Gracias a mi cómplice Li por su lectura previa. Los errores siguen siendo míos.


Disclaimer: la mayoría de los personajes mencionados son propiedad de Stephenie Meyer.

Capítulo 2

Frunzo las cejas. No sé a qué se refiere, lo único que siento es un escalofrío recorrer mi cuerpo entero.

Observo que el otro tipo grandullón está de nuevo acompañándolo, ambos comparten una sonrisa burlona y ese pequeño gesto logra que mis nervios revivan.

Mi raciocinio me dice que dialogue, pero estoy tan asustada que lo que menos quiero es hablar.

Sé inteligente Bella.

― ¿Por-por qué, estoy aquí? ―trato de sonar valiente.

El tipo alto y delgado se acerca a la cama. Su andar es imponente, parece ser un león a punto de atacar y sé que soy la presa.

― Anoche me pediste que te trajera ―dice sonriente.

Hay tanto cinismo en su semblante que quiero estrellar mi mano en su cara y borrarle la estúpida y perfecta sonrisa que tiene.

Aferro la sábana a mi pecho.

― No me acuerdo ―miento. Siento cómo el calor sube a mi rostro, sé que soy un tomate viviente―. Necesito irme porque… ―saco mis pies fuera de la cama y me incorporo con torpeza― seguramente estaré castigada por mis padres ―miento nuevamente, porque no sé qué decir para suavizar las cosas.

Camino con mayor confianza por la pequeña habitación. Sé que me están mirando porque puedo sentir el disturbio en mi espalda mientras busco mi bolso y zapatos, suspiro hondo al no ver nada a la vista.

La ilusión por ver la puerta abierta hace que mi corazón se agite. Debo salir corriendo y pedir ayuda. ¿Cuántos pasos podré dar?

Camino lentamente: uno, dos, tres, cuatro, cinco…

Un brazo rodea fuertemente mi cintura y me detiene.

Mi pecho se agita y el miedo invade mi sistema. Empiezo a llorar y sé que estoy a nada de suplicar por mi libertad.

― ¿Qué te pasa? ―pregunta con voz susurrante en mi oreja.

― Por favor, déjame ir ―sollozo―. Necesito saber dónde está mi amiga.

Dios mío que Tanya esté bien ―imploro.

― Si lo dices por la chica rubia que te acompañaba. Ella está bien ―afirma―. ¿Por qué no habría de estarlo?

Mantengo mi cabeza inclinada.

― ¿Dónde está?

― Yo qué sé ―responde y su hálito cosquillea mi piel―. Seguramente regresando a Arizona ¿no?

Me paralizo. Mi ritmo cardíaco se acelera al instante que lo escucho. ¿Cómo sabe qué somos de Arizona?

― Edward ―pronuncia el grandulón y ahora sé que el cobrizo se llama así―. Veré si la comida está lista.

El tipo gorilón camina y se detiene en la puerta, me está mirando fijamente. Aprecio sus ojos oscuros y me doy cuenta que no hay maldad, no es el villano.

Lo que me concede un poco de tranquilidad.

― ¿Tienes alguna alergia alimentaria? ―indaga.

Niego rápidamente sin articular palabra. Él cierra la puerta dejándome sola con mi secuestrador.

Lentamente sus manos se mueven en mi cintura y hacen girar mi cuerpo. Estoy frente a frente con el dueño de ese par de iris color esmeralda.

― Puedes quitar esa cara. No te haré daño ―asegura.

― Entonces déjame ir.

― Tú me pediste que te trajera ―asevera.

― No. ¡Jamás! Yo solo… ―mis palabras mueren. Veo sus ojos―. ¿Qué hicimos?

Sonríe presumido. La arrogancia parece ser su apellido.

― Tuvimos un buen faje. Ya sabes, cachondeo y manoseo.

La vergüenza me hizo bajar la cabeza. Nunca he sido una zorra, nunca tuve un polvo, nunca existió nadie más que no fuera Sam.

― Oye… ―sus dedos están bajo mi mentón, me obliga a mirarlo― nunca bajes la mirada ante nadie, no les des el poder de verte miserable.

Mis lágrimas caen bañando mis pómulos.

Sus pulgares se deslizan con suavidad deshaciendo mis lágrimas.

Aprecio un atisbo de ternura en su mirada. Quiero imaginar que no es un hombre malo, sobre todo, que no me dañará.

― ¿Me tienes secuestrada?

― Para nada, eres libre de andar a dónde tú quieras.

Suspiro. Siento un alivio en mi pecho que me hace esbozar una pequeña sonrisa.

― ¿Dónde están mis cosas? ―Por supuesto que no voy a ir descalza al aeropuerto.

― En mi habitación ―responde con tanta naturalidad que me hace meditar si él frecuentemente trae mujeres.

Entonces las dudas asaltan mi cabeza y el temor crece.

― ¿Tú y yo…? ―la pregunta se queda en el aire.

― ¿Quieres saber si cogimos?

Mis dientes se entierran con fuerza en mi labio inferior. Este hombre no sabe usar filtros.

― No lo hicimos ―revela. Su sinceridad es un bálsamo de tranquilidad mental―. Te digo que estuvimos en un faje pesado, pero no quise que pasara a mayores, te vi desnuda, te manosee y te chupé toda, pero eso fue todo ―me guiñe.

Exhalo. Doy media vuelta y camino más allá de la puerta. Intrigada por el lugar continuo mi recorrido por el estrecho pasillo, descubriendo que estoy en un barco de lujo.

Él camina detrás de mí y me indica la puerta que está al fondo.

Al entrar descubro que hay vasos en el piso, distintas botellas de alcohol en la cama y buró. Veo mis zapatos en un rincón y también está mi sostén negro, los levanto con la poca dignidad que me queda.

Mi bolso está en el pequeño sofá. Lo tomo con rapidez y salgo casi corriendo. Regreso por el mismo pasillo y camino presurosa recorriendo la elegante sala de estar. No me detengo a apreciar nada y subo los diez escalones, quedándome boca abierta al salir a cubierta y ver la enorme piscina.

Este no es un simple barco, es un impresionante yate de lujo.

Corro. Lo hago sin detenerme y me acerco peligrosamente a la baranda y veo la imponencia del mar azul.

¿Dónde demonios estoy?

¿Quién es él?

― ¡No te atrevas a saltar! ―exclama― porque te aseguro que no quiero quedarme viudo.

Me giro de inmediato hacia él.

― ¿Qué-qué dices? ―balbuceo.

Sonriente me muestra su mano izquierda, trae un anillo matrimonial en el dedo anular.

Mi cuerpo está temblando. Mis ojos vagan a mi mano izquierda y yo uso un anillo similar.

Apenas muevo la cabeza, negando.

Esto es un sueño. Una estúpida pesadilla y quiero despertar.


Hola. Les agradezco mucho su entusiasmo para la historia, gracias de verdad por su apoyo, por leer, por sus favoritos, follows y por darse un tiempo para dejarme un review. Espero leernos muy pronto. Por cierto, en el grupo les contaba que tenía intención de actualizar esta historia por las noches, solo que muchas veces mi tiempo no coincide para que sea así. ¿Opiniones?

Les invito al grupo de Facebook, ahí estarán imágenes alusivas respecto a cada capítulo *

Aquí los nombres de quienes comentaron el capítulo anterior: Cary, Mapi13, Valeria Sinai Cullen, Lily Pattinson Stewart, Arlette Cullen Swan, Iza, Ary Cullen 85, Jimena, Flor McCarty-Cullen, mrs puff, Maryluna, ALBANIDIA, Natali, catita1999, Pepita GY, Dulce Carolina, AleCullenn, Diannita Robles, Car Cullen Stewart Pattinson, Noriitha, Dess Cullen, The Vampire Goddess, Pao pao, Daniela Masen, saraipineda44, krisr0405 Lili Cullen-Swan, Rosemarie28, Cassandra Cantu, rociolujan y comentarios Guest

Gracias totales por leer 🌹