"¿Un nuevo humano?"

Serafina asiente. Como tantas veces desde tu nacimiento, la primera de todos los Serafines te a inculcado los conocimientos de la creación. El origen de todo en el Empireo, el poder para moldear la realidad a tu voluntad, y el gran deber de diseñar el universo.

Haz aprendió otras cosas por tu cuenta. Haz sentido en carne propia los peligros de lo que yace fuera del dominio de los Serafínes. También haz experimentado la efusiva y la dicha de crear vida.

Las aves, esas hermosas criaturas que creaste mientras admirabas la gloriosa forma de las alas de tus creadores. Aún así sabes que eso solo es el principio, tu propósito en el gran plan va más allá de simplemente crear animales y lo sabes, haz aceptado tu propósito y te sientes honrado de poder cumplirlo.

Es por eso que te sorprendiste cuando Serafina te contó que estaban por crear un segundo humano.

"Si, un segundo humano. La Primera Mujer"

Primero, otro primero.

"¿Se verá igual que tu?"

"¿Eres tu idéntico a Miguel?"

No lo eres. Te pareces más a Miguel que a Serafina, pero no eres como el.

"Eres parecido, pero no identico. No eres una copia si no un reflejo de nuestra divinidad. Tu y todos los humanos nunca serán identicos a nosotros, pero eso está bien. Todas somos iguales ante el juicio de la creación"

Sus palabras te animan al recordar el glorioso propósito. Aquello que te une como un igual a los Serafínes.

"¿Cuando estará lista?"

"Ahora mismo. Vine para traerte. Quiero que veas el nacimiento de la segunda humana"

Serafina agita las manos y la realidad se tuerce a su voluntad. Ya no están flotando en los infinitos mares de Ether, sino que ahora caminan con sus pies sobre un sólido inmóvil e inerte llamado tierra.

A unos metros encuentra Miguel. El se encuentra parado frente a una estatua de polvo solo sostenida por los poderes del Serafín.

Sientes como la llierva acaricia tus pies desnudoz al caminar y como las miradas del celestial se posa sobre ti.

"Adam, es bueno verte"

Miguel habla y te sonríe mientras transmite aquella paz y calidez que tanto te encanta.

"Miguel. Sera me dijo que estaban por crear a un nuevo humano"

"Ah, si. La Primera Mujer. Abaddon finalmente terminó de recoger el polvo necesario y moldearlo... hmmm"

El Arcángel soltó un ligero resoplido.

"¿Algo te molesta Miguel? ¿Abaddon se equivoco en algún detalle"

"Nada de eso Serafina. Es solo que Luzbel hizo de las suyas. Abaddon me dijo que Luzbel infundio el molde con polvo que el mismo recogió. No causará problemas con el proceso, pero es molesto"

Miguel suspiro con fastidio mientras rodaba los ojos y recordaba a su gemelo.

"Sigue siendo tan revoltoso como siempre y no deja de entrometerse en las tareas de nuestros hermanos. Deberíamos castigarlo más duramente hasta que aprenda a comportarse"

Luzbel. Es un tipo raro y peculiar. Siempre alegre y travieso, trata de meterse en los asuntos de los demás para ayudar. No es como Miguel, siempre estricto o Serafina, comprometida con el deber. Luzbel es un alma libre que recorre los confines del cosmos en busca de satisfacer su curiosidad.

Te agrada Luzbel.

El siempre tiene las ideas más extravagantes, y aunque muchos dirían que tiene la incorrecta necesidad de imponer su voluntad, sabes que es una buena persona.

Recuerdas con una sonrisa como conociste al portador de la luz y como es que este te mostró un camino más allá de solo el deber. El aire golpeando tu cara al volar y el agua al darte un chapuson son de tus sensaciones favoritas .

Pese a todo, Luzbel quiere lo mejor para la creación. Desea expandirla y llevarla hasta sus más grandes límites, crear un universo glorioso lleno de emoción y alegría.

El es un buen amigo.

"Creo que están siendo muy duros con Luzbel. El solo quiere ayudar"

Decides intervenir en favor de tu amigo.

"No trates de defenderlo Adam. Luzbel necesita ser reprendido por sus actos, no recompensado"

Miguel declara en un tono firme, pero tu sigues.

"Se que Luzbel necesita aprender a controlarse, pero no pueden negar que sus ideas, aunque raras, son brillantes. Fue el quien trajo luz al cosmos después de todo, y no olviden que fue su ingenio elaboró el plan con el que ustedes derrotaron al Leviatan"

Los Arcángeles guardan silencio. No pueden negar que pese a todo, Luzbel ha hecho grandes contribuciones a la creación y la defensa de esta. Después de todo, ¿Quien si no un loco podría haber pensado que la forma de paralizar a una entidad extranjera fuera dividir su cuerpo, alma y... Lo que sea que sea la tercera parte.

"Dejemos el tema de Luzbel de lado. Miguel, continuemos con lo planteado"

"Estoy de acuerdo"

Ambos Arcángeles recogieron el Ether en sus manos, brillando como un par le luces celeste y dorada. Miraste maravillado como las energías del empireo se arremolinaban y juntaban como un torbellino de luz divina.

Ambos se llevaron las manos a la boca, la izquierda de Serafina y la derecha de Miguel, y ambos soplaron sobre sus dedos índices. Tal y como lo habían hecho contigo, clavaron sus dedos en el par de ojos de la estatua.

Cuando retirarin sus manos, los ojos emitieron un brillo cegador que se extendio por todos los confines del reino celestial. El plvo se hizo carne, sangre y hueso. Cada minúscula parte de la mujer se formó de forma perfecta, y al terminar quedó la forma completa de la Primera Mujer.

Perfecta, gloriosa e inmaculada... Hermosa.

Tu corazón se agita en tu pecho, sientes un calor en tu rostro que nunca habías sentido. Miras a la mujer y sientes como tu mundo se estremece.

Ninguna mancha o lunar cubre la puresa de su piel blanca, ni ninguna sombra es capaz de ocultar sus protuberantes curvas. Su rostro mismo es un paisaje que transmite curiosidad, intriga y confusión. Sus largos mechones son como cientos de hilos de oro, tan largos que caen hasta sus caderas.

Pero no es su aspecto físico lo que re roba el aliento y tus miradas, son sus ojos, aquellas orbes brillantes y hermosas como amatista se clavan en tu mente y se hunden como una piedra en el agua.

Tu la miras, y por un momento el dorado y púrpura se cruzan. Sientes como un lazo invisible los une, y tú corazón no para de exaltar más y más.

Sientes amor.

En ese momento te propones a otorgarle un nombre, sientes en lo más profundo de tu corazón que debes ser tunquien la acepte como un engranaje más de la creación.

Dar nombres siempre ha sido fácil para ti. Como primogénito de la creación, siempre haz tenido el talento para leer y escuchar el significado verdadero de todo.

Lo entiendes, sabes un poco más de ella. Lo que es y lo que será, lo que hará y no hará. Los detalles son borrosos, pero logras juntar lo que puedes sobre ella y concluir algo. Logras encontrar una palabra, una que la describe en cuerpo y alma.

"Lilith. Te llamaras Lilith"

Lilith se estremece cuando una fuerza invisible la abraza. Ya no es un ser ajeno a este reino, ahora es uno más, un habitante de la creación.

Sus ojos tiemblan y su alma desborda emociones. Te acercas y la tomas de las manos en un gesto gentil. Por uno momento su cuerpo tiembla, mil millones de preguntas y se forman en su mente, pero te adelantas.

"Serás mi esposa"

Le dices. No es una orden o una sugerencia, es la verdad. Como dos engranajes gemelos, ambos están hechos el uno para el otro. Sus unión marcara el inició de la prosperidad y la abundancia en la creación.

"Y tu mi esposo"

Ella lo sabe. Sonríes con genuina alegría, y le contagias esa sonrisa a Lilith. La tomas del mentón, y bajo la aprobatoria mirada de Serafina y Miguel tu unes tus labios con los de ella.

El Primer Beso. El Primer Amor. La Primera Pareja.

"Todo empezó aquí ,¿Verdad?"

|||ADLE|||

Adam estaba cuanto menos intrigado. Belfegor les había revelado que el grueso de la población de Pereza(y la vida en general) está bajo tierra.

También les explico que tenía un elevador personal que conecta su hogar en la superficie con la más importante ciudad del primer círculo: Neues Berlín.

El nombre despertó una ligera inquietud en Adam, pero decidió seguir. Caminaron por la mansión hasta llegar a unas instalaciones subterráneas, no sin que antes Belfegor se pusiera una mascara anti-gas que filtra el hedor a pecado en el aire.

El lugar era una enorme habitación sumergida en la penumbra y sólo iluminada por antorchas que ardían con un fuego verde putrefacto. Aquella colosal estructura era mantenida por 50 pilares de la piedra indestructible que aprisiona los 7 circulos.

En el centro de todo resaltaba un gran elevador de cristal. Siendo adaptado para el tamaño de Belfegor, los 4 pudieron entrar sin sentirse apretados. Belfegor sólo tuvo que tocar la pantalla táctil en el ascensor y comenzaron un lento y seguro descenso.

"Este ascensor me parece familiar... ¿No es como el de la película de Wily Wonka"

Emily hizo una observación y Belfegor no pudo estar más contento.

"¡Me alegra que lo notarás! Antes era un ascensor común y corriente, pero luego de ver la película hize que cambiarán"

El demonio proclamo orgulloso. La emoción en su voz era palpable incluso con su mascara anti-gases.

"Wow, eso es impresionante. Este panel también es increíble"

Señaló al panel en la puerta del ascensor. No era un panel clásico con cableado y botones, sino una proyección digital táctil con un estilo futurista.

"¡Finalmente alguien aprecia lo lo hago! Veras, diseñe este panel inspirándome en..."

Mientras el grupo descendía hasta las mas profundas entrañas del infierno, Emily y Belfegor conversaron alegremente como un par de fanáticos de la ciencia ficción. Hablaron sobre sus películas favoritas, libros e incluso juegos de mesa de figuritas extremadamente caras.

Lute suspiro pesadamente y negó con la cabeza mientras los miraba.

"Frikis"

Adam asintió.

"Frikis"

Así siguieron por unos cientos y cientos de metros hasta que finalmente descendieron por completo. Al salir del ascensor, se encontraron en un salón de mármol blanco iluminado por la luz artificial de los paraluces amarillos.

"Valla viaje jodidamente largo"

Adam gruño mientras salía de elevador. Lute lo siguió, luego Emily y al final Belfegor. Repentinamente las puertas de la habitación se abrieron bruscamente cuando un demonio en uniforme negro entró.

El demonio era un IMP, una especie de nacido del infierno de aspecto mayormente humano, con piel roja como la sangre y cuernos negros en su cabeza.

Lute no tardaro en desenfundar su espada rota y moverse inumanamente rápido, estando a sólo un movimiento de cortarle el cuello al IMP.

"¡Esperen! Es solo el servicio de recepción"

Belfegor grito y Lute soltó al demonio. El IMP callo al suelo de rodillas mientras miraba con terror a la Exorcista.

"S-señor Belfegor. Es un honor tenerlo de vuelta"

"Lamento eso. Mis socios son un poco... Agresivos con todo lo demoníaco. No lo tomes personal"

"¿Demoníaco...?"

El demonio alzó una ceja. Cuando se dio el tiempo para mirar las enormes alas pegadas en la espalda de los tres desconocidos, se le heló la sangre. Belfegor se le adelanto, fingió toser para llamar su atención.

"¿Podrías traernos un transporte? Necesito hablar urgentemente con Hadolfo"

El IMP ni siquiera se molesto en corregir el nombre. Estaba demasiado apurado en salir de la mira de los Ángeles, por lo que salió corriendo.

"La salida es por aquí. Solo... Traten de no matar a nadie"

"No te preocupes"

"No prometo nada"

Emily y Adam respondieron. El primer hombre ignoro la mirada de la Serafín y camino hacia la puerta.

Las instalaciones eran pequeñas, algo normal considerando que estaban destinadas a servir únicamente a una persona. Había solo unos cuantos miembros del personal, todos IMPs que flojeaban en sus puestos antes de enderezarse aterrados mientras Belfegor pasaba.

Todo el lugar era cubierto por pinturas blancas y amarillas junto a diseños propios de películas que Emily reconocido. Llegaron a un estacionamiento vacío donde el IMP los esperaba con una larga limusina negra. Belfegor fue el primero en entrar. El IMP trato de ignorar el miedo y ser respetuoso al abrirle la puerta Lute.

"¡Haste a un lado!"

Adam empujó al demonio y se metió dentro, Lute le siguió sin darle una mirada al demonio. Emily miro con malos ojos a sus compañeros y le extendio la mano al IMP.

"Lamento eso. Normalmente no son así, solo... Han pasado cosas duras"

"N-no se preocupe señorita. No se tiene que molestar en preocuparse por un diablillo miserable"

Dijo apenado, a lo que Emily le regalo una sonrisa confortable.

"Nunca pienses eso de ti. Yo creo que eres una gran persona, una con el potencial de hacer grandes cosas"

Por un momento, el demonio sintió una sensación de satisfacción y consuelo refrescantes. Intento hablar, pero fue callado cuando un disparo de luz pasó rozando su frente.

"Tu, cabron; Aléjate de ella y ponte a conducir"

Adam ordenó desde el interior. El siniestro resplandor dorado en su mirada prometía un dolor inimaginable en contra del demonio.

"¡Adam! Esa no es la manera de tratar a las personas"

"Me importa una mierda. Tengo prisa así que apurate"

La Serafín sintió como su corazón se arrugaba. Adam maldecia mucho, pero nunca lo hacía contra ella; Ni siquiera de forma accidental. Supo que de inmediato que el seguía enojado. Entró en silencio a la limucina comenzó el viaje.

El viaje estuvo lleno de un silencio incómodo. Belfegor estaba demasiado nervioso para hablar, solo dedicándose a dar golpesitos en el reposabrazos en silencio; Emily decidió no agitarse ambiente tan pronto y Lute se mantenia alerta, no soltando su arma rota por nada en el mundo; Adam por su parte revisaba por las ventanas y no puedo contener su ceño fruncido.

Lo único primitivo o rural en toda la Ciudad son unos enormes pilares de piedra colocados estratégicamente en puntos de soporte. Todo lo demás es una masiva jungla de civilización y tecnología más allá de la modernidad en la tierra.

Neues Berlín es más grande que cualquier ciudad humana jamás construida. Es una gigantesca metrópolis con cientos o miles de colosales estructuras y edificios más parecidos a colmenas donde se amontona la población. Enormes puentes de concreto conectan los techos de edificios en una masiva red de calles y autopistas.

Debido al techo subterráneo, no hay un atisbo de luz natural. Toda la ciudad está iluminada únicamente por los anuncios de neón y las mega pantallas publicitarias. Era sin dudas una noche eterna de vicio y lujo, por lo menos en las alturas.

Cientos de fábricas se encuentran produciendo todo tipo de artilugios, expulsando cantidades ingentes de niebla y humos tóxicos.

Belfegor explicó que hace un siglo había descubierto un método químico para evitar que el smog se esparcida por todos lados, volviéndolo pesado y siendo incapaz de elevarse por sobre cierta altura. Esto significaba que entre más cerca estuvieras del suelo, más tóxico y desagradable se volvía el ambiente.

"La mayoría de la población se encuentra en las alturas baja y media de las colmenas. Sólo las élites tienen permitido vivir en las alturas"

Era cruel pero fascinante la forma en que los habitantes del primer círculo se adaptaron, pero no fue la infraestructura en sí lo que llamó la atención de Adam, sino los innumerables símbolos terrestres tan desagradablemenente conocidos.

"Oye imbecil, ¿Cómo dijiste que se llamaba el cabron que te derrocó?"

Adam pregunto casualmente, sin apartar su mirada de la ventana.

"Adolfo, pero creo que era algo más como Adlff o Jadolf"

Por la forma en que Adam apretava sus puños, esa no era la respuesta que buscaba.

"Es Adolf"

"¡Eso! ¿Lo conocés?"

Belfegor se sorprendió.

Adam quizo decir que no, pero entre más avanzaban más evidentes se hacían sus sospechas. Sólo un ciego no notaría los símbolos y textos pegados en los edificios.

Gigantescas esbásticas nazis coloreadas en rojo neón, carteles con con propaganda y la imagen de un soldado en un una titanica pantalla junto a las palabras "Deutschland über alles".

"No, pero espero que este cabron no sea quien creo que es"

El resto del viaje transcurrió con tranquilidad, mucha más de la que Adam esperaba en el infierno. Finalmente llegaron hasta el edificio más alto de toda Neues Berlín: La Kaiserturm.

La Kaiserturm era un edificio tan alto como el Empire State, con el cuádruple de ancho. Más de 30,000 demonios habitan aquella inmensa torre. Entraron por uno de los puentes que conectaba con el interior de la zona alta, y luego de estacionarse Belfegor le dijo al IMP que se quedara, luego entraron.

Entre más avanzaban más evidente se hacía la identidad del nuevo rey de Pereza para los Ángeles. Pinturas que hablaban sobre una guerra de maquinas móviles y bombas cubrían los pasillos.

"¿Estas decoraciones no se les hacen familiar?"

Incluso Emily se sentía incomoda. Solo Belfegor era indiferente a las preocupaciones.

"Señor, creo que ahora sabemos por qué nunca lo encontramos en ningún Exterminio"

"Tu lo haz dicho. Ese imbecil no estuvo escondido, estuvo AQUÍ"

Llegaron a una esquina cerrada de la torre donde lo único resaltante era un círculo dibujado en el suelo. Belfegor sacó una daga y se pincho el dedo. 6 gotas de sangre roja y negra calleron en el círculo, e instantáneamente el circulo mágico comenzó a brillar hasta envolver toda la habitación con una luz cegadora.

Cuando la luz se disipó, todos se encontraron en un lugar diferente. Enormes paredes grises y suelos blancos finamente lustrados cubrían sus vistas.

Lo que también llenaba sus vistas era un grupo de docenas de IMP's y demonios perro apuntandolos con rifles de asalto y llenando sus cuerpos con punteros láser. Antes de que esto escalara, Belfegor intervino.

"¡Alto!"

"¿Lord Belfegor...?"

Uno de los demonios lo reconoció.

"Loyal. Seque no arregle una cita, pero necesito hablar con el Sündenkaiser urgentemente. Ellos vienen conmigo"

El demonio lobo frunció el ceño. Les lanzó una mirada desagradable a los ángeles para luego negar con la cabeza.

"Retirence. Yo me encargo de esto"

El grupo de demonios se disperso para continuar con su labor. Loyal miro a los recién llegados.

"Síganme"

El demonio los guío por los pasillos en silencio. No tenía ningún interés en hablar con ellos, y para Adam y Lute, el sentimiento era mutuo.

Emily miro el lugar fascinada.

"¿Dónde estamos?"

"¿ven eso?"

Belfegor señaló a las multiples ventas, y cuando miraron se llevaron la sorpresa de que estaban en alguna parte completamente encima de la ciudad. No en la cima de un edificio, estaban encima de todo.

"¿P-pero c-como? cuando pasamos no había nada"

"Nada visible. Esta es una isla flotante artificial. Está infundida con múltiples hechizos defensivos y de ocultamiento que la ocultan de la vista pública. También tiene lo máximo en tecnología de camuflaje"

El demonio libero un suave suspiro.

"Este era mi hogar cuando aún reinaba. Suficientemente cerca para atender mi reino, suficientemente lejos para que no me molestaran. luego de que Adolfo—"

"—Adolf" Insistió Adam.

"Eso. Luego de que Adolf tomará el poder renombro este lugar; Le puse muchos nombres antes: Hades, Svartalfheim, Erebo, ETC. Ellos lo llamaron Morgenstern"

Flurg...

Una diminuta llama dorada ardió entre los puños del primer hombre.

"Estrella de la Mañana. ¿Es enserio?"

"¡No fui yo quien le puso ese nombre!"

Belfegor se escudo. Loyal los interrumpió con una falsa tos que le ganó la atención de todos.

"Aquí es"

Señalo a unas puertas dobles hechas de una madera rojo que conducían a la oficina del Rey Pecado. Sin decir una palabra más, el pecador se retiro.

Belfegor abrió las puertas para entrar.

La oficina era de diseño simple, con paredes color trigo y muebles acomodados simétricamente donde Adolf descanza.

Su piel es roja como la sangre y su cabello y bigote son de un negro con tonos púrpura. Unos cortos cuernos negros sobresalen en su cabeza, el derecho está roto. Sus ojos, tan ocupados en revisar unos documentos, son un par de estrellas de David color azul celeste.

El estómago de Emily se resuelve

'¡Es idéntico a...'

No, no es idéntico. Ahora Emily entiende por que Adam y Lute hablaban con tanta desgana del Rey de Pereza.

"Ahí se van mis esperanzas de que no fuera este pendejo" Adam dijo toscamente "De entre todos los hijos de puta, tenía que ser el puto Adolf Hitler"

Hitler no estaba nada un poco contento.

"¿Quien es es este tontivano que trajiste ante mi?"

"Oh, mira. El señor elegante me tira insultos refinados. ¡SI vas a insultar hazlo bien, estúpido!"

¡TZZZ!

Relámpagos amarillos surgieron desde el el cuerpo de Hitler, llenando la habitación de estática. Las luces de los aparatos parpadearon erraticamente.

Hitler lo miro furioso, mostrando sus dientes amarillos tan afilados como navajas. Adam no se inmutó, respondió con una sonrisa agresiva acompañada de una hola de violencia pura.

Belfegor tuvo que ponerse entre ambos para intervenir

"¡Detenganse! Adam, NO estamos aquí para pelear"

El primer hombre se cruzó de brazos, disgustado pero dispuesto a hacer caso. Belfegor miró al Sündenkaiser apenado.

"Lamento eso. Mi Sündenkaiser; A los Ángeles no les agrada todo lo que tenga que ver con demonios y pecadores"

Sus palabras no hicieron que Hitler se relajará, pero logró calmar su enojo. Instantáneamente su mente se lleno de pensamientos y preguntas.

"Ángeles ¿Estos son Ángeles?"

Señaló despectivamente. En vida tuvo un marcado rechazo por las religiones, pero su odio por la escoria judía es legendario. Esos animales dedicaban sus vidas a adorar a un reino celestial y proclamar estupideces sobre moral.

Se sentía asqueado por la forma en que promulgaban una moral que exaltaba la mentalidad de esclavos, oculto bajo un falso velo de humildad.

Fueron los habitantes de la Ciudad Perlada quienes inculcaron estas prácticas en la humanidad, por lo que en su opinión eran la más absoluta escoria. Tiranos disfrazados de salvadores que podrían engañar a las masas, pero no a él.

"¿Que quieren las ratas aladas en mi reino?"

Adam estuvo tentado a sacar a Sefirot y decapitar a Hitler, pero Lute lo tomó del hombro y negó con la cabeza. Ella deseaba lo mismo, pero deseaba más que llegara a Edén y se salvará.

"Mi Sündenkaiser, debido a ciertas circunstancias, estos Ángeles atravesaron los 7 circulos hasta chocar contra Pereza. Ellos desean volver al reino celestial cuando antes, le imploro que los deje salir, y para asegurarme de que no causen problemas, yo mismo guiaremos su camino hasta sacarlos del infierno"

Belfegor abandono todo atisbo de nerviosismo o miedo y adoptó una actitud más diplomática. El Sündenkaiser sin embargo no estaba convencido.

"¿y por qué debería dejarlos ir? Exhibir sus cabezas ante la plebe me ganará su respetoy temor en partes iguales. Dime dämonensau, ¿porque habría de dejar ir a estos cerdos luego de haberme insultado?"

La tensión estalló en la habitación en forma de una ola de intensión asesina. Tanto Emily como Belfegor se sintieron asfixiados cuando la tensión se volvió física, manifestándose como brazos de fuego ardiente y chispas eléctricas.

"Mi Sündenkaiser... El cielo no es una fuerza a la cuál tomar a la ligera. Tus ejercicios son poderosos, pero el reino celestial ha repelido cada ataque que el infierno ha realizado. Todas las armas que yo he fabricado son pálidas copias del arsenal verdadero del cielo"

Hitler frunció el ceño. Todo el armamento que tiene almacenado fue construido por el propio Belfegor, por lo que debía de tener un punto. También estaba el hecho de que apenas hace una década habían terminado de conquistar la totalidad del las ciudades Drow de Pereza.

"Además, quienes tiene en su presencia no son simples soldados rasos. Tiene ante usted una Serafín y el soberano de la Primera Esfera; El Arcangel de la Humanidad. Seguramente ambos podrán llegar a un acuerdo que los veneficiara a ambos.

Hitler no presto atención a el como Adam miraba de forma amenazante a Belfegor, en cambio se sumio en sus pensamientos. Ya no estaba envenenado con la ingenuidad e inexperiencia de su vida mortal. Sabía perfectamente que sus fuerzas no estaban listas para una guerra a escala divina, no aún. Un pacto con el cielo seguramente podría aliviar sus preocupaciones.

"Esta bien, les concedere el permiso de marcharse, pero a cambio deseo hacer un pacto con este supuesto Arcangel"

"¡Ashhh! Utedes, putos demonios, son un dolor en el culo"

Gruño exhesperado. Paso al frente y miro al pecador a los ojos.

"Di lo que quieres, pero te advirtió que no te daré mi puta alma ni la de nadie en el cielo, cabron"

"Por más tentadora que sea la idea, mi objetivo no es ese. Este mundo no es más que una tierra árida y estéril. Los recursos no bastan para abastecer a mi Nueva Alemania. No gozamos de tanto territorio avitable como los otros circulos"

"Espera un minuto don bigotes. ¿me estas diciendo que quieres que te ayudemos a invadir los otros circulos?"

"No, mis fuerzas son completamente capaces de arrasar con toda la escoria en el infierno. Lo que quiero es que ustedes, raras aladas, no se metan. Esas serán nuestras guerras, y no quiero que pongan sus asquerosas manos en ello"

Adam no le gustaba ser menospreciado, mucho menos por parte de un sucio pecador, por lo que libero un aura ardiente de puro poder. El Sündenkaiser respondió con relámpagos estallando a su alrededor.

Adam se detuvo. Su instinto estalló en señales de peligro que venían del pecador. Abrió grandes los ojos con sorpresa.

Un barro negro, espeso y maloliente comenzó a filtrarse como baba de las fauses del Pecado. El barro exhudaba un aire de maldad tan crudo y putrefacto que las chicas a su espalda retrocedieron.

"MIERD-DAHH"

Belfegor callo al suelo arrodillado mientras vomitaba dentro de su mascara. Esta tenía una serie de runas y hechizos que se deshicieron del vómito, pero el terrible asco no se quito de su sistema.

Hitler se percató de ello y se limpio el barro con una toalla

"Dämonensau, controlate. Tu espectáculo es patético"

"El está mal, ¿sabes? Deja de molestarlo"

Emily salió en defensa del demonio que no paraba de vomitar.

"Su alteza, no trate de buscar empatia en este monstruo genocida"

Lute aconsejo bajo un molesto gruñido del Sündenkaiser. La Serafín sin embargo no se sintió comoda ¿Como podía criticar a un genocidio cuando ella misma masacraba cada año a las almas en el infierno? Estaba claro que no podían confiar en Lucifer, pero...

"¡Bien! Si nos dejas salir, nunca comandare ninguna Legión contra tu puto reino"

Por primera vez desde que llegaron, Hitler sonrió.

"Es bueno oírlo. Con vuestra neutralidad, los infiernos se arrodillaran ante la voluntad del 4 Reich. Apenas puedo imaginar la dicha de mis hombres cuando eventualmente regresemos a nuestro antiguo hogar..."

"Detente ahí cabron"

Adam interrumpió bruscamente.

"¿De qué mierda hablas?"

"¿Que no es obvio? No nos conformaremos con este poso miserable lleno de escoria. Cuando la Nueva Alemania este lista, volveremos a la tierra" Hitler declaró "Reclamaremos el mundo que por derecho nos pertenece"

"¡Ni una mierda!"

Grito Adam mientras golpeaba el escritorio. Emily trato de razonar con el Pecado

"Señor Adolf, me temo que la tierra es un lugar para que habiten los vivos, no los muertos"

"Ehh, oigan, tal vez deberíamos calmarnos—" Belfegor intento intervenir, pero fue interrumpido

"No tienen elección. El glorioso destino del imperio Alemán no puede ser negado"

Relámpagos amarillos recurrieron la habitación, rodeando hasta tomar la forma de una jaula de rayos. El Sündenkaiser los miró fijamente, con sus estrellas celestes coloreadas de amarillo pálido.

"Dejenme ser más claro. Aceptan, o sus cabezas colgarán en mi pared"

Adam respondió con una risa hueca. Sefirot apareció en sus manos, bañada por una delgada capa de Ether.

"JODETE"

¡BUM!

Una todos retrocedieron ante la repentinamena explosión electrostática. Al recomponerse se toparon con que Hitler había desaparecido, y en su lugar estaba una docena de demonios, todo cabezas más altos que un humano normal.

Cada demonio usaba una robusta armadura negra como el ébano, con simbolos tallados con oro y una esbástica en donde esta el corazón. Sus rostros cubiertos por unos cascos con cuernos de oro, muy similares a las máscaras de las Exorcistas.

Los demonios sostienen en sus manos pesados rifles que resolvieron el estómago a Belfegor.

"Oh, no..."

"El cabron mando a sus perros... ¡Acérquese idiotas!"

Adam se notaba confiado. Lute sacó su espada rota y sonrió peligrosamente. El escuadrón les apuntó y—

"¡AGACHENSE!"

Belfegor tomo a Emily del cuello y se arrojó contra una pared sosteniendola, estampandola en el suelo. Adam miro esto confundido, hasta que los demonios dispararon.

¡FIUU!

Una docena de destellos de luz pura salieron disparados en su contra. Sus instintos se activaron y se movío para esquivar el ataque, pero Lute reaccionó muy tarde y dejó que un disparo le diera en el brazo.

"¡Mierda!"

Lute sintió como si una bomba incendiarias hubiera estallado en frente suyo. Aquella desagradable sensación le recordó hace unos pocos siglos, cuando recibió un ataque mágico de una Calamidad.

"¡Lute!"

Adam levantó una barrera que cubrió a los cuatro de los disparos, y descubrio con horror que se formaban grietas en su barrera.

"¿QUE CHINGASDOS ES ESO?"

"¡Son SHIVA's !" Grito Belfegor

"¿Que?"

"¡SHIVA!. Son las armas de fuego más poderosas que jamás he creado. Funcionan gracias a un proceso de fusión nuclear en miniatura capaz de generar disparos de plasma hiper-calentados que impactan con la potencia de un sol en miniatura"

"¡¿QUE MIERDA?!"

Lute grito, más enojada que nunca en su vida. Ahora entendía por qué sentía que su brazo se le iba a caer.

El plasma es el material mismo de las estrellas, y las estrellas son orbes de poder puro. ¡De no ser por su [Divina Providencia] anormalmente grande y la pluma de Adam en su alma, ella habría muerto!.

¡Crack!

"¡No!"

La barrera de Adam se rompió. Emily se apresuro en levantar una barrera que los cubrió de los destellos de destrucción. Aquella seguridad tambaleo al ver que cada disparo estaba comenzando a fragmentar su defensa magica.

Adam soltó un gruñido. Se sintió aterrado al darse cuenta de que la potencia de ataque no es muy diferente al de un disparo de Ether. Verdaderamente van a morir.

A su lado Lute era ahogada por la desesperación, no tanto por la perspectiva de su propia muerte, sino por la de Adam. Miro desesperadamente a su alrededor como si buscara una solución.

Estaban rodeados entre una esquina, con un escudo apunto de romperse y una muerte segura al frente.

¿Como devia proceder? ¿Podía contratacar?¿había una forma de hacerlo sin dejar a Adam vulnerable? ¿Debía siquiera hacerlo?.

Uno de los disparos choco contra la barrera y la energía explosiva residual desquebrajo la pared. Ahora Lute tiene una idea.

"¡Lo tengo! Señor, ¿Recuerda la fiesta en Venezuela"

"Ugh... Acordamos no hablar de eso"

"El Centauro sostiene a los Momoyes"

Adam se quedo quieto. Su rostro reflejaba sorpresa y emoción. Una sonrisa afilada se formó en sus labios.

"Perra loca, te amo. ¡Nubecita, a mi señal retira el escudo y acuéstate!"

"¡¿Que?!" "¡¿QUE MIERDA?!"

Tanto Emily y en especial Belfegor se sintieron conmocionados.

"Tu hazme caso"

"¡NOOO! ¡SI lo haces nos van a matar!"

"¡Callate imbecil! Mi chica y yo sabemos lo que hacemos"

Emily miro al frente con miedo. ¿En serio no les preocupaba que una ráfaga de disparos los fuera a matar?. La lógica decía que los ignorara, pero su corazón decidió confiar.

"Esta bien"

"¿Estas loca? ¡VAMOS A MO—"

"¡AHORA!"

Belfegor se mordió la lengua cuando la barrera se desvanecio y se tumbó al suelo. Adam creo un poderoso destello de luz que cegó un segundo a los demonios. Lute tomo su arma y la arrojó con todas sus fuerzas contra el demonio de en medio y se avalanzo contra el.

La espada se clavo en la única parte vulnerable de la armadura, el cuello. Mientras caía, los otros apuntaron en su dirección y dispararon donde estaría Lute.

¡FLUSH!

Adam soltó un disparo de luz celestial contra un demonio de las orillas, reventando su cabeza. Se dieron cuenta muy tarde que Lute no había llegado al demonio del centro, sino que dio un aleteo que la empujó contra el demonio de la orilla. Le arrancó el arma de las manos al cadáver y disparo, no contra los demonios sino contra sus aliados.

¡BUM!

La pared detrás de Adam, Emily y Belfegor explotó en miles de partículas. Adam tomo la Serafín y el demonio del cuello y se arrojó junto a ellos por el hoyo. Lute corrió y esquivo los disparos por milímetros mientras se arrojaba al vacío.

Y así, mientras los cuatro cain cientos de metros por los aires, un grito resonó en la distancia.

"¡ME LLEVA LA CHIMGADAAAAAAAAAA!"

|||ADLE|||

El infierno ganó.

Ese fue su primer pensamiento cuando las Legiones regresaron antes de tiempo. Sus temores se confirmaron al ver el estado de las huestes celestiales.

El Zodiaco del Juicio había sido diezmado. De los casi 40,000 efectivos, solo 7,000 habían sobrevivido. 8 Legiones habían sido completamente exterminadas, y sólo quedaban restos de las otras. Las siempre persistentes Exorcistas componían el 70% de estos sobrevivientes.

Lo que tanto temían fue confirmado. Lucifer había preparado un ejército de pecadores, Overlod's y miembros del Ars Goetia, todos armados con armas de Orichalcum. Esta noticia por si sola era suficiente para estremecer los cielos, pero el gran desastre, aquello que ha sumergido las sietes esferas en pánico no es sino la muerte del Héroe de o Cielo.

"Adam esta muerto..."

Fue lo que le dijo Jeanne. La chica era la sobreviviente de la 777° Legión con el mayor rango. Se presentó ante el Alto Consejo de Arcángeles con una expresión derrotada. Les contó como se había desarrollado la cruenta batalla, el como había logrado acorralar a la princesa del Infierno y había estado cerca de matarla hasta la intervención de Emily.

Sera se puso pálida. Sabía que Emily no estaba de acuerdo con los exterminios, pero jamás penso que se adentraria a las fauses del lobo en protesta. Jeanne le aseguró que ninguno de los vigías la había visto pasar, por lo que seguramente uso algún tipo de hechizo.

Luego de la intervención de Emily, Lucifer apareció. Adam lo enfrentó, y ambos arrasaron con la Ciudad Pentagrama en su sangriento duelo. Adam fue apuñalado por una técnica rastrera, y de alguna forma que desconocían, Lucifer se había transformado un monstruo que asesino a Adam, Lute y Emily. Una vez hecho esto, Lucifer les había ordenado que se marcharan.

Con su líder derrotado y sus fuerzas diesmadas, Jeanne no tuvo más opcion que ordenar la retirada.

Una vez que Jeanne terminó de relatar, la despidieron y dieron inicio a una reunión de emergencia. Los 6 hablaron largo y tendido, discutiendo que harían de ahora en adelante, pero sin llegar a algo claro. Se retiraron insatisfechos para continuar con sus deberes, lo que la lleva a su situación actual.

Sera se había recluido en la privacidad de su habitación. Ordenó que no se le contactará a menos que surja una emergencia, y cuando finalmente estuvo sola, pudo desplomarse en su asiento.

"Ellos están muertos"

Murmuró, sin tener muy claro con quién hablaba. Solo sabía que tenía que expresar en voz alta su situación antes de que se volviera loca. Los rostros sonrientes del Primer Hombre y la Última Serafín revolotearon dolorosamente por sus pensamientos.

"Adam..."

Su sol, su estrella radiante se había apagado, asesinado a manos del hombre que rompió la creación. Recordó entre amargos y felices recuerdos el momento en que lo creó, como en aquellas cuencas oculares nació una luz de oro que miraba fascinado todo a su alrededor.

Recordó aquella expresión de alegría y emoción cuando formó su primera criatura, aquellas risas cuando Luzbel hacia una travesura. Recordó haberlo abrazado y cubrirlo con sus alas cuando lloro por Lilith, así como recordó verlo tropezar con sus palabras cuando conoció a Eva.

Un poderoso peso aplastó su corazón, sentía que todas sus emociones se atoraban en la garganta y no le permiten respirar.

"Emily..."

Su pequeña estrella... Soltó un pesado suspiro.

La más joven de todos los Serafínes, su mini yo, su pedacito de cielo ya no estaba. Tal vez sea por la nostalgia, o solo sea por qué un ser milenario como ella siente el paso del tiempo diferente, pero aún recordaba el nacimiento de Emily como si hubiera sido ayer.

Las corrientes de Ether se agitaban descontroladamente ese día. Estaba familiarizada con el comportamiento del Empireo, y por lo tanto sabía que un nuevo Serafín iba a nacer.

Ella esperaba muchas cosas, y muchas más preguntas surgían en su mente. Se preguntó cuál sería la función de este nuevo Serafín, ¿cual sería su labor en la gran maquinaria cósmica?. Todas sus expectativas se rompieron cuando ella nació.

Como todo ser recien nacido del Empireo, era una masa sin forma radiante de luz celestial, sin embargo había algo que le resultaba atrapante. Un calor familiar y reconfortante que la bañaba con una sensación de dicha y alegría. No era la única, todos los presentes se derritieron dichosos ante el toque de su luz.

"Me pregunto, ¿que forma tomará?"

Miguel se preguntó en voz alta, e internamente Sera se preguntó lo mismo. El recién nacido ignoro las miradas expectantes del coro de Serafínes y floto en dirección a Sera. Su mente se lleno de preguntas, dudas y sorpresa cuando el Serafín empezó a tomar forma. La masa de Ether se volvió carne y hueso.

Se hizo notable como el Serafín adquiría una forma humanoide, y el como su cuerpo era cubierto por una piel morena, pero al mismo tiempo pálida, como si intentará y fallará en replicar ciertos pigmentos. 3 pares de alas nacieron de su espalda, y una caballera de plata callo hasta sus caderas. El Ether vailaba a su alrededor y formaba una capa de tela blanca con manchas celestes.

Recordó haberse sentido confundida y emocionada por partes iguales cuando se formaron los ojos. Un par de orbes celeste brillaban con la puresa de 2 estrellas.

"Serafina... Ella se parece a ti"

Lo era; de eso estaba segura. No era raro que la primera forma que tomará un Serafín al nacer fuera un reflejo de otro ser, el resultado de una imitación. La recién nacida había intentado imitar su forma.

"Buaahh"

Suaves balbuceos escaparon del infante. La nueva Serafín no era un adulto desarrollado: Era una bebé.

Sera sonrió. Aun se mantenia fresco el recuerdo de como tomó a la pequeña entre sus brazos y la acuñó contra su esternón.

Sera siempre fue enorme, y en ese momento Emily no era más grande que un bebé humano. Recordaba cómo la sujeto entre sus brazos como un gigante a una hormiga, como ignoro las palabras de sus hermanos y se concentró solo en ella.

Ella leyó y escucho. Las notas del destino y la melodía en el alma del Serafín se mostraron desnudos ante ella. El nombre verdadero del infante se mostró ante Serafina.

"Emily tu nombre será. Traeras alegría a todas las almas nobles y justas que entren a nuestro reino. Estas destinada a cosas grandes; Que las bendicionesde la creación sean contigo"

Emily no entendió, pero supo captar la dicha en el corazón de la mujer, y eso mismo la lleno de felicidad.

"Buaajaaja~"

Ella solo una pequeña risa.

"Les falle..."

Será dereamo sus emociones a la nada. Su corazón destrozado sangraba y sus globos oculares eran como presas sobrecargadas, y la menor fuga significaria dejar escapar sus lágrimas. Aun así, no se permito llorar. Ella era dolorosamente consiente de su valor moral.

Con la muerte de Adam, el cielo necesitaba un nuevo faro de esperanza, y sólo ella podría cumplir ese papel.

No se olvidó de como cuando Jeanne dio la noticia, todos sus hermanos Arcángeles voltearon a verla en busca de consejo. No podía darse el lujo de mostrar su dolor y arriesgarse a que los Santos, el consejo de Serafínes y todo aquel que depositará su fe en el cielo contemplará su debilidad. Debía mostrar únicamente fuerza y resiliencia.

Era su deber, el deber de la primera de todos los Serafínes.

"¡Mi reina!"

Un diminuto Querubín cabrio entró corriendo por las puertas. Su expresión era de completa desesperación.

"Cletus. Crei haberte dicho que no me molestaran"

"L-lo siento mi reina, pero esto es urgente. ¡Acaba de aparecer pecador en Asgard!"

Un escalofrío recorrió su columna.

"Entonces los demonios ya atravesaron las puertas"

Dijo con amargura.

"N-no. Las legiones siguen manteniendo bloqueada la salida. El pecador simplemente... Apareció. Mato a 2 santos antes de que un Serafín lo sometiera"

Eso no tenía sentido. Incluso suponiendo qué el pecador haya pasado desapercibido ante los guardianes, la Legión pretoriana lo habría interceptado antes de cruzar las puertas de San Pedro. Ni hablar de como llegó a la tercera Esfera Celestial.

"Explicate"

"No lo se, pero creo que los Serafínes saben—"

No termino de hablar cuando Sera ya se había teletransportado al palacio capital en Asgard. Un grupo de Serafínes de aspectos inhumanos la miraron con sorpresa.

"Mi reina—"

"Un pecador acaba de aparecer en este círculo. ¿Que es lo que saben?"

Un Serafín con forma de ojo gigante con 3 enormes pares de alas se puso al frente.

"Al principio pensamos que se trataba de un pecador que de alguna forma logró entrar, pero los testigos contaron algomás preocupante"

La realidad se deformo a su alrededor, y ahora todos estaban en una habitación cerrada con un enorme cristal a la derecha. Detrás del cristal se encontraba un ser con forma humana, de piel gris antinatural, con largos cuernos negros y garras.

El pecador chillaba y se retorcía en el suelo. Una vista más cercana mostraba como su carne se retorcía, arrugaba y endurecida hasta volverse escamas negras.

Los ojos de la Reina Serafín se abrieron con horror.

"Dime que no es lo que creo que es"

"Lo es, mi reina. No sé trata de un pecador del infiern, es un Santo corrompido que sucumbió al Pecado"

Será casi tambalea.

"... ¿Cómo es esto posible?"

"Hasta ahora no hay nada confirmado, pero creo que podría estar relacionado con el acorde roto"

'Acorde roto' era un término que los Serafínes usan para referirse a una anomalía en la [Canción de las Almas], una especie de faro psíquico que atrae las almas virtuosos al cielo y les permite escapar de la condenación infernal.

"Algo esta muy mal con la [Canción de las Almas]. Es como si se trata el de una presa de agua, pero con el [PECADO]. Ese muro ahora tiene grietas, y la maldad se filtra de ellas"

El Serafín hizo una pausa.

"No había sucedido algo similar desde... "

"— Desde la caída de Edén" Interrumpió Sera "¿Se han registrado más casos?"

"No. Hasta ahora es el único—"

"¡Están sonando las alarmas!" Otra Serafín grito, señalando a una pantalla "Son alrededorde 6 Pecadores. ¡Todos en Samsara!"

¡RIIING!

Un Serafín respondió el teléfono y se puso pálido.

"¡Una docena de pecadores esta causando disturbios en Olimpo! Se ha confirmado que 3 Santos y un Querubín han muerto"

Alarmas y llamadas estallaron en toda la habitación. Los Serafínes se movían de un lado a otro, pero sus números no daban abasto.

En todas las esferas se dieron avistamientos de Santos corrompidos matando, violando o robando sin Control. Sera tuvo que mirar como todo pasaba ante sus ojos, tan rápido que le era imposible reaccionar.

Mientras pensaba en las posibles razones del origen de esto, un pensamiento surgió, una idea que podría explicarlo todo.

La [Canción de las Almas] está ligada a Adam, aquel que creó el propio faro de almas. Su muerte sin dudas traería consecuencias a la estabilidad de la canción. Era como romper una bombilla en una linterna.

"Reúnan a todas las Exorcistas y revísenlas de pies a cabeza"

El Serafín asintió y se teletransporto fuera del lugar.

En este momento hay más de 4000 guerras Celestiales del más alto rango que estaban constantemente expuestas a la corrupción del infierno. La posibilidad de que todas ellas se corrompieran era aterradora.

Será suspiro cansadamente y se masajeo las cienes. La muerte de Adam los estaba afectando más de lo que esperaban.

Por qué era eso, su muerte era la unica explicación a los acordes rotos en la canción de las almas. Por que si estuviera vivo...

No, se negó a siquiera considerar ese pensamiento. Jeanne misma se lo había confirmado, no era posible, no tenía sentido.

No había forma de que Adam fuera corrompido.

"... Una tragediatras otra..."

|Notas del Autor|

Hasta aquí el capítulo 4.

Como pueden ver, hay varias revelaciones, entre ellas el nuevo rey de Pereza.

Desde el principio de la historia supe que quería cambiar los Pecados del HH-verse. Haberlos dejado habría hecho todo predecible, y por lo tanto aburrido.

Usar personajes históricos y míticos como PECADOS tiene sus ventajas, como que no sólo estoy atado a la estética del pecado en sí. Créanme, tengo grandes planes para los otros circulos.

Si, Adolf Hitler como uno de los grandes villanos es tanto una forma de crear problemas como una declaración de intenciones: No tengo miedo de introducir cosas fuertes, así que estence preparados para las montañas rusas de sorpresas.

Un tema aparte es Emily. Se que todos quieren verla madurar y aprender a ver como son realmente los pecadores, pero tranquilos. Tengo planeado un arco entero de personaje dedicado a esta cuestión, pero van a tener que dejarme cocinar a fuego lento.

Aún hay mucho que Emily tiene que pasar, traumas que experimentar e historias que escuchar.

Por otro lado, la situación en el cielo es mala, pero no se preocupen, se pondrá peor.

Sera la está pasando mal, pero afronta la sitación con voluntad. Tremenda la MILF.

En el siguiente capítulo echaremos un vistazo al infierno y las consecuencias de su victoria, y la liberación de Roo.

Alerta de Spoiler: Charlie se irá acercando más y más en volverse el anti-cristo.

Sin más que decir.

¡BAY, BAY!