"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

~~~~ • ~~~~ Cambio de escenario o lugar.

Capítulo 5:

"¡Que la diversión empiece putitas!"

Adán no tuvo que decirlo dos veces, sus ángeles compartieron la misma sed de sangre demoníaca que la de el, haciendo que gritaron eufóricas con sus lanzas en alto, batiendo sus alas todas bajaron a las calles a empezar a atacar.

Y el caos no se hizo esperar en los siete anillos del infierno, las ángeles desataron su furia ante los demonios que no esperaba tal ataque, después de todo, aún faltaban cuarenta días para el exterminio.

Ante el ataque inesperado nadie estuvo a salvó.

"¡Ahg!"

"¡Espera-a!"

"¡No! ¡No lo hagas!"

"¡Piedad! ¡Por favor piedad!"

"¡AAHHHHHHHHH!"

Los gritos de pánico y horror de los demonios era como música para los oídos de los Ángeles, no tuvieron oportunidad alguna contra ellos, no con las armas celestiales con el acero que los quemaba y cortaba como si fuera de papel, para morir de forma rápida y brutal a manos de los de arriba.

Ser eliminado de la propia existencia, un castigo que solo un ángel podría darles a los demonios que tanto despreciaban.

"¡Oh mierda! ¡Oh mierda!" Velvette se retorció en los alambres, cayendo al suelo empezó a arrastrarse como un gusano hacia donde sea que pudiera esconderse, ella no quería meterse con los ángeles.

Era una Overlord, no una estúpida.

"Eh… ¿Jefe?" Millei apretó el agarre sobre su hacha insegura, la verdad también tenía mucho miedo, en siglos ningún demonio había podido matar a un ángel, "¡Jefe!" grito en pánico cuando vio a un ángel venir hacia ella.

"¡Muere pequeña basura!" una de las tantas Ángeles exterminadoras estaba a punto de asesinar a la pequeña diablilla con su lanza o al menos iba hacerlo hasta que alguien la tomo de su lanza, "¡¿Qué ca-"

De una dura cachetada la chica ángel salió volando, estrellándose contra un edificio.

Todas las ángeles en el anillo del orgullo se detuvieron al instante y miraron con incredulidad al demonio que acababa de golpear a una de sus hermanas como si fuera solo un niño malcriado.

"Ángeles…" mirando con desdén la lanza de metal divino, Naruto la apretó con tanta fuerza que la destrozó ante la mirada de shock de las ángeles, "… no me impresionan"

"…" Velvette dejo de intentar huir, con su boca abierta a más no poder le costó creer lo que acababa de ver.

¡Ni siquiera un maldito Overlord podría quitarle la lanza así a un ángel y golpearla como si fuera una puta pelota!

Un sentimiento de atracción y excitación hervía dentro de la Overlord que parpadeó cuando sus ataduras fueron desatadas.

"Cumpliste, ahora vete" gruñó Naruto al enredar el cable de nuevo a su mano y guardarlo.

No tenía que decirlo dos veces, Velvette tomo su teléfono y escribiendo rápidamente desapareció, dejando atrás su teléfono que explotó en pedazos.

"Miren nada más…" Adán se acercó volando y negó con la cabeza al ver a una de sus ángeles salir apenas de entre los escombros, otras dos chicas la tuvieron que tomar y llevársela de nuevo al cielo, "¡¿Y tu quien carajo eres?!"

"Te puedo preguntar lo mismo, ¿Quién se supone que eres tú?" pregunto serio Naruto que extendió su brazo y dejó que Millie se trepara a su espalda.

"¡¿Cómo que quien soy yo?!" Riendo de forma ruidosa y arrogante, hizo que sus ángeles volarán a su alrededor como si fueran abejas, haciendo que su hacha se volviera una guitarra, Adán empezó a tocar, "¡Yo soy el primer humano! ¡Soy el padre de la humanidad! ¡Soy-"

El ángel grito cuando un pedazo de lanza fue arrojado a el, más específicamente a su amada guitarra que para su horror fue partida a la mitad.

"No se es necesario cantar para presentarse" dijo irritado Naruto.

"¡Malnacido hijo de puta! ¡Te voy a matar!" juro causando que todas sus chicas rugieran de acuerdo, igual de enojadas por la interrupción de la presentación de su jefe.

Ellas también tenían un papel importante de canto y coreografía en la canción de Adán.

Con calma el shinobi suspiro ante la reacción de los ángeles.

Sus emociones eran diferentes a los demonios.

Estaba lejos de ser tan tóxicas y sucias como la de los demonios. Sin embargo tampoco eran muy diferentes, porque lo sentía en cada una de ellas.

Odio.

Mucho odio contra los demonios.

Y una sed de sangre enfermiza por bañar sus armas con las sangres de sus presas.

Cada vez estaba más decepcionado de la otra vida. Incluso en su cultura los ángeles eran seres amorosos, nobles y puros. No veía eso.

En especial de parte de este hombre llamado 'Adan'. Su sola presencia desprendía tanto odio y resentimiento que pocas veces presencio.

"Millie" llamando a su pequeña secuas, la bajo de su hombro y la puso en el suelo frente a el.

"¿Si Jefe?"

"Dame tu mano"

Obedeciendo de inmediato, Millie se asombro cuando un poder que nunca antes había sentido recorrió sus venas, un aura burbujeante de chakra la rodeó dándole la forma de un zorro de una cola.

"…" Adam dejo de lado su furia, ahora estaba alerta al igual que todas sus demás chicas, en especial la que era su mano derecha.

"Ese es…" Lute trago saliva y se aferró con más fuerza a su lanza, "¡Es-s… es… un usuario de chakra!"

"¡¿Oh enserio?! ¡¿Lo dices por la puta energía burbujeante roja que hace que todos se cagen?! ¡Gran deducción pechitos duros!"

Lute gruñó furiosa por la falta de respeto, agitando su lanza golpeó a Adán en la cabeza, "¡No es tiempo de tu puto sarcasmo! ¡Al carajo los demonios! ¡Hay que matar a ese…"

Tanto Adán como Lute se quedó fríos cuando sintieron unas manos sobre sus hombros, dándose la vuelta lentamente vieron al Shinobi parado detrás de ellos.

"Hablan mucho"

En un movimiento rápido, tanto Adán como Lute recibieron un golpeó en el rostro tan poderoso que destrozó sus máscaras, los dos fueron mandados a volar a direcciones opuestas, estrellándose contra los edificios, que se derrumbaron sobre ellos.

"¡Ja! ¡Eso jefe!" Millie sintiéndose imparable corrió como una bestia, esquivando a las ángeles que intentaron atacarla, giro y golpeó a una de ellas, rompiendo su lanza y también a ella.

No sabía que era este poder que corría por su venas. Jamás había sentido algo así, tanta energía, tanta fuerza. No creía que nadie podría oponérsele.

"¡Es hora de invertir los papeles palomas hipócritas!" Riendo Millie se enfrentó a varios de los ángeles, mientras que otros cientos rodearon a Naruto que levantó la cabeza cuando una lluvia de lanzas le cayeron encima.

Hinchando su pecho, soplo una ventisca que se volvió un gran remolino que no solo rechazó las armas divinas, también derribo a muchas de las ángeles al suelo, que sin rendirse corrieron para atacarlo de nuevo.

"¿Y se supone que ellas ayudaron a purgar a los shinobis?"

Ataques frenéticos y directos.

Poca coordinación y trabajo de equipo.

Estás ángeles exterminadoras dejaban muchas dudas de como los usuarios de Chakra fueron vencidos.

Cansado de jugar a la defensiva, el último shinobi tomó un par de lanzas que le arrebato a alguna de las tantas atacantes, rompió los palos y las volvió unas cuchillas que uso para bloquear cada intento de corte, y contra atacar con demoledores golpes.

Las ángeles no tuvieron oportunidad, sus máscaras y huesos se rompían ante los nudillos de un oponente que tenía una técnica y habilidad deslumbrante, que ni siquiera dejo que pudieran hacerles un rasguño.

Pronto cientos de las ángeles cayeron derrotadas.

"¡Perras inútiles!" mandando a volar los escombros, Adán hizo aparecer una gran hacha, desplegando sus alas fue un destello de luz que apareció ante el shinobi que tuvo que bloquear un corte mortal.

El impacto destrozó las calles y dejó al shinobi aturdido, tuvo que centrarse rápido cuando Adán apareció de nuevo sobre el y con una sonrisa maniaca bajo su hacha, dando un gran corte que fue esquivada en el último segundo y en su lugar un gran edificio fue cortado a la mitad.

Saltando de un lado a otro, Naruto frunció el ceño al ver el daño que hacia esa hacha celestial, que sin duda era demasiado poderosa, considerando que tenía un corte superficial en su pecho de la que goteaba sangre.

Las armas celestiales tenían un efecto atroz contra los demonios. Fue una conclusión obvia por la facilidad con la que fue cortado, el tiempo que tardaba en curarse y el ardor del corte.

Sin duda, esa arma celestial hecha de acero divino, era algo que tendría que tener en cuanto, evitar el hacha era algo que tendría que hacer.

"¡Jajaja! ¡Ya no eres tan rudo ahora!" se burló el primer humano que levantó su arma y está fue envuelta por un brillo cegador, "¡Soy el maldita Adán! ¡El primer humano! ¡El mejor! ¡Todos vienen de mis huesos! ¡Son mis hijos de puta!"

"Solo tengo un padre, y tu no le llegas ni siquiera a sus tobillos"

"¡Ahggh!"

Adán nunca pensó odiar tanto a un demonio antes, era diferente a cualquier otro que se haya enfrentado antes.

Esa calma.

Esa serenidad.

Esa mirada…

Un escalofrío recorrió la espalda del primer humano al ver una silueta angelical detrás de ese demonio, que se parecía demasiado a alguien que siempre lo hizo sentir tan inferior.

¡Como un demonio podría parecerse a Miguel!

Negando con la cabeza con furia. Agitó sus alas, volvió a ser un destello de luz y con el mismo ataque de antes, solo que más poderoso por fin alcanzó a su objetivo, cortándolo a la mitad y haciendo que toda una manzana de edificios cayeran.

"¡AJAJAJA! ¡TOMALA PUTO!" Riendo victorioso Adán elevó su hacha, hasta que noto algo, en vez de ver un cuerpo desmembrado, vio dos partes de un tronco de madera. "¿Qué hace un tronco de madera aquí?"

"Una distracción"

"…" Adán rugió de dolor cuando una lanza atravesó su estómago, dándose la vuelta vio en shock al Shinobi que soltó la lanza y lo dejo caer al suelo, goteando sangre dorada, el ángel se arrastró por el suelo, "Bastardo-o… me apuñalaste-e por la espalda"

"¿Y me dirás ahora que esto era un combate de verdad?" Naruto tomo el mango de la lanza y la retorció haciendo gritar a Adán, "Solo fuiste un estúpido arrogante dando cortes con un juguete grande, no mereces mi tiempo para una pelea de verdad"

"¡Ahg…!"

"Ahora, estas vivo porque así lo quiero, y me vas a responder… Hinata Hyuuga, Boruto Uzumaki, Himawari Uzumaki, ¿Ellos están en el paraíso?"

"Ja…" con sangre bajando de su boca y más llegando a su pulmones, no impidió que Adán empezara a reír, "¡JAJAJAJAJA!"

Naruto apretó los dientes y por más tentado que se sienta de pisar la cabeza del ángel, se tuvo que contener, "¡Respóndeme!"

Cegado por su enojo, el shinobi apenas pudo reaccionar cuando Lute le saltó encima, logro desviar la lanza que casi atraviesa su corazón, no espero que la chica ángel fuera tan fuerte.

"¡Deja a Adán en paz!" rugió Lute que sacó una daga para intentar apuñalar la cabeza de su objetivo, que con una fuerza abrumadora la tomo del cuello y la estrelló contra el suelo, "¡Ahg!"

Habiéndose sacado a la ángel de encima, Naruto volteo a mirar a donde había dejado a Adán, sin embargo solo encontró una lanza cubierta de sangre divina.

"¡Bien hecho Lute!" elevándose cientos de metros sobre el suelo y cargando su hacha sobre su cabeza. Adán empezó a acumular una cantidad de energía gigantesca en la hoja de hacha, "¡Por eso siempre serás mi favorita!"

"¿Señor-r?" adolorida la ángel se levantó como pudo, para ver a sus demás hermanas también recuperar la conciencia, "¿Señor Adán?"

"¡Gracias por tu fiel servicio!"

Todo el cielo del anillo del orgullo fue iluminado por el hacha de Adán, que no dudó en bajarla y desatar una ola de pura energía celestial que fue directo hacia Naruto que estaba de pie en medio de la calle entre las ángeles.

A cuadras de distancia, Millie miro horrorizada tal ataque, "¡JEFE!"

Toda la cuidad fue sacudida, los demonios cercano a al zona del combate intentaron en vano huir, fueron vaporizador instantáneamente por el poder purificador dorado que fue borro todo a su paso en un rango de un kilómetro cuadrado.

Millie grito cuando fue alcanzada por la explosión.

Paso un minuto entero hasta que la luz se apagó, y en el cielo estaba Adán, agotado, herido y costándole estar en el aire.

"Tienes lo que mereces infeliz…" murmuró al apreciar lo que había hecho, dejo un círculo de un kilómetro de diámetro en medio de la cuidad del anillo del orgullo, uno tan profundo que ni siquiera se veía el fondo.

Dio un silbido, las pocas ángeles sobrevivientes acudieron a el, ayudándolo a subir de nuevo al cielo por un portal.

En los demás anillos las ángeles exterminadoras también se fueron, dejando al infierno en un caos completo.

Entre los escombros del borde del cráter, un capullo hecha de chakra se abrió, dejando salir a una mareada Millie que rodó por el suelo, perdiendo el manto de chakra miro a su alrededor confundida.

"¿Jefe?" recuperándose del shock se puso de pie y corrió a toda velocidad, "¡JEFE!" grito con todas sus fuerzas al mirar hacia abajo de la infinita oscuridad del cráter, "¡JEFE!"

Cuando estaba a punto de saltar para ir a buscarlo, vio una mano salir del borde del cráter.

Quemado y herido, un furioso Naruto salió del cráter, vapor salía de la todo su cuerpo que estaba cubierto de quemaduras de tercer grado, nueva piel reemplazo los tejidos muertos y aunque tardo unos minutos cayó sentado sin aliento.

Eso fue en verdad peligroso, no espero que ese desgraciado arrogante pudiera lanzar un ataque como ese.

"¡Jefe!" Millie de inmediato lo abordo, abrazándolo y frotando su cabeza contra su pecho, "¡No vuelvas a hacer eso nunca!"

Con una ligera sonrisa el shinobi acarició el cabello de la chica, que lloraba en su pecho.

~~~~~ • ~~~~~

"¿Madre?"

Las hijas de Carmilla miraron preocupadas a su madre, las dos de inmediato corrieron hacia su oficina apenas escucharon el caos que se había desatado afuera en la cuidad en el anillo del orgullo.

Ella estaba de pie, mirando por la ventana, que se podría apreciar claramente el gran cráter, o para ser más específico al hombre que había sobrevivido a eso.

"Ese tipo…" La demonio trago saliva en shock, pudo ver claramente como se curaba y se ponía de pie, para hablar con esa pequeña diablilla que la acompañaba como si nada.

El se enfrentó al ejército de exterminación.

¡Al Maldito Adán!

No solo sobrevivió.

No solo derrotó al ejército.

Había herido a alguien que por siglos se creyó intocable.

Sobrevivido a algo que solo los Pecados capitales podrían haber enfrentado. Y dudaba que salieran tan bien parados como el.

Volteando miro a sus hijas, que le dieron una mirada temerosa, con una sonrisa amorosa que solo una madre podría tener las tranquilizó y las abrazo, "Ya paso… todo está bien"

Cuando vez a tu enemigo caer.

Te unes del lado que lo causo.

O al menos te aseguras de caerle bien.

Tendría que reunirse con este nuevo demonio.

El último usuario del chakra.

~~~~~ • ~~~~~

"¡Jajaja! ¡El novato ah marcado su territorio mis radios oyentes!" desde el techo de su torre de radio, Alastor daba su programa diario del tema que seguro estaría en boca de todos, "Que simpático muchachos, darles una bienvenida maravillosa a nuestros asediadores los ángeles exterminadores, que por primera vez en siglos, se irán con más bajas entre sus propias filas que los demonios que se suponen venían a matar, que trágicamente… beneficioso para nosotros, ¿No lo creen?"

El aura del demonio de la radio se agitó, podría sentir el entusiasmo de sus radioyentes que estaban tan felices como el de que por una vez los ángeles hayan sido quienes terminaron comiendo el polvo de la derrota.

Con su sombra extendiéndose en toda su torre, su poder crecía a cada segundo por la cantidad de demonios que lo escuchaban, el interés del nuevo favorito del infierno era simplemente delicioso.

Riendo de forma macabra jugo con su micrófono, mirando a los lejos como el último elemental se retiraba con su secuas y un bulto que lo hizo levantar una ceja.

"Si… si… ¡Cada día mejora más! ¡Como cada día la humanidad haya arriba está cerca de llegar a su fin! Ah~ estaremos un poco apretados con tanta carne fresca, pero no hay que quejarse de lo que es útil y entretenido, claro que no" reapareciendo dentro de la cabina de su torre, clavo sus garras en los controles, "Grandes cambios vienen mi público… y no hay que perdernos de lo divertido que será verlo"

~~~~~ • ~~~~~

"Oh no…" Charlie desde la torre más alta de su hogar, tuvo que contener sus lágrimas al ver el gran desastre en el centro de la cuidad del anillos del orgullo.

Tantos caos.

Tantos de su gente muerta.

Tanto mal.

Fue difícil para ella no llorar por ver cómo una vez más, otro ataque de los ángeles dejaban a su hogar en ruinas.

Por su parte, Vaggie tenía una mirada oscura al ver algunas plumas que fue lo poco que quedó de las ángeles del exterminio, volar con la corriente del viento.

~~~~~ • ~~~~~

"¡Ahg! ¡Cuidado imbéciles!"

En el paraíso, más exactamente a la sala de recuperación privada, varios ángeles atendían a un herido Adán, que gritó de dolor cuando su ropa fue retirada y la gran herida de su estómago quedó expuesta.

De las manos de los ángeles salió una luz dorada que en segundos cerró la herida, para dejar como nuevo al primer humano, que se levantó de la mesa y los saco de su camino.

"¡Quiero algo fuerte! ¡Ese hijo de puto casi me arranca el hígado!"

Antes que cualquiera de los ángeles sanadores pudieran cumplir sus demandas, las puertas de la habitación se abrieron de golpe, dejando ver a una furiosa Será.

"Todos fuera, ¡Ahora!"

No tuvo que decirlo dos veces, todos huyeron a excepción de Adán, que reviso varias gavetas de la sala médica y encontró alcohol etílico, "Maldita sea, lo malo del cielo es que no tienen bebidas alcohólicas de verdad, solo mariconadas"

"…"

"¿Y por qué me miras así?"

"¡Has fracasado Adán!"

La sala entera se sacudió cuando la arcángel desplegó sus seis alas y unos ojos salieron de los rizos de su cabello.

"¡¿Eh?! ¡¿Está vivo?! ¡Prácticamente hice una Nagasaki a su puta cara y sobrevivió! Hijo de puta"

"Debiste haberte quedado, ¡Acabarlo!"

"¿No? ¿En serio? ¡Tenia un puto agujero en el estómago! ¡Un consolador gigante podría haber pasado por ahí sin problemas!"

Sus comentarios se detuvieron cuando Será se acercó peligrosamente a su rostro, "No confundas mi paciencia con respeto Adán, eres poderoso… solo por la bendición de los Arcángeles, al final… sigues siendo solo… un humano"

Eso definitivamente asustó a Adán que tosió incómodo, "Si-i, WOW, creo que me excedí, eh… una disculpa y todo eso, ¡Pero no me dijiste que ese hijo de perra iba ser tan poderoso!"

Calmándose pero aún seria, Será se dio la vuelta y respiro hondo, mirando por la ventana como las calles concurridas estaban llenas de sus preciados y puros ángeles.

"Lo subestime… al parecer las historias de Gabriel no fueron solo tonterías, y aunque pensé que bajaría como un pecador más, sus rasgos de Jinchiruki aún los conserva después de la muerte"

"Es más difícil de matar que todos los otros hijos de puta, pero lo haré, ¡En el próximo exterminio! Solo necesito que crees más ángeles exterminadores y dales unos asteroides o algo así para hacerlas las fuertes, porque me decepcionaron mucho"

Dejando escapar un largo suspiro, Será se frotó la frente, "La próxima vez no habrá fallas, tenemos que hacer esto rápido y sin hacer revuelo, los usuarios del chakra tienen que desaparecer de una vez por todas"

"¿Y por qué no mandamos al favorito de Dios para hacerlo? Ya lo hizo una vez y vaya que los hizo mierda, ¡Jajaja! ¡Los hizo polvo a todos!"

Sera frunció el ceño, "El no tiene tiempo que perder con esto, muchos menos el mancharse las manos, Miguel… no tiene que saber de esto"

"Ahg, bien, pero quiero un hacha más grande, quiero cortar la cabeza de ese hijo de puta yo mismo"

Fin del capítulo.

No le tenía planeado un cap para hoy, pero cuando abrí mi Instagram me enteré que murió Toriyama.

EL Toriyama.

No te lo puedo creer boludo, encima a sus 68 años, para mí una edad corta. Nadie de seguro lo esperaba y bueno, que se le va hacer, se nos fue otro grande del anime.

Me re saco de honda la noticia y hasta le mandé un WhatsApp a Zero, el tampoco ni enterado, en media hora de clase le avisé que se murió Toriyama.

Todavía quedé con la bronca de saber que el autor de Berserk también murió, justo cuando me puse al día con la obra y re enganchado me enteré que falleció.

No hay más vuelta que darle muchachos. Que en paz descanse el más grande entre los grandes, bueno, en momentos así hay que agradecer estar vivo y bueno, como los viernes no trabajo, si tienen algo para pasar el buen rato, háganlo, yo por lo menos escribo y justo en esta tarde termine el capítulo de hoy.

Disfruten del capítulo muchos.

PSD: Le pregunte el personaje favorito a Zero de Dragon Ball y dijo Tenshinhan. El mío siempre va ser Bardock. De paso dejen el nombre de su personaje favorito muchachos.

Mirio fuera.