Y acá va el segundo...

Ranma 1/2 no me pertenece.

Mini glosario:

gi= ropa de entrenamiento

tadaima = ya regresé (saludo cuando uno llega a casa)

okaeri = bienvenido de regreso (saludo de recibimiento cuando uno llega a casa)


Epílogo 2

Hoy en nuestro séptimo aniversario de bodas, me encuentro mirando la foto de la misma. Todos los momentos felices que vivimos desde entonces. Por supuesto que también ha habido momentos difíciles, pero lo hemos superado en familia. No puedo estar más feliz. Hoy con Akane vamos a ir a un hotel con aguas termales y cena incluida para disfrutar en pareja. Mi madre se quedará en casa con sus preciados nietos.

- Ranma, ¿Ryoma ya está de regreso? – Akane se asoma por la sala con el gi de entrenamiento ya que está dictando unas clases.

- Aún no. Imagino que debe estar por llegar.

- Quería pedirle que vaya a comprarme unas cosas. ¿Cuánto más se va a tardar este chico? – dice molesta.

- Si quieres me llevo a Yuna conmigo, los bebés están durmiendo. No tardaremos mucho.

- No, no. Mira si los bebés se despiertan justo cuando ustedes no están. ¿Qué puede estar entreteniéndolo tanto?

- Quizás el fan club de chicas que tiene detrás.

Hace cara de hastío – Digno hijo de su padre, ¿eh?

- Que yo recuerde tú también eras muy popular en la escuela.

- Sí, pero tú eras el que tenía tres prometidas y no te decidías por ninguna.

- ¿Vamos a discutir en nuestro aniversario?

- Mmm…por hoy te lo dejo pasar… además tengo que continuar con la clase.

- Ve tranquila, apenas llegue Ryoma le digo que vaya a comprar las cosas.

- ¡Gracias! – y se vuelve rápido al dojo.

Mi segunda hija, Yuna me mira con sus grandes ojos azules expectantes. Yuna tiene mis ojos y extrañamente el cabello rojizo, es mi copia de la época en que tenía mi maldición pero en pequeña. Cuando nació al ver su cabello recuperé una parte de mis recuerdos, en el momento fue un shock pero el saber que esa vida que vi en fotos realmente era mía fue reconfortante – Papi, ¿nos vamos de compras?

- La idea es que sea tu hermano el que vaya.

Escucho la puerta abrirse.

- Tadaima. – escucho la voz de Ryoma saludar desde la puerta.

- Okaeri. Ya tu madre estaba quejándose de que no llegabas. – Viene con la ropa desgarbada y con algo de tierra. - ¿Te persiguieron otra vez?

- ¡No entiendo por qué no me dejan en paz! Ya les dije una y mil veces que no me interesan. ¿Por qué tienen que ser tan insistentes?

- Sí yo lo sabré…es la maldición de los Saotome, las mujeres no pueden resistirse a nuestro encanto.

- Ya me tienen cansado…

- ¡¿Yo también tengo una maldición?! – pregunta Yuna preocupada

- No, amor. Y en el caso de que en algún momento hubiera chicos detrás de ti, tu papi se encargará de todos ellos – respondo con la vena de la sien palpitando tan solo de imaginarlo. No voy a dejar que nadie se acerque a mi bebé.

Ryoma con sus 13 años se volvió un joven muy apuesto, bueno tiene mi sangre y la de Akane, así que era un resultado obvio. Ahora se deja el cabello un poco largo y se lo acomoda en una corta coleta.

- ¿Quiénes fueron esta vez?

- Fueron las peores, Emi, Rika y Mayumi. – dice mientras se quita el bolso de los hombros.

- Eran la presidente del club de fans y las delegadas, ¿verdad?

- La verdad me importa un comino. Yo solo quiero que me dejen en paz – dice alborotándose el pelo.

- Antes de bañarte, mamá necesita que hagas unas compras.

- ¡¿Ehhhhh?! Estoy cansado, vengo de escaparme de esas locas.

- ¿Cansado con 13 años? Cuando yo tenía tu edad si quería me cruzaba el mar hasta China nadando. Sin excusas.

- Ahhhh… - Revolea los ojos – Sí, sí. ¿La lista?

- Pegada en la heladera.

Se va arrastrando los pies hasta la cocina.

- ¡¿Todo esto?! – exclama desde la cocina. Aparece apuntando la lista con el dedo molesto - ¡Es un montón! Voy a tener que hacer dos viajes.

- Pero qué quejoso. No es para tanto.

- ¡Yo te ayudo! – dice levantando la mano Yuna.

- Genial, me viene excelente tu fuerza de gorila.

- ¡Yo no soy un gorila! – le contesta molesta Yuna, aunque es verdad que para la edad de 6 años tiene una fuerza descomunal, eso lo sacó de Akane evidentemente.

- ¿Van los dos entonces? No tarden demasiado que hoy tenemos que salir con mamá.

Mi hijo vuelve a revolear los ojos – Sí, sí. Salida romántica. Puaj. – haciendo cara de asco. A pesar de ser adolescente no le interesan para nada las chicas, solamente tiene cabeza para las artes marciales. Y eso que no le faltan pretendientes, para Akane es otro lado más que sacó de mí. Pero creo que en su caso está multiplicado por diez.

Toma la mano de su hermana y se van al supermercado. - ¡Vamos de carrera, Yuna!

A pesar de la diferencia de edad con sus hermanos los adora y siempre está velando por ellos. Con Yuna se llevan 6 años de diferencia mientras que los gemelos Kamui y Kagura nacieron hace 1 año. Hablando de los gemelos, voy a dejar todo preparado para cuando llegue mi madre que no debe tardar ya.

Antes de subir las escaleras me encuentro nuevamente con las fotos de todos estos años que fuimos acumulando como familia y me topo con la foto de Shinichi, Akane y Ryoma, esa primera foto que ví cuando regresé. No puedo evitar la sonrisa que se forma en mis labios. Acaricio el anillo de casado en mi dedo y recuerdos vienen a mi mente…

Cuando aceptó ser mi esposa, cuando le regalé el anillo de compromiso en su cumpleaños, cuando le puse el anillo de casada en el dedo, nuestras manos entrelazadas mientras hacíamos el amor en nuestra primera noche como matrimonio. La sensación al tomar su mano izquierda en la mía cuando nació Yuna. El brillo del anillo la vez que sostenía el sobre con el resultado positivo del embarazo de los gemelos.

Shinichi es el detonante de que yo esté aquí hoy vistiendo este anillo en mi dedo y tenga todos estos hermosos recuerdos y vivencias.

Akane aparece detrás de mí – Ranma, ¿estás bien?

La miro con mis ojos enamorados, cada día más enamorado de ella. – Estoy perfecto.

Me sonríe y me mira de arriba abajo lascivamente – ¿Ryoma y Yuna?

Su mirada llama la atención de la zona baja de mi anatomía - Se fueron a hacer las compras que pediste.

- ¿Los gemelos?

Se me acerca provocativamente y me empiezan a picar las manos por querer tocarla - Siguen durmiendo. Ahora iba a preparar lo último antes de que llegue mi madre.

Mira el reloj con una sonrisa pícara y pasa lento y sensualmente su dedo por mi pecho invitándome a hacer una travesura.

Se muerde el labio de manera seductora desatando mi lívido - Creo que solo tenemos 7 minutos.

La abrazo fuerte por la cintura y la beso profundo y con hambre. Ella introduce sus manos por debajo de mi camiseta tocando mis abdominales y acercando sus dedos peligrosa y deliciosamente al elástico de mis pantalones mientras gime mi nombre. Cada vez que gime me vuelve loco. Me separo unos milímetros y exhalo sobre su boca – Más que suficiente por ahora.

Ríe tímida y toma mi mano para dirigirme a la habitación.

Volteo mi mirada por un segundo nuevamente hacia la foto y formulo con mis labios un "gracias."

-FINALMENTE FIN-


¡Muchísimas gracias por haberme acompañado todo este camino! A todos quienes dieron "seguir" y que han puesto como una de sus historias "favoritas" a la mía.

En especial quiero agradecer a: Alexander0621, D-Infinity, Akai27, Iwaya sum y Barbycgg por sus comentarios y el apoyo. Mi reverencia hacia ustedes.

Tengo sentimientos encontrados al subir este epílogo porque es el final final y por un lado quería terminarla y por el otro me da pena de que haya terminado, jaja.

Estoy en redacción de otra historia pero no encuentro tantos momentos para escribirla y a su vez le tengo tanto cariño a esta que me cuesta tener tanta inspiración para la otra. Espero pueda ver la luz del sol. Además cuento con una que está también en proceso que tengo bastante escrito, pero me faltan conexiones y darle el final, por más que ya tengo bastante en la mente. Mayormente es complicado hacerme del tiempo para escribir, pero bueno, veremos.

¡Un gran saludo desde Japón! Espero nos leamos pronto.