Capítulo 6
Argus Filch estaba feliz en su nuevo trabajo. La oficina que le dio Harry era bastante buena. No era una oficina de corporativo multimillonario pero era una oficina bastante buena de una empresa emergente. La oficina de su nuevo Jefe, Harry Potter, era apenas un par de metros más grande que la suya, así que sabía que Harry le tenía en alta estima.
No era para menos, ya que Argus Filch fue la persona que le ayudo a mantenerse fiel a sí mismo mientras vivía en la Mansión Potter.
Argus había sido mayordomo por causas de fuerza mayor pero el hombre originalmente había querido ser economista. Era bueno con los números y aprendió mucho de finanzas, inversiones, contabilidad y administración empresarial. Se hizo mayordomo porque su familia requería dinero cuando él era joven y empezó a trabajar de mayordomo para Fleamont Potter.
Contrario a James, Fleamont prefería que sus empleados estudiaran una carrera, en caso de que renunciaran o fueran despedidos. Fleamont era una persona producto de su educación y la única veta rebelde era que quería que sus empleados tuvieran oportunidades. En su época, aquellos que eran despedidos, raramente eran contratados en empleos de ese mismo nivel y los que renunciaban, muchas veces era para dedicarse al hogar o negocios familiares.
Fleamont quería darles herramientas a las que no pudieran acceder fácilmente, así que mientras él era el Jefe de la familia Potter, procuro que cada uno de sus empleados, terminara una carrera de su elección.
Gracias a esa decisión, cuando uno de sus empleados mostraba talento particular en algún ámbito, muchas veces obtenía un puesto en una de sus empresas y casi nunca tuvo que reclutar empleados para ellas, simplemente ponía un anuncio solicitando otro empleado doméstico.
James Potter mantuvo este legado de su padre pero sin entenderlo a cabalidad y jamás paso a alguien talentoso de su servidumbre a las empresas, por lo que muchos de los empleados jóvenes (cuando fueron contratados), no sabían que el Jefe anterior había tenido esta política de transferir empleados y tomaron la educación universitaria como una prestación de su empleo.
Argus fue mayordomo durante la mejor época de Fleamont Potter y este ya había visto el potencial de Harry. Fleamont le hizo prometer a Argus que cuidaría de su joven nieto, que al momento que Fleamont murió, tenía unos 8 años. El niño ya había comprendido que su abuelo no volvería e iría con su abuela Euphemia al cielo.
Harry y Argus entonces empezaron a tener una relación de tío y sobrino. Harry nunca vio a la servidumbre como empleados sino como una familia extendida. Para él, el ama de llaves era una tía estricta, el mayordomo era un tío consentidor y así sucesivamente.
Harry, cuando empezó su época de rebeldía adolescente, se apoyó mucho en Argus con sus dudas y anhelos. Argus cumplió la orden de Fleamont y trató de proteger, guiar y educar lo mejor que pudo al joven, ayudándole también con los conocimientos que adquirió mientras estudiaba.
Cuando Harry abandono la Mansión, Argus solo se quedó para cuidar a la Señora Norris y ahora que la gatita había ido con los abuelos, ya no había razón para permanecer al servicio de los Potter. Harry cuido el puesto de Argus en su empresa y ahora sus empleados entendían por qué.
Si Harry era un demonio de los negocios, Argus era el mismísimo Satanás.
Argus Filch, ya como asistente de Harry, demostró porque Harry había sido así todo este tiempo. Era evidente que Argus tuvo mucho que ver en la educación del joven, ya que muchas de las actitudes al tratar a otros empresarios y potenciales asociados, era bastante similar.
Los empleados de la empresa de Harry, estaban seguros de que esta compañía iba directo a la cima con esos dos como Jefes.
Tom Riddle finalmente estaba avanzando en la terapia pero eso tuvo efectos no deseados para Cassandra y Thomas Sr. Thomas Sr. empezaba a ver comportamientos no apropiados en Tom y eso le molestaba. En cambio, Cassandra realmente apreciaba a Tom. No era amor romántico, sino que lo apreciaba como un buen colega y quizás un amigo, pero era difícil no sentirse agraviada cuando Tom manifestaba estar de duelo por su relación de hace más de un año.
Cassandra solo sabía de Harry por los rumores alrededor del otrora heredero de los Potter y la naciente empresa de outsourcing en limpieza y administración que manejaba. Los conocidos de Tom solo lo habían descrito como un hombre guapo a su manera y bastante competente en su mundo. No había mucha información acerca de él y su vida o sus amigos. Ni siquiera algún tipo de hobby.
Sin embargo, Cassandra sabía más de lo que otros podrían saber de Harry, gracias a Tom. Tom había contratado a un investigador privado y este le había entregado a Tom la lista de los amigos de Harry, direcciones y aparentemente, el joven había empezado una nueva relación hace unos meses. Justo unas semanas después de que Tom había empezado la terapia.
Tom no era muy ordenado y Cassandra había encontrado el informe cuando fue a buscar un libro al estudio de Tom. No le había dicho nada a Tom y dejo el informe tal como lo encontró. Para Cassandra, había sido evidente que Tom apenas estaba interiorizando que su relación con Harry había terminado y pensaba que había una oportunidad de conservarlo, quizás como amante, de alguna forma.
Incluso para Cassandra, cuyos padres tenían este tipo de arreglo, cada uno con un amante por su lado, era inconcebible que un antiguo heredero aceptara un arreglo así para él mismo. Cassandra no lo hubiera aceptado, ya que sería rebajar su propia dignidad como hija de una familia de abolengo. No pensaba que Harry, no solo siendo de familia adinerada sino de una familia noble, aceptara ser el amante de alguien.
Tom estaba delirando si pensaba que Harry aceptaría algo así.
Tom, por su lado, había leído el informe y estaba pensando en ir a amenazar a Severus Snape. Incluso había llegado al grado de organizar un grupo de matones para derribar algunas de sus propiedades, pero de alguna forma, alguien se enteró y los matones se negaron a hacer el trabajo. Es más, incluso le regresaron el dinero a Tom.
Esto irritó terriblemente a Tom, quién ya estaba pensando en nuevas maneras de poder amedrentar a Snape, hasta que a su oficina llegó un anciano que nadie había visto en décadas. El anciano llegó junto con un grupo de hombres vestidos totalmente de negro, algunos de traje y otros en ropas más casuales, pero todos se veían peligrosos a su manera. Unos parecían guardaespaldas de los que ya habían probado sangre y los otros parecían abogados creados en el mismísimo averno.
Como fuera, todos estos hombres flanquearon al anciano que a pesar de su autoimpuesta reclusión, seguía emanando esa aura de peligro y superioridad. Tom no pudo menos que aceptar la "visita" del anciano sin chistar.
Magnus Prince ni siquiera pestañeo cuando se sentó en la silla frente al escritorio de Tom. Ni siquiera se disculpó por lo abrupta de su entrada y Tom se preguntaba que buscaba el augusto patriarca con él. Que él recordara, no había hecho nada contra la familia Prince, ni había disputado ningún negocio que quisiera esa familia. Su última interacción con alguien de esa familia fue cuando hace un par de meses, su prometida quiso ver la exposición de un tal Tiberius Prince, pero por lo que sabía Tom, era de una rama muy alejada y solo fueron a ver las pinturas.
El silencio del patriarca ya estaba crispando sus nervios, cuando este empezó a hablar—Debo decir, Sr. Riddle que admiro su valor. No cualquiera decide intentar ir contra alguien de mi familia y mucho menos de la rama principal. Admiro las agallas en un hombre—Tom estaba sudando frío. No recordaba a quien de esa familia había tratado de dañar—Sin embargo, esa admiración tiene un límite cuando se trata de mi querido nieto—.
Tom ahora estaba más confundido, ¿Cuándo intento dañar al nieto de este hombre? —Vera, Sr. Riddle, espero que esta visita de cortesía, le ayude a decidir cesar las hostilidades hacia mi nieto. Él está un poco alejado de mí por cosas que no compartiré con usted, pero sepa que siempre, siempre, voy a buscar que mi nieto sea feliz y si ese joven con el que está ahora lo hace feliz, no puedo permitir que usted, ni nadie, interfiera en esa relación, ¿Si me entiende? —.
Finalmente las piezas encajaron. Severus Snape era el "querido" nieto de Magnus Prince. Tom sabía que esta visita solo era una advertencia de cortesía. Si Magnus quisiera, podría desaparecerlo del mapa y nadie, ni siquiera su padre, daría con su cadáver. Si Magnus quisiera, podría desaparecer incluso su compañía y el apellido de su familia. Magnus tenía ese tipo de poder, el de desaparecer por completo a una persona, como si nunca hubiera existido.
Tom se preguntaba como nadie sabía que Severus Snape era el único nieto de Magnus Prince, ya que por lo que sabía Tom, los hijos varones de Magnus habían muerto sin dejar ningún hijo y de la hija, se ignoraba su paradero. Al parecer, su hija sí tuvo un heredero único, ya que Severus Snape no tenía hermanos.
Esta situación colocaba a Tom en un impase, ya que no podía alejar a Severus de su Harry. En todo caso, lo único que podía hacer era intentar atraer a Harry hacia él. Mientras no tocara a Severus Snape, Magnus no tendría por qué ir tras él.
Magnus ni siquiera se dignó a despedirse de Tom antes de levantarse e irse de su oficina, seguido por todo su sequito. Solo hasta que el último hombre del contingente se fue de la empresa, todos, incluyendo a Tom, pudieron respirar tranquilos.
Tom ahora sabía que Severus Snape no era cualquier hombre y que su única oportunidad con Harry era intentar atraerlo hacia él. Así que lo que tenía que hacer era revisar sus recuerdos y averiguar los pasatiempos de Harry, sus gustos y predilecciones actuales. Solo así podría averiguar la mejor forma de acercarse a él y arrebatárselo a Snape.
Ajeno a este drama, Harry estaba disfrutando su relación con Severus. Sus días eran tranquilos relativamente y aunque no habían caído en una rutina, ciertamente había cosas que ya eran comunes en su relación. Muchas veces se quedaban a dormir en la casa del otro y cenaban en alguna de las dos casas. Salían con los amigos de Harry, los de Severus o la pareja de ancianos estrafalaria que eran Gellert y Albus.
La piscina comunitaria fue estrenada con una fiesta en la piscina, ahora que el frío había quedado atrás y Harry terminó de conocer al resto de los vecinos. Todos parecían lo suficientemente amables y aunque quizás no les agradara, parecían estar dispuestos a darle el beneficio de la duda y Harry podía vivir con eso.
Cuando fue el cumpleaños de Harry, este decidió organizar una fiesta en la piscina (con el permiso de los otros vecinos, claro) y su pequeña fiesta de cumpleaños con sus amigos cercanos, terminó en una fiesta enorme con sus amigos, los de Severus y todos los vecinos.
Severus tuvo que ir a comprar más comida y pasteles, porque lo que habían comprado para la fiesta terminó siendo apenas lo de una botana. Dean y Seamus tuvieron que mandar a traer otros barriles de cerveza a sus empleados y la pequeña fiesta terminó en una fiesta enorme donde incluso llegó gente de los edificios vecinos a su cuadra.
Cuando la fiesta terminó, Harry estaba asombrado de que hubiera sido tanta gente, incluso gente que ni conocía termino llegando (con un regalo, eso sí) y que incluso algunos empleados cercanos a los que invitó, terminaran avisando a los otros y sus empleados terminaron celebrando su cumpleaños con esta fiesta extraña que empezó como una sencilla parrillada con unos pocos invitados.
Mientras Severus le ayudaba a limpiar el lugar, y sus amigos con resaca limpiaban otras partes de la alberca y los alrededores, este le dijo a Harry que no se preocupara mucho. Que hubiera habido tanta gente queriendo festejar su cumpleaños, era señal de que Harry era amado.
Eso puso una sonrisa en Harry que tuvo que aceptar lo que le decía su novio. Si, ahora había mucha gente a su alrededor que celebraba que hubiera cumplido un año más de vida y apreciaba su existencia. Atrás habían quedado los días en que se sentía más un engranaje de algún tipo de maquinaria y ahora solo estaba Harry.
Su negocio iba bien, su vida amorosa estaba insuperable y sus amigos estaban prosperando en sus respectivos negocios. Incluso Tiberius que llegó casi a la media noche, había disfrutado mucho la fiesta. Nadie supo quién le aviso pero el hombre llegó y se fue con dos señoritas que nadie conocía, pero llegaron con dos botellas de champaña cristal para Harry. Al menos las coladas tenían buen gusto.
Los regalos de Harry iban desde lo pensado con el corazón hasta lo genérico pero de buen gusto. El regalo de Tiberius fue un cuadro titulado "Los amantes" y Harry pensó que era un cuadro hermoso, con todos esos tonos rojos, naranjas y rosas. Había algunos tintes azules y morados, pero casi nada de negro más que al principio. Era evidente que Tiberius intento plasmar a su primo y a él en este cuadro y parece que lo había logrado.
Mientras Harry había disfrutado su fiesta y todas las atenciones, era ignorante de que estaba siendo vigilado por el investigador que Tom contrató. El hombre sinceramente no entendía a su cliente. El chico que lo había abandonado estaba claramente feliz en su nueva vida. Parecía ser un buen chico e incluso su nueva pareja parecía darle un buen trato y se veía enamorado, ¿Por qué su cliente quería separar a su amor de alguien que lo hacía tan feliz?
El investigador no decía todos sus pensamientos a sus clientes y sabía mantener su mente para sí, haciendo solo lo que el cliente le solicitaba, pero en su opinión, Tom Riddle había sido un completo asno respecto a su ex. Uno no simplemente pisoteaba los sentimientos de otra persona y pensaba que estaría ahí para siempre, eventualmente se cansarían y se marcharían, ¿Cómo pensó, sinceramente, que un joven tan agradable iba a estar bien con una infidelidad?
Desconocía todos los datos pero el investigador pensaba que era probable que Tom Riddle hubiera sido excesivamente obvio en su infidelidad si este joven no dudo en dejarlo, o por el contrario, ya eran demasiadas infidelidades. Alguna de esas dos cosas o incluso ambas.
Como fuera, él se limitaría a entregar la información a su cliente y en su privacidad rezaría porque este joven no le diera una segunda oportunidad a Riddle. Era difícil no sentir que este joven finalmente había obtenido su "felices para siempre" con ese hombre de nariz aguileña.
Tom Riddle estaba leyendo el informe del investigador y este se negó a seguir trabajando para él. Tom simplemente le pagó la cantidad acordada y ni siquiera pensó en porque este hombre ahora se negaba a trabajar para él y en realidad, no le importaban los pequeños peones.
Su terapeuta le había dicho que era narcisista y consideraba a las personas como propiedades y no como amigos, familiares o compañeros. También le dijo que ese tipo de actitud, probablemente vino de alguno de sus padres y su necesidad compulsiva de mantener feliz a su padre, pudo haber sido tanto un condicionamiento como un comportamiento aprendido por el padre que no era narcisista.
Tom solo pensaba en que la terapeuta intentaba sacarle más dinero, agendando más sesiones innecesarias.
Como fuera, ahí estaba Tom, leyendo el informe de las actividades de Harry y cuanto más leía, más fruncía su ceño. Harry parecía estar incluso más feliz ahora que cuando estaba con Tom. No era solo que estuviera feliz con su trabajo y amigos, sino que estaba feliz con su pareja. Al parecer, el tal Snape era compatible con el carácter de Harry.
Contrario a Tom, Severus Snape solía cocinarle a Harry, lavar la ropa, acompañarlo a hacer las compras semanales, llevarlo a sus oficinas y luego regresaba a su casa a atender su propio negocio de bienes raíces. Tenían citas, le regalaba flores y pequeños presentes, los amigos de Harry y Severus conocían a la otra parte de la pareja e incluso ya se había conocido los dos grupos de amigos.
Ambos grupos aceptaban al compañero de su amigo en común y parecían llevarse bien entre ellos a pesar de las diferencias de edades.
Tom intentaba recordar cuando salió con Harry y su grupo de amigos y descubrió que jamás habían salido juntos. Harry intento que conociera al menos a sus amigos principales pero Tom siempre estaba ocupado e intentaba compensarle eso con algún obsequio. Harry parecía aceptar los obsequios y luego de algunos intentos más, dejó de hacerlo y siguieron saliendo ellos dos solos.
Tom tampoco pudo rememorar si alguna vez le presentó a algún amigo… o al menos a uno de sus socios principales. Si se los encontraba en alguna fiesta, presentaba a Harry como "un amigo cercano a su corazón" y todos sabían que esa era una manera de decir "amante o novio", pero que él dijera en voz alta "es mi hombre/es mi novio/pareja", jamás.
Cuanto más intentaba recordar su relación con Harry, más se daba cuenta de que Harry siempre fue esta persona generosa que se acopló a la manera de ser de Tom, pero Tom jamás puso un empeño real en corresponder todas estas acciones. Sin embargo, Tom se negó a verse a sí mismo como egoísta y simplemente pensó que todo era por la falta de tiempo, pero una vez que Harry regresara con él, organizaría mejor su agenda y le daría un buen regalo.
Tom seguía pensando que una casa bonita compensaría todas sus faltas. Una casa lejos de Severus Snape, claro está.
Dado que el investigador privado se negó a seguir trabajando para él, Tom contrato otro. Este también trajo un informe parecido al anterior, y aunque relataba una pequeña discusión entre Harry y Snape, no pareció durar mucho y se reconciliaron el mismo día, luego de que Snape se disculpara.
Tom estaba pasando un momento particularmente difícil intentando encontrar alguna fractura en la relación de Harry para aparecer en la vida de su ex. Además, estaba pensando en que era extraño que Harry y Snape tuvieran una relación tan aparentemente idílica.
Así que desconfiando de los investigadores, decidió hacer una investigación por su cuenta. Armado con unos binoculares, un auto rentado de baja categoría y ropa común, Tom empezó a perseguir activamente a la pareja.
Contrario a lo que esperaba, los investigadores que contrato habían tenido razón. Severus Snape parecía bastante enamorado de Harry y Harry parecía igualmente enamorado de él. Tenían ya una pequeña rutina establecida pero eso no quería decir que fueran rutinarios. Harry solía prepararle el almuerzo a Snape y este le preparaba una lonchera con su almuerzo, ya que de los dos, Harry era quién si salía de casa para ejecutar su trabajo. Luego cocinaban juntos la cena en alguna de las dos casas y veían alguna serie o película.
Severus si llevaba a Harry al trabajo, pero no lo iba a buscar por el horario un poco cambiante a esa hora. Salían los fines de semana y Tom tuvo la suerte de ver una pequeña reunión entre un par de amigos de Harry, otro par de Snape y los ancianos que vivían cerca de ellos.
Tom tenía que aceptar que la dinámica de pareja entre Snape y Harry era bastante distinta a la que ellos habían llevado y Harry parecía estar prosperando con esta relación. Tom estaba un poco molesto por esto y dejo de vigilar a Harry alrededor de dos semanas después de empezar a vigilarlo.
Tenía muchas cosas que pensar y se aisló del mundo.
Nadie, ni siquiera sus empleados, vieron a Tom durante una semana. Si Tom era sincero, los primeros días rompió muchas cosas del pent-house. Tiro los regalos que Harry dejó atrás, en la basura. Maldijo en todos los idiomas que conocía y bebió varias botellas de vino, vodka y cualquier cosa con alcohol para consumo humano. Esos fueron los primeros 3 días de esa semana enclaustrado.
Los siguientes 4, fueron más bien de introspección. Tom tenía que aceptar que cuando sucedió la ruptura, nunca dimensionó su impacto en su propia vida. De alguna forma retorcida, creía que Harry seguía siendo suyo y solo estaba haciendo un berrinche. No era así, Harry finalmente había agotado su paciencia que a veces, parecía infinita.
Tom nunca vio las señales, o era mejor decir que se negó a verlas.
Harry siempre intento integrar a Tom en su mundo y que este le integrara al suyo, pero Tom siempre encontraba excusas baratas como el tiempo suyo, o el de sus conocidos. Jamás defendió a Harry de los ataques de su padre, porque en opinión de Tom, Harry ya se defendía maravillosamente por su cuenta. Nunca pensó que Harry consideraría esto como falta de interés de su parte.
Tom siempre fue receptor de múltiples atenciones y cuidados de Harry, como mantener la casa agradable, elegirle la ropa, cocinarle sus comidas favoritas y ser su escudo durante las fiestas. Tom debería haber sido también el escudo de Harry, pero Harry tuvo que ser tanto su propio escudo como el de Tom en esos compromisos de alta sociedad y negocios.
Pero cuando intentaba recordar alguna cosa que él hubiera hecho por Harry, solo venían momentos en que le daba algún objeto de varios miles de dólares y la cara de Harry diciéndole gracias, pero con una sonrisa de negocios.
Recordando estas ocasiones, solo recordaba un puñado de veces en que Harry sonrió felizmente para él y todas eran cuando estaban en la cama o salían a pasear como cualquier otra pareja. Harry apreciaba mucho más los pequeños gestos que los regalos caros y Tom estaba demasiado acostumbrado a ser esta persona que todo arreglaba con obsequios abrumadores.
Viendo que estaba abrumado por estas revelaciones, Tom se decidió a dar un paseo por el vecindario para tener un poco de aire. Sin embargo, esto no ayudo, ya que mientras paseaba, recordaba esos breves momentos de felicidad con Harry, cuando hacían esto y Harry tomaba su mano y le sonreía tímidamente.
Cada edificio le traía nuevos recuerdos y con cada recuerdo, Tom sentía una sensación que jamás había pensado sentir: un corazón roto.
Cuando las lágrimas, por primera vez en su vida, fluyeron de sus ojos, Tom se maravilló de lo hermoso y terrible que era el amor. Él había vivido toda su vida ciego. Su madre no había fallecido tan arrepentida por no haber obtenido participación del capital de Thomas, sino porque jamás pudo ganar el corazón de su padre.
Viendo en retrospectiva las acciones de su madre, parecían más las de una mujer loca de amor que las de una esposa de contrato, temerosa de perder su lugar. Una esposa como ella, tenía asegurado su lugar, haber dejado estéril a la amante de su marido era más una acción para que Thomas la abandonara y se concentrara en su familia.
Que ciego había sido Tom de ver las cosas bajo el filtro de los ojos de su padre.
Su madre había muerto con el corazón roto y la educación de su padre le impidió ver el enorme regalo que había sido Harry en su vida. Harry era una persona tan diferente a los ricos con los que él se codeaba, y estaba tan acostumbrado a estos últimos que jamás considero que Harry estaba siendo sincero y no le presentó una fachada de "ser único y diferente". Él simplemente lo era.
Con cada paso que daba Tom en las calles, era menos consciente del espectáculo que daba a los otros transeúntes. Muchos sabían que este joven estaba sufriendo por desamor y aquellos que habían sufrido decepciones amorosas, fingían no ver las lágrimas surcando el rostro de Tom. Otros sencillamente pensaban que se había peleado con la novia o fue rechazado en alguna confesión.
Unos pocos si identificaron que Tom apenas había caído en cuenta de que su ex-pareja lo había superado. Sabían que algunas personas digerían estas cosas muy lentamente y se daban cuenta de la enormidad de la ruptura hasta meses después. No podían saber que a Tom le llevó casi dos años darse cuenta.
Cuando Tom terminó su paseo, ya habiéndose limpiado las lágrimas, observo que la entrada de su edificio estaba Cassandra. Cuando la vio, supo que no podía continuar con este matrimonio. Ellos estaban por casarse en un par de semanas, pero no podía hacerle a una mujer lo que su padre le hizo a su madre.
Cassandra no lo merecía. Cassandra había sido una buena amiga todo este tiempo e incluso le busco ayuda cuando ni él sabía que la necesitaba. Ella además, era la primer amiga real que tenía y no una socia de negocios o un contacto útil. Cierto que por esas razones se hizo el compromiso, pero Cassandra no estaba obligada a llevarlo a terapia, ni a buscarle ayuda. Podría haber continuado su vida como si nada y simplemente casarse así, pero ella quiso ayudarlo.
Le debía mucho a Cassandra y no podía arrastrarla a una dinámica parecida a la de sus padres. Harry había tenido razón todo el tiempo, cuando un año después de que empezaron a vivir juntos, le dijo que podían vivir bien sin el apoyo de su padre. Tom se negó a escuchar los puntos de Harry y lo dejó solo en el pent-house y regresó al día siguiente con unos gemelos carísimos de platino.
Harry aceptó los gemelos pero jamás los uso y sutilmente intento que Tom viera su punto de vista. Tom jamás quiso verlo y continúo engañando a Harry bajo la excusa de que "solo era por negocios". Tom no había estado listo para comprometerse y veía el matrimonio como un negocio y no como la unión de dos personas que se amaban profundamente.
Cuando Cassandra vio a Tom a los ojos, supo que su compromiso había terminado. No necesito que Tom se lo dijera, simplemente vio en Tom una resolución que antes no estaba ahí y ella simplemente lo sabía. Tom sería el siguiente heredero en desertar de su familia.
Cuando averiguo la historia de Harry, no pudo menos que admirar las agallas de Harry. Abandonar la cómoda vida que llevaban era un salto de fe y ella no se veía todavía capaz de hacer algo así. Tom era una salida fácil del yugo de su familia pero viendo esa chispa de rebeldía en los ojos de su ahora ex-prometido, Cassandra sabía que Tom ya no era una opción.
—Hola—Dijo Tom cuando estuvo frente a su prometida, próximamente a ser ex-prometida.
—Hola—Tom, escuchando el tremor en la voz de Cassandra, supo que ella sospechaba la conversación que estaba por tener lugar.
—¿Quieres entrar? Hay algo que quiero hablar contigo—Cassandra asintió y ambos entraron para subir hasta el pent-house.
No fue una conversación fácil y ambos lloraron en varias partes, pero al final de ella, ambos se sintieron más ligeros. Tom ahora entendía por qué Cassandra había aceptado el compromiso tan fácilmente y también porque ella le había buscado ayuda. Tom jamás se había visto a sí mismo como alguien comprensivo.
Cassandra era la primera en verlo así, como una persona con una personalidad única. Ella vio cosas en él, que ni él mismo había visto en sí mismo. Ella había visto esas pequeñas señales de colapso mental y temió que fueran el indicio de algo más grave. Ella no quería perder al primer amigo que la apoyo en sus planes y que escuchaba lo que tenía que decir en vez de decirle lo que se esperaba de ella.
Tom finalmente los vio a ambos como víctimas de su ambiente. Ambos provenían de familias donde no eran vistos como personas, sino objetos y ellos habían hecho lo mismo con otras personas. Sin embargo, cuando se comprometieron, se propusieron sacar lo mejor de la situación y encontraron en el otro un alma afín, pero no un alma gemela.
Podrían ser los mejores amigos pero no los amantes que ellos deseaban con fervor. Tom ya había encontrado un amante que lo veía como una persona y lo dejo ir, Cassandra aún no había encontrado ese hombre o mujer y Tom deseaba que su primer amiga tuviera esa fortuna.
Ambos finalmente se dieron la mano y comprendieron que estaban por hacer un movimiento suicida en su mundo y lo mejor para ellos era hacer lo que Harry había hecho hace años: emanciparse de sus familias.
Tenían dinero a su nombre, aunque no tanto como sus familias. Era suficiente para empezar algún tipo de negocio y construirse algo por sí mismos. Sería un camino lleno de espinas, pero se tenían el uno al otro para apoyarse y por primera vez en su vida, estaban emocionados por el mañana.
Un mes después de esta epifanía de Tom Riddle, durante el desayuno en casa de Severus Snape, tanto él como Harry estaban leyendo el periódico mientras comían unos hotcakes, Severus con huevo y tocino a un lado y Harry con fruta picada y granola con yogur en un tazón.
En el periódico estaban varias noticias, una de ellas era que el patriarca de los Prince anuncio su regreso para hacerse cargo del conglomerado de su familia. Severus alzo una ceja, reconociendo que su abuelo lo buscaría en algún momento y era hora de contarle a Harry su historia. Harry frunció el ceño y luego sonrió, cuando leyó las noticias sobre la cancelación del compromiso de Tom y Cassandra, seguido de la noticia de que Tom estaba por empezar un negocio propio de arte.
Al parecer, eso no le había sentado bien a Thomas y este había anunciado que su hijo estaría siendo desheredado. Thomas no calculo bien el impacto de sus actos, porque las acciones de sus compañías habían bajado en varios puntos. Eso es lo que había hecho sonreír a Harry.
Había un pequeño clasificado, solicitando un mayordomo para la familia Potter y Harry supo que sus padres no habían podido cubrir la vacante dejada por Argus, pero como él se había alejado de su familia desde hace mucho tiempo, esa pequeña noticia en realidad no le afectaba.
En su mundo, el que él había construido con sus propias manos, todo estaba bien. No perfecto, bien. Y así es como le gustaba. Prefería mil veces a su imperfecto Severus que a cualquier hijo perfecto de una familia rica o noble, o ambas.
Ambos hombres siguieron sus vidas por ese día y Severus le dijo que quería hablar de algo con él pero podía esperar al fin de semana.
Harry había esperado por este momento durante bastante tiempo. Severus finalmente estaba contándole su historia y ciertamente había muchas cosas en común con su propia historia.
Severus había sido criado como una persona de bajos recursos, ya que su madre escapo con su padre, pero Severus ignoraba que su madre había sido rica. Ella y su padre se habían casado y huido hacia Irlanda.
Tobías había sido un guardaespaldas de su madre y fue así como ambos se conocieron. Tobías tenía muchos gustos en común con Eileen y luego de un año de convivencia, ellos empezaron una relación en secreto. No solo una relación platónica sino que ya habían tenido sexo.
Cuando Magnus, el padre de Eileen, le anuncio que la iba a comprometer, esta decidió huir con Tobías, ya que descubrió que tenía un mes de embarazo y si su padre se enteraba, la hubiera obligado a abortar.
Cuando Magnus los encontró, ella ya había dado a luz a Severus y se había casado con Tobías tanto en la religión de él (Pagana) como la de ella (Anglicana) y por las leyes del Reino Unido. Habían hecho tantos amigos y anunciado a tanta gente su unión, que si Tobías "mágicamente" desapareciera, todos sospecharían y la sospecha recaería en Magnus y por consiguiente, en la familia Prince.
Esto derivo en que Magnus desheredara a Eileen y finalmente dejara en paz a la pareja. Sin embargo, Eileen enfermó cuando Severus tenía alrededor de 15 años y los gastos de su enfermedad, así como los relacionados a su deceso, dejaron muy mermados los ahorros de Tobías, viéndose imposibilitado para darle a su hijo algo más que las necesidades básicas.
Una escuela como la que la inteligencia de su hijo merecía, estaba más allá de sus posibilidades y fue cuando llegó una bendición disfrazada de maldición. Magnus, el abuelo de Severus, había perdido a sus hijos un par de años antes, con diferencia de pocos meses entre ambos, así que solo le quedaba un heredero: su hija.
Cuando fue a buscarla, se enteró de su deceso pero notó a Severus y luego de enviar al adolescente a comprar algunas viandas para cenar, Magnus habló claro con Tobías: quería a Severus. Tobías se resistió a separarse de su hijo pero le dijo a Magnus que no se negaría a que este tuviera una relación con su único nieto. Después de todo, era todo lo que le quedaba a ambos de Eileen.
Magnus no pareció complacido por esto pero se despidió "cordialmente" de Tobías. Sin embargo, luego de esta visita, empezaron a suceder una serie de accidentes extraños y situaciones malas para el padre e hijo.
Para empezar, la fábrica donde trabajaba Tobías, fue vendida a una empresa extranjera y todo el personal de años fue despedido sin opción de apelar o mantener su antigüedad. Luego, un auto casi arrolló a Tobías y algunas personas intentaron hacer que probara drogas o le invitaban a beber muchos tragos en el pub local. Del lado de Severus, varios adolescentes locales le habían estado haciendo bullying pero Severus había sido enseñado por su padre a pelear y era poco lo que podían hacerle, otros chicos intentaron decirle que su padre había sido encontrado borracho o "indispuesto", dando a entender que se había metido algo.
Era difícil no pensar que alguien estaba intentando destruir a Tobías mientras al mismo tiempo, pensaban destruir la relación entre padre e hijo. Viendo todo esto, Severus le dijo a su padre lo que estaba sucediendo y este a su vez le comento a su hijo lo que le sucedía a él. Ambos vieron el patrón y fue cuando Tobías le contó sobre la familia de Eileen.
Magnus siempre se presentó en trajes normales y no había nada indicando su nivel económico. Saber que su abuelo era rico, asquerosamente rico, fue un shock para Severus y más cuando se enteró de que su madre había sido desheredada por atreverse a amar a su padre y elegir el amor sobre el dinero.
Ambos sabían que era difícil que Magnus no supiera sobre la enfermedad de Eileen, pero era evidente que el anciano hombre era demasiado orgulloso para disculpar a su hija y seguía empecinado en que ella agachara la cabeza y le rogara por ayuda. De esa forma, él podría marcar sus condiciones y tenerla sometida a su voluntad.
Tobías sabía que el patriarca Prince era implacable y no iba a cejar en su empeño de hacerse con la tutela de Severus, así que entre ambos urdieron un plan. Severus haría la pantomima de que estaba cansando de las "borracheras" de su padre e iría a pedir asilo a casa de Magnus. Una vez instalado en la mansión, le diría a su abuelo que suficiente dinero, haría que su padre no pudiera pedir la tutela de él o amenazara con demandarlos.
Una vez que Tobías tuviera dinero, se largaría del país, pero establecería una nueva identidad en algún paraíso fiscal y abriría una cuenta desde donde empezaría a aumentar su capital. Todo esto iría a parar a manos de Severus cuando Tobías muriera o en caso de algo menos drástico, Tobías pudiera apoyar a su hijo con este dinero.
El plan estaría establecido para ser ejecutado durante bastantes años, hasta que Severus tuviera 30 años o decidiera alejarse de la familia Prince.
Por extraño que parezca, funcionó. El patriarca Prince en realidad pensó que Tobías era un borracho y le mando 15 millones de libras si le cedía la custodia de Severus. Tobías incluso se había bañado en whiskey para simular haber estado bebiendo y Magnus arrugó la nariz cuando lo observaba firmar los papeles.
Era evidente que el patriarca siempre lo había considerado indigno de su hija y pensaba en Severus como un reemplazo.
Como fuera, las piezas estaban establecidas y Severus empezó su educación como heredero de la casa Prince. Fue a las escuelas adecuadas e hizo conexiones relevantes, pero no todas estuvieron bajo el escrutinio de su abuelo y al igual que Harry, Severus se le escapo al patriarca por las rendijas que no estuvo atento.
Cuando Severus cumplió 25 años, su abuelo empezó a organizarle citas con señoritas adecuadas como futuras nueras. Severus fue cordial y encantador pero jamás permitió que le establecieran un compromiso. Cuando llegó a la edad de 28 sin haber elegido una cónyuge, su abuelo le dio un ultimátum y le dijo que lo sacaría de la herencia si no se casaba.
Severus se empezó a reír de su abuelo y sacó una valija, la misma con la que había llegado. Solo metió la ropa con la que había llegado a la mansión, la foto de sus padres y su álbum de fotos familiar, una de su abuelo porque finalmente había llegado a apreciar al anciano y se fue de ahí, dándole a su abuelo una señal con el dedo medio.
Magnus montó en cólera y le congelo los activos a Severus, pero no pudo hacer nada con aquellos que pertenecían solo a Severus. Intento hacer que el banco los considerara familiares pero estaba establecido que solo la línea paterna de Severus, podía acceder a esos fondos.
Magnus le había perdido la pista a Tobías e ignoraba donde estaba el hombre, ya que alguna vez lo mandó matar y sus sicarios no habían dado con él. Fue hasta ese momento que recordó que Tobías había estado en las fuerzas especiales y fue por lo que lo contrato como guardaespaldas de Eileen. El hombre evidentemente tenía contactos que podían haberle ayudado a borrar su rastro y darle una nueva identidad.
Ahora estaba sin sus hijos y sin su único nieto. Sus hermanos y sus familias solo estaban esperando su muerte para heredar y destrozar sus empresas, despedazarlas y repartirse los restos. Y lo peor es que no podía culpar a nadie más que él.
Severus, en cambio, había ocupado sus años en la Mansión Prince para hacerse de poder político y financiero. Ciertamente no rivalizaba con el de su abuelo, pero tampoco era tan despreciable como para que su abuelo no se lo pensara dos veces antes de atacarlo y dado que Severus había elegido la abogacía como carrera, se había hecho de varios amigos en altas esferas de esos círculos.
Su abuelo no iba a intentar forzar su mano.
Una vez fuera de la familia Prince, Severus empezó a comprar algunas propiedades que se veían prometedoras y lentamente empezó a gastar dinero y ganarlo. Luego compro las propiedades que Harry ya conocía y rara vez las vendía, aunque tenía muchas otras repartidas en los suburbios, la ciudad y algunos pueblos aledaños.
Severus era tan rico como Harry, pero menos que la familia Prince, igual que Harry respecto a la familia Potter. Ambos habían sido vistos como meros objetos o una forma de perpetuar los genes, no como personas con anhelos. En el caso de Severus, la veta rebelde empezó con su madre que eligió a su padre sobre su abuelo. En el caso de Harry, empezó gracias a la promesa de Argus con Fleamont y la pequeña gatita que fue la Señora Norris.
Ambos habían sido niños maltratados. No como esos niños golpeados o dejados a su suerte, sino un tipo de maltrato más sutil y pernicioso que algunos sufrían: padres que pensaban en ellos como activos.
Una vez que Severus terminó su historia, Harry le abrazó y le dijo que habían sido muy valientes y astutos, tanto él como su padre. Ambos sabían que estaban metiéndose en territorio enemigo y podrían acabar mal, pero se armaron de valor y salieron victoriosos. Tobías nunca podría regresar a Inglaterra, pero tenían sus formas de comunicarse y Severus sabía que su padre lo estaba haciendo bien en alguna isla del Caribe.
Tobías jamás volvió a casarse, considerando a Eileen el único amor de su vida y solo se dedicaba a hacer crecer el dinero de Severus y financiarle sus proyectos. Después de todo, Tobías había aprendido muchas cosas trabajando para los Prince.
La confesión de Severus, no hizo más que acrecentar la confianza de Harry en que su historia juntos iba a tener un buen final. Quizás con el tiempo, ambos considerarían dar el gran salto y oficializar su relación con una boda. Solo el tiempo lo diría.
La psicóloga de Tom estaba asombrada. Había luchado mucho con Tom para que este se abriera y el hombre parecía cerrarse cada vez más en sí mismo. Sin embargo, el Tom Riddle que estaba frente a ella parecía haber pasado un infierno y había sido despojado de su arrogancia habitual.
Ella había predicho que Tom eventualmente caería en cuenta de sus errores respecto a sus relaciones pasadas, pero conforme Tom iba contando más y más de Harry, la única relación homosexual que había tenido seriamente, ella iba anotando más y más cosas.
Harry había sido tanto una bendición como una maldición en la vida de Tom. Con Harry, Tom se vio confortado y validado, pero también fue puesto en una posición incómoda con su padre. Thomas no había aceptado la falta de capital (aparente) de Harry, y viéndolo como una persona sin algo que aportar a la familia Riddle, este trato activamente de separar a la pareja.
Tom cayó en una autocomplacencia y se convenció a si mismo de que Harry siempre iba a amarlo y aceptar todos sus caprichos. Fue un error. El Harry que Tom había descrito no era otro sino el joven empresario que lideraba los titulares de finanzas a últimas fechas, ya que su empresa que hasta hace poco más de un año era de mediano tamaño, había abierto más sucursales, centralizando las oficinas principales en una zona lejos del centro empresarial de la ciudad.
Harry le mostró a Tom que había más caminos que someterse a la voluntad de su padre y Tom se negó a ver la evidencia, así que fue cuando se volcó en el compromiso acordado por su familia. Cassandra, la antigua prometida de Tom, fue la única que notó los cambios en Tom y le busco ayuda.
Todas estas acciones finalmente hicieron conexión en Tom y tuvo una ruptura en su ego. Finalmente lo que le había dicho Harry entro en su grueso cráneo y colapso mentalmente, finalmente cayendo en cuenta de que había dejado ir a una persona que realmente lo amaba solo por ser él mismo. Cassandra también lo amaba, pero como una amistad y también no exigía nada de él, excepto estar juntos sin mayor afán.
Entre Harry y Cassandra, Tom finalmente encontró el valor de romper su tóxica relación con su padre y se había emancipado de él, eligiendo abandonar a su padre y buscar suerte por él mismo. Cassandra estaba preparando su propia huida y sería apoyada por Tom quién ya estaba haciéndose un nombre con su negocio de arte. Cassandra quería poner una casa de subastas y eso se relacionaba con el negocio de Tom de vender pinturas y esculturas.
Tom sabía que ya no podía volver con Harry, viéndolo feliz con el amante después de él. Tom estaba dándole la máxima expresión de amor a Harry, dejándolo ir. Sin embargo, Tom sabía que algún día, alguien intentaría saltar todas las barreras y llegar a él, no podía ofrecerle este hombre tan dañado, así que decidió tomar la terapia en serio.
La psicóloga estaba feliz, Tom finalmente tendría progresos y estaba emocionada de que este pudiera empezar a sanar. Tom estaba dando un gran salto de fe y ella le daría todas las herramientas que pudiera para que lograra sus objetivos. Finalmente, fue por lo que había elegido esta carrera, para curar las heridas invisibles.
Nota al margen: Se que muchos querían ver sufrir al perro de Tom… digo, querían ver como colapsaba Tom y sufría durante varios capítulos todo lo que le hizo sufrir a Harry, pero la verdad es que Tom ya vivía un tipo de infierno que él ni siquiera sabía que estaba viviendo.
Harry para Tom era lo que decía Morpheus en Sandman, al final de su duelo con Lucifer: la esperanza es indestructible, porque, ¿Qué seria del infierno si las almas no soñaran con escapar de ahí?
Harry para Tom era ese pequeño resquicio de bondad y amor sin restricciones, pero como una persona que desconocía estos sentimientos, fue ciego a verlos y Harry sencillamente agotó su paciencia y se fue. No dejó de amar a Tom, pero estaba cansado y lo dejó libre. Luego Harry finalmente supero a Tom de forma saludable y no entro en otra relación hasta que estuvo listo.
Tom fue al contrario, entro en una relación (aunque esta fuera impuesta) antes de procesar la ruptura y aunque hizo cosas condenables (como el NTR) durante su relación con Harry, realmente no entendió que tan malas habían sido y las consideraba normales por que su madre también las vivió.
Hay historias mías donde disfruto poniendo parir cayotes a los perros malévolos pero en esta sentí que Tom era parte de las victimas también, además de victimario y es difícil hacerle las cosas más duras cuando todo se va a ir al garete por otras causas.
Así que si esperabas una historia donde habría una tortura larga donde Harry le rechaza una y otra vez mientras Tom se arrastra, pues una disculpa. Seguro hay un autor/autora que ya la escribió y esta esperando a que la leas.
Este es el capítulo final, pero aun falta el Epílogo, así que no desesperen.
Saludos UwU
