Notas:

Bueno, aquí Vera les viene a traer un capítulo más de este fic como regalo de Navidad de mi parte y de paso, para avisar que este será el Último Capítulo que publicare del año.

Ya que como algunos saben, voy a salir de mi país a partir de este miércoles 27 de diciembre por vacaciones familiares y regresare hasta finales de enero.

Así que nos seguiremos leyendo el año que viene. En serio les quiero dar las gracias por todo su apoyo y por haberle dado una oportunidad tanto a este fic como a todos los demás que he escrito❤

Espero les guste este capítulo ya que tanto estará narrado por Mai (Las partes en cursivas son las palabras de ella) debido a que esta es la continuación de la carta que empezó a leer Okkotsu en el capítulo anterior. Como también habrá algunos flashbacks para que puedan entender un poco del contexto de la historia.

Como dije espero disfruten su regalo de navidad, el cual es el capítulo más largo que he escrito hasta la fecha y de paso, les deseo que tengan un feliz año nuevo 🎉✨

Nos seguimos leyendo en este 2024 ✨

Los quiere Vera ❤


Capítulo 12. Secretos

Si te cuento un secreto, jura lo guardaras, en tu bolsillo con candado y a la tumba llevaras. Si te cuento y te lo enseño, sé que no lo dirás, que dos guardan secretos, cuando una muerta esta…


Okkotsu, ¿Sabes guardar un secreto? Porque necesitaré que me guardes varios.

Bueno, todo lo que te contaré a continuación, es lo que considero más importante que debes saber sobre lo sucedido después de tu partida. Quizás algunas partes se leerán muy apresuradas, porqué si te contará todo lo que pasó en estos siete años, no acabaría nunca. Así que en las siguientes páginas solo te contaré lo que pasó después de tu partida y los meses posteriores donde Maki estuvo embarazada y sobre el suceso que hizo que tus hijos nacieran antes de tiempo.

Si te nacen algunas dudas con lo que leerás a continuación, será tu misión encontrar las respuestas.

También, ya será de ti, creerme o no. Pero todo esto yo lo viví de primera mano porque yo estuve ahí. Soy fiel testigo de todo lo que tú partida provoco.

Y lo primero que debo confesar, es que te odio por haber abandonado a mi hermana. Nunca había sentido una angustia y una empatía tan molesta por Maki, pero ese día de tu partida y de paso, el recibir aquella noticia sobre que ella estaba embarazada, me movió sentimientos que no creía tener y de paso, fue lo que termino uniéndonos de la manera menos pensada.

Okkotsu ¿Has escuchado alguna vez que los gemelos tienen una intuición o un sexto sentido que les avisa sobre que su gemelo está en problemas o que le sucede algo malo?

Bueno, para nosotras como gemelas, siempre hubo una conexión de ese tipo. Ahí supe que algo andaba mal con Maki...


Hace siete años atrás.

Flashback

Mai arrugó la nariz mientras terminaba de tomar aquella botella de agua. Desde hacía rato que se sentía extraña. Era una sensación que le decía que debía salir a cierta zona con urgencia.

Por un momento, sintió su celular vibrar.

—¿Quién será esta vez?— se dijo en voz baja mientras veía su celular. Pero para su sorpresa, no había ningún mensaje en su bandeja de entrada.

Aun así, Mai se fijó en la hora, ya eran pasadas del medio día.

—De seguro la idiota de Maki ya se fue de regreso a Tokio con ese imbécil de Okkotsu.

Se dijo a sí misma tratando de concentrarse en llenar sus informes, pero de verdad, no podía sacarse ese raro sentir y presentimiento del pecho.

Incluso empezó a tener un extraño pensar con Maki. Era como si su hermana mayor le llamara a lo lejos.

Mai sentía que algo andaba mal con su gemela y quizás debía ir a averiguar qué pasaba. Aunque también asociaba esa sensación al estrés por las misiones que había tenido en esos días.

Una parte de Mai también se sentía molesta ya que se había enterado que su hermana mayor había estado en Kioto de luna de miel y para nada había tenido la iniciativa de pasar a saludarla o de mínimo avisarle que estaba en esa ciudad aquel fin de semana.

—Idiota...— Susurró mientras miraba una vez más su celular. Abrió el chat de su hermana y noto su última conexión.

De verdad, no podía dejar de pensar en su hermana mayor. La preocupación la estaba consumiendo.

—Algo no anda nada bien... Quizás deba ir a dar una vuelta. Si, tal vez solo necesito despejar mi mente. Iré a comprar unas cosas.

La gemela menor decidió hacerle caso a ese instinto.

Tomó su bolso y aviso a Momo que saldría a comprar unas cosas por si alguien la buscaba en la institución.

01:17 p.m.

Mai fue directamente hacia el centro comercial que estaba cerca de la principal estación del tren de Kioto. Hacía mucho tiempo que no iba de compras a esa zona. Sobre todo le gustaban los dulces que vendían ahí.

Mai primero empezó a observar los estantes de las tiendas de diversas marcas que tenían en aquel lugar. Observo bolsos y accesorios que podrían combinar con su look, así como también vio algunos souvenirs ya que sabía que aquella estación del tren conectaba con la estación del aeropuerto internacional de Haneda, así que aquella estación la hacía hacer una muy transitada.

Podías ver tanto a turistas como a residentes que iban y venían con sus maletas.

Mai estuvo caminando por aquellas tiendas alrededor de media hora, hasta que decidió entrar a comprar en una que conocía bastante bien.

Después de comprar algunos chocolates que tanto le gustaban a ella como a Momo. Mai decidió salir hacia la calle principal que conectaba con la estación del tren.

En ese momento, de nuevo un mal presentimiento empezó a sentirse muy latente en su pecho, incluso había detectado una extraña presencia de energía maldita venir de dentro de aquella estación.

Algo le decía que debía ir hacia aquella dirección.

Y eso hizo, la Zenin empezó a caminar hacia donde le decía su corazonada que fuera.

No pasaron más de cinco minutos que la gemela menor estuvo caminando hacia aquella estación, cuando una persona en especial le empezó a llamar la atención entre aquel mar de gente.

Entre más se acercaba a ella, más sentía conocerla.

Las ruedas de una maleta empezaron a sonar más y más fuerte mientras Mai seguía caminando directamente hacia esa persona que logró reconocer a lo lejos. Era su hermana.

Mai se detuvo de golpe frente a su gemela.
—¿Maki?— la nombro con sorpresa, noto que esta venia jalando su maleta. Inclusive parecía confundida.

Maki se detuvo de golpe al notar que alguien le había cerrado el paso, iba tan distraída que no se había dado cuenta con quien se había topado hasta que aquella voz la llamo por su nombre.

La gemela mayor poco a poco empezó a elevar la cabeza y vio a su hermana menor frente a ella.

—¿Maki? ¿Qué haces aquí?— pregunto Mai con confusión y más al verla en ese estado de desconcierto.

Pero lo siguiente la sorprendería demasiado.

En ese momento, Maki soltó su maleta y fue directamente a abrazar a Mai.

—¿Maki que sucede?— pregunto Mai muy confundida al ver aquel comportamiento de su hermana mayor, ya que esta se aferró a ella y empezó a llorar con amargura.

—Él me abandono...

—¿Qué dijiste?— Mai pregunto con demasiada sorpresa mientras sentía como su hermana trataba de ahogar su llanto.

—¡DIJE QUE YUTA ME ABANDONO! ¡ÉL ACABA DE IRSE DEL PAÍS SIN MI! ¡ÉL ME DEJO! ¡YUTA ME ABANDONO!— Maki grito con el corazón roto. Se estaba rompiendo a tal grado, que sus rodillas se doblaron y fue cayendo sobre ellas hasta tocar el piso sin soltarse de su hermana.

—Voy a matar a ese desgraciado...— Susurró Mai mientras abrazaba a Maki y trataba de levantarla


Esa fue la primera vez que vi a Maki tan vulnerable. Nunca en mi vida la había visto quebrarse emocionalmente.

Nunca la había visto llorar de esta forma. Ni siquiera cuando nos golpeaban en el clan la vi llorar ni quejarse como aquella tarde donde por primera vez, la vi derramar lágrimas y lo peor, es que las estaba derramando por un hombre.

Pero ese día comprobé que mi hermana tenía un corazón. Un corazón que tu destruiste.

De verdad Okkotsu, quería encontrarte, quería matarte por haberle roto el corazón a mi hermana.

Después de un rato. Maki por fin pudo hablar conmigo. Ambas habíamos salido de aquella estación y nos habíamos alejado de ahí. Así que decidí preguntarle que había ocurrido.


Flashback

En aquel instante, ambas estaban sentadas en una banca. Mai para ayudar un poco a calmar a su hermana, le compró un té y unos bocadillos que sabía que le gustaban.

Maki de verdad se veía destrozada, con la mirada perdida y los ojos hinchados. Era la primera vez que le rompían el corazón así que aquel sentimiento era de los peores que podía estar experimentando por primera vez.

Mai suspiro con pesar.
—Maki ¿Qué sucedió?— por fin se atrevió a cuestionar —¿Acaso tu y él discutieron?

Maki negó con la cabeza mientras levantaba sus anteojos y limpiaba sus lágrimas.

—No discutimos ni nada parecido. Simplemente yo lo estaba esperando en el andén ya que le pedí que fuera a comprarme una botella de agua antes de subir al tren— parpadeo varias veces para despejar las lágrimas de sus ojos y siguió secando sus mejillas con sus manos—Y ahí lo estuve esperando más de una hora, algunas cosas son confusas en este momento. Solo recuerdo que un idiota tropezó contra mí y de paso, hable con alguien más en aquel anden — sobo el puente de su nariz, parecía confundida — Pero en un abrir y cerrar de ojos, recuerdo verlo partir arriba del tren. ¡Yuta estaba sentado en la ventana y se estaba yendo sin mí en ese tren rumbo al aeropuerto de Haneda!— dijo muy molesta.—Él me dejó... simplemente me abandono aquí sin darme explicaciones.

—¿Sabes? ese idiota nunca me cayó bien y ahora con esto, tengo más motivos justificados para odiarlo más— Mai suspiro.

De aquello que le había dicho Maki, Mai sentía que algo no cuadraba, dudaba que su hermana estuviera drogada o bajo los efectos de alguna sustancia. Le parecía un poco confuso aquel comportamiento.

—¿Y por qué ese desgraciado no te marcó a tu celular para decirte que ya estaba arriba del tren? ¿Por qué tu no le llamaste?— reclamo Mai.

—Porque acaban de robarme el celular... no tenía forma de comunicarme con él. En sí, en este momento no tengo forma de comunicarme con nadie más — comentó Maki sobando sus sienes. Le dolía bastante la cabeza.

Mai elevo la voz con molestia—¿Cómo que te han robado el celular? ¿En qué momento paso eso?

—Todo sucedió tan rápido que hasta a mí me sorprende— Maki aun parecía confundida. — Como dije, hace rato un sujeto choco contra mí y al parecer ahí fue cuando me robo mi celular. La verdad, todo lo que ha sucedido en la estación fue tan... extraño ... incluso en este momento no tengo cabeza como para comprender que sucedió ahí dentro. Lo único que sé, es que Yuta me dejo... Él acaba de abandonarme...

Aquello le seguía pareciendo demasiado extraño a la gemela menor. Pensó que quizás su hermana mayor pudo haber estado bajo los efectos de una maldición o de alguna técnica maldita y más que ella al ser una mujer con una cantidad muy mínima de energía maldita, sabía que no era inmune a algo como eso, en caso de haber sido atacada por una maldición o por alguien. Solo eso explicaría su estado de confusión y delirio.

—Supongo que vamos a tener que ir a levantar una denuncia sobre este robo— suspiró.

—Por cierto, Mai ¿Qué hacías aquí? ¿Como diste conmigo?— pregunto Maki mirando a su hermana.

Mai se encogió de hombros.

—Simplemente tenía un raro presentimiento que me hizo venir hasta aquí. Y supongo que fue buena idea porque si no, no me imagino que locura hubieras hecho en este estado tan deplorable en el que te encuentras. ¡Además! No fuiste buena para decirme que andabas aquí en Kioto, me enteré que andabas en la ciudad gracias a Utahime sensei quien fue quién me comentó que ustedes dos estaban aquí — comento la menor de las gemelas cruzando los brazos.

—Perdón. Simplemente este fin de semana fue un caos... lo que se suponía debía ser un agradable fin de semana en pareja... terminó de la peor manera... o mejor dicho, de la manera menos esperada — comento Maki en un suspiro antes de darle un trago a su bebida.

—Si, supongo que tu relación con el idiota de Okkotsu debía acabar tarde o temprano. En fin, la vida sigue, supongo que aunque te duela deberás regresar tu sola a Tokio— comento Mai mientras abría un empaque de un pastelillo de frijoles dulces.

—La verdad, no tengo ni ganas de volver a esa ciudad...

Mai saco aquel postre y le dio una mordida. El olor de aquel dulce hizo que Maki tuviera una expresión de asco en su rostro.

—En serio, eso apesta... voy a vomitar...— su rostro se tensó en una mueca de total asco.

—¿Pero qué demonios dices? ¡Esto ni siquiera tiene un olor fuerte!—Mai levantó una ceja ante tal expresión de su gemela —Es más, come un poco de esto, te hará bien.

—¡Aleja eso de mí! — Maki soporto una arqueada —en serio quiero vomitar...— llevo su mano a su boca con demasiada molestia.

Mai observo con detenimiento a Maki, pensaba que al inicio aquel rechazo a la comida se debía a la depresión por aquella separación. Pero podía notar que su hermana mayor tenía algo más, parecía ocultar algo mientras daba tragos desordenados a su botella de agua.

—Maki en serio ¿Qué te sucede? No luces para nada bien. ¿Acaso el idiota de Okkotsu te hizo algo? ¿Qué más pasó? ¿Que tienes? La verdad te ves muy pálida y hasta cansada, ¿Que me estas ocultando?

La voz de Maki se empezó a quebrar al sentir que Mai había detectado que algo no andaba bien en ella.

—Mai es que yo...

—¿Es que qué? ¿Maki que te sucede? — Exigió saber mientras no dejaba de ver a su hermana los ojos.

—Mai... Es que estoy Embarazada...

La gemela menor se quedó completamente petrificada al escuchar esas palabras.

—¿Embarazada?

Maki suspiro mientras tallaba sus ojos —Descubrí hace unos días que estoy embarazada...

—¿Entonces Okkotsu te abandono por esto?— pregunto Mai muy molesta mientras apuntaba al vientre de su hermana—¿Ese hijo de perra te abandono por qué se enteró que estas embarazada?

Maki negó con la cabeza.
—Ni siquiera tuve el valor para decírselo... así que Yuta me abandono sin saber que estoy esperando un hijo de él...

Mai suspiro e hizo hacia atrás su cabeza.

—¡Maki Qué diablos has hecho! ¿Qué demonios vas a hacer ahora con ese bebé?— cuestiono enojada —¡Un hijo es una gran responsabilidad!

—¡No sé qué voy a hacer en este momento! ¡Me siento tan confundida que no sé qué voy a hacer! ¡No tengo cabeza en este momento para tomar una decisión!— Maki grito molesta.

Mai estaba demasiado molesta en aquel momento por la imprudencia de su hermana y eso se notaba en su voz y en sus manos, las cuales movía con furia—¡Sabes que te vas a meter en problemas cuando el clan sepa de este embarazo! ¡Nuestro padre va a matarte cuando sepas que estas cargando un hijo de ese idiota! ¡Si se enteran, te sacaran ese engendro a golpes!

Maki suspiro.
—Lo sé. Por eso Mai te pido que me guardes este secreto por el momento— tomo la mano de su hermana. —Por favor, hazlo como una promesa entre gemelas, no le digas a nadie que estoy embarazada mientras decido que haré con este bebé... por favor... sé que me odias, pero si estuvieras en mi lugar, sé que quizás harías lo mismo que yo... quizás pedirías mi ayuda como yo te la estoy pidiendo en este momento...

Mai suspiro al ver la expresión de su hermana mayor. De verdad se veía desesperada por que nadie más supiera que en su vientre cargaba un hijo de Okkotsu.

La gemela menor se soltó de las manos de su hermana y froto sus sienes muy molesta. Odiaba tener que guardar secretos que pudieran meterla en problemas. Pero si no lo hacía ¿Qué podría pasar? No quería ser una traidora tampoco...

—De acuerdo— la menor rodo los ojos —Te guardaré el secreto mientras decides que harás con ese bastardo. Igual supongo que te tendré que apoyar en lo que decidas y también tendré que guardar el secreto hasta la tumba ya que si decides abortarlo de todos modos no podré decir nada.

Maki la abrazo mientras trataba de controlar su llanto.

—Gracias... Mai…— Susurró con la voz rota.

Mai suspiro y paso sus brazos alrededor de su hermana para tratar de consolarla.

—Igual nunca perdonaré a ese idiota de Okkotsu por dejarte de esta manera. Y tampoco estoy tan contenta contigo en este momento.

—Como dije… No tuve ni el tiempo ni el valor para decírselo... y ahora él me ha abandonado...

—Si que eres una Idiota Maki.

—Lo sé. Lo soy...

Mai suspiro mientras su hermana mayor la iba soltando poco a poco. No podía dejarla en ese lugar.

—Ven, Vayamos a la academia— comento Mai poniéndose de pie.

—¿A la academia? ¿Contigo?— pregunto Maki con confusión.

—No puedo dejarte sola aquí y mucho menos creo que sea prudente que regreses a Tokio después de una humillación así— la tomo de la mano, ayudándola a ponerse de pie—Y en tu estado, no sé qué locura podrías cometer.

Maki seco sus lágrimas por aquello que decía su hermana —En serio, muchas gracias Mai...— soltó un suspiro muy pesado mientras tomaba su mano como cuando eran niñas.

Pero en esta ocasión, Mai era quien la guiaba a ella.

—Vamonos— respondió Mai con molestia mientras se alejaban de ahí.


Realmente no podía dejar a Maki en ese estado. Así que la llevé a la academia.

No le dije a Momo la situación, simplemente le mentí y le dije que Maki estaba de paso y que se quedaría a dormir esa noche conmigo.

Verla tan desanimada me hacía sentirme extraña. No era la Maki de siempre y eso me dolía.

¿Se supone que las hermanas estábamos ahí para apoyarnos las unas a las otras, cierto? ¿Se supone que nos tenemos la una a la otra para guardarnos secretos y hasta para matar en nombre de nuestra hermana si así se necesitará? ¿No es así? Pues supongo que desde ese día yo estaba dispuesta a hacer todo por Maki.

Aun así, ella debía tomar una decisión importante con ese embarazo.


Flashback

La noche ya había caído en Kioto.

La academia de esa antigua ciudad solía estar muy tranquila por la noche. Así que era muy raro que entre los alumnos se molestarán o se tratarán de meter en los asuntos del otro.

Así que nadie molestaría a esas dos.

Mai regreso a su habitación junto a una bolsa de comida que Momo había comprado para las hermanas.

Esto a petición de Mai ya que su gemela no quería levantarse de la cama y no quería comer nada. Y llevarla al comedor en ese estado, no era una opción.

—Le pedí a Momo que nos trajera unas hamburguesas — comento Mai sentándose al borde de su cama, la cual estaba mayormente ocupada por su gemela.

Maki estaba acostada con las cobijas cubriéndola hasta arriba. La pobre desde que llegó, se la había pasado llorando en aquella habitación.

Mai le había ayudado a ponerse su pijama, porque de verdad se veía muy desanimada y aun un poco fuera de si como para hacer algo por sí misma.

Era la primera vez que le rompían el corazón a Maki, así que acostumbrarse a aquel dolor iba a ser difícil y más cuando se cargaba con el fruto de ese amor.

La gemela mayor deslizó levemente la cobija por su cabeza para ver a Mai.

—Debes comer algo, sino te vas a enfermar y no quiero ser yo la que te deba a cuidar— comento está moviendo aquella bolsa en su mano.

—Pero no tengo hambre...— explicó Maki sentándose poco a poco y apoyando su espalda en la pared de madera.

Mai saco aquellas hamburguesas.

—No me importa que no tengas hambre. — le entregó aquel alimento con brusquedad —Además, tu y ese bebé deben comer— su voz sonaba en una mezcla entre molestia y preocupación.

Maki suspiro y tomo aquella hamburguesa y le empezó a dar una mordida mientras soltaba algunas lágrimas.

—Gracias...— dijo con algo de desánimo mientras comía.

Mai suspiro y se sentó a su lado, apoyando su hombro al lado de su gemela.

—¿Puedo preguntarte algo?

Maki suspiro —Adelante...— le dio otra mordida a su hamburguesa.

—¿Cuando te diste cuenta que estabas embarazada?— pregunto Mai con curiosidad.

Maki apretó los labios por un momento. Dio una mordida más y después trago para contestar.

—Me di cuenta el viernes. Antes de que Yuta y yo llegáramos aquí a Kioto para pasar nuestro aniversario de novios, pero...— suspiro — Nada estaba saliendo como queríamos. Nuestro hotel era un asco y de paso nuestra habitación igual era un desastre. Yo para nada estaba pasándola bien con las náuseas y Yuta a cada rato estaba pegado al teléfono debido a que lo buscaban con desespero de la sede. Además, El idiota de Satoru apareció de la nada y lo convenció de irse del país a último momento.

—¿Ese idiota lo convenció de irse del país? ¿Por qué? ¿Qué les dijo Gojo sensei?— pregunto Mai levantando una ceja.

—No lo sé. Simplemente se apareció frente a nosotros mientras estábamos en el antiguo barrio y le empezó a explicar a Yuta, que le tenía una misión muy especial fuera de Japón y que por eso mismo, debía salir del país lo antes posible. Yo no estaba convencida de aquello y más que...— puso su mano sobre su vientre — me enteré de esto...

—¿Realmente tu no querías salir de Japón?— pregunto Mai mirando a su hermana.— Con esa propuesta hubieras tenido la oportunidad incluso de alejarte de nuestro maldito clan.

Maki hizo un no con la cabeza.
—Tuve miedo y más que... — apretó los labios.

—¿Y más qué?— pregunto Mai.

—Digamos que alguien logró convencerme de que no sería buena idea ir detrás de un hombre— comento Maki dando otra mordida a su hamburguesa. —Quizás tengo demasiado orgullo para hacer algo como eso— dijo con la boca llena.

—¿Alguien? — Mai levantó una ceja —Maki ¿Alguien más habló contigo en aquella estación? ¿Quién fue? — pregunto.

Maki trago y se llevó una mano a la cabeza, la cual aún dolía un poco cuando trataba de recordar.
—No quiero hablar de eso...

—De acuerdo. Y dime ¿Recuerdas haber visto o detectado alguna maldición en la estación? o ¿Acaso detectaste a alguna otra persona además de Yuta, que tuviera poder maldito merodeando por ahí?— pregunto Mai confundida por lo que decía su hermana y más por cómo se llevaba la mano a la cabeza.

—En este momento no estoy muy segura... pero si sentí algo de energía maldita, y quizás si vi una que otra cara conocida, pero como dije, todo pasó tan rápido y ahora que trato de recordar todo es tan... confuso.

Mai suspiro, había llegado a la conclusión de que quizás algo le habían hecho a Maki. Pensó que quizás alguien había usado alguna técnica maldita sobre ella.

Siempre tuve una corazonada sobre eso... y meses después fue confirmado por la persona menos esperada.

—¿Pasa algo, Mai?— pregunto Maki mirando como su hermana parecía muy pensativa.

Mai negó con la cabeza.
—No, es simplemente que me quede pensando en lo que dices. Parece muy extraño lo que te sucedió ahí dentro de la estación. A no ser que alguien haya usado una técnica maldita o un dominio, lo que dices sobre el tiempo, es muy extraño.

Maki suspiro.
—Lo sé, pero de verdad, ya no quiero pensar en eso. Solo sé que Yuta me ha abandonado. Supongo que nuestra relación ya terminó.

Ambas gemelas guardaron silencio por un momento. Mai observo como Maki comía su segunda hamburguesa mientras su mano derecha estaba sobre su vientre.

—¿Y bien? Se que es muy pronto para preguntarte esto pero ¿Ya pensaste que harás con ese bastardo?— pregunto Mai mientras daba una mordida a su hamburguesa.

Su hermana negó con la cabeza.
—No estoy segura de que haré. Desde el viernes que me enteré que estoy embarazada, lo he estado analizando y pensando. Además, creía que si se lo decía a Yuta, podríamos tomar una decisión juntos. Pero parece que estoy sola en esto.

Mai soltó el aire con molestia.
—No estás del todo sola con este tema, porque desgraciadamente yo estoy contigo en lo que decidas. Aunque eso sí, solamente tu tendrás la decisión final sobre que harás con ese bastardo.

—¿Puedes dejar de decirle así a mi bebé?— comento Maki con molestia.

—Pero eso es lo que es ese niño que cargas en tu vientre. Un bastardo. Un hijo que no tendrá un padre y que su mera existencia estará amenazada por el clan de su madre. Además ¿Quién nos asegura que ese engendro no será una amenaza? Digo, su padre es un hechicero de grado especial que maldijo a su noviecita de la primaria y la convirtió en una maldición. Entonces ¿Quién dice que ese bebé no será también una maldición?

—No es así...— gruño Maki con voz baja mientras acariciaba su vientre.

—Además ¿Realmente quieres ver su estúpida cara en la cara de tu hijo y que ese niño ilegítimo te recuerde cada día de tu vida que su padre los abandono?

—¡Ya te dije que no lo sé! — Maki dijo con molestia —Una parte de mí, quiere tener a este bebé. Pero otra parte mía no quiere que nazca. Y menos en esta situación donde estaré sola como madre soltera en esta sociedad tan de mierda.

—No estarías completamente sola en esto de criarlo, ya que me tienes a mi...— comento Mai antes de torcer la boca.

—¿Y tú desde cuando te convertiste en la "tía" considerada? — cuestiono Maki con molestia.

—Desde el momento en que abriste la puta boca y me confesaste que estabas embarazada.

Ambas gemelas guardaron de nuevo un momento de silencio.

Maki suspiro.
—Mai... yo.

—Maki, sé que estas confundida, lo entiendo, pero también piensa muy bien en que sea lo que decidas tendrá sus consecuencias, porque esta decisión no sólo afectará tu vida, sino la mía. Soy tu hermana gemela, tú eres yo y yo soy tu, así que esto nos involucra a ambas ya que teóricamente, ese bebé también es sangre de mi sangre.

—Lo sé... Los gemelos monocigotos como nosotras compartimos el mismo material genético. Ya que se supone que somos una misma persona... así que en teoría, este bebé sería muy similar también a ti.

Mai empezó a acomodarse a un lado de su cama. Metiéndose entre sus cobijas y le dio la espalda a su hermana. Como solía hacerlo cuando dormían juntas de niñas.

—Así que decidas lo que decidas, solo avísame ¿OK? Toma el tiempo que necesites, pero si vas a tomar la decisión de no tenerlo, no dejes que avance más ese embarazo— dijo sobre su hombro.

—Gracias Mai...— Maki suspiro porque sabía que su hermana tenía razón — solo te pido por favor ... que me guardes este secreto por unos días más mientras decido si aborto a este bebé o si lo tengo... — comento también metiéndose en aquellas cobijas y recargando su frente en la espalda de su hermana.

Mai solamente suspiro.
—De acuerdo, No diré nada porque este tema no me corresponde a mi— soltó con frialdad.


Realmente creo que fui muy cruel con mis palabras aquella noche, pero era la verdad. Maki debía tomar una decisión.

Recuerdo que esa vez, ella durmió pero seguía llorando por todo aquello.
Yo únicamente la abrace como solía hacerlo de niña cuando no podíamos dormir.

Ver su rostro así de triste me rompía el corazón.

Maki paso dos días conmigo en la sede de Kioto. Incluso salimos a comprar un nuevo celular y a levantar una denuncia por robo.

Aquella tarde traté de distraerla un poco, inclusive las dos salimos con Miwa y Momo, a quienes no les dijimos nada y ante los síntomas de mi hermana como sus ascos y nauseas, les mentimos diciendo que era indigestión por la cena.

Parece que Maki se tomó muy en serio aquello de pensar muy bien que haría con ese embarazo. Ya que no fue hasta una semana después cuando ella ya tenía una respuesta a lo que haría con ese bebé.

Incluso por fin regresó a Tokio y les dijo a los demás que ustedes habían terminado pero no les revelo lo de aquel embarazo, y como dije, a la semana Maki regreso a Kioto y me pidió que la acompañara a hacerse un ultrasonido.

Yo le dije que aquello era mala idea, ya que ver a tu hijo en esa máquina, podría hacerla cambiar de opinión en caso de querer realizarse un aborto.

Pero ella insistió en que no quería ir sola y que necesitaba aquel ultrasonido para poder comprobar si había tomado la decisión correcta.

Okkotsu, mi hermana pensó momentáneamente en no tener a ese bebé, pero, puedo asegurarte que lo vi en sus ojos. Ese deseo de conservar algo tuyo, de poder dar a luz a esa pequeña muestra de amor entre ustedes dos.

Recuerdo con claridad ver esa ilusión en sus ojos cuando vio aquel ultrasonido. En ese momento ella tenía cerca de diez semanas de gestación. Pero nuestra sorpresa fue mayúscula cuando la doctora nos dijo que no era un solo bebé... sino dos.


Flashback

—Vas a sentir algo de frío por el gel y puede que sientas una leve presión por el paso del transductor sobre tu abdomen, así que trataré de revisarte lo más rápido que me permitas para no causarte incomodidad ¿De acuerdo?— comento amablemente la doctora que estaba atendiendo a Maki.

—De acuerdo— dijo la gemela mayor en un suspiro. Ella estaba acostada con el abdomen descubierto mientras la doctora ponía el gel sobre ella. Incluso podía notársele que apenas su vientre estaba abultado muy levemente.

En cambio, Mai estaba sentada a su lado. Suspiro al ver que iniciarían aquel procedimiento.
—Lo preguntare una vez más, Maki ¿De verdad estas segura de querer hacer esto? ¿De verdad esta es tu decisión final? Aun estas a tiempo de arrepentirte y no continuar con este embarazo — cruzo sus brazos.

Su gemela la miro con una mueca.
—Ya te dije que ya tomé mi decisión. Aun así quiero ver que todo esté bien con mi bebé. Además ¿Dijiste que me apoyarías en esto? ¿Cierto? Y Siento que tenerlo será una buena decisión.

Mai chasqueo la lengua.
—Admito que lo dije solo para que te sintieras mejor esa noche.

Maki rodó los ojos ante tal respuesta.

—Voy a comenzar ¿Estas lista Zenin san?— pregunto la doctora.

—Adelante. Estoy lista.

—Bien, iniciemos — comento la doctora poniendo el aparato sobre el vientre de Maki, empezando a analizar aquella primera imagen que se mostraba en la pantalla.

Mai solo hizo una mueca y sus cejas se juntaron un poco, al inicio no le encontraba forma a esa imagen que lanzaba el monitor. Pero al ver la cara de su hermana, podía notar aquel brillo de anhelo y felicidad por esa criatura que crecía y se formaba dentro de ella.

La doctora hizo algunos clicks iniciales para medir aquel pequeño feto que mostraba el monitor.

—Por sus medidas parece que tu bebé tiene un aproximado de diez semanas— dijo está empezando a mover aquel aparato para mostrar mejor aquella imagen.

—¿Diez semanas? — Mai levantó una ceja, rápidamente contó con sus dedos—Vaya, Ustedes sí que no perdieron el tiempo después de san Valentín — soltó con fastidio y un toque de sarcasmo.

—Cállate— dijo Maki con un sonrojo y mejor decidió ignorar a su hermana y mejor se dirigió con la doctora. —¿Esta todo bien con mi bebé?— pregunto con curiosidad mirando aquella imagen.

—Eso es lo que estoy revisando. Por su forma parece que todo se ve bien, ahora veamos si escuchamos latidos — comento la doctora empezando a escuchar con atención el sonido que salía del monitor mientras seguía observando la pantalla y moviendo aquel aparato sobre el vientre de su paciente.

De aquella máquina empezaron a salir los sonidos de unos diminutos latidos, pero algo más llamó la atención de esa médico, ya que ese sonido parecía doble, así que decidió hacer más movimientos con ese aparato sobre el lado izquierdo del vientre de su paciente para descubrir que provocaba aquello.

—Creo que estoy observando algo más por aquí— dijo la doctora algo extrañada mientras seguía moviendo aquella máquina sobre el vientre de Maki.

Las cejas de la medico se elevaron un poco de sorpresa mientras miraba lo que revelaba aquel monitor.

—¿Qué es eso?— pregunto Mai con sorpresa al ver lo mismo que veía la doctora y su hermana en esa pantalla.

—¿Doctora? ¿Pasa algo? ¿Por qué esa cara de sorpresa? ¿Mi bebé tiene algo? ¿Vio algo más?— pregunto Maki con miedo.

La doctora acomodo de tal manera aquella imagen que logró verse dos pequeños fetos en aquel monitor.

—Tú bebé no tiene nada de malo o mejor dicho, tus bebés están en perfecto estado— comento la doctora dando algunos clicks y mostrándole a Maki el monitor con más detenimiento.

—Felicidades Zenin san, vas a tener gemelos— dijo la doctora mostrando aquellos dos pequeños seres en aquella pantalla mientras escuchaban aquellos suaves latidos que provenían de ambos.

Los ojos de Maki se abrieron de tal manera que demostraba que estaba en total shock. Incluso se había quedado muda y con la boca a medio abrir pero no salía ruido de su garganta.

—¿Gemelos?— Mai dijo en voz alta llevándose las manos a la boca —No puede ser...


Ambas nos habíamos quedado en shock. Maki iba a tener gemelos.

Al inicio aquella fue una noticia un poco difícil de tragar. Ya que nosotras también somos gemelas y crecimos en un clan donde tener gemelos significaba un mal augurio.

Pero aun así, Maki decidió dejar todas esas supersticiones de lado y decidió avanzar con su embarazo.

La doctora al inicio nos comentó que Maki debía tener más cuidados debido a su embarazo gemelar, sobre todo porque a veces estos pueden nacer prematuros y muchas veces tanto la madre como los gemelos necesitan ciertos cuidados mientras más avance la gestación.

Aun así, ambas debíamos prepararnos para la llegada de esos bebés.

Okkotsu, mientras Tú estabas en el extranjero, disfrutando del viaje y quizás conociendo a personas y lugares interesantes. Mi hermana se estaba derrumbando de la incertidumbre y del miedo. Sobre todo porque no teníamos nada listo para la llegada de Yurika y Yuudai.

Después de aquella sorpresa donde nos enterábamos que serían dos bebes en lugar de uno, Maki tomó la decisión de revelar que estaba embarazada.

Aquello para nada fue fácil para mi terca hermana, lo sé porque ella quería hacer todo sola, pero definitivamente íbamos a necesitar la mayor ayuda posible.

Al principio guardamos este secreto hasta que ella cumplió las doce semanas, ósea hasta que cumplió los tres meses, esto debido a que un vientre de un embarazo gemelar se nota muchísimo más rápido que uno de un solo bebé.

Aquel secreto no íbamos a poder guardarlo por demasiado tiempo.

Así que a la primera persona que le revelamos aquel secreto fue a Utahime sensei.

Aún recuerdo la cara de mi querida maestra cuando le dimos esa noticia. Fue una combinación entre asombro y tristeza al ver a mi hermana con ese pequeño vientre abultado.

Sobre todo Utahime sensei sentía pena por Maki porque sabía que era injusto lo que tú, idiota, habías echo en abandonarla. Pero ella pensaba que quizás había algo más detrás de tu partida y creía que Satoru tenía que ver con ello.

Y ella tenía razón... Satoru está involucrado en tu separación con Maki... pero eso te toca a ti preguntárselo a él.

Para ese tercer mes, Necesitábamos que alguien de la academia interviniera por nosotras para pedir que Maki fuera suspendida de hacer misiones por un tiempo sin sufrir alguna penalización y que de paso, nos ayudara a guardar este secreto del clan Zenin.

Y la única que pudo ayudarnos en ese instante era Utahime sensei. Ya que ella tomó bajo a su cargo a Maki, pasándola de ser una hechicera a ser su asistente personal en la academia. Ya que mi maestra era la segunda al mando de la sede de Kioto solo por debajo del amargado de Gakuganji.

Recuerdo que aquellas dos semanas donde convivimos junto a Utahime sensei fueron muy amigables y me da demasiada nostalgia recordarlas, ya que en esas dos semanas, mi hermana y yo sentimos el amor de una madre reflejada en la sensei, quien nos entendía y comprendía. Incluso llegó a comprarle los primeros regalos a esos dos bebés de los cuales, aun no sabíamos su sexo y que de seguro en la actualidad, ella debido a la amnesia no ha de recordar que Maki estaba embarazada.

Realmente nos sentíamos apoyadas por ella. Lástima que esa felicidad no duró mucho...

Okkotsu, en este punto, presiento que Satoru si sabía del embarazo de Maki, ya que mi hermana lo estuvo evitando demasiado después de hablar con él, así como Maki estuvo huyendo de sus compañeros de Tokio por esas dos semanas donde aún no les decía nada sobre su embarazo.

Incluso Utahime sensei había ordenado un oficio diciendo que Maki había sido transferida a Kioto de último momento y al parecer eso molesto a Satoru.

Además, la relación entre esos dos siempre se me hizo un poco complicada. Ya que al parecer, fueron amantes, pero parecía que esa decisión de Utahime de llevarse a Maki, los hizo distanciarse.

Incluso Maki se molestaba demasiado cuando nombraban a ese idiota de cabellos blancos.

Aun así, entre las tres empezamos a planear todo para la llegada de esos dos bebés. Utahime sensei nos apoyó con los trámites iniciales en la academia así como nos apoyó junto a Ieiri Shoko, a buscar un hospital donde aceptaran atender a mi hermana con las visitas médicas.

Para este momento, solo dos personas ya sabían aquel secreto. Y esas eran Utahime y Shoko.

Pero como dije, toda esta felicidad fue pasajera.

Nuestra paz y tranquilidad fueron abatidas un 29 de mayo. Aun no puedo olvidar aquel fatídico día.

En esa ocasión, Utahime sensei había sido enviada a una misión al sur de Kioto y en esa misma misión, ella fue atacada con brutalidad por "algo", nunca supimos si fue una maldición o alguna persona quien la atacó, pero aquello realmente la dejo casi al borde de la muerte.

Realmente desconocemos que paso ya que incluso ella no volvió a ser la misma mujer después de aquello.

Utahime sensei había perdido la memoria y desgraciadamente también su poder como líder y maestra.

Y desde ese día, los problemas solo empezaron a avanzar con más rapidez.

Okkotsu, de lo único que estoy segura, es que quizás alguien mandó atacar a Utahime ya que esta, sabía muchas cosas sobre los clanes ... mi maestra no es una mala mujer, solamente era una mujer con demasiado conocimiento y poder ... y eso podía significar ser una amenaza para muchos hombres.

Recuerdo que incluso, Gojo sensei cambió su personalidad una vez descubrió aquel crimen que habían cometido contra la mujer que decía amar desde jóvenes. Se volvió más posesivo y hasta puedo asegurar que perdió la cabeza.
¿Amor u Obsesión? Realmente creo que fue un poco de ambos lo que hizo que Satoru tomara a Utahime como esposa al poco tiempo de que esta recuperará el conocimiento.

Como dije, siento que alguien atacó a mi querida maestra... Quizás puede haber sido una venganza hacia todos nosotros...

Incluso después de que Utahime sensei despertó de su coma, el cual duro cerca de un mes, Gojo sensei empezó a hacer de lado a sus propios alumnos... todos los de esta generación estábamos en un limbo donde la incertidumbre nos consumía por saber que sería de nosotros, así como de los demás hechiceros con las nuevas medidas que los peces gordos de ese tiempo estaban implementando ya que todos los hechiceros desconfiaban de los que decían ser sus aliados y tenían miedo de acabar como Utahime sensei o peor, terminar muertos.

Es por esos mismos cambios, que maestros como Kusakabe y hechiceros como Nanami renunciaron sin dudarlo.

Incluso Mei Mei desapareció de la noche a la mañana antes de que el infierno se desatará.

Pero desgraciadamente hubo otros más como Ieiri san que no pudieron salir de ahí.

El mundo de la hechicería estaba pendiendo de un hilo y con el nosotras y esos dos bebés, los cuales, podían haber significado una amenaza para todos en la sociedad de hechicería, sobre todo para los dos clanes que peor se llevaban.

Tanto a Maki como a mí se nos estaban acabando las opciones. No sabíamos a quién acudir.

Incluso habíamos escuchado que tanto el clan Zenin como el clan Gojo estaban involucrados en cosas turbias, sobre todo porque al parecer los clanes estaban sacando del juego a todos los que les estorbaban en su camino a la cima.

Pero ¿Qué pasaría si un Zenin y un Gojo se unían? ¿Eso arruinaría los planes de ambos clanes? Porque era más que obvio que la llegada de esos dos bebes significarían una amenaza para ellos y de paso para los altos mandos.

Además que nuestro principal miedo era que nos obligarán a regresar a esta infernal residencia. Y con dos bebés en camino... era más que obvio que los cuatro moriríamos...

Maki y yo estábamos contra reloj y más cuando mi tonta hermana ya había entrado al cuarto mes de gestación y sus síntomas y cambios físicos se hacían cada vez más notorios.

Necesitábamos la protección de alguien y parece que esa "ayuda" llegó inesperadamente de la persona que menos pensábamos y antes que te diga quién nos ayudó incluso a encontrar un hogar y un trabajo, debo contarte algo más.

Okkotsu ¿Has oído hablar de Tsukumo Yuki?

Bueno, Ella además de ser una hechicera de grado especial al igual que tú, también es una fanática por la investigación.

Así que por "mala o buena suerte" también caímos en las manos de ella.

Maki y yo, conocíamos a Tsukumo desde que éramos unas niñas, ya que ella investigo y examino la restricción celestial de mi hermana muy de cerca.

Esa mujer siempre encontró fascinante aquel estado, incluso tengo entendido que por un tiempo, examino a otro Zenin con esas características antes de que este muriera hace muchos años atrás.

Para ella, nosotras éramos dos especímenes fascinantes de cómo la energía maldita podía ser y no heredada.

Ahora imagina como se puso de eufórica esa rubia loca por la investigación cuando supo que Maki, una mujer con una restricción celestial estaba embarazada de gemelos y que el padre de esos bebés era un hechicero de grado especial como tú. Definitivamente eso fue un golpe de suerte para su investigación.

Aun siento repulsión al recordar su cara... verla tan emocionada mientras analizaba a mi hermana y acariciaba su vientre, me daba un profundo rechazo. Pero no nos quedó de otra que aceptar su ayuda y "una parte de su protección".

Tsukumo lo dejo muy en claro desde el primer momento, ella solo intervendría por nosotras solo cuando lo necesitáramos, ella solo regresaría a la ciudad en ciertas temporadas para ver el avance de ese embarazo e incluso dijo que pelearía junto a nosotras contra la academia y el clan solo si fuese necesario. Ya que lo que más le importaba eran esos dos bebés.

Incluso ella había sugerido que una vez nacieran tus hijos, ella podría haberlos adoptado como sus hijos para "protegerlos" . Incluso ella estaba dispuesta a ponerles su apellido a Yurika y Yuudai, pero gracias a Megumi, eso no fue necesario. Pero sobre eso te contaré lo que se en unas líneas más adelante, aunque considero más prudente que sobre este tema, sea Maki y Megumi quienes te cuenten lo que paso y el cómo decidieron casarse.

Pero vamos paso por paso ¿De acuerdo? Que aún me falta otro secreto más importante que revelarte en las siguientes páginas.

Pero volviendo al tema sobre Tsukumo, ella fue quien nos ayudó a dejar la academia, esto sucedió una vez le contamos la verdad a todos nuestros amigos y conocidos sobre que Maki estaba embarazada y les preguntamos sobre si estaban dispuestos a abandonar la sede.

Primero se lo dijimos a Megumi, él fue el primero en enterarse junto a Tsumiki que Maki estaba embarazada, y esta noticia se las revelamos un día que lo citamos fuera de la academia.

Debo decir que Tsumiki, aunque no sea familiar de sangre de nosotros, siempre tuvo el tacto y la empatía que le faltaba a esta estúpida familia.

Aun así, debo admitir que yo sentía un poco de celos de Maki al ver como Megumi y Tsumiki le ponian toda la atención del mundo una vez les reveló aquella noticia.

Pocos días después, fue cuando se los revelamos a los demás amigos de Maki, quienes lo tomaron con gran alegría y sorpresa al saber que mi hermana tendría a tus hijos.

Aunque Kugisaki, al igual que yo, quería matarte por haber abandonado a Maki. Y supongo que ella, al igual que yo, aun te odia.

Una vez se lo dijimos a sus amigos, yo le revele la verdad a Momo y a Miwa. Sobre todo Momo parecía ser la única que entendía mi sentir ante toda esta situación y ella nunca me dejó sola, inclusive cuando todos nosotros, tanto los alumnos de Tokio como los de Kioto renunciamos a ser hechiceros y decidimos vivir una vida normal fuera de la academia. Momo siguió a mi lado por los siguientes tres años.

En sí, fue Tsukumo quien "negocio" con Satoru sobre dejarnos ir a todos los alumnos. Cosa que él acepto pero bajo unas condiciones que aún desconozco.

Una vez fuera de la academia, quien nos ayudó económicamente hasta estos días fue Mei Mei...

Recuerdo que fue a finales de junio e inicios de julio los días más movidos para Maki y para mí.

Una vez abandonamos la academia, la vida para nada fue sencilla y menos para una mujer embarazada. Yo de verdad, odiaba ver a Maki llorar en silencio mientras acariciaba su vientre, el cual iba creciendo más y más con el pasar de los meses.

Yo sé que a ella aún le dolía tu partida y quizás sea algo que no supero hasta años después o quizás nunca hubiera olvidado a no ser por tu regreso.

Se que ella aún te amaba y eso es lo que más me dolía a mí, verla tan rota por tu culpa. Y el pensar que esos niños podrían heredar tu cara, me hacía molestar cada vez que lo pensaba.

Como dije, nada fue sencillo una vez dejamos el mundo de la hechicería.

Aunque Ieiri san, como último favor que pudimos tener de ella, fue que nos consiguió un trabajo de medio tiempo tanto para Maki como para mí en una tienda de cosméticos de una conocida de esa médico. El dinero y apenas nos alcanzaba para comer y para rentar un pequeño lugar para ambas.

Ahí fue, donde Mei Mei entro al juego e hizo un trato con Maki adquiriendo una deuda que supongo, aún sigue pagando.

Esa mujer y su raro hermano siempre me dieron mala espina por ser unas personas que les encantaba meterse en asuntos ajenos y después querían sacar provecho a la situación.

Pero aun así, si no hubiera sido por ellos, no hubiéramos logrado sobrevivir.

Mei negocio con Maki, no se los detalles completos, pero de lo único que me enteré es que Mei siempre tuvo un ojo puesto en mi hermana debido a su fuerza y habilidad desde aquel torneo de las escuelas gemelas que tuvimos en el año en que tu no estabas aquí en Japón.

Así que Mei, fue quien nos consiguió nuestro primer hogar, nos apoyó a comprar una pequeña casa de un solo piso y nos ayudó a amueblarla. Así como también nos ayudó a comprar las cosas que necesitábamos para los bebés, así como también fue ella quien nos apoyó con los gastos que faltaban para el hospital. Así que en teoría le debemos mucho dinero a esa hechicera.

Mei al igual que Tsukumo, lo hacían más por esos dos bebés... parecía que todos estaban interesados en esos dos... y supongo que el motivo principal se debía a que eran TUS HIJOS Okkotsu...

Tener a los hijos de dos grandes clanes, tanto era una amenaza como era un tesoro.

Obviamente, recibir favores monetarios de Mei y su hermano, significaba tener que pagarles con algo a cambio, ahí es donde Maki y yo le ayudábamos con "ciertos" trabajos.

Okkotsu ¿Alguna vez escuchaste que este mundo de la hechicería trabajaba en un inicio como algo informal y clandestino antes de que se monopolizara como una academia? Pues a eso nos dedicábamos casi todos una vez abandonamos la sede. A practicar la hechicería por debajo de la mesa. A hacer misiones de exorcismos como en la vieja escuela a través de peticiones por parte de clientes desesperados por quitarse maldiciones de encima o de sus locales.

Los siguientes dos meses fueron tranquilos y hasta podría considerarse como un tanto alegres. Era como la calma antes de la tormenta, era ese momento de alegría que necesitábamos en nuestras agitadas vidas.

Incluso recuerdo que septiembre fue un mes muy positivo incluso para Maki, ya que en ese mes, además de que nuestras vidas estaban tomando un mejor rumbo. En ese mes fue cuando descubrimos que esos Gemelos serían en realidad mellizos.

Ya que como dije, los gemelos son un mal augurio, y saber que esos bebés no serían del mismo sexo, dio un poco de alivio a nuestra mala suerte.

Aún recuerdo cuando nos enteramos de que serían un niño y una niña... con esa noticia, puedo decir que Maki se sintió aliviada, pero a la vez nostálgica y más que ella elegiría los nombres que tu querías que llevarán tus hijos.


Flashback.

—Yo sigo diciendo que serán niños. Mi abuela siempre decía que los vientres puntiagudos son señal de que el bebé que viene en camino es un varón y el vientre de Maki tiene esa forma— dijo Nobara con seguridad mientras en sus manos sujetaba aquel globo en color azul que decía "es un niño"

—¿Pero qué demonios dices? Mi instinto de hermana me dice que tendré sobrinas, esos dos bebés serán niñas— comento Mai con una mueca mientras llevaba en sus manos un globo en color rosa que decía "es una niña"

Ambas estaban muy emocionadas porque aquel día por fin sabrían el sexo de esos pequeños. Y más que esas dos mujeres, quienes no se soportaban entre sí, tenían una apuesta importante.

—¿Ambas quieren callarse?— se quejó Maki, quien estaba acostada en aquella cama mientras la doctora le hacia el ultrasonido.

La doctora sonrió un poco por los comentarios de esas dos mujeres que estaban acompañando a Maki en aquella consulta.

—Parece que no sólo las tías andan muy entusiasmadas el día de hoy. Nuestro bebé A también anda muy movido en esta consulta, aunque este bebé siempre ha sido así de inquieto, mientras que el bebé B está muy tranquilo como de costumbre — comento aquella doctora mientras revisaba a esos bebés a través del monitor. Como siempre, podía verse que un bebé se movía más que él otro.

Maki suspiro.
—No solo estoy cansada de escuchar a estas dos. También estoy algo cansada de escuchar que nombren a mis hijos como Bebé A y Bebé B...

—Bueno, pues de ahora en adelante ya podrás empezar a llamar a tus bebés por los nombres que elijas para ellos— comento la doctora con una sonrisa mientras limpiaba el gel del vientre de Maki —Y más porque Bebé A es una niña muy energética y Bebé B es un varón muy tranquilo.

Esas palabras dejaron sorprendidas tanto a Maki como a Nobara y a Mai.

—¿Qué?— salió de la boca de Nobara.

—¿Un niño y una niña?— pregunto Mai con asombro.

—Así es. Felicidades Zenin san— comento la doctora mostrando el monitor a esas tres mujeres — Tus bebés son gemelos fraternos, también conocidos como Mellizos. Así que llevas en tu vientre un niño y una niña, los cuales pueden que hayan sido concebidos solo por días de diferencia.

Maki tenía una suave sonrisa en el rostro mientras se veía y acariciaba su enorme vientre. Una parte de ella estaba feliz de que fueran niño y niña, pero aun así la tristeza se veía en su mirada.

—Parece que cada tía tendrá un sobrino consentido — sonrió la doctora mirando como aún Mai y Nobara estaban sorprendidas por aquella revelación.

—Supongo que es un empate — dijo Nobara con una mueca.

Mai suspiro.
—Al ser un empate, supongo que ambas debemos pagar por igual.

—Solo espero no quieras que te compre el tratamiento de belleza más caro.

—Lo mismo digo.

Esas dos tuvieron que pagar por igual su apuesta, donde quién ganará se le sería comprado un tratamiento de belleza y cremas de marca. Pero al ser un empate, ambas debían comprar aquellos productos por igual.

—Por cierto Zenin san, ¿Ya pensaste en los nombres que les pondrás a tus bebés?— pregunto la doctora con curiosidad.

El rostro de Maki reflejo tristeza ante tal pregunta, las comisuras de sus labios bajaron un poco y antes de responder a eso, esta soltó un suspiro.

—Soy mala para elegir nombres...

—Definitivamente eres terrible eligiendo nombres— contesto Mai rodando los ojos —Mi hermana tiene la rara costumbre de nombrar a mis cactus con nombres muy raros como "señor salchicha" o "Señora M"

—Aun así, he pensado en dos nombres para mis bebés y ahora que sé que serán un niño y una niña... creo que tomaré los que alguna vez "alguien" sugirió para ellos...— explicó Maki mientras se sentaba con cuidado en el borde de la cama —he pensado en nombrarlos como Yurika y Yuudai.

—Son unos bonitos nombres — dijo la doctora con una sonrisa mientras anotaba algunas cosas en el expediente médico.

Al escuchar esos nombres, no pude quedarme callada...

—¿Es en serio que quieres que tus hijos lleven las Iniciales Y U en sus nombres? ¿Esos nombres no los estarás eligiendo por ese idiota?— pregunto Mai un tanto molesta.

Aquella pregunta dejo el ambiente muy tenso en aquel consultorio.

Maki acaricio su vientre.
—Tú lo dijiste Mai, soy mala eligiendo los nombres, aun así, siento que esos dos nombres irán con las personalidades de mis hijos, Yurika siendo una niña llena de energía y Yuudai siendo un niño tranquilo — miro a su hermana con seriedad— O ¿Acaso quieres que los nombre como a tus cactus?


Pude verlo en sus ojos, ella los estaba nombrando de esa manera debido a ti.

Aunque Maki tenía razón, parecía que esos nombres irían muy de acuerdo a las personalidades de esos pequeños y más que desde el vientre materno pudimos notar como sería cada uno.

Yurika siempre fue una niña llena de mucha energía y muy inquieta que se movía demasiado incluso antes de salir de Maki. inclusive después de nacer la energía física de esa niña parecía no agotarse, fue sorprendente verla caminar antes de cumplir el año de edad.

En cambio, Yuudai era un niño tranquilo y hasta en cierto grado, un poco más dormilón y lento que su gemela. Él al ser más pequeño y un tanto débil, él dio sus primeros pasos casi hasta que cumplió los 14 meses.

Quizás el que él haya nacido tan temeroso y enfermizo se deba a lo sucedido una noche en especial. La noche que lo cambio todo

Okkotsu, lo que a continuación te voy a contar es uno de los secretos mayor guardados entre Maki y yo... un secreto que ni siquiera Megumi ni nuestros amigos saben.

Así que necesito que lo que leerás a continuación, lo guardes en tu bolsillo y también te lo lleves a la tumba, ya que nadie más debe saberlo y aun así, sé que me estoy arriesgando demasiado al contarte esto. Pero necesitas saberlo porque sé que quizás en los informes de la academia te han mentido sobre la muerte de mi hermana.

Okkotsu, Maki y yo cometimos un crimen... matamos a una mujer... y sus restos están en esa tumba donde yace la mentira sobre la muerte de mi hermana.

Aún recuerdo esa noche como si fuera ayer... todo lo que te contaré a continuación sucedió la noche del seis de octubre del 2020... la noche previa al nacimiento de Yurika y Yuudai.

Así que supongo que todos estos sucesos fueron los que provocaron que los niños nacieran antes de tiempo... tus hijos nacieron prematuros y quizás fue nuestra culpa que eso haya pasado.

Veras, Antes de esa noche, nuestra vida estaba yendo con normalidad.

Maki y yo seguíamos trabajando en la tienda de cosméticos, y para esa fecha, Maki ya estaba a punto de entrar en su octavo mes de gestación, así que todo el trabajo se le empezaba a hacer más pesado y agotador debido a su gran vientre.

En un inicio, pensaba que mi hermana sólo estaba cansada por el embarazo y alterada por las hormonas, ya que por ratos parecía toda paranoica e inclusive pensé que Maki estaba teniendo delirios de persecución, debido a que le costaba mucho trabajo dormir por las noches y ella constantemente decía que se sentía observada a cada rato.

Parecía que Maki había desarrollado un sexto sentido que le advertía que algo a nuestro alrededor estaba mal.

Debimos haber sido más precavidas, quizás si hubiera visto lo mismo que ella, hubiéramos huido o nos hubiéramos escondido mejor... me arrepiento de no haberle hecho caso en esos primeros momentos cuando me dijo que creía ver a alguien observándonos a la distancia, escondida entre las calles por las que siempre pasábamos.

Al parecer, el clan Zenin no se quedó de brazos cruzados una vez se enteró que tu saliste del país. A ese clan le encanta tener el control sobre todo lo que pudiera ser una desventaja para ellos.

Así que ellos suelen jugar sucio desde la antigüedad. Y eso también significa mandar a espiar y a eliminar el "problema".

Y con eso de jugar sucio, también me refiero a que también mi maldito clan estuvo involucrado en tu separación con Maki, ellos enviaron a varios hechiceros de grado uno y dos a esa estación a distorsionar el tiempo y espacio para hacer que tú y Maki pensaran en que se habían abandonado el uno al otro. Y mandarnos a esa mujer a espiarnos meses después solo era una señal para saber si su plan inicial había funcionado.

Esa noche donde descubrimos esta verdad, Maki estaba más nerviosa de lo normal, recuerdo que eran cerca de la una de la mañana y en una ida a la cocina por un antojo nocturno, fue ahí donde vimos que alguien había entrado a nuestra casa.

Aquel presentimiento de Maki resultó ser cierto. Alguien cada día nos espiaba muy de cerca.

Alguien había mandado a espiar a mi hermana, pero esa espía no contó con que las dos no nos quedaríamos quietas y mucho menos sentadas con los brazos cruzados. Entre las dos perseguiríamos a esa mujer por aquellas frías calles hasta llegar a aquel callejón.

Ahí descubrimos la verdad. Okkotsu, alguien intervino aquel día para que tú y Maki fueran separados.


Flashback.

El grito de desesperó de una mujer se escuchó hacer eco en aquella calle.

Aquella chica solo corría desesperada mientras era atacada.

Varios disparos se escucharon por aquel lugar. Al igual que se podían escuchar los pasos de varias personas corriendo, incluso las pisadas se volvían pesadas sobre los charcos de agua.

La lluvia había parado hacia rato, lo que hacía el correr algo peligroso debido a lo resbaloso del suelo.

E incluso el frío era penetrante y doliente para los pulmones.

Correr a toda velocidad era un tanto difícil en aquel momento y más cuando se está embarazada. Pero aun así, era sorprendente ver a Maki moverse con agilidad.

—¡Ya Te tengo maldita perra!— gruño Maki, quien aun así embarazada logró darle a esa mujer una estocada con su espada. Logrando lastimarla en el costado derecho, haciéndola sangrar y gritar de dolor.

Pero aquella mujer a quien perseguían, no se dejó atrapar tan fácilmente, esta le dio un empujón a Maki, haciendo que esta cayera al suelo con brusquedad sobre su costado izquierdo. No importaba que una de sus perseguidoras estuviera embarazada, ella solo quería huir de ahí.

—¡Maki!— grito Mai mientras apuntaba con su arma a aquella mujer que seguía corriendo y que estaba a punto de escapar.

—¡Estoy bien! ¡Tu Dispara Mai! ¡Detén a esa perra!— grito la gemela mayor mientras se iba poniendo poco a poco en pie, ayudándose con su espada como si fuera un bastón. Quizás tanto su restricción celestial como la adrenalina fluyendo por todo su cuerpo, le ayudaban en aquel momento a soportar y a estar en pie, enfrentándose a todo lo que estaba pasando en ese instante.

Aquello había sido una imprudencia total para una embarazada, pero Maki necesitaba detener a aquella mujer que podía arruinarle aún más la existencia.

Varios disparos más se escucharon en aquel momento. Mai había logrado darle en la pierna derecha de esa mujer, así como en el hombro izquierdo, haciendo que esta cayera retorciéndose de dolor en aquel callejón por el que se iba a escapar.

Mai corrió a ayudar rápidamente a Maki a ponerse de pie.

—¿Maki estas bien? ¡Los bebés! ¿Como sientes a los bebés? ¡Necesitamos irnos de aqui!— dijo toda preocupada al ver que su hermana sobaba su vientre.

La gemela mayor se apoyó en el brazo de su hermana mientras se ponía de pie y caminaban juntas
—Estoy bien... solo quiero saber quién es esta mujer y el porque ha estado espiándonos por días y el por qué entro a nuestra casa— sujeto con fuerza su espada mientras se acercaban a aquella mujer que yacía en el suelo, retorciéndose de dolor.

—¡Por favor! ¡Piedad! ¡Puedo explicarlo!— esa mujer de cabellos verdes oscuros miro a las gemelas, la pobre estaba sufriendo demasiado dolor por las heridas que había sufrido. Además al ser una persona sin energía maldita, no había forma de defenderse de esas dos.

Las hermanas la acorralaron contra la pared de aquel callejón. Haciendo que su espalda y cabeza se estrellaran con brusquedad contra la pared.

—¿Quién demonios eres tú?

—¿Y quién te envió?

Preguntaron las gemelas apuntando cada una con su arma a aquella mujer.

—¡Pu-puedo explicarlo! ¡Déjenme decirles lo que se!— dijo esta con dolor.

—¡Habla de una maldita vez! ¿Quién eres? ¿Para qué te enviaron? — grito Maki, quien dio una fuerte patada al estómago de esa mujer. —¡¿Por qué has estado vigilándonos?! — volvió a patearle pero ahora en el pecho.

—¡Maki cálmate, le harás daño a los bebés!— Mai le grito a su hermana con preocupación por todo el esfuerzo que estaba haciendo su gemela.

—¡Mai! ¡No me voy a calmar hasta que esta perra nos diga que hacía en nuestra casa! ¡¿Y el porque ha estado espiando nos?! — Maki grito muy molesta mientras le apuntaba con su espada a esa espía.

Aquella mujer tenía los ojos llenos de lágrimas, su pierna sangraba, al igual que su hombro y la pobre trataba de recuperar el aliento por aquellas patadas, las cuales la hicieron hasta vomitar.

Mai solo miro a su hermana con preocupación ya que podía verlo en sus gestos, le dolía el vientre y su respiración la delataba, pero también Mai quería saber lo mismo que ella. Saber quién envió a esa mujer.

—¿Y bien? ¿Quién eres?— gruño Maki.

—S- S-Soy una en-enviada d- del clan Zenin... soy una si- sirvienta al igual que ustedes — comento la mujer con dificultad ya que de nuevo tuvo una arqueada.

—De seguro mientes porque No recuerdo haberte visto antes en la residencia — dijo Maki muy molesta.

—Espera Maki... su rostro si se me hace familiar — dijo Mai mirando de cerca a esa mujer, le tomo del cabello con su mano, jalando la con fuerza hasta acercarla a ella y soltando la con brusquedad al reconocerla —Si, Creo haberte visto en el clan más de alguna vez ¡Eres una concubina del imbécil de Naoya!— apunto con su pistola —Eres una de esas sirvientas que se acostaban con ese idiota!

—¿Fue ese imbécil quien te envió a vigilarnos?— Maki seguía apuntándole con su espada.

Aquella chica no quería hablar, así que Maki le encajo su espada en la pierna izquierda —¡Te hice una pregunta!

Aquella chica empezó a gritar de dolor, se retorcía y solo así empezó a hablar
—Si, él me envió a vigilar que su plan siguiera yendo en marcha como desde el principio. ¡Piedad por favor! ¡No me maten! ¡Puedo explicarlo!

Maki le saco la espada de su pierna, aquella sangre brotó con intensidad.
—¿Qué dijiste?

— ¿Cuál plan?— pregunto Mai apuntándole con su pistola a la cabeza.

—¡Se muchas cosas que podrían beneficiarlas a ambas!

—Entonces dilas. ¿De qué plan estás hablando?— Mai le dio un giro al revolver de su pistola.

Aquella chica tomó el aire como podía y empezó a hablar.
—Él me envió a vigilar que Maki Zenin siguiera estando separada de Okkotsu Yuta... El señor Naoya junto a otras personas de rangos muy altos hicieron un plan para separarlos ¡Lo juro! ¡Yo soy inocente, simplemente me están usando!

—¿Qué has dicho?— pregunto Maki con incredulidad.

—¿Recuerdas el día cuando Yuta Okkotsu se fue del país?— pregunto la chica con la voz a medio cortarse mientras miraba a Maki.

—No logro olvidar ese jodido día...

—¡Pues ese día el plan de Naoya Zenin así como del señor Gojo y de más personas que están detrás de todo esto comenzó!— empezó a explicar— ¡Ellos no querían que tuvieras una relación con Okkotsu! ¡Eso les molestaba y de paso les afectaba para asumir el poder! ¡Ellos lo hicieron! —La chica lloro— ¡Ellos mandaron a varias personas ese día a separarlos! ¡Usaron sus técnicas malditas en ti, por eso sentiste que el tiempo duro horas cuando en realidad solo fueron unos minutos! ¡Si tu tenías una relación romántica con Okkotsu automáticamente ambos clanes serian parientes políticos y eso afectaría a quienes asumieran el cargo de cada clan ya que Okkotsu podría heredar ambos puestos por ser de categoría especial! ¡Un líder que podría unificar dos clanes es algo inaudito! ¡Así como engendrar hijos que tienen la sangre de ambos es algo insólito!— miro el vientre de Maki

— ¡Además que verlos felices y enamorados les molestaba a ambos señores de los clanes! ¿Una Zenin y un descendiente de Sugawara juntos? ¡Para muchos eso es algo profano! ¡Por eso el señor Naoya a base de amenazas me mando a vigilarte desde el principio en aquella estación del tren! ¡Y hace meses atrás me envió nuevamente para saber que estaba sucediendo con ustedes dos una vez se enteró que todos los alumnos renunciaron a la academia después de lo sucedido con Iori Utahime! ¡Piedad por favor! ¡Déjenme ir!¡Ellos aún no saben que estas esperando un hijo de Okkotsu! ¡Aún no se los he dicho! ¡Pero Si me dejan ir puedo serviles a ustedes como una doble espia y traerles más noticias del clan! ¡Pero por favor! ¡No me hagan nada! — suplico la mujer.

—¿Maki?— Mai nombro a su hermana con preocupación y más por lo que acababa de oír.

Maki no podía creer lo que acababa de escuchar. Sus manos así temblorosas se hicieron puños. Sujeto con furia la empuñadura de su espada. Sentía la sangre correr con furia por sus venas. Quería venganza.

—¡Lo juro! ¡Puedo ayudarte a identificar a todos los que te separaron del amor de tu vida! ¡Puedo mantener el secreto de tu embarazo! ¡Ellos no...— La chica no pudo hablar porque Maki en ese instante le corto la garganta.

—¡Maki No!— grito Mai al ver aquello que hizo su hermana mayor. Así que rápidamente trató de contenerla ya que Maki empezó también a apuñalar con odio el cuerpo de esa mujer.

—¡Malditos todos ustedes!— Grito la gemela mayor —¡Ustedes me arrebataron mi felicidad! ¡Los maldigo a todos ustedes!— Grito y empezó a llorar mientras su hermana la contenía.

—¡¿Maki que has hecho?! — grito Mai mientras alejaba unos pasos a Maki de aquella mujer.

—¡Si la dejaba vivir ella iba a revelarles sobre que estoy embarazada! ¡Ella no era de confiar!— Maki se detuvo y siguió llorando —¡Ella va a ser la primera en sufrir por este daño que me han hecho a mí, a Yuta y a nuestros hijos!— grito mientras veían como esa mujer daba su último aliento y la vida se desvanecía de sus ojos.

Yo sabía que Maki tenía razón. Esa mujer podría delatarnos, pero ahora teníamos un problema mayor.

—¡Ya Déjala! ¡Ya está muerta!— Mai la abrazo de un costado para detenerla.

—Ellos nos arrebataron la felicidad...— Maki seguía en shock mientras veía sus manos manchadas de sangre. Quería seguir apuñalando a esa mujer que también era cómplice de haberles arrebatado su felicidad, pero su hermana la detuvo. Maki se estaba sobre esforzándose físicamente y eso era peligroso —¡Ellos alejaron a Yuta de mí!

—¡Ya Cálmate o le harás daño a tus hijos!— Mai la tomo de tal manera por el costado para tranquilizarla mientras su hermana se soltaba a llorar en sus brazos y se iba agachando y poniendo sobre sus rodillas por el dolor de haber escuchado todo aquello.

—Mai... ellos me arrebataron la felicidad con el hombre que amaba...—Lloro con amargura.

—Lo sé. Y ahora nosotras le hemos quitado la vida a una de sus cómplices...— Susurró Mai mientras su hermana mayor ahogaba un grito en el pecho de su gemela para después observar el cadáver de aquella chica.

Debíamos pensar en un plan para deshacernos de aquel cuerpo.

La furia cuando ciega, deja graves consecuencias a su paso y mi hermana las empezó a pagar. Parecía que Maki había salido de su estado de euforia y ahora veía las consecuencias de su ira.

—¡Que hice, Qué hice!— Maki empezó a sentirse mal al ver aquella sangre en sus manos, en su ropa y en su espada. El olor a hierro la hizo vomitar a un lado de donde estaba agachada. —¡Mai! ¿Qué hicimos?— grito en estado de Shock. Su respiración era agitada y estaba toda temblorosa viendo aquella escena.

—¡Debes calmarte Maki! ¡Todo esto de verdad le puede afectar a los bebés!— Mai la tomo de los hombros para que la mirara y se tratara de calmar.—¡Mírame! ¡Ya paso! ¡Cálmate!

—¿Pero ahora que haremos con ella?— pregunto Maki toda nerviosa una vez regreso en sí y descubrió lo que había hecho.

—Debemos ocultar el cuerpo o en su caso, deshacernos de ella— dijo la gemela menor sintiendo como las leves gotas de lluvia las empezaban a empapar.
—Lo ideal será esconder el cadáver mientras pensamos en algo.

—¿Pero dónde la ocultaremos? Estamos muy lejos de casa para enterrarla en el patio— pregunto Maki con la respiración agitada mientras su espalda la descansaba en la fría pared.

Ambas estábamos muy estresadas en ese instante. Pero yo en especial estaba preocupada por Maki.

Veía como esta acariciaba mucho su vientre, sobre todo su costado izquierdo... aquel costado donde había caído. Aquel costado donde se supone Yuudai crecía.

Cargar aquel cadáver entre ambas era un riesgo y más si alguien nos descubría. O en su caso, no quería meter más presión en el cuerpo de Maki, yo estaba preocupada por los bebés y por ella. Por todo el esfuerzo que había hecho en aquella persecución.

Quizás ella asesino a esa mujer con sus propias manos, pero yo fui su cómplice, así que ambas estábamos involucradas en este crimen. No podía dejarla sola en esto.

Recuerdo que mire a mi alrededor, por suerte no se veían cámaras de seguridad en esa zona.

—¿Qué tal si simplemente la dejamos aquí y ya?— pregunto Maki muy nerviosa mientras sobaba su vientre y sentía las suaves gotas de lluvia caer sobre ella.

Mai empezó a buscar entre las cosas de aquella mujer, encontrando su cartera, la cual abrió y noto que traía su identificación.

—Aún si la dejamos aquí y alguien la descubre es más que obvio que harán una investigación y pueden notificar al clan y eso significarían muchos más problemas — comento Mai mirando con seriedad a su hermana mientras mostraba aquella cartera.

Maki se llevó las manos a la cabeza.
—¡¿No sería más fácil solo dejar el cuerpo aquí sin identificaciones y sin sus pertenencias y hacerla pasar como la víctima de algún asalto?!

—También es una opción. Pero este país tiene una buena base de datos de sus habitantes y con las huellas y el registro dental pueden dar con su identidad y de todos modos sería un problema si se notifica al clan— explicó Mai.

—¿Qué vamos a hacer? ¡Trágame tierra!—Dijo Maki con frustración —¡Si la dejaba vivir ella quizás nos hubiera delatado! ¡Como me gustaría desaparecer en este momento!

Al escuchar esas palabras de Maki, mi mente empezó a maquinar un plan.

Mire el cuerpo de nuestra víctima y note que esa mujer era físicamente parecida a mi hermana. Misma altura, tenía su mismo tono de cabello pero ella solo lo tenía un poco más largo que Maki, también tenía la piel clara, una fina nariz pero con unos ojos marrones.

En ese momento se me había ocurrido una macabra idea. Arriesgada pero quizás eso libraría a Maki y a mis sobrinos del clan. Así podían al fin ser libres.

—Ella se parece un poco a ti...— dijo Mai con frialdad.

—¡Todos en el maldito clan se parecen, Mai!

—Si, pero ¿Y si te hacemos pasar por ella para que el clan piense que moriste y así puedas ganar la libertad junto a tus hijos?— dijo Mai mientras miraba su hermana.

Pero Maki se veía muy angustiada y confundida por aquellas palabras. También estaba temblando de frío y se veía más pálida que de costumbre.
—En serio no entiendo lo que estas tratando de decir ni lo que estas tramando...— le dolía la cabeza.

—¿Déjame lo a mí de acuerdo? Yo solucionare todo esto— Mai se metió la cartera de esa mujer entre sus ropas para llevarse sus identificaciones.

—De acuerdo, confío en ti— dijo Maki con un suspiro y su mirada llena de miedo.

Más tarde pondría en marcha mi plan, pero por el momento, Necesitábamos esconder nuestro crimen.

— Mínimo escondamos el cadáver entre las cajas— dijo Mai con total seriedad.

—Si.

Y así lo hicimos, Maki y yo escondimos aquel cadáver entre algunas cajas en aquel callejón mientas la lluvia nos empapaba.

Y de ahí, nos fuimos a casa. De verdad, yo estaba preocupada por Maki ya que se veía pálida y de paso, sobaba demasiado su vientre.

—¡Prométeme que no le dirás a nadie sobre esto! ¡Y Que nos llevaremos este secreto a la tumba!— comento Maki con preocupación una vez estaban en casa.

Mai le paso una toalla a su hermana para que se secara.

—Te he estado guardando todos tus malditos secretos desde hace casi ocho meses atrás. Sabes que también este lo guardaré en mi bolsillo y lo llevare hasta la tumba ya que ambas somos cómplices — dijo Mai mirando a su hermana.

Maki le tomo de la mano.
—Gracias... por todo...

Mai tomo la mano de su hermana entre sus manos —Somos hermanas después de todo...

Podía notarse la complicidad en sus ojos.

Maki soltó las manos de su hermana y se empezó a secar el cabello — Aun así, esos malditos clanes me las pagarán por habernos robado la felicidad... uno a uno caerá y los tachare de mi lista que tengo escrita con su sangre, incluido el idiota de Okkotsu por seguirles la corriente — dijo muy molesta —Si él de verdad me hubiera amado, ya desde cuando hubiera descubierto la verdad y hubiera regresado por mi... maldito traidor... nunca se lo perdonaré.


En aquel momento pude ver en Maki el odio que tenía dentro de ella.

No la justifico, sé que ella tenía todo el derecho a estar molesta por lo que le hicieron y de paso, por lo que tú le hiciste. Aquí es donde me pregunto ¿Qué estarías haciendo tú en estos momentos donde la vida de Maki y tus hijos estaba yéndose en picada?

Después de que Maki al fin logró quedarse dormida, yo no podía dormir, estaba muy angustiada por todo lo que había sucedido.

Así que hice algo que sabía seria arriesgado, pero era la única solución que encontraba para salvar a mi hermana y a mis sobrinos.

Cerca de las 5 a.m. regrese a la escena del crimen, con cuidado de no ser descubierta, plante una pequeña pista en la cartera de aquel cuerpo, y después de eso regrese a casa.

Okkotsu, por mi hermana sería capaz de todo, así que estaba arriesgando hasta mi vida en este movimiento.

Recuerdo que aquella noche Maki de nuevo tuvo algunas pesadillas ya que la vi moverse demasiado e incluso llorar y gritar dormida. Acabar con la vida de alguien nunca será fácil y yo lo sé de primera mano.

Pero el problema vino al día siguiente.

Quizás todo el estrés vivido la noche anterior, así como la caída que tuvo Maki tuvieron consecuencias. Esto debido a que se le adelanto el parto.

Lo recuerdo con vividez y plasmarlo en estas hojas aún me sigue costando debido al shock que fue ver a mi hermana sangrar de esa manera.

Fue en la tarde, cuando Maki empezó a quejarse de que sentía que uno de sus bebés se movía de manera inusual y unos minutos después, ella empezó a sentirse muy mal.

Mi hermana se veía angustiada y hasta un tanto pálida. Eso hasta que empezó a quejarse de un fuerte dolor que apareció de un de repente en su vientre.

Lo recuerdo bastante bien porque yo estuve ahí al momento en que a ella se le rompió la fuente y en el instante en que ella empezó a sangrar.

Al parecer aquella caída solo provoco que las contracciones iniciarán desde la madrugada, pero no fue hasta la tarde en que se le rompió la fuente. Cuando ya tenía más de siete centímetros de dilatación.

Okkotsu, yo estuve presente en el nacimiento de Yurika y Yuudai. Y con toda seguridad puedo decirte que fue un parto muy difícil.

Maki sufrió demasiado, todo el procedimiento fue por parto vaginal debido a que prácticamente cuando llegamos a urgencias, tus hijos ya estaban listos para nacer ya que Maki había dilatado demasiado rápido y ya no había tiempo de hacer una cesaría de emergencia.
Pero lo que más nos preocupaba eran que ambos bebés iban a ser prematuros y eso significaría que iban a ser bebés diminutos y sin terminar de desarrollarse como debían.

Los gemelos pueden llegar a ser super pequeños y tus hijos no fueron la excepción. Ambos apenas median 30 centímetros y tenían un peso de apenas 2 kilos.

La primera en nacer fue Yurika y siete minutos después nació Yuudai.

Los demás detalles de dicho acontecimiento no me corresponden a mi decírtelos, sino a Maki, ella debe contarte todo lo que pasó en dicho parto, sobre todo con ella y con Yuudai y el por qué este podría ser considerado como un niño muy especial.

Lo único que puedo decirte en estas hojas es que los tres están vivos de puro milagro, sobre todo Yuudai a quien no le daban esperanzas de sobrevivir más de unos días. Pero sobrevivió y es hasta lo que recuerdo, un niño "estable" pero que necesita de algunos cuidados.

Me pregunto cómo estarán ahora... llevo tres años sin verlos...

Esa misma noche, después de que los niños nacieran y que ambos junto a Maki estuvieran en terapia intensiva y en la UCIN (Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales) Nos estábamos enfrentando a otro gran problema.

Y eso era buscar una solución para que los niños no heredarán ni el apellido Zenin ni Okkotsu para que ningún clan los reclamarán como suyos. Incluso queríamos evitar que Tsukumo Yuki les adoptará y separará de mi hermana.

Ahí fue donde Tsumiki intervino con Megumi. No se los detalles al cien porque yo solo veía a la distancia el cómo esos dos parecían discutir de "algo", mi intuición me dice que fue ELLA quien terminó de convencer a Megumi para que este se casara con Maki.

Así que prácticamente a los días de nacidos tus hijos empezaron a llevar el apellido Fushiguro e incluso Megumi empezó a actuar como un padre para esos dos.

Incluso todos los demás nos turnábamos para cuidarlos y atenderlos tanto dentro como fuera del hospital.

Ahora, Okkotsu quizás te preguntes ¿Y qué paso con el cuerpo de esa mujer del callejón? Bueno, lo que te contaré a continuación sé que podría ser usado en mi contra, pero mereces saber la verdad sobre quien está en esa tumba.

Bueno, yo como hermana y recién convertida tía, debía matar dos pájaros de un solo tiro, así que aquella noche donde mis sobrinos nacieron, también tuve que ir a identificar el cuerpo de "mi hermana" a la morgue.

Aquel día parecía eterno. En la noche del siete de octubre, recibí una llamada de la policía, donde decían que debía ir de inmediato a reconocer un cuerpo que había sido encontrado en un callejón y más que la identificación en la cartera de aquella mujer decía que se llamaba Maki Zenin.

¿Recuerdas que te dije hojas atrás que regresé al callejón y que planteé una "pista" en nuestra víctima? Pues antes de salir de casa tomé la identificación de la academia de mi tonta hermana y fui a dejarla en la cartera de esa mujer para hacerla pasar por Maki.

Digamos que la mayoría de los miembros del clan Zenin, tenemos rasgos muy similares, así que esa chica era un tanto parecida a Maki.

Recuerdo cuando llegue a dicho lugar. Estaba nerviosa, pero debía hacer aquello por el bien de mis recién nacidos sobrinos.


Flashback

El médico forense deslizó aquella sábana blanca del cuerpo de aquella mujer que tenía un día de evolución cadavérica.

Mai se quedó congelada al ver aquel cuerpo de aquella mujer a la que la noche anterior habían asesinado. Pudo ver los huecos de las balas que ella le disparo, así como los cortes y las apuñaladas que Maki le dio.

Sobre todo, destacaba la gran marca en su cuello.

Mai trago saliva. Su cuerpo quería traicionarla, pero debía controlarse. Debía mentir. Su puño se formó sobre su ropa mientras escuchaba al forense.

—Señorita Zenin ¿Reconoce usted a esta mujer?

Mai seguía en silencio mientras el forense seguía hablando.

—La he llamado Señorita Zenin porque en la credencial que encontramos en las pertenencias de esta mujer venia el número de usted como contacto de emergencia— empezó a explicar —Esta mujer fue encontrada por un civil quien fue a tirar algo de basura al contenedor que había en aquel callejón y por las heridas que presenta, podemos deducir que fue un crimen bastante violento, ya descartamos que fuera un robo debido a que sus pertenencias estaban con ella y tampoco presenta heridas del tipo sexual, aun así quizás se deba levantar una carpeta de investigación para buscar al culpable. Así que le pregunto nuevamente ¿Usted reconoce a esta mujer?

Mai seguía en shock, ver aquel cuerpo con el crimen que habían cometido entre ambas la había dejado impactada.

—Señorita ¿Se encuentra usted bien? — volvió a preguntar el forense.

Mai miro a aquel hombre —Maki...— dijo con la voz a medio quebrarse debido a que estaba llegando a su límite —Ella es mi hermana...— sus lágrimas empezaron a brotar de sus ojos con maestría en la mentira.

—Entiendo...— el médico volvió a cubrir aquel cadáver — Bien señorita, creo que es momento de que avise a su familia sobre esta lamentable pérdida. ¿Tiene un lugar donde podamos mandar a velar el cuerpo de su hermana?

Mai seco las lágrimas de estrés que caían por sus mejillas.
—Conseguiré uno de inmediato... necesito avisar a mi familia de esto— dijo con seriedad.


Y así lo hice. Conseguí un servicio para mandar directamente al crematorio a ese cuerpo y de paso, como "Familiar" decidí que no se abriera una carpeta de investigación.

Avise al clan Zenin, quien recibió aquella noticia junto a la sede de hechicería con el acta de defunción dicha por el forense. En cambio, sobre aquella sirvienta, me enteré que la dieron por "perdida", habían pensado que había huido, así que decidieron no hacer más por buscarla ya que solo era una sirvienta sin energía maldita. Un desperdicio de persona. Un desperdicio de persona según los estándares del clan.

Así de fácil, el clan desecha a las personas que no les sirven. Y todos los sirvientes entran en esa categoría, por eso sí estos huían o ya no había noticias de ellos en semanas, no eran buscados y eran dados por muertos.

Ese día mi hermana había muerto dos veces. Así que de ahora en adelante ella era un "fantasma" tanto para mi clan como para la sede.

Al parecer la noticia de la "muerte" de Maki no afecto a nadie de mi clan. Me enteré que ni mi madre ni mi padre lloraron por la muerte de su hija mayor. En cambio, el borracho de mi tío, Naobito, solo me contacto para avisarme que el pagaría un lugar en el cementerio para enterrar aquellas cenizas.

Así que si ya disté con la tumba de Maki Zenin, tienes todo el derecho de saber que quien está enterrada ahí, es la mujer que murió en aquel callejón. Quizás todo esto pueda resultarte un tanto confuso Okkotsu, pero Maki no está muerta, ni tus hijos.

Ellos simplemente están creciendo con otro apellido y viviendo una vida "normal"

A los dos días de haber dado a luz, Maki salió de terapia intensiva, sorprendentemente, su cuerpo se recuperó demasiado rápido. No parecía ser la misma de antes, sino que hasta se veía más fuerte físicamente y en su cuerpo se notaba, incluso su carácter cambió un poco. Parecía más tranquila, pero al mismo tiempo, más calculadora que antes. Aunque eso si, con sus hijos era más serena, atenta y hasta cariñosa.

Era como si su restricción se hubiera fortalecido y creo que eso afecto también a mi técnica, ya que ahora puedo usar mi energía maldita al cien, pero con sus consecuencias... esto es algo difícil de explicar a sí que quien podría darte respuesta sobre lo sucedido con nosotras dos sería Tsukumo, ella investigo todo esto.

Y a los días en que fue dada de alta del hospital, Maki se casó con Megumi en el registro de la ciudad para tanto tener una nueva identidad como para darle oficialmente un apellido a mis sobrinos.

Se supone que los informes sobre Maki Zenin y sobre el nacimiento de Yurika y Yuudai habían sido eliminados de todos lados y con ellos, una nueva identidad se les había otorgado a los tres.

Las semanas pasaron y esos pequeños empezaron a tener mejoría.

Yurika fue la primera en ser dada de alta al mes de nacida. Esto porque ella no presentó complicaciones al nacer. Ella era totalmente una niña sana y muy energética.

Incluso en esos meses donde ella ya estaba en casa y su mellizo aún en el hospital, yo me encargue de cuidar de esa preciosa niña. De la cual, lo admito Okkotsu me encariñe con tu hija al grado de que la empecé a querer como si fuera mi propia hija.

Incluso llegué a presentarla como mi hija cuando salíamos de compras solamente nosotras dos. Y hasta llegue a comprarle mucha ropa que combinaba con la mía y accesorios. Digamos que la llegué a consentir demasiado.

Esto porque veía en ella, una versión mía y de Maki que quería proteger y de paso, quería consentirla como a mí me hubiera gustado ser mimada.

Así que, Yurika, es mi sobrina favorita. Y solo espero que ella esté bien y siga siendo una niña alegre.

En cambio, Yuudai tardo casi tres meses en salir del hospital. Esto debido a su delicada salud.

Aun así, con sus complicaciones de salud, tu hijo logró salir adelante, quizás se deba a que ese pequeño lleva tu sangre. Podemos decir que su recuperación fue mejorando gradualmente, incluso nuestro miedo de que no pudiera hablar o que tuviera alguna limitación del movimiento o algún retraso mental, se fue descartando con el paso de los meses y con las idas a las terapias médicas.

Y lo admito, al inicio me costaba demasiado el tomarle cariño a tu hijo porque él es una copia exacta tuya. Él no tiene la culpa de mi odio hacia ti. Aun así trataba de cuidarlo como era debido, aun cuando Maki debía salir a trabajar. Y poco a poco lo empecé a querer.

Por favor Okkotsu, si ya has conocido a esos dos pequeños, te pido de favor que los cuides mucho. Yo los vi crecer hasta los tres años y no sabes lo que me duele el no poder estar con ellos en este momento.

Yo los vi crecer y pasar de ser bebés prematuros a ser bebés más saludables y llenos de energía y vida.

Yo estuve ahí cuando empezaron a gatear, y yo les ayudé a empezar a caminar, sujetando sus manitas y guiándolos

También estuve ahí cuando ellos empezaron a hablar.

Okkotsu, yo por Yurika y Yuudai di mi libertad y hasta daría mi vida porque ellos sigan viviendo una vida normal.

Y sé que los demás están haciendo lo mismo. Incluso Maki. Quien sé que aún te ama. Y por ese amor que te tiene, dio a luz a tus hijos.

Okkotsu, perdón que me haya extendido demasiado en estas hojas, aun así, me falto mucha verdad que contarte. Pero esa tarea se la dejare a Maki, para que ella te cuente toda la verdad o aquello de lo que tengas dudas.

Ya no me alcanza el tiempo, pero para resumir y como dije, hace tres años dejé de tener contacto con ellos debido a que di mi libertad a cambio de que el clan Zenin no diera con esos niños y de paso, que sigan creyendo que Maki está muerta. Ese tema le corresponde a mi hermana y a Megumi contarte que paso y el cómo es que ahora estoy atrapada de nuevo en esta infernal residencia, siendo la esposa del bastardo de Naoya...

Por favor Yuta, te lo pido, cuida de mis sobrinos y de Maki. Ellos te necesitaran demasiado.

Tienes mi permiso para darle esta carta a la idiota de mi hermana en caso de que no quiera contarte nada de lo que le preguntes.

Por favor Maki, Deja tu orgullo a un lado... él también merece saber la verdad.

Okkotsu, por favor, que el secreto que te conté en líneas atrás, guárdalo en tu bolsillo y llévalo a la tumba. Si se lo dices a alguien ajeno a Maki, juro por los dioses, que te mataré.

Ahora te toca a ti reparar todo esto... confío en que así lo harás...

Atentamente: Mai...


03:50 p.m.

Aquella larga carta la termino de leer Okkotsu una vez estuvo solo en su habitación del departamento donde se estaba quedando en la ciudad.

No podía creer todo lo que había leído en esas hojas. Las cuales había guardado muy bien una vez habían llegado a la escena del crimen.

Después de atender aquel llamado, Yuta pidió a Katsumoto ir directo a ese departamento, donde se encerró en su cuarto para leer aquella carta en silencio.

—Gracias Mai por contarme una parte de la verdad... sé que debo regresar te el favor — dijo en voz baja mientras seguía tomando esas cartas entre sus manos.

Yuta después observo hacia la gran ventana que había en su habitación, se estaba haciendo tarde. Podía ver que el cielo pronto se pondría rojo por el atardecer.

El leer aquella carta le revolvió demasiado los sentimientos y de paso, le confirmo algunas cosas. Sobre todo, aquella carta le motivaría para encarar a Satoru.

Pero, primero hablaría con Maki. También debía haber una forma de protegerla a ella, a los demás y sobre todo a sus hijos.

En aquel momento, la viva imagen de sus hijos se le vino a la mente. Y con ellos, una muy importante cuestión en la que no había pensado hasta aquel instante.

—¿Cómo tomarán Yurika y Yuudai la noticia de que yo soy su verdadero padre? — se cuestionó mirando aquella carta—¿Acaso me aceptaran? O ¿Lo mejor será que no sepan quién soy?

Yuta suspiro.
—Me perdí de muchas cosas de mis hijos, así que dudo mucho que me acepten así de fácil. Aun así hay mucho que resolver antes de decirles la verdad— se dejó caer en la cama.

—Me pregunto que estarán haciendo Maki y mis hijos en este momento...— suspiró mirando al techo.

—Maki...— Susurró aquel nombre con anhelo, el amor que sentía por ella aún era muy fuerte y ahora, tenía otros dos motivos más por los cuales seguir adelante y luchar por esa mujer. Y esos motivos eran Sus hijos.

Pero bien dicen que donde hubo fuego, cenizas quedan.


03:55 p.m.

—Yu...ta...— Maki Susurró entre sueños.

Ella había dormido un buen rato de la tarde.

Entre sueños estaba recordando un poco de lo que había pasado con ella y Yuta la noche anterior. Así como también recordó entre sueños su último beso. El cual se sentía tan real a pesar de ser un simple recuerdo.

Incluso unas risitas que escuchaba entre sueños, le hicieron recordar la primera vez que sujeto a sus bebés sin que estuvieran conectados a los respiradores. Cuando al fin pudo poner sus cabecitas sobre su pecho y pudo besar sus frentes.

Maki seguía soñando, eso hasta que sintió que unos pequeños se habían metido en su cama y la habían abrazado.

—shuu la vas a despertar...

—Tu eres la que está hablando...

—Parece que mami de nuevo esta soñando con ese hombre que ve en sueños— susurro Yurika.

—Me pregunto quien será ese hombre con el que tanto sueña mamá...— dijo Yuudai en voz baja.

—¿Crees que sueña con nuestro verdadero papá?

—No lo sé...

—¡Ya Se está despertando! — susurro Yurika con sorpresa.

—Rápido, hay que hacernos los dormidos también — susurro Yuudai cerrando los ojos.

Esas pequeñas voces cerca de ella, hicieron que Maki fuera abriendo los ojos poco a poco y notará que sus hijos estaban acostados cada uno en uno de sus costados.

Yurika estaba a la derecha de ella y Yuudai a la izquierda.

Maki sintió ternura al ver a sus hijos fingir estar dormidos, con los ojos cerrados, mientras sus cabecitas estaban recargadas en su pecho.

—Ya sé que no están dormidos— Sonrió y susurro mientras les daba un beso a cada uno en sus frentes y llevaba sus manos a sus cabellos para acariciarlos.—Yurika, Yuudai.

Ambos niños abrieron sus bellos ojos color miel mientras soltaban unas pequeñas carcajadas.

—¿Dormiste bien Mami?— pregunto Yuudai con una sonrisa.

Su madre volvió a besar sus frentes.

—Dormí bien y de paso, estaba soñando con la vez en que los cargué por primera vez a ustedes dos después de que nacieron — dijo Maki con una sonrisa — así como están ahora mismo, recargando sus cabezas en mi pecho.

Eso hizo que ambos niños sonrieran.

—Mami ¿Soñaste algo más?— pregunto Yurika con curiosidad.

—¿Por qué esa pregunta? — cuestiono Maki levantando una ceja.

—Por qué parecías decir el nombre de un hombre en voz baja— comento Yurika mientras se sentaba en el costado de la cama.

—¿Acaso estabas soñando con ese hombre que ves ensueños? — pregunto Yuudai también sentándose a un costado para ver a su madre.

—¿Acaso estabas soñando con nuestro verdadero padre?— pregunto Yurika.

Maki suspiro y estiro sus brazos mientras se quitaba las sábanas de encima.

—Ya no lo recuerdo— mintió mientras se encogía de hombros —Y por cierto ¿Qué hacen aquí en mi cuarto? ¿Y Megumi y los demás donde estan?— decidió cambiar de tema.

—Entramos para ver si ya estabas despierta— explicó Yuudai.

—Si, más que nada para que vayamos al super a comprar los ingredientes para mañana hacer la comida que le ofreceremos a Yuta kun— explicó Yurika emocionada.

—Y papá Gumi está en la sala junto a mis tíos— respondió Yuudai.

—Si, Papá estuvo de acuerdo en que entráramos a despertarte — dijo Yurika con una gran sonrisa.

—Ya veo, bueno, mínimo dormí lo necesario para sentirme mejor — contesto Maki con una leve sonrisa.

—¡Mami! ¿Crees que Yuta kun se podría quedar a dormir mañana aquí? ¡Queremos jugar con él!

—¡Y de paso queremos que conviva con nuestros tíos y con Papá!

—Parece que Yuta kun se llevó bien con los demás, ya que ayer todos parecían ser viejos amigos — explicó Yuudai.

Ambos niños se veían super emocionados por mañana y eso lo noto Maki.

—¿De verdad ya quieren a Okkotsu a pesar de que tan solo llevan conociéndolo pocos días?— pregunto su madre al ver la emoción de esos dos.

—¡Sip!

—¡Y más que él nos salvó!

—¡Además, sentimos una extraña conexión con él!

—Queremos que él esté con nosotros más tiempo antes de que regrese a Tokio.

Explicaron esos dos.

Maki suspiro y apretó un poco los labios en un puchero. No le agradaba aquella idea.

—¿Mami qué pasa?— cuestiono Yurika mirando la seriedad de su madre.

—¿Acaso él no te cae bien?— pregunto Yuudai.

—No es eso. Es solamente que él...— Maki no sabía si debía o no decir la verdad.

—¿Qué tiene él?— pregunto Yurika.

—¿Yuta kun es?— pregunto Yuudai.

Maki sintió que no era el momento para que sus hijos supieran la verdad.

— Yuta puede quedarse a dormir solo si él tiene tiempo, igual podemos prepararle un futon y hacerle un campo en la sala por si quiere quedarse a dormir aquí con nosotros — contesto Maki con una sonrisa mientras se sentaba en su cama —Ahora, vayan a ponerse los zapatos. Iremos de compras.

—¡Yeih!— gritaron esos dos emocionados mientras bajaban de la cama de su madre y corrían a sus respectivas habitaciones.

En cambio, Maki se dejó caer de espaldas sobre su colchón. No podía dejar de pensar en Yuta.

—Supongo que aún no es momento de que sepan la verdad...— Susurró para sí misma

Su corazón latía con fuerza solo de pensar en que mañana Yuta se quedaría a dormir en esa casa.

Continuara...


Notes:

Espero que les haya gustado este largo y revelador capítulo, o mejor dicho, regalo de Navidad.

¿Qué les está pareciendo esta historia? 👀 De paso, espero se haya entendido en este formato con el que escribí este capítulo.

Admito que esta fue una carta muy larga pero muy reveladora, y eso que a esta historia aun le faltan otros misterios más por mencionar, así como otras verdades que poco a poco irán saliendo a la luz, pero eso será revelado hasta el siguiente año.

Así que aquí solo quise poner lo que Mai consideraba más importante de contarle a Yuta.

Sobre el misterio de lo que le paso a Utahime sensei hace siete años atrás y de su vida actual con Satoru, para esa parte estoy pensando en escribir un capítulo que girara en torno a ese misterio. Pero eso ya será para el siguiente año.

Sobre el trabajo que aquí tenían las gemelas y también para la apuesta de Mai y Nobara, bueno para estas referencias tome lo que por ahí salió en un video de uno de los videojuegos de JJK y que incluso compartí en mi perfil de twitter, donde Maki hace referencia a que Nobara, tanto podría llevarse bien con Mai como con Utahime sensei debido a que ellas tres hablan seguido del cuidado de la piel y Maki no es tanto una chica de cuidarse la piel como ellas. Incluso, en el capítulo extra del manga 168.5 que salió para conmemorar la salida de la película por allá del 2021, en dicho capitulo Yuta, Maki, Toge y panda trabajaban medio día en una tienda de cosméticos que era de una amiga de Shoko y ahí se encontraron a Utahime, ahí es donde se nos deja ver que Uta es una mujer que cuida mucho su piel.

Sobre que los gemelos son de mala suerte, supongo que esa superstición se puede romper cuando los bebés nacen cada uno con un sexo contrario como en el caso de Yurika y Yuudai que fueron una niña y un niño. Aunque aun estoy definiendo que técnicas malditas habrá heredado cada niño. ¿Ustedes que técnicas sugieren? ¿Alguna técnica del clan Gojo o alguna del clan Zenin? Los estaré leyendo 👀

Y hablando de los padres de esos dos ¿Qué creen que pase en el siguiente capitulo donde Yuta ira a casa de Maki? ¿De qué creen que hablen Yuta y Maki? ¿Ustedes creen que Yurika y Yuudai ya están sospechando que Yuta es su verdadero padre? ¿Cómo creen que reaccionaran cuando lo descubran? ¿Lo tomaran a bien o a mal? Aunque para esto de la revelación, aún faltan varios capítulos más.

Solo puedo adelantar que dentro de poco, habrá un poco de celos de Yuta hacia Megumi porque esos niños quieren y le dicen "papá" a este hombre de cabellos de erizo ya que de verdad lo quieren como si fuera su verdadero padre 👀

Así que también dentro de poco, a Yuta le tocara hablar tanto con Maki como con Megumi.

Al igual que dentro de poco, Yuta tendrá que encarar a Satoru para que le de respuestas de lo sucedido hace años atrás. Chan chan chaan!

En fin, a esta historia aun le queda mucho por delante.

Como dije, este es el último capítulo que escribo de este año, espero en el siguiente, poder seguirles trayendo más ❤

Por el momento, este 26 de diciembre seguiré leyendo sus comentarios mientras sigo aquí en mi país.

Ya del 27 en adelante, tratare de leer sus teorías y comentarios una vez tenga internet en el extranjero. Y sino logro conectarme en estas casi cuatro semanas, tratare de ponerme al día con sus comentarios y sus mensajes una vez regrese a México.

Sin más, muchas gracias por todo, nos seguimos leyendo ❤

Sobre sugerencias sobre este fic u otros, no las ando aceptado, gracias