Buenos días a todos, aquí, les saluda su escirtor procrastinador favorito. Luego de sobrepasar algunas pruebas y osbtaculos familiares, por fin puedo volver a escribir una parte de esta bizarra historia.
Posiblemente, si los astros se alinean, esatré trayendo el final del volumen para octubre, con unos 4 capítulos más. Así que no decaigan. Si les gusta la historia, no duden en comentarlo. Cualquier crítica es bien recibida, considerando que este es mi idioma origen, así que pueden compartirlo si gustan XD.
Sin más que agregar, disfruten.
Kinua Garetto anda a su propio ritmo
Los caracoles son lentos. Mucho más lentos que las tortugas.
En condiciones extremas, como en climas muy secos, los caracoles pueden entrar en un estado de hibernación o estivación para conservar energía y sobrevivir hasta que las condiciones mejoren, hasta tres años seguidos sin importarle el exterior. Durante este tiempo, su metabolismo se ralentiza tanto que pueden pasar años sin comer ni beber. ¡Una siesta prolongada exprés! Entonces, tan "emocionante como suena" esta habilidad; no pasará de una curiosidad enlistada para el ensayo del mes. Tal vez una alta calificación por conseguir una risa del profesor hastiado de los trabajos del mes, pero no más. Esta información pasará de largo como la mayoría de datos obligatorios en el camino de ser "un ser humano adulto".
El producto perfecto de la sociedad carece de todo ese egoísmo necesario para existir. Lo reprime, "hiberna" a la persona imperfecta hasta que las condiciones no sean extremas. Muestra esa máscara para mantenerse al margen del exterior. No exponen nada, no gana nada. Nunca darás el paso para irse, ya no puedes moverte. Y si lo hace, corre el riesgo de morir. No literalmente, pero el daño es demasiado que podría terminar deseándolo.
¡Feliciten a las personas realizadas!
¡Elogien a todos los graduados!
¡Sonrían como si quisieran continuar así el resto de sus vidas!
Ahora, paguen sus tributos con el resto de su vida. Entréguenos sus sueños, sus emociones y sus metas. Todo servirá para avanzar, todo servirá para mejorar.
¡Banzaí! ¡Banzaí! ¡Banzaí! ¡Banzaí! ¡Banzaí!
Los caracoles son los animales más lentos del mundo.
Los caracoles son los animales más lentos del mundo solo porque los humanos ya no se ven como animales.
"Descendiente mío, la naturaleza humana radica mucho más allá de supuestos."
El timbre de llamada marcó el final del horario académico extracurricular, enviando una oleada de alivio a través de los distintos clubes. La fuerza de la costumbre mantiene un control total sobre las acciones de los demás, con pequeñas variaciones. Algunas personas salieron disparadas por las instalaciones rumbo a su inminente destino, otras excavaron ruidosamente a través de sus casilleros por algún bocadillo antes de enrumbarse al corazón de la ciudad. Sin importar sus actividades, el resultado sería el mismo: dirigirse a satisfacer el estómago y gozar de un descanso reparador. En mi caso fue similar, sin ninguna interrupción, o eso me gustaría decir. Ya que, por costumbre, ni siquiera me encontraría en estas instalaciones pues perturban mi bloqueo inherente de la realidad.
Como sea, yo, Hikigaya Hachiman, por lo general, no tengo una rutina perfecta para alcanzar un sueño reparador o alguna ingesta de comida en específico luego de ser sometido a escenarios exasperantes. Tenerla significaría acostumbrarme a tal exasperante comportamiento, LO CUAL ME NIEGO ROTUNDAMENTE A ACEPTAR. Y tampoco es que sucediera a menudo. A pesar de ser uno de los pocos jóvenes varones en mi clase, raramente converso con los demás por iniciativa propia. Las pocas ocasiones que suceden son por coacción de otras dos conocidas, en donde me aíslan de mi amada soledad recurrente en el almuerzo.
Entablar algunas palabras con ellos solo me llega a irritar sin motivo aparente, ¿acaso soy un monstruo para que se alejen ni bien les dirijo la mirada?; además que prefiero entrenar el uso del elemento lo más que pueda, ¿no es eso la excelencia en esta institución?
Así como logré destacarme en lengua y literatura, no comprendo la notable desestimación de la mayoría del alumnado por sentirse presionados en sus deberes. Las notas promedio abultan la campana de Gauss, que a estas alturas sería más una bolsa hundida, con tal descaro que empiezo a dudar de la integridad de la institución.
Más allá de la preparación física rigurosa y las múltiples rutinas en el uso de esta magia moderna, ¿existe alguna certificación de calidad estudiantil? Tampoco es que impacte mucho a estas alturas, sobrevivir sin alguna certificación internacional no parece imposible con el "elemento" en acción. Incluso, si no retuerzo las palabras de Minori-san, es posible curar ciertas enfermedades mortales con un entrenamiento riguroso. Y, si junto todo de la mejor manera, es posible acceder a esa y más información debido a mi linaje. Je, si no fuera autoconsciente de mi situación, ya estaría delirando acerca de mi protagonismo como personaje shounen. Lo cual es imposible debido al tortuoso entrenamiento experimentado el año pasado.
¿Entrenar y Hachiman en una sola oración? Al igual que mi capacidad para nadar lo suficiente, manipular el elemento con el maken activo es una rutina implantada por Spada-san. Más que un hábito, puedes considerarlo un Trastorno de Estrés Post Traumático. Realmente, odio a esa mujer sonriente.
En fin, siguiendo mi mapa de posibles destinos, después de dar vistazos por la bulliciosa calle exuberante de hormonas, luego de las clases rutinarias, simplemente recurro a algún local de comida ambulante; aquellos con un B, para recuperar el sabor casero de Chiba. Solo necesitaba presentar mi identificación para gozar de un ramen bien servido y la paz de degustarlo en compañía del silencio. Como se trata de un servicio básico, no requería usar el dinero depositado en mi cuenta de estudiante. Además, si bien la comida gratis es la mejor; aquella que viene con intereses es la peor en contraposición.
Naturalmente, ese no era el único motivo para no ir a los lujosos resorts cercanos. Es fácil adivinar que la mayoría evita los lugares más económicos por su delicado sentido del gusto, además que subestiman la comida nacida de la experticia callejera. Además, considerando el año pasado; exceptuando ciertos especímenes que profanan este lugar con conversaciones banales y ajenos al respeto por el espacio personal, era un soplo de aire fresco a las conversaciones de Ojou-samas en cada nueva mesa. Sí, a ti me refiero, Bakajou-san. ¿Por qué siempre paras trayendo a cada clase hasta llenar el edificio?
Aunque, en estos días, el escenario actual presenta más mosquitos faltos de atención y muchos zumbidos a mis ojos. Tch, los riajus nada innovadores, incluso ocasionales, siempre son la tumba de este tipo de negocios familiares que se esforzaron en convencer al gobierno de trabajar aquí. Peor en este nuevo entorno en donde al alumnado es mayoritariamente femenino y los pocos estudiantes masculinos parecen salidos del algún manga shounen. Los primeros incidentes y escándalos ya salieron a la luz. Maldita sea, su presencia se multiplica para mi malestar, ¡directora, haz algo!
Si se me concediera un deseo, me hubiera gustado seguir el trayecto leyendo una novela o manga o algo así, en vez de divagar en este espacio mental; pero había dejado todos los comics interesantes que todavía estaba siguiendo en mi departamento. Tal vez debería haberlos traído por precaución a una posible situación desesperante, o un golpe de realidad tal vez, como finalmente ocurrió en esta tarde. ¿Necesito planes de contingencia? No… necesito planes de contingencia
Pero ese tren ya había salido de la estación desde que empecé a regresar a mi fase más oscura, obviamente por el estúpido positivismo de Azuki-san y su cuadrilla. Supongo que la manera japonesa de poner eso sería "ato no matsuri". En inglés sería "después del festival"... No, no, eso sería "¡matsuri no ato!". Esperen, sería más como "He aquí, la torre de babel".
Sí, yo estaba tan aburrido que estaba jugando en ambos lados de un diálogo cómico por mí mismo. En serio, aunque... siempre he pensado esto, pero cuando pasas mucho tiempo contigo mismo, parece que sólo cosas de ese tipo suceden. A este paso, mis niveles de cordura solo pueden recuperarse con agua de almendras.
Y no es para menos…Quedar atrapado en un sauna altamente secreto en la cima de una montaña es un escenario digno de un doujin barato luego de los 30, pero ir a un gimnasio luego de ello, definitivamente entra en el terreno de la ruta JAV. ¡DIOSES JAPONESES SALVENME DEL DESCUIDO DE MI HOMÓLOGO! ¡NO SOY DESCENDIENTE DE UN DIOS GRIEGO PARA SALIR IMPUNE DE CUALQUIER CONSECUENCIA!
¿Pensaste que voy a ceder a mis instintos básicos y echar un ojo? TCH, TCH. NO, NO LO SOY.
¿Por qué? ¿Por qué debería rebajarme a ver sucios normie… Ah, como sea, mientras más pienso en ello, ¿es más difícil obviarlo?
La explicación es mucho más sencilla y normal de lo esperado, a diferencia de un guion mental para un protagonista ultra denso o carente del conocimiento sexual necesario para un joven mayor a doce años. Desde que fui capaz de experimentar esta especie de poder, llamado "elemento", mis pensamientos se aceleraron. Similar a los vectores de un albino psicótico, escalé 5 niveles por encima del pensamiento humano (la nariz ha crecido misteriosamente). No fue difícil darme cuenta que el tiempo se ralentizaba cada vez que me ensimismaba en mis pensamientos (osea, la diferencia entre 40 segundos y 1 minuto es significativa); asimismo, mi capacidad de entendimiento subió tal como si la ira me invadiera en combate y mi cabellera adquiriera un tono dorado.
Si tan solo fuese en el ámbito académico, mis padres estarían llorando de felicidad por convertirme en el rey de los estudiantes luego de dar un discurso motivacional en griego hacia mis compañeros de curso, aunque tampoco hay tal exigencia académica. Obviamente, eso nunca sucederá pues mi suerte se acabó desde ese accidente automovilístico. Ahora estoy atrapado en una especie de institución ultra secreta… espero que no nos envíen como bocadillos hacia demonios o entes lovecraftianos.
En este escenario especulativo, mi corazón se volvió a hundir en la desesperación. Lo suficiente para reconsiderar la sabiduría de los libros prohibidos por mi familia (¿Por qué confiscaron mi repertorio de mangas y novelas ligeras ni bien me aceptaron aquí? Tuve que sufrir para conseguir otros más antes de llegar aquí) De esta manera, en vez de que mi vista orbite en las masas y redondas formas cercanas a mi entorno, y por ende acabar noqueado como los dos tontos de atrás, simplemente centré mis fuerzas en revisar mi suministro de elemento desesperadamente.
Todavía faltaba un largo tiempo hasta que me llamaran para mi turno en las duchas, así que nada mejor que revisar el límite que presento debido al corte de conexión de hace rato. Tal como lo afirmó hace poco, la capacidad de elemento con el que puedo trabajar ha aumentado drásticamente. Sin embargo, mi inquietud al utilizarla surge de inmediato. Este aviso instintivo surge cuando el balance de esta magia escasea en el cuerpo. Una sensación similar a la sed; no estoy a punto de deshidratarme, pero el desgaste es evidente.
Mi ancestro, al parecer, solo observa e interviene de vez en cuando a mis dudas, como si se tratase de una brisa repentina. Así que me corresponde pensar en cómo graficar mis límites.
―¡Minorin está aquí!
Y, como si fuera una señal, una mujer casi desnuda surge de la nada (¡IMPOSIBLE, ¿CÓMO NO LA VI VENIR?! ¡SOLO ME DESCUIDÉ UN SEGUNDO!). Su presencia fue tan previsible como la niebla repentina en un cuarto perfectamente acondicionado. Aunque sumergirme en mi mismo me quitó la posibilidad de excusarme, dejé de mirarla por miedo a represalias y situaciones estereotipadas. Tch, temo por mi salud mental a este paso, incluso mis puentes neuronales ya deben haber mutado de tanta exposición al sexo opuesto. Ser estimulado por receptores gravitatorios en la parte delantera y trasera (¿por qué no hay una división de secciones entre el cuerpo y el alma?), además de sus ceñidos trajes de baño, no ayudaban a acceder a mi máxima concentración.
Como si alguien supiera el cómo iba a responder a semejante bombardeo de sensaciones, Rokujou-san se llenó de emoción expresada en una sonrisa brillante. Su dedo derecho me señaló acusatoriamente. Un tumulto de miradas expectantes me rodeó. Luego se apuntó a ella misma con el pulgar
―No tienen nada que temer, porque YO estoy aquí
¿Qué clase de parodia es esta? ¿No le debo de temer a usted? ¿Qué clase de frase propagandística es esa? Prefiero encargarme de salvar a este lugar exasperante yo solo en vez de confiar en una persona tan cambiante e ineficiente como directora. No, mejor que ya vengan las elecciones, prefiero una personalidad más calmada y que me releve de este tratamiento de empresa negra (¿debo dudar ni siquiera de que no será así a partir de ahora?).
―¡Oh, directora!
―Buena presentación
―10/10
―¿Por qué no entra por la puerta como una persona normal?
Un tal Hikigaya Hachiman, en rumbo de alcanzar la iluminación, escuchó los diversos comentarios sobre la parodia del portavoz de la paz japonesa. Solo quiero que esta situación termine de una vez.
―¡¿Por qué esta solo cubierta por una toalla?!
Oh no me había fijado, al parecer mi boca mantiene su autonomía sin importar el escenario. Curiosamente, la línea de la toalla que le cubre es demasiado fina, pero, a la vez, suficiente para tapar su feminidad de los jóvenes de hoy en día. No, bastardo. Ojos, ¡dejen de gravitar hacia esa mujer! ¡No cedan a las tentaciones exteriores de un interior podrido!
Vuelto en mi concentración, entre sus risas y murmullos, simplemente no hay cabida para una conversación racional; asi que mientras siguen parloteando; evitar algún castigo irracional de parte de estas mujeres a través de un desvío de atención.
La masa grisácea que recorre mis manos es una materialización de mi elemento sin usar el maken. No es recomendable para el entrenamiento a largo plazo, pero, considerando que mis reservas naturales han sido cortadas como el crédito financiero japonés; no queda de otra que probar mis límites. Además, si bien pueden no agradarme la compañía aquí presente, sus habilidades respaldan la mayoría de las posiciones aquí. Ante cualquier inconveniente en el manejo del elemento, ellos intervendrán de una u otra forma.
Incluso si sucede un ataque sorpresa, dudo que Boingkujou-san no sea capaz de frenarlo. El límite de su fueza es insondable para mis estándares. Ah, la confianza nunca fue mi punto fuerte y aquí estoy dejando mi espalda a una sociópata junto a una junta extraña de mujeres. ¿En dónde me equivoqué para llegar a este límite? Incluso, un dios desconocido y sospechosos ha copiado mi apariencia. Si hay actos desconocidos bajo mi nombre, mínimo ya sé a quién culpar.
Encerrado, en estas 4 paredes de concreto y complots gubernamentales, solo puedo confiar en mi fuerza interior y mi capacidad de… en serio, ¿impulsos chuunibyou de nuevo? Fuera, fuera; suficiente tengo con la voz dormida en mi cuerpo con actitud de anciano ancestral.
―¿Hay algún problema? ¿De qué están hablando ustedes? ¿No estarán intimidando a Hachiman? Jsjsjsjs
¿Intimidarme? No quiero presumir, pero en este cuarto solo hay una persona que puedes superarme después del tremendo buffo al descubrir un poder ancestral en mi interior.
―No, ninguno lo haría director. Lo que pasa es sentimos que alguien nos vigilaba en el sauna
―Sí, yo también lo sentí.
―Y no fue ninguno de los chicos.
―Sí, ninguno, ninguno
Ohyama y Usui replicaron, con sus últimas fuerzas, de manera apenas distinguible por los moretones en sus caras. ¿Debería considerar traerme algunas vendas, teñirme el cabello cual nieve y reflejar una actitud arrogante? No, eso me obligaría a tener un combate final contra tres enemigos semidivinos apoyados por un diavolos ex machina constante.
―¿Quizás fue algún animal? Hablando de animales. Minori, mencionaste algo así en la reunión anterior, ¿no?
Como la voz de la razón, mi salvadora de este circo de impulsos, Aki Nijou-san sacó información relevante al instante.
―Eh sí, Aki, se ha insertado fauna local. Unos leopardos, ciervos y tigres de las nieves… ah, también una osa
―¿Entonces eran una osa y un oso? Incluso ellos tienen más suerte que mi patética vida…
―No, solo fue una osa… ¿A qué te refieres Usui? ¿La viste?
Ya decía cuándo lo iban a contar. Ohyama Takeru me increpó con la mirada; su temor no tenía ni pies ni cabeza pues nunca los obligaron a mantener en secreto. Mi suspiro fue suficiente para dejarle vía libre y comentara sobre su punto de vista.
―De hecho, creo que la osa al que se refieren es Kumahachi. Encaja en la descripción de los chicos. Supongo que se acercó a ustedes por curiosidad. Como es hembra, quizás quería llevarse bien con los chicos
―¡Pudo habernos avisado antes! ¿Por qué se le olvido algo tan importante?
Por primera vez en la tarde, Ohyama saca a relucir su reclamo sin ningún miramiento. Puntos extra por reflejar la poca paciencia del sector masculino.
―¡Ah, deberes de director!
―¡Esa no es una excusa!
Luego de ducharnos, el camino de vuelta a las instalaciones fue extraño. Aunque quizás influyó en mi rápida separación para evitar alguna otra actividad inesperada y totalmente desvergonzada.
Si estás solo en casa, empiezas a hablarte a ti mismo más y más. Entonces empiezas a cantar en voz alta hacia ti mismo. Y luego hay un montón de veces cuando tu hermana pequeña llega a casa y va diciendo: "¡VIVA! Skibid..Agu- Ahh... Agua". Pero todavía no comprende esa moda juvenil del humor abstracto. Y como resultado, a menudo terminaba pensando en esas cosas. Espera, ¡ni siquiera he pasado los veinte!
En fin, en cierto sentido, incluso lo más aclamados investigadores son eso, son solitarios maestros de pensamiento. Por ahí, una motivación y empatía surgen con ello, otro de los muchos motivos por los cuales siguió estudiando y no dejar todo al infalible plan de ser amo de casa. Sortear las miradas denigrantes y de repugnancia fue sencillo pasando los cuatro meses; ningún mal dura cinco meses ni hay cuerpo que lo soporte.
Y si bien se dice que el hombre es un animal frágil, también es un animal pensante muy centrado en su relación con las multitudes, cosas raras para cualquier relación lógica. Sin embargo, es fácil de comprobar; Pues siempre te encontrarás pensando en algo, por más descabellado e impensable que fuera, relacionado con otra persona. Este rasgo es una prospectiva potente para la futura supervivencia en el estado salvaje de la vida sedentaria, o en comunidad asfixiante.
Aunque los solitarios no tienen ningún pensamiento de sobra de otras personas, sino más enfocados a la cruda realidad misma, sobre el mismo actuar de los demás, pueden pensar en las cosas aún más profundamente. Entonces, mis congéneres como yo poseemos circuitos en nuestros cerebros que nos permiten pensar de manera diferente de la gente normal, y esto a veces nos da la capacidad para llegar a ideas más allá de la capacidad de los seres humanos normales, o elementales razonamientos lógicos. . Excluyendo mis capacidades mutantes, el gen X simplemente potenció esa parte de mi al darme más tiempo para concentrarme más a mí mismo.
Sin embargo, está muy justificado ser una actividad exclusiva de una categoría (imagina otro tipo de clase con esa habilidad y es demasiado). Es muy difícil tratar de expresar la cantidad colosal de información en el universo a través del habla por sí sola. Es como una computadora. Se necesita tiempo para cargar grandes cantidades de datos a los servidores o para enviarlo por correo electrónico. Esa es la única razón por la cual los solitarios tienden a ser no calificados en la conversación. Pueden contener grandes memorias de información valiosa, pero carecen de los programas necesarios para ejecutarlas a terceros, tales como word o un pdf.
Pero creo que esto no es siempre una mala cosa. Las computadoras no existen sólo por el bien del correo electrónico, hay internet y cosas como Photoshow también. Así que no creo que un solo punto de vista sea suficiente para juzgar a una persona. Bueno, saqué las computadoras como un ejemplo allí, pero no es como si estuviera tan bien informado cuando se trata de computadoras... Si quieres a la gente que sabe mucho acerca de las computadoras, entonces, júntate a las personas que se apiñan en el club de informática. Y sí, en el clásico club de juegos que irradia un ambiente extremadamente meloso. Un poco más y se dedican a crear a la novia perfecta o una batalla campal por ver que club es el mejor.
¿Cómo nota su existencia? Pues esas personas estaban usando PSP y haciendo una búsqueda en el modo inalámbrico Ad-Hoc, además de parlotear en el medio del pasillo. ¿Cuáles eran sus nombres de nuevo? Oda... o Tahara... ¿Algo por el estilo?
"¡Eh, tú, usa un martillo o algo!"
"No, un gunlance ya es mucho más de lo que necesito."
Ellos parecen que se divierten, por lo que, si era honesto, una parte de mí quería ir y participar. Hace mucho tiempo, cosas como el manga, anime y los juegos eran campos dominados por los solitarios. Sin embargo, últimamente se habían convertido en otra forma de comunicarse y unirse con gente como esa ahora requeriría un cierto nivel de capacidad de comunicación. Entonces, ¿qué diablos debería hacer? Tampoco es que me importe mucho ahora. La ley de la selva servía de apoyo a tus creencias en esta escuela, así que, muy subrayado, los enfrentamientos son el pan de cada día.
Por eso mismo, fue extraño observar la coordinación de los equipos deportivos. Quizás un anime spokon live action ocasiona un mejor juicio a mi descripción de sus actividades.
El trabajo en equipo es, simplemente, ineficiente en la mayoría de los casos, ¿Cómo no puede serlo si solo el talento demuestra sus frutos elevados a la enésima potencia? Por eso, luego de fracasar en mi coordinación con Garetto-san y Azuki-san contra Spada-san, decidí entrenar por mi cuenta, aunque sospecho fue toda una trampa premeditada.
Demonios, si tan solo hubiera comprado ese folleto de aquel tipo misterioso… ¡El camino de la mano desnuda es el más fuerte!
Después del regreso a nuestros dormitorios, simplemente quería descansar en la cama de alta calidad entregada por la estancia estudiantil. El material de aquel oasis de reposo y tranquilidad superaba con creces cualquier otra experiencia mundana dada por el trabajo asalariado de padres ausentes ¡Banzai, gobierno japonés! Por lo menos sus esfuerzos para tener a los nuevos X-men en Japón darán resultados.
Aunque no puedo reemplazar la calidez del saludo de la mejor imouto del mundo, Vita-chan todavía ayuda a despejar la mente del estrés de estar encerrado con seres carentes de sentido común. Quizás pueda utilizar el viejo campo de entrenamiento.
Sin embargo, así como lo mencionó un mal comediante: "Solo hace falta un mal día para que el hombre más cuerdo caiga en la locura" o algo así. Las cortinas junto al equipo de construcción no ayudaban en mantener mi esperanza de que todo se tratase de una equivocación.
―Oh, Hikigaya
Un frasco de problemas, con tirabuzones rubios dignos de una ojousama, me interceptó antes de entrar a mi preciado lugar de descanso. A diferencia de un estudiante golpeado por un huracán de inconvenientes, ella rebozaba de energía, aunque un dudoso nerviosismo. Su "aura" o "the zone", al igual que otros riajus de alta categoría, transmitía esa sensación de entusiasmo y familiaridad. En verdad, una habilidad pasiva muy eficaz en multitudes y letal en un PvP. Si agregamos esa caja misteriosa que carga, dudo que mis probabilidades sean mayores al 50%. La suerte decae en cada hora del día, presiento que recae en cierta presencia inmaterial que vive en mi cuerpo.
―Garetto-san
―Ah, Hikigaya-san. No esperaba verte aquí
―Eufemismo del año, Garetto-chan. Es imposible que no vengan a estas horas considerando mi horario de salida y tu comunicación con Azuki-san.
―Y bueno, ¿qué quieres?
―Mañana, con Azuki-chan, iremos de compras. ¿Vendrás por los viejos tiempos?
―Que excelente idea, te deseo buena suerte en gastar tu dinero del mes.
Tengo un mal presentimiento de este desarrollo. Así que prefiero evitarlo por la vía del razonamiento y el diálogo ante todo.
―¿A dónde vas, Hikigaya-kun?
―Si recuerdo bien, este es un lugar hecho para descansar tanto el alma como el cuerpo, es mi derecho descansar hasta el mediodía de mañana.
―Hay tantas cosas que están mal en esa oración, pero lo más importante ¿No me ayudarás?
―Sabemos muy bien cuál será mi respuesta, Garetto-san.
―Te lo preguntaré por última vez, ¿no irás de compras conmigo incluso si hay comida gratis?
―Lo…lo pensaré
―Bien, espero tu respuesta pronto. Mañana es sábado, así que, si vamos, debe ser temprano.
―Mujer, déjame mantener la ilusión de que tenía alguna opción.
―No. Nunca la hubo, a menos que quieras decidirlo en combate.
Si las probabilidades no están a mi favor, ¿por qué debería luchar en clara desventaja? Incluso si ganara, nada me garantiza que no siga con su plática ociosa. Es más, me arriesgo a que comience su acoso o le cuente a Azuki. Ahí SÍ comienzan los problemas en mayúsculas.
―Como sea, tampoco esperaba mucho.
―Hasta luego, Ha-chi-man-kun
Ugh, sentí una perturbación en la corriente del gab moe. Y otro mal presentimiento a la lista
"Ya veo, un tsundere por naturaleza. Y uno muy tímido. Me compadezco del corazón de esos mikos. Aunque conocerlas por tus recuerdos contiene demasiado sesgo, entiendo que es mejor comprenderlas en vivo y directo"
¿A quién te estás refiriendo por mikos, Stand-san? La diferencia de generaciones debe estar afectando a mi homónimo ancestral. Además, ¿Quién te dio permiso para husmear en mis recuerdos? Sigue ahí y solo te engañarás de cuán difícil es ser una persona de razonamiento común en estas instalaciones de locos, ¡Estas advertido Yami Yugi!
―Disculpe, pero esas telas gigantes cubren todas las puertas, ¿tiene alguna idea de lo que ha pasado?
Mi pregunta recaía a la encargada del dormitorio. Una señora de avanzada edad que prepara uno de los estofados de carne más exquisitos que he probado. Si bien soy un buen cocinero, requisito indispensable de mi anterior aspiración realista; la comida gratis nunca dejará de ser una opción.
―Oh, qué pena. Usted, que es tan silencioso y amable, ya no estará con nosotros.
―Obaa-san, no entiendo lo que me quiere decir.
―Como hay más ingresantes de los que se esperaban, la mayoría han sido trasladados al nuevo pabellón. Esto también incluye a los pocos adultos varones de la zona. Su nuevo departamento compartido esta al costado del edificio femenino,
―Entiendo, aunque sea un atropello a mis derechos, supongo que volveráé a la jungla social… Adiós al santuario de la soledad. Espero que no hayan olvidado alguna de mis pertenencias en el camino.
―Ah, pero tu caso es especial. La directora debe habertelo comunicado, pero creo que no estuviste presente ese día, pero igual debían tener alguna otra oportunidad.
―¿Comunicado que?
―Tu mudanza, ¿no lo hizo?
―Esa vieja bruja no me indica nada de esto…
―Si ella no te lo dijo, quizás la chica que te acompañaba lo sepa
―¿Por qué ella?
―Porque ella conversó con la directora el mismo día que tu faltaste, además que se llevó tus últimas pertenencias justo ahora.
No hace falta saber por qué sentí una ira profunda junto al sentimiento de traición cuando vi a una sonriente Kinua Garetto en la entrada del infame dormitorio femenino. Siento millas de cuchillas visuales que bloquean el paso hacia el infierno.
―Eh, ¿sorpresa?
―Jajaja
―Espera, uhm, ¿Yei?
―Iré a conversar con ese intento de directora, sabes muy bien que esto no funcionará de ninguna forma.
―Un momento, espera, eso no es verdad.
―¿Nosotros dos? Tengo una hermana, así que puedo hacer el intento hasta que me reubiquen, pero una persona más destruirá todo y lo volverá incómodo por el tiempo que suceda.
El límite de mi ingenio siempre busca la manera de sobrevivir. Este escenario soñado para mi yo chuunibyou solo es un mayor inconveniente en mantener mi serenidad mental. Por fortuna, la elocuencia no es un punto fuerte en una persona con culpa. Hecho que pienso explotar hasta que ella misma decide apoyarme en mi reubicación.
―Eh, no… sabes que vivo con Azuki-san, ¿no?
―Demonios…Tuve una buena vida, ¿verdad?
―Levántate y deja ese intento de iluminación.
―Si quieres enviarme bajo tierra, primero espera que mande mi carta a Komachi.
Sin embargo, la madre naturaleza no es tan complaciente. Quizás debería haberme quedado con Hiratsuka-sensei. Por más entrometida que fuera, dudo que me impondría exponerme a futuros acontecimientos que volcarían mi mundo de cabeza. Por lo menos, no me habría unido a un club a la fuerza, ¿verdad?
"Las excusas solo te llevan al camino más rápido de la desesperación, descendiente-chan"
Desearía tener un Hollow-Zampakuto en vez de un Ryuk hiperactivo e imprevisible. Mis aviones son torcidos, como esperaba.
PD: Volvió la primavera por mi zona, eso significa una mayor cantidad de palabras por capítulo, un promedio de 5k, así como también un mayor seguimiento a las relaciones de los protagonistas.
En estos momentos, tal vez me vaya a saltar algunos arcos debido al power up (recipiente divino, cof cof sukuna bueno, cof cof) que Hachiman no dudará en usar para sobrevivir. Además, dudo que no le ponga ganas al saber que su familia puede verse involucrada si Ten-bi cae, pues el único eslabón enutral por asi decirlo para evitar infracciones a la población local.
PD2: Gracias a los comentarios que resaltaron que me olvidé los guiones XD. Esperen una actualización mucho mas pronto :-)
