Al día siguiente, Liam despertó sintiéndose terrible, la cabeza le dolía, los ruidos eran demasiado fuertes y la luz del sol deslumbraba. Emma no quería al principio, pero al final accedió a hacerle una poción para curarle aquel mal.
Era hora de regresar a casa para navidad, y Liam, ya más calmado, estaba ansioso por regresar con sus familiares. Emma estaba algo deprimida, y para quitarse lo que tenía en la cabeza, fue a darle unos golpes a Amanda.
—YA TE DIJE QUE NO LE HICE NADA!
—CALLATE PUTA! — Emma le dio un golpe en el estómago a la pobre chica
—AHHHHHHHHHH!
—EMMA! — Liam entro al compartimento, pues ya iban de camino a casa — QUE ESTÁS HACIENDO?!
—matándola — respondió Emma
—yo no sé qué hice — sollozo Amanda
—para eso pediste salir? — suspiro Liam — Amanda, regresa al compartimento, voy a hablar con ella
—ya voy — Amanda salió lentamente del lugar, Liam cerró la puerta apenas se fue
—a ver, que pasa?
—qué pasa? — Emma tomo a Liam y lo aventó al otro lado del compartimento, chocando con la ventana — escúchame idiota, ayer hicimos el amor y al final estabas hablando de la puta de Amanda, dime tu que estás viendo mientras te demostraba que te amooooooooo
—que?
—LO QUE ESCUCHASTE! — gruño Emma, acorralando a Liam — escúchame bien maldito, si ya no te gusto simplemente rompe conmigo y no me hagas sufrir
—de que estás hablando? — suspiro Liam — no quiero romper contigo, tú me gustas mucho
—ENTONCES POR QUÉ PENSABAS EN AMANDA?!
—bueno, es que tiene unas bonitas piernas y una bonita parte trasera — contesto Liam
—sí, es cierto, mierda, es una buena respuesta — gruño la chica
—pero tú tienes… lo tuyo — sonrió Liam — tienes estos brazos tan bonitos — dijo tomando los brazos de Emma — y estos músculos… y… tienes un bonito… eh… tú sabes… y más abajo tienes un abdomen que… ay, me vuelve loco, y una cadera que…
—ya entendí el punto — Emma sonrió — me gusta cuando te pones todo rojito cuando dices esas cosas
—el punto es que me gustas mucho — dijo Liam
—no sé, a veces pienso que te cansas de este cuerpo tan bonito — suspiro Emma
—cansarme? — Liam negó con la cabeza — como podría cansarme de ti? Además, no solo me gustas por tu cuerpo, tienes una personalidad muy bonita, vamos Emma, no te enojes
—bueno, pero llegando a casa me das cariño?
—te daré todo el cariño que quieras! — Liam abrazo a la chica, y le dio besitos en la mejilla
—jeje, vamos entonces — Emma sonrió contenta
El viaje a casa continuo sin problemas, aún que Emma estaba ansiosa de llegar a la casa de Liam. Hablaban y hablaban, hasta que la señora de los dulces llegó, y llenaron el carrito de ranas de chocolate. Dalia estaba muy contenta, y Jack trataba de quitarle las ranas de chocolate a la chica, pero terminaron peleando, y Amanda, entre tanta pelea, les robo las ranas de chocolate.
La tarde acompañaba a los chicos en su llegada a King's Cross, tan tranquila y relajante. Otra vez, los muggles de por ahí no parecían darse cuenta de los alumnos que salían del muro entre los andenes nueve y diez. Cómo fuera, Liam también lo había dejado pasar, y mejor fue directo a encontrarse con su familia.
—Hola! — dijo Liam, al llegar al estacionamiento y ver a la señora Baker esperando
—ah, hijo — la señora Baker lo miro — por fin llegas!
—hola suegra! — Emma saltó con una sonrisa, ya solo estaban ellos dos
—qué tal? — sonrió la mujer — donde está Tom?
—debe de llegar pronto — dijo Liam, y se acercó a su madre — mamá, QUE BUENO VERTE! — dijo abrazándola
—jaja, hijo — la señora Baker correspondió el abrazo — yo también estoy feliz de verte, díganme, como está su relación?
—muy… bien — dijo Emma
—sí, muy bien — Liam dejo a su madre y fue con Emma — Emma está lista para conocer a la abuela!
—pues mucho cuidado — suspiro — mamá es un tanto… exigente…
—estaré bien — Emma sonrió
—hola familia! — Tom salió contento de la estación — como están? — dijo en español
—tu por qué tardas tanto? — le pregunto Liam en el mismo idioma — no me digas que andabas hablando con Sofía
—ya, ya, no les entiendo nada! — dijo la señora Baker — hola hijo
—que pasa, mamá? — Tom sonrió, le dio un abrazo a su madre y tomo de nuevo su equipaje — vamos a casa?
—sí, sí, vamos — la señora Baker sonrió — de vuelta a casa, mis pequeños!
Regresaron al auto, en donde ya los esperaba el señor Baker, que partió de inmediato a casa. Tom iba hablando sobre lo maravillosa que era Sofía, y la señora Baker amenazó con hacer un encantamiento silenciador si no cambiaba de conservación.
La casa ya estaba frente a ellos, y hacia un frío tremendo, así que los chicos entraron lo más rápido posible a casa. Cuando estuvieron adentro, Raine los recibió muy contenta, pero no estaba sola, aparte de la compañía de Annelie, estaba con un chico, de gafas y algo alto.
—qué tal? — saludo Noach Wright, sentado en el sofá — como está Hogwarts?
—bien… — Liam y Emma cruzaron miradas, confundidos
—siguen saliendo? — pregunto Emma
—obviamente — dijo Noach
—sí, seguimos — Raine tomo a Liam y Emma — ahora suban a su habitación y cállense!
—pero…
—jeje, si, ya sé que están muy cansados! — Raine los empujó hacia las escaleras — adiós, descansen!
—que molesta — dijo Emma subiendo las escaleras — al final se va a terminar pareciendo a la vieja arrugada
—sí, tal vez — Liam suspiro
Liam y Emma dejaron sus cosas en la habitación de Liam, y la chica se lanzó a la cama, palmeo el colchón y miro a Liam.
—toca cariño — dijo Emma con una sonrisa
—sí, toca — Liam suspiro, saco a aura de su jaula y fue con Emma — que quieres que haga?
—hmmmm, se me ocurre algo de caricias — solicito Emma — en los brazos y en… el vientre! ¡También quiero que me abrases y me digas lo mucho que me quieres y adoras!
—bueno — Liam se acercó a la chica y empezó a acariciarle los brazos
—muy bien, muy bien, sigue así — Emma sonrió orgullosa — y no tienes nada que decir?
—que te amo mucho, Emma — le dijo Liam continuando su trabajo
—ah, no, no, yo no soy Emma — la chica río un poco — como me llamo?
—mi cerecita — suspiro Liam
—tu cerecita, sí! — Emma no podía estar más contenta — y que te gusta de tu cerecita?
—pues… — antes de que Liam pudiera seguir adulando a su novia, aura salto a la cama, y maulló agresivamente — que pasa?
—tendrá hambre? — pregunto Emma, y aura saltó enfrente de Liam, y le pasó la cola por la nariz
—ACHU! — estornudó — aura, espera! Ahora te mimo a ti — pero la gata subió a su pecho — aura, espera un momento por favor…
—esta de celosa — dijo Emma — hasta a las gatas les gustas! Claro, Amanda es una gata enorme
—deja eso — suspiro Liam, tomo a aura y la bajo de la cama, pero la gata volvió a subir — no nos va a dejar
—y si hablas con ella como hurón? — le pregunto Emma — también puede mirar, no me sentiré culpable si lo hace jeje
—Emma! — Liam le dio un golpecito en el brazo, y Emma río animadamente — ya! Voy a hablar con ella — dijo, entonces se relajó, y de un momento a otro se transformó en hurón — ¿qué pasa? — le pregunto
—te dije que no quería que te reprodujeras con ella! — gruño aura
—pero…
—eres necio! — aura salto y lo tomo del cuello, entonces salto de la cama
—oye! — Emma se levantó — a dónde vas?!
Aura corrió hacia la puerta, pego otro salto a la cerradura y lucho un rato con ella, hasta que logro girar la perilla. Emma no podía estar más sorprendida, pero más era su sorpresa, pues aura había raptado a Liam.
—déjame! ¡Déjame! — le decía Liam a aura, sacudiéndose — estás castigada! ¡No te voy a dar salmón!
—no te voy a dejar con ella! — dijo aura, llegó a la sala y salto a un sillón
—vaya, y esto? — dijo la señora Baker sorprendida — no será ese mi hijo?
—te quedas aquí! — aura soltó a Liam en el regazo de la señora Baker
—que paso? — la señora Baker alzo a Liam, que no dejaba de moverse. Emma bajó a toda velocidad, y vio a Liam en las manos de su madre
—aquí está! — Emma se acercó y tomo a Liam — esa gata se llevó a mi huroncito!
—lo dices mucho — suspiro Tom
—pero está vez es literal — Emma acaricio a Liam — bueno… vamos a seguir con lo nuestro, cuiden a aura!
Emma salió corriendo a la habitación de Liam, aún que aura también los siguió, Emma logro cerrar bien la puerta. Después de eso, Liam y Emma pudieron hacer sus cosas en paz, por fin, Emma estuvo contenta.
Pero al día siguiente, toda la familia tenía una cita. Liam se vistió muy bien, y Emma se puso lo más cálido que la señora Baker le permitió ponerse, una túnica de color negro con cuello de tortuga. Aún que Emma quería ponerse su mejor vestido, a dónde iban no motivaba mucho el uso de esa vestimenta, pues en el valle de Godric estaba nevando.
—todo listo? — pregunto la señora Baker en el jardín, acomodándose la túnica, una túnica muy elegante, y de color verde
—sí, solo una duda — dijo Liam — por qué Annelie va con nosotros?!
—por qué es de la familia — suspiro la mujer
—no es cierto! — alego Tom
—ya, ya, dejen de quejarse — dijo la señora Baker — además su hermana quería que ella fuera
—RAINE! — gritaron Tom y Liam
—es de la familia! — se defendió Raine — además, Emma va, y no es de la familia!
—yo, para tu información, soy la próxima señora Baker — presumió Emma — así que soy de la familia!
—tranquilos, ya — dijo el señor Baker, con un elegante traje — vamos a parecer una bonita familia, ¿sí?
—somos una bonita familia — dijo Annelie, con una de sus clásicas túnicas costosas
—TU NO ERES DE LA FAMILIA! — alegaron Tom y Liam
—bueno, quieren que sea Annelie Baker, eso quieren? — gruño la mujer — y quitarme el hermoso apellido de mi esposo?
—bah — Liam negó con la cabeza
—vieja arrugada, siempre tan molesta — suspiro Emma
—tendrás mi edad algún día — le dijo Annelie, como echando una maldición — entonces ya veremos cómo te va, Brown
—ya, niñas, ya — la señora Baker las interrumpió — vamos de una vez
—ok, aquí voy — el señor Baker tomo aire
—tranquilo, tengo una poción para el mareo — le dijo Emma palpando su bolsa de mano
—que amable — suspiro el señor Baker
La familia se tomó de las manos, y con un rápido "zas" se desaparecieron del jardín. Llegaron a un ancho jardín trasero, estaba nevado, como el techo de la casa. Emma le dio la poción al padre de Liam, que se recuperó al instante.
La señora Baker tocó a la puerta trasera, y una mujer mayor abrió la puerta. Tenía el cabello castaño claro, aún que ya muy claro, gracias a la edad.
—ah, ya están aquí — la mujer sonrió, hasta que vio al padre de Liam — pasen
La casa parecía una típica casa mágica, con cuadros moviéndose, cosas haciéndose solas, y raros artefactos en los muebles. Liam no recordaba todas esas cosas mágicas cuando visitaban a la abuela de niños, lo cual lo hizo sentirse un poco triste.
Fueron a la sala de la casa, en donde había tres sillones justos para que cupieran todos los integrantes.
—así que, Beatriz, ¿quién es esta mujer? — le pregunto la señora Hunt, abuela de Liam, mirando a Annelie
—es la madre de mi hija — respondió
—como?!
—sí, es Annelie, la recuerdas?
—con que este hombre se metió con tu amiga también! — dijo la señora Hunt — si ya te lo decía Beatriz!
—que no mamá! — protesto la señora Baker
—bueno, como quieras, pero ¿quién es esta jovencita? — dijo mirando a Raine
—pues nuestra hija — dijo la señora Baker — Raine
—mucho gusto — Raine sonrió
—ya, ya — la señora Hunt miro a Liam y Tom — vaya, que crecidos están! En especial tú, Liam, ¡mira que cabello traes!
—sí, me gusta mucho — Liam sonrió
—y está jovencita quién es? — dijo mirando a Emma
—Emma Brown — se presentó — soy la novia de Liam, y su mejor amiga, y además soy su futura esposa
—vaya, que decidida — dijo la señora Hunt impresionada — eres una bruja, ¿verdad?
—sí, lo soy — Emma asintió
—bien, al menos mi nieto si supo conservar la sangre — la señora Hunt sonrió orgullosa — no como otras…
—basta, mamá! — la señora Baker pataleo
—y que tal son para la magia? — pregunto la abuela, ignorando a su hija
—Liam es muy bueno en transformaciones — dijo la señora Baker — y Tom destaca en Encantamientos
—ya veo — la señora Hunt asintió con la cabeza
—Liam incluso es un animago! — dijo Emma, meneando a Liam — verdad que sí?
—sí, es el segundo del siglo — agrego la señora Baker
—con que un animago! — la señora Hunt río — muy bien, veo que los hiciste bien, Beatriz
—sí, lo hice — suspiro la señora Baker — y dónde está papá?
—salió a comprar, no debe de tardar — dijo la señora Hunt, y precisamente en ese momento la puerta de la entrada se abrió — vaya, que oportuno
—oh, ya llegaron! — dijo un hombre mayor, de cabello canoso y con aspecto algo cansado — que familia tan grande, y estás personas quiénes son?
—es la amante del muggle este — suspiro la señora Hunt
—ya te lo decía yo, Beatriz — el señor Hunt negó con la cabeza
—YA DÉJENME EN PAZ! — la señora Baker se revolcó en su asiento
Las presentaciones siguieron otro rato, y después de eso, se dio paso a una plática demasiado mágica, que los abuelos de Liam se esforzaron por hacer, para que el señor Baker no pudiera entender ni pío.
—YA LES DIJE QUE MICHAEL ES UN BUEN ESPOSO! — les grito la señora Baker en medio de la comida
—no te creo, hija — dijo el señor Hunt
—es un buen padre — opino Liam, pero la señora Hunt omitió su opinión
—es verdad, es un buen padre — dijo la señora Baker — y saben que, si siguen diciendo algo contra MI esposo, nos vamos de esta casa!
—bueno, fue bueno tenerlos un rato — dijo la señora Hunt
—AHHHHHHH! — la señora Baker se levantó de un salto
—a ver, que tanto tienen con mi suegro? — gruño Emma — si es súper bueno!
—es que es un muggle — dijo la señora Hunt, decepcionada — tan bien que le iba con Adrel…
—eso sí que no! — Liam se levantó de la mesa — mi mamá es muy feliz con papá, y Adrel ya es feliz con otra mujer, así que no lo metas en esto, abuela!
—eso mismo — la señora Baker sonrió
—yo no sé qué tienen los adultos — suspiro Emma — todo el tiempo hablando de mal de los muggles, a quien diablos le importa? ¡Si alguien conoce a un muggle y se terminan enamorando está bien! ¿Qué hay de malo?
—pues que la sangre…
—la sangre pura ya no existe, señora — le dijo Emma — es una ilusión que los viejos siguen teniendo, viejos como esa vieja arrugada de ahí! — dijo apuntando a la pobre Annelie — además, apuesto a que ni siquiera se ha dado a la tarea de conocer más a mi suegro, que hace todo por su familia, todos los días! Y ama a su esposa y le da todo tipo de regalos, algo que parece que viene en la sangre porque Liam es igual de detallista y Sofía me ha dicho que Tom nunca la deja sin un pequeño regalo siempre que terminan de entrenar
—que?
—lo que escucho — continúo Emma — así que deje de comportarse como si mi suegro fuera la peor persona del mundo, y admita que su hija es feliz con el! AHHHHHHHHHH!
—lo que dijo ella — la señora Baker asintió sabiamente — además, Michael y yo estamos esperando un cuarto Baker!
—QUE?! — dijeron todos, incluso el señor Baker
—bueno, no, pero ojalá! — suspiro la señora Baker — el caso es que yo amo mucho a esta hermosura de aquí — dijo revolviéndole el cabello al señor Baker
—lo hace! ¿Que no lo ven? — dijo Emma indignada
—pero… pero… — la señora Hunt quedó estupefacta
—así que lo acepta! — sentenció Emma — es que no ve la magia que hicieron juntos? ¿No ve a este muñeco de aquí? — Emma también revolvió el cabello de Liam — PERO COMO PUEDEN ESTAR TAN CIEGOOOOOS
—creo que entendieron — le dijo Liam, apenado
—eso espero — Emma pico una papa cocida — porque las papas están muy ricas
—bueno, tiene un poco de razón… — dijo la señora Hunt apenada
—la tiene! — la señora Baker sonrió ampliamente
—ah, hoy te la ganaste, Emma — Liam suspiro
—genial — la chica sonrió orgullosa
La comida continúo de una manera excelente después de eso, y Emma solo esperaba a la noche para cobrar su recompensa.
La señora Hunt, ya casi cuando la familia estaba por irse, llamó a su hija, que la siguió hasta donde era su antigua habitación.
—así que, Beatriz — la señora Hunt observo el jardín, desde la ventana de la habitación, Liam y Emma jugaban con nieve — es verdad lo que dijo aquella joven?
—obviamente es verdad — contesto la señora Baker — Michael es un hombre increíble, hace de mi vida una aventura! Día por día
—es un muggle — dijo la señora Hunt
—ya lo sé, y que? — suspiro la señora Baker — no te parece genial que sea tan capaz aun sin magia?
—no lo sé — la señora Hunt volteo a ver a su hija — pareces muy feliz, hija
—lo soy! — la señora Baker sonrió — tengo una buena vida, escribo en secreto para el profeta, e incluso el quisquilloso me ofreció un espacio! ¡También tengo un esposo que me ama, tres lindos hijos que me quieren mucho, y hasta mi mejor amiga es de mi familia!
—sigo sin entender eso — dijo la señora Hunt
—yo tampoco pero ya que — dijo la señora Baker riendo un poco — el caso es que soy muy feliz, no puedo pedir nada más
—entiendo, entiendo — la señora Hunt regreso su mirada a la ventana, Emma estaba acribillando a Liam a bolas de nieve — que chica tan rara
—que chica?
—ella, la pelirroja — dijo — no sabía que mi nieto tenía un gusto tan… peculiar
—sí, es una chica algo hiperactiva — suspiro la señora Baker — pero es una buena persona, además de que está loquita por Liam
—sí, creo que lo noté — la señora Hunt volvió a mirar a la pareja, ahora Liam lanzaba bolas de nieve con magia hacia Emma, y la chica se escondió detrás de un arbusto — dime, que piensa hacer Liam?
—quiere abrir una cafetería — contesto la señora Baker — junto con su mejor amigo y Emma, y también una chica francesa
—ya veo — la señora Hunt asintió, Raine se había unido a la batalla y ahora Emma y Liam estaban escondidos detrás del arbusto, mientras la Raine asesina cargaba una bola de nieve enorme — ay, hija, que vida tan peculiar llevas, pero… está bien, me alegro de que seas feliz — dijo, y volteo a ver a la señora Baker de nuevo — tal vez ese muggle no sea tan malo
—no lo es para nada — dijo la mujer con una sonrisa
Emma movió un poco la mano, y rompió una ramita del arbusto, entonces Raine por fin los encontró.
La señora Baker, una vez saco a Liam y Emma de la nieve, junto de nuevo a la familia para regresar a casa. La señora Hunt se despidió del señor Baker, cosa que le sorprendió, pues nunca le había dirigido ningún saludo ni ninguna despedida.
—ah, por fin en casa — dijo Emma entrando a la casa de los Baker
—fue un buen día — dijo Raine saltando a la sala — verdad?
—no lo sé — contesto Liam — creo que todavía tengo nieve…
—pues ven a mis brazos — le dijo Emma extendiendo los brazos — así te calientas
—nada de eso! — dijo Tom sentándose en el sillón de un salto — es de noche, pero ¿qué tal si jugamos un rato al Morio Kart?
—me apunto! — Raine se sentó al lado de Tom — vamos a jugar!
—sí, yo quiero jugar! — Liam sonrió
—pero yo quiero estar a solas contigo — Emma meneo un poco a Liam — con tanta familia, ya me dieron ganas de formar una contigo
—son muy jóvenes! — dijo la señora Baker, separando a Liam y Emma — mejor vayan a jugar
—bueno! — Liam salto al sillón — yo pido a la princesa!
—no se vale, yo quiero a la princesa! — alego Raine
—la escogí primero!
—tu siempre la escoges! — gruño la chica
—pues haberla escogido primero — Liam le enseño la lengua a Raine
—la voy a escoger primero! — Raine tomo un control
—ya veremos! — Liam tomo otro
—pero si ni siquiera está encendida la consola! — dijo Tom exaltado
—ya, silencio! — Emma tomo otro control — Liam se queda con la princesa!
—NO SE VALEEEEEE! — Raine pataleo
—pero si hay dos princesas! — les dijo Tom
—pero Liam siempre escoge a la rosa y yo quiero a la rosa! — dijo Raine
—pero puedes elegir la naranja! — dijo Tom
—PERO YO QUIERO LA ROSAAAAA
—de ninguna manera — gruño Liam — la rosa es mía!
—pero que no había una tercera? — dijo Emma — la celeste, esa se parece mucho a Raine
—sí, pero yo quiero la rosa!
—ponte la celeste — dijo Liam
—no hay de otra — Tom interrumpió la discusión — se decidirá en un duelo, el duelo más antiguo, piedra, papel y tijeras
—hecho! — Liam asintió
—ganare — gruño Raine
—serán tres rondas — dicto Tom — listos?
—listos! — Liam y Raine alzaron la mano
—PIEDRA, PAPEL Y TIJERA! — Tom marco el inicio de la competencia
Liam hizo una roca, y Raine puso unas tijeras, Liam se llevó la primera victoria. La segunda ronda fue protagonista por un papel de parte de Liam y nuevamente tijeras de Raine, está vez la rubia ganó. Era hora del desempate, Emma apoyaba a Liam, y Tom le susurraba algo a Raine. Se miraron a los ojos, agitaron las manos y Liam puso tijeras, lamentablemente Raine había puesto papel; Liam había ganado la batalla.
—JA! — Liam celebró — Liam Baker es la princesa!
—la próxima ganaré! — Raine gruño
—bueno, bueno, pero yo soy Morio — dijo Emma, mientras Tom prendía la consola
—y por qué Morio? — pregunto Raine
—porque siempre salva a la princesa — Tom río un poco
Raine no se podía quedar así, ganaría en la carrera. Fue muy reñida, pero al final Tom les saco ventaja a todos.
Ya al día siguiente, todo iba bien, la mañana parecía transcurrir sin problemas. Emma veía la televisión, mientras Liam se abrazaba de ella, hacía frío, así que los dos estaban cubiertos por una manta calientita. La señora Baker leía una revista muggle sobre estilos de cabello, Raine escribía un artículo sobre los muñecos de nieve, y Annelie cocinaba un postre, mientras el señor Baker mandaba un correo desde su computadora portátil. Tom hablaba por teléfono con Sofía, que también tenía un teléfono, aún que eso era por qué le había pedido a Liam que le comprara uno. Fue entonces que tocaron la puerta, y Liam fue a ver quién era.
—sí? — pregunto Liam
—soy yo, Anne!
—oh, Anne — Liam abrió la puerta, en el umbral pudo ver a Anne, pero no estaba sola, Akane y Haru estaban a su lado — DEMONIOS, ¡AHORA SABEN SONDE VIVO! — dijo y cerró la puerta
—quién es? — le pregunto Emma desde la sala, y Liam corrió con ella
—son Akane y Haru, vienen con Anne! — sollozo Liam — ahora no me dejaran en paz ni en mi casa
—yo me ocupo — Emma se levantó, y fue a abrir la puerta — que quieren, putas?
—oye, por qué me dices así? — Anne bajo la mirada
—a ti no — dijo Emma apenada — me refiero a las chinitas estas
—japonesas — corrigió Haru
—vienen conmigo — dijo Anne — hace rato las recogí, y pensamos en venir un rato…
—ugh, pues ya que — Emma se apartó — pasen rápido o las golpeó con la puerta
Haru y Akane se escabulleron a la casa, junto con Anne. Liam estaba temblando, realmente tenía miedo de las dos chicas.
—qué bonita casa — dijo Haru con una sonrisa
—ya la viste, FUERA! — Liam dio un fuerte pisotón
—tranquilo, Liam — Anne se acercó contenta a su amigo — venimos a ensayar un poco! ¡Traje mi guitarra, es hora de las tanukis de Hokkaido! Y claro, no podíamos sin nuestro vocalista, ¿verdad chicas?
—sí, sí, sí! — dijeron Haru y Akane, muy motivadas
—hijo mío, por qué tenías que conocer a tantas chicas? — la señora Baker suspiro, un poco exasperada
—yo no les dije que vinieran — Liam también suspiro
—vamos, no seas pesimista! — Anne dio un salto de alegría, y su estuche de la guitarra rebotó — tocamos un rato?
—pero no traen instrumentos — dijo Emma, acercándose a Liam
—aquí están — Haru movió la varita, y una batería, junto a un bajo aparecieron
—no puede ser — Liam negó con la cabeza — no quiero que estén en mi casa…
—vamos, Liam! — le dijo Anne — hay que tener más energía, pero… ahora regreso, necesito ir al sanitario
—ya sabes dónde está — le dijo Liam, y Anne escapó al instante — caray, yo que estaba muy contento acurrucado con Emma…
—yo tampoco estoy muy feliz — suspiro Emma
—no entiendo, yo pensé que te caíamos bien — dijo Haru
—sí, pero no para que estén en mi casa! — gruño Liam — parece que me acosan…
—no tengo cara de una yandere, ¿verdad? — Haru río un poco — y Akane… bueno Akane un poco sí, pero no lo es, ¿verdad?
—no, no, no — Akane negó animadamente — Liam-kun, casa muy bonita!
—supongo — Liam negó con la cabeza
—míranos! — le pidió Haru — no nos ves diferentes?
—las veo como siempre — suspiro Liam
—igual de molestas — agrego Emma, Liam tuvo que coincidir está vez
—YA ESTOY! — Anne salió del baño, muy contenta, pero no por hacer lo que normalmente se hace en el baño
La chica tenía puesta una falda negra, mallas negras, una chamarra deportiva rosa, y una peluca de color rosa, con un extraño adoro de dos cuadros azul y amarillo. Liam la vio, muy confundido, definitivamente ella no estaba así cuando había llegado.
—ahora sí! — dijo la chica — soy Bocchi, eh!
—quítate eso — suspiro Haru
—pero me costó mucho el cosplay — suspiro Anne — además, ya que vamos a tocar, es la ocasión perfecta para usarlo! ¡PORQUE SOY ELLA DE VERDAD!
—ah, pues ya que — Haru suspiro y tomo su bajo — vamos a tocar de una vez
—y que vamos a tocar? — pregunto Anne sacando su guitarra del estuche
—pues… ya se, toquemos noche de cristal de nuevo, para practicar — dijo Haru, y Akane estuvo de acuerdo, mientras se sentaba detrás de su batería
—OIGAN VAN A TOCAR EN LA SALA DE MI CASA! — protesto Liam — toda mi familia está aquí, no será muy molesto?
—está bien, hijo — dijo la señora Baker — quiero ver cómo cantas
—a mí me gusta ver a Anne tocar — dijo Raine apartando la mirada de su pergamino
—yo no sabía que tenías una banda, hijo — le dijo el señor Baker sorprendido
—y tú, Annelie?! — Liam le pregunto, y la mujer se asomó por la cocina
—me molestan, que se vayan — dijo la mujer firmemente
—GRACIAS! — Liam sonrió — ya está, fuera chicas, ya, se acabó
—ya! No seas molesto — gruño Haru — venimos a verte porque nos caes bien, desde Japón, ¡Liam!
—no seas tan duro — dijo Anne apenada — nosotras solo queríamos tocar juntas
—no me hagan sentir mal — suspiro Liam — a la próxima avísenme que vienen, al menos
—te avisaré — Anne sonrió — ahora toquemos algo, ¿sí?
—de acuerdo — Liam se acomodó el cabello
—entonces, noche de cristal? — Haru sonrió
—no, siempre tocamos cosas de Japón — dijo Liam — esta vez toquemos algo BRITANICO
—que propones? — dijo Anne
—algo de Queen, si — Liam sonrió orgulloso — que tal… carrera de bicicletas!
—esa canción me gusta — Anne también sonrió
—yo no sé de música muggle, pero ahora me dio curiosidad — Emma se estiró un poco — toquen!
—hum, si — Haru pensó un momento — tienen las notas o algo?
Anne no tardó nada en buscar las notas en internet, así que Haru las estudio un poco, y Akane también.
—muy bien, creo que ya estamos — Anne acomodó las manos en la guitarra
—denle — Liam se aclaró la garganta
—ICHI, NI, SAN — grito Haru, y al instante empezaron a tocar
Sonaba muy bien, Anne en especial sacaba a relucir sus habilidades, se notaba que ensayaba mucho. Liam también cantaba con ganas, en especial cierta parte de la canción, con la que las chicas de la habitación lo vieron un poco raro.
—ah, que bien! — Liam dio una vuelta, ya al final de la canción — así se toca!
—fue divertido — rio Anne — toquemos ahora reina asesina
—me leíste la mente — Liam rio un poco
—reina asesina? — Haru negó con la cabeza — no me se esa canción
—ahora busco las notas — Anne saco su teléfono y empezó la búsqueda
—necesito algo de agua — dijo Liam, y se dirigió a la cocina mientras las demás hacían su trabajo
—pues tocan bien — dijo la señora Baker
—Liam canta muy bien, si, si — Emma asintió, esparciendo su sabiduría
—me recuerda a mí en mi juventud — el señor Baker suspiro — yo tocaba el teclado, cantaba una que otra canción también
—con que todo un artista, ¿eh? — la señora Baker rio un poco — entonces mi maridito tiene un pasado de estrella de rock, que sueño
—no tanto, solo tocamos en uno que otro festival de la escuela — dijo el señor Baker con una sonrisa
—que hábil — la señora Baker rodeo el cuello del señor Baker con sus brazos — a ver si un día de estos me cantas algo
—con mucho gusto — el señor Baker soltó una risita, agradecido con la vida
—ey, Anne — le dijo Raine a la chica — ven aquí un momento
—sí? — Anne se acercó, mientras Haru y Akane veían las notas, y tocaban un poco
—acércate — dijo Raine, Anne obedeció, y Raine le susurro — dedícame una canción, sí, preciosa?
—s-si — dijo Anne, sonrojándose
—por cierto, bonitas piernas — Raine les dio una palmada a las piernas desnudas de Anne — recuerda que tenemos pendiente esa visita con tu disfraz de Halloween
—e-espera un poco… — Anne sonrió, ya muy sonrojada — tenemos que hablar… pero…
—LISTO! — Liam salió de un salto de la cocina — CONTINUEMOS!
—ay, si! — Anne se separó de Raine de inmediato
Liam y Anne regresaron junto a sus compañeras, que ya estaban listas. Empezaron a tocar, y Anne brillo otra vez, dijeran lo que dijeran, y aun que supieran que era a causa de la soledad. Liam se estaba divirtiendo mucho, ya dejando de lado su incomodad, cosa que se notaba en su voz y en su actitud.
—ah, qué bien nos está saliendo — dijo Anne, al terminar la canción — muy bien, vamos a tocar otra, Haru, Akane, se saben la de "le perteneces a el"
—obviamente — Haru sonrió — una de las favoritas de Akane jaja
—pues démosle — sonrió Anne — Liam, tienes teclado, ¿no?
—es de papá, pero si
—pueden ocuparlo, si lo necesitan! — dijo el señor Baker
—genial — Liam saco la varita, con un meneo, el teclado apareció
—acomódalo atrás — dijo Anne — esta vez yo canto
—um, ok? — Liam intercambio de lugar con Anne, y la chica se aclaró la garganta
—aprende las notas rápido, Liam — le dijo Anne de inmediato
—no te queda esa actitud — le dijo Liam, investigando las notas en su teléfono. Fueron unos cinco minutos en donde Liam leyó y toco un poco, lo suficiente para estar seguro, aunque todavía tenía las notas enfrente — muy bien, listo
—bien, démosle — dijo Anne
—ICHI, NI, SAN — grito Haru
—OMEGA TRIBE! — agrego Akane, y Liam empezó a tocar
Anne se sabía muy bien la letra, aunque fuera en japonés, tenía frases en inglés, frases muy evidentes. Al parecer, Haru y Akane estaban en el mismo tono que Anne, y la acompañaron coreando. Las tres chicas realmente vivían la canción, y a Liam se le quemaban las manos por la exactitud repentina que debía tener, realmente estaba concentrado, y no ponía mucha atención a la letra.
—AHHHHHHH, YA! — Anne termino la canción — listo, ya!
—sí que le diste — Emma rio un poco — de que trataba la canción, con exactitud?
—deberías de saberlo — suspiro Haru, cansada
—sí, eso — Anne suspiro, igual de cansada — necesito agua
Anne fue directamente a la cocina, sin distraerse mucho en el camino. Se encontró con su contraparte, que sacaba un pastel del horno, se miraron y no se dijeron nada. Salió de la cocina, ya hidratada, y vio a Raine, que le devolvía la mirada, negó con la cabeza y se fue con sus amigas.
