-Ok… Creo que este es el último. – Qrow comentó mientras terminaba de atar a un miembro de White Fang. – Vaya, si que eran un montón.

Miró al enorme grupo de Faunus que también se encontraban atados y debía reconocer que resultaba algo impresionante ver a tantos criminales arrestados, sobretodo después de que todos ellos se les hubieran lanzado encima como una gran horda y sin sufrir una sola baja en ninguno de los bandos.

-Y que lo digas. – Bikou movió un hombro para liberar algo de cansancio. – No eran la gran cosa, pero sus números eran molestos. Era casi como en esas películas de zombies.

-Solo que estos no quieren comerte vivo y usan armas. – El pelinegro le dio una sonrisa de lado al youkai que hizo lo mismo.

-Al menos por fin terminamos con esto nya. – La pelinegra dio un suspiro de cansancio. – Espero que los demás ya hayan hecho su parte para irnos de una vez, necesito una siesta.

-Como se nota que eres una gata. – En respuesta, Bikou fue agredido por una piedra en la cabeza por parte de Koneko. – ¡Hey!

-Eso no tiene que ver… Onee-sama solo es floja. – Ignoro el sonido de queja de su hermana. – De las dos ella es la que menos esfuerzo físico le gusta hacer y lo sabes mono.

-Eso es cierto… Entonces siento lástima por quién acabe siendo su pareja. Tendrá que hacer todo el traba-. – Se agachó rápidamente para esquivar una bola de fuego azul. – ¡Ja, fallaste!

-¡Pudrete saco de pulgas! – Kuroka tenía sus colas erguidas como un gato molesto. – ¡Ese no es asunto tuyo!

-Kuroka-sama, Bikou-sama, por favor no peleen.

-Dejalos Fay, no vale la pena. – Arthur sintió algo de vergüenza ajena al ver a ese par intentar matarse por… Lo cierto es que ya perdió la cuenta.

De repente un portal de color rojo se abrió cerca Qrow, lo cual llamó la atención de los demás y se pusieron en guardia. Cuando una persona salió de dicho portal no tardó en verse apuntada por una espada en su cuello.

-Vaya forma de dar la bienvenida a una chica. – Sonó algo fastidiada por el recibimiento violento. – Quita esa espada de mi cuello cuatro ojos a no ser que quieras una patada en tus bolas.

-¿Qué tal si primero nos dices quien eres? – Koneko hizo crujir sus nudillos.

-Calma. – Qrow trató de enfriar las cosas. – Ese portal por el que salió es la Semblanza de Raven, lo que significa que tu debes ser la tal Vernal.

-Asi es, ella me mandó aquí para tener esta cosa a salvo. – La bandida mostró a todos la Reliquia, los del grupo del Hakuryuukou pudieron notar que desprendía una gran cantidad de magia. – Así que porque no le dicen a este tipo que baje ese cuchillo gigante de una vez.

El mencionado solo resoplo por la nariz y bajó su arma. Al verse libre de moverse Vernal miró en dirección a Haven, preguntándose cuánto tardarían la hija de su amiga y sus compañeros en terminar con esos 4 idiotas.

-No creo que tarden Vernal-sama, pero ahora mismo solo podemos esperar.

-Eres educada… Eso me agrada. Al fin alguien que me muestra respeto. – La mujer le sonrió a lo que Fay hizo lo mismo. – Y tienes razón, solo que no me gusta estar sin hacer nada. Tenía la esperanza de poder patear unos traseros de terroristas, pero veo que se encargaron de todos.

-No fueron la gran cosa. – Vali, quien hasta ahora solo se había mantenido al margen, habló con aburrimiento.

-Vamos, deberías quitar esa cara de apático. Así nunca llamarás la atención de las chicas y es una pena, eres bien parecido. – Dijo con una sonrisa de lado que hizo que Vali la vea con una ceja alzada. – Veo que ser bien parecido es requisito para ser un Dragón Celestial o lo que sea.

-Yo creo que no. Digo, el Sekiryuutei es más bien… Promedio en ese aspecto jeje. – Bikou dijo eso con gracia.

-Quizás, pero me gusta esa mirada seria que tenía cuando peleó contra el Wyvern. ¡Además fue gracioso como desnudo a ese Team de Vacuo en el torneo Vytal jajaja! – Vernal se limpió una pequeña lágrima al recordar eso último.

-¿Qué el hizo qué cosa? – Arthur preguntó sin poderse creer lo que acababa de oír.

-Ah si, yo lo vi en vivo. – Qrow también parecía divertirse por el recuerdo. – El chico por "accidente" quemó las ropas de cuatro chicas en televisión mundial. Las mujeres lo declararon enemigo público y los hombres parecían listos para rendirle culto. – Bebió de su petaca. – Fue un día que Remnant no olvidará.

-¡Jajajajaja! ¡El Sekiryuutei es genial, me declaró su fan! – Bikou estaba que se descomponía de la risa.

Koneko por su parte un tic en uno de sus ojos al escuchar ese incidente de nuevo, pero a la vez tenía un fastidio al escuchar a la tal Vernal que le gusta la mirada seria de su Senpai… Y lo peor es que ella también tiene que estar de acuerdo con que esa mirada le queda a la perfección.

Fay tenía un fuerte sonrojo en su rostro al escuchar eso, pero su mente le jugó mal al mandarle una imagen de ella siendo "atacada" por su nuevo amigo. Agito la cabeza tratando de alejar esas imágenes, ella no es una pervertida para fantasear con esas cosas. No señor, no es como si le gustara que la vea con esa sonrisa sincera o también piense que cuando está serio se vuelve más guapo… ¡Centrate Le Fay Pendragon!

Kuroka por otro lado no sabía qué pensar. Aún sigue con la idea de que no quiere tener nada que ver con ese chico, pero debía estar de acuerdo con la bandida con eso de que esa mirada seria le quedaba bien. Pará colmo su cerebro le trajo de vuelta el recuerdo de cuando la beso y la tocó hace unos días y… Debía reconocer que se sintió bien… ¡Maldita sea, cada vez se le hace más difícil odiarlo!

-No puedo creer que él sea mi rival… – Por su parte Vali se estaba sobando los ojos al escuchar eso.

- {Tengo que admitir que el compañero de Ddraig es… Peculiar, pero no creo que sea malo. Después de todo eso hizo posible que conectara con nosotros.} – Tenía que darle la razón a Albione – {Además es divertido ver el caos que se genera con él estando cerca.}

-...¿Esas alas de cristal acaban de hablar? – Vernal señaló las dichas alas con asombro.

- {...No…} – Vali se llevó una mano al rostro al ver el intento de Albion de hacer que nada paso… La estupidez de su rival parece ser contagiosa… Teme por sí mismo.

-¡Y una mierda que no! ¿¡Cómo putas hace eso!?

-Es una historia muy larga… – Arthur hizo a un lado sus deseos por partir a la mitad al Sekiryuutei que le dieron al ver el sonrojo de su hermanita y trató de hacer contención de daños. – No creo que sea apropiado hablar de esto en este lugar.

-¡Pero-!

¡¡GROOOOOOOOAAAAAR!!

Todos pasaron a ver con sorpresa cómo a lo lejos la cabeza de una gran bestia se alzaba por encima de los edificios y lanzaba una poderosa llamarada desde su boca hacia una dirección al azar.

-¿¡Qué demonios es eso!? – Vernal señaló a esa cosa con asombro y miedo.

-Un Grimm Clase Gaea… – Qrow respondió con seriedad al ver a esa criatura. – Parece que lo ocurrido en Vale se repetirá aquí en Mistral.

-No, si nosotros acabamos con él. – Arthur volvió a desenvainar su espada.

-Será un placer. – Kuroka creó una llama azul en su mano. – Puedo sentir que esa cosa es más débil que la que enfrentamos hace un tiempo.

-Hum, al parecer las cosas se pusieron un poco más interesantes. – Vernal vio incrédula él como Vali sonreía al ver a esa cosa.

-...

-¿Ocurre algo Koneko-sama? Te ves más sería de lo habitual.

Y era cierto, la chica tenía una expresión muy sería. Además que su mirada era difícil de descifrar, pero parecía que estaba concentrándose.

-¿Shirone?

-Esa cosa… No está sola. – Todos la vieron con duda. – Algo la acompaña y… Es poderosa.

--

Con los Arc y Ravel, estos también veían a la criatura moverse y causar destrozos en Mistral. Pero quién veía con más seriedad a la criatura era Nicolás.

-Nunca espere ver de nuevo a esa cosa…

-¿Lo conoces papá? – Celeste vio a su padre con ligero asombro.

-Ryu Hisashi… O mejor conocido como El monstruo de Lake Matsu.

-¿¡Era real!? ¡Pensé que solo era un cuento para asustar a los niños!

-Pues no lo es Jade. La primera vez que vi a esa cosa fue hace casi 30 años, en una expedición para estudiar las profundidades de Lake Matsu.

-Genial, parece que tendremos que encargarnos de esa cosa.

-Bromeas, ¿Verdad Ravel? – Jaune pasó a ver a la chica como si estuviera loca.

-No, hablo en serio. – La pequeña rubia lo vio con seriedad. – Se que para ustedes esa cosa es fuerte, pero creanme cuando les digo que mis amigos y yo hemos peleado con seres más fuertes. Además no podemos dejar que este reino sea destruido.

-Ella tiene razón. No podemos permitir que esa cosa haga lo que quiera, no importa lo fuerte que sea. – Juniper hizo crujir su cuello tras decir ello. – Además contamos con el Sekiryuutei y el Hakuryuukou. No creo que tengamos muchos problemas.

-¡Cierto! ¡Nuestro héroe…!

-¡Barrera el piso con ese bicho!

-Quizás tengan razón… – Jaune sacudió la cabeza y puso una mirada determinada. No era momento de sentir miedo.

-Oigan… Como que esa cosa se mueve raro, ¿No? – Magenta señaló al Grimm. Desde donde estaban podían verlo desde arriba.

-Cierto. Parece una tortuga marina por lo que veo, pero aún así no parece que esté usando las aletas para moverse. – Vermillon entrecerró los ojos para tratar de ver mejor. – Es como si… Algo lo cargará…

-No digas tonterías hermana. Nada sería capaz de levantar a ese monstruo, menos aún cargarlo. – La mayor de las hermanas vio a Celeste y ciertamente era verdad. Pero aún así…

-¿Y ahora qué está haciendo? – Jade señaló al Grimm, el cual pareció esconderse dentro del caparazón. – ¿Por qué se esconde?

-No idea… Espera.

Ravel se dio cuenta de que el Ryu Hisashi aún parecía moverse aún cuando estaba ocultó. Fue entonces cuando ocurrió algo que nadie espero ver jamás.

--

De regreso en Haven el grupo de adolescentes junto a la Valquiria se cubrieron los oídos por el potente rugido y una vez cesó se vieron con seriedad excepto la albina que estaba algo alarmada pensando que "él" ya había llegado.

En eso vieron como el ascensor volvió a subir mostrando al Sekiryuutei acompañado por Ciel, Neo y Raven. La cual se apuró en salir del elevador y veía el lugar con atención en busca de la fuente del rugido.

-¿Qué demonios ha sido eso?

-Un Grimm. Y uno grande, quizás un Clase Gaea. – Blake contestó a la duda de Raven.

-¿Y qué esperamos entonces? ¡Vamos! – Nadie objetó ante las palabras de Issei, quien ahora estaba cargado a Sienna y se pusieron en camino.

Todos empezaron a correr en dirección a la salida de la academia. Una vez salieron se acercaron al borde del patio, buscando al Grimm en cuestión. Les pareció raro no ver nada dado el tamaño que debería tener un clase Gaea o Infernal. Fue entonces cuando vieron lo que parecía ser una gigantesca piedra ser lanzada al cielo a una gran altura.

-¿Pero que mierda…? – Yang no se creyó lo que estaba viendo al igual que los demás.

Vieron como la piedra caía no muy lejos de la academia, levantando una enorme nube de polvo. Cuando esta se disipó vieron como la piedra no resultó ser eso, sino una especie de plesiosaurio combinado con una tortuga.

-¿Q-qué es eso?

-Pues un Grimm. ¿Nunca viste uno? – La pregunta de Raven sacó de cuadro a la Valquiria. – Y por cierto. ¿Quién demonios eres tú?

-No llevo mucho tiempo en este mundo y mi nombre es Rossweisse. – Respondió de forma seria encarando a la mujer ya que no le gusto el tono con el que le hablo.

-¿Mundo? – La morena pregunta viendo a sus compañeros.

-Otra superviviente del mundo de Issei. – Tanto Ciel como Neo y Raven vieron al ninja con sorpresa.

-¿Y es normal que en su antiguo mundo las mujeres vayan vestidas así?

-¡N-no es que me vista asi porque si! – Gritó con el rostro sonrojado mientras se cubría con sus manos. – ¡Esta es la armadura que usábamos las Valkirias al servicio de Odin-sama…! Aunque era un viejo rabo verde… – Eso último lo dijo con un deje de enojo, pero a la vez algo de tristeza.

Todos tuvieron una gota de sudor en sus cabezas ante la respuesta de la peliblanca.

-"Eso explica el porqué Fafnir decía estupido viejo pervertido." – Neo habló a través de su scroll haciendo que varios de los presentes asientan con la cabeza.

-¿¡Fafnir!? ¿¡El Golden Dragon Monarch está en este mundo!? – Rossweisse no podía creer lo que escucho. – ¿Pero cómo logró…?

-Te lo explicaremos después Rossweisse, ahora tenemos que evitar que ese Grimm…

Todos vieron cómo Issei se quedó viendo en una dirección diferente a donde aterrizó el Ryu Hisashi. Todos pasaron a ver en dicha dirección y vieron a otro Grimm.

Este tenía una apariencia extraña para los nativos de Remnant, sin embargo Issei y Rossweisse lo correlacionaron casi de inmediato con un minotauro. Este tenía la cabeza, la cola y las piernas de un toro, mientras que el torso y brazos eran los de un humano. El torso era de color negro y el resto del cuerpo era de color blanco, haciendo un degradado en los puntos de unión al cuerpo. Pero lo que más llamaba la atención de ese Grimm era que sus cuernos, uñas, pezuñas y lo que parecían ser un arete en la nariz, unos brazaletes y un collar de esferas eran de un color verde brillante.

-¿Eso es lo que creo que es? – Ruby sonaba algo nerviosa al ver al nuevo Grimm.

-Si… Otro Grimm de Clase Infernal. – El Sekiryuutei sonó serio a lo que todos sus amigos no pudieron evitar tragar algo de saliva. – Pero este tiene algo distinto.

-¿Qué cosa Ise?

-Este es más pequeño que el Necroverno, más o menos del tamaño de un Giant Nevermore. Además que no se parece a un dragón. – Weiss respondió a la pregunta de la rubia al creer entender de qué hablaba el castaño.

-Exacto princesa. Eres una buena observadora.

-C-claro que lo soy. – Sacó el pecho lleno de orgullo, pero era notorio el sonrojó en su rostro junto a la sonrisa. – Pero esto es raro… Es la primera vez que veo a un Grimm con esas características, aun con los últimos dos Grimms Infernales tenían forma de dragón.

-En mi mundo existía un ser mitológico parecido. El minotauro, mitad hombre mitad toro.

-¡Minotaur! – Nora gritó de repente haciendo dar a todos un salto de la impresión. – ¡Si, tenía ganas de nombrar a uno!

-...¿Ella siempre es así? – La Valkiria miró a todos mientras señalaba a la pelinaranja quien hizo un puchero.

-Te acostumbraras.

A la albina le salió una gota en la nuca ante la respuesta coordinada de los adolescentes.

-Por ahora vayamos a lo que importa. – Issei hizo aparecer un pequeño círculo mágico en su oído. Luego debe darle las gracias a Fay por enseñarle cómo hacerlo. – Oye Vali, ¿Puedes oírme?

- Pensar que lograrías aprender a usar los círculos mágicos de esta forma… Hoy lloverá sin duda.

-Que te jodan demonio de quinta. – Si bien lo insultó, se pudo notar que lo dijo con gracia. – Tenemos a un nuevo Clase Infernal. ¿Listo para partirle la cara?

- Je. ¿Tienes que preguntar?

-Entonces dirígete a la parte central de la montaña donde está situada Haven. Nos está esperando ahí… Incluso me está diciendo que vaya con la mano el muy desgraciado.

Y era cierto, nada más verlo el Minotaur le señaló con el dedo para seguidamente decirle que se acercara con la misma mano. Algo muy similar a lo que hizo el Necroverno y, por qué no decirlo, le cabreaba.

- Nos vemos allí entonces. – Sin más que decir el peliblanco terminó la comunicación.

-Mmm… – En eso Issei sintió como Sienna se movió en su espalda. Al parecer ya estaba despertando. – Agh… Siento como si me hubiera atropellado un camión… ¿Dónde estoy?

-Buenos días bella durmiente. – La mencionada vio como pudo al castaño, el cual estaba bastante cerca de ella.

-¿Tu…? – En eso se dio cuenta de que la estaba cargando en su espalda. – ¿Qué significa esto?

-Te estoy cargando. ¿Te golpee demasiado fuerte para que no notes lo obvio? – Le dio una sonrisa burlona que le sacó un gruñido a la mujer. – Tranquila, no estás en condiciones para pelear… Ni para pararte por ti misma.

-Tch. – Chasqueó la lengua al mismo tiempo que desviaba la mirada con algo de rabia. – Esta es la primera vez en mi vida que pierdo un combate… Y es contra un mocoso.

-Además que me contuve. De lo contrario definitivamente estarías muerta.

-¿Y por qué no me mataste? Nadie te lo hubiera impedido.

-No es mi estilo matar de forma indiscriminada. – La vio con seriedad para luego verla con una media sonrisa. – Además, tampoco es que me guste lastimar a mujeres bellas.

La faunus lo vio por unos segundos, parpadeando un par de veces por la sorpresa ante tal respuesta para finalmente reír un poco.

-Jajaja. También eres el primero en darme un piropo sin miedo a que lo golpeé.

-No me extraña. Aún conteniendo mi fuerza real fuiste capaz de darme pelea e incluso hacerme bastantes heridas… Creo que conservaré la de la cara, me hace ver más cool. – Al decir eso la mujer solo río más fuerte… Y debía reconocer que la risa de la Faunus era agradable.

-¡¡¡EJEM!!!

El castaño vio como la mayoría de féminas se habían aclarado la garganta para llamar su atención. Y tiene que admitir que se sintió más intimidado por ellas que por cualquier Grimm o por la misma Salem. ¿La razón? Estaban cubiertas de un aura negra y muy densa que solo prometía una muerte lenta y dolorosa.

-Ammm… ¿Chicas? – Trago algo de saliva al ver los ojos de todas soltar un brillo maligno. – ¿Se encuentran bien?

-Si… Issei. Estamos perfectamente bien.

-No es como si te estuviéramos viendo coquetear con una líder terrorista frente a nuestros ojos o algo por el estilo.

-Tampoco es que queramos molerte a golpes por ello.

-Si… No tenemos deseo alguno de hacerte daño…

Vale. Ruby, Weiss, Yang y Pyrrha lo están viendo con deseos de hacerlo picadillo y las miradas de Ciel y Neo tampoco lo ayudan a sentirse a salvo. Pero le parece raro que Blake tenga una mirada inexpresiva justo como cuando la conoció hace tantos meses en Beacon… Eso lo está asustando más.

-*Fiuuu* Si que eres popular con las chicas, mocoso. – Sienna habló con cierta picardía en su voz.

-Muy graciosa… Nora, ¿Te importaría cargarla? Tengo que ir a por ese Grimm.

-Ok. – Ella agarró a la mujer y la cargó en su hombro como si fuera un saco de patatas. – Suerte hermano.

El castaño asintió antes de salir volando en dirección a donde estaba el Minotaur, todo bajo la mirada de las chicas que solo dieron un suspiro cansado. Hasta Raven lo hizo, ese chico le estaba matando.

-...No me digan que todas… – Por su parte Rossweisse estaba saliendo de su shock por tremendo instinto asesino. Vio a Ren que dio un pequeño suspiro para asentir con la cabeza. – ...Pensar que chicas más jóvenes que yo tendrían novio… ¡Buaaaaaaaaah!

Todos dieron un brincó ante la reacción de la peliblanca, incluso Raven que no se esperó esto. La pobre parecía que en cualquier momento se derrumbaría. Ruby se acercó a ella y tocó su hombro llamando la atención de la mujer que tenía varias lágrimas corriendo por sus mejillas.

-¿Estás bien? – La caperucita preguntó genuinamente preocupada.

-¡No! – Volvió a gritar haciendo que Ruby diera un brinco. – ¡Me queda claro que primero acabará el mundo antes que yo pueda tener un novio que me quiera! ¡Odin-sama tenía razón, siempre seré Rossweisse la valkiria virgen que nunca ha tenido un novio! ¡Buaaaaaaaaah!

Ok… Eso era bastante triste. Pero en eso Sienna miró en dirección a donde estaba el Ryu Hisashi y se dio cuenta de que un grupo de personas iban a donde estaba.

-Esos… Parecen la familia Arc.

-¿¡Qué!? – Todos vieron cómo, efectivamente, la familia Arc al completo estaba en camino de encontrarse con el Grimm Clase Gaea.

-¡Vamos todos! – Ruby no tardó en activar su Semblanza y dirigirse al lugar.

-¡Momento! ¿¡Qué hacemos con la terrorista!? – Nora preguntó aún cargado a la mencionada. En eso vio como Raven abrió un portal y le quitó a Sienna de brazo.

-Me la llevaré con los demás que apresó Qrow. Y tú vienes conmigo llorona.

Sin esperar respuesta de la Valquiria, la pelinegra guardó su arma y tomó a la antes mencionada con su otro brazo. Los demás vieron esto con sorpresa por unos segundos antes de ir con Ruby.

--

Con los Arc y Ravel. Estos habían llegado al lugar donde había aterrizado el Ryu Hisashi… Aún no se les quitaba de la mente semejante evento. Pero eso no era lo importante ahora, tenían que encargarse del Grimm.

Al llegar vieron como el Grimm estaba lanzando fuego a varias partes de la ciudad que poco a poco estaban siendo consumidas por las llamas. Varios faunus corrían para salvar sus vidas. Era una imagen terrible para todos.

-Acabemos con esa cosa.

-Me quitaste las palabras de la boca querida. – Nicolás sacó su arma al igual que su esposa y todos sus hijos.

-Yo les cubriré las espaldas con llamas. – Ravel alzó vuelo tras decir eso y creó un par de bolas de fuego. En eso vio que alguien más venía desde otro lado. – ¡Buenas noticias! ¡Issei y los demás parecen haber terminado!

-¡Pues venga, unámonos todos a la fiesta! – Jade fue la primera en moverse, lo cual le sacó un suspiro a su familia quienes fueron detrás de ella.

El Grimm estaba lanzando más llamas hasta que vio a un grupo de humanos que no huían, sino que iban donde él estaba y estaban armados. Rápidamente apuntó en su dirección listo para carbonizar a esos insectos, pero no espero que algo lo golpeara por su punto ciego.

-¡Hola grandullón! – Fue lo que dijo Ruby al aterrizar tras haber pateado al Grimm, el cual no se veía nada contento por la agresión.

En eso sintió como varios disparos le dieron en su cuello, giró su cabeza para ver a otro grupo de humanos atacandolo. Dio un rugido antes de lanzar una llamarada que los humanos lograron esquivar.

-Esa cosa sí que es grande. – Yang dijo mientras daba un silbido por el tamaño del ser. – Pero si lo comparamos con ese dragón dormilón se queda pequeño.

-Y eso que ni siquiera hemos visto su tamaño real. Solo encogido. – Nora sonrió al decir eso antes de lanzar unas cuantas granadas contra el Grimm quien se las comió sin más, explotandole dentro de la boca.. – ¡Oye, eso no es comida!

El Grimm sólo rugió en respuesta mientras avanzaba a paso lento, debido a estar fuera de su elemento. Sin embargo fue bastante rápido cuando movió su cabeza para tratar de comerse a los miembros del Team RWBY y HVNL, los cuales saltaron en diferentes direcciones para evitar ser el almuerzo de esa cosa.

-¡Nadie se come a mis amigos mala copia de tortuga! – Jade entró en escena propinándole un fuerte puñetazo al Ryu Hisashi que quedó desorientado por unos segundos.

-Me alegra verlos, familia Arc. ¿Qué tal fue la misión? – Pyrrha preguntó mientras disparaba al Grimm con su arma, además de lanzarle pedazos de tierra con su magia.

-Salvamos a los que pudimos… No todos lo lograron. – Pyrrha entendió a lo que se refería la rubia y solo pudo asentir mientras apretaba los dientes. – En este momento Miss Malaquita y sus hombres ya los debieron poner en un lugar seguro.

-¿Qué hay de ustedes? – Jade preguntó mientras veía como el Grimm rugía al recibir varias bolas de fuego por parte de Ravel y Yang. – ¿Tienen la cosa mágica esa?

-Si. Vernal, la compañera de Raven la puso a salvo.

-Perfecto… Todavía no me creo que esa mujer nos esté ayudando. – Juniper habló con ligera sorpresa en su voz.

-¿Por? – Pyrrha preguntó mientras disparaba unas rondas de Dust contra el Grimm. – Se que es una bandida, pero habla como si la conociera.

-Precisamente. – Todas las miradas de los adolescentes se posaron en la mujer rubia. – La primera vez que nos vimos fue durante el festival Vytal de nuestra época de estudiantes y… Digamos que las cosas no acabaron bien.

-Destruyeron la mitad del campo de batalla cuando trataron de seguir con la pelea aún cuando se les acabó el aura simultáneamente. – Nicolás dijo eso con cansancio, ganándose la mirada sorprendida de todos.

-¡Esa tipa se estaba burlando de mi! – Gritó con enojo que asustó a su esposo y a los que estaban cerca. – ¡¡Esa infeliz se atrevió a llamarme debilucha y lo peor me llamo plana!!

-Y por eso como venganza decidiste cortarle el cabello dejándolo a la altura de sus hombros… En ese momento creí haber visto un demonio… – El hombre rubio tembló ante el recuerdo. – Después de eso todos los encuentros casuales que tuvieron en misiones siempre acababan con unas cuantas denuncias por destrozos…

-...No creí que fueras tan… Salvaje mamá. – Vermillon no sabia que cara poner ante lo dicho por su padre.

-¿Nos podemos centrar en acabar con esa cosa y ya después hablamos de mis escaramuzas con la perra de Raven? Sin ofender, Yang.

-Ehm… – La rubia no supo qué contestar por lo que simplemente asintió.

-¡¡Menos hablar…!!

-¡¡Y más acción!!

Las gemelas les gritaron a los demás mientras trataban de hacerle algún daño al Ryu Hisashi en su cuello. Pero este era bastante duro, sus armas apenas le hacían unos pequeños rasguños.

Decidieron dejar el tema para otro momento y volvieron al combate. Celeste preparó su rifle mientras que Ciel su pistola y se quedaron atrás apoyando mientras Nicolás, Juniper, Magenta, Vermillon, Jaune y Neo cortaban las aletas y debajo del borde del caparazón. Ruby y Pyrrha combinaban ataques a distancia con sus armas a distancia y cuando podían las cambiaban a modo guadaña y jabalina respectivamente para lanzar cortes o puñaladas. Weiss, Blake, Ren y Ravel atacaban directamente la cabeza del Grimm quien no paraba de lanzar grandes cantidades de llamas, aunque esto no suponía un problema para la rubia. Por último Yang, Nora y Jade atacaban con todas sus fuerzas el caparazón, rompiendo todo el coral y demás que había sobre este.

-¡Esta cosa es muy resistente! ¡Apenas podemos cortar su piel!

-¡Por algo es un Grimm Clase Gaea hermana, pero no flaques ahora! – La mayor de las hermanas Arc le gritó a la menor con fuerza, pero en eso fue apartada por su hermano de un placaje justo cuando una de las aletas del Grimm casi la aplasta. – Buena salvada hermanito.

-¡Sin problema! – El chico le sonrió antes de abalanzarse contra la aleta del Ryu Hisashi, clavando su espada con fuerza en la extremidad.

El Grimm estaba apunto de usar de nuevo su aliento de fuego para quemar al rubio cuando de repente algo lo golpeó en la cabeza, haciendo que el ataque sea desviado.

-¡Ja! ¿Qué te pareció eso, imitación de Nessy? – Todos vieron como el youkai mono era el que le dio ese golpe al Grimm y vieron que no estaba solo.

-¿Llegamos en buen momento nya? – Kuroka llegó junto con su hermana y Qrow.

-¿¡Por qué tardaron tanto!? ¡La fiesta empezó hace mucho! – Yang lanzó un nuevo golpe con llamas al caparazón, agrietadolo un poco.

-No te enojes ricitos de oro, la cosa es que ya estamos aqui nya. – Kuroka le resto importancia a la queja de Yang quien tenía una vena en su frente por el tono de la gata.

-Céntrate Onee-sama. Tenemos que acabar rápidamente con esta cosa para ir con Issei-senpai y los demás. – La peliblanca cargo una gran bola de fuego azul sobre su cabeza y se la lanzó al Grimm, dándole justo en la aleta trasera izquierda que hizo bastante daño al Ryu Hisashi.

-No eres divertida Shirone… Pero ya que. – Kuroka hizo aparecer un círculo mágico detrás de ella de dónde salieron varias bolas de fuego azul que le dieron justo en la cabeza del Grimm que se vio algo aturdido. – Tch, estas cosas son una molestia nya.

-¡Y que lo digas! ¡Wah! – Ruby esquivo por poco el intento del Grimm de hacerla su aperitivo, solo para activar rápidamente su Semblanza y escapar de la llamarada que le lanzó.

-¡Hey, a mi hermana la dejas en paz! – Yang le lanzó una bola de fuego al Grimm dándole justo en la parte trasera de la cabeza. Este se dio la vuelta y vio a la rubia con rabia. – Ups…

Tanto ella como Nora y Jade tuvieron que saltar fuera del caparazón cuando vieron que el Grimm lanzó una llamarada sobre este, destruyendo gran parte de la vegetación que tenía encima.

-Creo que esa cosa se enojó… – Magenta dijo mientras sudaba un poco por el calor que estaba provocando todo ese fuego. – Ahora que lo notó, ¿Dónde están el resto de sus amigos? – Pregunto a Koneko al ver que faltaban algunas caras conocidas.

-Fueron a ayudar a Issei-senpai y Vali con el Grimm Clase Infernal.

-¿Clase que? – Nicolás preguntó al no haber escuchado de eso antes.

-Es un nuevo nivel de clasificación de los Grimms que se nos ocurrió. – Un *Ejem* hizo rodar los ojos a Yang. – Perdón, que a Ice Queen se le ocurrió. Estos son más fuertes que un Clase Gaea. – Término mientras veía a Wiess asentir con una sonrisa al recibir el crédito que según ella merece.

-¿¡¿MÁS FUERTES?!? – Juniper sintió como casi se desmaya al oír eso y no era la única.

-Sip. Esas cosas nacieron específicamente para intentar matar a Issei, de ahí lo de "Infernal" al ser él un Dragón Celestial. – Ciel aportó más datos mientras recargaba su arma.

-¿¿En serio?? Pará qué los Grimm lleguen a ese punto… – Celeste no dudó en mostrarse impresionada ante esas palabras.

-Hasta esas cosas se sienten intimidadas por el. No podía esperar menos del hombre que llamó mi atención. – Esas últimas palabras de Jade hicieron que algunas alarmas saltarán en cierto grupo de chicas.

-Y que lo digas hermana. No puedo esperar a tratar de hacerme notar ante él. – Magenta habló sin descaro alguno teniendo muy claro su objetivo.

-Con cada cosa que sabemos de nuestro héroe…

-Solo hace que queramos conocerlo más profundamente…

-Y que él nos conozca… De forma íntima. – Ambas gemelas declararon con emoción y algo de deseo.

-Eso me recuerda que aún no decidimos el orden en el que trataríamos de hablar con él y… Quizás algo más. – Y con esas últimas palabras de Vermillon es que cierto grupo de chicas estalló en furia y celos.

-¿¡Qué demonios pretenden con Issei!?

-¡Eso, cuidadito con lo que tratan de hacer con mi Alfa malditas aprovechadas!

-¡Cómo le toquen un solo pelo a mi futuro esposo las congeló vivas y las entierro en lo más recóndito de Atlas!

-¡Ustedes no tienen derecho alguno de acercarse a mi Ise como si nada!

-¡Si creen que les dejaré acercarse a mi compañero así nada más pues pensarlo dos veces!

Ruby, Blake, Weiss, Yang y Pyrrha gritaron mientras temblaban de la ira. ¿¡Qué se han creído esas frescas!?

-Pues no creo que le moleste más atención femenina. – Jade sonó con confianza mientras se cruzaba de brazos resaltando sus pechos. – Digo él parecía apreciar nuestros atributos.

-Cierto. Es tan lindo cuando cree que no lo vemos fufufu. – Vermillon río de manera coqueta mientras dejaba ver una mirada pervertida.

-Nosotras con gusto…

-Le dejaremos probarnos…

-Y después lo probaremos a él. – Lin y Gris ya parecían estar haciendo algunos planes de qué hacer con el castaño.

-Y puesto que él es poligamo por naturaleza pues no hay problema. – A las palabras de Magenta tanto sus padres como su hermano las vieron con sorpresa.

-¿¡Cómo saben eso!? – Fue Blake la que preguntó, viéndose entre sorprendida y molesta.

-Nora. – Fue la respuesta conjunta de la mayoría de las hermanas Arc, lo que hizo que varias de las féminas vieran a la mencionada con deseos de que ardiera espontáneamente.

-Bueno… Ya saben… Me gusta ver a mi hermano romperse la cabeza con estas cosas jeje… ¡¡Ugh!! – Nora de repente empezó a ser ahorcada por Neo quien tenía una cara que solo mostraba rabia. ¡A esta la mata aquí mismo! – ¡¡Lo sientooooo!! ¡¡No lo volveré a haceeer!!

-¡¡Silencio!! – Ciel le dio en la cabeza con la culata de la pistola. – ¡¡De esta no sales impune!!

En ese momento el Ryu Hisashi rugió, como recordándoles que seguía allí. Esa definitivamente fue una mala idea ya que las cinco novias del castaño lo vieron con los ojos vacíos y…

- ¡¡¡CÁLLATE!!! – Todas lanzaron un torrente de sus respectivas magias, haciendo que el Grimm se moviera unos cuantos metros y destruía algunas casas en llamas con su cuerpo. Eso hizo que muchos vieran eso con una gota de sudor en sus frentes.

-Tengo el presentimiento de que el mocoso morirá después de esto… – Ante las palabras de Qrow muchos asintieron con la cabeza.

-Ahora no le tengo tanta envidia al Sekiryuutei.-Bikou tenía una gota de sudor en la nuca al ver ese arrebato de celos.

-Issei-senpai… Es un mujeriego… – Koneko dijo mientras tenía de nuevo un tic en el ojo mientras aplastaba con su mano una piedra. – Es de lo peor.

-Sabía que esto pasaría . – Ravel, quien estaba en lo alto, negaba con la cabeza con el ceño fruncido. – (¿Y por qué será que no me gusta la idea de que no me mire a mi también?)

-... – Kuroka por su lado solo veía en la dirección donde podía sentir la presencia del Sekiryuutei y frunció el ceño. – (Juro que te haré pagar por todo esto que me estas haciendo sentir Sekiryuutei nya.)

-...Después de esto voy a querer muchas explicaciones. De todos. – Juniper habló con seriedad, sobre todo cuando vio a sus hijas. – Quiero saber todo lo que pueda de mi futuro yerno.

-¿¡Mamá!?

-¿¡Cariño!?

Tanto el patriarca de la familia Arc como su único hijo varón la vieron con asombro. Está por su parte solo se encogió de hombros.

-Sabes que ellas no darán un paso atrás, solo mira sus caras de determinación. – Dijo mientras señalaba a sus hijas que se apenaron un poco. – Además sabes que si les prohibimos algo, con más ganas lo harán.

-No puedo argumentar nada ante eso… – El hombre rubio sólo agachó la cabeza y dio un suspiro cansado.

-...Se que nos conocemos desde hace poco, pero siento que Issei rompió el Bro-code. – Jaune tenía una mirada neutra mientras decía eso.

-Bienvenido al circo que es nuestra vida. – Ren dijo mientras ponía su mano en el hombro del rubio, el cual río un poco ante esas palabras.

-Gracias… Solo me tomará tiempo acostumbrarme… ¿Lo haré cierto?

-Si claro. – Jaune se alivió al oír eso. – Con el tiempo… Un muy largo tiempo.

El rubio dejó caer sus hombros mientras daba un suspiro de resignación, pero tuvieron que regresar su atención al Grimm quien no se veía muy feliz por haber sido arrastrado por ese ataque.

Nuevamente lanzó una poderosa llamarada que todos lograron esquivar. Rápidamente Ruby y Weiss se movieron usando su Semblanza y magia respectivamente para colocarse cerca del cuello del Grimm, donde Weiss cargó Dust de fuego en su arma y apuñaló la parte central del cuello. Sacándole un rugido de dolor a la bestia que estaba por tratar de comerse a la peliblanca, pero fue detenido por Ruby que le clavó el extremo filoso de Crescent Rose MK2 en el ojo.

La criatura rugió de dolor y sacudió su cabeza en un intento de quitarse las molestias que estaban sobre él, cosa que consiguió pero tanto Ruby como Weiss aterrizaron sin problema usando viento y un Glyph respectivamente. El Grimm intentó devorarlas pero en eso sintió como alguien conectaba un poderoso golpe en su costado.

Varios vieron como Koneko había lanzado un golpe que logró mover a la criatura, pero no conforme con eso agarro al Grimm de uno de los bordes de su caparazon y en una demostración de fuerza logro voltearlo dejandolo de espaldas. Todos tenían la boca abierta por tremenda demostración de fuerza, pero pasó a preocupación al ver cómo caía de rodillas y jadeaba tratando de recuperar el aliento.

-¡Shirone! – Kuroka se apresuró a ir con su hermana, a la cual ayudó a pararse. – No te sobreesfuerces, no hace mucho usaste esa forma.

-Lo siento Onee-sama… Pensé que sería más fácil pero… Esa cosa es más pesada de lo que pensé.

-Aun así lograste dejarlo expuesto. ¡Buen trabajo! – Yang le dio un pulgar arriba antes de mirar a su compañera y ambas asintieron.

La rubia generó magia en sus manos y la usó para ponerse en una gran altura, tras eso Blake le lanzó su arma en modo Kusarigama y cuando Yang lo agarró la atrajo hacia ella. Cuando logró llegar a la altura de Yang, la pelinegra hizo un giro mientras jalaba del lazo de su arma, haciendo así que la rubia fuera lanzada hacia abajo con fuerza mientras se propulsaba con sus llamas. El resultado final fue un impacto directo en el vientre expuesto del Ryu Hisashi que rugió de dolor al sentir como era gravemente lastimado por ese último golpe.

Nadie perdió el tiempo y siguieron el ejemplo de ambas chicas, siendo Ravel y Kuroka las primeras en lanzar una poderosa ráfaga de llamas sobre el Grimm. Todo mientras los que tenían armas de fuego no dudaron en descargar hasta lo último que tenían de munición sobre la bestia mientras está solo podía rugir de dolor.

-¡¡Espero que te guste!!

Nora gritó mientras tenía su martillo en alto y varios arcos eléctricos lo cubrían como a ella misma, corrió hasta estar cerca de la cabeza del Grimm y de un movimiento dejó caer su martillo sobre este liberando una gran descarga eléctrica que sacudió a la criatura. Todos vieron cómo sacaba humo por varias partes de su cuerpo, se le notaba aturdido pero seguía vivo.

-¿Aun después de todo ese castigo sigue vivo? – Blake sonó algo sorprendida por ello. – Ni el Sea Feilong aguanto tanto.

-"Tal vez por qué es más robusto. ¿Alguna idea?" – Neo preguntó a través de su Scroll.

-Se me ocurre algo. – En eso Bikou agarró del brazo a Jaune quien lo vio con duda. – Y tú me ayudarás.

-¿De qué estas-? ¡¡¡WAH!!! – El rubio junto con el youkai se situaron justo encima del estómago del Grimm cuando el bastón se alargó de repente.

Cuando estaban cayendo Bikou cargo senjutsu en la espada del chico y así cuando ambos aterrizaron, la espada de Jaune se clavó en el Grimm y pasó toda la energía dentro de la bestia. Tras unos segundos de gritos agónicos por sentir esa energía venenosa corriendo por su cuerpo, el Ryu Hisashi finalmente se detuvo y empezó a deshacerse.

La familia Arc vieron con asombró el cómo el Grimm Clase Gaea había sido vencido, pero el que estaba más sorprendido era el mismo Juane quien veía su espada con asombro sin terminar de entender lo que había pasado.

-Enhorabuena chico. Te cargaste a un ser del nivel de un demonio de Clase Alta. – Bikou le dio una palmada en la espalda al rubio quien volvió a la realidad.

-Yo… ¿Gracias?

-No entendiste a lo que me refiero, ¿Cierto? – El Youkai lo vio con una ceja alzada y una media sonrisa. A lo que el rubio se mostró algo apenado.

– Básicamente que lograste algo grande siendo un humano normal.

-¡Oh! Entiendo. – Jaune volvió a ver su espada, vio su reflejo en la hoja y sonrió un poco. – Supongo que sí…

-¡Ese es nuestro hermanito! – Jade le dio un fuerte abrazo al rubio menor, el cual sintió como sus huesos crujían. – ¡Estoy tan orgullosa de ti!

-¡Así se hace Jaune!

-¡Lo hiciste muy bien!

La gemelas también se unieron a la muestra de cariño a su hermano que no sabía cómo reaccionar.

-Aunque la próxima vez grita menos. ¿Vale? – Vermillon le dio un golpecito en el hombro.

-Cierto. Ese no fue un grito muy masculino que digamos.

-Ya Mag, deja que disfrute de su logro. – Celeste rodó los ojos cuando su hermana le sacó la lengua.

Juane estaba algo apenado por los cumplidos de sus hermanas cuando notó que sus padres se acercaban y podía ver que en los ojos de ambos había un destello orgullo junto a algo más… Culpa.

-Hijo, bien hecho. Lograste algo que no todos pueden presumir. – Comenzó a decir el rubio mayo mientras colocaba una mano en el hombro de su hijo. – También quiero decirte que yo… Nosotros lo lamentamos.

-¿Por qué lo lamentan? – No entendía qué quiso decir su padre y pasó a ver a su madre que tenía una sonrisa triste. – Ustedes no hicieron nada malo.

-Nos disculpamos por eso mismo… No hacer nada hijo. Nunca te apoyamos con tu sueño, es más incluso intentamos hacer que desistieras de este. – Juniper tenía unas cuantas lágrimas en sus ojos. – Por eso mismo es que te términos orillando a que intentaras falsificar tu entrada a Beacon.

-Sin contar que cuando todo esto comenzó tu fuiste el que más peligro corrió por no saber pelear cuando tu madre y yo entrenamos a tus hermanas… A la larga te pusimos en peligro. – El patriarca Arc bajó la cabeza apenado mientras apretaba su puño. – Es por eso que te pedimos perdón hijo, más porque durante toda esta ocupación nos dimos cuenta que tienes talento y lo más importante. Determinación.

-Así que si nos lo permites quisiéramos ayudarte a partir de ahora a entrenar… Si es que quieres.

-Yo… – Juane secó con su brazo unas lágrimas que amenazaban con salir. – No mentiré al decir que si me afecto el ver como mi propia familia no me apoyaba, aunque igual reconozco que mi visión inicial sobre ser un cazador era demasiado infantil y que debí intentar hablar con ustedes de cómo me sentía y no solo irme… Así que no tengo nada que perdonar y claro que me gustaría su ayuda. Mamá, Papá.

Los dos adultos vieron con alegría a su hijo y no dudaron en abrazarlo, cosa que él imitó mientras los tres tenían pequeñas lágrimas en sus ojos. Todo esto era visto por los demás donde muchos tenían una sonrisa en su rostro como Kuroka quien tenía abrazada a su hermana quien también tenía una sonrisa pequeña en su rostro, pero por su parte Qrow sólo bebió de su petaca y Yang miraba esa interacción con un rostro complicado. Preguntándose si al menos podrá tener una charla con Raven para aclarar las cosas de una vez por todas.

-Bueno. Ya que acabamos aquí, ¿Vamos a ver si Issei necesita ayuda? – Dijo Jaune después de separarse del abrazo con sus padres y recuperar algo de aliento.

-Eso suena bien hijo. – Juniper dejó descansar su espada en su hombro. – Mejor demonos prisa, quiero ver con qué se enfrenta mi futuro yerno.

Si bien eso último le sacó un pequeño sonrojo a sus hijas y un ceño fruncido a algunas chicas, nadie dijo que no y empezaron a correr en dirección a donde estaba el Sekiryuutei… Todo eso bajo la atenta mirada del Nevermore Mecha de Salem, el cual activo sus propulsores y tomó vuelo en dirección a donde se dirigían los demás.

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A lo lejos en el cielo, se podía ver la figura de una persona observando todo lo que ocurría en Mistral con una mirada siniestra.

-Hmp, parece los humanos de este mundo no son tan patéticos como los de mi antiguo mundo… Será un placer esclavizarlos una vez asesine al Sekiryuutei y el Hakuryuukou. – Fueron sus palabras mientras seguía viendo todo con suma atención, esperando el momento adecuado para presentarse ante aquellos que lo adoraran… O morirán en sus manos.

Omake: Las desventuras del Team CFYV.

-(Je… Realmente soy patética.) – Fueron los pensamientos de Coco quien en estos momentos se encontraba sepultada bajo la arena. – (Al final Ilia y Lavinia tenían razón… Carmine no era más que una sucia traidora… Y yo confíe en ella.) – Si pudiera sonreír, sin duda lo haría con amargura. Hace apenas unos 2 días que ambas chicas le advirtieron sobre la cazadora y pum, había acertado.

Hoy había ocurrido algo inesperado, un ataque grande de Grimm. Cuando se levantó y vio a la cazadora veterana luchando no dudó en ir a ayudarla… Pero tras ver como esta se volvió contra ella después de acabar con los Grimm, revelando que la estuvo usando todo el tiempo fue de lo peor. Pará empeorar la situación, ella había usado su Semblanza de telequinesis para enterrarla viva.

-(Si por lo menos pudiera alcanzar mi munición de Dust… Podría hacer una explosión lo suficientemente grande con mi Semblanza para escapar… Pero no puedo mover los brazos…) – Era verdad, apenas podía moverse. Si tan solo hubiera creído en la faunus… – (Yo… Soy una idiota y ahora no podre advertirle a los demas… Y lo peor, no podré disculparme con Ilia.) – Fue su pensamiento mientras sentía que se le acababa el aire y el hecho de que sea claustrofóbica no le ayuda en nada.

-'Fue divertido mientras duró. Nos vemos en el infierno Co-. ¡Agh! ¿¡De dónde vino-!? *Crough* ¡¿Qué demonios-?! ¡Ah!'

Coco creyó escuchar la voz de esa perra quejándose, pero apenas podía oír algo por la arena y por que estaba perdiendo la consciencia.

-'¿Te pareció divertido jugar con mi amiga, miserable perra?' – Esa voz…

-'¡Tú! Debí suponerlo. Escoria faunus de White Fang.'

-'Ex-miembro. Agradecería que recordarás eso de la persona que está por meterte entre rejas.'

-'Eso no hace diferencia, ya que igual acabaré contigo.'

-'Te crees muy poderosa por tu Semblanza, pero déjame decirte algo.' – De repente pudo escuchar el sonido de un jadeo. – 'Eso no te bastará para ganarme…'

Eso fue lo último que logró escuchar Coco antes de finalmente perder la consciencia. El sentimiento era… Extraño. ¿Así se sentía morir? El proceso para llegar a esto fue bastante agobiante y aterrador para ella, pero ahora se sentía… Tranquila, como si alguien te cargará en brazos. Hasta podría jurar que sus labios se sentían cálidos. Je, este viaje al más allá casi parecía romántico.

-'Co…' – ¿Y ese sonido?

-'Coco…' – ¿La están llamando? ¿Pero quién…?

-'Coco.' – Un momento… No puede ser…

-'¡Coco!'

-(¿Ilia?)

-¡¡¡COCO!!! – Ese último grito la hizo abrir los ojos de golpe al mismo tiempo que dio un fuerte jadeo en busca de aire. Tosió un par de veces después de eso. – ¡¡Oh dios, menos mal!!

-¿Q-que? – La castaña trató de enfocar su vista tras limpiarse la arena de los ojos. Cuando finalmente pudo ver bien lo primero que vio fue a… – ¿Ilia?

-¡No sabes lo preocupada que estaba! – Ilia gritó de alegría mientras la abrazaba. – ¡Pensé que no llegaría a tiempo!

-Yo… Estoy bien Azucarito. – Ella devolvió el gesto con cariño. – Gracias por venir a por mi, aunque no lo mereciera.

-Idiota… Siempre me preocuparé por ti. En este tiempo todos se han vuelto importantes para mi… Tu lo eres.

-Oye calma Azucarito, si sigues hablando así realmente empezaré a pensar que… – Coco no pudo terminar de hablar al verse sorprendida por el beso en la mejilla que le dio la faunus.

-Yo… Estoy siendo sería con esto Coco. – Si bien hablo con mucha seriedad, se podía notar que estaba terriblemente avergonzada por el tono rosado de toda su piel. – Se que nos conocemos desde hace muy poco pero… Sencillamente no puedo apartar la vista de ti… De dejar de pensar en ti Coco.

Coco no dijo nada, solo se le quedó viendo con una sorpresa que jamás pensó que llegaría a sentir. Y menos aún sentir como el corazón estaba por salirsele del pecho.

-Yo… Ilia… Realmente no se que decir. – Pocas veces en su vida Coco Adel no sabía cómo responder a una situación y esta era una de esas ocasiones.

-Podremos hablar de ello en otro momento. Primero vamos a detener a esa perra de Carmine. Los demás fueron tras ella y Lavinia dijo que se pondrá sería. – Fue todo lo que dijo antes de ayudar a la castaña a pararse y la tomaba de la mano. – ¡Vamos Bombón!

-¡S-si! – Coco respondió con un tono nervioso que jamás en toda su vida pensó que pondría alguna vez.

Así ambas se pusieron en camino, con una dejándose llevar mientras aún trataba de procesar lo ocurrido y la otra muriéndose de vergüenza. Pero después de esto ya no había vuelta atrás, había aceptado este nuevo sentimiento que había empezado a florecer dentro de ella desde que conoció a la modista y en esta ocasión no se quedaría callada. Este era el nuevo comienzo de Ilia Amitola con Coco Adel.