Universitarios por el mundo: Londres

Los personajes son de Meyer y algunos de la historia SDVU de Maya, yo los cojo para jugar con ellos. Lo que no se reconozca es de mi invención.

Este capitulo va dedicado a Maya, la creadora de la historia de nuestros universitarios favoritos. Sabemos que la tenemos lesionada de la mano, así que el primero va para ella, por ser la única que vive en la capital del Reino Unido, y para que tenga un incentivo para ir a rehabilitación y recuperarse cuanto antes y seguir con sus historias.

El Daily Bruin editada por la asociación de estudiantes de la UCLA estaba de aniversario, no habían podido celebrar sus 100 años porque les había pillado por sorpresa la pandemia del Covid-19, por tanto tuvieron que aplazar la celebración del centenario de la fundación hasta que las cosas mejoraran. La publicación especial que se les ocurrió fue entrevistar a antiguos alumnos y ver si habían conseguido trabajar de lo que habían estudiado. El editor jefe se reunió con el rector, para comunicarle lo que habían decidido y pedirle permiso para revisar los anuarios desde la fundación del periódico en 1919 hasta el 2019, pero incluyeron el ultimo anuario de los estudiantes de la pandemia.

Cuando Will, el redactor jefe, tuvo los anuarios en su poder, acudió a la sede donde el periódico cobraba vida. El primer anuario que abrieron fue el de la promoción 2018/2022 los estudiantes que la pandemia pilló de lleno y que tuvieron que hacer el primer semestre del año 2020 de manera Online, exámenes incluidos; y el segundo semestre de manera semipresencial, es decir una semana iban a clase y la otra la hacían desde casa. Entre esos estudiantes se encontraban Ryan Gibert, Mike Newton, Paul Meraz, Edward Masen, Emmett Swan, Jasper Whitlock, Thomas Hawkins, James Gigandet, Garret Scott, Victoria Twosend, Jhonny Owen, Brad Karev, Damon Chambers, Katherine Gilmore, Felix Marshall, Riley Biers, Demetri Walsh, Santiago Lowell, Royce King y Justin Crawford entre otros estudiantes.

Los editores desplegaron sobre la mesa las fotos de grupo de todas las carreras que se graduaron en ese año. Con el listado de alumnos de cada foto, se quedaron mirando unos a otros. Para saber por quien empezar.

– Estaréis todos de acuerdo que el primero debe ser Justin Crawford – dijo Will – mi hermano no para de hablar de él, dice que fue el mejor capitán que pudieron tener.

– Pero se lo ha tragado la tierra, desde que termino la universidad no se le ha vuelto a ver – respondió Bruce – podría haber tenido una buena carrera como jugador de futbol americano, pero desapareció.

– No se lo puede haber tragado la tierra – Will rodó los ojos – quiero a todos buscando hasta debajo de las piedras si es preciso pero necesito una entrevista, fotos y videos con Justin y su pareja si tiene.

– La ultima noticia es que estaba con Elizabeth Masen – apostilló Johanna – lo sacamos en una de nuestras ediciones.

– Ya pero eso fue cuando ambos estaban en la universidad ahora pueden haber roto su relación, nadie dura para siempre.

– Estos dos sí – objetó Johanna – son viejas almas gemelas que reencarnan cada vez que mueren sus cuerpos físicos y siempre se encuentran.

– Deja de decir bobadas y poneros a buscar necesitamos terminar este numero a tiempo. Será el primero que repartamos cuando empiece el nuevo curso.

Los estudiantes comenzaron a buscar pistas. La hermana de Johanna era amiga de Amanda Bush, novia de Ian Reynolds en la universidad, ellos eran amigos del capitán y la princesa, es decir Justin y Lizzie. Así que nada más llegar a casa la llamó. Susan estaba terminando la carrera en San Diego, gracias a una beca que le habían ofrecido. Mediante las influencias de su hermana, Johanna supo que Justin residía en Londres.

Consiguieron el teléfono móvil de Justin y quedaron en verse en la capital del Reino Unido. Con el permiso del rector y un poco de dinero del periódico con el que pagaron los billetes, fueron al encuentro de Justin. Johanna y Dorian acudieron al aeropuerto internacional de Los Ángeles, su vuelo salía a la una del medio día. Llegaron a Heathrow a las nueve de la noche, se alojaron en el Ibis Budget London Heathrow Central, solo era por esa noche.

Al amanecer, sufriendo un poco de jetlag, acudieron delante de Buckingham Palace, donde Justin ya les estaba esperando.

– Hola Justin – saludó Johanna – ¿qué te ha traído a Londres?

– Hola – respondió el antiguo capitán – pues me trajo el amor

– ¿Una chica londinense conquistó tu corazón? – Johanna mostró un poco de tristeza porque siempre pensó que el capitán y la princesa envejecerían juntos.

– No, la única mujer de mi vida siempre ha sido, es y será Elizabeth.

– ¿La reina de Inglaterra? – dijo medio en broma Dorian – pero si esa mujer tiene más años que nuestro periódico.

– La reina no, la princesa, pero de la UCLA, Lizzie Masen

– Cuéntanos donde estamos – dijo Johanna tras las risas que ocasionó el comentario de Justin.

–Estamos delante del Buckingham Palace, residencia oficial de la reina Isabel – Justin señaló el enorme edificio que tenia a sus espaldas – La casa que constituye el núcleo original del palacio fue construida por el I duque de Buckhingham y Normamby en 1703.

–Es decir que no era casa de reyes

–No, era una casa de la aristocracia londinense, paso a manos de la monarquía en 1762. En 1826 el hijo de Jorge III, lo convirtió en palacio.

–Tengo entendido que no solo es la residencia de la monarca inglesa.

–También se utiliza para ceremonias oficiales y visitas de estados. Una parte sustancial de la Royal Collection se alberga en él.

–¿Y si quisiéramos acceder?

–El palacio no es propiedad de la reina, es de la nación, lo que pasa que uno no puede entrar como Pedro por su casa, las colecciones se pueden visitar en determinadas fechas del año. Existe la opción de visitar las habitaciones del Palacio.

–¿Como es que Lizzie y tú terminasteis aquí en Londres?

–Eso prefiero que os lo cuente ella, porque si lo hago yo, igual me toca dormir en el jardín.

Los tres se ríen mientras empiezan a caminar por las calles de Londres: Buckingham Gate, Palace Street y Catherine pl 57.

– Esta es la casa donde vivimos – dijo Justin cuando llegaron a una construcción de cuatro alturas, fachada blanca y un antejardin vallado.

– Una casa impresionante, ¿es vuestra?

– No, vivimos de alquiler, pagamos 2.000 libras al mes. Unos 2.352,65 dólares

–En la UCLA estudiabas medicina deportiva y fisioterapia – Justin asintió a las palabras de Johanna – si no hubieras salido del país, tengo entendido que te esperaba una prometedora carrera como jugador de futbol americano.

–Así es, en parte hecho de menos jugar pero no me arrepiento haber dejado atrás aquella oportunidad – Justin abrió la puerta de casa – darme un momento que voy a por las llaves del coche.

Johanna y Dorian, se quedaron esperando fuera. Ambos estaban impacientes por saber que era lo que había llevado a la pareja perfecta a cruzar el Atlántico, pero parece que para eso tocaba esperar. El antiguo capitán, salió poco después con una pequeña bolsa y las llaves en la mano. En la calle un Bentley que no sabia decir si era gris o azul parpadeó cuando Justin accionó el mando a distancia. Johanna fue hacia la puerta de la derecha.

– Ese es mi sitio – dijo Justin entre risas.

–Cierto, que estos ingleses conducen por el lado contrario – Johanna lo acompañó en las risas – ¿fue difícil acostumbraros al cambio de carril?

– Al principio íbamos a todos lados en transporte publico, temíamos provocar un accidente, pero nos planteamos que no podíamos estar siempre así. Fuimos a una autoescuela, les explicamos nuestro caso, hicimos practicas, le perdimos el miedo a conducir por el lado contrario y listo.

Cuando subieron en el coche, tanto Johanna como Dorian se fijaron en lo que iba en el asiento trasero pero no dijeron nada, supongo que en algún momento se lo contarían. Justin llevaba música de grupos norteamericanos en su coche, durante el trayecto no hablaban. Aparcó el coche en Great College st. Fueron andando hasta la Abadía de Westminster.

– Esta es la Abadía de Westminster de estilo gótico data entre los años 1245 y 1517, aunque la original era de estilo románico. De 1540 a 1550 se convirtió en catedral.

– Estas familiarizado con la ciudad y su patrimonio.

–Cuando tienes en casa a una mujer que le gusta estar al día de todo, y ver series y películas pues uno se instruye.

–Por cierto, hemos hablado de ella, pero no sabemos donde está Lizzie

–Esta trabajando, luego iremos a por ella y os dejaré mientras hago unos recados.

Justin terminó de contarles sobre la abadía, situada al lado del palacio de Westminster, perteneciente a la iglesia anglicana y lugar tradicional para las coronaciones y entierros de los monarcas. Formaba parte del patrimonio de la humanidad de la UNESCO desde 1987.

–Desde la coronación de Guillermo el Conquistador en 1066, todos los monarcas ingleses se han coronado aquí. Excepto Matilde I, Eduardo V, Juana I y Eduardo VIII que no llegaron al trono.

–¿Quien se encarga de llevar a cabo esas coronaciones?

– El arzobispo de Canterbury. No es habitual, pero algunos miembros de la familia real se han casado aquí.

En la abadía estaban enterrados los monarcas y otras personas de la realeza. Personas ilustres como Charles Darwin, William Turner, Isaac Newton, Charles Dickens y Stephen Hawking entre otros, estaban en el llamado Rincon de los poetas, además había otros muchos sepulcros de aristócratas, monjes y personas relacionadas con la abadía. Justin, Johanna y Dorian habían sacado unos minutos para entrar a ver la majestuosa edificación.

– ¿Cuanto tiempo lleváis en Londres?

– En junio hará tres años – respondió el capitán, llevándolos de camino al palacio de Westminster.

–¿Y solo trabaja Lizzie?

– Trabajamos los dos, yo hoy tengo el día libre, bueno más bien he cambiado el turno con un compañero.

Justin les enseñó por fuera el edificio que albergaba las dos cámaras del Parlamento del Reino Unido, la Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes, situado a la orilla norte del rio Támesis, cerca de varios edificios gubernamentales en Whitehall. El palacio fue reconstruido en el siglo XIX, el 16 de octubre de 1834 un incendio originado en la Cámara de los Lores destruyó la mayor parte del palacio. En 1941 la Cámara de los comunes fue destruida por las bombas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial.

Se realizaban importantes actos de Estado, la más importante la ceremonia de apertura del Parlamento. La torre más alta del palacio era la Torre Victoria con 98,5 metros, era cuadrada y estaba situada al sudoeste del edificio, en su interior se encontraba la Oficina de Registro de la Cámara de los Lores, donde se custodiaban los registros de ambas cámaras. Si en su cima ondeaba el Estandarte Real el monarca británico estaba presente en palacio sino, ondeaba la Union Jack. En su base se situaba la entrada del monarca, por donde este ingresaba al palacio para los actos ceremoniales.

La torre central se levantaba cerca del centro del palacio, media 91 metros y era la más pequeña de las tres principales. Poseía un pináculo y se ubicaba encima del vestíbulo central, su forma era octogonal, funcionaba como entrada de aire de alto nivel.

–La Torre Isabel es la más famosa y esta situada al lado noroeste, mide 96 metros de altura. Tiene un reloj conocido como el Gran Reloj de Westminster, con una cara para cada uno de los cuatro lados de la torre.

–¿Pero ese no es el Big Ben?

–Antiguamente se llamaba la Torre del Reloj – añadió Justin – contiene cinco campanas que repican los cuartos de las horas. La más grande y famosa de las campanas es Big Ben, que repica cada hora.

La barriga de Dorian eligió ese mismo momento para decir que tenia hambre así que Justin los llevó hasta un restaurante, el Cellarium Café & Terrace, se sentaron en una mesa y pidieron Beef Wellington, lomo de ternera cocinado en rollo de hojaldre sobre una cama de picadillo de verduras con cebollas y champiñones.

–Esto no lo encuentras en todos los restaurantes, pero como podéis apreciar esta muy bueno – dijo Justin cuando ya se habían llevado los platos.

–Nunca había probado nada como esto.

–Nosotros lo descubrimos por casualidad, fue uno de los motivos por los que nos quedamos aquí, el otro fue el trabajo de Lizzie.

– Aun no nos has dicho en que trabajas tú.

–Me reservo el día de mañana para enseñaros mi trabajo. Yo ahora me voy a hacer la compra, pero os voy a dejar con Lizzie que está a punto de salir de su trabajo y estoy cien por cien seguro que os responderá lo que queráis.

Justin se marchó dejando a Johanna y Dorian muy sorprendidos. Poco después Lizzie con su sonrisa y vitalidad de siempre apareció para hacerles compañía.

–Que alegría me da ver caras de Estados Unidos –dijo Lizzie abrazando a sus dos visitantes – aquí quitando a tres o cuatro personas todos tienen cara larga, debe ser que les falta horas de sol o algo.

Los tres se rieron. Se pusieron al día de lo que habían visto con Justin y lo que este les había contado. Lizzie les mostró el barrio donde ella trabajaba Holborn, donde se concentraban los abogados y los periodistas, era el Londres jurídico, conservaba edificios del siglo XV, en otros tiempos fue un importante distrito comercial.

–Yo trabajo en los laboratorios que dependen de los juzgados de la corte judicial de Londres – explicó Lizzie – me tienen para arriba y para abajo, pero bueno estoy en mi salsa, sabéis que no paro.

– Entonces has conseguido trabajar de lo que estudiaste

–Estudie criminologia y me dedico a ello.

Mientras que Lizzie les contaba que hacia en su trabajo, les mostró la Catedral de San Pablo, la Torre de Londres y la Tower Bridge, situados en The City, el distrito financiero de la ciudad, sede de la Bolsa de Valores y el Banco de Inglaterra. Su nombre completo era City of London, era la parte más antigua de Londres, el núcleo de la ciudad en la época medieval, el distrito financiero más influyente e importante del mundo. En él vivían nueve mil personas, pero trabajaban más de 320.000. Se dividía en los barrios de Aldgate, Barbican, Blackfriars, donde estaba la parada de metro que Lizzie cogía para ir a su casa y parte de los barrios de Farringdon y Temple.

– Siempre vengo a trabajar en metro – dijo Lizzie antes de que dijeran algo – así aprovecho y hago algo de ejercicio mientras ando desde la parada hasta casa o hasta el trabajo.

– Justin nos ha dicho que dejaba que fueras tú quien contaras la historia de porque terminasteis aquí

–Quedamos así cuando me comentó que veníais –dijo con una sonrisa en sus labios – supongo que habréis visto la silla de bebe en el coche.

–Nos ha sorprendido verla, pero no que tuvierais un hijo – respondió Johanna

– El motivo de quedarnos aquí fue nuestro hijo Mathew – a Lizzie se le iluminó la cara cuando habló de su pequeño – me enteré que estaba embarazada el día de la graduación de Justin.

– Por eso ese día él salia tan contento en las fotos – comentó Dorian recordando la gran sonrisa que el capitán tenia en la foto del anuario y de grupo.

–Se lo dijimos a nuestros padres, que se alegraron por nosotros.

A la mente de Lizzie llegó el recuerdo de la discusión de su padre y su suegro cuando se enteraron que iba a ser abuelos, peleaban por ver de que equipo de futbol seria el pequeño o pequeña que venia en camino, pero se llevaron una gran desilusión cuando con sus balbuceos de niño de dos años dijo que era del Liverpol, tanto Justin como ella se rieron de la cara de ambos abuelos que ya estaban dispuestos a comprarle la equipacion.

– Nos casamos en una ceremonia intima – Lizzie rememoraba ese día, donde con un vestido de novia sencillo y rodeada de su familia y sus amigos le dio el si quiero al amor de su vida – y nos fuimos de luna de miel a Francia, Italia e Inglaterra.

– Pero Justin se graduó un año antes que terminaras la carrera.

– Si, nuestro ultimo destino fue Londres, aquí conocí a una chica, que hoy es mi compañera de trabajo, se llama Amaia. Decidí transferir mi expediente a la Universidad de Londres y terminar aquí mi carrera, lejos de habladurías y problemas.

– ¿Así sin más?

–No, cuando empecé el tramite, el rector me llamó para preguntar porque lo hacia y cuando me sacó el motivo, no se lo puse fácil, me ofreció hacer clases Online y los exámenes por separado a mis compañeros, pero le dije que no, que lo mio no era quedarme encerrada en casa, pero no quería pasar por otro episodio como aquel.

Lizzie sacudió la cabeza para sacar el triste recuerdo que se formó, y por el cual rompió con Justin la primera vez. No quería que ese momento opacara la alegría que le hacía la visita de Johanna y Dorian.

–¿Y con solo la carrera estas trabajando?

–No, hice un máster en medicina forense, y a partir de ahí pues trabajé. Conocí a Amaia un día que estaba haciendo su trabajo en campo abierto, me sentí identificada con ella y me presenté. Al principió pensó que estaba loca, enserio la vi a punto de ponerse a gritar pidiendo socorro, pero luego le empecé a contar que estaba estudiando criminologia y ya empezó a comprender mi locura. A partir de ahí forjamos una solida amistad.

Lizzie, aparte de su trabajo iba hablando de cada parada que hacia el metro hasta que llegaron a la que ellos descendían, la parada de St. James Park, les quedaba un buen camino hasta llegar a casa, pero se les pasó rápido porque iban hablando.

– ¿Y donde lleváis a Mathew cuando estáis trabajando?

– Va a la guardería Coin Street, está relativamente cerca de mi trabajo, por si pasa algo y tengo que ir rápido. De momento no me han llamado con ninguna urgencia. Y esperemos que siga así. Matt es un buen niño.

En casa les estaba esperando Justin con un adormilado niño en brazos, el pequeño era una copia exacta de su padre, pero con los ojos de su madre. Se espabiló cuando vio entrar a su madre y saltó a sus brazos que lo llenó de besos que hicieron reír al pequeño.

–Bienvenidos a nuestra casa – dijo Justin cuando todos dejaron de reír por ver al pequeño luchar contra los besos de su madre.

–Parece grande.

–Tiene cuatro plantas, en esta planta se encuentra el salón, el comedor, la cocina un aseo y el jardín trasero. En la primera planta, la habitación de invitados, un baño y el estudio. En el segundo la habitación principal con baño y el vestidor. Y arriba del todo esta la habitación de Matt y la habitación de juego.

–Que alto habéis puesto al pequeño – se sorprendió Johanna.

–La casa estaba configurada así, mientras que era un bebé estuvo durmiendo con nosotros.

Johanna y Dorian compartieron la tarde con el pequeño y sus padres. Matt enseguida se los metió en sus pequeñas manos y conquistó sus corazones. Justin anunció que la escena estaba servida, había hecho Shephers's Pie, que aunque parecía una bomba calórica, tenia una pinta maravillosa y olía muy bien. Cuando se sentaron a la mesa Johanna y Dorian observaron que era un pastel de carne hecho por una capa de carne de cordero picada, zanahorias y guisantes, cubierta con puré de patata y queso.

–A pesar del embarazo ¿por que no os quedasteis en Estados Unidos?

–Lo pensamos, porque sabia que Justin tenia una carrera como jugador, pero quería alejarme de personas toxicas.

Johanna sabía a quien se refería Lizzie, las tres víboras de las Kappa siempre les hacían la vida imposible a Lizzie y a sus amigas, a pesar que dos de ellas fueran primas de la princesa, pero aunque se moría por saber, no preguntó nada más.

–¿Que es lo que más echáis de menos de vuestra antigua vida?

–Echamos de menos a la familia y a los amigos, bueno más que verlos el poder abrazarlos porque solemos hablar con ellos a menudo.

Hablaron un poco más de la lluviosa ciudad de Londres, lo que más les gustaba, como por ejemplo que la gente iba a la suya y no se metía en la vida de nadie. Y lo que menos, que no había muchos días de sol, cosa que echaban de menos de Los Ángeles. Johanna y Dorian durmieron en casa de Justin y Lizzie, en la habitación de invitados, esa que usaban los abuelos cuando iban de visita las pocas veces que podían hacerlo.

A la mañana siguiente una llamada en la puerta los hizo levantarse. Al salir con los pijamas, se encontraron con Justin preparando el desayuno, Lizzie hablando en el piso superior con su hijo, ellos subieron a cambiarse, aprovecharían lo que la familia Crawford–Masen tuvieran para enseñarles. Con los cinco preparados se subieron al coche. Dejaron a Lizzie en los laboratorios, solo trabajaría medio día y se encargaría de recoger a Matt de la guardería antes de ir a casa. Llevaron a Matt a Coin Street, en Waterloo. Johanna recordó cuando Lizzie dijo que la guardería estaba cerca de su trabajo, y para ella, el laboratorio de Lizzie y la Coin Street no estaban precisamente cerca. Por ultimo se dirigieron por las calles de la ciudad hasta coger la A23, se dirigieron a Stoke d'Abernon, Cobham, Surrey. Justin aparcó el coche donde lo hacia normalmente y bajó.

–¿Donde nos has traído?

–Esto es el Combham Training Centre, es el campo de entrenamiento del Chelsea Football Club y mi lugar de trabajo.

– ¿Ahora te has hecho jugador de futbol del Chelsea?

–No, cuido de las lesiones de los jugadores. Estudie medicina deportiva y fisioterapia, así que a eso me dedico.

–Esto es muy nuevo.

–Se inauguró en 2007, alberga todas las categorías del club, desde el primer equipo hasta los equipos de reservas, juveniles y femenino. Tiene lo ultimo en formación, rehabilitación, salud, campos y medios de comunicación – enumeró Justin – tiene 30 campos de futbol, un campo indoor de césped artificial, un estudio de televisión, una sala de prensa, piscinas de inmersión fría, una sauna, una sala de vapor, una piscina HydroWorx, una piscina de hidroterapia y un centro medico que es donde yo trabajo.

Mientras Justin iba enumerando lo que había, los tres iban adentrándose al lugar. Dorian que se encargaba de grabar tuvo que dejar la cámara y pasar a tomar notas, no tenían permitido grabar en las instalaciones, para preservar la privacidad de los jugadores. El complejo les sorprendió puesto que un tercio de las instalaciones se encontraban bajo tierra, con un tragaluz que iluminaba las habitaciones del sótano y reducir el uso de energía.

Estuvieron con Justin, observando como se ocupaba de las revisiones médicas de los jugadores, tanto del equipo principal como del resto de categorías. La vuelta a casa, lo hicieronpor Lambeth ubicado al sur del Támesis y dividido en los barrios de Brixton donde se concentra la población inmigrante de Londres, Clapham, Gipsy Hill, Herne Hill, Kennington, Lambeth, Stockwell, Streatham, Tulse Hill, Wauxhall y West Norwood. Dieron una vuelta en el London Eye, visitaron las instalaciones del Royal Festival Hall.

–El Royal Festival Hall es una sala de conciertos, baile y conferencias de la ciudad, es la sede de la Orquesta Filarmónica de Londres, de conciertos y recitales de música clásica. En 1960 se hizo aquí el Festival de Eurovisión.

Dorian y Johanna lo miraron porque no sabían de que estaba hablando. Justin no se dio cuenta, y si lo hizo no tuvo ganas de dar más indicaciones. Les enseñó el edificio del BFI IMAX, un cine IMAX al norte de la estación de Waterloo.

–Tenemos previsto venir a este cine, pero de momento no hemos podido. Cuando encontremos niñera – dijo Justin entre risas – estoy intentado convencer a Maya, pero Lizzie dice que ella no va a ese cine sin su amiga, así que necesitamos otra babysitter.

En Southwark ubicado al sur del Támesis, antiguamente abundaban los ladrones y los burdeles, actualmente era una de las zonas modernas y de moda. No se pararon mucho, pero vieron la catedral de Southwark, el Golden Hinde, el Winchester Palace, The Shard, Shakespeare's Globe Teathre y la Tate Modern.

Por ultimo visitaron el palacio de Lambeth de origen medieval y que era la residencia oficial del arzobispo de Canterbury en Londres y el Garden Museum el único de arte, historia y diseño de jardines, situado en la iglesia victoriana de St. Mary-at-Lambeth.

Llegaron a casa donde les esperaban Matt y Lizzie, con la mesa puesta y unos platos de fish and chips.

–No he preguntado, espero que os guste el pescado rebozado.

–Si no te preocupes, comemos de todo, no tenemos ninguna alergia.

La noche pasó rápidamente, a la mañana siguiente se levantaron los cinco, era el penúltimo día que Johanna y Dorian estaban de visita en Londres, por tanto Justin y Lizzie se habían cogido el día libre para pasarlo con ellos.

Se dispusieron a visitar la ciudad. Londres se dividía en treinta y tres distritos que a su vez se dividían en barrios. Los Crawford–Masen, vivían en Westminster, que desde siempre había sido el centro político, de la realeza y de la autoridad religiosa, desde el siglo XIV también era el lugar del Parlamento. Estaba ubicado en el West End al norte del Támesis. Acogía los barrios de Aldwych; Belgravia; Charing Chross; Chinatown, que solo eran dos calles pero con mucha vida, adornadas con luces rojas, los típicos dragones y los restaurantes donde pararon a comer; Covent Garden, que actualmente era el corazón del turismo de Londres, en la plaza donde se situaba el mercado y en los alrededores se encontraban todo tipo de tiendas, pubs y restaurantes, de vez en cuando, podía disfrutarse algún espectáculo de teatro en la plaza; Knigtbridge; Lisson Grove; Little Venice; Maida Vale; Marylebone; Mayfair, la zona más cara de Londres, ubicada al oeste de Regent Street y separaba de St. James por Piccadilly famosa por sus grandes pantallas encendidas las veinticuatro horas y que solo se apagaron cuando murieron Wiston Churchill y Diana de Gales; Millbank; Paddington; Pimlico; Soho, la zona de ocio de Londres, de los barrios más vibrantes y con más vida de la ciudad; St. Jame's, barrio donde residía la familia y que junto a Mayfair era de los más ricos de la ciudad, con tiendas elegantes y edificios históricos; St. John's Wood, Westminster y una parte del barrio del Temple. Prestaron más atención a la catedral de Westminster, Trafalgar Square, Downing Street, Hyde Park, Green Park, St. James park, Temple Church y la Somerset House.

Como estaban cerca de The City, se acercaron a ver dos monumentos que Lizzie no les había enseñado por falta de tiempo una era el Monument y la otra el Guilhall.

– Este es el Monument – Justin señaló una columna dórica – mide 61 metros y está situada a 61 metros de donde se inició el Gran Incendió de Londres. A la columna la corona una urna dorada en forma de fuego. Y aquí en la base hay una escultura que representa la destrucción de la City.

Lizzie les explicó que la escultura representaba al rey Carlos II y su hermano Jacobo rodeados por la Libertad, la Arquitectura y la Ciencia dando instrucciones para reconstruir la ciudad. Como se podía subir a la cima por una escalera de caracol. Justin, Dorian y Johanna subieron hasta arriba y tuvieron una vista magnifica de Londres.

–El Guilhall se construyó entre 1411 y 1440 para reflejar la importancia de la elite gobernante de Londres – introdujo Lizzie cuando estuvieron delante del edificio. En el incendio de 1666 y en los bombardeos de la segunda guerra mundial sufrió graves daños, la cripta se puede visitar mediante una visita guiada.

Su siguiente visita fue al estadio donde el Chelsea disputaba sus partidos de la Premier League, en la ciudad de Hammersmith y Fulham, Justin se disculpó por no poder entrar, le hubiera gustado enseñarles la diferencia entre los estadios del futbol americano y los de futbol europeo.

Su siguiente parada fue Kensington y Chelsea situado al oeste de Londres y habitada por la clase alta, el núcleo principal era el Kensington Palace. Pasearon por South Kensington donde contemplaron los lujosos coches que los vecinos tenían aparcados. En esta zona se encontraban las calles más elegantes de la ciudad. Al norte se encontraba el Hyde Park en el barrio de Notting Hill donde fueron a visitar el mercado de Portobello. Ademas visitaron Kensington Palace y Kensington Gardens, Royal Albert Hall, Victoria & Albert museum, el museo natural de historia y el Chelsea Physic Garden.

Pasaron por Camden, al norte de la City, Westminster y Kensington–Chelsea, era una zona bastante céntrica de la ciudad, pararon a cenar. En él se emplazaban tres de las estaciones más importantes de la ciudad. Se dividía en los distritos de Belsize Parl; Bloomsbury, donde visitaron el British Museum y algunas plazas y jardines del siglo XVIII; Candem Town, uno de los sitios más populares, en el Candem Market por el que pasearon se encontraron a felices familias entre el jolgorio; Chalk Farm; Criklewood; Dartmouth Park; Fitzrovia; Frognal; Gospel Oak; Hampstead; Highgate; Holborn, lugar de trabajo de Lizzie; Kentihs Town; Kilburn; King's Cross; Primrose Hill; Somerstown; St. Giles; St. Pancras; Swiss Cotage y West Hampstead.

–Mi pasatiempo favorito es pasar tiempo con familia y amigos – dijo Lizzie mientras se dirigían al parque de Primrose Hill. Ya que no puedo tener a mis amigos de toda la vida, aquí disfruto de la persona británica que puedo llamar amiga. Hemos quedado con Maya y su pareja, es como una tía para Matt.

Johanna y Dorian conocieron a los dos amigos de la pareja, al principio parecían un poco vergonzosos, pero conforme iba pasando la velada todos se iban soltando. Cuando se hizo una prudente hora volvieron a casa después de despedirse de aquellas personas que habían conocido. Johanna sabia que no las volvería a ver pero las llevaría en el corazón.

–Bueno este es nuestro ultimo día – dijo Dorian cuando se levantaron e hicieron las maletas.

Bajaron al desayuno, el pequeño Matt ya no estaba, su padre lo había llevado a la guardería. Hoy Lizzie estaría con ellos. Visitaron Tower Hamlets al este de la City, ocupaba gran parte del East End en la orilla norte del Támesis. Aquí visitaron la torre de Londres, St. Katharine's Dock y el Tower Bridge.

Pasaron por Greenwich emplazada al sureste, ligado a la historia marítima por eso se encontraba allí el Museo Marítimo, famoso por el paso del meridiano de Greenwich. En esta zona visitaron Greenwich Park, Royal Observatory, Ranger's House, Old Royal Naval College, Queen's House y Cutty Sark.

–Como vayamos a ver un museo más, me voy al aeropuerto y te espero allí – se quejó Dorian, que estaba un poco cansado de entrar a estos edificios por muy interesantes que fueran.

–No te quejes que ya os voy a hacer la ultima visita antes de llevaros al aeropuerto – dijo Lizzie.

La ultima visita se la dejaron a la ciudad de Richmond upon Thames de las menos urbanizadas y la única que ocupaba las dos orillas del rio. Gran parte de su territorio estaba formado por parques entre los que se encontraban los Reales Jardines Botánicos de Kew y el Richmond Park. Ellos visitaron Hampton Court.

Cuando terminaron tomaron un té con pastas en una de las cafeterías del aeropuerto. Johanna sabia que se habían dejado distritos de Londres por visitar como Islington, Brent, Lewisham o Harrow, pero seguro que volvería en otra ocasión para recorrer lo que le faltara.

–Nuestro viaje a llegado a su fin – dijo Johanna – pero nos gustaría saber si os volveremos a ver en algún momento por Estados Unidos.

–No sé cuando, pero si volveremos, no queremos que Matt crezca lejos de la familia.

–Nos ha encantado estar estos días con vosotros, habéis sido unos anfitriones excelentes. Esperamos veros pronto por Los Ángeles.

Dorian y Johanna subieron a su avión, dispuestos a volver a casa. En sus maletas una nueva experiencia. Habían conocido a dos personas de Inglaterra, Amaia y Thomas. Habían hablado con Justin y Lizzie que cuando estaban en la UCLA parecían de la realeza, inaccesibles, pero en realidad no lo eran. Se habían enamorado de su hijo Matt. Y habían conocido una ciudad que pensaban que nunca visitarían.

Al llegar a casa les quedaba mucho trabajo, editar el material visual, transcribir la entrevista en papel y sobre todo preparar la siguiente experiencia.

FIN

Aquí tenemos la primera entrega, espero que os haya gustado. Las próximas serán parecidas pero no iguales. ¿Quien será el próximo universitario que viaje? ¿Donde? ¿Por qué? ¿Que aventuras le ocurrirán? Sabéis que podéis dejar reviews.