Capitulo Nueve.
-Colin Bridgerton ¿Cómo puedes decir eso? - Le pregunté con valentía- ¿Cómo puedes creer que no siento nada por ti? Sí eres a quien yo más quiero en el mundo. Por eso me fui-Expliqué mientras el volvía a mirarme esperanzado-De alguna manera tenía que tratar de superar este amor y por mi propio bien enfrentarme a mi realidad para continuar mi camino. Verte cortejar a mi prima… créeme que no era fácil. También moría de celos al verlos juntos…
Nos entendimos y él sonrió.
-Pen…-Dijo maravillado.
-Espera. Déjame terminar-Le pedí-Cuando al fin creí que podía manejar esta situación regresé con la intención de ser solamente tu amiga y darte espacio para que fueras feliz con la persona que eligieras. Luego conocí a Lord Debling… es un hombre generoso a quien estimo.
-No tengo derecho a reclamarte nada con respecto a él.
-No, no tienes-Confirmé-Y realmente pensé que podría sentir algo parecido por él porque de él me atrajo su personalidad, me gustó físicamente y lo admiré. También me equivoqué. Lo supe cuando te volví a ver… todo había cambiado. Tú habías cambiado. Yo había cambiado. Jamás me imaginé que tu cambio se debía a que te habías dado cuenta de que… me querías.
Le sonreí y él iba a decir algo, pero no lo dejé hablar.
-Siempre he tenido claros mis sentimientos. Te quiero Colin Bridgerton-Declaré dulcemente-Como amigo, como compañero y como hombre. Te he amado desde que te hice caer del caballo y no pienso dejar que sacrifiques a esté amor creyendo que yo podría llegar a ser feliz con otro que no fueras tú.
-Todo está cómo siempre debió ser.
-Por fin-Coincidí cruzando mis brazos por su cuello.
- ¿Quieres ser mi esposa señorita Featherington?
Contuve el aliento.
-Hay algo que debes saber de mi...
- ¿Que eres Lady Whisteldown?
Me vi descubierta.
- ¿Cómo lo supiste?
-Mi hermana no fue muy sutil a la hora de ser tu reemplazo…-Dijo y no tuvo que decir más.
Ya no había secretos ni malos entendidos entre nosotros.
- ¿Te molesta?
-Ustedes dos juntas un día van a matarme. Aun así. No puedo vivir sin ninguna de las dos.
- ¿Quiere ser mi esposa señorita Featherington?- Repitió la pregunta.
-Si-Le respondí segura.
Colin me deslumbró con la hermosa sonrisa que me regaló, me abrazó y luego enterró su nariz en mi cabello y así nos quedamos un buen rato.
-No bailaste conmigo-Me acusó de pronto- ¿Me concedería ese honor de bailar conmigo futura señora Bridgerton?
-Estaría encantada de bailar con usted señor Bridgerton-Le respondí feliz apegándome a él.
Comenzamos a girar lenta y suavemente. Nuestras miradas se conectaron nuevamente.
Y tal como había pasado con Lord Debling, nuestro baile también terminó con un beso inolvidable.
Mi segundo beso.
La diferencia estaba en que sí con el beso de Alfred había llegado a las nubes, con el beso de Colin había llegado a las estrellas o quizás más lejos.
Su necesidad y la mía colisionaron y era tal la urgencia de nuestra entrega que terminé sin su chaqueta.
Todo lo correspondiente al decoro dejó de tener sentido entre nosotros.
Sus besos no me dejaban pensar. Todo mi amor emergió y se lo entregué sin limitación. Lo sentí gruñir mientras se hacía paso y volvía a recorrer mi espalda atrayéndome aún más.
De un segundo al otro Colín me tenía acorralada contra el gran árbol que sostenía los columpios besando cada parte de mi rostro y cuello. Sus manos recorrieron libremente cada sitio mientras su boca volvió a devorar a la mía con premura.
Estaba a su merced. Su calor traspasa mi vestido y yo… yo estaba tan perdida en las sensaciones me producía al tenerlo recorriéndome que no me di cuenta en qué momento la intensidad fue subiendo.
Ya no habían más reservar de mi parte. Yo era suya.
Estaba tan desconectada de la realidad que tampoco me di cuenta como una parte de mi vestido había sido removido dejando uno de mis pechos a su vista.
Los ojos de Colin lo quemaron sin tocarlo.
-Eres tan hermosa…
-Acaríciame…-Le pedí con voz entre cortada y encendida.
Él no lo dudó. Su mano izquierda bajó y rozó mi ceno con las yemas de sus dedos con delicadeza.
Mi respiración se hizo irregular mientras yo con mi mano buscaba y la suya por encima apretandola para así él hiciera lo mismo con mi pecho.
Fue embragueador sentirlo amasándolo y conociendo otra parte de mí.
Me sentí completa, querida y adorada y esos fueron los últimos pensamientos coherente que tuve antes de dejarme llevar por la pasión atrayéndolo más a mí y dejando que bajara por mi garganta.
Sólo fui capaz de contener el aliento cuando su rostro bajó más, hasta mi pecho y lo atrapó con su boca haciéndome arquear el cuerpo debido el placer de sentir su lengua hacer círculos justo en el pezón.
Como respuesta mi otra mano viajo hasta su cabello y lo tiró.
Fue el instante más excitante de mi vida.
-Serás mi perdición…-Me dijo antes de cerrar su mano con firmeza en mi pecho de volver a reclamar mis labios.
Mis ojos abrazadores lo observaron. Mi boca se abrió para él en espera de más besos.
Colin volvió a besarme con necesidad.
Y el tiempo se detuvo un poco a mi favor.
-Solicitaré una licencia especial…- Me avisó cuando su boca estuvo suficientemente libre-No creo que me pueda contener la próxima vez que te tenga así…
Intenté aclarar mis pensamientos.
Nos tuvimos que separar un poco para poder tomar un poco de aire.
-Te amo, Pen-Susurró contra mi piel. Hueles tan bien... Te deseo tanto…
-Quiero ser tuya en todos los sentidos, pero debes hablar con mi madre primero y yo debo hablar con Lord Debling.
-Lo sé. Estaré a tu lado y le explicaremos a ambos, mañana a primera hora-Dijo dejando una línea de besos hacia mi descubierto pecho.
-Espero que él lo entienda.
Se retiró un poco más.
-Mis sueños no te hacen justicia.
Yo respiré un par de veces volviendo a la realidad.
-Jamás imaginé que esto sería tan poderoso…-Reconocí.
Creo que nunca me había sentido tan mujer. Comencé a reír.
Colin comprendió mi estado y también terminó riendo mientras acomodaba mi vestido.
Tomó mi mano y la besó.
-Te amo a ti, señor Bridgerton. Gracias por hacerme tan feliz.
-Será mejor entrar…-Dijo mientras deslizaba su mano por mi mejilla.
Me incorporé terminando de estirar la tela que se había arrugado por completo.
- ¿Estoy muy despeinada?
-No mucho-Mintió con una sonrisa- ¿Estoy presentable?
Su cabello estaba hecho un lio.
-Si-Mentí sonriendo.
Se pasó las manos por su cabello. Arreglándolo casi como siempre.
Me ofreció su mano.
- ¿Qué tal sí ahora se lo contamos a mi familia?
Yo estuve de acuerdo.
Contuve el aliento mientras tomaba su mano y me dejaba guiar para siempre.
Lo vi caminar orgulloso al tenerme de la mano mientras me daba cuenta que los sentimientos confusos que ambos sentíamos finamente se habían aclarado.
Benedict y Eloíse nos vieron aparecer tomados de la mano. Benedict celebró.
-El, nosotros…-Comencé a explicar.
- ¿Cuándo será la boda…? - Cuestionó directamente.
Benedict, le dio un toque en las costillas con el codo aguantando la risa e intentando y pedirle a Eloíse el pago de la apuesta que seguramente hicieron entre ellos.
Colin y yo nos miramos y sonreímos.
-Lo antes posible, Eloíse-Respondió Colin-Lo antes posible...
Fin.
De verdad, muchas gracias por leer esta linda historia.
