Episodio 1

I

[Perla]

Volando por los lugares más hermosos del Amazonas, me encuentro con Roberto y mis hijos para pasar un rato y también darles una sorpresa que de seguro les iba a encantar.

Lamentablemente el vuelo se puso algo incomodo luego de lo que paso en el nido, mi pequeña discusión con Blu hizo que Bia estuviera callada durante todo el trayecto, normalmente ella solía iniciar la conversación enseñándonos algunas cosas que mi tía le enseña, pero ahora no decía nada.

Ella es la más apegada a él, seguramente no le agrado la idea de dejarlo en estos momentos de lado. Tiago y Carla volaban con ella, creo que intentan animarla un poco.

Solo puedo suspirar ante todo esto, sinceramente mi relación con Blu no ha mejorado para nada, el sigue pensando en regresar a Río mientras nosotros ya estamos relacionados con la naturaleza.

Él es el único que no puede verlo, tan solo quisiera que pueda ver lo hermoso que es la vida en la selva, solo así todo se resolvería.

- ¿Perliux?

Me quite de mis pensamientos para ver que Roberto me estaba llamando.

- Lo siento Roberto, estaba sumida en mis pensamientos.

- No te preocupes, después de todo, ya llegamos.

Roberto descendió su vuelo mientras yo lo seguía al igual que los niños.

Llegamos a una zona que ya habíamos encontrado anteriormente, y que sería muy entretenida de mostrarles a los niños para que puedan divertirse.

Roberto quitó algunos arbustos y mostró un jardín pequeño con flores y que se parecía más a un lugar para relajarse y divertirse al máximo, incluso traía un pequeño charco de agua.

- ¿Y qué les parece niños?

Roberto con una sonrisa mostró el lugar con mucha emoción.

Voltee a ver a mis pequeños para poder mirar su reacción ante un lugar tan hermoso.

- Me gusta mucho.

Dijo Carla mientras sus ojos brillaban.

- Qué lugar tan divertido, aquí podría ser mi base secreta.

Tiago con su actitud algo malevola a las bromas agitaba sus alas con emoción.

- Esta bien...

Fueron las 2 únicas palabras de Bia mientras veía el lugar sin mucha emoción en su rostro.

Me preocupe un poco por su actitud en estos momentos, pero antes de realizar algo, Roberto fue el que dio el primer paso.

- ¡Venga, vamos a divertirnos!

Agarró a los niños con sus alas mientras los llevaba al pequeño jardín, donde se sorprendieron un poco por la acción repentina de Roberto.

Sonreí mientras miraba este divertido momento para luego dirigirme junto con ellos para divertirme de la misma manera y pasar tiempo con mis niños y Roberto.

Mis pequeños comenzaron jugando a carreras de vuelo con Roberto, sobre todo Tiago quien parecía tener una rivalidad por ganarle, algo gracioso de ver.

Carla miraba con una sonrisa algunas flores mientras se ponía algunas pequeñas en su cabeza para ver si la hacían resaltar, un momento lindo, donde pude acariciar la cabeza de mi pequeña.

Roberto seguía jugando con Tiago muy animadamente, pues parecía que ninguno de los 2 se cansaban ante los juegos que él proponía.

Sin embargo, mire para ver si Bia se la estaba pasando bien, pero mi rostro de felicidad paso a uno de preocupación.

Bia estaba en el charco de agua con tristeza mientras solo jugaba poco con el agua.

Ella no siquiera se interesó en los juegos de Roberto, se le veía tan decaída que podría dejar el lugar en cualquier momento.

Bia solo quiero volver a casa para pasar tiempo con Blu, su vínculo de padre e hija es muy fuerte, incluso me atrevo a decir que ella se lleva mejor con Blu qué conmigo.

Bia siempre pasaba tiempo conmigo y se le veía alegre, pero su alegría se notaba más cuando pasa tiempo con Blu, recordé cuando ambos leian en Río mientras él le enseñaba algunas cosas de los libros.

En ese momento sentí a alguien tomando mi hombro mientras se coloca a mi lado.

- ¿Estás preocupada por ella no?

Roberto me habló mientras veía a Bia, yo solo pude asentir con la cabeza.

- Se suponía que debía divertirse con nosotros, en cambio parece que no quiere estar aquí en estos momentos.

Mi preocupación por ella era muy notoria, mis hijos siempre pasan los días con alegría, ver a uno de ellos no estar alegre es motivo de que tienen reprimido algo adentro y no quieren hablarlo.

Pero en el caso de Bia ya sabía que era lo que tenia, solo que hablarlo por algún motivo me causaba incomodidad.

- Tranquila, en cuanto llegué tu padre con Mimi, seguramente su ánimo cambié.

Miré a Roberto con una sonrisa mientras le daba un pequeño abrazo.

- Gracias por pasar tiempo con ellos, sinceramente necesitaban de esto.

- Lo se, las cosas estuvieron un poco incómodas en estos días.

Dijo Roberto mientras ponía su ala sobre mi y me apegaba a él.

Antes hacía eso cuando mis preocupaciones eran muy altas, por lo que sentir que hacía lo mismo hizo que una nostalgia me viniera a la mente.

- Espero que con la sorpresa que le tenemos también se alegre. Necesitan de esto después de todo lo que paso.

- Tranquila Perliux, lo que paso en la fosa fue algo que nadie esperaba, es cierto que perdimos, pero seguiremos aquí siempre que se presente dificultades, tu padre estará allí para ti, Mimi también, los niños, pero sobre todo...

Con eso dicho, me dio el abrazo más fuerte que jamás había sentido desde que era una niña.

- Me tiene a mi para estar ahí para ti siempre.

Con esas palabras hizo que recuerdos se me vinieran a la mente, donde Roberto estaba ahí cuando éramos niños, y sus abrazos siempre me tranquilizaban de todos los problemas.

- Gracias Roberto.

- No tienes que agradecerme Perliux, sabes que siempre estaré ahí contigo.

Puso mi cabeza en su pecho mientras nuestro abrazo se extendió por algunos minutos más.

Roberto siempre tiene algo para hacer que olvide todos los sucesos problemáticos, no se que haría si el no estuviera allí para mi.

Después de unos minutos, ambos nos separamos del abrazo mientras me dio una caricia en la cabeza.

- Sigues siendo la misma niña que tenía que reconfortar cuando llorabas.

- Jaja, muy gracioso.

Le di un pequeño golpe en su ala, mientras ambos nos comenzamos a reír por el momento divertido entre los dos.

Después de esas sonrisas, Roberto sonrió un poco mientras me señalaba en una dirección en especifico.

Al voltear a ver, me encontré con mis hijos Carla y Tiago tratando de animar a su hermana para que jugarán todos juntos.

- Ves, tus hijos se ayudan entre ellos, nunca vas a estar sola.

- Es cierto.

Las palabras de Roberto tenían peso, por lo que decidí seguir a mis niños y divertirnos en lo que queda de las horas, eso hasta que mi padre y mi tía lleguen.

Por un momento vi que la cara de Bia se alegró un poco, supongo que es porque Tiago hacia caras graciosas, por lo que se unió a ellos a jugar.

Pasamos el día como es debido, jugamos en el pequeño charco de agua, comimos arándanos qué se encontraban cerca de un árbol y nos relajamos en el césped.

Yo estaba en un lado del césped y Roberto se encontraba en el otro lado, mis hijos se encontraban en el medio, Carla a mi lado, Tiago al centro y Bia al lado de Roberto.

Miramos un poco el cielo que ya estaba atardeciendo, pronto caería la noche.

Debo decir que estar así con ellos me llena de una tranquilidad muy inmensa, veo como mis pequeños se divirtieron mucho, incluso Bia tenía una pequeña sonrisa en su rostro.

Me alegra de que al menos ya se sienta un poco mejor.

- Qué día ¿no?

Preguntó Roberto mientras mira a los niños con una sonrisa.

- Vaya que me divertí mucho, estoy tan cansado.

Dijo Tiago mientras se estiraba un poco.

- La verdad es que me divertí mucho en este dia.

Carla lo dijo con una alegría inmensa.

Mire a Bia para ver que tal estuvo el día con nosotros, por lo que Bia me miro por un momento.

- Me divertí un poco.

Dijo Bia mostrándome una pequeña sonrisa en su rostro.

A pesar de mostrarme una sonrisa, yo siento de que solo lo hizo para que no me preocupara de nuevo, espero que la sorpresa la alegre un poco.

De todos modos mostrare un poco de mi optimismo para ocultar un poco mi preocupación por mi Pequeña.

- La verdad es que fue un día maravilloso, y lo será aun mejor.

Con eso dicho abrace a mis pequeños con un ala, y no solo eso, si no que Roberto también puso su otra ala para abrazar a los niños.

Me sorprendí por la repentina acción de Roberto, pero el me dio una sonrisa. Recordé lo que hizo por mi el día de hoy por lo que también le di una sonrisa, aceptando su ala.

Sin embargo, sucedió algo que no pensé, y es que Bia se levantó inmediatamente luego de ver el ala de Roberto abrazándola.

Me quede confundida por las acciones de mi hija ante esto, incluso a Roberto y los niños les pareció extraño.

- ¿Qué sucede hija?

Pregunte con preocupación por su acción.

- Nada, solo es que ya me canse de estar en el suelo, es todo.

Dijo Bia mientras se estiraba y se alejaba un poco de donde nos encontrábamos todos.

Cuando estaba por decir algo más, la voz de Tiago me interrumpió.

- ¡Miren, son el Abu y tía Mimi!

Al decir eso, rápidamente mire arriba para darme cuenta de que eran mi padre y mi tía, al fin llegaron con nosotros.

- ¡Hola niños!

Grito mi padre Eduardo con una sonrisa mientras abría sus alas para recibir un abrazo.

Rápidamente nos levantamos del suelo para ver como Tiago y Carla corrieron hacia mi padre y lo abrazaron muy fuerte.

- Vaya, si que me extrañaron.

Sonreí ante el momento, mientras Roberto se ponía al lado mio.

Pude notar que mi tía andaba un poco confundida pero con un semblante serio.

No entendí porque me miraba de esa forma. ¿Acaso hice algo malo?

- Hola Bia ¿No le darás un abrazo a tu Abu?

Pregunto mi Padre quien miraba a mi hija con las alas abiertas.

Sin embargo Bia no se movió para nada de su sitio, simplemente lo saludo con el ala mientras se mantenía en su posición.

- ¿Qué le pasa a Bia?

Preguntó mi padre con mucha confusión ante su actitud.

Estaba por decir algo, incluso mi enojo estaba por salir y gritarle a mi hija pero me interrumpieron nuevamente.

- Nada, solo se molesto un poco por una cosa que no tiene importancia.

Ante las palabras dichas por Roberto, me quede sorprendida, mis hijos también, aunque esta vez pude ver un ceño fruncido en sus ojos.

También por una fracción de segundo pude escuchar la voz de Bia, pero muy baja, aunque no lo se del todo.

- "Tu eres el que no tiene importancia"

No se si esas fueron las palabras claras de mi hija o tal vez solo yo me estoy imaginando cosas que no son en realidad.

- Bueno niños, su Abu y yo venimos a darles una pequeña sorpresa.

Rápidamente mi tía Mimi dijo eso para cambiar un poco el ambiente que se encontraba en este momento.

- Bueno Eduardo, diles.

Mi padre asintió con la cabeza para luego mirarnos a todos.

- ¡Hemos decidido entre la tribu para irnos todos juntos a un viaje por todo el Amazonas!

Después de decir esas palabras, mis hijos se sorprendieron demasiado por la noticia, pude ver felicidad en sus rostros, incluso Bia tenía una pequeña sonrisa, pero se retiró de inmediato su alegría.

- ¡¡Eso quiere decir que será un viaje super divertido, haremos bromas, exploraremos peligros y más!!

Grito Tiago con mucha emoción, a él siempre le gustan los peligros de todo tipo.

- Así es Tiago, aunque tampoco nos pondremos en lugares peligrosos.

Dije mientras lo miro con una sonrisa.

- Aún así estoy muy emocionado.

A pesar de mis palabras no se le quitó la emoción en ningún momento, por lo que no lo detuve.

Mi tía y mi padre lo miraban con una sonrisa y se divertían de verlo tan emocionado.

- Podré ver lugares más lindos, incluso podría elegir un nuevo lugar para hacer el espectáculo más grande del Amazonas.

Dijo Carla también con un brillo en sus ojos y emoción al igual que su hermano.

Roberto y yo mirábamos como se emocionaban con mucha alegría.

Pero el ambiente se puso algo tenso ya que alguien le habló a mi padre.

- ¿Mi papá va a ir con nosotros al viaje no?

Voltee a ver a Bia quien pregunto mientras mira a mi padre con un tono neutral.

Estaba algo sorprendida por el tono neutral de mi hija, son pocas las veces que la veo de esa manera.

- Claro que papá va a venir con nosotros Bia.

Dijo Tiago sin preocuparse tanto.

- Si, papá vendrá con nosotros ¿correcto Abu?

Pregunto Carla también mientras mira a mi padre.

Voltee a ver a mi padre y vi que él los miraba con un poco de sorpresa por la pregunta, pero después de un silencio de su parte, decidió tomar la palabra.

- Por supuesto que vendrá con nosotros pequeña.

Con lo dicho con mi padre, Tiago y Carla se pusieron aun más contentos porque era la oportunidad perfecta de pasar tiempo todos juntos.

Pero Bia parecía seguir neutral por un momento, parece que las palabras de mi padre no la convencieron del todo, o eso es lo que me decía al ver su rostro.

Mi tía al ver el comportamiento de Bia, decidió hacer algo.

- Niños, regremos a casa, quiero enseñarles algo que encontré mientras exploraba.

Mi tía agarró a Bia, Tiago y Carla para llevarlos de regreso a la tribu, supongo que quiere dejarme a solas con Roberto y mi padre para hablar.

Los niños se confundieron por la actitud algo rara de mi tía, ya que fue algo repentino, por lo que me miraron algo confundidos.

- Vayan a pasar tiempo con su tía, yo ya estaré en casa.

Con mis palabras dejo tranquilos a los niños y se fueron con mi tía de regreso a la tribu.

Ahora me encuentro a solas con mi padre y Roberto.

- ¿Dime hija, quiere que llevemos a tu esposo al viaje?

La pregunta de mi padre me hizo agachar la cabeza, ciertamente no puedo olvidar nuestra pelea en la fosa de la perdición, pues después de esa discusión, las cosas no fueron las mismas.

Blu y yo nos hemos distanciado tanto, y siendo sincera, cada vez que Blu me habla, yo le respondo muy fuerte o me siento molesta de que él me hable, no creo estar lista para hablar nuevamente como lo hacíamos antes, no después de ese día.

- La verdad, prefiero que no vaya, lo mejor sería que se quede en la tribu.

Dije sincerandome en mis palabras, pues no tenía deseos de que Blu viaje con nosotros, no en estos momentos que nuestra relación ahora mismo está distanciada y tensa.

- Te entiendo, sigues molesta con él por su actitud en la fosa de la perdición.

Solo pude asentir ante el comentario de mi padre. Le conté a mi padre, mi tía y Roberto sobre mi discusión con Blu, por lo que me dieron su total apoyo ante esto.

Él quiere regresar a Río sin pensar en nosotros que somos su familia. Los niños tienen nuevos amigos aquí, si volvemos, ya no tendrán con quien divertirse y yo no quiero eso, además aquí tengo a toda mi familia, no quiero dejarlos por un pedido egoísta de Blu.

- Es lo mejor, quiero relajarme con los niños en este lindo viaje.

Dije mientras miro a mi padre.

- Y lo haremos. Regresemos con los niños y Mimi. Mañana comenzaremos el viaje con toda la tribu.

Con todo dicho, asentí con una sonrisa. Mi padre se acercó a mi y me dio un abrazo.

- Ya no te preocupes más hija, siempre te vamos a apoyar en todo.

Esas palabras hicieron que mi corazón se desahogara y comenzará a abrazar a mi padre.

- Si mamá estuviera aquí, ella sabría también ayudarme en estos momentos duros.

- Tu madre siempre te va a cuidar hija, desde arriba ella te cuidara.

Las palabras de mi padre hicieron que una sonrisa plasmada en mi rostro fuera visible. Mi padre es alguien maravilloso, quiero que estos momentos sigan así.

Después del abrazo, los tres comenzamos a tomar vuelo hacia la tribu, debíamos de alistar todo para mañana nuestro gran viaje.

"Un viaje que será extraordinario para mi familia y yo"

"Un viaje que podrías arrepentirte en el futuro"

Una voz mencionó esas palabras, volteando a ver de donde provenía, me di cuenta de que no había nadie, ni un ave, solo estábamos Roberto y mi padre, quienes se detuvieron mientras me miraban confundidos.

- ¿Hija, sucedió algo?

Preguntó mi padre con un poco de confusión y preocupación.

- Pensé escuchar algo, pero parece que no fue nada.

Dije retomando el vuelo en dirección ha nuestro hogar. Aún así no podía dejar de pensar en esas palabras.

"¿Por qué me arrepentiria de hacer este viaje con mi familia?"

Ignorando esas palabras que de seguro eran de mi subconsciente, seguimos nuestro camino de vuelta a la tribu.

II

[Blu]

No podía dejar de pensar en todo lo que pasó hace unas horas, ella realmente se fue con Roberto a pasar un tiempo con nuestros hijos, prefirió pasar tiempo con alguien de su pasado que con su propio esposo.

- ¡Pueden creerlo! ¡Ella me dijo eso!

Grite mientras caminaba de un lado a otro, la frustración, enojo e ira era casi incontrolables.

- Blu, tranquilo.

Rafael con un tono de calma quiso tranquilizarme ante mis palabras de frustración y enojo.

- ¡Es que no lo entiendo Rafael! ¡Ella...!

Las palabras querían salir de mi boca, pero simplemente no pasaba, sentía un nudo en la garganta al no poder expresarme abiertamente.

De repente sentí como Rafael tomaba mi ala y espalda.

Voltee a mirarlo confundido, pero la mirada me hizo darme cuenta de que quería escucharme, pero no de esta manera.

Me llevo hacia un pequeño asiento que tenía en su nuevo nido junto con Nico y Pedro quienes también me miraban con mucha preocupación.

Me senté en el lugar que me designó Rafael mientras una respiración profunda hizo que todo mi enojo se calmara al menos por estos momentos.

- Está bien Blu, dejalo salir.

Dijo Rafael mientras se sentaba para escucharme.

- Yo...

Sin darme cuenta, algunas lágrimas comenzaban a salir de mi rostro mientras no contenía más el llanto.

- ¿¡P-Por qué me hace esto!?...snif... ¿Qué hice mal?

Fueron mis lamentos mientras ponía mis alas en mi rostro, tapando las lágrimas que no paraban de salir de mis ojos.

Podía sentir el ala de Rafael en mi espalda mientras otras alas pequeñas hacían lo mismo.

- Hice lo que me dijiste. "Esposa feliz, vida feliz", pero...snif...aun así...snif...ella...

El llanto era incontrolable en mi, sentía que todo lo que hice por ella no le fue suficiente.

- P-Por qué...snif... Solo quería que fuera feliz...snif.

Me limpie algunas lágrimas de mis ojos mientras miro a mis amigos.

- Entiendo cuanto debe doler qué ella te haya dicho eso.

Dijo Rafael mientras comprendía completamente lo que acabo de contarle en lo que estuve con ellos.

- Siento mucha lastima por ti amigo.

Dijo Nico mientras ponía su ala en mi espalda.

- Ya no sé qué más hacer Rafael, siento que cada día me alejo más de ella...snif... N-No puedo más.

Dije mientras mi tristeza y mis inseguridades se hacían presente en mi rostro.

- Parece que siguiendo mi consejo no te ha traído nada bueno. Te pido disculpas por darte un consejo tan malo.

Dijo Rafael arrepentido de haberme dicho esa pequeña frase.

- Entiendo que eres un ave domesticada viejo y que te esfuerzas para encajar en este nuevo lugar. Lastimosamente, si no lo logras podrían incluso dejarte de lado en cosas que podrían ser importantes.

Dijo Pedro mientras se paraba enfrente mio.

- Tiene un punto, ¿Recuerdas cuando no podías volar?

Esas palabras de Rafael hicieron que recordará mi época donde no podía volar y sentía que era una carga.

- En esos tiempos pensabas igual y eso no te detuvo en lo absoluto, al contrario, lograste liberar a muchas aves de ese avión tú solo.

Mire a Rafael pues lo que decía era de alguna manera para hacerme sentir mucho mejor en ese aspecto.

- Aunque, si para ese entonces no sabias volar, pudiste haber muerto. Y tal vez Perla igual hubiera muerto. Aún así, creo que deberías de adaptarte a este lugar. Se que los cambios son difíciles, pero con el tiempo veras que todo mejorará. Llevamos casi 3 semanas aquí.

Rafael me golpeó un poco la espalda en señal de amistad, aunque su golpe no fue la gran cosa.

- Perla podrá ser una ave salvaje y todo eso, pero ella te ama. Esta discusión la tendrá molesta por unos días más, pero si eres más detallista con ella y le demuestras que te has adaptando a la selva, verá un gran cambio y podrán volver a ser felices. Las parejas suelen ser así, te ponen retos difíciles pero cuando los superas demuestras que vales mucho de lo que ellos pensaron. Incluso su padre verá un gran cambio en ti.

Las palabras de Rafael me hicieron pensar un poco, desde la discusión en la fosa de la perdición, aun tengo el deseo de estar cerca de los humanos y de las cosas que utilizan.

- ¿Entonces debo de dejar toda las cosas de humanos por ella?

Pregunte mientras lo miro aún con un fragmento de esperanza, aunque no quería dejar cosas que me gustan.

- Si es para hacer cambios, entonces deberías de empezar por ahí. La verdad, es que eso hice con Eva, y mirame ahora, estoy feliz con ella y con mis hijos. Además, mañana regresaremos a Río.

Cuando dijo esas palabras, me quede sorprendido, no pensé que ellos se irían a Río.

- ¿Ustedes van a regresar?

Pregunte intrigado o pensando que había escuchado mal.

- Si, la verdad es que las funciones para dar el mejor carnaval no están como queríamos, al menos intentamos realizar algo diferente, pero lastimosamente ya sabes lo que pasa cuando algo no sale bien.

Ante lo dicho por Nico, solo pude suspirar mientras regresaba a ver a Rafael.

- Ya veo. Entonces lo único que debo hacer es cambiar mi estilo de vida para que las cosas mejoren.

- Si es por Perla, debes hacerlo amigo, después de todo, ambos están juntos hasta el final.

Las palabras dichas por Rafael hicieron que mi cabeza pensara en lo que debía hacer.

Si es para mejorar esta situación tan incómoda, debería de hacerlo, después de todo, ella no quiere volver a Río, incluso los niños tienen amigos aquí, si nos vamos podrían perder a los únicos chicos que tienen. Y allá solo estaremos Perla y yo, además de Nico, Pedro y Rafael.

- Lo voy a hacer. Si es por el bien de mis hijos y de mi relación. Entonces cambiaré, me volveré un ave nueva.

Dije con mucha determinación en mis ojos, pues quería cambiar para impresionar a Perla, a mis hijos y a su padre, para demostrarle que soy digno de estar con su hija.

- Muy bien mi amigo.

Sin más que perder, era hora de dirigirme de regreso a la tribu, pues ya estaba a punto de anochecer.

- Bueno, creo que es hora de irme.

Antes de salir, les di un abrazo a mis amigos por última vez, pues creo que se irán mañana temprano para volver a Rio.

- Qué tengan un buen viaje mañana chicos.

- Gracias Blu, tu también, suerte y demuestrale a ese viejo que eres especial.

Asintiendo ante el comentario de Rafael, salí del nido mientras me despedía con el ala para así retomar mi vuelo hacia el nido.

Voy a extrañarlos, aunque creo que Nico debería de buscar un nuevo sombrero, ya que el que tiene lo hace ver medio raro.

De cualquier forma ya estaba en camino para poder arreglar las cosas, primero hablar con Perla y decirle que a partir de mañana comenzaré a cambiar por el bien de mi relación y de mi familia.

No me tarde casi nada en llegar a la tribu, después de todo ya aprendí un poco a como identificar el lugar.

Al fin di con el nido y entre para ver si habían llegado de ese pequeño paseo.

Al entrar, vi que el único que se encontraba en el nido es mi esposa Perla, no vi a los niños por ningún lado, tal vez los dejo con su tía.

- Hola amor.

Dije con una sonrisa, Perla volteó al instante mirándome por unos segundos, pensé que no me hablaría, aunque de todas formas queria hablar con ella.

- Hola Blu.

Dijo Perla tranquila aunque sentí que su voz seguía algo molesta y desinteresada.

- ¿Dónde están los niños?

- Se quedaron con mi tía Mimi, iré dentro de un rato a dormir en su nido esta noche.

Entonces va a dormir en casa de su tía Mimi con los niños. Eso quiere decir que aún no quiere hablar conmigo, o trata de evitarme para cualquier tipo de conversación.

No puedo dejar esto así, tengo que hablar con ella, si no lo hago me arrepentiré seguramente luego por no decirle.

- Perla ¿Podemos hablar?

Ante mi pregunta, ella volteo a verme un poco sorprendida aunque volvió a su estado neutral nuevamente.

- ¿De qué quieres hablar exactamente?

Pregunto algo sería mientras se cruzaba de alas.

Seguramente esta pensando en que le diría algo sobre volver a Río o tal vez en ir con Linda y Tulio, pues seguramente seguían aquí en el Amazonas.

- No vine a hablar sobre lo de Rio, es sobre otra cosa.

Esto hizo que Perla me mirara algo confundida, pues no esperaba que cambiara ese tema y dejarlo a un segundo plano.

- Escucha, se que he sido insistente en ese tema, pero esta vez, quiero adaptarme a este lugar.

- ¿Eh?

Perla en estos momentos se sentía confundida por mis palabras.

- Mañana me voy a volver más salvaje, voy a intentar ser como la tribu, quiero ser el ave que tu padre apruebe, por eso me volveré más salvaje, para que podamos ser felices.

Me acerque a mi esposa mientras ella me miraba algo incrédula ante mis palabras, tome sus alas mientras la miró con una sonrisa.

- Te prometo que daré mi mejor esfuerzo para cambiar y ser un ave salvaje. Si es por ti, haría lo que sea.

Dije esa línea con una sonrisa en mi rostro. Perla estaba sorprendida ante mis palabras.

Se sentirá con alegría, emoción de que por fin dejaré a un lado la vida de la ciudad para adaptarme aquí con ella. Por el bien de nuestro matrimonio y de la felicidad de mis hijos lo haría todo.

Estaba esperando paciente la respuesta de mi esposa tras mi propuesta y mi determinación por ser alguien que impresione a su padre.

- Blu, mejor no digas locuras. No lo hagas.

Esas palabras de Perla hicieron que toda mi determinación se fueran por la basura, se reemplazo por una actitud de confusion y sorpresa en mi rostro.

- ¿De qué hablas?

- Blu, voy a ser franca contigo. Intentaste ser alguien importante aquí para sorprenderme, pero lo único que provocaste es que hubiera una guerra entre las dos tribu y por eso hizo que perdieramos el derecho a comer mis nueces favoritas.

Me quede sin palabras ante los comentarios de Perla, pensé que ella quería que cambiara para ser alguien salvaje, pero no quiere.

- Pero ya te dije que no fue mi culpa, no sabía que estaba en el terreno de los Escarlata.

- Y por eso mismo no puedo permitir que vuelvas a cometer otra de tus tonterías. No mientras no estamos aquí.

- ¿Mientras no están?

Mi rostro cambió a uno de preocupación y algo de inquietud por sus palabras.

- No tenía ganas de decírtelo, pero de todas formas te ibas a enterar.

- ¿A dónde irán?

- Mi padre y la tribu nos iremos a un viaje por todo el Amazonas, iré con los niños y con mi familia.

Esa revelación hizo que mi cara de sorpresa no se hiciera de esperar.

- ¿Cuántos días será ese viaje?

- Tal vez 2 o 3 semanas, no lo se, pero esta es una buena oportunidad para que los niños se distraigan, después de todo, creo que aún siguen dolidos por lo que pasó en la fosa en el partido.

Sabía que mis niños se sentían un poco decepcionados de que hubiéramos perdido, pero aún así, me mostraron su cariño y comprensión y ahora seguía queriendome como siempre.

En especial Bia quien se encontraba más apegada a mi en estos días.

- ¿Cuándo planean viajar?

- Mañana por la mañana.

- Entiendo. Entonces arreglaré todo para ir a ese viaje, será un día de familia.

Deje mi actitud sorprendida para cambiarlo por una de alegría, pues un viaje en familia sería el momento perfecto para que nuestros lazos se hicieran más fuertes.

- Blu, tu no vas a ir con nosotros.

Deje de alegrarme al escuchar el comentario de Perla, no podía entenderlo.

- ¿Qué?

- No vendrás. Iré con mi padre, mi tía, los niños y Roberto, junto con la tribu.

Ella planeaba hacer un viaje con todos sin pensar en invitarme, era como si no importara en lo absoluto.

- ¿Por qué no puedo ir con ustedes?

- La verdad es que mi padre no quiere que nos vuelvas a causar problemas durante el viaje, y la verdad sería lo mejor, no queremos que causes otra guerra con otras tribus que estarán por el Amazonas.

Al decir eso, un enojo se hizo presente en mi al escuchar que su padre no quería que fuera a ese viaje.

- ¡Solo por que tu padre dijo eso, le harás caso!

- Blu, entiende...

- ¡Quiero, pero no puedo!

No aguante más mi enojo, Perla se sorprendió al ver mi actitud enojada.

- Blu, por favor no grites.

- ¡Como quieres que no grite! ¡Tu padre me está alejando de ustedes!

- Solo quiere evitar que causes problemas.

- ¡No voy a causar problemas! ¡Él me quiere hacer quedar como el villano en todo esto!

Ya no podía dejar escapar la ira que tenía contra su padre, desde que había llegado ha intentado humillarme de varias maneras, y ahora me quiere impedir que vaya a un viaje con mi familia.

- ¡Blu, estas hablando mal de mi padre!

- ¡Tengo derecho a hablar así de el! ¡Me hizo pasar por humillaciones y casi me mata con unos cocodrilos!

Grite mientras agitaba mis alas con mucha desesperación y exaltación.

- Blu, deja de decir delirios.

- ¡No son delirios, es la verdad!

- No quiero discutir contigo nuevamente.

- ¿¡Tan difícil es que me entiendas que tu padre no me quiere en la tribu!?

Mis palabras salían una tras otra, un desahogo salió desde lo más profundo de mi corazón, realmente me estaba sintiendo dañado por todo lo que estuve pasando.

- Solo mirate Blu, otra vez te estas poniendo como en la fosa de la perdición.

Las palabras de Perla hicieron que recordará ese día en la fosa de la perdición, donde decía que era un egoísta por pensar en mi en lugar de ellos.

- Por eso quiero cambiar, quiero ser un ave en el que te sientas feliz y cómoda a tu lado.

- ¡Y luego realizas una de tus locuras haciendo que provoques incomodidad en mi y en los niños! ¡Solo mira lo que sucedió en la fosa de la perdición, los niños sentían vergüenza de verte y de arruinar el partido!

Perla dijo esto con un tono serio y de decepción.

- ¡Esa vez me pase un poco por demostrar ser alguien que puede ser mejor que Roberto, pero simplemente no tuve la misma suerte!

- Ya no digas más Blu.

- ¿¡Prefieres pasar más tiempo con Roberto y los demás que conmigo!? ¿Por qué tengo que ser yo el que sale afectado?

De repente sentí un golpe en mi rostro, retrocediendo unos pasos hacia atrás pude ver a Perla quien me golpe con su ala.

- ¡Ya Basta!

Un grito de ira y enojo se hizo presente en el rostro de Perla.

- ¡Tenía razón, solo piensas en ti mismo! ¡Los niños se la están pasando bien con la tribu, incluso se llevan bien con el! ¡Él les está enseñando a ser más salvajes en este lugar! ¡A diferencia de ti que solo les has enseñado a esconderse y vivir como humanos! ¡No somos humanos! ¡Somos aves!

Perla comenzó a soltar algunas lágrimas en su rostro mientras me mira con mucha decepción.

- ¡Pensé que había perdido a mi padre y al resto de mi familia en ese incendio! ¡Y ahora que por fin volvimos a estar juntos desde hace tiempo, ahora quieres que nos vayamos y dejemos nuestras raíces!

- ¡Yo te dije que no me quería ir, ahora solo quiere cambiar para poder estar con ustedes, pero tu misma me estas excluyendo de todo!

Me levante rápidamente pero Perla me dio otro golpe en mi cara haciendo que caiga nuevamente.

- ¡No puedo creerlo! ¡Piensas que es así de sencillo! ¡Aunque quieras, tu nunca vas a cambiar! ¡Siempre habrá algo que necesitas de los humanos! ¡Ni siquiera te puedes deshacer de esa cangurera qué no soporto verla!

Su rostro mostraba que no se sentía conforme por ver la cangurera.

- ¡Ahora mismo prefiero mil veces que Roberto este con nosotros en el viaje antes que tu!

Esas simples palabras hicieron que mi corazón se partiera en pedazos, una mirada de tristeza se hizo presente en mi, mientras negaba con la cabeza.

- ¿No lo estas diciendo enserio?

- ¡Roberto sería una mejor figura paterna para ellos! ¡Solo mirate, no entiendes que nunca cambiaras! ¡Tan solo eres una mascota!

Esas palabras, esas palabras que nunca quería escuchar nuevamente, se volvieron a repetir, pero esta vez venían de mi propia esposa.

Sentí como lágrimas se formaban en mis ojos antes esas simples palabras de ella.

El enojo de Perla se hizo notar más, mientras se limpiaba las lágrimas de su rostro, me miró con algo de sorpresa al entender las palabras que había dicho, pero volvió a su actitud neutral hacia mi.

- Solo quiero disfrutar este viaje con los niños y mi familia. Solo quiero eso.

- ...

- Solo quedate aquí, no quiero que causes más problemas de los que ya has hecho. No sería justo para ellos, ni para mi.

Con eso dicho, abrió sus alas y salió del nido volando.

No podía describir lo que estoy sintiendo en este momento, una mezcla de emociones se hizo presente en mi, tristeza, rabia, decepción, culpa, todas cohexisitiendo en mi interior.

Me levante lentamente mientras aun tocaba la parte de mi rostro qué había recibido el golpe.

Un fuerte dolor se hizo presente en mi, las lágrimas no paraban de salir de mis ojos, en estos momentos, me he quedado solo.

Siempre soy yo el que sale lastimado. ¿Por que tengo que pasar por todo esto? Pensé que si cambiaba ese estilo las cosas podrían mejorar, pero ahora ella decidió que no debía hacerlo todo porque solo les causó problemas.

Mis sentimientos ya no se podían contener más, me senté en el nido, la luz de la luna se hizo presente en el huevo mientras reflejaba mi sombra.

La vida siempre te prepara para desafíos fuertes, pero nunca pensé que uno de estos desafíos sería luchar contra mis propios defectos.

"Solo eres una mascota"

Palabras que fácilmente no dolerían tanto si no hubiera sido criado por Linda, pero no fue así, el destino quería que estuviera con ella ese día.

Perla y los niños prefieren estar con un ave como Roberto, pues el es alguien que es salvaje y que podría mostrar mucho su valor ante cualquier peligro de la selva.

En cambio yo solo soy un ave que tiene miedo hasta la más simple cosa, ni siquiera pude volar cuando era un polluelo.

Un llanto salió de mi picó mientras me tapaba la cara con mis alas, no podía creer que todo esto esté sintiendo ahora. Solo hay decepción por parte de ella y de los demás que me rodean.

"¿Qué estoy haciendo mal?"

...

III

[Perla]

Mi actitud de enojo seguía presente aun mientras volaba en dirección al nido de mi tía.

El no tiene que ir al viaje, lo único que causa es problemas, lo que menos quiero es que mis hijos pasen de nuevo por una vergüenza así.

No entiendo a Blu, pero siempre ha tenido una actitud egoísta, pone encima las cosas de humanos antes que nosotros. Los niños no deben vivir como humanos, ellos deben vivir como aves.

Blu realmente no puede entenderlo, su impedimento de ser alguien doméstico nubla su juicio.

Pero aun así, el siempre estuvo ahí para mi, incluso mostró valentía ante cualquier situación.

Me detuve por un momento mientras pensaba en las palabra "mascota", así le dije a Blu antes de irme.

Me duele bastante haberle dicho eso, pero él realmente me saco de mis casilla al decir esas cosas de mi padre.

Este viaje me hará olvidar por lo menos estos conflictos que tengo con él, seguramente luego de este viaje las cosas podrían cambiar para mejor.

"Cambiaran, pero para ti, será algo de dolor y arrepentimiento"

Voltee rápidamente mirando a todos lados, volví a escuchar esa voz, estoy segura de que alguien debe de estar por aquí.

- ¿Hay alguien aquí?

Pregunte en voz alta mientras miraba a mis alrededores, pero nuevamente el silencio no se hizo esperar.

Dudas pasaban por mi cabeza, no entendía por que estaba escuchando una voz tan extraña pero tan escalofriante.

Decidí ignorar esto, retomando mi vuelo pude llegar sin problemas al nido de mi tía Mimi, donde se encontraba arropando a los niños, se quedaron dormidos esperándome.

Mi tía noto mi presencia por lo me saludo en voz baja.

- Los pequeñines ya se durmieron esperando tu llegada.

- Si, se ven lindos jeje.

- ¿Quieres que los despierte?

- No tía, en realidad vengo a pasar la noche aquí con los niños.

Dije mientras miraba un cuarto que solía usar cuando visitaba a mi tía.

- ¿Por qué? ¿Paso algo?

La confusión de mi tía era evidente, a ella le había caído muy bien Blu, por eso preguntaba, ya que no es común que yo tenga peleas con él.

- No quiero hablar de eso tía en estos momentos, solo quiero descansar. Mañana tenemos un día importante y pienso aprovecharlo al máximo.

Diciendo esto, me fui a mi pequeño cuarto y me acosté.

Mi tía quería preguntar algo más, pero al ver que ya me había acostado, decidió guardarse sus palabras.

- Buenas noches Perla.

- Buenas noches tía.

Cerrando mis párpados, entre al mundo de los sueños para olvidar este pequeño episodio.

Mañana es un día para relajarse y pienso que es la oportunidad perfecta para poder pasar tiempo con mis hijos y con toda mi familia.

...

El momento que más he estado esperando se cumplió, y ahora me encontraba con mis pequeños y toda la tribu reunida en el pequeño lugar de reuniones.

Estábamos esperando a mi padre y Roberto quienes eran los únicos que faltaban.

Mi tía se encontraba a mi lado con una sonrisa de emoción, pues ella es la que más esperaba este viaje, pues tenía muchas cosas que enseñarnos y ver cosas nuevas.

- En verdad, ya quiero comenzar el viaje, siendo sincera, quiero encontrar nuevas plantas jeje.

La emoción de mi tía es muy inminente y me divertía verla así.

Mis niños también se encontraban alegres de comenzar este viaje con toda la tribu, se sentían demasiado ilusionados de ver que nuevas cosas podrían aprender y encontrar.

Carla y Tiago se encontraban tan alegres que ya querían partir volando, sobre todo Tiago quien se encontraba ya con las alas listas para salir volando en cualquier momento.

Sin embargo, vi que Bia se encontraba mirando a todos los lados, supongo que noto que Blu no se encontraba con nosotros.

- Bia, que...

- ¿En dónde está papá?

La pregunta hizo que tanto Carla y Tiago también comenzarán a notar que su padre no se encontraba con ellos, aunque antes pensaban que nos darían el alcance.

- Blu, no podrá acompañarnos.

- ¿Por qué?

- Bueno, el... se encuentra enfermo.

Dije la mentira más rápida que se me ocurría, aunque mi tía me miró extrañada por la respuesta mientras mi hija cambió su actitud.

- Entonces me quedaré aquí.

Bia dijo esto con una actitud seria y preocupada por Blu.

- No te preocupes, el se encontrará bien, me encargue de que Rafael, Nico y Pedro lo acompañen mientras no estemos.

A pesar de haber dicho esto, Bia aun no seguía convencida por mi respuesta, ella quería quedarse aquí con Blu, quería cuidarlo.

Cuando estaba a punto de decir algo, llegaron mi padre y Roberto, vi como él se unió a nosotros mientras nos dio una sonrisa.

- Hola Perliux, niños ¿Están listos?

Ante la pregunta de Roberto, los niños contestaron con mucha emoción, pero Bia lo dijo con un tono algo forzado.

- ¡Muy bien tribu, el día más esperado ha llegado! ¡No quiero darles un discurso tan grande! ¡Disfrutemos de este viaje como se debe y protejamonos todos juntos! ¡Somos spix! ¡Somos una sola fuerza!

Con las pequeñas palabras dichas por mi padre, todos gritaron de mucha emoción, haciendo que todos abrieran las alas y comenzaramos el viaje de nuestras vidas.

Roberto y yo nos miramos con una sonrisa y salimos volando con el resto de la tribu.

Mi tía con una sonrisa tomo el vuelo junto con los niños.

Pude ver como Bia le costó salir volando, pues la dudas de dejar a Blu aquí no eran buenas, pero gracias a mi tía, ella voló junto a nosotros.

Un viaje en donde la pasaremos genial, un viaje donde la familia estará más unida qué nunca, y sobretodo, un viaje donde me traerá recuerdos para poder atesorar en mi vida.

Recordando cuando hacíamos estos viajes con mi madre, ahora viajaré con mi familia, con los niños que amo y sobre todo para ser yo misma.

[Blu]

Pude observar como todos se habían ido a ese viaje, ver a Perla junto con Roberto y mis hijos yéndose hizo que mi corazón se partiera en pedazos.

Sin importar la discusión de ayer, ella se fue a ese viaje para pasar tiempo con su familia.

Dejando eso, volví al nido mientras las lágrimas caían de mi rostro. Al llegar, no pude aguantar más la impotencia, comencé a golpear lo que había a mi alrededor, comencé a tirar mi cangurera tan fuerte que hizo que mis cosas salieran de allí.

Salió el GPS mientras lo tomaba con las garras y lo tiraba en la pared del árbol haciendo que se apagará rápidamente por el impacto.

Sentir esta tristeza de ver como tu familia se va alejando de ti, en verdad duele mucho, golpeando el suelo con mis alas, no pude más.

Me tire al suelo mientras tapaba mi rostro con mis alas, ocultar las lágrimas que tenía en este momento, mientras recuerdos venían a mi mente.

Yo yendo con mis pequeños al viaje mientras Perla me mira con mucha alegría y ternura en sus ojos.

Pero esa ternura ya no existe en ella, no me ha mostrado nuevamente cuando vinimos a este lugar.

Ahora toda su atención esta en los niños, Roberto, su padre y los demás. Pero yo solo soy una carga para ella.

- Por que...snif...¡No quiero esto!...snif...¡Yo también quiero ser feliz!...snif...¡Solo quiero eso!

Grite y llore todo lo que pude, sabiendo que nadie me iba a escuchar, nadie vendría a consolarme. Ellos se fueron y me dejaron aquí.

"Solo quiero ser feliz"

...

Primer capítulo y ya me esta doliendo el corazón. Si te ha gustado házmelo saber en tu reseña y sobre todo, dejar a entender que quieren más de esta historia.

Lamentablemente no hay opción para poner imágenes, pero si hay, me avisan, por el momento las imágenes serán exclusivas en Wattpad.

Eso sería todo, nos vemos en el próximo episodio :3

Blu, tu eres alguien especial para todos, nunca estarás solo.