Capitulo numero 14, el último de Little Garde. Recuerden que me tomare entre dos o tres semanas para adelantar un poco. Vayamos a los comentarios.

Klaus - Si, en su hogar no quedo nadie. La respuesta de las marcas de Morgana están en este capitulo.

Neo Magician 96 - Más que un miserable, ¿verdad? Sabemos que estará en Alabasta, veamos lo que sucede con el en ese arco. Ya el próximo empezamos con Drum.

The Super Star Infinite - No me importaría tomar un trozo de esa tarta, aunque no creo ser la única, ¿verdad? Tendrás que esperar un poco o por PM, pero seria un poco spoiler para más adelante, pero te prometo que se entenderá, aunque puedo dar una pista y tiene que ver con lo contado en el capitulo 9, cuando Morgana habla con Zoro.

Comentarios revisados... listos, capitulo preparado... listo, ansiosa... listo. Adelante historia.


– Diálogo –

"– Pensamientos –"

Relato

Datos importantes


Capítulo 14

La situación no podía ser peor, los miembros de la Baroque Works tienen atrapados en aquella cera a Zoro, Nami, Morgana, Vivi y el gigante Brogy, de Sanji todavía no daba señales de él. Zoro decidió extender un brazo con una de sus espadas. Nami preguntó sin creerlo.

– Zoro, ¿qué estás haciendo? –

– Si me voy a solidificar, prefiero qué sea en está pose. –

– ¡No es momento para bromear! –

– No es una broma. –

– Mejor haz algo con tus piernas. Duele con solo mirarlas –

– Entonces, no mires. –

"– Si lo qué dijo es cierto, seguramente está intentando controlar el sangrado. Es un milagro qué no perdiera el conocimiento o entrara en shock. –"

– Además, tu eres el idiota qué tuvo la idea de cortase las piernas para poder huir. –

"– ¡Nami-San! ¡No le des ideas! –"

– Te equivocas. Me las iba a cortar para pelear. –

"– ¿¡ZORO-SAN!? –"

– Eso es peor, no digas tonterías. –

– Cállate. –

– Por Dios, no tienes sentido común. –

– Déjame en paz. Morgana, ¿estas con nosotros? –

"– ¡Estoy aquí! ¡Sigo aquí! –"

Morgana golpeó de nuevo la cera, pero sus golpes fueron débiles. Toda su espalda está cubierta de cera al igual qué su cabeza y parte de las piernas, solo su pecho y los brazos aún se libran. Zoro dijo al intentar verla..

– Aguanta un poco, saldrás de está. Igual qué nosotros. –

– Morgana…. Casi está cubierta de cera. –

"– No puedo luchar, pero sí puedo hacer algo. Con esa serpiente. Está muerta en vida, Snepres... Te has vuelto un peligro para el mundo. –"

Brogy habló.

– Oye, mocoso, ¿ya no vas a luchar? –

– No, parece qué es el turno de otra persona. –

– Ya veo. –

"– Espero qué se den prisa… No puedo aguantar mucho más… –"

Miss Goldeen Week hablo a Mr. 3.

– Mr. 3, esos tipos se ven muy calmados. –

– ¡Tú también, Miss Golden Week! –

Zoro habla a las chicas.

– Oigan, si van a posar, háganlo ahora. –

– ¡No me pongas a tu nivel! –

– ¡Mr. Bushido, tómatelo en serio! –

– Siempre voy en serio –

– Yo diría qué eres estúpido. –

"– Debo decir qué es gracioso, pero se qué no es el momento adecuado. –"

Mr.3 no podía creer lo qué veía.

– Parece qué nos están subestimando. Me sacan de quicio. Incluso, la muchacha qué dejó ese imbécil más arriba, aún cubierta de cera sigue sin rendirse. Desde qué apareció ese tipo, ellos… ¡No me digan qué…! –

Recordó qué no era una situación para pensar. Luffy dijo.

– ¡Bien! –

– Aunque no parece un hombre confiable. –

– Mr. 3… Nosotros acabaremos con él. –

– ¿Acabarán con él? No digas tonterías. Mira. Ha aparecido aquí porque tus ataques no sirvieron de nada. Ese hombre está al menos un nivel por encima del tuyo. Encarguense de acabar con los demás. Agregare a Sombrero de Paja Luffy a mi colección de figuras de cera. Y tu serpiente… Impide qué se acerquen a mis creaciones. –

Usopp monto a Karoo, listo para actuar.

– ¡Ya cállense! ¡Se han pasado de la raya! ¡Dense por vencidos! –

– Escoria… –

– ¡En marcha! –

Karoo corrió hacia atrás, los dos se escondieron detrás de unos árboles.

– ¡Bien, hemos terminado los preparativos! ¡Nosotros te cubrimos Luffy! –

– ¿Dijiste algo? –

– ¡Acabaré contigo! ¡Candle Lock!

Luffy fue atrapado por cera en sus piernas. Vivi, Usopp y Karoo se sorprendieron por lo sucedido.

– ¿¡Qué es eso!? –

– ¡Luffy-San! –

"– ¡LUFFY-SAN! –"

– ¿Qué? ¿Ya lo atraparon? –

– ¡Qué torpe! –

– ¿Qué es está cosa? Pesa tanto como un martillo. –

– Eso fue pan comido. ¡Ahora tus manos! –

Luffy miró la cera de sus piernas.

– ¡Oh, esto es perfecto! –

¡Candle Lock!

Luffy esquivo el siguiente ataque qué le lanzó Mr. 3. Estiró un brazo y lo enrosco en uno de los cuernos del casco de Brogy, mientras se balancea, dice.

– ¡Viejo gigante! ¡Perdón por molestarte! –

Giro en el cuerno cada vez más rápido qué acabo mareando a Brogy.

¡Gomu Gomu no… Tonkachi!

Luffy golpeó la columna, rompiéndola. Nami y Vivi gritaron alegres.

– ¡Lo logró! –

Pero la cabeza en forma de calabaza cayó desde la misma posición. Los cuatro se asustaron, pensaron qué los aplastarían. Luffy se estaba riendo.

– ¡Qué suerte! ¡El martillo de mis pies se rompió! –

– Estoy viva… –

– Nos salvamos… –

"– Casi me muero… –"

– ¡Nuestra situación no ha cambiado nada! –

– Eso fue peligroso, ¿por qué no huyeron? –

– ¡No podemos movernos! ¿¡No lo ves!? –

– Ah, conque era eso… Pero ustedes me dijeron qué rompiera la columna. ¿Me mintieron? –

– ¿¡De verdad está bien qué dejemos nuestras vidas en sus manos, Mr. Bushido!? –

– Bueno, no tenemos otra opción. Mis brazos ya se han endurecido. –

– ¡Por favor, tómate esto más en serio! –

– Esperen… Siento qué mi cuerpo se pone cada vez más duro. ¡Mi cuerpo no se mueve en absoluto! –

– ¡Idiotas! ¡Ahora qué las velas están más cerca, el proceso se ha acelerado! ¡Ahora se convertirán en figuras de cera mucho antes! –

Morgana acabó chillando, la cera le estaba quemando aún más ahora. Podía sentir como su ser era sucumbido por la cera. La serpiente tenía la intención de ir a por Luffy, Morgana acabó enfadándose y dijo levantando la mano del cuchillo.

– ¡Eh, tu, serpiente muerta! –

La serpiente giró su cabeza hacia ella, sus ojos blanco sin pupila ni nada no la veían, pero las serpientes no necesitan a veces sus ojos.

– Snepres no es más qué un falso guardián, y un resucitador de pacotilla. Tanto desea mi muerte, acaba con mi vida. –

Zoro, Nami y Vivi se sorprendieron por sus palabras.

– ¿¡Pero qué estás diciendo!? –

– ¡Morgana-San! –

– ¡No hagas locura! ¡No seas como Zoro! –

– ¡Estoy a punto de perder el control! Si voy a caer… ¡Lo haré a mi manera! –

Luffy pregunto ante las palabras anteriores de Mr. 3.

– ¡Oigan, ¿se van a convertir en figuras de cera?! –

– ¡Eso es lo qué te hemos estado diciendo! –

– ¡Por favor, date prisa y rompe está cosa, Luffy-San! –

– ¡Bien, entendido! –

– ¡Ya te dije qué no permitiría qué interfirieras! ¡Doru Doru Arts: Mori!

¡Kayaku Boshi!

El ataque de Usopp a Mr. 3 fue interceptado por Mr. 5 qué se lo comió. Luffy esquivo la vela y Mr. 5 se hinchó de la explosión. Solo dijo.

– No tenía buen sabor. No usaste pólvora buena. –

– ¡Se comió mi Kayaku Boshi…! –

– Esto no es bueno… Va demasiado rápido. Qué bueno qué elegí está pose. –

– ¡Idiota! –

– ¡Luffy-San! ¡Date prisa, por favor! –

Luffy estiró los brazos, la serpiente se estaba abalanzándose sobre él, pero Morgana le lanzó su cuchillo, clavándolo en un ojo. Morgana casi estaba cubierta, pero intentaría resistir el tiempo suficiente para ayudar.

– ¡Tu serpiente! ¡Céntrate en mí, déjale en paz! –

– Bien, el problema es esa calabaza, ¿no? ¡Esperen! ¡Gomu Gomu no… –

– ¡Es inutil! ¡Candle Wall!

– …Bazooka!

Luffy golpeó el muro de cera recién creada de Mr. 3. La serpiente subió por la tarta hasta quedar justo enfrente de Morgana. Zoro y las chicas se dieron cuenta del peligro qué corría.

– Morgana… No la molestes. No vale la pena. –

– ¡Morgana! –

– ¡Morgana-San! –

– Si vale la pena. Porque acabar con un cadáver qué se mueve es necesario. –

Morgana aún llevaba la aguja qué encontró antes. La serpiente se lanzó sobre ella con la boca enseñando los colmillos. Solo se protegió lo suficiente para clavarle la aguja en la propia boca de la serpiente, pero se cortó el brazo derecho al introducirlo. El golpe la hizo caer hasta quedar entre Nami y Zoro. Mientras Luffy dijo.

– ¡Oye, no estorbes! –

– Eso debería decirlo yo. Te agradecería qué no interfirieras en mis actividades recreativas. ¡Candle Lock!

Un brazo de Luffy fue atrapado en la cera. Pero se rió por la situación.

– ¡Tengo un martillo! ¡Gomu Gomu no… –

– ¡Maldición! ¡Candle Wall!

– …Tonkachi!

Luffy usó la cera del brazo para intentar darle un "martillazo" pero un muro de cera se lo bloqueó. Aún así logró romperla, logrando qué de un "martillazo" pasará a un "puñetazo". Los otros agentes dijeron mientras Usopp y Karoo festejaban la victoria.

– M-Mr. 3… –

– ¡No puede ser! –

Luffy se quedó quieto sin hacer nada. La serpiente se encuentra entre Nami y Zoro, está se empezó a mover, pero cayó muerta al suelo, Morgana había conseguido liberarse de la cera de sus piernas por el impacto, pero las tenia unidas, empezó a toser ya qué la cera le cae por la cara, se llevó una mano a la garganta e intentó hablar.

– ¡No… …Puedo… …Respirar! –

– ¡Aguanta! –

– ¡Luffy! ¡Aprovecha para destruir esto cuanto antes! –

– No. –

– ¡Déjate de bromas y hazlo! –

– No. –

– ¡No es momento comportarse como un idiota! –

– ¡Luffy-San, por favor! –

– ¡LUFFY-SAN! –

Los ojos de Luffy parecían diferentes, como si algo le impidiera hacer lo qué fuera.

– ¿Qué hago? No tengo ganas de salvarlos. –

Nami no podía creer lo qué dijo Luffy.

– ¿Qué estás diciendo? –

¡Color Traps!

Al estar la calabaza más baja qué antes, cubría todo a su alrededor de cera. Morgana se fijó en algo en el suelo, justo debajo de Luffy. Tosió un poco y dijo.

– Luffy-San… Coof… Está encima de algo… Coof… Parece un símbolo... –

– ¡Oye Luffy! ¡Se nos acaba el tiempo! ¡Haz algo al respecto! –

– Si, lo sé. –

– ¡Si lo sabes, date prisa! –

– ¡Así es, Luffy! –

– L-lo se, pero… Pero no tengo ganas de salvarlos. –

– ¿¡Por qué sigues diciendo eso!? ¡Nos estamos convirtiendo en figuras de cera! ¿¡Lo entiendes!? ¡Vamos a morir! –

– Si, pero no tengo motivación. –

Los tres gritaron a la vez enfadados.

– ¡No es un problema de motivación! –

Morgana grito casi cubierta de cera.

– APARTATE DE ESE LUGAR. –

Usopp y Karoo estaban a punto de empezar a actuar, pero Mr. 5 y Miss Valentine los pillo.

– ¿Qué rayos le pasa a ese tipo? ¡Si no se da prisa, nuestros nakamas van a morir! Debo hacerlo reaccionar. ¡Vamos Karoo! ¿¡En qué momento…!? –

– No lo hagas. –

– Así es. ¿Puedes ver donde está parado? –

– ¿Dónde está parado? ¿Qué rayos? Hay un extraño símbolo negro. ¿Qué tiene eso de importante? –

– Si, no es nada, solo pintura. –

– ¿Pintura? –

– ¡Quiere decir qué tanto ustedes… …como sus amigos… …serán historia! –

Mr. 5 casi le da una patada a Usopp, la esquivo pero explotó donde impactó. Asustando a Usopp y Karoo. Usopp montó de nuevo a Karoo.

– ¡Karoo, huyamos por ahora! –

– ¡Pretender escapar con el pájaro! –

– ¡Tras ellos! –

La pareja empezó la persecución de los dos. Morgana intentó mirar a la serpiente, pero por desgracia la cera ya la estaba envolviendo, cada vez le costaba más mantener el conocimiento. Tal era su desesperación qué pensó en cómo fue su viaje con ellos hasta ahora.

"– Se qué no debo sentir nada por ellos… …pero este corto viaje… …era como si… …si pudiera ser yo misma. No quiero… –"

– Morgana, habla. ¿Qué pasa con Luffy? –

– Hay… Algo… Suelo… –

– Miss Golden Week… ¡Es obra tuya! –

¡Colors Trap: Usagiri no Kuro! Una vez qué tocas la pintura negra, sin importar qué tan importantes sean tus nakamas, los traicionaras. –

– ¿Qué quiere decir? Explícame qué ha ocurrido. –

– ¡Ella es una pintora realista qué puede crear los verdaderos colores de las emociones! ¡Su refinado sentido del color le permite manipular… …las mentes de las personas con sus pinturas! –

– ¿¡Manipular!? ¡Eso no es bueno! ¡Ya es bastante fácil manipular a ese cabeza hueca! –

"– ¿Estamos en problemas? –"

– Así qué basta con qué se aleje de la pintura, ¿no? ¡Luffy, aléjate de ahí! –

– No… Contrario… Contrario… –

Vivi entendió lo qué quería decir Morgana.

– ¡No lo hagas! ¡Luffy-San, no te muevas de ese círculo de pintura negra… …por nada del mundo, por favor! –

– Morgana, Vivi, ¿por qué? –

– ¡No queremos qué nos salves! –

– No. –

Luffy dio un paso hacia atrás, Zoro dijo al comprenderlo también.

– Ya veo. Le dijisteis las dos lo contrario para qué hiciera lo qué queríais. Y tú te diste cuenta rápido. ¿No, Morgana?–

– Si… –

Ese simple paso, hizo qué despertara del "hechizo".

– ¿Eh? M-me siento algo extraño –

– ¡Luffy-San, deprisa! –

– ¡Bien! ¡Ahora mismo los salvó! –

Antes de qué lanzara su ataque empezó a reírse sin control.

– ¡Pero prefiero reírme! –

Los cuatro se quedaron de piedra.

– ¿¡Por qué!? –

– ¡Maldito! –

– ¿¡Ahora qué pasa!? –

– ¡Lo mató! ¡Ahora tiene uno en su espalda! –

Así es, Luffy tiene en su espalda el mismo símbolo qué en el suelo. Solo qué en vez de negro es amarillo. Miss Golden Week dijo con una paleta de colores y un pincel.

¡Colors Trap: Warai no Kiiro! No debes moverte. –

– ¡Ahora está en su ropa! ¡Luffy! ¡Apresúrate y quítate la ropa! –

– ¡No, olvídate de eso! ¡Ahora solo quiero reírme! –

– No… Funcionara… –

Luffy empezó a reírse, Zoro comentó siendo consciente de la situación.

– Qué problema… A este paso, no aguantaremos otro minuto más. –

– Estoy… Apunto… De… –

– Oe, no te desmayes, háblame, háblanos. –

– ¡Morgana! –

– ¡Morgana-San! –


Morgana perdió el conocimiento. Cuando lo recupero se encontraba en un abismo negro, solo podía sentir algo de rigidez, al encontrarse de pie solo el abismo negro está ante sus ojos. Podía oír susurros de una voz desconocida. Pero esa voz desconocida no parece tener intenciones hostiles… Podía oír una sola frase.

– No te cierres…. Libérate… No escondas tu ser… –

Morgana no quería oír ni creer esas palabras, le daba miedo mostrarse como es… Ella no es humana, no es nada qué los piratas puedan entender. Y solo quería terminar todo… No quería ser ella misma… Quería ahora mismo desaparecer… Hasta qué sintió algo en su pecho, sabía lo qué era. Se llevó las manos al pecho y dijo a punto de llorar.

– Tengo miedo… Tengo miedo… Ya han visto las marcas de mis brazos y me harán preguntas…. Si me ven las piernas y la espalda…. Tengo miedo… Tengo miedo… Snepres se lo contará a Proditor… No hay lugar seguro para mi… Quiero qué esto acabe… Estoy sola… –

– Eso no es verdad… –

La voz desconocida cortó su llanto, podía oír aquella voz… Ahora era calidad y la reconoció… Era la misma voz qué oye desde hace 4 años, la acompaña en su soledad y también la oye cuando está con los piratas, también sentía una calidez qué la envolvía. La voz sólo habló una vez más.

– Acéptate a ti misma… Para qué veas qué otros lo hacen… –

– ESPERA… –


Morgana abrió los ojos, pero los cerró de nuevo y se obligó a usar su "Vista Astral", podía sentir el calor del fuego y también como la coraza de cera qué la apresaba, se derretía. Vio las "vidas" de los piratas y la princesa, también vio algo qué sabía qué no estaba vivo. Ante este ser, Morgana no perdió el tiempo, saltó aún en llamas mientras hacía qué sus manos estuvieran envueltas en luz roja.

"– Abyss… Lance. –"

Cuando sale del fuego y abre los ojos, descubre qué la serpiente negra "muerta" pretende atacar a los demás. Sus manos rojas forman una lanza roja. La lanza contra la serpiente, donde al impactar, es envuelta en una ardiente luz roja qué acaba por volverse un verdadero cadáver. Al caer al suelo, respira profundamente por usar ese ataque, se pone de rodillas para descansar.

"– La última vez qué use ese ataque, mate a un grupo de bandidos. –"

– ¡Morgana! ¡Morgana-San!–

Nami y Vivi corrieron hacia ella, Morgana tenía la intención de salir corriendo pero no podía por la fatiga. Al mirarlos vio qué salvo Luffy, Sanji y Karoo. todos están bien. Al llegar a ellas, Nami la abrazó con fuerza.

– ¡Morgana, estás bien! –

– ¿Nami-San? ¿Qué ha pasado? ¿Y tu camiseta? –

– Usopp y Luffy consiguieron hacer arder la cera. La camiseta se quemó también. Te desmayaste antes de volvernos figuras de cera. –

Morgana se miró los brazos, estaba un poco quemada pero intacta, su brazo derecho sangraba un poco a causa del anterior ataque de la serpiente. Miró a Vivi y preguntó.

– ¿Estás bien? –

– Si, pero tu eres la qué más me preocupa. –

– Ese último ataque me dejó sin fuerzas, todavía estaba el paralizador en el cuerpo, pero ahora solo es fatiga. Pero primero hay qué ayudar a Zoro-San. –

– Olvídate de mí ahora. –

Los chicos se acercaron a las chicas, Zoro extendió un brazo hacia Morgana, ella dudaba de dárselo. Había perdido el control por el peligro y ya no había forma de ocultarse. Zoro se dio cuenta y le dijo a Usopp.

– Usopp, busca su chaqueta. –

– ¿Su chaqueta? ¿Por qué? –

– Tu hazlo. –

– Está bien, está bien. –

Morgana decidió confiar un poco y le dio la mano, la ayudó a ponerse en pie. Las chicas la acompañaron hasta sentarse en una roca. Allí Morgana miró en su riñonera diciendo.

– ¿Dónde está? Se qué lo tenía por aquí. –

Las chicas le miraron los brazos

– ¿Qué son estos tatuajes? –

– Son muy elaborados, nunca vi este diseño. –

Nami estaba a punto de tocarle un brazo, pero Zoro dijo.

– Nami, no la toques. –

– ¿Por qué no? Estos tatuajes están por todo sus brazos. ¿¡Por eso no te quitabas la chaqueta!? –

– Déjala. –

– ¿Mr. Bushido? –

– ¿¡Porque la defiendes!? ¿¡Tal vez nos usaba para algo muy peligroso!? –

Usopp volvió con la chaqueta de Morgana y vio el enfadó de Nami, Morgana se canso y grito cuando encontró lo qué buscaba.

¡SON MARCAS!

Luffy y Karoo llegaron a tiempo para ver todo. Nami la miró de nuevo. Morgana se aplicó una crema qué encontró en su riñonera y dijo mientras se frotaba los brazos.

– Estas marcas, no son tatuajes, de donde soy, nos las hacemos para luego ir a una isla qué hay en Grand Line, es como una muestra de madurez. Pero mi sueño… Mi sueño… Sobrepasa todo… Estas marcas son mi promesa para lograrlo… –

Al terminar de aplicarse se lo dio a Vivi y dijo levantándose, aún está muy débil, pero no soportaba nada ya, agarro su chaqueta qué trae Usopp y a punto de caminar.

– Esto sanará sus quemaduras. Yo… Me iré… Quiero estar sola… –

Nami se dio cuenta de su error y dijo agarrándola.

– Lo siento, lo siento. Olvide qué… Sanji-Kun me contó un poco de ti… Perdóname. –

Morgana miró a Nami y luego su chaqueta, estaba sucia y cubierta de hierba. Pretendía darsela a Nami, pero eso podría ofenderla al estar sucia. Decidió sonreír con sinceridad y dijo.

– Tranquila. Este es el motivo por el qué no mostraba los brazos. –

– ¿Te avergonzabas? –

– No, es… ¿Qué te contó Sanji-San exactamente? Puedes contarlo, no importa ya. –

– Qué habías huido a una temprana edad. –

– Huir no es la palabra qué usaría, pero ya veo qué Sanji-San es alguien de palabra. Esto es duro… Fui desterrada. –

Vivi se sorprendió.

– ¿¡Desterrada!? ¿¡Por qué!? –

– Soy de una isla de un Blue. Soy… Fui un aprendiz de mi Maestro. El líder de la isla y de otras. Tenía 12 años cuando murió. Su sucesor, fue amigo mío o eso pensé. Me desterró por confiar en una de sus consejeras. Desde ese momento supe qué no podía confiar en nadie, no sentía vergüenza por las marcas, sino qué eso haría qué me hicieran preguntas hasta decir mi procedencia. Snepres es una de sus seguidores. Tengo prohibido ir a cualquier lugar donde esté mi gente. Ser Guardiana, rompería eso qué creo mi amigo y nadie me detendría. –

Empezó a cerrar los ojos con rapidez, recordar eso le dolía mucho. Intento guardar las lágrimas mientras vuelve a sentarse en la roca. Brogy dijo.

– No te lo guardes. Llevas mucho dentro. Suéltalo… Como haré yo. –

Zoro se sentó junto a ella, Brogy empezó a llorar, tal es su llanto qué sus lágrimas crearon un arco iris en el aire. Casi todos se taparon los oídos, Morgana decidió aprovechar para llorar, aunque solo sea en silencio. Su llanto era silencioso, no como el de Brogy qué suena fuerte. Nami dijo con las manos en los oídos, pero antes Luffy comento..

– ¡Oigan, miren! ¡Detrás de él! ¡Es un arcoiris! ¡Un arcoiris! –

– ¡Hasta sus llantos son enormes! –

– Parece una cascada. ¿Te sientes mejor? –

– Si. Ya me encuentro mejor… Necesitaba llorar. –

– Lo comprendo, Maestro Brogy. –

Ninguno se dio cuenta de qué Dorry se levanta, usando su espada como apoyo. Cuando todos se dan cuenta lo miran asombrados. Su amigo fue el primero en hablar.

– Dorry… ¿Cómo es qué…? –

– Parece qué perdí la consciencia… –

Dorry pudo sentarse bien, todos estaban impresionados, pensaban qué estaba muerto. El "revivido" dijo.

– Deben haber sido las armas. –

– ¿Las armas? ¡Claro! ¡Ni siquiera las armas de Elbaf aguantarían… …a dos gigantes luchando a muerte durante cien años! Qué locura… ¡Es un milagro espectacular! –

Los gigantes empezaron a llorar de alegría.

– Oye, Brogy. No me abraces. Me duelen las heridas. –

– ¡Cuanto me alegro qué sigas vivo, amigo! –

La alegría de los gigantes es contagiosa, Zoro dijo.

– No fue un milagro. Es lógico. Qué esas armas siguieran intactas tras cien años sería una gran locura. Igual qué sus dueños –

– Tienes razón Zoro-San, pero algo de milagro también es. –

– ¡Hoy es un día maravilloso! ¡Te lo agradezco, dios de Elbaf! –

– Oh, Brogy. ¿Hacerme un corte y dejarme inconsciente te alegro tanto? –

– ¡Idiota! ¡No me refería a eso! –

– ¡No me golpees en las heridas! –

Los golpes amistosos se volvieron más agresivos, hasta el punto de volver a pelear. Nami gritó enfadada.

– ¿¡Por qué siguen peleando!? –

– ¡Por favor, ya basta en un día! –

Todos volvieron a donde está la base de Dorry para vendarle las heridas. Al terminar ambos gigantes seguían riendo por el motivo, los carteles de recompensas de ellos.

– ¡Habíamos olvidado por completo qué teníamos… …recompensas por nuestras cabezas! –

– Pero yo fui el motivo original por el qué vinieron a la isla ¡Duele!. –

Nami tiró de una mejilla de Vivi para hacerla callar.

– ¡No digas eso! –

Luffy, Usopp y Karoo comían unas galletas qué se dejó Miss Golden Week.

– ¡Así es, Vivi! ¿Por qué estás tan desanimada? ¿Quieres una galleta de arroz? –

– ¿De dónde las sacaron? –

– ¡Bien, hagamos una fiesta con galletas de arroz! –

– Las galletas de arroz no son gran cosa. –

– ¿En serio? ¡Podemos brindar con ellas! –

– ¿Alguien te guarda rencor? –

– Además, Snepres iría a por mi sin importar donde vaya. –

A pesar de las tonterías de los tres, era todo tan calmado, Nami se quejó de algo, Zoro se dio cuenta y preguntó.

– ¿Qué pasa? –

– No es nada, solo fue un insecto. –

– Pero es terrible tener qué esperar un año a qué el Log Pose apunte a la siguiente isla. –

– Tienes razón. ¡No es para reírse! –

– Si hubiera alguna manera… –

– Nos salvaron. Así qué queremos agradecerles de algún modo. –

– ¡En ese caso, viejos, hagan algo con nuestra Log Pose! –

– Eso es lo único en lo qué no podemos ayudarlos. –

– Claro, incluso los gigantes tienen límites. –

Minutos después, se oye la voz de Sanji, lo vieron venir todo enamorado y saliendo el humo del cigarro en forma de corazón.

– ¡Nami-San! ¡Morgana-Chan! ¡Vivi-Chwan! ¡Idiotas! –

Luffy lo saludo pero Usopp y Karoo estaban enfadados con él, y con razón, no dio señales de vida mientras ellos peleaban.

– ¡Hola, Sanji! –

– ¿¡Estaban bien!? ¡Menos mal! –

– No vino cuando lo necesitábamos y ahora aparece tan campante… –

– ¿¡Qué es esto!? ¿¡Tu eres Mr. 3!? –

– Oye, ¿cómo es qué conoces a Mr. 3? –

Sanji miró a Nami, como se le quemó la camiseta y estaba en sujetador. Sanji la miró emocionado.

– ¡Oh, Nami-San! ¡Qué excitante eres, Nami-San! –

– ¿Quieres qué te golpee? –

Sanji se quitó la chaqueta y se la dio.

– Tranquila, Nami-San. Te resfriaras si te quedas así. Toma esto. –

– Gracias. –

Cuando miró a su alrededor no vio a Morgana, se escondía detrás de Zoro. Pregunto.

– ¿Morgana-Chan? ¡Me pareció verla antes! –

– Morgana. Sal de detrás de mí. –

Cuando salió intentó esconder sus brazos, pero era imposible. No se atrevió a ponerse de nuevo la chaqueta. Sanji preguntó.

– ¡Morgana-Chan! ¡Tus brazos! ¿Qué te pasó? ¿Quién te los hizo? Se lo haré pagar. –

– No, Sanji-San… Esto es mío, los tengo desde hace tiempo. Gracias por guardar el secreto. Al final me sincere un poco. –

Sanji sonrió y dijo acariciando su cabeza.

– Me alegra oír eso. Ya no tienes qué temer al pasado. –

– Poco a poco, poco a poco. –

Sanji se sentó en otra roca y dijo.

– Ahora bien, acabo de hablar con Mr. 0 mediante un Den Den Mushi. –

– ¿¡Hablaste con el Jefe!? –

– Si. Encontré un escondite extraño en la jungla. Pensó qué yo era Mr. 3, así qué le dije qué ya los había eliminado a todos. –

– Entonces, ¿piensa qué estamos muertos? –

– ¡Por fin nos hemos librado de nuestros perseguidores! ¡Pero no podemos irnos de aquí! –

– ¿No podemos irnos? ¿Tenemos algo qué hacer en está isla? Justo cuando había conseguido esto… –

Saco una Eternal Pose hacia Alabasta. Todos menos los gigantes se quedaban con la boca abierta. Sanji dijo sin entenderlo.

– ¿Q-qué? –

– ¡Es una Eternal Pose qué apunta a Alabasta! –

Todos se alegraron porque por fin podían irse de la isla. Vivi corrió y abrazó a Sanji con alegría..

– ¡Muchísimas gracias, Sanji-San! ¡Estaba muy preocupada! –

– ¡No, no, de nada! ¡Me alegro de haberte hecho tan feliz! –

Luffy y Nami agarraron varias galletas.

– ¡Bien! ¡Chicos, hagamos una fiesta con galletas de arroz! –

– ¡Esto no es bueno, Luffy! ¡No podemos hacer esa fiesta, solo nos quedan tres! –

– ¡No tenemos tiempo para hacer esto, ¿saben?! ¡Vamos, capitán! ¡No hay tiempo qué perder! –

La tontería de las galletas era relajante en el ambiente. Cuando todos estaban a punto de irse al barco, Sanji le dice a Zoro.

– Ah, si. Oye tu. Espero qué no hayas olvidado la competición de caza. –

– No, pero he ganado yo. ¡Atrapa un rinoceronte así de grande! –

– ¿Un rinoceronte? ¿Crees que eso se puede comer? –

– Por supuesto. –

Los gigantes hablaron entre ellos.

– Creo qué lo he oído antes… –

Luffy dice a los dos.

– Bueno, viejo redondo y viejo gigante, nos vamos ya. –

– Ya veo. Bueno, parece qué tienen prisa. –

– Es una pena, pero no los detendremos. Espero qué tu reino esté a salvo. –

– ¡si, gracias! –

– ¡Hasta luego! ¡No vuelvan a morir! –

– ¡Ha sido un honor conocerles! –

– ¡Maestro, algún día iré a Elbaf! –

– Ya lo veras. El mío es mucho más grande qué el tuyo. –

– ¡Si, claro! –

Morgana se acercó a Zoro, había recordado qué se cortó las piernas y le dijo.

– ¿Estás bien? –

– ¿Mnh? –

– Tus… –

Morgana señaló sus piernas, Zoro se miró y dijo sin darle importancia.

– Ah, no te preocupes. –

Morgana sacudió la cabeza y le lanzó una venda diciendo.

– Está venda tiene ungüento qué ayuda a la cicatrización y contra las infecciones. Has tenido suerte de no perder el conocimiento. –

– ¿Y tú? Estabas más expuesta a la cera. –

– ¿Cera? –

– Veras Sanji-San, mientras no estabas… –

Le contó lo sucedido a Sanji, incluso su encuentro con Snepres, ante esto Sanji agarró a Morgana por la cintura y dijo mirando a todos lados.

– ¿¡Dónde está!? ¿¡Dónde está!? –

– Bájame, Sanji-San, déjame en el suelo. –

– Déjala en el suelo, te lo está pidiendo, idiota. –

– ¿¡A QUIEN LLAMAS IDIOTA!? –

– ¡A TI, IDIOTA! –

Estaban a punto de pelear, pero Morgana les gritó.

– ¡YA VALE! ¡BÁJAME YA! –

Morgana empezó a toser, aún no se había recuperado del todo. Sanji la bajó, todos se preocuparon un poco. Morgana dijo tranquilizandolos.

– Estoy bien, estoy bien. Aún queda un poco de cera en mi. Pero no se preocupen, vi unas plantas qué me puede ayudar, aunque son muy amargas. –

Al volver al barco, ven los dos dinosaurios qué cazaron antes Zoro y Sanji, mientras los dos discuten Morgana está cerca cogiendo plantas medicinales. Podía oír su discusión.

– ¿¡Qué tal!? ¡El mío es más grande! –

– ¡Miralo bien, mi lagarto es más grande! –

– ¿¡Estas ciego o qué!? ¡Mi rinoceronte es más grande! –

– ¡Da igual, los dos se ven deliciosos! –

Los dos se enfadaron con Luffy.

– ¡Tu callate! –

Morgana sonrió mientras se acercaba para subir al barco. Nami dijo intentando terminar todo.

– ¿Hasta cuándo van a seguir así? ¡No lo llevaremos todo, asi qué corten lo qué sea necesario y zarpemos de una vez! –

– ¡Si, Nami-San! –

– ¡Oye, Usopp! Es obvio qué yo gané, ¿verdad? –

– ¿Eh? No me interesa. –

– ¿No pueden dejarlo en empate? –

– En las competiciones no hay empates. –

– ¡Dense prisa! –

Los dos se asustaron y procedieron a cortar la carne de los dinosaurios, Morgana se empezó a reír por todo lo qué pasaba. Al terminar de reír Usopp y Vivi la miraron, ella dijo nerviosa.

– Lo siento, es qué… –

– Tu no te preocupes, por fin te oímos reír. Apenas sonríes de verdad. –

– Es qué yo… –

– Tranquila Morgana-San, lo entendemos todo. Pero ahora puedes estar tranquila, ¿verdad? –

– Si. "Es verdad, es como si con ellos vuelva a ser como era antes. Me estare… ¿encariñando con ellos?" –

Partieron con rumbo a Alabasta, siguieron el cauce del rio para salir, Luffy insistió en llevar más carne, pero no podían arriesgarse, podrían pasar dos cosas; 1- Se pudriría o 2- el barco se hundiría. Al llegar al límite de la isla, vieron a los gigantes. Luffy dijo señalando.

– ¡Son los viejos! ¡Han venido a despedirse! –

Así es, Dorry y Brogy se encontraban allí, mirando en dirección al mar. Con sus armas preparadas para luchar. Brogy dijo primero.

– Más adelante, se encuentra la causa… –

– …que evita qué la gente qué viene a está isla llegue a la siguiente. –

Esas palabras sorprendieron y preocuparon a todos en el barco.

– Ustedes lucharon para proteger nuestro orgullo. –

– Por lo tanto, sin importar lo formidable qué sea el enemigo. –

– No dejaremos qué destruyan el orgullo de nuestros amigos. –

– ¡Confíen en nosotros y sigan derecho! ¡Pase lo qué pase, vayan derecho! –

– ¡Entendido! –

– ¿Qué rayos…? –

– ¿Qué entendiste? –

– ¡Iremos derecho pase lo qué pase! –

Mientras el barco se acercaba, Nami le preguntó a Morgana.

– ¿Podrías usar tu poder? –

– No, desgraciadamente no puedo usarlo. Me quedé sin fuerzas, si lo uso un poco más, me desmayare de nuevo. Y no sabría cuando despertare. –

Cuando Going Merry pasó entre los dos. Brogy dice.

– Está es la despedida. –

– Espero qué nos volvamos a ver. –

– Seguro. –

– ¡Miren al frente! –

Las aguas enfrente del barco se movían con violencia, de ellas emergió una carpa dorada gigante. Los gigantes lo observaban y dijeron.

– ¡Así qué has aparecido, Devorador de Islas! –

– ¡Les abriremos el camino, en nombre de Elbaf! –

Los piratas se asustaron por el pez gigante con las fauces abiertas. Usopp dice asustado.

– ¿¡Qué rayos es eso!? –

– ¿Qué es esa cosa? ¿Una carpa dorada? –

– ¿¡U-una carpa dorada gigante!? ¿D-Donde he escuchado eso antes? –

– ¡Toma el timón, deprisa! ¡Nos comerá! ¡Usopp, date prisa! –

– ¡N-no puedo! ¡Nosotros avanzaremos derecho! ¿N-no es así, Luffy? –

– ¡Por supuesto! –

– ¿¡Otra vez dentro de un ser vivo!? –

Menos Luffy todos están nerviosos y aterrorizados. Nami intentó sacar el barco de la zona.

– ¡No digas tonterías! ¡Esa cosa no es como Laboon! –

– Lo sé. Tranquilízate. Mira, come la última galleta de arroz. –

– ¡No la quiero! ¡Si no viramos el barco, nos van a…! –

Karoo estaba muy asustado, Zoro abrió una puerta para qué entrara y se recostó en la pared.

– Nami, date por vencida. –

Morgana corrió asustada y se abrazó a Sanji.

– ¡SANJI-SAN! –

– Tranquila Morgana-Chan, no pasara nada a ninguna de vosotras mientras yo este aqui. –

Sanji gritó a Luffy mientras abraza a Morgana.

– ¡Luffy! ¿¡Podemos confiar en esos tipos!? –

– ¡Si! –

– ¿Estás loco? ¿De verdad iremos hacia esa bestia? –

– ¡Oh no! ¡Ya es demasiado tarde! –

El pez cerró sus fauces cuando Going Merry entró, Usopp gritó.

– ¡Derecho, derecho! –

– ¿¡Qué rayos estás diciendo!? ¡Ya nos devoró! –

– ¡Derecho, derecho! –

De repente algo se sintió, algo qué no pertenece al pez. Una luz blanca qué procedía de popa empujó al barco y pasó por estribor y babor, sea lo qué fuera atravesó el pez sin dañar al barco. Al fijarse más vieron qué la luz blanca era algo de color azul y rojo. Siguieron en línea recta tal como les aconsejaron los gigantes. Habían logrado salir de aquel pez de colores gigante.

La alegría se vuelve urgencia y desesperación. La necesidad de un médico es más importante qué cualquier tesoro del mundo.


Y me toca descansar, nos vemos de dos a tres semanas, pero hago un anuncio importante. SpiritWarriot ha creado un Foro con el nombre de "La Mansión de las Historias", les animo a participar. No olviden comentar y PM si desean hablar, también les animo a leer tanto mis historias como las de Neo Magician 96 y SpiritWarriot. Y les doy un fuerte abrazo a quienes me han comentado hasta ahora. Klaus, The Super Star Infinite y Neo Magician 96. Gracias por el apoyo y hasta dentro de varias semanas. Por favor lean la historia de "Good vs Evil" de The Super Star Infinite, esta empezando su primera historia, apoyenlo tanto leyendo como comentarlo.