"Un potencial enorme."

En el frío y desolado espacio, dónde solo planetas inhabitables, estrellas, asteroides y agujeros negros son el pan de cada día para aquel ser desafortunado que deba vivir en aquel oscuro y solitario mundo. Sin embargo, no hay ente capaz de vivir más allá del planeta tierra mismo. Eso, es lo que creen la mayoría de seres humanos, otros humanos afirman lo contrario por fe, al saber que el universo es demasiado grande, es ridículo pensar que solo un planeta pueda ser digno del don de la vida.

"Es extraño, lo debo admitir. Pasa por un constante cambio, como cualquier otro universo, pero termina volviendo a empezar desde el principio. ¿Un bucle infinito tal vez?"

¿Podemos llamar esto un ser vivo? ¿Podemos decir que esto también representa la vida? Un ente de promociones enormes, un ente que no es un monstruo, no es un humano, no es un objeto, no es natural… ¿Qué es? Una simple pregunta, con una respuesta bastante larga y que cualquiera que la escuche solo se reiría de incredulidad, pero no se les puede culpar.

"En cualquier caso. Un corazón decidido, una actitud firme, un objetivo claro… un potencial enorme que solo yo podría detener si de desata."

No es por ignorancia, no es por terquedad, no es por inmadurez… No, no, no, no. Es simplemente por la razón. Nada más que la sencilla razón. Decirle a alguien que un ente está atrapado en el cosmos y quiere aniquilar a todo ser humano en la tierra, que este ente cada día intenta tentarnos con sus palabras, que cada día que pasa se acerca más a la liberación y que pronto estará sobre nosotros. Eso ya es difícil de creer.

"Es el momento, se alinearon las estrellas de ambos universos. Serás mi avatar. Te daré poder. Necesito entender tu cabeza antes de hacerte una propuesta. Así que me limitare a observarte, por ahora. Seria ingenuo si intento engañarte solo sabiendo tu nombre. Akemi Homura."

Pero imposible de creerlo, si digo que esa entidad. Es 'Dios'

"¿De verdad crees que puedo confiar en ti?"

Diciendo esas palabras aquella pelirrubia estiró su mano en dirección de la pelinegra, esta ultima miró con algo de sorpresa las ataduras que ahora la encadenan, es tan solo un listón rojo con cadenas doradas en el centro y, para asegurarse de que la pelinegra no escape, un candado dorado rodeado de una flor rojiza en su pecho. La mujer… No, la adolescente movió su cuerpo e intentó liberarse sin ningún éxito.

"¡T-Tonta!" intentando volver a liberarse de las ataduras. "¡Este no es el momento para esto!" Ella dijo esas palabras, aunque parece haberse dado por vencida de intentar liberarse.

La pelirrubia juntó su mano derecha en la cadera. Observando que su enemiga no puede moverse, sonrió con un poco de satisfacción.

"No quiero tener que lastimarte." Lo dijo con una pequeña sonrisa. "Pero necesito estar segura." Eso último mostrando una mirada seria.

Aunque la escena de fondo contrasta un poco con el asunto principal. Una cantidad de dulces enormes se encuentran esparcidos en todos lados y, lo más integrante, la oscuridad y sensación de que algo anda mal es palpable. Parece la mezcla entre el sueño de un niño y la pesadilla de un adulto. Un sitio bastante inusual.

La adolescente pelinegra miró a los ojos a la otra. "¡Está bruja es completamente diferente a aquellas con las que luchaste!" en ningún momento parpadeó y solo la miró a los ojos.

La otra adolescente enfocó sus ojos dorados con la misma intensidad. Parecen no tener más de entre catorce a quince años. Las dos llevan falda que cubre hasta la mitad de el muslo, de color negro a cuadros con rayas blancas y una blusa de un tono blanco amarillento con un destacable moño rojo. Parece un atuendo de escuela.

"Si te quedas callada. Te liberaré cuando hayamos terminado." El duelo de miradas terminó y la pelirrubia miró a la otra adolescente en la escena "Vamos, Kaname-San." La adolescente lleva el mismo uniforme que las otras dos, así que solo puedo destacar el color rosado de su pelo. Está última asintió a la petición de la otra adolescente.

La pelinegra, como si algo se hubiese encendido en ella, estiró su cuerpo intentando alcanzarlas "¡Espera-!" Ella no pudo volver a decir algo al sentir como su cuerpo sufría presión por las cintas.

La de ojos dorados, un poco más desarrollada que las otras dos, caminó tranquila hacia delante. La peli rosa observó de reojo con sus ojos rosa oscuro a la adolescente enjaulada… Ahí es donde las cosas deberían seguir su curso, pero hay una frase que cabe perfecto para este momento.

'Si dios quiere'

Un agujero oscuro inundado de luces que representan universos apareció debajo de la adolescente presa de las cintas, esta última intentó moverse otra vez, solo para que el patrón vuelva a repetirse. Pronto comenzó a caer poco a poco por el cosmos. "¡Libérame!" gritó. La peli rosa, que vio todo esto, chilló asustada "¡Mami-San!"

La pelirrubia solo miró de reojo a su rehén, la sorpresa cruzó por el rostro de esta.

El agujero empezó a moverse por el cosmos, mostrando diferentes planetas y soles/estrellas, los dulces esparcidos empezaron a moverse en dirección al agujero y la adolescente tampoco fue la excepción.

"¿¡Qué!? ¡Kaname-San, vete!" La mujer de ojos dorados la ató con cintas doradas y envío a la pelo rosa atrás de ella. Mami agarró las cintas que aún mantenían sostenida a la pelinegra. Una luz inundó el área, la adolescente rubio ahora lucía otro aspecto más elegante, aunque la situación no deja apreciarlo.

Ella intentó sacar a su rehén de aquel agujero negro, sin embargo, parece una tarea imposible. El agujero, como si sintiera que algo está evitando su alimento, se extendió y su absorción aumento.

Pronto un destello de luz aclaró todo el ambiente tétrico. Kaname se tapó los ojos, al cabo de un momento volvió a abrirlos. Los dulces, la oscuridad y las adolescente desaparecieron junto con el agujero negro. La peli rosa se acercó a pasos lentos en donde se supone que sus compañeras de escuela deberían estar.

"¿Qué pasó?" abrió las palmas de sus manos y miró a todos lados. El silencio, obviamente, no aclaró sus dudas.

"¿Que es esto? Otro humano, esto no estaba en mis planes. Uhm…"

El frio abraza a las presas de dios, mientras que de forma infinita caen hacia la supuesta nada. El ente comienza a ver sin tocar a la 'intrusa', de arriba a bajo. Luego de unos momentos de mirar y reflexionar, sacó su conclusiones.

"Parece tener cierto potencial, pero no lo suficiente. Eliminarlo es lo correcto… pero quizás me seas útil indirectamente. Todos los monos liberan sus secretos con otros monos que confían. Si, tu servirás."

En el espacio, no hay viento, pero aun así parece que algo está dando vueltas de lado a lado frente a la adolescente pelinegra. El ciclo que pasó con la otra adolescente se repitió.

"Si… puro potencial, aunque ahora este simio es débil. Valió la pena esperar tantos años para ver a mi avatar… ¿Qué es esto? Tu alma está maldita… El otro mono también tiene el alma maldita… parece algo que no puedo deshacer, pero si modificar. No sería la primera vez que juego con un alma."

La claridad está empezando a subyugar la oscuridad, Dios terminó de mover los hilos del destino. Ahora, con todo en orden, los caminos y posibilidades pueden seguir su trabajo.

"Te hice un pequeño regalo de bienvenida. Pronto volveré a hablar contigo, mientras tanto gana poder… sobrevive. No me falles."

Lo siguiente fue el cantar de los pájaros.