El último día de la semana había llegado, el ambiente se percibía fresco con su cielo claro y despejado. Despues de una larga semana nevada, finalmente la ausencia de su fria capa invernal permitía que el suelo se mostrara nuevamente en su estado natural.
Después de un análisis detenido, el grupo de estudiantes decidió dirigirse hacia los aposentos de los piratas, donde quedaron impresionados por los restos de los dos castillos que habían sido destruidos durante la guerra de nieve y el espectáculo de fuegos artificiales. Ahora solo descansaban los restos de unos cuantos muros protegiendo al Thousand Sunny Go.
El ver el campo como una zona de guerra, incitó a Kaminari a compartir su idea con sus compañeros, comenzando rascar los restos de los muros en búsqueda de recolección de escarcha para formar esferas e iniciar todos, un bombardeo de nieve atacando al barco pirata y despertando a sus pasajeros.
Los primeros en salir, fueron el par de comandantes problematicos que parecían molestos por el repentino asalto, mientras Luffy comenzaba a crear una bola de nieve gigante, recorriendo toda la cubierta rodando una esfera que crecía cada vez más en tamaño hasta lanzarla a los chicos y dejando enterrados a tres de ellos.
Franky no tardó en verse motivado por la iniciativa de los héroes e improvisó una metralleta de nieve, apuntado con ella a los jóvenes, transformando así lo que comenzó como una inocente broma en un campo de guerra con varios cuerpos sepultados bajo la helada escarcha, con solo sus pies saliendo de ella.
Ante la escena y aplastante victoria; Luffy, Franky y Ussop no podían parar de reir, viendo como los chicos luchaban por salir de la nieve.
—Recuérdenme... ¿Quién fue el de la brillante idea de lanzarle bolas de nieve? —Preguntó Jiro quien luchaba por desatascarse.
—Kaminari.
—Se suponía que tenía que ser divertido, no doloroso...
—La mía tenía una piedra. —Lloriqueó Koda, sobando su frente
—No tenemos piedras en el barco, ¡No seas llorón! —Reprendió Luffy
—Con que ahí terminó mi vaso... —Pronunció Usopp —¿Qué los trae por aca?
—Nunca nos visitan... Siempre es al revés.
—Bueno... Normalmente salen en fin de semana y por el entramiento que nos dieron la semana pasada no pudieron... —Explicó Yaoyorozu
—Y últimamente All Might ha estado estresado, por lo que no ha cumplido con llevarlos a la ciudad las últimas semanas... —Añadió Midoriya
—Asi que... Redoblen los tambores. —Pronunció Mina de manera juguetona, siendo Kirishima, Sero y Denki quienes hicieran percusiones con sus piernas. —¡Decidimos darles un tour por la ciudad! —Ochako, Mina, Toru y Aoyama saltaron con los brazos en alto.
—OH, QUE SORPRESA... ¿QUE HACEN AQUÍ? —All Might arribó tras ellos, viendo a los chicos escarbando tratando de sacar a los sepultados.
Los jóvenes héroes voltearon para responder, solo para encontrarse con su profesor luciendo más desgastado de lo habitual. Su cabello se notaba seco, sin brillo, más esponjado de lo normal, y las ojeras marcaban profundamente su rostro, revelando signos notables de fatiga.
—Zombi... —Pensaron afligidos los presentes.
—¿Está bien? Se ve terrible. —Comentó Iida, a lo que el héroe solo asintió con un débil movimiento de cabeza, para despues esperar por la respuesta.
—Pensamos llevarlos al centro... A Shibuya, talvez cambiar de ubicación a Minato o Akasaka... Se que habrá puntos de interés para algunos de ellos. —Respondió Momo, con un plan en mente.
—All Might —Llamó el representante. —Puedes descansar, nosotros nos encargamos.
—NO SÉ SI PUEDA DESCANSAR... PENSABA SALIR EN BÚSQUEDA DE... —Pronunció inquieto, abriendo su palma y mostrando la Vibre Card que continuaba apuntando al Noreste.
All Might quedó inmerso en sus pensamientos con la mirada perdida en el trozo de papel, incapaz de escapar de la inquietud lo abrumaba. Comprendía a la perfección las razones detrás del comportamiento peculiar de la asistente el último día que la vieron. Sumado a las decisiones irracionales bajo presión y la compulsiva necesidad de actuar como cebo, estaba convencido de que definitivamente se podría encontrar en problemas; y el hecho de que dejara atrás sus identidades, llevando consigo el contenido desconocido de sus cajas ahora vacías, solo intensificaba su inquietud.
—HAN PASADO CUATRO DÍAS Y AUN NO HAY RASTRO DE ELLA... LO UNICO QUE TENGO QUE LOGRA CALMARME, ES QUE SU VIBRE CARD SIGA COMPLETA. —Pronunció afligido, para despues ver al trio que visitó Ciudad Deika. —¿TIENEN ALGUNA PISTA? —Preguntó a Deku y Todoroki que no se apartaba del lado del cocinero.
—En la dirección que nos proporcionó tampoco se ha reportado.
—NINGUNO DE LOS PRISIONEROS RECIENTES PARECE SER ELLA.
—Necesitas relajarte All Might-san, ¿Por qué no nos acompañas? —Invitó el esqueleto.
—¡IR CON USTEDES ES TODO LO CONTRARIO A RELAJACIÓN! —Reaccionó escupiendo sangre.
Nami se acercó solicitando la Vibre Card, a lo que el rubio extendió su mano para que la pudiera tomar, más la navegante se limitó simplemente a observarla.
—Dijiste que apunta a una sola dirección ¿No es así?
—¿Que tan lejos queda Shibuya? —Preguntó el timonel.
—DOS HORAS EN TREN, U HORA Y CUARENTA EN AUTO.
—Entonces podría servirte como referencia... Si la vibre card deja de apuntar a la misma dirección durante el trayecto, podemos comenzar a trazar una linea para saber dónde se encuentra... Si no cambia de dirección, significa que debe estar incluso más lejos. —Explicó la navegante con total confianza, cruzandose de brazos con una ligera sonrisas. —Con eso tendremos al menos una idea de que rumbo debes tomar.
Toshinori dejó salir el aire, observando cómo no cambiaba el trozo de papel de dirección, para despues guardándolo nuevamente en el bolsillo en su chamarra.
—DE ACUERDO... —Aceptó la propuesta, continuando en dirigirse a los estudiantes. —PERO USTEDES SE ENCARGAN DE CUIDARLOS. SERÉ SU CARTA DE EMERGENCIA SI SE LLEGAN A METER EN PROBLEMAS.
—Pobrecillo —Murmuró apenada Tsuyu al ver como continuaba sin descansar.
—VOY POR UN AUTOBÚS.
Nami volteó con el grupo, con un satisfactorio gesto.
—Solo querías quien nos llevara. —Respondieron sus nakamas con sudor deslizándose por sus cabelleras.
Los escaparates de las tiendas decorados con temáticas navideñas, destellaban con sus brillantes adornos y luces parpadeantes. Las calles parecian animadas con transeúntes abrigados en ropa invernal, con el bullicio de la ciudad mezclandose con risas y charlas festivas. Los árboles a lo largo de las avenidas están decorados con luces centelleantes, y los anuncios luminosos añadieron un toque adicional de vida a la zona urbana.
El espíritu festivo envolvió a los héroes, inspirándolos a emprender distintos caminos para realizar las compras navideñas, asignando a cada uno de ellos la tarea de guiar a uno de los piratas, enfoncandose por asignar a Sero como el guía de Zoro, atándole la punta de sus cintas en la muñeca, dándole tirones ocasionales cuando cambiaba de rumbo.
Luffy en cambio, entraba a cuanta tienda encontraba, teniendo que seracompañado por Kirishima, Bakugo y Denki, que a pesar de llevar con ellos al mas rebelde, solo visitaba las tiendas que mas atrapaban su curiosidad, dejándole rápidamente sin dinero; por lo que se dieron a la búsqueda de la navegante, responsable del manejo de efectivo.
La navegante explotó de coraje al ver las bolsas de compras con artilugios innecesarios y sin sentido, golpeándolo con la palma la frente en repetidas ocasiones, ocasionando que Ochako rompiera en risa por la relación entre ambos.
Franky continuó sus pasos siguiendo a Iida, inicialmente creyendo que sus movimientos robóticos indicaban un entusiasmo por la tecnología. Sin embargo, su optimismo se desvaneció rápidamente al darse cuenta de que Iida no era capaz de responder a sus preguntas de tecnología moderna. Lamentándose de no tener a Mei en el grupo, quién le solía ofrecer información de sus preguntas a lujo de detalle.
Los dos mayores del grupo permanecieron juntos, pareciendo una dupla de disfraces por el delgado héroe que parecía Zombi y el esqueleto a su lado, atrayendo ambos la atención de los transeúntes. El par de esqueletos se dirigían a una tienda musical, donde Toshinori solicitó un favor del pirata, que lo resolvió al instante al anotar algo en una hoja de papel, cual le hizo entrega.
Saliendo de la zona de compras donde las calles eran destinadas solo a peatones, se toparon finalmente con un museo al otro lado de una avenida principal. Iida como representante de seguridad, reunió a los piratas dando una detallada explicación de las señales de tránsito, luces y significados, tomando todos atención, incluyendo Luffy que era obligado por Bakugo que le abría los ojos a la fuerza para que observara a su compañero.
Tokoyami, Kirishima, Franky, Chopper, Usopp, Brook y Luffy se dirigieron entusiastas al área del museo donde les permitían tomarse fotos usando armaduras. La mayoría de ellos eran capaces de usarlas, lo que desanimó a Franky, que no podía entrar en ninguna.
Desilusionado, se dio la vuelta mientras los demás disfrutaban de la experiencia, volteando de reojo quedando impactado por el resplandor del cobre y acero, reemplazándola rápidamente su triste gesto con ánimo y lágrimas, al ver a los demás lucir las armaduras e imitando su típica señal de SUPER, por él.
—¡WAAAAAAAAH! ¡No saben cuánto los amo, chicos! —Lloriqueó el carpintero.
Robin, Momo, Iida, Deku, Ochako y Nami visitaron el Museo Kokugakuin de Arqueología Japonesa, seguidos por el resto del grupo. Exploraron diversas partes históricas que desconocían, remontándose a los primeros días del país bajo el nombre de Japón. Sin embargo, lo que más atrajo su atención fue un tapiz que representaba a un dragón rosa emergiendo de un cráneo cornudo de gran tamaño.
—¡Oi, Es Momo en Onigashima! —Se acercó corriendo Luffy con su armadura con casco con forma de escarabajo.
—¡Calla sombrero de paja! —Silenció Iida cubriéndole la boca. —¿De dónde sacaste esa armadura?
—Ah, si... La debo devolver.
—¿Onigashima? —Cuestionaron en voz baja los estudiantes.
—Ahí residía Kaido y sus piratas. —Explicó Robin
—¿En el cráneo?
—Si.
—¿Que tan grande era? —Cuestionó Yaoroyozu
—Lo suficiente para poder llevar a cabo una guerra con cuatro mil personas... La gran guerra para liberar Wano fue ahí y el dragón retratado en el tapiz, es su actual shogun... Actual en nuestro tiempo.
—Es un niño llorón de ocho años.
—Físicamente, ya no es un niño, Luffy...
—¡¿Un niño de 8 se involucró en la guerra?! —Los cuatro estudiantes no pudieron evitar alzar la voz, sorprendidos.
—En realidad fueron dos... Y sin ellos no hubiéramos ganado. —Agregó Nami, dejando afligidos a los héroes, al percatarse que pequeños niños se vieron involucrados en una guerra que no debían haber luchado.
—Momo... —Pronunció la arqueóloga. —¿Podrías narrarme la historia de su País?
La mirada de Yaoyorozu se iluminó, al ser solicitado su conocimiento por alguien tan brillante como Robin; sintiéndose profundamente halagada, llevándola a un recorrido guiado por ella hacia todas las exhibiciones.
—Podemos incluso ir saliendo de aquí a Akasaka... No queda muy lejos y tiene edificaciones históricas usadas actualmente, que creo serán de tu interés.
—¿Qué hay en Akasaka? —Preguntó Nami
—Ahí se encuentra el Palacio donde residían los Emperadores. —Respondió Yaoyorozu, captando la atención de Robin que deseosa de conocer más sobre su historia, aceptó la idea.
—¿Será el castillo de Momonosuke?
—Lo dudo... Su construcción se realizó hace un par de miles de años y si está registrada en los libros.
Tras el final de la excursión por el museo, el hambre se apoderó de ellos, por lo que cambiaron de ubicación, dirigiéndose por experiencia a un buffet para poder comer sin limitaciones. Sin embargo, la insaciable gula del capitán provocó fueran vetados, corriéndoles a todos por el enardecido gerente que no podía dejar de pensar en las perdidas que el joven le habia provocado. Guiándolo a tomarle foto y así no les permitieran ingresar nuevamente.
Que el rostro del Emperador fuera registrado y exhibido a numerosas personas, encendió los focos rojos en los héroes que debían idear como eliminar esa información.
—¡Idiota de goma! Toca su teléfono. —Empujó Bakugo, a lo que Luffy se vio interesado por el brillante dispositivo que podría doblarse en manos del gerente.
—¡Woaah! ¡A ver! —La curiosidad del capitán lo guio a tocar el aparato, que estalló en el acto. Dejando tras él, una nube de humo negro y el rostro del gerente cubierto de hollín, mientras Denki entre risas, tomó la mano de Luffy para sacarlo del restaurante.
—LO LAMENTO... ESE JOVEN TIENE MANOS DE ESTÓMAGO; DESCOMPONE TODO LO QUE TOCA. —All Might expresó apenado, rascando su nuca y sacando su billetera para recobrarle el dinero de su teléfono, mientras los jóvenes héroes llevaban lejos a los piratas.
No tardó mucho en que el maestro se reuniera en un cruce con su grupo, agradeciendo la torpeza del capitán, en lugar de regañarlo.
Las luces del semáforo peatonal cambiaron a verdes y el entusiasmado chico sombrero de paja corrió al otro lado. En un abrir y cerrar de ojos, una sombra oscura se cernió sobre la escena. Una camioneta blindada se acercaba velozmente, sin mostrar signos de disminuir su velocidad.
La tragedia se desató cuando el vehículo impactó violentamente contra Luffy, dejando a los demás testigos que paseaban por la avenida y algunos de los héroes en estado de shock, con excepción de los piratas, Bakugo, Tokoyami y Toshinori que les recorrió una gota de sudor ante la escena.
El sonido del impacto resonó en la calle, y un silencio siguió mientras todos procesaban el accidente que acababan de presenciar, hasta que un agudo y ensordecedor grito proveniente de los aterrados transeúntes, dominando la escena, dejando en claro la conmoción y el horror que se apoderaron del lugar.
—¡LUFFY! —Gritaron los estudiantes espantados ante como la camioneta blindada centró al joven, siendo atrapado por los neumáticos, que, con su cuerpo de goma, terminó por enredarse en la tracción trasera, ocasionando un frenado abrupto en el vehículo que terminó por levantarse girando en el aire.
—Ves como todos gritan y nadie hace nada. —Apuntó Zoro repugnado a los testigos que quedaron en sus posiciones, apuntando mientras gritaban.
—Tch... Ni siquiera usan su teléfono para pedir ayuda... Estan tan acostumbrados que alguien se encargue de sus problemas, que ni siquiera se movilizan. —Señaló Sanji molesto, presionando con los dientes su cigarrillo.
El automóvil se levantó en el aire, a punto de rodar y poner en peligro a los demás vehículos que habían respetado la señal de tráfico. Sin embargo, unos látigos negros surgieron de las muñecas de Deku y lograron atraparlo antes de que cayera. Con movimientos precisos, reposicionaron el vehículo, dejándolo acostado con los neumáticos apuntando al cielo.
—¡¿POR QUÉ NO LO DETUVO O ESQUIVÓ?! —Señalaron con las palmas Sero y Mineta, al joven enredado.
Los piratas voltearon a verse entre sí y dijeron al unisón. —Tenemos prohibido defendernos... Cualquier situación de peligro lo dejamos a los héroes. ¿Recuerdan?
—...
—No importa si nos golpean. —Agregó Brook
—O si matan a alguien frente a nosotros. —Continuó Franky
Gotas de sudor recorrieron los cuerpos de los estudiantes, mientras mantenian sus rostros en blanco.
—¡¿QUÉ CLASE DE REGLAS SON ESAS?! —Gritaron alterados, a lo que, en respuesta los piratas apuntaron a Yagi.
—NO FUE LO QUE LES SOLICITÉ... LA SEÑORTIA NAMI LAS ALTERÓ. —Pasó la culpa a la navegante que no se veía del todo satisfecha, ya que su capitán a pesar de que obedeció sus palabras al pie de la letra... Si lo deseaba, podía haber esquivado sin problema.
—Ese idiota solo debía saltar. —Gruñó Nami, golpeandose la cabeza con la palma.
—Las personas normales aquí no pueden saltar mas de dos metros Nami... Se metería en problemas. —Defendió Usopp
—Creo que están exagerando con sus limitaciones. —Todoroki interfirió
—AGRADEZCO QUE SEAN FIELES A SUS PALABRAS...PERO ESTO...ETO... —Pronunció dirigiendo su mirada a cada uno de los piratas, finalizando en Zoro y Sanji que voltearon con una ridícula expresión, levantando dos dedos en "V" en señal de vitoria.
—¡ESTAN DEMENETES!
—¡Una cosa es no defenderse y otra muy diferente es no esquivar! —Reclamó Bakugo entre risas y molestia, notando el limite que al que podía llegar la idiotez del capitán.
—Tratos son tratos.
—BUENO... LO ESTÁN CUMPLIENDO.
—¡NO TE LES UNAS! —Los estudiantes reclamaron con sus dientes afilados.
—ESTOS TIPOS SON UNOS COMPLETOS LUNATICOS.
—Ya lo sabíamos Sero.
Las puertas del automóvil se abrieron de par en par, y cuatro individuos intentaron escapar desesperadamente, más fueron detenidos rápidamente atrapados por Sero, que cerró la puerta y la aseguró con sus cintas, aprisionandolos dentro del vehículo, que debido a su blindaje. les impidia su escape.
La sombra de un ser alado se proyectó desde las alturas. Un joven con alas rojas descendió sobre la escena, observando cómo habían manejado eficientemente la situación deteniendo a los delincuentes sin causar daño a la propiedad ni herir a nadie. Para despues enfocar su atención en Shoji y Kirishima, quienes trabajaban para desenredar al joven elástico de entre los neumáticos, omitiendo ese último pensamiento de su mente.
—Jiro, deberías ayudarles... Se ve complicado, así como desenredar audífonos... —Apuntó Denki
—Tomaré eso como una ofensa... —Mencionó molesta perforando el timpano del rubio, para despues subir al auto a dar instrucciones.
Hawks descendió con gracia, aterrizando con las manos en los bolsillos de su chaqueta, exhibiendo su actitud despreocupada.
—¡HAWKS... HAWKS SAN! —El modo fanboy se activó en Midoriya, gritando de emoción.
—Lo lamento, no puedo alcanzar mi velocidad total hasta que nazcan mis nuevas plumas. ¿Estan todos bien? —Preguntó intrigado al ver como el joven atrapado daba instrucciones erróneas, haciéndolo quedar más enmarañado y siendo regañado por los tres héroes mientras reía por sus reacciones.
—Es de goma... No le pasó nada —Tokoyami explicó a su tutor.
—Aun así... Eso debe doler...
—Tranquilo, básicamente sirve como saco de boxeo... Los golpes no le ocasionan ningún daño. —Bromeó Mineta, alzando sus hombros, tranquilizando al héroe al ver a todos con una actitud tan relajada.
Hawks, vio las múltiples cabezas que sobresalían entre los jóvenes estudiantes de UA, reconociendo cada una de ellas, terminando por enfocarse en el famoso espadachín que se encargó de Kamui.
—¡Pero si es mi amigo! —Expresó con un tono jovial, acercándose frescamente hacia Zoro, con una burlona sonrisa. —El cachorro perdido. —Rodeó con el brazo al peliverde.
El joven héroe, notó como las cintas de Sero tomaban por la muñeca al espadachín, recordando la ocasión que Tokoyami mencionaba lo fácil que era que Zoro se perdiera. Apenas hizo la relación con ambos factores, Hawks no pudo contener una ligera carcajada.
—Tch... Nunca acordé en nada... —Gruñó el espadachín
—¡¿SE CONOCEN?!
—Así es zombi; Lo encontré vagando sin rumbo en la ciudad.
—ZOM... ZOMBI... ¿TU TAMBIEN?... —Una oscura nube depresiva apareció sobre de él, al ser referido por uno de los suyos de esa manera.
—¿Son amigos? —Cuestionó Deku, apuntando a ambos.
—Me agrada... Tiene buenos apodos. —Confesó amigablemente el número dos, provocando que All Might se afligiera aún más.
—¿Eres amigo del saco de huesos?... Pfff, debe ser un héroe. —Señaló Sanji con desagrado.
—¡Jajaja! Saco de huesos... Deberé anotarlo... Veo no me conocen. —Dijo cruzando los brazos y examinando uno por uno de ellos. —Entonces en realidad no son de aquí.
Hawks caminó entre los presentes, hasta llegar con las piratas, quedando frente a ellas, con un gesto cordial y sus ojos sellados en una sonrisa, para abrirlos lentamente analizando al par.
—Veamos, bellas damas, una de ustedes debe ser la que brota brazos donde lo desee. —Las palabras del héroe, a pesar de no sonar amenazantes, hacía que la descripción sacara a relucir sus intenciones, dejándoles alertas viendo como cambiaba de objetivo, ahora enfocándose en el musico.
—El esqueleto que duerme a las personas con su musica...
—Tambien toco rock... Soul King, un placer. —Se presentó Brook formalmente.
—Fascinante... —Pronunció intrigado, acercándose a su rostro, preguntándose como podía hablar sin tener lengua ni labios.
—¿Acaso usted puede...?
—¡SI PUEDE DEFECAR, NO LE PREGUNTES! —Quejaron los alumnos, no deseando escuchar la pregunta del profesional.
—Iba a preguntar por digerir... Pero creo eso lo responde...
Los ojos de Hawks se enfocaron en el gran hombre de chamarra afelpada y ropa interior.
—El de la tanga... ¿No tienes frio?
—Soy mayormente de metal, no es problema. —Dijo orgulloso golpeando su pecho, creando un sonido metálico
—Eso explica porque tu cuerpo es básicamente un arma.
—Nos está estudiando, esto no me agrada. —Usopp expresó con las piernas temblorosas, siendo notado por el héroe.
—Y ustedes tres... No hay registros de sus habilidades... —Señaló a Chopper, Usopp y Jinbei.
—¿Eres un peluche? —Se agachó para ver a chopper.
—Soy un reno.
—Vaya que eres un reno adorable. —Expresó con un tono juguetón.
—Hehe~ ¡No creas que me alagas! ¡Idiota! Soy un doctor muy capaz... Hehe~ —El pequeño sonrojado reno no podía parar de agitar sus brazos en un tierno baile.
De entre todos, descansaba uno que no había sido descrito por sus compañeros héroes.
—¿Tambien vienes con ellos? No te tienen en el reporte...
—¿Que tramas Hawks? —Gruñó Zoro molesto.
Robin sonrió interesada en la actitud del joven, ladeando la cabeza con una enigmática mirada dirigida a él.
—Como dicen... Mantén cerca a los amigos y más cerca a los enemigos.
—Justamente bella dama, lamento las inconveniencias... —Detuvo sus análisis, tras el comportamiento amenazante del par, para despues firmar la frente de Deku, que sostenía la tapa de su plumón, mientras emitía un chillido de emoción. —Y chicos, gracias por detener a estos asaltantes... Lo hicieron bien. —Agradeció continuando su paso hasta llegar a su colega jubilado.
—Sabes... Despertó mi curiosidad por qué se ven muy familiarizados con estos delincuentes, ¿Por qué no entregarlos a las autoridades? —Pronunció quedando a un costado de All Might, viendo sus reacciones por el rabillo del ojo.
—ELLOS NO SON MALOS, SOLO UN POCO PROBLEMÁTICOS... POR ESO DEBEMOS MANTENERLOS VIGILADOS.
—¡AH! ¿Vienes de niñera?
—NO... YO NO... ELLOS LOS ESTÁN CUIDANDO, VENGO POR OTRO ASUNTO.
—¡Jajajaja! Unos jóvenes cuidando adultos, creo ya lo he visto todo.
—Hawks... —Llamó Todoroki. —¿Como?... ¿Como está Endeavor?
—Él está bien, ya debió salir del hospital.
—¿Tus alas? Tan rapido se...
—Son piezas prostéticas en lo que nacen nuevas plumas. —Explicó estirando una de ellas, mostrándola a contraluz, notándose como la luz no cruzaba en algunas de sus plumas.
Los neumáticos de la camioneta giraron por el efecto de resorte del chico elástico, apenas fue liberado y lanzado hacia el suelo por la fuerza centrífuga de estos. El capitán sacudió su sombrero, y fue directo a la puerta a quejarse con los delincuentes.
—¡OI! ¡Tengan más cuidado! ¡Van a lastimar a alguien!
—Son villanos Luffy, no les importa. —Señaló Kirishima
Luffy sintió como un brazo se apoyó sobre sus hombros, y volteó para ver un rostro que había visto anteriormente en el televisor.
—¿Ah?
—No te reconocí sin esos kilos extras. —Dijo presionando con su índice, el estómago del azabache.
—Asi que tú eres el chico que se estira... Golpeaste a uno de mis camaradas... Accidentalmente supongo. —Comentó curioso jalando su mejilla.
—¡Dos! Tambien a Shaggy. —Respondió Luffy apuntando a Toshinori que estaba avergonzado por la gran cantidad de nombres con los que le llamaban.
—Zombi... Shaggy... Saco de huesos... ¿Me estoy perdiendo alguno?
—Viejo y Momia... Momaighto —Contó Franky con sus dedos metálicos.
—Pfff... ¡Jajajaja! Vaya, que nulo respeto.
—Ya suéltame paloma. —Gruñó Luffy, retirando el brazo del héroe, notando como su tripulación estaba incomoda con su presencia, al igual que Yagi.
—Por ese sombrero y el de la bandera; intuyo, tu debes ser el capitán... ¿Estoy en lo correcto?
—¡Si! Soy Monkey D... —Antes de terminar pronunciar su nombre, Usopp se lanzó tacleándolo y cubriendo su boca evitando que hablara de más.
—No puedo golpearlo. Me meteré en problemas. —Chilló Nami cubriéndose la boca, volteando con Kaminari solicitando ayuda con la mirada.
—¡A la orden, nena! —Denki se lanzó con un golpe de su parte hacia el capitán.
—¡Ah, idiota eso no era necesario!
—No me puedes golpear. —Burló Denki —Nami me protege.
—Nunca prometí eso.
—¡¿EH?!
Hawks se veía confundido por la escena; parecía que la relación entre los estudiantes y los piratas era estable, lo que le llevaba a pensar que tenían algo que ver con la desaparición de la semana con los estudiantes. Sin embargo, aún había muchas preguntas y por sus actitudes, parecía no las iban a responder.
—No tengo idea de que está ocurriendo. —Respondió burlándose de si mismo con una expresión confundida y sarcastica.
—Los refugiamos en la escuela para que no causen problemas porque no son de aquí... Por lo que no se saben comportar bajo nuestras reglas aun... Es por eso ocurrió el incidente en altamar. —Explicó Tokoyami al tener mejor relación con él.
—¿En que parte destruir un barco de la marina es normal? —Hawks, cuestionó acusatoriamente.
—En el mismo donde pueden atacarnos sin una razón. —Defendió Nami
—Asesinaron especies en peligro... Fue por ello que mandaron a los encargados de protección de vida marina.
—Teníamos hambre... —Luffy reclamó con la lengua colgando.
—No sabíamos. —Chopper se unió apenado.
—Si lo pescas es tuyo. —Zoro rezongó apretando dientes.
—¿Realmente no saben nada o están fingiendo demencia?
—Todas sus especies están en peligro porque no tienen medidas apropiadas para conservar su medio ambiente. —Robin defendió las acciones de su tripulación usando la información adquirida en su estancia.
—Si existe alguna emergencia en altamar y requerimos buscar una fuente de alimento, cualquier especie que consumamos sería tomado como delito... La diferencia es que la caza de especies pequeñas son indetectables, mientras las grandes son más llamativas y dignas de noticia... Sin embargo, su ataque sin fundamentos, si puede ser considerado un crimen. Por lo que nuestra reacción fue meramente defensiva.
—Robin... Eres brillante. —Pensaron aliviados los héroes, mientras Zoro y Luffy, inclinaron cabezas tratando de comprender sus palabras.
—Lo que dijo Robin. —Pronunciaron el capitán.
—No puedo objetar nada contra ese argumento... Me parece bastante valido... —El héroe se levantó de hombros, dando por terminado el encuentro.
—Parece que no son mal intencionados, pero por ese mismo desconocimiento pueden llegar a ser peligrosos, será mejor mantenerlos al margen con supervisión... Aunque los tienen controlados. —Pensó manteniendo su sonrisa.
—Según los reportes de Ryukyu no lanzaron ningún ataque, solo se enfocaron en recuperar a All Might y dejarlos fuera de combate. —El rubio volteó en dirección al jubilado, sospechando de él. —¿Qué es lo que ocultas?
Toshinori sintió la aguda mirada de Hawks, encontrando miradas y logrando que cambiara de expresión por una sonrisa, tratando de ocultar su incomodidad.
—Vaya... Parece que les he quitado bastante tiempo y debo buscar quien se encargue de llevar a estos cuatro a comisaría... Eso y que aún tengo muchos años de juventud como para comenzar de niñero tan joven, así que no podré hacerles más compañía. —Pronunció estirando sus brazos para destensar sus músculos.
—Lamento que mi poca velocidad ocasionara lo atropellaran. —Hawks extendió sus alas, y las agitó lo suficiente para levantar su cuerpo del suelo. —Capitán Monkey D. Luffy
—AY NO... —Piratas y héroes se mostraron consternados ante la fría pronunciación del alado.
—¡ESPERA HAWKS! —All Might se mostró visiblemente alterado, corriendo hacia donde estaba el joven, quién le señaló lo acompañara lejos de los chicos...
Hawks sabía que de entre todos, el principal involucrado debía ser All Might.
—HAWKS, POR FAVOR, NO VAYAS A REPORTAR ESTE INCIDENTE, DÉJALOS FUERA DE ESTO.
—Claro... —Respondió jovialmente, para despues cambiar su mirada por una intimidante, logrando sentir como penetraba su ser como agujas. —Pero tendrás que decirme que está sucediendo.
El rostro de Toshinori permaneció en blanco, enmarcado con su ceño fruncido ante la amenaza, dejando entre los dos, un abundante silencio.
—NO SÉ SI PUEDA, O DEBA.
—Piénsalo, medítalo... —Hawks sacó de su chamarra, una de sus tarjetas que acomodó en el bolsillo de la chaqueta del rubio. —Me considero una persona paciente, pero este informe debería quedar en la noche... Tienes hasta entonces para darme una respuesta. —Dijo golpeando el pecho del héroe con ligeras palmadas.
—¿Que tanto secretean? ¡Vamos al observatorio! —Reclamó molesto el capitán, del otro lado de la calle.
—Basta Luffy, esto es serio... —Calló Iida
—YA VOY... —Agitó su brazo y fingió una sonrisa, devolviéndose con Hawks con un tono cansado. —DOS DIAS... NO PUEDO PENSAR CON ELLOS CERCA.
—Trato. —Extendió la mano, aceptando su propuesta y sellando el trato con un firme apretón de manos.
Con la retirada de segundo del top, decidieron retirar el sabor amargo de su interacción con la visita al observatorio, de donde podían admirar la ciudad de una altura considerable, apuntando a su próximo destino; no sin antes aprovechar su visita en Shibuya para comprar más artículos.
Mientras los chicos se dispersaban en la bulliciosa ciudad, All Might aguardaba pacientemente en la puerta del autobús, desplegando una vez más el trozo de papel que señalaba persistentemente hacia el noreste.
—Sigue retirada. —Pronunció Jinbei, sacando al rubio de sus pensamientos.
—Casi dos horas de la escuela y sigue apuntando a la misma dirección... Eso solo puede significar dos cosas... Que aun no estamos en la misma ruta hacia el noreste, o... Que se encuentra aun mas retirada de lo que pensábamos.
El rubio no pudo ocultar su expresión de preocupación frente al timonel, guiándolo a confesar su sensación de responsabilidad por no haber brindado apoyo cuando se enteró de lo sucedido con la psicóloga. El relato incompleto despertó la intriga en el tritón, quien indagó con interés sobre los detalles precisos que llevaron a la desaparición de la asistente.
Toshinori no sabía si compartir la información que tanto Robin como el habían planeado guardar. Sin embargo, la experiencia y formalidad de Jinbei lo persuadieron a revelar su descubrimiento, en busqueda de la opinión de alguien que había estado involucrado con diversas organizaciones, tanto gubernamentales como criminales.
La revelación dejó a Jinbei atónito, sumido en un incómodo silencio mientras intentaba comprender las razones detrás de las decisiones de los superiores.
—CON SU EXPERIENCIA... ¿CUÁL CREE QUE SEAN SUS INTENCIONES?
—Puede ser demasiado peligroso que hagan uso de esa habilidad sin ningun motivo... No creo que lo utilicen irresponsablemente... Me parece mas una medida de precaución; Pero claro, primero debemos conocer los motivos de esas personas para entender mejor que es lo que traman.
—¿DEBERÍAMOS DECIRLE A LOS DEMÁS?
—Hmmm... —Jinbei posó su mano sobre su barba. —No... Ruffy-kun no sabe guardar secretos... Si lo menciona a los chicos, solo los dejará intranquilos, eso crearía pánico innecesario.
Las palabras del tritón dejaron a Toshinori claramente preocupado y pensativo.
—No te preocupes... Si llegan a usar el Quirk, nosotros nos encargaremos. —Aseguró el tritón con un gesto determinado, dejando al jubilado con el sentimiento de ser apoyado, pero aun no del todo aliviado.
Luffy lideró a ambos grupos hacia el autobús, listos para su próxima parada, cual fue seleccionada por Robin y Yaoyorozu.
La iluminación suave destacaba los detalles arquitectónicos del Palacio de Akasaka y sus característicos jardínes. A lo largo de los caminos cuidadosamente trazados, las luces de colores suaves iluminaban delicadamente la ruta, guiando a los turistas a visitarlo.
—No se parece nada al castillo de Momo. —Bufó decepcionado Luffy.
—No se parece nada a Wano. —Reclamó cabizbajo Chopper.
—Es porque fue construido con inspiración Europea. —Explicó la vicepresidenta.
—¿Europea? —El trio de bobos, ladeó la cabeza al no entender el término.
—Explícales bien Momo-chan, kero.
—Europa es otro continente. —Respondió guiándolos por la explanada, acercándose a los amplios jardines florales donde las chicas se adelantaron para tomarse selfies con flores amarillas.
—El palacio tiene un estilo Neobarroco Europeo parecida al palacio de Hofburg en Viena, sin embargo, aun contiene detalles decorativos japoneses en su interior... Ahora alberga oficinas gubernamentales... Y es mejor conocido como la Casa de Invitados del estado. —Narró cual guía de turistas, siendo escuchada con atención por Sanji, Jinbei, Nami y Robin, en lo que Luffy, Usopp y Chopper se fueron a jugar a la fuente central.
—¿No se supone que los debemos estar cuidando? —Bufó Bakugo a regañadientes.
—¡AH! ¡LUFFY, CHOPPER, USOPP, DETENGANSE! ¡PUEDEN DAÑAR PROPIEDAD HISTORICA! —Deku e Iida intentaron pararlos, pero los dos jóvenes seguían pataleando mientras se quejaban del frio. Siendo Chopper el único que disfrutaba de la sensación que el agua helada el producía.
Los reclamos del par de estudiantes no lograban llegar al trio de traviesos, teniendo que Ochako llamar a Nami para que los controlara. Más un comentario del capitán atrajo la atención del grupo.
—¡Oi! ¡Momo! ¿Y qué hay abajo? —Llamó emocionado, aun saltando en el agua, siendo golpeado y arrastrado por Nami.
—¿Abajo?... —Repitió Yaoyorozu confundida. —Pues el aplanado e instalaciones para que funcione.
—Eso no idioooota. —Quejó el capitán
—¡NO LE FALTES AL RESPETO A MOMO-CHAN! —Reclamó Sanji con los dientes afilados al igual que sus ojos.
—Se refiere a los niveles inferiores. —Aclaró Zoro, apuntando bajo de ellos.
—¿Niveles inferiores? —Shoto cuestionó intrigado.
—QUIZÁS DOCUMENTOS... DESCONOCÍA TUVIERAN NIVELES SUBTERRÁNEOS. —Explicó Toshinori desde su experiencia, ya que había sido invitado con anterioridad a eventos del palacio.
—Son demasiados pisos y hectáreas para que solo guarden documentos. —Aclaró el cocinero.
—El movimiento que almacena abajo, lo hace parecer una ciudad subterránea. —Jinbei infirió
—¿De... De qué están hablando? —Deku tartamudeó alerta al recibir la declaración por los cuatro piratas capaces de usar el Haki de observación.
—¿No pueden sentirlos?
—Parece que aún les falta entrenamiento.
—Son... —Froppy mencionó en voz baja, concentrándose con los ojos cerrados, sintiendo todo al su alrededor, logrando enfocarse en los destellos de auras debiles paseando en una oscuridad subterranea. —Varios niveles... Llegan fuera de los jardines.
Una tétrica sonrisa se dibujó en el rostro de Zoro, queriendo empuñar sus katanas, mas al no llevarlas, cruzó sus brazos y presionó con fuerza sus bíceps ante lo que consideró un reto.
—Ay no... Zoro está sonriendo... —Pronunció Aoyama intimidado.
—Percibo voces hostiles... —Dijo con satisfacción, al finalmente parecer encontrar un rival.
—Deben ser los protectores de los diplomáticos que vivan aquí. —Trató de calmar la situación Iida y Momo al ver como se alteraban sus compañeros.
—¡¿De qué están hablando?! ¡¿Qué hay abajo?! —Mineta no pudo soportarlo más, por lo que soltó un grito que resonó en los alrededores.
—¡USTEDES! —Los estudiantes y piratas se giraron simultáneamente en dirección de donde provenía la voz: Un guardia de baja estatura, quien con una expresión irritada marchó rápidamente hacia ellos. Su piel grisácea resaltaba bajo la luz del lugar, y su chamarra ajustada parecía luchar contra sus robustos antebrazos.
—LO SIENTO, EN UN MOMENTO LO SACO DE LA FUENTE. —Pronunció apenado, retirando a Chopper del agua, como a un niño pequeño.
—Con la pena del mundo, debo pedir que se retiren. —Demandó el guardia, tratando de evitar fruncir el ceño mientras observaba a los presentes.
—¡¿QUE?¡ —Los jóvenes gritaron al unisón.
—¡Oye! ¡No puedes obligarnos a irnos, no hemos hecho nada malo! —Reclamó Mina, defendiendo su postura.
—Puedo ver de antemano que serán problemáticos. No pueden acatar una simple orden, están dañando el área pública, sobre todo la cantera que podría necesitar restauración si continúan. Además, el señor de allá no lleva pantalones... ¿En tiempo de frío? ¡¿En un área pública donde se encuentran familias?! Algo trama, ¡Eso no es normal! Definitivamente un pervertido —El guardia de seguridad expresó su molestia, señalando con sus dedos cada uno de los problemas que mencionaba.
—¡Oi! —Franky reclamó ofendido y ruborizado simultaneamente.
—Te dijimos que usaras pantalones...
—No podemos convencerlo. —Lamentó Yaoyorozu, quien era la que más le insistía.
—Veamos... —El guardia masajeo su sien con los índices. —Creo empezamos mal... Pido de la manera más cordial y atenta, que por favor continúen con su convivencia en otro lado. —Invitó a retirarse, juntando sus palmas y tomando un profundo respiro, tratando de calmarse.
—¡NO LO HAREMOS GORILA PIGMEO! ¡NO PUEDEN OBLIGARNOS! —Bakugo explotó en rabia, provocando que una vena brotara en el pequeño uniformado.
Aunque no le interesaba visitar el palacio; el simple hecho de que se los prohibieran le hizo reaccionar de manera agresiva.
Chopper comenzó a percibir un aroma familiar, cerró sus ojos, y levantó su naricita olfateando los alrededores, acercándose a la pierna del guardia y quedando visiblemente confundido, no entendiendo por qué le llevó ahí.
—Escuche señor, no queremos problemas solo estamos realizando un recorrido para nuestros amigos. —Iida se acercó firmemente.
—COMPRENDO SU LABOR Y LO RESPETO, PERO ¿PODRÍA DARNOS PASO? LE DOY MI PALABRA QUE NO VAN A CAUSAR NINGÚN PROBLEMA. —Pronunció Yagi con seguridad, esperando recibir una respuesta positiva al ser el, quién se dirigiera a la autoridad.
—Así es Popeye, así que déjanos pasar. —Reclamó Denki
—¡Oye brazos hinchados! ¿Qué hay abajo? —Preguntó luffy, ocasionando que todos se alteraran, incluyendo al guardia.
—¡LUFFY IDIOTA!
—¡No les puedo permitir! —bloqueó el paso, extendiendo sus brazos, aunque fácilmente podían pasar a su alrededor.
—Definitivamente él sabe algo... —Todoroki y Nami agudizaron la mirada, al presenciar la reacción del uniformado.
—¡COMO ERES TESTARUDO! —Bakugo lo quitó del camino
—Bakugo, es de seguridad, tenemos que respetarlo... Aunque este exagerando... —Kirishima intentó hacer entrar en razón a su amigo, deteniéndolo antes de que continuara.
—¡ESTÁ SIENDO RIDÍCULO!
El guardia, cuyo tono grisáceo de piel comenzaba a teñirse de rojo por la creciente molestia que estaba experimentando, soltó un reclamo sin previo aviso.
—¡Dad Might! ¡Controla a tus hijos! —Vociferó con una mirada de desaprobación que pintaba su rostro de un tono más intenso de irritación.
Toshinori amplió su mirada en sorpresa y quedó momentáneamente inmóvil, al recordar a la única persona que solía referirse a él de esa manera.
—¿QUE ESTÁ PASANDO AQUÍ?
Otro par de uniformados se acercaron viendo la problemática escena, percatándose de la presencia de los jóvenes héroes, reconociendo a Midoriya, Todoroki, Bakugo y Tokoyami del evento escolar, algunas noticias y por supuesto al ex símbolo de la paz.
—¡AH! ¡ES ALL MIGHT! —Se mostraron entusiasmados, aumentando el paso, demostrando que eran fieles fanáticos.
—¿Qué pasa? ¿Este enano los está molestando? —Preguntó un formido guardia de piel azul y cabellera espinosa, posando su mano en la nuca de su compañero de baja estatura.
—No nos deja pasar. —Mineta apuntó acusatoriamente.
—¿AAH? —Torcieron la boca desaprobando el comportamiento de su compañero. —Eso no es problema, nosotros se lo permitimos.
Toshinori, abrió el cierre del bolsillo donde mantenía su vibre card, posándola en la palma, notando como su objetivo habia cambiado de dirección... De moverse al noreste, ahora lo hacía frente a él, en el noroeste, apuntando hacia la persona que tenían sujeta del cuello.
Sus miradas cruzaron, y con un sutil parpadeo doble y movimiento de iris, indicó que se fueran.
—CREO SERÁ MEJOR RETIRARNOS. —Pronunció All Might, tomando a Luffy y Deku de las espaldas, para dirigirlos a otra dirección.
—Estoy de acuerdo con All Might, ya es tarde. —Apoyó Nami, volteando con Robin.
—Me parece buena idea. —Robin, Sanji y Jinbei accedieron, entendiendo que era lo que ocurría.
—No, no, no, adelante. Taro-san ha estado un tanto irracional los últimos dias, no le hagan caso. —El guardia forzó el cuello del uniformado, para hacer contacto visual con los ojos del pequeño, lastimándole al voltear.
—Pffff. ¡Taro!... —Bakugo provocó una explosión en su boca, para evitar carcajearse por el significado de la palabra «Gran Chico»
—Suéltenlo. —Luffy y Deku gruñeron molestos.
—Asi nos llevamos. —Excusó el otro guardia cubriendo al par con su robusta forma.
—Se nos acaba el tiempo, será mejor regresar a la escuela. —Trató de evitar conflicto la vicepresidenta.
—¡¿VES LO QUE OCASIONAS TARO?! —El guardia fornido violentamente sacudió al pequeño, aun siendo cubiertos por el de mayor tamaño.
—Por favor disculpen los inconvenientes, déjenme darles un tour guiado para que olvidemos este malentendido.
—¡ELLOS NO PUEDEN ESTAR AQUÍ! —La voz de Taro, logró alcanzar al grupo a pesar de no poderlo ver.
—¡TU NO DEBERIAS ESTAR AQUÍ!... ¿EN SERIO NO SÉ QUÉ TE SUCEDE HOY?... ¡COMO TE ATREVES A NEGAR EL PASO DE ALL MIGHT! CLARO QUE ÉL Y SUS INVITADOS SON BIENVENIDOS.
—LÁRGATE A TU CASA SI VAS A SEGUIR CON ESA ACTITUD, TIENES QUE APRENDER A RESPETAR A TUS SUPERIORES. —El fornido uniformado lo lanzó lejos; donde Taro apenas lograba recuperar el equilibrio, sobando su cuello.
—ESTOY DE ACUERDO EN ALGO CON ELLOS... DEBERÍAS RETIRARTE A TU CASA A DESCANSAR...
—All Might... —Pronunció Nami, lamentándose de no poder intervenir en la agresión de los abusivos guardias por las mismas reglas que ella había impuesto.
—IGUAL QUE NOSOTROS... —Finalizó guiando al gran grupo de camino hacia su autobús a unas cuadras.
—Vaya que incomodo... —Pronunció Aoyama, viendo todo el suceso con repulsión. —Cero elegantes para una institución de tanto renombre.
—Me preocupa el guardia, no parecen que estén en buenos términos con él. —Comentó Jiro.
—No lo están... Sus auras se ven violentas... Lo más seguro es que no termine bien.
—Tampoco seas presumida Tsuyu.
—Oye, Si puede, deja que use su habilidad. —Reprendió Nami, golpeando la cabeza de Mineta.
—Luffy san... ¿Qué es lo que presintió abajo? —Preguntó Iida
Las manos de Robin, nacieron en los torsos de los estudiantes, tomando sus teléfonos y apagándolos sin avisar. Acción que Jinbei tomó como paso libre para compartir la información.
—Por la cantidad de personas que se desplazaban... Calculo unos cinco niveles subterráneos. —Explicó el tritón
—Cinco en toda esta zona... —Agregó Sanji. —Parece que hay otras presencias, en otras más lejanas.
—NO TENÍA IDEA DE ESTO... ¿ESTAN SEGUROS?
—Si...
—¿Por qué no intentas verlo? —Rezongó Zoro —Deberías presentir por lo menos dos auras.
—Parece que hemos encontrado el centro de operaciones de las personas que se han encargado de manipular la información. —Robin pronunció seria, reflejando su preocupación.
—Lo mejor que pudimos hacer es habernos retirado... —Ochako dijo un poco aliviada.
—Podían reconocerlos... —Agregó Sato
—No creo que tengan fotografías. Han pasado milenios desde su era...
—Quizás descripciones.
—Si Luffy no se la pasara gritando su nombre, no sería tan complicado. —Rezongó Denki, irritado.
—Ruffy-kun; Debemos ocultar su Apellido... Que se haga público, podría desencadenar nuestra persecución... Y eso los incluye. —Apuntó a los chicos. —Les ordenarían enfrentarnos.
La declaración del tritón, provocó que a todos les recorriera un escalofrío con solo pensar en tener que luchar contra sus compañeros de viaje.
—Digo, es entendible que teman el nombre del... —El título oficial del capitán casi escapa de los labios de Sero. —Un Emperador.
—Es mas profundo que eso. —Corrigió Robin, obteniendo la completa atención del grupo. —Hay algo que el gobierno oculta en nuestro tiempo que, si se llegase a enterar en el presente, prendería alertas rojas... Los portadores de la D. en su nombre.
—¿D?
—La voluntad de los D. —Pronunció el tritón con un tono serio. —Son pocos los que saben en qué consiste la voluntad de los D... Pero ese nombre no ha parado de provocar tempestades por generaciones... Son considerados los enemigos naturales de los Dioses: Los Tenryubitos y el gobierno mundial.
—Nadie sabe su significado, el gobierno se hizo cargo de borrar todo lo relacionado a ellos en el pasado.
—Si saben sobre el apellido de los D... Entonces sabrán que Luffy san... —Midoriya comenzó a murmurar.
—¡Y SE LO DIJISTE A HAWKS! —Todos aquellos pertenecientes al presente, gritaron alarmados, dejando salir sus almas durante unos segundos.
Toshinori disminuyó el paso tras escucharlos alterados, caminando al ritmo de la arqueóloga retomando el tema sobre si decirles a sus respectivos grupos, una de las posibles tácticas de la sociedad oculta o continuar manteniéndolo en secreto entre los tres.
—Será mejor guardarlo un poco más... Hasta no saber qué información obtuvo Bakanee, guardémoslo entre nosotros.
—¿Que tanto secretean?
—Uu~uhhh... —Ashido burló con un tono cantado.
—Deja de shippear a todos Mina. —Regañó Jiro a la chica rosa, que sacó la lengua de manera traviesa en respuesta.
—NO SÉ QUÉ DECIRLE A HAWKS... —Lamentó el rubio, presionando su sien.
—Tenemos que ser más cuidadosos... Si no fuera por el guardia amargado, podríamos habernos metido en problemas. —Usopp reclamó nervioso.
El autobús arribó a las instalaciones después de una última parada para cenar. Cada uno de ellos continuó su camino, con los estudiantes dirigiéndose a descansar tras el largo día, mientras los piratas se retiraron a su barco para descargar sus compras y continuar con la decoración; En cambio, Toshinori en vez de dirigirse a su habitación para descansar, tomó la decisión de ir a su oficina a revisar documentos en busca de algún criminal con el apellido D.
Durante todo el trayecto, su mente no dejaba de dar vueltas entorno a lo que debería decirle a Hawks. El cansancio se reflejaba en sus pasos pesados y en la mirada pensativa que no abandonaba su rostro, hasta cruzarse con Powerloader, quien emergía apresuradamente de la enfermería, envolviendo su brazo en un grueso vendaje.
—POWERLOADER SAN, ¿QUÉ HACES AQUÍ? —Cuestionó sorprendido por el día y horario, deteniéndolo con su pregunta.
—Estaba trabajando en algo y llegó la asistente de Nezu por su encargo, quería verificar que ensamblaran bien sus piezas.
—¿EL PEDIDO QUE SOLICITÓ?
—Unas botas y guantes con compartimientos ocultos capaces de soportar peso de hasta 50 kilos sin romperse, que aparenten ser prendas de uso diario. —La tela blanca que cubría su brazo comenzó a teñirse de un brillante color carmesí, siendo notado por ambos héroes.
—Recovery Girl no estaba... Logré contener la hemorragia, pero necesito un hospital. —Pronunció reanudando su paso apresurado, siendo seguido por All Might.
—¿NECESITAS QUE TE LLEVE? ¿QUÉ TE SUCEDIÓ?
—Mi transporte está fuera esperándome, no te preocupes... —Respondió dejando una breve pausa antes de responder su segunda pregunta. —Trajo un par de cuchillas para ver si la medida era la correcta... Era un material que jamás habia visto... Completamente negro, parecía vacio; Imposible distinguir su relieve porque no refleja la luz... Lo toqué por curiosidad, pero su contorno era tan filoso que solo con rozarlo cortó mi dedo... Creo llegó hasta el hueso... —Dijo ejerciendo presión sobre su herida, quedando absorto en ella, deteniéndose brevemente para dedicarle su atención completamente al jubilado, mostrando en su sincera angustia.
—Esas cosas no están diseñadas para defensa... No imagino otro uso más que para... —Detuvo sus palabras no queriendo siquiera pensar en ello, ya que él había sido participe de crear esa abominación. —Ella no debe estar aquí.
Las palabras de Powerloader resonaron con un genuino temor, enviando un escalofrío que recorrió desde la planta de sus pies hasta concentrarse en su pecho. Realmente estaba consternado por lo que estaba sucediendo, con los últimos sucesos parecía que todo se estaba saliendo de control.
La herida de Powerloader emanaba frescura, lo cual sugería que Yue aún podría seguir dentro de las instalaciones. Con la inquietud presente, Toshinori decidió encaminarse hacia el área del equipo de apoyo. Encontrándose al llegar, la puerta entreabierta, dejando ver una prominente mancha de sangre pintada desde el interior y las abundantes salpicaduras frescas en el suelo.
El rubio podía sentir el latido acelerado de su corazón resonando en sus oídos. Su respiración se volvía agitada, y una sensación de inquietud se apoderaba de él. Cada paso parecía más pesado, como si una carga invisible se posara sobre sus hombros.
Con una expresión inquieta, ingresó a la habitación. La pesada puerta permaneció abierta y ligeramente caída, consecuencia de las constantes explosiones de Mei, lo que significaba que solo podía cerrarse aplicando fuerza. Al entrar, se encontró de espaldas a la peliblanca, quien llevaba una larga gabardina negra y una blusa de cuello de tortuga gris. En uno de sus pies, lucía una bota negra que alcanzaba hasta la rodilla, mientras que el otro se encontraba descalzo, solo cubierto por medias termicas negras.
Las manos de la mujer trabajaban en la bota faltante, retirándole la suela de metal recubierta de caucho. La asistente se veía temblorosa y algo débil, como si los nervios la dominaran, mas eso no le impedía continuar con su tarea de apretar los tornillos para asegurar la estructura.
La angustia generó una sensación de presión el corazón de All Might al ver a Yue en ese estado alterado. Sentía la imperiosa necesidad de encontrar una manera de demostrarle que todo estaría bien, pero incluso él mismo se sentía impotente al no saber cómo controlar la situación que se desarrollaba a su alrededor, y esto se sumaba a la incertidumbre generada por la información que ella portaba.
—SEÑORITA YUE... —Trató de acercarse cautelosamente, evitando tocar temas que pudieran inquietarla aún más. —QUE ALIVIO VER SE ENCUENTRE BIEN...
—Ni se te ocurra tocarme. —Advirtió anticipando sus intenciones, golpeando con fuerza el desarmador sobre la superficie de metal provocando un estruendo que lo detuvo en el acto.
Un sepulcral silencio se cernía en la fria habitación mientras All Might se mantenía inmóvil, anhelando una respuesta que nunca fue pronunciada. Yue permaneció congelada tras explotar su frustración, y tras un inquietante lapso de silencio, reanudó su labor ensamblando la suela de su bota.
—VEO QUE YA TE LLEVASTE ALGUNAS COSAS... ¿PIENSAS IRTE?
Ante la nula respuesta y cooperación, Toshinori optó por forzar una respuesta.
—ROBIN ME DIJO LO DE LA DOCTORA KNORR. —Sus palabras volvieron a detener la actividad de la peliblanca, que temblorosamente llevó su mano a la superficie de la mesa metalica.
—NO SÉ SI YA TE ENCARGASTE DE ESO... PERO ME DI LA TAREA DE INVESTIGARLA.
—¿Qué?... ¿Que encontraste? —Giró ligeramente la cabeza para que su oído apuntara a su dirección, pero su vista se mantuviera ajena al héroe.
—SUS SUPOSICIONES... —Dejó salir un sonoro suspiro. —ES PEOR DE LO QUE PENSABAN.
Sus rodillas temblaron renuentes a articular fuerza, quedando al borde de ceder ante la debilidad. Sin embargo, en el preciso instante en que parecía que se desplomaría, fue sujeta desde atrás.
—Maldición... Maldición... —Gruñó repetidamente luchando con renuencia para liberarse, no parando de agitarse para soltar el agarre, girando y encontrandose cara a cara con el jubilado, para instantaneamente desviar su mirada al suelo, sintiendo las manos del rubio que sostenía su peso por los codos. —Maldición... ¡Maldición! —Gritó en repetidas ocasiones golpeando el pecho del héroe que aun la sostenía evitando se desplomara.
—Las dos personas en quién deposité mi entera confianza desde un principio terminaron por traicionarme... —Quejó en voz baja tras el último par de golpes, recargando su frente sobre ambos puños, dejando confundido a Toshinori que no sabía de quienes se refería, dejando gobernar el silencio nuevamente, en espera de que continuara o el mismo silencio lograra reconfortarla.
—Nezu me pidió confiara... Que todo estaba preparado ¡Y no era así!... —Su voz tembló tras expulsar su coraje, descendiendo en un tono desesperanzado. —Caímos en una trampa... Si me hubiera acompañado... o de venir ella a la escuela como se lo solicite de un principio... No estaríamos en este dilema... ¿Por qué siquiera lo sugirió?... ¿Por qué accedí?
—EL SOLO DESEA EL BIENEST... —En un tono bajo, intentó justificar sus acciones, más fue interrumpido.
—Y tuuuu... —Gruñó con decepción arrastrando las palabras. —¡¿Acaso, sabes lo que me costó abrirme con ustedes?! —Tiró con fuerza de su chaqueta, demostrando el coraje en cada gesto. —¡¿Para qué?! ¡Para que me ocultaras que hay un maldito infiltrado en tu grupo!
—NO ESTÁ CONFIRMADO... TODOS ELLOS TIENEN CORAZONES HEROICOS, REALMENTE NO CREO QUE...
—¡Te lo dije antes! ¡Tu exceso de confianza será tu perdición! —Reclamó en voz alta, agitando sus manos con movimientos erraticos liberandose del agarre y dando un paso hacia atrás, revelándose por completo a la histérica mujer que finalmente había cesado de reprimir sus emociones.
Agitando marcadamente la cabeza al vociferar y provocando que el grueso mechón de cabello que le cubría media cara se sacudiera junto con ella, rebeló una variada gama de colores su rostro, captando la atención de Toshinori quién se acercó a la atemorizada mujer y deslizó su índice por su mentón, provocando que Yue sudara frio, y humillada desviara la mirada, mientras el rubio bajaba el cuello de la tortuga, revelando unas marcas enrojecidas y rastros de morado debido a la restricción de la circulación sanguínea, causada por una mano que le ejerció fuerte presión.
All Might experimentó un sentimiento de vergüenza y culpa al notar la vulnerabilidad de la asistente quien había cambiado de mostrar coraje, por fragilidad. Sin embargo, aprovechó que giró la cabeza al evitar el contacto visual, para peinar el mechón y descubrir su rostro, revelando cómo ocultaba un lado hinchado, con el párpado cortado y aun lagrimando por la hinchazón coloreada en distintas gamas de violetas.
—Tus fanáticos pueden llegar a ser violentos. —Pronunció con desprecio, golpeando la mano para que dejara caer su cabello cubriendo de nuevo su rostro.
Saber que la mujer soportaba diversos maltratos en su búsqueda de información, y que la desconfianza avivada por malentendidos y errores humanos le impedía pedir ayuda, desvaneciendo la confianza que habían construido con tanto esfuerzo, lo abrumaba aún más.
—LO LAMENTO... ME HE ENFOCADO TANTO EN LOS SOMBRERO DE PAJA TRATANDO DE QUE NO SE METAN EN PROBLEMAS, QUE NUNCA CRUZÓ POR MI MENTE QUE PUDIERAS NECESITAR AYUDA. —Su voz temblaba con sincero arrepentimiento, aproximandose tomándola por los hombros y acercándola hacia él, en un pobre intento reconfortarla.
Sentir cómo los brazos del héroe intentaban rodearla en un gesto de consuelo fue malinterpretado como una manera de sentirse aprisionada, privándola físicamente de su libertad. La repentina interacción le hizo reaccionar sin pensar, lanzándolo lejos y cayendo ambos en direcciones opuestas, golpeando mesas repletas de herramientas que terminaron por golpearles por el impacto.
La asistente respiraba agitada sin apartar la vista del héroe. Por primera vez, All Might podía percibir SU "voz"; más desconocía si su habilidad había mejorado o si el tiempo que Yue había tenido para recuperarse de su malnutrición le había otorgado fuerza que aumentara la voz de su aura. Sin embargo, lo único que le quedaba claro era que estaba confundida y asustada.
—NO TE SIENTES SEGURA CON NOSOTROS...
—¿Tú crees? —Respondió sarcásticamente jalando el cuero de la bota sobre la mesa, para colocársela.
All Might se puso de pie y caminó a la mesa de trabajo, retirando su bufanda para limpiar la sangre de Power Loader, mientras Yue le veía de reojo.
—Le advertí que no las tocara, son peligrosas... —Explicó con un tono decepcionado. —Por eso no se las dejé desde un principio, solo le di unos recortes para que los tomara de referencia.
—UNA HOJA TAN FILOSA... ¿QUE USO LE QUIERES DAR? —Cuestionó acusatoriamente, doblando la bufanda para seguir limpiando con tela seca.
—Hay que balancear la falta de fuerza otra con tecnica y herramientas... En este caso; el filo de mis ninjato es capaz de cortar casi cualquier cosa... Ideal para escapes. —Justificó ajustando ambas botas, que eran ligeramente mas gruesas de la parte exterior.
Una sensación fría provenía del héroe, sintiendo como era juzgada.
—No lo pienso usar en personas... —Finalizó tajante y despectiva, poniéndose de pie lista para partir, marchando hacia la salida.
—¡SABEMOS QUE HAY UNA SOCIEDAD BAJO DEL PALACIO! —Exclamó captando toda su atención y deteniendola en seco.
—¿Pero, qué obsesión tienen ustedes por gritar información confidencial? —Gruñó molesta, refiriéndose tanto a Toshinori, como Sombrero de paja.
—COMPRENDO QUE NO QUIERAS CONFIAR EN NOSOTROS, EN MÍ. LO ENTIENDO, HE FALLADO... PERO ¿QUÉ HAY DE LOS SOMBRERO DE PAJA? ELLOS OFICIALMENTE ESTÁN DIRECTAMENTE INVOLUCRADOS. SI CONTINÚAS AISLÁNDOTE DE ESTA MANERA, TARDE O TEMPRANO, LA FALTA DE INFORMACIÓN OCASIONARÁ PROBLEMAS NO SOLO PARA TI... SI NO ELLOS, NOSOTROS Y EN EL PEOR DE LOS CASOS... JAPÓN.
Las palabras de All Might, quedaron resonando en su cabeza una y otra vez, llevándole a masajear su sien en frustración.
—Que pesado... Deja de lamentarte... A derramar lágrimas cuando todo termine...
—NO ESTOY...
—Lo decía por mi...
—¿PENSANDO EN VOZ ALTA?
Yue esperó en el filo de la puerta, percatándose que Toshinori continuaba encargándose del desastre.
—Tienes razón... Merecen saber qué es lo que está ocurriendo. —Exhaló cansada. —Vamos traidor.
—FUE UN MALENTENDIDO...
—Como digas... Traidor.
El sol se había ocultado por completo, sumiendo el bosque en la oscuridad. La ausencia de luz artificial reveló un hermoso cielo estrellado donde las constelaciones brillaban con intensidad. Sin embargo, el espectáculo celeste fue efímero, ya que Franky encendió las recién adquiridas luces navideñas que decoraban los rieles y mástiles.
Luffy y Brook se enfocaron en la tarea de envolver las puertas, dándoles la apariencia de cajas de regalo. Sin embargo, el capitán fue quien terminó desperdiciando la mayor parte del papel al fallar en su tarea y quedar enredado en el listón mientras intentaba formar un moño, rodando por la cubierta en un intento desesperado por liberarse.
En medio de su travesía enredada, un par de presencias familiares en las cercanías llamaron su atención. Rodando torpemente se acercó al filo del Sunny, observando a Toshinori llegar acompañado.
—¡Ah, Shaggy! —Gritó animado, mordiendo el listón cual perro rabioso. —¡Llévanos a comprar más papel! Me lo acabé.
—NO CREO LOS PUEDA LLEVAR POR MÁS, PERO CON GUSTO LES PUEDO TRAER. —Aceptó, desenvolviendo al joven como un regalo.
—Gracias —Expresó con una sonrisa apenas fue liberado, dejándose caer en frio el césped, volteando tras el rubio y viendo a la apenada peliblanca ocultado la mirada y rascando su brazo.
—¡La encontraste!
—En realidad la encontramos —Expresó Nami, terminando de ayudar a Franky y Robin en colocar más iluminación alrededor de las puertas de las habitaciones.
—¿Eh?
—Era el policía que no nos dejaba pasar. —Explicó Robin, ocasionando que un signo de interrogación se formara encima de la cabeza de su capitán, junto con Franky, Brook, Chopper y Usopp.
—¡AH! ¡¿ERAS TU?!
—¿PERO? ¡¿COMO?! —Preguntaron los cinco
—¿Que no era un hombre pequeño? —Luffy señaló con su mano una baja estatura que llegaba a su ombligo.
—¿Van a participar en eso? —Cuestionó Bakanee con repudio, apuntando a la decoración, mostrando pena con una gota de sudor recorriendo su desanimado rostro.
—¡EVADIÓ LA PREGUNTA!
—¡SI, SI, SI!
—JAJAJA, ESTAN MUY ENTUSIASMADOS
—¡Deberían acompañarnos, tenemos dias organizándolo! —Invitó Luffy
—Al menos alguien se divierte... —Refunfuñó, continuando caminando arrastrando los pies en dirección a Robin.
—He visto muertos con mas vida. —Bufó Zoro refiriéndose a la mujer.
—¡Yohohoho! ¡Se refiere a mí!
—Y los zombis...
—¿El viejo gravemente herido cuenta?
—Me calma verte bien. —Pronunció la arqueóloga aliviada, a lo cual fue correspondida con una afligida mirada. —En lo que cabe...
Robin, acostumbrada a su papel de madre en la tripulación, notó que algo no estaba del todo bien. Con delicadeza, peinó el mechón tras la oreja de la asistente, revelando un rostro hinchado con una gama de colores contrastantes.
Al observarla maltratada, no pudo evitar dejar escapar un suspiro de preocupación.
—Chopper, puedes venir un momento.
—¡Aah! ¿Qué le pasó?
—¡Fueron esos malditos guardias! —El cuerpo de Sanji comenzó a generar calor, para despues estallar en llamas.
—No tiene importancia... —Pronunció con un tono sereno hacia el cocinero, cambiando por uno consternado. —¿Como están ellos?
La llama del cuerpo del pirata se apagó, al percatarse de su inquietud.
—Bien... Preocupados...
—Mas bien ¡¿Cómo estas tu?! —Preguntó Franky, no entendiendo a quienes se refería su pregunta.
—Mañana los visitaré de nuevo... —Pronunció con nostalgia, evitando responder la pregunta del carpintero.
La actitud animada y despreocupada de los piratas logró tranquilizarla al sentirse en un ambiente ajeno a lo habitual, incluso en su disociasión, permitió el doctor la tratara utilizando cremas desinflamatorias, antisépticos y un parche de gasas, siendo que antes ni siquiera permitía que se acercaran con un botiquín.
—Oi, ¿Como va eso? —Luffy señaló varias cajas decorativas que llevó hacia el enorme árbol que montó Jinbei en el centro del deck.
—DEBEN PONER LAS ESFERAS EN LAS RAMAS Y EL LISTON A SU ALREDEDOR, DE LA PUNTA HASTA LA PARTE BAJA. —Instruyó Toshinori, viendo con pena como el capitán volvía enredarse con el listón, teniendo que de nuevo asistirlo con ayuda de Brook.
Sanji no tardó en llegar con bebidas calientes para sus camaradas que se encontraban ocupados decorando el pino siguiendo las indicaciones de Yagi. Mientras, Robin supervisaba a un lado de Chopper como terminaba de tratar a la asistente sentada en el césped.
—Bakanee... ¿Qué hay abajo del Palacio? —La curiosa pirata inquirió, aprovechando se había relajado.
La asistente permaneció en silencio por un momento, girándose para mirar a la arqueóloga que la observaba con interés. Bakanee cambió su atención hacia el resto de los piratas, quienes se dieron cuenta de la pregunta que su compañera había formulado, guardando silencio para poder prestar atención.
Sin embargo, All Might fue testigo del cambio en el comportamiento de la asistente al estar rodeada de los piratas, comprendiendo la desconfianza que había generado en ella. Motivo por el cual decidió retirarse discretamente para permitirle expresarse libremente.
—YA ES ALGO TARDE, CREO QUE SERÁ MEJOR RETIRARME. —Dijo apenado rascando su nuca, apuntando a la rampa que dirigía fuera del Sunny.
—Quédate... —Pronunció con un tono familiar a sus oídos, sonando muy parecido al de aquellas personas que solicitan ayuda. Tomando desprevenido a All Might, provocándole sorpresa al venir la petición de alguien tan necia y orgullosa como ella.
—Necesitamos a alguien que tenga contactos dentro de la policía y altos mandos... Nezu me pone trabas que no me permiten avanzar, no me resuelve nada de lo que le he solicitado... Pero tu sin siquiera pedirlo, nos has ayudado...
—LA ÚNICA RAZÓN POR LA QUE ME INVOLUCRAS ES POR MI PESO EN LA SOCIEDAD...
—Se que no trabajas para ellos... Solo temo que terminen por manipularte a su favor y eso nos perjudique a todos.
—¿Quiénes? —Preguntó Nami. —¿Quiénes son?
—Yo tampoco lo se... —Volteó hacia los piratas, cuyas expresiones expectantes y miradas atentas mostraban el interés que habían depositado en la conversación.
—Lo que presenciaron en Akasaka, es el estado profundo... El estado dentro del estado.
—¿Estado dentro de un estado?
—Forma parte de la parte clandestina operada por redes de poder encubiertas que trabajan bajo objetivos propios de manera independiente y a la vez, paralelo al gobierno legítimo...
—PERAS Y MANZANAS... —Refrescó la memoria sobre como explicarle a algunos de los presentes.
—Cierto... Basicamente, es una red secreta de personas que tienen el poder de eludir la autoridad del estado y dictar su voluntad. —Explicó a los sombrero de paja, de los cuales solo el capitán parecía no entender una mierda, para despues dirigirse al jubilado.
—Las instituciones por las cuales ustedes abiertamente trabajan, son las que podemos ver a los alrededores, aquellas que se encuentran en la superficie y se muestran ante la sociedad... Pero alguno de los lideres quienes las controlan se encuentran en las profundidades.
—Ellos son los encargados de borrar la información. —Dedujo Nami
—Y de desaparecer a los residentes del viejo mundo. —Agregó el tritón.
—Así es.
—Anteriormente ese tipo de personas vivía en el punto más alto... Ahora es en las profundidades. —Robin pronunció con desprecio.
—Plaga de cucarachas... —Rezongó Franky
—No creo que vivan ahí... Al menos no todos. Parece ser que solo se reúnen en un punto común.
—¿Que tan grande es? —Cuestionó Nami, ajena a lo que "vieron" sus compañeros.
—A una ciudad de pequeño tamaño... Hay varias de ellas ubicadas en grandes ciudades repartidas por el mundo, no solo aquí... Las de Akasaka e Italia son las más grandes, contando esta con ciento veinte mil metros cuadrados de construcción, más los nueve niveles subterráneos.
—¡¿Nueve?! —Brook, Usopp y Chopper exclamaron. —¿No habían dicho que cinco?
—Podría haber más... Hace dos dias una presencia bajó a un noveno nivel.
—¡¿Por qué es tan grande?! —El tirador, estalló con la pregunta. —¿Quiénes habitan ahí?
—Lo desconozco... No he pasado del primer nivel.
—Entonces necesitamos investigar que hay abajo para entender a quienes nos enfrentamos. —Franky mencionó cruzándose de brazos
—Mas bien a quienes se enfrentan los reinos.
—Todos nosotros. —Corrigió Nami. —Mientras tengamos información del pasado, tanto nosotros como sus estudiantes estamos en problemas.
—¡Yosh! Entonces solo tenemos ir ahí.
—¡NO ES TAN SENCILLO! —Bakanee que conocía los antecedentes del emperador, gritó alterada comenzando a toser sangre por el daño en sus organos.
—¡Oi! ¿Estas bien?
—La patearon bastante. —Explicó el reno, pasando a regañarla. —Te dije que no debes ejercer fuerza en tu abdomen.
—Son varios filtros para poder llegar a los niveles inferiores, cada uno está diseñado para que no cualquiera pueda acceder a ellos, mantienen jerarquias entre los involucrados... El más sencillo es el primero, solo es necesaria una clave, el segundo es una tarjeta... Pero el resto no lo se.
—La tarjeta será fácil de conseguir. —Nami alardeó decidida.
—Si... Pero, por el momento me enfoco en rondar por las instalaciones para estudiar a las personas que recorren los pasillos del primer nivel... Así puedo buscar al sujeto apropiado para copiar sus movimientos, aprendiendo de su vida para poder hacer uso de su identidad e ingresar con menor sospecha a los otros niveles.
—¿Cómo lograste el cambio de forma? —Preguntó intrigado el reno.
—Los tratos clandestinos que mencionaste... —Respondió Nami
—Por tres millones de yenes puedo comprar un cambio de apariencia, pero solo dura cinco horas... ¿Me vas a arrestar? —Preguntó a Toshinori
—NO...
—No puedo simplemente copiar cualquier persona, mientras más asocial sea mejor, así evito interactuar con otros... Pero también abre puerta a ser agredido por el abuso de poder y jerarquías... Como hoy.
—¿Sabes qué es lo que hay abajo? —Preguntó la arqueóloga.
—Algunos tipos problemáticos. —Expresó Zoro con un tono serio.
—Mas fuertes que tus héroes. —Agregó Sanji
—No lo sé... Pero la seguridad de sus instalaciones es fuerte, por lo que su guardia también lo debería ser.
—No lo suficiente. —Burló Zoro.
—No trabajan la fuerza como ustedes... Me preocupa los quirks que posean.
—¿QUÉ TIENES PLANEADO?
—¡Vamos a ayudarte! —Decidió Luffy, poniéndose entusiasta de pie.
—...
—Por el momento...
—¡NADA DE: POR EL MOMENTO! ¡No has dejado de investigar por tu cuenta desde que despertaste! ¡Mira como estas! —Nami reclamó molesta, señalándola de pies a cabeza —¡Vamos a formar parte de esto, te guste o no!
—Como decía... Por el momento, debo esperar la oportunidad perfecta para poder bajar mínimo al tercer nivel... Solo necesitamos paciencia en lo que surge... Las fechas festivas serán de ayuda para que haya menos tránsito de personas en las instalaciones.
—¡NO NOS VAS A QUITAR LA NAVIDAD! —Luffy gritó alterado, apuntando molesto a la peliblanca.
—No creo que sea necesario cancelar su festividad... No tardará mucho en que organicen algún evento al final del año... Cuando eso suceda... Necesitare tu ayuda, Robin.
—¡NO!... Si va Robin tambien nosotros. —Defendieron Franky, Sanji y Luffy
—¿Y provocar un Ennies Lobby 2.0?... Yo creo que no. —Exhaló agotada. —Todo tiene que ser sutil, entrada por salida. No planeamos una invasión, es recolección de información... Algo que ustedes no creo puedan hacer sin ser descubiertos.
—Tiene un punto. —Señaló Nami
—¡Oi, Podemos ser sigilosos!
—¡Solo duraron cinco minutos en Onigashima antes de que se volviera un total caos! —Usopp se sobresaltó
—¡FUE CULPA DE JAGGY!
—¡TU EMPEZASTE EL ALBOROTO! —Regañó Zoro
—¡TU LO CONTINUASTE! —Sanji reclamó con dientes afilados.
Los reclamos continuaron, demostrando qué en efecto, solo un pequeño grupo de infiltración sería capaz de tomar la misión, necesitando una pieza importante para poder lograrlo. Por lo que Yue dirigió su atención al héroe.
—Necesitamos de tus relaciones con el gobierno... ¿Contamos contigo?
El rubio se mantuvo en silencio con mirada fija durante unos instantes, para después asentir con la cabeza en aprobación.
—¡YOSHA!
—TENGO EL PRESENTIMIENTO QUE ESTO NO SALDRÁ BIEN...
Chopper comenzó a empacar sus herramientas y medicinas, quedándose al final con un pequeño frasco de alcohol. Lo observó con curiosidad mientras recordaba los tubos de ensayo en el árbol, preguntándose sobre su desconocido uso.
—Bakanee... —Llamó el reno, captando su atención.
—¿Qué es lo que habia en tus frascos?
—¿Indagaste en mis cosas? —Expresó en un tono cansado al igual que su expresión.
—Tambien Nami, Shaggy y yo.
—No me lo imaginaba de usted Doctor... Ni de ti Shaggy... En cambio, de Nami y Luffy no me sorprende. —Suspiró. —Creo que ya saben lo que hay en su interior.
—Hongos, pero ¿Para qué? —Agregó la navegante.
—Hongos y cultivos de bacterias de diferentes orígenes... —Corrigió el reno
—Treinta y dos... Desde carne putrefacta, hasta jugos gástricos, cadáveres de larvas de mosca... Tú sabes; Bacterias, esporas, gérmenes, virus... Todo tipo de patógenos.
Robin agudizó la mirada al escuchar el contenido que guardaba dentro de los tubos, notando la actitud relajada de la asistente, que recargó su cabeza en las rodillas, explicando el contenido con naturalidad.
—¿Para qué los coleccionas?
—Inhalar eso es muy peligroso. —Nami pronunció seria.
—¡Casi me desmayo cuando rompí el frasco! —Quejó el capitán con un puchero.
—¡¿ROMPIERON MIS COSAS?!
—Si, es peligroso... Pero no pasa nada grave si los inhalas. —Dijo el capitán como un sabelotodo.
—Luffy san, no puedes asegurar eso, si eres inmune a venenos. —Brook reclamó su confianza.
—Si lo comes puedes enfermar gravemente. —Explicó Chopper
—Dudo que alguien coma esas cosas por voluntad propia. —Dijo Nami con sudor recorriendo su sedosa cabellera
—Hay una opción que te hace falta doctor... —Robin dijo en un tono escalofriante y sudor recorriendo su frente.
—Jejeje~ —Una juguetona sonrisa se dibujó en el rostro de Bakanee, tratando de contener la risa, finalmente logrando sofocarla; abriendo su ojo visible que desprendía una nota desafiante, aguardando con ansias las palabras de la arqueóloga. —Dilo, Robin~san
—Una dosis, y para cuando encuentren la cura será demasiado tarde.
—¿De qué hablas Robin? —Preguntó Franky, pasando saliva
—Si ese coctel de patógenos logra infiltrarse en las venas de alguien, puede acabar con su vida... son elementos que, en teoría podrían estudiarse individualmente para buscar una cura. Pero, puede llegar a ser un tanto complicado dependiendo de lo que sea, ¡Pero tantos en una sola dosis! Es practicamente imposible de curar... Básicamente, es un pase directo a una muerte lenta, creativa y variada. Antes de que siquiera puedan considerar curar uno de los males, el cuerpo se habrá convertido en un festín de desgracias. —Robin explicó con un tono frívolo, dejando en shock a sus compañeros, que voltearon con Bakanee que los veía con una inocente mirada.
—Estas perdiendo la cordura... —Pronunció Jinbei claramente preocupado por la salud mental de la mujer.
—All for One necesita de medicamente para seguir viviendo... Tan solo necesito agregarlo a su suero despues de robar la identidad de una de las enfermeras de Tártaro... —Su atención cambió directamente al símbolo de la paz que se veía helado ante sus palabras. —Y para conocer sus identidades necesito entrar... Ahí es donde entras tú, Yagi Toshinori.
—LA CITA... —Dijo como un susurro, entrelazando sus palabras con los recientes eventos. —¿TOMASTE MI FORMA CUANDO HICISTE LA LLAMADA?
—La verdad es que estoy peleada con su tecnología... No sé cómo conseguir tu voz, así que opté por la manera facil.
—¡PENSABAS TOMAR MI FORMA PARA IR A TÁTARO!
—¿Te~ Puedo acompañar?
—¡NO!
—Entonces sí, pienso hacer eso.
—¡Oi, oi, oi! —Luffy, Usopp y Zoro, agitaron su palma en desaprobación.
—¿Que? No está cooperando. —Reaccionó ofendida por la actitud que tomaban todos, apuntando con ambas manos al héroe.
—COMO FUI HACE POCO... ME NEGARON EL PERMISO.
—Estúpidas reglas ridículas...—Bufó con desprecio
—¡De acuerdo, basta ya!... Claramente sigues alterada y no estas pensando bien las cosas. —Nami objetó, poniendo orden.
—El tiempo avanza... No nos podemos quedar quietos.
—¿Que hay de su promesa de no volver a matar a nadie? —Cuestionó Brook
—No directamente... —Respondió con un puchero. —Y se lo merece.
—Dijiste que tenias que esperar el momento apropiado... ¿Por qué no descansas hasta entonces? —Sugirió Robin. —El tener la mente en blanco te dará mas opciones en las que te podamos ayudar y aligerar la carga.
—¿Lo que hay que buscar ahora son los nombres de los niveles inferiores? —Cuestionó Jinbei
—Rostros y nombres... También del equipo médico de Tartaros.
—Entonces esperemos a que salga la oportunidad que buscas; y que All Might san se encargue de conseguir los nombres del equipo médico... El debe tener contactos en la policia.
—EL PERSONAL ES CLASIFICADO
—Pero puedes intentarlo. —Presionó Franky
—NO DEBERÍA INVOLUCRARME EN LA MUERTE DE...
—Si no llo haces tu, lo hace ella. —Apuntó Zoro a la mujer que tenía la mirada iluminada, aceptando la tarea con gusto.
—LO INTENTARÉ... ¡PERO NADA DE ROBAR MI IDENTIDAD!
—Aguafiestas. —Quejaron Bakanee y Luffy
—¿PUEDES PROMETER ESO?
—Si... Nada de usar tu identidad... Otra vez. —Respondió desilusionada
—¿Por qué no solo invadimos Tartaro y le cortamos la cabeza? —Sugirió Zoro, ocasionando que All Might escupiera sangre por la iniciativa.
—No seas idiota, Marimo... Si hacemos eso nos volveremos enemigos numero uno, y los meteremos en problemas...
—Si la sociedad secreta es algo llevado a cabo a nivel mundial... Seremos objetivo del mundo ¡En una sociedad donde todos los heroes tienen poderes! —Analizó Usopp con cierto temor.
—¡EEEEEEEEEHH! —Chopper gritó alterado
—Wajajajaja, lo dicen como si no lo fueramos ya en nuestro tiempo.
—Ademas son debiles. —Agregó Sanji
—El mayor problema es que mientras todos nos vean como un enemigo, no podremos buscar libremente al usuario del quirk del tiempo... En especial cuando los civiles son obligados a reprimir sus habilidades. —Razonó Jinbei, dejando claro su punto. —Tendrían que ser obligados a usar su poder en contra de las reglas para poder identificar a algun poseedor.
—Exacto... Que invadan Tartaro está fuera de discusión. —Finalizó la peliblanca con una aguda mirada que dejó intranquila a la arqueóloga.
—¿Que tienes en mente? —Cuestionó Robin, notando como parecía haber considerado esa opción sin siquiera sugerirla y recordando sus palabras de las distintas variables que no quería mencionar.
—Nada... Solo analizo las posiblidades y sus consecuencias. —Respondió con una sonrisa nerviosa y simultaneamente satisfactoria, desarrollando en la astuta pirata cierta inquietud.
Sundancer aquí:
Se reanudan las publicaciones los Domingos. (Esta semana, dos capitulos)
Se suspende la versión en ingles de manera indefinida por falta de tiempo.
Espero hayan disfrutado de sus vacaciones ^u
