E1

DISCLAIMER: One Piece es creación exclusiva de Oda, yo solo utilizo su mundo y personajes para proponer un escenario ficticio para entretener.

La historia está ubicada luego de Wano y mucho antes de los acontecimientos de Egghead.


Era como cualquier día a bordo del Sunny, Luffy se encontraba durmiendo en su sitio favorito, para disfrutar de la suave brisa y el vaivén del barco que, de manera inusual, se mecía con tranquilidad. Usopp y Chopper habían decidido pescar en uno de los costado de la cubierta, Robin se encontraba junto a Franky en el timón, ambos conversaban de manera amena y juguetona, Sanji estaba subiendo las escaleras para ir a preparar unas bebidas en la cocina ya que debido al sol actual, todos se encontraban sedientos y a la espera de beber algo frío. Zoro estaba dormido en la cubierta junto a Brook, quién practicaba una tranquila melodía en su violín, a su vez tarareaba una suave melodía que claramente ayudaba al adormilado Zoro para caer en sueño profundo. Jinbe era el único que no se encontraba en la cubierta, esté como muchas otras veces se encontraba frente al acuario meditando. Nami por otro lado, se hallaba en un costado de la cubierta, opuesta a Usopp y Chopper, observando el horizonte.

Últimamente el mar se encontraba tranquilo al igual que el clima, la última isla que habían visitado estaba cubierta de nieve (para bendición de Chopper) y al momento de salir de ella, luego de robar un par de cosas y destruir otro par, se encontraron con una corriente tranquila que, sin duda alguna, le dio un respiro a todos.

Luego de la pelea contra Kaido y Big Mom creían que todo iría como siempre, pero luego de que Luffy, Eustas Kidd y Trafalgar Law decidieron a qué islas seguir cada uno todo se volvió un caos. Luffy insistía en parar en cada isla con la que se encontraban, lo cual no era del todo malo ya que el log pose terminaba de cargar el campo magnético de la isla que aquel capitán señalaba al mismo tiempo que su entusiasmo crecía y de igual manera, terminaba ocasionando más de un problema, además de quejarse de que su "alianza" con Trafalgar no había terminado, por lo que varias veces se encontraba llamándolo a través del den den mushi para saber sobre su paradero, claramente no tuvo mucho efecto y el capitán de los piratas Heart nunca contestó.

Nami suspiró, apoyando sus brazos en la barandilla del barco, las olas mecían suavemente al Sunny, por lo que gracias a esto y a la melodía de Brook, se sentía adormilada y extrañamente tranquila.

— Nami-san.— Jinbe apareció a su lado derecho. Se le veía tranquilo.— ¿Alguna novedad sobre la próxima isla?

— Aún nada, el log pose sigue girando en todas direcciones, quizá nos encontramos aún lejos de la próxima isla.— Volvió a enderezarse para ver a Jinbe de frente, se sentía cada vez más pequeña en la tripulación y si no fuera por Chopper y Usopp, sería sin duda la más baja del grupo.

— Bueno, tendremos unos cuantos días más de tranquilidad.— Jinbe sonrió y juntó sus brazos en su barriga. Daba la sensación de ser un gran sabio.— Esperemos no encontrar otra isla donde Luffy-san ponga su atención.— Nami se rió un poco mientras veía la cabeza de Sunny, era extraño ver a Luffy tan tranquilo, quizá eso era lo que les permitía permanecer a todos tan tranquilos hoy.

De pronto, y como si de un chiste se tratase, el Sunny comenzó a mecerse extrañamente, la navegante observó curiosa y algo preocupada el mar, se veía una gran sombra acercarse al barco a gran velocidad desde las profundidades, eso la asustó, no tenía muchas ganas de volver a encontrarse con un rey marino o peor aún, algún enemigo que desate la guerra contra su tripulación. De pronto Luffy, Zoro y Sanji se posicionaron tras la pelinaranja, expectantes y curiosos ante lo que podría avecinarse.

— ¡Espero que sea un gran pez!— Exclamó Luffy con los ojos brillosos y mucha saliva saliendo de su boca, algo muy típico del chico de goma.

— Si es un rey del mar podremos cenar pez hoy.— Dijo Sanji mientras encendía un cigarrillo.— Al menos así les daré un festín a Nami-swan y Robin-chwan.

Una pequeña gotita de sudor rodó por la mejilla de la navegante ante lo dicho por Sanji, decidió apartarse de la orilla cuando pudo ver que grandes burbujas salían de la sombra y el agua a su alrededor se volvía turbulenta, inmediatamente el trío junto a Jinbe se acercaron aún más. Luffy sonrió ampliamente al ver aquello que terminaba de ascender a la superficie y quedaba al descubierto al fin junto al barco.

— ¡Torao~!— Gritó el capitán alzando sus manos, Nami se acercó ahora más segura y tranquila de que nada raro ni nadie extraño abordaría el barco para armar el caos.

Nadie se encontraba aún en la cubierta del submarino por lo que le dio tiempo a toda la tripulación del sombrero de paja para reunirse sonrientes, viendo hacia la compuerta a la espera de sus aliados.

— Algo anda mal.— Susurró Robin a un costado de la barandilla. Nami la miró extrañada para luego fijar su vista en la puerta que se abría con un gran estruendo en el submarino.

Bepo salía a toda prisa, respirando agitado y con varias manchas de sangre tanto en su traje como su pelaje, el rostro de Luffy cambió drásticamente, lo observaron estirar sus brazos hasta la escotilla y lanzarse hacia el lugar. Bepo lo vio algo asustado en principio para luego abrazarlo mientras lloraba.

— Algo terrible debe haberles pasado.— Mencionó Usopp mientras veía preocupado la escena.

— Chopper, creo que Luffy te necesita.— Zoro señaló al azabache quién se preparaba para volver a estirar uno de sus brazos. Chopper aguantó la respiración en el momento en que sintió que Luffy lo jalaba hacia el submarino.

Bepo saludó a Chopper rápidamente antes de alzar sus brazos mientras, a ojos de toda la tripulación, trataba de explicar la situación.

— ¡Robin y Nami!— Llamó Chopper, ambas se asomaron con la intención de prestarle más atención.— Necesito que traigan mis cosas, ¡rápido!

— ¡En seguida!— Se apresuraron con Robin a la enfermería por los utensilios de su amigo. Al momento de volver a la cubierta Zoro tomó a Robin en sus brazos para saltar hacia el submarino mientras Sanji tomaba gentilmente a Nami para hacer lo mismo mientras, y como siempre hacía, regañaba al peliverde por la rudeza con la que había tomado a la arqueóloga.

— Nosotros cuidaremos del Sunny, vayan con calma.— Jinbe, Brook, Franky y Usopp agitaron sus manos como saludo.

Luffy les asintió con la cabeza antes de ingresar a toda prisa en el submarino aliado junto al resto. Bepo los guiaba a través de los pasillos semi iluminados, Nami se encontraba bastante sorprendida, lo amplio que era el interior del que lucía como un pequeño submarino amarillo era algo que jamás hubiese imaginado.

— Chopper-san, el capitán se encuentra en la sala de operaciones, necesita su ayuda urgentemente.— Bepo se veía realmente preocupado, Chopper solo asintió colocándose junto a él.— Capitán Mugiwara, Zoro-san y Sanji-san, les pido por favor si pueden ayudar al resto de la tripulación con la filtración de agua.

— ¡No hay problema!— Exclamó Luffy, Penguin apareció por uno de los pasillos y les hizo una seña a los tres chicos para que lo siguieran, mientras que la pelinaranja y la azabache se quedaban junto a los otros dos, se dieron un rápido saludo, se le veía mal herido pero no tanto como Bepo. Todos asintieron como despedida momentánea mientras tomaban caminos por separado. Robin y Nami seguían de cerca a Bepo y Chopper.

— Bepo-san, ¿qué es lo que ha sucedido aquí?— Preguntó Robin con un tono suave. Bepo se crispó y apretó sus manos a los costados mientras giraba su rostro un poco para verlos sin dejar de caminar.

— Fuimos atacados cerca de una isla al suroeste de aquí, no sabemos quién fue pero no tuvimos oportunidad ni de ascender a la superficie del todo.— Chopper miró preocupado al oso polar, se le veía más deprimido de la usual.— El capitán se enfrentó solo en tierra contra ellos, no nos permitió salir y...— Se cortó justo cuando llegaron de frente a una puerta de metal grande, sobre ella una fuerte luz roja parpadeando y un pequeño pitido los recibió.— Por favor... ayuden al capitán...

El susurro de Bepo se sintió como un lamento al momento de empujar la puerta, la sala frente a ellos se encontraba manchada de sangre, el suelo tenía grandes charcos y vendas tiradas al azar. Justo en medio una gran camilla de metal se encontraba totalmente iluminada, Trafalgar Law yacía sobre ella medio consciente ya que se retorcía de un lado a otro.

Su condición era grave, Chopper se abalanzó enseguida mientras que Nami y Robin comenzaban a desempacar sus herramientas de cirugía.

— Torao-kun, te ayudaremos.— Chopper se veía muy concentrado mientras revisaba cada parte del cuerpo del cirujano de la muerte. Bepo a un costado preguntaba al reno en qué podía ayudar.

Chopper comenzó a dar órdenes que acatamos sin chistar, rápidamente ambas chicas ayudaron a Bepo a quitarle su característica sudadera al pelinegro mientras Chopper comenzaba a limpiar sus heridas.

— Tiene varias fracturas y una gran herida en su estómago, primero trataremos la herida para evitar cualquier riesgo mortal.— Nami asintió viendo ahora la herida mencionada por Chopper, era muy grande, brotaban grandes cantidades de sangre de ahí. El reno le indicó hacer presión en la herida mientras buscaba las gasas y los implementos necesarios para limpiar y suturar la misma.

Apretó con fuerza la herida sintiendo como Trafalgar se quejaba con un gran grito, no podía imaginar el dolor que debía estar sintiendo, rápidamente Chopper le indicó a Robin como administrar anestesia a Law lo antes posible. Luego de ver como el pelinegro dejaba de quejarse gracias al sedante, Chopper prosiguió con las curaciones y con fervor terminó de coser la herida de Trafalgar.

Al pasar un par de horas el pequeño médico logró estabilizar a Trafalgar, tuvo que entablillar y vendar algunos de sus dedos debido a las fracturas, además de colocarle un cabestrillo en su brazo izquierdo, sin mencionar la sutura de la perforación que tenía cerca del estómago, pero para alivio de Bepo ya estaba fuera de riesgo.

— Esto será suficiente por ahora.— Chopper secó su frente y miró a Bepo satisfecho.— Tendrán que anclar junto a nosotros durante un tiempo para poder revisar sus heridas, al menos hasta que recobre bien su consciencia o el Log Pose encuentre una isla cercana donde podamos seguir monitoreando su estado.

— Gracias... de verdad muchas gracias.— Bepo lloraba desconsolado, Robin le sonrió levemente para luego ayudar a Chopper a ordenar sus cosas, este último le sonrió ampliamente al oso mientras le daba un par de palmaditas en el hombro.

— Bepo-kun, déjame curar tus heridas.— Nami se acercó a Bepo con un par de vendas y agua, también estaba herido, suponía que fue en el momento en que Law terminó así, probablemente tuvo que rescatarlo o llevarlo hacia su nave para resguardarlo.

— Iremos con los demás Nami.— Chopper y Robin se despidieron de Bepo, ella solo asintió con la cabeza despidiéndome de ellos con una sonrisa.

— Gracias, navegante-san.— El gran oso se sentó en el suelo junto a su capitán esperando a que lo curara. Se le veía aliviado y menos tenso.— Ya me habías curado antes.

La mención de esto último sorprendió un poco a la navegante, le sonrió ampliamente mientras limpiaba sus brazos con el agua y las gasas que tenía.

— Lo recuerdo, fue aquella vez en Zou.— Nami recordaba cómo había curado a la tripulación de los Piratas Heart y cuán agradecidos estaban.

— No pudimos agradecerle aquella vez como realmente correspondía.— Bepo se rascó la cabeza algo avergonzado.

— No era necesario, tampoco es como si fuera Chopper, solo les realicé primeros auxilios.

— Aún así nos ayudó, muchas gracias… —Volvió a sonreírle mientras terminaba de colocar la última venda alrededor de su peludo brazo derecho.— También ahora, muchas gracias.

— No hay de qué, para eso son las alianzas.

Bepo sonrió un poco antes de volver a levantarse, miró a su capitán y soltó un suspiró.

— Bepo-kun, si no es muy atrevido de mi parte... ¿podrías terminar de contarme lo que sucedió? —Lo miró expectante, se le veía bastante triste mientras observaba a su capitán recostado en aquella camilla, acarició sutilmente su brazo intentando demostrarle que su tripulación ya no tenía que preocuparse, que ellos estaban ahí para ayudarles.— Puedes contar con nosotros.

— Lo sé, navegante-san.— Bepo se giró hacía ella.— Somos aliados después de todo.

Nami asintió sin perder su sonrisa para hacerlo sentir seguro, debo decir que si bien en parte su curiosidad era la principal razón para escuchar la historia, también estaba algo preocupada, ¿qué harían si aquellos que habían dejado tan mal a Trafalgar Law, el mismísimo Cirujano de la muerte, los encontraban? Luffy aún no terminaba de sanar sus heridas, al igual que el resto. No estaban listos para recibir otro ataque tan fuerte o incluso más que Kaido.

— Como les estaba diciendo antes… —Bepo la sacó de sus pensamientos, sacudió un poco su cabeza para despejarse y así prestarle total atención al navegante.— No pudimos terminar de ascender cuando fuimos atacados, la coraza del submarino fue comprometida por lo que el agua comenzó a filtrarse al interior aumentando así la presión en el interior, nuestro capitán dijo que saldría para ver qué era lo que había sucedido y utilizó su akuma no mi para llegar a la orilla de la isla.— Bepo hizo una pausa para volver a mirar Law con ojos llorosos.— Lo último que pudimos hacer con Penguin y Shachi fue tratar de ascender el submarino para recolectar información y repararlo lo antes posible, pero al abrir la compuerta solo pudimos ver a nuestro capitán luchando contra alguien, no pudimos ver su rostro pero había herido gravemente al capitán.— Bepo volvió su cabeza hacia la chica, pequeñas lágrimas salían de sus ojos.— Pensé lo peor y terminé usando una de las medicinas que Chopper-san me había dado para transformarme, corrí hacía el capitán y como pude lo traje de vuelta al submarino... Sin orientación alguna, ya que nuestro log pose estaba fijado hacia aquella isla, intentamos controlar la filtración y navegar en el mar.

Por la cabeza de Nami pasaba la imagen de un Bepo fuera de sí tratando de cuidar de la nave y a su vez, de su capitán malherido. La sensación de temor, enojo y por sobretodo impotencia que debió sentir la banda de piratas debe haber sido mucho peor de lo que podría llegar a pensar.

— Cuando ya nos fue imposible seguir bajo el agua recordé la vivre card de Mugiwara-san que el capitán guardaba, así fue cómo los encontramos.— Otra lágrima se deslizó por el pelaje del oso mientras apoyaba su cabeza en la camilla de Law.

— Me alegra que nos hayan podido encontrar.— Acarició su brazo y le sonrió levemente.— Y también me alegra que hayamos podido ser de ayuda.

Bepo se frotó los ojos asintiendo, se le veía ahora mucho mejor, el brillo de sus ojos había vuelto y se le notaba con su humor más usual.

—No quiero dejarlo aquí solo, pero debo ir a ver cómo van con la fisura en el casco, ¿podría quedarse unos minutos, navegante-san?—Al ver la cara de Bepo no pudo negarse, el oso se veía tan lindo con sus ojos brillosos, quería abrazarlo para reconfortarlo luego de lo que había tenido que pasar.

—No hay problema, ve, dile a Luffy que estaré aquí mientras ustedes terminan de solucionar aquello.

La chica vio como el oso salía de la sala cerrando la puerta tras de sí. Miró a Trafalgar en la camilla, se le veía aún adolorido por las muecas que hacía de vez en cuando, aún estando anestesiado. Tomé una silla que había en el lugar para sentarme junto a él mientras esperaba que el resto estuviera bien. Seguramente Chopper se encontraba prestando primeros auxilios a todos aquellos que se encuentren en mal estado, Sanji y Zoro deben estar compitiendo por quién repara más rápido el casco del submarino, probablemente estén destrozando más cosas que ayudando a reparar, Franky sería más de ayuda en este tipo de cosas y claro que Robin debe estar ayudando a Penguin y Shachi con tareas más complejas.

Volvió a sentirse algo adormilada, la paz que había sido interrumpida por los piratas Heart había vuelto, a diferencia del Sunny, la sensación que se hallaba en el submarino era diferente, pese a la peculiar situación de peligro que habían vivido hace poco y a tener frente a ella a uno de los capitanes que había derrotado a la Yonkou Big Mom, se sentía extrañamente tranquila, otra vez.

Apoyó sus brazos junto al cuerpo de Trafalgar en la camilla para luego posar su cabeza sobre estos, probablemente la reparación del casco tomará bastante tiempo ya que apenas habían logrado salir a la superficie sin que la presión acabara con ellos. Puede que tomar una pequeña siesta en esta pacífica nave no sea tan mala idea.

Lentamente Nami sintió como el sueño le ganaba, lo último que vio fue uno de los tatuajes en la mano de Trafalgar Law antes de caer totalmente dormida.


Esta es mi primera historia, agradezco cualquier comentario al respecto y espero poder actualizar seguido la historia!