y muchos menos para este punto.

Más que sentirse culpable se siente molesto, aunque no podrá evitar que se sienta un poco culpable, por motivos diferentes, pero algo tendrá, participó en todos los combates que pudo, tiene pocos combates, incluso con los que tuvo como acompañante en realidad no hay mucho para él, e incluso cuando tiene menos experiencia igual dio pelea, tanto aquí como en el canon, ciertamente le permitirá crecer, también es cierto que aquí hay menos bases que corregir, que es lo que me creo que hiciera en el canon.

Oh, entiendo que eso no te guste, pero no te preocupes, eso es algo que trato en este capítulo, independientemente del rinnegan debería llevarse un susto por el kyubi, la principal razón sobre por qué no lo hizo en el capítulo anterior es que estaba muy ocupado reponiendo a Naruto constantemente.

Están entre los clanes más genéticamente parecidos, el veneno no era letal, desde el principio no fue la intención de Sasuke, e incluso así, Kurama solo necesitaba que el cuerpo de Naruto descansé antes de poder trabajar, nada más quedar inconsciente comenzó a purgar el veneno.

Orochimaru encuentra la genética Uzumaki curiosa, principalmente caóticos, capaces de desarrollarse de formas muy complejas, la verdadera duda es cómo funciona ese códice de información, pero no es algo que vaya a tratar pronto, quiero tratar con eso en el apartado de Shippuden.

En el caso de Tsunade es más probable ya que ella sí tiene sangre Uzumaki, honestamente estoy considerando eliminar al hermano que vive en la luna porque eso solo potencia la teoría de los Otsutsuki son marcianos y debo decir que eso fue un punto en el que sentí que las cosas se iban a pique, así que sí no lo eliminó quizás lo cambie.


Naruto creyó que estaba muerto y estaba en el otro mundo, en serio, el abrumador y enloquecedor dolor, uno que hacía que el dolor de los huesos rotos se comparará con un golpecito, desapareciera sin dejar rastro, se sentía tan descansado y relajado, sin tensión, podía respirar con normalidad (Algo que no había podido hacer por el veneno en su cuerpo) y sus ojos no le dolían por el abuso que les había dado, así que ese instante en que creyó estar muerto no fue tan malo, luego notó que estaba en una cama de hospital y no supo sí eso le hacía sentir mejor o peor.

— ¿Cuánto tiempo estuve fuera? —Sentía la garganta seca y la voz se escuchaba rasposa, claramente había pasado un buen tiempo desde que había hablado, aunque considerando cuanto había gritado a Sasuke quizás no era la mejor pista que seguir.

— Tres días enteros —Una voz sonó en la habitación, sí, Naruto ni siquiera había visto sí había más personas dentro de la habitación, Shikamaru estaba a su lado sentado mientras bebía algo de un termo, café, seguramente— Eres un bastardo afortunado ¿Lo sabías? —Cuestionó con una sonrisa mientras se acercaba para revolverle el cabello— Cualquier otra persona que hubiera hecho lo que hiciste habría muerto, ya sea por el dolor o porque su cuerpo no aguantó el reponer su chakra tan rápido constantemente —Le aclaró el chico con una sonrisa suave, aliviado de que su amigo estuviera vivo y despierto— Creímos que entrarías en un coma, que solo fueran tres días perdido es suave en realidad —Aseguró mientras ayudaba al rubio a levantarse.

— Dime de lo que me perdí, siempre que me despierto de estar tanto tiempo inconsciente no sé qué es realidad y qué es un sueño —Aceptó el rubio mientras se levantaba de la cama, sentándose en esta antes de ponerse de pie notando que estaba vestido con un pijama de holgados pantalones negros y una camiseta de tirantes naranja, no sabía quién lo había cambiado, pero lo agradecía porque la ropa era cómoda.

— Si... sobre eso... —Comenzó a rascarse la nuca en un gesto que ya sabía que significaba que estaba mucho más tenso y nervioso de lo que quería hacerle creer.

— Por favor no me digas que nos van a ejecutar por fallar esta misión, porque de ser así pudieron hacerlo mientras estaba inconsciente —Pidió, casi rogó mientras se levantaba, sintiendo un repentino mareo, sabía que por el kyubi realmente podía minimizar el daño que su tiempo fuera les hacía a sus músculos, pero incluso eso tenía un límite, se sentía agarrotado y comprimido de una forma para nada agradable.

— Nada de eso —Una nueva voz sonó en el lugar. Una voz que por desgracia Naruto conocía y no le alegraba precisamente, Danzo, el hombre extremadamente vendado había llegado en perfecto y absoluto silencio, sujetaba su bastón con firmeza y le dirigía una mirada bastante sería— Naruto, necesitó que me acompañes, hay detalles que es mejor tratar antes de que empiece la reunión del concejo, Tsunade nos estará esperando para poder tener esta conversación —Aunque no era una orden exactamente el tono dejaba en claro que negarse no era una opción— Lo mejor sería que no te esfuerces, puede que te hayas recuperado bien, pero es mejor no presionarte mientras te recuperas —Añadió mientras le dedicaba una sonrisa que intentaba ser bonachona, de un abuelo, pero era claro que este hombre no tenía nietos, o sí los tenía era claro que no era un abuelo bonachón.

— ¿No se supone que las reuniones del concejo sirven para tomar decisiones ¿Qué es lo que debemos tratar antes? —Logró preguntar con cierto nerviosismo, algo en esto le preocupaba, no sabía si era la situación o Danzo quien le provocaba esos nervios, algo que no le terminaría de gustar.

— Hay decisiones que tomar, sí, pero en su mayoría es para informar al concejo para que podamos actuar como un frente unido frente al exterior —Explicó el hombre con una mirada entrecerrada, aparentemente había notado que no estaba hecho para actuar como un abuelo bonachón— Ahora ¿Podrías acompañarme? —Volvió a preguntar, esta vez su tono sonaba mucho más forzado, cada vez era menos una petición y más una orden.

— Bien, mientras más rápido acabemos con esto más rápido podré irme a hacer otras cosas —Aceptó, un poco tenso porque claramente esto era grande, demasiado grande como para no ser algo que pudiera cambiar su vida, de nuevo.

El trayecto hasta llegar a una pequeña y simple sala fue silencioso, tanto que resultaba incómodo, la habitación tenía una pequeña barra, que probablemente serviría a modo de bar, la puerta estaba de espaldas a un sillón de los tres que había, la sala tenía el suelo negro, sillones blancos formando una especie de "C" entre los sillones se encontraba una mesa de granito negro que ya tenía algunos vasos sobre esta, Tsunade ya estaba esperándolos sentada en el sillón de la izquierda, un vaso en sus manos que contenía algo que Naruto dudaba que fuera té o café. Danzo ni siquiera esperó a que el rubio tomara asiento para sentarse frente a Tsunade, ambos lo miraron, vieron el sillón entre los dos, y lo volvieron a mirar, si, esto claramente lo ponía nervioso, se sentó en el sillón entre los dos y esperó.

— Hay que ir sin rodeos, Konoha tiene serios problemas —Empezó Danzo apenas dirigiéndole una mirada— Tras el ataque de Orochimaru habíamos tenido que desviar fondos para las reparaciones, pero lo peor es que nos vimos débiles, si perdemos credibilidad ante el mundo recibiremos menos misiones, menos misiones significa menos ingresos, menos credibilidad significa menos respeto, con menos respeto es más probable que volvamos a ser atacados, supongo que no necesito entrar en detalles sobre el por qué esto es malo —Explicó el hombre vendado con una expresión oscura, y Naruto no pudo evitar tragar en seco ante el entendimiento de lo que había ocurrido y significado.

— Y si lo de Sasuke se hace publicó... —No era necesario adivinar que eso dejaría la credibilidad de la aldea por los suelos, y ya podía imaginarse lo que pasaría.

— Cuando, no sí —Corrigió Tsunade con una expresión amarga— Debido a nuestro acuerdo con Kumo y Suna no podemos esconder esto bajo la alfombra, pero eso es un problema con una solución fácil, demostrando nuestro poder al resto del mundo, el segundo problema es el que no tiene una solución tan simple —La mujer de ojos miel lo miró directamente antes de suspirar profundamente.

— Perder a Sasuke implica que no tenemos un clan del que dependían dos fuertes alianzas comerciales, lo que significa que esas alianzas caerán, incluso podrían desencadenar una guerra —Naruto pudo sentir su sangre caer de golpe, no necesitaba verse en un espejo para saber que se había quedado blanco como papel— Debido al funcionamiento de la alianza con Suna hablarán mucho, pero no actuarán hasta que Kumo lo haga, intentarán tener un papel secundario, pero si ofrecemos una solución a Kumo tendremos que aplicar la misma a Suna, de lo contrario estaremos haciendo un desaire que bien podría provocar otra guerra —Naruto podía sentir el sudor frío recorriendo su cuello, estaba seguro que esto no podía ser bueno para su recuperación.

— Hay una solución ¿Verdad? —Odiaba que su voz saliera como un susurro ahogado, estaba rogando, porque es cierto, él nunca había estado en una guerra, pero no era idiota, o no tan idiota como para no entender la magnitud, haría que la invasión que tuvieron fuera un juego de niños en comparación con lo que ocurriría— Tiene que haberla...

— La hay, y ahí es dónde tú tienes un papel que jugar —Aseguró Tsunade mientras su expresión se volvía más y más agría— Konoha no cuenta con otros clanes a los que pueda recurrir con el renombre necesario para tomar el lugar de Sasuke en esas alianzas matrimoniales, el único clan que puede tomar el lugar del clan Uchiha es...

— El clan Uzumaki —Danzo y el propio Naruto completaron por ella, mientras que el concejal tenía seriedad en su voz, el rubio tenía comprensión y temor en su voz— La única opción que nos queda es que tu tomes el lugar de Sasuke en esas alianzas, tomar sus matrimonios —El hombre explicó con un tono frío— Si decides aceptar creo que sobra decir que se te seguirá aplicando el recuento de extranjeras y locales, pero no pensamos presionarte, es tu decisión si aceptas o no —Aclaró, pero Naruto no podía prestarle la debida atención, no con lo que le estaba diciendo.

— ¿Hay... hay otra solución? —La pregunta le salió como un susurro.

— Ninguna tan clara —Admitió Tsunade mientras cerraba los ojos por un instante— Independientemente Kumo gritará, hará mucho ruido incluso cuando el nuevo acuerdo sea mejor que el anterior, pero eso es algo por lo que no debes preocuparte —Intentó aliviarlo Tsunade, no lo logró.

— ¿Puedo... puedo pensarlo un momento? —Tragó en seco mientras apretaba sus manos de forma que se clavaba las uñas en sus palmas.

— Por supuesto, lo mejor sería que tuvieras una respuesta antes de mañana, para tener la oportunidad de hacer una reunión de concejo lo más rápido que se pueda —Con esas palabras ambos desaparecieron en un shunshin, y la puerta de la habitación se había cerrado con seguro, era inútil ya que podía usar el hiraishin, pero era claro el mensaje "No confiamos en que no te irás"

Suspiró mientras pensaba, claro, en apariencia no era un gran cambio, casarse con unas cuantas personas más (¿Qué tan tristes eran las cosas que podía decir eso sin sentir nada?), pero significaba más, más matrimonios significaban más compromisos, más responsabilidades, más presión, menos libertad, cada vez su pensamiento de que a la aldea le daría igual si dejaba de ser shinobi siempre que se pusiera a repoblar el clan se sentía más real, si aceptaba entonces la alianza dependería únicamente de él, quizás lo único que evitaría una siguiente gran guerra sería él, ¿En qué momento se había vuelto tan importante políticamente que simplemente negarse podría desencadenar miles o millones de muertes?, quizás lo más triste era que Orochimaru había tenido razón en algo, no era libre, se había sentido tan bien, tan libre, simplemente peleando, atacando con brutalidad, eso se había sentido grandioso, aunque quizás lo más grandioso fue que no lo vieron con miedo ni odio, era solo algo más que reconocer en él. Todo esto podría haberse evitado si hubiera podido traer a Sasuke con él, pero no estaba siendo justo consigo mismo, peleo, peleo en cada batalla, perdió chakra a montones, llevo su cuerpo y chakra al límite, y ante la falta de mención de pérdidas de vidas por parte de Shikamaru debía suponer que todos sobrevivieron. Ahora más que nunca extrañaba cuando no era nadie, que podía largarse y no mirar atrás, o quizás se sentía así porque todo era gracias al rinnegan y no por quién era por sí mismo.

— ¿Entonces por qué no simplemente te largas? —El zorro le habló, un tono aburrido y cansado— Hasta donde entiendo, cualquier territorio de este mundo te aceptaría con los brazos abiertos —Gruñó antes de volver a recostarse e intentar dormir.

Si, podía largarse a cualquier lugar, a cualquier país, y le aceptarían por el rinnegan con las condiciones que él quisiera, pero todo sería gracias al rinnegan, y no sería diferente a lo que Sasuke estaba haciendo, volverse un traidor, y Naruto tenía sus pensamientos sobre eso.

— Nunca sería aceptado, traiciona una vez, traicionarás siempre —Quizás era exagerado, pero no creía que pudieras confiar en alguien que traicionaba, no porque no quisieras confiar, sino porque una parte de ti no podría ignorar nunca que ya traicionó antes, te sería imposible no pensar que en realidad nada lo detendría de volver a traicionar— Tengo una respuesta —Dijo en voz alta, bastante seguro de que en realidad nunca lo habían dejado solo, gracias al reloj en una de las paredes sabía que habían pasado al menos unos cuantos minutos, en realidad había estado en sus pensamientos más tiempo del que creyó.

— ¿Y esa sería? —Tsunade y Danzo aparecieron en un parpadeó, la mirada del hombre fija en él, esperando, Naruto solo podía notar la tensión del hombre gracias a la detección de emociones del biju en su interior, pero no podía notar la forma en que apretaba su bastón, la tensión en sus hombros.

— Antes que nada, ¿Puedo preguntar algo? ¿Cuándo tendrán que hacerse efectivos estos matrimonios? —Pidió mientras retorcía sus manos, sabía que estaba haciendo, a que se estaba condenando, pero eso no lo hacía más fácil.

— Cuatro, quizás cinco años, es lo más que se puede retrasar, y tendríamos que darles a las naciones una solución mucho antes —Ofreció una respuesta mientras lo miraba detenidamente, quizás era porque solo tenía un ojo, pero eso ponía muy nervioso a Naruto sobre Danzo, la forma en que lo miraba.

— ¿Si pudiéramos recuperar a Sasuke antes de eso podríamos regresar los acuerdos a lo que era originalmente? —Cuestionó mientras se mordía el interior de su mejilla, ambos adultos levantaron una ceja en una pregunta muda.

— Podríamos, si, aceptó que es posible, pero improbable ¿Por? —Aceptó Tsunade mientras mantenía su mirada fija en él, una parte de Naruto se preguntaba sí estaba preparada para noquearlo en caso de que se negara.

— Acepto, pero no pienso dejar a Sasuke ir, no sé si por camaradería o por mezquindad, pero tengo pensado arrastrarlo de nuevo aquí —Admitió, odiaba que Sasuke lo hubiera hecho coincidir con el kyubi en que los Uchiha eran un dolor de cabeza, pero tenía pensado hacer pagar a Sasuke con creces— Incluso si tengo que arrancarle los brazos y las piernas —Gruñó mientras dejaba, por un instante, que la furia brotará de su sistema, sentía enojo, demasiado, tenía que entrenar para liberar un poco de esta.

— Mientras su aparato reproductor funcione nos sirve, no importa si es invalido —Admitió Danzo con un encogimiento de hombros, lo que solo hacía más cierto que a la aldea no le importaba si Naruto decidía dejar la vida shinobi si eso significaba que pasaría las veinticuatro horas repoblando el clan— Tendremos que detallar los detalles con el concejo, pero podremos llegar a algo —Aseguró mientras la tensión sobre su cuerpo disminuía más, casi podría parecer que se había relajado— Lo que nos lleva al segundo punto que tratar —Suspiró pesadamente antes de mirar a Tsunade de nuevo.

— Pese a que hay muchas noticias que debo darle al concejo hay dos que creo que tienes que estar enterado antes de eso —Había un algo en los ojos miel que le decía a Naruto que estaba guardando secretos, demasiados— Sobre los prisioneros que trajeron —Se debía sentir mal, Naruto lo sabía, especialmente cuando sabía cuál era el destino de estos, pero cuando era su oportunidad de encontrar a Sasuke y Orochimaru para resolver esto no podría importarle menos— Sus memorias no nos sirven de nada —Soltó un pesado suspiro.

— ¡¿Qué?! ¡¿P-pero cómo?! —Naruto no pudo evitar gritar al escuchar a la rubia Senju, tenían a los Yamanaka, al mejor grupo de interrogadores del mundo shinobi, cómo es que no podían obtener la información.

— Los Yamanaka se infiltraron en su cerebro y los resultados fueron... infructuosos —Danzo tomó la explicación de la Hokage— La chica directamente no tiene recuerdos de su tiempo bajo el mando de Orochimaru, en realidad casi no tiene recuerdos —Empezó el halcón de guerra con una mueca agriada— Los únicos recuerdos que tiene son los que involucran a una hermana menor, y los Yamanaka creen que son recuerdos que se negaron a ser borrados junto al resto, de lo contrario habría perdido la totalidad de su mente, debido al reporte del líder de escuadrón de la misión, Shikamaru Nara, suponemos que se debió al uso sin práctica del camino humano —Explicó mientras la sangre en Naruto se helaba.

— ¡Maldita sea! —Se lamentó mientras golpeaba sus muslos con sus puños, sabía que lo que fuera que hubiera hecho con el Ningendo había sido peligroso y había sido improvisado, y que por lo mismo tendría consecuencias, pero no había creído que haría esto.

— Aunque es cierto que tu intervención no nos facilitó el trabajo tenemos razones para sospechar que en caso de no hacerlo tampoco habría funcionado —Tsunade habló ahora, su expresión llena de amargura— El chico también tenía la memoria dañada, aunque no de forma tan absolutista como la chica, si tuviera que comparar, convirtieron su memoria en queso gruyere, cosas puntuales, todo lo que nos serviría para poder encontrar a Orochimaru, sus guaridas, saber qué planes tiene, quiénes son sus espías, sus tratos con otros, todo eso desapareció, sabemos que es un bastardo leal, pero nada útil —Explicó la mujer de grandes pechos mientras masajeaba el puente de su nariz.

— Tenemos motivos para creer que fue una contramedida de Orochimaru, probablemente habría hecho lo mismo con la chica sí no te hubieras adelantado —Descartó el hombre vendado con un movimiento de mano— Debimos imaginarlo, si fuera tan fácil atraparlo lo habríamos hecho hace mucho, pero hay algo más sobre esos dos que debemos tratar —Le dirigió una mirada a Tsunade, aparentemente estaban turnándose para dar la información de determinadas formas, lo que le permitía ver a Naruto hasta qué punto habían coreografiado esta conversación.

— Dado el historial de Orochimaru de hacer experimentos genéticos investigamos, el chico es un Kaguya, el último de los suyos, supongo que sabes lo que esto provoca —La mujer cerró los ojos por un segundo al ver la expresión de desconcierto pintada en el rostro del rubio— Y aunque la chica ha sido parte de experimentos hay algo más importante... es una Uzumaki —Proclamó logrando que la expresión ya de por sí desconcertada de Naruto se volviera de shock.

— Al país del fuego le gusta hacer las cosas por las buenas, con el mínimo de chantaje o tortura para obtener resultados —Explicó Danzo con un encogimiento de hombros— Por lo que al chico Kaguya se le ofreció entrar por las buenas o por las malas en el programa de restauración, independientemente de lo que haya elegido no tendrá las mismas libertades que tendrían los otros clanes en el programa —Añadió mientras hacía un gesto desdeñoso con las manos.

— Independientemente de todo, dado el... estado de la chica, Tayuya, se consideró que pese a su condición sería para volverla prisionera de guerra, se consideró que lo mejor era mantenerla bajo la custodia de su clan —Y Tsunade lo señaló como si él no pudiera entender qué es lo que esas palabras significaban, aunque quizás por el shock y la sorpresa era razonable.

— ¿Entonces no podríamos usarla para el compromiso con Kumo? —Preguntó Naruto, odiaba tener que cargarle el muerto a alguien más, especialmente en esto, pero era difícil no querer buscar una solución que no le quitará su libertad.

— A Kumo le interesa el rinnegan, aunque exista la posibilidad de que obtengan el rinnegan prefieren tener algo parecido a la certeza —Danzo negó con la mano, un suspiro aburrido saliendo de su boca— Sin contar que por norma general en estos acuerdos es la mujer la que pasa a vivir en el país de su marido, no podemos perder de vista a la chica, no solo por su estado mental, sino por el riesgo de que Orochimaru haga algo a través de ella —Aseguró, por lo que ahí se iba el plan de Naruto de aliviar sus problemas— Podría comprometerla dentro de la aldea, desposarla, o incluso dejarla sin comprometer —Le señaló el hombre con un encogimiento de hombros.

— Y el chico, Kimimaro Kaguya, dijo que aceptaría entrar en el programa de restauración siempre que pudiera volverse un clan vasallo... —Empezó Tsunade, claramente con la intención de dar un discurso semejante al que había dado Danzo, pero Naruto la interrumpió.

— ¿Clan vasallo? —Salió como un quejido, era ridículo lo que estaba escuchando— Eso no se ha usado desde la época de guerra de clanes ¡Y solo lo sé por las clases de historia! —Eso había rozado el esclavismo en la antigua era, clanes enteros subyugados, siguiendo a otros como lo harían con un señor feudal.

— No necesariamente, el clan Uzumaki tuvo clanes vasallos, pero ciertamente tenían acuerdos mucho menos opresores de los relatados en la historia —Le cortó Tsunade con una mirada que intentaba suavizar la noticia, no estaba funcionando— Además de que Konoha en realidad tiene leyes sobre los acuerdos de clanes vasallos, son leyes que no han recibido atención desde la fundación de Konoha, pero que, técnicamente, siguen siendo validas —Naruto no pudo evitar parpadear una vez, dos veces, tres veces antes de volver a hablar.

— ¿Pero por qué quiere eso? —Naruto no conocía a profundidad lo que significaba que un clan se volviera vasallo de otro, no era información que fuera muy entregada en las clases de historia de la academia, sin contar que esa había sido la materia menos favorita del rubio.

— Al menos en Konoha eso tiene algunos beneficios, o utilidades —Mencionó Danzo con una mueca— Para empezar, incluso cuando un clan vasallo puede formar negocios propios lo normal es que ayuden a los negocios de su clan señor, por lo que se ahorran la responsabilidad de tener que buscar un modo de sustentar económicamente a su propio clan, claro, tienen que pagar un "impuesto" al clan al que sirven, pero hay regulaciones en Konoha sobre eso —Explicó el hombre, y si no fuera porque sabía que incluso con eso esto era más cercano a esclavitud consideraría haberlo hecho para ahorrarse los problemas que estaba teniendo— En el proceso renuncian a la representación en el concejo, el clan al que sirven hace de representante para su propio clan, así como todos los que le sirven ante el concejo, también entregan la capacidad al líder del clan al que sirven la capacidad de hacer arreglos matrimoniales por ellos según algunos acuerdos, y normalmente los herederos de ambos clanes se pondrían en los mismos equipos para que estos protejan a los del clan líder, hay muchas otras leyes, pero es lo básico —Explicó el hombre.

— Y déjeme adivinar, el clan para el que quiere ser vasallo es el Uzumaki, ¿Cierto? No me dirían todo esto si no fuera el caso —Dedujo Naruto mientras soltaba un fuerte quejido— Claro que llamé la atención del bicho raro —Se quejó mientras pasaba sus manos por su cara.

— Y dado lo... activo que es en su lealtad con Orochimaru, no creemos que pueda formar un negocio estable para su clan, y ningún otro clan estaría dispuesto a aceptarlo... —Naruto ahora estaba entendiendo por qué tenía que tratarlo antes de la reunión del concejo, y ahora quería volver a estar inconsciente, no llevaba ni dos horas despierto y ya era una pesadilla— Entre las condiciones que tendrá hay un sello en su nuca que podría matarlo, entre otros sellos para mantenerlo controlado, pero ese es el principal —Añadió mientras intentaba darle una sonrisa para liberar tensión, no estaba sirviendo de nada, pero Naruto lo agradecía, al menos le hacía saber que no estaba enloqueciendo porque él no podría haber imaginado esto.

— ¿La pregunta es si voy a aceptarlo? ¿Si me hago cargo de ambos? Si, así sea solo porque sé que dejarlos correr por ahí sería peor —Se quejó y esperaba, honestamente, que estas fueran las últimas malas noticias que recibiría en el día— ¿Hay algo más que deba de saber antes de la reunión del concejo? —Pidió, rogó, porque la respuesta fuera "no".

— Jiraiya quiere llevarte de viaje de entrenamiento por tres años, prepararte en caso de que Orochimaru o Akatsuki vuelva a dar problemas, pero hay algunos asuntos que requieren tu presencia en Konoha más o menos continua, esto es algo que tenemos que tratar, pero que en comparación con lo anterior parecía ínfimo —Naruto tendría que darle la razón a Danzo porque recién había escuchado el problema y ya tenía una solución pensada.

— Uso el hiraishin para volver a la aldea una vez al mes, entrego los avances para el complejo Uzumaki y cualquier trabajo que deba hacer, si es necesaria mi presencia para algo más —Esto incluso podría servirle para repartir sellos por el mundo, no dudaba de que le vendría maravillosamente poder aparecer y desaparecer por todo el continente si se necesitaba su presencia en algún lugar.

— Bien, yo debo preparar todo para la reunión del concejo, sé que Danzo quería decirte algo más, nos vemos en unas horas —Y con esas palabras como despedida Tsunade desapareció en un shunshin, Naruto se giró a ver al hombre vendado quien solo suspiró.

— Se ha asegurado que algunos... regalos, por parte del daimyo ya están en su hogar, igual que ya se hicieron algunas de las expansiones a la casa principal Uzumaki —Proclamó el hombre mientras se levantaba, como si el tema se hubiera zanjado en ese momento, y Naruto no podía entender por qué estaban haciendo esto, hasta que cierta parte de la conversación que acababan de tener sonó en su mente.

— ¿Qué habrían hecho si me hubiera negado? —Cuestionó mientras agachaba la mirada con entendimiento— Esto es para comprarme... —La aldea de Konoha y el país del fuego prefería las cosas por las buenas, no podía evitar sentir que esto era para comprarlo, comprar su lealtad.

— Tienes razón, a la aldea le gusta las cosas por las buenas, pero también somos conscientes de que te estamos presionando, y el daimyo consideró que era mejor aliviar la presión de un activo valioso, en caso de que te hubieras negado habríamos aumentado la oferta —El hombre ni siquiera tenía una pizca de vergüenza en su expresión al admitir que esto era un soborno, o que si no podían comprarlo con esto subirían la apuesta— Ya que realmente no podemos evitar que te largues si eso quieres hay que recurrir a otras medidas —Sentenció con un gesto desdeñoso.

— ¿Por-por qué? ¿Cómo demonios valgo este gasto? —Cuestionó, era difícil imaginar que esto pudiera pagarlo algún día, solo la casa probablemente sería algo que lo mantendría en deuda eterna.

— Pese a que soy creyente de que la única gratificación de un shinobi por su trabajo, uno de este tipo, es la de saber que sus acciones benefician a su nación, reconozco que en ocasiones es bueno mostrar los frutos de ese trabajo —Mencionó el hombre sin siquiera inmutarse, como si no hubiera escuchado la pregunta de Naruto— ¿Tienes idea de los beneficios que trajo al país tus acciones? —Cuestionó con una ceja enarcada—. No solo tenemos una gran ventaja en las rutas comerciales gracias al conocimiento del terreno o por los permisos que obtuvimos en el país de las olas, nuestros comerciantes pueden vender más a mayores precios en el exterior, más misiones de escolta que son mejor pagadas, mejores productos, más misiones, no solo a la aldea sino a toda la nación ¿Cuánto dinero crees que esto ha traído a las arcas del país del fuego incluso cuando apenas está comenzando? —Naruto no pudo evitar tragar en seco— Tu... amistad con los chicos de Suna promete también traer beneficios ya que son prometedores en el futuro político de su nación, sin contar las propias ganancias que tus padres trajeron a la nación, sin contar el potencial de tus hijos, el camino comercial que elegiste para tu clan también promete muchas ganancias —La expresión del hombre era plana, pero Naruto podía decir que no era de quién se burla de alguien, sino de quien tiene que explicarle algo a un niño pequeño— Digamos que el señor feudal quiere que veas materializado una pequeña parte de las ganancias que traes al país, si eso es todo agradecería que terminemos esta charla aquí, tenemos que prepararnos para la reunión del concejo —Y con esas palabras desapareció en un shunshin.

— Carajo —Gruñó, nunca se había puesto a pensar realmente cuánto dinero traía esas cosas a la nación..., y francamente ahora no quería saberlo ya que aparentemente estaban dispuestos a usar parte de esa fortuna para sobornarlo.

Deidara quería gruñir por sexta vez, técnicamente había llegado a Iwa hacía una hora, su pájaro de arcilla gigante había estallado en el cielo para que no creyeran que era un ataque terrorista, pudo haber llegado hacia dos días, pero se había quedado dormido en algún punto (En su defensa para el gasto de chakra que había hecho para construir ese pájaro probablemente se quedaría dormido en cualquier momento), así que tuvo que dar la vuelta y regresarse por su camino para ir a la aldea, no sin antes dedicar algo de tiempo a dormir y comer para evitar esto de nuevo, ahora, la razón por la que esto había empezado con un "Técnicamente" era porque llevaba en las puertas de la aldea retenido desde hacía una hora porque "creían" que no era alguien de Iwa, pese a que había dado sus malditas credenciales y, peor aún, estos tipos habían sido sus compañeros en la academia, de pronto es que recordaba por qué había considerado desde hacía tiempo volverse terrorista, y aumentaba sus remordimientos por irse de Konoha.

— Atsu, Kiwochi, llevo más de un mes en una misión fuera, pueden preguntarle a Kurotsuchi, al Tsuchikage, y a su secretaría —Gruñó mientras golpeaba la pared detrás de él con su nuca. Estaba esposado en algo que se parecía más a una sala de espera que otra cosa— Llevo más de veinticuatro horas despierto y solo quiero tumbarme y dormir, así que me dejan pasar o me arrestan, por favor —Volvió a gruñir. Y estos eran de sus compañeros menos molestos con él— Incluso notifique de que volvería antes de la misión.

— No lo sé, Atsu... —Se burló Kiwochi con una expresión de burla de alguien que claramente estaba disfrutando de aprovechar su posición de poder— Llevamos tanto tiempo sin ver a Deidara, incluso juraría que ya habían dicho que se había unido a los terroristas —Proclamó.

— Esas son palabras mayores, mocoso, estás hablando del nieto del Tsuchikage y de mi sobrino, ¿Tienes pruebas para esa afirmación? —Una voz sonó desde la puerta que daba ingreso a la aldea de la roca, Deidara no pudo evitar sonreír al escuchar la voz de su tío Han— Llevamos esperando a Deidara por días, acaba de volver de una misión importante y tiene información delicada que entregar ¿Tienes idea de lo que significa haberlo retenido aquí sin motivo? —Cuestionó con una mirada de advertencia.

— Escúchame monstruo —Habló Atsu mientras daba un paso adelante hacia Han— Nuestro trabajo es retener a cualquiera sospe... —Antes de que pudiera terminar la oración su cabeza había sido estrellada contra la pared de roca detrás de él por parte del jinchuriki del cinco colas, con tanta fuerza que la pared se agrietó.

— Ya tengo demasiado con venir a esta jodida aldea para ser parte de una reunión con el Tsuchikage, no pienso tolerar que me insulte un mocoso que aún se mea en los pantalones, y mucho menos que alargue este martirio porque no dejan pasar a la única persona que hace falta para que pueda irme, así que o lo sueltan ahora, o los mato a todos ustedes, decidan —La voz de Han era fría, letal, una presión inmensa llenando la sala, en momentos como este es que nadie cuestionaba que Han odiará a los humanos, era difícil creer que esta presión era de alguien que sintiera cualquier cosa menos que repulsión por los presentes— Deidara, vámonos, ya me cansé de estar aquí —Ordenó sin siquiera dirigirle la mirada.

— Recuérdame por favor que le diga de esto al abuelo, sería el colmo que luego me arrestaran —Bufó el rubio mientras se liberaba de las esposas (Un viejo truco que había aprendido después de que algunos compañeros en la academia lo hubieran esposado dentro de un casillero, repetidamente), y se las lanzaba a Kiwochi.

Deidara agradecía, enormemente, que fuera su tío Han quien hubiera venido, estaba seguro de que su abuelo lo habría culpado por hacer que los guardias perdieran el tiempo, y si de casualidad el tío abuelo Roshi estuviera aquí probablemente alguien si hubiera muerto, Han le dio un abrazo de lado antes de revolverle los cabellos, era en momentos como este que se preguntaba si su tío lo consideraba humano porque siempre había sido más amigable con él, y que nunca había dicho que Deidara fuera una excepción a su afirmación de odiar a los humanos. Otra cosa que era muy buena de viajar con su tío era que casi nunca era necesario hablar, podían formar agradables silencios entre ellos, pero había algo raro, no solo que podía sentir una energía un tanto rara viniendo de parte de su tío, ansioso, nervioso, y eso era extraño porque normalmente su tío era la encarnación de la calma (Salvo cuando estaba en multitudes en cuyo caso parecía una bomba a punto de explotar), pero eso no era lo más raro: Eran las miradas que estaba recibiendo de algunos transeúntes. Deidara estaba acostumbrado a las miradas enfadadas, de desprecio, de desagrado, incluso de subestimación, por lo que ni siquiera las registraba para sí mismo, por eso eran extrañas las que sentía; Curiosas, reconocimiento y en algunos escasos puntos respeto. No hacía falta decir por qué era raro sentir esas miradas cuando eres conocido como el hijo bastardo del mayor enemigo de la nación que violó a la ilustre y querida hija del líder de dicha nación.

— Por poco te pierdes el cumpleaños de tu madre, chico, sí decidiste mentirle al viejo Onoki solo para volver a tiempo no te culparía —Se río por lo bajo Han mientras le dirigía una mirada, no porque el silencio fuera incómodo, se dio cuenta, era porque quería que no se fijara en las miradas que recibía.

— Tío Han, ¿Qué paso mientras no estuve? —Preguntó en un susurro mientras se acercaban al edificio de gobierno (El equivalente a la torre Hokage), un edificio extremadamente cuadrado y tosco. Sabía que su abuelo había dicho que la separación haría que la aldea también lo extrañara, pero él mejor que nadie sabía que eso era pura basura— ¿Roshi está bien? —No quería pensar lo peor, pero tampoco descartaría que hubiera llegado justo a tiempo para volverse jinchuriki.

— Lo sabrás una vez lleguemos, esos malditos idiotas lamebolas —Se quejó Han mientras dirigía una mirada de advertencia a los tranéuntes quienes por fin apartaron la mirada, no pudo evitar recordar algo ante esto; Cómo Naruto había notado que las miradas cambiaban cuando sus ojos se hicieron conocimiento público, como las miradas iban cambiando poco a poco, y exactamente eso estaba pasando aquí, aún estaban esas miradas menos que amigables, pero ahora había más, y eso lo puso nervioso.

Cuando por fin bajaron las escaleras hasta la subterránea oficina del Tsuchikage, sin que pudiera recoger al menos un par de las galletas que Katharina siempre tenía en su escritorio para al menos poder comerse sus propios nervios, se encontró con que toda su familia estaba allí (Lo que lo hacía incómodo porque al menos un buen número de hombres en su familia eran más bien robustos y la propia oficina era más bien pequeña), desde el río abuelo Roshi, el tío Han, el tío Shiro, incluso Kurotsuchi y Kozuchi, y este último sí tenía galletas (Si, Deidara sabía que estaba siendo infantil, pero esas galletas eran deliciosas), si bien esto facilitaba el reunir a la familia para que le ayudaran a dar las noticias sin que al viejo le diera un infarto también lo ponía nervioso, porque ciertamente él no lo pidió en su carta y no los había llamado, cada vez estaba más seguro de que algo grande había ocurrido mientras estuvo fuera.

— Deidara, al fin llegas, no creí haberte criado para ser tan impuntual —Le gruñó el viejo Onoki, pero no pudo evitar notar que no era igual a cuando lo reñía en el pasado, se parecía más a cómo sonaba cuando lo hacía con Kurotsuchi o Kozuchi...

— Lo retuvieron en la puerta del este —Proclamó Han mientras le dirigía una mala mirada a su padre, si, algo había pasado y cada vez le gustaba menos a Deidara.

— Bien —Chilló un poco más agudo de lo que le gustaría, una sonrisa y mirada tensa en su cara porque esto estaba siendo mucho más de lo que había estado esperando— Creo que lo mejor sería que te diera el reporte junto al resto del concejo, es información que creo que te encantaría escuchar, ya, ahora mismo, por favor —Rogó, porque sabía, podía sentir que esta conversación con su familia llevaría a un punto preocupante.

— ¿Pudiste recolectar información? Debido a que tuviste que partir con prisa pensé que no habrías obtenido nada —Su tío Shiro proclamó, por suerte para él seguía teniendo el mismo tono amargado de siempre, Deidara no creía poder soportar que algo más cambiara pronto.

— Deidara, hay algo que sería mejor que habláramos como familia antes de una reunión del concejo —Intervino Onoki mientras miraba a su nieto, quien tenía una expresión nerviosa y temerosa, debió imaginarse que notaría que algo raro pasaba.

— Viejo, por favor, llevo más de veinticuatro horas despierto, solo quiero dormir, estoy seguro de que cualquier conversación familiar que debamos tener puede esperar —Pidió porque había algo, un instinto, que le decía que esta conversación sería una que marcaría su vida y prefería postergarlo tanto como fuera posible.

— No creo que... —Intentó Onoki antes de ser interrumpido por su hijo Shiro (¿Desde cuándo sus hijos dejaron de respetarlo? Mejor no respondan la pregunta).

— Si el chico está tan seguro de la importancia de la información que tiene lo mejor sería que la diera primero, especialmente porque es mejor ahora que la información está más fresca —Opinó mientras Deidara asentía frenéticamente de acuerdo.

— Bien —Suspiró mientras hacía un jutsu de tierra y una de las paredes a su lado se abriera dando lugar a un pasillo oscuro que daba a la sala de guerra.

La sala de guerra era una habitación cuadrada donde se reunía el concejo de Iwa, siendo la nación de la tierra una militante extrema daba a que en realidad los civiles apenas tuvieran lugar en dicho concejo, literalmente era uno solo que era el representante civil, el resto del concejo estaba formado por las diferentes piezas de importancia militar en la aldea, por esto, y porque en realidad las figuras importantes en términos militares eran menos de los que uno podría esperar es que la habitación en realidad casi siempre estaba más vacía que llena, Onoki flotó hasta el centro de la estancia donde ya los habían estado esperando los miembros del concejo sentados en los costados de la habitación escondidos por las sombras porque la única parte realmente iluminada en la habitación era el centro.

— Si creían que no había recolectado nada de información ¿Qué hacen ellos aquí? —Cuestionó Deidara a Kurotsuchi a su lado.

— El abuelo ya los había mandado llamar por una filtración de información confidencial a la aldea —Susurró ella de vuelta con un encogimiento de hombros.

— Sé que les cite aquí por otros motivos, pero Deidara Bakudo regresó de su misión de infiltración y considera que la información debe ser compartida en la brevedad —Hizo un gesto hacia Deidara, quien estaba escondido entre las sombras de la habitación como casi todos los presentes, caminó con pasos decididos hasta el centro de la habitación, su abuelo se apartó antes de acomodarse junto al resto de su familia.

— Mi misión consistió en averiguar por qué la alianza entre Suna con Konoha no se rompió tras la invasión, lo mismo con la alianza que dicha aldea tiene con Kumo —Empezó mientras se concentraba en un solo punto en la oscuridad para no sentirse tan nervioso— La misión no tenía tiempo definido para terminar, pero debido a que me tope de frente con los sannin Jiraiya y Tsunade consideré que lo mejor sería partir en la brevedad —No creía tener que explicar qué pensamiento había desencadenado eso, no era precisamente un secreto.

— ¿Pudo recolectar información relevante? —Cuestionó Souda Tetsuga, ministro de educación militar, su rama era capacitar a los genin, chunin, jonin y Anbu, además de encontrar profesores para cada escuadrón en la aldea, de voz seria y firme, aparentemente indiferente, Deidara solo lo conocía porque fue ante él a quien tuvo que entregarle su petición para aprender el jutsu prohibido del cuerpo de explosivos (Permiso que aún esperaba le dijeran si había sido aprobado o rechazado).

— Si, por lo que pude averiguar las alianzas eran bajo acuerdos matrimoniales —Ese tipo de alianzas eran conocidas por ser del tipo más difícil de romper, aunque las alianzas en el mundo shinobi no valían más que el papel sobre el que se hicieron los acuerdos, pero solían tener una marca de fe más fuerte que las otras, por decirle de algún modo— Bajo la intención de Konoha de restaurar dos clanes en concreto...

— Supongo que el primero es el Uchiha, aunque no se me ocurre que otro clan pueda tener importancia para esa aldea, los Senju ya están extintos —Le interrumpió Nagito Ryuuga, director general de operaciones jonin (Había uno para cada rango en Iwa, asignando misiones a equipos y escuadrones según vieran necesario).

— Correcto, ese fue uno de los clanes, el otro es el Uzumaki —Un jadeó sonó en la habitación, casi todos ellos aun eran lo suficientemente viejos para recordar al clan de la última guerra.

— La habanero sangriento tuvo un hijo o una hija —Habló Baki Komaeda, director general de operaciones chunin, todos los directos generales de operaciones shinobi tenían el mismo rango pese a que trataban a grupos de diferentes rangos.

— Si, no tengo información sobre el miembro del clan Uchiha, pero pude entablar contacto con el Uzumaki, así que pude recaudar información sobre él y su importancia para dichos acuerdos —Ofreció, podía sentir las miradas sobre él, cada gramo de atención puestos sobre él, si ya de por sí se sentía nervioso por lo que había notado ahora se sentía peor— El Uzumaki en cuestionó tiene un kekei genkai... —Sentía que estaba siendo redundante, pero sí eso le ayudaba a disminuir sus nervios lo aceptaría.

— Las cadenas de chakra de Adamantino, todos las recordamos de la última guerra —Seto Jonouchi, jefe del departamento médico (Había dos jefes, solo el que implicaba a los shinobi tenía un lugar en este concejo), le interrumpió.

— No —Admitiría que eso le había asustado, interrumpir a cualquiera de estos hombres bien podría representarle una degradación o un castigo a cualquier shinobi, a él que tenía tan mala fama, bueno, solo podría empeorar— Este en concreto tenía un doujutsu, uno que no es ni el byakugan ni el sharingan —Ahora si podía escuchar jadeos de los otros, bien, esto no era bueno.

— ¿Lo vio activo? ¿Podría dibujarlo? ¿Al menos describirlo? —Exigió Katsuya Naegi mientras, por los sonidos que escuchaba, estaba rebuscando salvajemente en su escritorio algo, resultó que estaba buscando un cuaderno y un bolígrafo, solo lo supo porque se lo lanzó a la cara, esto solo aumentaba lo poco que le agradaba el director general de operaciones genin.

— Era muy simple, color lila, tres anillos concéntricos, el último anillo apenas se podría diferenciar de una pupila —Describió mientras dibujaba el ojo, puede que fuera escultor antes que otra cosa, pero sus habilidades como dibujante y pintor no eran tan horribles, mostrando el dibujo al terminarlo a todos los presentes, su familia incluida— Ya que no tenía información sobre este preferí tener cuidado... —Y volvió a ser interrumpido, fantástico.

— ¡¿Qué?! —El grito no provino de ningún miembro del concejo, vino por parte de dos personas al mismo tiempo en donde estaba su familia, vino de Han y de Roshi— ¡¿Su nombre?! ¡¿Te dijo su nombre?! —Cuestionó Roshi mientras corría hasta estar frente a él, observando el dibujo como si hubiera visto un fantasma, y por la expresión desconcertada del resto de personas, mismas que se habían acercado para poder ver mejor el dibujo no era el único desconcertado.

— Rinnegan, creo que lo llamó... —Susurró temeroso para notar como la expresión de su tío abuelo y su tío se volvían de desconcierto total, casi pánico— Bueno, siguiendo con el reporte... debido a que coincidimos en una casa pública de baños —Iwa era mucho menos liberal en cuanto a actividades, si se enteraban de que había sido, además, en la casa del objetivo podrían creer que era homosexual, y en Iwa eso no era precisamente bien visto— Pude ver cierto tatuaje, uno que me recordó mucho a los sellos que tienen los jinchurikis del cuatro y cinco colas —Odiaba referirse a los pocos miembros de su familia que sentía que lo querían de esa forma, pero ante este concejo era mejor este tipo de lenguaje— Partiendo de la información que tenemos sobre los bijus y sus ubicaciones, puedo suponer que es el del kyubi —Incluso cuando Roshi se había movido para volver con su familia (Siendo arrastrado por Han), podía ver como se volvían más y más blancos cual leche.

— Carajo —Escuchó el gruñido de Roshi, y por las expresiones de su familia no era el único que no entendía que les pasaba a los jinchurikis de la familia.

— Con razón ni Kumo ni Suna están dispuestos a sacrificar esta alianza, el mocoso debe tener buenos genes, soportar al biju más fuerte, un doujutsu que ya de por sí son raros, y el potencial de una descendencia con las cadenas de adamantino —Suspiró el más calmado de todos ellos, Seto Jonouchi, probablemente masajeando sus sienes.

— Y se pone peor —Suspiró porque sabía que lo siguiente sería la gran bomba, la que bien podría provocarle un infarto a su abuelo, y a muchos otros miembros del concejo, hasta donde todos sabían el Relámpago Amarillo no había tenido descendencia, esto podría ponerlos histéricos— Descubrí quién es el otro padre del Uzumaki, ya está muerto, pero se una copia al carbón de su padre en apariencia —Sentía las palmas de sus manos sudar, en realidad estaba sudando mucho ¿Cuándo comenzó a sudar tanto?

— ¿Quién es? Para que lo definas así debe ser alguien muy famoso ¿No? —La voz de Souda Tetsuga resonó en el aire, aumentando los nervios crecientes que sentía.

— Es el Relámpago Amarillo de Konoha, Minato Namikaze —Y lo soltó, hubo jadeos, pero no los gritos de sorpresa que esperó, él se giró a ver a su abuelo, intentando ver sí había cometido algún error, solo para encontrárselo con cara de espanto, pero no el horror abyecto que esperaba, parecido, pero no idéntico, mirada que compartía con todos los otros miembros de su familia.

— ¿Y se llevaron bien? Digo, los hermanos no siempre se llevan bien, y es algo que podríamos usar a futuro —El tono de Katsuya Naegi no era el burlón que normalmente usaban cuando se burlaban de que era un bastardo del cuarto Hokage, parecía genuinamente interesado.

— ¿Disculpe? —Preguntó. ¿En qué momento se había vuelto tan difícil respirar para él?

— Si —Siguió hablando, ignorando que toda la familia del chico hacía gestos con las manos para que dejara de hacerlo— Su relación fraternal podría ser útil para el país de la tierra, se supone que los hermanos menores deben respetar a los mayores, puede que no compartan a la misma madre, pero no tiene importancia ¿Cierto? —Cuestionó sin notar la expresión que tenía Deidara, o como toda la familia del Tsuchikage, el mismo incluido, intentaba hacerle callar— Claro, podría sentirse rencoroso porque tu madre violó a tu padre, pero supongo que los genes compartidos son más fuertes —Y sin saberlo soltó el golpe de gracia.

No sabía que era, si la falta de sueño, el hambre, la sed, los nervios, el cansancio, o que ahora no podía escapar de una verdad que había intentado desesperadamente enterrar e ignorar, pero su respiración se había vuelto claramente agitada, miró a su familia, intentando obtener algo, esperar que lo negaran, pero sus expresiones (Las de aquellos que tenían la edad para entender esto, dígase todos menos Kozuchi) le hacían saber que este era el asunto que querían hablar antes, que esto era verdad, que ahora había una confirmación real, cerró los ojos un segundo, parpadeó por un intento de atenuar las luces cegadoras, pero cualquiera que lo viera podía decir que eso no fue lo que ocurrió, su cuerpo chocó contra el suelo, inerte, desmayado.

Orochimaru miraba con curiosidad el cuerpo frente a él, Sasuke había llegado apenas hacía un par de días y se había desmayado al instante, fue una suerte que hubiera alcanzado a entrar en el rango de su jutsu de barrera rastreadora antes de caer desmayado de lo contrario podría haberse quedado allí durante toda la noche, y considerando el estado de Sasuke (Su cuerpo desnudo) contra la inclemente lluvia helada que había caído en la zona... habría desencadenado en su muerte más que seguramente, como mínimo habría podido desencadenar una decaída en su salud a un punto delicado, se había despertado al día siguiente y se había dado una ducha en las regaderas de la prisión (Esta guarida suya en particular era una que borraba cualquier rastro de intimidad y privacidad), y ahora estaba frente a él mientras observaba la marca de maldición con curiosidad. La marca de maldición no se veía diferente a como la había plasmado, parecía extremadamente normal lo que le provocaba más y más dudas.

— ¿Puedo tener ropa? —Cuestionó Sasuke logrando que Orochimaru volviera a centrar su atención en él como individuo, desnudo en mitad de las duchas, piernas separadas, sus manos ahuecando con pena su entrepierna, su mirada fija en el suelo.

— Podrás tenerla después de un chequeo médico completo, hay que estar seguros de que tu salud no peligra —Proclamó con voz suave mientras presionaba su mejilla con su palma en un gesto que tenía que resultar reconfortante— Por favor sigue por ese pasillo, la tercera puerta a la derecha, allí haremos el chequeó, tengo que darle a Kabuto algunas instrucciones —Pidió antes de separarse y mirar hacia la puerta mencionada.

Mientras Sasuke seguía sus instrucciones y caminaba a la puerta, aun cubriendo su entrepierna de una forma que solo lo volvía más lento al caminar, Orochimaru se giró a ver a su asistente, su expresión amigable y amable había desaparecido. Si bien es cierto que tiene fama de buscar chicos jóvenes lo que había provocado rumores de que tenía gustos cuestionables, no tenía ningún interés en la sexualidad humana, mucho menos en mantener el acto carnal con chicos jóvenes, pero eran más resistentes, no, esa palabra era un error, eran más flexibles, y los hacía mejores candidatos a la hora de hacer experimentos genéticos, y en su experiencia los chicos jóvenes eran más fáciles de manipular, por lo mismo tampoco podía entender, aunque lo intentara, por qué el chico parecía tan avergonzado por estar desnudo, solo era su cuerpo, todos tenían uno, se giró a ver a Kabuto, su expresión convertida en algo más molesto.

— Nada raro —Gruñó el sannin mientras hacía una mueca.

— ¿Qué es lo que busca, Lord Orochimaru? —Cuestionó Kabuto a su maestro sin despegar la mirada de un portapapeles, revisando el chequeo médico que tendría que hacerle al chico.

— La marca de maldición actuó de forma extraña —Susurró mientras llevaba su mano a su boca para comenzar a apretar con sus dientes la uña de su pulgar— Pude contactarme con tres personas, no tengo duda de que el estado de Kimimaro, entre la vida y la muerte, fue lo que me permitió ponerme en contacto con él, incluso fue lo que me permitió dañar su memoria —Explicó con un susurro, las marcas de maldición estaban en una línea muy delgada de la vida y la muerte del usuario, tanto que le servirían "revivir" a partir de ella y adquirir conocimientos de sus seguidores en sus últimos momentos— Sasuke podría ser por su propio potencial en el genjutsu, o su estado mental —No era ciego a los daños que podría provocar el tsukuyomi, eso podía facilitar su conexión.

— ¿Cómo es que pudo contactar con Naruto? Él no tiene una marca de maldición —Cuestionó Kabuto, y ese era el punto más problemático en opinión del chico de lentes.

— Es un jinchuriki, para ellos el paisaje mental, una conexión entre dos mentes, no es tan complicada, si debo apostar absorbió el chakra de la marca y permitió una apertura temporal —Orochimaru descartó con un gesto perezoso— No puedo ponerle la marca de maldición, necesito imprimir su alma con una parte de la mía, y el zorro podría destruirla al instante, no sé cuál sea el estado del chakra natural —Añadió antes de que su alumno pudiera hacerle esa pregunta, es por eso por lo que había dejado de intentar ponerle la marca de maldición cuando lo terminó de reconocer, sería una pérdida de tiempo y chakra— Lo que realmente me confunde es lo que le pasó a Sasuke, dijo que cambio de forma otra vez...

Eso era un misterio para Orochimaru mucho más interesante, las marcas de maldición no solían ser tan caóticas, adoptaban una forma según su usuario y de que clase fuera la marca, solo el cuerpo de Juugo había tenido tanta versatilidad a la hora de ajustar su cuerpo a las necesidades del momento, y estaba deseoso por aprender por qué había pasado eso y sí podía ser replicado.

— ¿Alguna prueba en particular a considerar? —Cuestionó Kabuto mientras asentía, revisando los papeles que tenía en sus manos.

— Una prueba de genética, no puedo descartar que lo ocurrido sea por una variación en sus genes —La respuesta salió apenas como un suspiro para el hombre antes de volver a mirarlo— Y una prueba de fertilidad, me niego a sacrificar mis posibilidades de investigar el sharingan solo porque no pudo dejar preñada a una mujer —Y con esas palabras se fue, dejando que Kabuto se encargara de eso, claro que sabía que Kabuto aprovecharía cualquier cosa para hacer menos a sus otros aprendices, Kabuto era un alumno celoso, pero no le importaba, quería romper al Uchiha para minimizar los riesgos a futuro, especialmente si quería usar a Sasuke como cebo para obtener a Naruto y al rinnegan.

Naruto se sentía extraño, había llegado a su casa y se había encontrado con que había trabajadores construyendo una nueva sección de su casa, y eso sin contar que ya habían hecho una ampliación desde allí, se había quedado inconsciente durante tres días, ni siquiera estaba seguro de que pudieran construir completamente una nueva habitación de una casa en el doble de ese tiempo y habían añadido toda una sección, sin contar con que había cajas de lo que solo le quedaba suponer que eran regalos, saber que era un soborno, o quizás un chantaje, lo hacía sentir extraño. Claro, después del incidente del pergamino podía ver por qué la gente pondría en dudas sus lealtades, pero de eso a que estuvieran haciendo algo de esto porque creían que se marcharía como un traidor le hacía sentir extraño, un sentimiento que no podía definir, aunque quería. En la mesa de su casa estaban unos cuantos papeles; Un pequeño cuaderno con lo que parecían ser las leyes sobre los clanes vasallos, algo a lo que tendría que darle atención después, una pequeña carta del daimyo que se resumía en que esperaba que esos regalos le gustaran y que le avisara si alguno no era de su gusto, y una lista de sus compromisos, actualizada con los de Sasuke, la tinta se veía vieja en el papel, esto era algo que ya habían preparado, ya sea porque sabían cuál sería su respuesta, o porque pensaban garantizar esa respuesta.

— Karui y Samui de Kumo —Empezó mientras leía las primeras personas de la lista, una separada por nación— Temari y Maki de Suna, sigue siendo posible cancelarlos después de que esta obtenga un kage para los acuerdos —Leyó con una sonrisa temblorosa, al menos tenía que buscar un modo de que esto no se sintiera tan mal— Haku de Kiri, como sí eso fuera de una alianza —Gruñó sin poder evitarlo— Kin del Sonido, claro, llamémosle esposa a una esclava sexual —Se quejó mientras pasaba su nombre, suponía que debía llamarlo un pequeño milagro que Tayuya no estuviera ya allí— Hana, Ino, Hinata de Konoha, que raro, juraría que Sakura también estaba con Sasuke, supongo que se echó para atrás, no me quejaré —Aunque dudaba que Tsume siquiera siendo válida para el conteo dada su edad intentaría formalizarlo, después de todo no podía hacerlo con Tsunade— Y Fuu de Taki ¿Cuándo demonios hicimos una alianza con Taki? —No sabía casi nada de la nación de la cascada, apenas sabía su ubicación en un mapa, pero hasta donde sabía ni siquiera habían empezado con el planteamiento de un acuerdo, mucho menos uno matrimonial, una parte de él le pedía que buscara información sobre esto, otra parte de él, casi instintiva, le decía que lo que averiguaría no le gustaría— Una diferencia de cuatro prometidas, debo conseguir cinco que sean de Konoha —No pudo evitar gruñir ante el pensamiento.

¿Qué opciones tenía en este momento? Incluso si dudaba sobre el asunto de Taki ya no tenía mucha opción para negarse, podía simplemente esperar a que llegara la hora de la reunión del concejo, pero eso podía tomar horas, podría revisar los sobornos, se negaría a llamarlos regalos, pero sentía que eso sería aceptarlos, admitir que estaba siendo comprado, podría ir a Ichiraku, hablar con Ayame y quejarse con Deidara de toda la mierda que estaba viviendo, quizás buscaría alguna de sus prometidas para intentar tener sexo (Quería liberar tensión, aunque sabía que casi todos estaban fuera de misión, incluso los genin), ir con Sakura y ver sí tenía alguna idea sobre lo que Sasuke podría hacer, quizás lo mejor sería simplemente darse una ducha y luego revisar la lista de prometidas para esto, al menos así haría algo útil para sí mismo.

Se concentró en los clones que aún estaban despiertos, intentando discernir que tanto de lo que había llegado a su memoria mientras estaba inconsciente, al menos la forma de rokudo para el elemento fuego era genial, aunque apenas entendía lo que podía hacer el camino humano, también tenía que buscarles un nombre a las formas de rokudo cuando usaba los seis caminos porque en otro caso eran nombres terriblemente largos, cada uno se había deshecho tras un día, pero durante ese día cada uno hizo algo diferente; Ningendo había estado con los miembros del escuadrón de Interrogación y Tortura para intentar aprender más. El camino Animal había estado enterrado debajo de los cachorros del clan Inuzuka, lo consideraba una terapía valida y sentía envidia de no poder hacer lo mismo, Naraka dado el reporte por él, así que solo faltaba de entregar la batalla entre Sasuke y él, bonito, le resultaría muy frustrante tener que repetir todo eso.

— Ya que todas las personas con las que puedo hablar están ocupadas o fuera por misiones, te preguntaré a ti, zorro pulgoso ¿Qué crees que haya en estas cajas? O ¿Qué crees que hayan añadido a la casa? —Cuestionó al biju mientras se levantaba para darse una necesaria ducha.

— ¿Te das cuenta de que no soy humano y mi comprensión de los regalos humanos son escasos tirando a nulos? —Cuestionó el biju, pero antes de que Naruto pudiera corregirse al darse cuenta del error, escuchó al biju una vez más— Mi apuesta va por joyas, los humanos tienen una fijación con esas cosas y de lugar... quizás una mazmorra sexual, sería más interesante que la mitad de los cuartos de este lugar —Añadió con un encogimiento de hombros, si, Naruto podía creer que hubiera joyas.

— Lo peor es que puedo ver que tendrías la razón —Susurró antes de meterse a la ducha.

— Uzumaki-san, su presencia es requerida en una reunión del concejo, con extrema urgencia —Le notificó un Anbu media hora después, al menos ya había terminado de ducharse y se había cambiado, de lo contrario consideraría lanzarle un shinra tensei.

—Ya voy para allá, será una de las largas ¿Cierto? —Susurró mientras desaparecía con el hiraishin, si, se negaba a dejar de usarlo en un descanso, tenía el terrible presentimiento de que había mucho más que no le dijeron, y que Tsunade tenía muchas más cosas por decirle, solo lo tranquilizaba que no podía haber mucho más que pudiera hacer peor todo esto


Vaya, este capítulo se escribió rápido, solo cuatro escenas para todo esto, y casi todo es conversaciones, pero es solo el principio de las consecuencias que tendrá lo ocurrido en la misión anterior, no sé qué tanto pueda sacar esto, los próximos capítulos serán sobre las consecuencias, la idea original es que solo fueran dos capítulos, pero sospecho que, con el largo de este capítulo probablemente se extienda un poco más de lo que había previsto.

Ahora, voy a hacer una pequeña pregunta de curiosidad, ¿Ustedes qué creen que le dieron a Naruto como soborno? Tanto en regalos como en qué cuartos sumaron a la casa, creo que podría resumir este capítulo en, ninguno de los hermanos Namikaze lo pasa bien.