Disclaimer: El universo y los personajes que reconozcáis le pertenecen a Rick Riordan.
Solo la trama es mía. No obtengo beneficios económicos ni lucrativos al escribir esta historia.
Aviso: Este fic forma parte del #Flufftober de #EsDeFanfics.
Nota: El título no está mal escrito. Comprenderéis cuando leáis.
Fandom: Percy Jackson.
Emparejamiento: Luke Castellan/Ethan Nacamura.
Prompt 5: Feria.
¡Vamos a la fiera!
Estaban preparándose para ir a la feria. Era una chiquitita, en un condado cercano, pero a ambos les había hecho ilusión ir con Park. Sería la primera vez que su hijo iría a la feria. Bueno, la primera vez que lo disfrutaría, porque fueron una vez cuando era un bebé y otra cuando tenía un añito, pero no pudieron subirle a nada. Aunque Ethan ganó una nutria de peluche para él.
Luke se estresó con los globos y fue a por algodón de azúcar con su hijo. Pero esta vez sí que lo conseguiría. No iban a ganarle unos globos y una pistola trucada. Para tramposo ya estaba él, hijo de Hermes.
Le puso ropita cómoda a su bebé, que no paraba de menearse emocionado y distorsionar el tiempo en el proceso y tuvo que correr tras él cuando se negó a ser peinado.
-¡No, papi! ¡No me peino!
Ethan los miró desde el salón, con una sonrisa, el muy traidor.
En breve, agarraría a Park y ambos correrían al coche dejando a Luke ocuparse de conectar la alarma, cerrar la puerta con llave y asegurarse de que los aspersores estuvieran apagados.
Como ya sabía, lo que había predicho ocurrió y ambos corrieron al coche, riéndose.
Su marido era imposible.
-¡Fiera, fiera, fiera! -Park iba cantando en el coche.
Ethan ya le había dicho que se decía Feria, pero él continuaba diciéndolo mal.
Tenía tres años, no podía pedirle un gran vocabulario. Además era adorable.
-No le des azúcar o esta noche no dormirá nadie. -Luke advirtió.
Iba al volante porque no se distraía con los gritos de Park en el asiento trasero. Y además, Ethan no se atrevía a conducir con su hijo en el vehículo.
Castellan decía que era una tontería, pero él no daría su brazo a torcer.
-Luke, pero si luego eres tú el primero que le da azúcar. -Nacamura resopló.
-No sé de dónde te has sacado semejante falacia.
Ethan resopló. Su marido mimaba a Park, a veces demasiado. Pero mientras su hijo no se volviera un malcriado, le daba igual.
Park no quería ir de la mano. Quería correr y curiosear por todas partes. Sin embargo, al ser un lugar tan concurrido, no se lo permitirían. Así que Luke se lo subió a los hombros ya que era algo que Park adoraba. Aunque le tapara los ojos y Ethan tenía que evitar que se chocara.
-¡Papi, papá! ¡La fiera! ¡Mira! -Chilló como si ellos no pudieran verlo.
-¿Ah, sí? ¿Es la feria? -Ethan preguntó con fingido asombro.
-¡Sí! -Luke tuvo que agarrar bien a su hijo para que no se cayera de tanto que se meneaba.
Fueron primero a las camas elásticas. Habían llevado alguna vez a Park a unas que había cerca de donde Ethan trabajaba y le encantaban.
Ya tendrían tiempo para que Luke pudiera desafiar el puesto de los peluches.
