Disclaimer: Los personajes corresponden en derecho de propiedad a sus respectivos autores, esta historia es sin fines de lucro. Solo con el único fin de entretener a un público lector; de una fan para fans. Esta historia ha sido publicada únicamente bajo el usuario de ladykya0 si la encuentras en otra página con en un perfil diferente se trata de plagio.
.
Algo que perder
.
I
.
.
— Ella probablemente está escuchando.
Fue lo que Misty entendió en cuanto encendió la pequeña bocina que había colocado en su gimnasio. Suspiró.
— ¿Seguro Romeo? ¿Qué pasa si no es así? — Preguntó una segunda voz.
— Volveré a llamar.
Finalizó. En ese momento los tonos de colgado resonaron por todo su gimnasio, seguidos por una risilla resignada del locutor de aquella estación de radio.
— Esperemos que tengas suerte.
La música no tardó en sonar.
Desde hacía unas semanas había estado pasando una constante que se había esparcido como un rumor por todo Kanto. La misma persona llamando a diferentes estaciones de radio. La razón, declarar su amor a una persona en el público oyente.
— Seguramente es publicidad para alguna serie o simplemente subir el rating—. Se dijo a sí misma, mientras realizaba un par de ejercicios de estiramientos para poder comenzar con sus qué haceres habituales, con tiempo suficiente para poder recibir a los primeros retadores del día.
La liga aún estaba lejos de comenzar, pero los entrenadores ya buscaban la forma de asegurar su lugar.
— Bien, comencemos con su hora de almuerzo.
Sonrió alegre y seguida de su Azurril se dirigió a la estancia dónde se encontraba la comida pokémon racionada para cada uno de sus compañeros. Aún podía percibir el eco del aparato, que alcanzaba a llenar el vacío qué había en todo su gimnasio. Se había sentido un poco sola los últimos días, sus hermanas habían partido a Kalos a una pasarela, ahora que su carrera como modelos había despegado, viajaban muy constantemente.
Un día, por curiosidad, simplemente decidió encender el aparato solitario que se encontraba a la espera de ser utilizado. Asombrada por descubrir que no solo transmitía las estaciones análogas de la región, sino que también las estaciones de radio por internet. Se descubrió a sí misma escuchando la música de moda de manera cotidiana y se preguntó en qué momento, la rutina de rellenar el silencio de su hogar y gimnasio con el sonido de la radio y los locutores en turno; había aparecido. No es que ella fuera una persona particularmente musical o que estuviese al pendiente de las tendencias, pero escuchar las voces de los presentadores y la música la ponía de buen ánimo.
Estaba sirviendo la última ración de comida cuando el sonido del pequeño aparato en su bolsillo trasero llamó su atención.
"Misty, hoy habló a la emisora" Decía el mensaje que recién había llegado a su teléfono.
La pelirroja resopló un poco mientras acomodaba el tazón de comida para Psyduck.
"Sí. Esta vez lo pude escuchar" Respondió un poco perezosa el mensaje de su amiga.
Misty había comenzado a pensar en que era una ridiculez todo aquel asunto del chico de la radio. Aunque la verdad era que no quería admitir abiertamente que ese tema le emocionaba un poco, porque simplemente no podía creer que alguien pudiera ser tan insistente haciendo ese tipo de llamadas. Con una declaración de amor más dulce que la anterior. Prefería evitar la fantasía de saber que alguien se expone de esa forma más de una vez, por una chica que ni siquiera parecía estar al tanto de la situación.
Sin embargo, algo muy curioso era ver como Sakura se obsesionaba cada vez un poco más.
La chica había visitado su gimnasio un par de semanas atrás y con ella la emoción del rumor del enamorado de la radio. Le emocionaba porque, según sus palabras; sentía que era algo muy original y romántico pensar que, en realidad había una chica allá afuera a la que le dedicaban esas palabras de amor, llenas de misterio y romance. Así que había dedicado su tiempo libre a investigar y leer teorías de fans, que incrementaban con las llamadas y que se dedicaban a intentar identificar al Romeo radial.
Y, como tenía la necesidad de compartirlo con alguien más, siempre le enviaba algún mensaje avisándole en qué estación de radio hizo la llamada esta vez.
"Ojalá algún día sepamos quién es la afortunada"
Volvió a leer.
"Yo solo espero que, si es real, no sea algún acosador o algo problemático para la susodicha, y que en realidad si sea algo lindo." Razonó, recordando como ejemplo a los pretendientes que tenía, en su gran mayoría debido a sus actuaciones en las obras que sus hermanas aún organizaban al menos una vez al año, en el gimnasio; y que habían intentado sobrepasar la línea un par de veces, sin éxito, pero que al final se tornaba molesto. Eso sin mencionar el par de relaciones fallidas que tampoco eran de gran ayuda en su repertorio amoroso.
Misty suspiró con cansancio.
No es que no creyera más en la ilusión de estar enamorada, pero con los años entendió que a veces las cosas no son y no funcionan como a uno le gustaría. Las relaciones y el amor no siempre son las experiencias más hermosas, ni las idealizaciones con las que siempre soñó.
Bloqueó el aparato cuando notó que su amiga ya no respondería, pero antes de que pudiera guardarlo, este volvió a resonar en sus manos, alertando un nuevo mensaje de un remitente diferente.
"Llegaré al Centro Pokémon de Ciudad Portual. ¡Hablemos hoy! :) "
Al ver el emoticón sonriente no pudo evitar imitarlo y sonreír también, ahora con un sentimiento más alegre dio una rápida respuesta afirmativa, para después proceder a guardar el teléfono en uno de los bolsillos de su sudadera deportiva, mientras regresaba a sus deberes y comenzaba a tararear la canción en turno, que en realidad le gustaba bastante.
.
— ¡Hey Mist! ¿Hace cuánto que somos amigos? — preguntó de pronto el entrenador, mientras la chica sentía la penetrante mirada castaña de él, a través de la pantalla.
— ¿Qué? — Le dirigió una mueca de total confusión, para después comenzar a pensar.
Tal como habían acordado, esa noche Ash había logrado contactar a su amiga para una videollamada desde el Centro Pokémon de Ciudad Portual, en Hoenn.
Últimamente, el entrenador se había convertido en toda una sensación, al mantener su título como Campeón y al demostrar la experiencia que había ganado y perfeccionado con los viajes en solitario que había realizado. Así que, ahora viajaba por diferentes regiones como parte de la campaña publicitaria que la Liga le había obligado a realizar.
La chica recordaba el fastidio con el que Ash le había contado aquel deber. No le molestaba la idea de viajar, amaba viajar y la aventura que eso significaba, pero dar entrevistas y sonreír todo el tiempo a preguntas que nada tenían que ver con su carrera tampoco eran su cosa favorita, de hecho, lo estresaban bastante. Él solo quería enfocarse en los pokémon, no entendía porque la Liga lo obligaba a tener y cuidar de una imagen pública.
— Demasiados —. Respondió por fin con una sonrisa— Soy testigo de cómo el Campeón de Campeones intentó vencer a un Pidgeotto con un Caterpie recién capturado. O aquel berrinche que hizo la primera vez que perdió una Liga oficial por no entrenar lo suficiente. — Comenzó a reír divertida ante la cara de incredulidad de Ash. — Valórame Ketchum. La información acerca de tu épica batalla de metapod versus metapod, vale millones para los medios.
— Silencio Misty, eso nunca pasó.
El chico desvió un poco la mirada de su amiga, quién ya deslumbraba un gesto triunfante al haber provocado vergüenza e incomodidad en el entrenador. Ash tardó un par de segundos más, para después suspirar y rindiéndose comenzó a reír con ella.
— Tienes razón, me conoces mucho —. Confirmó observándola. — … Mist... — Su voz se había relajado — ¿Sabes?... Hay algo…qué… he estado pensando…. — ella lo vio titubear por un momento — creo que me... en... — Notó la mirada expectante de la chica y él solo dejó de mirarla. — que me en... encantaría seguir platicando pero la enfermera Joy ya viene con Pikachu y los demás —. Terminó aquella oración de manera apresurada.
— Oh, bueno... — Ash percibió la ligera decepción en el tono de voz de la chica. — Vuelve a marcarme cuándo puedas. — Ella intentó sonar animada.
— ¡Claro! Nos vemos pronto. — Le dirigió una última mirada y colgó.
La imagen del entrenador desapareció de la pantalla y la pelirroja se quedó ahí parada observando el tiempo de llamada parpadeando frente a ella: 00:14:37.
Silencio otra vez.
Aspiró profundo intentando no sentirse triste.
Esa rutina de llamadas había iniciado desde el día que Ash había comenzado aquella gira. No entendía muy bien por qué el chico parecía un poco aferrado a mantenerse comunicado con ella. No es que le molestara, al contrario, hablar con él la hacía muy feliz porque a pesar de la constante distancia, que los objetivos de vida del chico le obligan a tener, su amistad había sobrevivido todos esos años, a pesar de que el entrenador fuera el tipo de persona que se desaparece meses y solo sabías de él cuándo lo veías en la transmisión de alguna competencia importante.
Lo quería mucho, estaba orgullosa de él y apreciaba que se mantuviera en contacto, pero comenzaba a ganarle la nostalgia.
Cada vez lo extrañaba y pensaba más seguido en él.
A veces, con su creciente fama le preocupaba si podrían mantener el contacto y su amistad o que en consecuencia se creara algún rumor sobre ellos y que su club de fans intentara acosarla, o al menos fastidiarle un poco la existencia. Sonrió. Aunque, pensándolo bien, no tendrían por qué si ellos al final siempre habían sido solo amigos.
Sacudió un poco su línea de pensamientos.
Era más probable que acosarán a Goh y dudarán de las preferencias de Ash. Se rió para sí misma al recordar las constantes bromas que surgían ya entre sus amigos por aquella situación. Pero, ¿quién diría que ese niño que solo vivía obsesionado por los Pokémon un día conquistaría a un montón de chicas solo por existir? Aún divertida por lo absurdo de la situación y de sus reflexiones, decidió tomar una cena ligera antes de prepararse para el día siguiente.
.
.
.
¡Hola!
Ando muy activa últimamente ¿verdad? jajaja, este fic lo había comenzado a escribir desde el año pasado y aunque aún me falta el final final, pues decidí que ya era hora de comenzar a publicarlo. Serán varios caps así que espero les guste. Quise ahondar en el sentir y el día a día de Misty así que mucho pasa desde su perspectiva. La verdad siempre me ha estresado la sensación de que Misty se quedo "atrapada" en Kanto solo porque tiene que ser Líder de Gimnasio, así que intente indagar en que en realidad lo que hace lo hace bien y tiene una vida bastante activa, y nunca se "quedó esperando" a Ash.
Saben que todo se hace con amor así que si tienen alguna opinión o algo que compartir siempre se agradece y se responde por mensaje privado, para mas chismecito, jaja.
¡Nos leemos!
