Al final del día, lo que verdaderamente importa es que las personas que amas estén bien, que tú hayas dado lo mejor de ti y que estés agradecido por todo lo que tienes.

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Kage ni kakureta sono sugata misero!

Oh... soudou no derivation

Fureru karada akaku kirikazami

Kokoro wa doko da? Itami sagashite mo

Oh...shinzou ga hotobashiru dake

Hey! We live in Armour Zone!

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Kaze wo kire koe wo karashite

Kemono ga warau kono machi de

Kuu ka kuwareru ka no sadame

Oh yeah!

Hora kanashimi no aji wa nodomoto

Tsumadate nagara kieru Nasty

Ikiru tame ni nani wo kurau

All race! Uragire

How do we survive?!

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Dos días transcurrieron desde el genocidio de los Amazonz, producto del gas que la Farmacéutica Margarete creó para aliviar el problema de los insectos que había en la ciudad.

Se contaron por lo menos un poco más de 3 mil brazaletes los cuales representaban más de dos tercios de los Amazonz que había.

La familia Shibuya buscó desesperadamente a Kanon. Luego de la breve charla que tuvieron hace dos días, no supieron de ella, incluso Chisato se dedicó a buscar indicios que ella estuviera viva, pero no encontró nada.

- Esta es la última paga de todas – Minato decía reuniendo al grupo y dándoles un cheque a cada una.

- Supongo que es el final de todo.

- Al menos podemos decir que esto acabó.

- No tendré más money – susurró Natsumi con una nube negra sobre ella.

- Realmente estás enferma con el dinero, mejor búscate un trabajo ahora que estarás libre.

- A todo esto, ¿Qué ha sido de Shibuya, Arashi? – el peli azul preguntó a la peli blanca.

- Nada todavía, seguimos sin saber de ella.

- Yo creo que deberían aceptar que…

- ¡No lo digas! – todo el mundo quedó en silencio – yo sé que ella está viva.

Nadie dijo nada sobre eso y es que la peli blanca todavía mantenía la esperanza viva.

El EDA quedaba oficialmente desintegrado por lo que cada una tomó su camino para continuar con su vida.

Con las cosas de vuelta a la normalidad, las clases se reanudaron y notaron la ausencia de varias estudiantes, entre ellas Kanon, por lo que rápidamente se asumió que ellas eran Amazonz.

Las chicas del ahora ex escuadrón eran compañeras en la misma academia, por lo que no se alejarían mucho y se reunían a comer casi todos los días.

- Supongo que al final es todo. Los Amazonz han sido eliminados.

- No creo, escuché que todavía hay Amazonz sueltos por ahí, algunos sobrevivieron al gas.

- Supongo que fue porque Shibuya-san intervino – Ren decía.

- Ella ayuda a quien lo necesite.

- ¡Pero no de ese modo! Al final de todo, es un Amazonz.

- Sumire-chan… por favor…

El día continuó de forma normal, aunque cuando las clases terminaron, el grupo de chicas caminaba hacia sus casas justo cuando un carro familiar apareció delante de ellas.

- ¿Minato-san?

- Chicas, se han detectado señales de Amazonz – las féminas se alarmaron y sin pensarlo dos veces, se subieron la vehículo partiendo de ahí.

El carro todavía tenía sus ropas de batalla, pero decidieron no usarlas y solo tomaron sus armas y con eso, estaban listas para la batalla.

- ¿Dónde es?

- Nos tomará un rato, pero estamos llegando al puerto – unos momentos después, el grupo llegó justo a lugar mencionado por el peli azul.

Pero la sorpresa fue mayor cuando notaron como había no solo un Amazonz, sino varios y estaban peleando entre ellos.

- ¿Qué diablos? ¿Por qué hay muchos bichos en este lugar?

- Los que huyeron se vinieron a refugiar aquí.

- ¡Chisato-chan! – la voz de alguien familiar llamó a la peli blanca.

- ¿La familia de Kanon-chan? – los padres de la peli naranja y su hermana estaban presentes ahí, se miraban igual de confundidos.

- ¿Qué hacen aquí? Es peligroso.

- Una chica de cabello morado nos dijo que Kanon estaba por aquí, por eso vinimos.

- Debió ser Wien Margarete quién les avisó.

- ¿Por qué los llamaría aquí? – Kinako preguntó.

De repente, los Amazonz fueron destrozados por alguien y notaron que era justo Wien quien atravesó a estos dos bichos que terminaron pereciendo.

- Parece que todos están viendo esto – la peli morada decía mirando a todos los que estaban ahí parados.

- ¿Por qué nos llamaste aquí? – preguntó la madre de Kanon.

- Porque ella y yo nos vamos a batir en combate – señaló hacia donde estaba justo Kanon que recién aparecía.

- ¡Hija!

- ¡Kanon-chan!

- ¿Qué es lo que pasa aquí? – susurró Natsumi mirando como las dos Amazonz se miraban mutuamente.

- Shibuya Kanon… es hora de que resolvamos esto de una vez – Wien tomó un pedazo del cuerpo de uno de los Amazonz que mató y lo mordió para asco de varios presentes.

- Creo que voy a vomitar – Aria exclamó.

- Wien Margarete, no me detendré hasta que dejes a los Amazonz en paz – la peli naranja colocó una mano sobre su cinturón.

- Je, parece que te has decidido. Recuerdo cuando tenías ese problema existencial, alegando que no sabías que eras al final – la austriaca reía mientras seguía comiendo ese pedazo de Amazonz – y ahora veo que lo has descifrado.

- No aguanto – Natsumi, Aria y Keke vomitaron por eso que hacía la peli morada.

- ¡¿Qué tiene de malo que me coma lo que extermino?! – esta acabó de comerse eso. Kanon comenzó a reír de una forma que daba miedo, sus padres se sorprendieron, incluso su mejor amiga.

- ¿Q-Qué te ha pasado Kanon-chan?

- ¡ZENKI / GOUKI!

Las dos chicas se transformaron en sus formas Amazonz y sin perder tiempo se lanzaron a la pelea. Era una bestialidad de golpes que se daban, ninguna parecía que iba a retroceder.

- ¡Miren! – había más Amazonz presentes en su forma humana mirando todo desde una distancia algo lejana.

- Parece que son los sobrevivientes que quedaron de la masacre.

- ¡Shibuya-san! ¡Ánimo! – el amigo de la chica, Yuki, alentaba a la Amazonz naranja al igual que la mayoría de los insectos ahí presentes.

- Creo que fue los que salvó Kanon-chan durante la Operación Tláloc.

De vuelta con la pelea, Kanon y Wien seguían en igualdad de condiciones, pero en un momento, Gouki Amazonz le dio una patada en el pie a la peli naranja y como golpe extra, le arañó el pecho haciendo que sangrara.

- Y ahora… siguen esos Amazonz – la europea dirigió su atención hacia los Amazonz que estaban lejos.

- ¡N-No los atacarás! – Kanon se aferró con fuerza a la pierna de Wien, pero con una patada en la cara la dejó ir.

- ¡Morirán! – iniciaría la masacre según la peli morada, aunque en el camino acabó con dos monstruos, pero alguien la pudo detener por un momento agarrándola de debajo de las axilas.

- ¡H-Huyan rápido! ¡Tienen que abordar el barco! – Yuki, transformado en ese tigre monstruoso, intentaba detener a la austriaca. A pesar de que Wien era más fuerte, al menos quería ganar tiempo.

- Parece que una rata quiere alargar un poco su muerte.

- No te soltaré… no importa que pase… ¡Shibuya me salvó, ahora yo haré lo mismo por ella!

- ¡Estorbas! – Wien se logró quitar al chico lanzándolo por los aires, pero cuando estaba por ser atravesado, Ren llegó y empujó a la Amazonz evitando que hiciera esa muerte.

- ¡Chicas! – el resto del grupo llegó a dispararle todo lo que tenían a Wien.

Aunque no eran tan potentes para su cuerpo, notó que ahora le hacían algo de daño, posiblemente porque la munición era mayor o de mejor calidad.

- ¿Con eso me ganarán? Patéticos.

- ¡Con esto sí! – Sumire apareció detrás dándole con su arma eléctrica la cual no fue tan efectiva como la primera vez que la usó contra ella, pero si le hizo algo de efecto ya que no pudo moverse mucho.

Eso fue aprovechado por las demás que le dispararon hasta que sus armas quedaron si nada, y para rematar las cosas, Kanon dio un gran salto hacia donde estaba la chica.

Un zarpazo en su pecho fue como un acto de venganza por el mismo golpe que le dio a la peli naranja momentos antes. La sangre comenzó a caer de la herida que le dio Kanon y eso la enojó mucho.

- Esto me dolió… ¡y no voy a permitir tal humillación! – de nuevo se enfrascaron en una pelea y ahora el EDA no podía intervenir debido a que no tenían municiones.

La familia Shibuya estaba que le daba algo notando como su hija se jugaba la vida contra esta enemiga la cual no moriría como ella.

Los demás Amazonz seguían viendo la batalla, pero Yuki fue hacia ellos, indicándoles que se alejaran y fueran al barco, que todo estaría bien, pero ellos, fieles, no se movieron.

Y en un determinado momento, las dos estaban a una cierta distancia y se sabía que eso sería el golpe decisivo.

Las dos corrieron rápidamente hacia la otra y usando todo el poder en sus garras y justo, ambas se dieron en un fuerte garrazo en sus cuellos haciéndolos sangrar de forma masiva.

- ¡Kanon / -chan!

Ambas retrocedieron unos pasos antes de caer al suelo perdiendo sus transformaciones y se les notaba muy cansadas y con múltiples heridas en sus cuerpos.

- Supongo que… mi cacería acaba por ahora – Wien decía tratando de levantarse a duras penas, pero sus heridas le hacían difícil hacer eso.

- Y yo no dejaré… que tú lo hagas – Kanon susurraba y al igual que Wien, estaba herida de muy mala manera.

- Tsk… realmente eres una Amazonz poderosa, pero te dejaré libre por ahora – la chica se sentó, pero se apoyó como pudo con sus manos – pero un día, te juro que acabaré con todos los Amazonz… incluyéndote a ti.

- Eso lo veremos – en ese momento, apareció Theo en su moto y fue hacia donde estaba Wien.

El chico la subió en su moto y sin más, el peli gris le dio una hamburguesa a la peli naranja que se sorprendió por el acto.

- Fue un gusto conocerte Shibuya-san. No te preocupes por Wien, me la llevaré a Austria para que podamos vivir en paz – Kanon asintió.

- Muchas gracias.

- Nos vemos – el chico partió en su vehículo con la peli morada con él y se perdieron en el horizonte.

- Shibuya-san – Yuki llegó con la peli naranja ayudándola a ponerse de pie y se apoyaba en él – ya es hora de que el barco zarpe.

- Sí… lo siento.

- ¡Kanon-chan!

- ¡Shibuya-san!

- ¡Hija!

- ¡Hermana! – la peli naranja se detuvo un momento y volteó a ver a todos los presentes.

- ¿A dónde vas Kanon-chan? – preguntó la albina.

- Me iré con los demás Amazonz… nos vamos lejos de aquí ya que no somos parte de la sociedad.

- ¡Kanon, ¿Cómo que te vas?! – su padre reclamó, su madre estaba llorando al igual que Aria.

- ¿Por qué quieren que me quede? Solo soy un monstruo que en cualquier momento podría ser peligroso para ustedes. Ya no soy la hija que ustedes criaron por 15 años, solo soy una bestia que emana peligro – su familia estaba en shock – además, tampoco me quedaré en un escuadrón y con personas que me consideren una bestia monstruosa y un peligro para sus vidas. Pensé que podría encajar con el tiempo, pero no fue así, como dijo Heanna-san, solo soy un Amazonz.

- K-Kanon-chan… ¿tú escuchaste lo que dije? – la familia de Kanon miró con horror a Chisato.

- Pensé que mi mejor amiga me apoyaría, pero veo que ella al igual que todos pensaban en mí, ya no como humana, sino como un Amazonz – esta tomó un respiro – y ya no soy Shibuya Kanon. Esa chica murió hace meses cuando fue atacada por aquel Amazonz. Mi nombre es Zenki, la demonio naranja.

- ¡Lo siento! – Chisato se arrodilló poniendo su frente contra el suelo – ¡lo siento tanto! ¡Por favor escúchame! ¡No fue lo que…!

- ¡Kanon, no puedes irte así como sí! – el fuerte sonido del barco indicó que se tenían que ir.

- Es hora de que zarpemos.

- ¡Kanon-chan, por favor perdóname! ¡No te vayas! ¡Por favor! – la peli naranja miró por última vez a todos, algunas lágrimas quisieron correr por sus ojos, pero se aguantó lo mejor que pudo y con ayuda de Yuki, se fueron hacia el barco junto con los demás Amazonz.

Aunque los padres de Kanon quisieron intervenir, algunos Amazonz evitaron su acercamiento y para peor cosa, el EDA no contenía municiones por lo que estaban desarmados contra ellos.

El navío zarpó de tierras niponas con todos los sobrevivientes en él. Incluso el capitán era un Amazonz y todos estaban yendo a donde decían que sería un nuevo comienzo.

- ¿No te arrepientes de esto? – preguntó el rubio a la peli naranja quien solo negó con la cabeza.

- Solo soy una Amazonz ahora… este comienzo en el Amazonas, de donde es el virus, será algo novedoso.

- Creo que sí – el barco continuó su rumbo a tierras brasileñas en donde les aguardaba su nuevo hogar.

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POV de Chisato

Han pasado 6 meses desde que la Operación Tláloc finalizó y bueno, los Amazonz restantes desaparecieron por lo que todo el mundo estaba en paz.

Perdí muchas cosas debido a todo el incidente.

Luego de que Kanon-chan se fuera, su familia me culpó por todo el incidente. Ella me escuchó hablando con las demás y creo que eso fue lo que le dio la idea de que no la queríamos.

Mi familia me defendió y bueno, eso llevó a ambas familias dejaran de llevarse.

Sí, la amistad que había se rompió por la ida de Kanon-chan. Ahora toda mi familia y yo estamos vetados de la cafetería Shibuya y de los demás negocios cercanos.

Realmente me duele mucho y no hay noche que no llore lamentando como fue que destruí la vida de Kanon-chan y ahora, me he ganado enemigos por eso.

La extraño mucho.

Mi mejor amiga se ha ido y posiblemente nunca la vea de nuevo.

Además, supe que el barco en el que zarparon fue al Amazonas en América. No sé qué es de ella o qué pasa y realmente quisiera saber, pero no sé cómo hacerlo.

Y no solo eso, escuché de Minato-san que Wien Margarete estaba esperando un hijo junto con Muller-san. No sé qué decir sobre eso, pero cada quien con su vida.

Lo único que me lamento es que no esté Kanon-han con nosotros.

Deseo que mi mejor amiga regrese conmigo.

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Jungla del Amazonas, Brasil.

En un pequeño pueblo, varios de los sobrevivientes Amazonz hicieron en poco tiempo una civilización en donde podían ser ellos y nadie los limitaría, aunque tenían la norma de que no comerían humanos por ningún motivo.

- ¡Cacé algo! – Yuki exclamó llevando varios peces a la pequeña casa que había hecho junto con la que era ahora su mujer.

- Bienvenido de vuelta – Kanon exclamó sonriendo. Los dos chicos ya no llevaban su ropa con la que se fueron, todos los Amazonz llevaban una especie de taparrabos y ropa hecha con productos de la selva.

- Podremos comer bien esta vez.

- Lo sé – la chica río un poco. El rubio miró hacia donde estaba el cinturón de transformación y la moto de su pareja – Zenki-chan, ¿no extrañas Japón?

- Extraño Japón… pero es mejor para nosotros no estar en contacto con las personas que nos ven como monstruos a pesar de que batallé para ayudarlos – la peli naranja suspiró un poco – pero si necesitan ayuda para una emergencia gigante o de vida o muerte, supongo que podré ir a ayudarles.

- Tienes un buen corazón – los dos se abrazaron y es que la pareja junto con los demás Amazonz seguían sus vidas en un nuevo lugar.

Aunque tal y como Kanon dijo, si Japón la llegara a necesitar, no dudaría en ir a ayudar.

Después de todo, ella seguirá siendo Kamen Rider Zenki.

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Kaze wo kire koe wo karashite

Kemono ga warau kono machi de

Kuu ka kuwareru ka no sadame

Oh yeah!

Hora kanashimi no aji wa nodomoto

Tsumadate nagara kieru Nasty

Ikiru tame ni nani wo kurau

All race! Uragire

How do we survive?!

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FIN.