Historia #17: La Noticia
En el bar Laica terminaba de limpiar las mesas, mientras Arthur organizaba toda la cristalería, Owen vigilaba a Zesyr e Izumi quienes estaban tallando las grandes ollas, ya que habían roto la televisión y la gramola y tuvieron que pagar con trabajo.
En ese momento entraban tres conejos arlequines, dos machos y una hembra vistiendo iguale, camisa blanca, pantalón formal, en el caso de la hembra una falda negra y medias largas, los machos usaban corbata y la hembra una pajarita negra.
—Hermana, llegaron nuestros reemplazos— anuncio Arthur.
—Que bien, después de 48 horas de trabajo continuo, es hora de un buen descanso— agradeció la loba.
—Buen trabajo, nosotros los reemplazaremos— hablo la coneja.
—Shisi, Zesyr e Izumi están en la cocina limpiando, luego viene mantenimiento a cambiar el equipo de entretenimiento— le comento el lobo macho a la coneja.
—Entendido, Louise les tendrá vigilado.
El conejo de la derecha asiente, el trio del ártico se retiraron a su descanso.
Laica se encontraba en su habitación tendida en cama, miraba en su portátil las noticias que ocurrían en la intranet, una red oculta de los sistemas de vigilancia. La loba miraba los diferentes encabezados hasta que nota uno en particular. "Ejecutaran al ex Zar Nikolay Kolosov en una semana" una foto de un lobo ártico, golpeado y con un rostro de completo abandono a su propia vida.
Laica rápidamente fue a la habitación de su hermano y golpeaba con mucha fuerza, este le abrió y Laica sin darse cuenta le golpeo varias veces.
— ¿Qué ocurre?— pregunto Arthur.
Laica le muestra la noticia de su portátil, Arthur leyendo el artículo, suelta un suspiro, rápidamente la toma del brazo y la ingresa a su habitación.
—Hermana, escapamos de ese destino, olvídalo ya,
—Pero es papa, nuestro propio padre.
— ¡LAICA! Perdimos a mama y papa nos dejó al cuidado de Owen.
El lobo le grito y la loba se molestó que pisoteo el suelo con rabia.
—Bien, yo iré a rescatar a nuestro padre.
Se marchó la loba con algo de resentimiento. Laica accedió a la zona de armamento y tomo todo lo que ocupaba, si bien sabia esconderse de los robots centinelas, pero fue sorprendida por Atenea.
—Ni lo intentes— le amenazaba la loba al unicornio robot.
—No me interesa para que ocupas ese equipo, pero si quieres, en la sección 4 hay pistolas de alto calibre.
Se marchó la robot y Laica aprovecho para hacerse con una de esas armas como munición.
Accedió al Endless y noto a Ram sentado en el asiento del capitán con las patas traseras en la consola, los ojos del grifo robot parecían apagados.
Laica intento despertar al robot para que le ayudara, pero al ver que no se movía lo lanzo hacia una esquina y comenzó a presionar todos los botones de la nave para hacerla funcionar.
Ram o la versión holográfica de este se materializo enfrente de la loba.
— ¿Qué haces?— pregunto el potro unicornio.
Asustando completamente la loba apunto con una daga al holograma.
— ¿Eres la IA de esta nave?— pregunto la canida.
—Sí, soy la IA de navegación de la nave— confirmo el potro.
—Necesito que me lleves a un planeta en concreto.
—Night Bat me prohibió manejar la nave sin su supervisión, pero realmente es una prohibición retórica, ya que soy el sistema de navegación literalmente.
— ¿Me ayudaras?— pregunto Laica.
—No, gracias, ahora sal de Endless antes que llame al Escuadrón— amenazo el potro.
Laica tomo el cuerpo inerte de Ram y amenazo con destruirlo.
—Te lo advierto pony, destruiré a Ram.
—Espera, espera, te ayudare, pero deja mi cuerpo, es un modelo único que ya no se fabrica después de la Guerra Celeste— el potro se preocupó de que su cuerpo salga dañado.
— ¿Qué? Este es Ram— confundida estaba.
— ¡YO SOY RAM!— grito el potro.
Rápidamente este se cargó en el robot y aventó a la loba al suelo, antes de que esta se recupere, el grifo le coloco el filo de su lanza en el cuello.
—No intentes nada perra, tal vez sea joven, pero no soy idiota.
Amenazante se miraba el joven grifo con sus ojos en una tonalidad roja.
Laica se lamentó el no poder ayudar, cosa que Ram termino ablandándose, Laica aprovecha y amarra al grifo.
—Creo que si eres más idiota de lo crees— se burló la loba.
—Hermana desata a ese robot.
Apareciendo en la entrada Arthur y Owen quien usaba una gran armadura de acero templado con remaches de plata y una gran capa blanca con el emblema de un lobo aullando y un hacha de combate dorado con hermosos detalles nevados en blanco, y donde el filo de este era de energía roja.
El grifo confundido antes la aparición de los otros dos, le explicaron de que se trataba y este al principio se negó, pero tuvo que ceder ante la petición de los hermanos, ya que significaría mucho para ellos.
—De acuerdo, pero seguro que termino regañado nuevamente.
El grifo se reconecto a la nave y una imagen de su habitación se veía como este salía de ella y la habitación se cambiaba por una idéntica a la cabina de mando del Endless.
El potro saludaba a sus compañeros y un globo de dialogo aparecía en la imagen "Sujétense firmemente"
La nave comenzó a despegar y salió disparada del hangar. Una vez que la nave salió el potro desde la pantalla observaba los diferentes destinos.
Los tres notaron unos planetas pero en concreto, un planeta cuya atmosfera es hostil y congelada, era el Sacro Imperio Theirhiel, un pequeño planeta en un estado de congelamiento perpetuo.
—Ram…— intento hablar el lobo.
—Capitán Ram para ti— corrigió el potro.
Arthur volteo lo ojos.
—Capitán Ram, ese planeta es nuestro destino— señalo el lobo.
Ram acciono el turbo y la nave acelero para llegar.
La nave en modo camuflaje investigaba la zona, hasta que llegaron a un gran castillo invernal, la nave hizo un aterrizaje a las afueras del castillo manteniendo el camuflaje.
—Espéranos aquí Ram— le ordeno el lobo macho.
—Solo diré que me secuestraron.
Historia #18: Liberando a Zar
Los jóvenes lobos y el oso caminaban por las oscuras y frías calles de lo que alguna vez fue su hogar, usaban capas para evitar ser descubiertos, aunque habían pasado años desde que escaparon no corrieron riesgos, caminaban tranquilamente los tres cuando una patrulla de dos guardias pasan a su lado, estos solo saludaron sin levantar alguna alarma.
Los uniformes de los lobos guardias eran negros con plata y el emblema había cambiado al que ellos recordaban.
El trio camino hacia el palacio e ingresaron por un pasadizo secreto que les dio acceso a los calabozos del castillo.
En estos había muchos más presos de los que recordaban algunos incluso eran familiares de los hermanos.
—Tío Issac, tía Luvidka— les hablo Arthur.
Ambos lobos voltearon en la dirección de la voz y notaron al joven lobo blanco, incluso con la mascada que usaba lo reconocieron.
—Príncipe Arthur.
—Sobrino mío.
Se alegraron ambos de verlo.
—Oigan no nos olviden— hablo Laica.
También los miraron a Laica y Owen, su alegría no se contuvo que hasta se les salieron unas lágrimas.
Owen con su fuerza rompió la celda e ingresaron para abrazarlos.
—Creímos que habían muerto— aliviado el lobo ante la presencia de sus sobrinos.
— ¿Dónde está papa?— pregunto Arthur.
Issac se mordió la lengua, el destino que se le presentaba era incierto.
—Tu padre debe estar en los niveles superiores, pero tiene máxima seguridad— hablo la tía.
—Gracias tía.
—Owen, guíanos.
—Sera un placer majestades.
Ordeno el lobo y el oso asintió.
Continuaron su búsqueda por los niveles superiores de los calabozos, cada vez la seguridad aumentaba, pues no solo había prisioneros peligrosos, también de alto perfil como líderes rebeldes. Un grupo de guardias reales daba su ronda por los pasillos, los hermanos los emboscaron y se hicieron de sus uniformes.
Usando atuendos de los guardias que incluía un casco que bloqueaba el rostro los hermanos caminaban con tranquilidad.
Subieron los pisos e incluso notaron a más familiares más cercanos incluyendo a niños que eran completamente ajenos, pero por ser parte de la facción opuesta estaban tras las rejas.
Caminaron hasta llegar a la celda donde dos guardias estaban alerta.
—Cambio de turno— hablo Arthur.
—Menos mal, ya se me estaban entumeciendo las patas— comento uno de los guardias.
Ambos guardias se retiraron y los hermanos esperaron hasta que no hubiera nadie vigilando. Arthur usando equipo de Sally para desbloquear la cerradura de la puerta, hasta lograr que esta se abriera.
Entraron ambos y miraron a su padre después de mucho tiempo, este les miro con odio.
— ¿Vienen por otra ronda?— pregunto el lobo mayor con picardía y desprecio.
—Papa, me alegro verte con vida.
Laica se lanzó en un abrazo que dejo confundido al lobo, Arthur se retiró el casco dejando ver su rostro
—Arthur, ¿Realmente eres tú?
—Me da gusto verte de nuevo padre— respondió el joven lobo con una sonrisa.
El lobo mayor se acercó a su hijo, poso ambas garras en los hombros del joven y le sonrió.
—Mírate, todo un adulto.
—Sí, sí, bonita reunión, pero tenemos que salir de aquí ahora mismo—
Owen preocupado por que sean descubiertos.
El grupo rápidamente saca al lobo de la celda y moviéndose entre las sombras por el castillo, Nikolay recordó algo importante.
—Tengo que recuperar algo muy importante.
Los cuatro se movían entre los pasillos rápidamente y algún que otro guardia noqueado para que no saltaran las alarmas.
Nikolay ingreso al gran salón de los tesoros y en un pedestal se encontraba una espada, la empuñadura negra, la guarda era la de un lobo plateado donde sus dos ojos eran brillantes zafiros, la vaina del arama de piel negra con inscripción en runas antiguas, la tomo y los ojos del lobo de la arma resplandecieron aún más, desenvaino la arma y el filo de la hoja de un plata pulido que el mismo Nikolay se podía mirarse, guardo la espada y regreso con sus hijos.
—Esa es la Gran Jauría— comento Owen.
—Quien tome esta espada y esta la acepta como su portador, tiene derecho a gobernar estas tierras— hablo Nikolay.
Los cuatro salieron del castillo sin ser vistos y caminaron hasta llegar a la nave donde les esperaba el pequeño robot grifo.
—Buenas noches señor— saludo el grifo.
—Un pequeño y encantador robot.
—Él es Ram, es nuestro piloto— comento Laica.
—Abróchense los cinturones que el viaje está por comenzar.
Ram encendió los motores y el Endless comenzó a despegar, volando a la velocidad de la luz, hasta llegar a la Base Maestra.
Los hermanos le dieron un recorrido rápidamente por toda la base o hasta donde ellos tienen acceso, hasta llegar al Bar donde los tres conejos habían terminado su turno.
—Bien Arthur, termino nuestro turno— se despedía la coneja arlequín mientras le entregaba el mandil.
—Y aquí trabajamos a cambio de hospedaje y comida— comento el joven lobo.
Nikolay rápidamente se acostumbró a su nueva vida usando el mismo uniforme que su hijo Arthur, había colocado la espada que tomo de sus tierras en la pared a modo de exhibición, el lobo mayor este se encontraba atendiendo a Skull y Merry detrás de la barra, .
— ¿Desde cuándo hay tres lobos trabajando?— pregunto Skull.
—Con eso que recogemos a muchos refugiados, no me sorprende que no te des cuenta— le respondió Merry.
Nikolay sonreía para sí mismo mientras preparaba dos Martini para los clientes.
Mientras tanto en el Sacro Imperio Theirhiel, un lobo de pelaje blanco de la cabeza que cambiaba a un gris y luego negro se preparaba para su gran acenso al poder y de ejecutar a su hermano.
Este desayunaba tranquilamente cuando un guardia muy preocupado se le acercaba.
—Majestad, tengo noticias importantes.
El lobo guardia se mostraba muy preocupado.
—Dilas soldado.
—Bueno, su hermano el traidor de Nikolay se ha escapado y no hay rastro de su paradero.
El lobo dejo su taza de café, miro por un momento al guardia, en su mirada se podía ver la rabia, pero este sonrio, igualmente el que su hermano escapara no era motivo para molestarse en su gran día de acenso al poder.
—Bueno, solamente habrá que movilizar a los guardias para que busquen a mi hermano.
Sin inmutarse este, le da un bocado a su desayuno.
—La otra noticia es que la Gran Jauría ha desaparecido también.
El nuevo Zar tomo del cuello al soldado mensajero y lo lanzo por la ventana que estaba en las alturas.
— ¡NIKOLAY!— grito en furia y rabia ya que sin esa espada la toma de poder nunca se realizara y no se podría formalizar como el nuevo Zar del Sacro Imperio.
En la Base Maestra, Nikolay trabajaba como bartender atendiendo a los jóvenes preparando bebidas especiales sin alcohol, mientras Arthur y Laica atendían las mesas.
