Capitulo 10: Diversión en la Escuela - Primera Parte

Los héroes vieron con gracia como cada estudiante salia corriendo, para ver las instalaciones que podía proporcionar la Escuela. Solo esperaban que no terminaran rompiendo algo en su primer día.


-.-.-.-.-Salón comedor-.-.-.-.-

Rainie estaba sola mirando alrededor del salón, buscando a su amigo. ¿Donde se había metido? Ni siquiera la había esperado para que fueran juntos y ahora estaba perdida. Para colmo, al parecer éste no se encontraba en la cocina y ahora no sabía donde mas buscar. No quería perderse.

—Señorita, ¿Se le ofrece algo? — dijo la voz pastosa de alguien a sus espaldas. Haciendo que la chica diera un pequeño grito y se pusiera rápidamente en guardia, dándose la vuelta en su propio eje y llevándose la enorme sorpresa de encontrarse con un hombre de cabello corto y negro, al igual que sus ojos. Estando a punto de atacarlo cuando la voz de Juliet la detuvo.

—¡No, espera! — le grito la pelinegra entrando rápidamente a la cocina, y interponiéndose entre ella y el hombre, estirando los brazos a sus costados — Se que se ve bastante tétrico y macabro, pero solo es Donovan... Un robot humanoide que hice con Tony — le explico con prisa, haciendo que Rainie suspirara dejando su postura.

(NT: lo de ponerle mi nombre a ese robot no fue idea mía, si no de Taishita)

—Lo siento, es que me asusto... — se disculpo, viendo como Juliet negaba suavemente para luego voltear a ver al robot.

—Donovan, vete... — le ordeno, haciendo que el robot humanoide obedeciera de inmediato — Tu solo dale una orden y él la obedecerá. No te hará nada, te lo prometo... — le explico, viendo a la joven asentirle.

En eso un pequeño silencio se formo. Uno que no tardo en incomodar a Rainie, haciendo carraspeara por bajo y Juliet la mirara fijo.

—Así que... ¿eres la hija adoptiva de Tony?— pregunto amablemente, provocando aun así que Juliet le viera con una sonrisa nerviosa.

—... Si... pero no hablemos de eso, es una historia aburrida, mejor vamos a el Salón de Juegos — le propuso evitando el tema — la mayoría de los muchachos están allí... — le explico, haciendo que Rainie entendiera el porque de la repentina desaparición de Ezio. Después de eso la pelinegra abandono el Salón Comedor siendo seguida por la muchacha.


-.-.-.-.-Salón Relax-.-.-.-.-

Alisson y Mery habían llegado a trote rápido hasta la primera habitación del segundo piso. Casi y se van de espaldas al ver todo lo que la habitación blanca y celeste tenia para ofrecerles: varias duchas, saunas y distintas camas altas con toallas blancas sobre ellas. Ambas rodearon las distintas maquinas hasta llegar al hidromasaje que se encontraba en el sector izquierdo de la gran habitación.

—Sin duda debo probar esta cosa — dijo la voz emocionada de Mery, mientras veía con fascinación lo que seguro seria un relajante baño con burbujas. Alisson asintió apenas, casi distraída. En su cabeza solo quería seguir recorriendo las instalaciones.

—Yo también... Pero vamos a ver otro lugar — propuso entusiasmada mientras se alejaba del lugar. No tardando mucho Mery en seguirla rápidamente.

Ambas corrieron hasta unas escaleras en forma de caracol que las conducía solamente hacia abajo. Con una sonrisa, las chicas bajaron lentamente... Sin saber bien con que se encontrarían allí.


-.-.-.-.-El Jardín-.-.-.-.-

Maykol ya había pasado antes por el Salón Relax, el Salón Comedor y parte del tercer piso de la Escuela. Ahora se encontraba comiendo una dona mientras veía los grandes senderos que allí se encontraban, sin duda esta era la zona que más le gustaba. Camino por un sendero de adoquín hasta ver que el sendero se dividía en dos. Había un cartel con dos flechas que señalaban los caminos a lo que seguro conducía cada uno... Mientras uno decía: "jardín de las rosas", el otro señalaba: "Lago del sauce llorón". Dándole una mordida más a la dona se dirigió al Lago del sauce llorón y sin duda la imagen lo dejo impresionado.

Podía verse un pequeño lago cubierta por nenúfares y flores de loto, a sus costados podían verse enredaderas con pequeñas flores rojas. El sauce estaba justo en frente suyo, con sus hojas cayendo en una cortina que dejaba un espacio vació, como para que alguien se sentara allí. Maykol ante la visión sonrió de medio lado y rodeo el lago hasta el sauce, sentándose en sus raíces. Luego de eso cerro sus ojos y dejo que la paz y el cantos de las aves lo arrullaran. Aun que de pronto un sonido muy cerca suyo lo hizo abrir los ojos con brusquedad.

*Cuack Cuack*

Con esto le dio casi ganas de reírse, una pata con sus cinco patitos amarillentos estaban viéndolo desde la orilla del lago. El peliverde ante eso sonrió y corto unos pequeños pedazos del pan de la dona que tenia y se las arrojo cerca suyo. Rápidamente los patitos empezaron a comer las migajas, mientras la mamá pata solo observaba al estudiante... por si las dudas.

Ante eso Maykol sonrió de medio lado. Sin duda, este seria su lugar favorito.


-.-.-.-.-Canchas de deporte-.-.-.-.-

Alice miraba con fascinación las canchas de distintos deportes que estaban el la parte trasera del jardín. Y casi da un grito al viento al ver la piscina Olímpica que estaba justo al final de la cancha de basquet. Se acerco a ella y se inclino para ver su reflejo en la cristalina agua. ¡Le daban muchas ganas de darse un chapuzón! además hacia calor y no creía que alguien se molestara con ella por...

*SPlash*

De repente Alice cayo bruscamente al agua de la piscina y salio rápidamente a la superficie con el rostro asustado. Tocio un poco de agua y levanto su mirada furiosa a la orilla de la piscina, solo para enojarse más al ver quien había sido él que la había empujado.

—Llámalo venganza y bienvenida ... — le dijo burlón Jhonny mientras de su bolsillo sacaba una cámara — Sonríe... — luego de eso el flash de la cámara dejo ciega por unos minutos a Alice, que para cuando recupero la vista se dio cuenta que el héroe ya no estaba.

En eso furiosa sale de la piscina dandose cuenta que Johnny no estaba tan lejos, solo estaba corriendo y estando a punto de llegar a la mitad de camino del edificio. Ante eso la muchacha sonrió por crueldad y río macabramente, solo con la idea de devolverle el ataque a Jhonny. Así que convirtiéndose en un Guepardo (Nt: ni idea de donde toco uno XD) salio tras su victima en una cacería que de seguro iba a disfrutar


-.-.-.-.-Salón de Juegos-.-.-.-.-.-.-

El tercer piso también contenía radares, sistemas de navegación computerizados y sistema de comunicaciones. Además de un taller completamente equipado para reparar los Gets y depósitos de combustible para los aviones. El hangar tenía capacidad para albergar cuatro Gets de distintos tamaños, tres en el almacén y uno en posición de despegue. Y aunque a Ezio le gustaba eso, no pudo quedar mas fascinado y maravillado con el Salón de juegos que sin duda iba para sus favoritos.

Ahora el estaba jugando una partida de Futbol Soccer con Jhon. Ambos empatados 2-2 y al parecer ninguno con la intención de dar revancha. Rainie, Juliet (quienes habían llegado hace rato y luego de que la muchacha le diera un golpe duro en la cabeza a Ezio, por haberla dejado sola en el Salón comedor con un robot macabro) Alisson, Karen, Sophis, Mery, Melissa y Hikaru estaban decidiendo que música escuchar. Luego de una disputa decidieron dejar que Victor eligiera una canción y él se decidió por "Don't dream". Entonces cuando la canción empezó a sonar, las jóvenes estudiantes se sentaron en unos sillones en ronda mientras bebían unas sodas (que les habían ofrecido Alexander y Devon, los cuales las habían traído del salón comedor).

—Y ... ¿Quien quiere comenzar? — empezó diciendo Alisson, las muchachas que estaban a su lado (que eran Juliet y Karen) le vieron y después sus demás compañeras.

—¿Porque no empiezas tu, Alisson? — propuso Melissa, haciendo que Alisson se ruborizo levemente.

—Si, empieza tu y luego que la ronda siga desde izquierda a derecha... — secundo Mery, señalando con sus dedos la ronda y el orden que podrían seguir. Haciendo que todas asintieran conformes, menos Karen.

—Bien, ¿que puedo decir?... — se pregunto Alisson llevándose un dedo a su mentón — Pues, mi nombre ya lo saben, y pues... estuve en un orfanato 11 años de mi vida hasta que un día me harte de las reglas de ese lugar y decidí escaparme una noche después de haber cumplido los 14 ... — contó con naturalidad, dejando a sus compañeras y a los chismosos impactados (o sea a los varones, excluyendo a Alexander) — Mis poderes los obtuve en un callejón y mi mejor amigo es Alexander — dijo señalando al chico que estaba junto a Devon.

—¿Y cuál es tu alias? — pregunto Juliet, haciendo que Alisson le viera confundida — O sea, tu próximo nombre de superhéroe... — explico mejor, haciendo que esta asintiera al comprenderlo.

—Oh si, por ahora soy WonderGirl (n.n)— termino por explicar —Bueno, tu turno Juliet... — acoto viendo a la muchacha a su lado.

—De mi mucho no hay que decir... — exclamo algo incomoda —Soy Juliet Stark, Tony me adopto hace tiempo por... ... — contaba parando su discurso de pronto. Juliet no sabia que decir, ya que después de lo ocurrido con Amora (la encantadora, villana de Thor), Fury le ordeno no decir ni una sola palabra de su pasado — Bueno... él lo hizo porque no tenia a nadie y además por un tema que sucedió con el virus extremis... — siguio contando, aun con nerviosismo en su voz — vivo con Tony y Pepper. Happy es mi chofer y guardaespaldas... Continuamente estoy viajando y yo ayude a Tony con la idea de la Escuela de Héroes y mi alias es Taishita... — explico, finalizando su extraña y mal contada historia.

—Oye, ¿puedes repetirlo?... Porque no te entendí nada— le pidió Mery confundida, mientras tachaba rápidamente lo que había anotado en una libreta de quien sabe donde saco.

—No... — le respondió con frialdad, haciendo que las estudiantes vieron impresionadas la manera rápida en que Juliet había cambiado de personalidad. Mery asintió rápidamente y anoto en su libreta.

Alisson: Fugitiva...

Juliet: Bipolar...

Devon es atractivo...

¿Donde dormire yo?

—Bueno, sigo yo. Mi nombre es Melissa Chassier, tengo 15 años y viví la mayor parte de mi vida en Francia, amaba observar por las noches la Torre Eiffel, mi familia es dueña de un viñedo, siento una gran admiración hacia Steve y me gustaría luchar a su lado como Hikari... — conto Melissa con simpleza, haciendo que Sophis le viera con una sonrisa casi de burla.

—¿Te gusta Rogers?— le pregunto maliciosa, provocando que Melissa se sonrojara por completo.

— ¡Claro que no! — le replico viendo ofendida y molesta a la niña. Luego de eso con un bufido de enojo, abandona la habitación, y aunque las estudiantes trataron de que no se fuera, no pudieron evitar que ella se marchara enojada — (¡Bobas!, encima que yo les hablo sobre mi, esas tontas tenían que burlarse...) — pensó enojada mientras se dirigía al jardín del sauce llorón.

Mientras que Melissa estaba enfadada en el jardín trasero. En el Salón de juegos aun estaban regañado a Sophis por haberle dicho tal cosa (menos Juliet y Karen). Alisson, Mery y Hikaru eran las más molestas por la actitud de Sophis. En cuanto a Rainie, esta solo le molestaba directamente la actitud de la niña. Al final Hikaru salio en busca de Melissa para ver como podía arreglar el asunto.

Juliet y Karen solo veían con neutralidad la tonta escena de Alisson regañando a la niña. A Juliet no le había parecido que el comentario de Sophis hubiera sido ofensivo o fuera de lo normal, y a Karen simplemente le daba igual si a las estudiantes les molestaba o no ese tipo de comentarios. Y aunque Alisson seguía con su largo discurso del porque no debía hacer ese tipo de comentarios a la niña, ésta no daba indicios de arrepentimiento por lo que había sucedido antes y Devon lo noto, pero aun así no dijo nada. Jhon en cambio las vio de medio lado .

—Sophis, es mejor que te disculpes ahora con Melissa... — le pidió John, poniéndole pausa al juego. Ezio ante eso solo vio a su nuevo amigo enojado. ¡Había estado haciendo una jugada perfecta y Jhon le pauso al juego!. Razón por la cual ahora se cruzaba de brazos molesto, mientras abandonaba el joystick —Oye, no hagas escena (¬¬).

—Ahora soy yo el ofendido... Me voy a comer — dijo justo en el momento en que su estomago había crujido. Solo por esto Jhon ríe y se levanta del cojín en el que habían estado antes.

—Vamos al Salón Comedor, creo haberlo visto abajo junto a una salida de emergencia — concordó, dándose la vuelta para ver a los otros dos estudiantes — Oigan muchachos ¿Nos acompañan? — les pregunto señalando a la puerta, haciendo que Alexander y Devon asintieran.

—Si pero... — exclamo Devon, haciendo una pequeña pausa y dejando arrastrar la ultima letra de su oración —¿No vieron donde se metió ese muchacho? Creo que dijo que se llamaba Axel o algo asi... — pregunto confundido, provocando que Alexander le palmeara el hombro.

—No te esfuerces o tu cerebro se sobre-calentara amigo — comento burlonamente Alexander, haciendo reír a todos y provocando a su ves que la antigua discusión se olvidara. Aunque obviamente al único que no le causo gracia fue a Devon, que solo le miro molesto por el comentario —Oh vamos, fue una broma... ... ... Mejor vamos a comer— exclamo nervioso mientras se alejaba del muchacho.

Ya anteriormente Devon había dicho algo sobre sus poderes y la verdad era que Alexander aun no quería ver las destrezas de su nuevo amigo, así que con cautela llego hasta la puerta. Pero sin que este se diera cuenta, Devon ya estaba persiguiéndole por los pasillos, tratando de atraparlo y darle un golpe (amistoso). Los demás estudiantes (menos Karen) solo vieron esto con más gracia aun y entre carcajadas siguieron a los dos muchachos por casi toda la Escuela, tratando de seguirles el paso. No querían perderse de nada y más aun cuando Devon parecía ser más rápido a cada segundo. Sin dudas, las risas fueron las que se adueñaron de los pasillos del segundo piso.


-.-.-.-.-.-El laberinto de los jazmines-.-.-.-.-.-

Sin tener mucha idea de a donde iba, Melissa caminaba sin parar por los complicados caminos del laberinto en el jardín. No teniendo idea de por que había decidido entrar en tan problematico sitio en primer lugar. Lamentando ahora aquella decisión mientras giraba a la izquierda, luego a la derecha, a un lado y hacia el otro. Dando vueltas y vueltas sin encontrar la salida.

Ahora incluso estaba molesta consigo misma, ya que definitivamente se había perdido de la manera muy estúpida. ¿Porque simplemente no podía hacerse la ofendida dentro de la Escuela, en vez de salirse a caminar en un lugar que no conocía?. Simplemente nada le salía bien, teniendo unas increíbles ganas de regresar a su querido Paris y olvidar todo esto de la escuela de héroes... pero claro, para hacer eso primero tenia que encontrar la salida de ese tonto laberinto de hojas y flores blancas, que no hacían mas que confundirle la vista por su llamativo color. Y la verdad hubiera usado su sensible sentido del olfato para escapar de aquella trampa de flores, si no fuera por que al haber tantos tipos de éstas a su alrededor, probablemente sus distintos aromas la sofocarían, haciendo que vomitara el desayuno que nunca pudo comer.

—(Genial...) — pensó con sarcasmo y una retorcida sonrisa. Pues hasta ahora se daba cuenta que por culpa de hacerle caso a Reed, se había quedado sin comer nada desde la mañana y ahora se moría del hambre —(Si tan solo encontrara la maldita salida)— pensó cada ves mas frustrada.

—¿Te perdiste?... — le pregunto una voz femenina detrás suyo, haciendo que Melissa diera un grito del susto y se voltea para ver a Hikaru. A la cual al principio solo le parpadeo confundida.

—Yo no ... Emmh — exclamo la muchacha de largos cabellos grises, parpadeando varias veces mas para luego resoplar el poco aire que tenia en los pulmones —Si ¿Tu sabes donde esta la salida?— pregunto resignada, ganándose una sonrisa de Hikaru.

En eso ambas empezaron a caminar en dirección opuesta a la que venia caminando Melissa. Hikaru quería disculparse por lo que había pasado anteriormente, pero no sabía como lo iba a tomar su compañera...

—Perdón por arruinar la charla de las chicas... — exclamo avergonzada Melissa. Hikaru volteo a verla sorprendida, pero después solo le sonrió amablemente.

—No importa— le contesto sin mayor problema —Las chicas no se molestaron contigo, es por eso que estoy aquí... Ellas querían disculparse por haberte incomodado... En especial Sophis— dijo ella, disculpándose por la niña sin saber de su verdadera identidad. Luego de unos minutos incómodos para Hikaru, la chica pregunto —Oye, Melissa ... — le llamo, haciendo que la estudiante volteara a verla —¿Porque siempre traes mucha ropa contigo?

Melissa no le respondió, pero tampoco le vio de mala forma, solo sonrió de medio lado y volvió a ver el camino, Hikaru supo que era mejor no preguntar por ahora, ya más tarde le volvería a hacer la misma pregunta. Ambas no dijeron nada hasta salir del laberinto donde directamente fueron hacia el Salón Comedor.


-.-.-.-Jardín del Sauce Llorón-.-.-.-.-

Maykol estaba en paz, ya hace rato le había dado de comer a los patitos y ahora solo miraba el paisaje y se dejaba relajar como solo lo hacia de vez en cuando. Aunque eso no duro mucho tiempo, pues se sentía vigilado y eso no le agradaba en nada. Al principio creyó que solo había sido por una cámara de seguridad o algo por el estilo... pero al no ver rastros de estas, ya se había empezado a incomodar. Sin embargo, al pasar los minutos y ver que no había amenaza alguna, dejo que su cuerpo se estirara como felino y se echara sobre el tronco curvo del árbol. Las flores le dejaban una agradable fragancia en sus fosas nasales y el silencio casi lo hacia dormir, de echo estaba a punto de hacerlo sino fuera porque...

—¡No detente, bruja loca!— dijo la voz espantada de Johnny, saliendo de la nada y tropezando con Maykol. Haciendo que éste quedara estampado contra el suelo, ya que al estar relajado lo habían pillado desprevenido.

Justo detrás de un arbustos con flores lilas, sale un hermoso guepardo de tamaño chico, pero con unos increíbles colmillos. Johnny solo atina a tragar duro y Maykol solo se queda perplejo, nunca antes había visto algo así y aunque no era nada comparado con las cosas que había visto anteriormente en su vida, no podía simplemente no impresionarse. Sin embargo el peliverde, notando que el guepardo solo parecía tener su vista fija en Jhonny, se lo quito rápidamente de encima, para luego salir corriendo unos cuantos pasos lejos de él, escuchando como a sus espaldas él animal se echaba encima de la Antorcha Human. El cual por cierto solo atino a esquivar las mordidas del guepardo.

—¡Alice, basta! ¡No hagas que me enfade! — gritaba Johnny mientras solo atinaba a esquivar los arañazos y las mordidas del animal.

Maykol que estaba viendo todo eso, solo pudo sonreír con gracia al comprender el porque de dicha pelea tan extraña, entre uno de los 4 Fantasticos y un guepardo de quien sabe donde salio. Algo a lo que decidió no darle mucha importancia, mientras resoplaba y le daba un ultimo vistazo a la cómica pelea, concluyendo fácilmente de que Alice seguramente puede cambiar de forma. Pero claro, solo es una idea suya... ya solo escuchando los gritos de Johnny y los rugidos de Alice a la lejanía, a paso lento va abandonando el Lago de Sauce Llorón para dirigirse a almorzar algo al Salón Comedor.