Disclaimer: Nada de esto me pertenece, la saga crepúsculo es propiedad de Stephenie Meyer y la trama es del webtoon y la novela "La emperatriz divorciada" de Alphatart y con arte de Sumpul, yo solo busco entretener y que más personas conozcan esta historia.


Capítulo 275. El Escándalo Del Fantasma (2)

Después de encargar al asesino convertir a Jane en una esclava, Irina regresó inmediatamente a la villa de Moire.

Los primeros días fueron dolorosos ya que la imagen de la cabeza del hombre muerto venía constantemente a su mente, pero con el paso del tiempo, la conmoción se desvaneció, y la idea de que Jane se convirtiera en una esclava la hizo sentir muy feliz.

Gracias a esto, pudo pasar el resto del tiempo disfrutando alegremente de la vista del campo, y cuando todo esto se volvió aburrido, finalmente regresó al palacio imperial.

El Vizconde Vulturi la visitó al día siguiente de su llegada al palacio.

Oh, cierto. También le pedí al Vizconde Vulturi que consiguiera un mercenario.

Irina recordó este hecho que había olvidado.

Mientras el Vizconde Vulturi esperaba en el salón, Irina reflexionó durante un tiempo.

Había conseguido un asesino para secuestrar a Jane. ¿Realmente necesitaba a un mercenario del Vizconde?'

Pensó que era una pérdida de dinero.

Sin embargo, pronto cambió de opinión, 'lo necesito'.

Necesitaba muchas personas para usar como sus brazos y sus piernas.

Mientras se tratará de una solicitud en la estuviera bien tener como cómplice al Vizconde Vulturi, valdría la pena utilizar a este mercenario.

Una vez decidida, Irina finalmente salió del dormitorio.

Al entrar en el salón, el Vizconde Vulturi estaba sentado en el lugar donde solía sentarse, y a su lado había un hombre con una capa con capucha que ocultaba su rostro.

—¿Por qué tardaste tanto en salir?

El Vizconde Vulturi se molestó y señaló al hombre que estaba a su lado,

—Este es el mercenario que conseguí. Es muy hábil. Puede hacer lo que quieras, siempre y cuando reciba el pago correspondiente.

Irina preguntó, mirándolo de arriba abajo,

—¿No puedes quitarte la capucha?

Lo mismo ocurrió con el asesino. ¿Por qué se cubren el rostro?

Sin embargo, el mercenario se negó.

Debido al trabajo que hacían, nunca revelaban sus rostros públicamente. Muchas personas les guardaban rencor.

—Entonces, ¿cómo puedo reconocerte?

Irina preguntó, frunciendo el ceño.

En cuanto al asesino que contrató personalmente, conocía su apodo y la ubicación del gremio de asesinos, así que estaba bien. Además, era bastante delgado y alto, una figura que podía reconocerse a simple vista incluso desde la distancia.

Sin embargo, la persona que tenía delante no tenía una figura inusual, por lo que parecía imposible de reconocer con una capa.

El mercenario le mostró sus dedos índice, medio y anular en los que llevaba el mismo anillo. Parecía querer que lo reconociera a través de los mismos.

—Está bien, pero no puedo contratarte de inmediato. Me gustaría ver primero lo hábil que eres.

El mercenario asintió como si estuviera diciendo que tenía que hacer.

Irina contuvo el impulso de gritar, '¡Mata a la persona a tu lado!'

En cambio, lo pensó bien y dijo.

—Esta noche, ve a donde el Duque Riddle y tráeme el brazalete que lleva puesto. Sin embargo, por ningún motivo debes hacerle daño.

Después de que el Vizconde Vulturi se retirara con el mercenario.

Irina se apresuró a visitar al Duque Riddle.

Quería contárselo de antemano y pedirle su comprensión.

Irina creía que el Duque Riddle era indulgente con ella y que esto no era realmente peligroso, así que imaginó que el Duque se reiría y le diría que estaba bien.

Pero cuando el Duque Riddle escuchó esto, respondió con frialdad.

—Irina, realmente te aprovechas de mí.

Su voz estaba llena de desagrado.

—¿Duque Riddle?

Irina lo llamó, desconcertada.

—Nunca, absolutamente nunca. Irina dejó esto en manos del Duque Riddle porque es en quien más confía. De verdad."

—¿Dejas en manos de la persona en la que más confías algo que pone en riesgo su vida?

Sin embargo, el Duque Riddle todavía parecía frío. Con una peculiar sonrisa amarga, cruzó los brazos y miró a la pared.

Irina se entristeció ya que ni siquiera quería mirarla a los ojos.

La solicitud de prueba era justo para esta noche. No quedaba mucho tiempo, pero no era como si pudiera cancelarla ahora.

Al final, dio un paso atrás y regresó decaída al Palacio del Oeste. Pensó en hablar de nuevo con el Duque Riddle una vez que se le pasara el enfado.


Tom se quedó junto a la ventana y observó fijamente su espalda.

Al poco tiempo, no había ningún signo de enfado en su expresión, sino una amplia sonrisa.

Cuando Tom perdió completamente de vista a Irina, llamó a su escudero y le ordenó,

—Encárgate de los preparativos.


Irina no pudo dormir en absoluto durante toda la noche porque estaba impaciente. No podía dejar de pensar en si el mercenario traería correctamente el brazalete o si el Duque Riddle seguiría enfadado.

Está bien. Después de ir mañana a disculparme, su enojo desaparecerá por completo.

Irina sabía que lo mejor era esperar a que se calmara un poco, así que se obligó a tranquilizarse.

Pero a las 4 de la mañana, cuando el mercenario apareció con el brazalete del Duque Riddle, Irina se enfureció.

Había sangre en el brazalete.

Mientras extendía el brazalete los tres anillos en sus dedos brillaban en rojo bajo la luz de las velas.

—¡Qué significa esto!

Cuando Irina gritó enfadada, el mercenario se excusó casualmente.

—El Duque Riddle era demasiado fuerte y tenía guardias, así que no tuve posibilidad de tomar el brazalete sin derramamiento de sangre.

Irina estaba hirviendo de ira, pero al menos reconoció su habilidad. El Duque Riddle parecía fuerte incluso a primera a primera vista. Siendo capaz de vencer no sólo al Duque, sino también superar a los guardias, sin duda debía ser fuerte.

Sin embargo, dejando eso a un lado, comenzó a preocuparse más por el Duque Riddle.

Después del desayuno, Irina inmediatamente fue al Palacio del Sur.

Como era de esperar, el Duque Riddle estaba más enfadado que ayer.

Tenía una expresión fría y ni siquiera sonrió al ver a Irina.

No, lo más grave fue que dijo que se iría.

—¿Te irás?

—Como dije. Ya no tengo ningún motivo para quedarme aquí, así que me iré.

—¿A dónde te irás?

—A casa.

—¡No te vayas!

Irina se aferró apresuradamente al Duque.

—Si el Duque se va, Irina se quedará sola en este lugar cruel y despiadado. Su Majestad ya no trata a Irina como antes, y los demás sólo se fijan en la corona de Irina. Sólo el Duque trata a Irina como Irina, si te vas...

—Lo siento. Pero estoy realmente decepcionado por lo de ayer. Irina, sentí que te estabas aprovechando de mi amistad.

Cuando el Duque Riddle extendió su mano para recoger su equipaje, ella se dio cuenta que la zona donde se colocaba el brazalete estaba vendada.

—Por favor, retírate.

Irina se vio obligada a regresar al Palacio del Oeste. Pero lo único en lo que podía pensar era que el Duque Riddle se iría.

Irina rompió a llorar mientras miraba el brazalete ensangrentado que el mercenario le había arrebatado al Duque Riddle.

Cada vez que los nobles de aquí le daban la espalda, el Duque Riddle era el único que se ponía de su lado.

Incluso después de convertirse en concubina, incluso después de convertirse en emperatriz.

Era el único amigo que no tenía prejuicios a pesar de saber que no era de origen noble.

Esa persona se había enojado y estaba a punto de irse. Este hecho fue aterrador y difícil de asimilar.

¿Seré capaz de seguir adelante sin el Duque Riddle?

Irina se presionó el pecho, tuvo que admitirlo.

Creo que me gusta el Duque Riddle.

Jasper fue el príncipe que la rescató cuando estaba en el momento más difícil, pero era tan caprichoso que abandonaba fácilmente a cualquiera.

Sin embargo, el Duque Riddle no sólo la ayudó cuando se enfrentaba a situaciones difíciles, sino que nunca dejó de brindarle su apoyo.

Aunque todavía amaba a Jasper, estaba segura que ese amor desaparecería gradualmente debido a su actitud.

Al contrario, sus sentimientos hacia el Duque Riddle no hacían más que crecer.

Irina se dio la vuelta y corrió de nuevo hacia el Duque Riddle.

Era posible que se tratara sólo de palabras vacías, pero el Duque Riddle ya había preparado un carruaje y estaba cargando su equipaje.

—¡Necesito decirte, necesito decirte algo!

—No hay nada más de que hablar.

—¡Tienes que escucharme! ¡Es una orden!

Irina exclamó con firmeza y llevó al Duque Riddle a su habitación. Pero apenas al entrar, el Duque Riddle se dio la vuelta para irse.

Irina se paró detrás de él y gritó desesperadamente con lágrimas en los ojos…

—Me gustas. Te amo. Por favor, no te vayas.

Irina, que estaba detrás del Duque Tom, no podía saber que estaba sonriendo.


NOTA:

Todo esta saliendo de acuerdo a los planes de Tom y de ¿Edward? ¿Que estaran planeando esos dos?

Creo que hubo unos problemas con el link asi que aqui les dejo mi numero para quien quiera entrar me mande un mensaje y yo les envio el link, +522226636785.

Nos leemos despues