Capitulo 34 – Una nueva vida en camino

Parece que la vida no le parecía suficiente con tener que soportar a una pareja empalagosa, sino que decidió mandarme otra; al menos agradezco que Bruce y Natasha fueran más discretos, o ya tendría una manguera en la mano para bajarles la calentura. Fue gracias a ellas que ahora pasaba más tiempo en el taller preparando un nuevo artefacto; un día en especial, decidí tomar un pequeño descanso, así que fui a la cocina para prepararme algo pero en ese momento escuche un fuerte sonido. Rápidamente regrese y me encontré con Thor tirada en el suelo mientras sujetaba su cabeza -¿Qué sucedió?-

-M-Me tropecé con un poco de aceite, p-pero estoy bien-

Me acerque a él y tome la mano que tenia sobre su cabeza –Estas sangrando, ven, voy a curarte-

-Pero…-

-Anda, vamos-. Lo ayude a sentarse en una silla y tome el botiquín para comenzar a curar su cabeza, lógicamente trato de moverse por el ardor del alcohol, pero logre controlarlo hasta que vende su cabeza –Listo, trata de ser más cuidadoso o tendré que cambiar tu nombre a Thor-pe-

-Me quedaría bien- dijo mientras se reía un poco. Últimamente me sentía extraño al estar con él, su risa, la forma de cómo era… Era diferente a estar con Fandral, Bruce o cualquier otro de los hombres. Quizás todo era cosa de mi imaginación

*POV's Tony*

¿Qué cualidades podría mencionar sobre Steve? Es atento, cariñoso, romántico, y… Un jodido Dios en la cama. No tenia absolutamente ninguna queja, bueno, solo una; he tenido mareos, cada mañana lo primero que hacía era correr al baño y devolver todo lo que cene la noche anterior, lo que realmente me preocupaba es que ya ni siquiera quería comer mis amadas donas y mi preciado café

Pensé que quizás era un malestar estomacal, pero con el pasar de los días, sabía que no era normal, así que a pesar de que la idea me desagradara fui al médico. Tuvo que sacarme una muestra de sangre, eso me hizo esperar alrededor de una hora para saber los resultados -¿Y bien? ¿Qué es lo que tengo, doctor?-

-Bueno, me gustaría hacer un ultrasonido para estar seguro, ¿Podría…?- dijo mientras señalaba la camilla, la cual se encontraba a un lado de esa extraña maquina. Me recosté y destape mi estomago, no pude evitar estremecerme un poco al sentir el gel. Comenzó a pasar el transductor por mi estomago, en la pantalla solo se podía ver una pequeña mancha blanca en medio de otra de color negro –Tal y como lo pensé-

-¿Qué? ¿Qué tengo?-. Ahora si estaba comenzando a ponerme nervioso, el solo sonrió un poco y apunto hacia la pantalla

-¿Ves esta mancha blanca? Pues… Es tu bebe-

-¿Q-Que?-

-Está embarazado, tienes aproximadamente un mes de gestación-. No pude decir ni una sola palabra, solamente mire hacia la pantalla. Ahí estaba, un bebe mío y de Steve, algo que nos uniría para siempre; por un momento pensé en un sinfín de posibilidades sobre cómo podría reaccionar: Una inmensa felicidad, inseguridad, enojo, el peor de los casos, huiría dejándome solo con el bebe. Por mi mente se cruzo la idea de no tenerlo y evitarle una molestia, pero algo en mi interior me dio una bofetada… En ese momento lo supe, supe que tendría un cachorro; y si Steve no me apoyaba, yo sacaría solo a mi bebe

-¿Tendré que tomar algo, doctor?-

-Te recomendare algunas vitaminas y acido fólico, si antes solía hacer ejercicio, te recomiendo que lo dejes al principio los primeros meses y evita hacer movimientos rudos. Nada de alcohol, tabaco, algún tipo de drogas y cafeína-

-Lo golpearía porque me quito uno de mis mayores tesoros, pero tengo una duda, ¿Qué hay del sexo? Porque mi pareja es estupendo en la cama y me dolería dejarlo en abstinencia-

-Olvida cualquier práctica ruda, será sexo vainilla-

-Entendido y anotado- dije antes de limpiar mi estomago y levantarme de la camilla. Tome la receta y salí del hospital, durante el camino a casa, me dio un enorme antojo por un banana Split; era como si la noticia hubiese activado los antojos de golpe. Entre a una heladería y compre la más grande, para tener más paz, decidí comerlo en un parque. Allí había un gran grupo de niños jugando mientras eran vigilados por sus madres, verlos hizo imaginarme a un pequeño que sería idéntico a mi pero con los ojos de Steve; o quizás una niña rubia con ojos cafés

Cualquiera de las 2 posibilidades hacia que la emoción de saber que tendría un bebe aumentaran. Quizás estuve una hora o más en ese lugar, pero cuando por fin me termine el helado, me fui a la casa. Para mi buena suerte, solo me encontré con Loki en la cocina –Y el doctor dijo…-

-Prepárate para tener ojeras, porque en unos cuantos meses habrá aquí un manojo de felicidad corriendo por estos pasillos-

-¿Q-Que?-

-Serás el tío Loki-

-¡Oh por Dios, Tony! ¡¿Acaso no conoces los anticonceptivos?!-. Aun si eso sonaba como un regaño, Loki no pudo evitar soltar la taza de té y correr hacia mí para abrazarme -¿Steve lo sabe?-

-Apenas me entere, tú te quedaras callado y yo se lo diré cuando sea el momento-

-Más te vale que eso no tome mucho tiempo o yo mismo se lo diré-

-¿Decirme que cosa?-. Y ahí estaba el, cargando las bolsas de las compras junto a Thor. Le di una última mirada a Loki antes de dirigirme hasta él y darle un pico –Nada, mi cielo, necesito que vengas conmigo-

*Fin POV's Tony*

-Loki, necesito hablar contigo… A solas- dijo Thor apenas guardo las compras. Cuando lo vi, pude notar que estaba bastante nervioso

-Claro-. Lo seguí hasta el taller, cuando entramos, permaneció en silencio por varios minutos -¿Thor?-

-Loki… El día que te conocí, yo supe que cambiarias mi vida, no tenía la mas mínima idea de cómo sucedería. Al empezar todo eso, te admiraba por tu inteligencia, tu forma de ver la vida, por tu amabilidad con la que nos acogiste a todos nosotros. Pero… Ahora ya no te veo de esa forma. L-Lo que quiero decir es que… Estoy enamorado de ti-