Grandes hazañas:

Escape de la Prisión de Máxima Seguridad, Chorh-Gom.

Divididas fueron las reacciones de los incontables espectadores, quienes un momento antes, se encontraban sumidos en el desasosiego. Para este punto, en su mayoría, han recuperado parte de la tranquilidad arrebatada durante la previa conmoción, sintiéndose un poco más seguros, sin embargo, la desconfianza no les abandonó. ¿La razón? Temían de las pantallas, de lo que podrían significar, el qué posiblemente sean, de quién posiblemente las creó (en el caso que sea correcto el referirse al presunto creador como un quién y no como qué). Las emociones de los incontables individuos, estaban a flor de piel con tales interrogantes: Inseguridad, miedo, ansiedad, expectación e incertidumbre, hallándose también esperanza (Fe) y devoción, esto por el lado de los fieles creyentes y seguidores de las religiones establecidas en los infinitos mundos, quienes, creían con fervor, que las pantallas era una manifestación de su Dios o, al menos, un emisario para hacer conocer su palabra. Era el caso de muchos mundos, quienes tenían esta expectativa, al igual que este, existen otros mundos que, también tienen sus propias expectativas que yacen más orientadas al presente, específicamente hacía lo que verían en pantalla, a continuación. Considerando el hecho que, si un ser superior que se sobrepone sobre todos los seres de la existencia, por definición, un Dios, como muchos empezaron a catalogar al emisor del comunicado; anunciaba que serían testigos de los hechos más Sorprendentes, no lo dudaron.

Sin embargo, terminaron en su gran mayoría decepcionados, al cabo del comunicado del título y el subtítulo materializado en pantalla, y no era para menos, pues en cada multiverso y universo, sus respectivos habitantes habían coincidido en algo, siendo, las enormes expectativas depositadas en el título pretencioso que, al final, resultó decepcionante.

Todos ciertamente esperaban ser testigos de un hecho o eventos de lo más interesantes que sobrepasara sus propias expectativas, y no una simple fuga de prisión de un convicto desconocido cualquiera que, en opinión personal, pero que en su gran mayoría compartían, no valía su tiempo. Todos estos preconceptos con relación al subtítulo mostrado, trajo como consecuencia situacional de la causa anterior, el ensombrecimiento del juicio colectivo que, por efecto, ocasionó que algunos detalles evidentes, por ende, relevantes fueran ignorados de forma inconsciente por los espectadores, o, al menos, por la gran mayoría que sólo veía el título y no más allá.

Mientras el colectivo brama con cierta molestia y decepción, olvidando el temor que tenían hace no mucho; una minoría de individuos con un grado superior de comprensión e intelecto, guardó silencio, no olvidando ni por un instante quién o qué compartía con ellos la información, deduciendo con este único detalle sustancial que, si una fuga de prisión tenía un lugar dentro de los puestos de una lista con tal título, debería poseer alguna característica especial que le valiera el lugar.

[Multiverso animado: Universo: Kung Fu Panda]

Bajo la fresca sombra del árbol de duraznos de la sabiduría celestial, Shifu, en compañía del maestro, Oogway; estaba sufriendo un profundo ataque de pánico, provocado por la implicación del subtítulo del video que estaba a punto de ser testigo, al tiempo que, él último mencionado, intentaba calmar a su amigo y alumno con suaves y serenas palabras de sabiduría, y unas gentiles palmadas en la espalda para que así olvidara su preocupación y volviera en sí mismo mismo.

—¿Cómo quiere que me calme, Maestro...? ¡Tai Long, escapara de prisión! ¡Volverá al valle de la paz y querrá arrasar con todo! ¡Con el valle, su gente, el templo, con usted, su legado y conmigo, y todo por conseguir el rollo del ¡Dragón! – Fueron las preocupaciones y quejas de, Shifu, emitidas con un tono casi lastimero, bastante temeroso y con un ápice de nostalgia en su voz por la implicación de tener que enfrentar de nuevo a su "hijo" y antiguo estudiante, no sintiéndose capaz de mirar a la cara ni enfrentar a, Tai Long, al igual que hace ya veinte años.

─Calma, mi amigo... Puedo entender cómo te sientes en estos momentos, y no te juzgaré por lo mismo, aun así, escucha mi consejo: "No te debes preocupar por eventos que aún no acontecen... Que el miedo no nuble tu juicio y Robe Tu Paz interior. Mejor respira, siéntate y disfruta de lo que veremos... Al final de cuentas, alguien tiene la amabilidad de mostrarnos el futuro para no cometer el mismo error y aún así aprender". – Aconsejó, Oogway, soltando una risita libre de malicia y bonachona al final de su oración, para luego concluir con una frase final - Que mejor presente que este...

Con esta verdad, Shifu, tuvo una epifanía de un hecho evidente que había ignorado al dejarse consumir por sus temores. Llegado este punto, Shifu, no tenía forma de contradecir o refutar el consejo de su maestro, tampoco lo deseaba, al final de cuentas, tenía razón como siempre. Un "Gracias, maestro" fue lo único que pudo decir al respecto.

El consejo del Maestro, Oogway, fue bien recibido por, Shifu, quien, a pasar de estar aún sumido en tales emociones negativas, respetaba por encima de todas las cosas el consejo de su maestro, por lo mismo, siguió su consejo al pie de la letra en consonancia con antiguas enseñanzas que volvieron a su mente. Respiró profundamente para liberar la tensión de su cuerpo, así como la pesada carga de emociones negativas que había estado acumulando masivamente desde la presentación del subtítulo para posteriormente sentarse al lado de su maestro, adoptando una posición Zeng, y disponerse a observar el flujo de los acontecimientos que se mostrarían en la pantalla, sólo anhelando encontrar una respuesta que le permita cambiar su futuro.

Por otro lado, Los Cinco Furiosos, se encontraban reunidos en el patio de entrenamiento exterior. De pie observaban con recelo el subtítulo en la pantalla, que sólo despertaba la preocupación y la tensión en cada miembro del equipo, así como la cólera de la gran felina, La maestra, Tigresa, cuyo ceño severamente fruncido, yacía clavado en el mencionado, mientras evocaba en sus pensamientos el nombre del guerrero que despertaba su ira.

─Esto no está bien... ¡Tai Long, no debe escapar! - Fue el único comentario emitido por la maestra, Tigresa, recibiendo la razón inmediata por parte del resto de integrantes del equipo y compañeros.

Aunque ninguno lo demostrara de forma abierta, con la excepción de, Grulla, y, Víbora, todos experimentaban un profundo temor por la posible fuga del antiguo alumno de, Shifu, pues lo tenían en una alta expectativa como un guerrero y genio marcial formidable como pocos, sumamente brutal y peligroso, a raíz de los incontables rumores y relatos que giran en torno a su nombre y fama.

─...Es-estoy de acuerdo contigo, Tigresa... Él nunca debe salir de prisión. Es un peligro, y me avergüenza decirlo, pero..., Tigresa, sabes bien que, contra él no podemos hacer nada... No nos menos precio, pero ese hombre ni el maestro, Shifu, lo pudo frenar... Su pierna coja es la prueba ¡No quiero tener que enfrentar jamás a ese hombre! – Explicó, Grulla, sumisamente; temeroso e inseguro de sí mismo y sus capacidades para poder hacer frente a una amenaza del nivel de, Tai Long. Aunque hacía tiempo había superado este complejo, era inevitable que aquel hombre de tal fama hiciera florecer con suma facilidad aquel complejo ya superado.

Nadie pudo contradecir este hecho relatado por su compañero, pues todos estaban de acuerdo en una cosa, nadie quería enfrentar directamente a, Tai Long, con la excepción de, Tigresa, quien yacía sumamente indignada por tales palabras llenas de cobardía, aunque no podía contradecir una verdad tan obvia como la que se había contado, tampoco iba a permitir que el miedo por un hombre doblegara a su equipo, por tal razón, en un veloz movimiento se giró en dirección a, Grulla, azotando ferozmente el piso, disipando el polvo acumulado en todo el campo de entrenamiento con la onda de choque provocada; al tiempo que, clavaba su feroz mirada felina en su compañero, quien sólo se paralizó en su lugar, al tiempo que tragaba grueso, reacción compartida por el resto. En ese instante supieron que lo mejor era callar. Nadie interrumpió cuando, Tigresa, empezó a hablar en un tono severo en reprimenda a, Grulla.

─¡Tenemos un deber con los habitantes de este valle! ¡Un deber que vale más que nuestras propias vidas, confían plenamente en nosotros para protegerlos cuando se encuentren en peligro...! ¡No puedo permitir que ninguno se acobarde ahora por un hombre que lleva 20 años encerrado, posiblemente mal alimentado y fuera de forma! ¿¡Quedó claro!? – Concluyó, Tigresa, en un tono más suave, pero no menos autoritario ni severo. Cuando no recibió respuesta, nuevamente hizo valer su autoridad en un grito que recibió como respuesta una inmediata confirmación conjunta por parte de todos, y una disculpa final por parte de, Grulla.

─Tigresa, por favor, no seas tan severa con el pobre, Grulla. El pobre está asustado tanto como todos nosotros. Entiende, esta noticia nos tomó por sorpresa... Espero el maestro, Shifu, no le afecte demasiado esta noticia... El pobre ya ha sufrido suficiente. – Explicó la siempre gentil y calmada, Víbora, con una expresión compasiva en su rostro; intentando apelar al lado gentil y comprensivo de la gran felina, al tiempo que buscaba desviar su atención con la mención del maestro, Shifu, y su pasado sufrimiento. Sólo recibiendo silencio por parte de, Tigresa, lo cual es un buen indicativo, ya que había logrado su propósito inicial.

─¿Dónde se puede encontrar ahora? – Preguntó el maestro, Mono, a nadie en particular.

─A esta hora del día, si no mal supongo, se debe encontrar meditando en compañía del maestro, Oogway... – Aclaró, Mantis.

─¡Qué felicidad! En estos momentos tan difíciles, el mejor apoyo se lo puede dar el maestro, Oogway – Comentó, Víbora, aliviada.

─En ese caso, nuestra obligación actual es prestar completa atención a lo que veremos, de esta forma podemos estudiar las habilidades y destrezas marciales de nuestro enemigo e idear una estrategia que nos permita lidiar y neutralizar a, Tai Long, en el caso posible que logre su cometido. – Fue la firme resolución de la maestra, Tigresa, como líder del equipo, recibiendo un asentimiento en conjunto con confirmaciones verbales por parte del resto que le indicaban que todos concordaban con su idea. Con esta acción, el dialogo fue dejado de lado para concentrar sus energías en la observación de la pantalla.

Mientras tanto, en el Valle de la Paz, el pánico general se había propagado con la noticia de la posible huida de, Tai Long. Tan pronto como ésta fue dada a conocer, cada habitante del valle movido por el miedo, se confinó en su respectivo recinto, abandonando sus posesiones tanto personales como comerciales en las calles para resguardarse junto a sus familiares o amigos próximos.

En el restaurant del, señor Ping, todos los clientes habían salido corriendo despavoridos del local, cuan estampida desmedida de animales consumidos por el miedo; destrozando la propiedad del establecimiento a su paso, mientras un muy molesto e indignado, señor Ping, desde la barra de atención al cliente consumidor, reclamaba entre gritos al público por, en primer lugar, irse sin pagar la comida, y, en última instancia, destruir su local, así como la propiedad del mismo, ignorando por completo la noticia del posible escape de, Tai Long, pues para él mismo nada era más importante en ese momento que su local y, por supuesto, su hijo, Po, quien intentaba llevarlo por la fuerza al interior de la propiedad, en un intento por evitar que fuera detrás de los clientes con la intención de golpear a todos con su mortal sartén por osar irse sin pagar la comida.

[Multiverso animado: Universo Zootopia: Pos-incidente con los aulladores, Departamento de policía, sala de reuniones]

Tanto, Nick, como, Judy, se encontraban ocupando un asiento en la sala de reuniones, en compañía del siempre serio jefe, Bogo, junto con todos los activos de la policía de la estación de Zootopia, quienes, sin excepción, observaban con atención el subtítulo en la pantalla con intriga, preocupación y seriedad ante el asunto, pues todos los presentes, en especial, Judy, consideraron la posibilidad remota que el evento mostrado podría acontecer en su mundo, creencia que les hacía temer que pudiera producirse una fuga masiva de reos de gran peligrosidad; creencia que, Nick, desmintió al instante, deduciendo el pensamiento colectivo de sus colegas, en especial de su pequeña compañera de redadas, quien no hacía nada para ocultar su preocupación creciente al estar ensimismada.

─Tranquila, zanahorias, no existe prisión de máxima seguridad en Zootopia que lleve ese nombre. – Reveló, Nick, al público, luego de dar un sorbo a su café; brindando una aportación de su conocimiento general de la ciudad, aunque su comentario fue hecho específicamente para calmar a su compañera de orejas largas, pues se preocupaba genuinamente por ella; no quería que ésta lo notara, por tanto, lo hizo pasar como una aportación general de conocimiento público para que su verdadera intención no fuera notada.

El comentario dio el resultado inicial esperado, calmando a su compañera, pero, en cambio, captó la atención inmediata de todos los policías presentes, y antes que se diera cuenta, todas las miradas se depositaron en él.

─¿Cómo está tan seguro agente, Fox? – Interrogó el jefe, Bogo, en tono severo, tornando su semblante aún más serio, al tiempo que se cruzaba de brazos.

─jefe... – Enfatizó, Nick, despreocupadamente -, fui un criminal, reconozco el nombre de cada prisión en esta ciudad..., Aunque ciertamente nunca he estado en una. –Explicó orgullosamente, Nick, mostrándose confiado en sus palabras–. Además, he vivido aquí desde siempre, conozco cada rincón de esta ciudad, y puedo decir que no existe esa prisión... ─concluyó bajando un poco sus oscuros lentes para mirar a los ojos directamente al jefe, Bogo.

─Es un alivio saber que no se trata de nuestro mundo. –Expresó, Judy, ciertamente más aliviada mientras liberaba un suspiro contenido.

─¿Qué comes que adivinas, Zanahorias? –Preguntó sarcásticamente el agente, Nick, a su compañera, despertando la inmediata molestia de ésta última, quien, por tal falta de respeto y seriedad, le propinó un duro golpe en su deltoides para que terminara finalmente con sus bromas. Acción que hizo sacar al agente una leve risa, seguido por un quejido fingido. A pesar de sus risas burlonas, si le dolió el golpe, aunque claro, no lo admitiría abiertamente.

[Multiverso DC: Multiverso Cómic: Tierra 1, Gotham, Bat-Cueva]

En la Bat-cueva, sin excepción alguna, se encontraban reunidos todos los integrantes de la bati-familia, quienes habían sido convocados por, Batman, antes de la aparición del título para discutir e investigar la aparición de las esferas para dar con su origen. El mencionado, yacía frente a la supercomputadora realizando una exhaustiva investigación global para dar con la ubicación de la prisión mencionada en la pantalla.

─Señor, Wayne, terminé su solicitud, más tenemos no haber sido de ayuda. No he hallado información, registros ni documentos oficiales, sea en Gotham como en otras ciudades y países; acerca de una prisión con ese nombre, señor –Comunicó, Alfred, profesionalmente en su arraigado papel de mayordomo.

─¿Investigaste correctamente, Alfred? ¿Seguro que no existe? –Cuestionó un paranoico, Batman, que no despegaba su atención del gran monitor; sin ser consciente de la implicación de sus palabras.

─¿Duda ahora de mis habilidades de investigador después de todos estos años de servicio, Señor? –Confrontó, Alfred, a su hijo adoptivo en un tono sereno, al tiempo que alzaba una ceja desafiante por el comentario desubicado dirigido por su hijo, que no encontró de agrado.

─No..., te ofrezco mis más sinceras disculpas, Alfred. No era mi intención ofenderte... –Expresó, Batman, tras un momento de reflexión, donde se percató que inconscientemente acusó a su padre de ser incompetente, actuar que lo hizo detenerse de su búsqueda.

─Señor, Wayne, reconozco sus preocupaciones, y puedo entender cómo se debe sentir ahora. Como mayordomo de la familia no tengo el derecho a exigirle nada, pero como el hombre que lo criado y cuidado todos estos años, estoy en mi derecho, y le ordeno, por una vez, que apague ese aparato y tome un descanso. Las palabras no me dicen nada, señor..., las acciones lo son todo ¿Recuerda que se lo enseñé? Si en verdad desea disculparse, será mejor que me obedezca... Ahora, volviendo al tema inicial ¿No ha considerado ser paciente y esperar a que la pantalla nos dé las respuestas que busca, señor...? –Regañó, Alfred, a, Batman, en su habitual tono servicial de mayordomo que denotaba la seguridad y autoridad de un señor de clase y estatus elevado, y que contrastaba totalmente con su posición laboral real; que ocultaba una ligera molestia.

Hecho acontecido ante la mirada atónita del resto de integrantes, quienes no podían concebir la idea de un, Batman, siendo regañado por, Alfred, quien luego concluyó con:

─No, seguramente no lo considero... Usted, siempre desea tener el control de toda situación y adelantarse a los eventos. Siga mi consejo, vaya con el resto, buscare algunos muebles cómodos y comida para que pasen el rato, tengo la sospecha que estaremos mucho tiempo aquí... Tiempo que no deseo verlo tocar ese aparato, la supercomputadora.

Sin más opción, Batman, suspiró, apagó la supercomputadora y se reunión con el resto de su familia, al tiempo que, Alfred, se retiraba para hacer lo que dicho. No se hicieron comentarios al respecto. Dick Grayson (Nightwing), Tim Drake (Red Robín), Barbara Gordon (Batgirl), Kate Kane (Batwoman), guardaron silencio, aunque internamente deseaban reírse en la cara de su mentor y halagar a, Alfred, por someter a, Batman, a la vergüenza de ser regañado, no lo hicieron, en parte por miedo y respeto al mencionado, por el otro, preferían no enojar en estos momentos a, Batman. Aunque este no era el caso de, Jason Todd (Red Hood), y, Damian Wayne (Robín), ambos se burlaron abiertamente de, Batman, por lo ocurrido. Batman, poco o nada le importaron las burlas, pues su atención nunca abandonó la pantalla.

[Dentro de la pantalla]

En la pantalla, se dio inicio a la narración de una historia, al tiempo que fueron mostradas diversas imágenes. Este mundo es un caso particular, pues es de los pocos en donde los humanos nunca existieron, sin embargo, ocupando su lugar como los gobernantes absolutos del planeta, están todos y cada una de las especies animales conocidas por la humanidad.

Se mostraron distintas imágenes. En la primera, se mostró la silueta de un humano, tomado como referencia para dar una idea clara, acerca sobre cómo son los especímenes de esta raza a los distintos seres del multiverso, en especial para quienes desconocen de su existencia. La primera imagen fue sucedida por una segunda, que fue revelada como una interminable lista que, llevaba cada nombre de las especies registradas por los humanos, donde cada uno era acompañado por una imagen del animal referido.

Este mundo es bastante antiguo, tanto que todas las especies animales evolucionaron, volviéndose seres con un alto grado de inteligencia, al punto de desarrollar la capacidad de razonar e idear; asimismo, su anatomía evolucionó con el tiempo, adaptándose para poder alternar entre la cuadrupedia y el bipedismo, convirtiéndose con el pasar de los milenios en criaturas antropomórficas; con el detalle evolutivo, que no sacrificaron las ventajas físicas naturales de sus antepasados por una inteligencia y raciocinio más desarrollado.

En consonancia con el relato, en la pantalla sería mostrada una línea de tiempo que revelaría, a través de una lluvia de imágenes, el cambio sufrido por las especies en el tiempo. En distintos cuadros se mostraron la razón de su evolución a lo que son actualmente, desde los cambios en costumbres y hábitos, hasta la influencia medio-ambiental y los cambios en la nutrición.

Con el tiempo, se crearon pequeñas comunidades entre miembros de una misma especie, que, con el tiempo, crecieron para dar nacimiento a las pequeñas primeras civilizaciones, y que pasado otros miles de años de cambio, evolución cultural, conflictos entre especies, y una significativa cadena de eventos que marcaron la historia de este mundo, tanto para bien como para mal; surgieron las grandes naciones, compuestas por una amplia diversidad de especies, tanto depredadoras como presas, las cuales coexistían casi armoniosamente, no dejando de existir por parte de los últimos en mención, un preconcepto hacia los depredadores, quienes sufren frecuentemente de rechazo y discriminación por el miedo que infunde su existencia a las presas.

A pesar de los preconceptos y distinciones existentes entre las especies, las diferencias no los dividieron, lo cual permitió a lo largo del tiempo, una óptima convivencia que impulsó su progreso. Compartieron idiomas para la creación de una lengua en común, costumbres culturales, gastronomía, arquitectura, hábitos, artes y conocimientos que fueron bien cuidados en el tiempo.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso animado: Universo: Zootopia, estación de policía, sala de reuniones]

─¿Humanos...? – Se cuestionó a sí misma, Judy, estando claramente confundida –Señor, ¿Tenemos registro de esta especie en nuestras bases de datos? Me es extraño no reconocer el nombre. Además, la anatomía que nos muestra la pantalla de estos "humanos", no corresponde con ninguna otra especie conocida en Zootopia, aunque su anatomía es semejante a la de los primates... Lo que me es muy extraño, ¿Podría tratarse de una nueva especie semejante o perteneciente al grupo de primates? – Interrogó, Judy, al jefe, Bogo, al tiempo que aportaba sus propias conclusiones del tema.

─Es justo como afirmas, agente Hopps, esta especie no existe en nuestros registros. Es muy posible que se esté hablando de una especie desconocida para nosotros que, como deduces, comparte familiaridad con los primates. – Comentó el jefe, Bogo.

─Pero, señor, ¿No le resulta extraño que la pantalla hable y se refiera a ellos cómo una especie bastante común, al punto de considerar extraño que no existan en algún mundo? ¿Y si también es el caso de nuestro mundo? ¿Estarán extintos? Además, hablan de ellos como si fueran una especie que estuviera en la cima de la cadena alimenticia o, en otro sentido, como si alguna vez llegaron a gobernar el mundo. Tengo mis propias hipótesis, pero me gustaría conocer su opinión, señor – Expresó, Judy, guardando silencio a la espera que sus dudas fueran resueltas.

─Tienes un punto, agente Hopps, es extraño... En primer lugar, pienso que podría tratarse de una especie que existió y prosperó en los tiempos antiguos, antes que, tanto depredadores como presas fueran civilizadas. En segundo lugar, puede ser que nunca existieron en nuestro mundo, pero esto sólo es mi opinión... En tercer lugar, sugiero que en lugar de continuar interrogándome para sacarme respuestas que claramente no tengo, le sugiero, agente, que guarde silencio para que todos podamos continuar viendo la pantalla y su contenido, es seguro que nos arroja mayor información que yo – Comunicó el jefe, Bogo, en voz alta, estando un tanto fastidiado de ser interrogado por la agente, Judy Hopps, de forma continua para sacarle respuestas de hechos o eventos que no tenía forma de conocer.

─Sí-Sí, lo siento, jefe. –Expresó, Judy, claramente avergonzada consigo misma por reconocer la verdad en las palabras de su jefe, asimismo, por su propia curiosidad que la hizo ignorar este hecho durante su interrogatorio. Acto seguido, se recogió en su asiento, haciéndose parecer más pequeño para evitar ser vista por sus demás compañeros.

Nick, siendo testigo de la forma grosera como fue tratada su compañera, no pudo evitar sentirse molesto. Ciertamente el jefe, Bogo, tenía un punto al mandar a callar a, Judy, por sus continuas interrupciones, más consideraba que ponerla en vergüenza frente a todo el departamento, no era la forma correcta. En el momento que intentó levantarse para confrontar al búfalo de agua que tenía por jefe, Judy, quien notó su intención, lo detuvo antes que iniciara una fuerte confrontación verbal con su superior, afirmando al zorro que todo estaba bien, agradeciendo la intención y reprendiéndolo en voz baja mientras lo pellizcaba por intentar formar un alboroto, en su opinión, innecesario, ello mientras, Nick, reía para no llorar por los continuos pellizcos de la coneja molesta que tenía por compañera.

Nick, luego de ser reprendido, guardó silencio para continuar escuchando lo relatado en la pantalla, sintiendo malestar e indignación por conocer que aún en ese mundo los depredadores no dejaban de ser discriminados porque las presas les temían. Sentándole peor contemplar en la pantalla diversas situaciones donde los depredadores eran discriminados por el simple hecho de pertenecer a esta categoría. Nick, no disfrutó en lo absoluto de estas imágenes, pues le recordaban a su trauma del pasado. Percatándose del estado alterado de su compañero, Judy, quien bien le conocía, lo reconfortó, postrando su pequeña mano en el antebrazo de, Nick, en un intento exitoso por hacerle saber indirectamente que todo estaba bien y que estaría con él, apoyándolo.

[Multiverso anime: Universo: Boku No Hero Academia, academia de héroes, comedor escolar]

─¡Esto es increíble! ¡No lo puedo creer! ¡Uno de los mayores enigmas que ha presentado la humanidad finalmente se nos es revelado! Darwin y su teoría de la evolución estaban en lo cierto... No encuentro las palabras para describir con precisión como me siento ahora, pero me siento muy emocionado –Expresó, David Shield, ensimismado en su propia gran emoción que le hacía sentirse como un infante de nuevo.

─¡Ciertamente lo es, papá! –Expresó, Melissa Shield, ahogando un grito de emoción infantil, mientras su comportamiento se asemejaba al de una niña pequeña que recibió un nuevo juguete, y que ahora, no podía dejar de estar feliz y emocionada al mismo tiempo- ¡Es interesante ver cómo las especies animales que conocemos, evolucionaron para ser semejantes a nosotros en muchos sentidos, además, de ser racionales e inteligentes, al punto de desarrollar una lengua en común, crear sus propias comunidades y civilizaciones, y su evolución a través del tiempo es idéntica a la recorrida por nuestra especie...! ¡Papá, esto significa que la teoría cíclica de civilizaciones no está equivocada del todo! – Expresó, Melissa, sin poder contener más su emoción ante la mirada sorprendida y, a la vez confundida, del resto de integrantes del comedor, quienes apenas entendían lo que estos dos hablan. Pero en el momento en que, Melissa, se dio cuenta de un hecho triste, dejó de sonreír para volverse un poco más seria ante el asunto – Pero también es curioso y extraño que no existamos en ese mundo, y en nuestro lugar, estén los animales que conocemos. Además, ¿No te has percatado, papá? Ese lugar tiene un gran parentesco a la tierra – Concluyó, Melissa, en su análisis.

─Es cierto, hija, ese mundo comparte muchas similitudes con el nuestro, de acuerdo a lo mostrado en la pantalla: flora y fauna, ambas iguales y, por lo que veo, también desarrollaron gastronomía y costumbres similares a los nuestras... Es como ver nuestra historia reflejada en otra especie en tiempo real... Mi hipótesis con relación a esto es, que posiblemente sí se trate de nuestro mundo, o, mejor dicho, una variante del nuestro... ¡¿Cómo no lo pensé antes?! ¡La pantalla lo confirmó, pero lo olvidé! ¡Melissa, esa es la Tierra, no la nuestra, sino una de las infinitas variantes posibles! – Comunicó, David Shield, a su hija, pasando de la seriedad inicial provocada por la revelación de la no existencia de los humanos en ese mundo, a la emoción por la confirmación de la certeza de la teoría de los mundos paralelos.

Para este punto, tanto los héroes profesionales, profesores y estudiantes de la U.A, abandonaron todo intento de buscar comprender los argumentos lógicos y científicos de estos dos, pues si bien son los más conocedores del tema y quienes pueden aportar las mejores explicaciones para la comprensión de la situación tan confusa que todos estaban viviendo, irónicamente por el mismo hecho, tanto padre como hija eran difícil de comprender. En su lugar, cada individuo presente, decidió prestar atención a lo mostrado en pantalla, ignorando los argumentos que aquéllos dos proporcionaban por su sanidad mental.

Al otro lado del comedor, acompañado por los profesores, el director, Nezu, siendo el único que verdaderamente comprendía los argumentos, asimismo, las teorías científicas compartidas por aquéllos dos, prestaba suma atención a la pantalla que, en su opinión, encontraba interesante y entretenida, especialmente por todo lo hablado del ámbito científico, sintiéndose despreocupado por lo mostrado, pues ya había deducido con toda certeza, a raíz de los argumentos del padre y la hija que, no tendría relación con su mundo.

[Multiverso cinematográfico: Universo cinematográfico de Marvel, Torre de los vengadores]

─Bueno, señores, el mundo se volvió loco, pero, al menos, ahora podemos respirar tranquilos y descartar este universo de nuestra lista de preocupaciones – Comentó, Tony Stark, entre sorprendido, extrañado y curioso por este primer universo que le hizo abrir grandemente los ojos, pues nunca le pasó por la mente que el primer mundo que verían, sería de animales parlantes.

Mientras tanto, Bruce Banner, como todo buen científico que se respete, se mostró grandemente cautivado e interesado por el mundo mostrado. La posibilidad de contemplar otros mundos paralelos, le traían gran dicha a, Banner, al punto de agradecer para sus adentros, producto de esta misma emoción, seguir vivo hasta los tiempos actuales.

─En momentos como estos, agradezco seguir vivo... –Expresó el científico, Bruce Banner, mientras su voz se quebraba, y sus ojos empezaron a lagrimar por la emoción y la felicidad, no preocupado por elevar sus pulsaciones cardiacas y, por consecuencia, despertar a, Hulk, pues, desde que las pantallas aparecieron en el mundo, perdió la capacidad de retomar tanto voluntaria como involuntariamente la forma de, Hulk. Tal acontecimiento, despertó en el científico, Bruce Banner, una indescriptible dicha por verse libre, luego de mucho tiempo, de la carga de nombre "Hulk" que tanto le había arrebatado, arruinando su vida. Hecho que, de forma inevitable, lo había dejado un tanto sensible. - Lo-lo siento, chicos, no me hagan caso... Sólo estoy muy emocionado. Desde pequeño, he deseado conocer otros mundos. Era uno de mis mayores sueños y aspiraciones en la vida, y con esta oportunidad ahora es posible – Se excusó, Banner, sintiendo la vergüenza porque todo el equipo le viera vulnerable, ello mientras limpiaba sus lágrimas.

Ciertamente nadie en ese momento esperó la reacción de, Bruce, pues, lo conocían, reconociendo que el hombre tenía un enorme control sobre sus estados emocionales, a razón obvia de su condición que lo obligaba mantener siempre la calma ante toda situación. Todos para este punto eran conscientes que, Banner, había perdido la capacidad de transformarse, hecho notorio que arrojó una luz de verdad que desmentía la inútil escusa de, Banner, que hizo reconocer al equipo el dolor real del hombre y la dicha que ahora sentía por estar libre de la criatura que, en opinión compartida, opinaban que, Banner, culpaba de toda la desgracia de su vida a, Hulk. Con la comprensión de la situación, todos le mostraron su apoyo, en especial, una persona particular.

─Está bien, Bruce, comprendemos... Tienes nuestro apoyo. –Reconfortó, Natasha Romanoff, quien sujetó la mano de, Bruce Banner, conforme le propinaba una sonrisa como muestra de apoyo incondicional. Opinando en representación de todos los presentes, con la excepción, de los hermanos, Maximoff, quienes sólo guardaron silencio, sintiéndose desubicados entre estas personas que no hace mucho eran sus enemigos. Por el lado de, Wanda, de forma comprensible, se sentía terrible, viendo al hombre que contenía una bestia peligrosa en su interior, recordando como le había manipulado para que perdiera la compostura. Ahora que veía su felicidad por estar libre de la influencia de la bestia esmeralda, se sentía aún más culpable, ello mientras su hermano, quien había notado la situación, hacía todo lo posible para hacerla sentir mejor.

[Dentro de la pantalla]

Con el tiempo, surgió un nuevo tipo de arte que sería conocido como: Kung Fu, un arte marcial milenaria, creada exclusivamente para la defensa personal como de los otros, siendo una disciplina que cuenta con principios filosóficos que enseñan el autoconocimiento del ser, el dominio personal sobre los pensamientos y las emociones, la paciencia y la concentración.

En la pantalla fueron reveladas diversas imágenes, las cuales mostraron en secuencia, a grupos de individuos de diferentes especies animales que, con gran maestría, hacían demostración de una variedad de habilidades, técnicas y estilos de lucha caracterizados principalmente por el combate desarmado, en su mayoría, existiendo también aquellas adaptadas al combate armado. Conforme eran mostradas las imágenes en pantalla, los infinitos espectadores no podían evitar sentirse cautivados, asimismo, asombrados por este "Kung Fu", en especial en los mundos poco desarrollados culturalmente, en donde cosas tales como conceptos filosóficos y estilos de lucha llamativos y altamente complejos como el visto, fueron poco o nada profundizados.

Desde la creación del Kung Fu, las artes marciales representan todo para la mayoría de habitantes de este mundo. Este hecho puede ser comparable con el valor simbólico y espiritual que representa el dominio del Chi para los maestros de esta doctrina. Para que sea comprendido, el Chi, por definición, es la energía vital que fluye por todos los seres vivos, y que mantiene al universo, al menos, este en específico, en perfecto equilibrio, y cuyo total dominio de esta energía espiritual para los maestros de esta doctrina, simboliza el más alto grado de maestría, a razón de ser una proeza que pocos han logrado en su historia.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso anime: Universo: One Punch Man, afueras de la ciudad Z, días antes a la emboscada de los héroes a, Garou, almacén abandonado]

─¡Qué maravilla! Hoy es mi día de suerte. Me he sacado la lotería con estas pantallas... Tantas técnicas y estilos de luchas únicos y nuevos para aprender y que me pueden servir para hacerme todavía más fuerte, y barrer el suelo con los patéticos héroes... ¡Continúa mostrándome más! ¡Muéstrame más técnicas y estilos de lucha! – Expresó un extasiado, Garou, con una gran sonrisa psicótica en su rostro, al tiempo que se imaginaba a él mismo destruyendo al resto de héroes de clase S.

Mientras tanto en la Asociación de Héroes, específicamente en la sala de reuniones de la clase S. un viejo, Silver Fang, escuchaba atentamente cada palabra de la descripción inicial de este mundo con absoluto disfrute, más allá del asombro que le produce conocer de la existencia de un mundo, donde los animales son como los humanos en términos generales con sus claras diferencias, le era de su mayor interés la parte en donde se empezó a hablar de sus amadas artes marciales. Le hacía muy feliz ver que en otros mundos la cultura de las artes marciales existe, se preserva y se cultiva diariamente con disciplina, no siendo un pasatiempo, sino una filosofía de vida.

─¡Oh!, pero que maravilloso mundo. Me complace ver que en este mundo existe una muy arraigada cultura marcial que, además, es muy respetada. Aunque me resulta cuanto menos curioso ver animales parlantes y caminando en dos patas... No termino por acostumbrarme del todo. Es extraño. –opinó, Silver Fang, con toda sinceridad, mientras una gota de sudor caía de su frente por la extrañeza y confusión de las imágenes.

─Concuerdo contigo, viejo. Es extraño. Al menos, también espero que exista el camino de la espada en ese mundo. Sería interesante ver el surgimiento de grandes espadachines... –comentó, Atomic Samurái, emocionado por su misma idea, asimismo, deseando que, así como los propios artistas marciales eran respetados, también lo fueran los samuráis y todo aquel que sigue el camino de la espada.

─En lo que a mí respecta, lo que hablan ustedes dos no es más que una estupidez tan grande como esto de estúpidos animales parlantes –comentó la insoportable, Tatsumaki, como siempre en un intento por llamar la atención a costa de generar un conflicto sin razón o motivo.

─¡Cállate, mocosa! ¿¡Quién te crees para insultar mi arte!? Primero crece y luego habla con nosotros los adultos ─comentó un muy molesto, Atomic Samurái, quien sin temor a la muerte expresó su opinión a la siempre molesta heroína que no hacía más que provocar conflictos internos.

─¿¡Cómo te atreves a llamarme mocosa y más insinuar que soy una enana¡? Maldito, viejo, tienes la osadía de tratarme así ahora que esa vibración me arrebatara los poderes, de lo contrario, te sepultaría bajo tierra con tu espada y te trituraría con ella antes de enterrarte –Expresó una eufórica, Tatsumaki, con su voz chillona, a quien le saltaban las venas de la frente.

La discusión entre estos dos continuó mientras los otros, con excepción de, Flashy Flash, Metal Bat, intentaban detener la discusión feroz que estalló entre estos dos para que todos pudieran continuar viendo la pantalla sin problemas.

Mientras tanto los ejecutivos de la asociación de héroes, quienes se encontraban en una habitación de monitorio exclusiva para ellos, inmediatamente descartaron la posibilidad que se trata de su mundo, además, debatieron otros asuntos importantes como las distintas teorías científicas que previamente se mencionaron con la participación del Doctor, Bofoi, quien sólo ve interés en la fuente de energía conocida como el Chi, si bien entendió que se trata de la energía vital de los seres, se preguntaba si era posible acceder a ella para fines científicos.

[Dentro de la pantalla]

Sin embargo, en esta ocasión, queridos espectadores, temo que nuestro interés principal no radica en su historia, cultura, evolución ni la energía que rige a este mundo, como bien han de tener presente. Con el fin de este comunicado, las imágenes mostradas anteriormente fueron sustituidas por un escenario concreto.

En la cima imponente de un conjunto de montañas, revestidas por la verde naturaleza, y adornadas de forma enigmática por la neblina característica de estas formaciones naturales, yacía majestuoso y solemne un templo, capaz de ser visto desde las lejanías del "Valle de la Paz". El templo, conocido por los pobladores del valle como el "Palacio de Jade", no es una construcción cualquiera, a razón que no existe otro semejante o comparable en todo el mundo. Este reconocimiento, no se debe exclusivamente por ser una construcción histórica invaluable para quienes adoptaron como estilo de vida, las prácticas y enseñanzas del Kung Fu; también se debe al hecho que, este lugar, es la cuna del Kung Fu chino.

Sin embargo, también es reconocido por muchas otras razones, más sólo se considerará una para esta ocasión: Siendo, en primera instancia, donde se formaron los mayores exponentes en la historia del Kung Fu. Maestros y guerreros, grabados eternamente en la historia de su mundo por su aportación al desarrollo de este arte, asimismo, por su experta capacitación en la educación y orientación de las nuevas generaciones que, por efecto colateral a las enseñanzas y valores confiados por sus antecesores, de muchos de ellos, nacerían valerosos guerreros y maestros, aclamados e idolatrados como héroes en su tiempo.

Siendo uno de estos referentes, como maestro en la actualidad, el maestro, Shifu, y, por supuesto, sus alumnos, quienes, como equipo de guerreros, se hacen llamar: "Los 5 furiosos". Pero, por encima de ellos, de hecho, por encima de todos los maestros y guerreros en toda su historia, siendo, además, un referente como el mayor guía espiritual de su mundo (aunque humildemente niegue el honorifico). Este individuo, considerado una leyenda viviente entre maestros, guerreros y la población civil, se le conoce como, maestro, Oogway, quien no es otro, más que el creador del Kung Fu chino y su filosofía.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso anime: Universo: Baki, pre-período de los condenados a muerte, Mansión familiar de los Kaioh, sala principal]

Tras la finalización del comunicado del evento actualmente presenciado, los miembros integrantes de la familia de los Kaioh, se juntaron en este lugar, donde cada uno, cargando el peso de sus propias expectativas, deseaban encontrar algo de interés personal en la pantalla. Lo que fue contado hasta ahora, ciertamente no los decepcionó de ninguna forma.

─¡Oh!, esto sí llamó mi interés –expresó, Kaku Kaioh, con la felicidad dibujando su rostro–. Parece un sueño muy bello ¿No lo creen, discipulos?... Un mundo donde nuestro arte, el kung fu chino y todas sus enseñanzas milenarias, son trasmitidas, practicadas y enseñadas como si fueran la biblia, es hermoso... Cómo me gustaría estar en ese mundo ahora y conocer estos dichosos referentes del kung fu, ¿Qué tan fuerte serán?

─Sí, concuerdo con usted, maestro –dijo, Retsu Kaioh, complacido con lo mostrado en pantalla─. En lo personal, me gustaría conocer a estos guerreros que son alumnos de este tal, Shifu, me gustaría probar su fuerza y habilidad marcial... Aunque quien me causa más intriga es este maestro, Oogway. No dudo que sea fuerte, pues incluso la criatura que nos permite ver este mundo, lo reconoce como alguien grande, por tanto, digno de respeto. Pero me niego a creer que siga vivo, si mi suposición es correcta. Nadie puede vivir por tanto tiempo.

Este comentario llamó la atención de los kaioh presentes, en especial del gran kaioh, kaku, quien le exigió una explicación.

─Bueno, maestro... Sí es cierto que este, Oogway, es el fundador de nuestro arte marcial en ese mundo, entonces sería tan viejo como la propia arte marcial, ¿Cómo podría seguir vivo si es correcto lo que dice la pantalla, que el kung fu tiene miles de años, incluso si la historia del kung fu en ese mundo fuera más joven, aun así, no sería posible que alguien sobreviva, en dado caso, este hombre debería tener miles de años?

Cuando, Retsu Kaioh, mostro su opinión, el gran kaioh se dio cuenta de la verdad tras sus palabras. Se había emocionado tanto por el pensamiento que en ese mundo las artes marciales fueran veneradas como una religión que obvió este dato inconscientemente. Era bueno que su estudiante lo estuviera acompañando. Este hecho no solo fue claro para él mismo, sino también para el resto. Sin embargo, fue kaku kaioh, quien robó la primera palabra. Entre risitas, agradeció que se le fuera notificado este hecho.

─Bueno, si la pantalla lo muestra, lo averiguaremos pronto. Pero recomiendo que guarden silencio y sigamos viendo ─ Sentenció, Kaku Kaio.

Está de más explicar el hecho que, cuando kaku kaioh emite una orden, todos la acatan, cerrando allí mismo toda discusión.

[Universo animado: universo kung fu panda, árbol de duraznos de la sabiduría celestial]

Shifu, a falta de palabras por la sorpresa que le produjo la opinión dada por la pantalla, no sabía cómo sentirse ahora, ciertamente podía decir que estaba feliz porque lo habían honrado al catalogar a este como un maestro referente y, por tanto, digno de respeto, lo cual apreciaba enormemente en su corazón, pues le hacía sentir en parte merecedor de ser un alumno digno de su maestro, asimismo, estaba feliz por ver que a estos alumnos que ahora tiene no les ha fallado, si la pantalla los coloca como grandes guerreros, pero, también se negaba a aceptar este hecho, pues se debatía entre el merecimiento y la negación, sin importa lo que la pantalla pudiera decir, como maestro no se creía completamente digno de su cargo, especialmente de ser visto como un referente del arte que enseña, dado a su pecado que le hizo perder a su más talentoso alumno, y amado hijo.

─Calma, mi amigo, esta es una buena ocasión, aunque tu dudes de tus propias capacidades como maestro, al igual que dudas ahora de ser merecedor de tales elogios, como puedes ver, existen quienes desmienten tus dudas... Resta importancia a todo lo que te aflige. Que los errores del pasado no te consuman – dijo, Oogway

─Lo agradezco, maestro, pero cuestiono ser merecedor de tales elogios, no los merezco, no soy digno... Le fallé a mi alumno, a mi hijo, no soy digno de ser visto como tal, ni ser puesto casi a la misma luz que usted. Usted, si los mereces ─dijo, shifu, abatido

─Shifu, todos cometemos errores, pero los errores no te definen, te forman ¿Acaso no le he enseñado? No le has fallado a nadie, Tai Long, se falló así mismo al no aceptar la inevitabilidad del destino. No vio más allá de sí mismo y sus ambiciones. No te puedes culpar para siempre por los errores de otros. Tienes que aprender a soltar. Las decisiones de, Tai long, son suyas, las tuyas, te pertenecen, no te diré si estás bien o mal, pues no tengo el poder de cambiar tu humor ni opinión, eso solo te corresponde. Como tu maestro, solo te marco el camino, es tu deber recorrer el sendero, contemplar el sendero, aprender del sendero y, aunque este tenga baches, este sucio o te lastime, aun así, aceptar que este es el camino es cómo debe ser y no como quieres que sea. Cuando el dolor es aceptado, la paz viene, si se consciente la negación al dolor y el sufrimiento, solo sufriremos más y nos ahogaremos inevitablemente en las aguas de la angustia, la frustración y la no aceptación. –comentó, oogway, compartiendo un poco de su sabiduría.

¿Qué decir para este punto? Nada, absolutamente nada. Shifu, ante la sabiduría de su maestro no podía objetar absolutamente nada, refutar sus argumentos era algo que ni el más ignorante entre todos los hombres de este mundo tendría la capacidad, pues ¿Quién es lo suficientemente ignorante como para negar estas palabras de sabiduría de un hombre tan lleno de experiencias y saberes y que, aparentemente siempre tenía una respuesta para todo? Nadie, en lo absoluto, el propio, Shifu, tan obstinado e inflexible, siempre encerrado en su negación, y cuya visión tan reducida del mundo le hacía creer que todos los aspectos del mismo eran controlables, manipulables y moldeables, ni siquiera él podría. Estas palabras calaron muy profundamente en su alma, tantas verdades tan obvias, pero a la vez tan desgarradoramente invisibles para su vista, penetraban en su alma y corazón por el recuerdo del tierno muchacho que a su mente volvió, y que desearía estuviera con él. A pesar de su malestar interno, el apoyo de su maestro de cierta forma le calmaba. Por esta razón, simplemente asintió para concentrarse nuevamente en la pantalla.

Mientras tanto, en el campo exterior de entrenamiento, un bullicioso mono expresaba su felicidad ante el reconocimiento de la pantalla al equipo, hostigando a todos con una misma pregunta que no esperaba: «¿Lo están viendo chicos? Esta cosa nos reconoce como grandes guerreros». Repetía, mono, tan molesto como siempre.

El resto estaba feliz por este reconocimiento. El momento sólo era arruinado por las travesuras de su compañero que solo encontró quietud cuando la feroz mujer felina clavo su mirada en él, permitiendo centrar nuevamente su atención en la pantalla. Para, Tigresa, nada de eso importaba, en su mente sólo estaba, Tai Long.

[Dentro de la pantalla]

En un cambio de escenario, la pantalla mostró a un panda rojo chino, que yacía en medio de un patio chino tradicional, cercado por un jardín agradable a la vista; sentado bajo la sombra de un árbol en posición de medio loto, al tiempo que, con una flauta, tocaba una melodía tan suave y relajante que acariciaba el alma. En ese instante, un cuadro de descripción ligado al animal mencionado, apareció en pantalla:

Nombre: Shifu.

Raza/Especie: Panda rojo chino.

Edad: 60 años.

Habilidades: Gran maestría en Kung Fu, sabiduría, grandes reflejos, gran agilidad y velocidad; hábil estratega del combate desarmado.

Destrezas: Maestro altamente capacitado, adaptabilidad educativa (se adapta a la forma única de aprender de sus estudiantes, facilitando el proceso)

Poderes: Maestría en Chí.

Habilidad especial: Llave dactilar Wuxi (Técnica que altera el Chi del objetivo lo suficiente, al punto de causar daños internos importantes que, finalmente desencadena que el cuerpo del objetivo se desintegre en una explosión)

[Fuera de la pantalla]

Con la descripción del individuo mostrado en pantalla, distintos individuos de diferentes mundos quedaron anonadados, especialmente aquellos que correspondiente al mundo de los humanos, quienes no podían dar crédito que un animal tan pequeño y que en muchos mundos era considerado tan tierno y amigable, en este mundo, en primer lugar, fuera considerado un maestro tan capacitado en un estilo de combate, aunque muchos los subestimaban por su estatura, edad y físico que daba mucho que desear, otros más inteligente, aunque escépticos, preferían creer en lo mostrado por mera lógica y sentido común.

[Multiverso Marvel: Universo UCM: Torre de los vengadores]

Sin excepción, todos se inclinaron más en sus asientos, interesados y asombrados a más no poder por la descripción que, en opinión compartida, no esperaba que este animal que ahora, reconocían como el maestro, Shifu, mencionado con anterioridad, tuviera tal descripción, en especial una habilidad tan peligrosa en su arsenal.

─¿Me tienes que estar jodiendo? ─dijo, Tony.

─Lenguaje ─regañó el, Cap.

─Parece que el pequeño panda no es tan inofensivo como aparenta ser... ─Comentó, Clint.

─Concuerdo contigo, Clint... Y pensar que un animal tan pequeño y aparentemente inofensivo puede contar con una habilidad tan peligrosa... La pantalla nos habló de este, Shifu, podía esperar de él que dominara o, al menos, pudiera manipular esta energía Chi que me causa intriga, pero ¿Hacer explotar a un hombre con una técnica? Eso es algo que me tomó por sorpresa... ─dijo, Natasha.

─Ni que lo digas, de por sí un mundo con animales parlantes e inteligentes no era suficiente, ahora también a parte son expertos artistas marciales y que posiblemente te puede hacer explotar como un globo con este chi ─Comentó, Clint.

─Bueno, aunque es cierto que es aterrador e inquietante el hecho que te puedan explotar como un globo si así lo desea, también es interesante que con una técnica se pueda manipular esta energía ─comentó, asombrado, Bruce.

─Yo no diría manipular, sino bloquear. De acuerdo a la pantalla, esta lo define como una energía que fluye como parte de un todo, es decir, que no puede ser manipulada, sino dirigida. Por colocar una analogía, esta energía es como un rio que tiene un camino formado, no puede ser domado ni manipulado, solo redirigido en una dirección u otra, en este caso, si se bloquea el camino de un rio, este se desborda, provocando un desastre. Pero sí, es interesante ─Comento, visión.

Ante este comentario, Bruce, sonrió a, visión, encontrando grato que otra persona o androide compartiera su interés, hecho que se lo hizo saber a visión con un sí que derivó en una conversación científica entre ellos.

[Multiverso videojuegos: Universo Bloody Roar: un mes después a los acontecimientos del último juego, Casa de Mitsuko]

─No es un Zoanthrope, es un animal corriente, pero por lo que veo, es fuerte... No sé nada de, Kung Fu, lo mío es el boxeo, pero reconozco a alguien fuerte cuando lo veo ─comentó, yugo

─Para saber que es fuerte ni es necesario que lo reafirmes, la pantalla ya nos lo dice, hermano ─comentó, kenji

─Kenji, no seas mal educado, no te burles de tu hermano, a veces puede ser un imprudente tonto, pero no siempre es un tonto... ─expresó, Alice, en defensa del prota y su interés amoroso

Ante este comentario, Kenji, normalmente serio, no pudo evitar reírse del comentario que, en vez de defender a su hermano de él, aparentemente lo puso más en ridículo. Siendo el mismo caso con, Uriko, sentada su lado que no pudo evitar reír ante el intento de defensa de su hermana a su interés.

─Gracias..., supongo, Alice ─ comento, yugo.

─Ustedes dos, dejen de burlarse del chico, principalmente tú, Uriko, es de mala educación, jovencita, burlarse del pretendiente de tu hermana ─expresó, Mitsuko

Ante la orden dada por la gran mujer, estos dos dejaron de reírse por temor y respeto a esta, recibiendo por parte de su hija adoptiva, una disculpa medio sincera. Este comentario, generó en la joven de traje de enfermera una reacción avergonzada por las palabras de su madre que la dejaron en un estado elevado de enrojecimiento. Por su parte, yugo, no podía estar mejor, claramente avergonzado, pero controlado en su reacción. Ello mientras una chica, Nagi, al otro lado del asiento, hacia un puchero por esto, pues en su mente, pensaba que yugo gustaba de ella.

─Traje algunos bocadillos para disfrutar de lo que nos muestren estas cosas. Chico, hazme un lado ─ Comento, mitsuko

Ante la orden, los cuatro individuos que compartían el sofá, hicieron un espacio, específicamente entre las dos jóvenes que eran sus hijas mientras la mujer, al sentarse dejaba los bocadillos en el centro de mesa, y tomaba.

Al otro lado de la ciudad, específicamente en un departamento de lujo, un hombre de nombre, Gado, y una mujer, posiblemente su pareja; de nombre, Jenny, yacían en compañía mutua, visualizando la pantalla, la segunda sentada en las piernas del primero, disfrutando de una copa de vino. Ambos, encontraban interesante este mundo, pues, compartían similitud con el propio, a razón que sus poderes tenían relación con los animales.

[Fuera de la pantalla]

Mientras el panda rojo, ahora conocido como, Shifu, continuaba sumergido en su actividad, a su alrededor, múltiples individuos tan veloces como silenciosos, le acechaban desde las sombras. A sus espaldas, un par de figuras sombrías, lo expiaban bajo el resguardo de los arbustos y un pilar de piedra tallado.

Para este punto, las imágenes mostradas en la pantalla, adoptaron un ritmo más acelerado. El foco pasó de los intrusos a, Shifu, para que, en un cambio de foco repentino, pasara a concentrarse en una silueta confiada en el recubrimiento de las sombras del pilar, al que, yace enroscada.

Ante la contemplación del escenario, infinitos espectadores de los mundos, comprendieron al instante la situación, tampoco era necesario nacer genio para saber la verdad, el maestro, Shifu, le habían tenido una emboscada en su propio patio. Quienes llegaron a esta conclusión, en su mayoría civiles, y, por supuesto, individuos guerreros, honorables y héroes, por igual, catalogaron este acto como cobarde, injusto y deshonroso ¿La razón? Era obvia, sólo veían un anciano, un individuo desprevenido, pequeño e indefenso, por ende, débil, y, a pesar que no fuera el caso, sin importar lo mostrado en el cuadro de descripción, todos, quienes veían las pantallas, se dejaron llevar por esta faceta actuada del maestro, Shifu, que sólo unos pocos lo suficientemente inteligentes, asimismo, observadores y poco prejuiciosos, o que directamente conocen o tuvieron experiencia con un viejo que, si así lo desea, los pondría a dormir, pudieron ver tras esta actuación. Cuando contemplaron que sus atacantes estaban en posición y listos para atacar, la audiencia, se inclinó en sus asientos en completó silencio por la situación de tensión y suspenso.

En ese instante, todos los atacantes, en un arranque de velocidad sobrehumana, abandonaron sus coberturas estratégicas, revelando bajo el sol del mediodía, sus verdaderas apariencias. Desde el alto pilar de piedra, una víbora tomó impulso para recortar la distancia entre ella y su objetivo. En coordinación con su compañera, otros tres individuos emergieron de la cobertura de los muros que cercaban el patio exterior, siendo el primero, un mono, seguido por un gran felino atigrado y una grulla, mientras una mantis, realizaba un ataque furtivo desde las alturas. Todos en perfecta coordinación, se precipitaron en una veloz carrera hacia, Shifu, quien fue cercado de todas las direcciones para la imposibilidad de la huida.

Sin embargo, Shifu, permanecía inmutable en su posición, tocando la flauta con tanta gracia, como si el mundo entero careciera de importancia. No siendo hasta que los segundos fueron sumamente escasos, y sus atacantes estuvieron casi encima de él que, reaccionó. Abriendo grandemente los ojos, Shifu, liberó un grito marcial, anunciado su predisposición para el combate. Con toda la habilidad alusiva a su merecido título de maestro, Shifu, del suelo, se levantó en un salto, y como primera acción defensiva, golpeó con su flauta en la cabeza a la pequeña víbora, quien pretendía sorprenderlo con un latigazo de cola.

Aprovechando la postura naturalmente adoptada tras su primer ataque, Shifu, realizó una rotación corporal completa, aprovechando su estatura para deslizarse bajo postura de la tigresa para seguidamente conectar una patada tras la rodilla, desestabilizando su postura, por ende, quebrando su equilibrio, llevándola a caer, por un instante, en su rodilla estable. Un instante, bien aprovechado por, Shifu, quien inmediatamente tras salir por debajo de las piernas de su atacante, realizó un gran salto hacia atrás que tuvo un doble propósito: Propinar una patada circular a la tigresa durante la ignición, dirigido al área del mentón; el segundo, escapar del acorralamiento al que voluntariamente decidió inicialmente someterse.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso anime: Universo: One Punch Man, afueras de la ciudad Z, días antes a la emboscada de los héroes a, Garou, almacén abandonado]

Garou, divertido con la paliza que estos sujetos estaban sufriendo, rio sin reservas, incapaz de retirar su atención de la pantalla ni por un instante. Mientras un joven, Tadeo, que había ingresado momentos antes para espantar al hombre de su refugio por influencia de sus "amigos", yacía a su lado, observando con asombro el combate en progreso.

─Vaya..., pobres diablos inútiles, parece que mordieron un hueso más duro que el podían roer, pero qué se puede esperar de basuras que atacan en grupo y aún peor, por la espalda... Son simplemente escoria ─dijo, garou, asqueado a más no poder. Al tiempo que emitió un siseo que enfatiza aún más su disgusto.

─¡Es increíble! ¡Ese señor es muy bueno! ¿¡No lo cree, señor!?

─¡Maldito mocoso! Apenas tengo dieciocho, no me llames señor ─dijo, garou. Quien apretaba los dientes mientras le saltaban las venas de la frente─... Y, sí, el viejo es bueno, como su kung fu, pero no tan bueno ni mejor que yo. No veo nada impresionante ni nuevo en sus estilos ni movimientos, que decepción..., al menos, es entretenido ver como pone en su lugar a la basura.

Tadeo, sólo miró al hombre mientras menospreciaba a los individuos de la pantalla por su bajo nivel de habilidad. Mientras tanto, Garou, guardó silencio para centrar su atención en la pantalla, específicamente en el viejo panda rojo, quien, por alguna extraña razón, le hacía recordar al viejo.

[Multiverso videojuego: universo: Street Fighter, Dojo de Gouken, período posterior a los eventos de Street Fighter 5]

En el Dojo de Gouken, contemplando la transmisión, yacían reunidos en un semicírculo, Ryu, conocidos, amigos y maestro. Estando presente: Ken Master, Eliza Master, Gouken, Chun-Li, Cammy, Juni, Juli, Guile, su esposa, Julia, e hija, Christina; Alex, Tom, y su hija, Patricia; Sakura, Kei Chitose, Rashid, y su sirviente, Azam; E-Honda, Rainbow Mika, junto a, Zangief, Ibuki, Laura, Dan Hibiki, Blanka, Elena, y su rival, Makoto; Lita Luwanda, Karin Kanzuki, Oro, Fei Long, Sagat, Sean Matsuda, Dhalsim, su esposa, Sally e hijo, Datta, y, por último, pero no menos importante, aunque sí, sorprendente, entre los mencionados, se encontraba presente, Juri Han, mirando la pantalla como una niña, sin temor a estar rodeada por sus mayores rivales y enemigos ¿La razón? Desde que fue transportada al establecimiento, fue incapaz de abandonar el lugar, por la misma razón, nadie la podía obligar a irse ni ser arrestada, asimismo, nadie la podía lastimar, del mismo modo, ella no podía lastimar a nadie mientras compartieran espacio, alguna fuerza externa lo impedía, posiblemente la pantalla, una conclusión con la que muchos estuvieron de acuerdo.

A razón de este hecho, estaban obligados a convivir con su enemigo para la especial molestia de, Cammy, Juni, y, Juli, quienes aún le recienten fuertemente por como maltrató a las Dolls; estando incluidas, Chun-Li, compartiendo la misma razón que, Cammy, y, Sakura, que, además, de compartir la misma motivación que las últimas mencionadas, también existe otra razón más reciente que comparte con, Chun-Li, pues, desde que la sádica pelinegra reconoce el hecho que no puede ser obligada a irse ni ser arrestada, no ha dejado de hacer comentarios muy sugerentes dirigidos a, Ryu, acto que, en términos generales, resultaban incomodos, asimismo, molestos para todos, en especial, ellas, quienes no podían hacer nada.

─Juri Han, rio con burla por la divertida escena─ ¡Wow! En verdad, me sorprendió el mapache o lo que sea... Es tan divertido ver cómo les parte la cara ¿No lo crees, amigui? ─dijo, volteando a ver a su rival. ─

─Chun-Li, ante el malicioso comentario, en especial, por la forma en que fue llamada, puso los ojos en blanco, no pudiendo soportar más la presencia de, Juri Han─ Guarda silencio, Juri.

─Que mala eres conmigo, amigui, pensé que me querías mucho... ¡Ouch! Mi corazón duele... Ryu, ella es tan mala, tu si me quieres, ¿verdad, grandulón? ─dijo, Juri Han, tan sugerente como nadie. Haciendo gestos alusivos que corresponden al significado de sus palabras para finalmente entrometerse entre la cercanía de, Chun-Li, y, Ryu, para luego abrazar el brazo derecho del último mencionado para provocar una reacción, en su opinión, divertida en su rival.

Evidentemente, la reacción no se hizo esperar. Mientras ambas mujeres discutían, una tercera se sumó a la discusión, siendo, Sakura, quien estaba harta de la sur coreana, en especial por la confianza inmerecida que esta se tomaba con su maestro y amor secreto. Ryu, por su lado, se sentía atrapado en medio de un combate feroz, protagonizado por los seres más aterradores del mundo, mujeres. Quería calmar la situación, pero, desconocía cómo, además, de sentirse incomodo con esto, por primera vez, estaba ante una situación social que le superaba y que desconocía como resolver, especialmente tratándose de mujeres, para empeorar la situación, ahora estaba siendo el centro de atención de todos sus amigos, los cuales, algunos, o disimulaban su diversión o la mostraban abiertamente como, Ken, quien no podía mantenerse callado como era costumbre, convirtiéndose en el objeto de sus comentarios, tales como: Ryu, ¿Es en serio, amigo? ¿También la loca?; Tienes que decidir, ¿Cuál te gusta más?; ¿Con quién te casaras?; ¿Por qué no te quedas con las tres?, etcétera. Y como si no fuera suficiente castigo, Juri Han, no dejaba de toquetearlo, asimismo, responder a las preguntas de, Ken, como si ambos estuvieran confabulados para hacerle pasar por ese momento.

Mientras, Gouken, estando sentado a las espaldas de sus estudiantes más destacados, observaría este escenario con orgullo y diversión, reconociendo con felicidad que su alumno ya no era un niño y que luego de terminado esta reacción, tendría que instruir al pobre, Ryu, sobre las relaciones amorosa, asimismo, sobre cómo lidiar con estas situaciones. Por lo pronto, decidió tocar su hombro como una clara señal que estaba orgulloso, al tiempo que le hacía saber su diversión de su situación, captando con esto la atención de todos.

─Parece que la competencia por tu corazón es más feroz que un combate en el dojo. ¿Acaso has estado entrenando en el arte de enamorar? Deberías considerar aprender a usar el 'hadouken' para protegerte de tantos corazones voladores. ¡O, al menos, un 'shoryuken' para despejarlas!

El buen chiste de, Gouken, inevitablemente desató una lluvia descontrolada de risas contenidas hasta por los más serios. Ken, inevitablemente estalló en una estridente carcajada al ver la enrojecida cara de, Ryu, quien se mostraba incrédulo porque su maestro se uniera al grupo que se burlaba y divertía de su situación. El chiste borró la atmosfera hostil que existía por la presencia de, Juri, y, Sagat, así como la molestia que tenían algunos de los presentes por no poder ver tranquilos lo que muestra la pantalla.

─No se preocupe, suegro querido, sé bien cómo cuidar lo mío de ladronas rompe-hogares.

Juri Han, aún más predispuesta a provocar el caos, hizo una última jugada que desataría el infierno. Mientras, Ryu, intentaba apartar a, Juri, de su brazo de la forma más respetuosa posible, ésta última tiró aún más del mismo, acercándolo a ella lo suficiente para plantar un beso de media luna. Lo que sorprendió a, Ryu, de gran manera, dejándolo tanto confundido como atónito. Por su lado, Ken, testigo de la escena, abrió los ojos grandemente por el atrevimiento, estaría divertido, se burlaría de su amigo y, sin dudas, haría muchas bromas de este momento, sin embargo, aunque la mayoría del tiempo pudiera actuar como un tonto, en lo que respecta a mujeres, con diferencia obvia a, Ryu, era un genio. Cuando, Juri Han, dio ese beso, Ken, supo de inmediato que se desataría el infierno, por la misma razón, aparto a su esposa, Eliza Master, del lugar que ocupaba en su lado derecho para su protección, ubicándola a su lado izquierdo. Los más cercanos a ellos seguramente pensaron lo mismo, pues, al instante, todos se apartaron

Tan pronto como, Ryu, quiso disciplinar a, Juri, por su falta de respeto, estalló la confrontación femenina iniciada inesperadamente por, Chun-Li, de la que nadie, absolutamente nadie esperó que fuera la primera en lanzar un golpe, aun si se tratara de, Juri Han, su mayor dolor de cabeza, Chun-Li, siempre fue la voz de la razón que evitaba el inicio de una pelea. Sin embargo, nadie se detendría a recordarle este hecho, pues, nadie sería tan estúpido para interponerse en una batalla entre mujeres por el corazón de un hombre, en especial, si una de ella es, Chun-Li. Aunque, tristemente nadie le ha enseñado tal cosa al pobre, Ryu, quien, estaba haciendo todo lo posible para detener el conflicto, viéndose atrapado en medio del ojo del huracán de filosas uñas, cabellos revoloteando y patadas sueltas sin ningún tipo de técnica. Casi eran audibles el sonido de feroces gatos de pelea en el lugar.

─Ryu, no temas, estoy aquí para ayudar... tal vez desde la distancia con un poco de zen y un gesto de paz. Aunque, sinceramente, la paz nunca fue parte de este espectáculo ─dijo, Dhalsim, manteniendo la distancia como el resto del duelo de fieras. Al tiempo que hacía el dicho gesto de paz antes de volver a su pose de meditación─. ¡cuánta violencia! A este ritmo hasta el yoga podría volverse violento... Ryu, orare por ti, si esta es la forma como tu resistencia es probada, espero tengamos suficientes vendas... ¡Ay, esas uñas son como armas letales!

─¿Así que ahora los besos forman parte de las estrategias de combate? ¡Qué ingenio femenino! ─comentó, Oro, divertido por la escena─ Si esto continua, necesitaré un sillón y unas palomitas para disfrutar de este drama de novela... Y, recuerden, queridas luchadores, la verdadera victoria es siempre un abrazo... después de la pelea.

Tras estos comentarios, algunos luchadores intentaron separar la pelea, en especial, ayudar a, Ryu, a salir del problema. Sin duda, una situación realmente complicada para ser resuelta pronto. Por otro lado, en algún lugar alejado de los bosques de japón, yacía un hombre bastante robusto, siendo, Akuma, quien observaba la pantalla con gran interés.

─Eres verdaderamente hábil para tu tamaño, pero demasiado débil para mis estándares, Shifu... Espero que quien sea este encerrado en esa prisión, este a la altura de mis expectativas, y no me haga perder el tiempo...─dijo, Akuma, con decepción por no ver una demostración mejor de habilidad. ─

[Dentro de la pantalla]

En pleno vuelo, Shifu, esquivó hábilmente el contraataque de la tigresa, asimismo, el ataque aéreo de grulla, al emplear el recurso de la voltereta en horizontal. El último en mención, al volver su atención a su objetivo, éste le recibió con un fuerte golpe en el intermedio entre el pico y la parte inferior alejada del ojo derecho.

Al estar nuevamente en el suelo, Shifu, fue interceptado por el ataque alado de grulla que, elegantemente, iba a por su cabeza. Al deslizarse con gracia bajo el batir de su alada, contraria a la dirección del ataque, fue que pudo esquivarlo.

Inmediatamente, tuvo que esquivar otro ataque furtivo de un nuevo atacante, siendo el mono que, saltó con agilidad atlética por encima de su cabeza, aterrizando en sus patas delanteras que le sirvieron de soporte para realizar una patada de pino, que fue bloqueada por la flauta de, Shifu, sin dificultad, al tiempo que neutralizaba la ofensiva de mantis, que fracasó miserablemente al atacarle por la espalda, recibiendo por su intento, un potente golpe de la palma de hierro de, Shifu, que lo apartaría del combate para concentrar su atención en mono.

Acto seguido, se desplazó en su dirección, reducción significativamente la distancia entre ellos en cuestión de segundos, antes de poder reaccionar. Como si fuera una danza, sus pies se movieron con sutileza y maestría. En un movimiento oscilatorio, Shifu, empleando su flauta, propinó un golpe de lleno en la barriga del mono que, a razón de su posición de pino, no tuvo posibilidades de defenderse. Para luego con este mismo instrumento, golpear el costado del mencionado, quien, además, del dolor, tuvo que soportar la humillación de ser manipulado como un trompo por el hombre que, aunque pequeño y aparentemente carente de músculos, tenía una fuerza decente. No conforme, fue arrojado en dirección a la grulla, impactando dolorosamente.

Al combate rápidamente se sumó la tigresa, que intentó conectar un golpe que fue hábilmente desviado con la misma habilidad con la que, Shifu, esquivó la posterior patada de rotatoria que iba a por su cabeza y piernas, al realizar un salto oportuno. Tan oportuno como la flauta en su mano que nuevamente fue de utilidad para el maestro, quien veloz en pensamiento analítico y más aún en sus próximas acciones, posicionó el instrumento bajo el cuello de la tigresa para atraerla en su dirección, recibiéndola, tras arrojar la flauta por encima de su cabeza para con habilidad notoria, manipular a la tigresa como un trapo viejo en las manos de un jodido niño de 5 años, que luego de divertirse un poco, arrojar su juguete lejos, en este caso, a la tigresa para que se mantuviera fuera del combate.

Cuando se deshizo de su adversario, Shifu, con naturalidad, adoptó una postura despreocupada para posteriormente recibir en sus manos la flauta antes que tocara el suelo. Concluyendo la confrontación, al propinar un último golpe de flauta al último de sus atacantes y, posiblemente el único que, hasta ese momento, no tuvo el privilegio de recibir, al menos, un golpe de su flauta, siendo, no otro más que la mantis que, como todos los anteriores a él, fue arrojado lejos, y, al igual que el resto, adoptó una postura marcial de combate en predisposición a continuar. Shifu, en medio de todos ellos, los miró de reojo, juzgando a cada uno, quienes indudablemente lucían agotados.

Cuando termino su juicio, Shifu, hizo girar la flauta entre sus dedos para acabar guardando el instrumento en su espalda, cuan espada que se envaina después de una escaramuza; para finalmente dirigirse a sus atacantes.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso animado: Universo Kung Fu Panda: Establecimiento del Señor Ping]

Un emocionado, Po, contemplaba la pantalla con excitación, observando cada movimiento, golpe, patada, pirueta, desplazamiento como si fueran la cosa más novedosa que jamás haya visto o escuchado jamás. Por primera vez en su vida podía ver a sus ídolos pelear, y, sin dudas, no estaba decepcionado. No paraba de gritar de emoción y emitir sonidos cada vez que veía una patada o golpe a centímetros de la pantalla. No dejaba de emitir comentarios que guardaban relación con la forma de como los cinco furiosos deberían actuar para enfrentar y derrotar a, Shifu. Era tanta la emoción que se cayó en más de una ocasión, mientras su padre divertido lo observaba mientras ambos compartían tiempo gracias a la pantalla.

─¡Wow! ¿¡Viste eso, papá!? ─dijo, Po, dando pequeños brincos y patadas de emoción con una gran sonrisa en su rostro.

A lo que el señor ping, simplemente contestó que sí, divertido por las infantiles reacciones de su hijo, las cuales le hacían recordar a los viejos tiempos cuando este apenas era un pequeño y gordo panda bebe.

[Multiverso anime: Universo: Boku no Hero Academia, comedor escolar]

Todos, estudiantes, maestros y héroes, por igual, en especial, aquellos que tenían conocimientos en artes marciales, quedaron absolutamente sorprendidos por la rápida demostración de habilidades, velocidad de ejecución en movimientos que muy pocos pudieron seguir, la enorme coordinación que acompañó siempre al trabajo en equipo, pero, sobre todo, como un único individuo que, además, era un anciano aparentemente inofensivo, había no sólo sometido con total facilidad a un grupo de atacantes jóvenes, expertos y saludables, también los había humillado, resultado que hizo que muchos de los estudiantes emitieran un aullido colectivo de asombro y emoción que se contagió a algunos profesores y héroes.

─¡Eso fue increíble! ─dijeron en conjunto, Itsuka Kendo, y, Ashido Mina.

─¡Estoy de acuerdo con ustedes! ¡La forma como ese señor manejó a todos, fue muy varonil! ─dijo, Kirishima, sin apartar sus ojos de la pantalla por la admiración que tenía hacia el viejo.

Mientras tanto en la mesa compartida entre héroes del ranking y profesores. La heroína, Mirko, gritaba como loca, cautivada con la demostración.

─¡De eso estoy hablando, viejo! ¡Mi sangre arde de emoción por una pelea! ¡Cómo me gustaría pelear contigo! ─dijo, Mirko, quien se había levantado de su asiento para hacer una escena.

─¡Mirko, por favor, siéntate, la gente nos está viendo! ¡Dios, es tan vergonzoso! ─expresó, Ryukyu, cubriendo su rostro por auto reflejo, deseando con ello, desaparecer.

─¡Es como ver una película de acción! ¿No lo crees, Deku-kun? Ese señor, en verdad, me ha sorprendido... Realmente me había preocupado porque estas personas lo lastimaran ─dijo, Uraraka, que tironeaba a su compañero por la emoción que no podía contener. ─

Ante la acción repetitiva, un avergonzado, Izuku Midoriya, asintió, al tiempo que hacía saber a su compañera de aula, su opinión compartida con respecto a su preocupación por la integridad del anciano, asimismo, la sorpresa que se había llevado por la demostración de habilidad. Sin embargo, cuando dejaron de hablar del asunto, y cada uno se concentró en sus propios intereses, Izuku, volvió su atención a la pantalla.

«¡Y no tiene un quirk! Es habilidad pura. Es increíble... ¿Es realmente posible volverse así de bueno con entrenamiento? ─pensó, Izuku, quien, con su atención en la pantalla, empezó a cuestionar sus propias creencias sobre la necesidad de tener un quirk para ser un héroe capacitado»

Retirando su atención de la pantalla por un instante, Izuku, con la mirada, recorrió el comedor pausadamente, observando a cada individuo presente con una habilidad propia. Miró a, Tenya Ida, cuyo poder, yace en sus pantorrillas en forma de tubos de escape, lo cual le permite alcanzar altas velocidades. En su opinión, una habilidad muy buena, sin embargo, quitando los motores, Ida, no pasa de una persona normal. Un disparo o una puñalada, y está muerto. Ahora su atención se posó en, Uraraka, y no pudo encontrar diferencias entre ella y un quirkless, sin sus poderes, no pasa de una persona normal, aún con ellos, es vulnerable ante un disparo, no diferenciándose de un quirkless. Posó su mirada en, Momo, Mina, Kendo, Nejire, Shimso, su profesor, Aizawa, Midnight, Sniper, llegando a la misma conclusión, miró al resto de compañeros, profesores y héroes, y no encontraba ninguna diferencia ¿Qué diferencia a un quirkless de un héroe? Claramente el poder con el que nace, al menos, es lo que siempre le han dicho y le han inculcado desde niño. No siendo posible ser un héroe si no se tiene un poder, pero viendo a este individuo que pudo someter a varios otros sin ninguna dificultad y usando únicamente una flauta dirigida con habilidad, se preguntaba ¿Qué hace un héroe realmente un héroe? ¿serían estas personas diferentes de mí sin un quirk? Obviamente, no, serían un civil más, un quirkless, concluyó, Izuko, ensimismado, para volver su mirada a la pantalla, sólo para cuestionarse lo patético que era. Nadie notó su estado, pues todos estaban sumidos en la emoción de la escena ante ellos. Antes que, Izuku, pudiera continuar lamentándose, un grito lo sacó de sus pensamientos.

─¿Me tienes que estar jodiendo? ¡Me niego a creer que un simple quirkless, en especial, una rata anciana, pudo hacer todo eso sin tener, al menos, un quirk! ¡Es completamente absurdo! Nadie sin algún poder de agilidad o alguna de esas mierdas puede hacer algo así ─dijo, Bakugo. A quien le saltaban las venas de la frente.

Ante la reacción de, Bakugo, muchos intentaron calmarle, entre ellos, Deku Midoriya, y, Kirishima, fracasando en el intento, siendo mandados a callar de la peor forma verbal posible por el desagradable estudiante, que estaba teniendo un nuevo ataque de ira que nadie se podía explicar. Quienes fueron inteligentes, decidieron mejor apartarse de su lado, mientras otros, insistieron en sus intentos por calmar a, Bakugo. Como siempre, Bakugo, había arruinado el ambiente. Antes que, Bakugo, pudiera continuar molestando con sus quejas, Aizawa, haciendo valer su autoridad como profesor, lo mandó a callar y guardar asiento, aunque el estudiante estuvo renuente a escuchar a su profesor, al final, no le quedó otra opción más que hacer lo que este le ordenaba.

La emoción seguía en su auge, nadie podía dejar de hablar de la habilidad del viejo maestro del kung fu que, para su mayor incredulidad, no era producto de un quirk, sino entrenamiento de décadas de dedicación disciplinaria, razón por la que los más dedicados y amantes del arte, llegando a cuestionarse si algún día podrían ser así de diestros y hábiles.

[Multiverso anime: Universo Baki: pre-período de los condenados a muerte, Mansión familiar de los Kaioh, sala principal]

La risa chillona del gran Kaioh, resonó en toda la sala. El viejo se había emocionado de gran manera por la demostración de habilidad, destreza y velocidad del viejo maestro del kung fu que, si bien, como había supuesto inicialmente, su arte está menos refinado, sin embargo, podía reconocer con cierto respeto, la dedicación aplicada durante décadas de perfeccionamiento.

─¡Bravo! Puedo reconocer que es muy hábil... para ser sólo un animal, sin embargo, es un poco decepcionante. Pensé que sería alguien más fuerte y capaz, alguien a la altura de mis expectativas. Cuanta decepción... aun así quiero pelear y probar a este, Shifu. Es una lástima que no exista en nuestro mundo ─Emitió su opinión, Kaku Kaioh.

─Maestro, no quiero ser yo quien cuestione su juicio, después de todo, no soy más más que su humilde discípulo, pero creo que subestima demasiado su habilidad. Esa técnica de la llave dactilar Wuxi, es extremadamente peligrosa ─Expresó, Retsu Kaioh.

─Es cierto... No eres más que mi discípulo, yo soy el maestro, no deberías cuestionar mi juicio, Retsu. Puedo parecer senil, pero mi oído y visión continúan siendo bastante buenos, asimismo, mi propio juicio, ¿Acaso ahora estás pensando que soy un deficiente que no se da cuenta de lo que pasa frente a sus ojos? ─cuestionó un ligeramente molesto, Kaku Kaioh.

Los presentes se estremecieron en su lugar por la sensación ruin que el viejo maestro desprendía por la ofensa. Entendiendo su error, Retsu, de forma inmediata, adoptó una postura de sumisión.

─¡Acepté mis disculpas, maestro, si le ofendí con mis palabras! ¡No debía...! ─dijo, Retsu, antes de ser interrumpido.

Kaku Kaioh, no le dejó terminar, pues inmediatamente disipó las preocupaciones de su discípulo con un gesto de mano sin importancia y unas palabras que enfatizaban este hecho. Luego de esto, Retsu, pudo respirar tranquilo antes de reincorporarse. Mientras tanto, en la antigua mansión familiar de, Emi Akezawa, difunta madre de Baki, el último mencionado yacía reunido en la sala familiar junto a su padre, Yujiro Hamma, su pareja sentimental, Kosue, Biscuit Oliva, Kaoru Hannayama, y uno de los pocos amigos, asimismo, el payaso personal de, Yujiro Hamma, el general, Strydum.

─Pensé que mostrarían un verdadero combate... Que maldita decepción, sólo me mostraron un mono dando palos con una flauta ─dijo, Yujiro Hamma, aburrido. Tomando un whisky de alta graduación.

─Vamos, ogro, hasta tú tienes que admitir que el pequeñín es bastante hábil... ─dijo, Oliva.

─Se burló, Yujiro Hamma, del comentario que para él resultó ser más una broma─ Creo que te has vuelto débil, Biscuit, si consideras ese circo habilidad, en mi opinión, nada me es interesante... Esto se ha prolongado demasiado, espero que la pantalla no tarde en mostrarme lo que promete.

Aunque le disgustara, Baki, no podía negar la verdad en las palabras de su padre, incluso él es mucho más fuerte y hábil que ese panda rojo, aunque el mencionado tuviera una mayor trayectoria marcial, por ende, más experiencia, él era mucho más fuerte. En lo único que discordaba con su padre era en el desprecio que este mostraba hacia el panda, pues, consideraba su arte hermoso y su habilidad bastante decente, reconociendo el hecho que posiblemente en ese mundo no muchos estuvieran a ese nivel y que, el simple hecho que aquel hombre tuviera tanta habilidad, a pesar de su tamaño, posible carencia de fuerza y explotando sus mejores cualidades, es digno de respeto.

[Multiverso cinematográfico: Universo UCM: Período era de ultrón, Torre de los vengadores]

─¡Wow!, definitivamente no me espere este resultado... ─comentó, Tony, sorprendido.

─Lo que a mí me sorprende es que, siendo tan pequeño, pudo levantar y manipular a su antojo a un tigre con tanta facilidad, y aún le diera tiempo para lidiar con los otros...─dijo, Natasha, levemente sorprendida─. La pantalla omitió información o nos mintió, aunque no lo parezca, a nivel muscular, es fuerte.

─Sería difícil lidiar con alguien tan pequeño y habilidoso, además, de rápido ─comentó, Steve Rogers.

─¿Qué sucede, Cap.? Temes que el pequeño pueda barrer el piso contigo ─dijo, Tony, conteniendo una burla─

─Es bueno saber que no es alguien de mal, pero quisiera ver cómo lidiar con él, Tony ─Devolvió la broma, Steve Rogers.

Ante este comentario, Tony, sólo rio para luego emitir un breve comentario: Touché.

[Dentro de la pantalla]

─Bien hecho, estudiantes [...] –expresó, Shifu, tranquilo y sereno al hablar, mostrando abiertamente una sonrisa sutil, que demostraba aparente complacencia con el resultado.

En ese instante, varios cuadros de descripción aparecieron en la pantalla, reconociéndose fácilmente que pertenecían a los atacantes, ahora reconocidos como estudiantes de, Shifu. El primero de ellos, apareció en la tigresa.

Nombre: Tigresa.

Raza/Especie: Tigresa del Sur de China.

Edad: 26.

Habilidades: Maestría en artes marciales, maestría en técnicas de sigilo, Velocidad superior a la de un gran felino, Agilidad superior a la de un gran felino, Fuerza física muy superior a un gran felino promedio, gran resistencia física.

Destrezas: Excelente esquive y defensa, combate armado y desarmado, estratega natural, Liderazgo, toma de decisiones rápidas, trabajo en equipo avanzado, control emocional, disciplina, determinación, adaptabilidad, Estilo del tigre de Hung (Estilo de combate feroz y contundente), resiliencia.

Poderes: ninguno.

Habilidad especial: Escaladora competente (con la ayuda de sus garras y técnicas, es capaz de escalar por superficies y terrenos difíciles, proporcionando ventajas tácticas), reflejos sobrehumanos (reflejos superiores a la de un gran felino promedio), palmas de fuego (realiza un potente golpe cruzado de palma doble, cuya fuerza de impacto se equipará a una honda de choque).

Para luego mostrar al mono:

Nombre: Mono.

Raza/Especie: Lengur dorado de Gee.

Edad: 22.

Habilidades: Agilidad y velocidad sobrehumana, creatividad en combate, habilidad para trabajar en equipo, resistencia, buenos reflejos.

Destrezas: Experto acróbata, Estilo del mono (Estilo marcial que simula los movimientos de los monos y emplea movimientos acrobáticos para el combate), dominio experto del bastón de combate, Experto practicante de parkour (disciplina que permite al practicante desplazarse con suma facilidad entre estructuras a través de acrobacias).

Poderes: ninguno.

Habilidad especial: Malos chistes (talento para distraer con tristes tan malos que harían llorar hasta un sordo).

Seguido de la grulla:

Nombre: Grulla.

Raza/Especie: Grulla de corona roja.

Edad: 23.

Habilidades: Velocidad y agilidad aérea, maestría marcial, pensador rápido, educador eficaz, resistencia, adaptabilidad, excelente visión.

Destrezas: Dominio del estilo de Grúa (Estilo de combate marcial que simula el movimiento de las aves), experto volador, eficiencia en combate al trabajar en equipo, estratega.

Poderes: Ninguno.

Habilidad especial: Percepción aguda (le permite detectar amenazas desde largas distancias), ráfagas de viento cortante (crea fuertes ragas de viento con el batir de las alas, capaz de cortar).

Para pasar a la pequeña víbora:

Nombre: Víbora.

Raza/Especie: Víbora verde.

Edad: 20.

Habilidades: Flexibilidad extrema (su cuerpo serpentino le permite realizar maniobras extremadamente fluidas y evasivas que son difíciles de predecir), Fluidez corporal, agilidad extrema, estratega.

Destrezas: Estilo de la víbora (estilo de combate altamente fluido, rápido y engañoso), bailarina de cinto profesional (experta en la danza con cinto), dominio del cinto de combate (su dominio del cinto, junto a sus habilidades de combate y baile, le han permitido adaptar esta herramienta de danza al área del kung fu), experta en el ataque sorpresa (gran habilidad para atacar desde ángulos anormalmente imposibles), inspiradora (tiene un talento natural para inspirar confianza en otros), gran sentido del humor (facilita sus interacciones con otros), trabajo en equipo, resiliencia.

Poderes: ninguno.

Habilidad especial: técnicas de envoltura (utiliza su cuerpo para envolver a sus opones para un desarme e inmovilización eficiente), dominio corporal completo (le permite aprovechar todos sus músculos, asimismo, la técnica de su estilo de combate para conectar potentes golpes), control del espacio (su cuerpo serpentino, tiene la capacidad de dominar el especio en el combate, haciendo que sus oponentes queden desprotegidos), escapes rápidos (excelente en el arte del escabullimiento para sorprender a sus enemigos).

Y, finalmente, Mantis.

Nombre: Mantis.

Raza/Especie: Mantis China.

Edad: 30.

Habilidades: Agilidad extrema, velocidad extrema, explosividad extrema, fuerza enana (tiene una fuerza sorprendentemente grande que le ayuda a lidiar con oponentes 20 veces superiores en tamaño), estratega, hábil luchador sincronizado, paciente.

Destrezas: Estilo de la mantis (estilo altamente especializado en golpes altamente precisos y contundentes), conocimientos avanzados de anatomía.

Poderes: Ninguno.

Habilidad especial: Golpes de veneno (realiza ataques simulan la picadura de un insecto, los cuales concentran toda la fuerza de impacto en un punto especifico del cuerpo, resultando en ataques altamente precisos y devastadores), ataque de acupuntura (ataca puntos específicos del cuerpo, paralizando al oponente al golpear determinados nervios), técnica del camaleón (su pequeño combinado con sus altos y prolongados arranques de velocidad, hacen difícil que sea detectado aun estando a plena vista, volviéndose un luchador altamente escurridizo y evasivo).

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso videojuegos: Universo Street Fighter: Dojo de Gouken, período posterior los eventos de Street Fighter 5]

Hace tiempo que la pelea entre mujeres había terminado. Incluso con esta inesperada interrupción de la visualización de los eventos en pantalla, ninguno se perdió de demasiado. Podría decirse que la pelea frente a ellos, podría incluso ser mejor que la mostrada en pantalla.

Para este punto, las heridas de, Ryu, estaban siendo tratadas por, Dhalsim, y, Chun-Li, quien, mientras desempeñaba esta labor, podría notársele enrojecida por la vergüenza de su propio comportamiento infantil que luego de disculparse con, Ryu, una única vez, se mantuvo callada tratando al hombre por la razón mencionada. El caso de, Sakura, era todo lo contrario, pues, era insistente en el acto verbal de dirigir a su maestro una repetitiva disculpa, mientras limpiaba la sangre alrededor de las heridas con motas de algodón humedecidas en alcohol etílico; aunque, Ryu, también fuera insistente en el acto de recordarle que estaba bien y que no debería ponerse en ese estado, que no pasaba de una niña nerviosa, asustada, avergonzada y cuyas expresiones tan cómicas daban la impresión que estaba próxima a romper en llanto, no llegando a ese punto para la buena fortuna de, Ryu ¿Cómo lidiar con una mujer en tal estado? Aun con sus afirmaciones, Sakura, fue insistente en su acto. El comportamiento de ambas mujeres alrededor de, Ryu, fue encontrado divertido por la mayoría de integrantes del dojo, en especial por aquellos más cercanos a los tres mencionados.

Mientras tanto, Juri Han, yacía cerca a los tres mencionados, curando por sí misma sus propias heridas, emitiendo pequeñas quejadas cada vez que el alcohol hacía contacto con las superficiales zonas sangrantes. Su estado no era el mejor. Parecía una amante de los gatos que aparentemente sufrió una revolución en su propio hogar por parte de sus propios gatos. Quedó cubierta de rasguños en todo el cuerpo, especialmente el rostro, aunque nada profundos, rasguños bastante superficiales; del mismo modo, quedó desaliñada, ahora mismo, su cabello era un desastre enmarañado oscuro. A pesar de su estado. La satisfacción no abandonó su expresión, que era mostrada con orgullo en forma de una sonrisa amplia que era dirigida a sus rivales para su molestia.

─Malditas ladronas rompe hogares... Amigui, nunca espere esta traición de ti. Primero yo y luego el guapetón de, Ryu. ¡Ya decídete! ¿Con quién te quedaras?

Y, con su tendencia a provocar caos, Juri Han, no abandonó las bromas de la discordia, lanzando un último beso y un guiño a, Ryu, para el desconcierto y la vergüenza del mencionado, asimismo, la molestia de las damas interesadas en el hombre.

Luego del drama de corazones, volvieron su atención a la pantalla justo a tiempo para enterarse de la revelación que los atacantes, eran sus alumnos, que todo resultó ser un combate de entrenamiento. También para poder visualizar los cuadros de descripción, los cuales resultaron ser bastante atractivos para absolutamente todos, asimismo, bastante sorprendente para unos pocos con una tendencia natural a la sorpresa excesiva. Los comentarios, no tardaron en llegar.

─Parece ser que nos hemos engañado... Es bueno que ese hombre nunca haya estado en peligro. Aun si la amenaza no fue real, sin dudas, fue una prueba dura donde nadie se reservó la potencia de sus golpes, lo cual aún nos demuestra cuan buen maestro y hábil artista marcial es, Shifu ─Expresó, Gouken, cruzado de brazos.

Nadie pudo refutar este hecho, el viejo maestro del ansatsuken, tenía razón.

─¡Wow! ¡Sakura, mira! ¡Estos tipos me han engañado, aparentaban ser débiles, pero son bastante fuertes! ─Expresó, Elena, emocionada, deseando ella misma probarse contra ellos.

─¿¡Qué dices...!? ¡Para mi siguen pareciendo bastante débiles! ─expresó, Makoto, menospreciando la opinión de su rival.

─¡Estoy de acuerdo con el chico! ¡No parecen la gran cosa, sobre todo si comparamos su habilidad deficiente con mi super talento para la...! ─comentó, Dan Hibiki, exudando una arrogancia tan impropia de sus propias capacidades y talentos para la lucha. Mientras hacía una pose exageradamente excéntrica, todo lo anterior lo decía en un tono caricaturesco que rápidamente se convirtió en un lamento y un chillido cuando un dolor extremo rápidamente atravesó su cuerpo para luego caer en el tatami casi al borde de la privación.

¿Qué había sucedido? Una eufórica, Makoto, había pateado la entrepierna de, Dan, por atreverse a confundirla con un chico. A causa de este mismo golpe contemplado por cada hombre en la sala, por reflejó natural, todos experimentaron este dolor fantasma que por reflejó los obligó a cubrir su entrepierna, al tiempo que, en consonancia, casi como un coro eclesiástico, compartieron abiertamente una queja similar a un alarido de dolor reprimido. Con la excepción de algunos que sólo se estremecieron en su lugar, siendo el caso de, Gouken, Ryu, Oro, y, Dhalsim.

─¡Imbécil! ¿¡A quién llamas chico!? ¡soy una chica!

Luego de acto deshonroso, Makoto, fue reprendida por, Elena, su rival, y el resto de chicas luchadoras, instándola a nunca repetir este acto en el futuro. Dan, por su parte, tenía una bolsa de hielo en las pelotas mientras cómicamente lloraba por el pensamiento recurrente que no tendría descendencia, ello mientras su amigo, Blanka, intentaba animarle, asimismo, su amiga y "discípula", Sakura.

─Volviendo al asunto...Elena, realmente no creo que aparentaran ser débiles, pienso que el maestro, Shifu, es tan bueno que los hace parecer débiles a su comparación. Después de todo ¿¡Has visto ese repertorio de habilidades!? ─dijo, Sakura, incomoda por la escena anterior.

─Elena, rio con modestia y algo de vergüenza─ Lo siento, creo que me dejé llevar.

─Excelente deducción, Sakura. Es lo que ocurre cuando existe una brecha bastante remarcada de habilidad entre dos individuos. Usualmente quien es más habilidoso, eclipsa al menos hábil ─dijo, Ryu, sobando la cabeza de su aprendiz con cariño.

Un «Gracias, maestro» fue lo único que pudo expresar la nerviosa, Sakura, sintiéndose tan feliz, pero terriblemente penosa por la caricia que mantuvo su cabeza gacha, ocultando un claro sonrojo que sólo fue inadvertido por, Ryu.

─Parece ser que la líder y mejor miembro de los alumnos de, Shifu, resulta ser una chica... Me gusta, ¡y me agrada todavía más ya que es un gato grande! ─dijo, Cammy, apenas conteniendo su emoción por la presencia de la gran felina que, además, de causarle admiración, también le hacía sentir ternura y cariño en el corazón por su amor incondicional a los gatos.

─Bueno..., es cierto, es por mucho la más hábil y completa luchadora de los miembros restantes. Resaltó demasiado durante su conflicto contra, Shifu. Tuvo gran participación y su ferocidad aparentemente desmedida, estuvo muy bien dirigida en sus movimientos. Es...

─Alguien con quien, sin dudas, desearía tener la oportunidad de pelear en igualdad de condiciones... ¡Uff! Lo siento, amigui, ¿Decías algo? ─Interrumpió, Juri Han, los comentarios de, Chun-Li.

Ante la provocativa, Chun-Li, sólo contestó a su rival sin mucha importancia para no dar a la última más material para molestarla. Si bien, ahora la toleraba más luego de reconocer en ella una pizca de bondad, este hecho no le quitaba lo molesta e insoportable que era.

─Bueno, dejando de lado las bromas. Se nota que no es una novata. Esos atributos son bastante altos. Con esos reflejos felinos sería difícil pelear a la par con ella. Pero estoy más interesada en esos movimientos con los pies, fueron bastante fluidos y de difícil ejecución, nunca había hecho algo similar. Me gustaría poder aprenderlos ─dijo, Juri Han.

─No me gusta estar de acuerdo contigo, pero por esta vez, concuerdo. Sería bueno aprender movimientos como los que hizo. Me gustaría poder hacerme con la habilidad para adquirir aquellos movimientos y patadas ─comentó, Chun-Li.

Ante este comentario, Juri Han, hizo otro, burlándose del hecho que por primera vez se habían puesto de acuerdo en una cosa, sugiriendo que estaban a un paso de convertirse en almas gemelas que el destino había unido hace muchos años luego de su pasado "Flechazo de colegiala". Un comentario que, sin dudas, hizo que las venas en la frente de, Chun-Li, se remarcaran al punto de palpitar.

─Concuerdo. Encuentro interesante ese ataque "Palma de fuego". Según la pantalla, es poderoso, espero que sea empleado con responsabilidad por esta, Tigresa ─comentó, Ryu, interesado en los luchadores y sus habilidades.

─Blanka, querer luchar. Mono, parecer divertido. Parecer buen amigo ─comentó, Blanka, dando brincos de alegría y emoción.

─Es irónico como los estilos de kung fu que fueron creados tomando como base el movimiento de los animales, ahora sean respectivamente usados por los mismos animales. A veces la vida puede ser irónica ─Comentó, Fei Long, quien se mantuvo callado desde su llegado al complejo, observando paciente.

Ante el comentario de, Fei Long, los maestros más diestros, emitieron una risa irónica que no tenía la intención comunicar burla. Seguidamente le dieron la razón para continuar posando su atención en el resto. Cuando, Ken Master, contempló con atención la habilidad especial de, Mono, no pudo evitar privarse de la risa por el nombre y la descripción de su habilidad que parecía más un chiste que una descripción en términos generales. Siendo acompañado por su alumno, Sean, y la hermana de este último, Laura, quienes compartían con el primero en mención sentido el humor.

─Querido, no seas irrespetuoso ─comentó, Eliza Master, aunque la misma apenas se contenía.

─Oponentes pequeños, esos son tan molestos. Son buenos para escabullirse frente a tus narices ─comentó, Rainbown Mika, contemplando a, Víbora, y, Mantis, recordando sus propias malas experiencias combatiendo con rivales considerablemente más a pequeños a ella

─da, son molestos, pero no representan problema alguno para la musculatura de, Zangief. Esas pequeñas ratas pueden correr y escabullirse, pero cuando el brazo duro de la madre rusia los toma, aprenden algo más que correr... aprenden a chillar ─comentó, Zangief, con su asentó natal, al tiempo que flexiona sus músculos prominentes con orgullo para la admiración de, Mika, pero la incomodidad del resto.

No deteniendo allí sus argumentos.

»Sin embargo, por lo que veo, estos dos son la excepción, saben correr, aunque también saben atacar y con mucha potencia por lo que estoy viendo. Pero no creo que sean la gran cosa si se enfrentan a las técnicas de combate de mi tierra.

Ante el menosprecio de las habilidades de los individuos más pequeños mostrados, Ryu, intervino.

─No creo que debas menosprecia la habilidad de otros, incluso si tus oponentes son más pequeños. Tal vez tu vista te fallo, pero este, Mantis, tiene la fuerza suficiente para derribarte en el suelo y tratarte como una muñeca de trapo. Y la pequeña, Víbora, podría romper tu brazo o usarlo en tu contra, si se llega a envolver. Deberías considerar la prudencia al hablar.

Gouken, Dhalsim, y, el propio, Oro, no podrían estar más orgulloso de, Ryu. El primero sólo pudo sonreír para sí mismo por ver en su hijo adoptivo y alumno, la figura futura de hombre viejo que carga con una gran sabiduría y que reprende a todo aquel que sólo emite juicios infundados. El comentario no mal intencionado, sin embargo, mal interpretado por, Mika, la hizo molestar, pues, tan despistada como siempre fue, confundió las palabras de, Ryu, con una ofensa. Quiso decir algo, pero fue detenida en el acto por, Zangief, quien, sonriendo se dirigió al hombre.

─Tal vez tengas razón, pero, aun sostengo que los oponentes pequeños son bastante molestos. Pero reconozco que tu argumento tiene mérito, si me confío, podría perder y, Zangief, nunca pierde.

Ryu, sólo sonrió, no dando una respuesta al hombre de inmediato, sólo respondiendo al cabo de unos segundos con un simple "Está bien", respuesta que extrañamente satisfizo al masivo hombre, quien volvió a sentarse junto a su fan número uno. No había mucho que ver ni que opinar respecto a los guerreros en pantalla, pues, si bien, tenían habilidades especiales bastante buenas, y sus habilidades, también eran decentes, no era nada que pudiera escandalizar a los presentes, pues, a lo largo de su trayectoria de vida, vieron cosas más sorprendentes.

[Multiverso animado: Universo Kung fu Panda: Patio de entrenamiento exterior]

─¡Oh, viejo! ¡Vamos! ¿No soy tan mal comediante para que mi habilidad especial sea ese y sea tomado como una burla? ¿Cierto? ─dijo, mono, buscando en sus compañeros una respuesta sincera.

Sólo encontrando en cada uno de ellos, un rostro cubierto por una mano que buscaba esconder una sonrisa burlona o, peor aún, una risa. Excepto por, Mantis, quien abiertamente se rio del chisto por descripción que tenía la habilidad de su compañero y amigo. Incluso la propia tigresa, quien, siendo tomada desprevenida por la habilidad de su compañero, luchaba por no romper su fachada estoica y severa. Víbora, era un caso diferente, reía con la sutileza de una serpiente y la elegancia de una dama de alta clase, cubriendo su hocico con su cola.

─¡No tiene gracia! ¡No es gracioso, muchachos! ─dijo, mono, ofendido por lo mostrado y las burlas dirigidas a él. Lo que más le molestaba y que era muy consciente es que otros también sabrían de esto y se estarían burlando de él. Lo cual le deprimía, pues le hacía recordar a su pasado.

Para su buena suerte, sus compañeros que inicialmente se burlaron, estaban allí para reconfortarlo.

Ante el elogio, los guerreros adoptaron de forma inmediata, una postura de saludo marcial como una muestra de respeto hacia el maestro. La complacencia disimulada recorría el rostro de los guerreros, pues, concluyeron haber cumplido, al menos, en esta ocasión, con las expectativas de su maestro, sin embargo, el maestro, Shifu, no había terminado de hablar. La ardiente severidad puesta en las palabras criticas siguientes, los trajo de vuelta a su realidad.

»¡Si lo que querían era decepcionarme...! ¡Tigresa, más ferocidad!, ¡Mono, más velocidad!, ¡Grulla, altura!, ¡Víbora, sutileza!, ¡Mantis...!

Los infinitos espectadores, quienes inicialmente catalogaron a, Shifu, como un maestro paciente y gentil con sus estudiantes, a juzgar por el comportamiento sumiso que había demostrado; nuevamente se sentirían engañados por el hombre de personalidad tan complicada que logró sorprender a todos, una vez más. Ahora dándose cuenta que el viejo panda, a pesar de su apariencia bonachona inicial es, en realidad, un individuo complejo, como maestro, es bastante severo, al punto de dar críticas bastante directas, sin rodeos. Viendo la personalidad real de, Shifu, jóvenes aprendices de la disciplina, quienes deseaban conocer al hombre para recibir dirección y retroalimentación, ahora se arrepentían de sus propias declaraciones.

Shifu, antes que pudiera emitir un juicio acerca de las deficiencias del último de sus estudiantes, fue interrumpido por un individuo reconocido por el viejo panda como el mensajero, Zeng, quien sumisamente y entre susurros, intentó llamar su atención para no irritar al fácilmente irritable panda, fallando muy miserablemente, pues, apenas mencionó su nombre, el viejo panda estalló en un grito interrogante: ¿¡Qué!?, al tiempo que apuntaba amenazadoramente con la flauta al pobre ganso que, acobardado, emitió un grito bajo por la repentina acción del viejo panda. Aun así, no quería irritar más a, Shifu, a razón de este hecho, comunicó el mensaje, haciéndole saber al mencionado que, el maestro, Oogway, deseaba verlo.

La molestia creciente del viejo maestro, fue inmediatamente aplacada por la mención del legendario hombre que despertó las alarmas en la mente de, Shifu. Él mismo, sin demora, luego de salir del trance, se condujo corriendo al encuentro con el maestro.

Este comportamiento, no pasó desapercibido por los infinitos espectadores. Gracias a las pantallas que brindaron información crucial acerca de este mundo, reconocían el nombre del legendario maestro del kung fu, a quien muchos de los espectadores deseaban conocer, y ahora mucho más, a razón del comportamiento anormal del viejo panda que, a la percepción analógica de muchos, Shifu, ahora se mostraba más como un niño que es llamado por un adulto respetado o, en otro sentido, un hijo que es llamado por su amado padre. En este caso, un alumno que es solicitado por un viejo y apreciado maestro, lo cual, indudablemente, causó una excelente primera impresión del hombre que, sin estar presente o mostrarse hasta ahora, y que sólo saben de él por menciones, por alguna razón, empezó a ganarse el cariño y respeto de muchos de los infinitos espectadores, quienes para este punto estaban ansiosos por conocer al mencionado, maestro, Oogway.

En un cambio de escena. Se mostró a, Shifu, ingresar corriendo al conocido "Palacio de Jade", cuyas imponentes puertas, tras su ingreso, fueron cerradas por la servidumbre a cargo, dejando la gran cámara sumida en una oscuridad parcial. Antes de continuar, Shifu, se tomó un tiempo para calmar su agitación, disminuir su estrés y ansiedad para estar presentable ante el honorable maestro. Emitiendo una última exhalación controlada, adoptó una postura de respeto tradicional china hacia el maestro.

─Maestro, Oogway, ¿Desea verme...? ¿Ocurre algo? ─expresó, Shifu, con un atisbo de ansiedad e incertidumbre. Al tiempo que dirigía una mirada suplicante al hombre frente a él, teniendo una expresión bastante complicada que sólo podía distinguirse malestar. Asimismo, una sospecha ligera que sólo pensaba en el peor de los escenarios.

Frente él, yacía erguido con firmeza, sobre una pulida superficie de jade, un bastón de madera rústica y de constitución bastante delgada, con una apariencia, un tanto, peculiar. En su cima, postrado en perfecto equilibrio, se muestra un gran caparazón, del cual, empezaron a brotar cuatro extremidades, que se aferraron al objeto mencionado para posteriormente bajar por el mismo, al tiempo que se asomaba una cabeza bastante alargada. En ese instante, como la vez anterior, la se mostró un cuadro de descripción:

Nombre: Oogway.

Raza/Especie: Tortuga de los galápagos.

Edad: desconocida.

Habilidades: Agilidad excepcional, velocidad absurda (su alta velocidad lo hacen casi invisible ante sus enemigos), fuerza física excepcional, explosividad muscular excepcionalmente alta, resistencia física y mental excepcional, flexibilidad absurdamente alta, voluntad inquebrantable (imposible que sea doblegado), equilibrio sobrehumano, sabiduría profunda, intuición super desarrollada (tiene una capacidad notoria para comprender la naturaleza de los seres y las cosas), paciencia inagotable, dominio corporal absoluto (tiene un dominio absoluto de los músculos de su cuerpo, al punto poder utilizar cada gramo de fuerza muscular y focalizar está en un punto para conectar golpes tan potentes que tienen el potencial infinito de incapacitar a un enemigo, incluso con la fuerza de impacto de un único dedo), experto acróbata.

Destrezas: Maestría absoluta en Kung Fu, Dominio absoluto del combate desarmado, Maestro experto en el combate con bastón (es capaz de utilizar este objeto como una extensión de él mismo), estratega excepcional (su basto conocimiento y experiencia de vida, le hacen capaz de planificar y anticipar el movimiento de sus adversarios), mentor excepcionalmente competente (tiene facilidad para guiar a los otros por un buen camino), sabiduría de consejeros (sabe cómo y cuándo dar consejos, adaptándose a las necesidades del receptor), guía espiritual, inspiración, técnicas de evasión de muy alto nivel, técnicas defensivas de muy alto nivel.

Poderes: Trascendencia (su profundo conocimiento de la vida y la muerte lo hacen capaz de trascender la existencia física), conexión profunda con el chi (su alto nivel de comprensión y conocimiento de la energía vital de su universo lo hacen capaz de dominar ésta a niveles nunca antes vistos), gran longevidad.

Habilidad especial: Visión profética (es capaz de prever eventos futuros), visión profunda (es capaz de ver el potencial oculto de los otros), empatía super desarrollada (es capaz de comprender a todos los individuos y saber sus intenciones), armonía (su sola presencia trasmite paz e influencia a otros), golpe a los nervios (tienen el potencial de noquear e inmovilizar partes del cuerpo de los oponentes con un golpe certero a los nervios asociados con la parte del cuerpo afectada).

[Fuera de la pantalla]

En un principio, cuando los infinitos espectadores contemplaron al maestro, Oogway, se decepcionaron, pues, lo único que veían era un anciano, incluso más viejo que, Shifu. Sí bien, muchos aprendieron a no dejarse llevar por la apariencia, a razón de lo visto anteriormente, otros con el gen de la estupidez, continuaban cometiendo el mismo estúpido error, no siendo una sorpresa, en lo absoluto, su reacción de incredulidad y asombro, que fue mayor a la de sus semejantes, cuando contemplaron el cuadro de descripción. Dejando nuevamente un hecho bien en claro, no volver a subestimar este mundo y a sus individuos, en especial a este. Comprendiendo ahora, el porqué es el fundador de este arte marcial.

[Multiverso animado: Universo Kung Fu panda, 1 mes antes de la huida de Tai Long, Valle de la paz, restaurante familiar del señor Ping]

Una expresión exageraba de sorpresa e incredulidad infantil, yacía grabado permanentemente en, Po, quien no podía concebir como verdad lo que veía. Y no porque dudara de la procedencia de la información, sino por la magnitud de las capacidades del legendario maestro del kung fu que dio inicio a todo. No sabía que decir, apenas podía murmurar incoherencias mientras constantemente desviaba su atención entre su padre y la pantalla, en un intento por dar a su padre, su opinión. No pasó demasiado antes que, Po, estallara en un grito al cielo que obligó a su padre a cubrirse los oídos:

─¡Qué bárbaro! ¡Lo estás viendo, papá! ¡El maestro, Oogway, es tan increíble!

─¡Po! ─regañó, el señor Ping, por el grito inicial ─Sí, lo estoy, viendo, pero, por favor, cálmate un poco, hijo, o destruirás mi establecimiento más que los otros brutos que se fueron sin pagar.

Con esta verdad, Po, expresó una disculpa sumisa y sincera, acompañada de la típica excusa de haberse emocionado de más. Acto seguido, volvió su atención a la pantalla, de la que no despegó la vista mientras recorría en su plenitud el cuadro de descripción, teniendo la expresión de un niño que acaba de conocer a uno de sus mayores figuras de inspiración. Ensimismado en su acción, Po, deseaba poder conocer a estas personas algún día, abandonar su vida de un simple mesero y hacer realidad su sueño de convertirse en un guerrero bárbaro, ampliamente respetado y reconocido como siempre había soñado. Esta expresión, no fue pasada desapercibida por el señor, Ping, quien, cambiaba su atención entre la pantalla y su hijo, cuestionándose: ¿Si era esto lo que su hijo deseaba?

Mientras tanto, en el patio exterior de entrenamiento del palacio de jade, los 5 furiosos yacían contemplando la pantalla con distintos grados de sorpresa como incredulidad, incluso, la siempre inexpresiva, Tigresa, para este momento, con los ojos bien abierto, era incapaz de disimular u ocultar su sorpresa.

─Antes creía que el maestro, Oogway, era increíble, pero..., es mucho más increíble de lo que pensé. Nunca me imaginé que este sería el alcance completo de sus habilidades... ─comentó, Grulla, entre tartamudeos, luchando por comunicar lo que todos estaban pensando ahora.

─Pues, te equivocaste, no es sólo increíble, es mucho más que increíble... No creo que existan palabras para definir qué tan sorprendente es... Compararme con él, me hace sentir pequeño... ¡En un sentido figurado, que te estoy viendo, Mono!, ¡y sé que pensabas hacer un comentario sobre mi tamaño! ─comentó, Mantis, cuya sorpresa no abandonó su expresión, hasta sus últimas palabras que reflejaban irritación controlada, al tiempo que le apuntaba con su espolón.

─Tranquilízate, amigo, no pienso molestarte con eso... Sólo quería decirte que me siento igual, y dudo que seamos los únicos... Nos supera en todos los aspectos. ¡Es veloz, ágil, fuerte y un acróbata seguramente, mucho mejor que yo! Pero supongo que es normal, después de todo, es nuestro maestro y maestro de nuestro maestro ─concluyó, Mono.

─Es cierto... Aun así, es sorprendente el nivel de habilidad y maestría del maestro, Oogway... No es sólo un guerrero notable, sino también un maestro excepcional... ─comentó, Víbora, con nada más que admiración por el hombre en pantalla.

─Es una lástima que este "espejo extraño" no ilustre sus habilidades... ─comentó, Tigresa, tan poco informativa como era costumbre, pero, internamente deseaba con todo su ser, ser testigo de las habilidades que más le han llamado la atención, como el dominio corporal.

─Estoy de acuerdo contigo, Tigresa... Siempre me he preguntado como hace el maestro para tener visiones. Me hubiera gustado ver eso... ─compartió, Víbora.

A lo cual, todos estuvieron de acuerdo, mientras respectivamente cada uno compartía su opinión personal acerca de lo que deseaban conocer más a fondo sobre el maestro, Oogway.

Mientras tanto, en el árbol de duraznos de la sabiduría celestial. Un atónito, Shifu, contemplaba a su maestro con mucha más reverencia, luego de lo mostrado en pantalla. Toda su vida confió en las enseñanzas ancestrales que su maestro le legó, incluso en aquellas lecciones que, para un joven, Shifu, no tenían sentido ni peso por el simple hecho de no comprender estas, sin embargo, confió en sus enseñanzas, como un hijo confía en que su padre para que le instruya sobre cómo afrontar los desafíos de la vida y el universo, y nunca se ha sentido decepcionado de ninguna forma. Shifu, siempre se preguntó ¿Cómo lo hacía? ¿Cómo siempre tenía razón? ¿Cómo nunca se equivocaba? Y siempre se lo preguntó, durante su vida entera, y ahora conocía la verdad, ahora todo tenía sentido. Sin poder contener su deseo por preguntar, Shifu, quiso cuestionar a su maestro para aliviar su curiosidad y salir de su shock.

─Maestro, ¿Usted...?

Sin embargo, fue interrumpido en el acto por, Oogway, quien, dedicándole una mirada jovial y comprensiva, como si un anciano estuviera viendo a un curioso niño que nada en confusión, le sonrió sin ninguna preocupación por lo descubierto sobre él. Acto seguido, le dio su respuesta:

─Sí, la pantalla no miente, Shifu, todo eso puedo hacer... humildes trucos que aprendí a lo largo de mi vida.

─¿Humildes trucos...? ─dándose cuenta de su exaltación, Shifu, se calmó─ Entonces, ¿usted vivirá para siempre? ¿Nunca me abandonara, maestro? ─cuestionó, Shifu, dejando escapar un atisbo de inseguridad al hablar.

─Y, ¿qué es vivir para siempre, Shifu? ¿Realmente morimos, existe algo después de la muerte, reencarnamos o transmutamos para volvernos un todo con el universo nuevamente y repetir un interminable ciclo? ¿Qué es la muerte? ¿Es un estado permanente o temporal? ¿o sólo es el siguiente paso para alcanzar un estado mayor? Son tantas preguntas para hacerse que no tienen una respuesta clara... ─divagó, Oogway, por un momento, mientras su mirada se perdía en la lejanía del cielo azul, para luego volver a centrarse en su alumno para primero reír sin malicia para proseguir─ No vale la pena preocuparse por incógnitas que sólo suman malos pensamientos a nuestra vida. La vida está para ser vivida y no para vivir preocupado por cosa como la muerte. Todos moriremos algún día, Shifu, no hay excepciones. Es una regla fundamental de vida: "Todo lo que vive, un día, tiene que morir". Es lastimoso que la muerte sea vista como algo malo, y no como parte de nuestra vida... Sé que temes al abandono, mi amigo, pero recuerda, no estás solo, sólo estás ciego y no te permites ver. La muerte, es el comienzo y el fin... Todos morimos, incluyéndome.

Nuevamente, Shifu, se sentía frustrado por no comprender las divagaciones de su maestro. Existen momentos como el actual, en los cuales, Shifu, podía volver a experimentar la incomodidad por verse nuevamente como el inexperto estudiante que fue algún día. Ahora como muchas veces en el pasado, se sentía molesto, pues, aunque respetaba a su maestro y sabía que este siempre le desearía lo mejor, asimismo, que siempre sabía que decir, incluso cuando esto podía provocar su ira, le molestaba por alguna razón que ni el mismo podía distinguir. Para simplemente olvidar este sentimiento, optó por hacer una pregunta más.

─¿Cuánto tiempo ha vivido, maestro?

─Quién sabe..., el tiempo es relativo, Shifu. Ayer, puede ser hoy, hoy, puede ser ayer, del mismo modo que, mañana, puede ser ayer u hoy, en diferentes lugares. Pero si lo que buscas es una respuesta simple, diré: mucho, mucho tiempo ─respondió, Oogway, quien, volvió su mirada a la pantalla.

A veces, sus respuestas enigmáticas podían resultar tediosas para, Shifu, como ahora, por la misma razón, ya resignado, simplemente volvió su mirada a la pantalla, liberando su frustración a través de un audible suspiro.

[Multiverso anime: Universo Baki: pre-período de los condenados a muerte, Antigua mansión familiar de Emi Akezawa, sala principal]

Todos los presentes, con la excepción más que obvia de, Yujiro Hamma, fueron sorprendidos al punto de la conmoción, pues, si bien, nadie esperaba nada de este mundo, ya que lo consideraban un mundo de simples animales que sólo tenían de especial el que podían hablar, y, aunque al principio fue sorprendente el hecho que practicaran artes marciales, lo cual fue emocionante, su notoria falta de habilidad y luchadores a la altura de ellos, les hizo perder rápidamente todo el interés que hayan podido tener por cualquier individuo de este mundo.

Sin embargo, la visión de estos fue cambiada por completo, cuando vieron al hombre que, al principio de la reacción, era grandemente aclamado como el mejor en toda su historia. Baki, con los ojos muy abierto, así como su boca, no daba credibilidad al arsenal de habilidades del hombre, quien le dejó sin palabras. Oliva Biscuit, por su parte, estaba muy emocionado, deseando poder pelear con el mencionado, Oogway, algún día. Mientras tanto, Yujiro Hamma, reía como todo un maniaco.

─¡Oh! Este viejo si es interesante... Y pensar que, entre tantos debiluchos y despojos de mierda animal, podría haber alguien decente con quien pelear, podría durar para, al menos, servir como entretenimiento por un rato. No importa cuantas habilidades tenga la tortuga, a mis ojos, continúa siendo un debilucho... ─comentó, Yujiro Hamma, con arrogancia para luego volver la mirada a su hijo con desprecio─. Es realmente patética, Baki, tu renovada admiración por el viejo y sus pobres habilidades... ¿En serio eres mi hijo? ¡Patético, igual que tu madre! Un hijo que admira a alguien más débil que él... Eres decepcionante, niño.

Baki, escuchando como su padre se refería a él con tanto menosprecio y una completa falta de respeto, asimismo, insultaba a su difunta madre, procedió a levantarse de su posición para encarar a su padre como un hombre que defiende su honor y el de aquellos que ama. Sin embargo, fue detenido por, Kozue, quien le tiro del brazo que le brindaba a la mujer de seguridad entre tantos monstruos que le rodeaban. La misma temía de, Yujiro Hamma, y de lo que el mencionado podría hacerle a su novio si lo desafiaba o le faltaba el respeto de alguna forma. Para la tranquilidad de su pareja sentimental, Baki, tan comprensivo, optó por guardarse sus opiniones y volver a su lugar.

─¡Oh! Vamos, Ogro, no puedes hablar en serio... Sé que no lo parece, a nuestra comparación, sólo es una vieja tortuga, pero, por favor, esa tortuga es un templo de conocimiento, poder, fuerza física y mental, y habilidad de posiblemente cientos de años... No digo que seas más fuerte que tú o que yo, pero debes admitir que para una tortuga es bastante sorpréndete, sobre todo esa habilidad de transcender ─comentó, Oliva Biscuit, con su eterna sonrisa y el buen humor siempre acompañándole.

─Simples trucos sin valor que sólo se puede encontrar en esa mierda para maricas que llaman kung fu. Nada de eso me importa, si es fuerte o no, sólo eso es importante. La fuerza para doblegar a tus oponentes y hacer lo que sea, es lo único que importa y nada más ─expresó, Yujiro Hamma, quien había perdido interés por lo visto en pantalla.

─Bueno, es tu opinión, sin embargo, estoy en desacuerdo, en mi opinión, el viejo es genial, además, se ve como alguien con quien fácilmente me podría llevar bien... ─contestó, Biscuit Oliva.

─Por supuesto que estarías en desacuerdo, después de todo, nadie más que tú podrías estar rodeado de debiluchos y considerarlos, amigos... ─decía, Yujiro, al tiempo que hacía comillas con los dedos de forma burlona─ Espero no te estes haciendo débil, Oliva...

─Nunca me permitiría tal ofensa hacía mí persona, mi mujer depende de mí y mi fuerza, si me permitiera ser débil, ¿Quién podría cuidar de ella? Así que no, Ogro, si no fuera por ti, porque existes, sería actualmente el más fuerte... ─comentó, Oliva Biscuit, eternamente sonriente, burlándose un poco de su más grande rival y amigo por igual.

─Tú y tus melosidades asquerosas, siempre arruinando el ambiente con esas declaraciones... Lastimosamente para ti, existo y después de mí, no existe nadie más fuerte que yo ─comentó, Yujiro Hamma, divertido por el intercambio de pequeñas ofensas del uno al otro que iban dirigidas como bromas entre amigos.

─Pero ¿Por cuánto tiempo? Hasta ahora, nadie te ha superado, pero estoy seguro existirá alguien que este a tu nivel o aun te pueda superar.

Con la finalización de las últimas palabras, Biscuit Oliva, empezó a reír con su tono habitual. Ante la declaración, Yujiro Hamma, sólo rio a carcajadas por el mal chiste que, de forma bastante irónica, era tan malo, pero tan bueno al mismo tiempo ¿La razón? El pensar que algún día alguien le podría superar representaba una broma en sí misma. Yujiro, sólo desestimo su declaración y la descartó como algo sin valor. Antes de volver su atención a la pantalla, la mirada de, Oliva, se posó en el vástago del ogro, Baki Hamma, quien estaba siendo calmado por su amigo, Kaoru Hanayama, por la última ofensa que recibió por parte del ogro. Cuando lo miraba, por alguna razón, aunque este no le haya demostrado nada, sentía confianza que el niño que compartía sangre con el monstruo, algún día le podría superar, sino era el caso, entonces, al menos, le podría dar la batalla que siempre, Yujiro Hamma, había deseado.

Mientras tanto, en el Shinshinkai Dojo Karate, Doppo Orochi, Katsumi Orochi, asimismo, los estudiantes del primero en mención, yacían contemplando la pantalla. Los últimos conversando entre sí con emoción e incredulidad como niños pequeños que nadan en la emoción por contemplar algo poco común. Por su parte, padre e hijo, hablaban entre sí.

─Los últimos guerreros fueron increíbles, pero este hombre está a un nivel completamente diferente... Pensé que sólo veríamos una fuga de prisión, tal vez una fuga masiva de una prisión imposible de huir, pero, aún no llegamos a esa parte y lo que nos han mostrado hasta ahora, no decepciona. Me atrevo a decir que, a cada minuto, lo que la pantalla nos muestra es cada vez más interesante. ─comentó, Doppo Orochi, genuinamente impresionado por el maestro, Oogway.

─Concuerdo con usted, padre. A cada instante, todo sólo mejora... Me pregunto ¿Qué tan increíble será la fuga? Estoy empezando a impacientarme por la tardanza para llegar al punto. ─comentó, Katsumi Orochi, reflejando el sentimiento a través de un gesto como el golpeteo repetitivo de su dedo.

─Puedo comprender tu insatisfacción con la espera, hijo. También estoy algo impaciente. No han mostrado nada relevante con relación a la fuga de prisión, pero hemos podido disfrutar de la presencia de esplendidos luchadores, lo que me es satisfactorio...─dijo, Doppo, deseando poder ver más luchadores.

─Ahora que lo menciona, padre, me parece curioso que todo lo que hemos visto hasta ahora, tenga relación total con el kung fu, sin embargo, estamos viendo una fuga de prisión ¿No le parece extraño? ─dijo, Katsumi Orochi, con una mueca pensativa en el rostro.

─Así que, no fui el único que lo notó... Bueno, también me resulta confuso, no tengo como tal una idea clara, pero mi suposición es que, quien sea que este arrestado, posiblemente también sea un luchador o un guerrero. Lo que me hace sentido, sino ¿Por qué mostrarnos todo lo anterior? ─compartió, Doppo Orochi, haciéndose escuchar claramente por el resto de sus alumnos.

Su hijo como aprendices, estuvieron de acuerdo, encontrando lógica en las palabras del gran hombre, lo que los emocionó todavía más, pues, pensaban que posiblemente sea alguien excepcional.

[Multiverso animado: Universo Star Wars: período de las guerras clon: Sala del consejo jedi]

─Esta energía..., el Chi, es parecida con la Fuerza. Ambas se guían por el mismo principio del universo, sin embargo, se diferencia notablemente. ─comentó, Obi Wan, reflexivo.

─No equivocado estar, Obi Wan. El mismo principio seguir, sin embargo, pura no ser. Poderosa es, pero en debate estar siempre entre dos fuerzas, luces y sombras, luz y oscuridad, lado luminoso y lado oscuro. Poderse ver en el siempre tenso maestro, Shifu. Que miedos y frustraciones cargar ─señaló el maestro, Yoda, con un dedo tembloroso a la gran pantalla.

Todos volvieron su atención a la pantalla para efectivamente, contemplar en el maestro, Shifu, lo que todos habían visto desde su presentación, una débil aura dorada que simbolizaba su dominio del Chi. Sin embargo, en esta ocasión, todos pudieron notar la oscuridad contenida en el área del corazón del hombre, de la que podían sentir tristeza, amargura, frustración y dolor. Comprobando de esta forma que este Chi, tenía un parecido con la fuerza bastante notable, sin embargo, en ese momento, Yoda, habló, a lo que todos le prestaron atención.

─Aclarado estar, parecido es, mas no ser igual a la fuerza. Este Chi, no es puro del todo, sin embargo, no hacerte del lado oscuro... Diría ser complementos, pero engañándome estaría, si muchas suposiciones hacer. Temo no ser más de ayuda ─comunicó, Yoda, a los miembros del consejo y quienes estuvieran presentes en la sala.

Sin embargo, nadie culpó al viejo maestro por este hecho, después de todo, estaban en presencia de una fuente nueva de energía bastante poderosa que era tan similar, pero a la vez tan distinta con la fuerza. El canciller, Palpatine, fue el primero en pronunciarse, agradeciendo al maestro, Yoda, por su aportación, mientras internamente se preguntaba si este mundo podía pertenecer al propio, si era el caso, le gustaría saber, pues, deseaba poseer a este dentro de sus filas, asimismo, le gustaría también tener dominio de este Chi, que es absurdamente poderoso. Observando la habilidad de trascender, Palpatine, se preguntaba si con esta podría vencer a la muerte y vivir para siempre.

─Maestro..., tengo la ligera sospecha que este hombre es como el maestro, Yoda ─susurró la padawan, Ahsoka Tano, al joven adulto de cicatriz en rostro que era su maestro, mientras no separaba la mirada de la imagen de, Oogway.

─Anakin Skywalker, rio con disimuló─ Lo dices por el aire sereno y lleno de misticismo alrededor de él, o la enorme cantidad de energía tan pura que lo rodea y lo hace brillar como un sable de luz... ─dijo, Anakin, mirando con sarcasmo a su joden aprendiz.

─...Bueno, sí y sí, la verdad, estoy sorprendida por la enorme cantidad de energía que tiene, además, de sus increíbles habilidades y poderes... Es un absurdo. Además, se nota que es mejor maestro que tú ─comentó, Ahsoka, en un intento por burlarse de su maestro.

─Inmediatamente, Anakin, le aplicó un suave codazo a su joven aprendiz─ ¡Oye! Eso es ofensivo. Deberías considerar disculparte o podría dejar de entrenarte ─contraatacó, Anakin, con una burla.

─¡Ouch! Sé más gentil, soy una chica... Para amenazar, maestro, primero debería tener con qué primero ─Ahsoka, se cubrió la boca, al finalizar estas palabras, intentando ahogar una burla para no llamar la atención de los maestros alrededor.

Con las palabras anteriores dicha, Anakin Skywalker, miró a su padawan con una ceja levantada y una expresión seria, pero carente de toda seriedad real, para luego romper su expresión, sustituyendo esta por una sonrisa sincera que pasó a una de malicia, haciéndole saber a la joven aprendiz de forma indirecta que se vengaría por ello. Acto que fue respondido por una sonrisa de la joven para que ambos luego de jugar, concentrarse en la pantalla.

[Dentro de la pantalla]

En ese instante, el maestro, Oogway, descendió, bajando con gracia del bastón, al tiempo que no retiraba la mirada de su alumno, a quien se dirigió con jovialidad:

─¿Por qué debe ocurrir algo para que desee ver a mi viejo amigo?

─Entonces, ¿no es nada...? ─cuestionó, Shifu, con una expresión que dividida entre la confusión y la extrañeza.

─Bueno..., yo no dije eso... ─aclaró, Oogway, con una eterna sonrisa en el rostro. Mientras se desviaba a su izquierda, donde yacían un conjunto enorme de velas encendidas que proporcionaban parte de la iluminación del lugar.

El comportamiento enigmático de su maestro, siempre resultó confuso para, Shifu, quien, siendo su alumno y amigo más próximo, difícilmente podía entender a este y su actuar. Estando frente a las innumerables velas, Oogway, con toda la paciencia del mundo, se dispuso a apagar éstas, una a la vez, tomándose el tiempo necesario en cada inhalación y exhalación.

Mientras tanto, Shifu, observaba con disimulada impaciencia e incomodidad su alrededor, contemplando con tortura las velas aún encendidas, cuya existencia, simbolizaba su permanencia eterna en aquel lugar. Segundo a segundo, crecía su impaciencia y la ansiedad por conocer la razón por la que fue llamado. Al tiempo que, estos sentimientos se acrecentaban, el maestro, Oogway, continuó absorto en la tarea trivial, despreocupado como siempre. En un punto, se detuvo para volver su atención a, Shifu, quien, viendo la acción, volvió su atención al hombre con mayor ansiedad, deseando ya recibir la noticia que le tenía deparado su maestro. Oogway, con el dedo alzado y la boca bien abierta, daba la impresión que finalmente diría la razón por la que llamó a, Shifu. Sin embargo, todo fue un engaño, pues, en un cambio de actitud, volvió su atención para apagar otra de las velas frente a él.

Esta acción, se ganó una merecida carcajada colectiva entre los infinitos espectadores, por el buen sentido del humor y el espíritu bromista del anciano maestro, al menos, fue la reacción de aquellos más optimistas, bromistas y con un buen sentido del humor, asimismo, aquellos que ven la vida para ser disfrutada. Por otro lado, estaban aquellos con amargura en el corazón, y así como, Shifu, un temperamento impaciente que no toleraban las pérdidas de tiempo. Sin embargo, incluso ellos, no pudieron evitar reír un poco, tras contemplar la expresión agónica y casi cómica de, Shifu, quien lucía a punto de estallar por la broma.

Dicho y hecho. Incapaz de conservar la paciencia por más tiempo, aun tratándose de su superior; realizó un movimiento cruzado de palamas que, debido a su potencia de empuje, generó una corriente potente de aire direccionada que apagó rápidamente las velas alrededor del estanque, quedando ambos maestros en la oscuridad, que sólo era atenuada por el brillo natural del estanque que reflectaba una fuente de luz desconocida. Y como si no hubiera pasado nada, Shifu, se dirigió a su maestro.

─Decía usted...

─Tuve una visión... Tai Long, regresará... ─expresó, Oogway, con pesar aparente en su expresión.

La sola mención de este nombre, al que le siguió el anterior mensaje, despertó en el viejo panda, una profunda angustia casi olvidada tras 20 años, que le siguió la preocupación, la ansiedad y el temor, los cuales se reflejaban en su rostro y postura debilita y tambaleante, simbolizando el profundo impacto que estas palabras tuvieron en él. Cuando los recuerdos del hombre vinieron a su mente, empezó a hiperventilar, al tiempo que empezó a negar su propia realidad.

─¡Eso es imposible! ¡Está en prisión! ─expresó, Shifu.

─Nada es imposible... ─fue la simple respuesta de, Oogway, emitida con total certeza.

Y, debido a esta certeza siempre presente en las palabras del maestro, Shifu, temió aún más por la posibilidad que aquel que algún día consideró su hijo, volviera. No aceptando este hecho, Shifu, llamó a un mensajero por su nombre, no siendo otro que el mismo que le llevó la noticia de reunirse con, Oogway. Zeng, el ganso mensajero, se presentó de inmediato al cumplimiento de su deber, siendo abordado por un angustiado, ansioso y sumamente enojado, Shifu, quien, en una rápida sucesión agresiva, empezó a emitir a gritos orden tras orden, los cuales, le hizo entender que debía comunicar a la prisión que contenía a, Tai Long.

─Sí maestro, Shifu... ─asintió, Zeng, quien emprendió el vuelo, pero, por no mirar por donde volaba, chocó dolorosamente con un pilar, pero tenía órdenes que cumplir, así que, ignorando el dolor, continuó volando, decidido a cumplir con su encargo.

Observando el comportamiento de su viejo amigo y aprendiz, Oogway, con una expresión complicada, a paso lento, caminó en otra dirección, al tiempo que, aportaba, a través de unas palabras, un grano de arena de su sabiduría milenaria, la cual soltó en la brisa, con la esperanza que su alumno entendiera:

─Uno suele con frecuencia hallar su destino, en el sendero que toma para evitarlo.

[Fuera de la pantalla]

Infinitos espectadores quedaron anonadados por la reacción casi violenta de, Shifu, y su creciente miedo por la mención de, Tai Long, lo cual llevó a mucho de a preguntarse, ¿Quién es, Tai Long? ¿Y por qué su mención generaba tal reacción en el viejo panda rojo? De estas preguntas, cada espectador sacó sus propias suposiciones para explicar este comportamiento inusual. Para este punto, aquellos individuos de mal del multiverso, estaban ansiosos por conocer a, Tai Long. Infinitos mundos se preguntaban, especialmente aquellos, en donde la escala de poder y habilidad está por debajo o es equiparable a la del mundo de Kung fu panda, ¿Qué clase de individuo es, Tai Long?

[Multiverso animado: Universo: Kung Fu Panda]

La noticia conmocionó a todos los habitantes del Valle de la Paz, quienes, aun en la protección de sus hogares, yacían temblando de miedo con sus familias, pues no se sentían más seguros. Anteriormente tenían miedo, ahora experimentan horror por la certeza de la huida pronta de, Tai Long, después de todo, nadie en el mundo era más creíble que el propio, Oogway. Si él lo dice, es una verdad que nadie puede cuestionar. Esta noticia, no sólo conmocionó al Valle, sino también al resto de China, pues, si bien, Tai Long, únicamente propagó el miedo por una noche en un único lugar, sus grandes hazañas y habilidades son bien conocidas en todo el mundo, especialmente por los maestros. Es un hecho que, sin importar si se queda merodeando los alrededores del valle, nadie querría que estuviera libre. Por esta razón, maestros del kung fu en todo el mundo, prestaron la mayor atención a la pantalla.

Mientras tanto, en el patio exterior de entrenamiento del Palacio de Jade. Los cinco furiosos, yacían reunidos, cada uno con expresiones variadas:

─Nuestras suposiciones fueron correctas. Tai Long, escapará...─expresó, Tigresa, para hacerse escuchar por el resto.

─Ay, no, debemos impedir que escape ─comentó, Víbora, remarcando la obviedad.

─Sí..., si, debemos prepararnos e idear un plan de contingencia... No..., no lo debemos enfrentar directamente sin tener un plan solido ─compartió, Grulla, haciendo notar su tartamudeo al hablar.

─Deberíamos primero terminar de ver lo que nos muestre la pantalla, luego podremos idear un plan...─compartió, Mantis, con gotas de sudor resbalando por su frente por el miedo de algún día tener que enfrentar a ese monstruo.

Llegando a preguntarse el alcance de las habilidades de, Tai Long. Esta preocupación recurrente le hacía desear entre pensamientos que la diferencia de nivel no fuera tan grande, al menos, así sabía, que tendrían una oportunidad de vencer.

─Estamos muertos...─comentó, Mono, quien, si bien no quiso mostrar su verdadero miedo, a través de las palabras como acabó de hacer, no pudo evitar comentar involuntariamente cuando el maestro, Oogway, confirmó la sospecha que todos estaban presentando.

Y, en un acto casi inmediato, todos los presentes clavaron su mirada en él, algunos con lastima, como el caso de Grulla, Víbora y Mantis, a pesar del mal humor del último, y otros con una molestia tan notoria que lo congeló en su lugar con una mirada tan fría que, al instante, hizo que se arrepintiera de sus palabras anteriores.

Sin embargo, para su alivio y sorpresa del resto, fue lo único que recibió de su compañera, después de todo, su interés real estaba en la pantalla y no quería perderse de nada con lo que impedir la huida de, Tai Long.

Mientras tanto, en el árbol de duraznos de la sabiduría celestial. Shifu, yacía respiración un poco más tranquila, luego de haber sufrido un nuevo ataque de pánico, siendo gracias a su maestro que ahora podía estar un poco más en control de sí.

─Ay, mi amigo, si continuas así, ¿Cómo esperas vivir tanto como yo? ─bromeó, Oogway, en un intento por aliviar el ambiente.

─Me disculpo, maestro, no quería preocuparle de esa forma... Es, es sólo que...

Sin embargo, antes de poder excusarse de forma convincente, Shifu, fue interrumpido por, Oogway, retirándole la palabra para ser él, quien habla nuevamente.

─Está bien, Shifu... No hay necesidad de disculparse. Puedo entender tu dolor perfectamente... Hace mucho tiempo que dejaste de ser su maestro, aunque nunca dejaste de verlo como tu hijo...─reveló, Oogway, expresando de forma perfecta el sentir de su alumno.

Tales palabras dejaron sin habla a, Shifu, quien, volvió su mirada sorprendida a su maestro, no pudiendo decir o hacer otra cosa, más que callar, observar y escuchar con atención al viejo, Oogway, quien aún no había terminado.

»No te juzgo por nada, mi amigo. Nadie tiene el derecho, tampoco yo, de juzgar a un padre por el amor incondicional que profesa a su hijo, sea o no de sangre... Sin embargo, tienes que hacer la paz, Shifu, con la realidad y, sobre todo, con tu pasado, o ambas podrían hundirte hasta el fin de tus días...

Al final de su oración, Oogway, clavó una mirada gentil cargada de lástima por su alumno, en quien reconocía a un hombre martirizado por su pasado y que quería ayudar a encontrar su paz interior. Por parte de, Shifu, este no podía retirar la mirada del maestro, quien, especialmente por respeto, aunque, siendo muy sincero, era en su mayoría por el shock que le produjo la declaración. Sin embargo, se sintió aliviado por no ser juzgado por su mayor referente de respeto. Liberando un suspiro, que simboliza la liberación temporal de sus cargas emocionales, Shifu, hizo una reverencia al hombre, a quien le agradeció en acción y palabras sinceras. Por su parte, Oogway, sólo sonrió. Luego de esto, ambos individuos volvieron su atención a la pantalla.

[Multiverso animado: Universo: Star Wars, período de las guerras clon, sala del consejo jedi]

─Un hombre sabio, he de admitir. Basta experiencia sus palabras cargan... Todos, solicito atención. Aprender deben de esta lección. Joven, Anakin, usted, por encima de todos, joven e imprudente es, conservar debe, las palabras del, maestro, Oogway, como mi consejo ─comunicó, Yoda, al resto de miembros de la cámara.

─Entiendo, y gracias, maestro, Yoda. Guardaré esta lección y la estudiaré ─expresó, Anakin Skywalker, al tiempo que mostraba una reverencia al gran maestro jedí.

Mientras tanto, Ahsoka, reía por la forma indirecta en que su maestro fue llamado "mocoso imprudente". Notando esto, Anakin, la miró para luego susurrarle una orden simple que no le dejó otra opción que callar y aceptar:

─Lo mismo va para ti, sabionda ─expresó, Anakin, con una sonrisa en el rostro.

─Sí, maestro. ─dijo, Ahsoka, no teniendo otras opciones de respuestas.

Mientras esta discusión finalizaba, los maestros discutían acerca de este, Tai Long. Captando la inmediata atención de los jóvenes maestro y aprendiz.

─Puedo sentir perturbaciones en el maestro, Shifu... Presiento en todo esto, que algo no se ha contado. ─dijo, Obi-Wan Kenobi,

─Empezando por ¿Quién demonios es, Tai Long? ─comentó, Mace Windu, tan tosco al hablar como es costumbre.

─Posiblemente se trate de un antiguo enemigo del maestro, Shifu. Tal vez alguien muy poderoso, llegando estar a su mismo nivel o superándolo. ─expresó, Obi-Wan, con su característica serenidad estoica.

─Es muy posible, pero, permíteme dudar y estar en desacuerdo contigo maestro, Obi-Wan... Es posible que sea un criminal con gran poder e influencia en ese mundo, y que está en la capacidad de provocar una guerra ─emitió su opinión, Mace Windu.

─No podemos descartar nada ninguna posibilidad, maestro, Windu. Sólo podemos suponer en base a lo que nos hemos escuchado de la pantalla. Además, usted también lo siente, esos sentimientos que el maestro, Shifu, experimenta, no son propios entre enemigos ─dijo, Obi-Wan.

En ese momento, Yoda, golpeó su bastón contra el suelo repetidas veces, demandando calma y atención sin emitir palabras. El mensaje fue recibido por todos los maestros, quienes volvieron su atención al viejo jedi.

─Posible es, más dudo que sea... Presentimientos tengo del maestro. Nada bueno es. Dolor, angustia y tristeza siento, y pesar profundo... Muy posible es que, Tai Long, ser un antiguo alumno de, Shifu. Una posibilidad triste y lamentable, pero la más racional. ─expresó, Yoda, con lastima por el viejo maestro, Shifu.

Todos debatieron esta posibilidad, hallando efectivamente que era la más lógica. Sin embargo, alguien que había estado viendo la pantalla y las expresiones dolorosas del hombre, recordó a su madre y cómo esta se sentía cada vez que sufría daños, lo cual le dio una idea que podría servir como base para algo más.

─Maestros, si me disculpan, me gustaría aportar mi opinión... ─Anakin, respiró profundo antes de dar su respuesta─ No creo que sea solamente eso. No quiero contradecirlo, maestro, pero tengo el presentimiento que es más que un lazo de maestro y aprendiz. Es sólo una suposición, pero esto se siente más como una relación padre e hijo.

─¿Y cómo puedes estar seguro? ─cuestionó, Mace Windu, desafiante.

─No tengo certeza, maestro, Windu, es una suposición. Un presentimiento que creí conveniente compartir con todos para tener una perspectiva más amplia y alejada de lo que estamos acostumbrados. ─expresó, Anakin, relajado.

─Agradecidos estamos joven, Anakin. Su enfoque permitir puede, que nosotros también podamos explorar posibilidades alternas. ─expresó, Yoda.

Dicho esto, todos continuaron en su debate, mientras volvían su atención a la pantalla.

[Dentro de la pantalla]

Inmediatamente, Shifu, aún angustiado y preocupado por la situación fuera de su control, empezó a dar razones a su maestro para que ambos tomaran las medidas necesarias para evitar que, Tai Long, arrasara con el valle de la paz. Pero, Oogway, sólo disipó sus preocupaciones con un comentario relacionado con su alumno.

─Tu mente es como esta agua, amigo mío, cuando está agitada se vuelve difícil ver..., pero si dejas que se calme, la respuesta se vuelve clara ─Expresó, Oogway, mientras se aproximaba al estanque, cuya superficie tocó sutilmente con su bastón para calmar la fluctuación ocasionada por los pétalos que cayeron en su superficie, aclarando la misma y mostrándose en el reflejo la estructura de un dragón hecho de oro puro. Ambos alzaron la mirada a la descrita estructura con un fino rollo en su hocico.

Infinitos espectadores, no podían dejar de sorprenderse cada vez más, especialmente aquellos considerados eruditos y estudiosos en sus mundos por la filosofía y la capacidad de hombre al hablar con tanta simpleza que hasta parece elegante. Asimismo, por su experiencia en términos de la vida. Para este punto, muchos deseaban algún día tener la oportunidad de conocer al anciano maestro.

─El rollo del dragón ─Fue el simple comentario de, Shifu, con asombro y esperanza reflejado en sus ojos, creyendo que no viviría lo suficiente para ver la llegada del guerrero dragón.

Para este punto, los infinitos espectadores yacían preguntándose de forma seria, ¿Qué era el tal rollo del dragón? ¿Y por qué es tan relevante?

─Llegó el momento... ─Fue todo lo que comentó, Oogway.

─Pero quien ¿Quién es digno de recibir el secreto para el poder ilimitado y volverse el guerrero dragón? – Fue el cuestionamiento de, Shifu, hacia su maestro, esperando recibir una respuesta real a sus problemas.

La reacción de los infinitos espectadores, no se hizo esperar. Quienes eran más crédulos, estaban asombrados por la implicación de tener acceso a tal rollo. Los más ambiciosos y hambrientos de poder, lo deseaban poseer para lograr sus objetivos. Otros, que eran más escépticos con relación a los misticismos cósmicos a raíz de su normativa social, desacreditaron tales afirmaciones con ligereza. Pero sin importar si creían o no, todos coincidían en un hecho, deseaban conocer más de este rollo del dragón. Sin embargo, la pantalla continuó relatando. Muchos sospecharon con decepción que no se hablaría más del asunto del rollo.

Después de unos instantes de silencio, Oogway, respondió de tal manera que nadie jamás esperó tal respuesta, incluso el mismo, Shifu, quien quedó en blanco con tal respuesta.

─Yo no sé –Fue su único comentario mientras esbozaba una sonrisa sutil.

La respuesta del maestro, tomó a los infinitos espectadores desprevenidos, haciendo que muchos volvieran a replantearse la idea de ser entrenado por, Oogway. Sin embargo, también volvió a ganarse una serie de risas por la expresión puesta por, Shifu.

Días habían transitados desde aquella conversación entre alumno y maestro. En un cambio de escena, se mostró al mensajero, Zeng, volar de forma apresurada por una región montañosa estéril, donde la nieve y el frio extremo, así como las tormentas de esta misma naturaleza eran la norma, haciendo aún más desafiante su viaje.

Zeng, presentaba agotamiento por los días enteros de vuelo sin descanso. En la lejanía, pudo observarse una montaña particular, con un gran agujero, donde se mostraba grandes portones de madera sólida, las cuales yacían reforzadas por un armazón de metal. En la cima y rodeando la montaña, yacía una inmensa fortaleza blindada que más haya de parecer una fortaleza, parecía la propia montaña vuelta una fortaleza inexpugnable. Zeng, finalmente había llegado a la prisión de máxima seguridad de Chorh-Gom.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso series: Universo: Juego de Tronos: temporada 1, período antes de la visita del rey a Invernalia, castillo de King's Landing, sala del trono]

Robert Baratheon, tenía previsto visitar a su viejo amigo, Ned Stark, por asuntos oficiales y personales, sin embargo, el viaje se había pospuesto por algún tiempo por la presencia de las pantallas, las cuales generaron un gran revuelo en el reino y zonas aledañas.

─¡Por los siete! ¿¡Seguro que es una prisión y no una fortaleza!? ─expresó, el rey, Robert Baratheon.

─Sí, señor, no se equivoca... ─comunicó, Sir Varys

─Porqué te sorprende esa fea construcción. No tiene nada de especial. Después de todo, no pasa de un agujero asqueroso para encerrar a la escoria. ─dijo, Cersei Lannister, despectivamente.

─Es cierto, mi señora, y, por lo mismo, es sorprendente para nuestro rey. Si bien, tenemos prisiones óptimas para encerrar a nuestros criminales, el hecho que una prisión sea una fortaleza da mucho en que pensar. Por ejemplo, ¿Quiénes están allí encerrados? ¿Qué tan peligrosos son para necesitar de una seguridad tan elevada? ─expresó, sir Varis, con su característico tono lleno de seguridad, confianza y serenidad.

─¡A calla, eunuco! ¡No recuerdo haber pedido tu opinión! ─declaró, Cersei Lannister, eufórica y arrogante.

─¡Silencio, mujer! Me importa más la opinión del eunuco que la tuya. Así que, ¡a callar! ─expresó, el rey, Robert.

Estas palabras obviamente molestaron en gran medida a la mujer, quien, a pesar de su naturaleza arrogante por su linaje, sabe cuándo callar y no recriminar cuando se debe, siendo, esta ocasión, una de ellas. Mientras tanto, en invernalia, los miembros que conforman a la casa Stark, yacían reunidos en el gran salón, junto con ellos estando, Theon Greyjoy, Rodrik Cassel, y, por supuesto, el maestro, Luwin.

─Este mundo no me deja de sorprender con cada vistazo. Si hoy muriera, moriría como el hombre más feliz del mundo por ver un mundo tan distinto al nuestro ─expresó, Master, Luwin, sin contener su emoción.

─Estoy de acuerdo con usted, maestro, Luwin... Me es sorprendente que esto que aparenta ser una fortaleza, sea, en realidad, una prisión ¿Qué tantos criminales peligrosos tendrán existen en ese mundo? ─expresó, Ned Stark, intrigado.

─Probablemente muchos, esposos. Pero no debemos preocuparnos por algo como eso, después de todo, no son el norte ni westeros, así que estamos seguros ─expresó, Catelyn Stark.

─Pero eso no quita la posibilidad que nuestro mundo pueda aparecer. Si está cosa, muestra el futuro y pasado como ha demostrado que puede hacer, entonces temo al futuro que pueda mostrar ─dijo, Ned Stark, con el único pensamiento en mente sobre el futuro de su familia y la verdad sobre, Jon.

Cayendo en cuenta de este hecho, todos los presentes estuvieron de acuerdo con los temores de su señor, especialmente su esposa.

─Entendemos, padre, pero deberíamos disfrutar ahora lo que se nos muestra. Después de todo, no se ve todos los días un mundo de animales que hablan y saben pelear ─dijo, Rob Stark.

Estas palabras causaron emoción en los starks más jóvenes. Ned, estando de acuerdo con las palabras de su hijo mayor, optó por relajarse y continuar viendo lo que la pantalla tenía para mostrar.

[Dentro de la pantalla]

Sin embargo, ya agotado, se desplomaría del cansancio frente a violentos custodios rinocerontes, los cuales le apuntarían con imponentes lanzas. Notando su reacción, Zeng, inmediatamente se dirigió a estos sumamente asustados.

─¡Esperen, esperen, esperen...! Tengo un mensaje... del maestro, Shifu – Comunicó, Zeng, casi sin aliento por el viaje y el miedo que sentía por estos hombres.

La mención de este nombre fácilmente reconocible por los guardias, obtuvo el efecto esperado por el mensajero, haciendo que estos se calmaran, al punto de ayudar al ave a ponerse de pie, pero de una forma bastante bruta, en la cual no había rastro de delicadeza ni gentileza por un hombre agotado. Seguidamente, se emitió la orden para que las puertas fueran abiertas, para luego, Zeng, ser escoltado hasta el jefe de la prisión.

En un nuevo cambio de escena, se mostró a un eufórico rinoceronte con cuerno dorado que reemplazaba el perdido en su nariz, quien aparentemente era el comandante en jefe de la prisión. Él mismo, estaba sumamente ofendido mientras leía el mensaje en voz alta, prácticamente gritando las palabras impresas en el rollo para que su voz pudiera ser escuchada por el mensajero, en un intento por intimidar a este, asimismo, para que sus propios guardias también tuviesen conocimiento del contenido del rollo.

─¿¡Qué...!? ¡Que duplique la guardia! ¡Precauciones adicionales! ¡Su prisión podría no ser adecuada...! ─dijo, el comandante rinoceronte, al tiempo que, de forma amenazante, acercó su rostro hasta estar frente a frente con el mensajero.

Este último comentario fue el colmo entre todas las anteriores declaraciones hechas, haciendo enojar aún más al comandante rinoceronte. Tales declaraciones hechas sin fundamento, también molestaron al personal a cargo de la seguridad de la prisión, los cuales rodearon al pobre, Zeng, de forma amenazadora, mientras mecían y manipulaban sus pesadas armas en sus manos, conteniéndolas en sus palmas, reprimiendo el deseo por aplastar al pobre ganso.

Para este punto, los infinitos espectadores experimentaron gran lastima por el pobre ganso, tras meterse en esa situación sin querer, y todo por cumplir su deber.

Zeng, contemplando esta reacción violenta de cada hombre que le rodeaba, él mismo retrocedió acobardado, dándose la vuelta para dirigirse al comandante, quien le abordó con una nueva pregunta.

─¿Dudas de la seguridad de mi prisión?

─Por supuesto que no..., Shifu, duda, yo sólo soy el mensajero...─expresó, Zeng, mientras su tono con cada palabra se deformaba por el miedo.

─Le daré un mensaje a tu maestro, Shifu... Escapar de la prisión de Chorh-Gom, es imposible...

Mientras expresaba estas palabras, Zeng, se acercó con precaución al borde del puente de piedra, donde se asomó y contempló las instalaciones de la prisión. Siendo un muy profundo foso que aparentaba no tener fondo alguno, de no ser por un muy débil punto carmesí reluciente en la parte más profunda del mismo, donde apenas se podía distinguir algo entre la oscuridad y el extendido sistema de puentes de piedras iluminados por las mismas luces carmesís que aparentaban ser farolas de mano.

Zeng, yacía tan ensimismado que el comandante que, no notó el acercamiento del comandante, sólo percatándose del mismo cuando le propinó una palmada en la espalda, provocando en él un sobresalto, sin mencionar la caída de una pluma que se desprendió de su espalda, desprendiendo un descenso lento hasta el fondo mientras la pantalla la seguía en su trayecto hasta cierto punto.

Infinitos espectadores estaban confusos acerca de la razón por la que la pantalla haría tanto énfasis en enfocar la caída de una pluma que, para la mayoría no aportaba nada a lo que se estaba mostrando. Sin embargo, otros más inteligentes, presentaban una idea acerca de lo que podría suceder.

La reacción del ganso, sacó al comandante una risa divertida que yacía mesclada con malicia.

─Es impresionante o ¿No? ─cuestionó, el comandante en jefe de la prisión.

Zeng, le otorgó la razón reiteradamente, estando de acuerdo de forma genuina, pero también temeroso de lo que le podría hacer si estaba en desacuerdo. Acto seguido, el comandante dio inicio a un discurso acerca del lugar:

─Una entrada..., una salida..., un millar de guardias... y un solo prisionero...

Mientras era dado el discurso, la prisión fue mostrada desde distintos ángulos. Mostrando la puerta como único medio de entrada y salida, siendo custodiada en sus laterales por un ejército fuertemente equipado de guardias rinocerontes rudos y en excelentes condiciones físicas. La entrada, también contaba con un par de torres de vigía a cada lado, ocupadas por decenas de guardias equipados con arcos apropiados para el combate en interiores. Las torres, además, yacían conectadas con otras torres aledañas, a través de puentes artificiales y caminos naturales exageradamente custodiados por posiblemente miles de arqueros. No conforme con esta seguridad, por encima de su cabeza, había otras estructuras: Torres, fuertes, puentes y caminos ocupados por muchos más guardias, siendo tantos que las estructuras parecían un carnaval por el intenso rojo de los talones de las flechas expuestas y preparadas en los arcos.

─Sí, pero ese prisionero es, Tai Long...─argumentó, Zeng, en un intento por hacer entender al hombre la amenaza real que representa, Tai Long.

[Fuera de la pantalla]

Indudablemente, los infinitos espectadores quedaron conmocionados por las fuertes declaraciones del comandante en jefe de la prisión, además, de la construcción estructurar interna de la prisión de máxima seguridad, de la cual comprendieron que cualquier intento de fuga, era imposible y por razones justificadas. Asimismo, por la fuerte custodia y vigía a la que era sometida con tanto rigor por guardias altamente capacitados y armados para la labor. Sin embargo, esto no fue tan sorprendente como la última declaración, pues nadie, en lo absoluto esperó ni de forma remota, que toda aquella seguridad con la que podría contenerse fácilmente a cientos y posiblemente miles de prisiones, estuviera destinada a contener en custodia de por vida a un único individuo como, Tai Long, del cual, apenas saben su nombre.

[Multiverso cinematográfico: Universo: UCM, torre de los vengadores]

─¡No me jodas! ¿¡Tanta seguridad para contener a un único hombre!? ¿¡Es, acaso el criminal más peligroso del mundo o qué!? ─expresó, Tony Stark, con una expresión de incredulidad total.

─Ese mundo no tiene nuestro nivel de tecnología, sin embargo, son bastante buenos para crear una prisión tan sofisticada... Sin duda, nadie podría escapar de allí, al menos, no ileso... ─dijo, Steve Rogers, olvidando recriminar a, Tony, por su vulgaridad al hablar por el asombro que le causó la excesiva seguridad del lugar.

─Bueno, estamos hablando de, Tai Long... No se nos ha dado mayor información más que su nombre, pero lo que nos ha mostrado la pantalla creo que es suficiente. Piensen, si construyeron una prisión así sólo para él, es porque las que posiblemente sean de máxima seguridad en su mundo, no cumplen con las expectativas, lo cual nos habla de su alto nivel de peligrosidad. Sin mencionar que, el maestro, Shifu, le tiene miedo, al punto de mandar un mensaje de solicitud para que sea duplicada la defensa, aunque como vemos, claramente no es necesario, al menos, por lo que supongo, pero no puedo determinar si es una exageración o son medidas necesarias. Lo que tenemos que tener en cuenta es que, Tai Long, es, en extremo peligroso. ─expresó, Natasha Romanoff, no menos sorprendida que el resto del equipo.

─Concuerdo con la señorita, Romanoff. La alta peligrosidad de, Tai Long, ahora demostrada por la excesiva seguridad ─dijo, Visión.

─Personalmente, dudo que pueda huir de un sitio así, aun con mi super velocidad. Sería muy difícil ─dijo, Quicksilver, entre tartamudeos.

─Dudo que cualquiera de nosotros pueda huir de un sitio así, tal vez, excepto, Hulk, Visión, y, Thor, y, Tony, si tiene su armadura. De resto, podríamos quedar vueltos un alfiletero humano antes de asomar la cabeza ─dijo, Clint Barton, ojo de halcón.

A lo cual todos estuvieron de acuerdo con lo dicho.

─Ese lugar es muy oscuro y el foso bastante profundo... ¿por cuánto tiempo ese hombre no abra visto la luz? ─pensó, Wanda, sintiendo lastima por el tal, Tai Long, pensando que, incluso siendo un criminal, pensaba que nadie debía ser confinado de forma tan inhumana.

[Multiverso series: Universo: The Boys: Período pre-muerte de, Madelyn, departamento de The Boys]

─¡La puta que la pario! ¿¡Quién coño hace una prisión para contener a un único hombre!? Es absurdo... ─expresó, Franchie, quien no daba crédito a lo que estaba viendo y escuchando.

─Estoy de acuerdo con, Franchie. ¡Es excesivo el nivel de seguridad..., ni que fueran malditos supers, por el amor de dios..., son putos animales que hablan y saben Kung fu! ¡Es malditamente extraño, pero es absurdo que alguien pueda huir de eso! ─expresó un inquieto, Leche materna, que yacía caminando de un lugar a otro mientras hablaba.

─¡Oh, amigo! Nunca pensé escucharte maldecir tanto en una oración ─dijo, Billy Butcher, riendo por la actitud de su amigo.

─¡Púdrete, Butcher! ─dijo, Leche materna, mientras señalaba con el dedo a, Billy.

─Es imposible... ¿¡Quién mierda sea super o no, podría huir de un lugar así!? ─expresó, Hughie Campbell, incrédulo.

─¡Oigan! Muchachos, porque no aprenden de la puta muda que está por allá y se callan ¿Acaso lo han olvidado? No es nuestro jodido mundo. No debería porque importarnos esto. ─dijo, Billy, señalando a, Kimiko, con su cerveza─ Mejor veamos que pasa y ya. Tal vez sea interesante.

Cuando, Franchie, quiso replicar en defensa de su amiga, Billy, le mandó a callar como un perro, desatando una discusión en el lugar entre los miembros.

─Bueno, dudo que algo más pueda sorprenderme de este mundo ─dijo, Leche materna.

Mientras tanto en, Vought internacional, específicamente en la sala de reuniones de los siete. El equipo de "héroes" mundialmente conocidos, yacían con expresiones incrédulas en el rostro, con la excepción de, Black Noir, quien, al tener el rostro cubierto, era imposible saber su apariencia, y, por supuesto, Homelander, quien le impresionaba poco lo que veía, después de todo, para él sólo son insectos.

─Ok..., esto realmente no era lo que imaginé que sería esta prisión... Por dios, ¿Quién es, Tai Long? ─dijo, Queen Maeve, con la mano en el rostro por la conmoción que le produjeron las anteriores declaraciones del guardia.

─Ni siquiera las prisiones de máxima seguridad de aquí, tiene ese nivel de custodia, mucho menos se destinan a la contención de un único hombre... ─reflexionó, A-train, con los ojos muy abiertos.

─Pero que mierda les sorprende... Son putos animales asquerosos. De cualquier forma, nada de eso sería un problema para nosotros. Somos superiores que los humanos patéticos y a esas cosas con cuernos... ─expresó, Homelander, con su característica prepotencia.

─La palabra que buscas es... rinocerontes ─aclaró, profundo.

─¡Y acaso yo pedí tu opinión, pedazo de mierda marina! ¿¡Acaso piensas que soy un maldito imbécil como tú!? ─reclamó, Homelander, quien voló de forma veloz para tomar del cuello a profundo.

Sin embargo, la discusión rápidamente se detuvo con el ingreso del ceo, Stan Edgar, y, Madelyn Stillwell. El primero ordenando a, Homelander, que soltara a profundo, orden que renuentemente aceptó. Para luego pasar a explicar su llegada al lugar, siendo con el propósito de una reunión.

[Multiverso anime: Universo: Boku no Hero academia: Bar de la liga de villanos]

─Este lugar es como un maldito tártaro... ¿Quién podría escapar de ese lugar sin poseer, al menos, un quirk? ¡Es absurdo! ¡Me niego a creer que un patético quirkles pueda superar eso! ─expresó, Shigaraki, con irritación y molestia.

─Silencio, Shigaraki, no me permites escuchar lo que hablan ─expresó, All For one, con seriedad.

─Lo..., lo siento, maestro. Me dejé llevar ─expresó, Shigaraki, avergonzado.

─Sí, lo noté. Además, te estás dejando llevar por nuestra propia ideología de quirk y quirkles. En ese mundo, tal vez no existan quirk, pero los individuos que hemos visto hasta ahora, han demostrado ser muy capaces... Nunca te dejes llevar por las apariencias, Shigaraki, o terminaras muerto ─regaño, All For One, a su sucesor.

─Sí, maestro, lo tendré en cuenta.

Fue lo último que pudo expresar, Shigaraki. Por su parte, el resto de integrantes de la liga, estaban conversando entre ellos, interesados y asombrados por lo visto, especialmente en el hombre que conocerían a continuación.

[Dentro de la pantalla]

En un punto, llegaron a un ascensor rudimentario, controlado por un primitivo mecanismo. Con una orden, Zeng y el comandante, se encontraron largo tiempo descendiendo por el foso de oscuridad, mientras el comandante se divertía hostigando al pobre, Zeng, al mover el ascensor, intentando asustarlo con la idea que el mecanismo pudiera fallar, caer y llevar a ambos hacia su inevitable muerte. Con el final del recorrido, la escena inmediatamente cambió. Ahora se mostraba una enorme puerta de metal sólida, siendo abierta por obra de un mecanismo, así como una serie de barrotes que eran otra puerta adicional y una tercera puerta que también era el puente levadizo.

─He ahí, Tai Long –dijo, el comandante, Vachir.

Al final del puente elevadizo, en el centro de todo y enfocado apenas por una tenue iluminación, yacía de rodillas, un hombre, específicamente un leopardo de las nieves muy fuertemente asegurado de los brazos por un par de gruesas y pesadas cadenas metálicas, que lo obligaban a estar siempre con sus brazos extendidos y sin posibilidades de ser movilizados, cuyo cuerpo también se encontraba asegurado por una especie de mecanismo sumamente pesado que tenía la forma de un caparazón de tortuga, caracterizado por tener un conjunto de seguros o llaves clavados al mismo, y con todo lo descrito, Tai Long, continuaba estando sumamente tranquilo, ignorando prácticamente su entorno, asimismo, no demostrando la incomodidad de la postura que sostenía. En ese momento, al lado del recluso, apareció un cuadro de descripción:

Nombre: Tai Long.

Raza/Especie: Leopardo de las nieves.

Edad: 40 años.

Habilidades: Prodigio experto en artes marciales, sentidos felinos altamente mejorados, resistencia elevada al fuego, manipulación biológica menor (es capaz de manipular la estructura de su cuerpo con propósitos regenerativos menores), superfuerza, fuerza muscular muy por encima de la media de su especie, potencia muscular excepcionalmente alta (sus golpes son capaces de generar ondas expansivas con el potenciar de provocar daños severos y destruir grandes estructuras), velocidad subsónica, reflejos y reacción subsónica, agilidad subsónica, resistencia abrumadora, durabilidad divina (difícilmente se podría cansar, incluso si luchada días o semanas enteras contra ejércitos completos), gran flexibilidad, nivel de inteligencia superior a la de un prodigio natural, aprendizaje rápido, evolución constante (nunca deja de hacerse más fuerte con el tiempo), analista experto (tiene facilidad para analizar situaciones), conocimiento absoluto de los mil pergaminos del kung fu (es el único estudiante en la historia de su mundo en aprender y memorizar a la perfección, los mil rollos del kung fu, un colectivo de pergaminos que tienen todo el conocimiento marcial, intelectual y espiritual acumulado por milenios de cada maestro en su historia), memoria largo a largo plazo.

Destrezas: Estilo del leopardo (Estilo altamente especializado para realizar golpes angulares, punzantes y contundentes con la propiedad de impactar a muy altas velocidades. Siendo un estilo oportuno que aprovecha cualquier oportunidad para acabar con sus oponentes lo más rápido y efectivamente posible. Su fuerte son los ataques engañosos y oportunos, a diferencia de otros estilos, el estilo leopardo es indirecto, el individuo que lo practica normalmente esquivara, bloqueara y dará golpes falsos, hasta que halle la oportunidad, entonces obrara con una ferocidad bestial que pocos estilos pueden hacer alarde de tener hasta acabar con su oponente en cuestión de segundos. Este estilo es particularmente más efectivo contra oponentes más grandes y fuertes, ya que permite, a diferencia de otros estilos, defenderse y atacar al mismo tiempo a través de diferentes posturas marciales), acróbata extremamente capacitado, armamento natural (es capaz de fortalecer y usar ciertas partes de su cuerpo como armas, a voluntad), experto estratega, adaptabilidad sobre humana.

Poderes: Auto-sustento (es capaz de absorber la energía del universo para como una alternativa para calmar el hambre y la sed), conexión con el chi (su nivel de conexión con el chi le permiten fortalecerse durante los combates)

Habilidad especial: Puntos de presión (es capaz de paralizar a sus oponentes con golpes que afecto a los nervios), ambición (su gran ambición es un propulsor para la evolución constante)

[Fuera de la pantalla]

Nadie podía encontrar las palabras para describir lo observado en pantalla. Lo único que podían experimentar era sorpresa y conmoción. Aún no había demostrado nada, sin embargo, en los infinitos mundos donde la fuerza era lo único que se valoraba, se empezó a experimentar respeto por el individuo, Tai Long, a razón de sus habilidades, aunque el mismo no haya demostrado aún nada, los espectadores estaban ansiosos por ver sus habilidades en acción.

[Multiverso comic: Universo DC: Tierra 1, Gothan, Batcueva]

Los miembros integrantes de la bati-familia, quedaron conmocionados por el amplio rango de habilidades, poderes y destrezas en posesión del criminal que tanto se había hablado durante los últimos minutos. Nadie, ni siquiera, Batman, quedó exento de quedar anonadados.

─Este sujeto es increíblemente hábil... ─expresó, Jason Todd (Red Hood), asombrado por lo mostrado en pantalla, olvidando por un momento que no estaba solo.

─Sí, Jason, también es un individuo extremadamente peligroso y eficiente, que pone en peligro las vidas de las personas de su mundo... No deberías elogiar a este tipo. ─regaño, Barbara Gordon (Batgirl).

─Sólo reconozco su habilidad..., aunque odie a los criminales, es innegable que este hombre para ser tan fuerte, se esforzó ─explicó con calma, Jason Todd.

─Es un buen punto, Jason, pero no debes olvidar que es un criminal, tú, por encima de todos nosotros, deberías comprender eso mejor que nadie ─explicó, Batman, con su típico tono estoico, provocando un incómodo silencio.

─Bueno, pasando a otro asunto. Es sorprendente la cantidad de habilidades que puede poseer un hombre..., es una lástima que sea un criminal ─expresó con calma, Dick Grayson.

─Sí, tiene un arsenal similar a todos los anteriores, pero lo que me interesa más es su estilo de lucha. He escuchado del estilo del leopardo. Es tradicional de china, pero poco eficiente en situaciones de combates reales actuales ─expresó, Damian Wayne─. Aunque creo que él, por pertenecer a la misma especie podrá hacer buen uso. Se nota, a pesar de estar atado, que es un experto artista marcial.

─Sí, además, es un genio en el combate y un dotado intelectualmente... Sería difícil lidiar con él en un combate directo ─expresó, Kate Kane.

─Aunque es bueno, dudo que pueda aguantar el impacto de una bala de mis armas ─comunicó en broma, Jason Todd, cargando su arma para acompañar la broma.

─Idiota, el tipo puede endurecer su piel, dudo que tus pistolitas puedan perforar... En el caso que lo consigan, si no lo has notado, también se puede regenerar. ─comunicó, Barbara Gordon (Batgirl).

─Sólo necesito la bala correcta y ya veremos si el gatito tiene, de hecho, nueve vidas ─bromeó, Jason Todd (Red Hood).

Barbara, ya cansada de discutir con un idiota, decidió simplemente dejar que ganara la discusión para concentrar su atención en la pantalla de nuevo. Mientras tanto, Batman, aunque sabía que no corría peligro su mundo, igualmente empezó a maquinar posibles planes de contingencia, dado el caso muy poco probable de encontrarse con este tipo por algún choque de universos.

[Multiverso series: Universo: The boys, pre-período de la muerte de, Madelyn, departamento de The boys]

─Vaya..., parece que nuestro hombre, Tai Long, resultó ser un gato bastante grande y mal portado, con garras terriblemente grandes y afiladas ¿No lo crees, Hughie? ─comunicó, Billy Butcher, riendo por su broma.

Por su parte, Hughie, no respondió, pues, al igual que el resto, quedó en su lugar petrificado por el miedo y la sorpresa, incluso, Kimiko, quien, comía unas papas industriales, quedó con el alimento en su boca, sin poder reaccionar. Sin embargo, este estado no duraría mucho.

─¡Qué mierda...! ¡Yo y mi puta bocotá! ¡Lo que falta que viera, un puto tigre inyectado con esteroides, resistente al fuego y que literalmente se puede alimentar de energía cósmica! ─expresó, Leche materna, arrepintiéndose de sus palabras anteriores.

─Sería interesante tener un gato así, aunque soy más de perros, me gustaría que mi gato tuviera sus mismas capacidades... Tal vez pueda partirle su mandarina a ese puto de patria ─dijo, Billy Butcher, sonriendo en su lugar maliciosamente mientras pensamientos oscuros le invadían.

─Este tipo es más fuerte que la mayoría de los supers de nuestro mundo... ─dijo, Frenchie, con los ojos bien abiertos.

─Y, por supuesto, infinitamente más inteligente. Me pregunto cómo se debe sentir ahora ese puto abanderado ahora que un gato es mejor que él ─dijo, Billy Butcher.

─Fuerza, inteligencia, velocidad, agilidad, flexibilidad, experto en combate, reflejos, resistencia y poderes... Este tipo lo tiene todo. Es alguien de cuidado. Es bueno que no esté en nuestro mundo o podría ser una amenaza igual a, Homelander ─dijo, Hughie.

Estando todos de acuerdo con su afirmación.

[Multiverso anime: Universo: Boku no hero academia: Comedor escolar]

En el lugar, sólo se escuchó un gritó bastante molesto que provenía del integrante más ruidoso de la clase 1-A. No siendo una sorpresa que este no fuera otra más que, Katsuki Bakugo.

─¡Qué mierda! ¿¡Cómo un puto villano extra puede ser más fuerte que yo!? ¡Es absurdo!

Decía entre muchas otras malas palabras, mientras sus compañeros de clase trataban de calmarlo.

─Cálmate, Baku-bro, por favor, sienta, queremos continuar viendo la pantalla ─dijo, Kirishima.

Sin embargo, ninguno de sus compañeros le pudo calmar. Si no hubiera sido por el profesor, Aizawa, este hubiera continuado en su arrebato injustificado e infantil. Mientras tanto, Izuku Midoriya, anotaba cada cosa del hombre en pantalla que encontraba interesante, en realidad, sería todo. Al tiempo que hacía sus propias observaciones, sintiéndose emocionado y asombrado por el hombre.

─Deku-Kun, ¿Qué escribes? ─preguntó, Uraraka.

─Sólo apuntes acerca de todo lo que veo... Me es interesante y, en verdad, estoy sorprendido por lo que muestra la pantalla. Nunca pensé que alguien sin poderes y sólo con entrenamiento podría alcanzar tal nivel ─explicó, Izuku.

─Sí, también creí que no fuera posible, así como ver otros mundos, pero míranos aquí, viendo posible lo que no es posible. ─dijo, Uraraka, con su típica sonrisa.

─Sí, realmente es sorprendente... ─dijo, Izuku.

Sin embargo, antes que pudieran continuar su conversación, un nuevo grito se escuchó en el comedor.

─¡Este tipo es sorprendente! ¡Quiero pelear con él!

Estas palabras fueron dichas por la heroína, Mirko, quien estaba emocionada cuento más leía en la pantalla, deseando patearle el trasero al villano que mostraban.

─Mirko, por favor, siéntate, nos estamos poniendo en ridículo, y peor, frente a estudiantes ─dijo, Ryukyu, molesta y con la cara roja por la vergüenza que le produce la atención recibida por la actuación de su amiga.

─Sabes, Mirko, creo que le gustarías, los conejos son la presa predilecta de los leopardos de las nieves..., ¿o son las liebres? Da igual, son igual, deben de saber iguales. No creo que note la diferencia si te los encuentras ─comentó, Hawks, con su característica sonrisa de burla que anunciaba el deseo que molestar a la siempre explosiva mujer.

─¿¡Estás buscando que te mate, Hawks!? ─cuestionó molesta, la voluptuosa mujer.

─No gracias, me gusta vivir... ─dijo, Hawks, como único comentario.

[Multiverso videojuegos: Universo: Mortal Kombat, período posterior a la victoria del primer torneo mortal, Earthrealm, templo Chao Ling]

─Es una verdadera lástima que un hombre con gran talento, se perdiera en el mal... Espero que algún día pueda encontrar redención ─oró, Raiden.

─Es realmente lamentable. Es un guerrero formidable por lo que veo y si no fuera alguien malo, y estuviera en nuestro mundo, su ayuda sería bien merecida para los próximos mortal kombat. ─dijo, Liu Kang, serenamente.

[Dentro de la pantalla]

─Creo que esperaré aquí – Comentó, Zeng, ante la vista lejana del posible hombre más peligroso del valle de la paz

─No tienes nada que temer es perfectamente seguro... ─Comentó posteriormente el comandante, Vachir, luego de reír burlonamente, divertido aún por la cobardía del mensajero. Con el fin de su comentario empujó a, Zeng, para que caminase al interior, el comandante pronunció una única orden mientras avanzaba muy seguramente─. ¡Ballestas! ¡Preparadas!

Zeng, confundido alzó la mirada y examinó los muros de izquierda a derecha, quedando asombrado y aterrado demás por los abrumadores números que decoraban los muros del abismo. Cientos de hombres armados que sólo los separaba un enorme abismo de la celda y muchos otros cargando las enormes ballestas bélicas que inmediatamente apuntaron al prisionero por precaución.

─Oye, brabucón, ¿Ya oíste...?, Oogway, finalmente le dará a alguien el rollo del dragón, y ese, no vas a ser tú... ─dijo el comandante de forma burlona.

Sin embargo, Tai Long, ni se inmutó ante el comentario.

─¿¡Qué hace!? ¡No lo haga enojar! ─Fue la queja temerosa de, Zeng, al comandante, quien simplemente le respondió arrogantemente

─¿Y qué podría hacer? Lo tengo completamente inmovilizado.

Con esta última declaración, el comandante, realizó un nuevo intento de provocación, esta vez un poco extremo, pues este consistió en pisar la cola de, Tai Long. Un acto despreciable visto por lo infinitos espectadores, quienes repudiaron, al menos, en su mayoría, el actuar del guardia. Shifu, también se quedó tranquiló, vio esta acción con molestia, pues, si bien, tuvo razones para encerrar a, Tai Long, por sus crímenes, no existían razones para que lo brutalizaran como estaba haciendo el comandante. Por la misma razón, optó por despedir al hombre luego que terminaran de ver la pantalla.

Por su parte, el comandante en jefe de la prisión, yacía un poco acobardado en su puesto de trabajo, pues, si era verdad que las pantallas estaban en todas partes, posiblemente, Shifu, haya visto el abuso diario al que sometía al prisionero.

Volviendo a los acontecimientos en la pantalla. Tai Long, de forma bastante sorprendente, no reaccionó a la provocación ni al abusó. Se mantuvo inmóvil en su lugar. No dignándose a darle la satisfacción al comandante de gritar. Su única respuesta fue el silencio. Pero ni esta reacción privó al comandante de la voluntad para continuar hostigando al prisionero.

─¡Uy!, le pisé la cola al gatito..., Ay.

─Ya vi suficiente, le diré a, Shifu, que no tiene nada que temer... ─dijo, Zeng, quien estaba en su límite con la situación que le ponía el plumaje de punta.

Inmediatamente ambos pasaron a retirarse mientras, Zeng, reiteradamente le pedía al comandante de favor, que si se podían ir ya. Cuando estos se retiraron nadie de la guardia se percató de la pluma que progresivamente descendió hasta caer frente a, Tai Long, quien inmediatamente abrió los ojos, los cuales yacían cargados de odio e ira contenida y sin adulterar, que esperaban el momento adecuado para explotar y ser liberada en contra de sus enemigos, especialmente del irrespetuoso y abusivo comandante que se atrevió a humillarlo de tal forma y tratarlo como un perro.

Los infinitos espectadores cuando vieron por primera vez reaccionar a, Tai Long, experimentaron un mal presentimiento que sólo se acrecentó cuando recordaron la pluma que tanto habían ignorado hasta ese momento. Algunos, ahora entendían porque la pantalla enfocó tanto el objeto.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso animado: Universo: Kung fu Panda: Árbol de duraznos de la sabiduría celestial]

─Shifu, recuerdas las palabras que dije en el palacio ─dijo, Oogway, con serenidad.

─"Uno suele con frecuencia hallar su destino, en el sendero que toma para evitarlo" ─repitió, Shifu, conmocionado, ahora entendiendo que la huida de, Tai Long, siempre se debió a su intervención.

─Es correcto. Pero, ahora te pregunto ¿Qué harás con este conocimiento? ¿Dejaras que el universo ponga todo en su orden o intentaras cambiar algo fuera de tu control?

Sin embargo, Shifu, no supo que responde, pues, estas interrogantes lo ponían en la misma posición que cuando estaba en el templo.

─Shifu, no te preocupes. Hayas la respuesta por ti mismo. Sé qué harás lo correcto ─dijo, Oogway, con su mano posada en el hombro de su maestro como gesto de buena voluntad.

[Dentro de la pantalla]

Usando la cola, arrastró la pluma hacia sí mismo y la llevó a la cerradura del caparazón de hierro que sólo le permitía respirar al mínimo, utilizando la pluma como llave y la cola para redirigir la misma para abrir los cerrojos. Con el último seguro abierto, los seguros del caparazón de hierro, lentamente se empezaron a abrir, consiguiendo que, Tai Long, pudiera volver a respirar correctamente, así como volver a usar sus extremidades superiores, cuyos músculos contrajo para hacer sonar sus huesos y articulaciones que por mucho tiempo no habían tenido movimiento. Al estirar su cuerpo los seguros salieron disparados y el caparazón de hierro finalmente salió expulsado en múltiples piezas de metal pesado, al tiempo que, Tai Long, caía de rodillas por el esfuerzo y el dolor que tal acción representó considerando los años de inmovilización al cual se vio obligado a permanecer.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso animado: Universo: Star Wars: Período de las guerras clon, sala del consejo jedi]

─Y, como el maestro, Yoda, este, Oogway, no se equivocó en sus palabras ─comentó, Ahsoka, sorprendida por la hazaña realizada.

─Ciertamente, aunque encuentro más sorprendente que haya podido abrir ese mecanismo sofisticado con una simple pluma. ─dijo, Anakin, sorprendido.

─¡Espero lo puedan aprisionar! Un individuo así de peligroso no puede escapar y andar suelto... Fuera por mí, lo hubiera ejecutado... ─comentó, Mace Windu, con su tono severo habitual.

─Fuera por usted maestro, Windu, cualquier criminal merecería la condena de muerte ─comentó, Obi-Wan.

La discusión estaba a punto de estallar entre ambos individuos, sin embargo, Yoda, lo impidió.

─Debemos concentrarnos en lo que muestre la pantalla.

Fue su único comentario, y como es costumbre, la voluntad del gran maestro, Yoda, no fue desafiada.

[Multiverso series: Universo: The boys, pre-período de la muerte de, Madelyn, departamento de The boys]

─Ese comandante se jodió y justamente se metió con la persona equivocada... ¿Cuánto apuestan a que los despacha a todos? Pongo cien verdes a favor del gato. Hughie, ¿te unes a las apuestas? ─dijo, Billy Butcher, divertido con lo mostrado en pantalla.

─¿Es enserio, Butcher...? ¡Personas inocentes morirán, y tú te pones a apostar con sus vidas! ¡Estás mal de la cabeza! ─comentó, Hughie, no queriendo ver la masacre que la pantalla mostraría, sin embargo, no le sería posible, la pantalla siempre le seguiría, no quedándole otra opción más que quedarse y mirar.

Billy, sólo descartó el arranque de ira de su compañero santurrón como si fuera lo más común para él tener que lidiar con la frescura de su compañero. Por otra parte, Frenchie, se sumó a las apuestas del lado de, Tai Long, igualmente, Kimiko, quien aposto algunas papas y dinero que tomó prestado (robado) de la cartera de, Hughie, sin que este lo notara. Ambos apostando por, Tai Long. Siendo el único que apostó por los guardias fue, Leche materna, quien, a pesar de ver que estos tipos eran abusivos, confiaba en su lógica que un hombre nunca podría escapar vivo de una prisión tan fuertemente custodiada. Siendo su parte abonada, cuatrocientos dólares, pues se sentía confiado.

─Muchachos, parece que alguien regaló cuatrocientos dólares... Siempre has sido pésimo para las apuestas, mi amigo. ─dijo, Billy Butcher, con una sonrisa burlona que dedicó a su compañero.

Este comentario se ganó la risa de, Frenchie, y, Kimiko, la última sólo seguía el comportamiento del primero por creer que lo que se dijo realmente fue gracioso.

─¡Púdrete, Butcher! El único que perderá su dinero, serás tú ─dijo, Leche materna, con completa confianza.

─¿Con que es así...? Bueno, ya que tu confianza es contagiosa, subo mi apuesta... mil dólares. Espero que estes listo, porque me quedaras debiendo hasta el alma, leche materna ─dijo, Billy, internamente muerto de la risa.

─El simple hecho que seamos amigos, implica que ya le vendí mi alma al diablo ─dijo, Leche materna, con un tono de obviedad.

[Dentro de la pantalla]

El ruido del metal había alertado a toda la guardia, así como al comandante, quien rápidamente se asomó al abismo.

─¡Oh, no! – Fue todo lo que pudo decir el comandante claramente asustado y, por supuesto, preocupado por la liberación de, Tai Long. El comandante fue inmediatamente abordado por, Zeng, quien le preguntó lo sucedido, pero la respuesta a la pregunta fue obvia, una vez miró el fondo.

Miles de guardias movilizándose apresuradamente por cada puente de piedra, dando órdenes apresuradamente mientras se preparaban para recibir al enemigo en caso que llegase a ellos. Por su parte, Tai Long, finalmente recuperado del esfuerzo físico se posó en una pierna y usando toda la fuerza que tenía en ese momento tiró de sus cadenas en un intento infructuoso por librarse de las mismas, pero estas eran de excelente calidad, además, eran demasiado gruesas y pesadas, producto de las enormes piedras a las que estaban sujetas y que daban al abismo, las cuales constantemente tiraban de sus brazos, consiguiendo que cualquier intento de ser rotas o haladas fuera imposible demás.

La frustración de, Tai Long, por no poder destruir las cadenas se liberó a manera de un poderoso, feroz y espeluznante rugido amenazante que iba dirigido a todos, pero muy especialmente al comandante, en quien había clavado su mirada.

Con el miedo invadiéndole, pero sin mostrarlo, el comandante dio la orden inmediata que las ballestas fueran disparadas contra el fugitivo, quien, haciendo gala de su habilidad, destrezas y reflejos marciales, evitó el impacto letal de todas y cada una de las armas bélicas con un simple juego de piernas, rotaciones de cintura y el cuerpo.

Tal acción tomada en su contra, consiguió hacer enojar a, Tai Long, quien cargando con un muy mal genio notable dirigió una mirada salvaje al último ballestero que aún no había disparado, pero que prontamente daría la orden de disparar muy en alto. Este último proyectil seria aprovechado por, Tai Long, quien en la trayectoria del proyectil interpondría su inmovilizado brazo derecho, cuyas cadenas serían rotas por la potencia del impacto. Por parte de los responsables de liberar una de las ataduras de, Tai Long, se encontrarían inmediatamente invadidos por el terror de haber cometido un error bastante grave, al punto que cómicamente, uno de ellos taparía su boca, en señal de preocupación. No demoraría demasiado tiempo antes que, Tai Long, se pudiera liberar de la última de sus ataduras aprovechando toda la fuerza de agarre, presión y tensión de su extremidad libre. Ni el excelente metal pudo resistir su poder.

─¡Tai Long, está libre... Debo avisar a, ¡Shifu! ─dijo, Zeng, aterrado, al punto de perder los nervios.

Él mismo estando ya predispuesto a huir para comunicar las noticias del incidente al viejo maestro panda, fue inmediatamente detenido por el comandante, quien le tomó del cuello con agresividad.

─¡No iras a ningún lado, y tampoco él! ─Exclamó el comandante eufórico─ Súbanla.

Con la orden dada, el ascensor inmediatamente empezó su lento ascenso hasta los puentes superiores, en un intento por contener a, Tai Long, en la parte más profunda del pozo, mientras algunos de los hombres más próximos al lugar, dominados por el miedo a quedar atrapados con semejante monstruo, salieron corriendo al ascensor, en un intento inútil por subir al mismo, al tiempo que rogaban a sus compañeros porque no los abandonasen.

Notando lo que pretendían hacer, Tai Long, no lo permitiría. De forma inmediata se daría la vuelta, al escuchar el gatillo de una de las ballestas a sus espaldas, siendo cargada y lista para disparar. Prontamente el proyectil fue disparado en su dirección en un intento por acabar con su vida, sin embargo, Tai Long, ya estaba esperando el proyectil en una posición defensiva, y en una muestra de poder y habilidad, Tai Long, lanzó un ataque que bloqueó y desvió el pesado proyectil con su firme palma, emitiendo un sonido similar al de una campana al ser golpeada.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso series: Universo: Juego de Tronos: temporada 1, período antes de la visita del rey a Invernalia, castillo de King's Landing, sala del trono]

Damas y caballeros, rey y reina, asimismo, el eunuco, la guardia real, el maestre y cada individuo dentro de la propia sala del trono, quienes contemplaron todo, quedaron anonadados por la habilidad demostrada, aun en una situación tan complicada que para algunos sería imposible de superar. Los gritos de invadieron la sala del trono por la última de las hazañas. Nadie podía dar crédito a que un hombre con sólo sus manos, tuviera la capacidad sobrehumana para detener un proyectil de tamaña proporción que fue disparado por un dispositivo que simulaba un arco, pero que todos notaron, era más potente.

─¡Aha! ¡Están viendo eso! ¡Puede ser un criminal y todo lo que quieran, pero nadie puede negar que fue increíble lo que acaba de hacer! ¿Quién aquí puede afirmar que vivió para frenar una flecha así? ─dijo el rey, Robert, dejándose llevar por la emoción acrecentada por el vino de su copa a medio terminar.

─Ciertamente, mi lord. Es un espécimen fascinante... Como me gustaría tenerlo en mi poder y estudiarlo en mi laboratorio ─dijo, el gran maestro, Pycelle.

─Suponiendo, por supuesto, que primero no logre arrancarte la cabeza de la forma más brutal posible por atreverte a tal osadía...Si no se ha dado cuenta, maestre, Pycelle, este individuo, ha estado prisionero por quien sabe cuánto tiempo, posiblemente nunca o muy poco fue alimentado, basando esto último, por supuesto, en lo visto. Lo menos que querrá, es que sus manos le toquen y lo diseccionen en un cuarto viejo y oscuro como ese agujero del que pretende salir ─dijo, sir Varys, con toda confianza en su habla.

─Ni que esa cosa tuviera derecho a escoger como debe vivir, si el rey me lo concede, lo tendré... ─dijo el gran maestro, Pycelle, confiado en sus palabras.

Sir Varys, quiso revelarle lo obvio al viejo maestre, y explicarle con toda satisfacción al hablar por qué esto no sería posible, aun tratándose del rey de todo westeros, sin embargo, el propio rey le robó la palabra de hablar.

─Pycelle, cierra la maldita boca. No digas tonterías, anciano ¿la memoria te comienza a fallar o simplemente te has vuelto más idiota? ¿Acaso has olvidado que no estamos viendo westeros ni algún lugar de nuestro mundo...? Además, si esa cosa existiera, no te la entregaría ni que fuera el maldito rey loco para cometer tremenda estupidez... Varys, tiene razón, es bastante probable que nos arranque primero la cabeza.

Ante el regaño, Pycelle, sólo pudo agachar la cabeza con resignación y disculparse como tenía por costumbre para evitar ser más objeto de burla para el resto de la cámara, quienes empezaron a reírse de él por los comentarios del rey.

─Bueno, mi rey, tienes un punto, pero también tienes que admitir que sería interesante por no decir menos, tener esta aberración de la naturaleza a nuestro cargo. Tal vez no es un león o un ciervo que representen a nuestras familias, pero podría ser una buena mascota para mi hijo, Joffrey, si la pudiéramos domesticar, asimismo, un buen perro guardián que nos proteja de nuestros enemigos... Sería lo mejor que pudiera aspirar en la vida una criatura vil como esa. Servir a nuestras casas. ─dijo, Cersei Lannister, con tanta arrogancia al hablar que podría resultar molesto al oído.

─¿¡En serio lo podría conservar como mascota, madre!? ─dijo con emoción el príncipe, Joffrey─ ¿Lo conseguirías por mí?

─¡Por supuesto que no, muchacho idiota! ¡Parece que tú tampoco estás prestando atención como el imbécil de, Pycele! ¡Mejor mantente callado y déjame ver esto que es más interesante que escuchar tus continuas estupideces! ─dijo, Robert, cansado de estar rodeado de idiotas

Mientras tanto, un pequeño, Tyrion, observaba todo con una risa contenida por el escarmiento público que el mocoso sufrió. Sin embargo, su atención estaba completamente puesta en la pantalla, mientras imaginaba la posibilidad de no sólo ver, sino también de viajar a esos mundos y conocer las maravillas que tienen para ofrecer. Mientras tanto en el norte, específicamente en invernalia. La ciudad estalló en gritos de sorpresa y asombro como era esperado. En el salón de banquetes, no era diferente.

─¡Jon! ¡Papá! ¿Lo vieron? ¡Detuvo una flecha con la palma de la mano! ─comentó una joven, Arya Stark, con gran emoción en su mirada.

─Si, mi pequeña loba, es, sin dudas impresionante ─dijo, Ned Stark, con la misma emoción que su hija, pero con una expresión más moderada en su rostro.

─No todos los días podemos ver otro mundo y una hazaña tan increíble como esta ─dijo, Rob Stark, con una sonrisa.

─Es cierto, hermano. Pero, no puedo dejar de preguntarme ¿Qué sigue? Digo, es increíble lo que estamos viendo, pero ¿será que veremos algunas hazañas todavía mayores a estas? ─compartió sus pensamientos, Jon Snow.

─Ahora que lo dices, posiblemente veamos personas increíbles ─expresó, Rob Stark.

─¡Tal vez historias románticas! ─comentó, Sansa, ilusionada por la idea de ver príncipes y princesas enamorados, o alguna historia del género romance muy hermoso que haga volar su imaginación.

─¡Ay, no! ¡Yo quisiera ver guerreros y guerreras formidables! ─comentó, Arya, emocionada por la idea de ver mujeres caballero.

─Me cortaré un dedo en tu nombre, Arya, si un día conozco alguna mujer caballero real. Por supuesto, primero tiene que existir alguna ─comentó, Theon Greyjoy, con burla─. Yo quisiera ver hermosas mujeres. Tan hermosas como nunca se hayan visto por los siete reinos...─declaró.

─En esto es en lo único que puedo estar de acuerdo contigo, Theon. ─dijo, Rob Stark, al tiempo que reía al compás con el resto de miembros de la familia.

─¿Creen que podamos aparecer? ─comentó un joven, Bran Stark.

─Es muy probable, hijo. Nuestra familia tiene un largo linaje que hombres que han marcado la historia... Es muy posible que veamos algunos de ellos, si nuestra familia es considerada digna de aparecer en alguna categoría.

─Padre, no hay nadie en los siete reinos que sea más digno que usted para aparecer... ─dijo, Jon Snow, intentando elogiar a su padre.

Sin embargo, el momento que estaba destinado a convertirse en un momento único entre padre e hijo, fue arruinado por la lady Stark de invernalia al escupir su habitual veneno serpentino al inocente, Jon Snow.

─Por supuesto que aparecerás, esposo mío... No existe nadie en los siete reinos que no conozca tu nombre. Eres el mejor hombre y el más honorable...─dijo, Catelyn Stark, para luego volver su mirada al bastardo, Jon Snow, para luego pensar─ «Y será así, siempre y cuando no aparezca el bastardo para arruinar tu reputación».

[Dentro de la pantalla]

Acto seguido, Tai Long, realizó un gran salto al proyectil que se mecía en el aire, brindándole una potente patada que redirigió el proyectil a la ballesta enemiga, destruyéndola y clavándose en el muro. Viendo esto, Tai Long, se le ocurrió una idea, y viendo que contaba con el resto de proyectiles supo al instante que lo que tenía que hacer. Tomando y arrojando los proyectiles de la ballesta por encima de su cabeza para que, en su descenso poder alcanzarlos más fácilmente con un salto que sería aprovechado por, Tai Long, para disparar los proyectiles al muro a punta de patadas hábiles y precisas. Todos y cada uno de los proyectiles impactaron y se adhirió a la pared, formando un camino escalonado.

Viendo su trabajo y preparándose, Tai Long, realizó un estiramiento de cuello, tronando sus vertebras para inmediatamente dar una voltereta hacia atrás, cayendo encima de la última de las flechas, aprovechando su retroceso para tomar impulso y salir disparado al muro, específicamente a la primera flecha de la que se sujetó, tomó impulso y salió disparado para alcanzar la pared, donde empezó a recorrerla corriendo hasta alcanzar el primer proyectil clavado que utilizó que utilizó como impulso, al igual que los que le seguían para desplazarse y quedar más cerca del ascensor.

Por parte del comandante, él mismo se encontraba atónito, siendo sacado de este estado por, Zeng, quien aterrado intentaba liberarse del agarre del comandante mientras informaba un hecho obvio, siendo que, Tai Long, venía hacia ellos.

Cegado por la ira, el orgullo y el ego, el comandante le afirmó a, Zeng, que, Tai Long, no llegaría lejos. Inmediatamente le daría la orden a todos los arqueros para disparar, orden que fue inmediatamente complacida por los 2 mil arqueros apostados al frente de cada fuerte, puente y torre de vigilancia, tiñendo el cielo de rojo por las innumerables flechas que descendían hacía, Tai Long, quien rápidamente tras ser testigo del peligro inminente, se columpió de la última flecha para salir disparado al ascensor, mientras las miles de flechas cada vez más cerca estaban del mismo, hasta alcanzar el ascensor que se cubrió por las mismas, no viéndose a, Tai Long, por ningún lado.

Para no correr riesgos, los guardias encargados de resguardar el ascensor, optaron por cortar la cadena, trayendo por consecuencia que el ascensor descendiera, desmontándose en la profundidad del pozo. Por parte de los guardias que llevaron a cabo esta acción, viendo que el ascensor cayó y con ello posiblemente, Tai Long, empezaron a reír burlonamente, mientras chocaban sus hachas a manera de celebración. Sin embargo, no tuvieron tiempo de reacción al momento que, Tai Long, salió de un salto repentinamente del agujero, impactando en ambos guardias, al mismo tiempo, una patada al rostro que los mandó a volar lejos, mientras, Tai Long, suavemente aterrizaba.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso cinematográfico: Universo UCM: Torre de los vengadores]

─¡Santa mierda! ¿¡Cómo hizo eso!? ─dijo, Tony, con la sorpresa dibujando su rostro.

─Este mortal es realmente habilidoso... Nunca antes he sido testigo de una mente tan aguda y de rápido pensamiento. Sin ofender, Tony, estoy seguro que entiendes a lo que me refiero con esto. ─expresó, Thor, con los ojos muy abiertos.

Sin embargo, Tony, no les prestó atención a sus palabras que, aunque carecían de mala intención, realmente no le interesaban. Su interés real estaba en lo que pasaría después.

─Dudo que yo mismo pueda esquivar todas esas flechas, pero él logró escapar de todas sin mucho esfuerzo. No es tan rápido como yo, pero, sin dudas, no lo necesita para sobrevivir a eso escenarios. Bendito sea el de arriba que no nacimos en el mismo mundo ─dijo, Quicksilver, realmente anonadado por la demostración de astucia y habilidad de, Tai Long.

─Sus movimientos son rápidos y fluidos; sus golpes, son bastante potentes, especialmente esas patadas. Siento lastima por quienes tengan la mala suerte de meterse en su camino... Además, su inteligencia es bastante formidable como lo afirma la pantalla. Está utilizando todos los recursos a su disposición para salir vivo del lugar. Sin dudas, lidiar con este tipo de personas son un dolor de cabeza constante ─dijo, Natasha Romanoff, sobando sus sienes por la preocupación y el estrés. No era su mundo, pero, al menos, esperaba que quienes protegían ese mundo pudieran lidiar con, Tai Long.

─Tranquilad, Nat, no te preocupes. Confía en que podrán lidiar con la amenaza, después de todo, tienen al maestro, Oogway, y por mucha habilidad o talento que tenga, dudo que pueda hacer algo si llega al palacio de jade.

─Sí, tienes razón, me estoy preocupando demasiado. Gracias, Bruce ─dijo, Natasha, sinceramente agradecida por el apoyo de su colega.

Mientras tanto, Tony, con una cara sugestiva, le hacía gestos faciales a su colega científico, dándole a entender que conocía sus verdaderas intenciones con la ex soviética.

[Multiverso animado: Universo Zootopia: Pos-incidente con los aulladores, Departamento de policía, sala de reuniones]

─Ok, ahora todos podemos estamos de acuerdo en una cosa, que esa prisión es una monstruosidad de exageración viviente...─comentó, Nick, no pudiendo contenerse más el comentario.

Nadie, dijo nada, pues su atención que anteriormente había sido capturada por la prisión y su estructura, asimismo, las declaraciones pasadas acerca que fue hecha para contener a un único reo y el cuadro de descripción que dejó a todos sin hablas, especialmente por unas partes particulares. Ahora yacían centrados de forma entera en la acción. Sin embargo, los comentarios nunca faltaron.

─¡Mi dios! ¡Ese hombre es un monstruo!

─¡Antes creí que estaban exagerando, pero ahora veo que las contenciones que el viejo pedía, sí eran necesarias!

─¡Ojalá nadie salga muerto!

─¡Tienen que huir de ese lugar!

─¡No, lo tienen que aprisionar!

─¡Es imposible, los matara antes que puedan hacer algo al respecto!

─¿¡Cómo puedes estar tan seguro!? ¡No lo hemos visto pelear aún!

─Sí, pero lo que nos ha mostrado es realmente suficiente para considerar escapar.

Entre una infinidad de comentarios más rondaban libremente por la sala de reuniones. Sin embargo, mientras todos comentaban, el jefe, Bogo, permanecía callado, sumido en un estado meditativo, contemplando la pantalla con impotencia en su rostro por no poder brindar asistencia real a los guardias en pantallas, sospechando que la pasarían terriblemente mal.

─Estoy... No sé qué decir, este hombre es la definición de imparable... Parece un superdepredador, pero, en realidad, es sólo un leopardo de las nieves como muchos que viven en Zootopia, pero todas sus capacidades están muy por encima que cualquier de los de su especie. Dudo que, aun bajo la influencia de los aulladores, un leopardo de las nieves pueda ser tan peligroso ─pensó, Judy, quien fue tomada por sorpresa por las imágenes en pantallas que la dejaron perpleja como a todos a su alrededor.

─Tranquila, zanahorias. No te comerá. Estás a salvo aquí con nosotros y él está en su mundo. ─dijo, Nick, con su habitual tono despreocupado, pero en sus acciones se le podía notar claramente preocupado por su compañera.

─Gracias, Nick.

Fue todo lo que dijo la pequeña policía, antes de abrazar a su compañero por el apoyo incondicional que le ha brindado hasta ahora.

[Dentro de la pantalla]

Denotando seriedad. Tai Long, observó su alrededor rápidamente analizó sus opciones, viendo la cadena brevemente supo qué hacer, y fue entonces que rápidamente se impulsó hacia adelante, golpeando con ambas piernas el seguro de la cadena para, al instante siguiente, correr para sujetar la misma y, cargando con esta en sus manos, corrió con dirección al pozo donde se arrojó en caída libre, con la cadena en mano, y en un movimiento hábil, se impulsó al sentido contrario de donde se había arrojado para luego columpiarse, cuyo impulso aprovechó para salir disparado de aquel puente hasta uno de los muros, quedando cercano a otro puente, al que se arrojó dispuesto a enfrentar los enormes números de guardias que ya lo estaban esperando más que listos con sus armas para dar muerte al prisionero, en caso que este opusiera resistencia, lo cual era un hecho.

Tan pronto aterrizó, Tai Long, no perdió el tiempo, propinando a los dos primeros guardias una única patada que los dejó fuera de combate, mientras un tercero intentó partir al mismo por la mitad con su arma, pero erró cuando, Tai Long, lo esquivó, recibiendo una serie agresiva de golpes y patadas antes de ser arrojado, mientras su abusador continuaba ensañado con el resto de guardias que intentaban inultamente pararlo. Uno a uno o, uno a muchos, recibían una rápida, pero muy violenta paliza por parte del prisionero que aprovechaba sus habilidades marciales al máximo para esquivar, bloquear, desviar, golpear, patear y contraatacar para diezmar las fuerzas enemigas que no paraban de llegar en grandes números para reponer, al final, la misma cantidad de unidades que perdieron.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso videojuego: universo: Street Fighter, Dojo de Gouken, período posterior a los eventos de Street Fighter 5]

─¡Wow! Miren a ese sujeto. Es realmente satisfactorio ver cómo les patea el trasero a esos rinocerontes. ¿No lo crees, amorcito? ─dijo, Juri, genuinamente emocionada por la demostración de habilidad de, Tai Long.

Ryu, obviamente, se avergonzaría por estas palabras, pues no le resultaba cómodo que alguien le llamara de tal forma, especialmente, Juri Han, quien no olvida que no pasa de una enemiga del pasado, pero que ahora puede tratar mejor. Mientras tanto, un par de mujeres cargaban con una mirada de muerte que prometía asesinar a alguien del complejo si tan sólo pudieran. En vista de esto, tuvieron que adoptar una estrategia más diplomática. Ambas apartaron a la mujer para ocupar su respectivo lugar al lado de, Ryu, siendo, Sakura, y, por supuesto, Chun-Li. Pero, Juri, no se quedaría atrás en su deseo por generar el caos en el lugar, más que por un sentimiento romántico que no existe, intentó realizar una jugada un poco más arriesgada que estaba segura desataría un nuevo caos en el lugar. Juri Han, intentó colarse entre las mujeres, con una idea en mente, abrazar con sus poderosas piernas de forma bastante sexual al fornido guerrero errante. Sin embargo, su intención quedó en el intentó, pues, fue detenida por, Ken Master, quien prefería evitar un nuevo enfrentamiento entre mujeres. Internamente, Ryu, viendo a su amigo y en una señal universal entre hombres y sin decir una palabra, dio las gracias, las cuales fueron bien recibidas por su amigo. Ken, luego liberaría a una, Juri, cerca de, Ryu. La mencionada estaría molesta como una niña pequeña que se le fue negado un juguete. Mostrando pucheros y estando de brazos cruzados, expondría su molestia.

─¡Ustedes no son nada divertidos!

Evidentemente fue ignorada sin misericordia por el resto de luchadores, quienes continuaron su observación de la pantalla para luego dar sus propias declaraciones

─Un combate directo con este, Tai Long, es una condena de muerte asegurada... Sin embargo, me gustaría pelear con él si tuviera la oportunidad de conocernos... Sería una pelea digna ─dijo, Alex, con confianza.

─Pero ¿por qué desearías pelear con él? Tú mismo lo has dicho, es una condena de muerte asegurada... Eres testigo de las grandes hazañas que ha realizado en el poco tiempo. Sería una estupidez, incluso para ti, Alex, pelear contra alguien así ─dijo, Tom, amigo de, Alex, preocupado por su amigo.

─Es imposible que lo conozcamos por estar en mundos distintos, pero si se da la oportunidad, por favor, no lo enfrentes ¿Me has escuchado? ─regaño, Patricia, la hija de, Tom, a la cabeza hueca de, Alex.

─Desafiar a un oponente de ese nivel, es algo que siempre he deseado... Estoy de acuerdo que sería un combate digno ─comentó, Fei Long, quien normalmente serio, esta vez sonrió.

─Yo nada más espero que nadie muera... Si lo han olvidado, este hombre es un criminal en su mundo, y por lo que estamos viendo, es sumamente peligroso. Personalmente no me gustaría enfrentarme a él y ninguno de ustedes debería tampoco desear tal cosa ─expresó, Chum-Li, sus pensamientos con genuina preocupación por las personas de la pantalla para que todos, al menos, pudieran adoptar un poco de la seriedad que tenía ella, con relación a la situación.

Estas palabras hicieron reflexionar a todos los presentes, quienes calmaron sus ansias de batalla, recordando el tipo de hombre que estaban visualizando para sólo concentrarse en lo que veían. Si bien, algunos no estaban de acuerdo con la violencia, no tenían problema con expresar su opinión sincera con respecto a la habilidad del guerrero.

─Ryu, ¿Crees que puedas ganarle? ─dijo, Ken Master, claramente interesado por conocer los pensamientos de su amigo, quien apenas habla y sólo cuando es necesario. Esta pregunta llamó la atención de todos, quienes, al igual que, Ken, querían conocer la opinión del guerrero errante.

─Realmente no lo sé, es alguien realmente fuerte, cuyas habilidades son excepcionales, haciendo cosas que yo no me podría imaginar haciendo. Podríamos pelear y dar una pelea digna, pero no puedo saber con certeza, quien saldría vencedor.

Esta respuesta sorprendió a los presentes, quienes tenían a, Ryu, como un guerrero formidable, cuyo nivel estaba por encima de la mayoría de todos los presentes. Sin embargo, estaban conformes con la respuesta, aceptando esta para volver su atención a la pantalla.

[Dentro de la pantalla]

En un momento, Tai Long, cansado de ser acosado por los guardias, realizó un muy potente golpe de palma al escudo de uno de los guardias que venía a por él, cuyo escudo solido de metal terminó fragmentándose y, por la fuerza del impacto, el guardia salió expulsado hacia sus compañeros, quienes por la fuerza con la que iba no pudieron pararlo, contrariamente fueron divididos como una corriente separada por una piedra en un rio, lo que trajo por consecuencia que todos se desplomaran, y muchos, por desgracia, terminaran por caer a las profundidades del pozo.

Viendo su camino despejado, Tai Long, salió corriendo hacia el lugar, cuya pared escaló rápida y eficientemente para escabullirse por un camino que había encontrado bajo el puente por encima de su cabeza, donde un par de guardias viendo su pronta llegada, rápidamente cerraron la puerta metálica, asegurándola, además, con sus cuerpos fornidos y pesados, creyendo que sería suficiente para frenar el avance de, Tai Long, pues se equivocaron. Con un único tacleo, Tai long, derribó la pesada puerta que expulsó a los guardias, quienes inconscientes, cayeron al suelo, recibiendo no sólo el peso de la gran puerta, sino también el de, Tai Long, quien, viendo la llegada de otro par de guardias, se arrojó de frente a ambos, quienes fueron sujetados por, Tai Long, de sus cuellos, al mismo tiempo que el mencionado usaba brazos y piernas para realizar esta acción en conjunto, y haciendo usó de su peso, los hizo girar en el aire, mientras se quejaban agónicamente mientras sus cuellos eran torcidos con brutalidad salvaje.

Tai Long, tras arrojar a ambos cuerpos, cayó en sus cuatro patas para enseguida arremeter en contra de otros guardias que iban a su encuentro. El primero cargó un ataque con una masa circular de pinchos, cuyo ataque erró para el minuto siguiente quedar despojado de su arma por el propio, Tai Long, quien contraatacó con un potente golpe a su rostro con esta misma arma que le desfiguró el rostro de forma violenta, seguido de un codazo. No deteniéndose allí, pues luego de acabar con la vida del guardia, arremetió contra el resto, esta vez armado.

A medidas que los guardias no dejaban de llegar, prontamente se iban, pues, Tai Long, los despachaba rápidamente al dejar caer sobre ellos su brutal venganza que prometía no perdonar la vida de nadie, y eso fue justo lo que hizo al moler sus cabezas a punta de un único y brutal golpe de masa, siendo el último de los guardias, quien se llevó el peor tratamiento, pues, TaI Long, conectó un golpe de masa en su boca, donde dejó depositada el arma para que en un movimiento rápido propinarle una patada ascendente que lo mandó a volar por encima de su cabeza mientras hacia el recorrido por el puente en el aire, mientras tanto, abajo, Tai Long, continuaba en su labor de hacer una limpieza de la zona de los molestos guardias que no paraban de llegar. En su descenso, el guardia aún con la masa en el hocico, fue interceptado por, Tai Long, quien lo tomó por la cabeza para enseguida hacerlo girar para en el primer giro arrojar salvajemente al desafortunado contra los guardias que se aproximaban por una de las torres.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso anime: Universo: Dragon Ball: Periodo de la resurrección de freezer, planeta de Bills]

─Es un sujeto bastante increíble, pero odio que este matando a tantos hombres para escapar y sin tener remordimientos. Es claramente superior al resto de sujetos, pero, aun así, decide matar matarlos...─dijo, Goku, claramente molesto por las acciones de, Tai Long.

─Señor, Son Goku, ciertamente es terrible, y no me gustaría justificar una atrocidad como esta, pero creo que ellos también lo intentan matar, además, si no se ha dado cuenta, creo que esta eufórico, así sería imposible dialogar con él ─dijo, Whis.

─¿Siquiera es posible dialogar con un sujeto así? ─comentó, Vegeta, confundido por una parte del comentario del ángel.

─Te sorprenderías, Vegeta, de lo que es posible y lo que no... Después de todo, tú eres un ejemplo perfecto de caso posible.

Estas últimas palabras se abrieron camino en la consciencia de, Vegeta, quien recordó sus tiempos como antiguo enemigo de los terrícolas y como en un giro inesperado de la vida. Ahora de un antiguo enemigo y protector del planeta que alguna vez quiso destruir

[Multiverso animado: Universo: Kung fu panda: Árbol de duraznos de la sabiduría celestial]

─¡Oh! ¿Pero qué has hecho, Tai Long? ¿Cómo has podido arrebatar una vida? ─dijo, Shifu, con un tono lastimoso que simbolizaba su corazón haciéndose pedazos.

─Shifu, estoy aquí para cuando necesites hablar ─expresó, Shifu, quien en su infinita experiencia sabía que lo mejor era expresar estas únicas palabras, asimismo, esperar pacientemente a que su amigo se abriera con él, en vez de forzar lo que no debe ser forzado.

─Lo agradezco mucho, maestro... Discúlpeme, pero ahora mismo me siento terrible... Me gustaría retirarme a mis aposentos ─se excusó, Shifu, no pudiendo ver más las atrocidades de su antiguo alumno e hijo.

─Está bien, Shifu. Si es lo que necesitas, puedes irte... La realidad, a veces puede traer decepciones, pero si no aceptamos la realidad, el dolor puede echar raíces y crecer exponencialmente ─compartió, Oogway, un poco de su sabiduría─, pero, a pesar de todo, quiero que recuerdes que, no estás solo...

─Gracias, maestro...

Fue todo lo que pudo decir, Shifu, quien se sentía genuinamente agradecido con su maestro. Sin embargo, el dolor de los acontecimientos recientes de los que fue testigo no le hacían bien. Prontamente se retiró, dejando a su maestro solo bajo el árbol de duraznos.

Mientras tanto con los cinco furiosos. Estos yacían divididos entre diferentes reacciones. Mono, estaba consternado por la masacre en la pantalla, víbora, estaba horrorizada al punto de conmoción, Grulla, no estamos menos mejor que los anteriores, Mantis, veía con repulsión y molestias las escenas tan bárbaras, y, finalmente, Tigresa, yacía sumida en un mar de emociones incontrolables. Estaba horrorizada por la masacre, indignada porque, Tai Long, estaba usando el kung fu para algo que no debe ser usado, molesta e impotente porque no podía hacer nada para ayudar, y deseos profundos de hacer que este hombre pare.

─Tengan presente que algún día nos tendremos que enfrentar a él, así que les pido que no teman al enemigo. Nos prepararemos para entonces lo suficiente para que el enemigo tema de nosotros. ─comunicó, Tigresa, a sus compañeros, en un intento por alentarlos a ser valientes y luchar.

Estas palabras les motivaron un poco, logrando que recuperaran un poco del valor perdido.

─¡Sí, tigresa!

Fue el grito colectivo del equipo comunicado con disposición a la acción.

[Dentro de la pantalla]

Tai Long, continuó ascendiendo, superando cada torre, cuyo interior era una trampa mortal destinada a causar su muerte, sin embargo, superó airoso cada trampa, llegando a cada nivel de la prisión con facilidad que lo posicionaban a un paso superado hasta lograr su libertad. Por supuesto, el hecho de llegar a un nuevo nivel de la prisión o cruzar un puente, implicaba que tendría que reanudar su violenta carnicería, ya que los guardias tampoco le pondrían fácil su escape. Este hecho se repitió indefinidamente, cada vez que salía vencedor de un nivel de la prisión, siendo cada uno más desafiante que el anterior, como el último antes de llegar a la puerta. Tuvo que enfrentar una horda de guardias que estaban respaldados por arqueros, siendo esta confrontación la que más problemas le dio, sin embargo, salió victorioso sin la presencia de heridas de ningún tipo.

Cuando llegó al último puente, estaba sutilmente cansado de los continuos combates, sin embargo, estaba preparado para despachar a los últimos despojos del ejército de guardias que se negaban insistentemente a concederle la libertad que tanto deseaba. Los mencionados prepararon sus armas más que dispuestos para recibir a su enemigo, quien los observó con ira, especialmente al comandante en jefe de la prisión, quien firmemente parado en su lugar con soberbia le dedicó una mueca burlona que le incentivaba al desafío. No predispuesto a quedarse callado, Tai Long, bufó amenazadora mente como todo un felino a manera de amenaza que le esperaba un destino cruel. Estos gestos fueron notados por el mensajero, Zeng, quien tembloroso, yacía sujeto del cuello por el comandante que no le permitiría irse; liberó un graznido involuntario. Mientras tanto, Tai Long, adoptó su pose marcial, dispuesto a matar a todo aquel que se atreviera a ir en su contra.

[Fuera de la pantalla]

Una vez más infinitos espectadores no pudieron concebir la idea que un único hombre pudiera vencer a un ejército fuertemente equipado con únicamente sus manos desnudas. Siendo una hazaña extraordinaria para mundos donde los niveles de habilidad no llegaban a estar a la altura de lo que, Tai Long, había logrado. Sin mencionar que había llegado hasta la puerta sin sufrir ninguna herida ni siquiera superficial.

[Multiverso anime: Universo: Goblin Slayer, gremio de aventureros]

Los gritos de conmoción inundaron el gran salón del gremio con cada demostración de habilidad marcial del sujeto que, desde hacía tiempo, les había dejado con la boca abierta y a la expectativa de sus próximas acciones. El asombro por sus habilidades, era rápidamente sustituida por el horror de sus acciones crueles y sanguinarias. Mientras tanto, en la mesa del goblin Slayer, una recepcionista se aferraba al brazo del hombre que amaba, horrorizada por las escenas vividas de sangre y carne.

─Así no dan muchas ganas de beber... ─dijo, el chaman enano, dejando su jarra de cerveza a un lado para continuar viendo la pantalla.

─¡Es muy brutal! ¡Oh, madre tierra, dales a esas pobres almas descanso! ─oró temblorosa una joven, Sacerdotisa, quien no quería continuar viendo la pantalla, a pesar de estar acostumbrada a la muerte y la masacre, gracias al goblin Slayer, no dejaba de ser atemorizante contemplar una masacre como esta, especialmente dirigida hacia personas y no goblins.

Sin embargo, fue rápidamente tranquilizada por el goblin Slayer, quien posó su mano en su cabeza para hacerle saber que todo estaba bien mientras estuviera a su lado, que la protegería de todo. Lo mismo el, goblin Slayer, hizo con la recepcionista y la chica granjera, quienes le agradecieron la asistencia.

─¿Qué opina señor, Goblin Slayer? En mi opinión, este sujeto es bastante interesante... Digo, sus habilidades son las verdaderamente interesantes. Parece un guerrero berserker por su fuerza desmedida y un paladín por el balance entre sus atributos, y un explorador por su agilidad... Sin embargo, lo que más me consterna es su notable habilidad al pelear desarmado. En mis años de vida nunca he conocido a nadie que pudiera hacer la mitad de lo que este sujeto puede lograr con sus manos ─dijo, el sacerdote lagarto, verdaderamente interesado en las habilidades del hombre.

─Sí, estoy de acuerdo... Su estilo de lucho es bastante complejo y efectivo. Nunca he escuchado de algo así. Sé que existen estilos de combate en nuestro mundo, pero nada tan elaborado como todo lo que hemos visto hasta ahora... Me intrigante que no haya sufrido ninguna herida, eso sólo habla de su habilidad notoria y su peligrosidad, pero supongo que no es importante para nosotros, después de todo. No es de nuestro mundo ─dijo, goblin Slayer, con su tono habitual monótono.

[Multiverso anime: Universo: Baki, pre-período de los condenados a muerte, Mansión familiar de los Kaioh, sala principal]

─Este hombre es digno de ser llamado un oponente. Aunque aún está un poco verde en sus habilidades. Por lo que pude ver, nunca para de mejorar con el tiempo ¿Qué tan bueno será cuándo tenga mi edad? Podría ser un combate digno para el recuerdo. Es una lástima que nos separe un universo ─dijo, Kaku Kaioh, un poco decepcionado porque nunca tendría la oportunidad de enfrentar a, Tai Long.

─Concuerdo con usted, maestro. Sin dudas, sería un oponente con el que gustoso podría pelear y llegar a respetar por su habilidad y dedicación al mejoramiento de su kung fu del estilo leopardo ─dijo, Retsu Kaioh, quien, a veces puede ser muy poco expresivo, pero que ahora sonreía de emoción.

Mientras tanto en la mansión de la difunta esposa de, Yujiro Hamma, Emi Akesawa. Baki, observaba la pantalla con asombro y reconocimiento por el hombre que por sí mismo pudo vencer a un ejército sin dificultad.

─No está nada mal. Podría servir como un entretenimiento todavía mayor al que consideré ─dijo, Yujiro Hamma, con una sonrisa psicópata.

─Me pregunto que será más fuerte ¿Sus puñetazos y patadas o mis músculos? ¿Qué se resistirá más? ─dijo, Biscuit Oliva, emocionado.

─Es una lástima que no sea de nuestro mundo. Podría aprender mucho de él ─pensó, Baki, suspirando de decepción.

[Dentro de la pantalla]

─Es el fin..., estamos bien, pero bien, muertos... ─comentó, Zeng, renunciando a la vida, esperando su pronta muerte en las manos de, Tai Long.

─No, todavía no... Ahora.

Ordenó el comandante a uno de sus guardias, quien disparó una flecha incendiaria a las oscuras estalactitas posadas por encima de la cabeza de, Tai Long. Sin que el mencionado lo esperara, se produjo una primera explosión que fue acompañada casi inmediatamente por otras que alarmaron de sobremanera al gran felino, quien, estando alerta, comprendió la situación. Querían sepultarlo vivo.

Prontamente un gran número de estalactitas, empezaron a desprenderse y caer frente al recluso, destruyendo el puente mientras él mismo, arremetía hacía los guardias, intentando huir de la destrucción de la estructura, pero eran demasiadas y caían tantas que tenía que preocuparse no sólo de llegar al otro lado, sino también de evitar que alguno de las estalactita le cayera encima, lo que dificultó significativamente su objetivo de huir, no había llegado a la mitad del puente cuando el mismo colapso por completo, dándole apenas tiempo para dar un salto que recorrió velozmente toda esa distancia, mientras el inexistente puente seguía cayendo, pero, a pesar de toda la fuerza puesta en aquel salto, no pudo llegar, se quedó a escasos centímetros de la orilla, donde sus garras rasparon el muro intentando aferrarse, pero sólo resbalaron, emitiendo un sonido terrible para luego caer encima de una de las estalactitas que lo llevaban a su inevitable muerte en el agujero del que tanto esfuerzo le costó escapar.

Infinitos espectadores quedaron expectantes y a escasos centímetros de sus pantallas, observando con interés el cómo este hombre haría para escapar de una situación tan compleja, sino imposible de superar.

Mientras caía, el comandante se burlaba de él, emitiendo una enorme carcajada maniaca, al tiempo que le despedía con su única mano libre. Pero sin tiempo, Tai Long, lo ignoró e inmediatamente pasó a buscar una forma de escapar de tal situación aparentemente sin salida posible.

Su mirada se enfocó en la dinamita que estaba pronta a explotar en la última de las estalactitas. Sin perder tiempo, emprendió una rápida y desesperada carrera a contrarreloj que le llevó a desplazarse entre saltos entre diferentes estructuras destruidas que iban en descenso. Como un animal salvaje, continuó recorriendo las plataformas a alta velocidad, intentando llegar a lo más alto lo antes posible. Las plataformas se habían acabado, solo quedaba la inmensa estalactita que estaba recorriendo velozmente, de la cual tomó impulso inmediato para realizar un poderoso salto con dirección a la última estalactita, la cual alcanzó, estando a punto de resbalar y caer, pero, en un punto, se quedó quieto, mientras sujetaba la superficie plana con sus garras para luego posicionarse mejor y ajustar su agarre, mientras frente a sus ojos la dinamita estaba pronta explotar por lo que se apresuró, llegando a ella y tomándola, específicamente de la cuerda a la que estaba unida, se arrojó hacia atrás descendiendo de una gran altura hasta los guardias, quienes previendo las intenciones de, Tai Long, empezaron a retroceder por el miedo. Todo ocurría ante la atónita y aterrada mirada del comandante, quien se encontró vacilante y derrotado ante el hombre.

─¿Ya corremos...? ─preguntó, Zeng, relajado, quien ya había asumido que iba a morir allí.

El comandante, sólo respondió a su pregunta con un "Sí" cargado de un miedo profundo. Mientras, Tai Long, simplemente se dispuso a arrojar la dinamita hacia los guardias y la puerta. Desde el exterior de la fortaleza, se mostró como la puerta era destruida por una gran explosión que traía consigo la madera de la misma, fuego y los cuerpos de soldados rinocerontes muy mal heridos o incluso muertos, algunos vivos con la mala suerte de caer al vacío de la montaña.

[Fuera de la pantalla]

Infinitos espectadores no supieron cómo reaccionar ante lo acontecido. Nadie podía imaginar como este hombre, aun con las posibilidades de salir vivo estando su contra, logrará revertir estas a su favor.

[Multiverso anime: Universo: Boku no hero academia: Bar de la liga de villanos]

─Has superado mis expectativas, Tai Long. Serías una excelente adición a la liga si estuvieras en nuestro mundo ─dijo, All For One, mientras aplaudía de forma lenta, ciertamente agradado por lo que sus inexistentes ojos podían ver.

─Concuerdo con usted, maestro ─dijo, Kurogiri, de pie al lado del hombre sin rostro.

─Como odio admitir que me he equivocado. Al final, este sujeto resultó ser más capaz de muchos villanos que he conocido... ─dijo, Shigaraki, entre dientes por tener que admitir su error.

Mientras tanto, una emocionada, Himiko Toga, yacía dando brincos en su lugar por la cantidad de sangre que pudo contemplar a lo largo de la transmisión. Sintiéndose agradada por el sujeto que le mostró sin reserva aquel hermoso líquido.

[Multiverso series: Universo: The Boys, pre-período de la muerte de, Madelyn, departamento de The Boys]

Una única carcajada bastante molesta, por cierto, provenía del interior del departamento de The Boys, las cuales provenían únicamente del mayor hijo de puta de la historia, no siendo otro que, Billy Butcher, quien había ganado la apuesta junto, Frenchie, y, Kimiko, y, por lo mismo, ahora se estaba burlando abiertamente de este, pues indirectamente le dio la razón cuando declaró que era un pésimo apostador.

─¡Púdrete en el infierno, Butcher! ─dijo, Leche materna, quien yacía encerrado en su mal humorado estado.

─¿¡Pero porqué te molestas!? Claramente te advertir que eres un apostador basura y te lo dije muy amablemente, pero no me hiciste caso. Ahora paga que, como acordamos, me debes hasta el alma ─dijo, Billy, mientras secaba una metafórica de su ojo derecho, mientras aún reía muy por lo bajo─. Además, tú sólo te lo buscaste. Eres el más inteligente entre nosotros, pero ¿no pudiste darte cuenta que era obvio que ganaría el malo por el titulo? Amigo, me estoy empezando a preocupar.

─¡Butcher, estás buscando que te parta la cara! ─dijo, Leche materna, ya cansado de las continuas burlas del hombre.

Ante la amenaza, Billy, sólo le sonrió y extendió la mano para recibir el dinero ganado de las apuestas que posteriormente repartió entre los otros ganadores.

[Multiverso cinematográfico: Universo: Gigantes de acero, gimnasio de boxeo de Bailey Tallet]

─¡Wow! Descartando la masacre. Esto es mucho más interesante que las peleas de robots ─dijo, Charlie Kenton, asombrado.

─¡Charlie, Max, está aquí y acabamos de ver una masacre real! ¿Lo has pensado? ─regaño, Bailey, realmente molesta con su "amigo".

─Sí, lo siento. Lo había olvidado...─dijo, Charlie Kenton, genuinamente arrepentido.

─Como casi todo lo importante en tu vida, pero está bien, es normal viniendo de ti ─dijo, Max, decepcionado, antes de retirarse del lugar.

[Dentro de la pantalla]

Pronto se vio a, Zeng, caer al suelo, con algunas plumas apenas quemadas mientras se estiraba adolorido por la explosión que, de milagro, no le alcanzó, pero sí al comandante, cuyo cuerno dorado cayó a un lado de, Zeng, quien lo observó y apenas tuvo tiempo de expresar un sonido de terror, cuando la mano de, Tai Long, le sujeto del cuello firmemente. Mientras, Zeng, se retorcía temeroso y claramente adolorido y sofocado por la fuerza de agarre contra su cuello. Sólo pudo tragar saliva y casi sollozar de pavor, cuando vio frente a, Tai Long, quien lo puso a su misma altura. Tenía una expresión seria que rápidamente sustituyó por otra más alegre y juguetona, mientras liberaba un suspiro de alivio por verse libre finalmente de ese horrible lugar.

─Que bien que, Shifu, te envió..., empezaba a sentirme olvidado – Expresó, Tai Long, casi melancólico, mientras gentilmente acariciaba a, Zeng, o, dicho de mejor forma, por pura cortesía, limpió la suciedad de la cabeza del mensajero– Vete volando y dile que el verdadero guerrero dragón, vuelve a casa...

Zeng, aterrado y tembloroso simplemente asintió con la cabeza para luego ser liberado por, Tai long, quien sólo lo vio irse volando. Terminando así la transmisión del día de hoy. La pantalla se apagó.

[Fuera de la pantalla]

[Multiverso animado: Universo Kung Fu Panda: Aposentos de, Shifu]

─Te estaré esperando..., hijo.

Fue lo único que pudo decir, Shifu, con una expresión abatida y un sentimiento de pesadez en el pecho que sólo creció más y más cuando su mente divagó entre cada atrocidad hecha por, Tai Long. Sintiéndose decepcionado por no haberlo guiado bien.

[Dentro de la pantalla]

Tan pronto la pantalla se apagó un nuevo tipo apareció, captando la atención de los presentes al instante, especialmente aquellos amantes de la lucha.

Batallas épicas:

Todos contra el imitador.