Disclaimer: Nada de esto me pertenece, la saga crepúsculo es propiedad de Stephenie Meyer y la trama es del webtoon y la novela "La emperatriz divorciada" de Alphatart y con arte de Sumpul, yo solo busco entretener y que más personas conozcan esta historia.


Capítulo 471. Aunque Sólo Crucemos Miradas (2)

Vladimir esbozó una sonrisa curiosa ante la respuesta de Tom.

—Veo que tienes un cuerpo muy caro.

Tom pareció disgustado.

—Tal vez.

Vladimir se cruzó de brazos.

—Tendrás que repetirlo luego. Delante de la Corte de la Alianza. ¿Te parece bien? Ahora todavía puedes cambiar de motivo. Haré la vista gorda.

Tom se encogió de hombros.

—Me parece bien.

—Si tú lo dices.

Había asegurado que no tendría inconveniente, así que no había necesidad de ser más considerado. Vladimir sacó una libreta y anotó el motivo. Luego preguntó.

—Dado que la Emperatriz Irina del Imperio Oriental nació esclava, no podía convertirse en emperatriz. Por lo tanto, cualquier trato que haya hecho con la anterior emperatriz se considera ilegítimo. Además, como la Emperatriz Irina hizo el acuerdo arbitrariamente, la transacción es inválida. ¿Es eso correcto?

—No.

Vladimir levantó una ceja.

—¿Estás refutando esto?

—Hay una condición necesaria para que el ascenso de Irina a la posición de emperatriz pueda considerarse nulo.

Respondió Tom.

—El Emperador Jasper no debía saber que era esclava antes de nombrarla Emperatriz.

Ahora ambas cejas de Vladimir se alzaron.

—Duque Riddle, ¿afirma que el Emperador Jasper lo sabía y lo consintió?

—Sí. Por lo tanto, todos los acuerdos que hizo son válidos ya que fue una emperatriz legítima.

Tom sonrió satisfecho.

Vladimir anotó todos los detalles en la libreta. Su pluma se deslizaba afanosamente. De repente, la mano de Vladimir se detuvo. Debía de tener algo más que escribir, pero aun así bajó lentamente la libreta.

—Por casualidad, ¿sabe algo de todo esto el Emperador del Imperio Occidental?

Los ojos de Tom se entrecerraron.

—¿Por qué preguntas por él?

—Los dos pasaban mucho tiempo juntos antes de su ascenso al trono.

Tom se encogió de hombros.

—Pasábamos mucho tiempo juntos, pero en este caso, no actuamos en conjunto.

—Ya veo.

Vladimir dio un golpecito con el pie.

—Sin embargo, en este complicado escenario, al final él salió beneficiado.

—Se casó con la mujer de la que se enamoró. A eso no se le puede llamar beneficiarse. Sería demasiado calculador.

—El matrimonio siempre ha sido un movimiento calculado, Duque Riddle.

Vladimir volvió a escribir en su libreta. Tom esperó. Un momento después, la pluma de Vladimir volvió a detenerse.

—Ah, Duque Riddle, esto no concierne al puerto, pero...

—Pregunte.

—¿Está el Emperador Edward involucrado con el fenómeno de la disminución del maná?

Tom hizo una ligera pausa.

—No.

—Ya veo.

Vladimir asintió y sonrió. Escribió una última frase en su libreta.

- El Duque Riddle sabe algo.


En medio de la noche, alguien susurró a Jasper.

—Su Majestad, Su Majestad.

Abrió los ojos y se incorporó. El Marqués Karl, que tenía la boca cerca de su oreja, retrocedió rápidamente. Jasper miró el reloj. Eran las dos de la madrugada.

—Le pido disculpas, Su Majestad. Me quedé esperando, pero no se despertaba...

—No, hiciste lo correcto.

Jasper miró el reloj con el ceño fruncido. Otras veces se había despertado solo, poco después de ponerse el sol. Pero hoy había pasado bastante tiempo. En realidad, había estado ocurriendo durante los últimos días. De hecho, basado en la fecha de hoy, hubo un día en el que no se despertó en absoluto.

Eso inquietó a Jasper.

—Tráeme agua fría.

—Sí, Su Majestad.

El Marqués Karl rápidamente volvió con el agua. Una vez que Jasper la aceptó, Karl dio un paso atrás.

—He investigado algunas de las cosas que Su Majestad ordenó.

—¿Que yo ordené?

Frunció el ceño.

—Ah. ¿Sobre combinar mis personalidades?

—Sí. Su Majestad sufrió una gran conmoción, que dividió su personalidad. Para que vuelva a su estado original, el médico del palacio y yo estamos de acuerdo en que debe reunirse con la persona que le provocó esa conmoción.

—Ya lo intentamos, pero no surtió efecto.

—Es cierto. Cuando te reuniste con Isabella, no hubo efecto. Al principio. Pero después de que tu personalidad del día la viera, y se acostumbrara más a tus deberes como emperador, comenzaste a actuar de forma diferente.

La declaración del Marqués Karl sonaba peligrosa.

—La diferencia entre mis dos personalidades es cada vez mayor.

—Sí, Su Majestad. Mi opinión es que, en vez de aplacar su mente conmocionada con otro incidente impactante, debemos pensar en este incidente como en una herida. Debemos encontrar una manera de sanarla.

Si Su Majestad pudiera ver a Glorym una vez más... Pero está muerta. No hay forma de verla.

El Marqués Karl estudió detenidamente el rostro de Jasper.

—Su Majestad, ¿podría explicar con más detalle lo que pasó ese día?

—Tuve una visión de Irina yendo tras Isabella. Salté para intentar salvarla... En el sueño, vi a una niña cubierta de sangre. Probablemente era Glorym.

—¿Y después de eso?

—Después de eso, me desperté como ahora.

Jasper suspiró y se levantó de la cama. Sacudió la cabeza, como si estuviera mareado, y luego se balanceó.

—No sé si ahí está la clave.

—Lo pensaré.

A continuación, el Marqués Karl informó de algunos asuntos urgentes.

Jasper se acercó a la mesa y selló sus propuestas o las rechazó. Tratados los asuntos urgentes, Jasper se dirigió de nuevo a la cama, como era habitual.

—Su Majestad, el Comandante de la 4ª División de los Caballeros Transnacionales estuvo aquí.

El Marqués Karl le contó las exigencias de Vladimir para llegar a un acuerdo. Luego le contó lo que había decidido el Jasper del día.

—Así que la alianza intenta sacar provecho del conflicto entre el Imperio Oriental y el Occidental.

Jasper murmuró. Se quedó pensativo por un momento.

—Presenta testimonios firmados de nobles y funcionarios sobre la aparición del Duque Riddle en la prueba de paternidad del templo con Ian. Explica cómo él fue el único que estuvo a su lado cuando circularon rumores sobre su estatus de esclava. Además, detalla los diversos escándalos que resultaron de su cercanía.

Planeaba demostrar la invalidez de los documentos, basándose en el hecho de que el Duque Riddle sabía desde un principio que Irina era una esclava.

Pero el Marqués Karl no terminó ahí.

—Su Majestad, hay una cosa más que debo decirle.

—¿Qué es?

—El Emperador Edward ha pedido que le demos la ubicación de Ian.

Jasper frunció el ceño.

—No se la des.

—Dijo que Isabella quería saber.

—Uh. Dile a ese tonto que aparece durante el día que al menos se encargue de eso.