Nunes: - ¿Es en serio? ¿Y quién se supone que eres, joven padawan? -
Roy: - Soy Roy. Roy Cameron, padawan del maestro Pablo-Jill. Es todo un honor. -
Nunes: - Valla. Un chico peculiar. Nada que ver con su maestro. -
Pablo: - Por favor, maestra Keldor. Perdone a mi padawan. A pesar de que actúa como un tonto, no suele compartarse como uno. Al menos la mayor parte del tiempo. -
Roy: - Eh...
?: - Y yo lo confirmo. -
Aquellos que estaban en la entrada se dieron la vuelta al escuchar la voz, que venía de la camara tras la maestra. Una voz que ambos conocían muy bien.
Una voz que ambos conocían muy bien Roy: - Maestro Voolvif. Que bueno verlo de una pieza, viejo furro. -
Voolvif: - ¿Cómo me has llamado? -
La cara del shitavaven no tenía comparación, así como la de su maestro que cerraba sus ojos mientras se rescaba la cabeza en busqueda de pasiencia. Y para empeorar las cosas, una risa escandalosa interrumpió el regaño del Voolvif incluso antes de empezar. La risa de una wookie.
Voolvif: - Eso. Ríase maestra Wanban. Eso aplica más para usted que para mi. -
La maestra Wamban era una Wookie La maestra Wamban era una Wookie. Caballera Jedi y de actitud alegre y optimista, así que no podía contenerse ante una buena broma. Portaba un sable dobre, con una hoja de color celesta y otra verde. Una que gruñó divertida ante la mostesta del shitavaven.
Voolvif: - Si si. Lo que usted diga. Bueno, creo que es mejor no perder más tiempo. -
Nunes: - Estoy de cuerdo. Maestro Pablo, padawan Roy, permítanme presentarle al resto del equipo. -
Los dos asintieron, y siquieron a la Kel dor al interior de la habitación. Donde conocieron a cada uno de los presentes.
Nunes: - Le presento Eekar oki. El como ustedes tuvo que hacer de sus responsabilidades a un lado para unirse a nosotros.
Eakar Oki era un mo calamari macho, de tes azul con machas marrones muy distintivas. Era sereno y algo frio, apegado al código como si este marcara sus pautas de conducta.
Pablo: - Un placer. -
Eekar oki: - El placer es todo mío, maestro.
Nunes: - El es el caballero jedi Huulik Nunes: - El es el caballero jedi Huulik. Ha estado muy activo en las zonas del borde exterior, y su apoyo será de mucha ayuda. -
El caballero rodiano era bastante conocido durante las Guerras Clon, y ejercía la función de general durante el período que había durado este conflicto. Un gran piloto, que sentía una gran admiración por las habilidades que el apasionado Skywalker mostró el día que salvó su vida aquel día en la Batalla de Sedratis.
Huulik: - Por supuesto, maestra Nunes. El pacer de ayudar es todo mío. -
Nunes: - Lucas Leger Nunes: - Lucas Leger. Fue nombrado Jedi hace poco, pero sabemos que será de ayuda. -
Por su aspecto, se podía instuir que el joven Jedi provenía de un mundo acuático, pues sus caracteristicas de cetáceo lo dejaban muy evidentes. Portaba un sable de luz verde, símbolo de alguien que a explorado más a fondo los entrañables caminos de la fuerza.
Lucas: - Heré todo lo que esté dentro de mis capacidades. -
Nunes: - El maestro Pino Forio también nos apoyará en esta misión Nunes: - El maestro Pino Forio también nos apoyará en esta misión. -
Forio: - Un placer, maestro Pablo. -
Pablo: - Lo mismo digo. -
Roy: - ¿Un neimodiano jedi? Nunca antes había visto uno. -
Forio: - Debo admitir que nuestra especie no es muy común en el uso de la fuerza Forio: - Debo admitir que nuestra especie no es muy común en el uso de la fuerza. -
Roy: - Bueno... Tal vez podemos llegar a un acuerdo con Rune Haako sin desatar un enfrentamiento. Tal vez escuche a alguien de su propia especie. -
Forio: - Un pensamiento algo iluso. No creo que alguien del clan bancario decida rendirse solo porque un semejante se lo pida. Pero debo admitir, que es una ilusión mu tentadora. -
?: - Pensar que esos corruptos puedan rendirse tan facilemente es bastante estúpido. -
Palabras fuertes para alguien de un especie igual de temeraria. Todos alzaron la mirada al origen de tales palabras, solo para percatarse que se trata de un enorme trandoshano. Una especia temida y odiada por muchos en esta galaxia, pues su reputación como mercenarios sanguinarios los precedía a donde quiera que fueran. Ver a uno portando las túnicas Jedi y un sable de luz azul era algo sumamente difícil de creer.
Forio: - Tan excéptico como siempre, maestro Mills Tead Forio: - Tan excéptico como siempre, maestro Mills Tead. -
Tead: - No es ser excéptico. Es ser realista. Esta guerra no se ganará con palabras. Y ellos fueron los que ejecutaron la primera agresión. -
?: - Lo que ocurrió en Geonosis fue una tragedia sin lugar a dudas, pero si nos comportamos como ellos... ¿Qué tan diferentes seríamos? -
Esta vez, la nueva voz se alzó para llamar a la calma, y no tentar a la furia. Se trataba de un hombre de aspecto curioso, de ya avanzada edad, el cual portaba sobre su cabeza un tipo de sombrero cónico de metal. Uno cuyos años hablaban por si solos.
Nunes: - Maestro Pablo. Les presento al maestro Lone Rage y a su padawan Shade Baco. -
El padawan se trataba de otro joven humano, de edad similar a Roy, pero sin presentar ninguna modificación biónica El padawan se trataba de otro joven humano, de edad similar a Roy, pero sin presentar ninguna modificación biónica. Aún portaba las túnicas padawan del templo, y parecía ser un joven de pocas palabras. Aún así, tanto él como Roy asintieron con la cabeza al intercambiar miradas. Sin embargo, había alguien que miraba al par con algo de exceptisismo.
?: - Dos padawan en una misión tan peligrosa. Misa no gustarle. Ser mucho riesgo. -
Pablo: - Entiendo su preocupación, maestro Isaiah Pablo: - Entiendo su preocupación, maestro Isaiah. Pero le aseguro que mi padawan está más que capacitado para esta misión. -
Lone: - Puedo decir lo mismo del joven Baco. Ha demostrado su valía en varias ocaciones, y se que estará a la altura del desafío. -
Baco: - Daré lo mejor de mi. Maestro. -
Iasiah era un gungan de las aguas profundas de Naboo. Un usuario extraordinario de la fuerza, aunque sufría de un orgullo impropio de los Jedi. Usaba dos sables de luz plateado, mostrando su actitud reaccia a los conflictos. Pero la paz en esta galaxia en guerra no se alcanzaría solo con palabras.
Isaiah solo asintió con la cabeza ante los comentarios. ¿Quién era él para poner en duda la determinación de esos jóvenes? Mucho menos dudar de las palabras de sus maestro. Así que simpelmente dió una bocanada a su pipa y exhaló profundamente, mientras la maestra Nunes seguía presentando a los dos últimos miembros del equipo.
La primera se trataba de una nautoliana, misma especie que el gran maestro y miembro del consejo Jedi Kit Fisto. Su piel anfibia mostraba una coloración negra, y su rostro cereno y algo enojado mostraba que era alguien de poca paciencia. Una que respondía al nombre de Alferra.
Y el último de todos, era un joven jedi humano de tes oscura, el cual respondía al nombre de Edino Y el último de todos, era un joven jedi humano de tes oscura, el cual respondía al nombre de Edino. Sin embargo, lo más extraño era ver al canino que lo acompañaba, una sabueso de pelaje azul oscuro y ojos dorados brillantes, con una coloración rojiza en la zona absominal. Onex era su nombre, y a pesar de u imponenete aspecto, era imposible no verlo con gracia cuando se comportaba como un cachorro cuando Roy se acercó para jugar con él.
Y así concluyeron las presentaciones Y así concluyeron las presentaciones. Trece Jedi y dos padawans para detener a un único miembro de alto mando Separatistas. Pero uno que sería un duro golpe para la confederación, y que tenía mucha información que podría hacer que esta guerra concluyese mucho antes de los esperado.
Por ahora, solo debían permanacer con un perfil bajo, esperando la llegada de su objetivo. Cada cual tomaría relevos para vigilar las zonas del puerto. Según los informes, Rune Haako llegaría en las siguientes rotaciones, así que debían estar alerta. Sin embargo, todos estaban convencidos que alguien tan importante de la Confederacion de Comercio no llegaría como un simple ciudadano. Y valla que tenía razón.
En la tarde del segundo día, un imponente Acorazado clase Próvidence apareció en la órbita de Lorrd. Era fácil poder imaginarse todas las tropas y recursos que una nave tan imponente podría cargar en su interior. Algo que solo le confirmaría a los Jedi que mantener un perfil bajo era de vital importacia.
Pasado unos minutos, se pudo apreciar como una elegante nave partió desde los hangares del Providence, y descendió hasta uno de los puertos más cercanos a la zona lujosa de la ciudad. Acompañado celosamente de dos naves de transporte CC-9979. Dos imponentes mastodontes llenos de droides en su interior. Estaba claro. Rune Haako quería demostrarle al gobernador local la opulencia y supremasía Confederada, y estaban bastante seguros que lo estaban logrando. Y finalmente, el susodicho apareció.
Lucas: - El comerciante ha llegado al puerto. Estamos listos. - Hablaba por el comunicador.
Nunes: - Enterado. Síguelo con discreción. -
Lucas: - Muy bien. Nos movelos a la zona de pezca. Y prepárense... Esto será más complejo de lo que pensábamos. -
De regreso al refugio de los Jedis, la maestra Nunes concluyó la llamada y regresó con el resto, quienes esperaban las noticias con paciensia.
Iasiah: - ¿Y bien? ¿Ya ser hora? -
Nunes: - Afirmativo. Rune Haako se dirige al palacio del gobernador en estos momentos. Debemos apresurarnos y tomar posiciones en el bazar antes su llegada. Sin embargo, tenemos muchos problemas. -
Tead: - Que novedad... -
Pablo: - ¿Qué tipo de problemas? -
Nunes: - Rune Haako esta siendo escoltado por una guarnición de droides de batalla. Droides comandos y droides destructories incluidos. Y ocho magnaguardias. -
Esos si eran enemigos a tener en cuenta. Toda la galaxia sabía de la existencia de los droides IG-100 y de su efectividad en combate. Los Jedi más que nadie sabían de esta amenaza, pues muchos de ellos habían probado lo mortal que podían llegar a ser. Algunos de ellos, no sobrevivieron para contarlo.
Nunes: - Debemos proceder con cautela, pero el plan sigue siendo el mismo. Detener a Rune Haako con vida es nuestra máxima prioridad. Preparen sus cosas. Partimos de inmediato. -
Y así, todos los presentes se dirigieron al lugar de la emboscada. Un enorme bazar, lleno de túneles y pazajes que podían aprovechar a su favor. Si se movían correctamente, podrían sorprender a su objetivo y capturarlo sin que este pudiera siquiera reaccionar. Una estrategía rápida y efectiva, pues debían finalizar antes de llamar la atención de la guardia local, o la neutralidad de Lorrd podría verse afectada.
Lo que todos ignoraban, era que aquel acorazado Separatistas que se alzaba sobre la órbita del planeta, no era otro que la mismísima Mano Invisible.