DISCLAIMER: Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer pero todo lo demás es mío.
AVISO: Es una historia muy sexual, sobre todo en los primeros capítulos.
.
.
.
A la mañana siguiente cuando llegamos a la playa ya hay bastante gente ahí, al parecer es una de las calas más demandadas de la isla.
Después del primer baño estamos tomando el sol tranquilamente cuando no paramos de ver chicas en topless.
-¡Madre mía que tetas!- expresa Victoria mirando descaradamente a una chica que estaba en la orilla.
-¡Qué exagerada! Tampoco es para tanto- refuta Rosalie.
-¿Qué no? Mira son grandes, tersas y firmes.
-Deberíamos hacer lo mismo- propongo.
-¿Operarnos las tetas?- dice Lauren riendo.
-Quitarnos la parte de arriba. Estoy harta de tener que ponerme tops que no dejen al descubierto las marcas de los tirantes.
-A mí me da corte- dice Rosalie.
-¿Nos lo quitamos?- me dice Victoria.
Yo sonrío y dejo a un lado la revista que tenía entre las manos para quitarme la parte de arriba de mi bikini verde. Al principio me siento un poco cohibida pero al pasar los minutos me voy sintiendo más y más cómoda.
-He quedado con Edward esta tarde- digo horas después.
-¿No vas a salir con nosotras esta noche?- pregunta Rosalie.
-Sí, supongo. Él entra a trabajar a las nueve así que estaremos juntos un rato y luego me tendréis de vuelta.
-Ten cuidado ¿vale?- me responde.
Envío la localización de mi apartamento a Edward por whatsapp y este me recoge a las seis en la puerta.
Tiene un BMW Z4 rojo descapotable que me deja con la boca abierta.
-No es mío o bueno al menos no es solo mío- me explica mientras conduce- la compañía discográfica con la que trabajo nos blinda estos servicios durante los festivales.
-¡Vaya servicios!
Él se ríe.
Cuando llegamos a la Cala Vadella, Edward aparca en uno de los acantilados colindantes desde donde se ve la inmensidad del mar y la playa queda a nuestros pies.
-Ahora entiendo porque es tu favorita- digo poniéndome las gafas de sol.
-Ven, ayúdame.
Abre el maletero y saca una pequeña nevera con vino y cerveza.
-Lo tenías todo bien planeado- digo tocándole por primera vez hoy.
-Traigo a la chica más guapa de la isla a la cala más bonita del mundo, hay que estar a la altura- responde antes de besarme.
Nos sentamos en el borde del acantilado uno al lado del otro hasta que el sol comienza a ponerse.
-Tengo que inmortalizar este momento- digo sacando el móvil para hacer fotos.
-Por supuesto.
Hago varias fotos al paisaje pero lo que más me apetece es hacerme una foto con él. No sé explicarlo pero siento que necesito tener algo para asegurarme de que estar con él es real.
-¿Puedo hacerme una foto contigo?- pregunto tímida.
Él se ríe a carcajadas.
-¿Estás teniendo tu momento fan conmigo?
-Claro- digo riéndome y guiñándole un ojo.
-Vamos a hacernos más de una foto- dice tomando mi teléfono.
No sé si refiere a este momento o a otros momentos más adelante.
La primera foto es el típico selfie de pareja uno al lado del otro, pero luego se le ocurre poner el temporizador y dejar el móvil en el coche para poder hacernos fotos más íntimas.
-Gracias por compartir conmigo tu lugar favorito- digo mientras recogemos los botellines de cerveza que hemos dejado en el suelo.
-Puedo enseñarte mi restaurante favorito- propone sacando un nuevo plan.
-Me gustaría que lo hicieras- sonrío.
Me apetece hacer todos los planes del mundo contigo, pienso.
-¿Mañana?-
En este momento vuelve mi vena egocéntrica y desconfiada. Esa voz que te dice que nunca dejes saber a un hombre lo mucho que te interesa y que no muestres siempre disponibilidad.
-La verdad es que ya tengo planes con mis amigas para mañana. Pero cuando pueda tener un rato de nuevo te llamo, ¿te parece?
Él duda durante unos segundos pero finalmente asiente con la cabeza.
El camino de vuelta con el coche descapotable recorriendo la carretera que va pegada a la costa es uno de los momentos más especiales de mi vida. Si le sumas el paisaje y el dejar atrás el sol a punto de ponerse, no puedo pedir más.
-¿Puedo confiar en ti?-
-Sí- respondo por inercia.
No obstante aunque apenas nos conocemos sé que nunca traicionaría a Edward.
-Estoy trabajando en un nuevo tema, no está acabado pero dime tu opinión.
Manipula su teléfono móvil y comienza a sonar una canción por los altavoces del coche.
Predomina la parte instrumental pero cuando comienza a cantar una voz masculina la canción es totalmente perfecta. (Armin van Buuren feat. Kensington - Heading Up High, Dimitri Vegas & Like Mike vs BOOSTEDKIDS Remix)
-¿Eres tú?
-No, yo es mejor que ponga mis manos en lugar de mi voz en un tema o no se vendería.
Me río porque tiene una voz preciosa aunque nunca le he escuchado cantar.
Me deja en casa y nos despedimos con un beso antes de que salga del coche.
Esa noche decidimos el plan mientras picamos algo rápido en la cocina. En la playa nos han abordado decenas de relaciones públicas de diferentes discotecas. Tenemos flyers de diferentes lugares así que buscándolos en google vemos cómo son y qué ambiente ofrecen.
Finalmente tomamos la decisión de ir a Amnesia, una gran discoteca con música techno y capacidad para 5000 personas.
Una vez allí esperaba sentirme igual que en Ushüaia pero no ocurrió.
Estábamos en medio de la multitud bailando con nuestras copas en la mano, la música era genial y de repente cada una estaba con un grupo de personas diferentes. Concretamente yo me había unido a un grupo de chicos y chicas de unos treinta años que lo estaban dando todo. Parecíamos amigos de toda la vida.
Para el final del set del DJ fui al baño con Rosalie y nos quedamos sorprendidas por la cantidad de gente que estaba consumiendo cocaína en el pasillo que conducía a los lavabos.
-Me da pena la gente que necesita drogas para pasarlo bien- comenta.
-Yo creo que no es tanto para pasarlo bien sino para aguantar más.
-Esta fiesta ha empezado a las once de la noche y son cerca de las siete de la mañana, ¿cuánto más quieres aguantar?
-Vamos a preguntárselo- propongo caminando hasta un grupo de chicas que ríen histéricas.
-Bella no te juntes con esa gente- me dice al oído Rose a medida que nos acercamos.
-¿Chicas? ¿A dónde se va después de aquí?
Si hago esta pregunta a unas extrañas en Francia, ahora mismo me estarían mirando raro por tomarme demasiadas confianzas. Seguro pensarían que qué me importa a mí dónde irán ellas después. Pero esto es Ibiza y aquí tardas más en pedirte una copa que en hacerte amigo de un extraño.
-Aquí nenas- dice una de ellas sacando su teléfono.
Nos muestra una foto de una casa en google maps.
-¿Dónde es eso?- pregunto.
-En playa d'em Bossa, es una villa, Villa María.
-Es una fiesta privada- añade una de sus amigas.
-Entonces no todo el mundo puede ir- concluyo.
-Mira aquí va todo el que sabe ir, así que si vas di que te llamas María y eres amiga de Marcus Walker.
-¿Quién es ese?- pregunta Rose.
-Ni idea, es lo que nos ha dicho la chica que nos ha invitado.
O sea es una fiesta privada pero si dices las palabras clave accede todo el mundo. Genial.
-Muchas gracias chicas.
-¿Os vemos allí?
Asiento con la cabeza antes de despedirnos para volver con Victoria y Lauren a la pista de baile.
-No vamos a ir- dice Rosalie cuando se lo propongo a las chicas.
-Claro que sí que vamos a ir- responde Victoria- es una fiesta privada en una villa de lujo, como en las pelis americanas.
La sonrío cómplice.
De todas mis amigas sé que Victoria es la única que me aguanta el ritmo de fiesta.
Cerca de las ocho nos bajamos de un taxi frente a Villa María.
Es una villa típica de Ibiza porque es blanca por completo. Tiene jardín delantero lleno de flores y palmeras y jardín trasero con una enorme piscina llena de gente. La casa tiene un porche con columnas y arcos blancos donde está el DJ pinchando música variada. Cuando llegamos era techno, ahora es reggaetón.
La gente está loca bailando, tirándose a la piscina y bebiendo, la mayoría beben champán directamente de la botella.
Nosotras decidimos pasar al interior de la casa para ver si hay ron o ginebra.
En el interior la fiesta es totalmente desenfrenada.
Hay gente desnuda bailando encima de los sofás sin ninguna vergüenza, dos personas están metiéndose algún tipo de droga en la escalera y en la cocina hay dos parejas follando.
-Joder- dice Lauren.
-Esto es Ibiza chicas- dice Victoria cogiendo una botella de ron del suelo.
Nos servimos una copa en vasos de plástico y salimos a la piscina a bailar.
Al poco tiempo el ambiente de descontrol se ha apoderado de nosotras y estamos bañándonos en la piscina en ropa interior.
-Hola guapas- dice un chico llegando hasta nosotras y pasando un brazo por los hombros de Rose- sois las más guapas de la fiesta. Soy James- dice levantando la palma a modo de saludo.
James se ha unido a nosotras como si fuera una más pero sospecho que su interés está únicamente en Rose, lo cual se confirma cuando veo a ambos salir juntos de la piscina y meterse al interior de la casa.
Las tres nos reímos contentas de que nuestra amiga más pudorosa por fin se deje llevar y eche un polvo sin compromiso.
Rosalie es la típica chica que se echa novio al empezar el instituto y se casa con él al acabar la universidad. En su caso no fue así, su novio después de ocho años la dejó por otra sin avisar y ahora lleva dos años soltera.
Cerca del medio día la fiesta continúa y no tiene pinta de querer acabar pero yo me muero de hambre así que junto a mis amigas y otras personas que habíamos conocido en la fiesta pedimos unas pizzas.
La segunda en desaparecer por el interior de esa casa es Lauren que va con un chico de piel oscura que no conocemos.
-Aquí todas a follar- me dice Victoria nadando hacia el borde de la piscina donde estoy sentada.
-Tú también has follado- le recuerdo dando un mordisco a la pizza de pepperoni.
Está grasienta y deliciosa.
-Xavier es bueno en la cama y divertido en la calle, mañana quedaremos supongo. ¿Y tu dj?
-No creo que quedemos mañana, bueno hoy- digo mirando el reloj.
-¿Por?
-Me dijo de quedar pero le contesté que tenía planes y que ya le llamaría.
-Haciéndote la dura y la interesante ¿no? Muy bien tía- dice riendo y dándome una palmadita en el culo.
Me río con ella porque me ha calado totalmente.
-Pero tampoco te pases ¿vale? Que nos queda poco más de una semana para estar aquí y no es plan de desaprovechar polvos.
-Me lo apunto- respondo guiñándole un ojo.
Victoria y yo nos vamos a casa a las dos de la tarde agotadas. Lauren y Rose han desaparecido así que las escribimos un whatsapp y que ellas vuelvan juntas después.
Cuando nos despertamos es de noche. Comemos algo y vamos a dar un paseo por la playa tranquilamente.
Rosalie y Lauren siguen dormidas y las dejamos descansar.
A la mañana siguiente nos levantamos temprano y con energía así que cogemos el coche y nos vamos al puerto. Hay barcos que montan fiestas en alta mar y aunque parezca imposible ya estamos preparadas para salir de nuevo.
El barco tiene unos 30 metros de eslora y tiene capacidad para 50 personas aunque yo creo que somos muchos más a bordo.
Esta vez he decidido pasarlo bien pero controlando la ingesta de alcohol.
La gente está un poco loca y entre todas las nacionalidades que estamos dentro del barco, los estadounidenses son los más locos. Se tiran al mar con el barco en marcha.
No sé dónde están mis amigas así que subo a la parte de arriba del barco para ver el mar en su inmensidad de manera relajada.
Unas manos se apoyan en mi cadera y alguien encaja su pelvis contra mi culo.
-¡Eh!- digo dándome la vuelta y empujando al chico hacia atrás.
-Perdona es que te he visto antes y me has encantado. Soy Ted- se presenta ofreciéndome la mano.
-Bella- le respondo apretándole la mano.
-¿Qué haces aquí sola Bella?
-Busco a mis amigas- digo mirando hacia la cubierta del barco llena de gente.
Pese a nuestro primer encuentro Ted es simpático y durante el resto del día vuelve a verme en varias ocasiones. Sé que está interesado en mí y yo no sé si estoy interesada en él.
Cuando el barco atraca de nuevo en el puerto, el sol se está poniendo.
Ya en tierra Ted me besa y yo le beso de vuelta por inercia.
-Llevo queriendo besarte todo el día- confiesa.
Yo le sonrío de vuelta porque no sé qué decirle.
-¿Bella?- pregunta Lauren detrás de mí-¿te vienes con nosotras?
Tengo dos opciones: irme con mis amigas a casa o irme con Ted y acostarme con él. Sé que no se va a conformar con un beso.
-Me quedo- les digo a mis amigas antes de que Ted me vuelva a besar.
.
.
.
¿Pensabais que ya tenían una relación exclusiva y solo se acostaban entre ellos? Al menos ya les habéis podido ver relacionarse sin que haya sexo entre ellos únicamente. Me gustaría saber qué os ha parecido el capítulo, darme feedback por favor.
Lo primero dar las gracias a todas las personas que han dejado un review, un favorito o un follow a la historia. Lo segundo pedir perdón por no mandar los adelantos pero ya tenía el capítulo y para qué mandaros un cachito si lo puedo subir entero. No obstante, los reviews que dejéis en este capítulo sí recibirán un adelanto y será diferente al adelanto publicado en el grupo Élite Fanfiction.
Como ya sabéis para vivir al 100% la experiencia no sirve solo con leer la historia. Hay que:
Pasarse por el grupo de Facebook para ver las imágenes y vídeos correspondientes al capítulo (link en mi biografía de fanfiction)
Escuchar la lista de Spotify que he creado en exclusiva para esta historia. (Link en mi grupo de facebook)
Visitar las siguientes páginas de Instagram: Ibiza(punto)Plus, White _ Ibiza, Amnesiaibiza
Ya sabéis que el ritmo de actualización será rápido.
Besitos
