Semi- Au con posible OCC. Ninguno de los personajes me pertenece ni el manga y todo eso ...

Una pequeña idea que tenía que sacar


La Finca de las mariposas acababa de recibir a tres de sus clientes habituales (los más destacables). Tres jóvenes cazadores de demonios, bastante excéntricos y joviales, su presencia hacia el ambiente distinto, lo volvia agitado y alegre con sus constantes peleas y las ocurrencias de los amigos: Tanjiro, Inosuke y Zenitzu.

Habian regresado de una misión sencilla, realmente no tenian heridas de gravedad un rasguño por aquí, un golpe por allá y muy poca sangre fuera fel cuerpo. Nada comparado a su primer ingreso en la finca. Solo necesitaban un lugar para descansar y poder retomar fuerxas antes de partir a la siguiente misión. Y para Aoi, la mayor de las enfermeras de la mansión, le era agradable recibirlos, pues su forma de ser de los chicos animaba el lugar y era un cambio significativo (aun sabiendo el trabajo extra que eso implica). Se habia encargado de preparales una habitación lejos de otros pacientes, para evitar que molestarán a alguien con su habitual escándalo.

Al comenzar a caer sol Aoi, les llevaba un té especial para los cazadores, les ayudarua a tomar fuerzas para la ardua tarea que desempeñaban. La joven de ojos azules llevaba sus habituales coletas adornadas por sus pasadores de mariposa, su delantal impecable, en sus manos una bandeja con vasos, una tetera y algunos bocadillos que seguro no serían suficientes para los chicos.

— ¡Es que es increíble! ¡Ese sujeto tiene no una, si no tres esposas! — La voz del joven rubio se escucaba desdé el pasillo... Para ser alguien con los oídos tan desarrollados parecía nunca escucharse — ¡ Y las tres son unas verdaderas bellezas! ¡Sería tan feliz si tuviera tres esposas como Tengen!

Aoi se quedó helada, la mension del Pilar del sonido le trajo el recuerdo desagradable de su encuentro y un escalofrío.Sacudió la cabeza para alejar esos pensamientos de su mente y recorrió el resto del pasillo con un paso mucho más lento que de costumbre.

— ¿Para qué quiere alguien tantas esposas? — Esa era la voz del chico jabalí.

— No lo entenderías, aún eres un mocoso, ¿Verdad Tanjiro?

— Chicos, no peleen... La verdad es que creó que tener una sóla esposa es mucho mejor.

— Tienes razón... No habrá nada mejor que tener buena esposa

—¿ Qué es eso de escocia?

— Una esposa es la compañera de vida. Es un poco complejo de explicar... Pero es alguien con quien se tiene lealtad, amor, apoyo y protección — El joven Kamado trato de simplificar para su amigo el concepto de esposa.

— ¡Una esposa es una mujer linda que te atiende, te da mimos, te cocina y te cuidaaaa! Debe ser femenina, dulce, gentil, mientras mas cualidades asi tenga mejor es y sobretodo su cue...

— Eso es diferente para cada persona Zenitzu, no todos los esposos son iguales

— ¡¡AH CLARO!! ¡¡ Ahora entiendo!!

Al llegar a la puerta del cuarto, Aoi se quedó quieta. estaba por seguir con su tarea cuando los comentarios de uno de los chicos llamó su atención.

— Chicos... Si pudieran elegir a alguna de las chicas que hemos conocido para ser su esposa ¿A quien elegirían? ¡No se vale repetir!

Sabía que estaba mal, era prácticamente escuchar a hurtadillas pero tenía curiosidad de escuchar esas respuestas. Casi podía imaginarlas... El chico rubio diría el nombre de una mujer fuera de su alcance. El joven Kamado parecía ser menos superficial así que sería alguien con quién hubiera una conexión especial por lo que no participará en el juego. El problema era el que udaba la cabeza de cerdo, injusta adivinanza, apenas le habían explicado el concepto de esposa.

— La señorita Kanao me parece linda - Para sorpresa de Aoi, el pelirojo fue el que inició el juego... Bueno, en realidad no era cómo esperaba. — ¡No digo que ah! ¡No quisiera que ...! — Su nerviosismo fue evidente, Aoi lo podía imaginar moviendo las manos y agitando la cabeza. La ojiazul río para sí, quizá no estaba tan equivocada después de todo, pensó con un leve dolor en el pecho..

— ¡Ahh no es justo! Yo iba a decir eso... ¡Bueno sí tú tienes una chica mariposa yo también! Que difícil, todas son verdaderas bellezas... Pero Shinobu-Sama es tanto aterradora como hermosa— El rubio debía agradecer que Aoi estaba escuchando a hurtadillas (y no quería ser descubierta) o de lo contrario ya le habría roto la bandeja en la cabeza — Entonces voy a elegir a Aoi-chan, sus ojos son hermosos manantiales azules.

Aoi no sabía que sentir en ese momento. Estaba digiriendo una mezcla entre el halago y el asco. Realmente Zenitzu tenia problemas para agradar a las mujeres. Pero la risa escandalosa del Inosuke fue demasiado como para pensar en que sentir.

—¡¿ Se puede saber de que te ríes?!- Algo cayó al suelo, quizá el pelinegro en su ataque de risa.

— ¿Enserio crees que Maio sería una buena esposa para ti? Es que se nota que eres idiota si crees eso— Aoi no lo admitiría nunca, pero esas palabras habian dolido. Abrió la puerta y entró al cuarto de golpe, les haría saber que no le importan las palabras de un

cabeza hueca — No es linda, dulce, ni gentil ¡Jajajaja!

Inosuke estaba de pie, en el pasillo de las camas. De espaldas a ella, de frente a sus compañeros que se habian puesto pálidos al verla entrar. Mientras Inosuke ponía sus manos en sus caderas y seguía hablando de cómo la chica no era nada de lo que Zenitzu habia descrito como una buena esposa, Aoi puso la sonrisa más dulce que pudo fingir.

— Con permiso Inosuke-san — Dijo al estar detrás del chico con cabeza de jabali, usando el tono mas dulce que pudo y aunque habia usado un tono casi chillón y cursi... no podía ocultar su instinto asesino. El jovén volteo la cabeza y si tuvo alguna reacción Aoi no lo vió.

— ¿Y a ti que te pasó? ¿Te golpearon en la cabeza? — Preguntó cómo si no hubiera estado hablando mal de ella hace solo unos instantes y ella fuera un ser extraño. Los otros dos estaban tan quietos que parecían de piedra.

— Les traje su estúpido té — Empujó la bandeja al frente, golpeando al chico pelinegro. Que importaba si se dereamaba, la soltó sin saber sí él la tomaría, que importaba sí se rompía y salió rápido. Qué importaba sí no le parecía que sería una buena esposa a ese idiota... Que importaba no es cómo si a ella le gustará él.